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Ciencia Ergo Sum

ISSN: 1405-0269
ciencia.ergosum@yahoo.com.mx
Universidad Autónoma del Estado de México
México

Aranda Sánchez, José María


Principales desarrollos de la sociología ambiental
Ciencia Ergo Sum, vol. 11, núm. 2, julio-octubre, 2004, pp. 199-208
Universidad Autónoma del Estado de México
Toluca, México

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=10411210

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Principales desarrollos de
la sociología ambiental
José María Aranda Sánchez*

Recepción: agosto 19 de 2003


Aceptación: diciembre 11 de 2003

* Centro de Investigación en Ciencias Sociales y Resumen. La posibilidad de resolver la crisis ambiental pasa por la aplicación del conocimiento
Humanidades, Universidad Autónoma del científico, tanto el generado por las ciencias naturales como por las sociales. Dentro de estas
Estado de México.
Correo electrónico: aranda@uaemex.mx
últimas, la sociología ambiental ya cuenta con un conjunto de teorías y estudios que abordan los
problemas socioambientales desde diversas orientaciones, las cuales enfatizan la complejidad que
supone su adecuado tratamiento. Este artículo reflexiona sobre cinco corrientes de la sociología
ambiental que aún son vigentes y que expresan concepciones fundamentales para analizar la
relación naturaleza-sociedad: el enfoque marxista, la ecología profunda, el ecofeminismo, la
ecología crítica y el constructivismo.
Palabras clave: sociología ambiental, sociedad-naturaleza, crisis ambiental.

Principal Developments in Environmental Sociology


Abstract. The possibility of resolving the environmental crisis resides in the application of
scientific knowledge generated by the natural as well as the social sciences Environmental
Sociology already comprehends a whole array of theories and studies that approach socio-
environmental problems from diverse perspectives, thus emphasizing the presupposed
complexity of appropriate treatment. This article reflects on five trends still in force in
Environmental Sociology, that express fundamental conceptions for analyzing the nature-
society relationship: the marxist focus; deep ecology; ecofeminism, critical ecology and
the constructivism.
Key words: environmental sociology, nature-society, environmental crises.

Introducción en los métodos de investigación y las cias naturales como sociales, a fin de
teorías científicas para aprehender una construir un conocimiento básico que
La emergencia, ya no tan reciente, de realidad en proceso de complejización, permita captar la multicausalidad y la
la crisis ambiental global no sólo exige que desborda la capacidad de compren- interdependencia de los procesos natu-
acciones integrales para enfrentar la sión y explicación de los paradigmas rales y sociales que determinan los cam-
gravedad de los problemas y estrate- teóricos vigentes hasta hace un par de bios socioambientales (Leff, 1998: 17).
gias que incluyan todos los niveles de décadas. Asimismo, la cuestión ecológica Es cierto que las ciencias sociales son
gobierno y ámbitos territoriales de la plantea la necesidad de asimilar un sa- las más reticentes en incorporar la di-
planeación, sino que los cambios am- ber ambiental emergente en un con- mensión ambiental a sus paradigmas
bientales han generado modificaciones junto de disciplinas, tanto de las cien- teóricos, sus objetos de conocimiento y

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sus métodos de análisis, de tal manera sintéticamente corresponden a ciertos sus principales representantes. Según el
que aún no se ha dado la adaptación de paradigmas que se encuentran en de- primero existe una dialéctica entre el
sus conceptos para abordar las relacio- bate actualmente. Una tendencia con ecosistema (o ambiente) y la sociedad
nes entre estos procesos sociales y los historia y consolidación, sin duda radi- humana, ya que sus procesos interac-
cambios ambientales emergentes; tal vez cal, es la materialista marxista, que se túan: de un lado, un modo de produc-
a excepción de la antropología, la eco- analizará en sus postulados elementa- ción y su expresión económica, las re-
nomía y el derecho, disciplinas en las les, representados por la contraposición laciones de producción intensivas de
que de manera diferenciada se han re- básica entre capital y ecología, y que capital sobre el trabajo, las multinacio-
gistrado algunas formas de incluir la hoy ha vuelto a tomar impulso y nue- nales presionando por infraestructura,
cuestión ambiental con interesantes vos desarrollos. Otro enfoque también los sindicatos luchando por el trabajo
aportes. importante y vigente y que continúa y la normalización de las relaciones; y
En cambio, en otros campos de las ganando adeptos en la teoría y en la de otro, una degradación ambiental que
ciencias sociales aún no se ha aborda- práctica es la ecología profunda, con resulta de esos imperativos contradic-
do la cuestión ambiental de manera sis- una fundamentación filosófica y una torios mal enfrentados por el Estado,
temática. Así sucede con la sociología, exigencia de acción radical que elimina y que llevan a una síntesis de escasez
donde se dificulta definir un objeto de el antropocentrismo para dar lugar a planeada. Schnaiberg aplica las catego-
conocimiento o un espacio propio de la idea de interdependencia sociedad- rías de la sociología y de la economía
reflexión del saber ambiental, que con- naturaleza. política marxistas al estudio de los pro-
tenga temas y métodos de investiga- En tercer lugar se expone el ecofe- blemas ambientales. Así, el uso de las
ción considerados propiamente como minismo, posición radical y con pers- llamadas tecnologías apropiadas (tec-
ambientales, sin caer en algún reduccio- pectiva de género que ha llegado a re- nologías limpias) sería tan sólo una
nismo biologicista o en una simple yux- presentar una crítica de fondo al capita- nueva utopía. Otros esfuerzos de orien-
taposición del análisis social ‘sobre’ el lismo y al sistema patriarcal, al impulsar tación marxista tienen que ver con la
ambiente. No obstante, tampoco pue- una corriente ideológica que cuestiona búsqueda de relacionar causalmente el
de decirse que en la sociología actual la posibilidad de la sustentabilidad mien- desarrollo capitalista con los fenóme-
no existan teorizaciones, categorías e tras los hombres tengan el poder. Asi- nos de degradación ambiental, y expli-
instrumentos que permitan abordar ob- mismo, se considera el enfoque de la car el surgimiento y la importancia de
jetos de estudio socioambientales para ecología humana crítica acompañado de los movimientos ambientalistas.
elaborar investigaciones rigurosas y la teoría de la acción comunicativa de La contribución marxista a la temáti-
planteamientos fundamentados; pero lo Habermas, que aporta un paradigma ca ambiental es relevante, incluye pro-
cierto es que la disciplina se ha desa- diferente al plantear las cuestiones am- piamente el campo de la ecología políti-
rrollado dentro de enfoques y proble- bientales para la sociedad en términos ca, con ensayos dirigidos a los estudios
mas teóricos que no son capaces de de dilemas, es decir, de decisiones que de la sociología ambiental. En esta orien-
equiparar directamente estos procesos conllevan necesariamente consecuencias tación se encuentran los trabajos de
emergentes, ya sea por su propia com- no deseadas. Finalmente, se bosqueja la Marcuse (1969) y los análisis de Gorz
plejidad como por lo novedoso, y las orientación constructivista, con su aná- y Bosquet (1978). Existe también una
interrelaciones entre manifestaciones lisis de la realidad social como una cons- significativa contribución del grupo in-
de orden físico, biológico y social que trucción que implica una parte objeti- glés que viene construyendo una temá-
implica su estudio. va, las estructuras sociales, y una subje- tica ambiental para la clase trabajado-
En este artículo se presentan y anali- tiva, que es la visión particular de los ra y cuyo lema es ‘verde y vermelho’
zan en lo sustancial algunas orientacio- sujetos, en una amalgama que permite (Pepper, 1986). Deben incluirse tam-
nes de la sociología ambiental que siguen superar las visiones ‘realista’ e ‘idealista’ bién los análisis de autores franceses,
siendo relevantes, con el propósito de en el terreno de la sociología. como los de Bihr (1989), que busca
contribuir al necesario debate sobre el definir la crisis ambiental contemporá-
papel de esta disciplina en la sistematiza- 1. Un enfoque materialista nea caracterizada por el carácter an-
ción de los conocimientos respectivos, marxista tidemocrático de la estructura social
así como para la solución de los graves actual, donde es urgente introducir la
problemas ecológicos de nuestra época. Este enfoque tiene en Schnaiberg dimensión ambiental en el pensamiento
Las orientaciones que se exponen (1980) y O’Connor (1994) a dos de y en las acciones políticas. Llamando

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la atención acerca del nuevo papel del sólo se trata de incluir una teoría de los
movimiento operativo, Bihr critica los costos ecológicos y las externalidades
El capitalismo lleva a una crisis
movimientos ecologistas por no deter- ambientales, sino de replantear la natu-
minar el modo de producción capitalis- profunda porque su sistema raleza como medio de producción y
ta como responsable de la crisis eco- de producción destruye dos potencial productivo. Esto significa la
lógica, al subordinar la naturaleza a los elaboración de conceptos relativos a las
condiciones necesarias:
imperativos del capital, ya que al capita- condiciones económicas, políticas y cul-
lismo no le interesa producir valores de los recursos naturales y la turales de un proceso equitativo y sus-
uso sin una reproducción ampliada del salud de la fuerza de trabajo. tentable de producción, así como de los
capital, lo que priva a los productores instrumentos de la gestión y democrati-
del control sobre sus producciones y lle- zación ambiental. Para esta orientación,
va a cabo la explotación desenfrenada da al desarrollo sustentable (Gutman, lo importante es avanzar hacia la transi-
de la fuerza de trabajo. 1991; Leff, 1998, 2000 y 2002; ción democrática sobre la base de una
Existe un enfoque marxista que apor- Martínez-Alier, 1989; Toledo, 1980 y nueva racionalidad productiva fundada
ta una reflexión más de fondo referen- 1990). Esta corriente busca replantear en la socialización de los medios natu-
te a las relaciones entre naturaleza y sis- la cuestión ambiental, consciente del rales y culturales de producción (Leff,
tema social. La idea es que la sociedad ‘vacío ecológico’ que presenta el mar- 1998: 340).
capitalista no sólo está marcada por la xismo, que no ha logrado integrar a la El alcance de la orientación marxista
contradicción entre fuerzas y relaciones naturaleza en las condiciones generales radica en que establece los límites es-
de producción; hay una segunda con- de la producción. La necesidad de in- tructurales del capitalismo como modo
tradicción igualmente importante: la que corporar los aspectos ecológicos y de producción basado en la explota-
opone las fuerzas y las condiciones de socioambientales al análisis de la pro- ción del hombre por el hombre, así
producción. El capitalismo lleva a una ducción abre nuevos caminos teóricos como del hombre sobre la naturaleza.
crisis profunda porque su sistema de y metodológicos al marxismo. Así, se Al eliminar las visiones románticas de
producción destruye dos condiciones ne- plantea el conocimiento de los proce- un posible capitalismo con ‘rostro hu-
cesarias: los recursos naturales y la sa- sos que determinan la producción de mano’, sostiene la crítica al modelo de
lud de la fuerza de trabajo. Sólo la unión recursos naturales y los equilibrios desarrollo como el factor determinan-
de verdaderos movimientos democrá- ecológicos que soportan los procesos te de la crisis ambiental. Sin embargo,
ticos, socialistas y ambientales será ca- productivos, y de ahí se establecen dos la mayor carencia de esta orientación
paz de remediar esta contradicción. Se alternativas teóricas: a) incorporar la se refiere a un planteamiento acerca
trata de una nueva forma de análisis, estructura y funcionamiento de la base de los actores sociales encargados de
necesaria, que conlleva una nueva praxis ecosistémica de recursos naturales, de enfrentar los problemas; es decir, no
(Prades, 1998: 20). la dinámica ecológica a la dialéctica so- considera la importancia de las accio-
Se advierte que esta visión desembo- cial del proceso productivo y de repro- nes colectivas encaminadas a favore-
ca progresivamente sobre una suerte de ducción del capital, y b) concebir al am- cer el ambiente, por lo que queda como
ecomarxismo, en parte inspirado en la biente como un potencial productivo un esquema incompleto donde el peso
obra de Ernst Bloch (1965), uno de los basado en la articulación de procesos recae en las instituciones, mientras que
pocos marxistas que superan la concep- productivos de distinto orden (natural, a los sujetos sociales no se les otorga
ción utilitarista de la naturaleza. Desde cultural, económico y tecnológico), y los un papel protagónico.
esta perspectiva, un orden tipo socialis- procesos ecológicos como codeter-
ta es imposible sin el despliegue de una minantes de la producción, lo que lleva 2. La ecología profunda
ética económica apropiada, capaz de a una reformulación del paradigma
juzgar cuáles son los límites que no pue- ecomarxista, no únicamente de la pro- Es un movimiento de ideas radicales
den sobrepasarse, a riesgo de alterar el ducción capitalista, sino de todo proce- que goza de muchos seguidores en
sistema en conjunto. so sustentable de desarrollo. En una pa- América. Sus principales representan-
Actualmente, puede afirmarse que el labra, el ecomarxismo emergente ha su- tes son Naes (1973 y 1984), Devall y
ecomarxismo transita de una teoría crí- brayado las funciones de la naturaleza Sessions (1985), y pertenecen más bien
tica de la producción a la construcción como condiciones de sustento, límite o al campo de la filosofía. Los fundamen-
de una racionalidad ambiental orienta- potencial del proceso productivo. No tos de su orientación han sido resumi-

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dos precisamente por Naes (1984) en duos sólo existen como tales en sus
ocho puntos: a) la vida de los seres La vida es una red en la cual relaciones con los demás seres vivien-
no humanos es un valor en sí mismo, los seres individuales tes del planeta. La vida es una red en
al igual que la riqueza y diversidad de la cual los seres individuales constitu-
constituyen nudos o centros
estas formas de vida; b) la riqueza y yen nudos o centros de interacción es-
la diversidad de las formas de vida de interacción especiales. peciales (Kwiatkowska e Issa, 1998: 14).
contribuyen a la realización de estos Los caracteriza el hecho de que nin-
valores y también son valores en sí gún ser vivo puede existir al margen
mismos; c) los seres humanos no pue- El punto central de la profundidad del continuo biológico, y éste se forma
den intervenir de manera destructiva aludida tiene que ver con la necesaria en un sistema de relaciones completa-
de la vida; d) a este respecto, la inter- motivación de quienes aceptan esta mente articulado, esto es, constituye
vención humana actual es eminente- orientación, que su relación especial con una totalidad indiferenciada que se
mente excesiva; e) por eso, las actuales la naturaleza proceda de sus creencias encuentra en continuo flujo. Todo flu-
reglas del juego deben ser radicalmen- y actitudes más básicas; sólo esto les ye, finalmente, hacia la unidad esencial
te modificadas; f) esta modificación asegura la fuerza suficiente para man- de todo lo que existe.
radical debe hacerse tanto en las es- tener una acción eficaz, continua y con- Quienes se identifican con la totali-
tructuras económicas como en las ideo- sistente. El otro sentido de la profundi- dad del universo no únicamente tienen
lógicas y culturales; g) en el ámbito dad del enfoque se refiere a la necesi- la visión del verdadero ser de las co-
ideológico, el cambio principal consis- dad de diferenciarlo de lo que Naes sas, sino que además, y esta es la se-
te en apreciar más la calidad de vida cataloga ‘ecología superficial’, la cual, gunda tesis, se encuentran preparados
que el goce de los bienes materiales; h) aunque ciertamente se preocupa por la para la acción consecuente con esa
las personas que aceptan estos princi- protección del planeta, está únicamente identificación, es decir, debe cambiar
pios tienen la obligación de contribuir, comprometida con una perspectiva su trato con la naturaleza, buscar la
directa o indirectamente, a la realiza- antropocéntrica de los problemas autorrealización como el acto de ex-
ción de los cambios fundamentales que ecológicos, desde la cual la naturaleza pandir la conciencia de sí; dejar atrás
aquéllos implican (Kwiatkowska e Issa, debe defenderse exclusivamente por el la idea común y egoísta de que se es
1998: 23-24). valor instrumental que representa para un individuo separado con intereses
Se trata de un movimiento extremis- la sociedad. De hecho, la ecología pro- particulares, hasta alcanzar un verda-
ta en doble sentido: a) debido a que funda critica el sesgo socialmente injus- dero sentimiento identificatorio con el
busca un cuestionamiento profundo de to a escala mundial que está implícito todo. Un eslabón hacia el estadio reli-
las prioridades valorativas y de los pre- en la ideología que fundamenta el mo- gioso es lo que implica esa trascenden-
supuestos filosóficos que se articulan en vimiento de reforma ecológica superfi- cia de sí hacia el todo, lo que exige una
nuestra forma cotidiana de vivir y pen- cial: “El movimiento superficial: com- conversión, el surgimiento de profun-
sar, y b) porque propugna una transfor- bate la polución y la disminución de los dos sentimientos, que se vierten en la
mación completa de la sociedad huma- recursos. Objetivo central: la salud y la religiosidad y le otorgan a la ecología
na: transformar el ideal del crecimiento opulencia de los habitantes de los países profunda ese componente social de
económico a toda costa a favor de una desarrollados” (Kwiatkowska e Issa, cohesión, sobre todo por el significati-
vida sencilla en los medios pero rica en 1998: 14). La cuestión es que, con ma- vo impulso motivacional que adquiere
los fines que persigue. Esto último le ha yor radicalidad, el movimiento llama a la causa de conservación ecológica.
valido a la corriente la etiqueta de inge- una revaloración de lo que significa ser Derivado de lo anterior, pueden des-
nuidad, ya que no hay realismo político humanos, no sólo de repensar el lugar prenderse dos consecuencias socioló-
en plantear que, con la fuerza de la con- que le corresponde a la persona en la gicamente importantes: primero, que el
ciencia individual, pueda cambiarse la totalidad del cosmos, sino de transfor- estilo de vida de aquellos que han ex-
razón de ser del modo de producción mar la idea que cada uno tiene acerca perimentado el cambio de su ego (yo)
capitalista, que, además, después de la de lo que constituye su ‘verdadero yo’. restringido por un ego ecológico, es
segunda guerra mundial ha sido ensal- El núcleo duro del movimiento se decir, por un yo constituido en la natu-
zado como la estructura ‘definitiva’ de constituye de dos tesis: la primera con- raleza, no puede seguir orientado ha-
la economía humana (Kwiatkowska e siste en afirmar un holismo de funda- cia un mayor nivel de consumo, como
Issa, 1998: 13). mento místico, según el cual los indivi- ocurre actualmente con el capitalismo.

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Ese cambio irreversible que ha regis- vive como una colección de objetos dis- 3. Ecofeminismo
trado su visión del mundo lo lleva por cretos dentro de un paisaje inerte cuyos
fuerza a buscar una forma de vida más componentes interactúan de cualquier Si bien el ecofeminismo surgió en dis-
sencilla, aunque también más vasta en manera. En cambio, desde la mirada de tintos países aproximadamente a me-
experiencias, al disponer siempre de los la ciencia de la ecología, cada cosa vi- diados de los años setenta, Estados Uni-
medios elementalmente necesarios viente se experimenta como nudo de dos dominó los primeros desarrollos
para disfrutarla. Se impone una revi- una red biosférica, es decir, en el cam- de esa orientación, también radical, que
sión de los valores habituales para con- po de las relaciones intrínsecas de la afirma la intervención de las mujeres
trastarlos con aquellos que enaltezcan biosfera. Desde la ecología profunda, como piezas clave en la transición des-
la experiencia en todos sus aspectos, entonces, los seres humanos se encuen- de un mundo insustentable hacia otro
las vivencias que todos podemos ge- tran relacionados internamente, ya que sustentable, aunque dentro de la co-
nerar en nuestra existencia cotidiana. las cosas sólo pueden concebirse a tra- rriente difieran las percepciones de los
La otra consecuencia es de índole fi- vés de sus relaciones con otras, y esa mecanismos del cambio. Así, mientras
losófica, ya que según la ecología pro- red constitutiva de interrelaciones lo vin- que las ecofeministas espirituales pue-
funda, esta nueva percepción del mun- cula todo en una articulación o totali- den llamar a las mujeres a contar con
do que resulta del proceso espiritual dad integrada como un sistema, donde el poder de la Diosa, las ecofeministas
de crecimiento ecológico proporciona cada parte o subsistema desempeña una sociales (anarquistas) y socialistas im-
la base para la ‘acción correcta’. Esto función específica, en forma interde- pulsan a las mujeres a desafiar la ce-
implica un franco alejamiento de la éti- pendiente con los otros subsistemas; se guera de género de las organizaciones
ca (incluyendo la ética ambiental), de genera así un engranaje que se desarro- políticas dominadas por hombres. Para
la moral y el deber, para acercarse más lla por medio de su propio automo- ambos casos, sin embargo, el fin de la
a la ontología. Significa simplemente vimiento, en un proceso complejo de subordinación femenina es un requisi-
que la ética es un fundamento equivo- múltiples determinaciones (Kwiatkow- to para una sociedad sustentable: “No
cado para la conservación, puesto que ska e Issa, 1998: 33-34). puede ser un subproducto de ninguna
si la gente percibe el cuidado que debe Puede decirse, finalmente, que la otra lucha. El ecofeminismo no puede
brindarle a la naturaleza como un acto mayor aportación de esta perspectiva ni quiere esperar hasta después de la
de sacrificio de su interés egoísta, la estriba en su carácter radical, de asu- revolución” (Mellor, 2000: 64).
exigencia moral que se lo reclama ten- mir la cuestión ambiental como un pro- Las cuestiones centrales que aportó
drá escasa eficacia práctica. Por ello el blema social e individual vinculado con el pensamiento ecofeminista a la críti-
mejor camino es la identificación del los valores y principios, y en esa medi- ca social tienen que ver con: a) la crisis
individuo con el universo natural, ya da más relacionado con las decisiones de la modernidad, cuando el costo
que así la conservación se ve como de personales y la voluntad. En esto radi- ecológico del ‘progreso’ resultó aparen-
interés propio y la acción se realiza por ca su fuerza y su proyección, ya que te; b) una crítica del ‘hombre patriar-
amor y con gusto, no por un deber que llama a los individuos a llevar adelante cal’ (occidental) como la causa de esa
se considera impuesto o forzado por un cambio en el modo de vida y ac- crisis; c) un llamado a que las mujeres/
las circunstancias. Cuando el yo perso- tuar consecuente con los principios de la hembra/lo femenino/el feminismo
nal ha madurado hasta lograr la protección y defensa de la naturaleza. sean los agentes del cambio; d) com-
autorrealización, entendida no en el No obstante, su limitación tiene que promiso con una igualdad sin géneros,
sentido de logro personal, sino como ver con el hecho de que exige una más que el ‘poder para las mujeres’.
conciencia de que no existimos sepa- modificación decisiva en la organiza- Más que los hombres per se, es el
rados de, ni en oposición a todos los ción de la vida cotidiana y en la forma patriarcado lo que se ve como proble-
demás seres vivos y procesos natura- de asumir los nexos con la naturaleza, ma. Las mujeres han de ser el puente
les, la ética como tal quizá esté de más. lo que implica una identidad y un con- hacia un orden social reformado y
Lo importante es cómo experimenta- junto de transformaciones personales reformulado (Mellor, 2000: 62).
mos el mundo y la práctica que seamos que conllevan una diferente visión del Ynestra King representa el vínculo
capaces de realizar. El problema estriba mundo y de los otros. Se marcaría así entre el movimiento ecofeminista y el
en que a través de la visión de la ciencia una división social entre los que efecti- activismo político radical. Ella partici-
moderna, que no ha incorporado la ra- vamente han adoptado esa posición pó notoriamente en la promulgación
cionalidad ambiental, la naturaleza se radical y quienes no lo han hecho. del ecofeminismo como una posición

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definida en la izquierda estadouniden- triarcal de la sociedad occidental. La pre- mujeres, e incluso de proponer que
se, fuertemente arraigada en la política sente amenaza a la naturaleza se ve únicamente después de acabar con el
y la práctica del movimiento de acción como consecuencia de dualidades jerár- dominio patriarcal será posible asumir
directa. King rechaza la idea de que las quicas occidentales: hombre/mujer, la crisis ambiental con éxito. Este plan-
mujeres abandonen su asociación con público/privado, sociedad/naturaleza, teamiento, lejos de llamar a sumar es-
la naturaleza y se unan a los hombres mente/cuerpo, así como patrones de co- fuerzos tanto de varones como de
en los mismos términos del ‘mundo nocimiento: razón/emoción, abstracto/ mujeres en la causa común, pareciera
público’, ya que significaría aceptar las concreto, saber académico/saber popu- marcar esa diferencia y excluir a los
formas culturales que desplazan a la lar. A pesar de sus diferencias, las femi- hombres, cuando la perspectiva de
mujer y la naturaleza. Asimismo, toda nistas concuerdan en la clase de socie- unidad sería más interesante.
vez que la sensibilidad ecológica de las dad que buscan, aunque la mayoría de
mujeres y la orientación de sus vidas sus argumentos y escritos parecen estar 4. Ecología humana crítica y
se construyen socialmente, esto podría más preocupados por eliminar los as- teoría de la acción comunicativa
socializarse desde las mujeres mismas pectos negativos de la actual sociedad
de acuerdo con su vida cotidiana. No que en considerar los específicamente Para algunos investigadores, la ecología
existe razón para pensar que las muje- positivos de una nueva organización humana es una de las vías más comple-
res situadas en posiciones de poder pa- social. Esto se comprende tanto por las tas para comprender los problemas
triarcal actuarán en forma diferente de exigencias de la acción directa para im- ambientales, debido a que comienza por
los hombres (King, 1983: 122-123). pulsar el movimiento social como por asumir a la sociedad como un sistema
El centro del planteamiento ecofe- las dificultades para diseñar otro mun- entre otros. No obstante, es una orien-
minista social que lo acerca al feminis- do que no resulte una utopía inviable. tación que a menudo ha dependido de
enfoques que naturalizan, y por lo re-
gular adoptan una postura acrítica frente
El centro del planteamiento ecofeminista social a las instituciones sociales. En esta par-
que lo acerca al feminismo de afinidad es que todos los seres te del artículo se busca subrayar por qué
puede considerarse una perspectiva in-
humanos se encuentran arraigados por igual en la
teresante y vigente, en la medida que
naturaleza, son seres corpóreos. aborda la compleja relación entre natu-
raleza y sistema social mediante un
modelo general de los problemas am-
mo de afinidad es que todos los seres Como orientación radical que exige bientales y los dilemas que se le presen-
humanos se encuentran arraigados por ante todo una perspectiva de género tan a las sociedades en esa interdepen-
igual en la naturaleza, son seres corpó- para enfocar el problema ambiental, el dencia (Wilson, 1999: 28).
reos. No obstante, para esta orienta- ecofeminismo ha sido muy importan- La idea del dilema social tiene la ven-
ción los hombres están esencialmente te, debido a que socialmente las muje- taja de analizar la relación naturaleza-
menos arraigados en la práctica. Esto res ocupan un lugar fundamental, y sociedad no sólo como una contradic-
se debe a que han utilizado su poder como activistas del ambientalismo se ción, sino como la gran disyuntiva que
para escapar de las consecuencias de hacen cargo de las actividades con han enfrentado las sociedades a través
su arraigo o corporeidad. De ahí que mucho compromiso: muestran respon- del tiempo en su interacción con la na-
el rechazo de la sociedad patriarcal y sabilidad y capacidad de liderazgo y turaleza, pero siempre a partir de la
la cosificación de las mujeres y del conducción de las organizaciones. El necesidad de optar por alguna alterna-
mundo natural se manifesten en la prác- gran mérito de esta orientación tiene tiva que de entrada no es agradable sino
tica. “En el proceso de nutrir la socia- que ver con la necesidad de plantear el conflictiva.
lización de lo orgánico, las mujeres tien- cuidado del medio como prioridad so- El punto de partida considera el am-
den el puente entre la naturaleza y la cial, donde las mujeres han dado prue- biente natural como un sistema físico que
cultura” (King, 1990: 116). bas de mayor deber y disciplina. A pe- sigue la lógica de las leyes de la termodi-
Tal vez el núcleo común que identifi- sar de ello, este enfoque presenta la námica. En cambio, el sistema social que
ca el pensamiento ecofeminista en todo limitante de cargar demasiado el peso organiza el ser humano para el manejo
el mundo es su crítica al carácter pa- de la responsabilidad ambiental en las de los medios naturales sigue la lógica de

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la maximización. Esto último es más evi- XX (Odum, 1985). Es sabido que la Finalmente, basar el subsistema eco-
dente en el caso del sistema económico, industria para el manejo de residuos es nómico en la maximización causa pre-
aunque también lo es para el sistema uno de los sectores económicos con siones para un crecimiento económico
político, tanto por su interdependencia rápido crecimiento. Existen costos en ilimitado. Mientras muchos investiga-
como por el hecho de que los actores el desarrollo de una solución técnica dores han sostenido que las innovacio-
políticos buscan maximizar el poder en para el problema así como en el mane- nes técnicas impiden una tendencia li-
forma equiparable con la que estilan los jo físico de los residuos. El dilema so- neal hacia el agotamiento de los recur-
actores económicos, quienes buscan ob- cial se debe a que los residuos aumen- sos, la escala clara de las porciones del
tener más dinero. Ahora bien, en la fron- tan a una velocidad mayor que su in- mundo natural ordenadas por el
tera entre los sistemas natural y social, corporación económica integral de las subsistema de la economía humana
ambas lógicas se contradicen mutuamen- actividades que los generan, y mucho ocasiona serios problemas. El proceso
te, de modo que esta oposición puede del costo se extiende a la sociedad. que conserva la diversidad biológica
modelarse como un ‘dilema social’, es Una segunda manifestación de la con- necesita espacio para funcionar. La
decir, una situación en la que la búsque- tradicción entre el sistema social y la magnitud de la economía humana, a la
da del interés individual socava los inte- naturaleza deriva de que la lógica de la que todos contribuimos, hace que este
reses colectivos a largo plazo de una co- economía busca maximizar no la efi- espacio desaparezca, lo cual genera un
munidad. El dilema mejor conocido en ciencia sustantiva del recurso, sino, más dilema social global.
las ciencias ambientales, y de la mayor bien, un valor calculado abstractamente Las complejidades de los dilemas
importancia para la sociología, es el de la (Wilson, 1999: 29). Los dilemas socia- sociales apuntan hacia la necesidad de
tragedia de los comunes que planteó Hardin les aparecen porque los costos a largo soluciones cooperativas. Tales arreglos
a finales de los sesenta (Bonfil, 1995: 21), plazo o el agotamiento de los recursos proceden en un sentido muy básico a
para señalar el destino inevitable al que se incorporan inadecuadamente en los partir de la comunicación, esto es, a
parece estar condenado cualquier recur- cálculos económicos y se emplazan a partir de negociaciones y actividades
so de propiedad compartida cuando los las futuras generaciones, ya que a la cooperativas que, a su vez, se basan
beneficiarios no son todos igualmente cui- fecha no existen adecuadas medicio- en comprensiones mutuas entre las
dadosos con las propiedades comunes, nes ni registros precisos. partes del dilema. Estas cooperaciones
lo que arriesga su usufructo o genera ca- La tercera expresión resulta de que y negociaciones ocurren dentro de es-
lamidades para la colectividad. Tal dile- los recursos energéticos se estructuran tructuras que reflejan relaciones de
ma puede ser una forma útil de repre- como un flujo unidireccional. Al mar- poder. La tensión entre la necesidad de
sentar esa contradicción general entre la gen de que hablemos de calorías o cooperación y las realidades del poder
lógica del ambiente natural y la del siste- megawatts, el problema es igual: la ener- social hace relevante el trabajo de
ma social. Cuatro tipos ‘ideales’ de de- gía fluye a través del sistema termodi- Jürgen Habermas para comprender las
gradación ambiental y práctica ecológica námico a tasas determinadas por las le- relaciones entre la sociedad y su ámbi-
no sustentable expresan este dilema so- yes de la naturaleza, es utilizada, y se to físico. La comunicación ofrece los
cial: la producción de residuos, la poca pierde –no puede ser reciclada– (Wil- principios, medios y motivos para lo-
valoración de los recursos, el consumo son, 1999: 30). Cuando se ejerce exce- grar que los dilemas encuentren solu-
excesivo de flujos de energía y la escala siva presión sobre los flujos de energía ción, al elevar el nivel de las interaccio-
global de la economía humana (Wilson, y se colapsan, los resultados son negati- nes y otorgar todo el valor al ambiente
1999: 29). vos para todos los involucrados. Estos y a la sociedad, que lo necesita en buen
Uno de los principales efectos de la dilemas sociales se manifiestan a veces estado y con futuro (Habermas, 1992).
lógica de la maximización en un siste- rápidamente en los recursos de propie-
ma económico competitivo es el de dad comunitaria, sobre los que resulta 5. Constructivismo
impulsar la innovación técnica conti- difícil establecer derechos de propiedad
nuamente y, por lo tanto, un aumento efectivos, lo que da lugar a la tragedia Según esta orientación de la sociología,
permanente de la complejidad. Todo de los comunes, es decir, al grave daño los problemas ambientales no se mate-
sistema vivo que aumenta en comple- que pueden ejercer los particulares so- rializan por sí mismos, sino que más bien
jidad requiere más energía a fin de ale- bre bienes comunes de la humanidad, deben ser ‘construidos’ por individuos
jar el desorden, como lo estableció sea por egoísmo, interés económico o u organizaciones, al definir la contami-
Odum en los años ochenta del siglo falta de cuidado. nación o cualquier otra condición obje-

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tiva como preocupante, plantean hacer fondo es social, en la medida que los narias, que sin duda contribuyen
algo al respecto. El principio es que los humanos hemos causado los daños a la significativamente al cuidado y adecua-
conceptos de naturaleza han sido siem- naturaleza y somos quienes podemos y da explotación de los recursos natura-
pre afirmaciones culturales, y el con- tenemos que generar los cambios en les, así como a la convivencia pacífica
texto para las interacciones ecológicas todos los niveles para revertirlos y, en de todos los pueblos del mundo.
es cada vez más construido por la so- adelante, proteger el planeta.
ciedad. Sin embargo, el hecho es que la Desde la perspectiva del constructi- Conclusiones
acción humana depende de la existen- vismo social, el interés de la sociología
cia del medio, actúa sobre él, y en mu- por los problemas relacionados con el a) Existen diversos y suficientes fun-
chos casos no visualiza la complejidad ambiente se centra, por un lado, en cómo damentos teóricos de la sociología am-
de la crisis que hemos contribuido a agu- las cuestiones ambientales son conver- biental que presentan otros tantos
dizar (Woodgate y Redclift, 1998: 17). tidas en problemas, y, por otro, en la paradigmas para explicar y compren-
Lo anterior significa el reconocimien- autoridad y legitimidad social de las di- der las complejas interrelaciones entre
to de que el ambiente no es representa- ferentes demandas sobre el medio. En naturaleza y sociedad.
do a través de una construcción social el primer caso, lo importante es el pro- b) La sociología no ha logrado con-
simplemente, ya sea por medio del len- ceso por el cual se entrecruzan los fac- tribuir significativamente a la solución
guaje o simbólicamente; es asimismo tores estructurales ‘objetivos’ relativos de los problemas ambientales; deja un
producto de la actividad social, lo que al ambiente, complementariamente el vacío en el conjunto de nuevas aproxi-
nos lleva a considerar no sólo las de- punto de vista del sujeto, con su expe- maciones que incluyan la racionalidad
mandas que se hacen contra la natura- riencia de vida y una perspectiva espe- ambiental.
leza, sino también su transformación cífica de percibir y apreciar la cuestión c) Las corrientes más importantes de
material. Para esta corriente, en cierto ambiental (Berger y Luckman, 1998). la actualidad combinan los enfoques
sentido, toda la discusión acerca de la El punto crítico surge al considerar radicales, los cuales apuntan a la nece-
sustentabilidad, incluyendo la ambien- que del mismo modo que los auto- sidad de cambios de fondo en el mo-
tal, es socialmente construida. Recorde- comprensivos enfoques sociológicos tra- delo de desarrollo y en las actitudes
mos que al hablar de sustentabilidad es- dicionales se mostraron incómodos con sociales como condiciones para resol-
tamos abordando principalmente tres los temas ‘técnicos’ y ‘biológicos’, es ver la crisis ambiental, que no deja de
componentes: la naturaleza, la sociedad posible observar en la actualidad pers- agudizarse, y orientaciones que plan-
y las instituciones que median, condicio- pectivas emergentes que ven los me- tean cambios individuales.
nan y determinan en buena medida las dios naturales en gran medida como d) El enfoque marxista ha recobra-
relaciones entre los dos primeros elemen- construcciones sociales: la naturaleza do vigencia y amplía su análisis de la
tos (Woodgate y Redclift, 1998: 18-19). como una variable social potencialmen- complejidad ambiental, al incorporar
El constructivismo plantea que la dis- te importante que corre el riesgo de la reflexión en torno a los factores re-
cusión sobre el medio está en una posi- convertirse en simple naturaleza social- lacionados con el funcionamiento de
ción ambivalente, pues si bien se le con- mente variable, como lo planteó en su la base ecosistémica de recursos na-
sidera un producto cultural como otros, momento Lutzenhisser (1992). turales, así como de la dinámica
por otra parte, el análisis sociológico, al Para el constructivismo, la construc- ecológica a la dialéctica social del pro-
no aceptar el determinismo biológico y ción cultural del ambiente no es tanto ceso productivo y de reproducción
las teorías evolucionistas, se aleja de los un preludio, es decir, algo que antecede capitalista, a la vez que propone con-
temas relacionados con la naturaleza. a la acción, sino un epílogo, que siem- cebir el ambiente como potencial pro-
Ese distanciamiento entre las ciencias pre es opcional. Para alcanzar la ductivo y procesos codeterminantes
sociales y los temas relacionados con la sustentabilidad la construcción social que de la producción, lo que implica una
naturaleza ha propiciado que la socio- más interesa tener en cuenta es precisa- reformulación del paradigma marxista
logía no contribuya a la solución de los mente que los problemas ambientales y una nueva visión de los conflictos.
problemas del cambio ambiental global. queden adecuadamente planteados y for- e) La ecología profunda ha marcado
De hecho, es un reclamo que se levanta mulados en términos científicos. Esto una posición que, lejos de perder fuer-
con mayor fuerza para que esta situa- no significa desechar los conocimientos za, continúa como fundamento de ac-
ción cambie, sobre todo cuando esta- y prácticas, generalmente de raíces ciones colectivas y cambios individua-
mos conscientes de que la cuestión de ancestrales, de las comunidades origi- les en muchos países del mundo, don-

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de la preocupación ética y urgente de posición extrema en la ecología, donde de una sociedad. El carácter crítico y
un cambio en los estilos de vida ha la perspectiva de género es la vía prin- propositivo está permitiendo aplica-
readquirido presencia; los miles de cipal para impulsar la participación so- ciones novedosas y estudios de ma-
seguidores mantienen una actitud in- cial en la solución de la crisis ambien- yor alcance.
transigente para quienes aún no han tal global, nacional y local. h) El constructivismo abrió el aná-
modificado sus hábitos y forma de g) La ecología crítica, complemen- lisis a los factores relacionados con la
vida. Por ello, esta orientación significa tada con la teoría de la acción comuni- construcción social del ambiente, en
una alternativa real de revaloración de cativa de Habermas, se trata de una la medida que la naturaleza y la reali-
la relación cultura-naturaleza, y posibi- orientación que si bien no es tan re- dad objetiva no son percibidas de la
lita un fundamento psíquico y de ac- ciente, sí ha registrado variaciones, a misma forma por grupos sociales con
ción colectiva que cada día se muestra partir de las cuales ha superado su vi- diferente cultura y significados codi-
más sólido. sión exclusiva del dilema como lógica ficados; de ahí que su insistencia en
f ) El ecofeminismo, también como de análisis, para arribar a una versión considerar los elementos subjetivos
orientación que sigue sumando simpa- que insiste en ofrecer respuestas a las haya encontrado eco y muchos ensa-
tizantes y activistas, representa un ca- contradicciones que las lógicas del ca- yos. Sin embargo, así como se han de-
mino importante, incluso donde las co- pital y del ambiente generan en toda sarrollado posiciones contructivistas
rrientes feministas no han logrado ocu- sociedad. De ahí sus esquemas pro- extremas que reducen la importancia
par un papel protagónico; en la orien- puestos y la perspectiva de análisis, de los datos físicos, esa restricción
tación ecologista encuentran los argu- donde las causas y las consecuencias está delineando el enfoque, y hace que
mentos y formas de organización de esperadas deben incluirse en la lógica las aportaciones de los seguidores en-
género que incluyen la lucha por el resultante de asumir los problemas a cuentren equilibrio en factores obje-
ambientalismo como el eje de las ac- partir de las acciones comunicativas tivos y subjetivos en la construcción
ciones. Así, contribuyen a generar una que conforman los principales nexos social del ambiente.

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