Quisiera volar hacia Dios con vuelo largo y abierto, pero enseguida me fallan las fuerzas y me encuentro de nuevo en la tierra Os pido y vuelvo a pediros, hermanos de almas puras, que ya que no sé volar, me ayudéis a ir hacía Dios, poco a poco, rama a rama. Así como el pájaro joven, que aún no tiene corazón ni alas para despegar. Hasta que llegue el día en que lance al cielo el corazón, y detrás, sin miedo, se lance él. Mirad como vuela... Vuela a placer en el espacio, sube a las cimas, baja al abismo, ya nada le asusta su corazón sólo ríe, ama, canta... ha puesto en Dios tanta confianza, que ya no teme caer . Así se aprende a volar, así se aprende a amar, así se llega a la santidad, como el pájaro, poco a poco, a poquitos, despacio, rama a rama..