You are on page 1of 4

Teoría crítica: de Marx a la escuela de Frankfurt

Relatoría clase 23/08/2018


Por: Sabina Bernal Galeano
En la clase del 23 de agosto se analizó el texto El Estado y la revolución (capítulos del 1 al
6) escrito por Lenin. Desarrollado en 1917, este texto muestra la concepción que tenía Lenin
del Estado, sus oposiciones a este y su idea de revolución. Su publicación, un año antes de la
revolución rusa y en un momento de fuerte convulsión en Europa, sería parte del abrebocas
para la revolución venidera en Rusia, impulsada justamente por Lenin. Para el análisis de
este texto fue importante tener varios puntos en cuenta. El primero fue el contexto de Lenin
y la situación de Rusia en ese momento. El segundo El estado y como este era concebido por
Lenin, el tercer punto, directamente ligado al anterior, es el tema del socialismo y del
comunismo y finalmente el cuarto el problema de la extinción del Estado.
Lenin nacido en Rusia en 1870, fue como se mencionó anteriormente, el principal impulsor
de la revolución rusa. Odiado por muchos y admirado por otros, buscó con la revolución
instaurar el comunismo en la Rusia del momento, una nación que en 1917 sufría unas
condiciones de gran desigualdad social y miseria, en donde la pobreza reinaba y aun el
feudalismo era el sistema allí imperante. Los zares vivían en sus palacios lujosos y los
campesinos eran prácticamente sus siervos; mientras los primeros vivían en la opulencia los
segundos se sumían en la miseria. Además, era una nación campesina, poco industrializada.
Con la revolución, Lenin buscó pasar del feudalismo directamente al socialismo, saltando la
etapa del capitalismo. Esto planteó una diferencia con la concepción teleológica de la historia
que tenía Marx quien había considerado que para llegar al comunismo había que pasar
primero por un estadio previo necesario de feudalismo seguido de capitalismo y después
socialismo. Sin embargo, es importante entender acá los contextos y realidades sociales que
vivieron los autores: Marx escribió desde un contexto industrializado e inspirado en la nación
donde capitalismo había visto primero la luz: Inglaterra. Lenin escribió viendo la desigualdad
y la realidad de una nación agraria preindustrial. Curiosamente, el paso del feudalismo al
socialismo fue un tránsito que después resultó común en varios estados alrededor del mundo
como Cuba o China donde se implementó el socialismo.
Para 1917, lo planteado por Marx y Engels, de que algún día la pauperización de los obreros
sería tal que llegaría la revolución, no había sucedido. Esto se debió en parte importante a la
conformación de sindicatos obreros que, por medio de demandas constantes, lograron
conquistas significativas. Si bien la pobreza no dejó de prevalecer y ser un factor dominante,
se logró que, por ejemplo, se instauraran los llamados tres ochos: ocho horas de trabajo, ocho
horas de sueño, ocho horas de estudio. también el sufragio femenino fue una de estas
conquistas.
De la mano del surgimiento de los sindicatos y sus conquistas, surgió la social democracia
en la izquierda. En cabeza de Eduard Bernstein y Karl Kautsky, ambos alemanes, la social
democracia se constituyó como una corriente de pensamiento que influenciaría también en
la conformación de partidos políticos en Europa. En sus postulados Kautsky y Bernstien
replantearon las bases del materialismo histórico, y defendieron el Estado democrático.
Partían de la tesis de que el socialismo es la realización completa y real de la democracia.
Planteaban que no se debía buscar acabar con el capitalismo (como lo plantearon Marx y
Engels en su momento y como lo plantearía Lenin), sino modificarlo;este, bajo unas
modificaciones democráticas, llevaría al socialismo. Ante estos postulados Lenin hizo una
oposición ferviente y radical, tildándolos entre otras cosas de burgueses. La principal razón
de su oposición era que para él Estado no podía ser nunca un garante de derechos o un
representante de la clase obrera, al ser el principal aparato base de dominación de la clase
burguesa sobre el proletariado.
Así pues, para inicios del siglo XX la izquierda se encontraba dividida en Rusia: por un lado,
estaban los mencheviques, influenciados por los pensamientos socialdemócratas, y por el
otro, los bolcheviques que eran comunistas y estaban influenciados por el pensamiento
marxista. Esta división se acrecentó aun más con las opiniones divididas que hubo acerca de
la participación de Rusia en la primera guerra Mundial. Los mencheviques estaban a favor,
los bolcheviques en contra. Lenin, quien era la cabeza de los bolcheviques se oponía
fuertemente a la participación de Rusia pues consideraba que esta era una guerra imperialista,
ya que su base era el reparto de las colonias, la geopolítica del poder; a fin de cuentas, una
guerra que contribuiría a la expansión del capitalismo en su fase superior: el imperialismo.
Además, consideraba que esta guerra tendría un gran potencial de destrucción -como
efectivamente lo tuvo- pues al no estar exenta del capitalismo, sino al contrario, ser una
expresión de él, reproduciría sus lógicas, por lo que la industria armamentista se vería
beneficiada de la pelea por el poder colonial, de los nacionalismos exacerbados y de la lucha
entre proletarios.
El segundo punto para el análisis fue El estado que, como se puede entre ver ya, para Lenin,
el Estado es desde su Genesis, el aparato de dominación y violencia producto de las
contradicciones de clase. En él siempre habrá una clase (los burgueses) oprimiendo y
dominando a otra, pues es en esta institución, según él, donde esto se legitima. Como se podrá
intuir de esto, Lenin es un enemigo de la Burocracia.
para Lenin la entrada a la guerra imperialista suponía no solamente una transformación del
capitalismo sino también del Estado, haciendo aun más dominantes y opresivas sus
características pues se convertiría en una gran burocracia militar y en un capitalismo
burocrático estatal, o en lo que se ha llamado más actualmente el complejo militar industrial.
De esta forma, el Estado ya no sería solo capitalista sino también imperialista, lo que traería
un detrimento para el proletariado que además de verse explotado se vería obligado a ser
carne de cañón al ir a la guerra, y finalmente, forzado a pelear contra su propia clase al luchar
por una idea de nación. Los proletarios de Francia y Rusia peleando contra los de Alemania.
A diferencia de lo planteado por Marx “Proletarios del mundo Unidos” la guerra y el Estado
capitalista los enfrenta y los hace matarse entre sí. Esto representaba para él una razón más
que suficiente para evitar la guerra. Sin embargo, Rusia fue a la guerra y y la destrucción y
muerte pronosticada por Lenin se cumplió.
Hablando del tema del Estado surgió la aclaración acerca de la dominación. Con respecto a
la idea central de Lenin del estado como fuente base de dominación, Santiago Castro- Gómez,
plantea que hay una contradicción teórica interna y es la confusión o mezcla de los términos
dominación y hegemonía, términos desarrollados por Gramsci. La dominación es la violencia
y opresión de un grupo sobre otro sin que el sometido tenga más opción que aceptar dicho
sometimiento, casi siempre en contra de su voluntad. La hegemonía en cambio, reconoce la
dominación, pero en este caso esta se da de forma consentida. Es decir, el poder de una de
las partes sobre la otra es consentido, conocido y aceptado. Pues bien, el asunto acá es que
dentro del Estado la figura que prime no siempre puede ser la dominación pues hay un
consentimiento de hacer las cosas a la forma en la que están establecidas, es decir que de
alguna manera hay un consentimiento sobre la estructura del Estado, aunque las políticas o
ideales de fondo que se lleven a cabo no se compartan. Es justamente por esto que distintos
grupos en la sociedad están peleando por la hegemonía del Estado.
El tercer punto que se trató en la clase es el de la diferencia entre socialismo y comunismo,
entendiendo que el primero es una etapa necesaria pero provisoria para llegar al segundo.
Marx, en el manifiesto del partido comunista planteaba que la primera instancia para el
cambio era que la clase obrera se configurara como un partido político. Una vez dicho partido
hubiera participado en el juego democrático y ganado las elecciones empezaría una transición
que llevaría de capitalismo al comunismo. Esta transición sería el socialismo, el cual sería
formado por la dictadura del proletariado conformada por diez puntos base a saber 1)
expropiación para estatizar la propiedad, 2) fuerte impuesto progresivo, 3)abolición del
derecho de herencia, 4)confiscación de la fortuna de los rebeldes, 5) solo un banco estatal,
eliminación de la banca privada, 6)centralización transporte, 7)industrialización en manos
del Estado, 8) proclamación del deber de trabajar, 9) reducir las diferencias entre ciudad y
campo y 10) educación pública y gratuita de todos los niños. Así se crearía un hombre nuevo
que estaría, por así decirlo, limpio de capitalismo. Durante el periodo de transición el Estado
jugaría un papel importante pues sería el creador de dicho hombre, por medio de las políticas
que implantara. Al final de dicho periodo, el Estado, que también es un mecanismo del mismo
sistema capitalista, dejaría de existir pues ya no habría necesidad de dicha institución, debido
a que los individuos se sabrían regular por si solos. El objetivo último es el comunismo, que
haya una sociedad humana donde el hombre esté reconciliado con su trabajo, con la
naturaleza, y con los otros hombres.
Lenin tenía una idea bastante idealista y romántica de la clase obrera y una fuerte creencia
en su autorregulación. Fiel a los postulados del manifiesto comunista, creía que después de
la superación del socialismo, llegaría el momento en el que las personas tendrían tan
internalizadas dentro de su actuar diario las diferentes funciones que antaño hubieran
correspondido al estado, que dicha institución no sería necesaria, en el comunismo la
sociedad se autorregularía. Así pues, para Lenin en el periodo de transición, es decir en el
socialismo, basado en los diez puntos planteados por Marx, se iría haciendo el desmonte
progresivo del Estado, siendo su existencia necesaria como herramienta base para su propia
extinsión. Al no existir Estado en el comunismo, no hay dominadores ni dominados, lo cual
refuerza aun más la necesaria desaparición de este pues su base ya no existe. A pesar del
ideal planteado por Lenin y su intento de implementarlo en Rusia, el fin del Estado nunca
llegó y el periodo de transición se convirtió en una dictadura con Stalin.
Finalmente, alejándonos un poco de Rusia y pensando en el funcionamiento del Estado en
Colombia se dijo que con la constitución del 1991 y con el acuerdo de paz se creó una
hegemonía y se dejó atrás la dominación existente durante el frente nacional. Sin embargo,
se dijo también que mientras el Paramilitarismo existiera o cualquier tipo de para estado, la
dominación iba a existir, revestida de hegemonía. Se reitera que no se trata de abolir el
capitalismo ni el Estado sino de combatir sus efectos más desigualitarios, cosa que la
izquierda latinoamericana ha venido entendiendo con el pasar de las luchas y los años y parte
de lo que conforma la diferencia entre la izquierda y la derecha: la derecha busca que las
cosas se queden como están, la izquierda (ahora) busca utilizar el Estado para paliar las
consecuencias más desigualitarias del capitalismo.

You might also like