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EDITORIAL ARIEL
OJleccon EI..CAf\O
la gecgraf!a
y SJS problemas

Ferr:,and Joly

JOLY, Fernand (1979), La cartografía. Barcelona, Ariel

 INTRODUCCIÓN

l. DSl'INICIÓN oe LA CARTOGRAflA

Un mapa es una reprl'semat:ión geométrica plana, s,mp/lf/cada >'

com'l!nrlona~ de UJda o parte dl! la superficie terrestre, t:011 una re/a
c1ón de similitud proporefonada, a la que se llama escala.

o\) Una reprcsentaciñn geometrlca plMa

lll mapa es la representación sobre un plano (el de la hoja de pa.

p,!I sobre la que eslá dibujado o impreso) de la superficie terrestre,
que es curva. El paso de esta superficie curva a la plana del ma¡>a no
f.<: logra sin dificultades.

Una de ellas es la definicíón exacta de la forma de la Tierra. Éste

es el objclo de la geodesia. que se encueotTa por dio en la base de
toda c11rtografia. Para determinar con pre<:isíón la forma y las dt-
meosiones de la Tierra, se dispone a un mismo tiempo de métodos
directos, que son los propios de la geodesia.. y de métodos indirectos,
.;uc dependen de la geofísica. La Tierra es un sólido que DO se parece
z ningún otro y que, por esta rawn. se denomina el geuidl!. Este
ROide se asimila, en la práctica. a UD elipsoide de revolución, 1 cuyu
i::aractcri~licas se admilcn unlversalmente. Los valores adoptados
¡,or la Asocfació11 /11/~rnacional de Geodesia en 1967 para este
GJ,'solde de refer1mcla son los siguientes:

Semieje mayor: R ~ 6.378.160 m

SemieJe menor: r = 6.3S6. 770 m
R-r 1
Aplanamiento: ; - ---
R 298,25
2 LA CARTOCI\AnA

Otra dificultad se presenta al trasladar a un plano la superficie

del elipsoide, lo q11e no puede hacerse sin partirla o defonnarla. Esu
opcracióo se resuelve geometricamcnte mediante 110a proyección. 81
problema se reduce a ima&Jnar un sistema de proyecclon que re-
du~ca a un mínimo lu deformaciones y permita conservar los ele-
mentos que más lmponan al usuario del mapa, por ejemplo, las rela-
ciones entre las ári::as, o entre las fonnu, o entre las distancias. Den-
tro de estos limites, el mapa debe ser lo suficientemente preciso para
que se puedan efe,ctuar sobre el un cierto número de medida• (areas.
direcciones, dista11cias), cuyo valor dependerá de las propiedades
geométricas caracteristicas del sistema de proy4eetón empicado.

B) Una representackin s/mplijieado y rom•e..clonal

•El mapa proporciona una imagen incompleta del terreno; no es

nunca una reproducción lall fiel como pueda serlo una fotoguJia
aérea: Incluso el más detallado de los planos está siempre sirnplifi-
cado.•Su composición exige una elección entre los objetOS que ocu-
pan realmente la superficie terrestre; elección en lo que se miere a su
número, PútSIO 11ue algunos deherin ser elinúna.dos, y elección en
cuanto a su imponanc10, puesto que se conservarán sólo uquenos
que respondan a dcrtos criterios determinados. •
Por tanto. el mapa es una construcción subjetlva sometida a nor-
mas preestablecidas, tanto de ~ección como de rep<eseotoclón. En
él los objetos no están representados tal y como son, sino mediante
símbolos o sígnos más o meno• descriptivos y susceptibles de varia•
cioocs cuantitálÍ\111$, N~l11ralmente, el número y forma de estos sim•
bolos dependen Jel espacio de que dispone el dibujante: cuanto
mayor sea la reducción de la iml$CD terreStre, más impcratin será
la selccciim de los objetos a representar, y más dilicii el tMUado de
$US contornos. Resolver este compromiso es cl objetivo de la genero·
lizaci6n, que ,;onsiste en upa esquemati,ación ruonada de los deta•
Uc, signiíicat:ivos del terreno. pero a co,;ta de acrecentar incluso el
caracter convencional y "caricaturesco~ de ta re:presentacioo carto-
¡ráf\ca.
 IN'rn:ODIJCCIÓN ]

C) Unn represenuulón de tQda Q parte de la superfu:le térrestre

Pueden construirse proyecciones qDG perrruten representar toda

la Tierra. La transcripción carlográfica de la superficie terrestre es,
pues teóricamente ilimitada. Sin embargo, los ¡lobos y mapas de
toda la Tierra - mapamundis o planisferios sólo tienen en la prác-
ttca un papel restringido. !Para ser manejables, deben Stt de dimen-
siones reducidas. con lo que pierden en precisión lo que ganan en ex
ren,ión.1Tambóén es frecuente la pubbcación de los mapas del mundo
en hojas encuadernables, que pueden estar reunidas en un atlas,
En general, para usos comentes, se recurre a mapas que tratan
sólo una parte reducida de la superficie terrestre: planos de munici-
pios o de CJUdades, mapas de un territorio regional o nacional, o bien
mapas de un continente. tratado$ generalmente eo varias bojas. Al
cartógrafo se le ofreet!n todas las posíb!lidades paro obtener, de una
parte de la Tierra o de toda ella. la imagen mis apropiada, en forma
y dimensione._ a las necesidades definidas por el uso que se hara de
,u compoSición,

D) Una relacfó11 de slmffitud. llamada escala

Estas consideraciones subrayan la importancia primordial de la

mación de seme1anza que se establezca entre las dimensiones reales
de la Tierra y las de su imagen sobre el mapa. Bsta relarión se deno
mina escala. La escala de un mapa es la razón oonstante..9.uc cxis1c
cnm la.s dlStaDCÍosTaneafes medidas sobre él y las dist.ancias lineales
correspondtenl.Cs medidas sobie el terreno. ·
•· La escala se expresa normalmente mediante uno fracción en la
que el numerador es la unidad de medida sobre el mapa (el ccntime-
uo o el mílirnctro) y el denominador el numero de estas mismas llllkla-
~ comorendidu co la longitud correspondienle sobre el terreno. Por

rjcm¡,lo, una escala & so.:ioo significa que I mm sobre el dibujo

representa S0.000 mm, es decir SO m sobre el ter~o; o bien que
1 cm representa 50.000 cm. es decir 500 m. Corrientemente se es•
4 LA CAR100RAAA

cribe i:50.000 (o 1/50.000). y se dice que la escala es de "ano

cincuenta mil". o también que el mapa está "a cincuentir mil". Ésu
es la escalo numérica del mapa. Con este sistema de elpresióon,
resullJl que la escala es IJlnlIJ más pequeña cuanto mayor es el deno-
minador; por tanto, la escala 1: 10.000 es mayor que la 1:50.0()(),
y ésta mayor que la 1: 100.000, etc.
En la prlicüca, para evitar que la relación indicada en el mapa re-
sulte falseada por las alteraeto nes del papel, o pot las ampbaclones- o
reducciones a que pueda sometem- la minuta original. suele repre-
sentarse la escala mediante uoa figura llamada escala grq/ka (li¡. 1),
que consiste en una recta dl\'idida en n panes iguales, correspondien-
tes a la unidad adoJ)lada sobre el terreno: a la izquierda del origen se
dibuja un ~IJlJón", subdividido en décimas partes de la unidad. Para
efectuar la medida. se traslada a la escala gráfica, mediante un com-
pás. uo doble declmetro o una hoja de papel, la distancia directa-
mente obtenida sobre el plano. Basta entonces con hacer coincidir el

2 J • s,"
f10. l . E~-afo g,áflra

extremo derecho de la medida con una división entera, y leer el valor

buscado en su extremo izquierdo, contando sobre la escala el
número de unidades, y solrc el talón el número de decimales n::s-
lJlntes.

E) La carlolfl"a/10

Lo cartografia tiene por objeto la concepción, preparación, re-

dacaon y realización de los mapas. Comprende ke/ C011f11nro de esm
dios y operaciones i:lem(lkas. an(srlcos y 1écniJ:os que inrervienen. a
partir de los resultados tk los obserw,clonu direclas o de la exploto•
 INTRODUCCIÓN s
ctó11 de una documemación, en el establec,mienJo <k mapas. p/Oll()S y/
01ras formas de expresión, así romo en su ur(/{zac/611".'
Esta definición, que quizá resulte un poco exlellsa, tiene al rneoos
la ventaja de ser precisa. No obs1ao1e, se observará que timita la car-
tografía a las operaciones que se realiZan o partir de la observación o
de la documentación, lo que significa que c1cluyc de ella a lu diver-
sas técokas de recogida, compilación y tratamiento de la informa-
ción. De hecho, es imposible que un canógrnfo ignore de qué modo
pueden reunirse los datos a los que está.encargado de dar forma; asi-
mismo, debe conocer los procedimientos de reproducción e lmpre-
,ión que se emplean en la publica01.ón frnal de los mapas, para utili-
zarlos del mejor modo posible. Hoy que admitir, por tanto, que la
canogrnf10 incluye todas las operaciones necesarias. desde d le,•an
tamicnto sobre el terreno o la rccog¡da de informes escritos (cuando
se efecuia con el fin de traducirlos sobre un mapa), hasta la ímpr~
sión definitiva y la diíusión del documento canográfioo.
D,:sde este punto de vista, la cartQ&rafia es a la vez una ciencia.
un arte y una técnico..' En efecto, exige del cartógrafo un conoci-
miento profundo de los métodos de estudio del objeto a cartoarafiar.
aptitud para concebir una expresión gráflca que sea a la vez precisa,
clara y armoniosa, y finalmente el uso, a v,:ccs complejo, de los pro-
ctdimientos modcrn05 de reproducción de mapas. Naturalmente. es
inevitable -y por otra par1e conveniente- que estos aspectos parti•
culares del trabajo canográlico tengan sus propios cspecialislas, y
no menos deseable que estos especialistas posean un cierto cono-
curucnto de todo el conjunto de problemas planteados por la cart.o-
¡ialio..

11 BREVE HISTORIA DE LA C~RTOGRAFIA

No es cuestión de volver a describír aquí la historia de la carto-

srafla, que es rica y compleja;• se trata simplemente de exponer las
lll!)tivacio= sucesivas a que han obedecido los cartógrafos, y cómo
l.l canograíia se ha ido poco a poco for!llllndo, afirmando y diversili-
.:ando, hasta llegar a abarcar l•s mriltiplcs facetas que hoy nos
ofrece.