Los pasos, las consecuencias y el menosprecio.

Mensaje basado en 2 Corintios 13:01-04

Hoy comenzamos el último capítulo de esta nuestra epístola de estudio.

[1] Ésta es la tercera vez que voy a vosotros. Por boca de dos o de tres testigos se decidirá todo asunto.

v1: Las tres metas y los tres pasos.

Pablo tenía una estrategia para el ministerio y sería bueno que cada quien lo estudie de fondo luego para que pueda
seguir el buen ejemplo.

Pablo realizo tres viajes misioneros, y cada uno de ellos tenía una meta por cumplir.

“Durante su primer viaje misionero (de Hechos 13 al capítulo 14), Pablo predica a Cristo, gana almas y
establece iglesias locales con los nuevos convertidos. Esta es nuestra primera tarea también: evangelizar y
tratar de incorporar a los nuevos convertidos en una iglesia local que predica y ensena la Biblia para cumplir
con la misión que Dios nos ha dado.

Durante su segundo viaje misionero (de Hechos 15.36 al 18.22) Pablo se dedica principalmente a la tarea del
discipulado. En Hechos 15.36 vemos que Pablo quiere volver a visitar a los santos de las ciudades que visito
durante su primer viaje misionero. Esto nos ensena que después de guiar a alguien a la salvación en Cristo,
necesitamos ayudarle a crecer en Cristo y establecerse en la fe. Esta obra se llama discipulado en la Biblia.

Durante el tercer viaje misionero (que empieza en Hechos 18.23 y termina en la cárcel en Roma), Pablo
procura confirmar a todos los discípulos (Hechos 18.23). O sea, vuelve una vez más a visitar las mismas
iglesia que empezó durante el primer viaje, pero esta vez su enfoque es en los discípulos para llevarlos un
paso más en su crecimiento—quiere desarrollar lideres (que es muy evidente en su discurso con los ancianos
de la iglesia local en Éfeso; Hechos 20.17-28). La obra no puede continuar en nuestra ausencia si no
desarrollamos a la próxima generación de lideres—hombres y mujeres que pueden hacer la misma obra de
evangelizar, discipular y desarrollar líderes. Pablo destaca la importancia de esto en su segunda carta a su
discípulo Timoteo.”1

Segunda Corintios es una carta donde Pablo estaba tratando de confirmar a los corintios en el ministerio, como
comenzamos diciendo al iniciar el viaje por este libro, todos somos ministros y este es el paso que sigue una vez los
dos anteriores se han dado.

[14] He aquí, por tercera vez estoy preparado para ir a vosotros; y no os seré gravoso, porque no
busco lo vuestro, sino a vosotros, pues no deben atesorar los hijos para los padres, sino los padres
para los hijos. [2 Co 12:14]

Pablo ya había visitado a los corintios en dos otras ocasiones. Esta sería su tercera visita y era su deseo que fuera
una visita provechosa en cuanto a lograr su meta. Que los corintios ya se hubieran corregido de todas sus faltas y
estuvieran en el proceso de confirmación en el ministerio como ministros de Cristo.

En la segunda parte del versículo Pablo hace referencia a Deuteronomio 19:152

[15] No se tomará en cuenta a un solo testigo contra ninguno en cualquier delito ni en cualquier
pecado, en relación con cualquiera ofensa cometida. Sólo por el testimonio de dos o tres testigos se
mantendrá la acusación. [Deuteronomio 19:15]

1
La dispensación de la Iglesia (la gracia): Mateo 28 – Filemón. Página 141. Como Estudiar la Biblia. Gregory Alan Kedrovsky.
Primera Edición. 2007. Iglesia del Este. Ref. adicional 2 Corintios 1:15-16
2
Juan 8:17. Hebreos 10:28. 1 Timoteo 5:19.

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Y básicamente lo que está sucediendo es que no va a permitir más murmuraciones y necedades de parte de los
opositores. Dice que por boca de dos o tres testigos se decidirá todo asunto.

En el antiguo testamento cuando en el pueblo judío se presentaba una situación, se mandaban a llamar a los testigos,
y tenían que ser dos o tres. Esto con el fin de evitar que se manipule la información y se acuse injustamente. También,
se hace una investigación del testimonio que estos testigos están dando fe en acusación. Si fuese posible que sean
hallados mentirosos, ellos sufrirían el castigo que estaba siendo preparado para el acusado. Esto era una forma de
asegurarse que no llegaran personas a dar falso testimonio al tribunal.

Este principio debería de verse en su cuadro completo estudiando Mateo 18:15-17. Estos versículos, debidamente
puestos en contexto, pueden arrogar mucha claridad en cómo manejar situaciones difíciles, donde un hermano
maneja ofensas o donde nosotros ofendemos a un hermano.3

[15] Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y repréndele estando tú y él solos; si te oyere, has
ganado a tu hermano. [16] Mas si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para que en boca de
dos o tres testigos conste toda palabra. [17] Si no los oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la
iglesia, tenle por gentil y publicano. [18] De cierto os digo que todo lo que atéis en la tierra, será
atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo. [Mateo 18:15-18]

El primero paso sería conversar uno a uno y tratar de esclarecer el asunto. El segundo paso, es tomar testigos si el
uno a uno no diera resultado. Y el tercer paso, seria exponerlo a la congregación, en nuestros tiempos, seria
conversar con el o los pastores para llegar a una resolución y ver si es necesario exponerlo frente a la congregación.

Lamentablemente a Pablo le estaban levantando falsos en público y no quedo más que ir directamente en público
(cartas y posiblemente una futura exhortación en persona) a defenderse.

[19] Contra un anciano no admitas acusación sino con dos o tres testigos. [1 Timoteo 5:19]

[2] He dicho antes, y ahora digo otra vez como si estuviera presente, y ahora ausente lo escribo a los que antes
pecaron, y a todos los demás, que si voy otra vez, no seré indulgente;

v2: La consecuencia de la desobediencia.

Lamentablemente el ser humano, tiene la tendencia de necesitar que le digan las cosas más de una vez. Mucha gente
quiere ver acá un principio de decir las cosas tres veces; pero en realidad deberíamos de ver las consecuencias de
ser desobedientes más que ver la cantidad de veces que debamos hacer la advertencia.

Pablo ya les había dicho una y otra vez lo mismo. Tener que estar recordándoles y haciendo hincapié a los corintios
de lo mismo es una tarea cansada y completamente innecesaria. Lo que se esperaba de los corintios es que ya
hubieran alcanzado cierto grado de madurez, para que con una llamada de atención fuese suficiente.

Ministro, usted como Pablo, tendrá que llegar en algunas ocasiones a dar las consecuencias de la desobediencia. Si
usted está ya trabajando en el ministerio, y ha tenido que pasar por eso, sabrá, así como yo, que es algo que no
queremos tener que hacer. Pues como hemos hablado ya en repetidas veces en otros mensajes, ningún padre le
gusta dar corrección a sus niños; pero ciertamente que a veces es bien necesaria.

Otro punto a destacar acá basado en este versículo, es la integridad con la que Pablo quería trabajar con los corintios.
Por eso es tan importante el notar los tiempos: “he dicho antes, y ahora digo otra vez como si estuviera presente”.
Ministros tenemos que mantener nuestra integridad, sea presentes o ausentes; sea pronto o tiempo después, nuestra
palabra debe ser consistente e integra.
Por eso no es de sorprender que Pablo dice, si voy otra vez, no seré indulgente. De acuerdo a la Real Academia ser
indulgente es “inclinado a perdonar y disimular los yerros o a conceder gracias”.

3
Mateo 18: Cuando alguien le ofende a usted. Página 16-19. Clase 201: Descubrir la madurez. Gregory Alan Kedrovsky. 2008.
Iglesia del Este.

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Él ya había avisado de las consecuencias a los corintios de seguir escuchando a los falsos maestros, creyendo sus
mentiras y el del seguir andando en pasos carnales. Pablo no lo quiere hacer, pero si tiene que hacerlo, el será
consistente e íntegro con lo “prometido”.

[7] Miráis las cosas según la apariencia. Si alguno está persuadido en sí mismo que es de Cristo, esto
también piense por sí mismo, que como él es de Cristo, así también nosotros somos de Cristo. [8]
Porque aunque me gloríe algo más todavía de nuestra autoridad, la cual el Señor nos dio para
edificación y no para vuestra destrucción, no me avergonzaré; [9] para que no parezca como que os
quiero amedrentar por cartas. [10] Porque a la verdad, dicen, las cartas son duras y fuertes; mas la
presencia corporal débil, y la palabra menospreciable. [11] Esto tenga en cuenta tal persona, que así
como somos en la palabra por cartas, estando ausentes, lo seremos también en hechos, estando
presentes. [2 Corintios 10:7-11]

[20] Pues me temo que cuando llegue, no os halle tales como quiero, y yo sea hallado de vosotros
cual no queréis; que haya entre vosotros contiendas, envidias, iras, divisiones, maledicencias,
murmuraciones, soberbias, desórdenes; [2 Corintios 12:20]

[10] Por esto os escribo estando ausente, para no usar de severidad cuando esté presente, conforme
a la autoridad que el Señor me ha dado para edificación, y no para destrucción. [2 Corintios 13:10]

[3] pues buscáis una prueba de que habla Cristo en mí, el cual no es débil para con vosotros, sino que es poderoso
en vosotros.
[4] Porque aunque fue crucificado en debilidad, vive por el poder de Dios. Pues también nosotros somos débiles en
él, pero viviremos con él por el poder de Dios para con vosotros.

v3-4: El error de menospreciar.

Pablo tuvo que lidiar con los corintios sobre el tema de si realmente era de Cristo o no. Como hemos hablado en
mensajes anteriores el gran problema era que había falsos maestros, que se metieron en Corinto, y estaban
engañando a los corintios. Debido a su inmadurez y falta de disciplina en la Palabra de Dios; muchos fueron
engañados a creer que Pablo era un falso maestro.

Algo que tenemos que entender es quien es Cristo. Jesús, el Cristo, era 100% hombre y 100% Dios, esto es lo que se
llama la unión hipostática de Cristo en teología4. Y explica grandes misterios en cómo es que Jesús podía sufrir en
varias áreas y al mismo tiempo ser todo poderoso para sanar, y resucitar de los muertos – entre algunas cosas
interesantes de su doble naturaleza.

Hay que tener mucho cuidado de confundir los tiempos y decisiones de Dios; su Hijo, tenía que venir a la tierra, sufrir
y morir en la cruz. Cristo fue paciente en muchas ocasiones y mostro gran compasión por los perdidos. Pero esto no
es señal de debilidad de carácter o que Dios es incapaz. Era un tiempo y un trato que era necesario debido al
contexto.

La dadiva más increíble que un cristiano puede tener es su salvación, ahí en la cruz, en su “debilidad”; Cristo venció a
la muerte para darnos la “fortaleza” de poder pasar a vida eterna. Y este nunca debe despreciarse, tenemos que
aprender a comprender estos principios en la Biblia para no caer en el error, como los corintios, de poner en duda el
trabajo de un hermano en el ministerio debido a que creamos que es “débil”, solo porque nos tiene paciencia y evita el
tratarnos con dureza.

[18] Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a
nosotros, es poder de Dios. [1 Corintios 1:18]

[1] Yo Pablo os ruego por la mansedumbre y ternura de Cristo, yo que estando presente ciertamente
soy humilde entre vosotros, mas ausente soy osado para con vosotros; [2] ruego, pues, que cuando
esté presente, no tenga que usar de aquella osadía con que estoy dispuesto a proceder
resueltamente contra algunos que nos tienen como si anduviésemos según la carne. [3] Pues

4
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 aunque andamos en la carne, no militamos según la carne; [4] porque las armas de nuestra milicia
no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas, [5] derribando
argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo
pensamiento a la obediencia a Cristo, [6] y estando prontos para castigar toda desobediencia,
cuando vuestra obediencia sea perfecta. [2 Corintios 10:1-6]

[12] Con todo, las señales de apóstol han sido hechas entre vosotros en toda paciencia, por señales,
prodigios y milagros. [2 Corintios 12:12]

El ministro debe aprender a saber cuándo debe ser “débil” y cuando debe ser “fuerte”, muchas veces aunque no lo
queramos tendremos que ser “fuertes” en temas de desobediencia y disciplina dentro de nuestras congregaciones y
debemos estar listos para tomar esas acciones. En cuanto a la congregación, no confunda el amor con debilidad, el
peor error usted puede cometer en este tema es menospreciar a los ministros que Dios puso para su cuidado; usted
no quiere que Dios tenga que defenderlos.

El versículo 4 continúa la idea del versículo 3. Y en esto se resume las acusaciones de algunos en Corinto, al poner
en duda a Pablo; están poniendo en duda al que llamo a Pablo al ministerio, y ese es Cristo Jesús.

Estos son los puntos vistos en el versículo 4:

- Cristo fue crucificado en debilidad porque fue crucificado con cuerpo humano, no porque Dios sea frágil. Si no
porque Cristo tenia cuerpo humano.

[43] Se siembra en deshonra, resucitará en gloria; se siembra en debilidad, resucitará en poder. [1

Corintios 15:43]

- Pero como Cristo era Dios en la carne, la manifestación del Hijo de Dios en la carne, él fue poderoso en
señales, prodigios y milagros. Siendo la obra más notoria e impactante que resucito de los muertos con poder.

[18] Nadie me la quita, sino que yo de mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder
para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre. [19] Volvió a haber disensión entre los
judíos por estas palabras. [Juan 10:18-19]

[7] sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; [8] y
estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y
muerte de cruz. [Filipenses 2:7-8]

[20] … del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a
su diestra en los lugares celestiales, [Efesios 1:20]

- Somos débiles en el, en el sentido de que como humanos también sufrimos, como él. También podemos morir
físicamente, como él. Pero así como él, resucitaremos en el “postrer día”, venciendo a la muerte segunda
(espiritual) y yendo al cielo a la presencia del Dios Padre.

[4] Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo
resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva.
[Romanos 6:4]

[12] Palabra fiel es ésta: Si somos muertos con él, también viviremos con él; [12] Si sufrimos,
también reinaremos con él; Si le negáremos, él también nos negará. [2 Timoteo 2:11-12]

“¿Cómo mide la gente el ministerio hoy? ¿Por una buena oratoria o por el contenido bíblico? ¿Por carácter
cristiano o lo que las editoriales dicen? Demasiados cristianos siguen los estándares del mundo cuando
evalúan los ministerios, y ellos necesitan prestar atención a los estándares de Dios.5”

5
The Wiersbe Bible Commentary: New Testament: The Complete New Testament in One Volume

Segunda Epístola de Pablo a los Corintios Página 4 www.iglesia-del-este.com