Introducción:

Un capítulo referido a convenciones creyentes no ignoró

que el campo de la política y de la o pensamiento alguno
se rechazan con fuerza la idea de un creador, o la que
considera irrelevante hasta el punto de relegar al ámbito
de de los irracional, la riqueza que las regiones pueden
ofrecer para una ecología integral, y para un desarrollo
pleno de humildad otras veces se supone que constituyen
una subcultura que suplemente, debe ser tolerada sin
embargo la ciencia y la religión que aportan diferente
aproximaciones a la realidad pueden entrar en un diálogo,
intenso y productivo para ambos.
 si tenemos en cuenta la complejidad de la crisis
ecológica y su múltiple causa deberíamos reconocer que
las soluciones no pueden llegar desde único modo de
interpretar y transformar la realidad también es necesario
acudir a las diversas riquezas culturales de los pueblos
arte y a la poesía a la vida interior y a la espiritualidad si
de verdad queremos construir una ecología que

Que no permita andar todo lo que hemos destruido

entonces ninguna rama de la ciencia oculta en el conjunto
de la realidad natural sin por ello afectar su autonomía
El Nuevo Testamento.
No sólo habla de su terreno y de su relación tan correcta
y amable como todo el mundo también muestra como
resultado y glorioso. presenta en toda la creación con su
señorío universal Dios quiso que en el residiera toda
plenitud él quiso reconciliar consigo todo lo que existe en
la tierra y en el cielo restableciendo la paz por la sangre
de su cruz esto no proyecta el final de los tiempos cuando
el hijo entrega al padre todas, las cosas, y Dios sea todo,
en todos de ese modo la criatura de este mundo ya no se
nos presentan como una realidad meramente natural,
porque el resucitado las envuelve misteriosamente y la
orienta a un destino de plenitud las Flores del campo y la
aves que el contemplo mirando con sus ojos humanos
ahora están llenas de su presencia luminosa Mira las
aves del cielo que no siembran ni cosechan, y no tienen
granero.
La comunión universal
Las criaturas de este mundo no puede ser considerada
un bien sin dueño son tuyas señor. que ama la vida ,Esto
provoca la condición de que siendo creado por el mismo
padre todos los seres del universo estamos Unidos por
lazo invisible y conformamos una especie de familia
universal.
Una Sublime comunión que nos mueve a un respeto
sagrado cariñoso y humilde, quiero recordar que Dios no
ha unido tan estrechamente, al mundo que rodea que la
desertificación del suelo es como una enfermedad para
cada uno y podemos lamentar la extinción de una
especie como si fuera una mutilación.
Esto no significa igualar a todos los seres vivos y quitarle
al ser humano este valor peculiar qué implica al mismo
tiempo una tremenda responsabilidad tampoco supone
una división de la tierra que nos privaría del llamado a
colaborar con ella y a proteger su fragilidad esta
concepción terminarían creando nuevos desequilibrios
por escapar de la realidad que no interpela.
Destino común de los bienes
soy creyente y no creyente estamos de acuerdo en que
la tierra es esencialmente una herencia común cuyo fruto
deben de beneficiar a todos, para los creyentes esto se
convierte en una cuestión de fidelidad, el creador porque
Dios creó el mundo para todo por consiguiente todo
planteó esto lógico debe decorar una perspectiva social
que tenga en cuenta los derechos fundamentales de lo
más postergados el principio de la subordinación de las
propiedad privada al destino universal de los bienes y por
tanto el derecho universal a su uso es una regla de oro
del comportamiento social y el primer principio de todo el
ordenamiento ético-social la tradición cristiana nunca
reconoció como absoluto o Intocable el derecho a la
propiedad privada, y subrayó la función social de
cualquier forma de propiedad privada,
San Juan pablo segundo recordó con mucho énfasis
doctrina diciendo que Dios ha dado tierra a todo el género
humano. para que ella sustente a todos sus habitantes
sin excluir a nadie, ni privilegiar a ninguno.