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TALLER DE CONTRATACION ESTATAL

Los datos aquí consignados deben traer la referencia bibliográfica (tomo autor año) de las doctrinas
y jurisprudencia debemos ir a la biblioteca

1. Que es la ley de garantías


1.1 Normatividad

Ley 996 del 2005, más conocida como Ley de Garantías la cual se tramitó y aprobó en el Congreso
de la República para la reelección del expresidente Álvaro Uribe Vélez.

1.2 para que sirve

La Ley 996 de 2005 o Ley de Garantías electorales promueve el ejercicio equitativo y transparente
de la democracia representativa y fue expedida para asegurar que la contienda democrática se
cumpla en condiciones igualitarias y transparentes para los electores.

Su propósito es afianzar la neutralidad de los servidores públicos que organizan y supervisan las
disputas electorales y que tanto los candidatos como los electores, aprovechen en igualdad de
condiciones los recursos ofrecidos por el Estado, de manera que la voluntad popular se exprese sin
obstrucciones de ningún tipo y que la decisión del pueblo se vea reflejada en la persona elegida para
ocupar el En ese contexto, la ley establece unas restricciones al ejercicio de la función
gubernamental como garantía del equilibrio y la transparencia del actuar administrativo en medio
del debate electoral, evitando que la nómina estatal o la contratación directa se utilicen como medio
en la campaña electoral para favorecer a uno o varios candidatos cargo de autoridad que se disputa.

1.3 como se aplica

A través de restricciones

Prohibiciones durante la campaña presidencial: Durante la campaña presidencial, quienes ejercen


la Presidencia o la Vicepresidencia de la República no podrán

 asistir a actos de inauguración de obras públicas;


 entregar personalmente recursos o bienes estatales, o cualquier otra suma de dinero
proveniente del erario público o producto de donaciones de terceros al Gobierno Nacional
 referirse a los candidatos o movimientos políticos en sus disertaciones o presentaciones
públicas, como Jefe de Estado o de gobierno
 utilizar o incluir la imagen, símbolos o consignas de su campaña presidencial en la publicidad
del gobierno; y utilizar bienes del Estado, diferentes a aquellos destinados a su seguridad
personal, en actividades de campaña presidencial.
 Se restringe el monto de la publicidad estatal porque durante la campaña presidencial no
se podrán aumentar los recursos destinados a la publicidad del Estado ni tampoco la
publicidad del Estado se podrá utilizar como propaganda política de los candidatos o
partidos políticos o movimientos políticos o sociales.
Con respecto a la vinculación a la nómina estatal, se suspenderá cualquier forma de vinculación que
afecte la nómina estatal, en la Rama Ejecutiva del Poder Público, durante los cuatro (4) meses
anteriores a la elección presidencial,

Se restringe la contratación directa por parte de todos los entes del Estado y hasta la fecha en la
cual el presidente de la República sea elegido.

Prohibiciones especiales durante la campaña para cargos de elección popular:

Los Gobernadores, Alcaldes Municipales y/o Distritales, secretarios, Gerentes y directores de


Entidades Descentralizadas del orden Municipal, Departamental o Distrital tienen las siguientes
restricciones:

 No podrán celebrar convenios interadministrativos para la ejecución de recursos públicos,


ni participar, promover y destinar recursos públicos de las entidades a su cargo, como
tampoco de las que participen como miembros de sus juntas directivas, en o para reuniones
de carácter proselitista. v Tampoco podrán inaugurar obras públicas o dar inicio a
programas de carácter social en reuniones o eventos en los que participen candidatos a la
Presidencia y Vicepresidencia de la República, el Congreso de la República, Gobernaciones
Departamentales, Asambleas Departamentales, Alcaldías y Concejos Municipales o
Distritales. Tampoco podrán hacerlo cuando participen voceros de los candidatos.
 No podrán autorizar la utilización de inmuebles o bienes muebles de carácter público para
actividades proselitistas, ni para facilitar el De conformidad con la Circular externa No. 24
del 12 de mayo de 2017 expedida por la Agencia Nacional de Contratación Pública –
Colombia compra eficiente-. alojamiento, ni el transporte de electores de candidatos a
cargos de elección popular.
 No podrán modificar la nómina del respectivo ente territorial o entidad desde el 11 de
noviembre de 2017 y hasta la fecha en la cual el Presidente de la República sea elegido,
salvo que se trate de provisión de cargos por faltas definitivas, con ocasión de muerte o
renuncia irrevocable del cargo correspondiente debidamente aceptada, y en los casos de
aplicación de las normas de carrera administrativa, es decir, en caso de nombramientos en
periodo de prueba de quienes hayan sido seleccionados en los concursos de méritos
Adelantados por la Comisión Nacional del Servicio Civil.

Excepciones de la ley de garantías


Queda exceptuada de la anterior restricción, lo referente a:
• La defensa y seguridad del Estado
• Los contratos de crédito público
• Los requeridos para cubrir las emergencias educativas, sanitarias y desastres
• Los utilizados para la reconstrucción de vías, puentes, carreteras, infraestructura energética y de
comunicaciones, en caso de que hayan sido objeto de atentados, acciones terroristas, desastres
naturales o casos de fuerza mayor, y
• Los que deban realizar las entidades sanitarias y hospitalarias
2. contratos atípicos estatales
2.1 2 doctrinas

Ha dicho la doctrina de derecho privado y de derecho administrativo

Contratos atípicos son aquellos no regulados por la ley, surgidos de la vida jurídica en razón de la
libertad de contratación, inherente – junto con la libertad para contratar- a la autonomía de la
voluntad. No han merecido aún recepción mediante una disciplina legal particular (69Farina Ob. Cit.
Pág. 370)

Que contrato innominado es aquel que, aunque mencionado por la ley carece de una disciplina
particular: a menos que la mención del contrato esté hecha por la ley en un lugar tal, que, mediante
remisión, se pueda deducir su disciplina jurídica (…) Alessandri, Rodríguez, Arturo. De los contratos.
Editorial jurídica Temis S.A. Editorial jurídica de chile, 2000, Pág. 37

Los innominados son aquellos que presentan caracteres atípicos resultantes de la reunión en un
contrato de diversos elementos constitutivos de los contratos típicos, como también aquellos otros
que, dentro del marco de la legalidad, pueden ser celebrados por los órganos del Estado dentro de
la esfera de su propia competencia. ‖ Bercaitz, Miguel Ángel. Teoría general de los contratos
administrativos. 2 ed., Ediciones de Palma Buenos Aires, 1980, Pág. 252.

2.2 1 jurisprudencia

Colombia, Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Civil, sentencia del veintidós (22) de octubre
de dos mil uno (2001) M-P. Jorge Antonio Castillo Rugeles. Expediente. No 5817. Señala la Corte:
―I. TIPICIDAD Y ATIPICIDAD CONTRACTUALES. Desde un punto de vista genérico, el concepto de
tipicidad denota, en el ámbito del Derecho, aquella particular forma de regular ciertas situaciones
generales a través de ―tipos‖, los cuales no son otra cosa que conductas y fenómenos sociales
individualizados en preceptos jurídicos, por medio de un conjunto de datos y elementos
particulares, que brindan una noción abstracta de dichas realidades, todo ello con miras a facilitar
un proceso de adecuación de un hecho o comportamiento de la vida, al modelo normativo que
indeterminadamente lo describe, con el fin de atribuirle los efectos allí previstos. De manera que la
tipicidad, cumple dos funciones significativas: de un lado, la de individualizar los comportamientos
humanos y, de otro, la de especificarlos y reglarlos jurídicamente. En tratándose de la tipicidad de
los contratos, ella tiene por finalidad la de ordenar las disposiciones negociales a través de tipos
contractuales, mediante un proceso que toma como punto de partida la especificación, con sustento
en un conjunto de datos o coordenadas generales, fruto de la autonomía privada de las partes, es
decir, el contrato, para, a partir de allí, agregar las notas particulares y distintivas que dan lugar a
los diversos arquetipos de contrato. Cuando dichos tipos están previstos en normas legales (para
distinguirlos de los originados en la denominada tipicidad social, es decir, la gobernada por normas
consuetudinarias), la tipicidad presupone la existencia de negocios jurídicos normativamente
hipotéticos, a los cuales, cuando sea del caso, habrá de adecuarse la declaración de voluntad de las
personas, para aplicarle la regulación prevista en la regla legal. Por supuesto que, como fácilmente
puede entenderse, allí radica la importancia de la tipicidad contractual, esto es, en la descripción
del tipo y en su regulación jurídica. ‖ 65Colombia, Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Civil,
sentencia de 13 de diciembre de 2001. M.P. Carlos Ignacio Jaramillo Jaramillo Expediente No 6462
señala la Corte: ―Es acotar por su conexión conceptual con el presente asunto, que esta sala, en
reciente oportunidad, puso de presente que existen casos en los que la ausencia de regulación
normativa suficiente, puede conducir a catalogar a un contrato como atípico. Así lo expreso en
punto tocante con el contrato de agencia de seguros no obstante referirse a ella leyes y decretos.
(L65/66 y D.827/67, D.663/93, D.2605/93), ya que ―nunca el legislador ha intentado disciplinar con
la especificidad requerida suficiente, compara darle cuerpo de un contrato típico, el vínculo que
contraen directamente la compañía y la agencia de seguros. La ley, al igual que lo ha hecho con
muchas otras actividades, profesiones u oficios, ha intervenido la actividad de las aseguradoras y de
sus intermediarios, sin que esto suponga una regulación específica de los contratos que éstos
celebran‖ Cas. Civ. De oct.22/2001 Exp. 5817.

En primer lugar, tenemos los contratos atípicos en sentido estricto o contratos atípicos puros. A esta
categoría corresponden los contratos atípicos cuyos elementos no tienen parecido con alguno otro
tipo contractual. En segundo lugar, los contratos atípicos mixtos los cuales estarían constituidos por
aquellas figuras conocidas por la ley, pero dispuestas en órdenes distintos a los contemplados en
los tipos contractuales y que corresponden a elementos tomados de más de un contrato en relación
de coordinación o de subordinación según sea el caso.

3. Potestad exorbitante del estado en materia contractual.

3.1 doctrinas

- Las cláusulas exorbitantes como potestad atribuible a la administración pública, en desarrollo de


su poder discrecional, se constituye en uno de los aspectos de las relaciones contractuales entre el
Estado y los particulares que mayor interés aboca en cuánto a definir y determinar las potestades
de que goza el funcionario público para tomar decisiones que puedan afectar la ejecución de un
contrato en donde se vea en peligro el interés del Estado. Diego Younes Moreno. Curso de Derecho Administrativo. 5ª
Edición. Ediciones Jurídicas. Gustavo Ibáñez. 1996. Pág. 179.

El Estado ejerce poder y control sobre las relaciones contractuales entre éste y los particulares,
habida cuenta de su responsabilidad en la defensa de los intereses públicos que no se vean
afectados en contratos que puedan resultar lesivos a sus intereses y por tanto, esas cláusulas
exorbitantes responden a esa facultad unilateral, que distinto al derecho civil, el principio de la
igualdad contractual, sufre una sensible alteración, casualmente en respuesta a esa potestad que la
ley le otorga.(Reyes, 2013)

Ahora bien, el hecho que dichas clausulas no hayan quedado insertas literalmente en el cuerpo del
contrato, no indica que su ausencia se entienda como su inexistencia. No, ellas son potestativas y
exclusivas del Estado y al no quedar escritas en el contrato, se entenderán como tal, pues así está
contenido en el estatuto contractual colombiano.

Tales potestades establecidas en el marco normativo son:


 La caducidad
 La interpretación
 La modificación
 La terminación unilateral
 La reversión
 Las multas
 La declaratoria de incumplimiento y,
 La cláusula penal pecuniaria

Las cláusulas exorbitantes cumplen un papel definitivo en la protección de los intereses de lo público
sobre lo privado y así como es imperativa su inclusión en determinado tipo de contratos, también
es prohibitivo o excluyente para otra clase de contratos como bien se ha podido detallar en la
relación anterior.

- Son estipulaciones cuyo objeto es conferir a las partes derechos u obligaciones ajenos por su
naturaleza a aquellos que son susceptibles de ser libremente consentidos por una persona en el
marco de las leyes civiles o comerciales según Georges Vedel; bajo criterio del mismo autor, tales
clausulas no serían ilícitas en los contratos del derecho común, si bien no son corriente de ellos.
Pero son ilícitas cuando se pactan en los contratos de derecho privado; porque se confiere a una de
las partes facultades de supremacía sobre la otra, que son ajenas a la libertad contractual y la
autonomía de la voluntad.

Por lo tanto, dichas clausulas no derivan su fuerza vinculante del contrato, ella existe fuera de él,
pues se deriva del mismo ordenamiento jurídico, pues es el mismo ordenamiento jurídico, es la
norma superior, la ley, la que le da esa supremacía que ostenta la administración; otorgando los
poderes que le permiten actuar en protección del interés general y le señala las pautas para su
ejercicio.

Según Roberto Dromi, las cláusulas exorbitantes son clausulas derogatorias del derecho común,
inadmisibles en los contratos privados, porque rompen el principio esencial de la igualdad de los
contratantes y de la libertad contractual que prima en la contratación civil, además de exceder el
ámbito de la libertad contractual y contrariar el orden público. Libro “la contratación de las
entidades estatales, séptima edición, autor Juan Ángel Palacio Hincapié, editorial librería jurídica
Sánchez R LTDA. Año 2014.

3.2 jurisprudencia

Sentencia T-1341/01. Acción de tutela instaurada por Inversiones Los Angeles Ltda. contra el Distrito
Especial, Industrial y Portuario de Barranquilla, Magistrado Ponente: Dr. ALVARO TAFUR GALVIS,
Bogotá, D.C., once (11 ) de diciembre del año dos mil uno (2001). La Sala Octava de Revisión de la
Corte Constitucional, integrada por los magistrados Jaime Araújo Rentería, Alvaro Tafur Galvis y
Clara Inés Vargas Hernández:
El señalamiento de las potestades excepcionales de la Administración en el campo de la
contratación estatal constituye materia legislativa. La Ley 80 de 1993, las define como medios
brindados a las entidades estatales para que garanticen el cumplimiento del objeto contractual, y
se concretan en potestades de interpretación, modificación y terminación unilateral del contrato,
declaración de la caducidad, etc.

Como lo ha establecido esta Corporación “los contratos estatales no constituyen por sí mismos una
finalidad, sino que representan un medio para “...la adquisición de bienes y servicios tendientes a
lograr los fines del Estado en forma legal, armónica y eficaz...” A través de las potestades
excepcionales generales la Administración goza de prerrogativas que le permiten llevar a cabo el
objeto del contrato celebrado, la dirección general del mismo, así como el control y la vigilancia de
su ejecución, a fin de evitar la paralización o la afectación grave de los servicios públicos a su cargo
y poder, así, asegurar la inmediata, continua y adecuada prestación de los mismos. Se garantiza de
esta manera, el cumplimiento de los fines estatales que se desarrollan a través de la contratación
estatal mediante el reconocimiento a la Administración Pública, de un poder especial de orden
administrativo.

El establecimiento de esta clase de potestades excepcionales encuentra apoyo constitucional en las


reglas que exigen que la función administrativa debe adelantarse en aras de la consecución de los
fines estatales y con fundamento en los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía,
celeridad, imparcialidad y publicidad (CP, art. 209). Además, la utilización que de esas potestades
se haga, se encuentra sometida a los mandatos constitucionales que disponen que los servidores
públicos deben ejercer sus funciones en la forma prevista por la Constitución, la ley y el reglamento,
siendo responsables por el desconocimiento de estos mandatos, al igual que por la omisión o
extralimitación en el ejercicio de sus funciones (CP, arts. 123 y 6).

El fundamento, alcance y finalidad de las cláusulas excepcionales de la Administración, para la Corte,


apoyada en la doctrina administrativista y en la jurisprudencia de lo contencioso administrativo, ha
sido el siguiente:

“Al hablar de “disposiciones extrañas a la contratación particular”, se hace referencia


específicamente a las llamadas cláusulas exorbitantes o excepcionales al derecho común, a través
de las cuales a la entidad pública contratante se le reconoce una serie de prerrogativas que no
ostentan los particulares, y que tienen como fundamento la prevalencia no sólo del interés general
sino de los fines estatales. Estos interés y fines permiten a la administración hacer uso de ciertos
poderes de Estado que como lo expone el tratadista Garrido Falla, en su Tratado de Derecho
Administrativo “determina una posición también especial de las partes contratantes, así como una
dinámica particular de la relación entre ellos, que viene a corregir típicamente la rigurosa
inflexibilidad de los contratos civiles”. Poderes de carácter excepcional a los cuales recurre la
administración en su calidad de tal, a efectos de declarar la caducidad del contrato; su terminación;
su modificación e interpretación unilateral, como medidas extremas que debe adoptar después de
agotar otros mecanismos para la debida ejecución del contrato, y cuya finalidad es la de evitar no
sólo la paralización de éste, sino para hacer viable la continua y adecuada prestación del servicio
que estos pueden comportar, en atención al interés público implícito en ellos. Sobre el ejercicio de
estos poderes ha dicho el H. Consejo de Estado:
“Son actos unilaterales de indiscutible factura y sólo pueden ser dictados por la
administración en ejercicio de poderes legales, denominados generalmente
exorbitantes. El hecho que tales actos se dicten en desarrollo de un contrato, no les da
una fisonomía propia, porque el contrato no es la fuente que dimana el poder para
expedirlos, sino ésta está únicamente en la ley. Esos poderes, así, no los otorga el
contrato y su ejercicio no puede ser objeto de convenio.”(Consejo de Estado, Sala de lo
Contencioso Administrativo, Sección Tercera, abril 13 de 1994)

4. formas de pago del contrato estatal


Precio global: el contratista obtiene como remuneración una suma fija y es el único
responsable del cumplimiento del objeto, la vinculación de personal, la elaboración de
subcontratos o la obtención de materiales. En el contrato a precio global se incluyen todos
los costos directos e indirectos en que incurre el contratista para la ejecución de la obra y la
Entidad Estatal no debe reconocer mayores cantidades de obra u obras adicionales
necesarias no previstas que se encuentren dentro del objeto.
Llave en mano: en esta modalidad, el contratista se compromete a realizar todas las labores
relacionadas con la obra incluyendo los diseños, estudios de factibilidad, construcción,
contratación del personal, instalaciones y suministros y la contraprestación a cargo del
contratista es la obra terminada y en funcionamiento. El precio corresponde a un valor
previamente establecido que opera como remuneración por todas las gestiones que
adelanta el contratista.
Precios unitarios: las partes establecen el costo por unidad de cada uno de los conceptos
que integran la obra a ejecutar o ítems de obra. Con base en este valor, las partes definen
la estimación inicial de la obra, pero el valor real es el que corresponde a la multiplicación
de las cantidades de obra ejecutadas efectivamente por el precio de cada unidad de obra.
Administración delegada: la Entidad Estatal delega la ejecución de la obra en el contratista
en calidad de director técnico, quien la ejecuta por cuenta y riesgo de la misma Entidad
Estatal. El contratista obtiene como remuneración los honorarios que se pactan por su
gestión. El administrador delegado se encarga de ejecutar la obra y responde por su buen
resultado, pero es la Entidad Estatal quien asume los Riesgos derivados del contrato y la
financiación de la obra. Los honorarios del contratista pueden pactarse en forma de
porcentaje sobre el valor de la obra o como precio fijo.
Rembolso de gastos: en esta modalidad el contratista asume los gastos de ejecución del
contrato y la Entidad Estatal en forma periódica rembolsa dichos gastos y además reconoce
al contratista los honorarios que se pactan por su gestión.
Cuando la forma de pago o remuneración del contrato estatal se pacta por el sistema de
precios unitarios, administración delegada o reembolso de gastos, el valor inicial del
contrato solo es un estimado o indicativo del costo probable, esto es, un estimado necesario
para elaborar el presupuesto, por tanto, el valor real del contrato se establece una vez
concluya el contrato, teniendo en cuenta la aplicación del procedimiento escogido por la
Entidad Estatal.
Las Entidades Estatales pueden incluir en el valor del contrato una proporción estimada de
Administración, imprevistos y utilidad, las cuales pueden ser una proporción residual de
dicho valor del contrato Cámara Colombiana de Infraestructura. “Una Política Pública”. Tercera Versión, noviembre de 2012.

4.1 2 doctrinas

¿Cuál es la diferencia entre el anticipo y el pago anticipado?

De acuerdo con la Ley 80 de 1993 las Entidades Estatales tienen la posibilidad de pactar en
los contratos que celebren pagos anticipados o anticipos, siempre y cuando su monto no
supere el 50% del valor del contrato.

El anticipo es un adelanto o avance del precio del contrato destinado a apalancar el


cumplimiento de su objeto, de modo que los recursos girados por dicho concepto solo se
integran al patrimonio del contratista en la medida que se cause su amortización mediante
la ejecución de actividades programadas del contrato. El pago anticipado es un pago
efectivo del precio de forma que los recursos se integran al patrimonio del contratista desde
su desembolso. Colombia Compra Eficiente.

5. Garantías en los contratos estatales

Las garantías son instrumentos de cobertura de Riesgos comunes en Procesos de Contratación.

La Entidad Estatal luego de conocer e identificar los Riesgos del Proceso de Contratación debe definir
las Garantías mediante las cuales mitiga el Riesgo de acuerdo con el objeto, el valor, la naturaleza y
las Obligaciones del contrato.

En las modalidades de selección de contratación directa y mínima cuantía, así como en la


contratación De seguros, la Entidad Estatal debe justificar la necesidad de exigir o no la constitución
de garantías.
En las demás modalidades de selección son obligatorias las garantías de seriedad de la oferta y
Cumplimiento. La garantía de responsabilidad civil extracontractual es obligatoria en los contratos
de obra y en aquellos en que por su objeto o naturaleza la Entidad Estatal lo considere necesario,
con ocasión de Los Riesgos del contrato.

En función de las fases del Proceso de Contratación, los Riesgos que se deben cubrir mediante
garantías son:

Selección: El oferente debe otorgar garantía de seriedad de la oferta.

Contratación y ejecución:
 Buen manejo y correcta inversión del anticipo.
 Devolución del pago anticipado.
 Cumplimiento del contrato.
 Pago de salarios, prestaciones sociales legales e indemnizaciones laborales.

Obligaciones posteriores a la ejecución:


 Estabilidad y calidad de la obra.
 Calidad del servicio.
 Calidad y correcto funcionamiento de los bienes.

El reglamento de la contratación identifica unos riesgos evidentes, comunes, atribuidos a los


oferentes y contratistas sobre los cuales fija pautas de garantías y coberturas y establece la siguiente
clasificación:

De seriedad de las propuestas, de los contratos y de su liquidación, de la responsabilidad


extracontractual del contratista que pueda repercutir en las entidades públicas contratantes.

Además de las opciones de póliza otorgada por compañía de seguros y garantías bancaria,
la ley 1150/2007, art. 7, abre la posibilidad de otras modalidades de garantía.
El reglamento autoriza las siguientes opciones:
 póliza de seguros
 fiducia mercantil en garantía
 garantía bancaria a primer requerimiento
 endoso en garantía de títulos valores
 depósito de dinero en garantía.

Otra novedad consiste en poder constituir la garantía única por etapas. Por ejemplo, se podría dejar
para la parte final la presentación de la garantía de estabilidad de obra o la garantía de calidad del
bien o servicio.

¿Qué pasa cuando una aseguradora no garantiza un contrato estatal?

Rta. Si la aseguradora no garantiza un contrato estatal no se podrá ejecutar el contrato dado que,
para que ejecutarse, aquel debe prestar una garantía que persigue lograr que el contratista cumpla
con el contrato y con la prestación a que se está comprometiendo. Esta caución busca proteger a la
administración contra ciertos riesgos, durante el tiempo de desarrollo del contrato y con
posterioridad al mismo.

Bibliografía: Contratación estatal---Autor OMAR FRANCO GUTIERREZ-CUARTA EDICCION: ediciones


jurídicas Gustavo Ibáñez --Ley 142/ 94 empresa prestadoras de servicio.

6. Contratos de empréstito

Son aquellos contratos mediante los cuales la entidad estatal contratante recibe en calidad de
préstamo unos recursos en moneda legal o extranjera, obligándose la entidad a su pago y
cancelación al momento del vencimiento del plazo.

Según la CONSTITUCIÓN POLÍTICA

ARTICULO 150. Corresponde al Congreso hacer las leyes. Por medio de ellas ejerce las siguientes
funciones: (…) 9. Conceder autorizaciones al Gobierno para celebrar contratos, negociar
empréstitos y enajenar bienes nacionales. El Gobierno rendirá periódicamente informes al
Congreso sobre el ejercicio de estas autorizaciones. ARTICULO 189. Corresponde al Presidente
de la República como Jefe de Estado, Jefe del Gobierno y Suprema Autoridad Administrativa:
(…) 23. Celebrar los contratos que le correspondan con sujeción a la Constitución y la ley.

Según la corriente doctrinal, (DAVILA, Luís Guillermo. “Estudios de Profundización en


Contratación Estatal”. Cámara de Comercio de Bogotá y Universidad Javeriana. 1997) se
considera que el empréstito es un contrato, el cual nace del acuerdo de voluntades entre un
Estado y sus acreedores, generando entre las partes obligaciones recíprocas y además
otorgando al acreedor la posibilidad de exigir al deudor el cumplimiento de sus obligaciones. En
este sentido, las obligaciones que nacen del contrato de empréstito no surgen de la voluntad
exclusiva del Estado, ni de la exclusiva voluntad del acreedor, sino del concurso real de ambas
voluntades, desarrollando de esta manera el postulado de la autonomía de la voluntad, en el
cual las partes intervinientes pueden pactar todas las cláusulas que consideren necesarias,
siempre que no contradigan la Constitución, la ley, la moral, el orden público y las buenas
costumbres.

CARACTERISTICAS GENERALES DEL CONTRATO DE EMPRESTITO INTERNO

- Solemne: Como podremos observar más adelante, la mayoría de contratos de empréstito deben
constar por escrito y ser autorizados previamente. Así mismo, se exige que antes de su
desembolso sean registrados en la Dirección General de Crédito Público del Ministerio de
Hacienda.
- Bilateral: El contrato de empréstito es un contrato en virtud del cual ambas partes se obligan
recíprocamente desde el momento de su celebración. Así las cosas, la entidad estatal se obliga
a restituir al acreedor las sumas de dinero que han sido prestadas y el acreedor por su parte se
obliga a medir la capacidad de endeudamiento de la entidad estatal.
- Oneroso: Por otra parte vale la pena señalar que, el contrato de empréstito tiene por objeto la
utilidad de ambos contratantes, pues el acreedor podrá percibir unos intereses por las sumas
de dinero que ha prestado a la entidad estatal y la entidad tendrá la oportunidad de disfrutar
de una suma de dinero que no se encontraba en su patrimonio.

- Principal: Igualmente, el contrato de empréstito se caracteriza por ser un contrato principal,


pues no requiere de otro acto jurídico para su conformación, produciendo obligaciones
principales.

- Nominativo: El ordenamiento Jurídico desarrolla y define el contrato el contrato de empréstito,


otorgándole una serie de efectos jurídicos.

- Conmutativo: La utilidad económica que perciben ambas partes, se puede apreciar desde el
mismo momento de la celebración del contrato de empréstito y no dependen del azar o de la
suerte.
- Libre Discusión: El contrato de empréstito es un contrato de libre discusión, en la medida en
que son las mismas partes quienes determinan de manera conjunta los términos y condiciones
de cada contrato.

Contratos de fiducia

Según consejo de estado, sala de consulta y servicio civil, consejero ponente: JAIME BETANCUR
CUARTAS, Santa Fe de Bogotá D. C., diciembre trece (13) de mil novecientos noventa y tres (1.993).
La fiducia pública se distingue claramente de la fiducia mercantil en el hecho de que aquélla no
implica cara transferencia de bienes ni la constitución de un patrimonio autónomo, razón por la cual
la fiducia pública forma parte de lo que la legislación anterior denominaba encargo fiduciario.

Es un negocio fiduciario en el cual interviene una entidad estatal como fideicomitente. Se diferencia
de la fiducia mercantil en que la entidad estatal no constituye un patrimonio autónomo ni trasfiere
la propiedad de los bienes o recursos fideicomitidos al fiduciario, salvo en los casos expresamente
señalados en la ley.

Características

 Constitución Informes acordados a las necesidades de la Entidad.


 No hay transferencia de dominio de los bienes o recursos.

Beneficios

 Confianza Eficiencia y transparencia con el manejo de los recursos públicos.


 Información detallada, confiable y oportuna.

Porque modalidad se debe contratar

7. El contrato de concesión 1 2 3 4 5 generación.

El contrato de concesión es un elemento fundamental en el desarrollo del sector de la


infraestructura, ya que es el vehículo que permite la vinculación de capital privado para garantizar
la construcción de las obras. Al existir un contrato, se requiere una póliza de cumplimiento que
garantice que las obligaciones contractuales asumidas por el contratista se cumplirán, y en el evento
que se generé algún incumplimiento que cause algún perjuicio a la entidad pública contratante, el
garante debe responder con su patrimonio.
ASPECTOS PRIMERA GENERACIÓN – SEGUNDA GENERACIÓN TERCERA GENERACION CUARTA GENERACION
RELEVANTES CONTRATO No. 445 CONTRATO No. 005 CONTRATO No. 046
DE 1994 DE 1999 DE 2004

ETAPAS DE a. Iniciación a. Pre construcción a. Pre construcción d. Pre construcción


EJECUCION DELb. Diseño y b. Construcción b. Construcción e. Construcción
CONTRATO Programación c. Operación y c. Operación y f. Operación y
c. Construcción mantenimiento mantenimiento mantenimiento
d. Operación
OBLIGACIONES - Financiación costo total -Constituir el - Constituir un -
patrimonio modalidad de Asociación
CONCESIONARIO del proyecto fideicomiso principal autónomo (fideicomiso) Público Privada, que
- Elaboración del diseño definitivo -Obtención del cierre financiero mediante la celebración de un significa que un privado
del proyecto -Operación y contrato de fiducia mercantil realiza las obras con
- Suministro, instalación, montaje Mantenimiento de la infraestructura irrevocable con una entidad recursos propios y de
y prueba de equipos -Contar con sus propios diseños para fiduciaria legalmente financiación, que recuperan
- Puesta en marcha del sistema obras de construcción y/o establecida en con el dinero que el
vial. rehabilitación. Colombia. Gobierno Nacional les gira a
- Recaudo de peaje -Construir, rehabilitar o mejorar-los Asumir, por su cuenta y riesgo, través de peajes o vigencias
- Trabajos de tramos del proyecto todos los costos y gastos del futuras (giros del tesoro
conservación, reparación - Operar el proyecto Proyecto, obligándose nacional en diferentes
mantenimiento y dentro de los a obtener y/o aportar la pagos anuales), en la
parámetros establecidos en financiación total de los medida en que avanzan con
Reconstrucción necesaria del el contrato. recursos requeridos los trabajos
proyecto.
- Recibir físicamente los
- Cumplir con la licencia
ambiental. Trayectos incluidos en el
Proyecto.
- Obtener el Cierre Financiero.
- Diseñar, construir,
rehabilitar, mantener y operar
por su cuenta y riesgo los
Trayectos del Proyecto.
- Tramitar las modificaciones de
la Licencia Ambiental.
- Suministrar e i nstalar los
equipos requeridos para la
operación del Proyecto.

PREGUNTA
8. Normatividad aplicable a las empresas de servicios públicos domiciliarios con capital 100% del
estado
Libro: EL RÉGIMEN DE CONTRATACIÓN DE LAS EMPRESAS D SERVICIOS PÚBLICOS,
DOMICILIARIOS DE CARACTER OFICIAL, de JUAN GABRIEL ROJAS LÓPEZ. Pag. 27 – 32.
Lo primero que debe precisarse, es cuáles son las empresas de servicios públicos
domiciliarios de carácter oficial, ya que las empresas prestadoras de servicios públicos
domiciliados pueden ser, aparte de oficiales, de carácter privado e, inclusive, mixto. Dicha
distinción tiene como fundamento la integración del capital social o el origen de los aportes,
ya que se consideran como Empresas de Servicios Públicos oficiales, aquellas en cuyo capital
la Nación, las entidades territoriales, o las entidades descentralizadas de aquella o de éstas,
tienen el100°/o de los aportes; Es decir, cuando la totalidad de las participaciones son de
origen estatal.
Por el contrario, se consideran Empresas de Servicios Públicos Privadas, aquellas cuyo capital
pertenece mayoritariamente a particulares, o a entidades surgidas de convenios
internacionales que deseen someterse íntegramente para estos efectos, a las reglas a las que
se someten los particulares. Y son Empresas de Servicios Públicos Mixtas, aquellas en cuyo
capital la Nación, las entidades territoriales, o las entidades descentralizadas de aquella o de
éstas, tienen aportes iguales o superiores al 50 %
El artículo 17 de la ley 142 de 1994, estableció que las empresas de servicios públicos son
sociedades por acciones, cuyo objeto es la prestación de los servicios públicos tratados en
dicha ley; pero el parágrafo primero estableció que las entidades descentralizadas de
cualquier orden territorial o nacional, cuyos propietarios no deseen que su capital esté
representado en acciones, deberán adoptar la forma de empresa industrial y comercial del
estado. Puede decirse, en consecuencia, que las Empresas de Servicios Públicos (E.S.P) son
una categoría jurídica autónoma, diferenciada de otras figuras tipo de la descentralización
administrativa por servicios y de las formas societarias convencionales, sometidas a un
régimen jurídico especial que podría denominarse mixto, ya que está conformado, tanto por
normas de derecho privado como por normas de derecho público, que les es aplicable, en
términos generales, a todos los operadores del servicio, para garantizar, con ello, las
condiciones de igualdad que deben darse en un medio de competencia económica.
Régimen contractual y jurídico de las empresas prestadoras de servicios públicos
domiciliarios de carácter oficial.
La ley 142 de 1994, consagraba en su artículo 31 lo siguiente:
"CONCORDANCIA CON EL ESTATUTO GENERAL DE LA CONTRATACIÓN PÚBLICA. Los
contratos que celebren las entidades estatales que prestan los servicios públicos a los que se
refiere esta ley, y que tengan por objeto la prestación de esos servicios, se regirán por el
parágrafo 1 del artículo 32 de la Ley 80 de 1993 y por la presente ley, salvo en lo que la misma
disponga otra cosa.
Las comisiones de regulación podrán hacer obligatoria la inclusión, en ciertos tipos de
contratos de cualquier empresa de servicios públicos, de cláusulas exorbitantes y podrán
facultar, previa consulta expresa, que se incluyan en los demás.
“Cuando la inclusión sea forzosa, todo lo relativo a tales cláusulas se regirá, en cuanto sea
pertinente, por lo dispuesto en la Ley 80 de 1993, y los actos que ejerciten esas facultades
estarán sujetos al control de la jurisdicción contencioso administrativa."
El inciso primero de la citada norma, remitía a lo dispuesto por el parágrafo 1 o del artículo
32 de ley 80, en el que se establece: "sin perjuicio de lo dispuesto en esta ley sobre fiducia y
encargo fiduciario, los contratos que celebren los establecimientos de crédito, las compañías
de seguros y las demás entidades financieras de carácter estatal que correspondan a giro
ordinario de las actividades propias de su objeto social, no estarán sujetos a las
disposiciones_ del _presente estatuto :Y se regirán por las disposiciones legales y
reglamentarias aplicables a dichas actividades”
Como puede observarse, la ley 142 de 1994, en el artículo 31 original, al regular los contratos
que sean celebrados por las entidades estatales que prestan los servicios públicos a los que
se refiere dicha ley, remitió al parágrafo 1 o del artículo 32 de la ley 80 de 1993, lo cual,
paradójicamente, significó que tales contratos no estarían sujetos a las disposiciones del
Estatuto General de Contratación de la Administración Pública.
De lo anterior se deduce que el legislador que expidió la ley 142 de 1994, fue temeroso en
ser directo con el mensaje que se quería transmitir, el cual era que el régimen aplicable a los
contratos de estas entidades estatales no sería el previsto en dicho estatuto contractual. Sin
embargo, en el inciso segundo del artículo 31 mencionado, se establecía que las Comisiones
de Regulación podrían hacer obligatoria la inclusión, en ciertos tipos de contratos de
cualquier empresa de servicios públicos, de cláusulas exorbitantes y podrían facultar, previa
consulta expresa, que se incluyeran en los demás. Cuando la inclusión fuese forzosa, todo lo
relativo a tales cláusulas se regiría, en cuanto fuera pertinente, por lo dispuesto en la Ley 80
de 1993, y los actos en los que se ejercitaran esas facultades estarían sujetos al control de la
jurisdicción de lo contencioso administrativo.
Sin embargo mediante auto del 23 de septiembre de 1997, Expediente S-701, la Sala Plena
del Consejo de Estado, precisó que los actos y los contratos de las empresas de servicios
públicos domiciliarios estarían sometidos, por regla general, al derecho privado, sus
conflictos debían dirimirse por la jurisdicción ordinaria, y sólo se aplicaría el derecho público
como régimen excepcional.
Allí se concluyó que sólo los contratos de prestación de servicios regulados en el artículo 128
de la ley 142 de 1994, los contratos que contengan cláusulas exorbitantes por imposición o
autorización de las comisiones de regulación (art. 31) y los contratos especiales enunciados
en el artículo 39.1, estarían sometidos al derecho público y a la jurisdicción contencioso-
administrativa. Posteriormente, el artículo 40 de la ley 446 de 199 8 le asignó competencia
a la Jurisdicción Contencioso Administrativa para conocer de los contratos de las entidades
estatales en sus distintos órdenes, y de los contratos celebrados por entidades prestadoras
de servicios públicos domiciliarios, cuando su finalidad estuviese vinculada directamente a
la prestación del servicio.
Se reiteró entonces la tesis de los contratos estatales especiales para referirse a aquellos que
celebran las entidades públicas que, no obstante estar sometidos al derecho privado o a un
régimen especial diferente al previsto por la ley 80 de 1993, son controlados por el juez
administrativo.
“Es el caso de las universidades públicas, cuyo régimen de contratación es el previsto en ley
30 de 1992, las empresas oficiales del sector de los servicios públicos domiciliarios (ley 142 y
143 de 1994) y las empresas sociales del Estado (ley 100 de 1993)”

9. ley 1474 del 2011 estatuto anti corrupción. Artículo del 82 al 87

CAPÍTULO VII. Disposiciones para prevenir y combatir la corrupción en la contratación pública

Artículo 82. Responsabilidad de los interventores. Modifíquese el artículo 53 de la Ley 80 de 1993,


el cual quedará así:

Los consultores y asesores externos responderán civil, fiscal, penal y disciplinariamente tanto por el
cumplimiento de las obligaciones derivadas del contrato de consultoría o asesoría, como por los
hechos u omisiones que les fueren imputables y que causen daño o perjuicio a las entidades,
derivados de la celebración y ejecución de los contratos respecto de los cuales hayan ejercido o
ejerzan las actividades de consultoría o asesoría.

Por su parte, los interventores responderán civil, fiscal, penal y disciplinariamente, tanto por el
cumplimiento de las obligaciones derivadas del contrato de interventoría, como por los hechos u
omisiones que les sean imputables y causen daño o perjuicio a las entidades, derivados de la
celebración y ejecución de los contratos respecto de los cuales hayan ejercido o ejerzan las
funciones de interventoría.

Parágrafo. El Gobierno Nacional reglamentará la materia dentro de los seis (6) meses siguientes a la
expedición de esta ley.

Artículo 83. Supervisión e interventoría contractual. Con el fin de proteger la moralidad


administrativa, de prevenir la ocurrencia de actos de corrupción y de tutelar la transparencia de la
actividad contractual, las entidades públicas están obligadas a vigilar permanentemente la correcta
ejecución del objeto contratado a través de un supervisor o un interventor, según corresponda.

La supervisión consistirá en el seguimiento técnico, administrativo, financiero, contable, y jurídico


que sobre el cumplimiento del objeto del contrato, es ejercida por la misma entidad estatal cuando
no requieren conocimientos especializados. Para la supervisión, la Entidad estatal podrá contratar
personal de apoyo, a través de los contratos de prestación de servicios que sean requeridos.

La interventoría consistirá en el seguimiento técnico que sobre el cumplimiento del contrato realice
una persona natural o jurídica contratada para tal fin por la Entidad Estatal, cuando el seguimiento
del contrato suponga conocimiento especializado en la materia, o cuando la complejidad o la
extensión del mismo lo justifiquen. No obstante, lo anterior cuando la entidad lo encuentre
justificado y acorde a la naturaleza del contrato principal, podrá contratar el seguimiento
administrativo, técnico, financiero, contable, jurídico del objeto o contrato dentro de la
interventoría.
Por regla general, no serán concurrentes en relación con un mismo contrato, las funciones de
supervisión e interventoría. Sin embargo, la entidad puede dividir la vigilancia del contrato principal,
caso en el cual, en el contrato respectivo de interventoría, se deberán indicar las actividades técnicas
a cargo del interventor y las demás quedarán a cargo de la Entidad a través del supervisor.

El contrato de Interventoría será supervisado directamente por la entidad estatal.

Parágrafo 1°. En adición a la obligación de contar con interventoría, teniendo en cuenta la capacidad
de la entidad para asumir o no la respectiva supervisión en los contratos de obra a que se refiere el
artículo 32 de la Ley 80 de 1993, los estudios previos de los contratos cuyo valor supere la menor
cuantía de la entidad, con independencia de la modalidad de selección, se pronunciarán sobre la
necesidad de contar con interventoría.

Parágrafo 2°. El Gobierno Nacional reglamentará la materia.

Artículo 84. Facultades y deberes de los supervisores y los interventores. La supervisión e


interventoría contractual implica el seguimiento al ejercicio del cumplimiento obligacional por la
entidad contratante sobre las obligaciones a cargo del contratista.

Los interventores y supervisores están facultados para solicitar informes, aclaraciones y


explicaciones sobre el desarrollo de la ejecución contractual, y serán responsables por mantener
informada a la entidad contratante de los hechos o circunstancias que puedan constituir actos de
corrupción tipificados como conductas punibles, o que puedan poner o pongan en riesgo el
cumplimiento del contrato, o cuando tal incumplimiento se presente.

Parágrafo 1°. El numeral 34 del artículo 48 de la Ley 734 de 2002 quedará así:

No exigir, el supervisor o el interventor, la calidad de los bienes y servicios adquiridos por la entidad
estatal, o en su defecto, los exigidos por las normas técnicas obligatorias, o certificar como recibida
a satisfacción, obra que no ha sido ejecutada a cabalidad. También será falta gravísima omitir el
deber de informar a la entidad contratante los hechos o circunstancias que puedan constituir actos
de corrupción tipificados como conductas punibles, o que puedan poner o pongan en riesgo el
cumplimiento del contrato, o cuando se presente el incumplimiento.

Parágrafo 2°. Adiciónese la Ley 80 de 1993, artículo 8°, numeral 1, con el siguiente literal:

k) El interventor que incumpla el deber de entregar información a la entidad contratante


relacionada con el incumplimiento del contrato, con hechos o circunstancias que puedan constituir
actos de corrupción tipificados como conductas punibles, o que puedan poner o pongan en riesgo
el cumplimiento del contrato.

Esta inhabilidad se extenderá por un término de cinco (5) años, contados a partir de la ejecutoria
del acto administrativo que así lo declare, previa la actuación administrativa correspondiente.

NOTA: Parágrafo declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional, mediante Sentencia C-434 de
2013.
Parágrafo 3°. El interventor que no haya informado oportunamente a la Entidad de un posible
incumplimiento del contrato vigilado o principal, parcial o total, de alguna de las obligaciones a cargo
del contratista, será solidariamente responsable con este de los perjuicios que se ocasionen con el
incumplimiento por los daños que le sean imputables al interventor.

Cuando el ordenador del gasto sea informado oportunamente de los posibles incumplimientos de
un contratista y no lo conmine al cumplimiento de lo pactado o adopte las medidas necesarias para
salvaguardar el interés general y los recursos públicos involucrados, será responsable
solidariamente con este, de los perjuicios que se ocasionen.

Parágrafo 4°. Cuando el interventor sea consorcio o unión temporal la solidaridad se aplicará en los
términos previstos en el artículo 7° de la Ley 80 de 1993, respecto del régimen sancionatorio.

Artículo 85. Continuidad de la interventoría. Los contratos de interventoría podrán prorrogarse por
el mismo plazo que se haya prorrogado el contrato objeto de vigilancia. En tal caso el valor podrá
ajustarse en atención a las obligaciones del objeto de interventoría, sin que resulte aplicable lo
dispuesto en el parágrafo del artículo 40 de la Ley 80 de 1993.

Parágrafo. Para la ejecución de los contratos de interventoría es obligatoria la constitución y


aprobación de la garantía de cumplimiento hasta por el mismo término de la garantía de estabilidad
del contrato principal; el Gobierno Nacional regulará la materia. En este evento podrá darse
aplicación al artículo 7° de la Ley 1150, en cuanto a la posibilidad de que la garantía pueda ser
dividida teniendo en cuenta las etapas o riesgos relativos a la ejecución del respectivo contrato.

Artículo 86. Imposición de multas, sanciones y declaratorias de incumplimiento. Las entidades


sometidas al Estatuto General de Contratación de la Administración Pública podrán declarar el
incumplimiento, cuantificando los perjuicios del mismo, imponer las multas y sanciones pactadas
en el contrato, y hacer efectiva la cláusula penal. Para tal efecto observarán el siguiente
procedimiento:

NOTA: El texto subrayado fue declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia
C-499 de 2015.

Ver el art. 5.1.13 del Decreto Nacional 734 de 2012

a) Evidenciado un posible incumplimiento de las obligaciones a cargo del contratista, la entidad


pública lo citará a audiencia para debatir lo ocurrido. En la citación, hará mención expresa y
detallada de los hechos que la soportan, acompañando el informe de interventoría o de supervisión
en el que se sustente la actuación y enunciará las normas o cláusulas posiblemente violadas y las
consecuencias que podrían derivarse para el contratista en desarrollo de la actuación. En la misma
se establecerá el lugar, fecha y hora para la realización de la audiencia, la que podrá tener lugar a la
mayor brevedad posible, atendida la naturaleza del contrato y la periodicidad establecida para el
cumplimiento de las obligaciones contractuales. En el evento en que la garantía de cumplimiento
consista en póliza de seguros, el garante será citado de la misma manera;
b) En desarrollo de la audiencia, el jefe de la entidad o su delegado, presentará las circunstancias de
hecho que motivan la actuación, enunciará las posibles normas o cláusulas posiblemente violadas y
las consecuencias que podrían derivarse para el contratista en desarrollo de la actuación. Acto
seguido se concederá el uso de la palabra al representante legal del contratista o a quien lo
represente, y al garante, para que presenten sus descargos, en desarrollo de lo cual podrá rendir las
explicaciones del caso, aportar pruebas y controvertir las presentadas por la entidad;

c) Hecho lo precedente, mediante resolución motivada en la que se consigne lo ocurrido en


desarrollo de la audiencia y la cual se entenderá notificada en dicho acto público, la entidad
procederá a decidir sobre la imposición o no de la multa, sanción o declaratoria de incumplimiento.
Contra la decisión así proferida sólo procede el recurso de reposición que se interpondrá, sustentará
y decidirá en la misma audiencia. La decisión sobre el recurso se entenderá notificada en la misma
audiencia;

d) En cualquier momento del desarrollo de la audiencia, el jefe de la entidad o su delegado, podrá


suspender la audiencia cuando de oficio o a petición de parte, ello resulte en su criterio necesario
para allegar o practicar pruebas que estime conducentes y pertinentes, o cuando por cualquier otra
razón debidamente sustentada, ello resulte necesario para el correcto desarrollo de la actuación
administrativa. En todo caso, al adoptar la decisión, se señalará fecha y hora para reanudar la
audiencia.

La entidad podrá dar por terminado el procedimiento en cualquier momento, si por algún medio
tiene conocimiento de la cesación de situación de incumplimiento.

Artículo 87. Maduración de proyectos. El numeral 12 del artículo 25 de la Ley 80 de 1993 quedará
así:

12. Previo a la apertura de un proceso de selección, o a la firma del contrato en el caso en que la
modalidad de selección sea contratación directa, deberán elaborarse los estudios, diseños y
proyectos requeridos, y los pliegos de condiciones, según corresponda.

Cuando el objeto de la contratación incluya la realización de una obra, en la misma oportunidad


señalada en el inciso primero, la entidad contratante deberá contar con los estudios y diseños que
permitan establecer la viabilidad del proyecto y su impacto social, económico y ambiental. Esta
condición será aplicable incluso para los contratos que incluyan dentro del objeto el diseño.

Parágrafo 1°. Derogado por el art. 73, Ley 1682 de 2013. Para efectos de decretar su expropiación,
además de los motivos determinados en otras leyes vigentes, declárese de utilidad pública o interés
social los bienes inmuebles necesarios para la ejecución de proyectos de infraestructura de
transporte.

Para estos efectos, el procedimiento para cada proyecto de infraestructura de transporte diseñado
será el siguiente:
1. La entidad responsable expedirá una resolución mediante la cual determine de forma precisa las
coordenadas del proyecto.

2. El Instituto Geográfico Agustín Codazzi - IGAC o la entidad competente según el caso, en los dos
(2) meses siguientes a la publicación de la resolución de que trata el numeral anterior, procederá a
identificar los predios que se ven afectados por el proyecto y ordenará registrar la calidad de predios
de utilidad pública o interés social en los respectivos registros catastrales y en los folios de matrícula
inmobiliaria, quedando dichos predios fuera del comercio a partir del mencionado registro.

3. Efectuado el Registro de que trata el numeral anterior, en un término de seis (6) meses el IGAC o
la entidad competente, con cargo a recursos de la entidad responsable del proyecto, realizará el
avalúo comercial del inmueble y lo notificará a esta y al propietario y demás interesados
acreditados.

4. El avalúo de que trata el numeral anterior deberá incluir el valor de las posesiones si las hubiera
y de las otras indemnizaciones o compensaciones que fuera del caso realizar por afectar dicha
declaratoria el patrimonio de los particulares.

5. El Gobierno Nacional reglamentará las condiciones para determinar el valor del precio de
adquisición o precio indemnizatorio que se reconocerá a los propietarios en los procesos de
enajenación voluntaria y expropiación judicial y administrativa, teniendo en cuenta la localización,
las condiciones físicas y jurídicas y la destinación económica de los inmuebles.

6. Los interesados acreditados podrán interponer los recursos de ley en los términos del Código
Contencioso Administrativo contra el avalúo del IGAC o de la entidad competente.

7. En firme el avalúo, la entidad responsable del proyecto o el contratista si así se hubiere pactado,
pagará dentro de los tres (3) meses siguientes, las indemnizaciones o compensaciones a que hubiere
lugar. Al recibir el pago el particular, se entiende que existe mutuo acuerdo en la negociación y
transacción de posibles indemnizaciones futuras.

8. Efectuado el pago por mutuo acuerdo, se procederá a realizar el registro del predio a nombre del
responsable del proyecto ratificando la naturaleza de bien como de uso público e interés social, el
cual gozará de los beneficios del artículo 63 de la Constitución Política.

9. De no ser posible el pago directo de la indemnización o compensación, se expedirá un acto


administrativo de expropiación por parte de la entidad responsable del proyecto y se realizará el
pago por consignación a órdenes del Juez o Tribunal Contencioso Administrativo competente, acto
con el cual quedará cancelada la obligación.

10. La resolución de expropiación será el título con fundamento en el cual se procederá al registro
del predio a nombre de la entidad responsable del proyecto y que, como bien de uso público e
interés social, gozará de los beneficios del artículo 63 de la Constitución Política. Lo anterior, sin
perjuicio del derecho de las personas objeto de indemnización o compensación a recurrir ante los
Jueces Contencioso Administrativos el valor de las mismas en cada caso particular.
11. La entidad responsable del proyecto deberá notificar a las personas objeto de la indemnización
o compensación que el pago de la misma se realizó. Una vez efectuada la notificación, dichos sujetos
deberán entregar el inmueble dentro de los quince (15) días hábiles siguientes.

12. En el evento en que las personas objeto de indemnización o compensación no entreguen el


inmueble dentro del término señalado, la entidad responsable del proyecto y las autoridades locales
competentes deberán efectuar el desalojo dentro del mes siguiente al vencimiento del plazo para
entrega del inmueble.

13. El presente parágrafo también será aplicable para proyectos de infraestructura de transporte
que estén contratados o en ejecución al momento de expedición de la presente ley.

Parágrafo 2°. Derogado por el art. 73, Ley 1682 de 2013. El avalúo comercial del inmueble requerido
para la ejecución de proyectos de infraestructura de transporte, en la medida en que supere en un
50% el valor del avalúo catastral, podrá ser utilizado como criterio para actualizar el avalúo catastral
de los inmuebles que fueren des englobados como consecuencia del proceso de enajenación
voluntaria o expropiación judicial o administrativa

10. interventoría y supervisión responsabilidad y como responden

La interventoría es el seguimiento técnico a la ejecución de contratos de distintas tipologías,


realizado por una persona natural o jurídica contratada para ese fin por la Entidad Estatal en los
siguientes casos: (i) cuando la ley ha establecido la obligación de contar con esta figura en
determinados contratos, (ii) cuando el seguimiento del contrato requiera del conocimiento
especializado en la materia objeto del mismo, o (iii) cuando la complejidad o la extensión del
contrato lo justifique.

Cuando la Entidad Estatal lo encuentre justificado, puede determinar que la interventoría no sólo
se refiera al seguimiento técnico, sino también a los aspectos administrativos, financieros, contables
y/o jurídicos del contrato.

El contrato de interventoría debe ser supervisado directamente por la Entidad Estatal, en


consecuencia, siempre que una Entidad Estatal suscriba este tipo de contratos debe designar a un
funcionario que haga la supervisión del contrato y que verifique su cumplimiento en las condiciones
pactadas.

La modalidad de selección prevista para escoger al interventor es la de concurso de méritos.

la interventoría por su Parte consiste en el seguimiento técnico que sobre el cumplimiento del
contrato realice una persona natural o jurídica contractual para tal fin la entidad estatal cuando el
seguimiento del contrato requiere de conocimiento especializado en la materia.

La supervisión.

La supervisión consiste en el seguimiento técnico administrativo financiero contable y jurídico sobre


el cumplimiento del objeto del contrato es ejercida por la misma entidad estatal.
Responden civil, penal, disciplinaria y físicamente por los daños que se ocasionan en la entidad
estatal con sus acciones u omisiones en el desempeño de sus funciones.

La acción civil y la acción penal aquí mencionadas prescriben a los 20 años a partir de la ocurrencia
de los hechos u omisiones. La acción disciplinaria de acuerdo con la ley 734, articulo 30, prescribe a
los 5 años (c. ctnal.sent. c-948/02).

Los contratistas, interventores y asesores, aunque sean particulares, ejercen funciones públicas y
por lo tanto están sujetos al régimen de responsabilidades aplicable a los servicios públicos.

El estatuto anticorrupción eleva a infracción de los supervisores, incluidos interventores, la omisión


de reporte de las irregularidades que observen en los contratos sometidos a su seguimiento. Libro
contratación pública, autor Carlos pachón Lucas, quinta edición, pag 81

11. audiencia de declaración de caducidad contrato

La declaratoria de caducidad es una de las facultades excepcionales que tiene la administración


pública para garantizar el cumplimiento del objeto contractual y la continuidad en la prestación de
los servicios públicos. De acuerdo con el Estatuto General de Contratación de la Administración
Pública, la caducidad puede declararse en cualquier momento durante el plazo de ejecución
contractual estipulado por las partes, en caso de que se presente un incumplimiento grave de las
obligaciones a cargo del contratista el que afecte de manera directa la ejecución del contrato y tenga
la potencialidad de conducir a su paralización.

¿Cómo se declara la caducidad de un contrato estatal?

La caducidad es declarada por la entidad contratante mediante un acto administrativo debidamente


motivado, el cual está precedido por una audiencia pública. Así mismo, de conformidad con la Ley
1150 de 2007 y la Ley 1474 de 2011, las actuaciones contractuales de naturaleza sancionatoria
dentro de las cuales está la declaratoria de caducidad, deben respetar el principio del debido
proceso. Esto significa que el contratista tiene derecho a conocer que se está siguiendo un
procedimiento para declarar la caducidad del contrato, a ejercer su derecho a la defensa mediante
la solicitud y aporte de pruebas, y a impugnar el acto administrativo que la declare, por medio del
recurso de reposición.

¿Qué consecuencias tiene la declaratoria de caducidad de un contrato?

La principal consecuencia de la declaratoria de caducidad de un contrato es su terminación y


liquidación en el estado en que se encuentre, sin lugar a reconocimiento de indemnización alguna
al contratista. Además, la entidad contratante puede ejecutar las garantías de cumplimiento del
contrato, imponer al contratista penalidades de naturaleza económica por el incumplimiento y
tomar posesión de la obra o continuar ejecutando el contrato inmediatamente a través del garante
o de otro contratista. Por su parte, el contratista quedará inhabilitado para contratar con el estado
durante cinco años.
Otro concepto: Rta: audiencia: contendrá la indicación de la fecha en la que se abre la licitación o
concursos, el sitio en donde se puede obtener los pliegos o términos de referencia, y a la fecha de
cierre de la licitación con indicación de la hora en que tal cierre se producirá.

Por lo que la entidad contratante mediante un acto administrativo declara la caducidad


debidamente motivado, por el cual esta procedido por una audiencia pública. Así mismo de
conformidad con la ley 1150 de 2007 y la ley 1474 de 2011, las acciones contractuales de naturaleza
sancionatoria dentro de las cuales está la declaratoria de caducidad, deben respetar el principio del
debido proceso.

12. El contrato estatal es un acto administrativo sí o no y porque

No es un acto administrativo porque según la jurisprudencia la distinción entre acto


administrativo y contrato estatal es la siguiente.

CONSEJO DE ESTADO, SALA DE LO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO, SECCIÓN TERCERA,


Consejera ponente: RUTH STELLA CORREA PALACIO, Bogotá, D.C., ocho (8) de marzo de dos mil
siete (2007), Radicación número: 20001-23-31-000-1996-02999-01(15052).- 2.2.1.Distinción
entre acto administrativo y contrato estatal.- Aunque resulta sugestivo el argumento según el
cual el contrato puede ser definido como un acto jurídico de la administración y, por lo mismo,
este resulta comprensivo de todos los actos jurídicos de la Administración incluidos los
contratos, la verdad es que no es fácil admitir que el contrato sea un acto administrativo
bilateral, toda vez que la existencia de ésta última modalidad es puesta en duda por un sector
muy importante de la doctrina como que el acto administrativo es, por antonomasia, una
manifestación o declaración unilateral de la voluntad de la Administración, en cumplimiento de
una función administrativa, con el fin de producir efectos jurídicos, lo que no se opone a la
participación en la producción del acto.
En efecto, es diferente el contrato, entendido, siguiendo la terminología civilista, como negocio
jurídico de la administración-expresión nítida del principio de la autonomía de la voluntad, esto
es, un acto en el que una parte se obliga para con otra a dar, hacer o no hacer alguna cosa, o
como acuerdo entre ellas para constituir, regular o extinguir entre ellas una relación jurídica
(artículo 1494 del Código Civil y 864 del Código de Comercio), que en materia de contratación
estatal está previsto actualmente en los artículos 13, 23, 32 y 40 de la Ley 80 de 1993, en
consonancia con el artículo 8 del Decreto 679 de 1994-y otra muy distinta la manifestación
unilateral de la administración que debe revestir la forma de acto administrativo.

En otras palabras, el contrato estatal no es un acto administrativo fruto de una declaración


unilateral sino un negocio jurídico producto de un acuerdo de voluntades, y por lo mismo su
régimen jurídico sustantivo, las acciones judiciales y, por supuesto, el estudio a nivel teórico
constituye capítulos separados del derecho administrativo.
Por eso, considera la Sala que cuando se declara nulo un acto administrativo general, al contrato
o una parte de él, según el caso, no se le puede aplicar la figura del decaimiento del acto
administrativo, el que se da por circunstancias sobrevinientes y posteriores a la expedición del
mismo, entre otras por la desaparición de sus fundamentos de hecho o de derecho, por cuanto
tal como lo prevé el numeral 2 del artículo 66 del Código Contencioso Administrativo, ello
procede para los “actos administrativos” y no para “los contratos de la administración pública”,
instituciones como se explicó claramente diferenciadas en el derecho.

En tal virtud, no puede ser de recibo el argumento del demandante según el cual en el sub
examine se violó el artículo 66 numeral 2 del Código Contencioso Administrativo, habida
consideración a que la institución que éste consagra no es de aplicación en el sentido por él
indicado a los contratos de la administración pública, por la diferencia conceptual entre el acto
administrativo propiamente dicho y los negocios jurídicos que celebran las entidades estatales,
tal y como se puntualizó. Cualquier duda sobre la particular queda zanjada con el artículo 1602
del Código Civil, que prevé: “todo contrato legalmente celebrado es una ley para los contratantes
y no puede ser invalidado sino por su consentimiento mutuo o por causales legales”, dentro de
las cuales no se encuentra la argüida por el libelista.

13. revocatoria directa cuando procede y cuando no


Las entidades estatales, luego de haber publicado la documentación que integra los procesos
de selección, pueden hacer uso de la revocatoria directa, si así lo consideran necesario para
garantizar un correcto y transparente desarrollo del procedimiento de contratación. Sin
embargo, su aplicación tiene un límite temporal, el cual de ser excedido podría causar graves
consecuencias para el ordenador del gasto.
Todos los procesos de contratación pública en Colombia se realizan mediante la expedición de
actos administrativos de carácter general y particular. Aquellos actos que son de carácter
general, son susceptibles de revocatoria directa.
La Corte Constitucional, mediante sentencia C-835-03, definió esta figura jurídica de la siguiente
manera:
“…Según la legislación vigente, la revocatoria directa, en cuanto acto constitutivo, es una
decisión invalidante de otro acto previo, decisión que puede surgir de oficio o a solicitud de
parte, y en todo caso, con nuevas consecuencias hacia el futuro. En la primera hipótesis el acto
de revocación lo dicta el funcionario que haya expedido el acto administrativo a suprimir, o
también, su inmediato superior. En la segunda hipótesis, el acto de revocación lo profiere el
funcionario competente a instancias del interesado…”.
Es así que la revocatoria directa se encuentra estipulada en el Código de Procedimiento
Administrativo y de lo Contencioso Administrativo. Su aplicación en los procesos de
contratación pública, es factible al considerar que al realizar su apertura debe efectuarse
mediante acto administrativo de carácter general tal como se observa en el artículo
2.2.1.1.2.1.5. del Decreto 1082 de 2015, el cual cita que:
“…Acto administrativo de apertura del proceso de selección. La Entidad Estatal debe ordenar la
apertura del proceso de selección, mediante acto administrativo de carácter general, sin
perjuicio de lo dispuesto en las Disposiciones Especiales para las modalidades de selección,
previstas en el capítulo 2 del presente título…”. (subrayado y resaltado fuera de texto).
Sin embargo, para acudir a esta figura jurídica es necesario que existan hechos o argumentos
que se enmarquen dentro de las causales legales, las cuales se encuentran señaladas en el
artículo 93 de la Ley 1437 de 2011, así:
“…CAUSALES DE REVOCACIÓN. Los actos administrativos deberán ser revocados por las mismas
autoridades que los hayan expedido o por sus inmediatos superiores jerárquicos o funcionales,
de oficio o a solicitud de parte, en cualquiera de los siguientes casos:
Cuando sea manifiesta su oposición a la Constitución Política o a la ley.
Cuando no estén conformes con el interés público o social, o atenten contra él.
Cuando con ellos se cause agravio injustificado a una persona...”
Es así que, los procesos de contratación pueden ser revocados directamente por la Entidad
Estatal, luego de publicados en el SECOP, por las causas señaladas en el artículo anterior, para
lo cual deben motivar y argumentar dentro del acto administrativo, los hechos que impulsan
dicha actuación.
No obstante, para acudir a esta figura jurídica, la entidad estatal no debe haber recibido
propuestas. Es decir, el proceso de selección puede ser revocado hasta antes de la recepción de
ofertas y realización del cierre del proceso.
En las diferentes modalidades de selección, a excepción de la contratación directa y la mínima
cuantía, el acto de revocatoria está dirigido contra la resolución de apertura, el cual anularía el
pliego de condiciones definitivo y demás actuaciones realizadas dentro del proceso de
contratación.
Por su parte, en los procesos de mínima cuantía, el acto de revocatoria está dirigido al
documento denominado “Invitación Pública o Invitación a Cotizar”, el cual es el equivalente al
pliego de condiciones en las demás modalidades. Algunos operadores jurídicos, también hacen
referencia en el acto de revocatoria, a los documentos de estudios previos.
Así mismo, se viene consolidando una práctica sana, aunque no expresada literalmente en la
normatividad vigente, la cual consiste en realizar y publicar la resolución de apertura en los
procesos de mínima cuantía, situación que facilita la expedición del acto de revocatoria, en caso
de requerirse.
En conclusión, la revocatoria directa en los procesos de contratación, sólo se puede efectuar,
hasta antes de recibir propuestas, sin considerar la modalidad. Se deben argumentar en la parte
motiva del acto de revocatoria, los hechos que soportan dicha decisión, la cual debe enmarcarse
en los siguientes criterios: a) Que el acto se halle en manifiesta oposición a la Constitución
Política o a la ley; b) Que el acto no esté conforme con el interés público o social, o atente contra
él; y c) Que el acto cause agravio injustificado a una persona
14. los recursos
Para poder demandar un acto administrativo en la jurisdicción contenciosa administrativa a
través de una acción de nulidad y restablecimiento del derecho, es necesario previo a demandar
agotar la vía gubernativa, que no, es más, que hacer uso de los recursos que la decisión permite
interponer para que la administración reconsidere su decisión.
Los recursos que proceden contra un acto administrativo son:
Reposición, la finalidad de este recurso es poner en consideración de la autoridad
administrativa que profirió el acto los argumentos necesarios para que lo modifique, lo revoque,
lo aclare o lo adicione.
Apelación, este recurso es considerado como obligatorio en el sentido de que, si es procedente,
para agotar la vía gubernativa se debe interponer. En este caso se pone en manos del superior
inmediato de quien expidió el acto la reconsideración del mismo.
Y por último está el recurso de queja que procede cuando se rechaza el recurso de apelación,
este recurso se interpone directamente ante el inmediato superior de quien profirió la decisión.
Respecto a los recursos que deben interponerse en contra de los actos administrativos para
agotar la vía gubernativa como anteriormente se le denominaba, o para cumplir con el requisito
previo a demandar, cuando se pretenda la nulidad de un acto administrativo particular, el
Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo Sección Primera en sentencia de Julio
6 de 2001 expediente 6352 se refirió de la siguiente manera:

“Naturaleza de la reposición y la apelación. El primero es un recurso optativo pues el obligatorio


de interponer es el de apelación. El carácter potestativo de dicho recurso pone en evidencia que
el acto que lo decide cuando es confirmatorio tiene un carácter eminentemente accesorio frente
al acto que es objeto del mismo, esto es, frente al principal. El acto administrativo principal como
el que decide el recurso de apelación son los presupuestos básicos para que la vía gubernativa
se entienda agotada en debida forma, a menos de que la notificación del último es la que tiene
incidencia para el cómputo del término de caducidad, para el ejercicio oportuno de la acción.”

El código de procedimiento administrativo y de lo contencioso administrativo establece la


obligatoriedad del recurso de apelación, por ende, cuando en contra de un acto administrativo
proceda dicho recurso para acudir en demanda de nulidad del acto particular es indispensable
haberlo interpuesto; mientras que los recursos de reposición y queja son eminentemente
facultativos, de conformidad con lo señalado en la parte final del artículo 76 del CPACA.

15. interés de conflicto


Un conflicto de interés surge cuando un servidor público o particular que desempeña una
función pública es influenciado en la realización de su trabajo por consideraciones
personales. El conflicto de intereses es una institución de transparencia democrática que se
produce en todo acto o negociación entre el Estado y un tercero, cuando entre este último
y quien realiza o decide dicho acto y/o participa posteriormente en la administración,
supervisión o control de los procesos derivados del mismo, existen relaciones de negocio,
parentesco o afectividad, que hagan presumir la falta de independencia o imparcialidad,
todo lo cual potencia la posibilidad de beneficiar directa o indirectamente, indebida e
indistintamente a cualquiera de las partes relacionadas. En términos genéricos, puede
decirse que existe una situación de “conflicto de intereses” cuando el interés personal de
quien ejerce una función pública colisiona con los deberes y obligaciones del cargo que
desempeña. En Colombia, los conflictos de intereses para los servidores públicos, se
encuentran regulados en la Constitución Política, en la ley y en la reglamentación interna o
estatutos de las entidades públicas. En ese sentido, encontramos que la Constitución
Política en su artículo 122 consagra, que ningún servidor público entrará a ejercer su cargo
sin prestar juramento de cumplir y defender la Constitución y desempeñar los deberes que
le incumben, y antes de tomar posesión del cargo, al retirarse del mismo o cuando autoridad
competente se lo solicite deberá declarar, bajo juramento, el monto de sus bienes y rentas.
Igualmente, la Ley 190 de 1995, en su artículo 15, dispone: “Será requisito para la posesión
o para el ejercicio de función pública suministrar la información sobre la actividad
económica privada del aspirante. En ella se incluirá la participación en sociedades o en
cualquier organización o actividad privada de carácter económico o sin ánimo de lucro de
la - DOCUMENTO OFICIAL - 1 0 cual haga parte, dentro o fuera del país. Todo cambio que se
produzca, deberá ser comunicado a la respectiva entidad dentro de los dos (2) meses
siguientes al mismo.”

16. impedimentos y recusación


LEY 80 DEL 93
Artículo 8º.- De las Inhabilidades e Incompatibilidades para Contratar:
1o. Son inhábiles para participar en licitaciones o concursos y para celebrar contratos con
las entidades estatales:
a) Las personas que se hallen inhabilitadas para contratar por la Constitución y las leyes
b) Quienes participaron en las licitaciones o concursos o celebraron los contratos de que
trata el literal anterior estando inhabilitados.
c) Quienes dieron lugar a la declaratoria de caducidad
d) (Quienes en sentencia judicial hayan sido condenados a la pena accesoria de interdicción
de derechos y funciones públicas) y quienes hayan sido sancionados disciplinariamente con
destitución. El texto subrayado fue declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional
mediante Sentencia C-178 de 1996; el texto entre paréntesis fue declarado EXEQUIBLE por
la Corte Constitucional mediante Sentencia 489 de 1996.
e) Quienes sin justa causa se abstengan de suscribir el contrato estatal adjudicado.
f) Los servidores públicos.
(Ver el Concepto del Consejo de Estado 867 de 1996.)
g) Quienes sean cónyuges o (compañeros permanentes) y quienes se encuentren dentro del
segundo grado de consanguinidad o segundo de afinidad con cualquier otra persona que
formalmente haya presentado propuesta para una misma licitación o concurso. Literal
declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia C-415 de 1994.
El texto entre paréntesis fue declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante
Sentencia C-029 de 2009, en el entendido de que en igualdad de condiciones, ellas
comprenden también a los integrantes de las parejas de un mismo sexo.
La expresión "Concurso" fue derogada por el art. 32 de la Ley 1150 de 2007.
Ver el art. 4, Decreto Nacional 679 de 1994, Ver el Concepto de la Sec. General 1045 de
1995.
h) Las sociedades distintas de las anónimas abiertas, en las cuales el representante legal o
cualquiera de sus socios tenga parentesco en segundo grado de consanguinidad o segundo
de afinidad con el representante legal o con cualquiera de los socios de una sociedad que
formalmente haya presentado propuesta, para una misma licitación o concurso. Literal
declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia C-415 de 1994
La expresión "Concurso" fue derogada por el art. 32 de la Ley 1150 de 2007.
i) Los socios de sociedades de personas a las cuales se haya declarado la caducidad, así como
las sociedades de personas de las que aquéllos formen parte con posterioridad a dicha
declaratoria.

Las inhabilidades a que se refieren los literales c), d), e i) se extenderán por un término de
cinco (5) años contados a partir de la fecha de ejecutoria del acto que declaró la caducidad,
o de la sentencia que impuso la pena, o del acto que dispuso la destitución; las previstas en
los literales b) y e), se extenderán por un término de cinco (5) años contados a partir de la
fecha de ocurrencia del hecho de la participación en la licitación o concurso, o de la
celebración del contrato, o de la de expiración del plazo para su firma.
La expresión "Concurso" fue derogada por el art. 32 de la Ley 1150 de 2007.
j) Modificado por el art. 1, Ley 1474 de 2011. Literal adicionado por el art. 18, Ley 1150 de
2007, así: Las personas naturales que hayan sido declaradas responsables judicialmente por
la comisión de delitos de peculado, concusión, cohecho, prevaricato en todas sus
modalidades y soborno transnacional, así como sus equivalentes en otras jurisdicciones.
Esta inhabilidad se extenderá a las sociedades de que sean socias tales personas, con
excepción de las sociedades anónimas abiertas
k) Literal adicionado por el art. 2, Ley 1474 de 2011, adicionado por el parágrafo 2, art. 84,
Ley 1474 de 2011
2o. Tampoco podrán participar en licitaciones o concursos ni celebrar contratos estatales
con la entidad respectiva:
La expresión "Concurso" fue derogada por el art. 32 de la Ley 1150 de 2007.
a. Quienes fueron miembros de la junta o consejo directivo o servidores públicos de la
entidad contratante. Esta incompatibilidad sólo comprende a quienes desempeñaron
funciones en los niveles directivo, asesor o ejecutivo y se extiende por el término de un (1)
año, contado a partir de la fecha del retiro.
Ver el Concepto del Consejo de Estado 867 de 1996.
b. Las personas que tengan vínculos de parentesco, hasta el segundo grado de
consanguinidad, segundo de afinidad o primero civil con los servidores públicos de los
niveles directivo, asesor ejecutivo o con los miembros de la junta o consejo directivo, o con
las personas que ejerzan el control interno o fiscal de la entidad contratante. Literal
declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia 429 de 1997.
Ver los Conceptos del Consejo de Estado 761 de 1995 y 925 de 1996.
c. El cónyuge compañero o compañera permanente del servidor público en los niveles
directivo, asesor, ejecutivo, o de un miembro de la junta o consejo directivo, o de quien
ejerza funciones de control interno o de control fiscal. El texto subrayado fue declarado
EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia C-029 de 2009, en el entendido
de que en igualdad de condiciones, ellas comprenden también a los integrantes de las
parejas de un mismo sexo.

d) Las corporaciones, asociaciones, fundaciones y las sociedades anónimas que no tengan


el carácter de abiertas, así como las sociedades de responsabilidad limitada y las demás
sociedades de personas en las que el servidor público en los niveles directivo, asesor o
ejecutivo, o el miembro de la junta o consejo directivo, o el cónyuge, compañero o
compañera permanente o los parientes hasta el segundo grado de consanguinidad, afinidad
o civil de cualquiera de ello, tenga participación o desempeñe cargos de dirección o manejo.
El texto subrayado fue declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia
C-029 de 2009, en el entendido de que, en igualdad de condiciones, ellas comprenden
también a los integrantes de las parejas de un mismo sexo.
e) Los miembros de las juntas o consejos directivos. Esta incompatibilidad sólo se predica
respecto de la entidad a la cual prestan sus servicios y de las del sector administrativo al que
la misma esté adscrita o vinculada.
f) Literal adicionado por el art. 4, Ley 1474 de 2011
Parágrafo 1º.- La inhabilidad prevista en el literal d) del ordinal 2o. de este artículo no se
aplicará en relación con las corporaciones, asociaciones, fundaciones y sociedades allí
mencionadas, cuando por disposición legal o estatutaria el servidor público en los niveles
referidos debe desempeñar en ellas cargos de dirección o manejo.
El art. 18 de la Ley 1150 de 2007, adicionó el siguiente inciso:
En las causales de inhabilidad por parentesco o por matrimonio, los vínculos desaparecen
por muerte o por disolución del matrimonio. Parágrafo 2º.- Para los efectos previstos en
este artículo, el Gobierno Nacional determinará qué debe entenderse por sociedades
anónimas abiertas.
Ver el art. 5, Decreto Nacional 679 de 1994, Ver el Fallo del Consejo de Estado 10641 de
1999.
Artículo 9º.- De las Inhabilidades e Incompatibilidades Sobrevinientes. Si llegare a
sobrevenir inhabilidad o incompatibilidad en el contratista, éste cederá el contrato previa
autorización escrita de la entidad contratante o, si ello no fuere posible, renunciará a su
ejecución.
Cuando la inhabilidad o incompatibilidad sobrevenga en un proponente dentro de una
licitación o concurso, se entenderá que renuncia a la participación en el proceso de
selección y a los derechos surgidos del mismo.
La expresión "Concurso" fue derogada por el art. 32 de la Ley 1150 de 2007.
Si la inhabilidad o incompatibilidad sobreviene en uno de los miembros de un consorcio o
unión temporal, éste cederá su participación a un tercero previa autorización escrita de la
entidad contratante. En ningún caso podrá haber cesión del contrato entre quienes integran
el consorcio o unión temporal.
Artículo declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia C-221 de
1996, Ver el Concepto de la Sec. General 1290 de 1998.

Artículo 10º.- De las Excepciones a las Inhabilidades e Incompatibilidades. No quedan


cobijadas por las inhabilidades e incompatibilidades de que tratan los artículos anteriores,
las personas que contraten por obligación legal o lo hagan para usar los bienes o servicios
que las entidades a que se refiere el presente estatuto ofrezcan al público en condiciones
comunes a quienes los soliciten, ni las personas jurídicas sin ánimo de lucro cuyos
representantes legales hagan parte de las juntas o consejos directivos en virtud de su cargo
o por mandato legal o estatutario, ni quienes celebren contratos en desarrollo de lo previsto
en el artículo 60 de la Constitución Política.

17. en qué se diferencia la revocatoria directa con los recursos

La revocatoria directa debe diferenciarse de los recursos administrativos, los cuales también
permiten ¨revocar¨ o hacer desaparecer los actos por decisión de la misma administración, pero
dicha ¨revocación¨ o desaparición se produce solo en virtud de recursos contra actos individuales y
cuando ellos apenas han sido expedidos, sin que se encuentren aun ejecutoriados, es decir, en firme.
Por el contrario, la figura de la revocación directa se presenta por fuera de los términos propios de
la vía administrativa e independientemente de ella, sea porque para el caso no haya recursos
administrativos o porque habiéndolos, no se hizo uso de ellos. ¨Libardo Rodríguez- decimoctava
edición¨

18. silencio positivo y negativo diferencias y cuál es el fin de los silencios

El Silencio Administrativo es una presunción o ficción legal en virtud de la cual, transcurrido


cierto plazo sin resolver las administraciones públicas y producidas además determinadas
circunstancias, se entenderá denegada u otorgada la petición o el recurso formulado por los
particulares u otras administraciones.

Silencio administrativo negativo: El silencio administrativo negativo o llamado también


desestimatorio es no pronunciarse dentro de un determinado plazo acerca de algo solicitado,
por lo cual la ley le da efecto desestimatorio a la petición. Si la administración no resuelve una
petición del administrado su abstención o silencio equivale por mandato de la ley a una
denegación o negativa.
Artículo 40. Silencio negativo. Transcurrido un plazo de tres meses contados a partir de la
presentación de una petición sin que se haya notificado decisión que la resuelva, se entenderá
que ésta es negativa.

La ocurrencia del silencio administrativo negativo no eximirá de responsabilidad a las


autoridades ni las excusará del deber de decidir sobre la petición inicial, salvo que el interesado
haya hecho uso de los recursos de la vía gubernativa con fundamento en él, contra el acto
presunto.

Silencio administrativo positivo: El silencio administrativo positivo o también llamado


estimatorio da lugar al nacimiento de un acto presunto, por cuanto se entiende concedido lo
que se ha solicitado.

Asimismo, el artículo 41 trae consigo el silencio positivo, así:

Artículo 41. Silencio positivo. Solamente en los casos expresamente previstos en disposiciones
especiales, el silencio de la administración equivale a decisión positiva.

El acto positivo presunto podrá ser objeto de revocatoria directa en las condiciones que señalan
los artículos 71, 73 y 74.

Finalmente, el artículo 42 se refiere al procedimiento para invocar el silencio administrativo


positivo, y su punto fundamental es una declaración bajo la gravedad del juramento donde
manifieste no haberle sido notificado (a) de respuesta alguna.

Cuál es el fin de los silencios

El primero de los efectos que produce el silencio es que se considerar que constituye un
auténtico acto administrativo que pone fin al procedimiento, esto es, tiene naturaleza de
resolución. Consecuencia de ello es que produce los efectos de dicho acto.

En cuanto al sentido del silencio, el artículo 24.1 de la Ley 39/2015 establece el silencio positivo
como norma general en los procedimientos administrativos iniciados a solicitud del interesado.
Pero seguidamente, en el mismo precepto y párrafo, establece el Legislador excepciones a esa
regla general y se considera que el silencio tiene efectos negativos en los siguientes supuestos:

a) Cuando una norma con rango de ley o una norma de Derecho de la Unión Europea o de
Derecho internacional aplicable en España establezcan lo contrario. Cuando el procedimiento
tenga por objeto el acceso a actividades o su ejercicio, la ley que disponga el carácter
desestimatorio del silencio deberá fundarse en la concurrencia de razones imperiosas de interés
general.
b) En los procedimientos de ejercicio del derecho de petición.

c) En los procedimientos cuya estimación tuviera como consecuencia que se transfirieran al


solicitante o a terceros facultades relativas al dominio público o al servicio público.

d) En los procedimientos que impliquen el ejercicio de actividades que puedan dañar el


medio ambiente.

e) En los procedimientos de responsabilidad patrimonial de las Administraciones Públicas.

f) En los procedimientos de impugnación de actos y disposiciones y en los de revisión de


oficio iniciados a solicitud de los interesados, en los que el silencio tendrá efecto
desestimatorio. No obstante, cuando el recurso de alzada se haya interpuesto contra la
desestimación por silencio administrativo de una solicitud por el transcurso del plazo, se
entenderá estimado el mismo si, llegado el plazo de resolución, el órgano administrativo
competente no dictase resolución expresa sobre el mismo, siempre que no se refiera a las
materias enumeradas en los apartados anteriores.
Sin perjuicio de lo anterior, el Legislador ha discriminado en los efectos del acto presunto,
según se trate de silencio positivo o negativo. Esa diferencia se vincula a la necesidad de
dictar el acto expreso, como después se verá. En efecto, se establece en el artículo 24.2 Ley
39/2015 que si el sentido del silencio es positivo, el acto presunto “tiene a todos los efectos
la consideración de acto administrativo finalizador del procedimiento” y el apartado 4 del
mismo artículo establece que “se podrán hacer valer tanto ante la Administración como
ante cualquier persona física o jurídica, pública o privada.” Dichos efectos se entienden
producidos “desde el vencimiento del plazo máximo en el que debe dictarse y notificarse la
resolución expresa sin que la misma se haya expedido”.

Como el problema del silencio positivo es la posibilidad de probar su existencia por la


dificultad que entraña probar lo que no existe, se dispone en artículo 24.4 que “su existencia
puede ser acreditada por cualquier medio de prueba admitido en Derecho, incluido el
certificado acreditativo del silencio producido.” El referido certificado acreditativo deberá
ser expedido de oficio por el órgano competente para resolver, en el plazo de quince días
desde que expire el plazo máximo para resolver el procedimiento. En cualquier caso, el
interesado podrá solicitarlo en cualquier momento, en cuyo caso el plazo de quince días se
computará desde el día siguiente a aquél en que la petición tuviese entrada en el registro
electrónico de la Administración u Organismo competente para resolver.

19. cuando queda ejecutado un acto administrativo


87 de la ley 1437 de 2011
Artículo 87. Firmeza de los actos administrativos. Los actos administrativos quedarán en
firme:
1. Cuando contra ellos no proceda ningún recurso, desde el día siguiente al de su
notificación, comunicación o publicación según el caso.
2. Desde el día siguiente a la publicación, comunicación o notificación de la decisión sobre
los recursos interpuestos.
3. Desde el día siguiente al del vencimiento del término para interponer los recursos, si estos
no fueron interpuestos, o se hubiere renunciado expresamente a ellos.
4. Desde el día siguiente al de la notificación de la aceptación del desistimiento de los
recursos.
5. Desde el día siguiente al de la protocolización a que alude el artículo 85 para el silencio
administrativo positivo.

20. cuando pierde ejecutoriedad un acto administrativo


CPACA Artículo 91 Colombia
Salvo norma expresa en contrario, los actos administrativos en firme serán obligatorios
mientras no hayan sido anulados por la Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo.
Perderán obligatoriedad y, por lo tanto, no podrán ser ejecutados en los siguientes casos:
1. Cuando sean suspendidos provisionalmente sus efectos por la Jurisdicción de lo
Contencioso Administrativo.
2. Cuando desaparezcan sus fundamentos de hecho o de derecho.
3. Cuando al cabo de cinco (5) años de estar en firme, la autoridad no ha realizado los actos
que le correspondan para ejecutarlos.
4. Cuando se cumpla la condición resolutoria a que se encuentre sometido el acto.
5. Cuando pierdan vigencia.

21. derecho de audiencia legal judicial y cuando se desarrolla


teniendo en cuenta el aviso al público, se tendrá en cuanta la fecha en la que se abre la
licitación o concurso, el sitio donde se pueden obtener los pliegos o términos de referencia,
y la fecha de cierre de la licitación, con indicación de la hora en que tal cierre se producirá.

Una ves empiece a correr el plazo para la presentación delas propuestas y dentro de los tres
días hábiles siguientes al inicio de dicho plazo, cualquiera delas personas que retiraron
pliegos de condiciones o términos de referencia, podrán solicitar a la entidad estatal que
abrió la licitación, que se celebre una audiencia con el objeto de precisar el contenido y
alcance de los documentos que hacen parte de los pliegos de condiciones, para que se
aclaren pasajes o conceptos dudosos u oscuros, para que se señale hasta donde abarca el
contenido delos mismos, para que se oiga a los interesados, los cuales lógicamente, podrán
pedir explicaciones y ampliaciones verbales sobre los documentos retirados.

En esta audiencia podrán intervenir todos los que hayan retirado pliegos, aunque no haya
sino ellos los que pidieran la audiencia y creemos nosotros que también pueden intervenir
el jefe de la entidad estatal y las personas que lo asesoran, los cuales podrán dar las
explicaciones que les sean solicitadas y las que ellos estimen pertinentes, todo ellos para
lograr economía y transparencia en la licitación.

“como resultado de lo debatido en la audiencia y cuando resulte conveniente, el jefe o


representante de la entidad expedirá las modificaciones pertinentes a dichos documentos
y prorrogara, si fuere necesario, el plazo de la licitación o concurso, hasta por seis días
hábiles”. (artículo 3, inciso 4).
La anterior disposición constituye una innovación de la ley en el trámite de las licitaciones,
pues se permite solicitar una audiencia para que se aclare todo lo relacionado con los
pliegos y demás documentos, le piden explicaciones sobre el alcance y contenido de los
mismos, constituyendo esta audiencia una ventaja para los presuntos contratistas que
pueden conocer la intención que tiene la entidad estatal, los objetivos que persigue y poder
conocer claramente las reglas de juego que se van a aplicar.

El hecho de que se pida y se realice la audiencia no impide que (…. Dentro del plazo de la
licitación o concurso, cualquier interesado pueda solicitar aclaraciones adicionales, que la
entidad contratante responderá mediante comunicación escrita, copia de la cual enviara a
todas y cada una de las personas que retiraron pliegos o términos de referencia”. (articulo
30, inciso 4 in fine).
Doctrina: la contratación administrativa
Autor: Omar Franco Gutiérrez
Cuarta edición

22. modalidades de contratación


según decreto 2474 del 7 de julio del 2008

Modalidades de Selección, licitación, Concurso de Merito, Selección Abreviada, mínima


cuantía, contratación directa
DESCRIPCION:
a) Licitación publica
De acuerdo con la Ley 80 de 1993 la “licitación pública es el procedimiento mediante el cual
la Entidad Estatal formula públicamente una convocatoria para que, en igualdad de
oportunidades, los interesados presenten sus ofertas y seleccione entre ellas la más
favorable.” Salvo norma especial la licitación pública es la modalidad de selección general,
es decir se aplica en todos los casos que no tengan otra modalidad asignada.
b) Mínima cuantía
La modalidad de selección de mínima cuantía es un procedimiento sencillo y rápido para
escoger al contratista en la adquisición de los bienes, obras y servicios cuyo valor no exceda
el diez por ciento de la menor cuantía de las Entidades Estatales. Esta modalidad de
selección tiene menos formalidades que las demás y tiene características especiales.
La modalidad de selección de mínima cuantía es aplicable a todos los objetos de
contratación cuando el presupuesto oficial del contrato sea inferior o igual a la mínima
cuantía de la Entidad Estatal, sin importar la naturaleza del contrato.
c) Contratación directa
La contratación directa es un mecanismo de selección del contratista, el cual opera en los
supuestos enunciados en el numeral 4 del artículo 2 de la ley 1150 de 2007, los cuales son:
Empréstitos
Interadministrativos, con excepción del contrato de seguro
Para la prestación de servicios profesionales o para la ejecución de trabajos artísticos que
sólo puedan encomendarse a determinadas personas naturales o jurídicas, o para el
desarrollo directo de actividades científicas o tecnológicas.
Arrendamiento o adquisición de inmuebles.
Urgencia manifiesta
Declaratoria de desierta de la licitación o concurso.
Cuando no se presente propuesta alguna o ninguna propuesta se ajuste al pliego de
condiciones, o términos de referencia o, en general, cuando falte voluntad de participación.
Bienes y servicios que se requieran para la defensa y seguridad nacional.
Cuando no exista pluralidad de oferentes.
Productos de origen o destinación agropecuaria que se ofrezcan en las bolsas de
productos legalmente constituidas.

En esta modalidad no es necesario recibir varias ofertas para la celebración del contrato.
d) Concurso de merito
El concurso de méritos a es una modalidad de selección en el cual se elige al contratista en
razón de la mayor capacidad técnica, científica, cultural o artística, con el fin de escoger la
persona más idónea para la realización del objeto contractual.
Según la ley 1150 de 2007 “Corresponde a la modalidad prevista para la selección de
consultores o proyectos, en la que se podrán utilizar sistemas de concurso abierto o de
precalificación. En este último caso, la conformación de la lista de precalificados se hará
mediante convocatoria pública, permitiéndose establecer listas limitadas de oferentes
utilizando para el efecto, entre otros, criterios de experiencia, capacidad intelectual y de
organización de los proponentes, según sea el caso.”
Los contratos de consultoría, necesarios realizar estudios necesarios para la ejecución de
proyectos de inversión, estudios de diagnóstico, pre factibilidad o factibilidad para
programas o proyectos específicos, al igual que las asesorías técnicas de coordinación,
control y supervisión, deben ser adelantados bajo esta modalidad.
e) Selección Abreviada
La Selección abreviada según la ley 1150 de 2007 se adelantará en los casos en que las
características del objeto a contratar, las circunstancias de la contratación o la cuantía o
destinación del bien, obra o servicio, permitan un proceso simplificado, garantizando
siempre la selección objetiva del contratista.
La ley ha determinado como causales:
La adquisición o suministro de bienes y servicios de características técnicas uniformes y
de común utilización por parte de las entidades, que corresponden a aquellos que poseen
las mismas especificaciones técnicas, con independencia de su diseño o de sus
características descriptivas, y comparten patrones de desempeño y calidad objetivamente
definidos.
La contratación de menor cuantía.
Sin perjuicio de lo dispuesto en la Ley 100 de 1993 y en la Ley 1122 de 2007, la celebración
de contratos para la prestación de servicios de salud.
La contratación cuyo proceso de licitación pública haya sido declarado desierto; en cuyo
caso la entidad deberá iniciar la selección abreviada dentro de los cuatro meses siguientes
a la declaración de desierta del proceso inicial;
La enajenación de bienes del Estado, con excepción de aquellos a que se refiere la Ley 226
de 1995.
Productos de origen o destinación agropecuarios que se ofrezcan en las bolsas de
productos legalmente constituidas;
Los actos y contratos que tengan por objeto directo las actividades comerciales e
industriales propias de las Empresas Industriales y Comerciales Estatales y de las Sociedades
de Economía Mixta, con excepción de los contratos que a título enunciativo identifica el
artículo 32 de la Ley 80 de 1993;
Los contratos de las entidades, a cuyo cargo se encuentre la ejecución de los programas
de protección de personas amenazadas, programas de desmovilización y reincorporación a
la vida civil de personas y grupos al margen de la ley, incluida la atención de los respectivos
grupos familiares, programas de atención a población desplazada por la violencia,
programas de protección de derechos humanos de grupos de personas habitantes de la
calle, niños y niñas o jóvenes involucrados en grupos juveniles que hayan incurrido en
conductas contra el patrimonio económico y sostengan enfrentamientos violentos de
diferente tipo, y población en alto grado de vulnerabilidad con reconocido estado de
exclusión que requieran capacitación, resocialización y preparación para el trabajo,
incluidos los contratos fiduciarios que demanden;
La contratación de bienes y servicios que se requieran para la defensa y seguridad
nacional.

23. clases de contratos


En la ley 80 de 1993 se encuentra un relación y descripción expresa de contratos nominados,
sin perjuicio de que la administración pública pueda acudir a contratos del derecho privado
o contratos producto de la voluntad de los contratantes.
En este orden de ideas se tiene entonces que existen contratos nominados y típicos y
contratos innominados o atípicos.
Los contratos nominados y típicos son los contemplados en la ley 80 pues esta norma la que
nos define y regula.
El art. 32 de la ley 80 de 1993 relaciona los contratos nominados propios de la
administración pública así:
1. Prestación de servicios
2. Consultaría
3. Concesión
4. Obra publica
5. Fiducia pública y encargo fiduciario

24. diferencia entre otrosí o adición de contrato y contrato adicional


Hay contrato adicional cuando existe una modificación del objeto del contrato, es decir
cuando se agrega algo nuevo al objeto inicial o cuando existe una verdadera ampliación del
objeto contractual; cualquier modificación del objeto del contrato implica la celebración de
un nuevo contrato.
Cuando existe una simple reforma del contrato que no implica una modificación en su
objeto, como un ajuste del valor o del plazo inicial del contrato, se trata de una adición del
contrato. Esta adición no puede ser superior al 50% del valor inicial (Parágrafo del artículo
40 de la Ley 80 de 1993).
25. declaratoria de siniestro
Según (Consejo de Estado, Sección Tercera, Sentencia (29857), mar. 27/14, C. P. Danilo Rojas
Betancourth)

Una entidad pública no puede, para hacer efectivas unas pólizas contractuales, declarar
unilateralmente la ocurrencia de un siniestro sin determinar la cuantía de los perjuicios, ya que
el artículo 1077 del Código del Comercio dispone que para hacer efectiva la garantía, se debe
demostrar la ocurrencia del siniestro y la cuantía de la pérdida. Estos dos requisitos son
necesarios para reclamar el dinero de las pólizas, aunque en el caso de garantías constituidas a
favor de entidades públicas, estas tienen la potestad de declarar unilateralmente la ocurrencia
del siniestro, en todo caso deben manifestarse los fundamentos fácticos que lo originaron y el
monto de la indemnización. 7372

No obstante, una entidad pública puede declarar unilateralmente la ocurrencia de un siniestro


cuando se busque reclamar las obligaciones derivadas de las garantías establecidas su favor,
debido a que el numeral 5° del artículo 68 del Código Contencioso Administrativo la autoriza
expresamente a hacerlo.

Como todo acto administrativo, la declaratoria del siniestro goza de una presunción de
legalidad, que puede ser impugnada en sede administrativa, tanto por quien expidió el seguro
como por el contratista, y que puede ser demandada ante la jurisdicción de lo contencioso
administrativo.

El Consejo aclaró que esta prerrogativa de la administración no tiene una naturaleza


sancionatoria, lo que permite su ejercicio después de terminado el plazo previsto para la
ejecución del contrato e incluso después de su liquidación.
Obligatoriedad

La administración tiene la facultad de declarar la ocurrencia del siniestro amparado por una
póliza, mediante la expedición de un acto administrativo ejecutable ante la jurisdicción. No
obstante, esa potestad no tiene carácter sancionatorio, recordó la Sección Tercera.

En ese contexto, las personas naturales o jurídicas que celebren contratos con el Estado deben
prestar una garantía única que avale el cumplimiento de las obligaciones que surjan del contrato
y que sean puestas a su cargo.

26. diferencia entre la delegación de la constitución y la de la ley 80

 Delegación ley 80/93, reglamenta.


El artículo 14. De la delegación de la facultad de celebrar contratos. En virtud de lo previsto en
el artículo 25, numeral 10 de la ley 80 /93, los jefes o representantes legales de las entidades
estatales podrán delegar en los funcionarios que desempeñen cargos en los niveles directivo,
ejecutivo o equivalente, adjudicación, celebración, liquidación, terminación, modificación,
adicción y prorroga de contratos y demás actos inherentes a la actividad contractual en las
cuantías que señalen las juntas o consejos directivos de las entidades, cuando se trate de
entidades que no tengan dichos órganos directivos, la delegación podrá realizarse respecto de
contratos cuya cuantía corresponda a cualquiera de los siguientes montos.
a. Sea igual o inferior a cien salarios mínimos legales mensuales.
b. Sea igual o al doble de los montos fijados por la ley a la respectiva entidad para que el
contrato sea de menor cuantía o no requiera formalidades plenas.
 Delegación en la constitución:
Artículo 209. La función administrativa está al servicio de los intereses generales y se desarrolla
con fundamento en los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía, celeridad,
imparcialidad y publicidad, mediante la descentralización, la delegación y la desconcentración
de funciones. Las autoridades administrativas deben coordinar sus actuaciones para el
adecuado cumplimiento de los fines del Estado. La administración pública, en todos sus órdenes,
tendrá un control interno que se ejercerá en los términos que señale la ley.

27. que es el SECOP


DECRETO 3485 DE 2011
TÍTULO. I
Artículo 1°. Definición del Sistema Electrónico para la Contratación Pública. El Sistema
Electrónico para la Contratación Pública, SECOP, es un instrumento de apoyo a la gestión
contractual de las entidades estatales, que permite la interacción de las entidades
contratantes, los proponentes, los contratistas, la comunidad y los órganos de control,
materializando particularmente los principios de transparencia y publicidad.
28. SECOP 2
SECOP II es una plataforma que permite a las Entidades Estatales adelantar Procesos de
Contratación y a los proveedores participar en ellos, mediante el envío de observaciones, la
presentación de las ofertas, y la firma de los contratos, entre otras actividades. La
información de los Procesos de Contratación que se adelantan en SECOP II está disponible
para consulta de todos los partícipes del Sistema de Compra Pública y de la ciudadanía en
general.
La plataforma permite adelantar todos los Procesos de Contratación derivados de todas las
modalidades de contratación, salvo las compras por catálogo realizadas por medio de la
Tienda Virtual del Estado Colombiano. Enviado por natalia.aguilar el Mar, 07/04/2017 - 17:36

29. porque en la contratación estatal se aplica la norma civil


ART. 13. DE LA NORMATIVIDAD APLICABLE A LOS CONTRATOS ESTATALES. Los contratos
que celebren las entidades a que se refiere el artículo 2. Del presente estatuto se regirán
por las disposiciones comerciales y civiles pertinentes, salvo en las materias particularmente
reguladas en esta ley.

Los contratos celebrados en el exterior se podrán regir en su ejecución por las reglas del
país en donde se hayan suscrito, a menos que deban cumplirse en Colombia.

Los contratos que se celebren en Colombia y deban ejecutarse o cumplirse en el extranjero,


podrán someterse a la ley extranjera.

Inciso final derogado por el artículo 32 de la Ley 1150 de 2007.

Comentarios
De acuerdo con este artículo, los contratos estatales, es decir aquellos que celebren las
entidades a que se refiere el ART. 2. de la Ley 80 de 1993, se rigen por las deposiciones del
derecho privado, es decir, por las reglas civiles y comerciales, en lo que no se encuentre
expresamente regulado por el estatuto.
Adicionalmente, la norma determina el régimen contractual aplicable teniendo en cuenta
el lugar de ejecución del contrato. Así, si el contrato fuese celebrado en Colombia o en el
exterior, y su ejecución se diera en el exterior, su ejecución se podrá regir por las normas
extranjeras. Mientras que, si el contrato debe ejecutarse en Colombia, sin importar si el
mismo fue celebrado en el exterior o dentro del territorio nacional, deberá sujetarse a las
normas nacionales.

El inciso 4º es derogado por la Ley 1150 de 2007 y a la vez el artículo 20 de esa misma ley,
regula en forma integral la cooperación con lo cual los decretos reglamentarios de esa
materia pierden su fuerza ejecutoria. Cabe recordar que ese inciso derogado fue declarado
exequible en forma condicionada por la Corte Constitucional. Esos criterios constitucionales
prevalecen en las nuevas normas
Vigencia
Inciso final derogado por el artículo 32 de la Ley 1150 de 2007, ‘por medio de la cual se
introducen medidas para la eficiencia y la transparencia en la Ley 80 de 1993 y se dictan
otras disposiciones generales sobre la contratación con Recursos Públicos’, publicada en el
Diario Oficial No. 46.691 de 16 de julio de 2007. Empieza a regir seis (6) meses después de
su promulgación según lo ordena el artículo 33 de la misma Ley.

Sentencia de constitucionalidad

Inciso segundo y tercero declarado EXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante


Sentencia C-249 de 16 de marzo de 2004, M.P. Dr. Jaime Araujo Rentería.

30. que son los parafiscales

Los parafiscales son aportes obligatorios que corresponden al empleador en beneficio de sus
trabajadores. Estos aportes (que suman el 9 % de la nómina) se destinan a las cajas de
compensación familiar, al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar –ICBF– y al servicio
nacional de aprendizaje –SENA–.

31. que es el contrato estatal


Son contratos estatales todos los actos jurídicos generadores de obligaciones que celebren
las entidades a que se refiere el presente estatuto, previste en el derecho privado o en
disposiciones especiales, o derivación del ejercicio de la autonomía de la voluntad
Desde el punto de vista didáctica podemos decir que el contrato estatal es un acuerdo de
voluntades destinado a producir obligaciones en donde una de las partes del contrato es
una entidad estatal, en el sentido descrito en el artículo 2 de la ley 80/93.
(Libro la contratación de las entidades estatales, séptima edición 2014, autor Juan Ángel
Palacio Hincapié)
32. régimen de excepciones
En materia de contratación estatal la regla general establece que las entidades estatales
están gobernadas por los principios y normas contenidos en la Ley 80 de 1993 y sus
respectivas modificaciones y decretos reglamentarios. Particularmente, el artículo 2º de la
Ley 1150 de 2007 el cual introdujo medidas para la eficiencia y la transparencia al régimen
de contratación estatal, este artículo dispone que, tratándose de entidades estatales, que
los contratistas serán seleccionados con arreglo a las modalidades de selección de (i)
licitación pública, (ii) selección abreviada, (iii) concurso de méritos

No obstante, lo anterior, las normas especiales que rigen el ordenamiento territorial


establecen excepciones al régimen de contratación estatal general atendiendo los fines,
principios y objetivos del ordenamiento del territorio.
En especial, nos referimos al desarrollo de proyectos de renovación urbana cuyas
características propias requieren de herramientas legales particulares, entre las cuales se
encuentran las previstas en la Ley 9 de 1989 y la Ley 388 de 1997. Para el caso de un
desarrollo que implique necesariamente la participación de una entidad estatal por ser
propietaria total o parcial de los inmuebles donde se localiza un proyecto de este tipo, las
leyes especiales de ordenamiento territorial establecen posibilidades que permiten el
dinamismo que tales proyectos demandan.

En efecto, el artículo 36 numeral 5° de la Ley 9 de 1989 prevé una de tales posibilidades, en


el sentido de permitir a las entidades estatales la enajenación de sus bienes inmuebles sin
necesidad de recurrir a un proceso de licitación pública, cuando se trate de la realización de
proyectos de renovación urbana. Aunque con relación a la enajenación de bienes inmuebles
de entidades estatales la norma vigente que regula la materia, Decreto 1510 de 2013,
establece la selección abreviada como la modalidad de contratación para tales efectos, el
artículo 36 en mención debe leerse de tal forma que su finalidad última se cumpla. En otras
palabras, en el caso del desarrollo de proyectos de renovación urbana, la enajenación de
bienes estatales se puede llevar a cabo sin surtir el proceso de selección abreviada.

Adicionalmente, para facilitar el pago de la enajenación de los inmuebles de entidades


estatales, es viable aplicar el artículo 78 de la Ley 9 de 1989 que establece como mecanismo
de pago la entrega de inmuebles construidos dentro del proyecto que se desarrolle. Esta
previsión legal aplica particularmente en los proyectos de reajuste de tierra y de integración
inmobiliaria característicos en la gestión de los desarrollos de renovación urbana.

Al respecto, es importante mencionar que la aplicación de las disposiciones especiales sobre


ordenamiento territorial de manera excepcional al régimen de contratación estatal ha sido
confirmada por el Consejo de Estado en varios pronunciamientos, entre los cuales se
desataca la sentencia del 11 de noviembre de 2009 de la Sala de lo Contencioso
Administrativo-Sección Tercera, y particularmente, con relación a la vigencia y aplicabilidad
del artículo 36 de la Ley 9 de 1989, la opinión de la Sala de Consulta y Servicio Civil número
970 del 22 de mayo de 1997 en la cual el Consejo de Estado manifiesta que el artículo en
mención “tiene aplicación preferente sobre las normas generales de la ley 80”

El esquema al que se hace referencia, pone a consideración una estructura flexible que
desde 1989 el legislador previó para darle dinamismo a los proyectos de renovación urbana,
con el fin de gestionar el suelo acorde con las dinámicas cambiantes que constantemente
demandan mayor eficiencia por parte del Estado en coordinación con los intereses de los
desarrolladores particulares.
33. derecho de petición:
SEGÚN CPACA, LEY 1755/2015
Concepto de derecho de petición en materia contractual según doctrina la contratación
administrativa de Omar Franco Gutiérrez. cuarta edición
en los contratos, responsabilidades
toda petición que se haga en el periodo de la ejecución de un contrato, deberá ser resuelta a la
mayor brevedad por la entidad estatal. No será posible que la entidad contratante, por no
resolver oportunamente una petición demore la ejecución del contrato, pues en este caso la ley
a dispuesto que el silencio pueda entenderse como decisión favorable al peticionario, con la
consiguiente responsabilidad para el funcionario que no responde.
en las solicitudes que se presentan en el curso de la ejecución del contrato, si la entidad estatal
no resuelve de fondo la petición dentro de los tres meses siguientes, se entenderá que la
decisión es favorable a las pretensiones del solicitante en virtud del silencio administrativo
positivo.
No obstante, a lo anterior, el funcionario o funcionarios competentes para dar respuesta serán
responsables en los términos de esta ley (numeral 16, articulo 25).
Decreto 679 de marzo 28 de 1994 “articulo 15. Del silencio administrativo positivo. De
conformidad con el articulo 25, numeral 16 de la ley 80 de 1993, las solicitudes que presente el
contratista en relación con aspectos derivados de la ejecución del contrato y durante el periodo
de la misma, se entenderán resueltas favorablemente a las pretensiones del contratista si la
entidad estatal contratante no se pronuncie dentro de los tres meses de la fecha de
presentación de la respectiva solicitud”.
“la responsabilidad en que incurren los funcionarios estatales por la omisión anteriormente
señalada y por otros actos negativos o positivos que debieron o no debieron esta reglamentada
en los artículos 50 y siguiente de la ley así:
“las entidades responderán por las actuaciones, abstenciones hechos y omisiones antijuridicas
que les sean imputables y que causan perjuicios a sus contratistas.
En tales casos deberán indemnizar la disminución patrimonial que se ocasione, la prolongación
de la misma y la ganancia, beneficio o provecho dejados de percibir por el contratista” (art 50).
La anterior es una sanción para la entidad estatal contratante.

En el articulo 51 de la ley se señala la responsabilidad en que incurre el servidor publico por sus
acciones u omisiones en materia contractual. “el servidor público responderá
disciplinariamente, civil penalmente por sus acciones y omisiones en la actuación contractual
en los términos de la constitución y la ley”. (art 51 de la ley de contratación).
En todo caso cuando una entidad estatal fuere condenada al pago de perjuicios por acciones u
omisiones debidas a culpa grave o dolo de un servidor público, la misma entidad, el Ministerio
Publico, cualquiera persona u oficiosamente al juez competente, iniciara la respectiva acción de
repetición, siempre y cuando aquel no hubiere sido llamado en garantía de conformidad con las
normas vigentes sobre la materia, manda el art 54 de la ley.
34. que entidades no obligadas al régimen de contratación estatal deben pactar clausulas
exorbitantes.
Las cláusulas exorbitantes en la Ley 80/93. De conformidad con la Ley y la Jurisprudencia del
Consejo de Estado hay cuatro (4) grupos de contratos estatales:
TIPOS DE CONTRATOS VS CLAUSULAS EXORBITANTES (LEY 80/93)

Contratos estatales en los cuales las cláusulas excepcionales al derecho común son obligatorias.
Es decir, tienen aplicación así no se hayan pactado en el proceso.

Obra, los que tienen por objeto la explotación y concesión de bienes del Estado, la prestación
de servicios públicos y las actividades que constituyen monopolio estatal.

Contratos estatales en los cuales las cláusulas excepcionales al derecho común son facultativas.

Contratos de prestación de servicios y suministro.

Contratos estatales en los cuales se encuentra prohibido incluir, y por tanto, ejercer cláusulas o
estipulaciones excepcionales. Si se incluyen, habrá nulidad absoluta de la cláusula.

Contratos con personas públicas internacionales, o de cooperación, ayuda o asistencia;


interadministrativos, en los de empréstito, donación y arrendamiento y en los que tengan por
objeto actividades comerciales o industriales de las entidades estatales que no corresponden a
las señaladas en el numeral 2° del artículo 14 de la Ley 80/93, o que tengan por objeto el
desarrollo directo de actividades científicas o tecnológicas, así como los contratos de seguro
tomados por las entidades estatales.

Todos los demás contratos estatales no previstos ni contemplados en alguno de los grupos
anteriormente individualizados, en los cuales tampoco hay lugar a la inclusión y menos al
ejercicio de tales potestades excepcionales.
La jurisprudencia ha sentado su posición manifestando que en este grupo de contratos NO es
posible la aplicación de estas cláusulas porque: 1: Este tipo de poderes requiere autorización
legal para su inclusión y posterior utilización y 2. Porque el legislador es el único que puede
disponer competencias para la expedición de actos administrativos en desarrollo de contratos
estatales.
Contrato de consultoría, comodato, leasing etc.
Sentencias de referencia:
Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Tercera. Sentencia de noviembre 30 de 2006.
Radicación: 25000232600020010100801(30832). Consejero Ponente: Alier Eduardo Hernández Enríquez.
Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Tercera. Sentencia del veinticinco (25) de febrero
de dos mil nueve (2009). Radicación: 85001233100019970037401 (15797).
Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Tercera. Sentencia del primero (1) de diciembre
de dos mil ocho (2008). Radicación: 25000232600020070053301(35827). Consejero Ponente: Enrique Gil Botero.
Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Tercera, Subsección A. Sentencia del trece (13) de
febrero de dos mil trece (2013). Radicación: 76001233100019990262201 (24996). Consejero Ponente: Mauricio
Fajardo Gómez.
“La Sala resalta que las cláusulas excepcionales a derecho común, fueron preceptuadas y
desarrolladas por los artículos 14 a 19 de la ley 80 de 1993, propenden por la protección de los
intereses generales y la prestación de los servicios públicos, razón por la hay ocasiones en las
que los co-contratantes en este tipo de relaciones negociales no se encuentran en un plano de
igualdad pues dadas las especiales circunstancias señaladas, el particular se ubica en una
relación de subordinación respecto de su co-contratante, que es el Estado.

Ahora bien, esta Sección, para el ejercicio de las facultades excepcionales, ha clasificado en
cuatro (4) grupos los contratos estatales: 1) contratos estatales en los que las cláusulas
excepcionales al derecho común son obligatorias; 2) contratos estatales en los que las cláusulas
excepcionales al derecho común son facultativas; 3) contratos estatales en los que se encuentra
prohibido incluir y, por tanto, ejercer cláusulas o estipulaciones excepcionales y; 4) todos los
demás contratos estatales no previstos ni contemplados en alguno de los grupos anteriormente
individualizados.

Sobre la mencionada clasificación, pretéritamente esta Sección señaló: "6.2. Las cláusulas
exorbitantes en la ley 80 de 1993. En particular, su pacto e imposición en contratos para los
cuales no existe autorización de la ley.

Según se anotó en los antecedentes del proceso, el municipio declaró la caducidad del contrato
celebrado con la sociedad Asesoramos SCA., poder exorbitante que fue pactado en la cláusula
quinta del contrato.

Advierte la Sala que, en vigencia de la ley 80 de 1993, norma bajo la cual se suscribió el presente
contrato, existen tres grupos de contratos en torno a los cuales el régimen de dichos poderes
exorbitantes es diferente.

En el primer grupo se encuentran los contratos en los cuales las cláusulas excepcionales se
tienen que pactar, es decir que son legalmente obligatorias, razón por la cual, si no se incluyen,
se entienden pactadas; -son las denominadas "cláusulas virtuales"-. Los contratos que
pertenecen a este grupo son: el de obra, los que tienen por objeto la explotación y concesión
de bienes del Estado, la prestación de servicios públicos y las actividades que constituyan
monopolio estatal.

Al segundo grupo pertenecen los contratos en los cuales se encuentra prohibido pactar dichas
cláusulas, de manera que, si se incluyen habrá nulidad absoluta de la cláusula.

A este grupo pertenecen, según el parágrafo del art. 14 de la ley 80 "... los contratos que se
celebren con personas públicas internacionales, o de cooperación, ayuda o asistencia; en los
interadministrativos; en los de empréstito, donación y arrendamiento y en los contratos que
tengan por objeto actividades comerciales o industriales de las entidades estatales que no
correspondan a las señaladas en el numeral 2o. de este artículo, o que tengan por objeto el
desarrollo directo de actividades científicas o tecnológicas, así como en los contratos de seguro
tomados por las entidades estatales..."

El tercer grupo lo integran los contratos en los cuales la ley autoriza, pero no impone, que las
partes del negocio jurídico acuerden su inclusión; el pacto de tales cláusulas, en estos casos, es
opcional, de manera que la falta de estipulación significa que los poderes exorbitantes no
existen. Este grupo está integrado por los contratos de prestación de servicios y suministro51.

Es importante señalar, en relación con este último grupo, aunque resulta obvio, que el acuerdo
correspondiente sólo puede favorecer a las entidades estatales, es decir, que no es posible
pactar tales poderes en favor del contratista.

Esta última hipótesis hace evidente una característica especial de los poderes exorbitantes que
en ella se contienen; en efecto, sólo en estos dos tipos de contratos la ley autoriza a las partes
del contrato a negociar la inclusión de los mismos, de manera que su existencia no deviene, en
forma "inmediata", de la ley, como ocurre con el primer grupo de contratos, sino de manera
"mediata", porque si las partes no llegan a un acuerdo sobre la inclusión de dichos poderes, la
ley no suple el vacío, y, por consiguiente, los mismos no existirán en el caso concreto.

Esta posibilidad abre un espacio al principio de la autonomía de la voluntad, en un tema donde


la tradición administrativa había entendido que exclusivamente la ley, no las partes del contrato,
podía disponer la inclusión de las cláusulas exorbitantes, sin perjuicio de que el origen de las
potestades propias de tales cláusulas provenga siempre de la ley, en unos casos, porque las
impone y, en otras, porque simplemente la autoriza.

En este contexto, y por exclusión, surge un cuarto grupo, constituido por todos aquellos
negocios jurídicos que no pertenecen a ninguno de los grupos anteriores. Tal es el caso del
contrato de consultoría, de comodato, de leasing, etc., los cuales no están incluidos en ninguno
de los tres grupos a que alude expresamente la ley, de manera que, frente a ellos, es menester
precisar el régimen a que deben sujetarse desde el punto de vista de las cláusulas excepcionales.

Esta situación genera, necesariamente, el siguiente interrogante: ¿es posible pactar las cláusulas
exorbitantes en los contratos que pertenecen a este cuarto grupo? Para la Sala la respuesta
debe ser negativa, por las siguientes razones:

De un lado, porque, como se ha visto, este tipo de poderes requiere, cuando menos,
autorización legal para su inclusión y posterior utilización, debido a la naturaleza que tienen
estas prerrogativas -por su carácter extraordinario e inusual, en relación con el derecho común-
, y, de otro, porque el legislador es el único que puede disponer competencias para la expedición
de actos administrativos en desarrollo de los contratos estatales, actos que, como es sabido,
constituyen el mecanismo de ejercicio de las exorbitancias contractuales.
De este modo, en ejercicio de la autonomía de la voluntad privada no es posible constituir este
tipo de poderes, en contratos en los que el lev no ha impartido autorización expresa, o excluirlos
en los que el legislador los ha previsto como obligatorios. '*2 (Subrayado fuera del texto).
Acorde con lo anterior, la Sala hace ahínco en que las facultades contempladas en el artículo 14
de la ley 80 de 1993, no son comunes a todos los contratos, pues como se observa de la lectura
del mencionado artículo, las potestades excepcionales son, en algunos contratos, de obligatoria
inclusión (aquellos que tengan por objeto el ejercicio de una actividad que constituya monopolio
estatal, la prestación de servicios públicos, la explotación o la concesión de bienes del Estado y
los de obra pública y la obligatoria de reversión en los contratos de explotación y concesión de
bienes del Estado - ordinal segundo, inciso primero), en otros de inclusión facultativa (contratos
de suministro y prestación de servicios, -ordinal segundo, inciso segundo-) y en otros está
prohibido incluirlas (en los contratos que se celebren con personas públicas internacionales o
de cooperación, ayuda y asistencia, en los interadministrativos, en los de empréstito, donación
y arrendamiento y en los contratos que tengan por objeto actividades comerciales o industriales
de las entidades estatales que no correspondan a las señaladas en el ordinal 2o o que tengan
por objeto el desarrollo directo de actividades científicas y tecnológicas, así como los contratos
de seguro tomados por las entidades estatales), como se puede apreciar en esta última
tipología, la prohibición obedece, en veces, al interés que se pretende amparar, al plano de
igualdad entre los sujetos co-contratantes (convenios interadministrativos) o al hecho de que
materialmente resulta imposible incluirlas, dados los efectos jurídicos que envuelve el ejercicio
de dicha cláusula excepcional.

De igual forma, la Sala resalta que la Administración ha tenido que servirse de medios e
instrumentos, y que debido a las circunstancias actuales y al creciente surgimiento de funciones
a su cargo le han sido otorgadas desde el ordenamiento jurídico. Entre esos instrumentos se
encuentra la potestad sancionadora, la cual es una herramienta de la administración para
desarrollar cada una de sus actividades.

Por tanto, se debe tener presente el alcance y los fundamentos propios de la actividad punitiva
de la administración, en cuanto al desarrollo de sus funciones, conforme a lo cual, y en ejercicio
de funciones administrativas, la administración tiene la potestad de imponer sanciones, ya sea
a los mismos funcionarios públicos o a los particulares, respetando las disposiciones legales.54

Es así, que la imposición de sanciones contractuales, por parte de la administración, tiene


naturaleza correctiva, pues pretende instar al obligado a cumplir los compromisos adquiridos y
en dicha potestad sancionatoria en la actividad contractual se sustenta la imposición de las
multas, la cláusula penal pecuniaria y la caducidad”.

35. tomar un proceso del secop y analizar cada documento publicado

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