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Los docentes de la enseñanza obligatoria

en España y las actividades de formación continua

María Begoña Alfageme-González* | José Miguel Nieto Cano**

El trabajo se propone conocer si el profesorado de la educación obligato- Palabras clave


ria participa en programas de formación, así como la tipología de dichas
modalidades educativas, y la valoración del grado de aprovechamien- Concepciones del
to que los docentes hacen de ellas. Se recogen aportaciones de 1 mil 413 profesor
profesores de enseñanza obligatoria mediante un muestreo incidental, Desarrollo profesional
en diferentes comunidades autónomas españolas. Los resultados indican Educación obligatoria
una alta participación del profesorado en modalidades de formación ges-
tionadas desde la administración educativa por los Centros de Profesores. Formación continua de
profesores
A su vez, predominan las modalidades de entrenamiento técnico indi-
vidual, sobre todo cursos o talleres. Se puede concluir que la formación Modalidades educativas
continuada del profesorado es principalmente a través de modalidades de Profesionalización
“entrenamiento” o de orientación “consumista”.

The purposes of this article are to study whether teachers in obligatory educa- Keywords
tion participate in teacher education programs, to determine the typology of
these educational modalities, and to assess the degree to which teachers take Teachers’ conceptions
advantage of them. Information was gathered from 1,413 teachers in obliga- Professional development
tory education through convenience sampling in a number of autonomous Obligatory education
communities in Spain. Results indicate high levels of participation by teach-
ers in education modalities managed by education administration through Continuing education for
Teachers’ Centers, and specify individual technical training, particularly teachers
courses and workshops, as the predominant modalities. It can be concluded Educational modalities
that teachers’ continuing education is primarily through “training” or “con- Professionalization
sumer” oriented modalities.

Recepción: 14 de octubre de 2016 | Aceptación: 14 de diciembre de 2016


* Profesora del Departamento de Didáctica y Organización Escolar de la Universidad de Murcia (España). Doctora
en Pedagogía. Líneas de investigación: metodologías y recursos didácticos; innovación en la enseñanza; profe-
sión docente y desarrollo profesional. Publicaciones recientes: (2016, en coautoría con J.S. Arencibia y A. Guarro),
“Contenidos e incidencia de la formación docente en Canarias”, Revista Profesorado, vol. 20, núm. 2, pp. 40-54;
(2016, en coautoría con J. Monteagudo y P. Miralles), “Concepciones del profesorado de Geografía e Historia sobre
la evaluación de los aprendizajes”, Revista Actualidades Investigativas en Educación, vol. 16, núm. 2, pp. 1-22. CE:
alfageme@um.es
** Profesor titular del Departamento de Didáctica y Organización Escolar de la Universidad de Murcia (España).
Doctor en Pedagogía. Líneas de investigación: innovación en la enseñanza y los centros docentes; profesión do-
cente y desarrollo profesional. Publicaciones recientes: (2015, en coautoría con F. Trillo y X. Rubal), “La formación
docente continuada en Galicia: políticas y perspectivas del profesorado de educación obligatoria”, en M.A. Flores
y F. Ilídio Ferreira (eds.), Formação e trabalho docente. Projectos, políticas e prácticas, Santo Tirso (Portugal), De
Facto Editores, pp. 53-64; (2015, en coautoría con A. Portela), “Alumnos y profesores: perfiles y características en
un escenario de vulnerabilidad educativa”, en M.T. González (coord.), La vulnerabilidad escolar y los programas de
cualificación profesional inicial. Apuntes para la formación profesional básica, Madrid, Wolters Kluwer, pp. 57-109.
CE: nietos@um.es

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Introducción como unidad de análisis, nos facilita abordar
comprensivamente la diversidad de formas
Aunque los contenidos de la formación son que pueden adoptar la formación continua y el
importantes, también se puede sostener que, desarrollo profesional, tal y como lo contem-
por sí mismos, son estériles si se desligan de plan autores como Lieberman (1995) o Zepeda
los procesos psicosociales a través de los cua- (2008).
les se movilizan, y si no son asimilados por el Por otro lado, adoptamos como marco de
propio profesorado y aplicados a su práctica referencia teórico el conocimiento disponible
profesional en su contexto de trabajo. No bas- en la literatura especializada sobre calidad del
ta una determinada selección y organización desarrollo profesional, tanto en su vertiente
de los qué del desarrollo profesional, sino que de la buena formación, aquella que defiende
pueden llegar a ser decisivos los cómo, esto es, prácticas que se ajustan a las convenciones
las oportunidades provistas y experimenta- aceptadas dentro de la comunidad profesional
das en las cuales, efectivamente, se impliquen y académica (Borko et al., 2010; Whitcomb et
los docentes y formadores. En esta línea, dos al., 2009), como en la vertiente de la formación
son las cuestiones principales que intenta eficaz, que postula modelos de actividad que
responder este trabajo: ¿realizan formación cuentan con respaldo empírico acerca de su
continuada los docentes de educación obliga- impacto o incidencia en los aprendizajes do-
toria?, y en caso de participar, ¿en qué moda- centes, en la práctica de la enseñanza/apren-
lidades de formación continuada del profeso- dizaje y en los aprendizajes de los alum-
rado lo hacen? Y ¿cuál es el grado de provecho nos (Ingvarson et al., 2010; Stoll et al., 2012).
que percibe el profesorado de su participa- Asimismo, consideramos relevante conectar
ción en dichas modalidades? De ahí que nos este marco de referencia con el de la creación,
planteemos, por un lado, realizar un análisis transferencia y utilización de conocimiento
descriptivo de la participación en unas u otras (Louis, 2005; Still, 2007). En estas fuentes, y en
modalidades de formación continua del pro- otras (Díaz-Barriga, 2002; Escudero y Portela,
fesorado de educación obligatoria y, por otro, 2015; Webster-Wright, 2009), los autores sos-
un análisis valorativo del grado de provecho tienen la necesidad de superar la formación
que vinculan a dicha participación. como entrenamiento individual, de compren-
Prestamos atención al desarrollo de la derla y realizarla como desarrollo profesional
formación, por encima de su planificación o colegiado.
evaluación, en referencia a la enorme diver- Existen muchas formas distintas que pue-
sidad que existe en el ámbito de la formación de adoptar la formación continua del profe-
docente lo que conlleva a que, en la practica, se sorado, ya que cubre un extenso abanico de
apliquen de modo indistinto, diferentes activi- posibilidades que cambia continuamente. Lo
dades, procesos, acciones, actuaciones, meto- que aquí manejamos son dos amplias cate-
dologías, estrategias, etcétera. En este sentido, gorizaciones, a manera de modelos. Éstos no
consideramos adecuado utilizar el término deben entenderse como categorías de clasifi-
“modalidad”, que hace referencia al modo de cación puras y mutuamente excluyentes, sino
estructurar deliberadamente el desarrollo como un recurso heurístico que nos sirve para
de un proceso formativo. Coincidimos con la simplificar y caracterizar comprensivamente
definición de Fernández Tilve, para quien las realidades múltiples y diferentes entre sí.
modalidades formativas son “las formas que Dos criterios generales constituyen los ejes
adoptan las actividades de formación del pro- principales desde los cuales se diferenciará la
fesorado en el desarrollo de los procesos for- naturaleza de los modelos metodológicos y de
mativos” (2000: 19). Así, el término modalidad, actividad en la formación docente: de un lado,

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el foco de la iniciativa y el control sobre el pro- presentan resultados de sus experiencias y/o
ceso y contenido de la formación; y del otro, el estudios y discuten sobre problemas educa-
tipo de conocimiento que se moviliza y utiliza tivos) constituyen dos de las actividades con
como contenido de la formación. mayor tradición en la formación continua del
profesorado. Por lo común, este tipo de acti-
La formación como entrenamiento vidades formativas se relaciona más directa-
técnico individual mente con los contenidos que tienen que ver
En el modelo de formación como entrena- con el “conocimiento y comprensión” de las
miento dominan las actividades de corta du- áreas curriculares o materias disciplinares y,
ración, situadas fuera de los lugares de trabajo, en su caso, con las “competencias pedagógi-
controladas por formadores y, por lo general, cas” que requiere la enseñanza de las mismas.
desvinculadas de los problemas emergentes de En términos generales, su nivel de impacto
la práctica, de las necesidades particulares de (en el conocimiento de la materia o pedagó-
los docentes y de su alumnado. Proveen una gico del profesor, en sus actitudes y creencias;
formación individual y técnica, y están des- o en las destrezas de enseñanza en el aula, en
conectadas de las condiciones locales y de la el aprendizaje y el rendimiento de los estu-
cultura organizativa de los centros docentes, diantes) tenderá a ser menor que otros for-
motivo por el cual desatienden, entre otros, matos más complejos en la medida en que la
procesos y factores de mejora tales como el li- actividad no incorpore coherentemente más
derazgo pedagógico distribuido (Harris, 2004). componentes formativos tales como teoría,
En esta clase de actividades formativas demostración, práctica, feedback y coaching
pueden incluirse desde las presentaciones (Joyce y Showers, 1988). Aun así, no puede ne-
y discusiones en grupo (conferencias, colo- garse su valor, al menos en términos de las ta-
quios, mesas redondas), hasta los cursos, los sas de participación del profesorado. Se trata
talleres y los seminarios o, incluso, las sesio- de las actividades a las que más frecuentemen-
nes de demostración y simulación de progra- te asisten los profesores, como lo evidencian,
mas, materiales o técnicas específicas. Borko por ejemplo, los resultados que ofrece la en-
et al. (2010) se refieren a ellas como formatos cuesta Teaching and Learning International
tradicionales de formación permanente en Survey (TALIS) (OCDE, 2009; 2014).
ejercicio donde un agente experto (el forma- Algunos autores (Guskey, 2000; Guskey
dor) comparte sus ideas y pericia a través de y Yoon, 2009) han señalado que este tipo de
una variedad de actividades grupales con actividades formativas constituyen uno de
profesores, los cuales participan a título indi- los modelos de desarrollo profesional más
vidual, fuera de los centros escolares y de las eficientes (o menos costosos) cuando se trata
aulas. Dadas sus características, esta clase de de compartir ideas e información en grupos
actividades formativas permiten compartir amplios de profesorado. Reconocen que hay
un vocabulario y un conocimiento base por pocas actividades formativas tan menospre-
medio del intercambio y el desarrollo de in- ciadas por los expertos, como los cursos y
formación e ideas en un grupo amplio. talleres, a las cuales se les ha estigmatizado
Los “cursos y talleres” (donde los profeso- como “prácticas ineficaces”, en particular las
res se familiarizan con contenidos curricula- de corta duración y escasa inversión en segui-
res, métodos pedagógicos, programas y pla- miento y apoyo. Entre las principales ventajas
nes educativos, técnicas de evaluación u otros de esta modalidad de formación docente está
temas específicos relacionados con la educa- que permite generar, entre todos los partici-
ción), así como los “seminarios y conferen- pantes, un vocabulario común, y compartir
cias” (donde los profesores y/o investigadores un conocimiento base. Una desventaja es que

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ofrece escasas oportunidades de elección y Es así que el traslado de nuevo conocimien-
personalización para los profesores más ex- to a la enseñanza en el aula es un problema que
perimentados, a menos que se incorporen queda postergado a la voluntad o capacidad de
componentes como los indicados por Joyce y cada profesor si el diseño formativo no prevé,
Showers (1988), lo cual, por otra parte, contri- como es habitual, que el profesor tenga la opor-
buye a encarecer la actividad y obliga a desti- tunidad de elección e individualización de la
nar recursos especializados. formación y, por otro, que disponga —durante
Sin embargo, Guskey y Yoon (2009) afirman o posteriormente al periodo formativo—, de la
que cuando las prácticas se diseñan y se dotan suficiente actividad adicional de práctica y se-
para ser “eficaces”, las actividades formativas guimiento en el lugar de trabajo.
con talleres tienden a mostrar una relación En suma, el modelo formativo de entrena-
positiva entre desarrollo profesional y mejora miento técnico individual engloba todas aque-
en el aprendizaje de los alumnos. Los factores llas actividades donde la iniciativa y el control
clave, señalan los autores, apuntan a que: sobre los procesos de la formación docente tie-
nen un foco externo, esto es, no corresponden
• Se centran en la implementación de al profesorado participante a título individual,
prácticas instructivas avaladas por in- y están en poder de las instancias políticas
vestigación (conocimiento de conteni- (decisoras) y/o técnicas (formadores, aseso-
do y su correspondiente conocimiento res, diseñadores) que planifican, imparten y/o
pedagógico), y disponen de un tiempo evalúan la formación. Puede decirse que son
considerable. los agentes externos a los profesores —y a sus
• Conllevan experiencias variadas de respectivos contextos de trabajo— los que re-
aprendizaje activo para los participan- gulan la agenda, y los que tienen la capacidad
tes, y brindan oportunidades para que de definir los contenidos, las condiciones y
los profesores adapten la enseñanza a las estructuras de la interacción por medio de
sus situaciones particulares de aula, lo las cuales se pretende el aprendizaje docente.
que exige un seguimiento sostenido y Además, el conocimiento que fundamenta
estructurado. o, en su caso, constituye el contenido de esa
formación (ideas, estrategias, programas, ma-
Tomando en consideración la dimensión teriales…) tiene también un origen externo y
de los “contenidos” de la formación, los forma- un carácter estandarizado. Ha sido creado —a
tos de entrenamiento dominantes se acomo- menudo a través de investigación empírico-
dan a un esquema de difusión o transferencia analítica— con pretensiones de generaliza-
de “conocimiento para” (ideas, técnicas, mé- ción; y diseñado, codificado o formalizado por
todos, materiales, recomendaciones, propues- otros —por lo general, investigadores o técni-
tas, etcétera). Esta modalidad de formación cos— a efectos de que pueda ser aprendido y
consiste en el contacto y la familiarización de aplicado fácilmente por muchos profesores, en
los profesores con contenidos estandarizados una amplia variedad de contextos de trabajo
para ser aplicados a la enseñanza, pero estos (Borko et al., 2010; Whitcomb et al., 2009).
contenidos son externos a los propios profeso-
res que participan en la formación y han sido La formación como desarrollo
previamente codificados por los expertos- profesional colegiado
formadores sin considerar, por regla general, En el modelo de formación como desarrollo
las particularidades de los contextos de uso profesional colegiado se utiliza una variedad
(Escudero y Portela, 2015). de actividades que se construyen sobre la base

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del análisis, la reflexión y la mejora de proble- relacionadas con las voces o perspec-
mas concretos ligados estrechamente al currí- tivas de los estudiantes en la planifica-
culo, la enseñanza y la evaluación en uso. Los ción, desarrollo y evaluación; incluso,
plazos de gestación y desarrollo tienden a ser se considera la implicación de los estu-
largos e implican ciclos sucesivos y sostenidos diantes en el esfuerzo de cambio y me-
de resolución de problemas desde el punto de jora de los contenidos de la formación.
vista metodológico. En referencia a concepcio- b) El profesorado como agente activo y
nes del aprendizaje docente de carácter situado reflexivo. Se busca una formación co-
y social, la formación continua incorpora fac- herente y continua respecto a las com-
tores sociales y organizativos e institucionales petencias docentes planteadas, lo que
de la práctica profesional y aspira a erigirse en requiere una participación activa y re-
parte consustancial de una agenda de mejora flexiva del docente, que tome en cuenta
de los centros docentes como un todo. tanto sus necesidades como las de sus
En esta clase de actividades formativas estudiantes. La relación directa de la
pueden incluirse desde iniciativas de coa- formación con las responsabilidades
ching, supervisión clínica, revisión por pares profesionales garantiza de antemano
o enseñanza compartida, hasta grupos de es- un mayor interés y compromiso de los
tudio, proyectos de innovación, investigación docentes. Asimismo, el trabajo basa-
acción cooperativa o comunidades profesio- do en indagación sistemática y acción
nales de aprendizaje. Como resaltan Borko et reflexiva propicia la reducción de la
al. (2010) estos formatos centran su atención distancia entre teoría y práctica; entre
en el desarrollo de capacidades profesionales creencias y acciones; y mejora la capa-
contextualizadas que son ejercitadas y apo- cidad de aprendizaje profesional y de
yadas en las aulas en el marco de una agenda resolver problemas y tomar decisiones.
flexible. Una parte de esta agenda se construye c) Orientación colegiada. La formación
sobre la marcha y en una perspectiva tempo- debe ser facilitadora de la colaboración
ral normalmente amplia. entre colegas y de reflexión compartida
A continuación, se enlistan algunas carac- sobre las prácticas profesionales, con el
terísticas de experiencias formativas que se propósito de mejorarlas. Las relaciones
realizan desde este modelo y que vale la pena colegiadas y el trabajo en equipo cons-
tomar en consideración (Borko et al., 2010; tituyen, al mismo tiempo, fines y medios
Guskey, 2000; DuFour, 2004; Sai y Siraj, 2015; de la formación. Se pueden combinar
Stoll et al., 2006; Whitcomb et al., 2010): diversos formatos (incluidos semina-
rios o talleres; formación presencial u
a) El estudiante es el referente primordial on-line) y diversos niveles grupales de
y, por lo tanto, los contenidos formati- profesorado en el centro docente, desde
vos están vinculados directamente con grupos pequeños o pares hasta su am-
su aprendizaje. En ciertos contextos pliación a todo el centro y sus agentes.
destaca la insistencia en que el obje- No es extraño, por lo demás, que for-
tivo último de la formación no es que matos más ambiciosos, como los que
a los alumnos se les enseñe bien, sino se utilizan en las comunidades pro-
que aprendan bien. En todo caso, este fesionales, incorporen actividades de
cambio de enfoque desde la enseñan- formación conjunta con otros agentes
za hacia el aprendizaje tiene profun- relevantes, como las familias o redes
das implicaciones, comenzando por inter-centros.
la inclusión de actividades formativas

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d) Condiciones organizativas facilitado- sostenidos en el tiempo, contribuyen a la crea-
ras. En este aspecto destaca el papel ción de capacidades profesionales que habrán
de liderazgo del equipo directivo para de facilitar la comprensión profunda de la en-
impulsar y apoyar el desarrollo de la señanza de contenidos determinados; poste-
formación en el centro docente, inclu- riormente estos contenidos serán enseñados
yendo la búsqueda de conexión o inte- a ciertos alumnos, en contextos concretos,
gración de la formación con proyectos cuyas particularidades juegan un papel fun-
de mejora o de innovación. En este damental en la calidad de esa enseñanza, y del
sentido, es particularmente relevante la aprendizaje que se persigue.
gestión de condiciones de trabajo (in- En suma, las actividades de formación do-
fraestructura, tiempos, asesoramien- cente que se pueden agrupar en el modelo de
to…) que, acordes con el carácter y desarrollo profesional colegiado comparten
alcance de la formación, facilitan ana- el hecho de que la iniciativa y el control de los
lizar y reflexionar sobre las prácticas de procesos y condiciones de la formación (pla-
aula y los resultados de aprendizaje del nificación, desarrollo, evaluación) tienen un
alumnado. foco interno que tiende a localizarse en los
docentes participantes.
Desde el punto de vista metodológico, El profesorado se concibe como aquellos
las prácticas formativas en la modalidad de profesionales que se desempeñan en un con-
desarrollo profesional colegiado tienden a texto de interacción social colegiada (entre
adoptar esquemas de evaluación e indagación iguales), lo que no excluye la existencia de deci-
sobre las propias prácticas profesionales que siones compartidas o acciones concertadas
imponen una orientación proactiva y revisio- con agentes promotores, formadores o aseso-
nista de la actividad (Glanz, 1998; West, 2011). res implicados en la actividad.
Bajo este formato, los problemas se localizan El carácter colegiado del trabajo docente
o emergen dentro del colectivo docente, de se relaciona con el origen del conocimiento
manera que los profesores participan plena y que constituye el contenido de la formación;
activamente a lo largo de todo el proceso for- es decir, el conocimiento se construye en el
mativo; es decir, se convierten en aprendices espacio de formación, frecuentemente con
reflexivos comprometidos y suelen adquirir el propósito de resolver problemas de ense-
una nueva conciencia de sus propios recursos ñanza y aprendizaje. Se trata, por tanto, de
y de sus posibilidades de mejora (aprendizaje), un conocimiento situado, esto es, vinculado
tanto independiente como colegiado. a un contexto de trabajo y de interacción so-
Con relación a los “contenidos” de la for- cioeducativa particular, en la cual se incorpo-
mación, los formatos de desarrollo profesio- ran tanto los procedimientos sistemáticos de
nal se ajustan a un esquema de “uso y creación indagación, como el conocimiento basado en
del conocimiento en y para la práctica” (plani- la experiencia profesional (Borko et al., 2010;
ficación del currículo, desarrollo de experien- Whitcomb et al., 2009).
cias…), así como a una formación basada en el
uso activo del conocimiento, y en la reflexión ¿Desarrollo profesional
sobre la práctica docente con propósitos de y/o aprendizaje profesional?
comprensión y de mejora, sea a título indivi- Desde una perspectiva general, y al margen de
dual, con los colegas o con otros agentes edu- la distinción entre modelos formativos hecha
cativos (Escudero y Portela, 2015). Los ciclos en este trabajo, el “desarrollo profesional” haría
de resolución sistemática de problemas, así referencia a todas aquellas oportunidades for-
como los de observación, práctica y reflexión, mativas (con intención transformadora) a las

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que los profesores pueden acceder para apren- estudiantes es de una complejidad notable-
der. Las modalidades o tipos de actividad que mente mayor (Vescio et al., 2008; Sai y Siraj,
engloba el desarrollo profesional serían, pues, 2015). En todo caso, lo que nos interesa señalar
múltiples y diferentes, incluyendo tanto los aquí es que las características que se vinculan
formales, como los informales (Easton, 2008). a actividades formativas que responden al
Por su parte, la noción de “aprendizaje modelo de desarrollo profesional colegiado
profesional” tiende a ser empleada, también son las que se asocian a un mayor impacto po-
en un sentido amplio, para hacer referencia tencial en general, y al aprendizaje profesional
al crecimiento (incremento de recursos) y al en particular (Stoll et al., 2012).
desarrollo (incremento de capacidad) que La búsqueda, en las últimas décadas, de las
afectan a los conocimientos, las destrezas o “mejores prácticas” de desarrollo profesional,
prácticas y/o las concepciones o actitudes del ha dominado la investigación en este campo,
profesor como consecuencia de la formación, en un intento por identificar un conjunto de
el estudio o la propia experiencia (Webster- características comunes que permitan dar con
Wright, 2009). un diseño formativo con garantía interna de
Entre crecimiento y desarrollo se establece eficacia, esto es, capaz de incidir en la mejora
una relación de causa y efecto de carácter rela- de los aprendizajes de los alumnos o, cuando
tivo, en el sentido de que siendo el “desarrollo menos, en su rendimiento académico. Pero,
profesional” (causa, variable independiente) paralelamente a este esfuerzo, se ha corrobo-
un tipo de actividad de carácter deliberado rado que el desarrollo profesional más efectivo
que persigue el “aprendizaje profesional” (efec- “no proviene de una combinación particular
to, variable dependiente), el tipo y alcance de de buenas prácticas y sí, en cambio, de una
éste puede depender de otros factores o con- adaptación muy precisa de una variedad de
diciones no directamente vinculados o atri- prácticas a elementos específicos de contexto,
buibles a aquél (causalidad débil). A estos dos de contenido y de proceso” (Guskey y Yoon,
elementos encadenados, se añade un tercero: 2009: 497). La mejor formación posible, se lla-
las conexiones entre el aprendizaje profesional me como se llame, sería aquella capaz de satis-
de los profesores y las mejoras en el aprendizaje facer este principio general.
de los estudiantes (Ingvarson et al., 2010). Como contrapunto a todo lo expuesto,
En las décadas pasadas, la investigación, y informes internacionales como el de la OCDE
particularmente los estudios de impacto de la (2014), denominado Estudio TALIS 2013, seña-
formación, revelaron la existencia de una serie lan que, en los países de la OCDE, alrededor de
de atributos de calidad —compartidos entre 87 por ciento de los profesores, en promedio:
modalidades formativas— que tienden a resul-
tar ya sea “eficaces” en sí mismas (esto es, que …declaran haberse involucrado en al me-
consiguen sus propios objetivos o alcanzan su nos una actividad de desarrollo profesional,
nivel de logro esperado), o bien, “más eficaces porcentaje similar al recogido en TALIS
que otras” (esto es, que consiguen objetivos 2008 (87.6 por ciento) y que señala que, en
más elevados o alcanzan un nivel de impacto general, la participación de los profesores en
mayor en comparación al que logran otras). El estas actividades es una característica rele-
conocimiento obtenido se ha utilizado, a su vante en la carrera profesional de la mayoría
vez, para identificar y consensuar principios de ellos (OCDE, 2014: 78).
clave en el diseño de experiencias formativas
que tengan incidencia, al menos, en el conoci- Este informe señala también la participa-
miento y las prácticas de los profesores, dado ción de los docentes en diferentes activida-
que medir el impacto en el aprendizaje de los des de desarrollo profesional en los 12 meses

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anteriores a la realización de la encuesta, en de la OCDE y en España, como podemos ver
porcentaje, respecto de la media de los países en la Tabla 1:

Tabla 1. Participación en actividades de desarrollo profesional


Modalidades de participación Media de la España (%)
OCDE (%)
Asistencia a cursos o talleres 69.4 66.6
Asistencia a congresos o seminarios de educación 40.2 24.4
Visitas de observación a otros centros 17.5 9.1
Visitas de observación a empresas, instituciones públicas u organizaciones no guber- 11.6 8.4
namentales (ONG)
Cursos de formación en empresas, organismos públicos u ONG 11.8 7.6
Programas de cualificación (segunda titulación, másteres, etc.) 17.1 21.2
Participación en redes de trabajo (red de profesores específica para el desarrollo 35.2 28.3
profesional)
Participación en actividades de investigación (individuales o colectivas) 29.5 41.5
Tutoría y colaboración entre profesores en el centro (observación entre compañeros) 27.1 21.3
Fuente: elaboración propia, a partir del Informe OCDE , 2014.

Como se puede ver en la Tabla 1, tanto en Metodología


la OCDE como en España, la actividad men-
cionada con mayor frecuencia son los cursos o Para este artículo se tomaron como referen-
talleres. En España todas las modalidades for- cia los datos analizados en el Proyecto I+D:
mativas tienen porcentajes inferiores a la me- “La formación continua del profesorado de
dia, excepto la participación en actividades de educación obligatoria: análisis y valoración
investigación, con un porcentaje muy superior de la formación en curso y su incidencia en el
a la media, que se sitúa como la segunda acti- aprendizaje de los profesores y los estudiantes”
vidad formativa en la que más participan los (EDU2012-38787). La información sobre el tema
docentes españoles. Las visitas de observación de estudio se recogió mediante diferentes pro-
y los cursos en empresas, organismos públicos cedimientos (análisis documental, cuestiona-
y ONG son las modalidades menos realizadas rio, entrevistas, estudios de casos, observación
por los docentes en ambos colectivos. de clases, entre otros) y abarca los contenidos
El informe también indica que la gran y actividades de la formación, así como su in-
mayoría de los docentes considera que la par- cidencia en la enseñanza y en los aprendizajes
ticipación en actividades de desarrollo profe- docentes y discentes (Escudero y Portela, 2015).
sional mejora su práctica docente: entre 75.2 y En este trabajo, por razones de enfoque
90.2 por ciento de los profesores entrevistados y espacio, presentamos solamente la infor-
(promedio OCDE), y entre 79.1 y 91.8 por ciento mación obtenida por medio de encuestas en
de los profesores españoles, considera que este relación con las modalidades formativas del
tipo de actividad tiene efectos positivos mo- profesorado. Las encuestas se aplicaron en
derados, o efectos fuertes, respectivamente, contextos formales a través de los Centros
en su trabajo docente. de Profesores (CEP). La concepción de los

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docentes en ejercicio sobre los temas objeto de diferencias con las variables “género”, “comu-
de estudio se recogió por medio de un cues- nidad autónoma” y “etapa educativa en la que
tionario con una fiabilidad muy alta (Alfa se imparte clase”, así como un análisis factorial
de Cronbach=.981), considerada excelente de exploratorio de componentes principales.1
acuerdo con los parámetros establecidos por
George y Mallery (2003). Análisis y discusión de resultados
Se recogió un total de 1 mil 413 cuestiona-
rios de profesorado, de las cinco comunida- La muestra se compone por 34.2 por ciento
des autónomas españolas participantes en la hombres y 65.8 por ciento mujeres. La ex-
investigación (Andalucía, Canarias, Galicia, periencia docente de los encuestados está
Región de Murcia y País Vasco), mediante compensada, ya que 40.3 por ciento tiene una
un muestreo incidental, en formato on-line. experiencia menor a 15 años y 60.7 por ciento
La elección de las cinco comunidades se hizo tiene más de 16 años de experiencia. Además,
con base en los diferentes modelos de forma- es de destacar que 47.2 por ciento de los parti-
ción oficial que las caracterizan: una de ellas cipantes son docentes de educación primaria
tiene un modelo más avanzado, dos un mo- y 52.8 por ciento de educación secundaria.
delo continuista, y las otras dos un modelo en El 94.9 por ciento de la muestra declara
proceso de cambio. haber realizado actividades de formación ofi-
En los cuestionarios se preguntaba a los ciales en los últimos cinco años, dato superior
docentes acerca de su participación y grado al recogido en los informes TALIS 2013 (OCDE,
de provecho en diferentes modalidades ofer- 2014), donde se señala un porcentaje de alre-
tadas por los CEP, y en otro tipo de formación dedor de 87 por ciento, aunque en este caso se
realizada fuera de la oficial en modalidades tomaron como referencia las actividades for-
formativas. Se utilizó una escala de Likert mativas realizadas en los 12 meses anteriores
(1=muy bajo, 2=bajo, 3=medio, 4=alto, 5=muy a la encuesta.
alto). También se profundizó en otros aspec- Los resultados de los ítems centrados en las
tos colaterales, como se puede ver en el si- modalidades de formación realizadas en los
guiente apartado. CEP, según lo declarado por los docentes en el
El tratamiento estadístico, realizado con el cuestionario, ofrecen información de su parti-
paquete SPSS V19, se centró en un análisis des- cipación y del grado de provecho que han teni-
criptivo, pero también se realizaron contrastes do para ellos, como puede verse en la Tabla 2.

Tabla 2. Participación y grado de provecho de modalidades formativas oficiales


realizadas en/con los Centros de Profesores
Modalidad formativa Participación Grado de provecho (%)
Frecuencia Porcentaje Muy Alto-muy Puntuación
bajo-bajo alto media
Cursos o talleres impartidos por 1,068 75.58 10.4 54.8 3.5
ponentes
Participación en actividades de forma- 840 59.45 18.6 51.1 3.41
ción on-line
Actividades docentes de planificación 695 49.19 22.6 42.6 3.19
del currículo y de la enseñanza en el
propio centro

Con ayuda del Servicio Estadístico de Análisis de Datos de la Universidad de Murcia.


1

156 Perfiles Educativos | vol. XXXIX, núm. 158, 2017 | IISUE-UNAM


M.B. Alfageme-González y J.M. Nieto | Los docentes de la enseñanza obligatoria en España…
Tabla 2. Participación y grado de provecho de modalidades formativas oficiales
realizadas en/con los Centros de Profesores (continuación)

Modalidad formativa Participación Grado de provecho (%)


Frecuencia Porcentaje Muy Alto-muy Puntuación
bajo-bajo alto media
Actividades más específicas de elabora- 657 46.5 21.0 41.2 3.21
ción de unidades didácticas o temas que
se trabajan posteriormente en las clases
y cuyo desarrollo y resultados son objeto
de reflexión y de mejora en grupo
Actividades de observación y análisis 440 31.14 43.6 29.8 2.68
de clases —por ejemplo, entre compañe-
ros/as—, o realizando grabaciones en
video que son analizadas en grupo con
el propósito de mejorar lo que proceda
Análisis y reflexión en el ciclo o depar- 574 40.62 26.1 36.8 3.07
tamento al que se pertenece sobre los
resultados de las evaluaciones, estudian-
do concretamente qué y cómo habría
que mejorar
Participación en seminarios de análisis y 608 43.03 26.6 39.2 3.10
reflexión sobre la práctica docente
Actividades de trabajo con las familias u 471 33.33 36.7 33.7 2.86
otros agentes del entorno, destinadas a
mejorar las relaciones y la participación
efectiva de los mismos en el aprendizaje
escolar
Actividades consistentes en la realiza- 731 51.73 19.0 48.0 3.34
ción de proyectos de innovación dentro
del propio centro o con otros, y teniendo
reuniones periódicas para ver y compar-
tir su desarrollo y efectos
Lectura personal (revistas, Internet, 846 59.87 9.7 56.0 3.6
etc.) sobre contenidos y metodologías
relacionadas con la enseñanza de su(s)
materia(s) o área(s) de enseñanza
Lectura en grupos docentes sobre con- 532 37.65 27.1 38.4 3.07
tenidos y metodologías relacionadas con
la enseñanza de su(s) materia(s) o área(s)
de enseñanza
Fuente: elaboración propia.

Como puede verse, la participación más personal supera a la realización de los cursos.
alta se alcanza en la modalidad de “cursos o ta- La modalidad formativa en la que los docentes
lleres”, seguido casi con el mismo porcentaje de menos han participado es la relacionada con
la modalidad de “lectura personal” y de la “par- actividades de “observación y análisis de clases
ticipación en actividades de formación on-line”, para la mejora”, que es, al mismo tiempo, la peor
aunque hay una diferencia de alrededor de 15 valorada en cuanto a su grado de provecho.
por ciento a favor de los cursos. En contras- En síntesis, la participación más alta de
te, el grado de provecho indica que la lectura los docentes se alcanza en la modalidad de

Perfiles Educativos | vol. XXXIX, núm. 158, 2017 | IISUE-UNAM


M.B. Alfageme-González y J.M. Nieto | Los docentes de la enseñanza obligatoria en España… 157
cursos, pero el grado de provecho de lectura actividades de observación y análisis de clases
personal es mayor que el de los cursos. Los para la mejora.
resultados reflejan que el porcentaje de do- Dado que, de acuerdo con Stoll et al. (2012),
centes que afirman haber realizado cursos o las modalidades formativas de desarrollo pro-
talleres es de 75.58 por ciento, mientras que en fesional colegiado son las que más impacto
el informe TALIS 2013 (OCDE, 2014), ese por- tienen en la formación y el aprendizaje pro-
centaje para los docentes españoles fue de 66.6 fesional, nuestros datos indican que, aunque
por ciento. La diferencia puede explicarse, de este tipo de formación sí se produce, aún pre-
nuevo, porque en dicho informe se indagaba domina la formación de carácter más técnico
acerca de la formación realizada en los 12 me- individual.
ses anteriores, mientras que en nuestro caso Al calcular las diferencias estadística-
esta información se remitió a los últimos cin- mente significativas mediante las pruebas no
co años. paramétricas U de Mann-Whitney con res-
Por los resultados se puede observar que pecto a las variables género, comunidades au-
predominan actividades de carácter indivi- tónomas y etapa educativa en la que imparten
dual, como son la lectura personal, los cursos docencia, pudimos observar lo siguiente: con
y la participación en actividades de formación relación al género, sólo hay dos modalidades
on-line, todas ellas modalidades de formación de formación en las que hay diferencias sig-
consideradas como de entrenamiento técnico nificativas entre las puntuaciones asignadas
individual en el sentido de Harris (2004), o lo por hombres y por mujeres: participación en
que Borko et al. (2010) señalan como formatos actividades de formación on-line (Sig. asintót.
tradicionales de formación permanente en bilateral .033), y actividades de observación y
ejercicio, en donde los profesores participan análisis de clases con el propósito de mejora
en actividades grupales, a título individual, (Sig. asintót. bilateral .013). En ambas, el rango
fuera de sus centros docentes y aulas. medio es mayor en el colectivo de mujeres.
Las actividades formativas que podría- Con relación a las diferencias estadísti-
mos englobar como desarrollo profesional camente significativas entre las modalidades
colegiado, ya que, siguiendo a Borko et al. formativas y la etapa donde imparten docen-
(2010), centran su atención en desarrollar ca- cia, en la Tabla 3 se observa que, excepto las
pacidades profesionales contextualizadas con modalidades de cursos, lectura personal y lec-
apoyo en las aulas, se sitúan en las últimas po- tura en grupos docentes, en todas las demás
siciones, tanto respecto a la participación de hay diferencias estadísticamente significati-
los docentes como en el grado de provecho: vas. El rango medio es superior en el colectivo
la modalidad en la que menos han participa- de los docentes de primaria respecto de los
do, y la peor valorada, es la relacionada con docentes de secundaria.

Tabla 3. Diferencias estadísticamente significativas entre las modalidades formativas


y la etapa donde imparten docencia
Actividad formativa Sig. asintót.
(bilateral)
Participación en actividades de formación on-line .018
Actividades docentes de planificación del currículo y de la enseñanza en el propio centro .000
Actividades más específicas de elaboración de unidades didácticas o temas que se trabajan posterior- .001
mente en las clases, y cuyo desarrollo y resultados son objeto de reflexión y de mejora en grupo
Actividades de observación y análisis de clases —por ejemplo, entre compañeros/as—, o realizando .000
grabaciones en video que son analizadas en grupo con el propósito de mejorar lo que proceda

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Tabla 3. Diferencias estadísticamente significativas entre las modalidades formativas
y la etapa donde imparten docencia (continuación)

Actividad formativa Sig. asintót.


(bilateral)
Análisis y reflexión en el ciclo o departamento al que se pertenece sobre los resultados de las evalua- .001
ciones, estudiando concretamente qué y cómo habría que mejorar
Participación en seminarios de análisis y reflexión sobre la práctica docente .000
Actividades de trabajo con las familias u otros agentes del entorno, destinadas a mejorar las relacio- .001
nes y la participación efectiva de los mismos en el aprendizaje escolar
Actividades consistentes en la realización de proyectos de innovación dentro del propio centro o con .000
otros, y teniendo reuniones periódicas para ver y compartir su desarrollo y efectos
Fuente: elaboración propia.

También están muy marcadas las diferen- se realizó una prueba a través del estadístico
cias estadísticamente significativas entre las H de Kruskal-Wallis. Sólo tres tipos de activi-
modalidades formativas y las comunidades dad no reportan diferencias estadísticamente
autónomas (CCAA) donde los profesores tra- significativas: las de “observación y análisis de
bajan, como puede verse en la Tabla 4. En este clases”, las de “realización de proyectos de in-
caso, por la propia naturaleza de la variable, novación” y las de “lectura personal”.

Tabla 4. Diferencias estadísticamente significativas entre las modalidades formativas


y las CCAA donde imparten docencia
Actividad formativa Sig. asintót. Rango promedio
(CCAA)
superior inferior
Cursos o talleres impartidos por ponentes .001 Murcia Galicia
Participación en actividades de formación on-line .003 Murcia Andalucía
Actividades docentes de planificación del currículo y de la enseñanza .000 Andalucía Galicia
en el propio centro
Actividades más específicas de elaboración de unidades didácticas o .000 Murcia Galicia
temas que se trabajan posteriormente en las clases y cuyo desarrollo y
resultados son objeto de reflexión y de mejora en grupo
Análisis y reflexión en el ciclo o departamento al que se pertenece .002 Andalucía Galicia
sobre los resultados de las evaluaciones, estudiando concretamente
qué y cómo habría que mejorar
Participación en seminarios de análisis y reflexión sobre la práctica .000 Andalucía Galicia
docente
Actividades de trabajo con las familias u otros agentes del entorno, .000 Andalucía Galicia
destinadas a mejorar las relaciones y la participación efectiva de los
mismos en el aprendizaje escolar
Lectura en grupos docentes sobre contenidos y metodologías relacio- .018 País Vasco Galicia
nadas con la enseñanza de su(s) materia(s) o área(s) de enseñanza
Fuente: elaboración propia.

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M.B. Alfageme-González y J.M. Nieto | Los docentes de la enseñanza obligatoria en España… 159
Al observar el rango medio de los datos la comunidad autónoma de Galicia, excepto
analizados por comunidad autónoma, en la el de “formación on-line”, cuyo rango inferior
Tabla 4, destaca que es superior en Andalucía está en Andalucía.
en actividades de “planificación del currículo Como se indicó en la primera parte de este
y de la enseñanza en el propio centro”, “aná- trabajo, la actividad formativa de “curso o ta-
lisis y reflexión sobre los resultados de las ller”, generalmente denostada por los expertos
evaluaciones”, “participación en seminarios (Guskey, 2000; Guskey y Yoon, 2009), es de las
de análisis y reflexión sobre la práctica do- modalidades en las que los docentes más par-
cente”, y “actividades de trabajo con familias ticipan. Sería interesante, por tanto, conocer
y otros agentes”. Es superior en la comunidad algo más acerca de ella; más concretamente,
autónoma de la región de Murcia en las mo- cuáles fueron las actividades que se realizaron
dalidades formativas de “cursos”, “formación dentro de la modalidad de “curso o taller”.
on-line”, y “actividades de elaboración de En nuestro estudio pedimos a los docen-
unidades didácticas” o “temas objeto de re- tes no sólo que señalaran la presencia o no de
flexión y de mejora en grupo”. Y es superior diferentes actividades dentro de esta modali-
en el País Vasco en “lectura en grupos docen- dad de formación, sino también su valoración
tes”. Los rangos inferiores se sitúan todos en (Tabla 5).

Tabla 5. Valoración de las actividades realizadas en la modalidad curso o taller


impartido por ponentes, en formación oficial de los Centros de Profesores
Actividad Grado de provecho (%)
Muy Alto-muy Puntuación
bajo-bajo alto media
Explicación de metodologías, materiales, etc. 10.4 54.8 3.5
Explicación de las bases teóricas del curso por el ponente 11.7 51.8 3.43
Observación, análisis y discusión de casos, ejemplos, materiales 13.1 51 3.42
didácticos, videos, experiencias, etc.
Trabajo en grupo entre los asistentes 20.3 44.8 3.27
Tras finalizar el curso, desarrollo de sus propuestas en las aulas de 36 28.9 2.82
los asistentes, con análisis y seguimiento de ello por los docentes
implicados
Fuente: elaboración propia.

En la Tabla 5 se puede ver que todas las de prácticas instructivas avaladas por investi-
actividades superan el 50 por ciento de la va- gación, y disponga de un tiempo considerable,
loración positiva excepto la última, que co- el presunto aprendizaje activo para los docen-
rresponde a la “aplicación a la práctica de lo tes no va acompañado por un seguimiento
aprendido en los cursos y su seguimiento”. sostenido y estructurado por parte de los ex-
De acuerdo con Guskey y Yoon (2009), esta pertos que les permita adaptar lo aprendido a
modalidad formativa no se considera como sus situaciones particulares de aula.
“práctica eficaz”, ni fomenta una relación posi- Otra de las preguntas realizadas a los do-
tiva entre el desarrollo profesional y mejora en centes hacía referencia al “grado en que son
el aprendizaje de los alumnos. Aunque según adecuadas las condiciones y los apoyos orga-
nuestros resultados la modalidad formativa de nizativos en su centro para potenciar la for-
“curso o taller” incorpore la implementación mación docente”. Al respecto, sólo 52.09 por

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ciento de los docentes respondieron este ítem, cursos o talleres impartidos por po-
y la valoración media fue de 3.16. Al realizar nentes. En este caso la formación es
pruebas de contraste no se obtuvieron dife- individual, pero se realiza dentro de un
rencias estadísticamente significativas con re- grupo.
lación al género, pero sí con relación a la etapa • Y en el tercer factor destacan la lectura
educativa (significatividad de .009) y con rela- personal sobre contenidos y metodo-
ción a las comunidades autónomas, donde al logías relacionados con la enseñanza
hacer la prueba de Kruskal-Wallis se obtuvo y las actividades de formación on-line;
una significatividad de .000. por lo tanto, el tercer factor agruparía
Finalmente, las variables relacionadas con la formación realizada de un modo
estas modalidades de formación fueron so- más individual y personal por parte del
metidas a un análisis factorial exploratorio docente.
de componentes principales, al verificarse
que los datos satisfacían convenientemente El cuestionario, además de indagar sobre
la prueba de Barlet (.000, con una medida de la formación de los docentes en los Centros
adecuación muestral de .917). Así, con una ro- de Profesores, también recogió qué otras acti-
tación Varimax Kaiser, surgieron tres factores vidades realizaron de forma alternativa o pa-
que explican el 61.504 por ciento de la muestra. ralela, no previstas como tales por el Centro
Centrándonos en los valores que más saturan de su zona. Al respecto, los datos indican que
cada uno de los factores encontramos que: 31.5 por ciento de los docentes (n=445) realiza
formación fuera de los cauces oficiales, lo cual
• El primero se centra en las actividades confirma que los docentes suelen realizar la
de observación y análisis de clases para mayor parte de su formación en la oferta que
la mejora, las actividades con las fami- hacen las comunidades autónomas a través de
lias y otros agentes, y las actividades de los Centros de Profesores. Así lo muestran los
proyectos de innovación, por lo que datos que aparecen en la Tabla 6, donde des-
se podría afirmar que agrupa aquellas taca la participación del 41.3 por ciento de ac-
actividades más colaborativas o de tra- tividades de formación sobre “características
bajo conjunto con compañeros y otros y aplicaciones pedagógicas de diversos mate-
colectivos. riales didácticos”. En el caso contrario nos en-
• En el segundo de los factores predo- contramos con la “pertenencia a un colectivo
minan las variables centradas en los de renovación pedagógica” (9.9 por ciento).

Tabla 6. Otras actividades de formación no previstas


como tales por el Centro de Profesores de su zona
Participación
Frecuencia Porcentaje
Cursos impartidos por expertos sobre temas científicos de su materia o área de 408 28.9
enseñanza
Cursos impartidos por expertos sobre temas pedagógicos o metodológicos relativos a 373 26.4
cómo enseñar y evaluación del aprendizaje
Características y aplicaciones pedagógicas de diversos materiales didácticos, entre 584 41.3
ellos TIC
Contenidos relacionados con la diversidad, interculturalidad, minorías culturales, 315 22.3
etc., y la enseñanza-aprendizaje escolar
Asuntos relativos a gestión del aula, convivencia, resolución de conflictos 334 23.6

Perfiles Educativos | vol. XXXIX, núm. 158, 2017 | IISUE-UNAM


M.B. Alfageme-González y J.M. Nieto | Los docentes de la enseñanza obligatoria en España… 161
Tabla 6. Otras actividades de formación no previstas
como tales por el Centro de Profesores de su zona (continuación)

Participación
Frecuencia Porcentaje
Pertenencia a un colectivo de renovación pedagógica, presencial o virtual 140 9.9
Proyectos o experiencias de renovación en el propio centro y/o con colegas del entorno 371 26.3
más próximo
Lectura personal (revistas, libros, en Internet, etc.) de temas científicos y pedagógicos 448 31.7
Cursos impartidos por expertos sobre temas científicos de su materia o área de 408 28.9
enseñanza
Otras 56 4
Fuente: elaboración propia.

Para completar estos datos hay que seña- de educación secundaria para la primera
lar que de los docentes que no contestaron o variable, relacionada con los conocimientos
declararon no realizar actividades formativas científicos, mientras que en las otras dos el
oficiales, un total de 82 (5.8 por ciento), sólo 27 rango es superior en el colectivo de docentes
(1.9 por ciento) no indicaron ninguna activi- de educación primaria.
dad alternativa de formación, lo que consti- Asimismo, son tres las variables con di-
tuiría, según nuestra muestra, el porcentaje ferencias estadísticamente significativas con
de profesorado ausente de cualquier actividad relación a las comunidades autónomas de
de formación. referencia, en este caso con la prueba Chi-
Si realizamos una prueba de contraste po- cuadrado, por la naturaleza de la propia varia-
dremos observar que, con relación al género, ble. Para la modalidad de “cursos sobre temas
existen diferencias estadísticamente signifi- científicos” se obtiene una significatividad de
cativas al realizar la prueba no paramétrica .002; en este caso el rango medio nos indica
U de Mann-Whitney en las variables: “cursos que la comunidad autónoma con el rango
impartidos por expertos relativos a cómo en- superior es Galicia, y la que obtuvo el rango
señar y evaluación del aprendizaje” (.036); y inferior es Canarias. Para la modalidad de
en “formación sobre contenidos relacionados “formación sobre asuntos relativos a gestión
con la diversidad, interculturalidad, minorías del aula, convivencia, resolución de conflic-
culturales, etc.” (.001). En ambos casos el rango tos”, la significatividad es de .010; en este caso
medio es superior en el colectivo de mujeres. la comunidad con el rango superior fue el País
Las diferencias estadísticamente significa- Vasco, y la de rango inferior fue Murcia. Por
tivas en relación con la variable etapa educati- último, para la modalidad de “lectura perso-
va se producen en tres variables, entre las que nal con relación a la enseñanza que imparte”
se encuentran las dos citadas antes. Así, para la significatividad fue de .000, y Galicia es la
la modalidad de “cursos sobre temas científi- comunidad autónoma con el rango superior
cos” los resultados son de una significatividad y el País Vasco el de rango inferior.
.000; para la modalidad de “cursos relativos a
cómo enseñar y evaluación del aprendizaje” Conclusiones
de .015; y para la modalidad sobre “diversidad,
interculturalidad, minorías culturales, etc.”, A la luz de los resultados presentados, reco-
de .004. Sin embargo, el rango medio nos indi- gidos mediante encuesta, podemos destacar
ca que es superior en el colectivo de profesores que, en los últimos cinco años:

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• Se produjo una muy alta participación de los Centros de Profesores, una ter-
del profesorado en actividades de for- cera parte de los docentes declaró reali-
mación oficiales, que forman parte de la zar la formación fuera de los cauces ofi-
política de formación que formalmen- ciales, específicamente respecto de la
te oferta la Administración Educativa, formación centrada en características
administrada y gestionada por los Cen- y aplicaciones pedagógicas de diversos
tros de Profesores. materiales didácticos.
• El número de docentes que no parti- • Son muy pocos los docentes que per-
cipa en ninguna acción formativa fue tenecen a un colectivo de renovación
residual, pues sólo un pequeñísimo pedagógica.
porcentaje de docentes no participó en
actividades formativas, fueran éstas ofi- En el sentido de lo apuntado, procede
ciales o no. tomar en consideración ciertas conclusio-
• Predominan las modalidades de for- nes relativas a la calidad de las oportunida-
mación de entrenamiento técnico in- des de aprendizaje docente (Easton, 2008;
dividual (Harris, 2004) o actividades en Daling-Hammond et al., 2009; Wei et al., 2010;
formato tradicional de formación per- Escudero, 2011; European Commission, 2012)
manente en ejercicio (Borko et al., 2010), a efecto de interpretar críticamente la preva-
donde los docentes, de modo indivi- lencia de modalidades de “entrenamiento”, de
dual, participan en actividades grupa- “conocimiento para” o de orientación “consu-
les fuera de los centros escolares y de las mista” en la formación continua del profeso-
aulas; frente a las actividades formati- rado, que hemos caracterizado en un modelo
vas de desarrollo profesional colegiado de formación técnico-individual. La investi-
(Borko, Jacobs y Koellner, 2010), aunque gación y la experiencia muestran que la forma
son éstas, según Stoll et al. (2012), las que más eficaz (si no la única) de lograr un cambio
mayor impacto tienen en la formación y profundo y duradero del comportamiento
en el aprendizaje profesional. docente consiste en que los profesores traba-
• Todas las actividades señaladas en la jen conjuntamente durante un largo periodo
modalidad de formación denominada de tiempo para resolver entre ellos (sin excluir
curso o taller (explicación de metodo- el apoyo técnico ni el conocimiento externos)
logías, de las bases teóricas, observa- problemas comunes que hayan identificado
ción y discusión de casos, trabajo en en su enseñanza y en sus aulas.
grupo y aplicación al aula y seguimien- Si las políticas y programas de formación
to) las realizan los docentes y son bien docente persisten en seguir ignorando el co-
valoradas y aprovechadas por ellos, ex- nocimiento disponible acerca de las condicio-
cepto la centrada en la aplicación de lo nes, relaciones y procesos (culturales, sociales,
aprendido a la práctica en los cursos y institucionales, etcétera) que mejor promue-
su seguimiento. ven el desarrollo profesional, no va a importar
• Sólo la mitad de los docentes valoraron tanto la participación o no del profesorado en
el grado de adecuación de las condi- actividades de formación, como el hecho de
ciones y los apoyos organizativos en su que esa formación siga siendo irrelevante, por
Centro para potenciar la formación do- diversas razones, para la transformación de la
cente, con una valoración media-alta. profesión y de la enseñanza que se requiere en
• Si bien los docentes suelen realizar su la actualidad.
formación entre la oferta que realizan No en vano, como señalan Robinson y
las comunidades autónomas a través Timperley (2007), si perseguimos mejorar los

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M.B. Alfageme-González y J.M. Nieto | Los docentes de la enseñanza obligatoria en España… 163
resultados de aprendizaje de los alumnos, hay tiene un impacto más directo en el aprendiza-
que considerar que el sistema de influencias je de los estudiantes.
que promueve el profesor en el aula es el que

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(consulta: 1 de septiembre de 2017).

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