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Cédula: 6-719-2111
Objetivos
En este capítulo vamos a examinar algunos de los siguientes aspectos del impacto de la
informática en la sociedad en general y la educación en particular:
Nadie pone en duda la enorme responsabilidad que tiene un profesor. Para bien o para mal,
influye en el futuro de todos y cada uno de sus alumnos.
En el pasado, muchos regímenes políticos han buscado controlar la educación pública porque, qué
duda cabe, tenía efectos liberadores sobre las personas. Hoy en día, la lucha por ejercer el derecho
a la educación, y por tanto el derecho a la libertad, es una realidad en muchas partes del mundo.
Para poder moldear adecuadamente los entornos educativos, los educadores deben de tener en
cuenta el mundo en el que van a vivir los niños. Por eso, el objetivo de este apartado es presentar
un esbozo de lo que puede significar vivir en una sociedad cada vez más informatizada.
La informatización de la sociedad no es absolutamente positiva en todos y cada uno de sus
aspectos. Weizenbaum (1976) nos recuerda las palabras de John Dewey, quien dijo: “cada
pensador pone en riesgo una parte aparentemente estable del mundo y nadie puede predecir lo
que surgirá en su lugar. Hoy en día, ya no nos deshacemos de nada, ya no definimos la memoria
en función de los datos que es capaz de recordar, sino de los que es capaz de hallar.
Alan Turing fue un filósofo y matemático inglés que en 1937 publico un ensayo en el que anticipo
la invención de la maquina informática electrónica moderna. Turing dejó constancia de que, con el
tiempo, seriamos capaces de construir una maquina capaz de encontrar la solución a cualquier
problema computable que nos propusiésemos.
Así es cómo una gran parte de la funcionalidad de la informática se inspira en el cerebro humano.
Por tanto, va a ser útil examinar, aunque sea brevemente, algunos aspectos de nuestra
comprensión de la mente humana, ese increíble producto del proceso evolutivo.
A pesar de lo maravilloso que es el cerebro humano, también es cierto que en ciertos aspectos
deja mucho que desear. Vamos a analizar dos de esas limitaciones con el propósito de
comprender como nos puede ayudar a superarlas el ordenador.
La memoria Como ha señalado Miller (1956), nuestra memoria, de corto plazo, es capaz de
ocuparse de cerca de siete asuntos a la vez. Algunos somos muy despistados y casi todos
olvidamos cosas alguna vez. La mayoría no somos demasiados meticulosos con respecto a nuestra
agenda y posibles citas.
Los seres humanos tienen, de todas maneras, ciertas habilidades intelectuales que están por
encima de la posibilidad del ordenador más potente, al menos en el futuro próximo.
El ordenador como organizador Hoy en día es muy frecuente emplear los sistemas informáticos
para almacenar electrónicamente todo tipo de datos, de manera que pueda accederse a ellos para
fines informativos con mucha facilidad.
Nada ello es especialmente emocionante, a no ser que te lo parezca, porque, gracias a los sistemas
de gestión informatizados, cualquier persona es capaz de mantener bajo control y realizar muchas
más tareas que antes.
Los ordenadores también están siendo utilizados en las escuelas para coordinar el acceso a datos y
la integración del material audiovisual en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Los sistemas expertos Los sistemas expertos son otra posibilidad interesante de extensión de las
capacidades de la mente humana.
Cada vez son más las empresas que crean este tipo de sistemas para todo tipo de aplicaciones,
gracias a los cuales es posible compartir los conocimientos individuales o colectivos. La inteligencia
artificial augura otras aplicaciones que, al menos por el momento, parecen bastantes remotas.
Imagina por un momento que tú, que eres profesor de educación primaria o secundaria, das con
un sistema que contiene los datos que te hacen falta sin que hayas tenido que buscarlos siquiera.
Hay que tener en mente, en relación con los ordenadores, que solo son “máquinas tontas”. Los
signos de inteligencia que muestran son el resultado del procesamiento de una serie de
instrucciones que les ha dado un ser humano.
Para saber manejar un ordenador, lo que hace falta es saber cómo, cuándo y en qué sentido
puede servir la informática a nuestras necesidades, mejorar nuestra vida y ampliar nuestras
posibilidades. Ello no solo tiene que ver con el cuerpo, sino también con la mente. Incluso lo
animales emplean herramientas para realizar diferentes tareas físicas.
Hay científicos capaces de agarrar rocas de la superficie de planetas remotos con sólo ponerse
unos guantes que están conectados mediante señales de radio a las “manos” de robots colocados
en dichos planetas para la investigación. El robot dispone de una cámara que transmite imágenes
del objeto que se quiere recoger.
Otros vehículos operadores por el control remoto son utilizados para estudiar la profundidad de
los océanos o para investigar bombas que no han estallado, y también para examinar zonas
posiblemente contaminadas por emisiones toxicas
La ingeniería del factor humano supone el estudio de las consideraciones sobre el humano en el
diseño de las maquinas.
La fabricación de este tipo de aparatos para ayudar a este segmento de la población está en
ascenso y ya se han producido inventos que alientan a esperar que la palabra discapacitado
termine desapareciendo de nuestro vocabulario.
Es posible que conozcas otros ejemplos en los que el ordenador ha permitido realizar funciones
físicas que hasta ese momento estaban fuera de alcance.
Powell (1992) describe el sistema de Inteligencia Artificial (IA) desarrollado por Geoffrey Hinton,
en la universidad de Toronto, destinado a la detención temprana de cáncer en mujeres. Este
sistema de reconocimiento de imagen es capaz de examinar una citología, que suele contener
alrededor de 500.000 células, e identificar las 128 células que hace falta estudiar para detectar el
cáncer. En realidad, este ejemplo subestima el verdadero poder que tiene el ordenador como
herramienta en manos inteligentes, es decir, humanas.
Las investigaciones han demostrado que las habilidades de los niños en la escritura aumentan
significativamente cuando emplean el ordenador, puesto que les libera de las restricciones que les
impone tener que formar las letras con las manos.
Los profesores tienen, en todo ello, una oportunidad de oro para mejorar la experiencia educativa
de los niños, creando un entorno en el que estos pueden sacar provecho de la tecnología
informática para ampliar sus capacidades físicas y mentales.
La expresión flexibilidad finita define todo aquello que es posible hacer en el contexto de las
capacidades humanas actuales. Por ejemplo, gracias al nivel de mando y de control posibilitado
por los ordenadores, hemos sido capaces de lograr la indudable hazaña de llevar al hombre a la
Luna.
El gobierno y las grandes empresas fueron los primeros en usar operadores a lo grande para
gestionar sus operaciones. En un principio, lo que interesaba era el control de los datos, como
registros de empleados, nominas, contabilidad, etc. Los sistemas expertos comenzaron a hacerse
con el conocimiento de los expertos, con el fin de que sus conocimientos sobre la materia
quedaran a resguardo y se copiaran para que otros lo aprovecharan.
La eficiencia y la productividad que resultan de una buena gestión de la fabricación integrada por
el ordenador conducen inevitablemente a un mayor beneficio económico.
La gente con más dificultades en la que tiene menos capacidad para adaptarse y seguir hacia
delante; ahí es donde puede intervenir la educación. Pero también hay que preguntarse cómo
puede de la sociedad en su conjunto adaptarse a esas nuevas realidades generadas por la
incorporación de la informática en los entornos laborales.
Los sistemas informáticos son parte fundamental del cambio en el mundo del trabajo; lo que falta
preguntarnos es si nuestras estructuras sociales son suficientemente flexibles para adaptarse a
este cambio sin que ello suponga graves conflictos sociales.
¿Qué implicaciones tiene este cambio en el mundo laboral para la educación? Es necesario decir
que las sociedades más preparadas para sobrevivir en el futuro sean las que garanticen a sus
ciudadanos el derecho al libre acceso a una oportunidad educativa para toda la vida. Los
ordenadores y las tecnologías informáticas van a ser un componente cada vez más importante de
esa oportunidad educativa.
Los ordenadores y las comunicaciones (C&C) ha acelerado la llegada de las realdades expuestas en
Las aldea global, de Marshall McLuhan. Estas nuevas realidades están definidas del siguiente
modo:
Al contrario de lo que dicen los escépticos acerca de la tecnología aliena a las personas, Naisbitt
observo que la alta tecnología, directa o indirectamente, puede acercar más a las personas y
estrechar el contacto entre ellas. Por ejemplo, las telecomunicaciones han reducido el mundo al
tamaño de una aldea, han acercado el mundo a nuestras puertas.
Los ordenadores, según parece, también son capaces de producir ciertos resultados sorprendentes
y conmovedores en cuando a “alta tecnología/ alta comunicación”
LA REVOLUCIÓN INFORMÁTICA
La palabra revolución suena fuerte. Significa una “gran convulsión” o un “cambio completo de
perspectiva, costumbres sociales o circunstancias”, de acuerdo con lo indicado en un diccionario.
Otro diccionario más señala que “revolución es un cambio completo o radical del tipo que sea.
El término “revolución” es relativo
Un tiempo marco para la revolución no tiene cabida dentro de las definiciones que acabamos de
dar. Al fin y al cabo, el tiempo es relativo en función de la percepción que cada quien tiene de los
acontecimientos. También debe ser relativo con respecto a la naturaleza de la sociedad, que ha
sufrido los efectos de ese cambio “cambio completo”, así como con el tipo de cambio que se
produce.
Por otro lado, muchísimas personas, quizá incluso el 70 por 100 de la población mundial, apenas
han percibido el impacto de la revolución tecnológica que ha supuesto la informatización.
El cambio que ha hecho posible la tecnología informática, desde los tiempos en que John Vicent
Atanasoff inventara, en 1939, el ordenador eléctrico digital, ya ha transformado a las sociedades
que han hecho uso de ella. A pesar de ello, los efectos de la informática en nuestra sociedad
apenas han comenzado a sentirse.
Las escuelas también tiene este problema: necesitan plantearse si deben comprar hoy y ahora un
equipo nuevo y, por tanto, ofrecer ya a sus alumnos la oportunidad de disfrutar de las ventajas
que aporta el aprendizaje por ordenador, o, por el contrario, deben esperar uno o dos años más
para aprovechar la mayor potencia de máquinas más nuevas.
Los ordenadores coordinan la planificación de los diversos proyectos que se iniciaron para
desarrollar la tecnología que llevaría a los astronautas a la Luna.
Los ordenadores han revolucionado la tecnología médica. Están insertos en los marcapasos para el
corazón, programadas para monitorear y ajustar el latido irregular y que el ritmo sea la adecuada.
Del mismo modo que la revolución crea el cambio, también genera caos. Un concomitante
importante de la revolución informática ha sido una explosión de información que amenaza con
terminar abrumando a cada paso cuando hace falta tomar una decisión.
Con mucha frecuencia se emplean los términos dato e informativo indistintamente. Pero los
profesores saben, mejor que nadie, que es muy posible aprender hechos o acontecimientos sin
entender cómo se conectan como conceptos coherentes.
De cualquier manera, y afortunadamente, mucho antes del 2005 existirá una tecnología de
almacenamiento de datos capaz de manejar el tipo de volumen de datos generados por la estación
espacial.
Para cuando la estación espacial sea una realidad, esa densidad para el almacenamiento de datos
procederá insignificante. Por tanto, la tecnología informativa va a seguir su rumbo de acuerdo con
su propio éxito como un perro que persigue su cola.
Información y riqueza
En la sociedad preindustrial, le fuente de la riqueza era la tierra; más tarde, en el siglo XVIII, la
revolución industrial provoco un viraje hacia el capital como la fuente principal de riqueza.
A continuación se presenta una serie de preguntas clave para comprender y anticipar el papel de
los ordenadores en escenarios educativos que reflejan las nuevas realidades de la sociedad de la
información:
¿Qué van a desempeñar los profesores en las escuelas en las que una gran parte del
aprendizaje se adquiera mediante ordenador?
¿Es probable que las escuelas, en cuanta entidad física, desaparezcan en la medida en que
los alumnos puedan acceder a los sistemas de aprendizaje desde sus casas?
¿Hasta qué punto es posible utilizar los ordenadores para controlar el proceso mediante el que
una persona adquiera el conjunto de la información, que se espera adquieran los estudiantes
desde la educación infantil hasta la universidad?
Primero, no existe nada parecido al control absoluto, puesto que ello supondría una perfección
que es una contradicción en sus propios términos con respecto a un mundo imperfecto.
El gobierno, las empresas y la industria avala el hecho de las economías y la eficiencia en general
están ineludiblemente basadas en el control. También la calidad está basada en el control, y hay
más probabilidades de lograrla cuando todas las personas implicadas en la producción de un
producto final participan más activamente en el logro de su excelencia.
Si aplicamos todo esto a la clase, el control es fundamental para que tengamos éxito con los
estudiantes. Cuando enseñamos, estamos buscando la excelencia en la calidad, tanto en nuestro
desempeño como en el suyo.
¿Qué papel van a desempeñar los profesores en las “escuelas” en las que gran parte del
aprendizaje se adquiere mediante ordenador?
La multitud de las aplicaciones informáticas orientas hacia el aprendizaje, que se han desarrollado
para la educación escolar pueden ayudarte en tu tarea de profesor al quitarte el peso principal
que supone la responsabilidad de la transferencia de los conocimientos. Después de todo,
aprender es responsabilidad de cada alumno.
Los aspectos de ese “modelo de educación diferente” se comentan a lo largo de todo este libro.
Sin embargo, la manera como funcionan las escuelas no puede cambiar de la noche a la mañana.
Ni siquiera toda la tecnología del mundo puede transformar la educación si la gente que la tiene
bajo su mando no entiende el cambio ni toma la iniciativa para realizarlo.
Los investigadores hicieron un seguimiento de una clase en la que la informática estaba muy
integrada en el currículum y se dieron cuenta de que, aparentemente, el profesor no tenía mucho
que hacer.
¿Es probable que las escuelas, en cuantas entidades físicas, desaparezcan en la medida en que
los estudiantes puedan acceder a los sistemas de aprendizaje desde sus casas?
En algún momento, quizá, las escuelas estarán en línea, aunque no por el momento. En realidad,
esta idea no es nada nueva. A nivel de adultos, la universidad abierta de la British Broadcasting
Corporation, que funciona desde hace 30 años, ha ofrecido para alumnos sin licenciatura
programas educativos destinados a proporcionarles títulos académicos reconocidos. El uso de
programas como CLASSMATE, de DIALOG, está permitiendo que los alumnos tomen contacto con
una amplia variedad de sistemas de recuperación de información en línea.
Es previsible que en un futuro no muy lejano, cada hogar cuente con un centro de información y
no tanto con centro de entretenimiento. La televisión, el videófono, el sistema de sonido y el
ordenador, estarán coordinados dentro de una unidad integrada. Tenemos que esperar que, en
mucho tiempo, ese tipo de escuelas sean no la excepción sino la regla .