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Primer asesinato-
Relató que Erika y él se encontraban en la cocina cuando llegó el
pequeño Erik, le dijo que se había orinado en la cama, dijo que ella
molesta, le dio un golpe en la cabeza y tomó un cuchillo diciéndole
“si me quieres mátalo” “Pero yo no lo hice, luego ella tomo el cuchillo
y lo mató” –
Segundo asesinato-
Posteriormente, declaró que tras el primer asesinato, se
encontraban en la recamara de la madre y escucharon los pasos de
la pequeña de 3 años: “Ahí estábamos sentados encima de un
tendido en el piso, a un lado del baño, estuvimos sentados ahí como
diez minutos empezamos a escuchar taconazos en los escalones de
madera, Erika tomó una de las cuerdas e hizo un nudo en uno de los
extremos. Bajó la hermanita y Erika se asomó por la puerta del cuarto
y dijo -Ven, beba, ven, te voy a enseñar un nuevo juego para que lo
juegues tú, vamos a jugar al perrito- le dijo: ‘Ponte como perrito’ La
niña se puso de rodillas con las manos en el piso ‘Aquí tengo la
correa’ le dijo Erika a la beba, se la pasó por la cabeza y se la puso en
el cuello y empezó a estirar con fuerza. Se sentó encima de la niña y
siguió estirando mucho tiempo, la niña dejo de moverse. Erika se
paró, levantó a la niña agarrándola del cordón y la metió al clóset, le
quito la cuerda y la tapó, le pusimos una toalla encima”
¿Coincidencia?
Frías declaraciones
Sin duda alguna, de las cosas que más llamó la atención en el caso,
es la actitud de frialdad con la que Tere Coss y Erika Peña hablaban
sobre la muerte de sus dos familiares. -die Los medios de
comunicación en diversas ocasiones argumentaron que no parecía
que fueran a careos a los juzgados sino a pasarelas de moda. Estaban
más preocupadas porque Santoy había ventilado la indelidad de la
madre a la hija que por el asesinato de los pequeños, armaban los
testigos.
Rumores en torno al caso
No faltaron los mitos que rodearon el asesinato de cumbres: Hay
quien dice que se trató de una ofrenda de una secta, ya según
algunos vecinos aseguraban que a la casa de Monte Casino, llegaban
políticos, funcionarios, abogados y artistas ataviados con túnicas
negras Otro rumor es que los niños asesinados no eran hijos de
Gonzalo Peña, sino de un prominente empresario, y que por
venganza de la fortuna que recibirían los niños aun y cuando no
estaban reconocidos, su hermana decidió acabar con sus vidas.
11 años después del Asesinato de Cumbres
Diego Santoy.- a pesar de estar recluido, se casó con una de sus
simpatizantes, una chica que creía en la inocencia de Diego y que
además le dio un hijo. Posteriormente se divorció sin embargo sigue
teniendo una buena comunicación con su familia.
Erika Peña.-
Salió librada de la justicia y se fue a estudiar lejos de Monterrey, hace
tres años contrajo nupcias en Guanajuato.
Tere Coss.
Se fue a vivir al extranjero, remodeló y vendió la casa de cumbres en
donde se cometieron los asesinatos, dejó de trabajar en los medios
y volvió a casarse.