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Psicothema, 1997. Vol. 9, nº 3, pp.

569-585
ISSN 0214 - 9915 CODEN PSOTEG

ENTREVISTA A NOAM CHOMSKY


Camilo J. Cela-Conde y Gisèle Marty
Universidad de las Islas Baleares

1. Usted ha mencionado muchas veces que existe de que otra criatura tiene una
que la idea cartesiana acerca de la capacidad mente como la nuestra. Son éstas las mani-
de utilizar signos lingüísticos para expresar festaciones de la segunda sustancia, la res
pensamientos libremente formados supone cogitans, en la metafísica cartesiana.
un excelente enfoque para comprender lo Es posible que Descartes conociera el
que es el lenguaje humano. Pero hay otra trabajo de Juan Huarte, quien poco antes
forma de considerar el cartesianismo: la que había enfatizado el “poder generativo” de la
sostiene el funcionalismo cognitivo cuando inteligencia humana ordinaria que permite a
propone un dualismo entre estructuras bio- las mentes activas “asistidas sólo por el su-
lógicas y funciones mentales. Por decirlo en jeto, sin la ayuda de ningún Cuerpo, produ-
palabras de Fodor, “es una especie de acci- cir miles de Conceptos de los cuales nunca
dente el que los sistemas psicológicos resul- habían oído hablar”. Huarte prosiguió dis-
ten estar encarnados en sistemas biológi- tinguiendo esta capacidad humana única y
cos”. compartida, infinita en su alcance, de otras
¿Es posible ser “cartesiano” en el primer formas de creatividad aún mayores que, se-
sentido y no en el segundo, como parece in- gún él, no constituyen unas propiedades hu-
dicar el programa minimalista? manas comunes. Algunas ideas similares
Noam Chomsky.– Se puede interpretar el fueron ampliamente desarrolladas en años
concepto “cartesiano” de varias maneras, posteriores, especialmente en la época ro-
centrando la atención en uno u otro compo- mántica.
nente de las ideas que fueron desarrolladas Esas observaciones e intuiciones básicas
o influenciadas por Descartes. Una observa- parecen bastante razonables, y también sig-
ción que jugó un papel significativo en el nificativas. Pero pueden ser reexpresadas sin
pensamiento cartesiano es la de que el len- contar con el dualismo metafísico que des-
guaje humano tiene aspectos “creativos”. truyó Isaac Newton a través de la demoli-
Descartes y sus sucesores argumentaron que ción que hizo de la “filosofía mecánica”.
estos “aspectos creativos del uso del len- Newton nos dejó con una imagen del mundo
guaje” (es una expresión mía, no de ellos) que es “antimaterialista”, que confía en
no pueden ser explicados en términos mecá- “fuerzas espirituales”, como dice de manera
nicos y proporcionan la evidencia más clara caricaturesca, pero captando el punto esen-
cial, Margaret Jacob. La propia postura de
Newton sostenía, como ha concluído Ale-
Correspondencia: Camilo J. Cela-Conde xander Koyre, que “una física puramente
Departamento de Filosofía
Universidad de las Islas Baleares (Spain)
materialista o mecánica es imposible”. Des-
E-mail: dflccc0 @ps.uib.es de entonces no ha habido, en mi opinión,

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ninguna formulación coherente del dualismo esto es cierto si al hablar de X nos referimos
metafísico o del problema mente/cuerpo. a un sistema planetario, o las propiedades
Es posible reconstituir un cierto tipo de químicas, o a la genética, o a las funciones
dualismo de una forma diferente: de la ma- mentales, o a cualquier otra cosa.
nera que ustedes mencionan, por ejemplo. Supongamos que tenemos dos teorías de
Es decir, el dualismo inducido por la ciencia las funciones cognitivas, y se descubre que
cognitiva teórica y la filosofía de la mente. sólo una de ella es compatible con las es-
Supongamos que estamos investigando al- tructuras cerebrales. No tendría ningún sen-
gunas de las funciones del cerebro (llamé- tido dejar de lado esta evidencia basándose
moslas “funciones mentales”) aisladas de en que, a la hora de estudiar las funciones
las propias estructuras del cerebro. Este pro- mentales, estamos haciendo abstracción de
cedimiento puede ser perfectamente legíti- las estructuras cerebrales.
mo y razonable, pero tendríamos que ser En el mundo post-Newtoniano, no pare-
cautelosos y no sacar de él unas conclusio- ce haber alternativa coherente a la sugestión
nes insostenibles. El procedimiento no se de John Locke de que, de la misma manera
restringe a las “funciones mentales”; hay que el movimiento tiene efectos “que de
otras propiedades del mundo que pueden ser ninguna manera podemos concebir que el
estudiadas de manera similar, y que lo son movimiento sea capaz de producir”, tam-
corrientemente. De este modo se puede es- bién algunos tipos de materia organizada
tudiar el sistema solar como un sistema de pueden tener una “facultad del pensamien-
masas puntuales dentro de la “mecánica ra- to”. Al igual que concluyeron otros autores
cional”, que es básicamente una rama de las en el siglo siguiente, estas propiedades “lla-
matemáticas. Y se pueden estudiar las pro- madas mentales” son el resultado de la “es-
piedades químicas aisladas de las propieda- tructura orgánica” del cerebro de igual ma-
des de las partículas en movimiento; de he- nera que la materia “es dueña de poderes de
cho, ésta es la manera como se estudiaba la atracción y repulsión” que actúan a distan-
química antes de que la revolución de la te- cia (La Mettrie, Joseph Priestley). Podemos
oría cuántica hiciera posible la unificación decir que es una “especie de suerte” que la
de la química con un tipo radicalmente dife- materia organizada presente “poderes de
rente de física. La química logró sus “triun- atracción y repulsión”, o propiedades de afi-
fos al margen de la ciencia física última- nidad química, o “fenómenos psicológicos”.
mente emergente” subrayó un historiador Pero esto me parece una manera errónea de
muy importante del tema (Arnold Thac- expresar el hecho de que las verdades empí-
kray). Eso mismo es cierto para la genética ricas no se sostienen a priori.
anterior al descubrimiento de los mecanis- Me parece que el planteamiento “cogniti-
mos implicados en ella, y hay muchos otros vo funcionalista” extrae del cartesianismo la
ejemplos. propiedad equivocada: el dualismo que te-
No pienso que los aspectos mentales del nía sentido como hipótesis científica cuando
mundo sean diferentes en este aspecto de Descartes lo formuló pero que, como mos-
otros. Si bien es posible, y a veces útil, es- tró Newton, no puede sostenerse. El funcio-
tudiar ciertas propiedades de un sistema X nalismo cognitivo reconstruye una perspec-
de manera abstracta, sería una forma ina- tiva dualista de una forma metodológica-
ceptable de dogmatismo, en mi opinión, el mente útil como medio de investigar el
rechazar en principio las intuiciones acerca mundo en el estado actual de nuestro cono-
de estas propiedades que puedan derivarse cimiento, como sucedió en el caso de la quí-
de otras maneras de estudiar el sistema X. Y mica durante la mayoría de su historia mo-

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derna, o de la genética pre-ADN, etc. Pero, sólo podemos dar por sentado que esos fe-
en mi opinión, eso no debería ser considera- nómenos “llamados mentales” son el resul-
do más que como algo temporalmente con- tado de la “estructura orgánica” del cerebro.
veniente, a lo que no podemos dotar de nin- En ese sentido los fenómenos mentales son
guna importancia metafísica. muy parecidos a las propiedades químicas,
Así que en respuesta a su pregunta, pien- ópticas, eléctricas o de otro tipo. No impli-
so ahora, y siempre he pensado, que es po- can cuestiones fundamentales de principio,
sible -y de hecho bastante apropiado - ser sino simplemente cuestiones de hecho. La
“cartesiano” en el primer sentido que uste- distinción software/hardware es mucho más
des mencionan, pero no en el segundo. La obscura y plantea todo un tipo de problemas
conclusión se aplica tanto al programa mi- que no surgen cuando estamos consideran-
nimalista como a todo mi trabajo anterior. do un sistema natural y sus propiedades. La
2. En su artículo “Language and Nature” distinción software/hardware no es una pro-
(1995), sostiene usted que el “dualismo me- piedad del mismo aparato, sino que depen-
todológico” es más pernicioso aún que el de más bien del propósito del diseñador, del
“dualismo metafísico”. ¿A qué tipo de dua- uso estándar, y de otros factores que no apa-
lismo pertenece la metáfora de la computa- recen cuando estudiamos un sistema natural
dora? como es, en particular, el cerebro y sus pro-
N.C.– La metáfora de la computadora es piedades mentales.
inofensiva, y quizá incluso útil, si se admite En pocas palabras, la metáfora de la
que no es nada más que una metáfora. Si se computadora es inocente si se adopta como
intenta algo más que esto, creo que caemos una conveniencia, pero puede ser engañosa
en el peligro del “dualismo metodológico”, si se toma demasiado en serio.
término con el que entiendo la exigencia de 3. El tipo de computación mental que ex-
dejar de lado las suposiciones normales de plica usted en su programa minimalista re-
la indagación racional cuando se investigan cuerda al propio del conexionismo. Quisié-
los aspectos mentales del mundo. Déjenme ramos saber si se trata de una coincidencia o
subrayar que nadie (al menos nadie entre si eso refleja relaciones más profundas.
aquellos de los que estamos discutiendo N.C.– Las teorías conexionistas estudian
aquí) defiende el dualismo metodológico. ciertas propiedades de las estructuras del ce-
Pero a menudo encontramos en la práctica rebro en abstracto. Como cualquier otra te-
manifestaciones así, como he intentado ilus- oría, tienen que demostrar su legitimidad en
trar en otro lugar. En mi opinión, ésta es una términos del poder de comprensión y expli-
cuestión que está extendida por toda la cien- cación que ofrecen. En el caso del lenguaje,
cia cognitiva teórica y la filosofía de la no hay mucho que discutir: existen pocos
mente contemporáneas. resultados significativos, que yo sepa. Se
A veces ayuda a la imaginación el pensar han hecho muchos esfuerzos por intentar
en las funciones mentales como “software” modelar algunos aspectos marginales de la
y en el cerebro como “hardware”, de mane- adquisición del lenguaje en estos términos
ra que podemos decir, así, que la psicología (como, por ejemplo, la adquisición de los
(incluyendo la lingüística) estudia el soft- verbos irregulares en inglés). Los resultados
ware, mientras que las ciencias del cerebro no son concluyentes e incluso si se pudiese
estudian el hardware. Pero por las razones demostrar algo no está claro cual sería su al-
que ya he mencionado, eso tiene que ser cance.
considerado todo lo más como algo útil. El Hay algunos elementos del uso del len-
cerebro es un objeto del mundo natural, y guaje que podrían bien prestarse a la inves-

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tigación en términos conexionistas. Supon- es una propiedad fundamental y elemental


gamos, por ejemplo, que Peter es un ha- de los sistemas del lenguaje; una de las po-
blante de “mi lenguaje” (entendiendo por tal cas operaciones admisibles toma dos obje-
un lenguaje parecido al mío, por medio de tos ya formados, liga uno al otro y constru-
algún criterio que varía con las circunstan- ye un nuevo objeto con las propiedades del
cias y las intenciones). Si me encuentro con blanco de atracción. Quizás se puedan ex-
Peter, mi sistema sensorial se adapta rápida- presar propiedades similares mediante un
mente a su habla y soy capaz de interpretar modelo conexionista lo suficientemente in-
sus expresiones gracias a los mecanismos trincado, quizás no; el tema está bajo deba-
de mi propio sistema lingüístico; entiendo te. Cualquiera que sea su resultado, de mo-
que está diciendo lo que yo diría por medio mento parece razonablemente claro que una
de unas expresiones que son la contraparti- propiedad fundamental y elemental de los
da de lo que oigo bajo esta “transducción”. modelos computacionales es, en el mejor de
Estas experiencias familiares cotidianas los casos, una propiedad extraña y comple-
pueden extenderse a un campo bastante am- ja de los modelos conexionistas, una propie-
plio y no se explican trivialmente de ningu- dad inesperada y antinatural (aun cuando
na manera. Es posible que los sistemas de sea formulable).
procesamiento periféricos de carácter cone- 4. Quienes sostienen la teoría de la iden-
xionista jueguen un papel en una adaptación tidad mente/cerebro son criticados a menu-
muy rápida como ésta. Se pueden imaginar do desde este punto de vista: un acto simple,
otras posibilidades semejantes, y puede ser como el de coger un libro que está sobre una
muy bien que merezca la pena proseguir mesa, implica la necesidad de la “decisión”
con ellas. de coger el libro (algo similar al nous poie-
En la literatura especializada existen mu- ticus de Aristóteles). ¿Cree usted que debe-
chas discusiones acerca de lo que significa mos postular la existencia de en el cerebro
el que una descripción de las funciones cog- de algo más que:
nitivas en términos de redes neuronales de-
muestre ser factible. La mayor parte de esta I. La percepción del libro
discusión me parece que ilustra de nuevo el II. El recuerdo de las emociones ligadas
dualismo metodológico. Dudo que la litera- a las lecturas previas
tura de la embriología incluya muchos de- III. La orden motora de coger el libro?
bates sobre lo que significa el que unos mo-
delos no estructurados, con propiedades N.C.– Soy escéptico acerca de estas for-
desconocidas, sean capaces de describir el mulaciones en todos los respectos a los que
desarrollo de los organismos sin apelar a las se refieren. Para empezar, una tesis de la
construcciones complejas en términos de identidad mente/cerebro presupone de algu-
concentración de sustancias químicas, pro- na manera el distinguir entre mente y cere-
grama interno de células, producción de bro. No conozco ninguna vía sensata de ha-
proteínas, etc. cer la distinción, excepto en el sentido irre-
En cuanto al programa minimalista, me levante ya mencionado: podemos estudiar
parece tan alejado en su concepción de la ciertas propiedades del cerebro “llamadas
arquitectura conexionista como lo han esta- mentales” en abstracción de otras, como una
do otros modelos computacionales del len- conveniencia. En segundo lugar, no hay ra-
guaje. Por mencionar una de las propieda- zón alguna para creer que una acción tenga
des más simples, el programa minimalista, que ser precedida de una “decisión” de em-
como otros, asume que la componibilidad prenderla. Puedo coger un libro de la mesa,

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o decir que hace demasiado frío para nadar, miento, utilizando las “capacidades para ha-
sin antes tomar una decisión para ejecutar la cer ciencia” que son un componente de la
acción. mente humana del que entendemos tan poco
Un informe de la conducta en tales tér- como de la mayoría de los otros temas com-
minos mezcla diferentes formas de descrip- plejos. Otra parte de nuestra vida intenta
ción y explicación de una manera que pro- comprender lo que está pasando alrededor
ducirá obligatoriamente confusión y no luz. nuestro en los únicos términos que nuestro
En el uso ordinario común, hablamos de entendimiento compartido ordinario lo per-
gente que toman decisiones y actúan a par- mite.
tir de estas decisiones, aunque también ha- 5. Aun así, no parece que sea del todo
blamos de cometas que apuntan hacia la tie- imposible expresar un correlato neurobioló-
rra pero (por suerte) no aciertan, y de olas gico de lo que podría ser una “decisión”, de
rompiendose contra la orilla. Las ciencias algún tipo de decisión al menos. El descu-
naturales no intentan entender las descrip- brimiento del “slow negative DC-potential”
ciones intencionales ordinarias en el caso de que aparece en ciertas áreas corticales im-
los cometas y de las olas, y hay pocas razo- plicadas luego en actos intencionales ha da-
nes para esperar que las ciencias, si alguna do lugar a la consideración del llamado “re-
vez llegan tan lejos como hasta la acción adiness potential” o “Beretischaftspoten-
humana, intenten incorporar vías del senti- tial” (BP) (Kornhuber and Deecke, 1965).
do común para describir la conducta racio- Deecke (1996) ha sugerido que ese descu-
nal y apropiada. Hay que añadir que esta- brimiento puede contribuir a potenciar los
mos ante un SI condicional muy grande: el estudios de la filosofía de la mente “pre-ro-
objetivo queda lejos, y quizás sea inalcanza- lándicos” (motivación, voluntad, previsión)
ble por razones relacionadas con la capaci- frente a los “retro-rolándicos” (percepción,
dad cognitiva humana; algo que, si es ver- cognición). Quizá no sea posible todavía
dad, no tendría que sorprender a nadie que “explicar la conducta” en esos términos, pe-
piense que los humanos son parte del mun- ro parece que estamos más cerca de enten-
do orgánico y no unos ángeles. derla de lo que Newton estaba respecto del
En el uso ordinario describimos la acción carácter “semiespiritual” de la electricidad,
humana en términos de lo que la gente per- ¿no lo cree así?
cibe, recuerda, intenta, decide, etc. Las cien- N.C.– Las explicaciones acerca de cómo
cias han llevado a cabo un trabajo bastante andan las cucarachas suelen formularse en
interesante acerca de la percepción y de la términos de la organización de unidades
organización de la actividad motriz, pero no neuroconductistas (osciladores, servomeca-
alcanzan -y ni siquiera contemplan- la ex- nismos, etc.) Si son correctas, deberían exis-
plicación de la conducta. En mi opinión per- tir los correlatos neurobiológicos correspon-
sonal, la especulación no es muy útil en es- dientes. Algo similar debería ser cierto en el
te asunto, no más útil de lo que hubiera sido caso de la organización de la actividad mo-
hace dos siglos especular acerca de la natu- tora humana. Esas explicaciones incluyen
raleza de los elementos químicos (que La- por lo común unas nociones que se relacio-
voisier pensaba que nunca llegaríamos a co- nan de forma vaga con aquello en lo que
nocer), el extraño “semi-espiritual” carácter pensamos como planes, intenciones y cosas
de la electricidad que tanto intrigó a New- así. Los teóricos toman prestados a veces
ton, etc. El mundo es como es. Una parte de términos del uso ordinario como “plan” e
nuestra vida intenta adquirir una compren- “intención”, al igual que los físicos hablan
sión teórica de su naturaleza y funciona- de energía y líquidos y los científicos de la

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Tierra de ríos y montañas. Pero igual que en Nos encontramos ante el clásico proble-
los otros casos, no veo ninguna razón para ma de la elección del acto, de la voluntad y
esperar que el significado de las palabras to- la decisión. Supongamos que sabemos todo
madas en préstamo se relacionen con el sig- acerca de “cómo se mueven los miembros
nificado ordinario que tienen. O, por decir- de los cuerpos de los animales bajo el man-
lo de manera diferente, que las nociones de do de la voluntad”, como dijo Newton cuan-
sentido común den lugar a explicaciones te- do examinaba los misterios que le confundí-
óricas. Otros autores piensan de manera dis- an. Parece que, aun así, todavía estaríamos
tinta y ven el asunto como significativo en delante del problema tradicional de “cómo
este caso particular (aunque no en otros), in- decide la voluntad” a la hora de dar una or-
cluso crucialmente significativo; por ejem- den u otra; por ejemplo, al poner el dedo en
plo, los “realistas intencionales”, si entiendo la llama pese a los factores que nos “incitan
bien sus argumentos. Pero no estoy conven- e inclinan” a hacer lo contrario.
cido de ello. Ha habido muchos esfuerzos por supues-
El progreso en el estudio de la organiza- to, incluyendo algunos muy sofisticados e
ción de la conducta nos deja todavía muy le- intrigantes, encaminados a mostrar que el
jos de la explicación de la conducta. Las ra- problema está mal formulado y no se tiene
zones de que sea así tienen que ver con los en pie o que tiene ésta o aquella solución.
fenómenos de la experiencia ordinaria tam- Personalmente creo que el problema básico
bién presentes en el corazón del pensamien- continúa siendo el mismo que siempre fue.
to cartesiano, que distinguía entre máquinas Por replantear las cuestiones tradiciona-
que están “obligadas” a actuar de un cierto les en la terminología que ustedes sugieren,
modo (a partir de un estado interno y un am- si se encontrasen los correlatos neurobioló-
biente externo) y humanos que estaban sólo gicos de algo parecido a una “decisión”, eso
“incitados e inclinados” a actuar así pero dejaría sin contestar aún los problemas tra-
(bajo las mismas condiciones) podían deci- dicionales de la elección y la acción. Toda-
dir otra cosa. Por poner un ejemplo cartesia- vía no se ha abordado la cuestión de cómo
no típico, puedo estar muy motivado (“inci- “la voluntad”, incluso superando las moti-
tado e inclinado”) a retirar mi dedo de la lla- vaciones más fuertes, lleva a cabo una par-
ma, pero puedo elegir el quemarme. Puedo ticular decisión y no otra.
incluso poner el dedo en la llama adrede sin Esas cuestiones no se alcanzan mediante
que medie una decisión consciente, y sólo el estudio empírico de la organización de la
llegar a reconocer lo que estoy haciendo co- conducta, incluso cuando éste hace uso de
mo parte de la acción. Sea lo que sea que nociones similares a “plan”, “intención”,
suceda, la acción motriz tiene que estar or- “decisión”, “motivación”, etc. En su revi-
ganizada (inconscientemente) en algún pun- sión clásica, C.R. Gallistel escribe que “la
to. Es en ese punto donde comienza la in- motivación, en el sentido en que uso el tér-
vestigación científica. Esta puede postular mino aquí, se refiere a esos procesos del sis-
algo parecido a motivaciones, fines, etc., y tema nervioso central que organizan la con-
buscará ciertamente los correlatos neuroló- ducta de forma que, en su conjunto, los ac-
gicos de lo que queda implicado en la orga- tos separados del animal tienden hacia un
nización de la conducta. Pero aquello que punto culminante, o una acción, o una con-
corresponde a la elección (posiblemente dición” (Gallistel, 1980, p. 321). Eso está
perversa) de la acción, es algo que queda en bien, pero también existe un problema apa-
otro sitio, tal como argumentaron, no sin ra- rentemente distinto y no tomado en cuenta:
zón según creo, los cartesianos. la elección de la acción que inicia esos pro-

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cesos y no otros. La brecha continúa siendo opuesta: estamos mucho más lejos de la
la misma, tal como veo las cosas, incluso si comprensión de la conducta. Las propieda-
se encuentran los correlatos neurobiológi- des que Newton consideraba “semiespiri-
cos. tuales” son reales: en términos de Newton,
El estudio de la organización de la con- la fuente de la electricidad no pierde peso y
ducta y sus correlatos neurobiológicos in- la electricidad tiene efectos detectables, así
vestiga cómo intervienen los mecanismos que la electricidad tiene aspectos materiales
internos en el acto de tomar una taza de en- e inmateriales, una conclusión que él inter-
cima de la mesa, pero no alcanza la cuestión pretaba dentro de sus teorías físicas madu-
de cómo elijo el hacer eso en lugar de em- ras en términos de la herejía arriana (New-
pujar la taza fuera de la mesa —cosa que ton estaba interesado en la “gran teoría”, no
podría hacer incluso si acabase seriamente sólo en la física, por supuesto). Por el con-
herido al realizarla. Me parece que estas trario, no sabemos que exista algo como la
cuestiones se unen, en cierto modo, a las del “explicación de la conducta”, según me pa-
“aspecto creativo del uso del lenguaje”. Y al rece. Sin embargo, no cabe duda de que hay
igual que en ese caso quedan más allá de mucho por aprender acerca de la organiza-
nuestra capacidad de conocimiento, por el ción de la acción. Quizá algo como las deci-
momento al menos y quizás para siempre, siones, los planes, las intenciones, entren de
como a veces pensó Descartes. No tenemos hecho en las explicaciones teóricas dentro
ningún programa de investigación serio que de algún nivel apropiado. Por decirlo una
se refiera a esos problemas, al menos que yo vez más, podemos muy bien descubrir que
sepa. las acciones no necesitan estar precedidas
No me parece que haya ningún motivo de ninguna “decisión” o “intención” en nin-
razonable para creer que la conducta está gún sentido del término que se relacione ni
causada, en ningún sentido de “causa” que siquiera débilmente con el uso ordinario —
podamos entender, así que no hay ninguna lo que no quiere decir que no exista ningu-
razón para esperar que exista una teoría que na actividad cerebral relevante cuando la
explique cómo está causada. Puede que no acción (de alguna forma desconocida) se se-
exista ninguna “explicación de la conducta” lecciona y luego se planifica, se organiza y
capaz de ocuparse de esas cuestiones tradi- se ejecuta.
cionales de la filosofía de la mente, cuestio- 6. ¿Puede usted darnos una opinión acer-
nes que no pueden ser minimizadas fácil- ca de los estudios actuales (Crick & Koch,
mente, según creo. Por lo que hace a la su- Damasio, Penrose, Smythies, Freeman) so-
gerencia de que los filósofos de la mente bre la consciencia perceptiva? ¿Estamos ya
consideren “la motivación, la voluntad, la descodificando “pensamientos”?
previsión”, no entiendo qué quiere decir. La N.C.– No tengo ninguna opinión infor-
motivación y la voluntad (y en algunos ca- mada acerca de estos estudios, que he leído
sos la previsión) son algo que siempre he- con interés pero que no estoy en condicio-
mos tomado en consideración, así que los nes de evaluar. Por lo que puedo ver, esas
problemas básicos me parece que continúan investigaciones están encontrando algunos
estando donde siempre estuvieron. correlatos neuronales de lo que en términos
No quisiera llevar muy lejos la analogía intuitivos informales llamamos “pensa-
entre la comprensión de la conducta y la del miento” y “consciencia”. Pero el hueco es
carácter “semiespiritual” de la electricidad enorme, y los temas fundamentales que han
(en el caso de Newton), pero si hay que se- sido una fuente de perplejidad desde siem-
guir con ella deberíamos sacar la conclusión pre no se plantean. No digo esto como críti-

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ca, ni mucho menos. Tenemos que seguir muy específica. El resto del libro trata de
mediante la búsqueda científica todo lo le- enfrentarse con el problema proponiendo
jos que se pueda llegar, pero es importante los mecanismos que podrían ofrecer la in-
que los profesionales sean muy escrupulo- terpretación de un rango infinito de expre-
sos a la hora de describir su alcance. Eso es siones a partir de la experiencia limitada
cierto tanto si pensamos en los economistas que resulta suficiente para ponerlas en su
dando consejos sobre el transcurso del cre- lugar. Los trabajos siguientes introdujeron
cimiento y del desarrollo, en los científicos muchos cambios, a menudo radicales, pe-
investigando los mecanismos cerebrales y ro siguieron en esencia por el mismo ca-
las funciones cognitivas, o en cualquier otro mino.
caso. Sea cual sea el interés de estos logros, Personalmente yo prefiero usar el térmi-
un programa de ordenador que genera prue- no “sintaxis” para referirme a esos aspectos;
bas de teoremas en cálculos proposicionales otros usan el término “semántica”, que a mí
no resuelve el problema mente/cuerpo, una me gustaría reservar para el estudio de lo
gramática generativa no da cuenta del “as- que se llama a menudo las conexiones “len-
pecto creativo del uso del lenguaje” y el guaje-mundo”: más adecuadamente, desde
descubrimiento de la actividad neuronal que mi punto de vista, las conexiones entre el
correlaciona con la consciencia o la catego- lenguaje y otras partes del mundo, algunas
rización no supone “descodificar pensa- de ellas dentro del organismo (como son,
mientos”. presumiblemente, los órganos articulatorios
7. El programa minimalista parece in- y los sistemas conceptuales, entre otros), al-
cluir un mayor énfasis en los aspectos se- gunas fuera de él, como la computadora que
mánticos del lenguaje, apartándose, en cier- estoy usando.
to modo, de los aspectos sintácticos. ¿Puede Esta visión del lenguaje tuvo que ver con
este enfoque animarnos a buscar “universa- los universales lingüísticos, pero de una for-
les semánticos” del lenguaje humano? ¿Po- ma que difiere de otras aproximaciones an-
dría darnos algún ejemplo? teriores. En el marco de la gramática gene-
N.C.– No pienso que exista ninguna dife- rativa, los universales lingüísticos se toman
rencia de punto de vista si consideramos la como propiedades del estado inicial de la
sintaxis/semántica o los universales semán- facultad humana del lenguaje, y no como
ticos, aunque, naturalmente, la comprensión propiedades observadas en todas o la mayo-
de estos asuntos ha evolucionado con el ría de las lenguas. Ambos conceptos están
tiempo. relacionados, pero no son idénticos. Ls pro-
Desde un principio, el trabajo de la gra- piedades del estado inicial no se encuentran
mática generativa fue motivado principal- normalmente reflejadas directa e individual-
mente por unas cuestiones que llamamos mente: sus efectos se manifiestan en las len-
normalmente “semánticas”. Mi primer li- guas particulares, pero lo hacen típicamente
bro amplio, no publicado durante muchos a través de complejas interacciones que im-
años, fue Logical Structure of Linguistic plican las propiedades del estado inicial y
Theory (1955-56; publicado en parte en de la experiencia que les lleva a asumir una
1975). El capítulo introductorio esboza el u otra forma.
campo al que intenta dedicarse el trabajo: Considérese, por ejemplo, las frases (1)-
de manera decisiva, el hecho de que una (2)
persona que tiene una experiencia limitada
del lenguaje consigue entender de alguna (1) él cree que John es un genio
forma nuevas expresiones de una manera (2) su madre cree que John es un genio

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La frase (2) puede entenderse como que sos menos elementales que éste, se vuelve
la madre de John cree que él, John, es un ge- más difícil el formular los universales de la
nio. Pero la frase (1) no puede entenderse manera siguiente:
como que John cree que él, John, es un ge-
nio. En términos más técnicos, el pronom- (3) todos los lenguajes tienen la propie-
bre (que puede o no articularse fonética- dad P.
mente, dependiendo de la lengua) puede ser
referencialmente dependiente de “John” en Y no sólo más difícil, sino carente de sen-
(2), pero no en (1). La propiedad de la de- tido. La formulación (3) oculta el hecho de
pendencia referencial es llamada a menudo que las propiedades de las expresiones —in-
“semántica” porque juega un papel en lo cluida la forma como se entienden— son el
que significan las expresiones y en cómo resultado de la interacción de muchos facto-
son entendidas. Yo prefiero llamarla “sin- res, algunos de ellos derivados de la facultad
táctica” porque la investigación no alcanza del estado inicial del lenguaje y otros de la
aún las relaciones lenguaje/mundo; se limi- experiencia que induce cambios de estado en
ta a lo que “está en la cabeza”. Análoga- el “órgano del lenguaje”. Podríamos encon-
mente, deberíamos distinguir claramente la trarnos con los mismos problemas si preten-
investigación sobre la manera como los sis- demos buscar “universales”de la forma (3)
temas sensoriomotores relacionan las expre- en otros sistemas, como, por ejemplo, el sis-
siones con los sonidos del estudio de la in- tema fonético, o el sistema visual, o el siste-
formación que proporciona el lenguaje de ma de organización de la conducta motriz.
los sistemas sensoriomotores y cómo se Se puede dar una lista de muchos ejem-
construye mediante operaciones internas. plos de “universales” del tipo ilustrado, pe-
Preferiría reservar el término “fonética” pa- ro sería engañoso. Así, la propiedad del co-
ra la primera investigación y ver la última mando-c que entra en dependencia referen-
como parte de la sintaxis, en el sentido ge- cial juega también un papel importante a la
neral del término, incluida la “fonología”. hora de determinar la interpretación de ex-
Es importante tener en cuenta esas distin- presiones de muy diferentes tipos. Considé-
ciones. rense, por ejemplo, las expresiones (4)-(7):
Sean cuales fueren los términos que deci-
dimos usar, la dependencia referencial que- (4) John comió una manzana
da determinada en parte por las propiedades (5) John comió
de la expresión, en particular por la propie- (6) John es demasiado listo para coger a
dad formal llamada técnicamente “coman- Bill
do-c” que se aplica al pronombre y “John” (7) John es demasiado listo para coger
en (1) pero no en (2). Por lo que sabemos, el
que la dependencia referencial está determi- A veces se traducen directamente a otras
nada por el comando-c en la forma ilustrada lenguas, y otras veces no. No puede haber
por esos ejemplos es una propiedad univer- serias dudas acerca de que la interpretación
sal del lenguaje. queda crucialmente determinada por las
Podemos decir que uno de los “universa- propiedades del estado inicial de la facultad
les semánticos” es el de que para cualquier del lenguaje. Estas son “universales” en el
lenguaje L un pronombre no puede de- sentido del término que estoy considerando
pender referencialmente de un antecedente ahora, incluso si no pueden manifestarse de
con el que mantiene la relación de coman- ninguna forma sencilla en los lenguajes par-
do-c en L. Cundo vamos más allá, a los ca- ticulares.

Psicothema, 1997 577


ENTREVISTA A NOAM CHOMSKY

La distinción aparece aun más clara diferentes libros? ¿Se refiere el pronombre
cuando examinamos de cerca las interpreta- “lo” a algo abstracto o concreto? No hay res-
ciones de esas expresiones. Nos encontra- puesta para esas preguntas. Están mal plan-
mos con que (5) significa en términos gene- teadas. Peter y John se llevaron el mismo li-
rales, tal como esperaríamos, que John co- bro si adoptamos la perspectiva asbtracta al
mió algo no especificado: el objeto directo interpretar la palabra “libro” y el pronombre
“una manzana” que aparece en (4) se ha que depende referencialmente de él, y se lle-
perdido y “rellenamos el agujero” con algo varon libros distintos si adoptamos la pers-
al estilo de una referencia no específica. Pe- pectiva concreta. Tal como ilustra el ejem-
ro la analogía no se sigue en (6) y (7). La plo, no podemos adoptar ambas perspectivas
frase (6) significa algo parecido a (8), pero simultáneamente, pese a la aparente contra-
(7) no tiene, análogamente, el significado de dicción, usando el pronombre “lo” en un ca-
(9), sino el de (10). so desde la perspectiva abstracta y en el otro
desde la concreta. Encontramos propiedades
(8) John es tan listo que no cogerá a Bill así incluso en los casos más simples —nom-
(9) John es tan listo que no cogerá a nin- bres de sustancias como el agua, por ejem-
guna persona no especificada plo— y esas propiedades proliferan hacia si-
(10) John es tan listo que nadie podrá co- tuaciones considerablemente intrincadas
gerle cuando vamos más lejos.
La investigación acerca de cómo se en-
La “inversión” de la interpretación en el tienden las expresiones ha sido la fuerza di-
par [(8), (10)], que viola la analogía ilustra- rectora de la gramática generativa desde el
da en [(4), (5)] es sorprendente, y requiere principio, y lo continúa siendo. El programa
una explicación. En esta caso la explicación minimalista reformula, desde luego, el enfo-
no es trivial. Implica de forma crucial el co- que de alguna cierta forma en la medida en
mando-c, pero en interacción con otros prin- que asigna un papel más crucial a los “nive-
cipios invariantes del estado inicial de la fa- les de interfaz”, es decir, a los puntos de in-
cultad del lenguaje. No debe haber una for- teracción entre el órgano del lenguaje y
ma simple de expresar los “universales se- otros subsistemas de la mente/cerebro —
mánticos” de la forma (3). sistemas sensoriomotores y modos de pen-
Las expresiones más simples son las pa- samiento y entendimiento. Pero los elemen-
labras aisladas, “libro”, “casa”, “ciudad”, tos básicos continúan siendo más o menos
etc. Cuando investigamos sus significados, los mismos.
encontramos intrincadas y complejas pro- Se ha aprendido mucho, particularmente
piedades que los niños conocen sin una ex- en los últimos años, sobre los factores que
periencia relevante. Deben derivarse del es- determinan lo que significan las expresiones
tado inicial de la facultad del lenguaje y, por y cómo se entienden. Ha habido también
tanto, ser compartidas por todos los lengua- una buena cantidad de investigación pro-
jes humanos posibles. Por ejemplo, la pala- ductiva en la semántica del léxico, que re-
bra “libro” puede ser entendida de una forma vela muchas propiedades sorprendentes al
concreta o abstracta, Supongamos que la bi- estilo de las recién ilustradas en el caso de la
blioteca tiene dos ejemplares del Ulysses, palabra “libro”. Han sido éstas algunas de
Peter se lleva uno y John el otro. Peter lo en- las áreas más interesantes y vivas de la in-
cuentra muy inspirador y comienza a apren- vestigación en lingüística de los últimos
dérselo de memoria, pero John lo odia y ter- años. Pero no veo eso como un cambio del
mina por quemarlo. ¿Cogieron el mismo o énfasis desde los aspectos sintácticos a los

578 Psicothema, 1997


CAMILO J. CELA-CONDE Y GISÈLE MARTY

semánticos del lenguaje, sino más bien co- mántica” para referirse a las propiedades
mo una parte de la profundización en el co- morfológicas o entonacionales o al coman-
nocimiento de todos los aspectos sintácticos do-c, pese a que todos ellos tienen conse-
del lenguaje, usando ahora el término “sin- cuencias para las relaciones lenguaje-mun-
taxis” en su sentido más general (y tradicio- do. Esas propiedades se tienen convencio-
nal), es decir, referido a los objetos simbóli- nalmente por sintácticas. La propiedad de la
cos y sus propiedades, incluyendo en ellas “dependencia referencial” me parece que,
las propiedades que entran dentro de la for- en ese sentido, encuentra su sitio dentro de
ma como se usan. la sintaxis. E, incidentalmente, tiene poco
8. Ha hecho usted una formulación muy que ver en un sentido técnico con la re-
interesante de la “semántica” como un tér- ferencia: los principios trabajan aproxima-
mino que debería reservarse para denotar damente de la misma forma en pronombres
“las conexiones lenguaje/mundo”. También “referencialmente dependientes” en el caso
ha sostenido que la propiedad de la depen- de “el hombre alto” y en el de “el hombre
dencia referencial debería ser considerada promedio”, por ejemplo.
del todo “sintáctica” porque la investigación Pero sigamos el excelente consejo de Hu-
no alcanza aún las relaciones lenguaje/mun- me e intentemos ser claros respecto de “las
do; se limita a lo que “está en la cabeza”. cosas”, al margen de los términos que deci-
Sin embargo, como usted admite (y como damos utilizar. Asumamos, como sugieren
cualquiera debería admitir después del obis- ustedes, que entre “las cosas que hay en la
po Berkeley) el concepto de “lo que está en cabeza” están los sistemas conceptuales y
la cabeza” es ambiguo. Todo concepto está que algunos de sus elementos son concep-
en la cabeza, por supuesto, pero algunos de tos. Me gustaría llamar “sintaxis” al estudio
los conceptos se refieren cosas que están internalista de esos objetos, ya queden den-
fuera del organismo, como la máquina de tro de una lingua mentis, en el sentido de
escribir, y otros a las que están dentro, como Jerry Fodor, o de otro tipo de sistema. Pero
los sistemas conceptuales. ¿Sería una tarea de eso no se deduce que “todos los aspectos
sintáctica, entonces, todo lo que se refiriese del sistema conceptual [sean] sintácticos”.
a los sistemas conceptuales? ¿La teoría del Análogamente, el estudio de los elementos
conocimiento a priori de la metafísica kan- morfológicos cae dentro de la sintaxis, pero
tiana, por ejemplo? algunos aspectos de los sistemas morfológi-
N.C.– Hume dice en alguna parte que cos no son sintácticos: por ejemplo, el he-
“siempre que estemos de acuerdo acerca de cho de que la pluralidad tiene una interpre-
las cosas, no merece la pena discutir acerca tación semántica en los sustantivos (“los li-
de los términos”. El uso del término “se- bros están en el mostrador” y “los libros es-
mántica” para referirse al estudio de las re- tán en los mostradores” tienen significados
laciones lenguaje-mundo y el de “sintaxis” distintos), pero no la tienen ni los elementos
para referirse al estudio de las propiedades verbales ni los adjetivos (la inflección plural
de los sistemas simbólicos en sí mismos me de la cópula no añade nada nuevo al signifi-
parece adecuadamente convencional en al- cado de esas frases). Similarmente, algunos
gunos casos; por lo que hace al estudio de aspectos de los sistemas conceptuales no
los “lenguajes formales”, por ejemplo (i.e., son sintácticos; por ejemplo, los que tienen
la relación semántica entre numerales y nú- que ver con cómo utiliza la gente los con-
meros, y la relación sintáctica de la concate- ceptos cuando piensa o habla de lo que está
nación). En el caso del lenguaje natural su- fuera del organismo (o dentro de él, para el
pongo que pocos utilizarían el término “se- caso).

Psicothema, 1997 579


ENTREVISTA A NOAM CHOMSKY

Aparece un problema, sin embargo, encontraremos aquí con una confusión si in-
cuando decimos que los conceptos “se re- tentamos interpretar las expresiones del len-
fieren a cosas”. Los términos se usan ahora guaje natural como lo hacemos dentro del
en un sentido técnico inventado, así que sig- estudio de los sistemas formales, postulan-
nifican lo que su inventor quiere que signi- do una relación entre el mundo y una cosa:
fiquen, como sucede en el caso de “tensor” “libro” es a “Ulysses”como “primo” es a 7.
o “indecibilidad”. Por consiguiente no po- No me parece que sea así como funciona el
demos juzgar si la aserción es verdadera lenguaje, ya sea en el sentido fonético o se-
hasta que no se nos diga más acerca del sig- mántico. Y el asunto no mejora, en mi opi-
nificado de los términos técnicos “concep- nión, cuando extendemos el uso de las pala-
to”, “cosa” y “referir”. No podemos apelar bras a los conceptos.
al lenguaje natural. Los lenguajes naturales La advertencia de que las interpretacio-
tienen palabras similares, pero no con el nes equivocadas de la “forma superficial”
sentido técnico típicamente apropiado. Así, del lenguaje natural pueden llevar a errores
en inglés existen palabras como “referir” y filosóficos se remonta al menos a las críti-
“concepto”, pero no se usan en el sentido en cas del siglo XVIII de la teoría de las ideas,
que se pretende aquí. Eso mismo es cierto y ha ganado fama en este siglo gracias al úl-
en otras lenguas similares. Por ese motivo timo Wittgenstein y a la filosofía del “len-
tuvo que Frege inventar un sentido técnico guaje ordinario” de Oxford. Me parece que
para “Bedeutung” y “Sinn”, y por eso exis- esa advertencia debe ser tenida en cuenta
te tanta variación a la hora de traducir sus también en este caso.
neologismos. Tal como yo lo veo, el estudio de los as-
No creo, además, que la noción “cosa” pectos mentales del mundo nos lleva a pos-
del lenguaje natural ayude demasiado. Co- tular la existencia de una variedad de siste-
mo dijo Hume, haciéndose eco de una larga mas cognitivos (el lenguaje entre ellos) que
tradición que se remonta al menos a Aristó- tienen sus propias propiedades e interactúan
teles, incluso en el caso de la gente, los ani- de diferentes formas. El estudio internalista
males, los ríos, etc., las cosas de que habla- de esos sistemas es lo que preferiría llamar
mos son “ficticias”, son establecidas por la “sintaxis”. El estudio de cómo utiliza la
imaginación y el entendimiento humanos y gente esos sistemas se llama a menudo
no se identifican con una “naturaleza” inde- “pragmática”. Si la semántica se entiende
pendiente de la mente. Eso es del todo cier- como el estudio de la relación de “las pala-
to cuando digo que la cosa que más le con- bras/conceptos y las cosas”, utilizando una
cierne a John es el destino de la Tierra cuan- interpretación no mentalista de “las cosas”,
do se refiere él al decir que es horroroso. En entonces no existe ningún tópico semejante
el lenguaje ordinario decimos que la gente a la semántica del lenguaje natural. La ana-
utiliza palabras para referirse a cosas, pero logía con la aritmética formal desaparece,
“cosas” en un sentido que no forma parte de como sucede también en otras partes. Por el
ningún intento de dar una explicación cien- contrario, si la semántica se entiende como
tífica o filosófica (si es que una y otra son el estudio de las relaciones del lenguaje (o
diferentes, como a menudo se sostiene). los conceptos) con el mundo externo e in-
Volviendo al ejemplo al que me refería an- terno, entonces sí que existe un tópico así;
tes, puedo utilizar la palabra “libro” para re- es algo parejo a lo que sucede con la fonéti-
ferirme a lo que Peter y John sacaron de la ca entendida como la relación entre elemen-
biblioteca (el Ulysses, algo simultáneamen- tos (internos) lingüísticos y movimientos
te abstracto y concreto). De nuevo sólo nos (externos) de moléculas en el aire, etc., pe-

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CAMILO J. CELA-CONDE Y GISÈLE MARTY

ro sin implicar ninguna noción semejante a más informaciones la conclusión de que


la de referencia, en su sentido técnico. John intentó ir a la escuela, pero no puedo
Respecto al “conocimiento a priori” en sacar conclusión alguna respecto de las in-
este sentido naturalista tenemos que distin- tenciones de Peter.
guir varios casos. Uno es el de lo que Kon- Los hechos no son controvertibles; se
rad Lorenz llamó “el a priori biológico”: aceptan por todas las partes. Un científico
los chimpancés parecen saber, por ejemplo, que estudia el lenguaje querrá explicar esos
sin necesidad de la experiencia que las ser- hechos. Los estudios empíricos siguen una
pientes son peligrosas (aunque el “conoci- línea típica —creo que invariable— de in-
miento a priori” no parece referirse a las vestigación: encontrar las propiedades es-
serpientes, como indica un análisis más tructurales de las expresiones que entran en
profundo). Sin duda mucho de nuestro co- la interpretación y las propiedades semánti-
nocimiento es similar, esto es, supone esas cas intrínsecas de “persuadir”, “intentar”,
“partes del conocimiento” que nos vienen etc. ¿Hay alguna hipótesis alternativa? Se
de “la mano original de la naturaleza”, en asume ampliamente que las distinciones tie-
palabras de Hume. nen que ver con la profundidad de las cre-
Existe también un conocimiento a priori encias, la “importancia semántica”, o algo
asociado con las verdades analíticas. Reco- por el estilo. Pero no se han hecho propues-
nozco que la ortodoxia de los últimos cua- tas sustantivas en esa línea, y los tanteos
renta años sostiene que no existen, pero creo existentes no tienen buena apariencia, por
que esa conclusión es problemática. Tene- decirlo de forma suave. No hay forma de
mos que distinguir entre dos casos: (1) lo evaluar esas tesis, así que uno podría pre-
que metafóricamente se llama “el lenguaje guntar por qué se supone que tienen tanta
de la ciencia” y (2) el lenguaje humano, un fuerza.
objeto biológico. Las investigaciones empíricas proporcio-
Por lo que hace al “lenguaje de la cien- nan un considerable apoyo a la conclusión
cia”, la conclusión es indudablemente co- de que existen relaciones fonéticas y se-
rrecta. Quine está de acuerdo con Carnap mánticas mantenidas en base a las propieda-
en eso. Pero a menos que uno crea en una des intrínsecas de las expresiones (i.e., la
altamente implausible teoría de la “homo- implicación y la rima formales). Sucede que
geneidad de la mente” en la que la física éstas conducen a una distinción
cuántica y lo que mi nieto me cuenta caigan analítico/sintética, pero, tal como yo lo veo,
dentro de una misma red sin separaciones, esa conclusión no tiene interés filosófico, ni
no podemos sacar la conclusión de que el interés particular alguno para el estudio del
lenguaje carece de propiedades semánticas lenguaje. Pero se podría decir que una cate-
intrínsecas. Me parece que las evidencias goría de “conocimiento a priori”, entrando
indican abrumadoramente que sí las tiene, quizá en la conducta racional, tiene sus raí-
de la misma forma que tiene propiedades ces en esos términos.
fonéticas intrínsecas. Estas propiedades in- El mismo razonamiento puede aplicarse
trínsecas parecen llevar a relaciones como a los sistemas conceptuales postulados, en
la implicación formal y la rima formal. Así, la medida en que los entendemos. Pero eso
“alfiler” rima con “neceser” y la afirmación puede ser porque en sus aspectos relevantes
de que Peter convenció a John para que fue- son muy difíciles de distinguir de los siste-
se a la escuela implica que John intentó mas lingüísticos.
(hasta cierto punto) ir a la escuela. Si creo 9. Es verdad que la búsqueda de univer-
lo primero puedo sacar sin necesidad de sales semánticos se convierte en un proble-

Psicothema, 1997 581


ENTREVISTA A NOAM CHOMSKY

ma siempre que intentemos defender una forma (3): Sea P la propiedad de que se
sentencia como la (3): cumple ese principio; entonces todo len-
guaje tiene la propiedad P. Considérese un
(3) Todos los lenguajes tienen la propie- caso ligeramente más complejo: la pro-
dad P. puesta reciente de Richard Kayne de que
el orden “de izquierda a derecha” refleja
Una sentencia así tropieza con el hecho un comando-c asimétrico (su Axioma Li-
de que las propiedades lingüísticas son el neal de Correspondencia, ALC). Kayne
resultado de la interacción de factores in- propone que el ALC también es un princi-
natos y factores de la experiencia. Usted pio irreductible de la GU. De una cierta
mismo apunta que nos encontramos con versión del ALC se deduce que el orden
problemas parecidos si pretendemos bus- subyacente de cada lenguaje es sujeto-ver-
car universales en otros sistemas. Sin em- bo-objeto. Esta última afirmación es una
bargo, parece que sí pueden encontrarse generalización de categoría (3) derivada
universales del sistema visual como es, por de un principio de la GU. No se encuentra
ejemplo, la percepción del color a través de directamente en lo que observamos. La te-
la agrupación del continuo de las longitu- sis sostiene que cuando el orden observa-
des de onda de la luz en muy pocos grupos do es diferente se han producido operacio-
de colores simples y bastante discretos. E nes de desplazamiento para modificar el
incluso “universales semánticos” (en el orden universal subyacente. la generaliza-
sentido en el que se emplea ese término en ción empírica es de categoría (3), pero es-
la etnolingüística) relacionados con tales tá ligada muy profundamente a la teoría:
colores simples y con los nombres que to- se refiere a las estructuras subyacentes que
man en las distintas lenguas (Gellatly, no pueden observarse.
1995). Ha habido también estudios muy produc-
N.C.– Las propiedades universales del tivos de generalizaciones que son observa-
lenguaje, incluyendo en ellas la semántica bles de manera más directa, de generaliza-
universal, no caen de ninguna forma sen- ciones acerca de los órdenes de las palabras
cilla en la categoría (3) (aunque si admiti- que de hecho vemos, por ejemplo. La obra
mos la suficiente complejidad siempre de Joseph Greenberg ha sido particularmen-
podemos reformularlas como (3) de forma te instructiva e influyente a ese respecto.
irrelevante). Lo mismo puede decirse de Esos universales son probablemente genera-
las propiedades universales del sistema lizaciones descriptivas que deberían deri-
visual. varse de principios de la GU. El explicarlos
Pero muchas generalizaciones toman en esos términos ha sido un importante pro-
directamente la forma (3). Consideremos yecto de investigación dentro de la gramáti-
el principio que mencioné antes: un pro- ca generativa.
nombre no puede depender referencial- También existen generalizaciones de mu-
mente de un antecedente al que comanda- chas otras clases.
c. Es razonable suponer que se trata de un He sostenido que la satisfacción de una
principio irreductible de la teoría del esta- forma sencilla de (3) no es una condición
do inicial de la facultad del lenguaje, la de los universales del lenguaje, tal como
“gramática universal” (GU) en su sentido se entiende el término en la GU contem-
contemporáneo. Es, pues, un “universal poránea. Esta difiere de la gramática uni-
del lenguaje” en el sentido mencionado, y versal tradicional en este aspecto. La tra-
puede ser reformulado fácilmente de la dición se limita en una considerable medi-

582 Psicothema, 1997


CAMILO J. CELA-CONDE Y GISÈLE MARTY

da a las propiedades pretendidamente ha- Debería añadir que estas conclusiones


lladas, ya sea siempre o como una tenden- tienen sus raíces en el estudio tradicional
cia, “en la superficie” de los lenguajes. Pe- del lenguaje, que fue ampliamente dejado
ro la GU contemporánea es una teoría del de lado e ignorado por las corrientes con-
estado inicial de la facultad del lenguaje, y ductistas y estructuralistas. Su último gran
sus principios no se expresan directamen- representante fue quizá el lingüista danés
te de la forma (3) aun cuando puedan es- Otto Jespersen, quien sostuvo que debe ha-
conder generalizaciones que tienen esa ber una sintaxis universal aun cuando na-
forma. die pueda concebir una morfología univer-
Creo que estos comentarios generales se sal. Replanteando esa conclusión en unos
aplican al sistema visual y a otros sistemas. términos que probablemente hubiese acep-
10. ¿Podemos establecer una diferencia tado Jespersen, las operaciones computa-
entre los sistemas sintáctico y léxico de los cionales pueden muy bien ser invariantes,
lenguajes, en el sentido de que los sistemas mientras que los cambios en los rasgos in-
léxicos tienden a reflejar invariantes cultu- flexivos y otros por el estilo pueden tener
rales (particularmente en el caso del lexicón consecuencias a largo término, ya que pro-
de clase abierta: verbos, sujetos, adjetivos) liferan a través de la computación de ex-
mientras que los sistemas sintácticos tien- presiones complejas.
den a reflejar categorías universales de es- Es razonable suponer, como sugieren
pecies (la categoría de “instrumento”, por ustedes, que las operaciones computacio-
ejemplo)? nales y los factores que entran en ellas son
N.C.– Dejando de lado las complejida- relativamente (o quizá completamente)
des, podemos decir que el estado inicial de independientes de la variación cultural.
la facultad del lenguaje proporciona un Al mismo tiempo eso parece ser cierto
conjunto de propiedades invariantes (lla- también respecto de al menos algunas de
madas “rasgos”) y dos operaciones: opera- las variedades de los sistemas morfológi-
ciones de ensamblaje, que forman ítems lé- cos, aunque de esa forma nos aparecen
xicos a partir de rasgos, y operaciones muchas preguntas, sobre todo cuando
computacionales, que forman expresiones examinamos una clase más amplia de len-
más complejas a partir de ítems léxicos. guajes: los lenguajes que requieren que
Los lenguajes varían en ambas dimensio- una acción se especifique en términos de
nes, y la variación parece superficialmente su relación con la salida y la puesta del
muy grande. No hace mucho los lingüistas sol, y los lenguajes en los que los objetos
profesionales daban comúnmente por su- son identificados por medio de afijos que
puesto que las lenguas podrían variar ilimi- especifican si están en una dirección, si se
tadamente en ambos casos, cosa que debe alejan, si cuesta trabajo el obtenerlos, etc.
ser literalmente falsa o, de lo contrario, Ese tipo de propiedades abundan también
ningún niño podría aprender una lengua ja- en lenguas más familiares, pero no sabe-
más. Existe ahora un cierto grado de cono- mos cómo se relacionan con los sistemas
cimiento de los factores que restringen ní- culturales, o si lo hacen de una forma que
tidamente las formas como pueden funcio- no sea trivial.
nar las operaciones computacionales, con- Como ha sido reconocido desde hace
duciendo a variaciones tipológicas apa- tiempo, las operaciones de ensamblaje son
rentemente dramáticas como resultado de en cierto sentido “arbitrarias”: las propie-
pequeños cambios (de una forma típica en dades del estado inicial no determinan si
los sistemas morfológicos). un lenguaje utilizará la palabra “libro” o

Psicothema, 1997 583


ENTREVISTA A NOAM CHOMSKY

“book”, o si la cópula se parecerá al inglés Formular una teoría estándar de la ver-


“be” o al español “ser/estar”. Cada ítem dad para el inglés en algunas otras lenguas
léxico es una colección de rasgos primiti- no es una tarea menor si consideramos esos
vos, algunos de ellos que funcionan en la ejemplos. Hay muchos otros tipos de varia-
interfaz fonética como “instrucciones” pa- ción, algunos notablemente sistemáticos.
ra los sistemas sensoriomotores; otros que Así, el inglés tiende a utilizar verbos con
funcionan en la interfaz semántica como muy poco contenido semántico como me-
“instrucciones” para los sistemas “concep- dio para formar construcciones verbales
tuales/intencionales” de la mente/cerebro, que tienen a menudo ítems léxicos indivi-
que los usan para el pensamiento y la re- duales como contrapartida en lenguas co-
flexión hablando del mundo, haciendo mo el español (“take in”, “take out”, “take
preguntas y en otras muchas formas. Tam- away”, etc.). Similarmente, encontramos
bién hay rasgos estructurales de los ítems que ciertas propiedades como la de “instru-
léxicos, y todo el complejo se combina mento” pueden aparecer dentro de ítems
con las propiedades inflexivas de varias léxicos o pueden expresarse por medio de
diferentes formas. inflexiones u operaciones computaciona-
Los rasgos primitivos determinan una les, con muchas consecuencias para su in-
rica serie de interpretaciones de los ítems terpretación. Estos problemas se encuen-
léxicos y, por la misma razón, restringen tran entre otros muchos que hacen enlo-
nítidamente su variedad; el ejemplo del quecer a los traductores y a los que estu-
“libro” es típico. Pero encontramos a me- dian lenguas.
nudo que los lenguajes no concuerdan El conjunto de los rasgos de los ítems
punto por punto ni en el nivel fonético ni léxicos reflejan en algunos aspectos la va-
en el semántico. La observación es fami- riedad cultural. Al inglés y al español, por
liar, pero a veces se olvida. Así, la litera- ejemplo, les faltan las contrapartidas léxi-
tura lógico/filosófica utiliza ejemplos es- cas de las palabras que se encuentran en
tándar como (11) para ilustrar que las te- lenguajes de la región amazónica o de
orías de verdad del significado no son va- Nueva Guinea, y al revés. Y la traducción
cías: no es una tarea sencilla. Pero de nuevo no
se entiende demasiado qué significa eso.
(11) la sentencia alemana “Schnee is Por ejemplo, ¿es un hecho cultural signifi-
weiss” es verdad si y sólo si la nieve es cativo del inglés y del chino el que tiendan
blanca. a utilizar ítems verbales semánticamente
vacíos, o que el inglés disponga del para-
La sentencia castellana (11) es sencilla- digma (12) pero otros lenguajes semejan-
mente informativa; nos dice algo no trivial tes no?
respecto del alemán. Pero la fuerza de la
ilustración decae considerablemente si ex- Agradecimientos
tendemos el paradigma en la más mínima
forma. Así, la sentencia inglesa “snow is Entrevista a Noam Chomsky* Esta entrevista
white” es fácil de traducir a muchas len- se ha realizado gracias al Proyecto de Investiga-
guas, pero eso no es cierto respecto del pa- ción PS95-0059 que lleva el título de “Implica-
radigma ilustrado por (12) ciones filosóficas y psicológicas de la teoría neu-
robiológica de la consciencia”, financiado por la
(12) snow looks (feels, tastes, smells) Comisión Interministerial de Ciencia y Tecnolo-
good. gía, Ministerio de Educación (España).

584 Psicothema, 1997


CAMILO J. CELA-CONDE Y GISÈLE MARTY

Referencias

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Psicothema, 1997 585

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