You are on page 1of 84

“Año del Diálogo y la Reconciliación Nacional”

FACULTAD DE CIENCIAS POLITICAS


ESCUELA ACADÉMICO PROFESIONAL DE DERECHO

MONOGRAFÍA
“CÓDIGO DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES”
Autor(es):

 CORDOVA

 FLORES TENAZOA, Santiago

 NÚÑEZ REGALADO, Angela

 PRECIADO PORTILLA, Guesseny

 RAMOS ORRILLO, Whitney Yalu

Asesor:
Fisc. WALTER ROLDAN RIOS PINCHI

Tarapoto - Perú
2018

INDICE

INTRODUCCCION ............................................................................................. 3
CAPÍTULO I.- CONCEPTUALIZACIÓN DEL DERECHO DE LOS NIÑOS Y
ADOLESCENTES. ............................................................................................. 5

1
1.1. Inicio: Fines y derecho del niño adolescente. ........................................... 5
1.2. Naturaleza Del Derecho Del Niño Y Adolescente ................................. 9
1.2.1. Derecho del niño y adolescente como fenómeno social: .............. 10
1.2.2. El derecho del niño y adolescente como fenómeno histórico ....... 23
1.2.3. Situación histórica del niño y adolescente en el Perú. .................. 29
1.3. EL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO JURÍDICO ........... 30
1.3.1. Condición jurídica del niño y adolescente..................................... 31
1.4. EL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO
DOCTRINAL. ................................................................................................ 33
1.4.1. Doctrina de la situación irregular. ................................................. 33
1.4.1.1. Doctrina de la protección integral. ............................................. 34
1.5. EL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO
AUTÓNOMO. ................................................................................................ 34
1.5.1. En cuanto a su estructura. ............................................................ 35
1.5.2. Diferencia con el Derecho de familia. ........................................... 35
1.6. EL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO
BIOPSICOLÓGICO. ...................................................................................... 36
1.7. DEFINICIÓN DEL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE ............ 37
CAPÍTULO II.- LA CONVECION SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO ......... 37
2.1. HISTORIA DE LA CONVENCIÓN ....................................................... 38
2.2. IMPORTANCIA DE LA CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL
NIÑO 39
2.3. PRINCIPIOS RECTORES DE LA C.D.N............................................. 39
2.4. LA CONVENCIÓN EN AMÉRICA LATINA .......................................... 40
2.5. PROTOCOLOS FACULTATIVOS ....................................................... 41
CAPÍTULO III.- INTERES SUPERIOR DEL NIÑO Y DEL ADOLECENTE ....... 43
3.1. CONCEPTO. ....................................................................................... 43
3.2. La Doctrina de la Protección Integral .................................................. 53
CAPITULO IV: ENTIDADES Y ORGANIZACIONES QUE PROTEGEN LOS
DERECHOS DEL NIÑO Y EL ADOLESCENTE (INTERES SUPERIOR DEL
NIÑO). .............................................................................................................. 71
4.1. CENTRO DE EMERGENCIA MUJER. ................................................ 71
4.1.1. FUNCIÓN: .................................................................................... 71
4.1.2. MISION: ........................................................................................ 71
4.1.3. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS
DEL NIÑO Y ADOLESCENTE: .................................................................. 72
4.2. DEMUNA. ............................................................................................ 72

2
4.2.1. Base Legal. ................................................................................... 72
4.2.2. FUNCIÓNES:................................................................................ 73
4.2.3. MISION: La DEMUNA de la Municipalidad Provincial de San
Martín, 73
4.2.4. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS
DEL NIÑO Y ADOLESCENTE: .................................................................. 73
4.3. FISCALIA DE LA FAMILIA. ................................................................. 74
4.3.1. FUNCIÓN: .................................................................................... 74
4.3.2. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS
DEL NIÑO Y ADOLESCENTE: .................................................................. 74
4.4. DEFENSA PÚBLICA. .......................................................................... 75
4.4.1. FUNCIÓN: .................................................................................... 76
4.4.2. MISION: ........................................................................................ 76
4.4.3. VISION: ........................................................................................ 76
4.4.4. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS
DEL NIÑO Y ADOLESCENTE: .................................................................. 76
4.5. DEFENSORIA DEL PUEBLO. ............................................................ 77
4.5.1. FUNCIÓNES:................................................................................ 77
4.5.2. MISION: ........................................................................................ 79
4.5.3. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS
DEL NIÑO Y ADOLESCENTE: .................................................................. 79
4.6. OTRAS ORGANIZACIONES. ............................................................. 79
V. CONCLUCIONES ........................................................................................ 80
VI. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS ............................................................ 81
VII. ANEXOS .................................................................................................... 84

INTRODUCCCION

Un indicador muy importante de demostrar el respeto a los "Derechos


Humanos" es la manera en que la sociedad trata a sus niños. Una sociedad
respetuosa de los "Derechos Fundamentales" brinda libertad y dignidad a la

3
niñez y formula condiciones adecuadas en las que pueda desarrollar todas las
potencialidades infantiles.

A pesar de mejoras en indicadores económicos respecto a Perú en general en


los últimos años, la situación de los niños en el país indica que no se ha
producido grandes avances en este tema. Según el índice desarrollo de la
niñez, confeccionado por el Instituto Nacional de Estadísticas e Informática –
INEI del Perú, dieciséis (16) de los veinticuatro (24) departamentos a nivel
nacional se encuentran en niveles bajos o muy bajos en el desarrollo de la
niñez, lo que constituye un grave problema.

El 20 de noviembre de 1989 los países firmaron la "Convención sobre los


Derechos del Niño", se comprometieron, verdaderamente, ante el mundo y no
sólo de palabra. Cada país miembro, incluyendo el Perú, tenía que cambiar su
legislación e implementar acciones concretas para que se cumplan los
derechos de todos los niños y las niñas en su jurisdicción. Por esta razón, el
Gobierno peruano elaboró el "Código de los Niños y Adolescentes", que se
promulgó del 24 de diciembre de 1992.

El Código de los Niños y Adolescentes tiene por objeto al menor, cautela que
nazca, crezca y se desarrolle normalmente y que llegue a la mayoría de edad,
en la plenitud de sus posibilidades físicas, mentales y espirituales. Regula su
actividad moral y conflictual con la familia, la comunidad y el orden jurídico
social. En este contexto vemos un aspecto importante y resalte el principio
interés superior del niño, pone acertadamente el asentó en su realidad como
sujeto digno de atención, promoción, provisión y protección. Este principio a de
aplicarse en todas aquellas situaciones donde se hallen involucrado menores
de edad. Pero el interés superior del niño no es un concepto pacifico sino que
es objeto de múltiples y muy diversas controversias que tiene influencias en su
eficaz práctica.

4
CODIGO DEL NIÑO Y DEL ADOLECENTE

CAPÍTULO I.- CONCEPTUALIZACIÓN DEL DERECHO DE LOS NIÑOS Y


ADOLESCENTES.

1.1. Saberes Previos:


El código de los niños y los adolescentes en el título Preliminar contiene
los principios inspiradores de todas las normas del Código que desarrolla
la doctrina de la protección integral.

Artículo I.- Definición de niño y adolecente.-1 “Se considera niño a todo ser
humano desde su concepción hasta cumplir los doce años de edad y
adolescente desde los doce hasta cumplir los dieciocho años de edad. El
Estado protege al concebido para todo lo que le favorece. Si existiera
duda acerca de la edad de una persona, se le considerará niño o
adolescente mientras no se pruebe lo contrario”.

La definición de niño que trae el Art. 1º es la misma del texto de la


Convención de los Derechos del Niño. Esta considera como tales a los
menores de 18 años de edad; pero además el legislador ha asegurado el

1
Código Del Niño Y Del Adolecente/ Jurista Editores –Ley N°27337, pág. 671

5
criterio de su homólogo brasileño, optando por diferenciarlos en dos
categorías jurídicas: niño, desde el momento de la concepción hasta
antes de cumplir los doce años y adolescente, a partir de los 12 años
hasta antes de los 18.

Artículo II.- Sujeto de derechos.- “El niño y el adolescente son sujetos de


derechos, libertades y de protección específica. Deben cumplir las
obligaciones consagradas en esta norma”.

La titularidad de derechos, uno de los principales pilares de protección


integral, está consagrada en el artículo II, que claramente establece que
además de gozar de los derechos inherentes a su condición de persona
humana, los niños y adolescentes tienen protección especial y derechos
específicos en relación a su proceso de desarrollo y etapa de formación.

Artículo III.- Igualdad de oportunidades.- “Para la interpretación y


aplicación de este Código se deberá considerar la igualdad de
oportunidades y la no discriminación a que tiene derecho todo niño y
adolescente sin distinción de sexo”.

El Art. 3º consagra el derecho del niño a la igualdad de oportunidades que


resulta fundamental dentro del marco de la doctrina de la protección
integral, pues se trata de salvaguardar el derecho del niño a convertirse
en adulto gozando a tal efecto de iguales oportunidades dejando de lado
toda discriminación.

Artículo IV.- Capacidad.- “Además de los derechos inherentes a la


persona humana, el niño y el adolescente gozan de los derechos
específicos relacionados con su proceso de desarrollo. Tienen capacidad
especial para la realización de los actos civiles autorizados por este
Código y demás leyes.

La Ley establece las circunstancias en que el ejercicio de esos actos


requiere de un régimen de asistencia y determina responsabilidades.

En caso de infracción a la ley penal, el niño será sujeto de medidas de


protección y el adolescente de medidas socio-educativas.

6
En relación con los referidos derechos, al niño y al adolescente se le
reconoce en el artículo IV capacidad especial para la realización de los
actos civiles autorizado por este Código y demás leyes, destáquense aquí
las normas de auto protección que ha previsto el propio Código en el Libro
II, Capitulo IV en el régimen del Adolescente Trabajador.

Artículo V.- Ámbito de aplicación general.- “El presente Código se aplicará


a todos los niños y adolescentes del territorio peruano, sin ninguna
distinción por motivo de raza, color, sexo, idioma, religión, opinión política,
nacionalidad, origen social, posición económica, etnia, impedimento físico
o mental, o cualquier otra condición,

Artículo VI.- Extensión del ámbito de aplicación.- El presente Código


reconoce que la obligación de atención al niño y al adolescente se
extiende a la madre y a la familia del mismo. Sea propia o de sus padres
o responsables”.

Una de las dos principales perspectivas de la protección integral, esto es


la aplicación general, está contemplada en el Art. 5º cuando establece
que el Código se aplicará a todos los niños y adolescentes del territorio
peruano, sin ninguna distinción, por motivo de raza, color, sexo, idioma,
religión, opinión política, origen social, posición económica, etnia,
impedimento físico o mental, o por cualquier otra condición.

La atención que el Código dispensa al niño y al adolescente se hace


extensiva a la madre y a la familia según el Art. 6º.

Artículo VII.- Fuentes.- En la interpretación y aplicación del presente


Código se tendrá en cuenta los principios y las disposiciones de la
Constitución Política del Perú, la Convención sobre los Derechos del Niño
y de los demás convenios internacionales ratificados por el Perú. En todo
lo relacionado con los niños y adolescentes, las instituciones familiares se
rigen por lo dispuesto en el presente Código y el Código Civil en lo que les
fuere aplicable.

Las normas del Código Civil, Código Penal, Código Procesal Civil y
Código Procesal Penal se aplicarán cuando corresponda en forma

7
supletoria al presente Código. Cuando se trate de niños o adolescentes
pertenecientes a grupos étnicos o comunidades nativas o indígenas, se
observará, además de este Código y la legislación vigente, sus
costumbres, siempre y cuando no sean contrarias a las normas de orden
público.
Son fuentes para la interpretación y aplicación del Código de los Niños y
Adolescentes, los principios y las disposiciones de la Constitución Política
del Perú, la Convención sobre los Derechos del Niño y demás Convenios
Internacionales sobre la materia ratificados por el Perú.

Asimismo son fuentes supletorias cuando corresponda, según el Art. 7º, el


Código Civil, Código Penal, Código Procesal Civil y Código Procesal
Penal.

Artículo IX.- Interés superior del niño y del adolescente.- "En toda medida
concerniente al niño y al adolescente que adopte el Estado a través de los
Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, del Ministerio Público, los
Gobiernos Regionales, Gobiernos Locales y sus demás instituciones, así
como en la acción de la sociedad, se considerará el Principio del Interés
Superior del Niño y del Adolescente y el respeto a sus derechos”.
El Interés Superior del Niño, principio rector de todo el sistema jurídico de
protección de niños y adolescentes, está consagrado en el Art. 9º. En toda
medida concerniente al niño y al adolescente que adopte el Estado a
través de los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, del Ministerio
Público, los Gobiernos Regionales, Gobiernos Locales, y demás
instituciones, así como en la acción de la sociedad se considera el
principio del interés superior del niño y el adolescente y el respeto a sus
derechos.

Si bien no existe consenso respecto a la conceptualización de este


principio; sin embargo podríamos intentar una primera definición, como
"todo aquello que mejor favorezca a la protección integral de niños y
adolescentes y el respeto a sus derechos".

Este principio actúa como norma orientadora de todas las medidas que
adopten las autoridades judiciales o administrativas. Es uno de los

8
principales pilares de la doctrina de la protección integral que otorga
prioridad social y compromete la acción preferente de las autoridades del
Estado a favor de los menores de edad. Tiene su sustento en el respeto a
la dignidad de la persona humana reconocida en los artículos 1º y 3º de la
Constitución Política del Perú.

1.2. Inicio: Fines y derecho del niño adolescente.


Debemos precisar ad initio que los fines últimos del Niño y Adolescente
es: primero, por parte de la comunidad satisfacer las necesidades del niño
y adolescente, su sana constitución material y espiritual; y segundo, con
ello se busca un concepto teleológico mayor, como es el bienestar de la
colectividad. En fin de cuentas estos son los fines trascendentes del
Derecho del Niño y Adolescente (en adelante DNA.). Parece que éste
intento de educar, instruir a los niños en el pasado ha sido un fracaso, al
advertir que los abanderados de combatir la corrupción y el robo son
precisamente los primeros en incurrir en actos de lesa humanidad.

1.3. Naturaleza Del Derecho Del Niño Y Adolescente

Si antes hemos dicho que el Derecho del Niño y adolescente era un


microcosmos jurídico, ahora debemos entenderlo como que es un
fenómeno.

Entendiendo esto “como manifestación de la naturaleza”2 –Diccionario de


la Lengua Española-. Efectivamente, el fenómeno niño y adolescente son
ontológicamente manifestaciones simultáneas, sucesivas, o temporales.
Pasa por ser conformado como ser social al estar integrado a la sociedad
y sujeto a sus vaivenes, condiciones y determinaciones; como asimismo
tiene una historia – zigzagueante si se quiere o como diría el filósofo Juan
Bautista Vico, “en espiral” - pero hay una historia. Pero esta historia está
vinculada a lo jurídico, así como que tiene también su doctrina y todo ello
vinculado al aspecto biosociológico de la que está investido todo ser
humano desde su nacimiento. Cada uno de estos fenómenos vamos a
pasar hablar a continuación.

2
Diccionario de la Real Academia Española, Ed. Ramón Sopena S.A. 1991

9
1.3.1. Derecho del niño y adolescente como fenómeno social:
Esta parte social tiene características y elementos determinantes y
condicionantes. El niño y el adolescente como seres humanos están
insertados en la sociedad. La sociedad como cristalización humana
como forma de organización tiene finalidad tuitiva para la protección
de los individuos, y en relación al niño y adolescente de apoyo y
cuidado en forma integral.

1.3.1.1. Elementos determinantes y condicionantes

En la sociedad hay principios y empezaremos por la que fue


enunciada primero: la mano invisible.

“Todo individuo trata de emplear su capital de tal forma que su


producto tenga el mayor valor posible. Generalmente ni trata de
promover el interés público ni sabe cuándo lo está ‘promoviendo'.
Lo único que busca es su propia seguridad, sólo su propia
ganancia. Y al hacerlo, una mano invisible le lleva promover un fin
que no estaba en sus intenciones. Al buscar su propio interés, a
menudo promueve el de la sociedad más eficazmente que si
realmente pretendiere promoverlo”. (Adam Smith3).

Ahora tenemos pensamiento que tenemos como principio


enunciado por C. Marx en su obra Contribución a la Economía
Política que dice escuetamente: “No es la conciencia de los
hombres lo que determina la realidad, antes por el contrario es la
realidad social lo que determina su conciencia” y otra: “Hay
Fuerzas naturales en la base de la sociedad que imperan en un
periodo de tiempo y la caracterizan además permiten su evolución
la misma que supedita la cultura (especialmente el Derecho)”4
Estos pensamientos arriba expuestos, son considerados como
principios. O así son entendidos académicamente. Pasaremos
analizarlos brevemente. Ya en el siglo XVI, XVII, XVIII,
aparecieron filósofos como Hobbes, Hume, Jeremias Bentham

3
Adam Smith, La Riqueza de las Naciones. Alianza Editorial.4a. Ed.2007. Pág. 446 Madrid.
4
Eric Roll, Ed. Efe. Fondo Cultura Económica. Quinta Edición 1985.México.Pág. 249.

10
que establecían que el espíritu humano era esencialmente
egoísta, pero esto no lo veían como un vicio sino como una virtud
porque es así como concebían que era como progresa la
humanidad. Este espíritu egoísta nace de las relaciones con las
que se vinculan las personas para poder subsistir. Por ejemplo
decía Adam Smith5, padre de la Economía Política actual, teórico
sistematizador del sistema capitalista.

Contraponiendo el pensamiento antiguo sistematizado por


Aristóteles, que el individuo se supeditaba a la sociedad “como la
parte al todo”6 Otros elementos que condicionan o determinan
conforme a las circunstancias vienen a ser el grado de desarrollo
económico y social de un país, lo que pasaremos a exponer a
continuación.

A. Pobreza o riqueza de un país. Decimos que estos elementos son


determinantes- condicionantes en el sentido que la situación
económica social del país conduce a que los niños y adolescentes
puedan tener un desarrollo sano, en caso contrario si la situación
es extremadamente grave puede conducir que los niños y
adolescentes tengan graves deterioros en su constitución
sustancialmente cerebral. El más importante, reiteramos, el
aspecto económico del país. En países medios desarrollo como
es el Perú los efectos no determinan esencialmente la estructura
cerebral, la inteligencia, el ánimo, el comportamiento, conducta,
etc. Sólo excepcionalmente. Una persona pobre y con deficiencias
en la alimentación, puede llegar a la desnutrición, anemia; pero
sin embargo su capacidad cognoscitiva puede permanecer
inalterable, en razón que de acuerdo con la biología el cerebro
sabe defenderse, se precave muy bien, descuidar otras partes del
cuerpo para proteger el cerebro. No quiero decir que no se pueda
afectar seriamente el cerebro si la subalimentación es crónica,
permanente, aunado a ello el consumo de drogas, ahí se puede

5
Adam Smith, idem
6
Aristóteles, La Política, Ed. Lima S.A. 1991.Pág. 18

11
decir que repercute y hace estragos a todo el organismo y hasta
el cerebro. El nivel de pobreza o riqueza de un país es esencial
para establecer la situación del niño y adolescente.

A.1. Situación económica del Perú. La situación económica de un


país, es clave para poder entender los demás indicadores. Si un
país es rico, de economía próspera, socialmente equilibrado en
consecuencia sus indicadores en nutrición, educación y salud
como la salud mental de su población es sana. Siendo por tanto,
uno de los indicadores más importantes para establecer el estado
en que se encuentra la niñez y la adolescencia. El Perú es un país
en estado medio de desarrollo pero prevalece la pobreza, la
misma que deja una secuela importante tanto en el aspecto macro
como micro social. Tanto a nivel de las instituciones,
interrelacionado con el individuo y asimismo en la situación
específica del NA. Por dar un ejemplo, el ingreso remunerativo del
personal en el sector salud aunado al presupuesto asignado a
este sector, si es alto o es bajo repercute directamente en la
familia y con ello al sector vulnerable como son los hijos menores
de edad. El Perú en relación al mundo su Producto Bruto Interno
Per Capita (PBIPC) es uno de los más bajos, hasta en
Latinoamérica se encuentra relegado: por ejemplo Luxemburgo en
el mundo es el que tiene un PBIPC más alto: $ 111.162.00
dólares, EE.UU. $ 53.143.00 dólares. Se encuentra en el quinto
lugar, más abajo se encuentran Alemania, Japón, Francia, Gran
Bretaña. Podemos decir que los países desarrollados tienen un
ingreso promedio mayor de $. 30.000.00 dólares. En
Latinoamérica el puesto más alto lo tiene Puerto Rico con cerca
de $25.000.00 dólares. Pero en Sudamérica el puesto más alto lo
disputan Uruguay: $.16.351.00 y Chile $. 15.752.00. Después le
sigue Argentina con $ 14.760.00 dólares. Después viene
Venezuela con $ 14.415.00 dólares. Brasil con $ 11.808.00
Colombia con $ 7.828.00 dólares. Para recién venir el Perú con $
6.660.00 dólares.

12
Lo insólito resulta que casi todos los países latinoamericanos han
aumentado el doble de su producto bruto interno per cápita en 10
años aproximadamente, mientras el Perú lo triplicó. Si solo
hubiésemos duplicado nuestro Producto Bruto Interno, como los
demás, estaríamos relegados en los últimos puestos. Esta
diferencia económica tiene su correlato con otros hechos como
son la pobreza, la desnutrición, mala educación, fecundidad
desmedida, etc. Siendo la más grave sus efectos, como es la baja
autoestima, que lo sufre toda la población estratos altos como los
bajos. Por supuesto si nos comparamos con otros países aun los
de nuestro continente observamos nuestras diferencias: baja
estatura debilidad congénita por la mala nutrición, una educación
deficiente, nivel cultural pobre.

Es posible que así como hemos triplicado nuestro producto


interno bruto en 10 años basado sustancialmente en la enorme
capacidad de trabajo del hombre peruano podamos revertir esta
situación en pocos años en relación siquiera a nuestros hermanos
latinoamericanos. La pobreza: Está situación de pobreza que
exponemos repercute directamente en la situación del niño y
adolescente. Los estratos bajos del Perú es una población
mayoritariamente pobre. La pobreza es un verdadero drama:
primeramente, se configura como un círculo vicioso, afecta la
calidad y niveles de vida. Las familias que enfrentan una situación
de pobreza se ven afectadas por secuelas de desnutrición, en la
salud y en la capacidad de recibir instrucción que en muchos
casos no pueden ser remontadas, aunque los ingresos mejoren.
Concepto de pobreza: La pobreza es una situación social y
económica caracterizada por una carencia marcada en la
satisfacción de necesidades. Existe además la extrema pobreza,
es el estado más severo de la pobreza. Cuando las personas no
pueden subvertir sus necesidades básicas como alimento, agua
potable, techo, sanidad, educación y cuidado de la salud.

13
Personas con ingresos menores a $ 01.00 dólar diario precios
internacional de 1993 (Banco Mundial).

A.2. Estado del niño y adolescente en el Perú: “La pobreza en el


Perú tiene el rostro de un niño” (Enrique Larrea, diario La
República 23-05-2011)7. En el año 2000 el Perú tenía una
población de 25 millones 662 habitantes, de los cuales el 30% son
menores de 18 años. A pesar que el porcentaje es decreciente
respecto a años anteriores el porcentaje continúa elevado,
especialmente en el área rural (45%). Esto es que la población
etárea comprendida entre la niñez y adolescencia supera el 30 %
de la población del país por lo que hay tener en cuenta para
políticas de desarrollo social. Los problemas se manifiestan
cuando contrastamos el área rural con el urbano: la Desnutrición
crónica afecta al 18% de los niños y niñas de 6 a 11 años de
edad. En el área urbana sólo el 6% se ve afectado por este
problema, mientras que en el área rural afecta al 36%. Asimismo
esta enfermedad afecta al 14 % de los niños y niñas que hablan
castellano como primera lengua, pero al 43% de aquellos que
hablan una lengua nativa. El acceso a la educación secundaria
está marcado por significativas diferencias, en el área urbana la
asistencia a la educación secundaria es del 84%, mientras que en
el área rural alcanza solo el 67%. Más marcada aún es la
diferencia en acceso por motivos étnicos, con sólo un 38% de los
adolescentes que hablan una lengua originaria asistiendo a la
secundaria en comparación a un 79% entre los castellano
hablantes. Huancavelica es el caso más alarmante de
desnutrición crónica entre los niños desde la concepción hasta los
5 años, con el 59.2% según la Organización Mundial de la Salud.
Otro de los problemas graves es la anemia para los niños de 6 a
11 años, lo padecen a nivel nacional el 32% entre los niños y
niñas. Pasco tiene la tasa más alta de anemia con el 52% seguido

7
Enrique Larrea, Artículo del diario la República,23 de mayo del 2011

14
por Puno con 49%, mientras las más baja la encontramos en San
Martín y Lambayeque con 12% y 14%.

Mientras que en relación al servicio de agua y saneamiento


revelan que el campo y los departamentos más pobres son los
más desabastecidos. En tanto a nivel nacional el 66% de niños
tienen acceso al agua potable, en áreas rurales apenas el 32%. Y
en lo que se refiere al saneamiento el 73% cuenta con este
servicio en zonas urbanas mientras las rurales esta tasa cae al
9%. Ser niño y adolescente en el Perú, implica pobreza,
enfermedad y riesgo social. Con respecto a las familias se
constata que las condiciones en las que se desenvuelven la
mayoría de niños y adolescentes, muestran una serie de
insuficiencias y desventajas que repercuten desfavorablemente en
su desarrollo.

Las proyecciones oficiales del Instituto Nacional de Estadística e


Informática (INEI) para el año 2010, la población del Perú se
acerca los 30 millones de habitantes, en consecuencia ahora
(2014) ya supero esa barrera. El 36 % está conformada por niños
y adolescentes de 0 a 17 años, alrededor del 45 % vive en
condiciones de pobreza. En el caso de pobreza extrema el 12 %
del total de la población peruana se encuentra en esta situación
frente al 19 % de los niños y niñas de 0 a 5 años. Los efectos que
causa está pobreza es la desnutrición, la anemia, deserción
escolar, el trabajo infantil, por ello es vital que el Estado asuma su
papel y ataque a la pobreza para que los niños y adolescentes
obtengan un mejor nivel de vida y buen desempeño en su vida
futura.

B. La desnutrición en el Perú: Podemos definir la desnutrición como


un estado patológico caracterizado por la falta de aporte
adecuado de energía y/o nutrientes acordes con las necesidades
biológicas del organismo que produce un estado catabólico,
sistémico y potencialmente reversible.

15
La causa de la desnutrición puede ser biológica, pero no es ésta
de la que queremos hablar sino la causa estructural, esto la
ocasionada por la pobreza. Para la FAO para 2009, o sea hace 5
años existía en el mundo 1.020 millones de que sufrían de
hambre y el mayor porcentaje de esta población vivía en los
países subdesarrollados. Siendo las características: - Apariencia
emaciada. - Debilitamiento muscular y pérdida de grasa muscular.
- Piel arrugada. - Descamación de la piel. - Abdomen distendido.
Los sectores más vulnerables son los socioeconómicos bajos y
dentro de estos las madres gestantes y los infantes de 01 a 04
años, lo cual inducirá a una adolescencia con problemas físicos e
intelectuales. (Vásquez H. Enrique ¿y los Niños…Primero? Fondo
Editorial Universidad del Pacífico. Lima 2004. Pag. 37). La
secuela de la desnutrición es grave. En el Perú como hemos
dicho hay como 10 millones de peruanos entre niños y
adolescentes que sufren de desnutrición por lo que se tiene que
actuar rápido y radicalmente para que la recuperación sea
completa.

En el gobierno de Alan García con el afán de disminuir la pobreza


creó la Estrategia Nacional Crecer en el año 2007 logrando bajar
la desnutrición de 40% a 32%. El actual gobierno de Ollanta
Humala también asumido radicalmente medidas para disminuir la
pobreza creando el programa Juntos, aspirando bajar la
desnutrición hasta el 16% al final de su gobierno. Hay que tener
presente que el Perú está en el puesto 21 en Latinoamérica con
25.4 de desnutrición en el año 2009, teniendo el más alto puesto
chile con el 1.5%, Cuba esta con 4%, Paraguay 10%, Brasil 11%,
Argentina 13%. El Perú solo supera a Ecuador, Haiti y Bolivia.
(Elizabeth Herrera Quispe,8 Desnutrición en el Perú. Google) En
la actualidad se tiene entendido que el Perú ha disminuido el nivel
de Desnutrición al 18.1% conforme datos de la UNICEF 2013.

8
Elizabeth herrera Quispe, desnutrición en el Perú, Google. 2010.

16
Lo que aún resulta alto. El gobierno actual se ha comprometido
bajarlo a final de su periodo al 10%. Para los efectos de atención
en zonas deprimidas se han creado diversos programas como es
el caso del Fondo para la Inclusión Económica en zonas Rurales
el mismo que cuenta con un fondo de S/. 600 millones de soles
depositados por la Dirección General de Endeudamiento y Tesoro
Público del Ministerio de Economía y Finanzas, en una cuenta de
carácter intangible. Después hay el programa Cuna Más, a cargo
del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, cuyo objetivo es
mejorar el desarrollo infantil de niños y niñas menores de 3 años
de edad en zonas de pobreza y pobreza extrema, para superar
brechas en su desarrollo cognitivo, social físico y emocional. Se
creó el 23 de marzo del 2012, sobre la base del programa
WawaWasi.

Y niñas entre 06 a 36 meses de edad en situación de pobreza y


pobreza extrema, otorgándoles atención alimentaria, nutricional,
servicio integral de salud y aprendizaje infantil. También hay
servicio de acompañamiento de familias, se establece en áreas
rurales diseñado sobre la experiencia del servicio de Qatari Wawa
(2008-2012). Otro programa Juntos, Programa Nacional directo a
los más pobres, es un programa de transferencias monetarias
condicionadas que se inscribe dentro de la política de desarrollo e
inclusión social del gobierno peruano. Pensión 65, este programa
tiene por finalidad otorgar protección a los grupos sociales
especialmente vulnerables, dentro de los cuales están los adultos
a partir de los 65 años de edad que carezcan condiciones básicas
para su subsistencia.

1.3.1.2. Elementos condicionantes

Estos son variables que dependen, asimismo, de la situación del


país.

17
C. La Salud. Según Informe de la UNICEF9 el cual establece que
una gran proporción de niños en el Perú enfrenta una situación
caracterizada por la baja calidad de vida, escasez de
oportunidades, falta de acceso a los servicios básicos y pobreza
que se traducen en mortalidad infantil. Esto no es algo reciente
sino que viene acumulándose en el transcurso de los años. Uno
de los más graves trastornos de la niñez y adolescencia es la
depresión. Los menores que sufren estos trastornos proviene
generalmente de un cuadro de stress proveniente de cuadros de
ansiedad, conflictos familiares incertidumbre respecto a su
orientación sexual, pobre rendimiento estudiantil, trastorno por
uso de drogas, pérdida de uno de sus padres o de un UNICEF.

Salud en el Perú. 2010 ser querido, rompimiento de una relación


sentimental, abuso, abandono, enfermedades crónicas. Se
manifiesta como estado de ánimo triste o irritable, perdida de
interés o placer en actividades que antes disfrutaba, cambio
significativo en el apetito y peso corporal, etc. Entre las
características encontramos, dolor de cabeza, retraimiento,
ausencia escolar, etc. Para ello los padres y sus profesores tienen
que tener una actitud de percatarse sobre la situación del niño o
adolescente y si fuese el caso, preguntarle si ha pensado en
suicidarse. Si fuese ese el caso actuar de inmediato para un
tratamiento o terapia; no dejarlo solo. La base del tratamiento
debe ser la afectividad, el dialogo la comprensión. Otro de los
males que asola a los niños y adolescentes reiteramos es la
desnutrición. El mismo que hemos enunciado paginas arriba. Otro
de los problemas graves en nuestro país es el aborto. En el Perú
no hay política en relación al aborto, sólo existe la criminalización.
Todos hablamos en relación al aborto, todos estamos en contra
pero el dilema mayor es como lo afrontamos. No existe una
política estatal en relación al aborto. No hay una política

9
UNICEF, google. Salud en el Perú. 2010

18
preventiva, educativa. Sólo existe la represión penal y esta no es
una solución sana.

En Italia antes de la segunda guerra mundial el gobierno dispuso


que a toda mujer que salga gestando, las premiarían
económicamente, además que el estado asumiría el
mantenimiento si es que la parturienta o la madre no estuvieran
en capacidad de mantenerlo. Reduciendo con esta política en la
mínima expresión el aborto clandestino. La organización Mundial
de la salud define el aborto la interrupción del embarazo cuando el
feto no es viable fuera del vientre materno. En el Perú solo se
admite penalmente el aborto terapéutico con la finalidad de salvar
la vida de la madre o vaya sufrir un daño grave o irreparable. (art.
119 del C.P.). El problema del aborto se encuentra mal enfo cado,
en razón que, uno puede estar en contra de la penalización en
cuanto al bien jurídico afectado, pero eso no implica estar a favor
del aborto. Uno puede estar radicalmente en contra del aborto,
pero combatir éste mal mediante una efectiva política social,
educativa, como es por ejemplo, premiar a la mujer que salga
gestando, o subsidiar económicamente, como se hizo en Italia en
el año 1935, a consecuencia de ello desapareció el aborto en ese
país.. Pero criminalizar el aborto, es un acto de cinismo. En la
situación actual, en que la mujer desvalida y en la pobreza, pueda
quedar gestando y sin apoyo de su pareja por cualquier causa,
verdaderamente se encuentra entre la espada y la pared, tanto su
vida, su futuro; en esta situación de desesperación pueda tomar
una decisión equivocada. No podemos tapar el sol con un dedo, o
cegarnos, de que no es un problema. En el Perú se producen más
de 350.000 abortos al año (o más) donde mujeres adolescentes o
adultas se exponen a perder la vida llevadas por la
desesperación, en consecuencia se deben adoptar ideas
compatibles al reto, pero sin que se tenga que afrontar juicios
legales absurdos, que además por la benignidad de la pena
muchas veces prescriben y no se logra disuadir la conducta. En

19
Cuanto al consumo de drogas es alto ya sea por parte de los
varones, pero la magnitud del consumo de drogas por parte de las
mujeres también es elevado. De 100 estudiantes hombres que
consumen drogas hay 69 estudiantes mujeres que consumen
drogas ilegales. El uso de drogas médica es superior por parte de
las escolares mujeres en relación a consumo por parte de los
escolares varones (de 100 hombres hay 142 mujeres que
consumen diversos tipos de drogas incluyendo drogas médicas).
En realidad no es por parte del autor de este documento tratar
hablar en forma pormenorizada sobre los diferentes datos que
infieren sobre la conducta y el desarrollo integral del menor en el
futuro sino dar indicadores generales, referenciales, de interés
metodológico fundamentalmente. La responsabilidad que
debemos tener en relación al niño y adolescente, y su futuro,
sustancialmente en función de la influencia que se va tener en la
sociedad peruana.

D. La Educación. Podemos Afirmar que parafraseando el dicho


“que los niños son el futuro de la sociedad” podemos decir “como
son los adultos y autoridades actualmente sabremos la formación
y ejemplos que han recibido en la niñez”. Obviamente podemos
afirmar que en este ámbito el país parte de sus autoridades
empezando por los Presidentes de la República en colusión con
delincuentes desvalijaron al país (1990 al 2010), proponiendo
patrones de conducta que aparentemente podían darse por
atenuados o desaparecidos en la actualidad: pero no ha sido así:
continúa en su esplendor la corrupción en todos los ámbitos,
como es el caso en el sector de Educación en instituciones
universitarias donde rectores se ponen sumas astronómicas en
sus sueldos para cualquier tipo de país ya sea desarrollado o en
vías de desarrollo, saqueando el patrimonio de estudiantes de
universidades privadas (casi en general); alcaldes, presidentes de
región, entidades encargadas de aplicar justicia, medios de
comunicación apañadores y cómplices.

20
Todos ellos con notorias muestras de conducta delictivas. En
consecuencia podemos decir que la educación en el Perú sufre de
gruesas fallas. A contra pelo de ello sin embargo manifestamos
que la educación es uno de los derechos fundamentales de los
niños y adolescentes. La educación es una tarea permanente de
las personas que debe ser satisfecha hasta la más avanzada
edad. “La educación tiene como finalidad –dice nuestra
Constitución Política en el artículo 13- el desarrollo integral de la
persona humana”. La educación en el Perú, no se desarrolla
como quisiéramos. Tiene notorias fallas a nivel, inicial, primaria,
secundaria y universitaria.

La educación por parte del Estado se brinda gratuitamente y debe


ir acompañado con los servicios de alimentación y salud. En
cuanto a las normas jurídicas están bien orientadas el asunto es
ponerlas en ejecución. Se habla de la gratuidad de la enseñanza,
servicios a los alumnos, hincapié en relación a la formación de
maestros de calidad, materiales e infraestructura educativa. Pero
todo ello se tropieza con la precariedad del presupuesto por dar
un ejemplo: en el Perú se gasta $400.00 dólares por alumno al
año mientras que en Chile es $1.500.00 dólares por alumno al
año. La educación forma parte del tejido institucional y social de
un país y es cimiento de su potencial humano. La educación es
base sustancial para el desarrollo de la persona y con ello del
país. Deficiencia estructural en la educación como por ejemplo no
permitir el acceso de toda la población a prepararse es fuente de
frustración personal e incuba deterioros sociales. El escaso
presupuesto no permite que el Estado pueda asistir a la población
con una educación eficiente. Los centros escolares están lejos de
los núcleos estudiantiles. Hay niños que tienen que caminar horas
para asistir a clases. Los maestros tienen una escasa
preparación.

El presupuesto de la República asignado a educación no permite


dar una educación decorosa aun cuando se propongan año tras

21
año que el presupuesto de la República sea el 6 % del mismo,
esto no se cumple, históricamente se llega hasta el 3% a
contrapelo de otros países de la región que su presupuesto anual
llega al 6%. El sueldo de los profesores es escaso. Por regla
general no llega a los dos mil soles oro. Todo ello contribuye a
una elitización en formación educativa, conllevado a la
desigualdad en la educación. Ante una educación deficiente y un
mundo enormemente competitivo los estudiantes rurales y
aquellas zonas deprimidas asumen un reto en total desventaja.
Niños, adolescentes y hasta adultos de zonas deprimidas y
rurales como es el caso de Huancavelica, Cajamarca, Apurímac,
para ellos siquiera ver una película tiene dificultades de
entendimiento, cuando llegan a zonas de más desarrollo
conseguir trabajo se les hace un mundo, por lo incipiente de su
formación. Hasta para servir en un hogar se sienten incapacitados
al verse atascados al no poder encender y poner en uso un
microondas, aspiradora o quien sabe encender una cocina a gas
pero no porque tenga acceso a ellos pero nunca ha hecho uso de
ellos sino porque nunca los ha visto. En términos generales el
sistema educativo peruano sufre de tres problemas graves: baja
calidad educativa, desigualdad e ineficiencia. La primera hace
alusión al tipo de calidad que brindan los profesionales a los
estudiantes; el segundo es la desigualdad existente, en especial
las zonas rurales y urbanas, particulares y estatales. Por último la
infraestructura, totalmente deficiente. No obstante, todos estos
males que acosan el sistema educativo peruano, donde el más
resaltante es la corrupción, por otro lado debemos dejar
constancia la mística de otros miles de maestros que no ceden
ante estas plagas y cumplen sus tareas de formación de niños,
adolescentes y jóvenes universitarios con la única satisfacción de
cumplir con los demás por un desbordante e ilimitado amor al país
y a la sociedad.

22
E. La Autoestima. La autoestima entendiendo como factor
psicológico subjetivo. Responde a los valores sustancialmente de
dignidad, positivos o negativos10 que tenemos internalizado. La
autoestima puede responder a factor personal o puede ser
manifestación de toda o gran parte de la sociedad. Nosotros
queremos verlo como uno de los efectos que sufre un niño y
adolescente conforme a la situación en la que se encuentra el
país. Si la situación es de pobreza, como es el caso del Perú el
efecto puede resultar perverso. En consecuencia es una de las
consecuencias que más grave y perniciosa que se recibe.

En el Perú la bajo autoestima es casi generalizada. Se sufre o


percibe pesimismo por parte de todos los sectores sociales. Esto
es manifestación asimismo de la desigualdad social, las
diferencias sociales que vienen heredados desde la llegada de los
conquistadores. Está bajo autoestima se puede expresar por
sentimientos que conducen a la depresión. Hay personas que
sufren la depresión sin percatarse de ello. Segmentos femeninos,
-se rehúsan querer buscar trabajo, esperando que su pareja las
mantenga-, niños y adolescentes, que se descuidan en su
higiene, hábitos de consumo, presencia personal, etc. Actúan con
temor, cualquier problema o perjuicio les echan la culpa a otros.
Proclives de culpar a los padres u otros miembros familiares de
sus inconvenientes o traumas. Vergüenza de ingresar a sitios
públicos o de enfrentar conglomerado de personas. Sentirse
abatidos ante extranjeros. Todo ello puede ser combatido
ciertamente con un trabajo persistente psicológico. Pero la
principal manera como puede ser superado socialmente, es con
éxitos sociales y económicos del propio país en su conjunto.

1.3.2. El derecho del niño y adolescente como fenómeno histórico

El Derecho del Niño y Adolescente debemos verlo también como


un fenómeno histórico, hay que apreciarlo de esta manera,

10
Autor y Editor Corporación Chirre. Lima. 1998.pág. 08.

23
analizarlo de este modo. Entendiendo que hacer historia es un 50
% de concepto de lo que estamos analizando (Samuelson,
Economía, 1er. T.14). Veremos como el fenómeno jurídico, es
algo reciente. No podemos negar la actitud instintiva del ser
humano de acudir al niño y adolescente desde siempre. Pero no
ha existido la conducta afectiva apropiada todo el tiempo. A veces
los adultos desfogaban sus frustraciones (bueno según
investigaciones realizadas sobre el maltrato al niño son las
madres quienes más maltratan a sus hijos) en los niños, esto no
ha sido erradicado hasta la fecha. Para el historiador Philippe
Aries, historiador francés, en su obra el Niño y la Vida Familiar en
el Antiguo Régimen, señala Samuelson11, Economía. Editorial
Mcgraw-Hill Primer Tomo. XII edición. México. 1990. Pág. 45. que
la infancia es un descubrimiento hecho en el siglo XVII al XVIII.

1.3.2.1. El Derecho del N.A. en la antigüedad.

De los restos materiales obtenidos se observa que


jurídicamente los pueblos que han dejado suficiente
documentos, esto es desde que se descubrió la escritura,
como es el caso de los Griegos y en Roma especialmente
en estos últimos el Estado dispuso poder irrestricto al
padre para que impusiera orden en su entorno. El niño y
adolescente, así como la propia madre, se encontraba
totalmente subordinada a la autoridad paterna. En Roma
se denominó esta potestad como Pater Familis, el Estado
otorgó con éste principio todo el poder al padre. Aunque el
poder mayor lo detentaba el Estado (ius imperium). En la
antigüedad, Grecia, Roma, Judea, se podían establecer
normas, conductas violentas contra los niños y
adolescentes como es el caso de Herodes, quien dispuso
la muerte de los niños primogénitos. En Grecia, -
Espartamás apropiadamente, se permitía la muerte de
niños recién nacidos. Aunque esta actitud estaba
11
Samuelson, Economía. Editorial Mcgraw-Hill Primer Tomo. XII edición. México. 1990. Pág. 45.

24
permitida en todas la ciudades griegas. Además, estaba
admitida la esclavitud de los niños y adolescentes, los
padres podían vender sus hijos o cualquier miembro de su
familia como esclavos. O pagar deudas entregando a sus
familiares incluyendo a sus hijos como esclavos, lo que
motivo muchos levantamientos y enfrenamientos, donde
el legislador griego, Solón tuvo que intervenir como
autoridad y evitar se continúe con estas prácticas, que
estaba generando conflictos entre los sectores sociales.
También eran frecuentes los sacrificios de los niños y
niñas como también mutilaciones para ser utilizados
posteriormente como guardianes del harén de las clases
altas. O simplemente porque decían que la voz de los
niños castrados era más bella. O también para el tráfico
sexual. El sacrificio religioso asimismo estaba permitido y
esto lo advertimos en las páginas de la Biblia, donde se
relata el caso de Abraham, quien estuvo a punto de
sacrificar a su hijo Isaac, según manifiesta por mandato
divino. Doctrinalmen te en el siglo 400 a.e. Aristóteles
decía “un hijo y un esclavo son propiedad y nada de lo
que se hace con su propiedad es injusto”12. En el siglo IV
a.e. en Jericó los niños eran empotrados de los cimientos
de las murales, muros de los edificios y puentes, para
supuestamente fijarlos.
1.3.2.2. El DNA en Roma.

En edad antigua la minoría de edad se daba hasta los 25


años. La pubertad se iniciaba desde los 14 años y se
podía contraer matrimonio desde esta edad. P. Aries,
manifestaba en su obra que el varón ciudadano
representaba el mejor valor de la sociedad, creando con
ello desigualdad entre los hijos y la madre. En Roma
había tres instituciones básicas dirigidas hacia la

12
Aristóteles, La Política. Idem Pág. 31

25
protección del menor: en caso de abandono de los
infantes, instituciones alimentarias y los registros y
certificados de nacimiento. El abandono de los hijos era
una atribución propia de la Patria Potestad, en
consecuencia atribución propia de la vida y muerte sobre
sus hijos. (ius vitae et necis). El hijo respondía a la
característica del alieni iuris, es decir la dependencia y
subordinación del hijo. La Ley de las XII tablas se
reconocía la venta de los hijos o la muerte por
deformaciones “cito necatustaquam ex XII tabulisinsgnis
ad defor-mitatempuer”. En cuanto a la institución de la
Alimenta, Las primeras referencias las encontramos en el
Gobierno de Nerva (96-98) quién concedió ayuda públicas
a las familias que carecían de medios para poder sacar
adelante a sus hijos, estas ayudas se denominaron
alimentas. Con el emperador Trajano (98-117) se
institucionalizo y el emperador Adriano continúo con estas
ayudas creándose la figura de praefectusalimetorum. En
cuanto a los Registros y Certificados, respondían a la Lex
Aelia Sentia (4 d.c.) y la Lex Poppaea (9 d.c.).
Obviamente no todos los nacidos podían ser inscritos.
Estaba restringida a los legítimos. En cuanto a la Patria
Potestad en Roma, la dependencia al padre era total en
relación a los hijos, esposa, madre y esclavos. En relación
a los hijos esta sujeción desaparecía de a cuerdo a
derecho. A principios del siglo (8 15 Aristóteles, La
Política. Idem Pág. 31 d.c.) Primero Ulpiano y después
Marciano suavizaron los rigores de la Patria Potestad
como que no se puede matar al hijo sin antes escucharlo
o en el caso de Marciano, que deportó a un padre por
haber matado a su hijo acusándolo de mantener
relaciones son su madrastra. Aduciendo el emperador que
la Patria Potestad debe consistir en la piedad, no en la
atrocidad. Ciertamente que esto podía confundir el poder

26
de la Patria Potestad con el ius imperium propio del
Estado y gobierno Romano. Fue en el imperio romano de
oriente donde se constituyo la más alta expresión jurídica
siendo durante el reinado de Justiniano (482-565 d.c.)
quién secundado de grandes juristas dirigido por
Triboniano (según refiere el maestro peruano José
Antonio Silva Vallejo13) hicieron la notable compilación
denominada Corpus Iuris.Con las Cruzadas habidas en el
Medioevo con la finalidad de recuperar la Tierra Santa se
organizó una cuarta cruzada denominada infantil,
organizada por el Papa Inocencio III (1148- 1202), que
utilizando predicadores fanatizados se hizo este
experimento que acabó en una debacle. Empujada
además por la hambruna que sufría Europa. Falleciendo
miles de niños y algunos eran hasta sacrificados con
finalidad de alimentarse. La aventura fracaso
estrepitosamente, al cruzar los niños el mediterráneo
algunos barcos naufragaron y los que llegaron a las
costas fueron vendidos como esclavos en Egipto. En otras
cruzadas habidas la hambruna era tan fuerte que se
comían a los niños, permitiéndose antropofagia. Para los
efectos religiosos en una sociedad signada por prejuicios
teológicos, el Derecho Canónico medioeval estableció la
edad de siete años para recibir los sacramentos. Al
margen que socialmente desconocían la sutileza de los
niños considerándolos como si fueran adultos lo que hay
muchas referencias en los trabajos pictóricos donde se
ponían a los niños con rostros de adultos.
1.3.2.3. El Derecho del niño y adolescente en la Etapa Moderna:

Se logró entender la educación que se debía dar a los


niños y adolescentes, tenemos la obra de Emilio de Juan

13
José Antonio Silva Vallejo, El Pensamiento Jurídico y Filosófico. 2010. Ed. J.A.Silva Vallejo. II Tomo Pág.
1119.

27
Jacobo Rousseau donde plantea la controversial hipótesis
que el “hombre nace bueno y la sociedad lo corrompe”14 .
En esta obra da pautas sobre la educación al niño y
adolescente. Suavizar la educación que se daba en esa
época. En su obra Fermin Chunga la Monja15, recoge
algunos datos, que reproducimos: en Alemania en el año
1833 se dieron modelos de readaptación; en Inglaterra en
el año 1854 se separó a los niños de los delincuentes. En
Rusia en 1897 se normo que los procesos a los
infractores niños y adolescentes fuese a puertas cerradas.
En el siglo XIX no existía un centro de protección a los
niños como es el caso en Nueva York el maltrato dado a
la pequeña Mary Ellen (1874), por sus padres adoptivos,
quién denunciados en los tribunales, no había quién la
represente ante esa instancia legal, teniendo que ser la
sociedad protectora de animales quien la defienda. A raíz
de este suceso se crea en Nueva York la primera
Sociedad de Prevención de la crueldad en los niños.
Fermín Chunga la Monja resalta que en el año 1899 se
constituyo en Chicago – Estados Unidos el Primer
Tribunal de Menores, que denomino la Partida de
nacimiento del menor, que después cundió el ejemplo en
todos EE.UU. y a nivel mundial. Pues sirvió para la
creación jueces especiales avocados al tratamiento del
menor como disciplina jurídica autónoma con sujeto y
objeto propio. Conllevando preparación especial a los
magistrados en el tratamiento y conocimiento de los niños
y adolescentes.
1.3.2.4. En la Época Contempóranea:

Tenemos normas de carácter internacional como la


Declaración de Ginebra del año 1924, cinco escuetos

14
J.J. Rousseau, Emilio; ed. Mercurio, Lima –Perú 1971.
15
Fermín Chunga la Monja, Derecho de Menores,Ed. Grijley5º edición 2000. Pág. 81

28
puntos pero muy relevantes. 17 J.J. Rousseau, Emilio; ed.
Mercurio, Lima – Perú 1971. 18 Fermín Chunga la Monja,
Derecho de Menores, Ed. Grijley5º edición 2000. Pág. 81
Convención de los Derechos del Niño del año 1989, de
gran trascendencia. Reglas de las Naciones Unidas para
la Administración de Justicia a menores. Y las Directivas
de las Naciones Unidas (RIAD). En América, en el año
1919 se creó en Montevideo Uruguay El Instituto
Interamericano en Defensa del Menor. Es con esto, a
partir del Siglo XX, que el Niño y Adolescente dejó de ser
invisibles y empezó a ser tratado técnica y
profesionalmente.

1.3.3. Situación histórica del niño y adolescente en el Perú.

A) En la sociedad incaica: Obvio que lo prioritario fue la subsistencia.


El mayor desafío lo ofrecía el medio ambiente. No se tiene
conocimiento que las culturas subordinadas a los Incas fueran
tratados de manera cruel y vejatorio. Había un autoritarismo
estatal. La sociedad incaica era enteramente estratificada. A cuya
cabeza estaba el Inca, la nobleza denominada “Orejones”. Los
niños de clases altas tenían acceso a la educación en los centros
de instrucción llamados Inkahuasi y a cargo de maestros
llamados Amautas. Los niños de sectores bajos, su educación
estaba ligado a las labores sustancialmente de tipo doméstico:
cuidado de hermanos menores, ayuda en el trabajo en la
agricultura. El trato hacia los niños era dicotómico, esto es suave
por un lado y riguroso por otro, especialmente en lo que se refiere
a ritos religiosos, que conducían hasta el sacrificio.

B) En la colonia: Dominada por la élite española. Se caracterizó por


ser una sociedad escindida y excluyente, especialmente en
relación a la raza indígena. El trabajo se convirtió en obligatorio
para los de ésta raza. Se rompió la correa de transmisión que
significaba la familia. La desigualdad se entronizó y con ello la

29
pauperización de toda la sociedad. Los indios podría afirmarse
que trabajaban en las minas hasta el exhausto y hasta la muerte.
Se dieron medidas protectoras, como es el caso para menores de
18 años, quienes no tributaban, en caso de trabajar éste debería
ser remunerado, igual en los casos de trabajo en las mitas; pero,
esto era verdaderamente un eufemismo, pues la retribución no se
cumplía. Tan así es así que las madres mataban a sus hijos
recién nacidos para evitar que trabajaran en las mitas16.

C) En la República: Los sectores sociales débiles continuaron


desprotegidos. José Luis Orbegoso creó la Beneficencia Pública
de Lima y Agustín Gamarra la reglamentó. El Mariscal Castilla
elaboró el Primer Manual de Crianza de Niños. En el año 1918
durante el Gobierno de José Pardo y Barreda se dio una ley
precursora: la ley 2851 a favor de los niños y adolescentes y de la
mujer. Se estableció la jornada laboral de acuerdo a la edad: no
más de 6 horas los adolescentes a partir de 14 años hasta los 18
y las mujeres no más de 8 horas. Prohibición de trabajo nocturno
y perjudicial. Se establecieron Casas Cunas en los
establecimientos laborales y una hora para atender a los recién
nacidos, Descanso por Lactancia y Beneficio de ingreso para el
huérfano del Empleado Público. Recién en el siglo XX se
materializaron dispositivos a favor del niño y adolescente.
Primero, el Código de Procedimientos Penales de 1914, después
antes acotada, a continuación el Código Penal de 1924, Código
Civil de 1936, Código de Menores de 1966 y Código de los Niños
y Adolescentes 1991 y 2001.

1.4. EL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO JURÍDICO

Para nuestra materia que es el Derecho del Niño y Adolescente viene a


constituirse naturalmente el más resaltante. Que, en relación al Derecho
del Niño y Adolescente como aspecto jurídico, debemos sentar algunas
premisas de lo que debemos entender lo que es Derecho. El Derecho

16
Héctor Galeano, Las venas abiertas de América Latina. Internet.

30
como se conoce actualmente, en gran parte de América fue importado,
tomado como hecho reciente17. Mientras que en Áfri19 Héctor Galeano,
Las venas abiertas de América Latina. Internet. Es reconocido el Código
de Hammurabi, encontrado en Mesopotamia, hecho en piedra de basalto,
como uno de los documentos más antiguo del mundo. Después Asia y por
último Europa, tuvo un desarrollo normal; por la interconexión e influencia;
sin embargo en la actualidad tanto el Derecho del Niño y Adolescente
como el derecho femenino está adquiriendo gran desarrollo y
protagonismo. Veremos cómo se plasma jurídicamente tanto en lo
doctrinal como en las normas.

1.4.1. Condición jurídica del niño y adolescente

En el Perú la condición jurídica del niño y adolescente estaba


regulado en la Constitución Política e históricamente dentro del
Código Civil y el Código Penal, también en el Código Procesal Civil y
el Código de Procedimientos Penales. Posteriormente en el año 1964
apareció una norma especial. Aunque laboralmente estuvo legislado
en la Ley 2851 del año 1918. Nuestra Constitución actual en una
incongruente normativa dice del niño y adolescente en el artículo 4º
que la comunidad y el estado protegen especialmente al niño y
adolescente, a la madre y al anciano en estado de abandono18.
Podemos adelantar decir que es incongruente, -pues más adelante
volveremos hablar del tema- en razón que nuestra Constitución del
año 1993 habla de sociedad y Estado. Pero es inexplicable por qué
ingresan utilizar el término lingüístico comunidad, cuando ya todos
tenemos formado un concepto de sociedad pero no el de comunidad.
Además agregan “en estado de abandono” cuando nuestro Código
del niño y adolescente está integrado enfáticamente a la doctrina de
la protección integral y en consecuencia no puede hacer distinción o
acoger el concepto superado y antagónico de la doctrina de situación
irregular, nuestro Código del Niño y Adolescente, fiel reflejo de la

17
Es reconocido el Código de Hammurabi, encontrado en Mesopotamia, hecho en piedra de basalto,
como uno de los documentos más antiguo del mundo.
18
Gustavo Gutierrez-Ticse. Constitución Política del Perú. Ed. Grijley. 2010. Lima

31
Convención de los Niños, no puede hacer distinciones entre niños y
adolescentes en estado de abandono y los que no están en estado de
abandono, todos son iguales. Nuestro Código Civil al hablar de
capacidades, dice sobre el niño y adolescente que son incapaces:
absoluto (desde la concepción hasta los 16 años) e incapaces re
lativos, (de los 16 a los 18 años). En cuanto a Tutela Jurisdiccional lo
pueden adquirir a partir de los 16 años cuando contraigan matrimonio,
también pueden interponer demanda de alimentos. Esto es capacidad
de ejercicio que lo tienen limitado y pueden ejercitarlo en casos
puntuales como los mencionados.

En relación a nuestro Código Penal el que teníamos en año 1924


señalaba que la pena que podía infligir al niño y adolescente infractor
era 50% del adulto. Recién en el siglo XX se elabora la teoría de la
inimputabilidad. Que en el Perú responde al principio juri et de jure.
Consistente en la capacidad de atribuirle a alguien un delito. Siendo
en consecuencia su fundamento su libertad y capacidad de
discernimiento. En la caracterización y definición del delito –acción,
típica, y antijurídica- un adolescente infractor puede estar
comprendido dentro de estos elementos, pero no en relación a la
culpabilidad, puesto que no puede ser sujeto de reproche. Según la
doctrina se considera inimputable por falta de experiencia (Santo
Tomás de Aquino). Otra interpretación es el embotamiento de sus
sentidos, bajo intelecto, incapacidad para entender la acción injusta.
Condición privilegiada. Vulnerabilidad. Capacidad de rehabilitación e
insertarse en la sociedad (conclusiones que obtuve como Fiscal
Provincial de Familia en el Distrito Judicial de Huaura en los años
1998 a 2005). Además de ello no es poco frecuente que sufran
trastornos bipolares, paranoia o esquizofrenia, que se van superando
a medida que vaya avanzando en la edad para que en un momento
determinado desaparecer.

32
1.5. EL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO
DOCTRINAL.

Se entiende que existen dos doctrinas: -Doctrina de la Situación Irregular. -


Doctrina de la Protección Integral. Son dos teorías una antigua y otra
moderna. De manera general una se aplica a países atrasados y otro en
las civilizaciones de mayor desarrollo.

1.5.1. Doctrina de la situación irregular.

Como hemos dicho es propio de países atrasados. Se remarca la


situación de abandono o cuando se encuentran en estado de peligro
social, moral y material. Hay precariedad extrema: pobreza extrema.
Se toma en cuenta: -Cuando el menor se encuentra en estado de
abandono. -Menores infractores. -Sustancialmente: segregación. Se
criminaliza la pobreza. Es como si existieran dos mundos: el de los
niños y adolescentes de clase media y ricos. Y del otro lado los
niños y adolescentes de clases bajas, pobres o muy pobres. A estos
últimos caen las medidas tutelares o son considerados como
infractores. Por decir un adolescente es intervenido caminado por
haberse sustraído un gorro de la banca de un parque: la autoridad
hace una distinción, si pertenece a la clase media, lo toma como una
anécdota pero si es de familia pobre: lo remite interno a un centro
juvenil. Características intrínsecas:
-El Juez de Familia asume todas las responsabilidades. No consulta
ni toma en cuenta la opinión del Fiscal de Familia, de los auxiliares
de justicia. Actúa como si fuera un padre: esto niega al Niño y
Adolescente su capacidad de sujeto de derechos. El Juez si por el
fuese bota al Defensor del Infractor y a su familia. Se considera
omnímodo y resuelve conforme a su propia subjetividad. Si le cae
bien el adolescente es benigno con él, pero si no le cae bien, le
aplica lo más severo del Código del Niño y Adolescente.

-Al no respetarse al Niño y Adolescente con ser Sujeto de Derechos


se vulnera sus Garantías Constitucionales: legalidad, adopta criterios
de peligrosidad, sujeto de restricciones. Se sanciona la pobreza. Hay

33
asistencialismo, del cual no discrepo, pero si cuando es
indiscriminado incluyendo sectores que no precisan, por ejemplo
personas aptas para trabajar, a los cuales se les puede inocular una
actitud permisiva y ociosa. Presunta compasión por parte de las
autoridades y legisladores disfrazando los hechos con eufemismos.

1.5.1.1. Doctrina de la protección integral.

Se salvaguarda su interés desde la concepción hasta que se cumple


los 18 años de edad. Tiene caracteres tutelares. El apoyo se hace
extensivo a la familia, especialmente a la madre. Lo que es loable.
Se incentiva: centros prepartos, cobertura escolar, creación de
cunas infantiles, comedores populares, campañas de salud, centros
recreacionales, incentivos pecuniarios (caso de Canadá donde a los
niños y adolescentes escolares se les gratifica con una cantidad
regular a los alumnos responsables. Caracteres Intrínsecos: -Está
abolida la segregación entre niños y adolescentes. Se trata de
eliminar la desigualdad. -Se eliminan el criterio de peligrosidad. -
Todos los niños y adolescentes son tratados iguales. -Existe el
concepto univocó que el niño y adolescente es sujeto de derechos. -
Las medidas socio educativas o tutelares aplicarse responden a la
acción incurrida y no por ratio de estado de abandono. El Juez ya no
actúa con criterios de paternidad, respetar el principio que niño y
adolescente es sujeto de derechos. -El juez tendrá que tomar en
cuenta la opinión de los demás partes del proceso. Intervención de
diversas autoridades, profesionales, como los auxiliares de justicia:
trabajadores sociales, médicos legistas especializados, psicólogos,
policías. -Respeto al principio de legalidad. -Eliminación de
eufemismos. ANGELA

1.6. EL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO


AUTÓNOMO.

En relación al derecho del niño y adolescente hay una línea confusional


como es el caso con el Derecho de Familia, sin embargo son distintos.

34
Partamos por tanto señalar unos puntos propios del Derecho del Niño y
Adolescente, cuyos derechos tiene una estructura y características propias.

1.6.1. En cuanto a su estructura.


Responde a lo usual del derecho en general. Un aspecto sustantivo
y otro aspecto adjetivo. En cuanto al primero el Niño y Adolescente
es titular de derechos y garantías tanto Internacionales como
Constitucionales. Derechos inmanentes tanto objetivos como
subjetivos. En cuanto a lo adjetivo, responde a las Garantías
Procesales. Aspecto Político, responde a los lineamientos de la
política gubernamental aplicar. En lo que se refiere a las
características del DNA, tenemos a la didáctica aplicar como es la
Doctrinal y Metodológica. La Legislativa, consistente en las normas
jurídicas que tiene de distintas disciplinas. La Administrativa,
responde al nuevo tratamiento de la Gestión Estatal.

1.6.2. Diferencia con el Derecho de familia.

En relación a diferencia con la familia y el Derecho de Familia por


parte de grandes sectores dan por descontado la dependencia del
Derecho del Niño y Adolescente con el Derecho de Familia, se
considera que el derecho del NA se encuentra inmerso dentro del
Derecho de Familia lo que no es cierto. Diferencias del Derecho de
Familia y el Derecho del Niño y adolescente. Primeramente tenemos
que decir que la Familia en textos sociológicos, doctrinarios como en
la Constitución del año 1979 señala que la familia es célula de
nuestra sociedad. Entendiéndola consiguientemente como una
forma especial de organización y esto es muy cierto, el hombre vive
en sociedad y no se puede desarraigar de esta muy fácilmente sin
que corra enorme peligros su subsistencia. La familia ha pasado por
varios estadios, esto es a evolucionado tal como explicara Lewis
Morgan en su obra la sociedad antigua19 y Al lución de la familia sino
que además da cuenta que la familia sigue evolucionando tal es así
que refiere que en los Estados Unidos el 30% de las personas

19
Lewis Morgan, Sociedad Antigua. Ed. Fondo de Cultura Económica. México. Pág. 45.

35
mayores de 18 años viven solas. Además la constitución de las
familias ya sean en concubinato o casadas, pueden ser disueltas, ya
sea de hecho o con el divorcio. La constituciones matrimoniales o ya
sea de unión de hecho responde a caracteres patrimoniales. El
matrimonio es una institución al encontrarse protegida por la
Constitución de la República y otros hechos. En cuanto al Niño y
Adolescente es de carácter antropológico, consiguientemente
indisoluble: es una etapa transitoria de la vida. La más vulnerable.
Carece además de fines patrimoniales.

1.7. EL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE COMO FENÓMENO


BIOPSICOLÓGICO.

El Derecho del niño y adolescente responde además a factores


biopsicológico y también sociológicos. Aún cuando pretendamos no
observar las diferencias estas saltan a la vista. Si bien en la primera etapa
de la vida hasta la llegada de la adolescencia no son notorias las
diferencias, y si existen son mínimas. Pero posteriormente se acusan las
diferencias. A partir de la adolescencia y con la primera menarquía de la
mujer se suscitan transformaciones. Los desórdenes de carácter general
entre ambos es las vertientes hormonales haciendo a las mujeres se
reproduzca conductas feministas y en el hombre machistas. En ambos se
dan desórdenes psicológicos como son paranoias, esquizofrenias (su
mundo existencial dividido), delirios de persecución. Conducta bipolar. Esto
es, pasar de euforias delirantes hasta depresiones graves. Las infracciones
más comunes en el varón son el hurto y lesiones. Se manifiesta además
delirios de autoafirmación y causar admiración que conduce a
exacerbaciones sociales sobre todo cuando se encuentra en
muchedumbre. Mientras que en la mujer –según Simone de Bouvair 24 23
AlvirToffler, La 3ª. Ola. Ed. Plaza James. Sexta edición 1981. Barcelona.
Pág. 144.

Se manifiesta en la entrada de la adolescencia un período grave de


variación total de valores, hasta puede llegar como rechazo a la sociedad y
autoafirmarse y con las dudas consiguientes, llegar hasta la prostitución.

36
Su incursión no es tanto al delito pues la prostitución no es considerado
como acto doloso y por consiguiente no configura como delito, pero
también sus delitos o actos inmorales en la mujer están ligadas al consumo
y tráfico ilícito de drogas y por último al hurto como al delito de aborto,
como sujeto pasivo muchas veces.

1.8. DEFINICIÓN DEL DERECHO DEL NIÑO Y ADOLESCENTE

Hay muchas definiciones pero consideramos como la más avanzada la


dada por el maestro sanmarquino Dr. Fermín Chunga La Monja, quién
define -en su época llamado Derecho de Menores: “Derecho especial de
protección al menor en situación irregular”. Comparto en parte está
definición, en el sentido como derecho, especial y protección. Pero
estamos en desacuerdo en relación a lo de situación irregular, puesto que
esto queda dentro de la doctrina que ya no es aplicable conforme a nuestro
Código del Niño y Adolescente y de acuerdo a lo que hemos dicho y
comparado con el de la doctrina de la Protección Integral.

En este caso la cátedra acoge la definición siguiente: “Un Derecho especial


de naturaleza mixto, y autónomo de carácter tuitivo que cautela y protege
los intereses del niño y adolescente de manera integral”. Lo que tratamos
es dar una definición técnica de acuerdo a lo que hemos dicho del derecho
del Niño y Adolescente hasta está parte.

CAPÍTULO II.- LA CONVECION SOBRE LOS DERECHOS DEL NIÑO

La Convención sobre los Derechos del Niño (CDN, en inglés CRC) es un


tratado internacional de las Naciones Unidas, firmado en 1989, a través del
cual se enfatiza que los niños tienen los mismos derechos que los adultos, y se
subrayan aquellos derechos que se desprenden de su especial condición de
seres humanos que, por no haber alcanzado el pleno desarrollo físico y mental,
requieren de protección especial.

Es el primer tratado vinculante a nivel nacional e internacional que reúne en un


único texto sus derechos civiles, políticos, sociales, económicos y culturales. El
texto de la CDN al que suscriben los Estados está compuesto por un conjunto

37
de normas para la protección de la infancia y los derechos del niño. Esto quiere
decir que los Estados que se adhieren a la convención se comprometen a
cumplirla. En virtud de ello se comprometen a adecuar su marco normativo a
los principios de la CDN y a destinar todos los esfuerzos que sean necesarios
para lograr que cada niño goce plenamente de sus derechos. La convención
está compuesta por 54 artículos que consagran el derecho a la protección de la
sociedad y el gobierno. El derecho de las personas menores de edad a
desarrollarse en medios seguros y a participar activamente en la sociedad.

La Convención sobre los Derechos del Niño recoge los derechos de todas las
personas menores de 18 años. Sus derechos están íntimamente relacionados
con las obligaciones y las responsabilidades de los Estados, es decir, los
artículos son de cumplimiento obligatorio para todos los gobiernos y todas las
personas.

Los cuatro principios rectores de La Convención son: el Principio de la No


Discriminación; el Interés Superior del Niño; la Supervivencia y el Desarrollo; y
la Participación.

Estos principios sirven para orientar la forma en que se cumplen y se respetan


los derechos y sirven de punto de referencia constante para la aplicación y
verificación de los derechos de las niñas, niños y adolescentes.

2.1. HISTORIA DE LA CONVENCIÓN

La Organización de las Naciones Unidas aprobó en 1948 la Declaración


Universal de los Derechos Humanos que, implícitamente, incluía los
derechos de la infancia. Sin embargo, posteriormente se llegó al
convencimiento de que las particulares necesidades de los niños y niñas
debían estar especialmente enunciadas y protegidas. Más tarde, en 1959,
se aprobaría la Declaración de los Derechos del Niño, que cuenta con 10
artículos.

Estos tratados son los principales antecesores de la convención:

1924 Declaración de Ginebra sobre los Derechos del Niño 5

38
1948 Declaración Universal de los Derechos Humanos (no los
menciona específicamente, pero sí implícitamente)
30

1959 Declaración de los Derechos del Niño 10

1989 Convención sobre los Derechos del Niño 54

2.2. IMPORTANCIA DE LA CONVENCIÓN SOBRE LOS DERECHOS DEL


NIÑO

Por primera vez, en comparación con tratados anteriores, la convención


reconoce a los niños como sujetos de derecho, pero convierte a las
personas adultas en sujetos de responsabilidades.

Por otra parte, también es significativo que se trate de una convención en


lugar de una declaración. Esto significa que los Estados participantes
adquieren la obligación de garantizar su cumplimiento. La Declaración
Universal de los Derechos Humanos, como declaración, es una serie de
principios y normas que los Estados crean y se comprometen a cumplir
internamente en sus naciones, pero quienes la firman no adquieren la
obligación de cumplir su articulado.

Además, es el tratado internacional que reúne al mayor número de Estados


que han ratificado un tratado: actualmente, ha sido ratificado por 196
estados reconocidos en la Asamblea General de las Naciones Unidas
(todos los estados con la excepción de los Estados Unidos de América).
Somalía comenzó la ratificación de la convención (con algunas
excepciones) en enero de 2015, finalizando este proceso en octubre de
2015.

2.3. PRINCIPIOS RECTORES DE LA C.D.N

Como todos los tratados sobre derechos humanos, el texto de la CDN se


fundamenta en tres grandes principios: los derechos son universales, es
decir que conciernen a todos los niños; son indivisibles, dado que la CDN
no jerarquiza los derechos que contiene, y, estrechamente vinculado con lo

39
anterior, son interdependientes. En otras palabras, no hay primacía de un
derecho sobre los demás por cuanto el cumplimiento de cada uno depende
de la garantía efectiva del resto.

A estas nociones compartidas con el conjunto de tratados de derechos


humanos, se le suman cuatro principios específicos de la CIDN: el interés
superior del niño, el derecho a la no discriminación, el derecho a la vida, la
sobrevivencia y el desarrollo y finalmente, el derecho a la libertad de
expresión y a ser escuchado. En efecto, el Comité de los Derechos del
Niño otorgó mayor relevancia al contenido de los artículos 2, 3, 6 y 12. Que
contienen estas nociones, posicionándolas como “principios generales”. De
este modo, de acuerdo con el SIPI, estos artículos constituyen derechos en
sí mismos, y a la vez se instauran como guía para la interpretación y
respeto de todos los demás derechos presentes en la Convención.

2.4. LA CONVENCIÓN EN AMÉRICA LATINA

Algunos los países latinoamericanos ratificaron la Convención. De acuerdo


con el SIPI, el rango que el país decide otorgar a la CDN es sustantivo
debido a la consecuencia jurídica que implica dentro de su sistema jurídico.
El valor jurídico de la CDN está dado por su posición respecto a la
Constitución Nacional, ya que el texto constitucional es la ley suprema de
un país. Allí se establecen los fundamentos de convivencia civil y actuación
de los poderes públicos con el fin de garantizar los derechos de los
ciudadanos. El carácter fundamental de la Constitución se sostiene en que
sus mandatos quedan fuera de las discrecionalidades partidarias, su texto
no puede ser alterado, ni modificado por los poderes públicos en su
actuación ordinaria. Por el contrario, sus principios se instauran como
orientadores y en virtud de ello, a la vez que potencia, limita el ejercicio de
las funciones de los poderes públicos.

El mayor rango jurídico que puede otorgarle un país a la CDN es el


supraconstitucional. En estos casos, el tratado internacional se antepone a
la ley suprema. Le sigue el rango constitucional, a través del cual la
Convención tiene igual primacía que el texto constitucional. Si la CDN tiene
rango supralegal, su texto prevalece cuando una ley del ordenamiento

40
jurídico interno entra en contradicción con sus principios. Por el contrario, si
la CDN tiene rango legal ésta adquiere el mismo valor jurídico que
cualquier otra ley ordinaria.

En América latina, solo Guatemala posiciona a la CDN en rango


supraconstitucional. Argentina, República Dominicana, Venezuela y
México, le han otorgado rango constitucional, mientras que Bolivia,
Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Honduras y Paraguay,
posicionan al texto de la Convención como supralegal. Por último se
encuentra el grupo de países que le ha dado a la CDN rango legal,
conformado por Chile, Cuba, Nicaragua, Panamá, Perú y Uruguay.

2.5. PROTOCOLOS FACULTATIVOS

Esta convención está desarrollada o complementada por los siguientes


protocolos:

 Protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño


relativo a la venta de niños, la prostitución infantil y la utilización de niños
en la pornografía; Resolución A/RES/54/263 del 25 de mayo de 2000,
entrada en vigor el 18 de enero de 2002.
 Protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño
relativo a la participación de niños en los conflictos armados, Resolución
A/RES/54/263 del 25 de mayo de 2000, entrada en vigor el 12 de febrero
de 2002.7
 Protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño
relativo al procedimiento de comunicaciones; Resolución A/RES/66/138,
entrada en vigor el 28 de mayo de 2012.8

Caso Guatemala

Un acontecimiento bisagra en la relación del Estado con la infancia fue la


sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre el caso
“Niños de la Calle” Villagrán Morales y otros vs Guatemala. Esta fue la primera
vez que la Corte Interamericana falló en un caso por violación de los derechos
de los niños. En junio de 1990 cinco niños que vivían en la calle de la ciudad de
Guatemala fueron secuestrados, torturados y asesinados por fuerzas de

41
seguridad estatales. Luego de más de dos años de intentos fallidos por llevar el
caso a juicio en Guatemala, la denuncia fue presentada formalmente a la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por el Centro por la
Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) y Casa Alianza. Posteriormente fue
presentado ante la Corte Interamericana por la CIDH. En 1999 la Corte decide
por unanimidad declarar responsable al Estado de Guatemala, por violar
derechos consagrados en la Convención Americana de Derechos Humanos
(CADH), específicamente el derecho a la vida, la integridad física, libertad
personal, garantías judiciales, protección judicial y los derechos del niño. El 26
de mayo de 2001, la Corte ordenó al Estado de Guatemala que además de
compensar económicamente a las familias y sancionar a los culpables,
adecuara su legislación doméstica al artículo 19 de la Convención Americana.
El Estado de Guatemala adoptó estas medidas en los meses siguientes. El
Código de los Menores, vigente desde 1979, fue abolido en forma inmediata
pero fue necesaria la movilización de la sociedad civil para que finalmente
cuatro años después del fallo, el 4 de junio de 2003, entrara en vigor la Ley de
Protección Integral de Niños y Personas Jóvenes. Este fallo emblemático puso
en relieve la necesidad de redefinir la relación del Estado con la infancia, y la
relevancia de introducir como marco rector a la CDN. A partir de entonces, se
dinamizó el proceso de adecuación normativa a los principios de la CDN en
prácticamente todos los países que aún no lo habían iniciado

42
CAPÍTULO III.- INTERES SUPERIOR DEL NIÑO Y DEL ADOLECENTE

3.1. CONCEPTO.

Pretender definir lo que debe entenderse como “interés superior del niño”
es una tarea compleja, ya nos enfrentamos a lo que en derecho es
conocido como un concepto jurídico indeterminado o una clausula general.
Es por ello que dicho concepto no debe ser interpretado en una forma
estática sino que por el contrario, deberá entenderse en una forma
dinámica, flexible, de manera que nos permita ir perfilando en cada caso
concreto una idea acerca de lo que el “interés superior del niño”.

Tratar de dar un contenido rígido, estricto, inamovible a la cláusula abierta


del interés superior del niño sería contrario a la finalidad que el propio
concepto encierra en sí mismo; ya que si se trata de un concepto jurídico
indeterminado ¿Cómo puede quedar fijado su contenido sin que ello
implique entrar en franca contradicción con la finalidad de la propia norma?
Sentadas las bases que deben regir en todo momento nuestra actitud frente
a la cláusula general del interés superior del niño, sí que podemos, no
obstante, tratar de aproximarnos a cual es un significado.

Para llevar a cabo esa aproximación utilizaremos las definiciones que sobre
dicho valor jurídico indeterminado nos ha ido aportando la doctrina
entendida sobre la materia, así como las valoraciones realizadas por parte
de nuestros tribunales en el momento de resolver problemas prácticos que
día a día se han ido presentando.

La Convención sobre los Derechos del Niño, adoptada en el seno de la


Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de 1989
constituye un instrumento internacional vinculante para los Estados Partes
respecto del tratamiento de la infancia. Dicho instrumento internacional,
inspirado en la denominada "Doctrina de la Protección Integral", reconoce a
los niños, niñas y adolescentes un conjunto de derechos civiles, culturales,
económicos, políticos y sociales cuyo sustento se resume en cuatro
principios fundamentales: la no discriminación, el interés superior del niño,
el derecho a la vida, la supervivencia y desarrollo, y el respeto de la opinión

43
del niño en todos los asuntos que le afecten. El Principio del Interés
Superior del Niño, enunciado por el artículo 3º de la Convención y recogido
por el artículo IX del Título Preliminar del Código de los Niños y
Adolescentes peruano, preconiza que todas las medidas concernientes a
los "niños" a ser adoptadas por las instituciones públicas o privadas de
bienestar social, los tribunales, las autoridades administrativas o los
órganos legislativos deben tener como suprema consideración su "interés
superior". En ese sentido, corresponde a la administración de justicia en
general, y con mayor razón a la especializada en infancia, que las
decisiones a adoptarse tengan como sustento dicho interés superior,
independientemente de los intereses de los padres; sin embargo, cabe
preguntarnos, ¿existen límites para la aplicación de dicho Principio?

Para absolver la inquietud, debemos resaltar, en primer término, que en la


práctica judicial el Principio del Interés Superior del Niño es invocado y
aplicado mayoritariamente por los operadores de justicia al momento de
decidir o resolver una controversia en la cual se encuentra involucrado un
niño, una niña o un adolescente. Miguel Cillero Bruñol (1998), al respecto,
expresa lo siguiente: "(…) Generalmente se cree que el interés superior del
niño es una directriz vaga, indeterminada y sujeta a múltiples
interpretaciones, tanto de carácter jurídico como psicosocial, que
constituiría una especie de excusa para tomar decisiones al margen de los
derechos reconocidos en razón de un etéreo interés superior de tipo
extrajurídico. Por esta razón, diversos autores han puesto de relieve que el
carácter indeterminado de esta noción impide una interpretación uniforme,
en consecuencia permite que las resoluciones que se adopten basadas en
ella no satisfagan debidamente las exigencias de seguridad jurídica. Existen
quienes lamentan que la Convención lo recogiera, porque amparados en el
'interés superior' se permitiría un amplio margen a la discrecionalidad de la
autoridad y se debilitaría la tutela efectiva de los derechos que la propia
Convención consagra" (p. 108). Como es de advertir, la reflexión alude a
decisiones jurisdiccionales que sin mayor justificación y con la sola
invocación del Principio del Interés Superior del Niño "resuelven" la litis,
vulnerándose de esta forma la seguridad jurídica y la tutela procesal

44
efectiva; la seguridad jurídica "(…) es un principio consustancial al Estado
constitucional de derecho, implícitamente reconocido en la Constitución. Se
trata de un valor superior contenido en el espíritu garantista de la Carta
Fundamental, que se proyecta hacia todo el ordenamiento jurídico y busca
asegurar al individuo una expectativa razonablemente fundada respecto de
cuál será la actuación de los poderes públicos y, en general, de toda la
colectividad, al desenvolverse dentro de los cauces del Derecho y la
legalidad (…)".

En relación con el tema, Manuel Miranda Estrampes (2006) sostiene que


los problemas surgidos en relación al Principio del Interés Superior del Niño
derivan de su calidad de concepto jurídico indeterminado e indefinido por la
propia Convención; así sostiene que "la decisión sobre lo que en cada caso
se ajusta al interés del menor se deja al arbitrio judicial; no obstante, el juez
no se encuentra ante un concepto vacío, sino que a la luz de la anterior
conceptuación, el contenido de las resoluciones judiciales debe consistir en
asegurar la efectividad de los derechos fundamentales de los menores,
quienes por sus condiciones de madurez no pueden actuar por sí mismos,
para ello el juez deberá valorar el conjunto. De circunstancias concurrentes,
entre las que debe mencionarse la propia edad y circunstancias personales
del menor (familiares, sociales)(…); el interés del menor actuará como
criterio rector de la toma de decisiones cuando se suscite un conflicto con
otros intereses legítimos, especialmente el interés de los progenitores. En
estos casos, el conflicto deberá resolverse siempre primando el interés del
menor" (p.109). Vale decir que el Principio del Interés Superior del Niño
debe indiscutiblemente ser la guía en la toma de cualquier decisión pública
o privada, más aún en sede judicial; sin embargo, su sola enunciación no
constituye razón ni justificación suficiente de la decisión; peor aún, no
puede instituirse como herramienta de la arbitrariedad, sino que, por el
contrario, debe ser la consecuencia lógica de la valoración de todo el
caudal probatorio aportado al proceso, a partir del cual el Juzgador
utilizando su apreciación razonada determinará lo mejor para el niño. Por
tanto, aquellas decisiones en las que únicamente se menciona el Principio
del Interés Superior del Niño como frase "cliché" o "plantilla", sin sustento,

45
no resuelven un problema, sino que lo agravan, por cuanto al constituir un
vicio procesal que afecta el deber de motivación de resoluciones judiciales,
acarrea la nulidad del fallo. En ese sentido, corresponde a los operadores
de justicia garantizar el respeto y observancia del Principio del Debido
Proceso, de tal forma que los derechos que lo conforman: defensa, producir
prueba y que esta sea debidamente valorada, obtener una sentencia
motivada y fundada en derecho, doble instancia, igualdad procesal, etc.,
sean plenamente ejercidos por las partes. Ahora bien, resulta importante
destacar que la Corte Suprema de Justicia del Perú por el III Pleno
Casatorio Civil recaído en la Casación Nº 4664-2010 PUNO, ha establecido
como precedente judicial vinculante lo siguiente: En los procesos de familia,
como en los de alimentos, divorcio, filiación, violencia familiar, entre otros,
el Juez tiene facultades tuitivas y en consecuencia debe flexibilizar algunos
principios y normas procesales como los de iniciativa de parte, congruencia,
formalidad, eventualidad, preclusión, acumulación de pretensiones, en
atención a la naturaleza de los conflictos que debe solucionar, derivados de
las relaciones familiares y personales, ofreciendo protección a la parte
perjudicada, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 4º y 43º de la
Constitución Política del Estado.

Flexibilizar implica que el Juez que conoce de un proceso en el cual se


encuentra involucrado un niño debe partir por internalizar que el caso
sometido a su conocimiento debe ser considerado como "problema
humano" y que por ende merece especial atención y consideración. El
Código de los Niños y Adolescentes incorpora dicha obligación en el
artículo X de su Título Preliminar. La ratio legis de la norma es que el
juzgador vaya más allá de la mera aplicación de la Ley, toda vez que de por
medio se encuentran seres humanos que directa o indirectamente sufren
las consecuencias del enfrentamiento familiar; de allí la necesidad de que la
solución a la controversia se funde, además de lo que resulte más beneficio
para el niño inmerso en la litis, en el reconocimiento expreso de su derecho
a vivir en el seno de su familia y mantener con el padre o madre con quien
no convive las relaciones interpersonales necesarias a fin de asegurar su
desarrollo integral. De acuerdo con lo expresado, cuando la Corte Suprema

46
alude que en los procesos de familia los principios y normas procesales
deben ser flexibilizados, básicamente se refiere a que debe entenderse que
dichos procesos, por su especial naturaleza, no pueden estar sujetos a
normas estrictas o trabas que impidan administrar justicia desde la
perspectiva de la solución a un problema humano, más aún el rol tuitivo que
corresponde al propio juzgador. Debemos recordar que la Constitución
Política del Perú en su artículo 4º prevé que "la comunidad y el Estado
protegen especialmente al niño, al adolescente, a la madre y al anciano en
situación de abandono. También protegen a la familia y promueven el
matrimonio. Reconocen a estos últimos como institutos naturales y
fundamentales de la sociedad". El dispositivo constitucional no hace más
que ratificar la obligación primera del Estado de proteger al niño,
entendiéndose como tal incluso al concebido, conforme lo estipulado por el
numeral 2) del artículo 2º de la Carta Fundamental y el artículo 1º del Título
Preliminar del Código de los Niños y Adolescentes, en atención a su
condición de persona humana demandante de especial cuidado y
protección, tanto para la satisfacción de sus necesidades vitales, como para
el logro de su realización integral.

La norma en modo alguno desconoce o niega el deber, a la vez derecho,


legal y biológico de los padres de alimentar, educar y dar seguridad a sus
hijos, como manifestación expresa del ejercicio de la patria potestad, sino
que determina el rol preponderante del Estado en la protección de los
derechos del niño a través de políticas públicas específicas orientadas a
coadyuvar a su bienestar, lo que incluye aspectos de alimentación, salud,
educación, vivienda, entre otros. Debemos recordar que ante la muerte o
ausencia de los padres o el incumplimiento de los roles paterno y materno,
el Estado tiene la obligación de cautelar la integridad de los niños mediante
la adopción de medidas de protección específicas, de acuerdo con las
normas previstas por el Capítulo IX del Título II del Libro Cuarto del Código
de los Niños y Adolescentes. Al desarrollar los alcances del mencionado
artículo 4º de la Norma Fundamental, el Tribunal Constitucional ha sido
enfático en precisar lo siguiente: (…) Que, dentro del orden de prelaciones
y jerarquías existente al interior de una Constitución, es decididamente un

47
hecho incontrovertible, que mayor importancia reviste para un Estado y su
colectividad, el proteger a la infancia y más aún, si se encuentra en
situación de abandono, que promover la seguridad como valor aislado,
pues independientemente de que tal dispositivo reposa directamente sus
fundamentos en el artículo 1° de la Norma Fundamental y es, por
consiguiente, rigurosamente tributario del principio "Dignidad de la
Persona", a la larga, del cumplimiento de un dispositivo, depende, en los
hechos, la eficacia y vigencia del otro. No es posible, que un Estado
proclame la Seguridad Ciudadana como valor preciado de hoy cuando
alimenta las condiciones de su propia alteración a futuro. Si una
colectividad permite, de espaldas a su propia realidad, que la desprotección
a la niñez se solvente con actitudes de indiferencia crónica, lo único que
engendra son las condiciones para que la seguridad que hoy proclama
como bandera, no vaya más allá de su propia existencia, como si el futuro
de sus descendientes, paradójicamente la seguridad de ellos, no le
interesara en lo absoluto (…).(…) Adicionalmente a lo expuesto en los
parágrafos precedentes, es necesario precisar que conforme se desprende
la Constitución, en todo proceso judicial en el que se deba verificar la
afectación de los derechos fundamentales de niños o menores de edad, los
órganos jurisdiccionales deben procurar una atención especial y prioritaria
en su tramitación. En efecto, como uno de los contenidos
constitucionalmente protegidos del artículo 4º de la Constitución se
establece que "La comunidad y el Estado protegen especialmente al niño,
al adolescente (...)", haciendo que la preservación del interés superior del
niño y del adolescente sea una obligación ineludible de la comunidad y
principalmente del Estado. Desarrollado tal contenido, el Código de los
Niños y Adolescentes ha precisado en el artículo IX que "En toda medida
concerniente al niño y al adolescente que adopte el Estado a través de los
Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, del Ministerio Público, los
Gobiernos Regionales, Gobiernos Locales y sus demás instituciones, así
como en la acción de la sociedad, se considerará el Principio del Interés
Superior del Niño y del Adolescente y el respeto a sus derechos". Tal
atención a prestarse por los órganos jurisdiccionales, como se desprende
de la propia Norma Fundamental (artículo 4º), debe ser especial en la

48
medida en que un niño o un adolescente no se constituye en una parte más
en el proceso sino una que posee características singulares y particulares
respecto de otras, por lo que más allá del resultado del caso, debe
procurarse un escrupuloso tratamiento y respeto de sus derechos durante
el proceso. Asimismo, tal atención deber ser prioritaria, pues el interés
superior del niño y del adolescente tiene precedencia en la actuación
estatal respecto de aquellas decisiones judiciales en las que no se
encuentran comprometidos sus derechos fundamentales (…).. (…) el deber
especial de protección sobre los Derechos del Niño vincula no solo a las
entidades estatales y públicas sino también a las entidades privadas e
inclusive a la comunidad toda, a fin de que en cualquier medida que
adopten o acto que los comprometa velen por el interés superior del niño, el
cual debe anteponerse a cualquier otro interés. Por tanto, constituye un
deber el velar por la vigencia de los derechos del niño y la preferencia de
sus intereses, resultando que ante cualquier situación en la que colisione o
se vea en riesgo el interés superior del niño, indudablemente, este debe ser
preferido antes que cualquier otro interés. Y es que la niñez constituye un
grupo de personas de interés y de protección prioritaria del Estado y de
toda la comunidad, por lo que las políticas estatales le deben dispensar una
atención preferente. En consecuencia, en la eventualidad de un conflicto
frente al presunto interés del adulto sobre el del niño, prevalece el de este
último; y es que parte de su esencia radica en la necesidad de defensa de
los derechos de quien no puede ejercerlos a plenitud por sí mismo y de
quien, por la etapa de desarrollo en que se encuentra, no puede oponer
resistencia o responder ante un agravio a sus derechos (…).Del análisis de
las sentencias glosadas resulta factible establecer lo siguiente:

1. Para un Estado y su colectividad resulta de suma importancia proteger a


la infancia, más aún si se encuentra en situación de abandono.

2. La obligación de la comunidad y el Estado de proteger especialmente al


niño, niña y adolescente tiene como sustento el reconocimiento del
Principio del Interés Superior del Niño como parte integrante del bloque de
constitucionalidad.

49
3. En todo proceso judicial en el que se verifique la afectación de los
derechos fundamentales de niños, niñas y adolescentes, los órganos
jurisdiccionales deben procurar brindarles atención especial y prioritaria,
debiendo resolver a favor de aquellos en contraposición a cualquier otro
interés.

Por tanto, flexibilizar, como así se señala en la propia sentencia casatoria,


supone evitar el exceso de ritual y la ineficacia del instrumento procesal, de
tal forma que principios procesales como congruencia, preclusión,
eventualidad procesal, prohibición de reforma en peor, entre otros, cedan
ante la imperiosa necesidad de dar una solución integral al conflicto, todo lo
cual nos lleva a concluir que el único límite para la aplicación del Principio
Superior del Niño en instancia judicial es que la decisión, además de
encontrarse debidamente fundamentada fáctica y jurídicamente, constituya
lo más beneficioso para el niño involucrado en la problemática.

Desde fines del siglo XIX ha existido a nivel mundial, innumerable


legislación vinculada con las personas menores de edad, a la relación de
éstas con el Derecho habiendo variado el tratamiento, al compás de los
cambios en la ideología que lo sustenta, fruto de una evolución en el
pensamiento. Se ha venido denominando a esta normativa: “Derecho de
Menores”, sobre el particular existen ordenamientos jurídicos nacionales
que han reunido toda la materia en cuerpos jurídicos codificados,
concebidos como códigos del menor y, en otros casos se ha logrado una
legislación orgánica autosuficiente sobre el tema, motivando la discusión en
relación con la autonomía científica de la materia. Es importante la
evolución experimentada sobretodo en los países occidentales, la que se
ha caracterizado por el paso de un modelo de protección a un modelo
educativo o de bienestar, y éste, en algunos casos, ha dado lugar al
denominado “modelo de responsabilidad”. El modelo de protección o de la
“situación irregular” (más conocida en el Perú como “tutelar”), consideraba a
los menores de edad, cuyo comportamiento se presumiera desviado, como
aquejados por alguna patología, conducentes a la comisión de hechos
delictuosos como consecuencia de factores biológicos o psicológicos ó, por

50
influencia de su entorno familiar o social. La “tutela” tenía como finalidad
conseguir la corrección o la reeducación del menor de edad, la “disposición”
de éste menor de edad era una medida de duración indeterminada, y
consistía, en la mayoría de los casos en el internamiento, pues se entendía
que la reeducación necesitaba el alejamiento de su entorno social habitual.
En este contexto encontramos a la Infancia dividida en dos sectores:

• Infancia con sus necesidades básicas satisfechas ó con familia


estructurada: Infancia Regular.

• Infancia con sus necesidades básicas total o parcialmente insatisfechas ó


con familia desestructurada ó marcada por la pobreza como situación que
se puede convertir en amenaza social: Infancia Irregular. En materia
procesal, el menor de edad carecía de garantías, el juez era cual padre, lo
que conllevaba la idea de que era esa la mejor garantía posible, con miras
a asegurar la terapia de reeducación o resocialización; es más, no era
necesaria la vinculación del menor de edad con el hecho considerado
delictuoso: en ciertos casos, bastaba con demostrar o presumir el estado de
abandono moral o material para proceder a dicha disposición.

Ante la crisis del modelo tutelar (protectorio), aparece el modelo


denominado “educativo” o “de bienestar”, se rechaza la intervención
represiva contenida en el modelo anterior, se propugna alejar al menor de
edad de la justicia penal, para lo cual, se propicia la adopción de soluciones
extra judiciales (a través de la intervención de organismos asistenciales
públicos, instituciones privadas o la propia familia), con miras a alcanzar la
solución del conflicto y la asistencia al menor de edad en problemas; con
arreglo a éste modelo, la jurisdicción de menores de edad pertenecería al
fuero civil y no al orden penal. En los Estados Unidos, a partir del “Caso
Gault”, se inicia un alejamiento de la ideología tutelar y de sus
concepciones de “situación irregular” y de “abandono moral y material”, que
habilitaron una indiscriminada intervención judicial con argumentos poco
jurídicos, alejados de las concepciones de culpabilidad y responsabilidad
propias del derecho aplicable a los plenamente capaces .

51
Por su parte, en Europa, a partir de la década de los ochenta, se va
produciendo un nuevo cambio de orientación en el Derecho de Menores,
propiciado por cambios sociales y por un aumento de la denominada
delincuencia juvenil, reclamando la sociedad, la presencia de medidas
represivas para los menores de edad, lo que da paso al tercer modelo,
denominado “de responsabilidad” o “modelo mixto”, que combina aspectos
educativos con otros sancionadores o represivos; se caracteriza por la
asunción de responsabilidad del menor de edad en la comisión de hechos
delictuosos, lo que repercute en las consecuencias jurídicas aplicables;
pues, si el menor de edad es responsable, se prevé para él, una
consecuencia distinta de la medida de seguridad o educativa; pero así
como se modifica el contenido, también se establecen límites a la duración
de las sanciones y, se busca disminuir la respuesta penal, cambiando
sanciones privativas de libertad por otras de carácter ambulatorio, como la
reparación y la compensación entre autor y víctima; finalmente, se reserva
el internamiento para casos en que resulte absolutamente inevitable o
necesario. Desde un punto de vista procesal, en este sistema de
responsabilidad, o mixto, se reconocen plenamente los derechos y
garantías del menor de edad; se establece un proceso contradictorio en el
que intervienen abogado y Ministerio Público, se respeta la presunción de
inocencia, el derecho de los padres a ser informados, y se reconoce el
derecho a que se revisen las medidas impuestas al menor de edad;
además de que los jueces de menores de edad deben tener una formación
especializada. Por las características indicadas se convierte en un modelo
mixto al conservar, del modelo educativo, los arreglos extra judiciales por la
vía del principio de oportunidad y, por potenciar la reparación y la
compensación autor – víctima.

En América Latina, también operan cambios sustanciales, pero ello a raíz


de la Convención Internacional de los Derechos del Niño, que abandona la
ideología reconocida como modelo tutelar (denominado también de
protección, asistencial o de la situación irregular), generándose en muchos
países una dicotomía legislativa surgida de la comparación de sistemas:
constitucional e infra constitucional, debido a que al ser ratificada la

52
Convención de los Derechos del Niño, fue automáticamente incorporada a
la Constitución Nacional, mientras paralelamente, continuaban vigentes las
normas de rango legal (infra constitucional), caracterizadas por una fuerte
ideología tutelar, cuyas disposiciones corresponden al modelo tutelar o de
la “situación irregular”. SANTIAGO

3.2. La Doctrina de la Protección Integral

El interés superior del niño se consagra como un principio inspirador, que


tiene su origen en el Derecho Común, donde sirve para la solución de
conflictos de interés entre un niño y otra persona, donde priman los
intereses del niño; lo que implica que, éste principio favorece la protección
de los derechos del niño y, el lugar central que ocupa en la Convención
constituye un valioso aporte a la ideología de los derechos del niño. La
Convención, además permite imponer a los derechos del niño, límites
destinados a asegurar la “protección especial” que necesitan las personas
menores de edad, debido a su mayor vulnerabilidad y limitada madurez,
esa posibilidad no se deriva del principio de los intereses superiores del
niño exclusivamente, sino que está reconocida en varias disposiciones de la
Convención.

Esther Fernández al referirse al interés superior del niño, señala que: “En el
ámbito penal dicho principio debe entenderse, no tanto como atención a las
necesidades del menor, sino como un derecho del mismo a que se le
proporcionen respuestas que favorezcan la responsabilización y que
atiendan a su especial consideración de menor de edad. Se trata de hacerle
justicia en su vertiente existencial y de garantizarle su status de persona y
los derechos que le corresponden, pero adecuados a su situación de menor
de edad. No se trata, en ningún caso, de una discriminación positiva ni de
un trato de favor (...). El menor que infringe las leyes penales es
únicamente una persona en desarrollo que no ha podido interiorizar dichas
normas (función motivadora de la norma), por lo que no se puede partir de
la base de que ha defraudado las expectativas que la sociedad pudiera
tener respecto a él, sino que ni siquiera, en muchas ocasiones, la sociedad
le ha dado la oportunidad de adquirir la madurez necesaria para la

53
interiorización de estas normas. La doctrina lleva mucho tiempo poniendo
de manifiesto que la delincuencia de menores es otra cosa y que la
reacción social frente a ésta no puede venir de la mano del castigo, sino de
la propuesta educativa. Esta será la esencia de un Derecho penal de
menores orientado hacía el “supremo interés del menor.

Como se tiene señalado, mientras la Doctrina de la Situación Irregular


corresponde al ‘Modelo Proteccionista o Tutelar’, la Doctrina de la
Protección Integral corresponde al ‘Modelo de Responsabilidad’, por lo que
se puede afirmar que, todo adolescente o joven infractor de la ley penal, no
debe quedar al margen de la aplicación de los derechos y garantías que
caracterizan el derecho penal liberal y, en virtud de su condición especial de
sujeto en formación, las seguridades jurídicas no pueden sino maximizarse;
de manera que, como lo señala Mabel López Oliva, a modo de conclusión:
“La adopción por la comunidad internacional de la doctrina de la protección
integral, a través de la Convención Internacional por los Derechos del Niño
ha significado el pleno reconocimiento del niño como sujeto de derecho. A
partir del salto cualitativo en la percepción de los niños y adolescentes, la
intervención penal en sus vidas, debe limitarse a casos graves y
excepcionales que no admitan solución por vías alternativas no judiciales.
Las circunstancias económicas, sociales o familiares de los niños y jóvenes,
ya no pueden legitimar su injusta y arbitraria criminalización e
institucionalización. El Estado se halla en la obligación de adoptar políticas
sociales que tiendan a disminuir las desigualdades entre los individuos y
que permitan acceder a todos por igual, a condiciones de existencia
dignas.”14 Con similar tendencia, Emilio García Méndez (Asesor Regional
de Derechos del Niño de la Oficina Regional de UNICEF para América
Latina y el Caribe), resalta como rasgos centrales de la Doctrina de la
Protección Integral los siguientes:

• Sin ignorar la existencia de profundas diferencias sociales, las nuevas


leyes basadas en esta doctrina, se proponen como un instrumento para el
conjunto de la categoría infancia y, no sólo para aquellos en circunstancias
particularmente difíciles.

54
• Se jerarquiza la función judicial, devolviéndole su misión específica de
dirimir conflictos de naturaleza jurídica; y por ello no sólo se prevé la
presencia obligatoria de abogado, sino que además, se otorga una función
importantísima de control y contrapeso al Ministerio Público.

• Se desvinculan las situaciones de mayor riesgo, de patologías de carácter


individual, posibilitando que las deficiencias más agudas sean percibidas
como omisiones de las políticas sociales básicas. No es más el niño o el
adolescente que se encuentra en situación irregular, sino la persona o
institución responsable por la acción u omisión.

• Se asegura jurídicamente el principio básico de igualdad ante la ley. En el


tratamiento de casos de naturaleza penal, se sustituye el binomio
impunidad – arbitrariedad por el binomio severidad – justicia.

• Se eliminan las internaciones no vinculadas a la comisión de delitos o


contravenciones, debidamente comprobadas.

• Consideración de la infancia como sujeto pleno de derechos.

• Incorporación explícita de los principios constitucionales relativos a la


seguridad de la persona, así como los principios básicos del Derecho
contenidos en la Convención.

• Tendencia creciente a la eliminación de eufemismos falsamente tutelares,


reconociéndose explícitamente que la “internación” o la “ubicación
institucional”, según consta en las Reglas de las Naciones Unidas para los
Jóvenes Privados de Libertad, constituye una verdadera y formal privación
de libertad Es evidente que la evolución en cuanto a los derechos de las
personas menores de edad, no sólo es en materia penal, sino que implica el
abandono de la concepción del niño como “incapaz” y, tiende a proteger
todos y cada uno de sus derechos como ser humano y como niño.

Advirtiéndose que en los últimos años, luego de la aprobación de la


Convención Internacional de los Derechos del Niño, la gran mayoría de los
países de América Latina, incluido el Perú, han adecuado su legislación

55
interna o están inmersos en ese proceso evolutivo de cambio, no sólo para
evitar la dicotomía entre la normatividad constitucional y la infra
constitucional, sino también porque la responsabilidad, sobre todo penal de
las personas menores de edad, debe presentar, frente a la de los adultos,
un carácter primordial de intervención educativa que trascienda a todos los
aspectos de su regulación jurídica y, que determine considerables
diferencias entre el sentido y el procedimiento de las sanciones en uno y
otro sector, sin perjuicio de las garantías comunes a todo justiciable; de
manera que siendo las garantías procesales del enjuiciamiento de los
menores de edad las mismas que las del proceso de adultos, en aquél debe
existir una especial sensibilización en el desarrollo de dichas garantías y del
propio proceso, en atención al supremo interés del menor de edad; en
consecuencia, las medidas que se impongan a los adolescentes no
deberán ser represivas, sino preventivo – sociales, destinadas a lograr la
efectiva reinserción y el interés superior del niño; con principios que
garanticen la construcción de un derecho de mínima intervención estatal,
con la utilización de la teoría del delito en los casos de adolescentes
infractores, como instrumento garantista y limitador de la discrecionalidad
de la actividad judicial y, el respeto a todos los derechos y garantías en la
diagramación del proceso penal. No cabe duda de que a pesar de no ser el
primer instrumento internacional en términos cronológicos, la Convención
constituye el instrumento más importante, en la medida que proporciona el
marco general de interpretación de todo el resto de la normatividad que
comprende la Doctrina de la Protección Integral; pero, no son sólo razones
de carácter jurídico las que explican la importancia de la Convención, sino
que ha sido este instrumento el que ha tenido el mérito de llamar la
atención, tanto de los movimientos sociales, cuanto del sector más
avanzado de las políticas públicas, acerca de la importancia de la
dimensión jurídica en el proceso de lucha por mejorar las condiciones de
vida de la infancia. La Convención constituye, un cambio fundamental,
determinando una percepción radicalmente nueva de la condición de la
infancia, especialmente en América Latina, la que no se puede
desaprovechar; urge sí la inmediatez de su aplicación en un contexto de
auténtica identificación con nuestro niños: los niños del Perú.

56
LIBRO PRIMERO: DERECHOS Y LIBERTADES

CAPITULO I DERECHOS CIVILES

Artículo 1º.- A la vida e integridad.-

El niño y el adolescente tienen derecho a la vida desde el momento de la


concepción. El presente Código garantiza la vida del concebido, protegiéndolo
de experimentos o manipulaciones genéticas contrarias a su integridad y a su
desarrollo físico o mental.

Reconoce el derecho a la vida como derecho fundamental de la persona


humana desde la concepción, esto es que el concebido es sujeto de derechos, y
como tal debe ser protegido íntegramente. En consecuencia se proscribe el
aborto y la manipulación genética como actos atentatorios contra el niño en
gestación.

Artículo 2º.- A su atención por el Estado desde su concepción.-

Es responsabilidad del Estado promover el establecimiento de condiciones


adecuadas para la atención de la madre durante las etapas del embarazo, el
parto y la fase postnatal. El Estado otorgará atención especializada a la
adolescente madre y promoverá la lactancia materna y el establecimiento de
centros de cuidado diurno. La sociedad coadyuvará a hacer efectivas tales
garantías.

Para garantizar el derecho a la vida del concebido debe otorgarse las


condiciones adecuadas a la madre durante la gestación, parto y periodo post-
natal.

Artículo 3º.- A vivir en un ambiente sano.-

El niño y el adolescente tienen derecho a vivir en un ambiente sano y

57
ecológicamente equilibrado.

Artículo 3°-A.- Los niños, niñas y adolescentes, sin exclusión alguna, tienen
derecho al buen trato, que implica recibir buenos cuidados, afecto, protección,
socialización y educación no violentas, en un ambiente armonioso, en el que se
brinde protección integral, ya sea por parte de sus padres, tutores, responsables
o representantes legales así como de sus educadores, autoridades
administrativas, públicas o privadas, o cualquier otra persona.

El derecho a buen trato es reciproco entre los niños, niñas y adolescentes.

Consagra uno de los llamados derechos de tercera generación, los que como es
conocido se fundan en la solidaridad: es el derecho a vivir en un ambiente sano
y ecológicamente equilibrado, el que opera como una garantía para el desarrollo
saludable de la vida humana.

Artículo 4º.- A su integridad personal.-

El niño y el adolescente tienen derecho a que se respete su integridad moral,


psíquica y física y a su libre desarrollo y bienestar. No podrán ser sometidos a
tortura, ni a trato cruel o degradante.

Se consideran formas extremas que afectan su integridad personal, el trabajo


forzado y la explotación económica, así como el reclutamiento forzado, la
prostitución, la trata, la venta y el tráfico de niños y adolescentes y todas las
demás formas de explotación.

Reconoce el derecho a la integridad personal del niño y el adolescente,


protección que comprende los aspectos: físico, psicológico, espiritual. Quedan
por tanto proscritas la tortura o trato cruel o las formas esclavizantes como el
trabajo forzado, la prostitución, la trata, venta y trafico de menores de edad.
Como todos los derechos fundamentales, este se caracteriza por su
irrenunciabilidad.

Artículo 5º.- A la libertad.- El niño y el adolescente tienen derecho a la libertad.

58
Ningún niño o adolescente será detenido o privado de su libertad. Se excluyen
los casos de detención por mandato judicial o de flagrante infracción a la ley
penal.

Garantiza que ningún niño o adolescente pueda ser detenido sino por mandato
de juez competente, como lo reconoce el articulo 2do. Inc. 24, literal f, de la
Constitución Política.

“Artículo 2o.- Toda persona tiene derecho:

[…]

24. A la libertad y a la seguridad personales. En consecuencia:

[…]

f. Nadie puede ser detenido sino por mandamiento escrito y motivado del juez o
por las autoridades policiales en caso de flagrante delito. La detención no durará
más del tiempo estrictamente necesario para la realización de las
investigaciones y, en todo caso, el detenido debe ser puesto a disposición del
juzgado correspondiente, dentro del plazo máximo de cuarenta y ocho horas o
en el término de la distancia.

Estos plazos no se aplican a los casos de terrorismo, espionaje, tráfico ilícito de


drogas y a los delitos cometidos por organizaciones criminales. En tales casos,
las autoridades policiales pueden efectuar la detención preventiva de los
presuntos implicados por un término no mayor de quince días naturales. Deben
dar cuenta al Ministerio Público y al juez, quien puede asumir jurisdicción antes
de vencido dicho término”.

Artículo 6º.- A la identidad.-

El niño y el adolescente tienen derecho a la identidad, lo que incluye el derecho


a tener un nombre, a adquirir una nacionalidad y, en la medida de lo posible, a
conocer a sus padres y llevar sus apellidos. Tienen también derecho al
desarrollo integral de su personalidad.

59
Es obligación del Estado preservar la inscripción e identidad de los niños y
adolescentes, sancionando a los responsables de su alteración, sustitución o
privación ilegal, de conformidad con el Código Penal.

En caso de que se produjera dicha alteración, sustitución o privación, el Estado


restablecerá la verdadera identidad mediante los mecanismos más idóneos.

Cuando un niño, niña y adolescente se encuentren involucrados como autores,


participes o testigos de una infracción, falta o delito sean víctimas de los
mismos, no se publicara su identidad ni su imagen a través de los medios de
comunicación. La prohibición se extiende al padre, madre, tutor/a o a las
personas que vivan con él/ella. Los medios de comunicación tienen la obligación
de garantizar la reserva de los datos personales y cualquier información que
permita identificarlos, salvo que, en el caso de las niñas, niños y adolescentes,
exista una autorización escrita de los padres o representantes legales, y siempre
no se atente contra su interés superior.

Artículo 7º.- A la inscripción.-

Los niños son inscritos en el Registro del Estado Civil correspondiente por su
padre, madre o el responsable de su cuidado, inmediatamente después de su
nacimiento. De no hacerlo en el plazo de treinta días, se procederá conforme
con lo prescrito en el Título VI de la Ley Orgánica del Registro Nacional de
Identificación y Estado Civil. En el certificado de nacimiento vivo constará la
identificación dactilar de la madre y la identificación pelmatoscópica del recién
nacido, además de los datos que corresponde a la naturaleza del documento.

La dependencia a cargo del registro extenderá, bajo responsabilidad y en forma


gratuita, la primera constancia de nacimiento dentro de un plazo que no
excederá las veinticuatro horas desde el momento de su inscripción.

El derecho a la identidad que está consagrado en el presente artículo del


Código. Incluye derecho al nombre, a adquirir una nacionalidad y, en la medida
de lo posible, conocer a su padre y llevar sus apellidos.

Es obligación del Estado preservar la identidad de niños y adolescentes,

60
sancionando a los responsables de la alteración, sustitución o privación ilegal de
la identidad. Por la primera se entiende la modificación o cualquier cambio de la
identidad; la sustitución, es la suplantación o reemplazo de la identidad; y la
privación de la identidad, es el desconocimiento, prohibición o cualquier acto
que pretenda no reconocerla.

En los casos anteriores el Estado restablecerá la verdadera identidad del niño


mediante los mecanismos respectivos.

En relación con el derecho a la identidad el numeral sétimo manda la inscripción


de los niños en el registro del Estado Civil correspondiente por el padre o la
madre inmediatamente después de su nacimiento. En caso de no hacerlo en 30
días se procederá a la inscripción de oficio.

En el certificado de nacimiento vivo deberá constar la identificación dactilar de la


madre y la pelmatoscópica (huella plantar) del recién nacido.

Artículo 8º.- A vivir en una familia.-

El niño y el adolescente tienen derecho a vivir, crecer y desarrollarse en el seno


de su familia.

El niño y el adolescente que carecen de familia natural tienen derecho a crecer


en un ambiente familiar adecuado.

El niño y el adolescente no podrán ser separados de su familia sino por


circunstancias especiales definidas en la ley y con la exclusiva finalidad de
protegerlos.

Los padres deben velar porque sus hijos reciban los cuidados necesarios para
su adecuado desarrollo integral.

El niño y el adolescente tienen derecho a vivir, crecer y desarrollarse en el seno


de su propia familia. Los que carecieran de su familia natural tienen derecho a
crecer en un ambiente familiar adecuado (hogar sustituto).

El Código preserva además este derecho al establecer que solo podrá

61
separárseles de su familia, por circunstancias especiales, previstas por la Ley, y
con la finalidad de protegerlos, en salvaguarda de su interés superior. Los
padres están obligados a velar por el desarrollo integral de sus hijos.

Artículo 9º.- A la libertad de opinión.-

El niño y el adolescente que estuvieren en condiciones de formarse sus propios


juicios tendrán derecho a expresar su opinión libremente en todos los asuntos
que les afecten y por los medios que elijan, incluida la objeción de conciencia, y
a que se tenga en cuenta sus opiniones en función de su edad y madurez.

Como sujetos de derechos, el niño y el adolescente tienen derechos a que su


opinión sea escuchada en todo asunto que les competa. Las autoridades están
en la obligación de atender esta opinión de acuerdo a su grado de desarrollo y
madurez.

Este articulo del Código establece que el niño y el adolescente que estuvieren
en condiciones de formarse sus propios juicios tendrán derecho a expresar su
opinión libremente en todos los asuntos que les afecten y por los medios que
elijan, incluida la objeción de conciencia, y que se tenga en cuenta sus
opiniones en función de su edad y madurez.

La objeción de conciencia es un derecho, cuyo reconocimiento no tiene


precedente en el Sistema Jurídico Peruano.

Doctrinariamente y en sentido amplio se puede definir la objeción de conciencia


como la "actitud de aquel que se niega a obedecer un mandato de la autoridad,
un imperativo jurídico, invocando la existencia en el seno de su conciencia de un
dictamen que le impide realizar el comportamiento prescrito".

Resulta de trascendental importancia que el reconocimiento de este derecho en


el Perú se efectúe en primer lugar a favor de niños y adolescentes, lo que pone
de relieve el respeto por estos derechos.

Artículo 10º.- A la libertad de expresión.-

62
El niño y el adolescente tienen derecho a la libertad de expresión en sus
distintas manifestaciones. El ejercicio de este derecho estará sujeto a las
restricciones determinadas por ley.

Artículo 11º.- A la libertad de pensamiento, conciencia y religión.-

El niño y el adolescente tienen derecho a la libertad de pensamiento, conciencia


y religión. Se respetará el derecho de los padres, o de sus responsables, de
guiar al niño y al adolescente en el ejercicio de este derecho de acuerdo a su
edad y madurez.

Estos derechos están reconocidos en los artículos 10 y 11 del Código, lo que


importa un cambio en la concepción tradicional que concebía a los menores de
edad como objeto de protección.

Generalmente los menores de edad comparten los valores y religiones de sus


padres, quienes se constituyen en sus primeros maestros. Se respeta pues en
principio el derecho de los padres, o de sus responsables, de guiar al niño y
adolescente en este ejercicio o este derecho de acuerdo a su edad y madurez.
Sin embargo el Código, siguiendo la doctrina que inspira la Convención
Internacional de los Derechos del Niño, ha previsto la posibilidad que puedan
profesar una religión diferente a la de sus padres, debiendo respetarse su
elección.

Artículo 12º.- Al libre tránsito.-

El niño y el adolescente tienen derecho a la libertad de tránsito, con las


restricciones y autorizaciones que se señalan en el Libro Tercero de este
Código.

El derecho a la libertad de tránsito es reconocido, pero con las restricciones y


autorizaciones para viajar fuera de su ciudad o al extranjero.

Artículo 13º.- A asociarse.-

63
El niño y el adolescente tienen derecho a la libertad de asociarse con fines
lícitos y a reunirse pacíficamente.

Sólo los adolescentes podrán constituir personas jurídicas de carácter asociativo


sin fines de lucro. Los niños podrán adherirse a dichas asociaciones.

La capacidad civil especial de los adolescentes que integran estas personas


jurídicas sólo les permite la realización de actos vinculados estrictamente a los
fines de las mismas, siempre que no importen disposición patrimonial.

Estas asociaciones son reconocidas por los Gobiernos Locales y pueden


inscribirse en los Registros Públicos por el solo mérito de la Resolución
Municipal de reconocimiento.

Los adolescentes pueden constituir personas jurídicas sin fines de lucro y los
niños pueden adherirse a ésta, sin requerir de la representación de los mayores
de edad. Constituye una modificación a las normas del Código Civil que
declaraba como incapaces absolutos a los menores de 16 años de edad.

Este derecho es de trascendental importancia para la protección de los


derechos del adolescente trabajador, particularmente en la constitución de
sindicatos para la autoprotección de esos derechos.

CAPITULO II

DERECHOS ECONOMICOS, SOCIALES Y CULTURALES

Artículo 14º.- A la educación, cultura, deporte y recreación.-


El niño y el adolescente tienen derecho a la educación. El Estado asegura la
gratuidad pública de la enseñanza para quienes tienen limitaciones económicas.
Ningún niño o adolescente debe ser discriminado en un centro educativo, por su
condición de discapacidad ni por causa del estado civil de sus padres. La niña o
la adolescente, embarazada o madre, no debe ser impedida de iniciar o
proseguir sus estudios.

La autoridad educativa adoptará las medidas del caso para evitar cualquier
forma de discriminación.

64
Artículo 15º.- A la educación básica.-

El Estado garantiza que la educación básica comprenda:

a) El desarrollo de la personalidad, las aptitudes y la capacidad mental y


física del niño y del adolescente, hasta su máximo potencial;

b) El respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales;

c) La promoción y difusión de los derechos de los niños y adolescentes;

d) El respeto a los padres, a la propia identidad cultural, al idioma, a los


valores nacionales y los valores de los pueblos y culturas distintas de las
propias;

e) La preparación para una vida responsable en una sociedad libre, con


espíritu de solidaridad, comprensión, paz, tolerancia, igualdad entre los sexos,
amistad entre los pueblos y grupos étnicos, nacionales y religiosos;

f) La formación en espíritu democrático y en el ejercicio responsable de los


derechos y obligaciones;

g) La orientación sexual y la planificación familiar;

h) El desarrollo de un pensamiento autónomo, crítico y creativo;

i) La capacitación del niño y el adolescente para el trabajo productivo y


para el manejo de conocimientos técnicos y científicos; y,

j) El respeto al ambiente natural.

Artículo 16º.- A ser respetados por sus educadores.-

El niño y el adolescente tienen derecho a ser respetados por sus educadores y


a cuestionar sus criterios valorativos, pudiendo recurrir a instancias superiores
si fuera necesario.

65
Artículo 17º.- A ser matriculado en el sistema regular de enseñanza.- Los
padres o responsables tienen la obligación de matricular a sus hijos o a
quienes tengan bajo su cuidado en el sistema regular de enseñanza.

Artículo 18º.- A la protección por los Directores de los centros educativos.- Los
Directores de los centros educativos comunicarán a la autoridad competente
los casos de:

a) Maltrato físico, psicológico, de acoso, abuso y violencia sexual en


agravio de los alumnos;

b) Reiterada repitencia y deserción escolar;

c) Reiteradas faltas injustificadas;

d) Consumo de sustancias tóxicas;

e) Desamparo y otros casos que impliquen violación de los derechos del


niño y adolescente;

f) Rendimiento escolar de niños y adolescentes trabajadores; y,

g) Otros hechos lesivos.

Artículo 19º.- Modalidades y horarios para el trabajo.-

El Estado garantiza modalidades y horarios escolares especiales que permitan


a los niños y adolescentes que trabajan asistir regularmente a sus centros de
estudio.

Los Directores de los centros educativos pondrán atención para que el trabajo
no afecte su asistencia y su rendimiento escolar e informarán periódicamente a
la autoridad competente acerca del nivel de rendimiento de los estudiantes
trabajadores.

Artículo 20º.- A participar en programas culturales deportivos y recreativos.-

El Estado estimulará y facilitará la aplicación de recursos y espacios físicos


para la ejecución de programas culturales, deportivos y de recreación dirigidos
a niños y adolescentes. Los municipios canalizarán los recursos y ejecutarán

66
programas con la colaboración y concurso de la sociedad civil y de las
organizaciones sociales.

El niño y el adolescente tienen derecho a la educación. El Estado asegurar la


gratuidad de la enseñanza para quienes tienen limitaciones económicas.
Ningún niño o adolescente debe ser discriminado en un centro educativo por
ninguna razón.

El Estado garantiza la Educación Básica, la que comprende: el desarrollo de la


personalidad y sus aptitudes hasta su máximo potencial; el respeto a los
derechos humanos y libertades fundamentales; la promoción y difusión de sus
derechos, el respeto a su identidad cultural y culturas distintas a la suya; la
preparación para una vida responsable en una sociedad libre, con espíritu de
solidaridad, paz, tolerancia, igualdad de sexos, amistad entre los pueblos y
grupos étnicos; y el respeto al medio ambiente.

Dentro de la misma perspectiva está consagrado el derecho a ser respetado


por sus educadores y a cuestionar sus criterios valorativos, asimismo a la
protección por los Directores de los centros educativos en caso de: maltrato
físico, psicológico o sexual; repitencia y deserción escolar, consumo de
sustancias tóxicas, desamparo o violación de sus derechos.

El Estado garantiza modalidades y horarios especiales que permitan que los


niños y adolescentes que trabajan puedan asistir regularmente a sus centros
de estudios.

Artículo 21º.- A la atención integral de salud.-

El niño y el adolescente tienen derecho a la atención integral de su salud,


mediante la ejecución de políticas que permitan su desarrollo físico e intelectual
en condiciones adecuadas.

Cuando se encuentren enfermos, con limitaciones físicas o mentales,


impedidos, o cuando se trate de dependientes de sustancias tóxicas, recibirán

67
tratamiento y rehabilitación que permita su participación en la comunidad de
acuerdo a sus capacidades.

Corresponde al Estado, con la colaboración y el concurso de la sociedad civil,


desarrollar los programas necesarios para reducir la mortalidad y prevenir las
enfermedades; educar a la familia en las prácticas de higiene y saneamiento; y
combatir la malnutrición, otorgando prioridad en estos programas al niño y al
adolescente en circunstancias especialmente difíciles y a la adolescente-madre
durante los períodos de gestación y lactancia.

El niño y adolescente tienen derecho a la atención integral de su salud,


mediante condiciones que permitan su desarrollo físico e intelectual.

Cuando se hallen enfermos o tengan limitaciones físicas o mentales o se trate


de drogodependientes recibirán tratamiento y rehabilitación.

Es responsabilidad del Estado, con el concurso de la sociedad civil, desarrollar


programas para la reducción de las tasas de mortalidad y prevención de
enfermedades.

Artículo 22º.- Derecho a trabajar del adolescente.-

El adolescente que trabaja será protegido en forma especial por el Estado. El


Estado reconoce el derecho de los adolescentes a trabajar, con las
restricciones que impone este Código, siempre y cuando no exista explotación
económica y su actividad laboral no importe riesgo o peligro, afecte su proceso
educativo o sea nocivo para su salud o para su desarrollo físico, mental,
espiritual, moral o social.

El propio Estado reconoce el derecho del adolescente a trabajar dentro de las


normas de protección previstas por este Código, sobre todo en defensa de su
salud, desarrollo físico, mental, espiritual, moral o social.

68
CAPITULO III

DERECHOS DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES DISCAPACITADOS

Artículo 23º.- Derechos de los niños y adolescentes discapacitados.-

Además de los derechos consagrados en la Convención sobre los Derechos


del Niño y en este Código, los niños y adolescentes discapacitados gozan y
ejercen los derechos inherentes a su propia condición.

El Estado, preferentemente a través de los Ministerios comprendidos en el


Consejo Nacional de la Persona con Discapacidad, y la sociedad asegurarán la
igualdad de oportunidades para acceder a condiciones adecuadas a su
situación con material y servicios adaptados, como salud educación, deporte,
cultura y capacitación laboral. Asimismo, se asegura el pleno desarrollo de su
personalidad hasta el máximo de sus potencialidades, así como el goce de una
vida plena y digna, facilitando su participación activa, igualdad y oportunidades
en la comunidad.

Consagra que el niño y adolescente discapacitado gozan de capacidades


inherentes a su propia condición. El Estado garantiza la igualdad de
oportunidades para acceder a condiciones adecuadas a su salud, educación,
cultura y capacidad laboral. Se asegura el pleno desarrollo de su personalidad
y el goce de una vida plena y digna.

CAPITULO IV

69
DEBERES DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES

Artículo 24º.- Deberes.- Son deberes de los niños y adolescentes:

a) Respetar y obedecer a sus padres o los responsables de su cuidado,


siempre que sus órdenes no lesionen sus derechos o contravengan las leyes;

b) Estudiar satisfactoriamente;

c) Cuidar, en la medida de sus posibilidades, a sus ascendientes en su


enfermedad y ancianidad;

d) Prestar su colaboración en el hogar, de acuerdo a su edad;

e) Respetar la propiedad pública y privada;

f) Conservar el medio ambiente;

g) Cuidar su salud personal;

h) No consumir sustancias psicotrópicas;

i) Respetar las ideas y los derechos de los demás, así como las creencias
religiosas distintas de las suyas; y,

j) Respetar a la Patria, sus leyes, símbolos y héroes.

CAPITULO V GARANTIAS

Artículo 25º.- Ejercicio de los derechos y libertades.-

El Estado garantiza el ejercicio de los derechos y libertades del niño y del


adolescente consagrados en la ley, mediante la política, las medidas y las
acciones permanentes y sostenidas contempladas en el presente Código.

Artículo 26º.- Difusión de los derechos contenidos en este Código.-

70
El Ministerio de Promoción de la Mujer y del Desarrollo Humano (PROMUDEH)
promoverá, en los medios de comunicación masivos, espacios destinados a la
difusión de los derechos del niño y el adolescente. Para estos fines, podrá
suscribir convenios de cooperación.

El ejercicio de los derechos y libertades del niño y adolescente consagrados en


la ley, se garantiza a través de políticas, medidas y acciones permanentes y
sostenidas. Esta garantía se complementa con el establecimiento de un
Sistema de Atención Integral al Niño y al Adolescente en el Libro Segundo del
Código.

Políticas, Medidas y Acciones

Difusión de los Derechos

El Ministerio de Promoción de la Mujer y Desarrollo Humano (PROMUDEH)


promoverá a través de los medios de comunicación masivos la difusión de los
derechos del niño y del adolescente. Sin embargo dicha difusión deberá
efectuarse por cuanto medio esté al alcance y a lo largo y ancho del Perú, pues
derechos que no se conocen, son derechos que no se ejercen.

CAPITULO IV: ENTIDADES Y ORGANIZACIONES QUE PROTEGEN LOS


DERECHOS DEL NIÑO Y EL ADOLESCENTE (INTERES SUPERIOR DEL
NIÑO).

4.1. CENTRO DE EMERGENCIA MUJER.

4.1.1. FUNCIÓN:

Los CEM son servicios públicos especializados y gratuitos, de


atención integral y multidisciplinaria, para víctimas de violencia familiar
y sexual, en los cuales se brinda orientación legal, defensa judicial y
consejería psicológica. Se procura la recuperación del daño sufrido y
se presta asistencia social. Asimismo, se realizan actividades de
prevención a través de capacitaciones, campañas comunicacionales,
formación de agentes comunitarios y movilización de organizaciones.
4.1.2. MISION:

La creación de servicios de atención y prevención de la violencia en

71
todo el país es tarea imprescindible para garantizar los derechos de
mujeres y varones.
4.1.3. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS
DEL NIÑO Y ADOLESCENTE:

A través de los medios de defensa judicial, orientación legal y


consejería psicológica, por el cual velan por la recuperación del daño
sufrido de la víctima y busca justicia para este frente al imputado.

La población más vulnerable al maltrato, que acude a estos servicios,


lo constituyen niños, niñas adolescentes, mujeres, personas adultas
mayores y personas con discapacidad. En el ámbito de la prevención
y promoción, los CEM se dirigen a toda la población. Enfatizan su
accionar en la comunidad educativa (docentes, alumnos y padres de
familia), operadores de servicios (salud, policía, justicia)
organizaciones sociales de base, líderes comunales y tomadores de
decisiones.

4.2. DEMUNA.

Es un servicio gratuito encargado de proteger, promover, atender y vigilar


el cumplimiento estricto de los derechos humanos de los niños, niñas y
adolescentes en la jurisdicción de la municipalidad. Desde 1997 está
considerada en la Ley Orgánica de Municipalidades como una función de
los Gobiernos Locales.

4.2.1. Base Legal.

Resolución Legislativa 25278, que aprueba la Convención sobre los


Derechos del Niño. Decreto Ley 26102, Código de los Niños y
Adolescentes (artículos 45° al 50°). Texto Unico Ordenado de la Ley
26260, Ley de Violencia Familiar (artículo 30°), D.S. 006-97-JUS. Ley
23853, Ley Orgánica de Municipalidades (artículo 67°, inciso 1).
Modificado por Ley 26875. Ley 26872, Ley de Conciliación y su
ampliatoria Ley 27007.

72
4.2.2. FUNCIÓNES:

• Conocer la situación de los niños y adolescentes que se encuentran


en instituciones públicas y privadas.

• intervenir cuando estén en conflicto sus derechos a fin de hacer


prevalecer su interés superior del niño y adolescente.

• Promover el fortalecimiento de los lazos familiares. Para ello podré


efectuar conciliaciones entre cónyuges, padres y familiares, fijando
normas de comportamiento, alimentos, colocación familiar provisional,
siempre que no existan procesos judiciales abiertos sobre estas
materias.

• Promover el reconocimiento voluntario de filiaciones.

•Orientar programas en beneficio de los niños y adolescentes que


trabajan.

• Brindar orientación a la familia para prevenir situaciones críticas.

• Presentar denuncias ante las autoridades competentes por falta y


delitos en agravio de los niños y adolescentes e intervenir en su
defensa.

4.2.3. MISION: La DEMUNA de la Municipalidad Provincial de San


Martín,

Es la entidad que promueve en la comunidad la participación


ciudadana para la defensa y promoción de la dignidad humana de los
niños, niñas y adolescentes. Fortalecerá con su participación a la
Coordinadora Regional de DEMUNA de San Martín haciendo de ellas
una fortaleza para el desarrollo de la Región.

4.2.4. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS


DEL NIÑO Y ADOLESCENTE:

Ofrece atención gratuita y confidencial de casos de alimentos,


régimen de visitas, maltrato, violencia familiar, reconocimiento
voluntario de filiación, y, en general situaciones que afecten los
derechos de los niños y adolescentes.

73
 Realiza difusión y capacitación sobre Derechos del Niño.

 Impulsa actividades preventivas y de movilización social por los


Derechos del Niño.

 Coordina permanentemente con instituciones y organizaciones


locales para atender los problemas de los niños, adolescentes
y familia.

 Denuncia delitos en agravio de niños y adolescentes.

Ante ellos las siguientes personas pueden pedir la intervención de


la DEMUNA:

 Los propios niños, niñas y adolescentes, La madre, el padre o


cualquier otro familiar.

 Cualquier persona que conozca de una situación que afecte los


derechos del niño y adolescente. Y también se puede realizar
de forma anónima.
4.3. FISCALIA DE LA FAMILIA.

4.3.1. FUNCIÓN:

Es deber de la fiscalía investigar los delitos y acusar a los presuntos


infractores ante los juzgados y tribunales competentes. Asegurando la
comparecencia de los presuntos infractores de la ley penal.

4.3.2. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS DEL


NIÑO Y ADOLESCENTE:
Configura la legislación española al Ministerio Fiscal como la Institución
encargada de la defensa de la legalidad, de los derechos de los
ciudadanos, y del interés público tutelado por la ley. (art.124 de la
C.E.).

En el art. 3 de la ley 50/81, concreta esta responsabilidad al


encomendarle la representación y defensa, en juicio y fuera de él, de
quienes por carecer de capacidad de obrar o de representación legal,
no puedan actuar por sí mismos, así como, promover y formar parte de

74
los organismos tutelares que tengan por objeto la protección y defensa
de menores y desvalidos.

El desarrollo de las distintas leyes sustantivas y procesales,


encomiendan al Fiscal, ya en concreto, la defensa de los derechos de
los menores, en los distintos ámbitos procesales, pero
fundamentalmente, en estos tres básicos para su actuación:

En el ejercicio de la acción penal: La defensa de los menores víctimas


de los delitos tipificados en las leyes penales, así como el ejercicio de
la correspondiente acción civil.

En el ejercicio de las funciones expresamente tuitivas reguladas en el


código y leyes de enjuiciamiento civiles, en los supuestos tanto de
desprotección como de crisis familiares, así como en la protección del
honor, imagen e intimidad de los menores.

En el ejercicio de las funciones encomendadas por la ley orgánica


reguladora del procedimiento y competencia de los Juzgados de
Menores determinadas por el interés del menor.

Sobre este trípode, se asienta la función protectora que ejerce el Fiscal


sobre los menores, y con objeto de que pueda comprenderse el
alcance que en la defensa del menor puede tener el Fiscal, parece
preciso, desarrollar, aunque brevemente, cada una de esas funciones.

4.4. DEFENSA PÚBLICA.


La Defensa Pública es un órgano del sistema de justicia, cuyo propósito
fundamental garantizar la tutela judicial efectiva del derecho constitucional
a la defensa en las diversas áreas de su competencia. Asimismo, está
dedicada a prestar, a nivel nacional, un servicio de defensa pública, en
forma gratuita a las personas que lo requieran, sin distinción de clase
socioeconómica. (Artículo 2 de la Ley de Reforma Parcial de la Ley
Orgánica de la Defensa Pública).

75
4.4.1. FUNCIÓN:

Para actuar ante los órganos y entes nacionales, estatales y


municipales, la Defensa Pública ofrece sus servicios en materia penal
ordinario; penal municipal; penal ejecución; especial de delitos de
violencia contra la mujer; especial administrativa; contencioso
administrativa y penal para las funcionarias y funcionarios policiales;
responsabilidad penal del adolescente; jurisdicción penal militar;
integral; agraria y pesquera; laboral; protección del niño, niña y
adolescente; indígena; civil y administrativa especial inquilinaria y para
la defensa del derecho a la vivienda; contencioso administrativa y
ante el Tribunal Supremo de Justicia.

4.4.2. MISION:

Proveer Defensa Pública con excelencia, solidaridad y compromiso


con todos los(as) usuario(as), contribuyendo a garantizar la plena
vigencia de los derechos, libertades, garantías e intereses de estas
personas, en forma ágil y oportuna, en los procesos judiciales que nos
han sido legalmente asignados.

4.4.3. VISION:

Ser una Defensa Pública técnica, eficaz, eficiente y con calidad, con
recursos humanos, tecnológicos y materiales idóneos para el
mejoramiento del servicio; que contribuya a garantizar el respeto de
los derechos, libertades y garantías de las personas y la no
discriminación por razones de género, discapacidad u otras;
inspirados en los valores de nuestra institución, contribuyendo así al
desarrollo democrático y a la paz social de Costa Rica.

4.4.4. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS


DEL NIÑO Y ADOLESCENTE:

reconocido en el Artículo 139º, numeral 16, de la Constitución Política


del Perú, que funciona como garantía básica del Acceso Efectivo a la
Justicia de todas las personas, en particular las de mayor

76
vulnerabilidad, sin discriminación alguna, para el pleno goce de los
derechos humanos, y de los servicios del sistema judicial.

Este servicio integral brinda Asistencia Legal Gratuita, en materia


penal, de familia, civil y laboral, y defiende a personas que han sido
víctimas de la vulneración de sus derechos en cualquiera de sus
formas.

4.5. DEFENSORIA DEL PUEBLO.

La Defensoría del Pueblo en el Perú fue creada por la Constitución Política


de 1993, como un organismo constitucionalmente autónomo, para defender
los derechos fundamentales, supervisar el cumplimiento de los deberes de
la administración estatal, así como la eficiente prestación de los servicios
públicos en todo el territorio nacional.

La Defensoría atiende -en todo el país- quejas, consultas y pedidos de


ciudadanos que, por alguna causa, han experimentado la vulneración de
sus derechos. No desempeña funciones de juez o fiscal ni sustituye a
autoridad alguna. No dicta sentencias, no impone multas ni sanciones.
Elabora informes con recomendaciones o exhortaciones a las autoridades,
cuyo cumplimiento encuentra sustento en su poder de persuasión y en la
fortaleza de argumentos técnicos, éticos y jurídicos.

La Defensoría del Pueblo es, pues, un colaborador crítico del Estado que
actúa, con autonomía, respecto de cualquier poder público o privado, en
nombre del bien común y en defensa de los derechos de la ciudadanía. En
razón de ello, ejerce su mandato con objetividad, profesionalismo y
responsabilidad, nunca por oposición arbitraria o injustificada frente al
Estado.

4.5.1. FUNCIÓNES:
Intervenir en procesos constitucionales:

Con el fin de defender los derechos humanos y el principio de


supremacía constitucional, la Defensoría del Pueblo está facultada para
intervenir en los procesos constitucionales de amparo, hábeas corpus,
hábeas data, acción de inconstitucionalidad, acción popular y acción de

77
cumplimiento. Su intervención puede efectuarse mediante diversas
modalidades. Así, puede iniciar procesos constitucionales, intervenir en
procesos en trámite como coadyuvante o presentando escritos como el
amicus curiae y puede presentar informes u opiniones a solicitud de las
partes o del Tribunal Constitucional.

.Elaborar informes sobre temas de especial trascendencia:

La Defensoría del Pueblo elabora informes sobre temas de su


competencia, denominados informes defensoriales y, además,
anualmente presenta un Informe al Congreso de la República sobre la
gestión realizada.

De acuerdo a esta atribución, la Defensoría del Pueblo puede iniciar y


proseguir investigaciones, ya sea por iniciativa propia o a solicitud de
cualquier persona interesada, con la finalidad de esclarecer los hechos
o situaciones que, generados por la administración estatal o sus
agentes incluyendo a las personas jurídicas no estatales que ejerzan
prerrogativas públicas y que presten servicios públicos, pudieran estar
afectando sus derechos. Además se investigan, con carácter prioritario,
temas de alcance general que afecten a un número significativo de
personas.

.Ejercer iniciativa legislativa:

La Defensoría del Pueblo puede hacer uso de esta facultad mediante la


presentación de proyectos de ley ante el Congreso de la República.

.Promover la firma, ratificación, adhesión y difusión de tratados


internacionales sobre DD.HH :

La Defensoría del Pueblo está facultada para promover la firma,


ratificación, adhesión y efectiva difusión de los tratados internacionales
sobre derechos humanos, con el fin de asegurar su aplicación.
Además, promueve que la legislación y las prácticas nacionales se
adecuen a lo previsto en los tratados suscritos por el Perú.

.Promover procedimientos administrativos:

78
La Defensoría del Pueblo puede iniciar cualquier procedimiento
administrativo, o participar en éste por iniciativa propia o a pedido de
terceros, utilizando el criterio de discrecionalidad, en representación de
una o varias personas, para la defensa de los derechos fundamentales
y constitucionales.

4.5.2. MISION:
Defender y promover los derechos de las personas, supervisar la
eficacia de la actuación de la administración estatal y supervisar la
adecuada prestación de los servicios públicos para que todas las
peruanas y peruanos, especialmente los que se encuentran en
situación de vulnerabilidad, tengan una vida próspera y plena.

4.5.3. DE QUE MANERA PROTEGEN Y VELAN POR LOS DRECHOS


DEL NIÑO Y ADOLESCENTE:

Según el Artículo 162°: Corresponde a la Defensoría del Pueblo


defender los derechos constitucionales y fundamentales de la persona
y de la comunidad; y supervisar el cumplimiento de los deberes de la
administración estatal.

4.6. OTRAS ORGANIZACIONES.


 Instituciones Públicas
 Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables - INABIF
 Ministerio de Educación
 Ministerio del Interior
 Ministerio de Salud
 Municipalidad Metropolitana de Lima
 PNP – División de Familia
 Organismos no Gubernamentales
 Aldeas Infantiles SOS Perú
 Acción por los Niños
 Asociación Pro Desarrollo Infantil – APRODIN
 CEDRO
 CEDETEP
 COMETA

79
 Fundación ANAR
 DINEZ
 Grupo Iniciativa Nacional – GIN
 Organizaciones Sociales
 Coordinadora Metropolitana del Vaso de Leche
 Federación de Mujeres Organizadas en Centrales de Comedores
Populares Autogestionarios y Afines de Lima y Callao –
FEMOCCPAALC
 Asociación Coordinadora de Clubes de Madres
 Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza
 Otras instituciones que trabajan por la infancia
 Asociación de Scouts del Perú
 ADRA Perú
 Amici Dei Bambini
 Asociación de Profesionales por los Derechos de los Niñ@s y
adolescentes
 Asociación de Scouts del Perú
 Asociación Solaris Perú
 Asociación Un día de Esperanza
 Conferencia Episcopal Peruana – Pastoral de Infancia
 Delegados Nacionales de XIV Encuentro Nacional de Niñas, Niños y
Adolescentes 2011
 Facilitadores del Desarrollo Social
 Familia y Desarrollo

V. CONCLUCIONES

A manera de conclusión, es importante resaltar lo siguiente:

 El Principio del Interés Superior del Niño representa el espíritu de la


Doctrina de la Protección Integral, materializado en el reconocimiento de
los derechos humanos de la infancia consagrados en la Convención
sobre los Derechos del Niño.

 El Principio del Interés Superior del Niño debe ser la guía y criterio rector

80
en la toma de decisiones en materia de infancia, lo que a la vez
garantizará la vigencia efectiva de los derechos de los niños, niñas y
adolescentes.

 El Principio del Interés Superior del Niño conforma el Bloque de


Constitucionalidad a que se refiere el artículo 4º de la Constitución
Política del Estado, plasmado en el artículo IX del Título Preliminar del
Código de los Niños y Adolescentes, y supone la supremacía de los
derechos de los niños, niñas y adolescentes en caso de colisión con
otros derechos o intereses.

 El Principio del Interés Superior del Niño exige que los fallos judiciales
se sujeten tanto en la forma como en el fondo a los derechos de los
niños, niñas y adolescentes recogidos en la Convención sobre los
Derechos del Niño y en el Código de los Niños y Adolescentes.

 En caso de colisión entre el Principio del Interés Superior del Niño y el


Principio del Debido Proceso, deben ponderarse los derechos en
conflicto y privilegiarse el primero.

 El Principio del Interés Superior del Niño se antepone a cualquier otro


derecho o interés en controversia y constituye una norma sustantiva que
tiene prevalencia sobre cualquier norma procesal.

 Corresponde a los operadores de justicia de todas las instancias


internalizar los alcances del Principio del Interés Superior del Niño y
sopesarlo como fundamento de todos los fallos judiciales en materia de
infancia.

 Los operadores de justicia tienen la obligación de hacer suya la línea


hermenéutica del Tribunal Constitucional en el sentido de privilegiar
sobre cualquier circunstancia el interés superior del niño. CARLOS

VI. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

 Cillero Bruñol, Miguel (1998). El interés superior del niño en el marco de


la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño. En: Emilio

81
García Méndez, Infancia, ley y democracia en América Latina. Análisis
crítico del panorama legislativo en el marco de la Convención
Internacional sobre los Derechos del Niño (1990-1998) (pp. 80 y ss.).
Colombia: Ed. Temis-Depalma. Miranda Estrampes, Manuel (2006). La
convención frente al desamparo del menor. En Desarrollo de la
convención sobre los derechos del niño en España (pp.109 y ss.).
Barcelona, España: Edit. Bosch.

 Academia de la Magistratura, Educación a Distancia - Material de


Lectura: “Derecho de la Infancia”, Parte 1, Año 2000, Lima – Perú.

 Academia de la Magistratura, Educación a Distancia - Material de


Lectura: “Derecho de la Infancia”, Parte 3 – I, Año 2000, Lima – Perú.

 AMARAL E SILVA, Antonio do, De la Situación Irregular a la Protección


Integral: La nueva justicia de los Niños y Adolescentes. En: Consejo de
Coordinación Judicial – Unicef, Materiales de Lectura del Seminario
Taller Internacional: “El Principio del Interés Superior del Niño en la
Doctrina de las Naciones Unidas de Protección de la Infancia”, diciembre
1997, Lima – Perú, “Anuario de Justicia de Menores”. Nº I, año 2001,
Editorial Astigi S.L., Sevilla – España, pp. 882.

 “Anuario de Justicia de Menores”. Nº II, año 2002, Editorial Astigi S.L.,


Sevilla – España, pp. 791.

 Código de los Niños y Adolescentes, aprobado por Ley N° 27337.

 Consejo de Coordinación Judicial – Unicef, Materiales de Lectura del


Seminario Taller Internacional: “El Principio del Interés Superior del Niño
en la Doctrina de las Naciones Unidas de Protección de la Infancia”,
diciembre 1997, Lima – Perú, pp. 118.

 Convención sobre los Derechos del Niño, 20 de Noviembre de 1989,


Unicef.

 DOMENECH, Ernesto, Adecuación de la Legislación Local a la

82
Convención de los Derechos del Niño. El Caso de la Provincia de
Buenos Aires (Argentina). En: “Anuario de Justicia de Menores”, Nº I,
2001, Editorial Astigi S.L., Sevilla – España.

 FERNÁNDEZ MOLINA, Esther. La Valoración del Interés del Menor en


la LO 5/2000, de 12 de Enero, Reguladora de la Responsabilidad Penal
de los Menores. En: “Anuario de Justicia de Menores”, Nº II, 2002,
Editorial Astigi S.L., Sevilla – España.

 GAMARRA RUBIO, Fernando, Convención sobre los Derechos del Niño.


Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú, 2001,
Lima – Perú, pp. 142.

 GARCÍA MÉNDEZ, Emilio, Legislaciones Infanto – Juveniles en América


Latina. Modelos y Tendencias. En: Consejo de Coordinación Judicial –
Unicef, Materiales de Lectura del Seminario Taller Internacional: “El
Principio del Interés Superior del Niño en la Doctrina de las Naciones
Unidas de Protección de la Infancia”, Diciembre 1997, Lima – Perú.

 GARCÍA MÉNDEZ, Emilio y CARRANZA, Elías, El Derecho de


“Menores” como Derecho Mayor. En: Consejo de Coordinación Judicial –
Unicef, Materiales de Lectura del Seminario Taller Internacional: “El
Principio del Interés Superior del Niño en la Doctrina de las Naciones
Unidas de Protección de la Infancia”, Diciembre 1997, Lima – Perú.

 LÓPEZ OLIVA, Mabel, La Responsabilidad de la Persona Menor de


Edad que Infringe la Ley Penal. En: Separata preparada para el Curso
“Adolescentes en Conflicto con la Ley Penal, dirigido a Jueces y Fiscales
del Servicio de Justicia Especializada en Niños y Adolescentes”, Lima, 7,
8 y 9 de Mayo de 1998.

 NAVAS RIAL, Claudio Roberto. Los Menores y el Derecho Penal en la


República Argentina. En: “Anuario de Justicia de Menores”, Nº II, 2002,
Editorial Astigi, S.L., Sevilla – España.

 PAJA BURGOA, José, La Convención de los Derechos del Niño,

83
Editorial Tecnos, S.A., 1998, Madrid – España, pp.190.

 SALADO OSUNA, Ana, Algunas Reflexiones sobre la Opinión Consultiva


17 (28 de Agosto de 2002) de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos, Relativa a la “Condición Jurídica y Derechos Humanos del
Niño”. En: “Anuario de Justicia de Menores”, Nº II, 2002, Editorial Astigi
S.L., Sevilla – España

VII. ANEXOS

84

You might also like