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PERCONTARI

Año 5 • Nº 19 • Santa Cruz de la Sierra, Bolivia • noviembre 2018

El arte
Revista del Colegio Abierto de Filosofía

Revista Percontari 1
Colegio CONTENIDO
Abierto de
Filosofía

Percontari es una revista del Los aspectos conservadores de la cultura


Colegio Abierto de Filosofía. y la estética populares ................................................. 5
Filosofar significa estar en H. C. F. Mansilla
camino. Sus preguntas son más
esenciales que sus respuestas y
La naturaleza de la experiencia estética
toda respuesta se convierte en y la belleza ................................................................. 10
nueva pregunta.
Gustavo E. Romero
Karl Theodor Jaspers
El arte que no vemos y sus relaciones
con la sociedad .......................................................... 12
Dirección Roxana Hartmann
Enrique Fernández García
Las parcelas del arte .................................................. 14
Consejo Editorial
H. C. F. Mansilla
Andrés Canseco Garvizu
Roberto Barbery Anaya El arte, la política y Gustavo Dudamel ........................ 16
Blas Aramayo Guerrero
Fernando Mires
Andrés Canseco Garvizu
Alejandro Ibáñez Murillo Del arte y sus escarceos con la política ..................... 21
Ilustración Enrique Fernández García
Juan Carlos Porcel
Esbozo histórico de las concepciones
del arte en la filosofía. Arte y belleza hoy .................. 23
Artista invitado
Gustavo Pinto Mosqueira
Roxana Hartmann
El artista y la obra bordianos.
Seguimiento editorial
Notas sobre la figuración artística en Arturo Borda .... 38
Juan Marcelo Columba-Fernández
La expresión estética del Ande a través
del telurismo pictórico de Cecilio Guzmán de Rojas .. 41
Freddy Zárate
El espejo: el poder del arte o el arte de poder .......... 46
Delmar Apaza López
Gente de Blanco El arte: un disparo que no genera dolor ..................... 49
DL: 8-3-39-14
Mario Javier Tobón Román
El Popper conservador ............................................... 51
Luis Christian Rivas Salazar
facebook.com/
Ante el Ángel de las Elegías ...................................... 58
colegioabiertodefilosofia
revistapercontari@gmail.com Emilio Martínez Cardona
revistapercontari.com
El antepenúltimo andén .............................................. 59
Roberto Barbery Anaya
Mimesis y poiesis ....................................................... 60
P. A. F. Jiménez

2 Revista Percontari
Editorial

En pos de una
comunicación original y ejemplar
Enrique Fernández García

D ejándolo de manifiesto en cuantiosas opor-


tunidades, Bertrand Russell fue un filósofo
que se distinguió por el sentido del humor. Es-
ya hubiese conocido. No se trata de alentar las
rupturas radicales, revolucionarias; ser original
no implica abolir el pasado. Por otro lado, esa
tuvo lejos de quienes conciben el pensamiento creación artística debería ser ejemplar, desper-
como un oficio que, para su ejecución, exige tando admiraciones, así como suscitando otras
ceños fruncidos, mirada penetrante y, entre reacciones positivas, efectos mediante los cuales
otros requerimientos, censurar cualquier gracia. las personas puedan advertir cómo es vencida
En una ocasión, evidenciando dicha virtud, dijo su indiferencia. De esta manera, se reconoce un
que jamás había escrito sobre estética porque no componente fascinador en ese tipo de hazañas.
tenía dominio del tema, ignorándolo de forma En definitiva, el desafío tiene que ver con ser
significativa; sin embargo, complementando la tan singulares cuanto dignos del aprecio ajeno,
explicación, aclaró que, según algunos colegas, sea racional o emotivo. Conforme a este parecer,
eso nunca le había impedido reflexionar sobre el artista no podría ser presentado como agente
otros múltiples asuntos. Pasa que, durante su que combina misantropía con cierta consciencia
dilatada existencia, pensó acerca de diferentes de lo bello. Su producción, como señala Sartre
terrenos del saber, llegando incluso a protago- cuando habla de la literatura, no se agota en el
nizar debates e instigar a la rebeldía en varias concepto del soliloquio. Por consiguiente, la
áreas. Habló, pues, de diversas cuestiones, pero comunicación con su semejante será parte de
dejó sin examen propio esa esfera en que la be- sus designios, aunque sin desdeñar las formas,
lleza y, por supuesto, el arte son fundamentales. los modos, el estilo. No es un propósito que se
Por suerte, otros como Kant, Hegel y Alain pueda conseguir con facilidad. Quizá por esto
fueron más osados. quienes son reconocidos allí como genios sean
Contemporáneamente, los razonamientos tan pocos. Aludo a personas que han podido
en torno al arte pueden remitirnos al estudio comunicarse —aún hoy, varios siglos después
de muchos autores. André Comte-Sponville es de su deceso— con la mayor de las eficacias
uno de los pensadores que ha escrito al respecto. posibles. Es cierto que pertenecen a nuestra
Lo hace de forma pedagógica, clara, provechosa, misma especie; no obstante, ante su obra, como
como siempre. Destaco que, para él, los elemen- pasa con Leonardo, uno se siente gratamente
tos que resultan indispensables para hablar de inferior. En cualquier caso, ésta es apenas una
una obra maestra son dos, a saber: originalidad de las perspectivas que nos depara el arte. Las
y ejemplaridad. El primer requisito nos aleja de páginas que constituyen este número sirven
la imitación, aun cuando ésta sea notable; por para evidenciar cuán distintos son los criterios
tanto, no podríamos ofrecer al prójimo algo que en ese ámbito.

Revista Percontari 3
Roxana
Hartmann

Nace en Santa Cruz de la Sierra,


Bolivia. Licenciada en Arte con es-
pecialidad en Diseño Gráfico de la
Universidad del Estado de Kansas,
Estados Unidos de América. Cursó
una Maestría en Marketing y Post-
grado en Educación Superior. Artista
por oficio y decisión. Propicia un
diálogo entre el sub-consciente y el
exterior. Es docente de Diseño desde
el año 2002 en la UPSA y la UCB
San Pablo, además de maestra de
pintura desde 2010, por donde han
pasado desde niños hasta adultos.
Gestora cultural y conferencista,
ha dictado talleres y charlas en Santa
Cruz, La Paz, Barcelona y la Chiqui-
tanía boliviana. Investiga sobre las
relaciones de las personas y su entor-
no, la cotidianidad y la búsqueda de
la esencia como acto introspectivo y
las reacciones a los eventos sociales
y políticos de su país que afectan la
vida diaria. Propone encuentros entre
su obra y el que la visita y genera con
estos elementos un diálogo con el
que va dibujando espacios. La cons-
tante de su trabajo es la reflexión, el
objeto artístico como resultado de
una investigación y la interacción de
ambos de distintos formatos.
Ha participado de una veintena de
exposiciones individuales dentro y
fuera del país y varias otras colectivas.
Catedrática y conferencista, madre y
activista, Hartmann va explorando y
proponiendo libremente su percep-
ción traducida en momentos visual.

4 Revista Percontari
Los aspectos conservadores de la
cultura y la estética populares
H. C. F. Mansilla

E l mundo actual, signado por un cierto rela-


tivismo de valores en la esfera moral y por
el predominio casi irrestricto del principio de
Pese a su relativismo axiológico y a su pre-
tendido pluralismo de enfoques, las concep-
ciones postmodernistas de nuestro tiempo
rendimiento y eficacia en el campo de la eco- –en América Latina en general y en Bolivia en
nomía, tiende a dar la espalda a lo que antes particular– prescriben un aparato doctrinario
se conocía como normativas éticas y estéticas, instrumentalista y lúdico-populachero que, en
basadas en sistemas coherentes de creencias re- el fondo, sólo reconoce la consecución de in-
ligiosas o en doctrinas filosóficas de reconocida tereses sociales y la satisfacción de necesidades
solvencia. Esta afirmación exhibe hoy un aire materiales. El ejercicio de la libertad ética es,
de anacronismo, inexactitud conceptual y hasta en cambio, el intento de romper las cadenas de
exageración retórica; hay en ella, sin duda, una la causalidad y de los lazos primarios que nos
clara nostalgia por los valores humanistas del atan a los imperativos de la naturaleza y de la
pasado. Decir esto, empero, es ya una abdicación autoconservación de la especie, por un lado, y al
del espíritu crítico, una concesión a las modas ordenamiento prerracional de la tribu, por otro.
doctrinarias del momento, pues sería admitir La libertad preconizada por los humanistas
que la dimensión del humanismo pertenece puede ser vista como el triunfo de la condición
inexorablemente al ámbito de la caducidad. Las humana sobre la dimensión de la pura necesi-
teorías fundamentales asociadas al humanismo dad de la supervivencia, por más precario que
y sus orientaciones normativas no representan resulte ese triunfo. La ética humanista exige
una dimensión pretérita de nuestra existencia ni algo superior: que el prójimo no sea degradado
a la categoría de medio para la consecución de
tampoco un capítulo superado de la historia de
nuestras metas.
las ideas, sino los logros, siempre incompletos,
del intento humano de comprenderse mejor. Aquí se intentará un breve estudio de la pro-
blemática mediante un enfoque que se inspira
La nostalgia es la consciencia de la pérdida
en pensadores de la Escuela de Frankfurt, como
de cualidades y valores reputados ahora como
Theodor W. Adorno, Herbert Marcuse y Jürgen
anticuados (la confiabilidad, la perseverancia, la Habermas. Este esfuerzo teórico no suplanta,
autonomía de juicio, el buen gusto formado a lo obviamente, otros caminos para entender el
largo de generaciones, el respeto a la pluralidad modelo civilizatorio contemporáneo en Bo-
de opiniones, el aprecio por el Estado de De- livia y el derrumbe de los valores normativos
recho), que han demostrado ser útiles e impor- humanistas, pero puede contribuir a esclarecer
tantes para una vida bien lograda. Su dilución el contexto en dimensiones que habitualmente
conlleva el empobrecimiento de la existencia son pasadas por alto. Este impulso está basado
individual y social en el presente, comparada en una visión crítica de la evolución social-cul-
con lo que podría alcanzarse por medio de tural, acompañada por una nostalgia –es decir:
esfuerzos razonables. Se puede percibir en este por una visión que no acepta sin más la facti-
desarrollo (a) el enaltecimiento indebido de cidad de lo real–, que nos obliga a confrontar
la cultura popular, (b) el aplanamiento de las los fenómenos analizados con sus propios pos-
opciones estéticas, (c) la obsolescencia de casi tulados y con lo alcanzado en etapas anteriores.
toda reflexión moral y (d) la probabilidad de Me apoyo en observaciones dispersas referidas
convertir al ciudadano y al espectador de arte a las pautas recurrentes de comportamiento en
en un mero consumidor. El resultado es la “in- América Latina y Bolivia. Por ejemplo: casi
dustria de la cultura”, concepción vislumbrada todos los estratos sociales y las comunidades de
tempranamente por la Escuela de Frankfurt, distintos orígenes sociales y étnicos se dedican
cuyos fundamentos guían este ensayo. con similar ahínco a destruir el manto vegetal

Revista Percontari 5
y a ampliar la frontera agrícola, y a todos ellos La celebración apasionada del crecimiento eco-
les es igualmente indiferente la belleza de los nómico, de la expansión de la frontera agrícola
ecosistemas naturales. Los grupos juveniles se y de la modernización general de la sociedad
adhieren a una cultura del ocio muy semejante respectiva tiene lugar paralelamente a una rein-
en todos los países del área, cuyos rasgos genera- vención de la tradición. En el ámbito andino
les no dejan entrever una racionalidad de largo esta última se manifiesta como el redescubri-
plazo. Este texto exploratorio intenta provocar miento parcializado y hasta manipulado de los
el interés acerca de temáticas y perspectivas no valores ancestrales indígenas. En este contexto
muy usuales, oponiéndose a la corrección polí- se puede percibir un designio omnipresente de
tica del momento. modernización técnico-económica, que sucede
En América Latina y Bolivia, la conjunción del simultáneamente con la importación masiva de
mencionado relativismo de valores en el terreno las doctrinas postmodernistas y con el elogio
de las interacciones sociales con la prevalencia –estrictamente verbal– de la Madre Tierra.
del principio de eficacia en la esfera económica El principio que guía este texto es la pregun-
no es algo enteramente nuevo. La dependencia ta por lo que se halla detrás de los fenómenos
cultural del Nuevo Mundo con respecto al mo- socio-políticos visibles en la cultura popular y
delo civilizatorio occidental constituye algo es- detrás de las teorías altisonantes que defienden
tudiado por la ensayística latinoamericana desde los regímenes latinoamericanos considerados
el siglo XIX: se imitan las metas normativas del como progresistas. El designio de cuestionar la
desarrollo histórico occidental (modernización realidad de toda época ha representado uno de
en general, urbanización a gran escala, educa- los elementos centrales del racionalismo y, por
ción humanista, introducción del principio de
lo tanto, su mérito perdurable: hay que criticar
eficacia, alto nivel de consumo masivo y en lo
el “sano” sentido común de las mayorías y las
posible: industrialización) y, al mismo tiempo,
convenciones de la vida cotidiana, empezando
se celebran las tradiciones socio-políticas de
por las herencias civilizatorias de más prestigio
vieja data (caudillismo, autoritarismo, paterna-
en la respectiva sociedad. Estas últimas funda-
lismo) en cuanto herencias culturales propias y
autónomas, y como si estas fueran razonables mentan la cultura popular, y por este motivo
y paradigmáticas por tener tintes nacionalistas constituyen hoy en día los objetivos del elogio
y revolucionarios. Las teorías actuales de la de las corrientes postmodernistas, comunitaris-
descolonización, del indigenismo e indianismo tas y relativistas. Precisamente a causa de ello
que ponen en duda la herencia occidental no es imprescindible una operación incómoda de
pueden ser tomadas totalmente en serio porque carácter contra-intuitivo: poner en duda las evi-
no proponen objetivos realmente distintos de la dencias inmediatas de la vida social y las “ver-
evolución histórica a largo plazo y porque no dades” asumidas por cada nación, especialmente
poseen una visión crítica de su propio pasado las más apreciadas por las masas. Las normativas
y de las prácticas políticas utilizadas por los éticas y estéticas de la cultura popular encubren
movimientos indigenistas. probablemente (a) la férrea voluntad de poder
Se puede constatar hoy una paradoja que se ha de contra-élites políticas, (b) la moral consue-
expandido en Bolivia: el retorno a las tradiciones tudinaria que proviene de siglos pasados y (c)
de la propia cultura y el rechazo del liberalismo el designio de imitar el desarrollo occidental
occidental ocurren en medio de la adopción bajo el manto de la autenticidad, la novedad y
entusiasta de la modernidad europea y nortea- la otredad revolucionarias. No es, manifiesta-
mericana en sus aspectos económico-técnicos. mente, una temática que invite a la autocrítica
Y en el plano teórico ese rechazo es justificado de aquellos teóricos a la moda que enaltecen
mediante fragmentos del pensamiento comuni- estas corrientes. El actual modelo civilizatorio
tarista y enfoques de origen postmodernista-re- en América Latina y particularmente bajo los
lativista, todos ellos aderezados mediante vesti- regímenes populistas fomenta el tradicional co-
gios de la ortodoxia marxista-leninista. Ambos lectivismo autoritario, que ahora es disimulado
fenómenos –el desarrollo económico acelerado por un dilatado manto de tecnología moderna,
y la defensa del legado cultural propio– flore- por un tinte de juventud y espontaneidad y por
cen con inusitado vigor en los experimentos una aceptación masiva y candorosa de las di-
populistas de Bolivia, Nicaragua y Venezuela. rectivas gubernamentales. Esta cultura popular

6 Revista Percontari
puede, por lo tanto, causar el naufragio de los del egoísmo, aunque la apariencia exterior
valores normativos humanistas. de sus manifestaciones sea “antiburguesa”, es
La actual situación latinoamericana y bolivia- decir: fraternal, generosa y espontánea. En las
na puede ser descrita como deprimente, pues preferencias de la juventud esta cultura popular
favorece (a) una ética de la materialidad y la desplaza sin problemas a la llamada alta cultura.
inmediatez, y (b) una estética pública que no Hoy en día la cultura popular no contiene ele-
sólo es otra, con respecto a tiempos anteriores mentos revolucionarios o emancipadores, sino
–lo que sería un cierto consuelo–, sino una re- una apariencia comercial que afecta a casi todas
lativamente exenta del designio de crear belleza sus manifestaciones, lo que se puede constatar,
perenne o, dicho menos enfáticamente, libre del paradójicamente, en las creaciones del indige-
intento de producir bienes que se sobrepongan nismo e indianismo en el área andina a partir
a las modas y a los caprichos del momento. En del cambio de siglo. Por todo ello esta cultura
lo referente a la ética se puede argüir que las adopta necesariamente una inclinación conser-
normativas dictadas por intereses materiales vadora en términos políticos, pese al carácter
han representado a lo largo de la evolución del destemplado de sus lenguajes y a sus preten-
mundo entero las pautas de comportamiento siones de radicalidad y otredad. Este estado de
más habituales y apreciadas de toda la huma- cosas no es inusual. Los modelos civilizatorios
nidad. La ética que se está expandiendo en el que no tienen una autoconsciencia crítica de su
Nuevo Mundo ostenta ahora el aura de lo juve- pasado o de sus normativas dirigidas al futuro
nil y revolucionario, de lo ligero y placentero, es tienden a celebrar los modestos logros propios
decir, de lo adecuado a una época del desenfado como algo único y digno de ser preservado y
y el placer, que ya no reconoce ni en el plano utilizado en toda oportunidad al alcance de la
teórico-prescriptivo limitaciones anacrónicas y mano. Sus intelectuales se consagran dócilmen-
regulaciones engorrosas. Los apóstoles postmo- te a resaltar el carácter revolucionario y progre-
dernistas han calificado a nuestro tiempo como sista de estos legados históricos. A ellos no les
progresista y tolerante en comparación con toda preocupa el proceso de comercialización de la
la historia universal. La ética prevaleciente, si se cultura popular o la mencionada estridencia y
puede llamar así, está libre de preocupaciones desmesura de sus manifestaciones juveniles,
por los derechos de terceros y por el bien co- pues ella, en el fondo, sería el testimonio de algo
mún; es una moral, además, vacía de reflexiones que viene de muy atrás, de algo sagrado en sen-
y anhelos de largo plazo. Los apologistas de la tido de altamente apreciado y reverenciado por
nueva cultura-mundo, que celebran en primer las masas sufridas de la población. Por esto es
lugar la revolución científica y tecnológica y sus conveniente comentar el aporte del historiador
consecuencias en el terreno de la comunicación argentino-mexicano Adolfo Gilly, quien logró
masiva, señalan de manera elogiosa que esta reconstruir el sentimiento generalizado de la
nueva forma de cultura ya no es elitista, sino población indígena del área andina que no ha
una creación de las masas. Su razón de ser es sido favorecida por el desarrollo de las últimas
“ofrecer novedades accesibles para el público décadas.
más amplio posible y que distraigan a la mayor La cultura popular –la música, el baile, el
cantidad posible de consumidores. Su intención espectáculo masivo, la comida, la estructura
es divertir y dar placer, posibilitar una evasión familiar, los vínculos con el paisaje, los mitos
fácil y accesible para todos”. Los contenidos acerca de los nexos entre el Hombre y el univer-
morales y estéticos se han evaporado; lo único so– conforma, según Gilly y muchos autores ac-
importante de la cultura-mundo resulta ser su tuales, el núcleo de la identidad colectiva andina
carácter global-popular, fácil de comprender, y de su dignidad ontológica superior. Se trata
y la elaboración de estrategias para que los de una evocación que hace renacer un tiempo
consumidores no tengan que pensar en temas y un mundo, y para ello hay que tener una em-
desagradables o complicados. patía elemental a priori con ese universo, que
Se puede aseverar que la cultura popular no puede ser comprendido mediante un análisis
latinoamericana del momento es el ámbito de racional a posteriori. Para entenderlo hay que
la estridencia y la desmesura, marcado, entre tomar partido por él, por sus habitantes, sus
otras cosas, por la decadencia de la solidaridad anhelos y sus penas. Únicamente los revolucio-
efectiva (no la retórica) y por el incremento narios, mediante su ética de la solidaridad y fra-

Revista Percontari 7
ternidad inmediatas, pueden adentrarse en esa Esta idea es muy popular en círculos progre-
mentalidad popular. Este principio doctrinario sistas, izquierdistas e indigenistas y representa,
conlleva, empero, el peligro de que comprender por otra parte, la base de la industria de la pu-
abarque también las funciones de perdonar y blicidad. Esta última transforma cualquier cosa
justificar. que debe ser vendida en un objeto de apariencia
Los ideólogos de la descolonización, como atractiva según los cánones del relativismo
Adolfo Gilly, no están dispuestos a ver los imperante; los especialistas de publicidad sos-
aspectos problemáticos en los sistemas civi- tienen con razón que pueden vender cualquier
lizatorios que desplegaron los indígenas en el cosa, como los artistas contemporáneos afirman
Nuevo Mundo y que perviven en las comuni- que pueden convertir cualquier cosa en arte.
dades campesinas de la región andina, sistemas Por todo ello se puede aducir lo siguiente
que no han generado los derechos humanos, la contra las presuntas bondades de la cultura
modernidad y sus evidentes ventajas en la vida popular. Sus productos actuales –otra cosa han
cotidiana. En cambio estos intelectuales pro- sido, obviamente, los testimonios artísticos e
mueven la concepción de que las formas ances- intelectuales de su larga historia– no provienen
trales comunitarias de organización y la llamada generalmente de auténticas prácticas culturales
ahora democracia directa representarían formas del pueblo, no son creaciones “espontáneas” de
superiores de la vida social. La compensación las clases subalternas, sino constituyen en pro-
por la dignidad perdida se revela, empero, como porción importante objetos y valores generados
la consecución de actos simbólicos y gestos por grandes conglomerados manufactureros de
casi esotéricos de muy poca relevancia práctica, acuerdo a un plan (lo menos espontáneo que
aunque se puede argumentar que los ajenos a hay) de largo aliento para el consumo de millo-
esta cultura ofendida no pueden comprender nes de personas. En el fondo la mayoría de estos
el alcance y la verdadera significación de esos “productos” no tiene nada de “democrático” en
actos y gestos. De todas maneras: llama la el sentido de sus defensores: son de un estiliza-
atención la desproporción entre las compensa- do barbarismo.
ciones históricas reclamadas y la intensidad del En base al ejemplo de Colombia, Omar
sentimiento colectivo de reivindicación, por un Rincón afirmó que la cultura popular engloba
lado, y la modestia de los bienes simbólicos que a menudo la “ética del triunfo rápido” y el im-
crearían esa satisfacción, por otro. Adolfo Gilly pulso imparable a la ostentación. Todo vale, por
concluye que el odio y la voluntad de sacrificio ejemplo, para salir de pobre. Cuando se llega a
de los humillados “se nutren de la imagen de ser rico, es para lucirlo y exhibirlo. Ello tiene
los antepasados oprimidos y no del ideal de los que ver con nuevos grupos sociales que influyen
descendientes libres”. Esta concepción conser- sobre las tendencias del gusto público, especial-
vadora propugna al fin y al cabo la restauración mente del juvenil; se mueven sobre todo en el
del orden social anterior a la llegada de los ámbito del espectáculo, lo que hoy está imbri-
españoles, orden considerado como óptimo y cado de modo íntimo con la política y el delito.
ejemplar, lo que en la realidad significaría rees- Estos “círculos” poseen la fuerza o la habilidad
cribir la historia universal y negar sus resultados de imponer los nuevos valores de orientación
tangibles. masiva, como el dinero fácil y los bienes de
Las doctrinas de una necesaria y recomenda- consumo que denotan un gusto retumbante y
ble amalgama entre cultura superior y popular ordinario. Sus actividades se realizan casi siem-
propugnan una fusión de ambas donde lo único pre con el acompañamiento de música ruidosa,
notable es la preponderancia de los motivos y las jactancia hueca y rechazo de otras normativas
prácticas comerciales. La pregonada comunión culturales, todo ello acompañado por ideolo-
entre ambas esferas es algo manipulado desde gías que proclaman el carácter revolucionario,
arriba, donde el arte y la literatura propenden innovador y abierto de esos emprendimientos.
a transformarse en meras mercancías intercam- Lo más preocupante no es la utilización masiva
biables y donde en vano se buscaría una fructí- de la música popular, sino el desprecio abierto
fera comunicación entre lo cotidiano y lo culto. por otras opciones culturales y hasta políticas, lo
También en América Latina se ha expandido la que significa que las rutinas y las convenciones
concepción de que cualquier objeto puede ser autoritarias y dogmáticas de vieja data se han
arte y que todo, por ende, puede ser estetizado. entremezclado exitosamente con las pautas

8 Revista Percontari
de comportamiento de los jóvenes contempo- gímenes populistas del siglo XXI. Según Omar
ráneos. La cultura del autoritarismo muestra Rincón, la filosofía popular que corresponde a
así su perdurabilidad y arraigo en los estratos esta estética expresa el destino trágico de los
populares, como lo es también en otras capas protagonistas por ser hijos de la pobreza y la
sociales. injusticia social, la corrupción política y el des-
A comienzos del siglo XXI vuelve a oírse el precio de los ricos antiguos. Aunque consideran
clamor de la tribu: en medio del progreso tecno- el dinero como único referente normativo,
lógico y en los regímenes populistas que preten- comparten al mismo tiempo una proto-ideología
den encarnar un grado superior de democracia, “progresista” y patriótica, que percibe la culpa de
se expanden concepciones arcaicas revestidas de
los principales males nacionales en la política de
un tenor juvenil, lúdico, hedonista y obviamente
los Estados Unidos, es decir: en una de las con-
simpático. Se celebran nuevamente el mimetis-
mo gregario, el retorno a la comunidad ancestral venciones más arraigadas de toda la región, y
y el renacimiento de los lazos primarios, pero no por ello la huella cultural más razonable. La
ahora dentro de un contexto a la moda del día narco-estética no es una manifestación de mal
que ensalza la “estetización del cuerpo social”, gusto, según este autor, sino simplemente otra
la “ética del instante” y la prevalencia de senti- estética, la de las comunidades desposeídas que
mientos y emociones sin las anticuadas restric- se asoman a la modernidad, la de las “culturas
ciones racionalistas. La elogiada vida orgiástica, populares del mundo”, donde lo “popular-ca-
pese a su apariencia de espontaneidad y liber- pitalista premia el billete por encima de todas
tad, conduce premeditada e inexorablemente las cosas”. Aunque parezca sorprendente, en los
a la dilución de lo individual en lo grupal. La regímenes populistas de Bolivia, Ecuador, Ni-
responsabilidad moral e individual se disuelve caragua y Venezuela la situación es, en el fondo,
en lo colectivo, así como el sopesamiento de al- muy similar, y la retórica anticapitalista apenas
ternativas y opciones según criterios racionales encubre una realidad signada por el anhelo
es desplazado por el entusiasmo de sumergirse vehemente de poseer y consumir más cada día.
en la experiencia del conjunto social. Esta ten-
dencia (“la efervescencia dionisíaca”), que se En el plano estético la producción contem-
aviene tan adecuadamente a nuestra época del poránea de obras de arte en América Latina y
placer generalizado, conlleva la subestimación Bolivia ya no representa, en términos generales,
del sujeto racional y el enaltecimiento corres- una promesa de felicidad y bienestar, ni una ra-
pondiente de los entes colectivos: lo individual cionalidad orientada a fines, ni un dique contra
pierde en dignidad ontológica frente a lo social. el totalitarismo, ni un “incremento del ser”, ni
La mentalidad colectiva nunca cuestionada, la una fuente autónoma de solaz y conocimiento,
cultura política tradicional, los prejuicios de sino la fabricación fácil y rápida de ocurrencias,
la tribu y las modas del momento vuelven a bromas y meros esbozos, es decir, la manufac-
transformarse en lo positivo y promisorio, con tura premeditada de lo efímero e insustancial.
lo cual se da una regresión histórica hacia etapas Utilizo términos dramáticos, sin duda alguna,
históricamente ya superadas, y no la pretendida pero estos nos ayudan a comprender la declina-
creación de un modelo social distinto y mejor ción del arte (y de la ética) en una época de una
en comparación con el orden disciplinario cierta prosperidad material y democratización
y castrante de la vilipendiada modernidad
política. El arte auténtico es el que expresa lo
occidental. El enaltecimiento irracional del
que la ideología encubre, aquel que transciende
hedonismo puede terminar paradójicamente en
un esoterismo místico y un sentir cósmico, es la falsa consciencia; su verdad se refleja en su
decir, en actitudes políticamente conservadoras protesta permanente contra la realidad. El con-
y resignadas con respecto al presente inmediato. sumo de bienes de la cultura popular no tiene
Hoy en día, cuando han muerto los valores de por objetivos ni propagar otro paradigma de
la distinción meritocrática, también empiezan mejor sociedad, ni promover una moral diferen-
a desaparecer todas las normativas éticas y es- te, sino forzar el consentimiento a las modas del
téticas vinculadas a las tradiciones humanistas. día. El resultado a largo plazo puede ser descri-
Aunque resulte odioso, hay que mencionar que to como la dilución de la consciencia crítica y la
esta constelación está muy difundida en los re- represión de la genuina individualidad.

Revista Percontari 9
La naturaleza de la
experiencia estética y la belleza
Gustavo E. Romero

C ualquier descripción de experiencias


estéticas tiene que abordar al menos las
siguientes dos preguntas: ¿qué significa que x
un objeto y el contexto en el que la relación se
da (Langer 2016, Romero 2018).
Los conceptos de experiencia estética y valor
sea una experiencia?; y ¿qué significa para esa estético están vinculados entre sí mediante la
experiencia ser estética? Como cualquier otra siguiente necesidad lógica (Dorsch 2000):
experiencia humana, las experiencias estéticas
son procesos que ocurren en el cuerpo humano, La experiencia de un objeto es estética si y solo
especialmente en el cerebro. Estos procesos son si atribuye un valor al objeto, y ese valor es
activados por interacciones ya sea con un objeto estético.
artificial o con un elemento natural. Dependen Cualquier persona incapaz de tener experiencias
de las propiedades objetivas del mismo, del estéticas será indiferente a los juicios estéticos.
conocimiento del individuo, de su estado emo- La belleza no se encuentra en la naturaleza, sino
cional y físico, de las condiciones ambientales, que se experimenta por un organismo suficien-
y de la susceptibilidad del sujeto a factores no temente evolucionado.
bien conocidos, pero que podrían ser revelados La apreciación estética de los diferentes tipos
por investigaciones neurológicas adicionales de objetos conduce a la producción de juicios
basadas en el uso de resonancia magnética fun- estéticos. Decimos que un objeto, evento o
cional, magnetoencefalografía y electroencefa- proceso es hermoso o bello si produce en no-
lografía, todas ellas realizadas mientras el sujeto sotros un tipo particular de experiencia estética
está expuesto a diferente tipos de obras de arte positiva. Una experiencia se dice positiva si, en
y objetos estéticos. El conocimiento recabado condiciones ideales, hace que el sujeto se sienta
hasta ahora indica que la experiencia estética bien y experimente un deseo de continuar o
involucra la activación de áreas sensomotoras repetir la experiencia. Específicamente,
del cerebro junto con centros emocionales cen-
trales y centros relacionados con recompensas Definición: Un objeto a es estéticamente va-
(ver, por ejemplo, las investigaciones de Di Dio lioso en su aspecto b para un organismo c en la
y Gallese 2009, Brattico y Pearce 2013). circunstancia d, y a la luz del cuerpo de conoci-
mientos e si la exposición de c a a produce una
La experiencia estética es un proceso alta-
experiencia estética positiva en c.
mente complejo que ocurre en muchos niveles,
superando el mero análisis cognitivo-sensorial Una persona puede tener una experiencia esté-
y la apreciación de obras de arte. Se basa en tica positiva, pero la causa puede no ser con-
resonancias visceromotoras y somatomotoras siderada como hermosa. Por ejemplo, algunos
muy complejas, no necesariamente conscientes, objetos pueden causar repugnancia o incluso
que ocurren en el espectador. Estas reacciones aversión; sin embargo, podrían desencadenar
involucran los principales centros emocionales, procesos cognitivos y otros procesos cerebrales
como la ínsula y la amígdala, que se activan o corporales considerados como estéticamente
fuertemente durante las experiencias. La na- valiosos y positivos por el individuo. De aquí
turaleza y profundidad del fenómeno depende que la relación entre experiencias estéticas y
fuertemente del conocimiento, la formación y belleza no es uno a uno. La belleza es solo un
el estilo de vida del sujeto, junto con las condi- subconjunto de todas las experiencias estéti-
ciones físicas externas (ambiente, iluminación, camente positivas posibles para un individuo
temperatura). La experiencia estética, entonces, dado. Las características distintivas del sub-
surge de las relaciones entre un sujeto sensible, conjunto de experiencias que llamamos bellas

10 Revista Percontari
es que la experiencia inducida no es solamente del estado del organismo. Si la experiencia es
considerada valiosa, sino también deleitable y positiva, el organismo considera el objeto esté-
disfrutable para el sujeto. tico como estéticamente valioso (por ejemplo,
Los juicios estéticos involucran relaciones de como hermoso o bello).
la forma Vabcd ... n. Si es posible tener éxito en Las experiencias estéticas son las raíces de las
la cuantificación de los valores estéticos (cosa valoraciones estéticas que realizamos. No exis-
que raramente sucede), la relación se convierte ten cosas bellas o acontecimientos hermosos
en una función de n-tuplas de objetos a núme- en sí mismos: los valores estéticos, como todos
ros reales. Por ejemplo: V (a, b, c, d, f, u) = v, los valores, son ficciones atribuidas a algunos
donde u es una unidad adecuada, y v el valor objetos por algunos organismos en un estado
numérico que b atribuye a un objeto estético a particular. Los movimientos artísticos, por su
en su aspecto c, sobre la base de un conocimien- parte, son sistemas socioculturales materiales
to f y en la situación d. La forma general de una que incluyen artistas, expertos, críticos, y los
función real que representa valores estéticos es muchos materiales y elementos conceptuales
V: A X B X…N X U —> R, donde A es una
asociados a sus actividades específicas. El arte es
colección de objetos susceptibles de apreciación
simplemente la clase de todos los movimientos
estética, B una colección de individuos, y los
artísticos. O sea, el arte es un concepto, pero los
factores restantes en el producto cartesiano,
movimientos artísticos son materiales, como lo
hasta N, puede ser colecciones de cosas, propie-
dades, estados, o procesos, mientras que U es son sus componentes (artistas, obras, instru-
un conjunto de unidades, y R es el conjunto de mentos, etc). Cada uno de estos movimientos
los números reales. Como ocurre en la ética, los incluye algunas convenciones respecto de las
valores estéticos son cuantificables en principio, cuales se realizan juicios artísticos.
aunque raramente en la práctica se procede a Los productos artísticos (estatuas, pinturas,
su exactificación. Por lo general, solamente los obras musicales, etc) son artefactos culturales,
críticos de arte y esteticistas se preocupan por es decir, construcciones humanas producidas
realizar una evaluación cuantitativa de los valo- en un contexto cultural dentro de una sociedad,
res estéticos. cuyo objetivo es inducir algún tipo de experien-
Particiones del conjunto B de individuos cau- cia estética en el espectador. Las obras de arte
sadas por diferentes conocimientos de fondo o pueden ser materiales, tales como las pinturas
diferencias en las condiciones y otras variables y esculturas, conceptuales como obras literarias,
explican las diferencias en la atribución de valor procesales como obras musicales, o mixtas,
por diferentes críticos a los mismos objetos. como una performance teatral.
La belleza es simplemente el conjunto B de La estética es el estudio filosófico de las ex-
todos los objetos considerados hermosos por un periencias estéticas y artísticas. El arte no es
individuo b, bajo condiciones c, en un instante científico, ciertamente, pero la estética puede
dado t. La intersección de Bi para objetos de llegar a serlo si usa herramientas de la ciencia
clase x en un grupo G de individuos i = 1, ..., (Romero 2018).
n en una sociedad C es el ideal de belleza de
x en ese grupo. No solo las obras de arte pue-
den ser estéticamente valiosas. Paisajes, rostros
humanos, objetos naturales, animales, artefactos Referencias
tecnológicos, teorías científicas, y muchos otros Brattico, E. and Pearce, M. 2013, «The Neuroaesthetics
items, pueden también considerarse objetos de of Music», Psychology of Aesthetics, Creativity, and the
belleza. Arts, 7, 48-61.
En conclusión: las experiencias estéticas son Di Dio, C. and Gallese, V. 2009. «Neuroaesthetics: A
review», Current
un tipo de procesos biológicos. Son mediadas
Opinion in Neurobiology, 9, 682-687.
por los sentidos y ocurren en ciertos organis-
Dorsch, F. 2000, «The Nature of Aesthetic Experiences»,
mos complejos, involucrando principalmente M. Phil. Thesis, London: University College London.
al cerebro. Estos procesos dependen tanto del Langer, F. 2016, «Art Theory for (Neuro)scientists: Brid-
estímulo externo producido por el objeto de ging the Gap», Poetics Today 37(4), 497-516.
apreciación estética (natural o artificial) como Romero, G.E. 2018, Scientific Philosophy, Berlin: Springer.

Revista Percontari 11
El arte que no vemos
y sus relaciones con la sociedad
Roxana Hartmann

L as maneras de mirar al arte pasan por las


formas que nos han enseñado; también,
algunas veces, procedemos intuitivamente, aun-
arte no es solamente objetos producidos como
resultado de una técnica desarrollada en un
espacio y bajo ciertas demandas del momento.
que esto puede significar la pérdida de detalles El arte es también, o sobre todo, este aparato
necesarios. Cuando se habla de arte contem- gestor de pensamiento que, a través de sus
poráneo, se complica un poco más la tarea de múltiples canales o formas, se manifiesta para
entender de qué se está discutiendo porque, servir de articulador de significados, opinio-
aparentemente, no hay un estilo o una forma nes, conductas o situaciones que podrán ser
reconocible que unifique a este periodo. Por ello, parte de la construcción social. Ahora bien,
para poder comenzar a plantear las relaciones tenemos que, obligadamente, definir el límite
del denominado arte contemporáneo con la geográfico de nuestra sociedad y poder si-
sociedad, es necesario tomar como referencia tuarnos para no imaginar a Europa y generar
algunas mínimas definiciones. significados equivocados. Por supuesto, estoy
Lo contemporáneo en el arte no es una cua- hablando desde Latinoamérica.
lidad de algo que acontece en este periodo de 2. Otra de las maneras en que Agamben define
tiempo; no hay paralelismo, es una forma de lo contemporáneo es describiendo una facul-
nombrar lo que se hace y sirve como herra- tad de ver en la oscuridad o la capacidad del
mienta cognoscitiva, algo que provoca y ge- sujeto contemporáneo de mirar a través de ella
nera múltiples lecturas y que también produce y vislumbrar lo importante del momento sin
transformación en el espectador individual dejar campo a la alucinación; “contemporáneo
o en un colectivo. Como dice Agamben: “La es aquel que tiene fija la mirada en su tiempo,
contemporaneidad es, entonces, una singular para percibir no las luces, sino la oscuridad”2.
relación con el propio tiempo, que adhiere a él Se puede deducir que aquello que cuestiona o
y, a la vez, toma distancia; más precisamente, es que está por debajo de lo obvio, eso que está en
aquella relación con el tiempo que se adhiere a movimiento; aunque provenga del silencio o
él a través de un desfasaje y un anacronismo”1. de la quietud, promueve la mirada hacia lo que
Entonces, lo contemporáneo es el espacio de sucede ahí donde no llega la luz del instante.
análisis u observación entre un sujeto y su tiem- Decir que el arte se relaciona con la sociedad
po, generando así distancia y diálogo, esto hace a partir de una búsqueda dentro de su propia
que no exista un fenómeno paralelo y todo lo oscuridad, que hay en la sociedad o que tam-
que produce el arte contemporáneo podría estar bién produce la sociedad, es encontrar caminos
afuera de su tiempo real. De alguna manera, el en donde, a partir de la mirada polisémica del
arte contemporáneo es distante de lo formal y arte, se puedan converger miradas a lo social
lo estético; no hace reverencia a los símbolos, se y a lo político, dejando que lo encontrado en
apega al concepto y a la narración del mismo sin la oscuridad sirva de iniciador de un diálogo
pretender ser discursivo o portador de mensajes entre el tiempo, la imagen, las palabras y, por
con significados absolutos. supuesto, sobre todo, el espectador.
1. En la búsqueda de ver cómo se relaciona el 3. Esto no significa que el arte ilumina y, por
arte con la sociedad o cómo el arte puede ser consiguiente, el artista es un iluminado que
usado como instrumento para transformar regala en cada obra un momento espiritual-
la cultura del presente (el que cada vez que mente bello o hasta sublime, como proponía
es nombrado es algo así como un momento si acaso Hegel. Este concepto, que aún se usa
atemporal), es necesario comprender que el en algunos escenarios para determinar qué es

1 Giorgio Agamben, 2008, ¿Qué es lo contemporáneo? 2 Giorgio Agamben, op. cit.

12 Revista Percontari
arte y qué no, o qué está bien y qué está mal, Nos han enseñado a dar valor a lo que se puede
está anclado en la modernidad. Creer que hay ver. Hemos aprendido a dar valor a lo material
una sola verdad o una única manera de ver las y a la individualidad de lo visible. En el arte, al
cosas hace que se limite o disipe la posibilidad producto artístico –pintura, escultura, objeto– y
de contradecir y, al no poder generar contra- al dueño de la firma, y no así a lo que el arte, por
dicción, no hay debate. Y si bien, el debate no medio de acciones integradoras, investigación
es indispensable a la hora de hablar de arte teórica o también nuevas maneras de intervenir
contemporáneo, es inherente a todo proceso el espacio en un determinado momento (quizás
creativo o es relativo a las construcciones so- usando elementos convencionales), pueda pro-
ciales de un determinado tiempo y espacio. vocar o transformar. Estar conscientes de que
4. El carácter polisémico del arte es una oportu- ahora hay muchos asuntos importantes, porque
nidad para resignificar escenarios, para poder hay una variedad de grupos que los validan, es
reescribir historias o para dar visibilidad a tener la apertura para hablar o constituir las di-
agentes que no han sido expuestos. Esto hace ferentes formas de hacer y las distintas maneras
referencia a la posibilidad de decodificar estas acciones
de decir de otra manera o y así, probablemente, aportar
de provocar que el obser- a la construcción social.
vador genere a partir del La construcción social
espacio entre lo sugerido desde el arte es también un
y su experiencia una nueva modo de hablar de educa-
forma de abordar temas ción. Aunque el propósito no
sociales y políticamente sea unificar el pensamiento
importantes. “El arte de- ni establecer pautas generales
bería ser consciente de su en cada asunto, puede empe-
impacto político y debería zar despertando sensibilida-
refinarse para sacar lo me- des, matices y diferencias que
jor de ello”3. nos rodean.
5. Habitar espacios y crear El arte que no vemos
nuevos lenguajes es otro acompaña, a veces, al que
canal que encuentra el arte podemos nombrar porque
para intervenir la sociedad, sería inapropiado pensar
para hablar o crear silencios que solamente lo que genera
molestos sobre temas que conocimiento o propone
perturban, pero que son necesarios porque una teoría es válido. Si así fuera, estaríamos
contaminan la cotidianidad que vivimos. reafirmando la mirada sesgada de aquellos
Aquí es importante resaltar que aún existe la círculos que se mueven motivados por la valo-
censura y no precisamente de entes institu- ración mercantil.
cionales con poder. La censura, muchas veces Las relaciones o los lazos que conectan al
por ignorancia, viene de la misma sociedad arte con la sociedad son como puentes entre lo
que, estancada en un conformismo cínico, re- que se quiere decir, lo que entienden los otros
chaza lo que incomoda y valora lo “bello útil” que se está diciendo y lo que sucede cuando
y funcional al mercado, dando otra vez mayor se pone en evidencia aquello (sin importar la
importancia al objeto que al pensamiento. estructura formal) en un determinado lugar
Así, acrecienta socialmente su inmunidad al y bajo condiciones que transgredan la luz;
auto examen y crítica de los procesos reflexi- creando a partir de la oscuridad temporali-
vos y artísticos. dades nuevas y, consecuentemente, haciendo
Entonces: ¿cuál es ese arte que no vemos y cómo contemporaneidad.
se relaciona con las personas de nuestro entorno? Será misión del artista ponerse en el lugar
que considera que le corresponde en esta acción
honesta de hacer lo que cree que es coherente
3 Luis Camnitzer, 2014, Una conversación con Luis Cam-
nitzer, artista, teórico y una figura central del conceptualismo con lo que se piensa.
latinoamericano.

Revista Percontari 13
Las parcelas del arte
Andrés Canseco Gavizu

D eambular por ciudades que no nos vieron


nacer es uno más de los grandes regalos
que otorgan las travesías. Desdeñoso de las
mercial, el elemento del precio está regido por
oferta y demanda más que por la observación
de detalles. Es lógico inferir que, al reproducir
horas perdidas en hoteles, mi apuesta es la del decenas de estatuillas –por ejemplo–, el carácter
viajero inquieto, el que encuentra sorpresas dig- único no está presente.
nas de engendrar ideas y aprendizaje. Aun para
aquellas cuestiones que ya creíamos retenidas y Técnica y legado en el arte
apoyadas en certidumbre, los aires distintos son
capaces de probarnos y renovarnos. Pensar en el arte implica recopilar más cuestio-
Precisamente fue en uno de aquellos reco- nes. Expresiones como la pintura, la música, la
rridos recientes en que la cuestión del arte escultura, y otras, son parte del arraigo cultural.
volvió a ser parte de mis meditaciones. En una No se exagera al afirmar que las ciudades pueden
mañana de invierno en un país vecino, migré jactarse de contar con los museos que guardan
por tres espacios a los que el mundo llama in- las más antiguas obras o que en su arquitectura
distintamente arte, pero que, en su naturaleza, se hallen catedrales o edificios de renombre.
concepción, efectos y fines, son completamente La primera cuestión es —claro está— la es-
distintos: una feria, un museo de bellas artes y tética. Incluso, para retratar a un nauseabundo
un centro cultural. Aunque no son restrictivos, monstruo, el pintor elige bien el encuadre, los
cada uno está pensado en su mayoría para dife- colores, las sombras, la perspectiva, etc. Un
rentes manifestaciones. La feria estaba ocupada conjunto de conocimientos que no se adquieren
por artesanías, al museo lo llenaban pinturas por azar. Aun si estos conceptos se tuvieran
y esculturas (herencia de las bellas artes) y el bien retenidos, ejecutarlos demanda un talento
centro cultural recibía numerosas muestras de y dedicación mayores de lo normal. Los grandes
arte conceptual. Vale la pena comentar algunas artistas del pasado guardan en su recorrido bo-
reflexiones. rradores y numerosas correcciones a sus obras
antes de haberlas puesto en la vista del prójimo.
Artesanía y carácter masivo Es casi una patología de disconformidad, pues
tratan de alcanzar la perfección.
Podría pensarse que la brecha artesanía-arte está La universalidad es otro elemento que puede
claramente marcada; basta revisar el sustantivo diferenciar al arte cultivado. Es así que este se
que alude al ejecutante para comprender la di- proyecta en tiempo y espacio. Aunque el objeto
ferencia (artesano y artista). Sin embargo, como central y específico de la obra sea particular, el
la claridad conceptual se ve comprometida por tema en general tiene un alcance que puede
las emociones y se tiene la tendencia a igualar, superar las particularidades. Por ejemplo, pen-
conviene realizar ciertas precisiones. semos en un cuadro de Ernesto de la Cárcova,
La labor artesanal está orientada casi entera- Sin pan y sin trabajo. En la pintura, podremos
mente al comercio; la producción de sus obras apreciar elementos de la vestimenta local,
se cuenta por decenas o centenas. Por supuesto, facciones en el rostro propias de la región; sin
no se trata de una emulación de una fábrica, embargo, nos puede hacer pensar que el hambre
pues la artesanía puede bien contar con un sello y la miseria son entendibles por individuos de
propio, la marca del artesano. Es también posi- todo el planeta y de todas las épocas.
ble vincular la artesanía al espacio geográfico y Finalmente, el arte ha ido creciendo a medida
las costumbres de una región. De hecho, una de que las restricciones morales, religiosos y po-
las mayores ventas de artesanías se da entre los líticas han aminorado. Pero no reniega de sus
visitante foráneos. En vista de su carácter co- orígenes; es más, encuentra en ellos elementos

14 Revista Percontari
valiosos y de conservación. Alguien puede ser es que hay pasiones superiores1. El presente va
un ateo confeso, pero no dejará de admirar las abarrotando los espacios con estas muestras de
melodías de cantos gregorianos o las iglesias abstracción, con manchas de sangre en lienzos
y sus expresiones artísticas. Por eso el mundo y puntos alineados sin aparente sentido, exi-
occidental puede conciliar muy bien las expre- giendo subvenciones y proclamando una falsa
siones artísticas con su presente, aunque pueden profundidad de ideas. Oscar Wilde y su arte por
parecer ajenos. el arte han sido apartados para para poner al arte
al servicio de una causa.
Arte conceptual y embuste
Ojos y opiniones en el arte
Como el abanico del arte ha crecido en liber-
tad, también se ha dado espacio para el arte En Las consolaciones de la filosofía, Alain de Bo-
conceptual, expresiones en las que el concepto tton rescata la figura de Sócrates para resistir
o idea superaría a la misma obra y su represen- a la impopularidad. Menciono esta idea de la
tación. Engendrado y popularizado en el siglo
impopularidad porque, cuando se discute sobre
XX hasta nuestros días, vemos que este tipo
arte, actualmente, hay una tendencia a colocar
de arte ha modificado sus fines: lo importante
todo en un mismo nivel, y cualquier apreciación
es el mensaje. Por este motivo, la subjetividad
sobre la calidad de algunas expresiones artís-
es esencial. En principio, esto no aparenta ser
malo, al menos hasta que uno se encuentra con ticas por encima de lo conceptual implica ser
un sabor a poco en las muestras. La claridad no políticamente incorrecto, incluso ser catalogado
acompaña al arte conceptual, y pueden encon- como un sujeto sin comprensión ni sensibilidad
trarse verdaderas miserias como dos ladrillos artística. Si bien es cierto que la cicuta no será el
montados o una mesa con una lámpara, que re- castigo como lo fue para el maestro de Platón,
flejarían profundos problemas de la humanidad. la condena puede ser igual de furiosa.
Recuerdo que, en el año 2014, una expositora El propósito nunca será limitar al arte, poner-
montó en la Casa de la Cultura de Santa Cruz le cercas a la creatividad. Sin embargo, es justa-
de la Sierra una obra que llevaba por nombre mente porque el arte guarda una unión con el
Escatolate. A decir de ella, por lo expresado en hombre, con su historia, con su desarrollo en el
la descripción de su creación: “Los ESCATO- tiempo y espacio y con la libertad, que hay que
LATES, son el resultado de una minuciosa reconocer que la calidad y la técnica son ele-
recolección de cacas de animales del campo y mentos constitutivos de la estética. No es cierto
una sofisticada elaboración, usando uno de los que el arte se ocupa solo de lo bello —Umberto
mejores chocolates del mercado y accesorios, Eco desarrolló la importancia de lo feo también
como pirotines y fuentes, para conseguir una como expresión del arte y de la realidad—,
auténtica obra visual e hiperreal”. Cierto tiempo pero sí es cierto que, si lo que pretendemos es
después, me encontré en la red un video tutorial proyectarnos en los años pasados y venideros,
de la creadora, detallando y recreando su receta es muy poco probable que sea a través de la
cual gran manjar. Aclaro que, al ser mi apuesta venta de artesanía ni con los desvaríos del arte
siempre por la libertad, no consideraría jamás conceptual. Así, a cada parcela se le dará el valor
prohibir estas “exposiciones”. Con todo, la ino- que merece.
cencia de algunas expresiones de arte conceptual
está en pensar que se puede despertar mentes
recubriendo materia fecal con chocolate.
Una carencia del arte conceptual y la mayoría
de las performances es el elemento conmovedor. 1 Algo similar sucede con algunos representantes de la
poesía vanguardista, aunque el objetivo ya no sea des-
Impactar, despertar, rebelar —entre otros— son pertar un agitar conciencias, sino, por el contrario, la ex-
verbos que reemplazan a conmover. No es casual presión de desbordadas emociones personales. Tal es el
tampoco que varios de estos movimientos ar- deseo de exteriorizar el flujo sentimental que, para ellos,
no tiene ningún sentido recaer en rimas, ritmos o saber el
tísticos posmodernos se hallen alineados a una menos qué es una sinalefa. En esta situación, la expresión
ideología política. La armonía y hasta la técnica artística se desliga de la estética para ser más un consuelo
se consideran secundarios y hasta desechables si o terapia.

Revista Percontari 15
El arte, la política
y Gustavo Dudamel
Fernando Mires

S é que el texto que voy a escribir no está


orientado hacia un público especializado.
Por eso no será fácil abordar el tema. Quiero
la esencia metafísica e inmanencia apariencial
(sensorial) y propone un dualismo no antagó-
nico entre lo dionisiaco y lo apolíneo. Lo dio-
escribir sobre las relaciones entre arte y política nisiaco corresponde al estado de embriaguez y
como consecuencia del vendaval de agresiones éxtasis.
que, el año pasado, una parte de la oposición El arte, cualquiera sea su expresión, no puede
venezolana desató en contra del exitoso y joven prescindir del desvarío, afirma Nietzsche. Por
director de orquesta Gustavo Dudamel. esa razón, el devenir del arte no transita por
Dudamel fue acusado por una parte de la caminos rectos, sino por laberintos. El artista
oposición del “delito” de no haber roto con el presiente lo que busca, mas no lo sabe. Hacer
chavismo ni haber tomado posiciones frente al arte supone confrontarse con un continuo
régimen que impera en su país. La dificultad perderse en sí mismo. El arte es tormentoso, es
que asoma es que, para abordar este tema, es pasional y, en sus orígenes, desenfrenado. Por
ineludible hacer un intento, por breve que sea, eso Dioniso, dios de los placeres, a fin de no
para cotejar la especificidad de lo artístico y de sucumbir aplastado por el peso de sus pasiones,
lo político. Lo intentaré. necesita de Apolo, el dios del equilibrio, la per-
fección y la armonía. Pero, para poner en orden
1. Arte a las pasiones, Apolo también necesita de ellas.
Entre Dioniso y Apolo se establece entonces
Si voy a hablar de arte, tengo que recurrir a una relación de fraternidad e incluso de compli-
quienes mejor han intentado entender el senti- cidad. De la comunicación entre ambos surgirá
do de su ejercicio. Confrontado con el tema, los el arte. Sin uno o sin el otro, todo arte será un
primeros nombres que llegan a mi mente son remedo del arte.
los de Nietzsche y Heidegger. Heidegger, profundamente nietzscheano,
Según el Nietzsche de Así habló Zaratustra y continúa el pensamiento de Nietzsche, sobre
del Nacimiento de la tragedia, el arte surge de la todo en el primer tomo de su tratado sobre
“voluntad de poder”. No obstante, ese poder no Nietzsche (son tres). Según Heidegger, el arte
tiene nada que ver con el poder ejercido sobre no termina en las cosas, no es cósico.  Trabaja
las personas y las cosas. Mucho menos con el en y con las cosas, pero en busca de una –este
poder político. Se trata de un poder extracorpo- es concepto central en Heidegger– “apertura”.
ral, pero que, por paradoja, debe ser alcanzado La “apertura” se encuentra, según Heidegger,
con y a través del cuerpo. Un poder extrasenso- no fuera de alguna caverna como imaginó Pla-
rial, pero que, a la vez, debe ser conquistado con tón, sino en las ocultas profundidades del Ser.
el uso limitado de nuestros sentidos. Un poder En lo oculto, dijo Heidegger, vive la verdad.
cuyo “sí mismo” está destinado a acceder a otra Arrojar luz hacia lo oculto es, en consecuencia,
realidad, pero que, a la vez, usa como punto de tarea principal del artista. Sin búsqueda de
partida la realidad que habitamos. En breve, se la verdad no hay arte –aquí Heidegger toma
trata de un poder metafísico. un camino distinto a Nietzsche, camino que
El arte lleva de por sí  una práctica metafísica transita precisamente en su libro  Caminos del
o trascendental. Sin trascendencia, según Niet- Bosque  (Holzwege)–. El artista es un revelador
zsche, no hay arte. Esa es una de sus proposicio- de la verdad. El modelo del arte total, así como
nes centrales en Zaratustra. Nietzsche creyó encontrarlo en la música de
En  El origen de la tragedia, Nietzsche se Wagner, lo encontró Heidegger en la poesía de
distancia un tanto de la contradicción entre Hölderlin.

16 Revista Percontari
El arte, según Heidegger, se aproxima a tiempo, establecemos compromisos. La políti-
la búsqueda de Dios, pero convertido en La ca, luego, no es trascendente, sino radicalmente
Verdad (Para Heidegger –legado socratiano–, inmanente. Su práctica no se deja regir por las
Verdad y Belleza son casi sinónimos). Solo a pasiones, ni por el amor, ni por el odio, sino que
partir de la revelación de lo oculto comienza por una razón instrumental que nunca puede ni
el proceso de la creación artística (Re-creación, debe regir la actividad artística. Arte y política
corregiría Ratzinger, pues el humano puede son en ese sentido excluyentes. Como el agua y
inventar o componer, nunca crear, atributo ex- el fuego, nunca podrán juntarse. Así se explica
clusivo de Dios). por qué casi no existen políticos dedicados al
El arte, al “desocultar” lo oculto, nos lleva a re- arte (a menos que consideremos como arte los
considerar la existencia en el marco de otra his- mamarrachos que pintaba Chávez). A la inver-
toria, o lo que es igual, de otro tiempo distinto sa, cada vez que los artistas han intentado in-
al de nuestra existencia. De modo que, gracias cursionar en política, los resultados, salvo raras
al arte, salimos, al igual que Nietzsche, desde el excepciones, han sido catastróficos.
más acá hacia el más allá, con la diferencia que, El arte actúa hacia lo desconocido. La polí-
según Heidegger, ese más allá no está fuera del tica, en cambio, actúa sobre la base de lo exis-
más acá, sino en los lugares más recónditos, qui- tente. Sin acontecimientos no hay política. La
zás en el fondo mismo de nuestros corazones. política, en fin, no es actividad metafísica sino
La “apertura” para Heidegger es en cierto modo existencial. Todo proyecto encaminado a elabo-
un regreso: un regreso hacia la esencia del Ser. rar una política trascendental y metafísica, lleva,
Y bien. Dejaremos en este punto esta síntesis según Arendt, al totalitarismo (Los orígenes del
acerca de la esencia del arte para dirigir la vista totalitarismo), es decir, hacia el fin de la política.
hacia ese otro espacio que nunca Nietzsche y Tesis verificada durante los totalitarismos nazis
Heidegger exploraron. Nos referimos al espacio y comunistas.
de la política. Un espacio hacia el cual se atrevió Con estos apuntes ya es suficiente entonces
a caminar, aunque muy sola, Hannah Arendt. A para percibir por qué los caminos del arte y la
lo largo de ese camino podemos descubrir, guia- política están separados por campos minados.
dos por Arendt, la enorme antítesis que existe Esa es la razón, además, por la cual los artis-
entre el pensamiento artístico y el pensamiento tas enfrentan una contradicción insalvable.
político. Como habitantes de la ciudad, deben cumplir
obligaciones ciudadanas y a veces asumir tareas
2. Política políticas. Como artistas, están condenados a
distanciarse de las cosas de este mundo.
La antítesis entre ambos pensamientos explica Desde que hay política y arte, el dilema para
a su vez la hipertensión que existe entre esos todo artista ha sido: o poner la política al ser-
dos modos del ser, el del estar aquí y el del ser vicio de su arte o poner su arte al servicio de la
fuera de sí. La política, en efecto, no está situada política. Si elige la primera vía, será denostado
en las profundidades del ser, sino en su mera por sus conciudadanos. Si elige la segunda,
superficie. Sobre esa superficie se erigen las ciu- dejará de ser artista para convertirse en un mer-
dades y en ellas debaten los ciudadanos sobre cenario al servicio de poderes circunstanciales.
las cosas de este mundo. La política, por lo mis- Por eso muchos artistas eligen un camino inter-
mo, reside en el nivel de las apariencias, nunca medio. Ese parece ser el elegido por el director
en el de la trascendencia. Y mucho menos en el de orquesta venezolano Gustavo Dudamel.
de las esencias. Una política no superficial no
sería política. De la política no debemos esperar 3. Dudamel
ninguna redención.
La política, a diferencia del arte, tiene lugar Gustavo Dudamel decidió a muy temprana
–afirma Arendt– bajo la luz de lo público (¿Qué edad –siguiendo la línea de su maestro José
es política?).  Su objetivo no es la búsqueda de Antonio Abreu, fundador del sistema nacional
la verdad, sino, simplemente, de mínimas certi- de Orquestas y Coros Juveniles– aceptar la
dumbres. Para defender nuestras certidumbres, colaboración del gobierno de turno como venía
luchamos unos contra otros, pero, al mismo ocurriendo desde los años ochenta. El precio

Revista Percontari 17
módico fue rendir respeto al gobierno sin poner gas Llosa, cuya actividad política ha sido más
la música bajo su servicio exclusivo. que profusa. Los éxitos logrados en el exterior
Dudamel ha intentado, como miles de artis- por esos escritores han sido celebrados por la
tas en el mundo, un compromiso desde el reino inmensa mayoría de los habitantes de sus res-
de la música con el reino de este mundo. El pectivos países, quienes han sabido deponer
problema es que esa solución intermedia no ha diferencias cuando llega el momento de honrar
sido entendida por gran parte de la oposición a sus glorias nacionales. Eso, lamentablemente,
política venezolana. Situación inédita en la his- no ha ocurrido en Venezuela con respecto a una
toria de la música. Mientras más éxito alcanza de las figuras más representativas de la música
Dudamel, más aversión despierta en sectores contemporánea: Gustavo Dudamel.
de la oposición. Los medios afines al chavismo En el campo de la música es difícil encontrar
tampoco lo glorifican. Seguramente esperan de a alguien que haya elevado tan alto el nombre
él una toma firme de posiciones, loas al poder de su nación como Gustavo Dudamel. Ya sea en
y juramentos de fidelidad a Maduro. Tampoco los Ángeles o en Gotenburg, en Chicago o en
lo han logrado. Dudamel, simplemente, no ha Stuttgart, en Nueva York o en Viena, ha ganado
querido hablar sobre política. Decisión que un reconocimiento internacional sin paralelo en
contrasta con la de otros artistas latinoamerica- la historia de la música latinoamericana. Hay
nos, quienes, pese a que intentaron opinar sobre directores de orquesta que ya lo comparan con
política, jamás despertaron el odio concitado Leonard Bernstein. Pocos han logrado sentir el
por Dudamel entre sus connacionales. Pense- espíritu de Mahler o de Brahms de un modo
mos, por ejemplo, en dos muy grandes: Neruda
tan intenso. Verlo dirigir la cuarta de Brahms es
y Borges.
un espectáculo. Dudamel no solo dirige; “vive”
Pablo Neruda nunca ocultó su militancia en en Brahms.
el Partido Comunista. Pero su poesía era admi-
Adonde vaya Dudamel será visto como
rada más allá de su partido. Dos de sus mejores
embajador artístico, no de un Gobierno, sino
amigos no eran de izquierda. Hernán Díaz
Arrieta (Alone), eximio y ultrareaccionario crí- de una nación. Gracias a Dudamel, muchos
tico literario de El Mercurio, nunca ahorró loas amantes de la música se han enterado de que
a Neruda. El escritor Jorge Edwards, al final Venezuela no solo produce petróleo, reinas de
de la vida de Neruda, fue confidente del gran belleza y militares corruptos. Quieran o no, los
poeta. Neruda, pese a ser comunista, iba mucho venezolanos, no solo los chavistas, tienen una
más allá de la dicotomía izquierda-derecha. deuda con Gustavo Dudamel. Más grande será
Como Dudamel cuando dirige, Neruda, aún en cuando llegue el momento de desagraviarlo
su poesía política, estaba más allá de la política. frente a los indecibles insultos que le han pro-
Para mí, Neruda –no pido a nadie que comparta pinado miembros de exaltadas fracciones de la
mi opinión– era y es “la poesía”. oposición por el hecho de haber decidido, antes
El caso de Jorge Luis Borges es aún más de un concierto de Nuevo Año en Viena, no dar
interesante. Siempre Borges presumió de an- opiniones políticas sobre su país.
ti-político. Pero pocos escritores han destilado Claudio Arrau, el genial pianista chileno,
más veneno político que Borges en contra del también tomó en su tiempo la decisión de Du-
peronismo, del comunismo y del “progresismo”. damel. Ni siquiera en los más feroces días de
Sin embargo, todas esas corrientes lo respeta- la dictadura militar quiso hablar sobre política.
ron. Los escritores peronistas –son muchos– se Todos, derecha e izquierda, si no lo entendi-
declaran, en su mayoría, devotos de Borges. mos, lo respetábamos. Y en sus giras íbamos a
Borges, para la intelectualidad argentina y gran escucharlo no porque nos interesara su posición
parte de la latinoamericana, es el maestro. Si se política, sino porque llegó a ser el mejor espe-
quiere bromear un poco, Borges es el Maradona cialista en piano de Beethoven y, además –hay
de los artistas e intelectuales de su nación (lo es- que decirlo–, porque era chileno, nacido en
cribo con cierta sorna: Borges odiaba al fútbol). Chillán. Al igual que ayer Arrau, grandiosos
Podríamos decir palabras similares de otros pianistas rusos, algunos de ellos, emigrantes
grandes como García Márquez (El “Gabo” es por razones políticas, viajan hoy por el mundo y
símbolo nacional), Octavio Paz e incluso Var- ninguno opina sobre el régimen de Putin. Solo

18 Revista Percontari
en Venezuela vilipendian a Dudamel porque no Razón de más para pensar que el problema
eleva su voz frente al régimen que azota al país. no reside tanto en Dudamel, sino en la propia
Por cierto, hay también grandes músicos que, oposición venezolana. En ese sentido, parece ser
como ciudadanos, toman opciones políticas evidente que Dudamel ha fungido como chivo
y, en algunas ocasiones, ponen sus talentos al expiatorio frente a agresiones que no habían
servicio de una causa. La soprano Anna Ne- logrado encontrar un objeto concreto.
trebko –de quien se dice es la heredera de la El deseo de agresión precede al objeto de agre-
Callas– y el magnífico director Valery Gergiev sión, dice una conocida tesis freudo-lacaniana.
no han vacilado en rendir homenaje al zar Putin En efecto, Dudamel ha pasado a ser objeto de
en sus presentaciones. Muy bien, es su derecho, agresión de una tendencia política que no ha
pero no es su obligación. Del mismo modo, la podido lograr sus objetivos de poder. Ya sea por
venezolana Gabriela Montero, pianista de reco- una conducción errática, o por la imposibilidad
nocimiento internacional, ha llegado a compo- de alcanzar un punto unitario, esa tendencia se
ner piezas musicales a favor de una Venezuela encuentra muy frustrada. No habiendo podido
democrática. Puede decirse lo mismo: es un derrotar al enemigo, impotente frente a un
derecho, pero no es una obligación. Y mientras régimen armado hasta los dientes, ha termina-
alguien cumpla con las leyes y normas de un do por desarrollar en su interior una serie de
derecho universal que garantiza tanto la liber- agresiones. Agresiones que, si no encuentran el
tad de opinión como la libertad de no opinar, objetivo, pueden transformarse en autoagresio-
ni Montero ni Dudamel pueden ser objetados. nes o ser invertidas en un objeto sustitutivo del
El autor de estas líneas  comparte  la opción enemigo (en este caso, Dudamel). En las redes
política de Montero y a la vez acepta la opción sociales, sus actores optan por las dos vías a la
de Dudamel. Pues compartir y aceptar son vez. Por una parte, se injurian de modo abomi-
cosas diferentes. No hay ley moral o jurídica nable entre sí. Por otra, descargan un increíble
que obligue a los artistas a tomar o a no tomar odio en alguien que ni siquiera es un político.
decisiones políticas. Gracias a Dios. De ahí mi
Un profesional serio, un joven exitoso, un pro-
absoluta incomprensión frente a esos sectores
pietario de esa mercancía que no se vende en las
afiebrados de la opinión pública venezolana
farmacias: talento.
que, al enjuiciar a Dudamel, se dejan regir por
el lema totalitario: “O estás a favor o en contra Por cierto, hay quienes hacen la separación
de nosotros”. En nombre de su oposición al entre el director Dudamel y el hombre Du-
chavismo, esos sectores han hecho suya la lógica damel. Aducen que, reconociendo el valor del
del chavismo. primero, se pronuncian en contra del segundo
Evidentemente, en Venezuela hay dos grandes aunque sin ahorrar epítetos (desde colaboracio-
conflictos. Por una parte, el de la oposición-go- nista hasta hijo de perra). Desde un punto de
bierno. Por otra, el de una cultura democrática vista formal, esa es una posición correcta, pero,
frente a otra muy antidemocrática. Esta última desde el punto de vista político, no lo es. Y no
no solo reside en el chavismo. Atraviesa, ade- lo es por la sencilla razón de que Dudamel no
más, de lado a lado, al conjunto de la oposición. es un político. Su mundo, como hombre y como
Incluso, me atrevería a decir, una parte de la artista, es musical.
oposición, no sé cuál es su magnitud, ha sido Lo que más llama la atención es precisamente
facistizada por el chavismo (si es que no lo es- que la mayoría de los enemigos (¿políticos?) de
taba antes). Dudamel no polemizan con el director por el
Recordando lo que mostraban hace más de hecho de que este haya emitido una opinión,
un año las redes sociales, uno se sigue sorpren- sino por lo contrario: por el hecho de no haberla
diendo por la magnitud e intensidad de las emitido. El manido argumento al que recurren
invectivas en contra de Dudamel. Dejemos de es que, ante la situación que vive Venezuela,
lado al hampa tuitera, esos criminales del tecla- nadie puede ser neutral. Paradójicamente, esa
do que proyectan sus complejos de inferioridad fue la misma posición que levantaron los nazis
en contra de seres muy lejos de su nivel. Lo que y los comunistas en sus respectivos países. En
sí asombra es que personas ponderadas hayan situación de guerra interna y externa –aducían–,
caído en el mismo frenesí anti-dudamelista. la neutralidad es colaboración. ¿No es la misma

Revista Percontari 19
tónica empleada por Maduro cuando califica a opiniones que creen en una lucha democrática
toda la oposición como “enemigos de la patria?”. realizada por personas democráticas.
Hannah Arendt, será preciso recordar, distin- Personas que creen en las diferencias, en la
guía dos enemigas de la política: la despolitiza- libertad de opinión y, por lo mismo, en la liber-
ción y la sobrepolitización. La despolitización o tad de no opinar. Personas convencidas en que
apatía política lleva a la desintegración de una quienes cumplen con las leyes y con la moral
sociedad. La sobrepolitización, al convertir a normativa que de las leyes se deduce (l’esprit des
todo en política, anula las diferencias entre lo lois, según Montesquieu) no pueden ser juzga-
político con lo no político (la intimidad, la re- dos ni condenados por nadie. Personas que no
se dejan regir por una supuesta moral universal
ligión, el arte), dándose así las condiciones para
situada más allá de todo tiempo y lugar. Per-
que aparezca la tentación totalitaria. Y bien, me
sonas que creen que el debate político hay que
parece que en estos momentos Venezuela vive
llevarlo a cabo con políticos y no con cantantes,
un avanzado grado de sobrepolitización. jugadores de fútbol y directores de orquesta.
Afortunadamente, he podido observar en Personas, en fin, que han hecho suyo uno de
las redes muchas posiciones razonables que no los lemas más felices de Rosa Luxemburg: “La
señalaron a Dudamel como el enemigo número libertad es siempre y exclusivamente libertad
uno de la oposición, llamando a centrar la acción para el que piensa diferente”.
frente a objetivos políticamente definidos (entre Pienso que esas personas conforman la mayo-
ellos la lucha por elecciones libres y soberanas), ría de la oposición venezolana. Quiero, además,
reclamando una separación entre la política con creer que así es. Porque, si no fuera así, seguir
los otros espacios de la vida ciudadana. En fin, apoyando a esa oposición no valdría la pena.

20 Revista Percontari
Del arte y sus escarceos políticos
Enrique Fernández García

Tanta veneración del arte volvió prescindibles a los seres humanos. Hitler saludaba
alborozado los bombardeos aliados sobre las ciudades alemanas porque despejaban el
terreno para sus nuevos diseños.
John Carey

E n uno de sus alegatos dirigidos a quienes lo


juzgaban, Sócrates cuestionó a los atenien-
ses que no valoraban la vida reflexiva. No basta-
Cuando la política es bella

En 1936, Walter Benjamin publicó «La obra de


ba con perseguir la satisfacción de necesidades arte en la época de su reproductibilidad técni-
materiales, afrontando aquellas urgencias que ca»1. Es un ensayo que, desde una perspectiva
impone el cuerpo, así como las frivolidades del cultural, procura la exposición crítica de algu-
espíritu. Ocuparse sólo de dichos menesteres nos aspectos fundamentales del fascismo. Con
equivalía a desaprovechar tontamente nuestras todo, hay allí una idea que se destaca con clari-
facultades. Porque, conforme a su generosa dad: la estetización de la política. En efecto, si
pedagogía, todos estábamos en condiciones nosotros analizamos varios regímenes, dentro o
de acometer el distanciamiento del error, ad- fuera de Occidente, hallaremos este fenómeno.
virtiendo la facilidad con que muchos se con- En particular, lo que provocaría valoraciones
funden y resguardan necedades. De este modo, estéticas de carácter positivo serían los recursos
verbigracia, un militar podía estar seguro de del poder asociados con la fuerza. Las armas,
saber qué significaba ser valiente; no obstante, los tanques, el arsenal nuclear, lejos de llamar
al conversar con ese maestro del pensamiento, a la repulsa, generarían fruición. Frente a todo
ello, como pasó con los futuristas de Marinetti,
siendo impactado por elementales contraejem-
no correspondería sino su celebración. Es una
plos e interrogantes, notaba su ignorancia. Pero,
razón que justifica la existencia de paradas
aun cuando este descubrimiento de las equivo-
militares y otras pomposidades ridículas. Los
caciones propias resulte bastante remunerativo
símbolos partidarios sirven asimismo para evi-
para el semejante, su filosofía nos ofrece más
denciar esa manera de concebir el manejo del
bondades.
orden público. La indumentaria oficial tampoco
Sucede que, además del acercamiento a lo se deja al azar. Recordemos que las SS tuvieron
verdadero, ese insigne filósofo nos deparaba el como diseñador a Hugo Boss, nada menos.
contacto con la belleza. El valor concedido a Aportó también a este propósito Leni  Riefens-
la contemplación estética no era, pues, menor; tahl, cineasta que trabajó para inmortalizar en
al contrario, todo individuo debía considerarlo el celuloide películas recargadas de los desvaríos
indispensable para ser feliz. Desde luego, las del nacionalsocialismo. El objetivo era no dejar
personas podían toparse con expresiones de lo espacio a otra clase de orientación.
hermoso en diferentes circunstancias, ligándolo
igualmente a diversos objetos. No pensemos Artistas al mando del Estado
en su previsible conexión con el amor; subra-
yemos ahora que la política ha recibido esas Como es sabido, Platón propugnó una monar-
atenciones. Es que, en varias oportunidades, quía que estuviese al mando de un filósofo-rey.
los hombres han encontrado bello el ejercicio Posteriormente, con Marco Aurelio, emperador
del poder. Siguiendo esta línea, simples actores, y estoico, un experimento así parecía materiali-
humildes peones o envanecidos protagonistas
nos enseñan una realidad de la cual no conviene 1 Cf. Walter Benjamin, Estética y política; Buenos Aires: La
olvidarse. Cuarenta, 2009 [1936], páginas 83-128.

Revista Percontari 21
zarse, aunque, por variados factores, sin mostrar las perfecciones que
aquél pensó en su momento. No se discute que un individuo medi-
tativo e ilustrado pueda regir los destinos de una sociedad, tomando
las decisiones primordiales en torno a sus problemas. El punto es que,
pese a su lucidez, gobernantes de tal índole pueden equivocarse como
los demás. Sin embargo, esto no debería emplearse como argumen-
to para desdeñar la capacidad racional, encumbrando otros medios.
Fue lo que hicieron quienes entendieron la política como una labor
adecuada para las cualidades del artista. Es más, un sujeto como Goe-
bbels la definió como “arte plástica del Estado”. Sus líderes tenían,
por consiguiente, la misión de forjar una obra maestra, utilizando a
los ciudadanos como material tan moldeable cuanto descartable. Se
aspiraba a crear un hombre nuevo, una comunidad sublime; empero,
los resultados nunca fueron rescatables. Nadie niega que, en cierto
grado, el dibujante Adolf Hitler o un aficionado a la escritura como
Mussolini, entre otros casos destacados por Juan José Sebreli al re-
flexionar sobre Nietzsche2, se hayan sentido artistas. Lo negativo es
que, en lugar de brindarnos belleza, depararon muestras palpables del
horror. Si tenían alguna sensibilidad, ésta era como la de Lenin, quien
se conmovía cuando escuchaba a Beethoven, mas no tenía inconve-
nientes en planificar la liquidación del adversario. Tal vez su aparente
creatividad sea útil para explicar la originalidad de algunos vejámenes.

Variantes del compromiso estético

No hay una sola relación entre los artistas y el poder. Por un lado,
tenemos una especie de servidumbre que, sin oponer resistencia, con-
tribuye al embellecimiento del régimen. No hablamos aquí de amena-
zas, persecuciones ni exilios: el aporte al sistema se realiza con gusto,
sea por ignorancia, candidez u oportunismo. Porque hallamos seres
dedicados a esas delicadas actividades que tienen un desconocimiento
escandaloso de la historia y sus vicisitudes políticas. Encontramos
asimismo a los que, por una vituperable inocencia, son optimistas
ante quienes deberían inspirar desasosiego. Además, están los mor-
tales que aprovechan cualquier circunstancia para subastar su talento,
aunque sea muy exiguo. En este último caso, lo que menos interesa es
el respeto a principios. Al respecto, evoco las transacciones entre los
Rockefeller y el anticapitalista Diego Rivera. Salvo que haya sido una
curiosa estrategia de ataque al Imperio, ese connotado muralista no
irradió mucha coherencia.
Por supuesto, cabe reivindicar la existencia de personas que asumen
posiciones distintas en el campo del arte. Sus posturas no denotan
desdén ni pereza por conocer. Tampoco incurren en el absurdo de
ilusionarse tras tener contacto con la demagogia. Finalmente, jamás
están a la caza de musas autoritarias, ya que sus concepciones estéticas
no varían según la ideología del cliente. Resumiéndolo, para ellos, las
artes no tienen por qué adecuarse al ejercicio del poder, menos aún
si éste es contrario a la libertad, valor sin cuya vigencia ninguna gran
obra sería posible.

2 Cf. Juan José Sebreli, El olvido de la razón; Buenos Aires: Sudamericana, 2006, pági-
nas 45-81.

22 Revista Percontari
Esbozo histórico de las
concepciones del arte en la Filosofía.
Arte y belleza hoy.
Gustavo Pinto Mosqueira

El arte tiene primordialmente que embellecer nuestra vida y, por ende, hacer que
seamos tolerables y agradables unos a otros.
Nietzsche

E ste trabajo es general. Tiene el propósito


de acercar al lector no muy versado en el
asunto del arte y la belleza.
1) El arte para los presocráticos

Antes de que se consolide la separación entre


Hasta muy entrado el siglo XX, se pensó que el discurso sobre el arte y el discurso sobre la
el arte tenía que representar la belleza del mun- belleza, se pensaba en el mundo griego antiguo
do. Pero, a partir de mediados del siglo pasado, que el arte podía decir mentiras semejantes a la
esa idea se dejó de lado. El posmodernismo verdad, pero que también, cuando se quería, se
estético rompió con aquella idea del arte y la podía decir la verdad con arte y belleza (cuando
belleza vigente desde los filósofos griegos clá- no había separación entre belleza y verdad en
sicos antiguos. Aristóteles, por ejemplo, sostuvo el discurso). Así lo da a entender Hesíodo en
que el arte era la imitación de la belleza de la su obra Teogonía cuando en las Musas escribió:
naturaleza. «Sabemos decir mentiras semejantes a la ver-
Hoy el arte está muy presente en nuestras dad, pero también sabemos, cuando queremos,
vidas. Algunos dicen que nuestra vida cotidia- decir la verdad».
na está estetizada. Verdadero o no este aserto, Esto generará una concepción de doble filo en
lo cierto es que la estética es uno de los ocho la antigua Grecia, según la cual al arte se atri-
campos centrales que tiene hoy la filosofía para buye un carácter ilusorio y, a la vez, veritativo.
estudiarla. Y se la define como la disciplina que En efecto, se dice que lo que desató la guerra de
reflexiona sobre el arte. Troya no fue tanto el amor de París por Helena,
En la estética están vigentes discusiones so- sino el robo por un troyano de una seductora
bre los valores que expresa el arte en general, estatua de Esparta. También se pensaba que
la relación entre el arte y la moral, la intuición la poesía griega tenía una doble función: traer
artística, cómo se da la creatividad para produ- la progresiva purificación y racionalización de
cir una obra de arte, la belleza y la fealdad, entre la mitología, y, a su vez, restituir los materiales
otros temas. arcaicos, contradictorios y tenebrosos a la luz de
Actualmente, existe una corriente llamada la belleza y, por tanto, de la verdad.
neuroestética, la que se ocupa de estudiar las
neuronas encargadas de generar el placer o el 2) El arte en los socráticos: Platón y Aristóteles
gusto estético, sin prescindir de la estética como
disciplina filosófica ni de la ética. Ahora bien, en la Antigüedad griega clásica, ya
En este escrito, no nos ocupamos de los temas con los socráticos como Platón y con Aristóte-
ya señalados, pues requieren otras indagaciones les, eran dos los vocablos que designaban lo que
para tratarlos. Los traemos a colación porque en términos modernos llamamos arte:
queremos subrayar la importancia que tienen Uno, la Tékne: disposición a producir objetos
para seguir estudiando el asunto del arte y la manuales que implica habilidad, estar en posi-
estética. ción de los instrumentos adecuados y en cono-

Revista Percontari 23
cimiento de un fin. Dentro de este término se «irreal», ya que estaba alejado de la idea, ámbito
incluía a la escultura y la pintura, pero también de lo real y lo verdadero, porque (el arte), imi-
otras actividades que no poseían una finalidad tando el mundo sensible, que es ya una copia
intencionalmente estética, como, por ejemplo, del mundo ideal, forma únicamente «la copia de
aquello que se llama hoy artesanía. El término la copia», y, por otra parte, porque el arte, como
excluía otras actividades como la danza. en la poesía y la música, tenía un poder «psica-
Dos, la Mousiké: se refería a las actividades gógico», es decir, conmovedor y persuasivo, que
que tenían un carácter indudablemente artísti- consiste en una exposición peligrosa y equívoca
co, tales como la música, la danza y la poesía. a las fuerzas irracionales del alma. Por tanto,
Pero, como vemos, este término no se refería a podría acarrear desorden en una ciudad-Estado,
todo el campo artístico, sino a unas actividades lo que exigía que los poetas sean expulsados de
específicas que tenían que ver, sí, con el arte, y la vida civil.
tampoco diferenciaba entre poesía y música, ac- Ahora bien, en la postura de Platón sobre el
tividades que serán separadas en la Antigüedad arte, está presente también la idea a partir de
tardía y en el medioevo europeo. Demócrito de que aquel es también imitación,
En los diálogos de Platón, como, por ejem- pero no en el sentido de reproducir, de copiar,
plo, en el dedicado al rapsoda Ión, la poesía y la sino de «hacer como». A su vez, es psicagógico,
música aparecen investidas, «de un entusiasmo, que significaba no solo sometimiento a las pa-
de un furor, de una locura divina que las elevan siones (se puede ver esto en el diálogo Ion y en
a la categoría de medios de un conocimiento el Banquete), sino también liberación de las pa-
superior, convirtiendo a quienes la profesan en siones con el fin de conseguir un conocimiento
un inconsciente, sorprendido y atónito instru- exacto y profundo, aunque fuese inconsciente.
mento en manos de la divinidad»1. ¿En qué pensaba Platón al condenar el arte y
A su vez, la Antigüedad clásica (la de Platón en qué sentido esta condena arroja luz sobre el
y Aristóteles) ignora sustancialmente el nexo problema de la verdad del arte?, se pregunta Gi-
arte-belleza (algo que, para la filosofía moderna, vone3. Platón dará respuesta a este interrogante
está en la base de la reflexión sobre el arte). En en su gran obra de madurez: La República. En
efecto, «[todas] las actividades que llamamos esta obra no es desterrado de la ciudad el arte
(hoy) arte, no sólo la pintura, la escultura o la en general, sino en particular la tragedia. En el
arquitectura, sino también la poesía o la música, Fedro, Platón reconoce al arte estar en grado de
eran valoradas por los griegos por el fin que per- acercarse a lo divino por estar inspirado en la
seguían –o tratar de producir objetos o de suscitar belleza. Pero, frente a la tragedia, que es lo que
sentimientos– y no por la belleza que pudiesen Platón rechaza, el espectador es conducido a la
albergar. Tanto es así que, acerca del problema identificación con los personajes en virtud de las
del arte, dominaban, por una parte, reflexiones fuerzas oscuras, devastadoras, que contradicen
de tipo preceptivo (según la línea inaugurada por el principio de la responsabilidad individual,
Aristóteles en su Poética y desarrollada por la tra- al que debe atenerse el buen ciudadano como
tadística medieval y renacentista), y, por otra, de fundamento del orden jurídico. Es la tragedia
tipo místico (según la línea que parte de Platón la que engaña y miente, alegando pretextos
y que continuó a lo largo de toda la Edad Media, como justificación y precipitando a la confusión
contribuyendo a la formación de la figura del ar- de actos en los que el sujeto aparece al mismo
tista como mediador entre lo humano y lo divino tiempo culpable e inocente. No así la poesía,
que será celebrada en el Renacimiento). Con la pues, si permanece anclada en el principio del
excepción de la desvalorización del arte como orden que rige todas las cosas y las orienta hacia
engaño en favor de un misticismo más auténtico el bien, solo podría reflejar este orden, esta lu-
guiado por la aspiración a la belleza como reflejo minosidad, esta belleza4.
de la verdad»2. De este modo, según Platón, lo que se pone
Por otro lado, sabido es que Platón condenó en juego en la sociedad griega, algo que ya vio
el arte porque el arte, por una parte, para él, era en su tiempo Nietzsche, no es la contraposición

1 L. Givone, 1999, 17. 3 Ibíd., 19.


2 Íd. 4 Íd.

24 Revista Percontari
del arte como simulación a la realidad y como das después) y las artes liberales (llamadas, con
manifestación de la verdad misma, sino entre el tiempo, bellas artes, comprendido dentro de
dos formas de saber: el saber filosófico, por un estas la pintura y la escultura). De manera que,
lado, y el saber trágico, por otro. «Es decir, por durante el Medioevo, aparecerá esta tendencia
una parte, el saber que reduce la realidad a un a hacer aquella diferencia; la misma que se va
único y estable fundamento (el uno, el bien) y la a consolidar definitivamente a fines del siglo
distribuye según un orden armónico que se re- XIII, cuando ya se entienda por arte el conjunto
fleja en la belleza, precisamente como armonía; de las «bellas artes».
por otra, el saber que muestra y pone en escena Por lo que se ve, el concepto de arte no per-
la realidad en su irreductible e inquebrantable manece inmóvil. Es cierto que en la Antigüedad
ambigüedad, hasta el punto de que la belleza, griega clásica y hasta la Edad Media y el Re-
signo de su aparecer, posee un carácter doble y nacimiento, se proponía una acepción del arte,
enigmático. Precisamente a esto parece referirse según Givone9, demasiado amplia, por incluir
la tradición cuando cuenta que Platón decidió en su concepto actividades privadas de finali-
dedicarse a la filosofía después de quemar las dad estética, pero también demasiado limitada
tragedias que compuso»5. en cuanto que excluía todas las manifestaciones
Por su lado, Aristóteles verá el arte de esta ma- musicales que parecían más del entusiasmo
nera: ocupándose de la poesía en su obra Poética, personal que de la técnica.
sostendrá que el arte es imitación y su fin es de- A su vez, hasta el Medioevo y el Renacimien-
leitar el alma6. Además, en su libro Retórica, tam- to, e incluso hasta el romanticismo, se mantuvo
bién se ocupará del arte y de la belleza. Hablará la idea que el arte estaba separado de la belleza,
y estudiará, por ejemplo, el teatro, en especial estando más bien ésta última unida a la verdad,
la tragedia. «En vez de rechazarla y tacharla de por una parte, y que el arte se reducía al domi-
mentirosa y embaucadora como hizo su maestro, nio de la apariencia y de la ilusión, por otra (que
Aristóteles no sólo acepta la tragedia sino que era una idea platónica).
también la estudia detenidamente»7. Y todo esto a pesar de que se dio una disconti-
Según Aristóteles, el arte, para salir adelante, nuidad entre la Edad Media y el Renacimiento,
necesitaba del artista trabajo más que inspira- pues la primera edad se basó en la trascendencia
ción. Para él, al contrario de Platón, la imitación de Dios y en la infravaloración de todo obrar
no es falsa, engañosa o despreciable, sino que, a humano, en la idea de la vida humana como
través de la verosimilitud, se creará una ficción simple peregrinación y exilio donde se halla
que nos hablará de hechos ciertos. Para el Es- también la historia de la salvación. Por su lado,
tagirita, tampoco el placer proporcionado por el la idea en el Renacimiento al respecto se basó
arte será malo. Es más, a través de la «catarsis», en una concepción que exalta al hombre y a su
se puede llegar a la purificación de las almas de capacidad de dominar y someter la naturaleza,
los espectadores: a transmitir buenas ideas y así como en la idea del progreso junto a la cual
mejores sentimientos, aprovechando los estados se encuentra la del clasicismo que veía el arte
de ánimo provocados en el auditorio. El arte como perfección insuperable.
influye en el público y puede llevar al bien o Ahora bien, serán las cuestiones estéticas (las
al mal, pero esto no significa que tenga un fin relativas al arte, la belleza, la interpretación) las
moralizante8. que provocarán el replanteamiento de las rela-
ciones entre Edad Media y Renacimiento.
3) El arte en la Edad Media Respecto a la belleza, en ambos periodos, los
pensadores se atienen a la idea griega de que
En este periodo, se dará ya una división entre la belleza es la coincidencia de ser y aparecer:
lo que serán las artes que implican una cierta se dice que una cosa es bella cuando aparece como
manualidad (artes serviles serán también llama- verdaderamente es. Así, bello aparece incluso
Lucifer, pero pierde su belleza cuando pierde su
integridad con la caída, que es privación de ser;
5 Íd.
6 Ibíd., 24.
7 P. Blanco, 2001, 108.
8 Ibíd., 109. 9 S. Givone, op. cit., 20-21.

Revista Percontari 25
y bello aparece el hombre en la luz de su origen Acá se instala una tradición de tratar y escribir
divino, de su verdad y así sucesivamente. sobre la vida de los artistas. Se busca conciliar
En cuanto al arte, los pensadores de ambos la especulación con la actividad práctica del
periodos atribuyen a la obra artística, en sentido artista.
pleno, «un carácter icónico y ven en ella, por «Pero, más allá de este rasgo que caracteriza
tanto, el lugar de una teofanía, el signo viviente el paso del Medioevo al Renacimiento, ambas
de Dios, la reproducción finita (microcosmos) épocas están atravesadas por corrientes de
del infinito (macrocosmos)...»10. pensamiento –el neoplatonismo y el aristote-
En relación con la interpretación, unos y lismo en particular– cuyo desarrollo es parti-
otros autores extienden el método exegético a cularmente unitario y cuyo origen se remonta
la experiencia artística, refiriéndose no solo a la a la antigüedad. Son fenómenos culturales de
lectura sino también a la producción de obras enorme complejidad, y estaría fuera de lugar
literarias. «Unos consideran que una obra debe intentar reconstruirlos; [...]», dice Givone14. Sin
ser leída y producida según los cuatro sentidos embargo, el autor se atreve a dar una mirada
de las Escrituras; los otros, a su vez, opinan que panorámica al asunto, que nosotros en este es-
debe ser descifrada y copiada sobre la base del pacio lo sintetizamos a continuación.
código presente en el ‘gran libro de la Natura-
leza’».11 El neoplatonismo en la Edad Media y el Rena-
Ahora bien, hay una diferencia en la manera cimiento
de concebir al artista entre ambas épocas:
Ya en Plotino (s. II d. C.) se halla lo que ca-
En la Edad Media racterizará la dirección tanto en la Edad Media
como en el Renacimiento: la interpretación en
+ Aquí el artista es concebido como humilde clave mística de Platón. Así:
y artesano.
+ Acá no se escribe ni se difunde nada sobre * En Platón, la «caída» del mundo inteligible
la vida de los artistas. al mundo sensible posee un carácter metafísico
+ Más importa la actividad práctica del artis- y explica el nexo entre lo uno y lo múltiple y,
ta, y no la parte especulativa. además, muestra el fundamento arquetípico e
ideal del reino de la apariencia.
En el Renacimiento * Pero en Plotino posee un carácter teleológi-
co, la unidad, el lugar de las ideas perfectas, se
Acá cambia, y es visto como la «expresión más identifica con Dios, de manera que si se aleja
alta de la chispa divina que hay en el hombre y del mismo solo existe confusión y dispersión.
asume las características misma de la divinidad, * En Platón, el retorno del mundo sensible
ya sea de una divinidad demiúrgica o melancóli- al inteligible posee un carácter esencialmente
ca» . «Pero, en definitiva, incluso este profundo ético y político (retornar a esa unidad significa
12

cambio hay que buscarlo en el florecimiento de recuperar la existencia humana en su plenitud);


la lejanas reminiscencias clásicas: la idea de la en Plotino, adquiere un aspecto ascético y re-
pintura como penetración y conocimiento, con- ligioso en cuanto implica la suspensión de los
creto y abstracto, de las leyes de la naturaleza; la vínculos mundanos y la liberación del alma de
idea de que construir casas e iglesias posee un la prisión del cuerpo.
valor de restablecimiento del orden religioso y * En ambos pensadores, si la caída arroja al
político; o bien la idea de la composición musi- mundo a un estado de falta de valor, el retorno
cal entendida como una mística repetición de la es posible por el acto de amor mediante el cual
armonía del universo»13. el hombre trata de llenar esa falta, esa necesidad:
lo que suscita el amor es el amor de la belleza,
que resplandece en todo aquello sobre lo que
10 Ibíd., 21.
irradia el destino originario. Este retorno se da
11 Íd.
12 Íd.
13 Íd. 14 Ibíd., 22.

26 Revista Percontari
por grados. Si en Platón es la imitación (que medievales. La discusión se centró en definir si
también es medio primario de conocimiento), el fin del arte debía ser deleitar o educar. ¿Debía
en Plotino es la música, es decir, el arte en el tener un fin hedonístico o didáctico, pedagógi-
sentido griego del término. co?
«El vigor fuertemente estetizante del neopla- Algunos pensaron, como Lodovico Castel-
tonismo será recogido en toda su importancia vetro, que, por ejemplo, la poesía debía tener
por los pensadores renacentistas, hasta el punto como fin «deleitar y recrear los ánimos de la
de dar lugar a lo que Beardsley ha llamado tosca multitud y del pueblo común» (cit. en
“religión neoplatónica del arte”. Esta forma Givone17). Se pensó, como Aristóteles, que la
de religiosidad estética fue inaugurada por la poesía es imitación y, por ello, es la fuente del
Theologia platonica (1482), de Marsilio Ficino, placer que acompaña a la actividad mimética en
quien concibe el alma como “cópula del mundo” cuanto tal, tanto si se imitan cosas bellas (placer
en cuanto que es medio de extremos y unidad directo) como si se imitan cosas carentes de
de opuestos: está situada entre Dios y el cuerpo, belleza (placer indirecto).
y participa a la vez de la finitud e infinitud. La Otros pensaban que la poesía se la debía hacer
mediación sólo puede tener lugar a través del en provecho de la vida humana, para instruirla,
amor, ya que el alma ha nacido de Dios y a Él amaestrarla y formarla, como lo defiende Ales-
aspira; el amor, que está guiado por la visión de sandro Picolomini en 1575. «A su vez, Scaligie-
la belleza, conduce, a su vez, al alma entre los ro, en su Poetica (1561), trata de conciliar ambas
extremos, del caos al cosmos»15. tesis definiendo la imitación poética como «el
* «Este tema aparecerá de nuevo un siglo más fin medio al fin último, que es enseñar delei-
tarde en el De monade (1591), de Giordano tando»18.
Bruno. Es interesante señalar que Bruno in- Pero también en el Renacimiento hay un
troduce una expresión, el «heroico furor», que intento de conciliar el pensamiento de Aris-
no es otra cosa que la traducción de la «locura tóteles con el de Platón. Esto lo intenta hacer
divina» que Platón atribuía al artista en cuanto en el Naugerius sive de Poetica (1555) Gerolamo
que inspirado por Dios; esto es necesario, según Fracostoro, que retoma la tesis aristotélica de
Bruno, porque el objeto de la visión es la vida que la poesía es más filosófica que la historia y,
misma del universo, que no tiene fin, y, por por tanto, posee una mayor capacidad de verdad
tanto, su verdad sólo puede ser entendida en el en cuanto que tiene relación con lo universal y,
recíproco reflejarse de las formas (el bien, el in- no como la historia, con lo particular y contin-
telecto, el amor y la belleza) donde lo infinito y gente; pero afirma también que lo universal es
lo finito dejan de aparecer como opuestos. Pero la idea platónica.
la obra en la que el neoplatonismo renacentista
revela sus tendencias a abrir la religión a una 4) El arte en el barroco
dimensión estética es la Poética (primera parte
de la Philosophia rationalis, escrita en 1623, pero El barroco traspasa el horizonte que se había
que no será publicada hasta 1638), de Tommaso constituido sobre la base de una unidad fun-
Campanella. La poesía, escribe Campanella, es damental de desarrollo que subyace a la Edad
alabanza a Dios («no se puede dar mayor gusto Media. Por ejemplo, la poética del barroco actúa
a un artífice que mirar sus obras con admira- desarraigándose de la metafísica hasta el punto
ción») y ‘un medio para conocerlo’»16. que se la considera un anticipo de la cultura
moderna. Se reduce el arte a una dimensión
El aristotelismo en la Edad Media y el Renaci- de maravilla e invención; por tanto, ya no tiene
miento finalidades miméticas (de imitación), por ende,
tampoco didácticas o hedonistas. Se procura que
En la segunda mitad del siglo XVI, la Poética el arte vuelva a la libre e inagotable producción
de Aristóteles fue muy importante, debido a de significado. En la poesía y la imaginación se
los estudios filológicos, desconocidos por los disuelve lo real, en los artificios el lenguaje tam-

15 Ibíd., 23. 17 Ibíd., 24.


16 Íd. 18 Íd.

Revista Percontari 27
bién, así como en el torbellino de las metáforas. y manía italiana y que en 1733 el padre Feijoo
Así lo veía y procuraba el poeta Góngora. A su codificara en una obra titulada El no sé qué»21.
vez, el propio universo simbólico y mitológico Entonces, el barroco rompe e implica una des-
se libera a sí mismo y, por lo tanto, se le recono- composición del clasicismo renacentista. En el
ce el mismo estatuto que a la realidad. barroco comienza la revolución estética que
Algunos verán el barroco como la decadencia culminará en el romanticismo. Este, el barroco,
literaria (en el juicio de Croce) y otros, como toma la idea de que el arte no es solo el órgano
una categoría a la vez histórica e ideal, es decir, de la verdad, sino que lo es de la verdad en su
como una especie de modelo recurrente dotado reconocerse originariamente unida al mito y,
de autonomía teórica y poética (como lo hace como el mito, entregada a la poética elocutiva
Heinrich Wölffin, historiador del arte), y otros con la que tanto Dios como la naturaleza han
como el intento de devolver al arte a la raíz expresado sus más difíciles e importantes secre-
i-lógica, pero ingeniosa, tópica, imaginativa de tos. «El pensamiento de Vico, que une ideal-
las distintas formas de expresión, como si el arte mente el barroco con el romanticismo, confirma
recogiese en sí «el mundo del misterio donde este tesis»22.
nuestra existencia tiene su origen» (según E. «Pero el clima cultural europeo no favorecía la
Grassi)19. difusión de todo lo que Vico había sabido reco-
De acuerdo con Givone20, no es que el ba- ger de las poéticas barrocas, llegando a descubrir
rroco busque convertir el mundo en fábula, o un alto significado especulativo en el barroco y
bien pretenda ser una mística de la alegoría, o mostrando cómo el gusto por el pandemónium
una semiosis indefinida, sino que lo que busca figurativo (adornos, hallazgos arqueológicos, es-
es la liberación de los juegos del arte que son tilos retóricos, simbolismos de toda clase, etc.)
tan fabulosos como verosímiles. Otros incluso es expresión del mitopoético todavía presente
confían el conocimiento de la verdad al arte en el mundo civilizado o, como diríamos hoy,
durante el barroco. Gracián, por ejemplo, hace secularizado [...]»23.
dialogar a la verdad con el ingenio estético. Las Durante el barroco se pensaba que sólo lo
técnicas retóricas y estilísticas permiten enten- verdadero era bello y amable. Que solo lo ver-
der a la verdad en todos sus matices y en las dadero debía reinar también en las fábulas (aquí
más sutiles diferencias e invenciones porque es fábula es sinónimo de logos, de palabra, de mitos
propio de la verdad ser ella misma y serlo como -mythos, en griego, vocablo que pasó al latín
algo distinto de sí, hasta el punto de aparecer como mutus. Eso sostenía, por ejemplo, Boileau
engañosa y apagada allí donde se la repite in- en su obra Art poétique: «Solo lo verdadero es
cansablemente, y viva, sin embargo, donde se la bello. Sólo lo verdadero es amable. Debe reinar
contradice en su nombre. en todas las cosas, también en las fábulas» (cit.
Durante el barroco se ve que el arte produce en Givone)24. Se pensaba que, antes de la razón,
todo el universo simbólico y mítico, y no solo la palabra había sacado a los hombres de la vida
eso, sino también que lo que lo vivifica es el incivilizada. Y esto era el fruto de los primeros
cambio, la traslación, la contradicción, en el versos poéticos.
sentido de que lo idéntico (el principio, la vida)
aparece siempre como algo distinto, siendo 5) El arte y la estética moderna
solo así verdaderamente ello mismo, vivificado.
«Si la estética barroca parece asomar sobre el Pero luego vendrá la época de la razón con Des-
“misterio” de la existencia, no es tanto porque cartes y otros. El pensador francés sostendrá en
la existencia le parezca insondable, sino más su escrito «Las pasiones del alma», de 1649 (y
bien porque le parece “tópica” e “imaginativa”. también en su texto Compendium misicae, que
Este es precisamente el sentido de la afortunada quedó inédito, pero fue publicado en 1650), que
poética del “no sé qué” de la que ya en 1671 ha- la razón deber ser norma y medida de las pasiones.
blaba Bouhours como de una innundante oda
21 Ibíd., 28.
22 Íd.
19 Vid., Ibíd., 26. 23 Ibíd., 30.
20 Ibíd., 26-27. 24 Íd.

28 Revista Percontari
Boileau, transforma este principio estético, y ven en el arte la fase intermedia de un proceso
afirma que la razón debe ser norma y medida destinado a «superarlo»26.
de la facultad típicamente pasional: la imagina- Ese intento de justificar la experiencia estética
ción. De esto se deriva la idea de que el arte está como experiencia que cubre los distintos niveles
subordinado a una normativa que la trasciende, lo de la existencia humana también se dará en los
que a su vez lleva a pensar que el arte conlleva ingleses ilustrados del siglo XVIII. En efecto,
una función hedonista y didáctica. se da dentro de las vertientes del pensamiento
Sin embargo, el pensamiento de Leibniz anglosajón: el empirismo (de Bacon a Hume)
tendrá un discurso aparte. En su Monadología y el neoplatonismo (de Henry More a Schaff-
(1714), dirá que la mónada como, por ejemplo, tesbury). Así, para Schatttesbury, en la persona
el hombre, al organizarse, lo hace como forma; virtuosa se encuentra la experiencia de lo bello,
llega a eso porque está sometido a un impulso la del bien y lo verdadero. En su libro Sensus
originario que no es ni una ley mecánica ni una Comunis (1709), sostuvo que la experiencia de
necesidad cósmica, sino voluntad individual de lo bello es también la experiencia del bien, así
ser aquello a lo que un individuo está destinado. como esta es siempre experiencia de la verdade-
Ahora bien, este impulso, que lleva a una ro; la belleza revela, platónicamente, el orden y
organización espontánea, está de acuerdo con medida en que consiste la realidad.
el sentimiento de placer y con la contemplación Por su parte, el empirista Hume, en sus
de lo bello, por una parte, y con el ejercicio de la Ensayos morale, políticos y literarios (1742), en
virtud y la aspiración a la perfección, por otro. especial los dedicados a la «delicadeza del gusto
«El sentimiento de placer y la contemplación y la vivacidad de las pasiones», al «entusiasmo»,
de lo bello no son, efectivamente, sino distintos al «progreso de las artes y las ciencias», sostiene
momentos de la reintegración en la armonía a que lo bello es también bueno y lo bueno es
la que tiende todo lo que es imperfecto o sim-
bello porque ambos responden al principio de
plemente en potencia. El hombre siente placer
utilidad. Así, la contemplación de un dorado y
cuando actúa conforme al fin que ha suscitado
fértil campo sembrado provoca un sentimiento
su acción, la conformidad con el fin se manifies-
de satisfacción en el propietario y en todos los
ta bajo la forma de belleza, bello es aquello que
que se benefician de él. Lo que hace a un campo
siendo perfecto implica una acción virtuosa, etc.
útil es su fertilidad, y esto lo hace bello a ese
Placer y belleza, perfección y virtud están, en
campo sembrado.
suma, tan íntimamente unidos que nunca se
dan separadamente»25. En todas esas visiones del arte y de la experien-
Pero de aquí surgió la pregunta sobre la cia estética subyace el reconocimiento, típicamente
función que ejerce el arte dentro de semejante moderno, de que dicha experiencia es original y
experiencia, en conformidad con los principios originaria. En esta línea, Johann Gottfried Her-
leibnizianos. A esa pregunta trató de respon- der, en Silvas crítica o bien observaciones sobre la
der, siguiendo a Leibniz, Alexander Gottlieb ciencia del arte y de lo bello (1769), insistirá, junto
Baumgarten, alumno y sucesor del gran ilus- a otros pensadores de la época como Johann
trado alemán Christian Wolff. «Según Baum- G. Hamann, en la esencia inaugural, fundante
garten –autor de una Aesthetica (1750) en dos y crítica del lenguaje de la poesía respecto a la
volúmenes en donde por primera vez utiliza el historia, tanto secular como sagrada.
término “estética” en su acepción moderna–, el Por su parte, Immanuel Kant dialogará con los
arte es esencialmente conocimiento, pero un empiristas ingleses y los metafísicos alemanes
tipo especial de conocimiento. Es un conoci- sobre la estética o realidad artística, adoptará
miento claro (es decir, consciente) y, por tanto, sus presupuestos, pero destruirá sus resultados,
no es oscuro (es decir, inconsciente), pero es un o sea, llegará a conclusiones diferentes sobre el
conocimiento confuso (intuitivo) y no distinto arte y la belleza, o el bien y la moral. Según este
(discursivo, filosófico). De este modo, Baum- filósofo alemán, lo decisivo en lo estético como
garten abre el camino a las concepciones que en lo ético es la forma y no su contenido.

25 Ibíd., 31. 26 Íd.

Revista Percontari 29
Ese formalismo estético se explica así: Kant En consecuencia, la estética de kantiana es
piensa que, además del entendimiento (que es una crítica del juicio estético, o sea, de la facultad
estudiado por la razón teórica, en su Crítica de de juzgar acerca de lo bello (o de sublime) con
la razón pura), y de la voluntad, fundamento pretensión de validez universal. Pero ¿existen
de la moral (que es la razón práctica, estudiada juicios de gusto que tengan validez universal?
por la Crítica de la razón práctica), existe otra Es cierto que toda sensación de placer o des-
facultad fundamental humana: la sensibilidad, placer es subjetivo e individual. Pero, como todo
que es estudiada en su obra Crítica del juicio, en fenómeno natural, aquella sensación está ligada
la cual trata de responder al problema de cuáles a determinadas causas. Si estas causas son de
son la leyes que rigen a priori el sentimiento (el carácter supraindividual y a priori, el placer y
gusto) y cómo en este caso pueden ser posibles desplacer pueden convertirse en fenómenos de
juicios sintéticos a priori. A este problema le dio validez universal. Y así es.
solución en su tercera crítica ya señalada: Crítica De manera que la impresión estética establece
del juicio (1790), distinguiendo una facultad de cierta relación de las facultades cognitivas entre
sensibilidad inferior (lo sensible) y otra superior sí. Las facultades de conocimiento y relación
(lo espiritual). En ese mismo libro se refiere a entre sí son una propiedad a priori del espíritu
esta última facultad. humano. Son algo común, universal, general,
En oposición al entendimiento como facultad para todos los individuos.
de juzgar por definición, la facultad de la sen- Por tanto, el juicio estético también puede
sibilidad superior aparece como una capacidad pretender validez universal. Es un «juicio sin-
de juzgar por la reflexión. Su tarea no consiste tético a priori», pues el acto estético se apoya
en conocer y determinar el objeto, sino en de- en condiciones y funciones a priori. Y lo es
terminar y juzgar sobre él. de tal modo que el objeto estético necesaria y
Ahora bien, se juzga dicho objeto desde un universalmente, es decir, en cada uno, produce
fin o una finalidad, la que es solo de dos tipos: la ese juego de fuerzas cognitivas que constituye
formal o subjetiva, que es sinónimo de belleza, la “vivencia estética”.
esto es, se juzga un objeto estético desde la be- En la «Analítica de lo bello» (a la cual sigue
lleza; y la real u objetiva que significa perfección. la «Analítica de lo sublime»), la “vivencia esté-
La primera finalidad, o sea, la belleza, existe tica” es definida esencialmente como un «placer
cuando la estructura del objeto (sus aspectos desinteresado». Dice Kant: «Gusto [estético]
formales, verbigracia, la combinación de colo- es la facultad de juzgar un objeto [bello] o una
res, la armonía de las notas en un pieza musical) representación [de la belleza] mediante una
armoniza con nuestra facultad de conocer, es satisfacción o un descontento, sin interés algu-
decir que hace coincidir placenteramente la no. El objeto de semejante satisfacción llamase
fantasía y el entendimiento del contemplador bello»27.
(el sujeto humano) de aquel objeto (obra de En esto se ve que el placer es producido ex-
arte, paisaje, pieza musical, etc.). Aquí se siente clusivamente por la forma del objeto. De ahí que
la acción del objeto sobre nosotros. Aquí el a esta estética kantiana, y la que elaboraron sus
efecto sensible del objeto ocupa el primer plano seguidores, se le llama «estética formal». Para
de la conciencia. Acá la facultad de juzgar pro- esta estética, el objeto del placer y del desplacer
cede estéticamente. Y por eso decimos “esto es estético no es la materia sino la forma. Pero esta
bello o feo”. forma no es nada simple, sino una relación. Así,
La segunda existe cuando la estructura (for- sentimos y juzgamos como bellos la concordan-
ma) coincide con la esencia propia del objeto, cia de colores, la armonía de sonidos, etc. «Es
es decir, cuando corresponde con su definición. tarea de la estética mostrar estas relaciones ele-
Aquí se siente al objeto mismo como final. Acá mentales que reaparecen por doquier y, por así
predomina lo intelectual; la sensación de pla- decirlo, reunirlas en un muestrario estético»28.
cer es secundaria. Aquí la capacidad de juzgar
procede teleológicamente. (Por ello, la primera
mitad de la Crítica del juicio de Kant contiene
una «crítica del juicio estético» y la segunda una 27 I. Kant, s.a., parág. 5.
«crítica del juicio teleológico».) 28 J. Hessen, 1959, 301.

30 Revista Percontari
¿Qué es arte hoy? villa natural. (El capullo que se abre. ¿Qué es lo
hermoso en ello? Se dice: ‘¡Ve, cómo se abre!’)”35.
¿Cómo se lo define el arte, sobre todo, en el ¿Cuál es la esencia del arte? Según Di Napo-
pensamiento estético contemporáneo? Veamos li36, en su texto Estética, la solución a esta cues-
algunas concepciones. tión debe atender a cuatro significados que con
El arte está ligado a la visión del mundo de frecuencia se asumen del arte. El arte también
cada cultura, a las costumbres sociales, al canon se asume:
de belleza que posee cada cultura, etc., aunque
el modo de expresar la belleza, el bien y la ver- * Como un hábito o la posesión de las apti-
dad cambia con la historia y en cada cultura29. tudes para confeccionar la belleza.
El arte: “El arte es toda obra cultural dotada * Como el mismo acto que produce la belle-
de belleza”. “...el arte busca la transformación za; en este sentido se asume el arte cuando
del mundo en busca de la belleza”. No se busca se dice que el arte es la imitación de la na-
la utilidad, como lo hace la técnica, sino un fin turaleza.
“inútil”, es decir, no ligado a la solución de un
problema encaminado a la propia subsistencia30. * Como el modo propio de la actividad que
Por su relativa independencia con los fines produce la belleza; así se dice del arte de
prácticos, el arte supone un desarrollo cultural este o aquel poeta o escritor o pintor, etc.
superior: una cultura demasiado dependiente (El arte de Rafael, de Miguel Ángel, etc.)
de la satisfacción de las necesidades vitales
* Como el efecto de la actividad y el modo
se agota en ese esfuerzo. Una cultura que ya
propio de hacer una obra. Entonces, del arte
dispone de medios de subsistencia puede pre-
se dice que es la misma obra artística; así, la
ocuparse de crear belleza. “El arte es, por otro
historia del arte es la historia de las obras
lado, una continuación de la belleza contenida
artísticas, en la que se distingue la historia
en la naturaleza: un bloque de mármol en bruto
de las doctrinas estéticas.
puede resultar bello, pero mucho más los será
después de haberse tallado la Pietà de Miguel Otra de las funciones simbólicas más caracte-
Angel [...]”31. rísticas del hombre, y a la que ciertamente no
Y, al mismo tiempo, “el arte supone un des- alcanzan los animales, es la expresión artística
pliegue de inteligencia y voluntad creativas, de la belleza y su contemplación.
en la medida en que transforma una materia El arte puede ser imitación de la naturaleza,
dotándola de unas formas y significados nue- como lo es en la pintura costumbrista o en la
vos. Por eso podemos definir el arte como ‘la del paisaje natural; pero, con más frecuencia, es
actividad humana creadora de belleza’ (Yepes, una idealización, un intento de perfeccionar la
1996). La creación artística saca belleza donde naturaleza y construir lo que ella no construye,
no la había (crear es hacer algo de la nada), y en de transcenderla hacia formas en las que se
este sentido se trata de una actividad, en cierto exprese una armonía, una perfección superior
sentido, divina”32. que solo la mente humana concibe e intenta
“En el arte es difícil decir algo que sea tan plasmar después en el mármol, en la tela, en la
bueno como no decir nada” (Afor. 120).33 música o en la poesía.
“Si el arte sirve para ‘producir sentimientos’, «Es verdad que el arte no es sólo expresión de
¿está, a fin de cuentas, su percepción sensible la belleza porque a veces puede ser expresión
también entre estos sentimientos?”34. “Podría de sentimientos sublimes o trágicos, alegres o
decirse: el arte nos muestra las maravillas de la dolorosos, pero siempre requiere una intuición
naturaleza. Se basa en el concepto de la mara- del artista que sabe plasmar en el lienzo, en el
mármol, en notas musicales, en gestos teatrales,
o en palabras, el sentimiento profundo y bello
29 J. A. García C., 2003, 96. con el que los demás se sienten identificados o
30 Ibíd., 200. conmovidos. Si de alguna manera no hay belle-
31 Íd.
32 Íd.
33 L. Wittgenstein, 1995, 63. 35 Ibíd., 111.
34 Ibíd., 84. 36 Texto en digital, s.p.i.

Revista Percontari 31
za no hay arte en sentido estricto. Habrá técnica Es aquí donde topamos con la poesía, que es la
que es otra cosa»37. esencia artística de todo arte, y su cima: porque
Paussin38 dijo: «La finalidad del arte es el pla- «la esencia del arte es el poema», como vuelve a
cer». Se trata del placer tanto de lo que se ama decir Heidegger, y porque «la esencia del poema
como de lo que se conoce. «El arte nos ayuda es la instauración de la verdad»41.
a amar la verdad, resaltando –incluso cuando Sigamos con Heidegger: «El arte es poner
el objeto evocado es feo y banal– su belleza. en la obra la verdad […]. El arte es histórico
Dos manzanas, una cebolla, un par de zapatos y como tal es la contemplación creadora de la
viejos...O bien unas notas, unas palabras...Y es verdad en la obra. El arte acontece como Poe-
como si, de repente, lo absoluto estuviera ahí, sía. Ésta es instauración en el triple sentido de
en la pared o en el silencio, radiante en su es- ofrenda, fundación y comienzo. El arte como
plendor, en su eternidad, en su verdad por fin instauración es esencialmente histórico (en el
y para siempre revelada...». «La verdadera vida sentido de que funda a la historia-la aclaración
–escribía Proust–, la vida por fin descubierta y es nuestra). […] El arte permite brotar a la ver-
esclarecida, y por lo tanto, la única vida real- dad. El arte brota como la contemplación que
mente vivida, es la literatura». instaura en la obra la verdad del ente. Lo que
Esto no significa que los libros valgan más significa la palabra origen en algo que brota, en
que la vida, ni que los escritores vivan más que un salto que funda, de la fuente de la esencia al
los demás. Significa, por el contrario, que la li- ser. El origen de la obra de arte, es decir, a la vez,
teratura, como todo arte, nos ayuda a percibir y de los creadores y los contempladores, es decir,
a vivir esta vida verdadera, que se encuentra «en de la existencia histórica de un pueblo, es el arte.
cada instante en todos nosotros y en el artista, Esto es así porque el arte en su esencia es un
como sigue diciendo Poust,39 pero que la mayo- origen y no otra cosa: una manera extraordina-
ría de nosotros no vemos, por falta de atención, ria de llegar a ser la verdad y hacerse historia»42.
o de talento, y que el artista, en su singularidad,
nos revela [...]». ¿Qué es belleza hoy?
«El arte hace brotar la verdad. De un golpe, el
arte hace surgir en la obra, en tanto que salva- ¿Y la belleza, qué es? ¿Cómo se la concibe en la
guarda instauradora, la verdad del ente», sostiene estética actual?
Heidegger40. Esta verdad no es la de las ciencias, La belleza es un valor que en cierto sentido
hecha siempre de conceptos, teorías, de abstraccio- convierte en fines a los seres que la tienen, por-
nes. La verdad del arte es siempre concreta, siempre que se vuelven en sí mismos preferibles, a dife-
práctica, siempre silenciosa a su manera (incluso rencia de lo que sucede con la utilidad (lo útil se
cuando se expresa por medio de palabras o so- quiere siempre para algo distinto a sí mismo)43.
nidos): es la verdad del ser, en la medida en que La doctrina subjetivista dice que la belleza
somos capaces de escribirla, es «la manifestación es algo relativo al sujeto; así, la doctrina sen-
del ser del ente como tal», escribe Heidegger, y timentalista sostiene que la belleza es algo que
esto constituye una especie de figura humana, se mide por el instinto, o algún sentimiento
necesariamente humana, del absoluto del que estético (Hutcheson, Burke). La escuela positi-
formamos parte o que somos. ¡Tanto peor para vista enseña que la belleza es algo que produce
los estetas! ¡Tanto peor para los virtuosos, si no sensaciones gratas (Taine). Kant dice que la
es más que eso! La belleza no lo es todo. La belleza es la capacidad que tiene algún sujeto de
técnica no lo es todo. Antes que producción producir gozo de manera libre con la imagina-
o habilidad, el arte es fundamentalmente re- ción entre los límites de las leyes del intelecto.
velación, instauración o establecimiento de la Por su lado, la doctrina objetivista reduce o quita
verdad. Pero ¿qué es verdad para el hombre, sin la parte subjetiva en la esencia de la belleza: a) la
lenguaje? ¿Qué silencio, incluso, sin lenguaje? belleza es la expresión de la forma (Hegel); b) la
belleza es la expresión de la idea por la materia
37 C. Valverde, s.a., 159.
38 Cit. en A. Comte-Sponville, 2002, 122. 41 A. Comte-Sponville, 2002, 123-124.
39 Cit. en A. Comte-Sponville, 2002, 122-123. 42 M. Heidegger, 1992, 117-118.
40 Cit. en A. Comte-Sponville, 2002, 123. 43 J. A. García C., 2003, 200.

32 Revista Percontari
( Jouffroy); c) la belleza es la mera unidad en la -«Es la perfección intuitiva».
variedad (S. Agustín, Cousin). «La plenitud inmediatamente sentida en la
Nuestra doctrina, dice Di Napoli, que es casi percepción»45.
la vía media sostiene: la belleza es lo que posee En la obra El hombre latinoamericano y sus
multiplicidad de partes integrales, proporciona- valores46, se advierte que no debemos identificar
das y claras, así como lo que produce delecta- belleza con estética. La belleza es una categoría
ción en cuanto se aprende. de la cual depende la valoración de otras como la
- La multiplicidad de partes se entiende en armonía, el orden, lo sublime, etc. En este senti-
el orden, o material (partes cuantitativas), o do, lo bello ha sido caracterizado como aquello
espiritual (el número de atributos o cantidad) que produce paz, armonía, equilibrios y norma-
porque, como las cosas simples (Dios, el alma), lidad en nuestro ánimo. La valoración estética
la belleza exige multiplicidad de perfecciones al que hacemos de la realidad o cosas, la hacemos
menos como se conoce. desde lo bello como criterio, y lo bello va ligado
- La integridad se entiende como la presencia a la perfección entendido como lo perfectible.
de todo componente; en las cosas espirituales, la «Esta relación entre lo bello y lo perfecto suscita
integridad se refiere a todas las perfecciones; en la emoción de paz en el goce estético, síntesis del
las cosas materiales se refiere a las partes mate- sistema de imágenes y relaciones establecidas,
riales y a la forma, o sea al principio de unidad y fruto de la sensibilidad y del juicio intuitivo res-
especificación; como la integridad difiere de la pectivamente».47
misma cosa, con frecuencia, la suple la imagina- En su diálogo, «Hipias Mayor o de lo Bello»,
ción para obtener esta. Platón48, poniendo en boca de Sócrates, dice
- La proporción indica la disposición de que lo bello no es ni una mujer bella, ni lo útil,
partes, así es como se tiene consonancia (orden, ni lo conveniente, ni el oro ni la plata puesto en
armonía, simetría), según varios aspectos: o la los objetos, ni el placer del oído ni de la vista...
proporción de partes del todo, o la proporción Puede que lo «bello sea el placer ventajoso».
de partes entre sí, o la proporción total para la Pero, como dice el proverbio popular: «Las co-
circunstancia de lugar, tiempo, modo etc., o la sas bellas son difíciles».
proporción realmente facilita la aprensión; por
esto se tiene variedad en la unidad. La obra de arte, la creación artística y la clasi-
- Clara y resplandeciente, o sea, la misma ficación del arte desde la estética
evidencia de la cosa; esta no se toma de la evi-
dencia del enunciado (de la proposición), sino «En la obra de arte intervienen el espíritu y la
de la evidencia del objeto concreto existente naturaleza reconciliándose. Lo bello viene a ser
o imaginario en cuanto que fácil e inmediata- esa armonía de principios opuestos: la idea y la
mente aquello puede contemplarse o intuirse. forma, la esencia y la realidad, lo invisible y lo vi-
- La delectación (el gozo, el placer) es el efec- sible. De manera que el arte ya no es una simple
to del objeto bello en el efecto que contempla, imitación de la naturaleza. Tampoco es un juego,
el placer contemplativo de la belleza es el mero ni un mero solaz del espíritu, ni la plasmación de
placer contemplativo (desinteresado) de donde una idea abstracta. Es algo más grande y maravi-
el amor que ama lo bello no es el amor de la lloso: la manifestación del hombre. La naturaleza
concupiscencia, sino que tiende al gozo del ob- ya es de por sí un espejo sorprendente del espíritu
jeto, o amor de benevolencia, en cuanto se ama universal. Pero el arte va más allá: mediante sus
lo bello, por esta causa se produce la quietud en símbolos nos evidencia el espíritu y arroja plena
la misma (Di Napoli, Estética)44. luz sobre su sentido»49.
También la belleza se define así: «El arte es, entonces, un lenguaje, la palabra
«Es la manifestación sensible de la idea». más alta y expresiva del hombre. No lo po-
«Es la manifestación del ser de la verdad al
ponerse en la obra y como obra». 45 AA.VV., 1988, 371.
-«Es la forma pletórica de expresión». 46 Ibíd., 1988, 439-440.
47 Ibíd., 440.
48 Platón, 1996, 247.
44 Texto en digital, s.p.i. 49 F. Beltrán – L. J. González, 1986, 431-432.

Revista Percontari 33
demos entender como mero pasatiempo. Al d) Hay otra categoría: el “signo idiomático”.
respecto, Hegel afirma que “es en las obras de Y su arte corresponde a la literatura. (El simbo-
arte donde los pueblos han depositado sus más lismo gráfico presenta imágenes con el recurso
íntimos pensamientos y sus más ricas intuicio- de la metáfora.)
nes”. Tiene toda la razón. El arte constituye la Aquí surge la pregunta: ¿la belleza es obje-
forma clave para la penetración en la forma de tiva en cada una de sus expresiones? Esto es,
ser de un determinado pueblo»50. ¿todas las artes valen lo mismo? Todas las artes
Como existe una diversidad de expresiones expresan valores. Solo que algunas lo hacen
artísticas, se impone la necesidad de clarifi- con mayores recursos que otras. Aquí destaca
carlas. Y en esto ayuda la estética, que, según la literatura, puesto que el idioma incorpora
Hegel, es filosofía del arte y de las bellas artes. el mayor número de imágenes. Así, el genio
Ahora bien, existen diversos modos se clasifi- literario de la poética con la metáfora enriquece
car las artes, y se lo hace según los criterios que hasta el infinito la posibilidad de la lingüística
se utilice. como expresión estética. En cambio, la música
constituye el arte más intenso porque su acción
1) A continuación, se presentan cuatro criterios: penetra a lo más íntimo de la intuición. La
plástica ocupa el último lugar, aunque hoy la
Primer criterio: según el material usado en cada pintura contemporánea ha tratado de recuperar
expresión artística. para la plástica la expresión del movimiento, del
a) Así, tenemos arte material: arte del sonido ritmo e incluso de la metáfora.
(como la pieza musical cruceña «Aguaterita»),
del dibujo (como varios de los que en nuestro 2) Hay otra clasificación de carácter empírico
medio realiza Belicoso), del color, de los metales;
y arte espiritual: arte de las letras en general (una En efecto:
poesía, como la de Pedro Shimose, «Beyuma», un i) Están las artes mixtas: son el resultado de
cuento como «El Aleph», de Jorge Luis Borges, una composición, reducción o combinación
novelas como El principito, de Antoine Marie de varios géneros artísticos. Tenemos el canto,
Jean-Baptiste Roger Saint-Exupéry, y Cien años unión de música y literatura; la danza, fusión
de soledad, de Gabriel García Márquez). de música y plástica; el cine, que es el producto
más rico del arte, puesto que reúne a todas. Las
Segundo criterio: según el método. artes mixtas superan en posibilidades a las artes
puras. «La combinación de géneros artísticos les
b) Las artes se dividen en “analíticas o de
abre amplios horizontes estéticos»51.
observación”, como la fotografía o la plástica
retratista; y en “sintética o de creación”, como la El conjunto de las artes presenta una corre-
poseía, la música, etc. lación estética. Por eso se dice que la música es
poética, o que la poesía presenta musicalidad;
las artes plásticas expresan ritmo y poesía.
Tercer criterio: se basa en la categoría estética, «Esta correlación en las artes puras es implícita,
tomadas de Kant, como espacio y tiempo. mientras que en las mixtas configura su esencia
c) Esas categorías son las formas puras de la explícita, ya que en ella y por ella se funden los
sensibilidad. aspectos puros del arte»52.
Así, al espacio corresponden la línea, el color, la ii) Ligadas a las artes mixtas están las artes
superficie y el volumen. Su expresión artística se menores y las artes manuales o artesanías. «Ellas
llama «artes plásticas»: es el arte de lo espacial siguen el antiguo precepto de que el arte es el
o visual. dominio del material con el que se trabaja. Pero
Al tiempo, corresponde el sonido y su arte es la su belleza emana no de la posibilidad técnica
música: arte del sonido y la audición. con que se realicen, sino también de la concep-
ción estética»53.
Cuarto criterio: El signo idiomático.
51 Ibíd., 433-434.
52 Ibíd., 435.
50 Ibíd., 432. 53 Íd.

34 Revista Percontari
iii) En una situación análoga se hallan las artes De esta actividad surgen, no sólo obras de
menores como la orfebrería, el miniaturismo, arte, sino también utensilios (herramientas, má-
el tallado y el folclor. En estas artes menores quinas, muebles). Estos tienen un fin práctico.
resaltan dos aspectos: uno, el manual, producto Porque el hombre es ante todo un ser práctico,
de la habilidad, y que es calificado ajeno al valor volitivo, activo. Pero, una vez su esfuerzo sa-
estético de la obra; dos, la extensión o duración tisface sus primeras necesidades, pasa luego a
no corresponde a su valor estético. De aquí que satisfacer sus necesidades espirituales, y a éstas
una joya de orfebrería puede constituir una trata de satisfacer el arte o la obra de arte.
obra maestra, al igual que una porcelana o un Mientras que las obras técnicas tienen fines
pequeño grabado. Realmente, las artes menores
prácticos; las obras de arte tienen fines superio-
pueden igualar o superar al gran arte, aunque
res. Aquí la utilidad queda excluida. Por eso el
con dificultad por la limitación de su material.
arte puede ser definido «como la producción y
«Finalmente notamos que el folclor surge
representación de valores estéticos»56.
a partir de pequeños temas artísticos, por lo
general. Pero a la vez... puede dar lugar a la
expresión de un alto contenido artístico, y hasta Clasificación de las artes:
servir de modelo a la obra académica y docta
del gran arte»54. Como esa representación puede tener varias
maneras, entonces hay diversas clases de arte.
Así:
3) La creación artística y otras clasificaciones
del arte a) Una antigua clasificación lo dividen en
espaciales y temporales. Las primeras represen-
Si hay una diversidad de arte, es porque la crea- tan algo yuxtapuesto en el espacio y, por ende,
tividad artística es variada. Esta creatividad, en simultáneo. Aquí están las artes plásticas. Las
cualquier tipo de arte, reúne dos rasgos centrales: segundas, en cambio, son una serie temporal,
Uno, la intuición: el artista sólo puede crear lo algo que se sucede en el tiempo. Aquí están,
que previamente ha intuido. «El artista intuye por ejemplo, las artes que tienen que ver con la
un valor estético y entonces se pone a darle palabra como la poesía.
forma. De este modo toma cuerpo su idea esté- b) H. von Pauler propone esta clasificación:
tica»55. ¿De dónde el artista intuye valores? Los i) las artes reproductoras, que son la pintura, la
caminos son diversos: su intuición puede venir escultura, la jardinería (que es una forma del
de situaciones de vivencias o de otra obra de arte del paisaje) y el teatro; ii) las artes simboli-
arte que ve. También puede apoyarse en otros zadoras, como ser: la música, la danza y la arqui-
aspectos de distinta naturaleza. tectura. En esta clasificación, la poesía se ubica
Dos, la producción: es la composición. Esta en ambas clases de arte porque en ella se unen
se da en el alma del artista. El valor estético todas las artes, y se equilibran la reproducción y
se presenta en el alma con la exigencia de ser la simbolización.
expresado, y el alma sensible del artista puede c) Hessen, en base a su definición de arte, lo
reaccionar enseguida hacia ese valor. El artista clasifica en: poesía (su medio de representación
percibe esto como una necesidad, a veces in-
es la palabra), música (su medio de represen-
cluso como un demonio. Esta fase consiste en
tación son los sonidos); la pintura (se dirige a
dar al valor estético intuido una expresión apre-
la vista humana y para ello emplea colores);
hensible por otros hombres. Para esto, el artista
tiene que poseer unas determinadas facultades. la arquitectura y plástica (son también artes
Vale decir, en la obra artística se expresa tam- visuales, pero no trabajan con colores sino con
bién la persona misma del artista. El producto materiales sólidos (madera, metal, piedra); artes
de la actividad artística es la obra de arte, que se del movimiento (sus medios de representación
distingue de los productos de la naturaleza por son los movimientos rítmicos, por ejemplo, el
tener su origen en la actividad creativa humana. mimo. En el arte mímico se añade también la
palabra hablada).
54 Ibíd., 434.
55 J. Hessen, 1959, 323. 56 Ibíd., 325.

Revista Percontari 35
«Dentro de cada clase de arte hay infinito nú- mar, o escuchar una buena melodía musical,
mero de posibilidades de producción artística. una canción, ver un cuadro de pintura, leerse un
En cada obra de arte se refleja la individualidad poema del chileno Pablo Neruda, o del cruceño
del artista. Por tanto ninguna es totalmente Raúl Otero Reiche, etc. De manera que el arte
igual a la otra. Sin embargo, en las obras de arte es otra forma de conocer y percibir las cosas; es
de una determinada época puede comprobarse otra manera, como diría Heidegger, de decir la
ciertos rasgos generales, al que damos el nom- verdad; o es otra manera de conocer y entender
bre de estilo artístico»57. el mundo, donde la intuición juega un papel
fundamental. En el arte también se graba la
Reflexiones finales memoria histórica de un pueblo. Es más, para
algunos, el arte es lo que realmente diferencia al
En la educación y escuela alternativa europea, hombre de los “brutos”.
ya existe el firme interés de introducir en serio, Por eso urge darle más importancia al arte en
es decir, de manera sistemática y permanente, el nuestras vidas desde que nacemos. Y en esto la
arte para educar y enseñar a aprender. Se sostie- educación y escuela tiene para este siglo XXI un
ne que la práctica de alguna actividad artística gran desafío: educar, enseñar, hacer aprender y
desde temprana edad ayuda al niño, adolescente formar al ser humano, haciendo arte.
o joven a llevar una vida más equilibrada, men- ¿Y en Bolivia o en Santa Cruz cómo va la
tal y emocionalmente hablando. enseñanza del arte en las escuelas y colegios?
Ha ya unas dos décadas, oí una conferencia Infiero que lo tenemos relegado, hasta el punto
de dos profesores de Suecia que explicaban que la enseñanza, por ejemplo, de la música
que, en la reforma educativa que comenzaría tiene dos horas pizarra a la semana (unos 80
a aplicar en su país a fines del siglo XX para minutos), cuyas clases se reducen a aprender a
iniciar el nuevo milenio, estaban incorporando cantar el himno boliviano y los himnos depar-
la enseñanza del arte de la música como un área tamentales, o «Viva mi patria Bolivia», con pro-
fundamental y con tanta importante como el de fesores que completan, por mencionar un caso
las matemáticas o el de lenguaje. que he visto, sus horas de clases de Geografía
En el encabezado de este escrito se mencionó con las de música como si esta fuese un apén-
que hoy la neuroestética ha confirmado que te- dice sin importancia. Esto en la mayoría de los
nemos unas neuronas especiales encargadas de colegios públicos y de convenios, y también en
provocarnos el placer respectivo cuando mira- varios privados, con algunas loables excepciones.
mos algo bello o que nos agrada, y que, además, Alguno que otro se salva de esta observación.
si se las estimula con actividades de este orden, De manera que nuestros hijos salen bachilleres
contribuyen al desarrollo de la imaginación y la sin saber leer un pentagrama con sus respectivas
creatividad humanas, además de ayudar a que notas. ¡Esto se los puedo asegurar!
un ser humano desarrolle su personalidad con En la universidad, en el último quinquenio
mejores valores. (después de ir leyendo más temas de neuroedu-
Se dijo también que hoy se acepta que la es- cación), les vengo preguntando a los estudiantes
tética como disciplina filosófica es fundamental si saben tocar algún instrumento musical. Uno
para estudiar y entender de qué va eso de la fi- que otro dice que sí, pero porque lo aprendió
losofía. Por tanto, la enseñanza de la estética no por tradición familiar, o porque fue por su
debería estar ausente del pensum de esta ciencia cuenta a un centro de arte, o por “amor al arte”,
humana. como se dice, es decir, por aptitud natural, como
Aquello muestra que, junto a la cosmovisión en mi caso que aprendí a tocar guitarra porque
filosófica, científica y religiosa, las culturas o veía tocar de niño a mi padre –y mi padre lo
la cultura occidental en particular tienen una hizo porque mi abuelo cruceño tocaba ese ins-
cosmovisión estética, porque al ser humano le trumento–. Hoy, en Santa Cruz, el Festival de
gusta, siente placer, contemplar algo bello: una Música Renacentista y Barroca en los últimos
puesta de sol, un campo de flores, las olas del años está estimulando mucho entre los niños
y jóvenes el amor por la música y, por tanto,
el deseo de aprender a tocar el violín y otros
57 Ibíd., 336-337. instrumentos musicales. Hace como cinco años,

36 Revista Percontari
un músico estadounidense que estuvo unos meses enseñando
música, antes de volver a su país, en una entrevista, afirmó que
entre los niños y jóvenes de Santa Cruz encontraba mucho
talento para la música en general. ¿Estamos haciendo algo
más para desarrollar estos talentos artísticos de las presentes y
futuras generaciones cambas?
Podríamos introducir reformas en las escuelas y colegios en
esta línea, si la educación fuera una competencia autónoma de
las regiones. ¡De esto estamos seguros, si tuviéramos libertad
de educación y enseñanza! Pero, con el manejo centralizado de
la educación, seguiremos arrastrando esta carencia terrible en
nuestro sistema educativo de Bolivia y en nuestras regiones o
departamentos en particular.

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Revista Percontari 37
El artista y la obra bordianos
Notas sobre la figuración artística en
Arturo Borda
Juan Marcelo Columba-Fernández

P ermítame, plástico lector, introducirme en


la exquisitez y voluptuosidad de la temática
estética a partir de la exploración de la obra lite-
lector, algunos elementos de figuración sobre al
individuo productor del proceso creativo y su
producto en los escritos de Borda para aproxi-
raria de uno de los más representativos artistas marnos, finalmente, de manera muy preliminar,
bolivianos de la primera mitad del siglo XX. a una conceptualización bordiana del arte.
Arturo Borda Gozálvez inició su producción
plástica hacia 1905, labor que infatigablemente Una individualidad apasionada y generosa
continuó hasta su deceso en 1953. Durante
la última década de su vida, Borda produjo La figuración del artista bordiano se manifiesta
admirables lienzos que establecen singulares en analogía con la imagen del poeta, ambas
relaciones con El loco1 –obra de tres tomos pu- personalidades incomprendidas por un entor-
blicada póstumamente en 1966– a manera de no que no alcanza a apreciar el valor estético
un discurso visual paralelo y complementario fundado en el estremecimiento pasional que,
a su producción literaria2; una interactividad como misión primordial, se propone transmitir
pictórico-escritural en la que, a primera vista, la el sujeto creador de arte:
pintura pareciera destinada a ilustrar capítulos
[...] es sabido que cada corazón tiene sus
enteros del texto bordiano3.
modalidades peculiares, de donde resulta
Es a partir de esta providencial confluencia que el poeta o el artista jamás es interpreta-
artística entre la plástica y las letras, pictórico do en su verdadero sentido, por desesperado
lector, que deseo emprender una vertiginosa que sea su esfuerzo para conseguir ello [...]
lectura sobre las figuraciones del arte en el texto en arte muy especialmente, lo que viene del
bordiano. Una abreviada exploración temática corazón va directamente al corazón, como
sobre el vocablo “arte”4 en los escritos de Borda en la vida de relación amorosa, esforzán-
nos permite apreciar la pertinaz afinidad de dose así el artista en remover el máximum
dicha palabra con voces como “artista” y “obra”; de las pasiones [...] todo artista lo primero
una combinación que, a manera de constelación que debe buscar es el misterioso tic emotivo
semántica, revela luminiscencias significativas [...]5.
en torno a la temática artística en el corpus
estudiado. Veamos a continuación, estético Otro aspecto que destaca en la representación
del artista bordiano es aquel relacionado con
la reafirmación de la individualidad del sujeto
1 A. Borda, El loco, La Paz, H. Municipalidad de La Paz,
creador, una singularidad contrapuesta a la ti-
1966. ranía ejercida por la crítica del arte. La mordaz
2 P. Querejazu Leytón, «Arturo Borda y el mundo clásico», expresión pasional de la individualidad artística
en Classica boliviana, 7, La Paz, SOBEC/Marigalante, se opondría, así, a una suerte de opresión que
2016, págs. 164-165.
3 R. Roa Balderrama, Arturo Borda. Historia desconocida
la crítica artística ejerce sobre otras conciencias
de un artista boliviano, La Paz, Museo Nacional de Arte, menos advertidas:
2010, pág. 96.
4 Etimológicamente el vocablo “arte” (del lat. ars, artis ´ha-
Es en verdad una gran vergüenza para los
bilidad´, voz resultante del calco semántico del gr. téchnē) tiempos idos el que tuvieran sus hombres la
refiere tanto a una capacidad como a un conjunto de necesidad de vivir pendientes de la opinión
preceptos para hacer bien algo. Cf. J. Coromines, Breve
diccionario etimológico de la lengua castellana, Madrid, Gre-
dos, 2011, pág. 46. 5 Borda, op. cit. págs. 351, 589, 861.

38 Revista Percontari
del crítico [...] haremos que todos se burlen veo es obra de arte o no, debo esperar que
de la opinión que es el despotismo y la más mi emoción se manifieste [...] si en este
odiosa tiranía de las conciencias, imbuyen- esfuerzo [expresivo] la obra no es esencial-
do en la juventud el hecho ultracósmico de mente emotiva, está perdida para siempre,
que primero, ante todo y sobre todo es el porque el arte se reduce a la emoción [...]8.
YO, en todo orden de cosas [...]6. El tópico de la imperfección en la obra de arte
Probablemente, la representación más elocuen- se inscribe en el texto bordiano como un rasgo
te del artista se encuentra hacia el final de la inherente al producto estético, una característi-
obra donde se figura al sujeto creador como un ca susceptible de ser puesta de relieve conscien-
ser en esencia pasional que transforma armo- temente. En contraste, la perfección de la obra
niosamente la belleza inteligible y la obsequia en Borda se encontraría en su proximidad con
generosamente al mundo: la naturaleza y los patrones clásicos9:
[...] el artista, olvidado de sí, absorbiendo No hay obra humana que no cargue un
con angustia insaciable la esencia del amor, cúmulo de imperfecciones y sin que el
la potencia y belleza de todas las existencias autor se percate de ello. Es por eso que las
en la poliinfinitud proteica y proteiforme de imperfecciones debemos ponerlas adrede
lo cognoscible, viviendo esa pluralidad, lo y ostensiblemente [...]. Y es de ver cómo
traduce todo en armonía, vaciándolo luego persiguiendo la perfección han llegado a
todo a manos llenas en el universo mundo eso que llaman el naturalismo o algo así, lo
del Ser7. que prueba, para mí, por lo menos, de modo
En síntesis, el artista bordiano es representado concluyente, que la obra perfecta de arte es
como una individualidad generosa, apasionada la naturaleza [...]. Lo clásico en el fondo y
e incomprendida que principia un proceso en la forma debe significar la perfección en
creativo para la expresión de su sentir. El artista todo sentido [...] debemos preguntarnos:
también es imaginado como propiciador de una ¿qué es y cómo es la perfección? La perfec-
génesis estética enfrentada a la valoración arbi- ción en el arte es la imitación máxima a la
traria y opresiva que, desde un pedestal gregario naturaleza10.
y fortuito, puede ejercer la crítica del arte. Por otra parte, un insospechado vínculo entre
ciencia y obra de arte se hace presente en Borda
Una expresión emotiva y laboriosa cuando el autor señala que la creación artística
tiene su fundamento en el quehacer científico,
Independientemente de la técnica o habilidad en la búsqueda de la verdad y el desafío de lo
para producción artística, el valor de la obra enigmático, generando tanto formas superiores
de arte bordiana radicaría en su potencial de de conocimiento como expresiones de subli-
conmover las almas, en la convulsión pasional mación estética alcanzadas mediante la labor
que es capaz de suscitar en los espíritus expec- abnegada y trascendental del individuo:
tantes. Asimismo, el estatus de “obra de arte” La iniciación en el verdadero arte, en su sen-
dependería, en Borda, de la intensidad con que tido más real, artificio, está en la ciencia; es
se manifiesta la emoción en el receptor artístico; ella quien desentrañando impasiblemente
una suerte de instinto estético individual en el la verdad se ahonda en el misterio, navegan-
destinatario que reconoce una obra cuando la do en las ondas filosóficas, sobre las cuales
siente: emergen las imágenes de lo sublime, a cuyo
Pues por estupenda que sea la técnica, si el imperio se hace en nosotros el ensueño,
motivo carece de fuerza emotiva, la obra no
vale, ya que le falta lo único que consagra 8 Ibíd., págs. 43, 97.
a la obra de arte: la emoción, el tic de toda 9 El contenido de obras pictóricas de Borda como La per-
belleza [...] para que mi razón sepa si lo que fección de las artes (1944) o Crítica de los ismos y triunfo del
arte clásico (1948) remite, en la búsqueda de generación
de belleza, a la importancia de la perfección inspirada en
la naturaleza y en el mundo clásico. Cf. Querejazu, op. cit.
6 Ibíd., pág. 860. pág. 174.
7 Ibíd., pág. 1633. 10 Borda, op. cit. págs. 270, 351, 819.

Revista Percontari 39
para el trasunto de lo cual obra el arte plás-
tico o subjetivo [...] si el deliquio de crear,
de inventar o descubrir, implica sacrificio,
sacrificadla íntegra vuestra existencia –es el
instante– al logro de una sola obra de vasta
aspiración perfectible a lo sublime, ya sea
en la ciencia o en el arte; y considerad que
así legareis al mundo algo más que vuestros
huesos a la pudre11.
Borda concibe la obra de arte como un producto
estético que debe manifestar, insoslayablemen-
te, la emotividad del artista y remover las fibras
pasionales de su público. Asimismo, la obra
bordiana, sin rehuir las imperfecciones inhe-
rentes a la creatividad humana, fundamenta su
belleza y su perfección en los patrones clásicos
y en la naturaleza, pero también lo hace en una
laboriosa y trascendental búsqueda de la verdad
y la inmersión en lo insondable.
El fugaz recorrido precedente nos permite,
vehemente lector, plantear la cuestión del arte
en Borda como un tema esencialmente ligado
a la expresión y recepción de la pasión humana,
un proceso cimentado en modelos clásicos y de
orden natural, pero, sobre todo, fundado en el
esfuerzo creativo y perdurable que subyace a tan
encomiable empresa.
Quisiera cerrar esta sucinta reflexión brin-
dando al polícromo lector un lienzo impoluto
donde pueda bosquejar, mediante la técnica y la
materia que considere apropiada, el perfil de las
interrelaciones pictórico-literarias del apasio-
nado corpus multimodal bordiano; una noble
tarea que sabrán cumplir a cabalidad las hábiles
manos y el meditabundo espíritu del impetuoso
hermeneuta-espectador.

11 Ibíd., págs. 867, 1401.

40 Revista Percontari
La expresión estética del Ande
a través del telurismo pictórico de
Cecilio Guzmán de Rojas
Freddy Zárate

A partir de los primeros años del siglo XX hasta


finales de la década de los años cuarenta se
produjo una notable literatura que tuvo por ob-
principal fue más allá del aspecto estético. Estas
representaciones artísticas tuvieron la finalidad
de trasmitir una serie de mensajes políticos
jeto reconstruir y revalorizar el legado autóctono simbolizados en retratar un telurismo artístico
de Bolivia. En el campo filosófico esta corriente con anterioridad a la filosofía denominada “una
fue denominada por Guillermo Francovich con mística de la tierra”. Como señaló Cecilio Guz-
la expresión “una mística en la tierra”1. Según mán de Rojas en una declaración a la prensa:
Francovich, “el paisaje, lo telúrico tienen una “Cada una de las artes, la pintura, la música,
especie de espíritu y que actúan sobre el hombre la escultura, deben cumplir su misión peculiar.
creando formas de vida individual y social, dando Cada arte tiene su forma propia de expresión.
nacimiento a tipos culturales con fisonomía tan Así dentro de un cuadro histórico, la belleza ha
propia como los ambientes geográficos que las de ser atendida ante todo por un sentimiento
han producido”2. Los representantes de esta estético de forma y color y sólo después vendrá
filosofía telúrica fueron Roberto Prudencio3, el sentimiento dramático a completar la obra
Fernando Diez de Medina4, Humberto Palza5 con la documentación literaria”7.
y Federico Ávila6, entre otros.
Pero todo ese proceso filosófico tuvo como Su vida
antecedente al campo artístico. Los artistas rea-
lizaron una contribución notoria a este período Uno de los máximos exponentes de la pintura
a través de la pintura, la escultura y el grabado. boliviana en el siglo XX es el artista Cecilio
A pesar de que esta generación de artistas no Guzmán de Rojas. Según las descripciones de
promovió un aporte –en el sentido estricto de Francisco Curt Lange (1903-1997), el pintor
la palabra– a la teoría política, la ensayística, era “de mediana estatura, delgado, de tez mo-
la historia o la novela para manifestar sus in- rena, marcadamente pálida; ojos grandes, algo
quietudes existenciales o políticas, su propósito inquietos; pupilas dilatadas que tienen por mar-
co unas cejas pobladas; cabellera oscura”8. Los
datos biográficos pueden ser resumidos en estas
1 Guillermo Francovich, El pensamiento boliviano en el siglo breves líneas9: nació en Potosí el 24 de octubre
XX, México: FCE 1956, p. 87; Cf. Guillermo Franco-
vich, La filosofía en Bolivia, Buenos Aires: Editorial Lo-
sada 1945, pp. 155-165. 7 Declaración de conceptos plásticos por Cecilio Guzmán
2 Ibíd., p. 88. de Rojas a su retorno a Bolivia en el año de 1929, en: El
3 El filósofo Roberto Prudencio fundó en 1939 la Revis- Diario (La Paz), 12 de noviembre de 1929.
ta Kollasuyo. Prudencio no concibió un libro que englobe 8 Francisco Curt Lange, Impresiones andinas (Tomo I),
todas sus teorías estéticas, filosóficas, históricas, sino toda Editorial Nueva América, Montevideo, 1938, p. 100.
su producción se encuentra dispersa en periódicos, revis- 9 Iván Guzmán de Rojas, Datos biográficos del pintor boli-
tas y principalmente en la Revista Kollasuyo. El artículo viano Cecilio Guzmán de Rojas (1899-1950) con extractos
más explícito sobre el telurismo se encuentra expuesto en de artículos de la prensa internacional de su obra, Recupe-
«Sentido y proyección del Kollasuyo», en: REVISTA KO- rado de: https://www.dropbox.com/s/fq75i9dqjc4dez4/
LLASUYO (La Paz), N° 12, diciembre de 1939, pp. 3-11. BioDatCGR.pdf?dl=0; sobre otros datos biográficos
4 Fernando Diez de Medina, Thunupa, La Paz: Gisbert y acerca de Cecilio Guzmán de Rojas cf. Marcelo Calvo,
Cía. 1947. Mística y paisaje, La Paz: Editorial Juventud 1986; Oscar
5 Humberto Palza, El hombre como método, San Francisco Cerruto, La muerte mágica, La Paz: Ediciones altiplano
de California, U.S.A., 1939. 1988; Jorge Villanueva Suárez, Dibujantes, pintores y es-
6 Federico Ávila, La revisión de nuestro pasado, La Paz: Edi- cultores bolivianos, La Paz: 2da. edición, CIMA 2007;
torial Boliviana, 1936. Catalogo conmemorativo de la obra pictórica de Cecilio

Revista Percontari 41
de 1899. En 1912 la familia Guzmán se traslada Pacheco indica que su alistamiento se hizo en
a Cochabamba. Allí asiste tempranamente a la el año de 1934: “El soldado Guzmán de Rojas,
Academia de Pintura y Dibujo dirigida por el aparte de su fusil, lleva en su modesto equipaje
profesor Avelino Nogales, quien abre en la pin- papeles, pinceles, cuadernillos, material de
tura boliviana nuevos horizontes10. Por el año pintura, lápices, y tintas […]. Viajaba en com-
de 1920, Guzmán de Rojas celebra su primera pañía de amigos en la cultura y de anónimos
exposición en Potosí. Ahí exhibe su cuadro al jóvenes indígenas que desconocían su destino
óleo intitulado El mendigo. Al año siguiente, su final”12. Las vivencias existenciales del Chaco
madre patrocina su viaje a Europa –vendiendo son testimonios de dolor y sangre resguardados
sus joyas personales– con la esperanza de que su en cada uno de sus dibujos, acuarelas y óleos.
hijo obtenga una beca de estudio. En primera Sobre este episodio, Wilson Mendieta recupera
instancia, Cecilio Guzmán de Rojas se dirige a un episodio poco conocido por la historiografía
España e ingresa a la Academia Provincial de del Chaco relatado por el hijo, Iván Guzmán de
Barcelona. En 1923 se traslada a París donde Rojas: “El estado de ánimo y físico de los com-
ingresa a la Escuela de Bellas Artes. Ahí co- batientes los presenta con toda crudeza y dra-
noció a Picasso y a Fougita. En 1924 retorna a matismo a tal punto que algunos jefes militares
España, logrando ingresar a la Real Academia le prohíben que pinte estos cuadros y le pre-
de San Fernando de Madrid con una beca del vienen que serán quemados porque constituyen
gobierno español. En la Academia madrileña un desaliento para los soldados […]. El hecho
tuvo como compañero de estudio a Salvador no se consumó porque interviene el Gral. David
Dalí. Expuso sus trabajos en el Círculo de Be- Toro, quien ordena que se los oculte pero que
llas Artes de Madrid, recibiendo importantes no sean quemados”13. El pintor de la contienda
elogios de varios críticos de arte. Concluidos bélica inmortalizó varios episodios incomodos
sus estudios, retornó a Bolivia en 1929, llegan- del Chaco manifestados en los cuadros titula-
do a realizar una exposición en La Paz en el dos: Insolación, Avitaminosis, Paisajes del Chaco,
Círculo Militar, en donde presentó 37 óleos, Agonía, Sed, Héroes sin gloria y El rezagado.
doce grabados, dos dibujos y tres notas. La Terminada la contienda bélica con el Para-
impresión producida en el público fue de gran guay, Cecilio Guzmán de Rojas retornó a sus
sorpresa y novedad, después de muchos años de labores artísticas. Exhibió sus obras de índole
estancamiento11. Posteriormente, se postuló al expresionista como protesta hacia los horrores
concurso de méritos para optar a una cátedra de la Guerra14. Al momento de ver los cuadros
y administrar la Escuela Nacional de Bellas sobre el infierno verde “encontré tantos vestigios
Artes, llegando asumir la Dirección General de de la guerra, tanta tristeza y desolación, tanta
Bellas Artes en mayo de 1930. rebeldía y desesperación oculta, que me sentí
confundido con el mundo de ex-combatientes
por quienes pasó la muerte rozando. Le vi una
La Guerra del Chaco tarde en su taller sufriendo aún los estragos de
una disentería que le imposibilitaba trabajar
Las deterioradas relaciones internacionales con
con calma”, relata Curt Lange15.
el Paraguay dieron inicio a la Guerra del Cha-
co (1932-1935). El escritor Wilson Mendieta
El artista y la política

Guzmán de Rojas, realizada por Pedro Querejazu para


La agitada época de los años cuarenta empuja-
la Exposición en el centenario de su nacimiento (24 de ron a Cecilio Guzmán de Rojas a incursionar
octubre -1999 a 31 de mayo -2000), Fundación Cultu- en política. Según declaraciones del escritor y
ral del Banco Central de Bolivia; Teresa Gisbert y José político Tristán Marof16, Guzmán de Rojas fue
de Mesa, Historia del arte en Bolivia - Periodo republicano
(tomo III), La Paz: Gisbert y Cia. S.A. / Fundación Si-
món I. Patiño. 12 Wilson Mendieta Pacheco, Cecilio Guzmán de Rojas: con-
10 Alfredo La Placa, «Pintura y escultura» en: Hugo Boero ductor estético de los Andes, La Paz: CIMA 1999.
Rojo, Bolivia mágica (Tomo II), La Paz, Editorial Ver- 13 Ibíd., p. 25.
tiente, 1993, p. 188. 14 Alfredo La Placa, «Pintura y escultura», (nota 10), p. 189.
11 Rigoberto Villarroel Claure, Teorías estéticas y otros estu- 15 Francisco Curt Lange, (nota 8), p. 100.
dios, La Paz: Biblioteca paceña - Nueva Serie, Honorable 16 Stefan Baciu, Tristán Marof de cuerpo entero, Ediciones
Municipalidad, 1975, p. 54. ISLA, 1987, p. 133-134.

42 Revista Percontari
participe en la fundación del Partido Socialista El Ande visto con sentimiento estético
Obrero de Bolivia (P.S.O.B.)17. El fugaz par-
tido tuvo como integrantes a Tristán Marof, La expresión del arte telúrico fue un manantial
José Aguirre Gainsborg, Alipio Valencia Vega, para la teorización del pensamiento místico de
Eduardo Arze Loureiro, Guillermo Viscarra la tierra. Esta representación pictórica se con-
Fabre, entre otros. Esta participación activa virtió en enaltecer la figura del aymara y su en-
en política del artista es cuestionada por Iván torno de forma idealista, serena, rodeada de un
Guzmán de Rojas: “Si bien fue muy amigo de ambiente agradable, suave y colorido: irradian-
personajes como Tristán Marof y otros líderes do cualidades físicas, culturales, espirituales y
(por ejemplo, Gualberto Villarroel, Enrique geográficas. Tempranamente, Cecilio Guzmán
Peñaranda o Víctor Paz Estenssoro), nunca de Rojas –a la edad de 20 años–, puso la semilla
incursionó en la política de partidos. Conside- inaugural del telurismo estético plasmado en
raba que era una pérdida de energía y tiempo en el óleo sobre lienzo titulado El mendigo, y sus
detrimento de su labor artística”18. varios dibujos en acuarela de calles y plazuelas
de la ciudad de Potosí. Estas representaciones
El fin pictóricas muestran una realidad romántica del
altiplano, alejándose de la pobreza, la miseria
El 14 de febrero de 1950 –en vísperas de Car- y el desprecio. El escritor Fernando Diez de
naval–, la vida del artista terminó abruptamen- Medina afirma que en esa época “no había, por
te: “El pintor se ponía su ropa de trabajo. Todos entonces, un clima artístico en el país andino.
los días laboraba pincel en mano […]. Luego Ni críticos, ni gustadores, sólo aficionados
de un hondo suspiro, abandona la casa en horas mudos. Y se inició el combate, entre el creador
de la mañana en forma apresurada portando henchido de energía y entusiasmo, y el pueblo
algunos enseres en un pequeño bolso […]. Al indiferente, adormecido en el bostezo de sus
día siguiente, toca la puerta un agente policial montañas de basalto. Cecilio Guzmán de Rojas
y muestra a sus familiares una pistola y su es el primer artista boliviano que lucha por su
sombrero… Cecilio Guzmán de Rojas se había arte. Lo acerca, lo explica, lo defiende, lo impone
autoeliminado en los escarpados de Llojeta”19. a amigos y enemigos, despertando sensibilidad
La repercusión tras la muerte de Cecilio Guz- estética de sus compatriotas”21.
mán de Rojas se vio manifestada en la prensa La reivindicación al indio –desde la óptica del
nacional, la radio y los homenajes póstumos. arte– es visible en los óleos sobre lienzo: El triun-
La escultora Marina Núñez del Prado refleja fo de la naturaleza (1928); El beso del ídolo (1927-
el sentir de la pérdida del pintor de los Andes: 1929); Ñusta (1932); óleo sobre papel Indios en
“No en vano en esta tierra de milagros floreció, Llojeta (1933); acuarela y témpera sobre papel
tanto como el prodigio de la plata, el espíritu Hermanas (1934); óleo sobre lienzo El niño indio
creador de numerosos pintores, entre los cua- (1937); Paisaje del lago Titicaca (1945); Cristo ay-
les descuella el malogrado Cecilio Guzmán mara (1947) y Virgen india, son algunos ejemplos
de Rojas, que fue el iniciador del movimiento a la contribución filosófica del arte telúrico. Estas
indigenista en la pintura y que dejó una obra obras pictóricas –en palabras de Fernando Diez
de calidad desgraciadamente truncada por la de Medina– fueron consideradas como una pe-
muerte”20. netración al interior de nuestra sierra, sintiendo
su dramático desgarramiento, su deslumbradora
grandeza, la poderosa sugestión de sus formas
coléricas. Embellecido por la brujería de su arte,
el paisaje andino está aprisionado en sus lienzos
17 Este hecho también fue confirmado por Guillermo Lora: con sus colores tumultuosos y el potente clamor
“Cecilio Guzmán de Rojas estuvo vinculado al PSOB e del contraste22.
hizo un retrato de Marof ”, en: Diccionario político histórico
cultural, Ediciones Masas, La Paz, 1985, p. 252.
18 Entrevista realizada a Iván Guzmán de Rojas, La Paz, 18 21 Fernando Diez de Medina, «El pintor del Ande», en:
de abril de 2017. Thunupa, La Paz: Gisbert y Cía. 1947, pp. 163-173.
19 Ibíd., (nota 9), p. 35. 22 Fernando Diez de Medina, «Noticia de la pintura boli-
20 Marina Núñez del Prado, Eternidad en los Andes, Edito- viana», en: El velero matinal, La Paz, Editorial América
rial Lord Cochrane, Santiago de Chile, 1973, p. 38. 1935, pp. 229-256.

Revista Percontari 43
Padre de la pintura moderna en Bolivia y el fin del ritmo general”26. Esa esencia mística del
de un ciclo hombre y la tierra fue concebida por Cecilio
Guzmán de Rojas al sentir la energía de las
El crítico de arte Carlos Salazar Mostajo aseve- ruinas de Tiwanacu. En estos suelos ancestrales
ra que Cecilio Guzmán de Rojas no solamente el artista fortaleció su ideal de arte y la razón
fue el creador de la tendencia indianista, sino lo única de su vida hasta el día de su muerte. Guz-
considera como el padre de la pintura moderna mán de Rojas es consciente de su faena artística.
en Bolivia. Asimismo, el estudioso del arte bo- Así, explícitamente señala: “En mi labor verán
liviano Rigoberto Villarroel Claure afirma: “La que no hay una documentación objetiva de la
pintura simbolista ejercida en Bolivia por Ceci- naturaleza sino el sentimiento boliviano dentro
lio Guzmán de Rojas concluyó con su muerte de su forma estética, basada en el gran arte
en 1950”23. Para Salazar Mostajo, las creaciones Tiahuanacota, arte superior, estilizado, rítmico,
de Guzmán de Rojas consistieron en “la apli- planista, decorativo, sintetizado en el más puro
cación de lo que llamaba Ritmos voluptuosos concepto analítico y con plenos contactos con el
(título de uno de sus cuadros) que no son sino arte incásico, maya, egipcio”27.
el sistema de curvas en la figura humana, que
en los cuadros de grupo ofrecen extraordinarias Su magisterio artístico
posibilidades de composición y que logran una
perfecta complementación con el paisaje de Con respecto a su labor de profesor en las mate-
colinas que forman el anillo inmediato de la rias de Dibujo y Composición, Rigoberto Villa-
ciudad de La Paz”24. rroel describe a Cecilio Guzmán de Rojas como
un hombre de personalidad “absorbente” y “ava-
El paisaje andino: una fuente de inspiración salladora”. Su magisterio estuvo cargado de “en-
tusiasmo”, “dedicación” y su “contagioso afán de
Otro aspecto llamativo de la obra de Guzmán descubrir nuevos valores”. Pero sus enseñanzas
de Rojas es la explotación del paisaje andino. –según relata Villarroel– tuvieron un defecto,
Según Rigoberto Villarroel Claure, “el paisaje “propio de un hombre cuya actitud mesiánica se
juega una parte esencial e integrante de la corresponde con un fuero interno sumamente
paleta del artista: ya siente el ensueño del lago susceptible: no admite contradicción. Impone
secular crepusculado, en cuyo contorno alzan su su estilo como ley, y de eso resulta una escuela
silueta fantástica, ruinas solemnes que hablan guzmanrojista tan definida como limitada, y de
del acervo del pueblo milenario”25. El horizonte la que formaran parte Marina Núñez del Prado,
se complementa con la representación de per- Yolanda Bedregal, Hugo Almaraz, Félix Rojas
sonajes indígenas trazados “en un multicolor Ulloa, Arcadio Ortiz, Edmundo de Bejar, Félix
estallido de mantas y polleras, de lluchus y Edmundo Valdez, Rebeca de la Barra, Germán
ponchos. Hasta los cielos y las nubes participan Villazón”28. Todos ellos siguieron imitativamen-
te el estilo de los ritmos voluptuosos en la pintura
y escultura, forjando un arte estandarizado y
23 Rigoberto Villarroel Claure, «La pintura nueva de Bo- altamente idealista.
livia», en: (La Paz), 1972, SEPARATA, Arte y Arqueo-
logía N° 2, Revista del Instituto de Estudios Bolivianos,
Sección Arte, División de Extensión Universitaria, Uni- El legado del arte telúrico
versidad Mayor de San Andrés, pp. 5-19.
24 Carlos Salazar Mostajo, La pintura contemporánea de Bo- A casi un siglo de esta corriente artística, el es-
livia. Ensayo histórico-crítico, La Paz: Editorial Juventud pectador actual experimentará ante estas obras
1989, p. 66.
25 Rigoberto Villarroel Claure, Arte contemporáneo. Pinto- pictóricas un sentimiento de familiaridad con
res, escultores y grabadores bolivianos, Argentina: Impren- los Andes mezclado con éxtasis. Por un lado, re-
ta López, 1952, p. 23.- Cf. una visión general del arte conocerá fácilmente a los personajes retratados
boliviano fue divulgado en el exterior, Rigoberto Villa- y ubicará el entorno geográfico donde fueron
rroel Claure, Art In Latin America Today Bolivia, Pan
American Union, Washington, D. C., 1963, pp. 1-86; y
Rigoberto Villarroel Claure, «Introducción a la historia
boliviana del arte», en REVISTA MUNICIPAL DE 26 Ibíd., (nota 24), p. 69.
ARTE Y LETRAS KHANA (La Paz), Año XI, Vol. II, 27 Ibíd., (nota 7).
N° 39, 1967, pp. 167-206. 28 Ibíd., (nota 25), p. 70.

44 Revista Percontari
concebidos. Por otro lado, le producirá una sen- se había reflexionado en toda su intensidad la
sación fantástica del altiplano. Entre estos dos denominada filosofía telúrica. Hoy en día uno
polos se despliega las representaciones del arte puede apreciar este fascinante legado artístico
telúrico del artista Cecilio Guzmán de Rojas y revisualizar de la mano de Guzmán de Rojas
que pasa a ser así como la expresión de un idea- la temática indígena y ver sus diferentes direc-
rio político forjado en el paisaje y los personajes trices que fueron desembocando en el campo
autóctonos. Un mensaje precursor desde la fi- artístico, literario, histórico y filosófico.
losofía del arte en el instante en que todavía no

Revista Percontari 45
El espejo: el poder del arte
o el arte de poder
Delmar Apaza López

A veces en las tardes una cara nos mira desde el fondo de un espejo… el arte
debe ser como ese espejo que nos revela nuestra propia cara.
Jorge Luis Borges.

E xiste un hito por demás relevante en la


historia del pensamiento humano, y este
es inextricablemente influido por la idea de
Esa introspección caló hondo en algunos bus-
cadores de verdades eternas. Verbigracia, el pin-
tor Jan van Eyck en su célebre cuadro Retrato
la representación que tiene el individuo de sí de un hombre con turbante, pintura al óleo deta-
mismo. A lo largo de los años, diversas culturas lladamente expresada y que podría constituirse
de todo el orbe pretendieron establecer una en un logro enorme para dar relevancia al arte
forma de significar el mundo, ya sea a través como poder. En este caso, el poder de conquis-
de manchas desdibujadas en las paredes de tar nuestra propia auto-representación y llevarla
Altamira o en la capacidad hiper-tecnologizada a consideración de nuestros congéneres. Por eso
de contar con cámaras y pantallas de hasta 8k es que, de todas las manifestaciones humanas,
de definición. El tránsito de un hecho a otro se el arte no puede ser tomado como cualquiera
dio a través de un proceso de introspección en desde el punto de vista de creación, significado
busca de sentido, uno que tomó la búsqueda de o fin, puesto que, desde su primera acepción, el
representación a través de marfil tallado, grafías arte busca la estética, la comunicación de expre-
diseñadas en paredes cavernosas o el desarrollo siones que dimanen de ella o asciendan hacia
ella. Este solo motivo bastaría para reconocer
de la escultura como forma de imitar la vida
el poder del placer que ejerce sobre nosotros el
en un elemento estático que sea posible de ser
arte. Curiosamente, las generaciones cada vez
admirado y referenciado por los demás.
más amantes de la virtualidad y la vida tecno-
El arte entonces formó parte del imaginario lógica suelen considerar aburrido o caduco el
colectivo, del crecimiento espiritual de los gru- apreciar el arte o intentar comprenderlo.
pos humanos que expresaban en sus manifes- Es entonces la belleza una de las justifica-
taciones, denominadas artísticas, sus anhelos e ciones más que necesarias que no pasarán de
inquietudes. Se constituyó así el arte en un po- moda, o que en sí mismas son una forma de
der, una forma de imponer y recrear una cultura vida, porque es natural al ser humano la armo-
que se herede a través del tiempo. Piénsese en nía y afirmación de este tipo de verdad.
obras escritas y consagradas con la etiqueta de ¿Por qué verdad? Afirmo esto en mérito a que
arte literario en la obra de Homero, me refiero las expresiones artísticas nos ofrecen ejemplos
a la Ilíada y la Odisea, referencias obligatorias prototípicos, constructos idealizados en afirmar
para apreciar las formas de comprender las la belleza desde nosotros o vista en nuestra
relaciones humanas en un mundo pleno de percepción. Se configura el arte entonces como
simbología y pluralidad en medio de las viejas poder auténtico, ya que transmite evocadora-
pasiones humanas, circunscritas a la guerra y el mente una forma de ver nuestra realidad; es así
amor como motores de todo relato clásico. Ese que el arte es un poder ejercer en los demás una
poder heredado de obras clásicas en el origen sublimación del espíritu, de crecer en nosotros
de nuestra cultura fue pasando de la palabra y para los demás.
oral a la escrita, de la imaginación que teníamos Hay quienes, sin embargo, piensan que el arte
sobre nosotros a concretar la materialización como tal ha muerto. Tomemos como ejemplo
de la misma en obras dignas de ser recordadas, al filósofo y crítico de arte Arthur Danto, para
admiradas, pero, sobre todo, consideradas arte. quien asistimos ante una muerte del alma en el

46 Revista Percontari
ámbito cultural, basándose en la idea hegelia- La tercera y no menos revolucionaria trans-
na sobre la muerte del arte en el contexto de formación radica en el arte y la sustitución de
la estética. Tal como él mismo afirmó (2009): los criterios estéticos: en la música (serialiedad,
“Intento explicar, desde el punto de vista de la desarmonía); escultura (abstracción); literatura
historia del arte, por qué se fue la belleza y nun- (surrealismo, dadaísmo, expresionismo y futu-
ca más volvió”, “ya que tal parece hoy en día, que rismo) y, obviamente, en la pintura (cubismo,
la belleza es una opción, ya no una condición surrealismo). Existe una fuerza motora que
necesaria”. intenta verse como permisiva en todo sentido
Aun así, el poder del arte funda en su yux- (siendo etiquetada como postmoderna). De
taposición con la verdad su fuerza dentro de este modo, se busca una nueva verdad artística,
nuestra cultura, su naturaleza propia en pro de un nuevo credo que dirija caminos estéticos
explicar una y mil formas de ser nosotros. De inexplorados y, sobre todo, se expanda a partir
esta manera, por ejemplo, se entiende cómo el de la experimentación de nuevos formas de
poder económico que ostentaba el pueblo judío hacer arte.
antes de la Segunda Guerra Mundial recayó Filosóficamente, se va abandonando el código
en manos de los nazis a partir de la captura de mimético (imitación) anclado en la concepción
valiosas obras artísticas en manos de hombres platónica como forma de expresión artística; el
del Tercer Reich. nuevo arte busca representar lo invisible, la es-
tructura, la particularidad innata de la realidad.
El poder revolucionario del arte Es así que se da un salto cuántico del arte figu-
rativo al abstracto; siendo uno de los primeros
Si bien la estética fue un fin de verdad en el el siempre preciado Wasili Kandinsky, cuyas
periodo clásico greco-romano, entre el siglo XX obras, junto al cubismo de Picasso, se proyec-
y XXI se producen cambios paradigmáticos que taron a través de una forma compleja de ver y
pusieron en crisis la visión usual del mundo y representar la realidad.
la forma común de verlo en tiempos pretéritos. Esta insurrección en la comprensión del
Esos cambios se hallan inherentemente vincu- mundo recae en la búsqueda impertérrita del
lados con tres revoluciones culturales globales: ser humano de darse un refresco de nuevas
la teoría de la relatividad, el psicoanálisis y el experiencias, de mirar más allá, de transitar por
arte abstracto. nuevos parajes sensorialmente expresivos, pero,
En cuanto a la teoría de la relatividad, plan- por encima de todo, que encaren ese poder mu-
teada desde la genialidad imaginativa de Albert tador que posee el arte, ese dominio que se ma-
Einstein, terminó revolucionando la física nifieste en el catalizador de nuestra existencia.
clásica de Newton y Kepler, cuestionando la
concepción de causalidad, espacio y tiempo. El arte de poder
Así, se determinó un alejamiento más profundo
de la “visión común del mundo”. Dicha visión En Ulises y las sirenas, obra pictórica de John
transformadora del mundo será ahondada por William Waterhouse, se recrea uno de los mitos
Max Planck, con su teoría cuántica, y Werner griegos más famosos acerca de seres híbridos
Heinsenberg, con su concepto de relación de y mágicos como las sirenas, enfrentadas a la
indeterminación voluntad enfocada de un ser humano como
La segunda revolución empoderante se ciñó Ulises, dispuesto a todo con tal de cumplir con
al descubrimiento del inconsciente, a través del su cometido, retornar a su amada Ítaca y, por
trabajo del neurólogo y psiquiatra Sigmund ende, al lado de su familia. Pero llama nuestra
Freud. Esto se consiguió principalmente con su atención la comprensión que tenemos de los
teoría de la sexualidad, rompiendo con el tabú seres irreales, en nuestra contextualidad al me-
de la época victoriana, concentrándose en la nos, denominados sirenas; puesto que se trataría
energía sexual: la libido, más allá del intelecto y de entes similares a las ninfas que, dependiendo
la voluntad. Es entonces re-descubierta la for- de la versión del mito, eran tres, cinco o inclu-
ma en la que nos miramos nosotros; un nuevo so ocho; vivían en el mar, cerca de lo que es
espejo en el cual ver reflejadas nuestras ansias, Sicilia, asumiendo forma de ave en el sentido
deseos y acciones. corporal, y con rostro de mujer, por lo que no

Revista Percontari 47
tenían aletas, sino alas para poder volar, aunque, vo trazado a nivel humano, pues el conquistar o
posteriormente, se tomaron como seres con cola lograr una realización personal o colectiva será
de pez. considerado por pocos como éxito proveniente
Una de sus principales características era de un esfuerzo y un conocimiento aplicado a
su voz, ya que poseían una  inmensa dulzura una circunstancia, pero por muchos otros se
y musicalidad. Gracias a su don,  atraían a las tildará ese evento como suerte afirmada en un
embarcaciones con marineros a bordo; éstos individuo. Tomando en cuenta las palabras del
quedaban tan embelesados con tan bella mú- adagio popular atribuido a Aristóteles, Bismarck
sica que saltaban del barco para poder escuchar o Churchill, de que “la política es el arte de lo
mejor, pereciendo ahogados en las aguas. Sin posible”, éste reflejaría una acción materializada
embargo, para poder Ulises pasar indemne por en las decisiones que tomamos en torno al po-
la prueba de las sirenas y cumplir así el designio der, a cómo conquistarlo, reproducirlo o man-
de estos seres míticos –que consistía en que, si tenerlo. Es en sí una forma de hacernos saber
algún hombre era capaz de oírlas, pero no se cuánto de imaginativos, geniales y ocurrentes
sentía atraído por ellas, una tenía que morir–, podemos llegar a ser para conquistar un poder
nuestro héroe siguió el consejo de Circe y orde- político, un propósito electoral o simplemente
nó que todos los hombres de la nave se tapasen para ejercer un derecho ciudadano.
los oídos con cera para no escuchar el canto de Es entonces la política un arte, un reflejo vivo
las sirenas. Mientras esta operación se llevaba de la capacidad de expresar en los demás y para
a cabo, Ulises se ató al mástil del barco con los la colectividad, la mejor versión de nuestras
oídos descubiertos, sin cera alguna. Les ordenó posibilidades como conductores de ideas, como
que, viesen lo que viesen,  no le desataran del creadores de posibilidades o, simplemente,
mástil, por mucho que él suplicara. como una oportunidad de mostrar una razón
Cuando pasaron por la zona en que las sirenas innata en nosotros.
comenzaban con su canto, ninguno de los mari- Es así un espejo que refleja lo que es, al me-
neros sufrió daño alguno, ya que no escucharon nos figurativamente, pero que aun así no es lo
nada. No obstante, Ulises, hechizado por la bella reflejado en su integralidad, concluyendo que es
música, suplicó e imploró que le soltaran, pero la dualidad el símbolo de lo artístico, la que se
los marineros le hicieron caso omiso. Ulises expresa en su poder transformador y la que nace
pudo escuchar la música sin sufrir daño alguno. de su reflejo, y las formas que toma. Es el miedo
Ante el rechazo sufrido, las sirenas no tuvie- a no necesitar o buscar comprender esos reflejos
ron otro remedio que cumplir con su obligación los que deberían mortificarnos, así como cuando
y una de ellas debía morir. La escogida fue Par- no queremos saber nada de nosotros mismos.
ténope, que se lanzó al mar. Su cuerpo fue Tal vez como sugería el maestro Borges:
arrastrado hasta la costa, donde fue enterrada
con grandes honores, construyéndose también Dios ha creado las noches que se arman 
un pequeño templo en su honor alrededor el de sueños y las formas del espejo 
cual se fundó un pueblo, Parténope, que tiempo para que el hombre sienta que es reflejo 
después sería Nápoles.
y vanidad. Por eso nos alarman.
Esta historia no hace más que recordarnos el
factor volitivo como determinante en un objeti-

48 Revista Percontari
El arte: un disparo
que no genera dolor
Mario Javier Tobón Román

C oncebir el arte como una de las característi-


cas propias del ser humano no es en ningún
momento hacer una valoración antropológica
que no son otra cosa que dar opiniones sobre
lo que se admira, creando siempre una brecha
entre las épocas que no se puede justificar por
al acto de pensar, sino que, por el contrario, es tener solo el recurso último como criterio de
reconocer, en el hombre que piensa, el arte de verificación.
construir para su propia construcción. Por ello, Todo lo anterior ocurre cuando se hace una
hay que tener en cuenta que el hombre crea y observación del arte a través de la historia, pero
recrea con la intención lingüística de hacer que es necesario llegar a la reflexión en torno al arte
los demás comprendan lo que se quiere decir; en el mismo momento histórico, es decir: cómo
así mismo, se busca que con esta acción se eje- comprender la imagen religiosa de los primeros
cute un alto grado de interpretación que con- cristianos en su momento, la transición a las
cluye en el ejercicio de entenderse a la hora de épocas iconoclastas y la motivación nihilista de
manifestarse en el mundo temporal y espacial. la desaparición de las mismas en el mundo laico
Desde los primeros albores de las comunida- contemporáneo. Es que el hombre del siglo
des creadoras de culturas, hay en el arte un artifi- XXI no podrá entender el arte religioso desde
cio de producción de emociones, pensamientos las necesidades de los primeros cristianos; él
y trascendencias que se han dado en el hombre deberá ahondar en sus necesidades, en el ritmo
y que se convierten en motivo de comprensión que lleva el mundo y las preguntas que se hacen
para las siguientes generaciones: pintar objetos, en su época, pero tomando como criterio de
guerras, batallas, estereotipos, entre otros; no es verdad la valoración y la comprensión, sin llegar
más que la intención humana de la preservación al acto facilista de la eliminación, que es lo que
temporal de la esencia de los mismos. El arte en ocasiones ocurre.
primitivo no sale como un acto de ocio, pues no Para el cometido de esta propuesta, se en-
se realizaba por un acto de mera utilización del cuentra la obra de arte cuando deja el sentido
tiempo libre; tampoco es el resultado de la opre- de mostrar belleza que cómodamente lo puede
sión de las confrontaciones entre pueblos. Los hacer. Anteriormente, ya se había señalado
primeros vestigios artísticos son el resultado de la génesis de la obra de arte como medio de
la necesidad de hacerse entender por los otros, comunicación, y se ha querido llegar a la in-
quizás por encima del propio lenguaje, aunque, tención de demostrar en ella el medio para la
desde una perspectiva filosófica, sería imposible manifestación revolucionaria ante la opresión y
decir que el arte no sea una manifestación de ante lo que no se desea. El arte como manifes-
lo que se desea expresar que, posteriormente, tación de protesta es, además, la mejor manera
se convierta en una sistematización de códigos de mostrar lo que se siente y decir a otros que
llamado lenguaje. hay un alto grado de discriminación en los actos
La comprensión del arte en la humanidad humanos, que es necesario restituir y motivar
solo se da a través del tiempo; solo las futuras una verdadera reflexión en favor de la verdadera
generaciones han podido expresar por signos y intención humana, la humanización constante.
códigos lo que se quería manifestar en su mo- Parafraseando la filosofía del arte de Ortega y
mento por sus autores, de ahí la necesidad de la Gasset, lo que se busca es la humanización del
conservación de las obras como medio de cone- mismo, el que se ha perdido en la contempora-
xión entre el presente y el pasado. El error más neidad en el mismo instante en que se permite
frecuente es la interpretación de las obras con la apreciación subjetiva. Partiendo de esta pre-
los criterios de verdad propios de cada época, lo misa, lo que se busca en el arte como revolución
que permite criterios como la belleza y la feúra, no es crear perspectivas conflictivas, sino, por el

Revista Percontari 49
contrario, que lo que permita la manifestación obesidad, sino que da a los generosos en masa
sea la concertació: ya no se deben encontrar un espacio vital en el mundo de la belleza: pin-
la bipolaridad de opiniones, sino que el men- tar gordos es un protesta a los estereotipos de
saje no permita de ninguna manera diferentes normalidad y a los criterios de estabilidad física
acepciones, generando sentimientos de acción, del ser humano, incluso resulta ser muy efectivo
revisión, reparación y construcción de nuevas en la época en la que se rinde una valoración
acciones humanas. Así, resultaría posible la suprema a la figura humana.
recuperación de la humanidad al arte y, por qué Pero es necesario mostrar uno de los íconos
no, a las relaciones humanas. más significativos de este trabajo reflexivo, la
Para explicar con mejor detalle lo que se pre- antioqueña Débora Arango, quien, víctima de
tende demostrar, es necesario hacer un elenco la separación del arte y la cultura para la mujer
de autores que, con sus obras, han gritado a la en una sociedad reservada y machista, se lanza
humanidad su error. Algunos no fueron escu-
a exponer la belleza del cuerpo de la mujer por
chados y otros solo alcanzaron crear un poco de
encima de las adecuaciones culturales, de los
reflexión en minorías, tomando como base que,
criterios morales de la iglesia y de las oportuni-
en ocasiones, el mensaje motivó a las mismas
dades de igualdad que se tenían con respecto a
víctimas, dejando a los victimarios inocentes de
la reflexión. los hombres. Ella se expresó sin miedo, diciendo
a la sociedad que la mujer no es un objeto, sino
Frida Kahlo contó a la humanidad que su ser
un sujeto; así, devolvió valor al ser de las mismas
de mujer no alcanzó a ser reconocido por las
y tuvo la grandeza de mostrar en su obra son-
presiones del sistema. Sus pinturas dejan ver a
una mujer biológicamente creada, pero metafí- risas sin comedia, balas y sangres in violencia,
sicamente impotente, de ahí que se haya con- libertad sin barreras, expresiones del alma en las
vertido en el ícono de la revolución femenina en líneas de su pincel y revolución en la intensión
la contemporaneidad. de su ser.
Por su parte, Silvio Rodríguez y otros, desde Como conclusión, el arte es el arma que
Cuba, cantaron al gobierno ilegítimo que solo muchos han utilizado para disparar ilusiones,
causó guerras de orden político, demostrando para vengarse de los opresores y para respirar
el horror detrás del poder. Lo mismo ocurrió sin complicaciones en sociedades donde el falso
en Colombia con el dúo Ana y Jaime y, en la poder ha impedido que la libertad se pueda ex-
cultura gaucha, la misma Mercedes Sosa, por presar sin problemas y donde la felicidad se ha
enumerar algunos de los autores. convertido en ilusión. De esta manera, los artis-
En Colombia, además, hay dos grandes ejem- tas se han convertido, desde la filosofía, en los
plos para figurar lo que se pretende mostrar. guerreros que han armado su propio conflicto
En primer lugar, tenemos la acción inclusiva y en el que, de forma pacífica, dicen al mundo lo
global de Fernando Botero, que no ridiculiza la que sienten, aunque se hayan acallado sus voces.

50 Revista Percontari
El Popper conservador
Luis Christian Rivas Salazar

Yo no censuro a un artista o a un músico por intentar decir algo nuevo. Lo que real-
mente censuro a muchos de los músicos “modernos” es su incapacidad para amar la
gran música, a los grandes maestros y sus maravillosas obras, las más grandes tal vez
que el hombre haya producido.
Karl Popper, Búsqueda sin término.

1. Bosquejos, tonadas, cinceladas y pincela- Joseph Aydn, Wolfang Amadeus Mozart, Lud-
das del arte objetivo wig van Beethoven, Johannes Brahms, Arnold
Schoenberg, Gustav Mahler, Anton Bruckner,
En su tesis para obtener el grado académico de Antonio Saleri, Antonio Vivaldi, Cristobal
maestría, «Ideas sobre la música en la autobio- Gluck, Franz Schubert, entre otros3.
grafía de Karl Popper»1, el filósofo Lenin Falla La ciudad de Viena también albergó entre
Carrillo indaga sobre la concepción objetiva sus muros, durante el siglo XIX y principios del
de la música. A continuación, observaremos la siglo XX, a grandes pensadores como Ludwig
tesis de Falla y la vida de Popper para tratar de Wittgenstein, Rudolf Carnap y todo el Círculo
delimitar lo que puede considerarse arte; de la de Viena4; Carl Menger, F. A. Hayek, Ludwig
vivencia subjetiva, intentaremos llegar a lo obje-
tivo, acercándonos mediante el individualismo
metodológico a nuestro objetivo, por medio Beethoven, Brahms, Bruckner, Mahler y Mozart eran
de la noción de belleza, para terminar en una inmigrantes en Viena. Aquí considera a Schubert como
segunda parte, donde analizaremos lo feo como quizá el de mayor genio natural en Viena, y afirma que
esta Viena es comparable con la Atenas de Pericles (Cfr.
arte hoy en día. 163, 164).
Empecemos recordando que Karl Popper 3 En la Ética protestante y el espíritu del capitalismo, Max
nació en Viena en 1902, territorio del antiguo Weber nos dice que la música clásica es un producto ex-
clusivo de la civilización occidental: “Aparentemente, el
Sacro Imperio Romano Germánico, posterior- oído musical estuvo quizás más finamente desarrollado
mente del Imperio Austriaco, una ciudad que en otros pueblos que en el nuestro de la actualidad. En
fue considerada por muchos como la “Atenas todo caso, no fue menos sensible. La polifonía estuvo
de la Música”2, donde tocaron músicos como muy extendida por toda la tierra. Es posible encontrar la
cooperación de varios instrumentos y la división en com-
pases en otras partes. Todos nuestros intervalos tónicos
racionales se conocieron y se calcularon también en otros
1 Ricardo Lenin Alfredo Falla Carrillo, «Ideas sobre la lados. Pero una música racionalmente armónica –tanto el
música en la autobiografía de Karl Popper» (2015), tesis contrapunto como la armonía de acordes–, la construc-
para obtener el grado académico de Magíster en Filo- ción del material sonoro sobre la base de los tres trito-
sofía, Mención en Historia de la Filosofía, Universidad nos y la tercera armónica; nuestra cromática y nuestra
Nacional Mayor de San Marcos, Lima, Perú. armonización, entendidas desde el Renacimiento no en
2 En su libro En busca de un mundo mejor, Karl Popper tiene cuanto a distancias sino armónicamente y en forma ra-
un ensayo denominado «Sobre el choque cultural», en el cional; la orquesta actual con su correspondiente cuarteto
cual analiza cuánto bien hizo el choque cultural ocurrido de cuerdas como núcleo y su organización del conjunto
en el Mediterráneo, concretamente en la antigua Grecia, de instrumentos de viento; el bajo básico; el pentagrama
para bien de la civilización occidental. Esta conferencia la (que hace posible en absoluto tanto la composición y la
realizó para la Sociedad de Austriacos en el Extranjero. ejercitación de las obras musicales modernas como su
Al mismo tiempo, él se refiere a la Viena donde Ludwig conservación a través del tiempo); las sonatas, sinfonías y
Boltzmann y Ernst Mach no sólo fueron grandes físicos, óperas –a pesar de que siempre hubo música programá-
sino precursores de la filosofía de la ciencia y del Circulo tica y matizados, alteración de tonos y cromáticas como
de Viena. Habla igualmente de Josef Popper-Linkeus, medios de expresión en las más diversas músicas– y por
filósofo social fundador del moderno estado de bienes- último, como medios para todo lo anterior, nuestros ins-
tar, las “Universidades Populares”, el “Club de la Escuela trumentos fundamentales: el órgano, el piano, el violín
Libre”, semilla del movimiento de reforma escolar. Dice, - todo esto sólo ha existido en Occidente” (p. 2).
a manera de hipótesis, que esa vasta productividad cultu- 4 El Círculo de Viena estaba conformado por filósofos
ral se debe al choque cultural; la vieja Austria tenía una que abogaban por una concepción científica del mundo;
infinidad de minorías lingüísticas y culturales: Haydn, sus integrantes más destacados fueron: Moritz Schlick,

Revista Percontari 51
von Mises y la Escuela Austriaca de Economía5. mundo 2 y mundo 3, que tan importante papel
Fue un momento de esplendor que llega desde juega en la filosofía de mis años tardíos (p. 80).
el despotismo ilustrado. Cada familia de la bur- En Conocimiento objetivo, nos dirá que el mun-
guesía ilustrada vienesa participaba de los even- do 1 es el mundo físico, es el mundo de las cosas
tos culturales de música, debates, reflexiones, tangibles; el mundo 2, el mundo psicológico o
publicaciones, lecturas: la cultura general estaba de estados de la conciencia de las personas, en-
muy extendida y la expansión de conocimiento tre ambos mundos existe interacción; finalmen-
era casi general. Este ambiente tenía al joven te, está el mundo 3, el mundo de los sistemas
Popper muy activo para aprender. Karl conside- teóricos, problemas, situaciones problemáticas,
ró muy seriamente dedicarse a la música y fue hipótesis, y los más importantes habitantes de
miembro de la Sociedad para Conciertos Priva-
ese mundo son los argumentos críticos, plasma-
dos presidida por Arnold Schönberg. También
dos en el contenido de publicaciones periódicas,
fue admitido en el Departamento de Música
libros y bibliotecas, etc. Este mundo tres se in-
Religiosa del Conservatorio de Viena hacia
dependiza de sus portadores para conformar lo
1922. Sin embargo, posteriormente, continuó
que se llamará el conocimiento objetivo, donde las
sus estudios en matemáticas y psicología para
teorías e ideas luchan entre sí en una especie de
terminar en manos de la filosofía.
epistemología evolutiva para que sobrevivan las
Falla Carrillo describe todo este ambiente y ideas con más temple de verosimilitud, es decir,
nos cita extractos autobiográficos que nos lle- aquellas que se acerquen más a la verdad.
van a pensar por qué Popper se consideraba un
En su libro El cuerpo y la mente, Popper seña-
conservador en gustos musicales, así como por
lará que las sinfonías de los grandes creadores de
qué, para el filósofo de la ciencia, Schubert fue
la música como productos de la mente humana
el último gran músico, aunque Brahms y Bruc-
kner poseían “algún tipo de valor”, calificando la pertenecen al mundo 3 y son independientes de
obra de Wagner de ridícula. sus creadores:
Mediante la música llega a comprender que Ocurre algo similar con una sinfonía. La par-
el conocimiento es objetivo. Efectivamente, en titura de la sinfonía en sol menor de Mozart
su obra Conocimiento objetivo, planteará por pri- no es la sinfonía de Mozart, aunque representa
mera vez su teoría de los tres mundos, siguiendo la sinfonía de Mozart en forma codificada. Las
la tradición gnoseológica y realista de Platón, diversas interpretaciones de la sinfonía en sol
Hegel, Frege y Bolzano. En su autobiografía menor de Mozart tampoco son la sinfonía de
confesará: Mozart: guardan con la sinfonía una relación
de reproducciones. Estas interpretaciones perte-
Fue mi interés por la música lo que me llevó
necen simultáneamente tanto al mundo 1 como
a lo que entonces creía era un descubrimiento
intelectual de importancia secundaria… Este al mundo 3. Pero la sinfonía en sí pertenece al
descubrimiento tuvo gran influencia ulterior mundo 3: ese mundo 3 que comprende la ar-
en mi modo de pensar en filosofía y última- quitectura, el arte, la literatura, la música (p.
mente me condujo incluso a mi distinción entre 36 y 37).
Los productos de los seres humanos en el
Rudolf Carnap, Otto Neurath, Olga Hahn-Neura- mundo 3 tienen cierta independencia porque
th, Herbert Feigl, Philipp Frank, Friedrich Waismann, pueden ser reproducidos por otros. Se asemejan
Hans Hahn, Hans Reichenbach, Kurt Gödel, A. J. Ayer, a los diques construidos por los castores, o los
Charles Morris, Felix Kaufmann, Victor Kraft, Otto
Weininger, Carl Hempel y Karl Popper, a quien también panales construidos por las abejas, que dejan de
se considera el encargado de refutar la visión inductivista pertenecer a sus propios constructores para ser
de la investigación científica de este grupo. de otros; una vez construidos, siendo productos
5 La Escuela Austriaca es la institución teórica que ha
forjado los más grandes exponentes del liberalismo
terminados, pasan a tener existencia propia.
económico, capitalismo competitivo y el anarcocapita- Como el objetivo de la ciencia es la búsqueda
lismo; entre sus filas han estado: Carl Menger, Eugen de la verdad; de la ética, la búsqueda del bien; lo
von Böhm-Bawerk, Friedrich von Wieser; asimismo, mismo para el derecho, la búsqueda de la justi-
tenemos a Ludwig von Mises y su discípulo Friedrich
von Hayek, que han expandido su influencia por todo el cia; para el arte y la estética será la búsqueda de
mundo. la belleza, la belleza por la belleza.

52 Revista Percontari
¿Podemos tener parámetros de objetividad Beethoven imprimía su propia personalidad en
para medir la belleza? Sí, Popper diferenciará la sus composiciones: “Beethoven había hecho de
música en objetiva y subjetiva, aspecto que nos la música un instrumento de autoexpresión. En
sirve no sólo para diferenciar los tipos de temas su desesperación, éste pudo haber sido para él
musicales con mayor o menor valor; también el único modo de continuar viviendo” (p. 81)7.
podemos clasificar como objetiva y subjetiva Por otro lado, la música de Bach representa
toda representación y producto que se precie de para Popper la música objetiva por excelencia,
ser artístico. La idea de belleza en Platón era junto con los clásicos y barrocos, porque Bach
sinónimo de perfección, universalidad, armonía, y los demás autores componían por descubrir
etc.; en Popper, la idea de belleza estará situada y componer la música misma como fin, la bús-
en el mundo 3 y estará sometida a la crítica, por queda de la belleza por la belleza misma:
eso el artista no es completamente libre en el
momento de empezar y terminar su obra. Po- En una gran obra de arte, el artista no preten-
pper tomará como ejemplo a Beethoven para de imponer sus pequeñas ambiciones personales
examinar su libertad artística: sobre la obra, sino que las usa para servir a su
obra. En ese sentido, el artista puede desarro-
Así, nuestra libertad, y especialmente nuestra llarse, como persona, mediante la interacción
libertad de crear, están claramente limitadas con lo que él mismo hace. Por una suerte de
por las restricciones de los tres mundos. Si retroalimentación, puede ir ganando en habili-
Beethoven, por alguna desgracia, hubiera sido dades artesanales y las restantes facultades que
sordo de nacimiento, difícilmente hubiera po- hacen un artista (p. 84).
dido llegar a ser compositor. Como compositor,
Los artistas son personas que van puliendo lo
subordinó libremente su libertad a las restric-
que sus maestros les han enseñado hasta buscar
ciones estructurales del “mundo 3”. El “mundo
la perfección. Bach se olvida de sí en su obra,
3” autónomo fue el mundo en el que hizo sus
Bach es un sirviente de su propia obra; no deja
auténticos grandes descubrimientos, siendo
de imprimir su estilo y personalidad, es cierto,
libre de escoger su camino como un descubridor
pero no es consciente de esto, como lo era Bee-
del Himalaya, pero restringido por el camino
thoven, quien buscaba expresarse, mostrando
escogido hasta el momento y por las restriccio-
sus diferentes humores en su obra. Por eso Po-
nes del mundo que iba descubriendo (Popper
pper veía en ambos músicos actitudes opuestas
1994, p. 150).
con respecto a sus obras8.
Afirmamos que ningún científico empieza sus
investigaciones de la nada. Nadie sale a reco-
lectar datos así por así; previamente, hay una latinamente de los cánones tradicionales, tratando de
situación problematizadora y un marco teórico enfatizar el elemento personal y subjetivo en sus compo-
que nos permite conjeturar; así empieza la in- siciones. Los contrastes sonoros, los cambios abruptos de
vestigación científica. Ahora bien, Beethoven, intensidad, el avivamiento de los tiempos y la ralentiza-
ción de los mismos, se fueron acentuando en la medida
deviniendo sordo, ya conocía de antemano que se acercaba a su muerte… una experiencia de inno-
las reglas para componer en base a un marco vación sonora que no ha tenido parangón en la historia
común de conocimiento musical; partiendo del de la música” (Fubini: 1990).
mundo 3, pudo crear y terminar su obra. Enton- 7 Si bien, en su autobiografía, Popper pone como ejemplo
de música subjetiva la obra de Beethoven, no porque sea
ces, la música y el arte, en general, forman parte mala, sino porque el subjetivismo resta valor a la música,
del mundo 3, tienen una existencia objetiva y en su libro posterior, En busca de un mundo mejor, den-
parcialmente autónoma; los músicos manipulan tro de su ensayo «La autocrítica creativa en la ciencia y
el sonido, mundo 1, con las reglas del mundo 3: arte (Robado de los borradores de Beethoven)», rescatará
la obra de Beethoven, calificándola de optimista y cuida-
ese es el lenguaje musical. dosamente corregida, como veremos más adelante. Pero
Pero la música dejará de ser subjetiva mien- Beethoven, con todo su sufrimiento, era un optimista que
tras más se aleje del mundo 2, el mundo sub- terminaba sus obras con un espíritu de calma, como la
Missa Solemnis, y alegría en sus sinfonías, como en el Fi-
jetivo y psicológico. La música de Beethoven delio.
será el ejemplo de música subjetiva , porque 8 Popper veía a Einstein autocritico con sus teorías cientí-
6

ficas, pero, en contraposición, estaban Marx y Freud, con


una actitud dogmática, actitud científica frente a una ac-
6 ¿Por qué Beethoven?: “Beethoven fue liberándose pau- titud pseudocientífica.

Revista Percontari 53
Debemos decir que Bach veía en su obra in- también se verá alentado a usar sus propias
cluso aspectos trascendentales9, ya que, al final ideas musicales y entrenado para poder ela-
de cada partitura, colocaba constantemente la borarlas de manera clara y diestra. No hay
frase: “Soli Deo Gloria”; dedicaba su obra a la duda de que sus ideas pueden ser desarrolladas.
gloria de Dios10, como los más grandes pintores Mediante su trabajo, el músico puede, como el
y escultores, quienes se desligaban de sí mismos científico, aprender por ensayo y error. Y con el
para entregar sus obras a ideales religiosos. crecimiento de su obra, pueden también crecer
Como la palabra dios por definición es la per- su criterio y gustos musicales –y tal vez incluso
fección, las obras de estos artistas se acercaban su imaginación creadora–. Pero este crecimien-
al ideal máximo de belleza11. to dependerá de su esfuerzo, de su industria, de
Popper incluirá en el trabajo del artista obje- su dedicación al trabajo; de su sensibilidad para
tivo el constante sacrificio de búsqueda, crítica la obra de otros y de su autocrítica. Habrá un
y autocrítica: constante dar y tomar entre el artista y su obra,
más bien que de un dar unilateral –una mera
El músico va a cultivarse, por así decirlo, en expresión de su personalidad en la obra (p. 86).
el taller de Bach. Aprende una disciplina, pero
Popper no puede aceptar el arte como una
mera expresión de la persona, que el arte sea
9 Estos grandes artistas tienen composiciones sagradas y una mera sensibilidad al “espíritu de la época”,
litúrgicas que han influido en la expansión del cristianis-
mo, basta mencionar cómo el estilo barroco se presenta
al “espíritu del pueblo”, expresiones subjetivas
en la misiones jesuíticas. que condicionan al autor. El arte será bello en
10 No sólo lo artistas consagraban su obra; algunos cientí- cualquier tiempo y espacio, la belleza como un
ficos hacían lo mismo. El mismo Popper nos hace notar asunto universal; entonces, el expresionismo le
cómo Kleper encontraba armonía en la creación, y ter-
mina el ensayo nombrado en la nota 7 con una hermosa
será vacío, sin aporte. Afirmó al respecto:
cita que dice: “Señoras y señores, deseo terminar con una Mi principal crítica de esta teoría es simple: la
cita de uno de los mayores científicos, Johannes Kepler,
el gran cosmólogo y astrónomo que murió en 1630, doce teoría expresionista del arte es vacía. Porque
años después que se iniciara la guerra de los Treinta Años. todo lo que un hombre o un animal puede hacer
En esta cita, Kepler toma como punto de partida su teo- es (entre otras cosas) expresión de un estado
ría del movimiento de los cuerpos celestes, y lo compara interno, de emociones, y de una personalidad.
con la música, especialmente con la música divina de las
esferas. Pero casi sin quererlo, Kepler concluye con un Esto es trivialmente verdadero para todo tipo
elogio a la música creada por el hombre, a la música poli- de lenguaje humano y animal. Es válido para
fónica que era por entonces un descubrimiento bastante el modo en que un hombre o un león andan,
reciente, Kepler escribe: ‘Así los movimientos celestes no para el modo en que un hombre tose o se sue-
son más que una suerte de concierto perenne, racional
más que audible o vocal. Se mueven por la tensión de na, para el modo en que un hombre o un león
disonancias que son como síncopas o suspensos con sus pueden mirarte, o ignorarte. Es aplicable a la
resoluciones (por las cuales los hombres imitan las co- manera en que un pájaro construye su nido,
rrespondientes disonancias de la naturaleza), llegando a la araña fabrica su tela, y un hombre edifica
cierres seguros y predeterminados, cada uno de los cua-
les consta de seis términos igual que un coro compues- su casa. Dicho en otras palabras, no se trata
to por seis voces . Y mediante estas marcas distinguen y de una característica del arte. Por la misma
articulan la inmensidad del tiempo. No hay así maravilla razón, las teorías expresionistas o emotivas
mayor o sublime que las reglas de cantar en armonía jun- del lenguaje son triviales, no informativas e
tos en varias partes, algo desconocido para los antiguos y
finalmente descubierto por el hombre, la imagen de su inútiles (p. 83).
Creador; de tal modo que, mediante la cuidada sinfonía Wagner imprimió en su obra la expresión de
de muchas voces, puede representar en un fragmento de
hora la visión de la perpetuidad total del mundo en el
un pueblo, música subjetiva, que tiene menor
tiempo; y que, en el dulce sentido de la dicha alcanza- valor que la música objetiva. Popper ya atisbaba
da mediante la música, el eco de Dios, pueda alcanzar el la decadencia del arte contemporáneo al con-
contento que Dios el Creador tiene en sus propias obras” vertirse cada vez más subjetiva: “Siempre fui
(Cita de Joannis Keppleri, Harmonices Mundi, Lib. V, fi-
nal del Capit. VII).
conservador en el campo de la música”12. Los
11 Como ejemplo de algunos grandes pintores inspirados
en la religión tenemos a Boticelli, Leonardo, Caravaggio,
El Bosco, El Greco, Rembrandt, Rubens, Rafael, Tiziano, 12 Sobre su postura de sano conservadurismo en lo cultural,
Velázquez, Pérez de Olguín, Durero, Goya, etc.; entre los los últimos trabajos se refieren a la televisión. En el libro
escultores: Donatello, Erhart, Miguel Angel, Bernini, etc. de entrevistas Popper. La lección de este siglo (1992), está

54 Revista Percontari
artistas vanguardista no convencían a Popper, espíritu del tiempo, sino que de hecho está de-
quien amaba la música clásica y los composito- lante del tiempo; un líder que normalmente es
res de la época de oro, pero los contemporáneos mal entendido por sus contemporáneos, salvo
han tomado como ejemplo a Beethoven en vez por unos pocos expertos avanzados” (p. 93).
de Bach, creyéndose genios incomprendidos o El progresismo ha provocado la involución
artistas adelantados en su tiempo. y decadencia de la música; los artistas aban-
Falla Carrillo menciona que con Beethoven donaron la disciplina y los criterios formales,
empieza una larga tradición romántica, música racionales, críticos, para abrazar consideracio-
subjetiva: Berlioz, Mendelssohn, Liszt, Chopin, nes ideológicas14, una ambición desmedida por
Schumann, Wagner, Franck, Fauré, Brahms, proyectar el “arte del futuro”, abandonando a los
Dvorák y termina con Mahler, Rachmaninov, grandes maestros del pasado. No hay retroali-
Strauss, entre otros, a inicios del siglo XX. mentación, no se parte de parámetros forjados
Desde el romanticismo hasta hoy, no podemos con sacrificio; se despreció la herencia y legado
negar que los diferentes géneros musicales han de la tradición artística clásica.
disminuido su intensidad en complejidad y be- ¿Entonces, cual es la propuesta popperiana?
lleza, perdiendo valor en varios sentidos. En su libro En busca de un mundo mejor, dirá
Muchos que se hacen llamar artistas hoy en que la respuesta es la autocrítica creativa en la
día solo expresan sus estados mentales cotidia- ciencia y en el arte. Los más grandes artistas
nos, relajan los criterios formales de creación, han empleado la expresión “el arte por la obra
buscan romper esquemas, dejando el ideal de de arte”; lo mismo puede decirse de los más
la belleza; se alejan de la racionalidad, buen grandes científicos, buscar la verdad por la
gusto, crítica y autocrítica, para autoafirmarse. verdad. Dirá Popper, como primera hipótesis,
La música se convierte en un medio para sí que la poesía y la ciencia tienen sus bases sobre
mismo, en vez que sea el fin, dejando de lado la el mito; como segunda hipótesis, habrá critica
tradición: “Así, la invención de la polifonía, del con intereses estéticos y literarios y existirá la
aria, del recitativo, del contrapunto, de la forma crítica con intereses racionales: el primero nos
de la sonata, etc., y otras formas, son producto conduce al mito de la poesía y el segundo, al
de la interacción entre el músico y la tradición” mito de la ciencia; el primero evalúa la belleza,
(Popper: 1994). ritmo, fuerza, tensión, imágenes, poesía épica y
El paso de lo rudimentario a lo complejo fue la dramática que nos lleva a la música, esa fuerza
evolución, ahora se involuciona para hacer pro- creadora requiere de mucho esfuerzo. “Todo
ductos enlatados simples. La retroalimentación artista ha de aprender su arte, incluso un in-
entre sujeto artista – objeto de arte se descuida. creíble genio como Mozart”, todo artista tiene
Lo pasado y presente se rompe para imponer su maestro15; los artistas aprenden de su propia
lo progresista, supuestamente empezar desde
cero, rompiendo parámetros. Wagner introdujo 14 El marxismo cultural inunda no solo las aulas de las
el parámetro de progreso historicista; Popper universidades, sino también teatros, conciertos, mues-
acusa a Wagner13 porque “fomentó también tras de pintura, recitales, revistas, libros, portales digita-
les, medios de comunicación, donde existe victimismo y
la casi histérica y acríticamente idea de genio sentimiento de opresión. Hay una ambición desmedida
incomprendido: el genio que no sólo expresa el por destruir la civilización occidental y sus bases. Sean la
ética judeocristiana, el lenguaje, derecho, ciencia, tecno-
logía, familia, empresas y el incomprendido capitalismo
presente un título muy sugestivo: «La televisión corrom- competitivo, se levantarán feministas y progresistas de
pe a la humanidad. Es como la guerra», donde explica todo pelaje para convencer mediante el arte, imponer la
cómo la televisión muestra la violencia sin límites como corrección política y el socialismo socapado. Si bien se ha
si fuera normal, el peligro de que los niños crezcan en demostrado la importancia de la libertad política y liber-
ese ambiente y el poder ilimitado de los medios de co- tad económica en el mundo, en el aspecto cultural hemos
municación. Aboga por una autorregulación por el bien perdido: afuera, en las calles, tenemos millones de artistas
de la sociedad abierta. Esta posición, hoy en día, frente anticapitalistas que venden muy bien sus ideas.
a la arremetida de Internet, hubiera tenido a Karl muy 15 La película Star Wars VIII. The Last Jedi (Disney, 2017)
preocupado. decepcionó a los tradicionales fans de esta saga. Las me-
13 Aquí debemos incluir a Friedrich Nietzsche y sus se- jores críticas llegaban de las manos de Robert Barron,
guidores, personajes que son vistos como genios incom- quien lamentó que exista un cambio sustancial con res-
prendidos, espíritus rebeldes, iconoclastas, forjadores del pecto a las anteriores películas producidas por George
martillo. Lucas. La base filosófica de la película fue cambiada: el

Revista Percontari 55
obra. En este ensayo, Popper nos dirá que en los 2. Lo feo como arte
borradores de Beethoven encontró la autocríti-
ca creativa, la constante reconsideración de sus Personas desnudas gateando en círculo, cada
ideas, y las correcciones implacables que realizó uno con la cabeza en el trasero del que está ade-
en estas, desde que empezó a componer hasta lante, girando y girando, simulando un ciempiés.
sus últimas obras: ensayo y error, planear, esbo- Personas desnudas corriendo circularmente con
zar, corregir, buscar la perfección (Cfr. 1992, p. sus dedos metidos en los culos de los demás,
283-294). simulando un carrusel. Mujeres orinando sobre
Como vemos, Popper reconsidera la obra de hombres pintados de negro. Pintores cagando
Beethoven: si en su autobiografía intelectual lo pintura sobre lienzos. Telas oscuras con una
tiene como ejemplo de música subjetiva, luego, línea blanca al centro en habitaciones vacías.
cuando se encuentra con los borradores de Bee- Perro amarrado en la sala durante toda la expo-
thoven16, se da cuenta que esa obra tiene una sición sin probar agua y alimento. Yoko Hono
incansable y constante autocorrección. ¿Quita gritando como una demente. Cacas y bostas
fuerza este descubrimiento a lo mencionado con micrófonos para amplificar el sonido de las
sobre la música subjetiva? Consideramos que moscas. Botellones de agua pintados con toda
no, pues la obra de arte que tiene características clase de colores y ordenados de manera indis-
subjetivas gana objetividad y valor mientras más tinta. Tazas de baño colgadas en las paredes. Di-
esté sometida a la autocrítica y crítica. ferentes papeles higiénicos usados con materia
fecal como formando un lienzo en un bastidor.
Todo esto viene siendo presentado, expuesto en
galerías de artes y estudiado “seriamente” en las
facultades de arte de las distintas universidades.
relato del héroe joven que sale de la comodidad de su
zona de confort para enfrentase al mal y salvar la huma-
Los expertos llaman arte moderno o concep-
nidad con el lema “que la fuerza te acompañe”, “que Dios tual a estas manifestaciones extremadamente
te acompañe”, ahora es políticamente incorrecta. Así, en- subjetivas, herederas del dadaísmo, que fue
tenderíamos que se pueden quemar templos y sus libros una reacción al “arte burgués”: es el anti-arte.
sagrados, correspondiendo quemar las bibliotecas, pues
la sabiduría no está en los libros, quemando la sabiduría
Quienes siguen esta corriente se presentan
de los padres y los abuelos, porque el conocimiento está como pretenciosos sofisticados que interpretan
dentro de uno mismo, dicen. Antes, los Jedi como Luke correctamente un montón de manchas en los
y Anakin necesitaban mucho entrenamiento y seguían a lienzos que los demás no logran entender; en-
sus maestros como si fueran discípulos de un sacerdote
entregado a su fe. Yoda entrenó 900 años para ser maes-
tonces, aparentan ser profundos e iconoclastas,
tro. Los maestros eran respetados por su experiencia y co- dan sentido al sin sentido; mientras los demás
nocimientos; sin embargo, en esa película, la muchachita siguen en lo convencional, aburrido, burgués,
Rey termina siendo más poderosa que sus antecesores heteropatriarcal, imperialista y capitalista.
en cinco minutos, ¿cómo? Esto es posmodernismo puro,
relativismo, New Age, pues cabe sólo inventar la propia Estos “artistas” son los marxistas del arte que,
espiritualidad: cada uno tiene la verdad; así, la fuerza es desde la cultura, buscan atacar las instituciones
subjetiva, la verdad es subjetiva; solo utiliza y necesitas tu burguesas y capitalistas tradicionales, insti-
propia intuición, no necesitas maestros ni libros, ¡tremen-
da irracionalidad! Según George Lucas, toda esta saga
tuciones de la civilización occidental, que son
estaba inspirada en la filosofía perenne explicada por el intermedias entre el individuo y el Estado: la
psicólogo Carl Jung, la misma que dice que el alma hu- familia, iglesia, empresas, escuelas, lenguaje, etc.
mana tiene valores jerárquicos, crecimiento humano en La larga marcha gramsciana tiene que destruir
base a valores religiosos, la misión del héroe frente al mal.
Todo esto fue desechado por Disney, según los nuevos
estas y, en su arrogancia, construir las nuevas
vientos posmodernos. instituciones socialistas, lo que llamamos mar-
16 En su autobiografía intelectual, Búsqueda sin término, pu- xismo cultural.
blicada en 1976, como vimos, Beethoven es considerado
como ejemplo de música subjetiva; posteriormente, fue
El femimarxismo, como marxismo trasno-
publicado el libro En busca de un mundo mejor, donde a chado, dice que el hombre es el opresor y la
Beethoven se presenta como ejemplo de optimismo y mujer es la oprimida. Por eso tratan de eliminar
autocorrección. Encontré esta aparente contradicción los estándares de belleza no solo de concursos
escribiendo el presente ensayo, que Lenin Falla Carrillo
no menciona en su tesis nombrada en la nota 1. Falla
de belleza, que representarían para ellas la
Carrillo no tiene en su biografía el libro En busca de un cosificación de la mujer, por la desnudez, sino
mundo mejor. que también critican, con una mojigatería

56 Revista Percontari
contemporánea, las faldas cortas y los escotes Frente a esa postura, tenemos el arte objetivo,
cosificadores, prohibiendo que existan modelos basado en el alejamiento de lo subjetivo, en
en carreras de vehículos. Mientras marchan con la autocrítica creativa en el arte, ensayo-error,
los torsos desnudos y defecan en las iglesias, su búsqueda interminable de la belleza, perfeccio-
moda y apariencia resalta la fealdad e imponen namiento mediante la enseñanza de los grandes
sus patrones en los demás, veamos a la Miss maestros y la tradición conservadora clásica en
Helsinki 201717. el arte y la cultura.
Entonces, vemos exposiciones como Canon.
Virgen de la puerta, donde transexuales peruanos Bibliografía
se ponen coronas y capas para simular pinturas
religiosas como la Virgen de la leche y Santa Rosa Falla Carrillo, Ricardo Lenin Alfredo
2015. «Ideas sobre la música en la autobiografía de Karl
de Lima; así, atacan al cristianismo que resulta Popper», tesis para obtener el grado académico de
ser un pilar fundamental en la construcción de Magíster en Filosofía, Mención en Historia de la Fi-
la civilización occidental. Gracias a esas bases, losofía, Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
hoy pueden burlarse de lo religioso, porque esa Popper, Karl
sociedad libre y tolerante no se repite en otros 1992. En busca de un mundo mejor, Paidós, Barcelona.
países de la civilización oriental; atacan al cris- 1992. Popper. La lección de este siglo, entrevistado por Gian-
carlo Bosetti. Temas. Bs.As.
tianismo, pero no se atreven a blasfemar contra
1994. Búsqueda sin término. Autobiografía intelectual. Tec-
Alá, Shiva, Pachamama, Indra, Budha, Brahma, nos. Madrid.
Huitzilopochtli, Quetzalcóatl, etc., algunas de 1997. El cuerpo y la mente. Paidós. Barcelona.
estas deidades con más fieles en el mundo. Se 2006. Conocimiento objetivo. Un enfoque evolucionista. Tec-
comprende entonces su fijación irracional por el nos. Madrid.
cristianismo y su cobardía frente a los demás; al Weber, Max
Islam, por ejemplo. Veamos el ataque de Charlie 1988. Ética protestante y el espíritu del capitalismo. Hyspa-
merica. Weber.
Hebdo como una forma de violencia dentro de
una sociedad fundada en el cristianismo, un lu-
gar donde se puede insultar, ofender, blasfemar
sin perder la vida.

Conclusiones preliminares

Los grandes maestros buscaron plasmar en sus


obras la belleza, armonía, profundidad e inspira-
ción, para encontrar la perfección, tratar y tratar,
esforzarse en mejorar la técnica y conocimiento
de sus antecesores. Hoy en día, sin ánimo de
generalizar, los que se hacen llamar “artistas” y
los “artistas de la performance” han cambiado
los antiguos parámetros por lo feo, novedoso,
futurista, iconoclasta, diferente, impresionan-
te; han caído, y con ellos los demás, en el arte
subjetivo, para llamar “arte” a cualquier cosa que
sea ofensiva, grosera, vulgar y escatológica para
provocar, ofender, impresionar y hacer pasar por
profunda cualquier cosa.

17 La elección de Miss Universo 2018 fue afectada por la


polémica cuando un hombre transexual ganó como la
mujer más bella de España. Es el mismo caso del repre-
sentante de Mongolia. Es decir, por motivos de la ideo-
logía de género, se deja el parámetro de la belleza para
buscar impresionar y adoctrinar, romper ideales.

Revista Percontari 57
Ante el Ángel de
las Elegías

Emilio Martínez Cardona

E s harto conocida la distinción entre lo bello y lo sublime, es-


tablecida por Immanuel Kant en su Crítica del juicio, tercer
gran libro de su corpus y dedicado a la estética, a diferencia de la
Crítica de la razón pura (epistemología) y de la Crítica de la razón
práctica (ética).
Lo bello sería lo clara y armónicamente delimitado, lo agradable,
contrapuesto a la ilimitación terrible y grandiosa que sentimos,
por ejemplo, ante la contemplación de un océano embravecido,
donde nos encontramos frente a la manifestación de lo sublime.
No es menos divulgado el tratado de Edmund Burke, Indaga-
ción filosófica sobre el origen de nuestras ideas acerca de lo sublime y de
lo bello, donde continúa al pensador de Königsberg, asimilando las
categorías en pugna a la sensibilidad clásica y a la romántica.
Un tercer momento menos conocido de esta filosofía del arte se
puede encontrar en las Elegías de Duino de Rainer Maria Rilke,
donde se dice que “la belleza no es nada sino el principio de lo
terrible, lo que somos apenas capaces de soportar, lo que sólo ad-
miramos porque serenamente desdeña destrozarnos. Todo ángel
es terrible”.
El poeta concibe las operaciones del arte como un viaje de lo
tangible a lo intangible, como una interiorización, que hace per-
durable a lo sensible en un orbe elegíaco. Es la “obra del corazón”
(Herzwerk) como razón de ser del hombre: interiorizar las cosas
para que pervivan, llevarlas del precario mundo externo a un es-
pacio interior ilimitado.
Martin Heidegger decía, respecto a esto, que Lo-Abierto en
Rilke es el ámbito donde se produce la “completa percepción”.
Agregaremos: el secreto de la epifanía es su invisibilidad, ya
que exige para hacerse observable de una especial disposición del
espíritu. Lo arcano necesita la llave hermenéutica de la sutileza.
“¿Quién, si yo gritase, me oiría desde los coros celestiales?”, se
preguntaba Rilke al comienzo del proceso de composición de su
libro, para responderse más adelante que “el Ángel de las Elegías
es aquella criatura en que aparece ya cumplida la transformación
de lo visible en invisible, que nosotros realizamos”.
En otra de sus obras, Sonetos a Orfeo, dictaminaba que “tan sólo
el poema sobre la tierra consagra y glorifica”.
Transportar lo material determinado a lo trascendental indeter-
minado sigue siendo el eje de ese programa estético que eslabona
los nombres de Kant, Burke, Rilke y Heidegger, que incluso los
cultores de lo efímero cumplen sin notarlo.

58 Revista Percontari
El antepenúltimo
andén

Roberto Barbery Anaya

…otra coincidencia mayor entre Filosofía


y Psicología: el arte como recurso de com-
pensación para un individuo singular que
padece las limitaciones culturales de su
entorno. Es la fuga de los existencialistas o
la sublimación de los freudianos. Se trata de
revestir de sentido a la vida, refugiándose en
las letras, la pintura, la música…

A veces la magia no alcanza, como en


aquella noche definitiva de Hemingway…

Nótese que, para Freud, la “salida” en la


forma de Hemingway, es ceder a la pulsión
de retorno a la nada, inmóvil, a la nada
original, en efecto… Desde esa perspectiva,
el arte sería algo así como el antepenúltimo
andén de vida; la forma creativa que nos
separa de la indiferencia, ya casi exánime,
y, al final, de la agresión contra los demás y
contra nosotros mismos…

Pero también hay un modelo distinto de


artista. Camus lo resume así: “Se trata de
morir irreconciliado y no de buena gana” (y
así se fue…).

Yo creo en esos héroes que son capaces de


llevar un mundo singular en los hombros y
detenerse a escuchar una canción.

Y hasta dos.

Revista Percontari 59
Mímesis y poiesis
P. A. F. Jiménez

T enía la forma de una serpiente gigante.


Estaba en el cielo: eran millones de almas
que conducían sus caballos alados, tratando de
ardua. No sólo debían luchar contra su caballo
negro, sino contra los de los demás. El primero
en subir había escalado, como pudo, el camino
alzarse sobre las nubes irradiadas por Apolo. de la Verdad. Estaba perplejo ante tal escenario.
Todas danzaban en dirección a aquél lugar, –¿Quiénes son ustedes? –inquirió aquel alma,
donde las almas más avezadas tenían extensas aún cegada por el sol.
alas de vívidos colores, con plumas suaves pero –Somos Guardianes del cielo. Siervos del
fuertes. Su alimento, pues, era de origen divino. Ser2, como todos –respondió Paulo. Luego de
Cada alma era jalada sin esfuerzo alguno, por ver su alma por unos segundos, añadió con pre-
dos caballos blancos; juntas, eran llevadas por ocupación–: El que parece no saber quién es,
lo alto sobre aquellas nubes de oro. Yacían en eres tú.
directa contemplación del Ser. –Mi nombre es Abasi, hijo del maestro de la
Esos ángeles eran pocos. La mayoría de las al- sospecha, Dion –respondió inmediatamente–.
mas traía sus alas rotas, sucias o quemadas. Estas ¿Por qué me impiden el paso, amables Guardia-
eran llevadas por la inercia de los caprichos de nes? ¿Qué traigo yo que pueda ser una amenaza
sus caballos: los más rebeldes, los negros, jala- frente a tan portentosa fuerza universal?
ban hacia abajo. Y reunidos todos, tratando de –Guarda tus palabras melosas, extraño. Si-
sobrepasarse el uno al otro, formaban una masa gues sin decirnos quién eres y por qué estás
atiborrada que ensuciaba el cielo. Éstas no veían aquí. ¡Muéstrate de una vez! –dijo Paulo, algo
al Ser que todas perseguían. molesto. A lo que Ademes añadió:
Y como no podía ser de otra manera, había –Tu ceguera no es más que el camuflaje de
almas intermedias. Con un caballo blanco y tu miedo: no quieres ser visto, por eso no ves.
otro negro. Estas criaturas particulares, mitad Quítate el velo de tus ojos y podrás ver al Ser
dioses, mitad animales, conformaban el cintu- que todos quieren ver.
rón medio de la serpiente. Incluso alguno de
–Yo… No sé cómo hacerlo –confesó.
ellos llegó a pensar que su virtud consistía en
quedarse en ese punto medio. Sin embargo, –Habrá que ir a tu medio para entenderte
algunas de ellas se elevaban, porque lograron entonces –dijo Numa, abrazando al neófito.
dominar su caballo negro, con látigos y caricias.
El blanco, apoyado con las alas de estas almas, I. Nihilismo, estética y selección natural: Abasi
lograba dirigir el carruaje por encima del flujo
medio. Pero otros, enmohecidos de ego y de ilu- –Soy un estudioso de la materia, un devora-
sión, caían a la Tierra y, adheridos a un cuerpo, dor de libros, buscador de la verdad –comenzó
continuaban su peregrinación1. Abasi, cual si estuviese en una entrevista. Todos
se encontraban sentados en una taberna, be-
En esta marcha cósmica se encontraban
biendo.
Paulo, Numa y Admes. Dispersos por sobre el
cinturón medio de la humanidad, vigilaban a –¿Qué esconde tu alma, buen hombre? –in-
quienes lograban subir. Sólo podían dejar pasar sistió Paulo, apartando su vaso.
caballos blancos. Muchas veces, incluso, estos –Yo, yo no tengo alma. No que yo sepa –res-
caballos se volvían negros al mínimo toque de la pondió poco convencido Abasi.
luz de Apolo. La tarea de estos tres iniciados era –¿El camino de la verdad te ha traído aquí sin
haberte enfrentado primero a la más vital de las
preguntas? ¿Cómo lo has recorrido sin saber la
1 Este escenario fue construido sobre el mito narrado en
el Fedro (Platón, 247a y ss.), porque esta es la visión de
Paulo. 2 El Ser, el Todo, el Numen, Dios, todos son iguales.

60 Revista Percontari
verdad sobre ti mismo?3 –preguntó sorprendido –Dejando de lado que lo sagrado no es esen-
Paulo. cialmente doctrinal, díganos, ¿qué descubrió?
–¡Yo sé quién soy! Y no me haría problema en ¿Cuál fue su aporte a la humanidad, buen hom-
que ustedes tuviesen las creencias que quisiesen, bre? –intervino Numa.
si no estuviesen increpándome por las mías. –Llegué a la conclusión que “toda teoría cien-
¿Debo admitir que tengo alma para pasar? tífica no es más que una fórmula de superviven-
Dado que había sido, justamente, su alma la cia”7. Y más aún, querer saber sobre la Verdad o
que ascendió hasta las nubes doradas, los tres la Realidad de las cosas es querer saber más de
filósofos-guardianes quedaron confundidos. la cuenta8.
Paulo vio que lo mejor era llevar las cosas con –Ciertamente, aquello contradeciría el “res-
calma, paso a paso. peto que la fe profesa al esencial Misterio de
–¿Por dónde partiste tu investigación del Dios”9. Lo inefable escapa a la razón humana,
mundo? –preguntó. potencial elemento de ilusión –sentenció Ad-
–Por la naturaleza, por supuesto. mes, dándole la razón.
–Es un buen lugar, tanto para comenzar como «Lo inefable es otra opción decorativa de la
para terminar –comentó Numa. realidad, que prima cuando todo va mal»10, pen-
–¿Por qué? –preguntó el neófito, tratando de só Abasi. Pero, con más estrategia, respondió:
ponerse al nivel de la conversación. –¿Qué hice mal entonces? ¿Por qué estoy
–Las puertas de la percepción se encuentran atrapado en esta taberna, conversando con
ocultas en ella4. Después de atravesarlas, nace ustedes? ¡Quiero ver lo que hay detrás de las
todo en el hombre: tanto sus ganas de volver nubes doradas! Es a lo que vine. Quiero saber si
a ver al Ser, el olvido que sufre al nacer, y el la Belleza existe –protestó Abasi.
anhelo innato de progreso espiritual. Sobre este –¿Cómo puedes hablar de la luz de Apolo11 y
entusiasmo, contacto con lo numinoso, nace la negarte a ver su rostro? –preguntó confundido
civilización5. Y, a la vez, es allí donde sabemos Numa. A lo que Paulo respondió:
que debemos acabar: en la unión con el Todo6 –La luz ciega a quienes salen muy pronto
–contestó Admes. de la caverna. –Luego, dirigiéndose a Abasi, le
–¡Pero yo jamás busqué algo sagrado! Al dijo–: ¿Cómo rechazas la Verdad y la Realidad,
contrario, investigué la naturaleza lo más ob- y a la vez, aceptas la Belleza sin más? En algún
jetivamente que pude, considerando toda doc- lugar, un mal genio te desvió. Cuéntanos, ¿cómo
trina como potencialmente falsa. Fui lo que en llegaste al camino de la Verdad?
mi tiempo llaman nihilista. Y así, llegué lejos. –Nada es lo que parece, ¿saben? Incluso esas
Heme aquí, ¿no es así? Ideas de las que me hablan, tanto como los
paradigmas de la ciencia y la tecnología de mi
tiempo, no son más que prótesis físico-mentales
que adaptan lo mejor posible al hombre en su
3 De acuerdo con el mandato de Delfos, Platón considera- entorno12. “En las transacciones entre coope-
ba que al camino de la verdad como un camino de auto- rantes, el que logra engañar al otro, queriendo
conocimiento. o sin querer, obteniendo más de la transacción
4 Véase Huxley Aldous, Las puertas de la percepción, Edito- de lo que le corresponde, se ve favorecido por
rial Sudamericana, Buenos Aires, 1999. Las exoferomo-
nas constituyen una vía a lo sagrado tan legítima como la la selección natural”; el mismo favor de la na-
mística o la religiosa.
5 Esto, si consideramos que los mitos de los pueblos primi-
tivos, modelos de comportamiento, estaban basados en 7 Castodreza, Carlos, Nihilismo y supervivencia: una apro-
una cosmogonía sagrada. Lo sagrado juega un papel fun- ximación naturalista de lo inefable, Trotta, Madrid, 2007,
dacional en el nacimiento de una tribu, y más aún de una pp. 95.
civilización. Cf. Eliade, Mircea, Lo sagrado y lo profano, 8 Ibíd., pp. 95.
Paidós Orientalia, España, 1998. 9 Gómez Caffarena, José, El enigma y el misterio: una filoso-
6 Esto ocurre especialmente en la vía de la unión. Cf. Otto, fía de la religión, Trotta, Madrid, 2007, pp. 600.
Rudolf, Mysticism East and West: A Comparative Analysis 10 Cf. Castodreza, op. cit., pp. 180.
of the Nature of Mysticism, MacMillan and Co., London, 11 Platón es tan hijo de Apolo como Parménides. Cf.
1932. El Todo es el nombre hermético de Dios. Según Kingsley Peter, En los oscuros lugares del saber, Atalanta,
Schuré, el entendimiento platónico de la divinidad, viene Girona, 2010, pp. 44 y ss.
de Egipto. 12 Castodreza, op. cit., pp. 168.

Revista Percontari 61
turaleza recibe quien puede detectar un engaño posibilidad de controlar los “tiempos epistémi-
a tiempo. Tanto el engaño como su detección cos”21, nada más.
se ven favorecidos por la selección natural13. –Como me temía –dijo con pena Paulo–, no
¿Qué es la verdad sino saber a qué atenerse para puedes distinguir el propio engaño porque no te
conseguir el bien propio?14. “La búsqueda de la conoces a ti mismo. La belleza de los cuerpos es
verdad es una expresión eufemística de la bús- sólo un tipo de belleza, y el más simple. Aplicas
queda de supervivencia”.15 Si en algo soy bueno, lo que sabes de la ciencia que has desarrolla-
es en detectar el engaño. En ese sentido, asumo, do a tu propia vida; lo cual no es desacertado
me dirigí a lo que ustedes llaman “el camino de siempre, pero, en tu caso, es poco provechoso a
la Verdad”. En realidad, siempre consideré que lo que realmente importa. El conocimiento de
la selección natural no favorecía “ni el bien, ni uno mismo viene de adentro, no de los libros
la verdad ni la belleza”, y que esas Ideas no eran de sombras22. He ahí que tu genio estético te
más que “simulacros para la construcción de ha fallado.
una hiperrealidad generalizable”16, ¿me dejo en- –¿Significa eso que no puedo pasar a presen-
tender? –respondió Abasi, tomándose un trago. ciar la Belleza?
–Diríamos que tu arte consiste en detectar –Temo que estás en lo cierto. Tu investigación
el engaño, ¿no es cierto? ¿Y qué hay acerca del desenfrenada por la verdad sólo te ha llevado
propio engaño? ¿Cómo distinguimos a éste? – a contemplar el engaño. Así tú lo has querido.
preguntó Paulo. Creyendo como crees que todo es falaz, sólo te
–Justamente, soy de los pocos que saben que quedó ver la belleza que dichos engaños pro-
vivimos constantemente engañados. Me incluyo. ducían, dejando de lado la belleza misma. La
–Es decir, ¿proclamas que todo es falso, sometiste a tus propósitos, como yo lo hice en
incluyendo tu proclamación? ¿No es ésta una vida. La subordiné al bien, porque creí que sólo
contradicción? éste se suscita en lo más profundo del alma,
Abasi, sonriendo, como quien sabía lo que mientras la belleza necesita ser reflejada en el
venía, respondió serenamente: arte23. En cambio, ahora pienso24, de ambas
–Mi engaño se atenúa porque sabe que es un Ideas quizá la belleza tenga más derecho de ser
autoengaño. Soy consciente de ello. La selec- la Idea de las Ideas, puesto que el Bien aún es
ción natural es un hecho; pero de éste se deriva susceptible de encontrar aplicación, como en
la condición estética de todo conocimiento. Es la política, mientras que la Belleza brilla por
más, “la dimensión principal de la naturaleza sí misma.25 En realidad, el bien, la verdad y
se manifiesta […] en la dimensión estética”17: la belleza son lo mismo. El poder natural del
la mismísima selección sexual está basada en la dialéctico es ver lo uno y lo múltiple26. Esta es
belleza18. Lo único que se impone es el derecho la fuente de todo verdadero arte. Y usted no
de los más afortunados19, y su facultad de “or- está listo para semejante conocimiento ni para
namentar el mundo cognitivamente para estar semejante belleza.
relativamente cómodo(s) en él”20, según lo que –¿Cómo dices? ¡Recorrí el camino de la
es necesario a cada quien. “La ciencia aclararía verdad! Descubrí que toda su fuerza está en la
lo que está oscuro” y la filosofía, “con su pregun- belleza que aporta al hombre y a su superviven-
tar interminable y obsesivo, oscurecería lo que cia. ¿Es poca cosa? ¡Exijo que se me permita
está claro”. El uso de uno u otro se basa en la subir hasta lo alto para ver con mis propios ojos

13 Ibíd., pp. 171. 21 Cf. Ibíd., pp. 21.


14 Ibíd., pp. 173. 22 Cf. Platón, Diálogos III: Fedro, Gredos, Madrid, 1988,
15 Castodreza, Carlos, El flujo de la historia y el sentido de la 268a y ss.
vida: la retórica irresistible de la selección natural, Herder, 23 Schuré, Édouard, The Great Initiates vol. II, William Ri-
Barcelona, 2013, pp. 21. der & Son, London, 1920, pp. 195.
16 Castodreza, Carlos, Nihilismo y supervivencia…, op. cit. 24 Pues en vida, Platón hizo lo contrario. Encontró aplica-
pp. 170. ción política hasta en el arte, como lo atestigua el libro X
17 Castodreza, Carlos, El flujo de la historia… op. cit., pp. 64. de la República.
18 Cf. Ibíd., pp. 23. 25 Arendt, Hannah, La promesa de la política, Paidós, Buenos
19 Ibíd., pp. 64. Aires, 2015, pp. 48 y 49.
20 Ibíd., pp. 22. 26 Cf. Platón, op. cit., 266b y c.

62 Revista Percontari
lo que mi boca podrá negar después! –relinchó hombre, pese a ser tan pesimista y abogado del
Abasi. Numa, sereno, le respondió: caos, aunque haya descuartizado a sus enemi-
–Negras son tus intenciones como el caballo gos, logró pasar.
que diriges, y endurecido está tu corazón27. Ni Otro espíritu, sin embargo, que subió con
siquiera te has dado cuenta de que la belleza a la mucho ímpetu y soberbia, poseído por cientos
que aspiras está ya en la naturaleza que estudias. de musas traviesas, no tendría tanta suerte. Es-
Sus formas, sus dotes, sus gracias, todo lo bueno tas fueron sus palabras al atravesar las primeras
que hay en ella está dado por la Belleza de aquí nubes:
arriba. Y, sin embargo, al vislumbrarla, quedaste –Hasta ahora, pequeñas almas, no han tocado
ciego. el punto esencial del arte. Aquello que, para
–¿Dices que ya pude verla? No entiendo. ustedes, lo hace más divino. Es reflejo de su
–La luz, hijo mío, es la madre de toda belleza. Dios. Su Dios creó al mundo de la nada. No es
Es la única Idea que pudiste ver porque es la perfecto si no es creador; lo mismo cree el hom-
única que se hace sensible28. Ella ilumina todo bre de sí31. Les dio sentido porque los creó a
cuanto hay.29 Pero en cuanto esa luz te tocó a su imagen y semejanza. Ustedes, en su pequeño
ti, tus caballos ennegrecieron aún más, como entendimiento, creen que son barro: con vida
tu alma. Por ello, debes marcharte –terminó sólo por el toque de un Dios trascendente. ¡Qué
Numa. poco se quieren a sí mismos!
Junto con Admes y Paulo, sostuvieron al neó- Alejandro se hallaba mirando hacia Apolo,
fito en sus brazos, alistándolo para su retorno a filtrando a través de sus rayos la sustancia mis-
la Tierra. Lo sacaron de su ilusión en la que él ma del Ser, su belleza. En su éxtasis divino, pese
no era ciego y en la que todos se encontraban a estar con los sentidos invalidados, escuchaba
bebiendo en una taberna. Lo bajaron a través la conversación de fondo. Sonreía.
de las nubes, donde ángeles alados lo recibieron –El objetivo de las bellas artes no es la imi-
con pena y amor. Abasi olvidará todo, y así, po- tación, sino la creación32, ¡entiende Paulo! No
drá continuar su profana labor. le des la razón al profano, te está usando –decía
Numa entreverado en una discusión de todos
II. El genio, entre la creación y la imitación contra todos, de la que Dion se complacía.
«Hasta los guardianes me respetan» pensaba,
La labor de los guardianes continuaba. Alejan- mientras Admes guardaba silencio, sin dejar de
dro había llegado con alas ensangrentadas. Ha- mirar a los ojos de Dion, sorprendido por su
bía contemplado toda la belleza divina en una capacidad de desenvolverse en los cielos y en la
silla, sin mucho arte. En su ensimismamiento Tierra.
estético, tuvo que descender hasta los lugares –Escúchense a sí mismos, qué les dice las
oscuros del saber, donde tuvo que batallar con ideas33, ¡oigan a los espíritus34! ¿Por qué estamos
demonios fieros para poder ascender. Pero por discutiendo?
la valentía de su alma, logró contemplar el aura –Precisamente, Paulo, porque Dion tiene un
hasta de los objetos inanimados. Y cuando poder creador. Su arte es la discordia, y gracias a
fue interrogado, demostró un conocimiento ti, lo ha llevado a cabo a la perfección. Simple-
fehaciente de todo lo que es perenne, de la in-
timidad de la belleza y la unidad de Dios30. El
31 Por ejemplo, Marx y toda su descendencia. Poster ya po-
nía de manifiesto que la teoría del valor de Marx, produce
27 La metáfora bíblica puede ser extrapolada aquí. Un cora- riqueza ex nihilo (como dice Dussel) mediante el trabajo.
zón endurecido es el equivalente a un caballo negro enar- Así, su modelo se desliza fácilmente al modelo judeo-cris-
decido. De ambas formas, el alma no puede desenvolverse tiano de creación. Cf. Poster, Mark, Foucault, marxismo e
bien. Su impedimento ético es un impedimento estético. historia, Paidós, Buenos Aires, 1897, pp. 77 y 78.
28 Cf. Labrada, María Antonia, Consideraciones filosóficas so- 32 Emerson, Ralph Waldo, Ensayos, Cátedra, Madrid, 2014,
bre la belleza y el arte, EUNSA, Pamplona, 2017, pp. 20. pp. 281.
29 Ibíd., pp. 23. 33 Cf. Platón, op. cit., 249b.
30 Aquí se recuerda la experiencia de Alejandro, no narrada, 34 Sobre la línea platónica, Kardec identificaría a las ideas
a la que se alude en el «Diálogo intempestivo I», donde con los espíritus, como mónadas que pueblan el mundo
accede al misterio a través del San Pedro. Alejandro re- del más allá, capaces de comunicarse con nosotros a tra-
memora la experiencia de Huxley, op. cit. vés del pensamiento.

Revista Percontari 63
mente admite el misterio de la creación artística35 –Por supuesto, pero incluso ellos están lo-
para que podamos proseguir con nuestra eva- camente inspirados por las musas, y ellas sólo
luación –insistió Numa. comunican, con grandes dificultades, lo que ven
–¡Pero no todos son creadores! El fabricante, aquí, donde estamos nosotros. “El Bien y la Be-
por ejemplo, de una flauta tiene una opinión lleza vivientes son superiores a los de cualquier
fundada. El artista que la toca tiene conoci- obra de arte”43. La única forma de engendrar
miento sobre ésta, porque es capaz de extraerle en la belleza es procreando. Sólo así podemos
las más bellas melodías. Pero ¿el pintor? ¿Co- participar en la eternidad44.
noce el arte del flautista o del fabricador a la –En realidad, Paulo, las obras de arte son
hora de pintar una flauta? Así, él no imita36 una inmortales. Gracias a la creación artística, “lo
Idea, sino algo sensible. Está más alejado de la inmortal se hecho visible a nuestro mundo
realidad que los demás. Y esto ocurre más aún transitorio”45 –contradijo Numa.
en la época de la reproductibilidad técnica37 que –¿No lo ven? –intervino Admes–. Están dis-
vive el mundo de Aetos en adelante. Esto prue- cutiendo sin sentido. Vamos por partes. Paulo,
ba que, en ausencia de lo divino38, el mundo del dices que el arte es imitación de la belleza que
arte decae en una mala mímesis de sí mismo, aquí estamos custodiando, ¿no es cierto? Numa
cada vez más borrosa y alejada de las Ideas. ¡Es dice que ese arte es creación del hombre. ¿Dón-
más! Lo que tú llamas “creación”, no es tal en de está la contradicción? Alguno de ustedes
realidad. Porque quien “crea” está poseído por respóndame.
las musas39; no es dueño de sí mismo –contradi- –“La mano no puede ejecutar nunca nada
jo Paulo. Dion simplemente sonreía, orgulloso. superior a lo que el carácter puede inspirar”46.
–No es del todo cierto, aunque esté inspirado, No hay musas; sólo alma –dijo Numa.
la obra de un artista es la expresión de su carác- –“No existe genio sin un toque de misticis-
ter.40 “El arte no ha llegado aún a su madurez mo”47 –repuso Paulo.
sino corre parejas con las más potentes influen- –Siguen sin serenar su mente. Acompañen
cias del mundo”41 –repuso sin mucho esfuerzo conmigo al Logos. Ya como autor o como mé-
Numa. dium, interviene el artista en la producción de
–Pero ¿de dónde reciben la inspiración? Si el una obra de arte, de implementación sensible
arte fuera natural en el hombre, y no una fa- de la belleza natural, ¿de acuerdo? Sea esta obra
cultad extraordinaria, todos serían artistas. Y no creada o imitada, no nos interesa. Porque, en
es el caso… –replicó Paulo, mientras Dion lo principio, el autor puede estar inspirado en sí
interrumpió exclamando: mismo o puede estar ayudado por otros espíri-
–¡Sólo los mejores42 son creadores!, no lo tus. En un caso será más creador, en el otro será
olviden. más imitador. La creación ex nihilo es absurda48,
Numa. Hay que descubrir una ley oculta49. Poco
importa si quien la descubre está en el cuerpo
que ejecuta o no. Hay un genio creador, sea
35 Admitir las tesis suscitadas en el libro homónimo: Zweig,
Stephan, El misterio de la creación artística, Sequitur, Ma- que inspire o que actúe. La indagación debería
drid, 2007. versar sobre él, sobre su naturaleza. “Lo bello
36 El sentido original de mímesis era personificar. Y habían nace por doquiera y no es privilegio de ningún
dos clases: la personificación directa (con las musas) y la pueblo, pero en cada uno en particular toma su
indirecta (con otros hombres). La primera era la más pe-
ligrosa por ser más intensa. Y los guardianes sólo podrían color, tono y formas…” . Lo mismo sucede con
50

imitar al Bien. Cf. Grube, G. M. A., El pensamiento de


Platón, Gredos, Madrid, 1973, pp. 283.
37 El mundo de la pérdida del aura, o, en términos marxis- 43 Grube, op. cit., pp. 285.
tas, el mundo alienado del arte gracias a la industria. Cf. 44 Platón, Diálogos III: El banquete, Gredos, Madrid, 1988,
Benjamin, Walter, La obra de arte en la época de la repro- 206c y ss.
ductibilidad técnica, Itaca, México, 2003. 45 Zweig, op. cit., pp. 7.
38 Desencantado, en términos de Weber. 46 Emerson, op. cit., pp. 291.
39 Platón, op. cit., 245c. 47 Bovio, Giovanni, El genio. Un capítulo de psicología, Ame-
40 Emerson, op. cit., pp. 286 y 287. ricalee, Buenos Aires, 1943, pp. 119.
41 Ibíd., pp. 298. 48 Bovio, op. cit., pp. 93.
42 De formas distintas, Platón y Nietzsche comparten la 49 Ibíd.
visión aristocrática de la vida en comunidad. 50 Ibíd., pp. 84.

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los genios. Hay que investigar al hombre, no a señar humildad? ¡Ése es su premio! Aprender.
la belleza. Antropología, no metafísica. Ahora, ¿Saben por qué yo pasaré? Porque soy sincero,
dejemos, ¡por Zeus!, que Dion dé su testimo- puro. Casi un niño. Eternamente renuevo la
nio. Sé que es un espíritu muy digno que ya ha espiritualidad del mundo, esa es mi tarea; y
contemplado lo divino sin dificultad. Pero sé ustedes, sin entenderla, me juzgan. Les estoy
también que nos ha escupido en la cara con tal enseñando humildad, hermanos míos, usando
influir en su época. ¿Por fin esta alma se ha redi- el arma más preciada de Paulo: la verdad. Lo
mido? Calmemos nuestros caballos y prestemos saben, lo intuyen, lo sienten, una voz les persua-
oídos a lo que tiene que decir. ¿Por qué quieres, de de mi verdad. Es lógica, simple, sincera. Sólo
nuevamente, contemplar al Ser? –le preguntó así me permito pensar. ¿No lo entienden? ¿Por
directamente. Tras un silencio incómodo, Dion qué se quedan perplejos? Amo la belleza. Si los
llenó de aire sus pulmones y constestó: dioses bailan a través de mí, ¿cómo no amar la
–¿Por qué no querría? ¿Creen que el haber divinidad? ¿Quieres que les explique por qué
declarado la muerte de Dios me impedirá ver calumnié tanto a la herencia suya? ¿Crees que
su rostro? Yo, quien mejor lo conoce, soy el que iba por buen camino? Lo saben bien: cuando un
más derecho tiene de negarlo. Pero no es a él a mito pierde su fuerza, es necesario cambiarlo. Yo
quien vengo a ver, Apolo, maestro del engaño. sólo fui a destruir lo que ustedes edificaron mal.
Vengo tras Dionisios. –Todos se sorprendieron–. Fui a cumplir un ciclo. Hice lo que cualquiera
¡Ja!, ustedes siguen bajo las órdenes del Maya, de ustedes habría hecho. Aetos, Raz o Eudor53
creyendo que son ‘Guardianes’. Actúan como no han sido juzgados con tanta rudeza como
individuos en el cielo, ¿no les parece raro? Todo yo. Mi único pecado fue ser explícito: ‘Dios ha
buen místico sabe que el ego no existe en el más muerto’, dije. ‘El hombre ha de ser un artista’.
allá. ¿Dicen que su misión es divina? Más bien La vida con arte, el arte de la vida: su mejor
su ilusión es divina51. No pudiendo conectar creación. Bellas lecciones extraje de su muerte,
con el Uno, se quedan fuera, escoltando la puer- ¿no creen? Ahora, déjenme pasar –habló Dion
ta. Son el último obstáculo de quienes suben, poseído.
su última prueba. Eso porque ustedes mismos –Lo haremos. Pero piensa antes de entrar:
no pudieron pasarla. ¿No se dan cuenta? Su así como tú juzgaste nuestro legado identifi-
ego les mantiene aquí. Destruye a otras almas, cándolo con las acciones de los humanos, que
demandando lo mejor de sí mismas justo ante libres por naturaleza, yo también podría juzgar
las puertas del cielo. Así, son tentadas por el tu legado según los mismos parámetros. Si yo
principio de individuación52: creyendo tener que puedo, más aún puede Dios. ¿Sabes lo que pasó
mostrar lo mejor de sí, el ego les sobreviene. El en el mundo después de que te fuiste? ¿Tienes
Maya que traen es contagioso. Vamos, ¿acaso no idea? –inquirió Numa.
han razonado sobre su condición? Hagámoslo –Realmente no. Tuve un merecido descanso
juntos, a la manera dual, como les gusta. En –dijo. «Sordos, piensen lo que quieran. Mis mu-
caso de que yo no pase por decisión suya, ¿qué sas son muchísimo más fuertes que las suyas»,
sucedería conmigo? Me quedaría entre ustedes, pensó Dion mientras recorría el camino. Fue
quizá más abajo, dependiendo de mi elevación entonces a reunirse con su maestro, Alejandro54,
moral. Pero en definitiva: la posición de ustedes en plena contemplación de la Voluntad. Lo que
es la más alta que puedo alcanzar, sin llegar a ésta comunique queda oculto para quienes no
contemplar al Ser. ¿Y qué sucede si me dejan hablamos el lenguaje inefable de la divinidad.
pasar? Accedo al verdadero y único Dios. ¿Lo No por escrito, al menos55.
ven? Donde están los magos, hay engaño. Si nos
libramos de ustedes, accedemos realmente a la
verdad. ¿Y cuál es su pedazo de torta? Se creen
los voceros de Dios, ¿no es cierto? ¿No creen
que justamente a ustedes Dios les querría en-
53 Marx, Freud y Fromm, respectivamente. Véase «Hieros
Logos».
51 Ilusión trascendental, diría Kant. 54 Schopenhauer.
52 Desde luego, nos referimos al Nietzsche del Origen de la 55 Véase Platón, Diálogos VII: Cartas, Gredos, Madrid,
tragedia. 1988.

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