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la minimización de sus efectos, especialmente para la vida y la salud de las personas, cuando
tuviera lugar un hecho no deseado de tránsito. También se refiere a las tecnologías empleadas
para dicho fin en cualquier medio de desplazamiento terrestre
(ómnibus, camión, automóvil, motocicleta, bicicleta y a pie).
Otro término más completo es el que define seguridad vial como las reglas y actitudes que son
necesarias para estar seguro si la persona esta manejando algún vehículo o caminando en una
vía.
La prevención de accidentes.
La prioridad en el uso del espacio público de los diferentes modos de desplazamiento será
conforme a la siguiente jerarquía:
Peatones.
Ciclistas.
Es muy importante conocer, como peatones, cuales son nuestros derechos para garantizar
nuestra integridad física, así como también cuales son nuestras obligaciones.
Los peatones tienen derecho de preferencia sobre el tránsito vehicular, para garantizar su
integridad física cuando:
Los vehículos vayan a dar vuelta para entrar a otra vía y haya peatones cruzando ésta.
Los vehículos deban circular sobre el acotamiento y en éste haya peatones transitando
aunque no dispongan de zona peatonal.
Transiten por la banqueta y algún conductor deba cruzarla para entrar o salir de una
cochera o estacionamiento.
Transiten por los espacios habilitados para ello cuando la acera se encuentre afectada
por la ejecución de un trabajo o evento que modifique de forma transitoria las
características del área de circulación peatonal.
Los peatones deben, por su propia seguridad, observar las siguientes obligaciones:
Cruzar las vías primarias y secundarias por las esquinas o zonas marcadas para tal
efecto, excepto en las calles locales o domiciliarias cuando sólo exista un carril para la
circulación.
Utilizar los puentes, pasos peatonales a desnivel o rampas especiales para cruzar la vía
pública dotada para ello.
Hacer caso a las señales del semáforo (rojo :pare ámbar: vaya deteniéndose y verde:
avance).
Índice
1Seguridad activa
2Seguridad pasiva
7Referencias
8Véase también
9Enlaces externos
Seguridad activa[editar]
Es aquello que asiste al conductor para evitar un posible siniestro interviniendo de manera
permanente durante la circulación, algunos ejemplos que podemos citar son:
Sistema de retrovisores: Permite al conductor, la visibilidad posterior del vehículo y la
circulación que ocurre detrás, para ello se cuenta con: espejos, eliminación de puntos
ciegos1, y otras ayudas de control como radares, comunicación de seguridad
inalámbrica del vehículo y visión nocturna.
Mecánica: En este caso, los desplazamientos de las ruedas son absorbidos por
los resortes o espirales.
mecánico
neumático
eléctrico
automatico
Los sistemas más empleados en automóviles de uso particular, son el mecánico y el hidráulico.
Los frenos pueden ser de tambor o de disco, aunque algunos fabricantes combinan ambos
montando los frenos de disco en las ruedas delanteras y los de tambor en las traseras.
La fuerza de frenado debe asegurar una rápida detención de las ruedas pero sin llegar a
bloquearlas. Para que eso sea posible es fundamental tener en cuenta las condiciones de la vía
y el estado general de los mecanismos del vehículo (neumáticos, suspensiones, etc.).
Sistema de dirección: La dirección orienta las ruedas a voluntad del conductor, con
precisión y suavidad, e influye directamente en la estabilidad del vehículo. Si la
dirección es asistida, el esfuerzo sobre el volante se reduce considerablemente a
través de un sistema hidráulico que realiza la mayor parte del trabajo necesario para
girar la dirección.
Los sistemas de dirección servo asistida permiten hacer menos esfuerzos en el volante a la
hora de maniobrar el auto para estacionarlo y mantener una dirección correcta cuando
circulamos a altas velocidades.
También estos sistemas de dirección pretenden asegurar un perfecto control del vehículo
incluso en condiciones límite, (coeficiente de roce diferentes para las ruedas delanteras,
variaciones rápidas del ángulo de giro).
Las presiones de trabajo del sistema hidráulico se taran (calibran) para que quienes se sientan
al volante, sientan constantemente un alto grado de adherencia de los neumáticos con la
carretera, permitiendo, de esta manera, un grado de seguridad muy alto.
Seguridad pasiva[editar]
Es aquella que se encarga de minimizar las consecuencias negativas que se pueden producir
cuando el accidente es inevitable.
Pedalera colapsable: Minimiza los daños en las extremidades inferiores del conductor
en caso de colisión frontal.
Volante con absorción de energía: Donde la corona del volante y los radios son amplios
y redondeados, cubiertos por un material deformable que no produce astillas.
Hay que tomar en cuenta que ante un siniestro (es así como se cataloga en orden de
atención en los hospitales), es de vital importancia contar con una aseguradora
confiable y así evitar perdida de tiempo que puede resultar vital.
Al elegir un seguro para nuestro auto hay que tomar en cuenta puntos clave como son:
la cobertura, que hospitales y servicios de ambulancia se encuentran en convenio con
dicha aseguradora, cual es el la suma asegurada que manejamos o si esta va
aumentando en cuestión al tiempo que llevemos con el seguro o cuál seria el
deducible a pagar.
Otros puntos a tomar en cuenta son los estudios de gabinete y especializados que
están autorizados según nuestra cobertura, que especialidades se encuentran en el rol
médico que manejan, si estos están por llamado o de planta en el hospital.
La seguridad automovilística es crítica en estos casos, sobre todo considerando que los
dispositivos existentes no han sido diseñados para ellos. En muchos países (por ejemplo, en los
Estados miembros de la Unión Europea) es obligatorio el uso de mecanismos de retención
apropiados al peso y la altura; desde sillas especiales hasta elevadores que impidan que el
cinturón de seguridad provoque asfixia si ocurre un accidente. En todos los casos se deben
utilizar siguiendo las instrucciones de los fabricantes, y debe recordarse el peligro que puede
representar para un bebé o niño la bolsa de aire.
Muchos conductores que siguen la misma ruta cada día lo hacen sin utilizar el área
del cerebro donde tiene lugar el pensamiento consciente, según afirma el científico
especialista en tráfico Michael Schrekkenberg, de la Universidad de Duisburgo-
Essen (Alemania). Como conocen el camino, los conductores se ocupan de otras cosas en vez
de concentrarse en el tráfico; en consecuencia, tardan más en advertir los peligros. Por esta
razón, se les recomienda recordar continuamente la necesidad de estar alerta y no distraerse
de la carretera. No solamente se debe tener en cuenta que se conoce el camino sino también
el clima ya que no es lo mismo conducir en un día soleado a conducir en un fuerte aguacero o
sobre una vía congelada.
También en Auckland, un estudio (Newstead y D’Elía, 2007)2 descubrió que los automóviles de
color blanco tuvieron una tasa significativamente mayor de sufrir accidentes graves que los
autos de otros colores, incluido el rojo.
Comparados con los vehículos blancos, una cantidad de colores se asocian con un riesgo de
accidentes más alto. Esos colores son generalmente los que están por debajo en el índice de
visibilidad, e incluyen el azul, gris, negro, rojo, plata y verde. Ningún color fue
significativamente más seguro que el blanco, aunque varios otros colores no se pudieron
distinguir del blanco en términos de riesgo relativo de accidente. [...] Ninguno de los colores de
vehículos que indicaron un menor riesgo relativo en comparación con el color blanco fue
estadística mente significativo.
Stuart Newstead y Ángelo D’Elía, 20072
[alerta esto puede parecer ilogico , y lo es, asi que puedes decir wtf:)]La siguiente tabla
(Newstead y D’Elía, pág. 8)2 presenta la relación entre los accidentes de tránsito y los distintos
colores de automóviles. Como unidad se utiliza la peligrosidad del color blanco. Por ejemplo,
durante el día, el color plata (1,10) es 10% más peligroso que el color blanco.
Índice
1Contenidos
o 1.1La trilogía vial
o 1.2Cultura vial
o 1.3Seguridad vial
o 1.4Prevención y minimización de siniestros
2Ámbitos de desarrollo
o 2.1En la educación formal
3Importancia de la educación vial
o 3.1Los agentes involucrados
4Véase también
5Referencias
6Enlaces externos
Contenidos[editar]
La Educación vial es parte de la Educación ciudadana,3, de carácter multi e
interdisciplinario, se nutre de estudios, investigaciones y aportes de varias ciencias o
áreas, como el derecho, la ética, la sociología, la psicología, la estadística, la mecánica y
las ciencias de la salud, entre otras.1
La disciplina permite adquirir conocimientos, desarrollar destrezas y mejorar habilidades
sobre los temas vinculados a los transeúntes, la conducta vial, el transporte y las vías de
comunicación; en especial sobre:1
La trilogía vial;
Vía pública: tipos, funciones, características y partes;
Seguridad vial: primaria o activa, secundaria o pasiva, terciaria y cuaternaria;
Legislación vial y derechos conexos (internacionales, regionales, nacionales y locales);
Señales de tránsito y señalización: verticales, horizontales, luminosas, auditivas y
manuales.
Conducción de vehículos: motos, automóviles, vehículos de emergencia y especiales,
ómnibus, etc.;
Convivencia, conducta y ética en el tránsito: la Educación vial sensibiliza socialmente
respecto a los comportamientos que fomentan la convivencia, la tolerancia, la
solidaridad, el respeto y la responsabilidad, y favorecen las relaciones humanas
pacíficas en la vía pública4;
Siniestros o accidentes de tráfico: prevención, factores de riesgo, causas,
consecuencias y actuación;
Primeros auxilios en el tránsito, con sus distintos momentos;
Movilidad sostenible;
Seguridad en el transporte fluvial y aéreo; y,
Medioambiente y circulación: clima, animales y plantas en las vías, contaminación y
polución, etc.
Los temas del área tratan principalmente sobre el tránsito terrestre, pero también pueden
incluir -aunque sea en menor proporción- al transporte fluvial, marítimo y aéreo.
La trilogía vial[editar]
Se denomina así a los tres factores del tránsito, cada uno de los cuales consta -a su vez-
de una serie de elementos con sus propias particularidades:1
Seguridad vial[editar]
Además de las medidas legales, mecánicas, técnicas y de infraestructura requeridas, la
educación ha tenido tradicionalmente un papel preponderante en la seguridad vial.
La prevención y minimización de siniestros viales (incluyendo a los accidentes) se realiza a
través de los cuatro niveles de seguridad vial:
La seguridad primaria (también llamada activa): busca prevenirlos o evitarlos mediante
diversos mecanismos, acciones y normas.
La seguridad secundaria (o pasiva): se dirige a proteger a las personas durante la
ocurrencia, a fin de evitar o minimizar las consecuencias, como daños y lesiones.
La seguridad terciaria: está destinada a luego de que sucedan (también es
minimización), a fin de minimizar las consecuencias y de evitar nuevos siniestros.
La seguridad cuaternaria: hace referencia a la recuperación, es decir a las terapias
físicas y psicológicas de las personas.617
Esta clasificación guarda relación con la matriz desarrollada por Haddon en los años de
1970, quien al estudiar a los siniestros propuso dividir en tres los momentos de
actuación: antes, durante y después de su ocurrencia. Estos tiempos se combinan con los
tres factores del tránsito (trilogía vial) para formar una matriz de nueve casillas, conocida
con el nombre de su creador.8
Los siniestros viales suceden por diversos motivos, mas su denominación no toma en
consideración la existencia o no de víctimas, ni tampoco su previsibilidad. El concepto se
refiere a aquellos hechos susceptibles de ser evitados por el ser humano, lo que no ocurre
con los accidentes, por ser estos últimos hechos fortuitos.
Cualquier incidente negativo en la vías de transporte es considerado un siniestro, mientras
que los accidentes son solamente una pequeña parte de los mismos, aquellos que hayan
tenido lugar por obra casual o sin mediar responsabilidad humana.9
A menudo, las conductas de transgresión de las normas de tránsito durante la circulación
por el espacio público (en calidad de conductores, ciclistas, pasajeros o transeúntes)
aparecen naturalizadas, sobre todo en cuanto al respeto de las señales y a los
reglamentos más actuales. Esto se generalizó en algunos países a partir de hechos como
el aumento del parque de rodados (automotriz, motovehículos, transportes públicos y de
carga), la pavimentación masiva de las calles o la adopción de nuevos sentidos de
circulación; a lo que debe sumarse la inadecuada o insuficiente educación vial de la
ciudadanía.
Ámbitos de desarrollo[editar]
La Educación vial formalmente se imparte desde las instituciones educativas y
las autoescuelas; pero también tiene lugar de manera no formal e informal desde las
familias, organismos estatales, instituciones privadas y medios de comunicación. Para su
desarrollo tanto las instituciones públicas (ministerios, agencias viales, ayuntamientos,
municipios, etc.) como las privadas y mixtas aportan recursos económicos, coordinan o
promocionan proyectos, organizan campañas publicitarias, lanzan libros, y realizan
conferencias, encuentros o talleres.101112
En las escuelas promueve la transformación de los habitus culturales mal arraigados en
«el juego de la calle» (término acuñado por el antropólogo argentino Pablo Wright)13
mediante el trabajo de manera transversal en las asignaturas, a través de una educación
del transeúnte que pone en el centro al sujeto, al ciudadano que transita, cualquiera sea el
medio o la forma que utilice para desplazarse.14
En la educación formal[editar]
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Véase también[editar]
Autoescuela
Convención de Viena sobre Señalización Vial
Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2011-2020
Seguridad vial
Violencia vial
Referencias[editar]
1. ↑ Saltar a:a b c d e f Oviedo Sotelo, Daniel (2018). Educación Vial. Ética, derecho y
sustentabilidad para el buen andar (3° reimp. 2° edición). Ñemby: Book Sellers.
p. 228. ISBN 978-99967-850-0-9.
2. ↑ Saltar a:a b Pacheco Cortés, Carlos Manuel (2017). «Educación Vial en la Era Digital:
cultura vial y educación permanente». Diálogos Sobre Educación (Guadalajara,
Jalisco) 8 (15): 1-14. ISSN 2007-2171.
3. Volver arriba↑ Min. de Educación, Ciencia y Tecnología (2007). Educación vial: un camino
hacia la vida. Buenos Aires.
4. Volver arriba↑ Álvarez González, FJ, González Briones, E y Robledo de Dios, T (coords.)
(2004). Cuaderno didáctico sobre educación vial y salud. Madrid: Ministerio de Educación y
Ciencia. NIPO: 651-04-150-1
5. ↑ Saltar a:a b Camacho-Cabrera, G. (2009). «Qué es cultura vial». CulturaVial.net.
Consultado el 8 de julio de 2018.
6. Volver arriba↑ Montenegro, Julio César (1989). Distintas formas de seguridad
vial. Mapfre N° 36. [Consultado el 31 de enero de 2018]
7. Volver arriba↑ Centro Zaragoza. «SISTEMAS DE SEGURIDAD PRIMARIA: LO PRIMERO
ES LO PRIMERO». www.supermotor.com (en inglés). Consultado el 8 de julio de 2018.
8. Volver arriba↑ Álvarez, F. J. (2005-04). «La prevención de las lesiones derivadas de las
colisiones de tráfico». SEMERGEN - Medicina de Familia 31 (4): 151-153. ISSN 1138-
3593. doi:10.1016/S1138-3593(05)72904-X. Consultado el 14 de julio de 2018.
9. Volver arriba↑ «Accidente o siniestro - Rastreator.com™». www.rastreator.com. Consultado
el 31 de enero de 2018.
10. Volver arriba↑ García Godoy, F (coord.) (2001). La educación vial en mi colegio. Proyecto
de Educación Vial 2001/2003. La Carolina (Jaén): Colegio Público de Infantil y Primaria
“Manuel Andújar”.
11. Volver arriba↑ Martínez Pérez S, Liarte Agüera José (1996). Programa municipal de
Educación Vial. Cuaderno de actividades del alumno. Cartagena: Ayuntamiento de
Cartagena, Instituto Municipal de Educación.
12. Volver arriba↑ Ministerio de Educación, Cultura y Deporte Programa de educación y
formación vialEspaña. Consultado el 04/05/2014.
13. Volver arriba↑ La Gaceta (2013, 30 de mayo). El tránsito, visto como un problema
antropológico
14. Volver arriba↑ Educación del transeúnte. Ministerio de Educación de Argentina. Consultado
el 10/03/2017.
15. Volver arriba↑ Otero, Mariana y Rosana Guerra (18 de septiembre de 2011). «La educación
vial arranca en las escuelas». La Voz del Interior (Córdoba, Argentina). Consultado el 8 de
julio de 2018.
16. Volver arriba↑ «Educación en seguridad vial será obligatoria». Vanguardia.com. Consultado
el 13 de julio de 2018.
17. Volver arriba↑ «La educación vial arranca en las escuelas». Consultado el 31 de enero de
2018.
18. Volver arriba↑ «200 colegios públicos impartirán educación vial este 2018». Diario Digital
Nuestro País. Consultado el 8 de julio de 2018.
19. Volver arriba↑ Ministerio del Interior. Dirección General de Tráfico. «Educación Vial para la
Educación Secundaria Obligatoria (ESO)». Consultado el 31 de enero de 2018.
20. Volver arriba↑ «La reforma educativa establece que alumnos de Primaria hablen de
terrorismo y violencia machista». ELMUNDO. Consultado el 31 de enero de 2018.
21. Volver arriba↑ «La reforma educativa establece que alumnos de Primaria hablen de
terrorismo y violencia machista». ELMUNDO. Consultado el 31 de enero de 2018.
22. Volver arriba↑ «Educación Vial, materia obligatoria de preescolar hasta
preparatoria». Chiquini.mx. 23 de abril de 2018. Consultado el 13 de julio de 2018.
23. Volver arriba↑ «Se incluirá la Seguridad Vial en la Educación Básica». Gobierno del Estado
de Jalisco. Consultado el 31 de enero de 2018.
24. Volver arriba↑ «Ley Nº 5044 Que incorpora la enseñanza de la EDUCACION VIAL como
asignatura en la malla curricular del sistema educativo nacional». www.bacn.gov.py. 2013.
Consultado el 14 de julio de 2018.
25. Volver arriba↑ «Academia de choferes en Montevideo».
26. Volver arriba↑ www.mapfre.es. «¿Por qué la seguridad vial debería ser una asignatura
obligatoria en el cole?». Seguridad Vial Infantil. Consultado el 13 de julio de 2018.
27. Volver arriba↑ Policía Nacional de Nicaragua, Dirección de Seguridad de
Tránsito. «Educación Vial, WebQuest acerca de seguridad vial». Consultado el 2 de
diciembre de 2017.
28. Volver arriba↑ Liliana RONCONI y Martín ALDAO (201?). Agencia Nacional de Seguridad
Vial. Argentina, ed. «Educación Vial. Propuestas para la enseñanza nivel secundario.».
https://www.trafikoa.eus/wps/wcm/connect/trafico/ff7ba7804f18d2a2991c99388f4ad0d9/Gu
ia+seguridad+vial+laboral.pdf?MOD=AJPERES&CVID=lyr96dA
https://ansv.gov.co/Detalle/136/nueva-estrategia-territorial-de-la-
ansv/
Esta actividad hace parte del plan de choque que adelanta el Ministerio
de Transporte con su ANSV y la Ditra en las regiones donde más se están
presentando incidentes viales, para concertar acciones específicas con
los gobiernos locales y así combatir de la mejor manera esta
problemática.
https://ansv.gov.co/Detalle/138/se-concerto-plan-por-la-seguridad-vial-en-villavicencio/
Los traumatismos causados por el tránsito son uno de los principales problemas de salud
pública, pues provocan más de 1,2 millones de muertes cada año.1 Afectan a todos los grupos
de edad, pero de forma más destacada a los jóvenes: son la primera causa de mortalidad a
nivel mundial en la franja de 15 a 29 años. Aunque en muchos países de ingresos altos las tasas
de mortalidad por accidentes de tránsito se han estabilizado o han disminuido en los últimos
decenios, los datos disponibles llevan a pensar que en la mayoría de las regiones del mundo
están aumentando de resultas del rápido incremento de la motorización y de la insuficiencia
de las actividades de prevención. Se ha estimado que, a menos que se tomen medidas
inmediatas, las muertes en carretera aumentarán hasta convertirse en la quinta causa de
muerte para 2030, con unos 2,4 millones de defunciones anuales.1,2
La atención prestada por las instancias normativas y las instituciones financiadoras a esta
epidemia que asuela las vías de tránsito en todo el mundo no guarda en absoluto proporción
con la carga de morbilidad asociada a los traumatismos causados por el tránsito. A fin de
facilitar los esfuerzos necesarios para reforzar las medidas de sensibilización y dar más
prioridad a la seguridad vial en las agendas políticas y del desarrollo –así como para garantizar
la financiación a largo plazo que requiere una inversión sostenida en la seguridad vial-, es
preciso manejar cifras fiables sobre la magnitud del problema, mejorar la vigilancia de las
tendencias mundiales y regionales, e identificar las lagunas existentes en las actividades
necesarias a nivel nacional, regional e internacional. Ello exige a su vez una evaluación mundial
de las medidas de seguridad vial basada en un método estándar que permita vigilar las
tendencias de varios indicadores de la seguridad vial a lo largo del tiempo, y que permita
además a los países comparar su situación con la seguridad vial de otros países. Tales
evaluaciones son corrientes en otras esferas de la salud: en el caso del alcohol, el control del
tabaco y la tuberculosis, se dispone de instrumentos e indicadores que permiten evaluar la
situación mundial en cada uno de esos ámbitos de forma periódica, y utilizar esos datos con
fines de promoción. Este año se ha realizado por primera vez una encuesta de ese tipo en 178
países: los resultados presentados en el Informe sobre la situación mundial de la seguridad
vial ofrecen la primera panorámica mundial de la seguridad vial, y proporcionan a los
gobiernos, los donantes, los médicos y los investigadores la información que necesitan para
tomar decisiones basadas en la evidencia en materia de seguridad vial.3
El informe presenta varios resultados clave que tienen importantes implicaciones a nivel
normativo. Confirma los resultados de investigaciones anteriores que muestran que las tasas
de letalidad asociadas al tránsito son mucho mayores en los países de ingresos bajos y medios
(21,5 y 19,5 por 100 000, respectivamente) que en los países de ingresos altos (10,3 por 100
000). Se destaca en él que aunque los países en desarrollo concentran más del 90% de las
defunciones por accidentes de tránsito, sin embargo albergan menos de la mitad de los
vehículos registrados en todo el mundo. Esto remite a otro dato, a saber, que casi la mitad de
las personas fallecidas en accidentes de tránsito son peatones, ciclistas o motociclistas, y esa
proporción de muertes de usuarios vulnerables es mayor en las economías más pobres del
mundo, muchas de las cuales no han aplicado todavía medidas de prevención en materia de
seguridad vial o carecen de suficientes servicios médicos de urgencia para afrontar las
consecuencias del aumento de accidentes. La interrupción o inversión de la tendencia de la
mortalidad mundial por accidentes de tránsito exige por consiguiente una perspectiva amplia
que abarque la protección de todos los usuarios de las carreteras, pero que garantice también
en particular que en las decisiones concernientes al aprovechamiento de la tierra y la
planificación del transporte se tengan en cuenta las necesidades de los usuarios más
vulnerables. Por ejemplo, las nuevas infraestructuras pueden separar a los usuarios
motorizados y no motorizados que actualmente comparten espacio vial; la inversión en
transportes públicos puede reducir el riesgo entre los usuarios vulnerables; y es posible
adoptar estrategias que fomenten los desplazamientos a pie y en bicicleta, alternativas que
son ya las principales modalidades de transporte en algunos países de ingresos bajos y medios.
La reducción de la dependencia de formas individuales de transporte motorizado también
puede tener muchos efectos beneficiosos para la salud y el ambiente, en particular la
reducción de la contaminación del aire y los efectos saludables de la mayor actividad física.
El informe ofrece algunos datos nuevos de interés sobre las intervenciones ya emprendidas a
nivel de país. Por ejemplo, solo un 15% de los países han promulgado leyes que contemplen
prácticas óptimas basadas en una evidencia sólida sobre su eficacia, pese a los muchos datos
que avalan la eficacia de la aplicación y la vigilancia del cumplimiento de leyes relacionadas
con factores de riesgo clave como son una velocidad excesiva, la conducción bajo los efectos
del alcohol y el uso de cinturones de seguridad, sistemas de retención para niños y cascos para
motociclistas. El cumplimiento de la legislación es fundamental para el éxito de esas medidas,
y los datos presentados en el informe parecen indicar que la vigilancia de ese cumplimiento es
insuficiente en numerosos países.
Referencias
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Available
from: http://www.who.int/healthinfo/global_burden_disease/GBD_report_2004updat
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2. World health statistics 2008. Geneva: World Health Organization; 2008. Available
from: http://www.who.int/whosis/whostat/EN_WHS08_Full.pdf[accessed on 8
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3. Global status report on road safety: time for action. Geneva: World Health
Organization; 2009. Available
from: http://www.who.int/violence_injury_prevention/road_safety_status/ [accessed
on 8 September 2009].
https://www.csv.go.cr/documents/10179/20401/SEGURIDADVIAL+Manual+050314.pdf/4d181
337-7fce-43bf-b412-8e8ee92eb2ae
https://www.arlsura.com/images/stories/riesgos/joaquin/joaquin_11.pdf
https://www.csv.go.cr/documents/10179/20401/SEGURIDADVIAL+Manual+050314.pdf/4d181
337-7fce-43bf-b412-8e8ee92eb2ae