TEJIDO EMPRESARIAL ATOMIZADO, LA CARA DE

CAJAMARCA
La libertad es de los logros más maravillosos que la humanidad ha ido luchando y estableciendo –aunque
con imperfecciones claro está- de forma informal dentro del accionar cotidiano de los individuos y
también de forma formal en sus biblias estatales (Constituciones políticas). Ahora la libertad del tipo
económica, así mismo, no es ajena a este logro, y más aún ha sido y viene siendo una especie de principio
orientador para alimentar el sostenimiento productivo de bienes y servicios de nuestras economías. En
este sentido en nuestra nación, disposiciones dentro de nuestra constitución como las libertades de:
iniciativa privada, trabajo, empresa, comercio e industria; entre otras, buscan satisfacer la suficiencia en
la producción, así como la promoción de empleo, salud, educación, seguridad, servicios públicos e
infraestructura –desarrollo señores-.

Sin embargo, como toda cosa en la vida “todo tiene su costo o desventaja”, así nuestra libertad
propugnada, seguido de las características productivas y culturales ad hoc de nuestra nación y, de la
debilidad de mano dura y de ideas consistentes de nuestros gobiernos, han afinado la plataforma para que
surja un tejido empresarial atomizado, informal y laxamente productivo; situación que denotan unas
regiones más que otras, claro está. Ante lo dicho, echemos un vistazo a los datos para nuestra querida
Cajamarca, donde el crecimiento económico y poblacional que ha experimentado la región ha aperturado
un mayor grado de dinamismo empresarial, principalmente en la capital de la región la misma que está
básicamente orientada hacia el sector terciario (Comercio, restaurantes, hoteles) y parte del sector
secundario (construcción, electricidad y agua). Con empresas cuyos tamaños básicamente son “micro”
(es decir de capacidad de empleabilidad de entre 1 a 10 trabajadores) y, es que viendo el grafico
presentado, vemos que tanto a nivel regional, como a nivel provincial y distrital, se repite en cada uno
que el 96% de empresas son “micro”, menos del 4 % son “pequeñas empresas” y menos del 1% de
empresas son “medianas-grandes”.

Composición empresarial: cantidad y tamaño Concentración de empresas en el

por región, provincia y distrito de Cajamarca distrito de Cajamarca
30000
25000
20000 0%
4%
15000 MICRO

10000 PEQUEÑAS
MEDIANA Y GRANDE
5000
0 96%
REGIÓN PROVINCIA DISTRITO

MICRO PEQUEÑA MEDIANA Y GRANDE

. Fuente: Sigeo Produce, elaboración propia

Vale destacar, viendo el gráfico circular, que en términos de concentración, Cajamarca Distrito (capital),
absorbe gran parte del total de empresas del departamento, esto es, que el 48%, 57% y 49% de micro,
pequeñas y medianas-grandes respectivamente, se geolocalizan en el distrito de Cajamarca, un claro
desbalance en contra del resto de provincias y/o distritos de nuestro departamento y un claro espacio para
el actuar de políticas regionales.

Ahora retomando la plataforma menciona, la laxa productividad, la informalidad y el micro tamaño de las
empresas, como la presenta Cajamarca, conforman una caracterización que genera una trampa de
exclusión, R. Machado (2014), y causalmente una trampa de pobreza, esa es la cara económica de
Cajamarca, una economía compuesta de empresas atomizadas o individualizadas, que sumando a las
características ya mencionadas, la debilidad de base tecnológica y la debilidad de asociación, no hacen
más que pronosticar una muerte empresarial anunciada, ante ello mis amigos empecemos –en verdad y
por fin- por generar y concretar políticas regionales pensadas en el óptimo social, así mismo cedamos el
espacio a “aires frescos” bienintencionados.