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Facultad de Economía, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)

Seis años de lucha campesina


Author(s): Armando Bartra
Source: Investigación Económica, Vol. 36, No. [141] (Julio-septiembre de 1977), pp. 157-209
Published by: Facultad de Economía, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)
Stable URL: http://www.jstor.org/stable/42813660
Accessed: 26-01-2016 19:34 UTC

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Seis años de lucha campesina

por Armando Bartra

I. Ascenso general y sostenido cualitativamente distintas que pre-


del movimiento campesino senta hoy la problemática rural
mexicana. No basta constatar que
1. Introducción hay luchas campesinas o que éstas
se agudizan local o regionalmente,
Durante el sexenio 1971-1976 se pues esto ha sido una situación per-
inicia una etapa cualitativamente manente en las últimas décadas; no
distinta de la lucha de clases en el basta siquiera reconocer que cier-
campo mexicano: por primera vez tas luchas regionales coinciden en el
en más de 30 años, la lucha de los tiempo, pues tal cosa se ha presen-
trabajadores rurales se extiende por tado también en años anteriores. El
todo el país y tiende a agudizarse fenómeno nuevo es la generaliza-
aceleradamente en todas partes. Por ción, básicamente espontánea, y la
primera vez desde la década de continuidad ascendente del movi-
los treintas se presenta en México miento campesino de los últimos
un ascenso generalizado y sostenido años que lo definen como una fase
del movimiento campesino. distinta de la lucha de clases rural.
Tuvieron que desatarse y confluir Vista aisladamente, ninguna ac-
durante años infinidad de conflictos ción campesina del sexenio pasado
y luchas locales. Fueron necesarios resulta excepcional; las grandes to-
decenas de miles de estallidos aisla- mas de tierras tienen antecedentes
dos pero, finalmente, a partir de cercanos en las invasiones que em-
1972, la marea ascendente de los prende la UGO CM de Jacinto
explotados del campo se pone en pri- López durante 1958 en Sonora, o
mer plano y cobra el carácter de un en la ocupación de 40,000 has. de
movimiento nacional. los valles de Michapa y El Gua-
Reconocer que vivimos un ascen- rín en Morelos por 4,000 campe-
so del movimiento campesino, y que sinos encabezados por Rubén Ja-
este es ya un ascenso general y ramillo en 1961. En cuanto a las
prolongado, es la piedra de toque marchas campesinas, ya Alvaro
para comprender las condiciones Ríos había promovido en 1966 una

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gran movilización al D. F. desde mas y la crisis coyuntural que lo
Durango, y posiblemente ninguna pone en acción se extiende bajo di-
acción reciente supera la amplitud versas formas a todo el medio rural.
y espectacularidad de la toma de la Por otra parte, las luchas locales
ciudad de Mérida por 10,000 hene- repercuten de mil maneras en otras
queneros en 1966. Sin embargo, to- regiones y se estimulan mutuamen-
das éstas son acciones aisladas y te, tendiendo a generalizar la agita-
básicamente locales cuya ofensiva ción y la movilización.
es de corta duración. Durante 1970 y 1971 se multipli-
Incluso un movimiento regional can los conflictos en el campo y la
tan amplio como el que promueve lucha de clases rural entra en un
la Asociación Cívica Guerrerense en proceso sostenido de agudización;
1962, y cuya represión genera la gue- pero no es sino hasta 1972 y 1973
rrilla de Genaro Vázquez, responde que el ascenso del movimiento cam-
más a una situación estatal que a pesino cobra espontáneamente un
una coyuntura de carácter nacional. carácter nacional. Ciertamente el
Finalmente, ni siquiera un con- desarrollo de la lucha es desigual,
flicto tan aparatoso como el levan- tanto en su naturaleza como en su
tamiento gasquista de 1961 - en el intensidad; pero para estos años
que participan grupos de Veracruz se extiende ya prácticamente a to-
Chiapas, Puebla, Guerrero, Oaxaca, dos los estados de la República, y
Edo. de México, Saltillo, Coahuila, cada nueva acción tiene efectos mul-
San Luis Potosí y el D. F. - pasa de tiplicadores. Es también a partir de
ser una acción conspirativa que no 1973 que en algunas zonas el mo-
se apoya en un ascenso generalizado vimiento comienza a estructurarse
del movimiento campesino, ni lo ge- regionalmente. Por último, es el in-
nera. controlable poder de la marea cam-
A diferencia de estos estallidos pesina en estos dos últimos años lo
que corresponden a coyunturas lo- que obliga a modificar la política
cales o regionales, y que derivan agraria del régimen echeverrista.
más o menos rápidamente en un
reflujo, las luchas campesinas del 2. El ascenso del movimiento
sexenio pasado confluyen en un mo- campesino hasta su generalización
vimiento nacional cuyo ascenso se (1970-1973)
sostiene por más de seis años.
Las causas inmediatas de la lu- Es difícil documentar esta prime-
cha, los enemigos concretos y las rei- ra fase de ascenso del movimiento
vindicaciones específicas, cambian campesino hasta su generalización
de una región a otra, y el movimien- por falta de una información siste-
to es inicialmente heterogéneo y dis- mática y suficiente; sin embargo,
perso en sus manifestaciones; pero precisamente por ello, es necesario
sus raíces estructurales son las mis- registrar por lo menos algunos de
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los hechos más importantes que fun- pensión de entrega de caña; en ju-
damentan nuestras afirmaciones. lio de 1970 el cacique José Guada-
En el nivel de una simple cons- lupe Ramírez está a punto de ser
tatación, que posteriormente inten- linchado y, en diciembre del mismo
taremos fundamentar, los movimien- año, a resultas de un nuevo paro,
tos campesinos de estos años pueden los anexos de Raboso y Teruel lo-
ser provisionalmente agrupados en: gran independizarse de la sociedad.
a) luchas de los pequeños produc- En condiciones muy distintas,
tores por los precios; b) luchas de pero con reivindicaciones de la mis-
los trabajadores por sus ingresos; ma naturaleza, se movilizan duran-
c) combates por la democracia y te 1972 en la sierra de Juárez de
contra la imposición política; y d) Oaxaca 15,000 campesinos de 12
la lucha generalizada por la tierra. poblados que cortan madera para
la Papelera Tuxtepec. Las deman-
a) Las luchas por los precios das son un aumento en el precio
del producto y el cumplimiento de
La movilización más importante los servicios prometidos por la em-
en torno a los precios de la produc- presa, la forma de lucha es la sus-
ción es la que sostienen los cañeros pensión de entregas. También con-
de Veracruz cuando, en diciembre tra los explotadores de la madera
de 1972, cien ejidos suspenden las que saquean sus bosques se dan lu-
entregas de caña al ingenio de San chas en 1970 en San Pedro Nexapa
Cristóbal. Dado que los "pequeños y en 1971 en Milpa Alta, los dos
propietarios" comienzan a sabotear en el estado de México. En San
la lucha - entregando caña por su Pedro Nexapa la lucha es reprimi-
cuenta - el paro se combina con la da con la intervención del ejército.
toma del ingenio que culmina con Finalmente es necesario mencio-
la ocupación militar de las instala- nar el movimiento que durante
ciones el 9 de enero de 1973. Las 1972 y 73 desarrollan casi 100,000
últimas acciones son un paro soli- candelilleros e ixtleros de Coahuila
dario de los obreros del ingenio, que y San Luis Potosí contra la Forestal
es quebrado por el sindicato, y las por el precio de sus productos.
grandes movilizaciones de cañeros
a Jalapa donde toman el palacio de b) Las luchas de los trabajadores
gobierno. por sus ingresos
En Puebla, el movimiento de los
ejidatarios cañeros de Atencingo se Durante estos años, la lucha de
desarrolla básicamente con el mismo los que de una u otra manera ven-
contenido, aunque combinado con den su trabajo a cambio de un in-
la lucha contra un cacicazgo que greso monetario no cobra en el
controla la sociedad de crédito. En campo un carácter sindical. Sin
noviembre de 1969 realizan una sus- embargo se presenta en forma de
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estallidos anárquicos y espontáneos rían entregarles. En octubre de
de gran amplitud y virulencia. Así, 1972, mil henequeneros de Izamal
en Sonora -durante 1971 - 30,000 lapidan hasta la muerte al agente
jornaleros, mantenidos durante se- agrario, cubren el cadáver con cal
manas sin ingreso ni viviendas de- y destruyen las oficinas.
bido a que las lluvias atrasan las
pizcas, inician un movimiento casi c) Las luchas por la democracia y
insurreccional, toman Villa Juárez contra la imposición política
y arrasan los comercios expropian-
do víveres. Frenados por la inter- La lucha contra la imposición
vención del ejército, que detiene a política, y en general contra el des-
los dirigentes, logran sin embargo potismo en el medio rural, es per-
su excarcelación al sitiar la cárcel manente y tiene las más variadas
mediante una movilización en que manifestaciones, desde la guerrilla
- con
participan 10,000 personas. apoyo y composición predo-
En Sinaloa, durante el mes de minantemente campesina - hasta
marzo de 1972, los trabajadores los movimientos contra la imposi-
agrícolas de la flor, el tomate y el ción municipal. En este segundo
algodón se lanzan a un movimiento aspecto puede mencionarse, a título
de huelga con apoyo 'estudiantil. In- de ejemplo, la lucha que se desa-
terviene la policía judicial, con sal- rrolla en 1969 en Huehuetlán, Pue-
do de estudiantes y campesinos pre- bla, contra la imposición de presi-
sos, en Guasave, Angostura, Gua- dente municipal, que fue reprimida
muchil, La Cruz, Culiacán y Ma- por el ejército. En el mismo estado,
zatlán. pero en septiembre de 1970, el mo-
Por otro lado, la lucha de los eji- vimiento contra el alcalde de Izú-
datarios henequeneros de Yucatán car de Matamoros, que culmina con
contra el Banco Agrario por el pa- una manifestación de 6,000 perso-
go de las deudas, por el aumento nas, que lo obliga a renunciar. En
de los "adelantos", e incluso por el mismo año, en Michoacán, 3,000
"aguinaldos", tiene el carácter de campesinos de Cherán rodean la
una reivindicación salarial, que presidencia municipal para obligar
tampoco adopta formas de luchas a los funcionarios a renunciar, y
sindicales. En 1970 miles de hene- pese a la presencia del ejército lo-
queneros toman nuevamente Mé- gran la renuncia del alcalde.
rida y sólo regresan a sus ejidos La presencia de la guerrilla, que
cuando Gómez Villanueva les pro- proviene de un movimiento popu-
mete dinero. En enero de 1971 cien- lar, tiene sus manifestaciones más
tos de henequeneros de Tecoh asal- claras en Guerrero: el 25 de junio
tan las oficinas del Banco Agrario, de 1972 el grupo de Lucio Cabañas
secuestran a cuatro funcionarios y tiende una emboscada a miembros
expropian las despensas que no que- del 50* Batallón de Infantería con
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saldo de 10 soldados muertos; el 23 Familias de ejidatarios o comune-
de agosto del mismo año, en otra ros con parcelas divididas en hec-
emboscada, mueren 18 soldados y táreas, medias hectáreas, surcos,
20, entre ellos nueve heridos, son en espera de una ampliación de
apresados por la guerrilla. ejido para los hijos mayores de 16,
Suspensiones de entregas empren- de 20, de 30 años. . .
didas por decenas de miles de ca- Y durante décadas, todas estas
ñeros, huelgas de taladores, movili- demandas reducidas a un sordo ru-
zaciones semiinsurreccionales por la mor de papeles. Tres millones de
subsistencia, desarrolladas por jor- campesinos solicitantes agrupados
naleros o ejidatarios henequeneros, en torno a más de 60,000 comités
tomas de palacios municipales, se- particulares ejecutivos cuyos expe-
cuestro de alcaldes, emboscadas de dientes están detenidos en primera
la guerrilla campesina al ejército, o segunda instancia, frenados por
etc., constituyen claros síntomas de fallos negativos o simplemente ex-
la agudización de la lucha de cla- traviados. Resoluciones presidencia-
ses en el campo ; pero por su misma les nunca ejecutadas, testimonian-
naturaleza, estos tipos de movimien- do - sobre el papel - el espíritu
to no podían configurar por sí solos "agrarista" de GDO, ALM, RC.
un ascenso nacional y sosteniendo Trámites siempre bloqueados por
de la lucha campesina. Pese a su "trabajos técnicos e informativos"
importancia y amplitud, estas no falseados a cambio de dinero: me-
son más que vertientes secundarias diciones mal hechas o inventadas
del movimiento de los explotados sobre el escritorio, amparos, certifi-
rurales, cuya columna vertebral es, cados de inafectabilidad expedidos
como veremos, la lucha por la al vapor. . . Y todo esto enmaraña-
tierra. do en xma enorme y corrupta buro-
cracia agraria que, por casi 40 años,
d) La lucha generalizada por funciona como un sólido dique con-
la tierra tra el que se estrella la creciente
marea de solicitantes.
Millones de campesinos sin tie- Pero a partir de 1970, y sobre
rra, pero con derechos eternamente todo después de 1972, el dique co-
"a salvo", esperando la dotación eji- mienza a agrietarse peligrosamente
dal, el nuevo centro de población, y amenaza saltar en mil pedazos.
la restitución de terrenos comuna- Las eternas comisiones de uno o
les. . . Exejidatarios y excomuneros dos representantes del comité par-
desposeídos por los nuevos terrate- ticular ejecutivo comienzan a ser
nientes que progresivamente han sustituidos por grupos de 10, 100,
comprado, rentado, expropiado por 500 campesinos que ya no aceptan
deudas o simplemente robado las fácilmente las promesas y toman
parcelas ejidales o comunales. . . posesión de las oficinas. Y junto a

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las tomas de las oficinas de la SRA, den una marcha al D. F., promovi-
las marchas campesinas a las capi- da por la Unión de Campesinos y
tales de los estados y al D. F. co- Estudiantes de Tlaxcala y la Fede-
mienzan a generalizarse. ración Campesina Independiente de
Al mismo tiempo, en sus lugares Puebla, y con la solidaridad del
de origen, la marea campesina co- Frente Obrero Campesino Estu-
mienza a desparramarse sobre las diantil del estado de Puebla. La
tierras reclamadas. En Puebla, Tlax- marcha, que demanda solución a
cala, Sonora, Sinaloa, Chihuahua, los problemas particulares de cada
Oaxaca, Zacatecas, San Luis Poto- grupo además de reivindicaciones
sí, ... en el país entero, resuenan los generales, es frenada en Llano
golpes de machete contra los alam- Grande por dos compañías del ejér-
bres, y las cercas comienzan a ceder. cito que la interceptan a bordo de
En todas partes aparecen nuevos 18 transportes militares.
linderos, fogatas, banderas, campa- Pero la represión a la marcha no
mentos improvisados. frena la lucha, que en los meses
Una reseña exhaustiva es imposi- siguientes se desata impetuosa en
los dos estados: en julio de 1972 los
ble; sin embargo, es también indis-
pensable nuevamente registrar por campesinos de Santa Apolonia, en
lo menos algunos movimientos. Tlaxcala, toman tierras de las ha-
ciendas de Masaquiahuac, San An-
A partir de la marcha campesina tonio Micha y Santa Elena, y en
al D. F. en 1972, mencionar la lu-
septiembre, los de San Francisco
cha por la tierra en Puebla y Tlax-
Tepeyanco toman Mimeahuapan.
cala es ya un lugar común; pero En Puebla 400 campesinos de cua-
esta acción es simplemente la cul- tro poblados de Santa Inés toman,
minación de una serie de luchas an- en julio, 2,100 has. y constituyen so-
teriores y señala el inicio de una bre las tierras ocupadas el "Campa-
nueva etapa. mento Emiliano Zapata" que cuen-
Ya en enero de 1970, 500 cam- ta con apoyo estudiatil. En septiem-
pesinos de Monte de Chila (Pue- bre del mismo año, también en Pue-
bla) tomaron las tierras y fueron bla, se toman tierras en San Andrés
reprimidos por el ejército que in- v en la Manzanilla, y en diciembre
cluso bombardeó el pueblo . . . ¡ con 1,000 campesinos cuyos representan-
Napalm! En marzo de 1972, tam- tes habían participado en la mar-
bién en Puebla, los campesinos con cha ocupan 10 latifundios en Te-
apoyo estudiantil invaden la hacien- peaca, Atlixco y Tecamachalco. . .
da de Tepalcatepec y son desaloja- Las luchas por la tierra en Sina-
dos en octubre, etcétera. El 10 de loa son un ejemplo de persistencia
abril de 1972 cientos de campesinos y continuidad. En el Ta jito la pri-
en representación de 52 grupos de mera toma se da en diciembre de
Tlaxcala y 20 de Puebla empren- 1968 y es desalojada por la policía

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judicial. En febrero de 1969, los embargo, se logra la excarcelación
campesinos ocupan nuevamente las de los detenidos.
tierras y una vez más son desaloja- En septiembre de 1972 un con-
dos por la policía. En mayo de 1972 tingente de 1,000 personas, entre
una tercera toma conduce a un si- campesinos y estudiantes, atacan ar-
tio militar con saldo de muertos y mados con machetes la cárcel de
detenidos. Angostura y después de tumbar
En Rancho Siboney la primera las puertas liberan a cuatro presos
toma se da en diciembre de 1971 y acusados de invasión.
es desalojada en febrero de 1972; En mayo de 1973 los campesinos
poco después, los campesinos ocu- de Montelargo toman nuevamente
pan de nuevo las tierras y en mayo las tierras que ya antes habían ocu-
son otra vez desalojados. En Alhuey pado en cuatro ocasiones, siendo de-
los campesinos ocupan las tierras salojados en todos los casos. En julio
en diciembre de 1971 y son desalo- del mismo año invaden tierras 86
jados; sin embargo, en noviembre campesinos del ejido Las Flores.
de 1972 nuevamente 283 campesi- En Durango algunas luchas tie-
nos toman 7,380 has. y, una vez nen antecedentes en la marcha enca-
más, son desalojados. En Rancho bezada por Alvaro Ríos en 1966.
Rebeca 400 campesinos toman Así, en marzo de 1970 los campe-
1,000 has. en julio de 1971 : son de- sinos de Cienaguilla, que habían
salojados y presos sus dirigentes. En participado en esa acción, obtienen
mayo de 1971, 168 ejidatarios de la tierra después de dos invasiones.
Los Hornos, El Gallo, Hidalgo y Sin embargo, posiblemente lo más
anexos toman 460 has. importante en el estado es la amplia
Una de las luchas que tiene ma- participación campesina en el mo-
yores repercusiones es la de Rancho vimiento popular de enero de 1970
California. El 14 de junio de 1971 contra el gobernador Páez Urquidi.
se da la primera toma que es rá- Esta participación se combina con
pidamente reprimida, pero para el tomas de tierras, y durante el mis-
22 del mismo mes los campesinos mo mes de enero se ocupan latifun-
toman nuevamente las tierras. Aho- dios, entre ellos los de Santa Teresa
ra la represión incluye la quema de y Santa María del Oro. En octubre
las casas, pero también la respuesta del mismo año se presentan inva-
es más amplia: el 30 de junio 3,000 siones de tierras en el municipio de
personas, entre campesinos y estu- Hidalgo.
diantes, realizan un mitin en Culia- Dos regiones de Chihuahua des-
cán exigiendo castigo a los respon- tacan en la lucha por la tierra. En
sables de la represión, libertad a los el distrito de Jiménez, durante el
presos y solución a los problemas mes de junio de 1970, dos organi-
agrarios de la entidad. Hay enfren- zaciones, la CCI (Danzón) local y
tamientos con la fuerza pública; sin la Unión de Ejidos del Distrito cor-

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dinan las acciones de más de 200 pación de la exhacienda de Jalpa
solicitantes que toman tierras en en el municipio del mismo nombre.
Héroes de la Revolución, Feo. Villa, Se toman tierras en el municipio de
China Guapa y El Pilar, Javier Rojo San Francisco del Rincón y en el
Gómez, etc. Por otra parte, el Co- municipio de Purísima de Bustos;
mité de Defensa Popular organiza la invasión de Los Arcos es repri-
en abril de 1972 un encuentro cam- mida por el ejército, de la misma
pesino-estudiantil con participación manera que las tomas en los muni-
de 10 organizaciones campesinas y, cipios de Manuel Doblado y San
dos meses después, 300 solicitantes Felipe. Para este mes se calcula que
toman 11,000 has. del latifundio hay 46 invasiones en el estado.
Quintas Carolinas con apoyo del En marzo de 1973 cinco grupos
CDP. toman 1,000 has. en: Santa Anita,
En julio de 1973 campesinos de la municipio de Cortazar, San José de
CCI que invaden 50,000 has. en los Llanos, municipio de Guanajua-
Guerrero, Cuauhtémoc y San Fran- to y exhacienda de Tapétaro, mu-
cisco de Borja, son desalojados y nicipio de Cuerámbaro. El mismo
algunos detenidos. Días después un mes otro grupo toma el rancho To-
grupo de campesinos y estudiantes masito. En agosto 1,000 campesinos
toman las oficinas del DAAC en del CAM invaden la exhacienda de
Chihuahua exigiendo la libertad Santa Ana y en octubre hay una
de los presos. nueva toma en Las Brujas, muni-
En Jalisco destaca la toma de la cipio de Abasolo.
Delegación Agraria de Guadalajara También en 1972 se multiplican
en octubre de 1972 por 200 cam- las tomas en el estado de Michoa-
pesinos de la CCI, que representan cán. En julio los campesinos ocupan
grupos de 30 municipios. La ocu- 200 has. en San Pedro Jorullo; en
pación se prolonga por seis días y agosto se hacen invasiones en Santa
sólo abandonan el local después de Inés y San Antonio; en septiembre
lograr la destitución del jefe del en el Valle de Zamora, etc.
Departamento Técnico. Meses des- El nacimiento del "Campamento
pués, en enero de 1973, 1,000 cam- Tierra y Libertad" es sin duda la
pesinos de Colula que habían par- expresión más importante de la lu-
ticipado en la toma del DAAC cha por la tierra en San Luis Po-
invaden la hacienda de San Diego tosí. A partir del Frente Sindical
siendo desalojados por el ejército a Independiente Obrero-Campesino,
los 10 días. En julio del mismo año constituido con un puñado de acti-
1,000 campesinos invaden 1,030 has. vistas en 1972, cobra fuerza la or-
en Ovejo, municipio de Zapotlán. ganización de los solicitantes de la
En Guanajuato, numerosas tomas zona que en febrero de 1973 for-
se concentran en el mes de mayo de man un comité coordinador. La de-
1972. La UGOCM encabeza la ocu- cisión de tomar la tierra y los planes

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para realizarlo no son aquí total- 1,000 has. del latifundio de los Abas-
mente espontáneos; en efecto, en cal en los valles centrales del estado.
otras partes del país existen ya im- La COCEO y la COCEI nacen en
portantes experiencias, y algunos 1973 y en febrero del mismo año
miembros del comité coordina- los campesinos de Zimatlán toman
dor realizan una visita a Tlaxca- el latifundio de Candiani; días des-
la para aprender de ellas. En ju- pués, en Santa Gertrudis siguen el
nio de 1973, los grupos de Otates ejemplo invadiendo cuatro peque-
y C'rucitas toman La Mata, y ñas propiedades", en los dos casos
al desalojo responden con un mi- con importante apoyo de los sec-
tin de 2,000 cairìpesinos y un tores que comenzaban a organizar-
intento de marcha al D. F., que al se en la COCEO.
ser bloqueada por el ejército ter- Con mayor o menor trascenden-
mina en comisión al DAAC. A par- cia, también en otros estados de la
tir de esta acción se constituye en República la lucha por la tierra de-
Otates un campamento permanen- semboca en invasiones: en Queré-
te, que en años posteriores será el taro 1,000 campesinos del CAM
centro coordinador de las luchas por toman Casablanca en junio de 1972.
la tierra tanto en las Huastecas En Tamaulipas 400 campesinos de
como en parte de Zacatecas, Vera- la CCI ocupan dos ranchos en Rey-
cruz, etc. En noviembre de 1973, nosa, el 11 de octubre de 1972. En
numerosos campesinos del campa- Sonora, los jornaleros no sólo se mo-
mento toman las oficinas del DAAC vilizan por hambre en 1971, en oc-
en el D. F., realizan una huelga de tubre de 1972, un grupo de solicitan-
hambre y otras acciones. tes, encabezado por el CAM toma
La constitución de las Coalicio- el predio de Capetamaya, en Navo-
nes Obrero-Campesino-Estudian- joa. En Nayarit, durante 1970, miles
tiles vinculadas desde el principio de comuneros ocupan los latifun-
a luchas campesinas es el síntoma dios ganaderos que les han sido re-
más importante del ascenso de la conocidos sobre el papel, y durante
lucha por la tierra en Oaxaca. Sin más de una semana desarticulan la
embargo, los conflictos por la tenen- represión militar tomando una y otra
cia anteceden a su estructuración vez las tierras, hasta que son sa-
orgánica. En julio de 1972 la de- cados del estado a bordo de trans-
puración censal en el ejido de San- portes del ejército.
ta Gertrudis genera un movimiento Además de las tomas de tierras,
contra los acaparadores de tierra otras formas de lucha se generali-
que culmina en una espontánea zan. En efecto, en Colima se realiza
manifestación campesina en la ciu- en septiembre de 1972 una mani-
dad de Oaxaca. En el mismo año, festación y mitin con asistencia de
los campesinos de Santa Catarina más de 1,000 personas entre obre-
Quiané y La Ciénega toman las ros, estudiantes y campesinos, que

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exige dotación de tierras a los soli- persión y aislamiento rural fue sin
citantes y libertad para los presos. duda un serio obstáculo para la ge-
En marzo de 1972 se realiza en neralización del movimiento cam-
Coahuila una "caravana del ham- pesino. Pero precisamente por ello
bre" detenida cerca de Saltillo. el hecho de que a pesar de todo
Incluso los peones acasillados de éste se haya desatado a escala na-
las zonas más atrasadas del país cional, evidencia lo profundo de las
se incorporan a la lucha por la tie- raíces de su lucha. Reconocer su dis-
rra. En Chiapas, durante el mes de persión estructural no debiera servir
agosto de 1973, peones de Vista como alegato para subestimar el mo-
Hermosa y de otras haciendas ocu- vimiento campesino; por el contra-
pan 80 has. de la finca. rio, debiera ser un argumento para
La lista podría prolongarse inde- - en toda su -
apreciar importancia
finidamente sin que pasara de ser la considerable cohesión orgánica y
apenas una pequeña muestra de la política que llega a cobrar en unos
multidinaria lucha por la tierra que cuantos años, a contra corriente de
se desarrolla hasta 1973. Sin temor algunas de las condiciones objetivas.
a equivocarnos podemos afirmar que Todavía en 1970 las acciones son
las tomas se cuentan por millares en su mayoría dispersas y básica-
y los invasores por cientos de miles. mente espontáneas; pero en 1973
Naturalmente, las instituciones que presentan ya una sorprendente or-
tienen en sus manos la posibilidad ganicidad. De mil maneras, y casi
de cuantificar los conflictos ocultan siempre de abajo a arriba, los di-
cuidadosamente la información. Sin versos grupos campesinos se enlazan
embargo, los pocos datos oficiales v coordinan sumando sus fuerzas y
que se difunden son significativos: multiplicando su experiencia. Por
a fines de 1973, sólo en los estados todo el país surgen uniones, coali-
de Guanajuato, Tlaxcala y Michoa- ciones, alianzas, y en muchos esta-
cán se calculaban 600 invasiones. dos se constituyen frentes con im-
Por otra parte, cientos de veces se portante participación campesina.
toman las oficinas del DAAC en De entre las organizaciones cam-
provincia y en el D. F., y las mar- pesinas independientes de carácter
chas masivas a las capitales de los regional o estatal, las que aparecen
estados o a la ciudad de México en la siguiente lista se constituyen
se cuentan por decenas. antes de 1974, y la mayor parte
Ciertamente en el medio rural de ellas después de 1970: Unión
predomina la dispersión. Las con- Campesina Independiente ( Ve r a-
diciones socioeconómicas de los tra- cruz), Comisión de los Cien Pue-
bajadores del campo los hacen un blos (Veracruz), Liga Campesina
sector heterogéneo y además cons- Independiente de Valle de Guay-
tituido por núcleos comparativa- mas-Empalme (Sonora), Comité de
mente pequeños y aislados. Esta dis- Defensa de los Campesinos del Valle

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de Zamora (Michoacán), Unión de catecas, Comité de Defensa Popu-
Ejidos de la Costa de Jalisco. Frente lar (Chihuahua), Coalición Obre-
Independiente de Lucha (Nuevo ro-Campesina-Estudiantil de Oaxa-
León), Unión de Ejidos del Distrito ca, Coalición Obrero-Campesina-
de Jiménez (Chihuahua), Consejo Estudiantil del Itsmo, Unión de
Nacional Cardenista (Colima), y Campesinos y Estudiantes de Tlax-
Federación Obrero Campesina del cala, Frente Obrero-Campesisno-
Estado de Durango. Formadas des- Estudiantil del Estado de Puebla.
pués de 1973, pero con el mismo Incluso las propias centrales ofi-
carácter, podemos mencionar al cialistas operan en algunas ocasiones
Frente Campesino Independiente como instrumento para la moviliza-
(Sonora), a la Unión de Ejidata- ción campesina. Independientemen-
rios y Cañeros de Morelos "Plan de te de su comportamiento manipula-
Ayala", a la Alianza Campesina dor, que se expresa en posiciones
10 de Abril (Chiapas), etc. claudicantes y/o provocadoras, or-
Existen también organizaciones ganismos como el Consejo Agrarista
campesinas independientes que re- Mexicano, las dos Uniones Genera-
basan los limites regionales y se ex- les de Obreros y Campesinos Me-
tienden por diversos estados de la xicanos y la Central Campesina
República : Central Independiente Independiente de Garzón, tienen
de Obreros Agrícolas y Campesinos, que responder a la presión campe-
Campamento Tierra y Libertad sina promoviendo numerosas tomas
(que se inicia en San Luis Potosí y de tierras. Hasta la propia CNC se
se extiende después a Veracruz y hace responsable de algunas inva-
Zacatecas) . Federación Nacional de siones y los miembros de la Alianza
Trabajadores Ixtleros y Candelille- Nacional de Productores de Caña
ros (que aglutina campesinos de de Azúcar, también de la CNC, pro-
Coahuila y San Luis Potosí). mueven luchas tan importantes co-
Finalmente, se constituyen nume- mo la huelga cañera de 1972-73 en
rosas organizaciones de participa- Veracruz.
ción campesina con el carácter de Ciertamente estas organizaciones
frentes populares. En ocasiones son campesinas, o populares de partici-
de tipo puramente coyuntural, como pación campesina, no pueden ser
la de Durango durante el movi- desde el comienzo modelos de fun-
miento de 1970 contra Páez Urqui- cionamiento democrático y militan-
di, o la de Yucatán durante el mo- cia de base: en un principio su co-
vimiento de 1974 contra Loret de hesión interna es limitada, predo-
Mola, pero en otras ocasiones se con- mina el espontaneísmo y el caudillis-
solidan como organismos de lucha mo, y en algunos casos los plantea-
más o menos permanentes: Coali- mientos políticos de la dirección son
ción Obrero Campesino Misanteca francamente oportunistas. En estas
(Veracruz) , Frente Popular de Za- condiciones es lógico que algunas se

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desintegren espontáneamente o co- dización de la lucha de clases rural.
mo resultado de la represión - como Con el ascenso de un movimiento
la Liga Campesina Independiente, campesino, portador de reivindica-
desmembrada en 1971 - y que otras ciones que son incompatibles con el
sean conducidas por sus dirigentes específico sistema capitalista mexi-
a posiciones abiertamente claudican- cano - aunque no lo sean con el
tes como sucede con la Alianza modo de producción capitalista en
Nacional de Productores de Caña - se
general ponen de manifiesto los
de Azúcar. Sin embargo, muchas de límites del capitalismo en los países
ellas se consolidan orgánicamente y neocolonizados por el imperialismo.
tienden a desarrollar una mayor cla- Los rasgos esenciales del campo
ridad y cohesión políticas: Campa- mexicano están determinados por
mento Tierra y Libertad, Unión las funciones socioeconómicas que
Campesina Independiente, Frente le asignan las necesidades de repro-
Campesino Independiente, etc. En ducción y acumulación de un capi-
balance, puede afirmarse que en talismo periférico: a) Generación
un lapso sorprendentemente corto de excedentes agropecuarios expor-
el movimiento campesino logra una tables para financiar, así sea par-
considerable organicidad y comien- cialmente, la importación de bienes
za a desarrollar una clara indepen- de capital, b) Transferencia de
dencia, no sólo práctica sino tam- plusvalía generada por el trabajo
bién política, con respecto al Esta- rural para reforzar la acumulación
do. De las organizaciones mencio- de capital en el sector industrial,
nadas casi el 80 por ciento se forman c) Retención y liberación controla-
antes de 1974, y más de la mitad das de la mano de obra, dados los
surgen en el periodo que va de -
requerimientos crecientes pero li-
1970 a 1973. -
mitados e irregulares de fuerza de
trabajo por parte del capital urbano
II. Las causas del ascenso y rural.
del movimiento campesino Sobre todo a partir de 1940, el
sector agrario mexicano cumple más
1. La base estructuralde la lucha o menos adecuadamente estas fun-
de clases en el campo ciones gracias a su peculiar configu-
ración :
El ascenso del movimiento cam- a) Un sector de agricultores ca-
pesino en los últimos años tiene cau- pitalistas que cuentan con la mayor
sas coyunturales, pero hunde sus parte de las tierras de riego, lo fun-
raíces en las condiciones básicas de damental de los medios de produc-
la estructura socioeconómica del ción agrícola modernos y un abas-
país. Son las contradicciones de un tecimiento seguro de mano de obra
capitalismo dependiente y periféri- barata y temporal. Este sector - que
co las que se expresan en la agu- dispone, además, de todo el apoyo

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oficial en lo que respecta tanto al Pero la existencia de pequeñas
crédito, obras de infraestructura e explotaciones rurales cumple tam-
investigación agronómica, como en bién la función de regular el abaste-
lo que se refiere a la protección po- cimiento de fuerza de trabajo para
lítica y legal - produce fundamen- el resto de la economía: proporcio-
talmente para la exportación, y en na a la industria un flujo de mano
los bienes que orienta al mercado de obra suficiente para mantener
interno tiene ventajas comparativas bajos los salarios, satisface sobrada-
en los costos y obtiene superganan- mente las necesidades de trabajado-
cias. res permanentes y eventuales de la
b) Un sector de capitalistas agro- agricultura capitalista y, sobre todo,
comerciales y agroindustriales que retiene y garantiza la subsistencia
controlan y explotan a cientos de de los jornaleros que la agricultura
miles de pequeños y medianos agri- capitalista sólo emplea cíclicamen-
cultores refaccionando, comprando te y, en general, de la gran masa de
y procesando su producción. Estos trabajadores que el capitalismo de-
bienes, elaborados o semielabora- pendiente mexicano no puede absor-
dos, se destinan al mercado interno ber permanentemente.
o a la exportación, y en su venta se A partir del esquema anterior re-
realiza no sólo la plusvalía generada sulta claro que en la economía de-
en el procesamiento industrial, sino pendiente mexicana el capital no
también una parte o la totalidad obtiene plusvalía solamente del tra-
del plustrabajo que el productor di- bajo obrero y de la labor a jornal.
recto fue obligado a transferir. También el trabajo de los peque-
c) Una enorme masa de peque- ños productores genera excedentes
ños y medianos productores - más para la acumulación capitalista.
o menos mercantiles- que en su Este plusvalor de origen campesino
gran mayoría cultivan tierras de es transferido de dos maneras: al
temporal y disponen de escasos me- vender sus mercancías sistemática-
dios de produccin. Este sector se ve mente por debajo del valor - y tam-
obligado a vender a bajos precios bién del precio de producción - , y
bienes destinados directamente al al sostener parcialmente (median-
consumo popular, y abastece a las te el autoconsumo familiar y la
compañías agrocomerciales y agro- eventual contratación de peones)
industriales a cambio de un ingreso la fuerza de trabajo que las empre-
de subsistencia. En tanto que vende sas agrícolas subemplean. En el pri-
sin ganancias, transfiere sus exce- mer caso, el excedente transferido
dentes a la industria permitiéndole permite reducir artificialmente los
subvalorar su capital variable cuan- costos del capital industrial, propor-
do se trata de bienes de consumo cionando materias primas y bienes
obrero, o su capital constante cuan- de salario subvalorados; en el se-
do se trata de materias primas. gundo, subsidia a las empresas agrí-

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colas, que no tienen que hacerse vés de las crisis agrarias de nuestra
cargo de la reproducción integral época no avanza el capitalismo sino
de una fuerza de trabajo cuya dis- el socialismo, y en los movimien-
ponibilidad, sin embargo, les es in- tos campesinos de este siglo no se
dispensable en las temporadas de expresa la revolución burguesa en
mayores requerimientos laborales. ascenso, sino la necesidad de la nue-
Para configurar un sector rural va revolución.
como el antes descrito, el capitalis- El capitalismo dependiente me-
mo dependiente mexicano ha tenido xicano es asediado por crecientes
que apropiarse de tierras y recur- luchas populares y será inevitable-
sos, que alguna vez fueron de los mente derrocado por ellas, no sólo
campesinos, para ponerlos en ma- porque ha creado con un numeroso
nos de los empresarios agrícolas jun- proletariado a su futuro enterrador,
to con la fuerza de trabajo "libe- sino también porque ha desposeído
rada", pero, a la vez, está obligado y arruinado, sin poderlo proletari-
a conservar a estos mismos campe- zar, a un no menos numeroso cam-
sinos en posesión de una parte de pesinado que también le está ca-
las tierras y de los recursos, tanto vando la fosa.
para que produzcan mercancías a
precios bajos como para que repro- 2. La crisis del modelo de desarrollo
duzcan parcialmente a la parte de agropecuario
la fuerza de trabajo que el sistema
a) La crisis de la producción
no puede asimilar integramente bajo
formas netamente capitalistas. agrícola
Esta es la base estructural de la Por lo menos desde 1940 y hasta
lucha de clases en el campo mexica- 1965, la agricultura mexicana cum-
no. En la explotación del trabajo ple las funciones que le asigna la
rural fincada no sólo en la expro- reproducción económica y social del
piación del productor directo sino capitalismo dependiente.
también en mantenerlo encadenado Durante 25 años la oferta de pro-
a los medios de producción de ma- ductos agrícolas crece más rápido
nera parcial y limitada, se encuen- que la población, lo cual, entre otras
tran las raíces del actual ascenso cosas, permite abastecer el mercado
del movimiento campesino. interno y mantener relativamente
Cuando esta estructura se tamba- bajos los precios de los alimentos.
lea política y económicamente, lo En otras palabras, durante casi 30
que está entrando en crisis no son años el trabajo de los campesinos
los residuos precapitalistas del pa- permite mantener casi estancado el
sado, y los cambios sociales que se costo de la vida en las ciudades, de
anuncian en ello no son en el sen- modo que la presión para el aumen-
tido de un mayor desarrollo del ca- to de los salarios industriales no es
pitalismo en la agricultura. A tra- demasiado intensa.

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Otro de los efectos de este creci- tos (hortalizas, etc.), la reducción
miento de la producción es la dis- del valor de las exportaciones de
ponibilidad de sobrantes cada vez otros (algodón, azúcar, henequén,
mayores para la exportación, lo cual, ganado, etc.), sumado a las cre-
combinado con la reducción de las cientes importaciones de bienes de
importaciones, permite que la balan- consumo de origen agropecuario
za comercial de productos agrope- (maíz, trigo, arroz, oleaginosas, lác-
cuarios arroje en 1965 un saldo fa- teos, etc.), conduce a México en
vorable de más de 600 millones de 1974 a dejar de ser un país expor-
dólares. En otras palabras, durante tador de productos agrícolas para
casi treinta años el trabajo de los convertirse en un país importador
campesinos permite exportar volú- de los mismos. En la medida en
menes crecientes de productos agri- . que el crecimiento de las exporta-
colas, generando parte de las divisas ciones de origen industrial no com-
necesarias para que la industria im- pensa el cambio de signo en el in-
porte la tecnología requerida para tercambio externo de productos
su desarrollo. agrícolas, aumenta aceleradamente
Pero a partir de 1965, y sobre el saldo rojo en la balanza comer-
todo de 1970, este "milagro mexica- cial que tiene que compensarse con
no" comienza a resquebrajarse. El un endeudamiento externo creciente
crecimiento de la producción agrí- y conduce inevitablemente a la de-
cola, que de 1940 a 1965 había sido valuación.
a un promedio del 5 por ciento, En lo interno, el creciente déficit
disminuye de 1965 a 1970 al 1.2 por de la oferta de bienes de consu-
ciento anual, y de 1970 a 1974 prác- mo de origen agropecuario, que tie-
ticamente se estanca al reducirse la ne que compensarse con compras a
tasa de crecimiento promedio anual altos precios en el mercado inter-
al 0.2 por ciento. Naturalmente, la nacional, genera una incontenible
población ha seguido creciendo, de elevación de los precios con la con-
modo que en el último periodo el siguiente alza del costo de la vida.
producto agrícola por persona sufre A pesar de que se intenta cargar
una reducción promedio de 2.6 por sobre los hombros del proletariado
ciento cada año. todo el peso de la crisis, los salarios
Rebasa los límites de este trabajo obreros tienen que aumentar, lo cual
el análisis de las múltiples repercu- deriva en aumentos más que pro-
siones de esta crisis de producción. porcionales de los precios de los
Para nuestros fines nos bastará es- productos industriales. Los efectos
tablecer la secuencia de algunas de este proceso se suman a los de la
de las concatenaciones más impor- devaluación, agudizando aun más
tantes. la espiral inflacionaria.
El lento crecimiento del valor de Tampoco corresponde a este tra-
las exportaciones de ciertos produc- bajo el análisis de las causas inme-

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diatas de esta crisis de producción; La ruina generalizada de los
sin embargo, es evidente que después pequeños campesinos, el empobre-
de treinta años la desmedida explo- cimiento progresivo de muchos agri-
tación del trabajo agrícola -en be- cultores medianos, y el rápido cre-
neficio principalmente del capital cimiento de la masa de campesinos
industrial- ha llegado a su límite, sin tierra y con escasas oportuni-
y la gallina de los huevos de oro del dades de empleo, coloca a la ma-
capitalismo mexicano agoniza. El yoría de los trabajadores rurales
estancamiento o la ruina del peque- en condiciones de infrasubsistencia.
ño y mediano productor agrícola, Esta situación, que no es nueva, se
explotado hasta el agotamiento, y la agudiza aceleradamente hasta ha-
orientación hacia una agricultura cerse social y políticamente explo-
especulativa y principalmente de siva a fines de la década de los se-
exportación de la mayor parte de los sentas y principios de los setentas.
subsidiados y sobreprotegidos em- Para explicarnos este aspecto de
presarios capitalistas, han provocado la crisis es necesaria una mínima
una crisis que se manifiesta en pri- revisión de las tendencias históricas.
mera instancia en la insuficiente El reparto agrario que sigue a la
oferta de bienes de consumo, y cu- revolución de 1910, y que se in-
yos efectos se extienden a todo el tensifica durante el régimen de
sistema. Cárdenas, es, en general, lento y
burocrático y no entrega más que
b) Crisis de la agricultura
minifundios; sin embargo, durante
campesina y desocupación casi cuarenta años sirve para vincu-
creciente
lar a la tierra a un número crecien-
La crisis de producción es sólo te de campesinos. De 1915 a 1940 se
un aspecto, y ni siquiera el más im- dota de parcelas a 1.7 millones de
portante, de la crisis socioeconómi- campesinos. De 1910 a 1950 el nú-
ca y política del sector rural du- mero de campesinos sin tierra no
rante el sexenio de Echeverría. deja de disminuir (1910: 3.1 mi-
Si la insuficiencia de la produc- llones, 1930: 2.4 millones, 1940:
ción agropecuaria para satisfacer el 1.9 millones, 1950: 1.4 millones).
mercado interno y generar exceden- Pero el censo de 1950 es definitiva-
tes exportables configura una crisis mente el que muestra un número
de producción, la paulatina contrac- menor de campesinos sin tierra en
ción del ingreso de los trabajadores toda la historia de México.
del campo hasta niveles inferiores De 1950 a 1970 el número de pe-
a los de subsistencia se expresa en queños productores con tierra no
el ascenso espontáneo de la lucha sólo no aumenta sino que disminu-
campesina y genera una crisis so- ye, pasando de 2.5 millones a 2.1
cial y política de enormes propor- millones; mientras, el número de
ciones. campesinos sin tierra casi se du-

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plica pasando de 1.4 millones en orientan fundamentalmente a elevar
1950 a 2.5 millones en 1970. Para la composición orgánica del capi-
este último año, los trabajadores del tal agropecuario. En efecto, si en
campo que no tienen tierra propia 1940 la proporción del costo de la
-
aunque en muchos casos cultivan producción agropecuaria entre ma-
tierras a medias o de la familia - quinaria y jornales era 1-3, para
superan ya en 400,000 a los cam- 1960 la proporción era ya 3-2.
pesinos que disponen de una par- Además, la mayor parte del em-
cela. pleo que genera la agricultura em-
Pero la insuficiencia de las tie- presarial es temporal e irregular.
rras en manos de los campesinos Si el aumento demográfico, com-
no sólo se expresa en los 2.5 mi- binado con el estancamiento de la
llones que carecen de parcela, pues agricultura campesina, genera en
casi dos millones de los que sí están los últimos 25 años una creciente
en posesión disponen de minifundios desocupación rural, la crisis gene-
temporaleros que no les proporcio- ral de esta agricultura - que de una
nan lo suficiente para subsistir, de forma u otra sostiene a los subocu-
tal modo que tienen que sumarse - a fines de la década de los
pados
a los que carecen de tierra en busca setentas lanza a la lucha por la sub-
de ingresos complementarios.1 sistencia a más de 4 millones de
La población campesina aumen- campesinos.
ta, pero el número de predios y la 1 Frecuentemente se hablade que 2.5 millo-
cantidad de tierras de labor en ma- nesde trabajadores del campodependen exclu-
nos de los pequeños productores sivamente de su salariopara subsistir, y que
otros2 millones de minifundistasdependen tam-
permanece casi estancado desde
biéndel jornalpara subsidiar una producción
1950. Por otro lado, sólo una par- parceliariaque operaconpérdidas. Si estofue-
te del crecimiento demográfico ru- ra así habríaque admitir que el capitalagra-
ral es absorbido por el capital como riosostiene íntegramente a 4.5 millones de fa-
miliasa pesarde que sólo consume su fuerza
fuerza de trabajo asalariada. En de trabajode maneralimitaday temporal, lo
efecto, de 1940 a 1970 la industria cual es un absurdoevidente. En realidad,vista
globalmente, la situaciónse nos presenta exac-
y los servicios no absorbieron más tamente a la inversa.Si los subocupados del
que a tres de cada 10 nuevos traba- campono muerenes porqueen realidadsub-
jadores rurales (28 por ciento del sistende trabajarlas tierrascampesinas. De
crecimiento de la PEA agrícola de maneramiserable y precariael minifundio eji-
dal o privado,pocomásde 2 millones de pre-
1940 a 1950, 32 por ciento de 1950 dios,tieneque sostener a casi 5 millonesde
a 1960 y 36 por ciento de 1960 a trabajadoresy susfamilias, sinmásapoyoque
el ingresoque una partede estostrabajadores
1970). La agricultura capitalista, puedenobtener comoasalariados fueradel sec-
por su parte, tampoco ocupa a la torminifundista. Casi 30 millones de personas
totalidad de esta mano de obra li- subsistenen lo sustancialde la pequeñay me-
berada, pues si bien en el mismo
dianaagricultura campesina, y éstatodavíaes-
tá obligadaa producir excedentes parael mer-
periodo se incrementan considera- cado internoy la exportación, pagadosmuy
blemente las inversiones, éstas se pordebajode suvalor.

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En esos 4.5 millones de subocu- duetos campesinos tradicionales; el
- 2.5 millones
pados estructurales precio al productor de frijol aumen-
de campesinos sin tierra propia y ta apenas levemente de 1965 a 1970
2 millones de minifundistas que re- y después se mantiene estancado
- hasta 1973, el caso del maíz es aun
quieren ingresos complementarios
tenemos la base social del movimien- más dramático pues en esos años
to campesino que conmociona al su precio incluso se reduce. Y todo
país en el sexenio pasado. Pero para esto en condiciones de un proceso
explicar su estallido no basta seña- inflacionario en que los precios ge-
lar la subocupación que se profun- nerales comienzan a aumentar ace-
diza aceleradamente a partir de leradamente.
1950, pues después de todo esta Pero este mecanismo de sobreex-
masa creciente de trabajadores sub- plotación a través del mercado para
siste de alguna manera durante va- forzar el incremento de la oferta y
rias décadas; es precisamente hasta de la transferencia, tiene límites.
que sus precarias formas de subsis- Llega un momento en que el cam-
tencia se ven asfixiadas por la crisis pesino ya no puede asimilar las pér-
cuando se lanza a una lucha incon- didas, el proceso de desacumulación
tenible. hace crisis y el campesino deja de
La explicación de la ruina de la producir, o por lo menos produce
agricultura campesina es muy sim- menos y deja de vender, retrayén-
ple. De manera intuitiva el capita- dose al autoconsumo.
lismo mexicano había descubierto De 1971 a 1974 la superficie co-
que la agricultura familiar se com- sechada de maíz se reduce en más
porta de manera muy diferente a de un millón de has. (el 20 por
la empresarial: ante una disminu- ciento del total), y la cosechada
ción de los precios reales, el peque- con frijol se reduce en más de 600
ño productor, lejos de reducir la mil has. (el 31 por ciento del to-
producción como lo haría el empre- tal). Uno de los resultados del es-
sario capitalista, aumenta la oferta trangulamiento de la economía
en un intento por mantener el in- campesina es la crisis de alimen-
greso mínimo de subsistencia. Este tos; pero el efecto principal es la
hallazgo afortunado, utilizado por crisis de las precarias condiciones
el Estado, le había permitido en las de reproducción de los trabajadores
últimas décadas lograr incrementos del campo. Esto habría sido sufi-
notables en la oferta de productos ciente para poner en movimiento a
agrícolas manteniendo estancados las masas de los explotados rurales;
los precios y sin realizar inversio- pero aun confluyen otros factores
nes en el sector de los pequeños y coyunturales que aceleran el ascen-
medianos productores. so o lo agudizan localmente.
En particular este fenómeno es En 1964 terminan los programas
muy notable desde 1965 en los pro- de braceros que daban salida hacia

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los EU a una buena parte de los colaboran a la agudización de la
desocupados mexicanos. Si bien esta lucha de clases en el campo.
medida no acaba con la emigración Por casi 50 años el Estado sos-
(de 1971 a 1975 son deportados 2.8 tuvo que la reforma agraria no ha-
millones de "ilegales") sí la hace bía terminado; el reparto de tierras
más difícil, y reduce las posibilida- era una práctica cada vez más limi-
des de reintegrarse al país con aho- tada y las parcelas entregadas es-
rros. taban en los cerros o en el desierto,
La reducción en 1974 de los pre- pero el reparto agrario seguía siendo
cios internacionales del algodón de- una esperanza manejada demagógi-
termina una drástica reducción de camente por el gobierno y millones
los cultivos (sólo en Sonora, de 1974 de campesinos "con derechos a sal-
a 1975 dejan de cultivarse con al- vo" creyeron por muchos años en
godón casi 100,000 has.) y su sus- ella.
titución por el cultivo mecanizado Durante el régimen de Díaz Or-
de trigo. El efecto es la desocupa- daz el Estado mexicano renuncia
ción de enormes ejércitos de pizca- abiertamente a la línea principal de
dores. su demagogia agrarista y, al decla-
La reducción de los cultivos de rar que "el aspecto distributivo de
caña, que de 1972 a 1974 se restrin- la reforma agraria ha terminado",
gen en más de 30,000 has., acom- destruye de golpe las esperanzas
pañada por una contracción de los seculares mantenidas por millones
rendimientos, recorta drásticamente de solicitantes.
tanto la demanda de fuerza de tra- Las afirmaciones de Norberto
bajo para la zafra como los ingresos Aguirre Palancares en el sentido de
de los cortadores. que "ya no hay tierra que repartir
La reducción de las inversiones y no existen latifundios", significan
del Estado durante 1971, principal- un reconocimiento explícito de que
mente en lo que se refiere a las obras las grandes propiedades agrarias tie-
de infraestructura, desemplea a una nen todo el apoyo del Estado y que
enorme masa de campesinos que tra- las solicitudes de afectación ya no
bajan eventualmente en la construc- prosperarán. Con este franco reco-
ción. nocimiento de lo que era ya una
realidad, el DAAC renuncia a su
c) Crisis de la política agraria principal arma de manipulación
ideológica.
No es sólo la desocupación y la Esto significa que el trámite agra-
ruina de la economía campesina rio por la tierra, el proceso legal
lo que ocasiona el ascenso de la lu- eterno pero esperanzado, ya no tie-
cha rural. Junto a los factores socio- ne sentido. Esto significa también
económicos, factores políticos, como que la CNC, apéndice "campesino"
la crisis de la demagogia agrarista, del DAAC, pierde su razón de ser

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y se ve privada de toda capaci- siempre presente en el medio rural,
dad de negociación pues su función pero cuando la agitación campesina
fundamental es "representar" a los aumenta en razón directa a la mi-
campesinos en el aspecto de la te- seria y la desesperación del explo-
nencia de la tierra. Al sumarse a la tado del campo, también la repre-
posición oficial de que "ya no hay sión se extiende y profundiza.
tierra que repartir", la CNC pierde Sin embargo, las raíces de la lu-
lo poco que le quedaba de su ya cha son profundas y la violencia
deteriorada eficacia como organis- reaccionaria no puede contenerla
mo de control. fácilmente, y, por el contrario, la
Precisamente en los momentos en radicaliza. Cada vez con más fre-
que la presión campesina sobre la cuencia el Estado se ve obligado a
tierra se hace más imperiosa, los enviar "gobierno" en auxilio de los
aparatos de control oficialistas re- explotadores rurales y sus guardias
nuncian a manejar, siquiera dema- blancas, y en muchas zonas comien-
gógicamente, esta demanda, y el re- za a desarrollarse la contraviolencia
sultado es explosivo. El campesino campesina bajo diversas formas: in-
se ve cada vez más empujado a pro- surrecciones espontáneas en Yucatán
mover sus reivindicaciones por otras o Chiapas, pueblos que se defien-
vías, y el recurso a las organizacio- den con las armas en la mano, como
nes distintas a la CNC se impone en Puebla o Veracruz, grupos gue-
como única alternativa. rrilleros con apoyo y hasta compo-
Algunas centrales campesinas, ofi- sición campesina como en Chihua-
cialistas pero independientes de la hua o Guerrero, etc.
CNC, aprovechan esta coyuntura Los factores de la crisis social y
para fortalecerse. La CCI de Gar- política del campo mexicano se vie-
zón y las dos UGOCM se muestran nen acumulando durante la década
dispuestas a apoyar de manera de- de los sesenta, y al inicio del régi-
magógica o aventurera la lucha por men de Echeverría se combinan con
la tierra, y gracias a ello logran la crisis económica que se encarga
fortalecerse a la par que la CNC se de profundizarlos. Para 1970 el mo-
debilita. Sin embargo su situación vimiento campesino está en franco
es incómoda, pues sostener un mo- ascenso, y para 1973 ha cobrado
vimiento abiertamente desautoriza- un carácter nacional y tiende a agu-
do por el Estado entra en contra- dizarse y profundizarse. El Estado
dicción con su vocación oficialista. se ve obligado entonces a revisar
Finalmente, un último elemento drásticamente su política agraria
de carácter político se suma a la buscando diseñar una alternativa
mezcla para hacerla más explosiva. que al mismo tiempo que contenga
La violencia de los explotadores ru- la lucha de clases en el campo, sea
rales, apoyados y solapados por la capaz de resolver la crisis económi-
fuerza pública, ha sido un factor ca de producción. Como veremos en

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el siguiente apartado, la alternativa seguir cumpliendo la función que
agraria echeverrista fracasa en los tiene asignada.
dos aspectos y lejos de atenuar el Dada la reticencia del capital pri-
movimiento campesino, en cierto vado, este apoyo económico a la
sentido colabora a agudizarlo y ge- agricultura tiene que correr a car-
neralizarlo. go del capitalismo de Estado, y de-
berá complementarse con un respal-
do técnico y organizativo también en
III. El fracaso de la política
gran escala.
oficial y la continuidad del Pero no se trata sólo de invertir
ascenso del movimiento más en la agricultura y mejorar los
campesino términos del intercambio de algu-
nos productos agrícolas; se trata
1. La primera política agraria también de cambiar el sentido de
de Echeverría la participación del Estado en el
sector agropecuario. La concentra-
En lo que respecta a la forma de ción de crédito y de las obras de
enfrentar la crisis económica del infraestructura en beneficio exclu-
sector agropecuario, la política de sivo del sector empresarial, y par-
Echeverría parte de reconocer que ticularmente del exportador, y el
"el modelo de desarrollo seguido abandono total de la gran mayoría
hasta ahora se ha basado en la des- de los ejidos y de la producción
capitalización de la agricultura" y para el mercado interno, habían te-
se plantea la necesidad de darle al nido un resultado contraproducente
sector agropecuario "un mayor apo- a la larga. Se trataba entonces de
yo económico que le permita capi- destinar una parte importante de los
talizarse y recuperar su dinamismo". nuevos recursos al apoyo del sector
Naturalmente no se trata de que ejidal y al estímulo de la produc-
la agricultura deje de jugar el papel ción para el consumo nacional, sin
de sostén del desarrollo capitalista que esto significara dejar de pro-
dependiente. Las exportaciones de teger y apoyar a la agricultura ca-
productos industriales, aunque cre- pitalista y al sector de exportación.
cientes, no eliminan la necesidad En la política agraria echeverris-
de exportaciones agropecuarias que ta el sector ejidal está llamado a
proporcionen divisas; la posibilidad ser un nuevo polo de desarrolo agro-
de exportaciones masivas de petró- pecuario que, supuestamente, debe
leo es una alternativa que aparece cubrir los huecos dejados por la
después y, en cualquier caso, está producción empresarial privada ;
bastante lejana. Se trata simplemen- además, debe de permitir un ma-
te de reducir por un tiempo la pre- nejo más racional, planificado y
sión sobre el sector agropecuario eficiente de los recursos, ya que el
para que salga de su crisis y pueda sector de capital privado había re-

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sultado demasiado especulativo y cesos de comercialización de la pro-
exclusivamente preocupado por ma- ducción agropecuaria, tendiente a
ximizar sus propias ganancias desa- racionalizar la intermediación re-
tendiendo los "intereses sociales". duciendo las ganancias comerciales-
Naturalmente, los "fines socia- especulativas y transfiriendo limpia-
les" que puede cumplir un sector mente el excedente producido por
ejidal más dinámico no son otros el campesino al sector industrial,
que los objetivos generales del de- ya sea en forma de materias pri-
sarrollo capitalista del país. Este mas subvaloradas, ya en forma de
sector debe cumplir, con más efi- bienes económicos de consumo obre-
ciencia y economía, las metas de ro. En cuanto a las materias pri-
abastecer el mercado interno y pro- mas, se crean instituciones como
ducir excedentes para la exporta- Tabamex, Imecafé, Proquivemex,
ción, que el sector empresarial no etc. ; en cuanto a los bienes de con-
ha cubierto satisfactoriamente. sumo popular, se amplía considera-
Para que tal cosa sea posible, el blemente el radio de acción de
sector ejidal debe funcionar en for- Conasupo y se crean aparatos adi-
ma de empresas agrícolas, abando- cionales como el Fideicomiso para
nando la dispersión de la actual pro- Productos Agrícolas Perecederos,
ducción campesina; todo esto sólo etc.
puede darse si el Estado proporcio- Ampliación de la participación
na no sólo los recursos económicos del Estado en la comercialización
sino también la asesoría técnica, ad- de la producción agrícola, aumento
ministrativa, etc. Es decir, que los de la inversión estatal en el sector
ejidos sólo pueden funcionar como agropecuario orientada en gran me-
empresas dóciles a las necesidades dida al antes abandonado sector
del capitalismo nacional si operan ejidal, elevación de los precios de
como empresas controladas por el garantía, incremento del crédito
capitalismo de Estado. agropecuario dirigido a reforzar la
El modelo organizativo para es- producción para el mercado inter-
tas nuevas empresas agrícolas es la no, y todo esto combinado con una
colectivización ejidal, prevista en la política de promoción, organización
Ley General de Reforma Agraria, y asesoría tendiente a crear empre-
y el principal instrumento de coac- sas agrícolas de control estatal con
ción legal para imponerlo es la Ley el nombre de "ejidos colectivos",
General de Crédito Rural que, al tal es la solución que el régimen
establecer prioridades crediticias a echeverrista plantea para superar la
la organización colectiva, permite crisis económica del sector agrope-
chantajear a los ejidos. cuario. Pero la crisis económica es
Otro aspecto de la política agra- sólo una parte del problema rural;
ria echeverrista consiste en la mayor Echeverría se enfrenta también a la
participación del Estado en los pro- crisis política y social encarnada en

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un ascendente movimiento cam- campesina en las obras de infraes-
pesino. tructura rural, etc. Sin embargo,
En lo que se refiere a las reivin- las acciones que se emprenden en
dicaciones de los campesinos en tan- este terreno no son más que gotas
to que productores: mejores pre- de agua en el desierto y la presión
cios, créditos, obras de infraestruc- sobre la tierra no disminuye sensi-
tura, servicios, etc., el paquete de blemente.
políticas antes señalado debería, en Al mantener la misma posición
teoría, atenuar la agitación. Sin que el régimen anterior en lo que
embargo, la lucha por la tierra de respecta a la tenencia de la tierra,
los campesinos sin parcela o con el gobierno de Echeverría sigue en-
dotación insuficiente plantea un frentándose al movimiento campe-
problema distinto. sino, políticamente desarmado, y el
Hasta 1974, la respuesta echeve- ascenso ininterrumpido de la lucha
rrista a la lucha por la tierra se rural, que para 1973 es ya generali-
mantiene sustanciaímente en el mis- zado, es enfrentado por el régimen
mo terreno en que la había ubicado casi exclusivamente por la vía de la
el régimen anterior; las soluciones represión. Durante los primeros
que se intentan promover son siem- cuatro años del sexenio la presen-
pre periféricas a la cuestión en con- cia del Estado en el campo es bási-
flicto. A pesar de que en su toma camente militar, pues tanto las au-
de posesión Echeverría había dicho toridades agrarias como la CNC
que "legal y físicamente existen to- carecen de alternativas políticas
davía tierras susceptibles de ser dis- para enfrentar las demandas cam-
tribuidas", en los primeros años de pesinas.
su régimen la preocupación por el Para julio de 1973 el general
reparto agrario y por los problemas Hermenegildo Cuenca Díaz infor-
de la tenencia de la tierra son defi- ma a la prensa que ha recibido ór-
nitivamente secundarios en su polí- denes del Ejecutivo para implemen-
tica; por el contrario, se asume la tar la intervención generalizada del
tesis diazordacista de que ni existen ejército en el campo ". . .debido a
latifundios ni hay tierra que repar- que agitadores profesionales han
tir. En consecuencia la solución no venido promoviendo invasiones de
está en la dotación de tierras sino tierras de pequeños propietarios. .
en la creación de empleos. El secretario de la Defensa agrega
La subocupación del campesino que durante ese mes el ejército ha
sin tierra y del minifundista pre- desalojado invasiones de 28 predios
tende enfrentarse entonces promo- agrícolas en los estados de Colima,
miendo las pequeñas y medianas in- Guanajuato, Michoacán, San Luis
dustrias en el campo, apoyando la Potosí, Tamaulipas, Querétaro y
producción y comercialización de Tlaxcala.
artesanías, ocupando mano de obra En pocos años, la acción conjun-

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ta de guardias blancas y ejército Se dan fuertes movimientos con-
arroja un saldo de cientos de cam- tra los alcaldes impuestos por lo
pesinos asesinados, hombres y mu- menos en nueve municipios de Pue-
jeres torturados, pueblos quemados. bla, y en enero de 1975 hay tomas
Las cárceles del país están repletas de palacios municipales por lo me-
de campesinos que por lo general no nos en cinco de ellos. La respuesta
aparecen en las listas de presos po- popular al desalojo por el ejército es
líticos. A lo largo y a lo Micho del una manifestación en la ciudad de
país se confirma la expresión usual Puebla. En Cholula la lucha es par-
de los hombres del campo, que iden- ticularmente intensa: 3,000 perso-
tifica "gobierno" y "ejército"; pero nas toman el palacio municipal, y
nada de esto detiene el ascenso del al ser reprimidos organizan una
movimiento. manifestación en la capital del esta-
do y después una marcha al Distri-
2. Continúa el ascenso del movimiento to Federal.
campesino También en Oaxaca se desarro-
lla a fines de 1974 una fuerte lucha
Una vez más debemos intentar por la imposición en las alcaldías.
documentar la segunda fase de esta A las tomas generalizadas de los
lucha, cuyo registro se ha limitado palacios municipales se responde sis-
hasta ahora a las páginas de los temáticamente con la intervención
periódicos. del ejército (Zimatlán, Santa Ger-
Si hasta 1973 las acciones eran trudis, Xoxocotlán, etc.).
todavía básicamente dispersas y En Chiapas destaca la lucha de
apenas comenzaban a constituirse San Juan Chamula, una de cuyas
organizaciones regionales o estata- acciones más importantes es la to-
les, de 1974 a 1976 muchas de estas ma del palacio en octubre de 1974,
organizaciones se consolidan, nacen coincidiendo con la celebración en
otras y el movimiento tiende a ser San Cristóbal de las Casas de un
cada vez más coordinado, y en al- congreso indígena. Días después, el
gunos casos, también más definido ejército los desaloja con saldo de
políticamente. decenas de detenidos.
En el estado de México 600 per-
a) Lucha contra la imposición sonas toman el palacio municipal
política, por los precios y de Tenancingo en abril de 1975, y
por los salarios 500 toman la alcaldía de Cocotitlán
en diciembre del mismo año. En
Las luchas contra la imposición Jalisco 250 personas toman el pala-
política, por los precios de la pro- cio municipal de El Tuito en di-
ducción, por los salarios, etc., se ciembre de 1974. En Veracruz,
mantienen más o menos en el mis- 3,000 personas toman la alcaldía
mo nivel. de Choapas en septiembre de 1975.

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En Tulancingo, Hidalgo, 1,000 per- dico, pago de incapacidad por acci-
sonas toman el palacio municipal dentes de trabajo, etc.
y las oficinas del PRI en noviembre En enero de 1976 estalla la huel-
de 1975. ga en la empresa agrovitivinícola de
Las luchas más importantes por Batopilas, en Coahuila ; 64 trabaja-
el aumento de los precios siguen dores organizados en una coalición
siendo sostenidas por los ejidatarios desde 1973 exigen el cumplimiento
cañeros. En octubre de 1975, en del contrato y, después de un mes
Jalisco, el ejército tiene que inter- de paro, en el que cuentan con apo-
venir para evitar que paren 10 in- yo campesino y estudiantil, logran
genios cuyos abastecedores exigen el cumplimiento de sus demandas.
aumento de los precios de garantía.
En diciembre de 1976 el ingenio de b) Lucha por la tierra
Colipan, Puebla, es tomado por 400
cañeros que demandan el pago de Una vez más, es la lucha por la
los adeudos. Pero también otros tierra la corriente principal del mo-
agricultores se movilizan con de- vimiento campesino. En los últi-
mandas semejantes. En octubre de mos años del sexenio pasado la in-
1975 se realizan en Coahuila mani- contenible marea de las tomas de
festaciones por mejor pago del al- tierra ocupa el absoluto primer pla-
godón. no en la lucha de clases rural.
La lucha sostenida de los traba- En Guanajuato, donde existen
jadores del campo por los salarios 3,225 grupos de solicitantes, las in-
se mantiene también bajo la forma vasiones son particularmente impe-
de algunos estallidos espontáneos, y tuosas y la intervención militar re-
excepcionalmente, un conflicto de sulta tan omnipresente como infruc-
tipo sindical. Los henequeneros una tuosa. Para octubre de 1975, un
vez más se lanzan sobre Mérida, y funcionario reconoce que durante el
en septiembre de 1976 seis mil eji- año se han presentado 79 invasio-
datarios toman el palacio de gobier- nes, todas ellas desalojadas; pero en
no exigiendo mayores adelantos. noviembre los campesinos ocupan
Una experiencia importante de nuevamente las tierras y las tomas
organización y lucha de los jornale- se extienden por todos los munici-
ros de la zafra se desarrolla en la pios: Manuel Doblado, Apaseo el
zona de Tuxtepec, Oaxaca. A prin- Grande, Celaya, etc. A principios
cipios de 1976 sesenta trabajadores de 1976, 52 predios que estaban in-
paran el corte reclamando aumen- vadidos son nuevamente desaloja-
to; el paro tiene éxito y para fines dos. Para abril, la UGOCM enca-
de 1976, con el inicio de una nueva beza dos tomas de tierras de 2,500
zafra, el grupo ha crecido y ahora y 3,000 has. respectivamente, y un
80 trabajadores paran de nuevo y grupo de campesinos toma predios
logran salario mínimo, servicio mé- del Centro de Investigaciones Agra-

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rias del Bajío. Nuevos desalojos y gionalmente, aunque en otros cobra
nuevas tomas se suceden hasta el un carácter seminsurreccional y es-
fin del sexenio. pontáneo. En mayo de 1974 más
En Hidalgo existen 116 resolucio- de mil indígenas entre chamulas y
nes presidenciales sin ejecutar, y du- andreseros (de San Andrés Larráin-
rante los años de 1974 y 1975 se zar), salen de la selva con mache-
multiplican las tomas de tierras. A tes, armas de fuego y también tam-
principios de 1976 se habla de que bores y banderas. Asaltan fincas en
existen 70 predios ocupados por los el municipio del Bosque y matan a
campesinos, y para julio de ese mis- siete hacendados. Interviene el ejér-
mo año se calcula que 7,000 cam- cito. En octubre del mismo año, y
pesinos organizados en 130 grupos con otro carácter, se realiza un mi-
se han posesionado de 65,000 has. tin campesino-estudiantil en Tux-
en ocho municipios de la huasteca tla contra el latifundismo que im-
hidalguense. pera en el estado. En febrero de
En Colima la lucha campesina 1975 mil campesinos de Rubén
tiende a confluir en un amplio mo- Márquez, Tonalá, marchan al DF
vimiento contra el gobernador Ar- para denunciar un despojo de tie-
turo Noriega, franco representante rras. El asesinato del líder Bartolo-
de los terratenientes. En agosto de mé Martínez Villatoro, de Venus-
1974, quinientos campesinos del tiano Carranza, en septiembre de
Consejo Nacional Cardenista, que ese mismo año, tiene como respues-
representan a 40 pueblos, realizan ta un gran mitin en Tuxtla donde
una marcha exitosa al Distrito Fe- los campesinos están a punto de to-
deral. En abril de 1975, campesi- mar el palacio de gobierno. Inter-
nos del Consejo se ponen en huelga viene el ejército. En 1976 nace la
de hambre, y en diciembre del mis- Alianza Campesina 10 de Abril en
mo año se lleva a cabo una nueva una zona donde eran tradicionales
marcha, ahora a la ciudad de Co- las tomas de tierras para la tempo-
lima, que culmina con la toma de rada en que se inician los cultivos.
las puertas del palacio de gobierno. En 1976 se coordinan ocho grupos
Para marzo de 1976 campesinos del campesinos: Francisco Villa y
mismo estado se posesionan de la Cuauhtémoc del municipio de Vi-
SRA en el DF, y en mayo de ese lla Flores, otros de Villa Hidalgo,
mismo año ocho mil campesinos del Venustiano Carranza, Socoltenan-
Consejo, en una gran concentra- go, Tzimol, Comalapa, etc., y el 10
ción, rodean el palacio de gobierno de abril ocupan tierras de las fin-
exigiendo la caída del gobernador, cas de Cuemavaca, Nuevo Edén,
mientras Arturo Noriega se oculta. San Damián, La Selva, Argelia, Si-
En Chiapas se agudiza la lucha beria, Santa Inés, Pueblo Viejo y
contra los finqueros, que en algu- La Haciendita. En las semanas si-
nos casos llega a estructurarse re- guientes interviene el ejército con

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saldo de muertos, heridos y deteni- toman la delegación de la SRA en
dos. En octubre del mismo año, mil Zacatecas.
campesinos toman la delegación de Para abril de 1976 la lucha por
la SRA en Tuxtla. la tierra se agudiza y extiende por
En Zacatecas y San Luis Potosí todo el estado. Se habla de 48 pre-
el proceso de lucha por la tierra dios ocupados en 12 municipios, y
conduce a la constitución de orga- la Unión de Productores Agrope-
nizaciones regionales que le dan al cuarios denuncia 250 invasiones. En
movimiento consistencia orgánica y mayo, el Frente organiza un acto
política. en el que participan 8,000 personas,
En febrero de 1974 nace el Fren- y para junio la CIOAC y el Frente
te Popular de Zacatecas constituido implementan una serie de tomas
básicamente por estudiantes, cam- coordinadas y una gran marcha. A
pesinos y colonos, que llega a esta- partir de esto se profundiza la inter-
blecer contactos con más de 100 co- vención del ejército; muchos gru-
munidades y organiza mítines y ma- pos son desalojados, se queman po-
nifestaciones de hasta 20,000 per- blados y se detiene a campesinos,
sonas. Entre el Frente y la CIOAC pero también se tienen que hacer
se coordinan la mayor parte de las algunas concesiones: un teratenien-
tomas de tierras en el estado. En te "cede" 2,500 has. En julio la
abril de 1975, dos mil campesinos SRA afecta 1,643 has. para dotar
de Troncoso toman 5,136 has. In- a 89 campesinos, etc.
terviene el ejército. Para junio de El Campamento Tierra y Liber-
ese mismo año, el Frente organiza tad, que nace el año de 1973 en
una toma de tierras coordinada en San Luis Potosí, se extiende y con-
la que participan campesinos de solida a partir de 1974. En abril se
Quemada, Casa Blanca, Pozo Hon- toman 61 has. de riego en Puente
do y Boquilla del Carmen. Dos mil del Carmen con apoyo del Campa-
solicitantes ocupan 22,300 has. de mento. En mayo, 600 campesinos
cuatro latifundios. Paralelamente, se - seis de
pertenecientes a 13 grupos
realiza en la ciudad de Zacatecas solicitantes y siete solidarios - ocu-
una manifestación con más de 1,000 pan el latifundio de Maitines y en
asistentes entre estudiantes y cam- el mismo mes 50 campesinos inva-
pesinos. En octubre se multiplican den Pretiles y son desalojados. Pa-
las tomas de tierras en El Alto Ja- ralelamente, y como otra forma de
lisco, Margaritas, Santa Rosa y en presión, se toma la delegación de la
los latifundios de La Valencia y SRA. En julio los solicitantess de
Huejoquilla. En marzo de 1976 los los grupos fundadores de Otates y
campesinos de Sombrerete toman Crucitas, que habían sido desaloja-
5,860 has en manos de menonitas. dos, toman posesión de las tierras.
En abril, campesinos del Frente En mayo de 1975 un numeroso
pertenecientes a cinco municipios grupo de campesinos del Campa-

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mento toma el octavo piso de la legación de la SRA y 23 camiones,
SRA y realiza mítines en las calles. en protesta por un despojo de
Para setiembre de 1975 el traba- tierras.
jo del Campamento se ha extendido En Coahuila, los campesinos de
a diversos estados y se realizan to- Lerdo se movilizan al DF y toman
mas coordinadas en Santiago Hua- el octavo piso de la SRA en agosto
tusco (Veracruz), Nuevo Tule (Za- de 1975. En marzo de 1976 solici-
catecas), Rubén Jaramillo (Ta- tantes de tierras de Batopilas toman
maulipas), y Puente del Carmen las oficinas de Recaudación de Ren-
(San Luis Potosí). Paralelamente, tas. En abril del mismo año se rea-
un grupo de mujeres se posesionan lizan tomas de tierras en la zona de
del octavo piso de la SRA en el Torreón, y, en octubre, 1,000 cam-
DF. Dos de las tomas tienen éxito y pesinos invaden 13 propiedades y
se mantiene la posesión; en otras posteriormente 600 bloquean las
dos tienen que desaslojar. En di- carreteras próximas a San Pedro de
ciembre del mismo año, 250 cam- las Colonias.
pesinos del Campamento toman de En Chihuahua se refuerza la lu-
nuevo la subdelegación de la SRA cha por la tiera en 1976: a fines de
en Ciudad Valles. En marzo los febrero, 600 ejidatarios de Casas
campesinos de Otates ocupan una Grandes toman 24,000 has. en ma-
fracción que les faltaba: Siete Le- nos de mormones, y posteriormente
guas. invaden 50,000 has. más; a pesar de
El asesinato del líder Eusebio que son desalojados, para abril hay
García en julio de 1976 tiene como por lo menos 18 predios invadidos,
respuesta inmediata una gran ma- lo que representa 34,000 has. ocu-
nifestación y la toma de la SRA en padas por los campesinos. En mayo,
el DF. Con el mismo carácter se 500 campesinos invaden tres pre-
realiza en julio otra manifestación dios más en Villa Almada y 200
en Ciudad Valles. chocan con la policía con saldo de
Con mayor o menor amplitud, un muerto y siete heridos.
la lucha por la tierra se extiende a En Puebla sigue la tradición de
todos los estados de la República: las marchas. En 1974 se movilizan
en Michoacán, en noviembre de por la libertad de Danzos (CCI),
1975, se toman tierras en La Paz, y en agosto de 1975 quinientos cam-
municipio de Epitácio Huerta, y en pesinos de Tlaxcala, Puebla, Hidal-
enero de 1976 interviene el ejército go y Veracruz realizan una mani-
con saldo de muertos. En el mismo festación en Teziutlán. En octubre
mes 400 campesinos del municipio de 1975 estalla la lucha por el agua
de Coeneo, miembros de la CCI, en 56 ejidos del distrito de riego
toman el octavo piso de la SRA. En de Tecamachalco; 1,500 campesi-
abril, campesinos y estudiantes de la nos salen en marcha al DF y la po-
Normal de Tiripetío toman la de- licía secuestra a 100 manifestantes.

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En octubre de 1976, 200 campesi- de El Pichón en septiembre de 1975,
nos toman el Rancho de San Isidro. interviene el ejército y la respuesta
En el estado de México, 100 es una manifestación frente a la
campesinos de Oxotitlán toman 234 SRA del DF con apoyo de otras
has. en noviembre de 1975. Un gru- organizaciones. En octubre del mis-
po organizado en el Frente Campe- mo año, 300 campesinos de la CCI
sino Emiliano Zapata toma tierras invaden tierras en tres municipios.
en Santa María Zacazonapan en En Baja California Norte campe-
mayo de 1976, y, el mismo mes, 700 sinos de la CCI invaden 60,000 has.
campesinos invaden tierras en Te- en Héroes de BC, Ensenada, en
mascalcingo y son desalojados. septiembre de 1976. Interviene el
En Jalisco, durante abril de 1975, ejército. En el DF la lucha campe-
seiscientos campesinos de Zacoalco sina por la tiera se centra en los
manifiestan en Guadalajara contra despojos que causa el crecimiento
la represión. En junio, campesinos de la ciudad: en 1974, protestas de
del Movimiento de Organización los campesinos de San Pedro Már-
Socialista (MOS) invaden 1,600 tir que son despojados de sus tierras
has. en Tlajonulco y Manzanilla para la construcción de la Univer-
de la Paz. En diciembre se reali- sidad Militar, y durante 1975, mí-
zan tomas de tierra en Lagos de tines contra despojos de tierras en
Moreno. Desierto de los Leones, San Mateo
En Nayarit, comuneros de San Tlatengo, Santa Rosa Xochiac y
Juan Bautista invaden 400 has. del Magdalena Contreras.
municipio de Jalisco en octubre de Mas adelante trataremos la lu-
1975, y en mayo de 1976 miembros cha en Sonora y Sinaloa, pero con
de la Brigada Agraria Adolfo Ló- lo reseñado hasta ahora resulta ya
pez Mateos (CNC) ocupan 19 evidente que de 1974 a 1976 el mo-
predios. vimiento campesino por la tierra es
Prácticamente no hay un estado nacional y no deja de agudizarse; y
de la República donde no se regis- resulta claro también que la repre-
tre por lo menos una toma. En Oa- sión, inusitadamente generalizada,
xaca, durante 1974, tomas en Tla- resulta impotente para frenarlo; por
lixtac, el Trapiche, Xoxocotlan, etc. el contrario, en 1975 y sobre todo
En la Huasteca veracruzana, 29 in- en 1976, el ascenso llega a un punto
vasiones durante 1975. En Nuevo máximo. Pese a la insuficiencia de
León, 900 has. en Agualenguas son la información y a la poca confia-
ocupadas en noviembre de 1975. En bilidad de las fuentes, algunos datos
Guerrero, 40 campesinos de Los resultan significativos: para octu-
Amates invaden 50 has. del frac- bre de 1975 se reconocen 79 inva-
cionamiento "Tres Vidas en la Pla- siones en Guanajuato, y en la Huas-
ya" e intervienen el ejército. En teca veracruzana se habla de 29 to-
Tamaulipas se invade la exhacienda mas de tierras; para julio de 1976

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hay 130 tomas en Hidalgo con Ciertamente el régimen buscará
65,000 has. invadidas. Durante el que sus nuevos planteamientos so-
mismo mes, en Sonora están ocupa- bre la tenencia sean congruentes
das 21,000 has.; en Zacatecas, para con la alternativa que se ha traza-
el mes de abril, se reconocen 48 do para enfrentar la crisis agrope-
predios invadidos y, para diciembre cuaria de producción, y en los con-
de ese mismo año, los campesinos tados casos en que se les reconoce
están posesionados de 40,000 has. la posesión a los campesinos que
en Sinaloa. han tomado la tierra, el Estado
3. Rectificación de la política agraria acostumbra promover la "colectivi-
de Echeverría zación" y con frecuencia proporcio-
na créditos. Pero no debemos atri-
El viraje de la concepción eche- buirle un excesivo maquiavelismo a
verrista de la Reforma Agraria un régimen acosado por la lucha
-
que se da fundamentalmente a popular; en lo fundamental, el vi-
principios de 1975, y coincide con raje político de Echeverría es una
la transformación del DAAC en respuesta defensiva a la presión de
SRA y con la firma del Pacto las masas.
de Ocampo - le es impuesto al Los nuevos planteamientos agra-
régimen por la presión del movi- rios constituyen una ruptura con la
miento campesino. Este viraje res- política del DAAC diazordacista, y
ponde a la necesidad de instrumen- en esencia se basan en la tesis de
tar una alternativa política que que "la fase distributiva de la re-
frene el ascenso de la lucha, pues forma agraria no ha terminado".
a estas alturas resulta ya evidente Paralelamente comienza a recono-
que el intento de controlar al mo- cerse que existen aún latifundios
vimiento rural apelando exclusiva- encubiertos bajo la forma de "frac-
mente a la represión está llevando cionamientos simulados".
al campo a un práctico estado de Naturalmente, no se trata de ini-
guerra que amenaza con producir ciar un reparto agrario masivo que
estallidos masivos de contraviolen- por necesidad tendría que cues-
cia campesina. tionar la existencia misma de la
Son sintomáticas las palabras de gran propiedad privada en el cam-
Humberto Serrano (CAM) en el po. Echeverría y sus corifeos se en-
Congreso del Pacto de Ocampo: cargan de ofrecer reiteradamente
". . . Compañeros: o reformamos las todo tipo de garantías y segurida-
leyes o este país se incendia y nos des a la "auténtica pequeña pro-
quema a todos ..." En el mismo piedad". Se trata, simplemente, de
congreso la UGOCM se pronuncia contener la incendiaria presión cam-
contra las inafectabilidades agríco- pesina sobre la tierra, rencauzándo-
las y ganaderas, y la propia CNC se la por el camino del trámite le-
declara opuesta al amparo agrario. gal a través de las organizaciones

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oficialistas, y para ello es necesario la tierra no puede ser ni siquiera
mantener viva la esperanza de un mínimamente atenuada si el Estado
reparto agrario que no ha "termi- no dispone de alguna capacidad de
nado". negociación, y ni los intentos de ge-
Sin embargo, la esperanza de mi- nerar empleo industrial en el cam-
llones de campesinos sólo puede sos- po, ni la política de colonización se
tenerse si cuando menos una pe- la proporcionan. El Estado pide en-
queña parte de los solicitantes son tonces la colaboración de la bur-
efectivamente dotados, así sea como guesía agraria, sugiriéndole que
muestra que mantenga viva la ilu- sacrifique una parte mínima de su
sión haciendo confiables las pro- - ahí donde
propiedad territorial
mesas. la presión campesina es más fuer-
Una de las alternativas para re- te- con el fin de restaurar la paz
vitalizar el reparto agrario es el social y garantizar la seguridad de
impulso a la explotación agrope- la parte sustancial de sus propie-
cuaria del trópico húmedo, y, efec- dades.
tivamente, se promueve la coloni- Por otra parte, en un principio
zación del sureste sobre todo por la se trata de afectar únicamente la
vía de crear nuevos centros de po- propiedad territorial más atrasa-
blación ejidal. Pero el traslado de da, recortando algunos latifundios
los solicitantes de Michoacán o Gua- extensivos, reduciendo un poco las
najuato a la selva, en condiciones grandes propiedades ganaderas, en-
ecológicas hostiles y sin disponer de tregando tierras de agostadero o
los más mínimos recursos, fracasa temporal subutilizadas. Además, en
reiteradamente. Por otra parte, los las primeras afectaciones se sigue
planes que incluyen la construcción la práctica de ofrecerles jugosas re-
de obras de infraestructura agrope- muneraciones por su tierra a los an-
cuaria en estas zonas: Chontalpa, teriores propietarios.
Balancán-Tenosique, etc., resultan Esta reconsideración de la polí-
extraordinariamente costosos, con- tica sobre la tenencia de la tierra
ducen a catastróficos fracasos econó- responde, en primer lugar, a la ne-
micos y, definitivamente, absorben cesidad de enfrentar una agitación
muy poca mano de obra. rural para la cual la política ante-
Y si la alternativa de coloniza- rior no tenía alternativas, pero, ante
ción no es viable, no queda más la masiva reivindicación campesina
remedio que repartir algunas tierras de "tierra para el que la trabaja", es
ahí donde la presión campesina es demagógica y sólo busca ganar tiem-
mayor y, donde, normalmente, es- po con pequeñas concesiones que
tas tierras están en manos de gran- mantengan viva la esperanza en la
des propietarios. vía legal y las centrales oficialistas.
Definitivamente, la crisis política En segundo lugar, es coherente con
que ocasiona la lucha campesina por la solución a la crisis económica

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del sector agropecuario pues, por lo Pero además, la mayor partici-
menos en las zonas de un cierto pación estatal en el sector agrope-
potencial agrícola, la dotación de cuario, y en particular su promo-
tierras debe ir acompañada de un ción controlada de la agricultura
control técnico, económico y organi- ejidal, no tiene efectos sensibles, por
zativo que permita crear empresas lo menos en el corto plazo, sobre la
agrícolas "colectivas" que respondan crisis de producción. Pese a las cuan-
a las necesidades del desarrollo ca- tiosas inversiones el déficit se man-
pitalista en su conjunto. Finalmen- tiene, continúan las importaciones
te, los intereses de la agricultura y muchos proyectos ejidales "colec-
empresarial moderna, e incluso los tivos" fracasan estrepitosamente. La
de los grandes propietarios con consecuencia es que la política agra-
explotaciones extensivas, deberán ria del echeverrismo no satisface
ser respetados en lo fundamental y a los intereses del capital en gene-
seguirán teniendo el apoyo estatal. ral, no atenúa aquellos aspectos de
Contener al movimiento campe- la agitación campesina que provie-
sino y revitalizar los organismos ofi- nen directamente de la crisis de la
cialistas de control, superar la crisis pequeña producción, y no demues-
económica en beneficio de los inte- tra ni a la "iniciativa privada" en
reses del capital en su conjunto y su conjunto, ni mucho menos a los
a la vez respetar y seguir promo- agricultores capitalistas, que el "co-
viendo los intereses privados en la lectivo" de participación estatal es
agricultura, tales son los objetivos tanto o más rentable que la agri-
de la política agraria echeverrista. cultura empresarial y que, por lo
En todo lo esencial, esta nueva po- tanto, se justifica apoyarlo.
lítica fracasa. Pero la crisis general de la polí-
4. Fracaso de la nueva política agraria tica agraria echeverrista, que se ex-
presa claramente en el apoyo que
El movimiento campesino se en- todas las grandes organizaciones em-
frenta de manera inmediata con la presariales brindan a su fracción
burguesía agraria y particularmen- rural a fines de 1976, es resultado
te con su propiedad territorial. Esta, de un proceso gradual de fracasos
vista en su conjunto, es una contra- sucesivos que paulatinamente van
dicción antagónica. La mediación aislando al Ejecutivo y sus apéndi-
del Estado no sólo no logra conciliar- ces agrarios.
la sino que genera contradicciones La primera en oponerse tajante-
adicionales, pues ni el movimiento mente a colaborar con el proyecto
campesino se deja encauzar a un echeverrista es la burguesía agraria.
terreno controlable, ni la burguesía Al margen de cualquier considera-
agraria acepta colaborar cediendo ción que tomara en cuenta las po-
algunos recortes secundarios en su sibilidades y necesidades económicas
propiedad. y políticas del capitalismo mexica-

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no en su conjunto, los empresarios local y en ocasiones al ejército, re-
del campo se mueven casi exclusi- fuerzan sus "guardias blancas" y
vamente en función de sus intereses "columnas volantes" creando verda-
particulares e inmediatos. Implícita deros ejércitos particulares, etc.
o explícitamente expresan su pre- En los últimos años del sexenio
tensión de controlar toda la tierra, el ascenso del movimiento campe-
barriendo con el ejido cuando éste sino es paralelo a la agudización de
representa un obstáculo a su expan- las contradicciones entre el Estado
sión. En particular ven con profun- y la burguesía agraria. El gobierno
do desagrado la limitación de sus recurre sobre todo a la SRA y a las
derechos sobre futuras tierras de rie- centrales oficialistas, que basadas
go a 20 has., y con frecuencia en la nueva política logran revita-
bloquean proyectos de la SRH pre- lizarse y centralizarse con la firma
firiendo conservar sus grandes pro- del Pacto de Ocampo. Finalmente,
piedades de temporal. Finalmente, llega a recurrir al propio movimien-
se consideran con derechos casi ex- to campesino, al que pretende uti-
clusivos sobre el crédito y ven con lizar como elemento de presión y
malos ojos las prioridades que la chantaje.
nueva ley ofrece a la tenencia eji- Desarmado por la intransigencia
dal y comunal. de la burguesía agraria y la neutra-
Para defender estos intereses han lidad especiante de todo el sector
contado - y desean seguir contan- empresarial, y ante un movimiento
do - con el control político cuando campesino que presiona cada día
menos a nivel regional y en ocasio- más, el Estado recurre a la amena-
nes estatal. No sólo manejan a la za. Los propios "líderes" campesi-
GNOP y a la Confederación Nacio- nos priístas hablan de la necesidad
nal Ganadera, sino que controlan de suprimir el amparo agrario y re-
también, en muchos casos, a las de- ducir toda la propiedad privada en
legaciones y subdelegaciones de la tierras de riego a menos de 20 has.
SRA, la SAG, la SRH, etc., así Entre la espada campesina y la pa-
como a las gerencias regionales de red terrateniente nace el "neozopa-
los bancos agrarios. Por último, ha- tismo" oficialista.
bían impuesto casi siempre a las Frente al movimiento campesino,
autoridades municipales y con fre- la demagogia oficial surte un efecto
cuencia a los gobiernos estatales. contrario al que pretenden lograr
Con todo este poder se enfren- sus autores. Lejos de tranquilizarlo
ta el tímido proyecto echeverrista. y reducirlo a una pasividad espe-
Apenas los terratenientes son míni- ranzada en los trámites de sus
mamente afectados echan mano de adalides priístas, los nuevos plan-
todas sus armas: recurren al ampa- teamientos de la política agraria
ro, corrompen funcionarios, mane- estimulan al movimiento y colabo-
jan a su antojo a la fuerza pública ran a generalizarlo.

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El simple hecho de que se admita miento que era aún desigual y frag-
que el trámite agrario ha sido blo- mentario.
queado por años y debe agilizarse,
desata una verdadera avalancha de 5. El movimientocampesino y las
comisiones que se apoyan en el de- contradiccionesinterburguesas
magógico reconocimiento oficial del
burocratismo y la corrupción para En todo este proceso de múltiples
exigir soluciones legales, rápidas y contradicciones no son Ignacio Bur-
expeditas. goa y Félix Barra los actores prin-
El estilo personal de Echeverría, cipales; ni siquiera lo es Echeverría.
que recibe ocasionalmente a los Estos no son más que comparsas de
campesinos y hace promesas, genera una obra en la que el personaje es
un verdadero asedio el Presidente el movimiento campesino. Pese a
y los funcionarios mayores y me- la inmadurez de sus organizaciones
nores. y a su espontaneidad, el movimien-
El reconocimiento puramente ver- to campesino logra mantener la ini-
bal de que la lucha por la tierra es ciativa, y son las sucesivas oleadas
"justificable", basta para que cien- de su lucha los que modifican la
tos de miles de campesinos, aún in- correlación de fuerzas y agudizan
decisos, se animen a movilizarse. las propias contradicciones interbur-
La aceptación de que efectiva- guesas.
mente existen algunos latifundios La lucha de clases en Sonora y
simulados propicia que los campe- Sinaloa durante 1975 y 1976 es una
sinos destapen la cloaca de las infi- clara muestra tanto del fracaso de
nitas irregularidades, transas y co- la política echeverrista como del
rruptelas en las que se funda gran papel decisivo jugado por el movi-
parte de la propiedad territorial pri- miento campesino.
vada.
Finalmente, el reconocimiento de a) El caso de Sinaloa
facto a ciertos invasores, a quienes
eventualmente se les legaliza la po- Además del hecho de que 85 fa-
sesión, desata una oleada de tomas milias controlan 117,000 has. de rie-
de tierra en todo el país. go en el estado, un factor coyuntu-
La generalización espontánea del ral favorece el ascenso de la lucha
movimiento campesino forza cam- por la tierra en Sinaloa. La zafra
bios en la política agraria oficial, azucarera de 1975 es una de las me-
pero estos cambios, así sean dema- nores de su historia reciente, el 90
gógicos o precisamente por que lo por ciento de los productores tra-
son y no pueden hacerse efectivos, baja con pérdidas y, en 49 ejidos,
extienden la inquietud a todos los los campesinos queman cañaverales
rincones del país y hacen más ho- pues no les interesa trabajar para
mogéneo y generalizado un movi- resultar finalmente con números ro-

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jos. El resultado es que la produc- muchos de los invasores pertenecen
ción desciende en un 20 por ciento a las centrales oficialistas y con fre-
y 40,000 campesinos quedan desem- cuencia son forzados por sus "líde-
pleados. . . res" a desalojar las tierras; pero es
Durante todo el año de 1975 se evidente que las tomas responden a
suceden incontenibles las tomas de una necesidad de la base, y si las
tierras en el estado: en mayo, 1,500 organizaciones no las respaldaran
campesinos de El Navito y el Do- perderían el control y los campesi-
rado ocupan 50,000 has. çn Culia- nos se lanzarían por cuenta propia*
cán, Angostura y Salvador Alvara- En diciembre 2,500 campesinos
do. En noviembre, dos mil campe- invaden 1,000 has. de riego y para-
sinos de la UGOCM se instalan lizan los trabajos en otras 3,000;
frente a las oficinas de la delega- posteriormente se suman otros 2,500
ción de la SRA, y manifiestan que solicitantes y ocupan 40,000 has.
no se retirarán hasta que no se les más. Para este mes se calculan 76
entreguen 19,000 has. de riego del tomas de tierras en el estado, de las
Valle de Culiacán que están en po- cuales 70 son desalojadas.
sesión de 22 familias. En febrero de 1976 la UGOCM
Ante la presión, el gobierno del invade 3,000 has. del Valle de Cu-
estado habla de la necesidad de liacán, y el mismo mes la Federa-
"acelerar al máximo el reparto agra- ción de la Pequeña Propiedad se
rio" y la SRA se anima a repartir retira de la Comisión Tripartita
a campesinos de Culiacán 2,507 has. Agraria Estatal. A fines del mes se
pertenecientes a la familia Almada calculan 43 invasiones, la mayoría
Calles. La respuesta de la Federa- desalojadas; pero cinco predios si-
ción Estatal de la Pequeña Propie- guen ocupados. Para abril los pre-
dad es organizar un paro respalda- dios invadidos y ocupados han au-
do por comerciantes e industriales mentado a 39 en ocho municipios, lo
del estado y que cuenta con el apo- que representa 17,439 has.
yo del Consejo Coordinador Empre- Para mayo es necesario reforzar
sarial. Echeverría declara que "... al ejército que, como brazo armado
esos señores que pararon los tracto- del Ejecutivo, tiene que cumplir una
res, quisieron organizar hace tres doble función: por una parte frenar
años a sus mujeres con una mani- al movimiento campesino desalojan-
festación de cacerolas vacías, como do las invasiones, y por otra, evitar
en Chile, y también fracasaron. . los ataques a los invasores prove-
y a continuación pone en alerta a nientes de los peones a los que los
los campesinos. "pequeños propietarios" utilizan
Pero pese a los desplantes de como fuerzas de choque. Durante
Echeverría, las afectaciones son in- este mes, 66 predios que represen-
significantes y el movimiento por la tan 15,000 has. son desalojados.
tierra sigue impetuoso. Ciertamente Además de recurrir a la violen-

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cia directa los empresarios agrícolas ca con el secretario de la Defensa
presionan y negocian. Para junio "para lograr el apoyo del ejército
realizan un nuevo paro, y para sep- a fin de poner fin a la violencia en
tiembre el presidente de la Confe- Sinaloa". Esto no impide, sin em-
deración de Asociaciones Agrícolas bargo, que la CIOAC organice una
del estado de Sinaloa ofrece ceder marcha al DF con 7,000 campe-
10,000 has. y vender 17,000. Pero sinos.
la SRA se mantiene intransigente y
anuncia la afectación de 40,000 has. b) El caso de Sonora
Por su parte, solicitantes de la
Unión de Ejidos Independientes de Estructuralmente, la lucha por la
Obreros Agrícolas y Campesinos no tierra en Sonora se explica si toma-
se conforman con promesas y se- mos en cuenta que según el censo de
cuestran al delegado agrario y a 9 1970 el 72 por ciento de la PEA
funcionarios más exigiendo dotación agrícola del estado eran jornaleros,
de tierras para 25 grupos. y que según otras fuentes la región
En noviembre, después de que el llega a 80,000 campesinos sin tie-
decreto expropiatorio de Sonora ha rra. Por otra parte, también para
causado una conmoción nacional y 1970, se calculaba que el 30 por
la "iniciativa privada" cierra filas ciento de los ejidatarios rentaban
en torno a su sector agrario, la SRA sus parcelas. Pero para 1975 una
se olvida de sus promesas de afectar serie de factores coyunturales viene
40,000 has. y acepta el viejo ofre- a agudizar esta situación: por una
cimiento de 10,000 has. de riego, a parte la sustitución de una gran ex-
las que se agregan 3,500 de tem- tensión de las tierras sembradas de
poral. algodón por cultivos mecanizados
Para diciembre es evidente que de trigo; por otra parte, el cierre de
las migajas no pueden contener el un gran número de maquiladoras y
movimiento campesino, y pese al los recortes de personal en las res-
acuerdo de sus superiores de la SRA, tantes.
las centrales oficialistas tienen que En estas condiciones el ascenso
seguir respaldando las invasiones. de la lucha por la tierra en el es-
La CCI y la UGOCM ocupan 30 tado era inevitable y las tomas que
predios. Pero, además, 50 grupos de anteceden a la caída de Armando
la Vieja Guardia Agrarista parali- Biebrich, como la invasión protago-
zan 43,000 has. en los valles del nizada por los 250 campesinos de
Fuerte y del Carrizo. Hay en total San Ignacio Río Muerto, en el Valle
40,000 has. invadidas. del Yaqui, responden a una tenden-
Durante este mismo mes el go- cia natural y espontánea. Sin em-
bernador, que poco antes había bargo, esto no quiere decir que es
hablado de la necesidad de "acele- el movimiento campesino quien de-
rar el reparto agrario", se comuni- rroca al gobernador.

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Biebrich era un claro represen- promesas de dotación no se cum-
tante de la oligarquía local y es plen.
fama pública que su campaña fue El 7 de abril de 1976 el Frente
financiada por la familia Obregón,
Campesino Independiente ocupa el
neolatifundistas de la costa de Her-
predio San Pedro en el block 407
mosillo y del Valle del Yaqui. Con- del Valle del Yaqui, acompañando
secuente con sus patrocinadores, los su acción con el secuestro del dele-
planteamientos agrarios de Biebrich gado de la SRA y dos personas más.
son no sólo partidarios de la agri- Para el día 9 los campesinos liberan
cultura empresarial sino expresa- a los funcionarios pero declaran que
mente desfavorables al ejido, y por no dejarán la tierra: "Esperamos 18
tanto, a la política agraria del régi- años para invadir; el Valle del Ya-
men. Durante su campaña declara
qui será nuestro o no será."
que "... el ejido no está respon-
Durante ese mes se extienden las
diendo a las esperanzas que la Re-
invasiones y el día 14 se toman tie-
volución puso en él, pues no tiene
rras en Sombolibambo que son desa-
rentabilidad ni productividad...".
La renuncia del gobernador el 26 lojadas por el ejército el 15.
de octubre de 1975, después del ase- Por estos días todas las fuerzas
sinato de siete campesinos de San del agrarismo oficialista se concen-
tran en el estado en un intento de
Ignacio, es forzada por Echeverría;
pero la política agraria de su suce- imponerse tanto sobre el movimien-
sor Alejandro Carrillo Marcor, que to campesino como sobre los em-
en noviembre afecta 4,387 has. de presarios agrícolas indisciplinados.
Félix Barra promete no abandonar
riego para San Ignacio y firma
12 mandamientos sobre 22,823 has. el estado hasta no resolver el pro-
blema. La CNC y la CCI afirman
más, no responde solamente a la ne-
cesidad de someter al orden a la que en seis meses erradicarán el la-
tifundio. Echeverría, adalid de una
oligarquía terrateniente local, sino
fundamentalmente a la urgencia de tercera vía impracticable, regaña a
darle salidas políticas a un movi- todo mundo : "... Ni la violencia
miento campesino que amenaza con de latifundistas ni las invasiones son
hacerse incontrolable. buen camino . . .
Por otra parte, la caída de Bie- A pesar de la desautorización
brich y la demagogia agrarista de echeverrista, durante el mes de mayo
Carrillo Marcor - quien por cierto las invasiones se multiplican : tomas
es también terrateniente- lejos de en el Valle del Mayo y en el mu-
neutralizar al movimiento campesi- nicipio de Echojos, etc. Los ocupan-
no lo alienta y, en muchos casos, en tes del block 407 secuestran a dos
lugar de hacerlo controlable lo lleva policías estatales. Para junio el go-
a romper con las organizaciones ofi- bernador reconoce que hay 21,000
cialistas en la medida en que las has. invadidas.

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Para entonces, la SRA descubre dad de un movimiento que ha con-
una "solución" que debe dejar sa- ducido al fracaso todas sus alterna-
tisfechas a todas las fuerzas en pug- tivas anteriores, tanto las demagó-
na : se trata de una promesa de am- gicas como las represivas.
pliación del distrito de riego 41 sobre A fines de julio el ejército levanta
35,000 has., donde se encuentran el sitio al block 407 y se llega al
tierras ejidales cuyos poseedores no acuerdo de liberar a los presos, can-
las trabajan por falta de agua. La celar las órdenes de aprehensión y
criba para controlar y seleccionar a
respetar los derechos agrarios de
los solicitantes que deben ser dota- los ocupantes. Doce horas después,
dos es su disposición a participar en los campesinos posesionados desalo-
el desmonte de las nuevas tierras.
jan y realizan un mitin en el Cam-
A fines de junio la alternativa se
po 30.
derrumba estrepitosamente: el 27
De agosto a noviembre la pro-
del mismo mes las organizaciones
mesa de afectaciones no se cumple
campesinas independientes organi-
zan un gran mitin en Ciudad Obre- y los terratenientes mueven todos
sus recursos, entre ellos la promo-
gón contra la "solución" de la SRA. ción de 600 amparos. Presionadas
Paralelamente, los ejidatarios que ahora por la derecha, y ante un mo-
serían afectados, armados de palos
vimiento campesino que se mantie-
y piedras hacen huir de sus tierras a ne a la expectativa, las autoridades
los funcionarios de la SRA. Final-
dan marcha atrás y el 20 de agosto
mente, las propias organizaciones
del Pacto de Ocampo, temerosos Félix Barra declara que ya no será
de perder por completo el control de posible afectar los latifundios antes
sus bases, tienen que rechazar el rea- del lo. de diciembre.
comodo. Pero a estas alturas cualquier
Pero si las promesas demagógi- cambio en la posición de Echeve-
cas no resuelven el problema, tam- rría genera una reacción inmediata
poco la represión frena al movimien- en los verdaderos contendientes, y
to: al cerco militar del block 407, un día después de las declaracio-
el 3 de julio, se responde con una nes de Barra 400 campesinos del
asamblea permanente en Ciudad FCI ocupan de nuevo los blocks 407
Obregón y un cerco campesino al y 512. Para el día 26, a pesar de
cerco militar. que los del block 407 han sido obli-
La publicación en el Boletín Ofi- gados a desalojar, son ya 11 las
cial del Estado de que 80,000 has. nuevas invasiones en el estado. El
(40,000 de riego y 40,000 de agos- 18 de noviembre, por decreto pre-
tadero) están en investigación por sidencial, se expropian 37,131 has.
simulación y pronto serán afectadas, de riego en los valles del Yaqui y
es una posición que le es impuesta del Mayo y 61,655 has. de agos-
a las autoridades por la continui- tadero.

li

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La reacción de la oligarquía te- y, en definitiva, a los campesinos
rrateniente cuenta ahora con la soli- independientes sólo les corresponden
daridad de amplios sectores de la 2,000 de las hectáreas afectadas.
"iniciativa privada", que hasta ese Evidentemente, la cuestión que se
momento se habían mantenido a la debate en las confrontaciones entre
expectativa. Al grito de que "... las el echeverrismo y algunos de los sec-
brigadas de la SRA son la avanzada tores determinantes de la burguesía,
del desastre. . los "pequeños pro- no son 35,000 has., sino la política
pietarios" se lanzan al paro y cuen- agraria, y aun más, la política ente-
tan con el apoyo de las cámaras de ra del nuevo régimen lopezporti-
comercio de varios estados. El Con- llista.
sejo Coordinador Empresarial de Parece claro que la burguesía
Puebla, que coordina la solidaridad agraria, y en general todo el sector
con la oligarquía sonorense por par- empresarial, logran imponer al nue-
te de la burguesía organizada de 27 vo presidente un proyecto político
ciudades del país, califica a las me- totalmente distinto al de Echeverría.
" Sin embargo, no debemos perder de
didas de Echeverría de . . . avalan-
cha desestabilizadora del gobierno vista que la política agraria del ré-
contra los mexicanos que sí trabaja- gimen anterior no fue un capricho
mos y pagamos impuestos...". del Ejecutivo. Las contradicciones
Pero no sólo ante la burguesía estructurales de la agricultura me-
fracasa el intento echeverrista de xicana no son erradicables, y los
encontrar una alternativa política a factores coyunturales que las agu-
la crisis rural, pues, evidentemente, dizaron se mantienen; el movi-
las decenas de miles de solicitantes miento campesino continúa y nada
movilizados en Sonora rebasan con permite prever un reflujo prolon-
mucho el número de 8,000 campe- gado. En consecuencia, López Porti-
sinos que pueden ser dotados con llo, y la burguesía por él represen-
apenas cinco has. cada uno. Duran- tada, se enfrentan a una crisis
te todo el mes de diciembre el ejér- económica y política en el medio
cito sigue siendo el único aparato rural que no desaparecerá por más
del Estado capaz de ordenar míni- que se pretenda encontrar en la po-
mamente la situación en el campo lítica del régimen anterior al único
sonorense. Tres mil soldados desalo- responsable. Ante esta crisis existen
jan sistemáticamente las decenas de pocas alternativas burguesas de cor-
predios invadidos. te reformista que sean viables, y el
Además es necesario pagarles a fracaso de Echeverría es una mues-
las centrales oficialistas por los ser- tra de esto; pero su enfrentamiento
vicios prestados, de modo que el 94 apelando como único recurso a la
por ciento de las tierras es reparti- represión, tiene indudables efectos
do a sus incondicionales. Tres mil incendiarios y de ello también es
miembros del FCI son desalojados un claro ejemplo el sexenio pasado.

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IV. El carácter de clase del tipo de articulación de modos de
movimiento campesino en producción que define a la agricul-
tura mexicana, y de ahí se despren-
los últimos años
den deductivamente las clases pro-
Plantear la existencia de un mo- pias de cada modo de producción,
vimiento de los explotados del cam- así como las que provienen de su
po ascendente y nacional, implica articulación. Alimentando este mo-
reconocer que éste se ha extendido delo con datos estadísticos y censa-
y agudizado de manera espontánea ; les tenemos la radiografía de clases
pero para que este movimiento pue- del campo mexicano. En todo el
da ser concebido como una sola y proceso no ha sido necesario, no di-
gran corriente de masas es necesa- gamos ya vincularse con el movi-
rio encontrar en él una tendencia miento campesino, sino ni siquiera
principal, una serie de reivindica- tomarse la molestia de revisar la
ciones y objetivos centrales y gene- información existente sobre las lu-
ralizados. En este apartado nos ocu- chas efectivas que se están desa-
paremos de la tendencia principal rrollando hoy en el medio rural,
del movimiento campesino y su ca- pues después de todo, del esquema
rácter de clase. se desprende una caracterización
La primera evidencia que se nos "científica" del carácter que "debe"
plantea es la existencia en el medio adoptar la lucha de clases en el
rural de la más abigarrada gama de campo, y si el movimiento campe-
contradicciones, reivindicaciones, sino no quiere adaptarse a ella, peor
demandas y formas de lucha en para él.
las que se expresan las condiciones Sin juzgar por anticipado la vali-
socioeconómicas y las necesidades dez de estas categorías creemos, sin
de los sectores más diversos. Ante embargo, que éste no es el método
esta opacidad - que contrasta con correcto para abordar el problema
la limpia confrontación entre bur- del carácter de clase del movimien-
guesía y proletariado en las zonas to campesino. Y no lo es, sobre todo,
más nítidamente capitalistas de la en los momentos privilegiados en
formación social mexicana - es casi que un ascenso generalizado de la
un acto reflejo entre los teóricos lucha rural permite y exige abordar
que se han ocupado del problema el el problema de las clases en el cam-
echar mano a todo un arsenal de po precisamente a partir de su lu-
conceptos estructurales: "articula- cha real y efectiva.
ción de dos o más modos de pro- Naturalmente no se trata de que-
ducción", "subsunción formal del darse en la pura constatación de lo
trabajo por el capital", "produc- que sucede; la información concreta
ción mercantil simple", etc. debe ser interpretada con ayuda de
En base a estas categorías se ela- un instrumental teórico adecuado,
bora una caracterización general del y necesariamente tendremos que re-
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ferimos a la determinación estruc- producción y comercialización, cuya
tural que nos explique el "porqué" célula básica puede ser la comuni-
de tales o cuales manifestaciones y dad, el grupo solidario, la sociedad
nos permita establecer las tenden- de crédito o las diversas organiza-
cias y las perspectivas. Pero para ciones de productores aglutinados
que esto sea posible, la lucha de en torno a la comercialización, el
clases concreta debe ser tanto el financiamiento, etc. Las formas de
punto de partida como el resultado lucha son aquí la suspensión de en-
de la investigación, y no sólo la con- tregas o la búsqueda de vías alter-
clusión de un proceso deductivo que nativas de comercialización cuando
parte del mundo especulativo de las el conflicto se presenta en el pre-
categorías puras. cio de venta, y la organización in-
Como primer paso podemos agru- dependiente y autogestiva del tra-
par los diferentes movimientos tan- bajo cuando el conflicto se presenta
to por el tipo de sus reivindicacio- con los agentes que intentan con-
nes, formas de lucha y organiza- trolar la producción a través del
ción, como por la naturaleza de sus crédito. Los enemigos inmediatos
enemigos inmediatos. Al respecto re- son desde los acaparadores y usu-
sulta evidente, según la información reros locales hasta las compañías
disponible, que en el campo mexi- agrocomerciales y agroindustriales,
cano se han presentado en los úl- e incluso el propio Estado repre-
timos años por lo menos cinco tipos sentado por el Banco Agrario, la
de movimientos diferentes. Aseguradora, la Conasupo, Imeca-
Luchas por la tierra, cuya célula fé, Tabamex, etc.
básica son los grupos de solicitantes Luchas por los ingresos moneta-
aglutinados en torno a los Comités rios de tipo salarial, cuyas condi-
Particulares Ejecutivos, y que fre- ciones organizativas son extremada-
cuentemente están coordinados re- mente heterogéneas, pues van desde
gional, estatal o nacionalmente. Las las agrupaciones de tipo sindical,
formas de lucha van desde el sim- muy escasas, hasta las organizacio-
ple trámite legal en pequeñas comi- nes extremadamente informales de
siones, hasta las tomas de tierras los henequeneros, los trabajadores
pasando por las comisiones multi- de las zafras desocupados, etc. Una
tudinarias, las ocupaciones de ofici- forma de lucha es, evidentemente,
nas de la SRA, las marchas, etc. el paro de labores, pero ante su
Los enemigos inmediatos son tanto frecuente imposibilidad, se presen-
finqueros semifeudales como los de tan todo tipo de formas de presión
Oaxaca y Chiapas, como los lati- masiva. Los enemigos inmediatos son
fundistas ganaderos e, incluso, los los agricultores capitalistas en tanto
agricultores capitalistas en tanto que compradores de fuerza de tra-
que dueños de la tierra. bajo, pero también los hacendados
Luchas por las condiciones de v finqueros tradicionales que con-

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tratan peones, e incluso la banca De entre estas cinco vertientes
oficial cuando funje como patrón. del movimiento campesino, sin lu-
Luchas contra la imposición y el gar a dudas es la lucha por la tierra
despotismo y por la democracia a la que constituye hoy la tendencia
nivel de comunidad o de municipio. principal. Tanto por el número de
También aquí las formas de orga- personas involucradas como por la
nización son extremadamente diver- intensidad y radicalidad de los com-
sas, pues la lucha contra la impo- bates, e incluso por el grado de or-
sición y el despotismo se presenta ganización y conciencia de los lu-
en todo tipo de agrupaciones: eji- chadores, ha sido la vieja bandera
dos, comunidades, sociedades de zapatista de "Tierra para quien la
crédito, uniones, centrales campesi- trabaja" la que se ha colocado cla-
nas, etc. Sin embargo una de sus ramente en el centro de la lucha
manifestaciones más importantes es campesina de nuestros días.
la organización masiva de los po- Y la tierra por la que se lucha
bladores de los municipios contra no es sólo aquella que está siendo
la imposición de autoridades. En subutilizada, o que se encuentra en
este último caso, las formas de lu- manos de latifundistas extensivos y
cha más frecuentes son el apoyo a atrasados. No se trata de un movi-
candidatos independientes, las tomas miento contra la propiedad preca-
de presidencias municipales, y otras. pitalista.
El enemigo inmediato de estas lu- Los campesinos irrumpen en
chas se presenta normalmente bajo grandes latifundios de miles de has.,
la forma del cacicazgo local o re- pero también ocupan medianas y
gional con sus diversos apéndices: hasta pequeñas propiedades cuando
autoridades antipopulares, guardias los dueños no las trabajan por sí
blancas e incluso la propia fuerza mismos, o simplemente son caci-
pública. ques enemigos del pueblo; en mu-
Finalmente, cabe mencionar las chas zonas los campesinos se pose-
luchas por servicios como agua po- sionan de latifundios ganaderos con
table, caminos, asistencia médica, tierras declaradas de agostadero
escuelas, y demás. Aquí el poblado pero en realidad agrícolas, sin em-
es la célula básica y frecuentemente bargo, se toman también tierras cul-
se estructuran uniones regionales tivadas. Se rescatan en general te-
de comunidades que padecen los rrenos de temporal, pero, finalmen-
mismos problemas. Las formas de te, tampoco se respetan las "sagra-
lucha son las movilizaciones, las to- das" tierras de riego explotadas por
mas de las oficinas de las depen- grandes empresarios con fuertes in-
dencias del Estado, etc., y el ene- versiones y tecnología moderna.
migo inmediato es el propio Estado, Los campesinos reclaman tanto
en tanto que una de sus funciones las tierras sin cultivar o subexplota-
es proporcionar los servicios básicos. das como las tierras de aquellos

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que no las trabajan con sus propias ja" es la demanda central, unifica-
manos. Los campesinos reclaman dora y más generalizada del mo-
para sí la tierra toda. vimiento campesino.
Pero en algunos casos se atenta De los casi cinco millones de tra-
incluso contra la propiedad de otros bajadores del campo apenas poco
medios de producción. Cuando los más de dos millones tienen tierra
jornaleros de San Ignacio fueron ejidal o de propiedad privada ; pero
dotados, se subieron en las máqui- de ellos ocho de cada 10 no obtie-
nas que se encontraban en los cam- nen de su parcela ingresos suficien-
pos en ese momento, exigiendo que tes para subsistir. Es decir que casi
formaran parte de la expropia- dos millones de familias con parce-
ción. . . . las pequeñas en tierras malas y de
En esta lucha y en torno a esta temporal se ven obligadas a luchar
demanda confluyen minifundistas por más y mejores tierras, sin que
privados o ejidales con tierras insu- esto excluya el combate por mayo-
ficientes que completan su ingreso res precios para su producción, cré-
con el jornal, medieros o aparceros dito adecuado y otras demandas.
que ceden parte de su raquítica co- Por otra parte, existen poco más
secha, peones acasillados de las fin- de 2.5 millones de campesinos sin
cas del sureste que además de ser- tierra propia, muchos de los cuales
vir al hacendado trabajan una par- trabajan temporalmente en la par-
cela prestada. Participan, en fin, cela familiar o cultivan tierras en
todos aquellos que cultivando un aparcería, pero que dependen sin
pedazo de tierra para sí mismos no embargo fundamentalmente del
obtienen lo suficiente para subsistir jornal.
o tienen que ceder parte de su co- De estos sólo una pequeña mino-
secha. ría, generalmente especializada, tie-
Pero la fuerza principal de esta ne trabajo permanente y con salario
lucha son los campesinos sin tierra. de subsistencia; los demás depen-
Se incorporan a ella masivamente den de trabajos irregulares insegu-
los jornaleros eventuales o perma- ros y pésimamente pagados. De
nentes que trabajan para la agricul- ellos, más de un millón son jorna-
tura moderna e, incluso, muchos leros migratorios con empleo dis-
trabajadores irregulares de las ciu- continuo que viven la mayor parte
dades rechazados de nuevo al cam- del año hacinados en barracas.
po por el desempleo urbano. Se in- Es decir, que cerca de 2.5 millo-
corpora de una u otra manera la nes de trabajadores sin tierra pro-
enorme mayoría de la población pia, dependientes de un trabajo in-
rural trabajadora. suficiente, duro y mal pagado, están
Unos cuantos datos globales bas- empujados a luchar por una parce-
tan para explicar por qué la lucha la que les permita subsistir. Sin
por "la tierra para el que la traba- que esto excluya el combate por

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mejores condiciones de vida y tra- ciones propias de los pequeños pro-
bajo, mayores salarios, etc. ductores en su lugar de origen, y
Existen, pues, más de cuatro mi- tener demandas de jornalero en las
llones de trabajadores rurales sin zonas de contratación. Pero a la
medios de producción propios o con vez, es perfectamente posible que
medios insuficientes, empujados a donde trabaja como asalariado se
luchar por una parcela como alter- organice también como solicitante
nativa casi única de subsistencia. de tierra, mientras que en la comu-
Esto significa que el movimiento nidad de la que proviene ha creado
campesino porque la tierra sea del derechos agrarios y espera una am-
que la trabaja, está poniendo en pliación de ejido o participa en la
acción de manera más o menos de- lucha contra el terrateniente y el
cidida a una tercera parte de todos acaparador de parcelas.
los trabajadores del país. Pero si la Y no sólo se combinan las distin-
lucha por la tierra es la tendencia tas luchas, sino que con frecuencia
principal, hemos dicho ya que no se presentan como sucesivas para un
es la única y veremos ahora que mismo grupo. Así, por ejemplo, los
no es excluyente. que después de un movimiento por
Los mismos campesinos que agru- la tierra han logrado finalmente la
pados en torno a un comité parti- posesión, sea por la vía del trámite,
cular ejecutivo demandan la tierra, sea por invasión, se enfrentan inme-
pueden luchar como jornaleros en diatamente a las dificutades propias
las zonas de contratación por mayo- de los pequeños productores.
res salarios y mejores condiciones de Los éxitos de uno u otro grupo de
trabajo. Igualmente, muchas de las campesinos en su lucha por la tie-
familias que explotan una pequeña rra son parciales y no representan
parcela y se enfrentan al banco y a el final del combate sino el comien-
la aseguradora, o a los acaparado- zo de otras luchas igualmente difí-
res y prestamistas, luchan también ciles; ahora, como pequeños agri-
por una dotación más amplia, o por cultores afectados por otros proble-
parcelas para los hijos mayores. mas y acosados por diferentes ene-
El hecho de que un mismo cam- migos, ¿cómo iniciar la producción
pesino sea pequeño agricultor y a cuando se carece de recursos?, ¿có-
la vez trabajador asalariado; el he- mo subsistir hasta que se logre la
cho de que una parte del año tra- primera cosecha?, ¿cómo obtener
baje tierras propias o en aparcería crédito y a la vez no caer en manos
y el resto del tiempo se emplee como de los prestamistas y comerciantes?,
jornalero en la misma zona o en lu- ¿cómo mantener la unidad social y
gares distantes, lo empuja a desa- política del grupo ahora, sobre nue-
rrollar su lucha en todos los frentes. vas bases? El tránsito de una condi-
Así, un hijo de ejidatario puede ción socioeconómica a otra en ton
levantar con su familia reivindica- proceso continuo de lucha, con sus

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efectos en el desplazamiento de las también bajo la forma de contra-
contradicciones y en la metamorfo- dicciones estructuralmente no anta-
sis de los enemigos inmediatos, es gónicas pero que pueden agudizar-
uno de los problemas concretos se coyunturalmente.
más complejos a los que se enfren- La lucha por la tierra cuenta fre-
ta la lucha de los trabajadores del cuentemente con el apoyo de otros
campo. campesinos que poseen parcela, so-
En cuanto a los movimientos por bre todo cuando los solicitantes son
los servicios, o contra la imposición avecindados en una comunidad o hi-
y por la democracia, es claro que jos de ejidatarios; y también cuan-
los comparten por igual todos los do los campesinos ya dotados han
explotados y oprimidos del campo, logrado la tierra mediante una lu-
independientemente de cuál sea su cha. Este tipo de alianzas se expre-
principal frente de lucha en tanto san frecuentemente en organizacio-
que trabajadores. Sin embargo, este nes como el Campamento Tierra y
tipo de reivindicaciones, cuya célu- Libertad, El Frente Popular de Za-
la organizativa básica es el pobla- catecas, etc.
do, tienen mayores posibilidades de La lucha por mejores precios sos-
desarrollo donde los lazos de la vida tenida por los pequeños producto-
comunitaria son más sólidos. res ha contado en algunos casos con
Las tres vertientes del movimien- la solidaridad de los jornaleros,
to de los explotados del campo en como sucedió en la huelga de los
tanto que productores: lucha por ejidatarios cañeros de Veracruz. Y
la tierra, lucha por las condiciones a la inversa, la lucha de los jorna-
de producción y comercialización y leros por mayores salarios ha sido
lucha por los salarios y las condicio- eventualmente apoyada por los pe-
nes de trabajo, no son excluyentes queños productores.
en tanto que las relaciones de pro- Sin embargo, precisamente por-
ducción en el campo son complejas que se trata de intereses distintos,
y abigarradas, de tal manera que un pueden presentarse contradicciones
gran número de trabajadores estén entre ellos. Así, por ejemplo, es
sometidos sucesiva o paralelamente frecuente que los campesinos se en-
a las más diversas condiciones de frenten entre sí por la tierra, y, en
explotación. Pero esto no significa muchas ocasiones, esta contradic-
que ciertos sectores no tiendan a de- ción ha sido manipulada por los
finirse cada vez más, o que en un latifundistas y por el gobierno con
momento dado un grupo social no el fin de encubrir a los verdaderos
se identifique centralmente con una enemigos y desviar la lucha. Igual-
vertiente de la lucha. En estos ca- mente ha sucedido que los ejidata-
sos, la complementariedad de los rios cañeros se opongan a las reivin-
movimientos se manifiesta en alian- dicaciones de los cortadores de caña
za» permanentes o temporales, v dejándose utilizar por el ingenio

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que es el enemigo común. Incluso carácter de un sector se define fun-
se ha presentado el caso, en Sonora damentalmente por el contenido de
y Sinaloa, de que los trabajadores sus luchas, es necesario reconocer
permanentes de las empresas agríco- que hoy el campesinado mexicano,
las se presten a ser utilizados por como clase, está constituido tanto
sus patrones como fuerza de choque por los pequeños y medianos agri-
contra los solicitantes de tierra. cultores como por la enorme masa
En todos estos casos las contra- de jornaleros eventuales, expropia-
dicciones no son estructuralmente dos pero no plenamente proletari-
antagónicas, pero pueden eventual- zados, cuya alternativa más viable
mente agudizarse y con frecuencia en la lucha por la subsistencia es el
son los propios enemigos comunes combate por su campesinización.
auienes se encargan de esa labor. En cuanto a la lucha rural por
Sin embargo, en la práctica ha pre- reivindicaciones de tipo proleta-
dominado la tendencia a la unidad, rio, es sostenida por los jornaleros
8
incluso con sectores y clases no agrícolas pero también por ciertos
agrarias como los obreros industria- sectores que formalmente son po-
les y los estudiantes, y de ello son seedores de medios de producción,
testimonio los numerosos frentes po- como los ejidatarios henequeneros,
pulares regionales o estatales que pero que carecen de todo control
se han constituido en los últimos sobre su proceso de trabajo y cuyo
años. ingreso en forma de "adelantos" no
De todo lo anterior se desprende guarda ninguna relación con el vo-
que el movimiento por la tierra es lumen de su producción.
la tendencia principal, aunque no Más aun, son precisamente estos
exclusiva, de la lucha rural, y que últimos quienes se circunscriben a
las demás vertientes se enlazan con reivindicaciones puramente obreras,
ella y la complementan. Ha queda- pues carecen de toda alternativa de
do claro también que esta lucha la recampesinización, mientras que
sostienen fundamentalmente los jor- aquéllos, más cercanos formalmen-
naleros sin tierra aun cuando se in- te a la condición proletaria, tienden
corporan a ella campesinos pobres a explorar la alternativa de campe-
con tierras insuficientes, aparceros, sinizarse y dan luchas por la tierra,
peones acasillados, etc. En cuanto a
su carácter de clase, es evidente que 2 No consideramos aquí a los obreros
indus-
se trata de una reivindicación típi- trialesque trabajanen el campoy que han
camente campesina aun cuando las dado algunasluchaspor reivindicaciones pro-
pias y eventualmenteen apoyode las deman-
condiciones específicas de la forma- das campesinas: intentos in-
de sindicalización
ción social mexicana la lleven a dependiente y huelgasde los trabajadores de
cuestionar no las relaciones preca- los aserraderos
en Chihuahua, Chiapas,luchas
porel trabajo,o porla democracia sindicalde
pitalistas, sino la base misma de la los obrerosde los ingenioscomoen San Luis
propiedad capitalista rural. Y si el Potosío Veracruz, etc.

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aun cuando eventualmente aprove- como "Un sexenio de lucha de cla-
chen coyunturas favorables para dar ses en México 1970-1976" (Sergio
el combate por mayores salarios o de la Peña, Historia y Sociedad, No.
mejores condiciones de trabajo. 10) se analice incluso la salida de
Contra los que piensan algunos, Scherer del Excélsior, pero al movi-
desde el punto de vista del carácter miento campesino sólo se le dedi-
de clase de su movimiento, los cam- can cinco palabras: "embestida
pesinos mexicanos son hoy en gran agraria contra el latifudismo". In-
medida aquellos que aparecen co- cluso un autor especializado en cues-
mo asalariados en los censos de po- tiones agrarias como Roger Bartra,
blación mientras que, algunos de los en un artículo subtitulado "Refle-
que figuran como ejidatarios, están xiones sobre la coyuntura . política
dando luchas por reivindicaciones de 1976 en México" y sintomática-
del más puro corte proletario. mente titulado "Y si los campesinos
se extinguiesen. . ( Historia y So-
El movimiento campesino ciedad, No. 8) se dedica sistemáti-
" " camente a intentar demostrar "la
frente a sus intérpretes
desaparición tendencial del campe-
Aunque esto tiene sin cuidado al sinado . . . ", sin dedicar más que
movimiento campesino, cabe seña- una frase a las que sin duda consi-
lar que la lucha de los explotados dera luchas de agonía: "la lucha
del campo se ha desatado hasta co- campesina independiente y casi
brar un carácter nacional, a con- siempre espontánea se agudizó (in-
tra corriente de las opiniones de vasiones de tierra, guerrillas) ..."
buena parte de la izquierda mexi- Y todo esto escrito en 1976 en ple-
cana y de la gran mayoría de los no auge de la lucha rural.
teóricos marxistas que se ocupan de Aunque la práctica esté ya ba-
los problemas del campo. rriendo con ellas, la crítica teórica
El ascenso de la lucha rural y el de las posiciones que pueden con-
papel central que en ésta tiene el ducir a una ceguera total ante la
combate por la tierra, está ponien- importancia del movimiento cam-
do en crisis las "teorías" más o me- pesino está en gran medida por ha-
nos sofisticadas de muchos investi- cerse. Intentaremos aquí simple-
gadores; pero la mayoría de ellos, mente comentar algunas de estas
lejos de rectificar sus planteamien- posiciones.
tos penosamente elaborados, han Para muchos autores marxistas
preferido dedicarse a gesticular al el campo no es más que el terreno
paso del movimiento campesino, ca- de una inevitable y por demás con-
lificándolo de "antihistórico", "ro- veniente y necesaria proletarización.
mántico", etc., cuando no se han Basados en el principio general de
limitado simplemente a ignorarlo. que la tendencia del capitalismo es
Es sintomático que en artículos la completa descomposición del

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campesinado y constatando en las los que dan esta lucha o son "pe-
estadísticas que en México cada vez queñoburgueses" o están impregna-
hay más campesinos sin tierra, lle- dos de esta ideología individualista
gan a la conclusión de que "el 93.5 y atrasada. Todo hace pensar que
por ciento de los trabajadores del para estos autores ser campesino es
campo son ya proletarios o semipro- una enfermedad que sólo se cura
letarios"8 de tal modo que todo con la proletarización.
consiste en que se den cuenta de La cosa, sin embargo, no es tan
ello y actúen en consecuencia. sencilla. Si pese al gran número de
Los que sostienen esta posición no trabajadores que recurren al jornal
pueden menos que ver con descon- o dependen de él por completo, no
fianza, sino es que con franco desa- se da en el campo mexicano una
grado, acciones tales como marchas, amplia lucha de corte proletario, ni
tomas de las oficinas de la SRA, se desarrollan con fuerza los inten-
ocupaciones de tierra, etc., y su es- tos de organización sindical, no es
panto e indignación crecen cuando porque los trabajadores rurales no
los propios jornaleros de los distri- hayan tomado conciencia de su con-
tos de riego, típicos "proletarios" de dición, ni porque exista un "desfa-
empresas capitalistas, se lanzan a la 3 RogerBartraen Estructura
lucha por la tierra y por la recupe- Agraria y Cla-
ses Socialesen el CampoMexicano .
ración de su condición campesina.4 4 En el No. 8 de la revistaEstrategia,leemos
Para ellos la actual lucha de los "...Las invasiones campesinas...son simple-
menteuna formade lucha,a vecesdramática
trabajadores rurales, con o sin tie- y dolorosa , que imponeun alto precioa los
rra, que se enfrentan a un sistema campesinos. Una formade acciónespontánea
de explotación que los arruina como y un tantoromântica que revelala impacien-
cia y aun la impotencia de quienesrecurren a
productores y los mantiene en la ella...".
condición de parias buscadores de "... puñadosde campesinos aquí y allá,con-
un trabajo eventual, sólo sería revo- vencidosde que les asisteestederechoy em-
lucionaria si los jornaleros renuncia- pujadospor la desesperación y la miseria- y
a vecestambién la demagogia y el manipuleo
ran definitivamente a la tierra y los políticode líderesprofesionales - realizanin-
minifundistas aceptaran alboroza- vasiones, que si bienno les devuelven lo que
antesfuesuyo,sí contribuyen a que compren-
dos su ruina para reencarnar purifi- dan que. . . la manerade enfrentarse a estain-
cados en el paraíso de los prole- contrastable corrientehistóricano consisteen
tarios.6 tratarde revivir un pasadoque ya no volve-
rá. . (Los subrayados, obviamente, sonnues-
Desde el punto de vista mencio- tros,AB.)
nado, la lucha por reivindicaciones 5 Ibid "...la luchapor la tierratiendea
encubrir (y casi siempre lo logra) la relación
campesinas que hoy moviliza a un enraizadaen términos
tercio de la población trabajadora ya profundamente obje-
tivosentreel capitaly el trabajo... Es in-
del país, es reaccionaria, aunque dudableel éxitode la manipulación política,
por lo general los que así piensan ideológica y económica de la burguesía que le
ha permitido hasta hoyencubrir al enemigo
emplean términos más sutiles como principalde las masasrurales, y desviarsuslu-
"dolorosa", "manipulada", etc., y chashaciaobjetivos y enemigos secundarios. .

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Sarniento entre las condiciones obje- pues transformarse en jornalero in-
tivás y subjetivas".6 tegral es cobrar uno de los rasgos
Son las condiciones estructurales de la condición proletaria: la total
sobre las cuales se da el trabajo asa- desposesión, pero privado estructu-
lariado rural las que hacen obje- ralmente de las condiciones míni-
tivamente débil la capacidad de mas que le permitan negociar la
negociación de la mayoría de los venta de su fuerza de trabajo. Para
jornaleros. La desproporción entre el hombre del campo, la condición
la enorme oferta de fuerza de tra- de la mayoría de los jornaleros es
bajo y la limitada demanda, la la de parias entre los parias, y ésta
contratación temporal, la aventua- no es una ilusión ideológica sino
lidad en el trabajo, colocan al jor- una triste realidad.
nalero en condiciones objetivas de Definitivamente, la idea de que
inferioridad para reclamar reivin- en México la ruina del pequeño
dicaciones laborales y obstaculizan productor conduce al "renacimiento
su organización permanente de cor- del campesino en la figura del obre-
te sindical. No es que el jornalero ro" no es una "constatación" mar-
no se dé cuenta de su potencial xista ni tiene "consecuencias políti-
fuerza para negociar su fuerza de cas" que "enriquezcan la práctica
trabajo ; es que por lo general care- revolucionaria" ; es simplemente una
ce de tal fuerza potencial y por tan- especulación de gabinete.7
to difícilmente puede hacerla ob- Las peculiares condiciones del
jetiva. mercado de trabajo rural enfrentan
Esto no quiere decir que cuando a los vendedores de su fuerza de
las condiciones coyunturales colocan 6 Ibidem."Existeun desarrollo
al jornalero en una posición de fuer- profunda-
mentedesigualentrelas condiciones objetivas
za éste no recurra a las acciones de y subjetivas de la lucharevolucionaria. . . en
tipo proletario. Sin embargo, esta tantoque hoyla mayorpartede la plusvalía
y valoresgenerados en el camposonresultado
situación no es permanente ni ge- de la explotación a la que estánsometidos más
neralizada. de 4 millones de obreros . . las lu-
y jornaleros.
chas más numerosas continúan librándose en
Tampoco es por un simple pro- términos de la posesiónde la tierray no del
blema de conciencia que el campe- enfrentamiento entrecapitaly trabajo".Exac-
sino minifundista se resiste a perder tamente en el mismosentido Encarnación Pérez
su parcela y ve como la peor des- escribeen el No. 5 de la revistaSocialismo'.
"La sindicalización en el campose ha topado
gracia la perspectiva de transfor- con obstáculos grandes. Por un lado,la escasa
marse en jornalero integral. Cierta- laboren favorde la organización de los asala-
mente no se hace ilusiones sobre su riados,y porotrala enorme resistencianatural
de los burgueses agrarios y la faltade libertad
perspectiva como agricultor, y sabe paraalcanzarla derivadadel despotismo estatal.
bien que en México la vida del pe- A faltade sindicatos, los obrerosagrícolasse
organizan en comités ejecutivos
particulase con
queño productor está muy lejos de la ilusiónde obtener la tierra".
ser el paraíso, que nunca lo ha sido. 7 R. Bartraen "Y si los campesinos se ex-
Pero la otra alternativa es aun peor, tinguiesen..." Historiay Sociedad , No. 8.

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trabajo con los compradores capi- tes, pues lanzarse a la lucha por la
talistas en una relación, tan asimé- campesinización no impide desarro-
trica, que es difícil si no imposible llar paralelamente la organización
que el asalariado imponga el pago v las acciones tendientes a mejorar
"justo" de su fuerza de trabajo, es sus condiciones como asalariado, en
decir, un grado de explotación "nor- la medida en que la coyuntura se lo
mal". En la reproducción de esta permita. Sin embargo, es evidente
asimetría juega un papel importan- que si en un momento dado se trata
te el hecho de que muchos jornale- de elegir entre tomar posesión de la
ros puedan ser estructuralmente tierra o mantener sus reivindicacio-
obligados a colaborar en la repro- nes laborales, el trabajador decidi-
ducción de su fuerza de trabajo rá campesinizarse, pues el no hacer-
completando su salario insuficiente lo lo pone objetivamente del lado
con el ingreso de la parcela fami- del patrón y, como sucedió en So-
liar. Pero la situación del asalaria- nora y Sinaloa, lo lleva a ser mani-
do integral no es mejor, sino inclu- pulado y a tomar posiciones reac-
so peor, pues en la medida en que cionarias.
el mercado de trabajo rural es uno Ciertamente, el que tal o cual
solo, la competencia obliga a los parcela pase a manos de los campe-
jornaleros integrales a aceptar el sinos no es incompatible con la sub-
salario que sus compañeros mini- sistencia del sistema capitalista me-
fundistas estén dispuestos a recibir xicano, pero cuando la lucha por la
so pena de no conseguir trabajo. tierra es nacional y generalizada,
En estas condiciones es lógico cuando se sintetizan en ella los
que el vendedor de fuerza de tra- deseos de cuatro millones de tra-
bajo se resista a admitir un estado bajadores, cuando de hecho es un
de cosas por el que se condena a combate por la tierra toda, se trans-
aceptar la transacción en condicio- forma en una reivindicación que lle-
nes de absoluta inferioridad. Su vada hasta sus últimas consecuen-
única posibilidad es cuestionar las cias cuestiona la continuidad del
bases mismas de esta situación, re- régimen y es objetivamente revolu-
sistiéndose a admitir como definiti- cionaria.
va su condición de jornalero. Ciertamente esta lucha por la tie-
Cuando el asalariado agrícola, en rra toda no es socialista, pero tam-
lugar de formar un sindicato se or- poco debe ser subestimada en nom-
ganiza en un grupo de solicitantes bre de las reivindicaciones obreras.
y eventualmente se lanza a tomar Para el trabajador industrial que se
las tierras, elige la alternativa más enfrenta al hecho consumado de
radical e incluso la que tiene más que los medios de producción son
posibilidades inmediatas de éxito. de los patrones, y que está sometido
Lo cual, por cierto, no significa que a un proceso de trabajo complejo
las dos posibilidades sean excluyen- orientado a hacerle pensar que los

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misterios de la producción sólo pue- de partida del campesino es la con-
den ser dominados por técnicos y vicción de que los medios de pro-
administradores, el primer paso es ducción deben estar en manos de
la toma de conciencia sindical que los trabajadores y de que ellos mis-
lo lleva a negociar los términos de mos pueden controlar la produc-
la explotación, más no a cuestionar- ción, y por ello su lucha atenta más
la. Sólo posteriores tomas de con- fácilmente contra la sagrada pro-
ciencia conducen al obrero a la piedad burguesa, por lo menos en
convicción de que los medios de lo que a la tierra se refiere. En esto
producción deben pertenecer a quie- radica la fuerza y el carácter espon-
nes los trabajan, y en el caso de la táneamente subversivo de la ideolo-
producción industrial, especializada gía campesina, pero en esto radica
y compleja, esto sólo es posible a también su debilidad.
través de su apropiación social. La producción que el campesino
La condición del campesino me- se sabe capaz de controlar, es aún
xicano es distinta. Una buena par- semiartesanal y primitiva y con un
te de los trabajadores rurales está proceso de trabajo básicamente fa-
en posesión de medios de produc- miliar y poco socializado; es difícil
ción propios, y aun para los que para él comprender la necesidad de
carecen de parcela y trabajan para la apropiación y gestión social de
agricultores capitalistas, el derecho los medios de producción por los
de estos últimos a la propiedad de trabajadores como clase, y le es di-
la tierra no es ni con mucho una fícil porque con el actual desarrollo
situación reconocida y aceptada. de las fuerzas productivas, efectiva-
Pero el campesino mexicano no mente gran parte de la producción
sólo no ha sido separado radical- agropecuaria no podría ser directa-
mente de la tierra a la cual incluso mente socializada. Por todo ello el
legalmente tiene derecho, sino que, campesino se eleva difícilmente a
por el carácter rudimentario y poco una conciencia socialista, y por sí
socializado de los procesos de traba- solo no puede ofrecer una alterna-
jo agrícolas, tampoco ha sido for-
zado a creer que el control de la pro- 8 Cuandoestosucede,el procesode traba-
ducción es un problema de técnicos jo agrícolaadoptala formade un procesode
y administradores.8 Por el contra- producción industrial.En palabrasde Marx,
cuandose realizala "subsunción real del tra-
rio, el campesino se sabe capaz de bajo por el capital",el campesino pierdesu
cultivar la tierra y organizar su eco- capacidadoriginaria de cuestionarle
al capital
nomía y se siente orgulloso de ello. su derechoa la propiedad y al controlde los
mediosde producción, e independenitemente de
Ante los técnicos y administradores su condición jurídicae inclusode su concien-
tiene normalmente una actitud de cia,ha sidoreducido de obrero
a la condición
superioridad y desprecio, frecuente- y no tienemás alternativa que evolucionar
mente justificada.
haciauna ideología y una formade luchapro-
letaria.Tal es el caso,porejemplo,de los eji-
A diferencia del obrero, el punto datarios del Plan Chontalpa.

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tiva estratégica a la sociedad bur- ducción agropecuaria altamente so-
guesa. cializada y de tipo industrial los
Pero negar el potencial revolu- convenza de la necesidad del socia-
cionario de esta espontánea lucha lismo. Es pedirles, en fin, que dejen
contra la propiedad territorial ca- de dar luchas campesinas espontá-
pitalista y contra el control socio- neamente revolucionarias y se limi-
económico burgués, sólo porque no ten a intentar el regateo sindicalista
cuestiona directamente la totalidad obrero en condiciones de absoluta
del sistema y carece por sí misma debilidad, pero consagrado por su
de una alternativa socialista, es se- pureza proletaria, y destinado a
guir pensando en un campesinado transformarse - un día remoto-
decimonónico que, enfrentado a re- en una lucha revolucionaria socia-
laciones feudales, no tuvo más al- lista.
ternativas que ser la fuerza mate- Con todo esto se pretende que el
rial de las revoluciones burguesas en movimiento campesino renuncie a
ascenso; es no ver a un campesina- ser hoy una fuerza distinta pero
do de la época del imperialismo confluyente con el movimeinto obre-
enfrentado ya a la explotación bur- ro, para ser, en un futuro más o
guesa aunque a través de una rela- menos lejano, una parte más de ese
ción no plenamente capitalista, y mismo movimiento. Se abandona
cuya alternativa histórica es una la lucha por una alianza obrero-
revolución de nuevo tipo. En pocas campesina en nombre de una utó-
palabras: negar el potencial revo- pica homogenización de clase de los
lucionario del campesinado mexica- trabajadores rurales y urbanos.
no es negar la función y el papel Y para que todo esto suceda se
de la alianza obrero-campesina reconoce la necesidad, que sólo pue-
como unión estratégica. de "horrorizar" a los "populistas in-
Exigir que el jornalero y el cam- curables", de que las actuales y fu-
pesino pobre se sientan únicamente turas luchas campesinas sean defi-
proletarios, es pedirles que abando- nitivamente derrotadas. Después de
nen las luchas inmediatas y futuras todo el problema no es tan grave,
por la tierra y reconozcan tácita- pues el invasor de tierras asesinado
mente el derecho burgués de pro- por las guardias blancas del latifun-
piedad. Es pedirles que pospongan dista "renacerá en la figura del
su lucha actual y efectiva porque obrero", y ahí estarán los "marxis-
el trabajador del campo posea y tas" para "constatarlo" y extraer
controle sus medios de producción las "consecuencias políticas nece-
hasta el momento en que la pro- sarias".

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