LOS SIETE SABIOS DE GRECIA

Por allá en el siglo VI (A.N.E), alrededor del mar Egeo se desarrollaron las ciudades griegas con la
mirada puesta en el Mediterráneo. Antes de este tiempo en el amanecer de la humanidad,
podemos imaginarnos que las comunidades desarrollaron pensamientos tan ingenuos como
parecen desde el punto de vista de la interpretación racionalista. Estas primeras comunidades no
conocían el concepto de ciencia, en el sentido que hoy día le damos. En cambio, sí tenían una
actividad muy desarrollada en el campo de las verdades filosóficas - místicas. Por una parte esto
degeneraba en magia y superficialidad, que seguramente condujeron a estos pueblos más de una
vez a engaños, traiciones y crímenes. Pero también la magia tenía un origen noble y pensamientos
profundos, con fórmulas y rituales que generalmente estaban asociados al nombre de un
hechicero, o de un sacerdote, muy al estilo de lo que aún se conservan en muchos pueblos
salvajes de África o de América. Muchos de los dioses tenían una función simbólica de unir lo
divino y lo demoniaco. Es curioso que los dioses griegos no tenían un equivalente del demonio, en
cambio sí eran muy humanos, demasiados humanos, con comportamientos muy parecidos a las de
las clases altas griegas.

En esas lejanas épocas los poetas (Homero por ejemplo) llevaban el conocimiento y la historia a
estos pueblos.

En este contexto histórico, que se corresponde casi con el inicio de la decadencia de la hegemonía
griega en el mediterráneo la civilización griega asistía a la crisis de la hasta entonces poderosa
Atenas y a la posterior supremacía Espartana, resultado de su victoria en la guerra del Peloponeso
y a su vez a la hegemonía Tebana que derrotó a Esparta en la batalla de Leutra (371 A C).

“En todas las sociedades las personas se organizan continuamente en formas complejas con el fin
de producir instituciones, actividades, y estructuras sociales que adquieren una vida y una
estabilidad propia”.

(Schwartz y Jacobs 1984 pág. 462-463)

Los mismos autores señalan que “Los seres humanos se organizan así mismos en relaciones
simbióticas, intricadas para formar entidades mayores que ellos mismos.”

Estos niveles de conocimiento implícito en el comportamiento de los miembros de una sociedad

configura lo que posiblemente paso con los llamados “Los siete sabios de Grecia” Estos autores o
“sabios” antes mencionados consideran varios tipos de conocimientos que delimitan a su vez
diferentes niveles de legitimación. Estos son: el conocimiento incipiente, el rudimentario, el explícito
y podemos hablar también de los universos simbólicos.

Estos conocimientos nos han llegado sinterizados en forma de aforismos, los cuales demuestran lo
afamados que eran en esos días. Veamos algunos de ellos.
  Cleobulo de lindos

“La moderación es lo mejor”

“Aceptar la injusticia no es una virtud, sino todo lo contrario”

 Solón de Atenas

“Nada con exceso todo con media”

“Conócete a ti mismo”

 Quilón de Esparta

“No desees lo imposible”

 Brias de Briene (juez)

“La mayoría de los hombres son malos”

 Tales de Mileto (filósofo y matemático)

“En la confianza, está el peligro”

 Pitaco de Miteline ((filósofo y matemático)

“Debes saber escoger la oportunidad”

 Periandro de Corinto (Tirano de Corinto)

“Se previsor con todas las cosas “

Sócrates nos cuenta unas anécdotas que demuestran que para ellos la humildad es la madre de la
sabiduría. Vemos en ellos el nacimiento de lo que hoy conocemos como filosofía, que se encuentra
vinculada con el abandono de las explicaciones mitológicas para los problemas del origen del
universo y como la fe religiosa es sustituida por la fe científica con sus triunfos y limitaciones.

Los especialistas consideran que ellos dieron el paso del “Mito” al “logo” como un cambio radical
que incluye, no solo la despersonificación de la fuerza de la naturaleza, sino un cambio en lo
político, social y religioso que involucra un despertar menta que tiende a relativizar el valor de la
tradición.

A manera de conclusión podemos decir que ellos fueron los precursores de lo que fue la filosofía
griega con la prudencia imprescindible cuando uno se enfrenta a toda una tradición de más de 25
siglos. Así como Platón es el padre fundador independientemente del valor que cada cual asigne a
sus doctrinas, ellos son los precursores de un ideal político representado por una sociedad regida
por una casta de sabios en posesión de la verdad.

Carlos Cesar Molina

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