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En los números de más de cuatros cifras se pueden agrupar sus dígitos de tres en tres empezando
por la derecha mediante espacios en blanco.
Tradicionalmente se ha empleado el punto o la coma. Esto ahora es incorrecto.
El empleo de los espacios es opcional cuando el número expresa cantidad. No se permite su uso si
no expresa cantidad, sino que identifica un elemento dentro de una serie. No se emplean en años,
paginación, códigos postales, etc
Entre los países hispanohablantes el uso de la coma o del punto se reparte casi a partes iguales. En
España se suele emplear la coma.
La Ortografía recomienda el uso del punto.
Es incorrecto el uso del apóstrofo (*20’34).
Podemos emplear también los espacios de separación en la parte decimal: 23.34 987 kilos.
Ejemplos:
2. Numerales
Las palabras con las que se representan los números reciben el nombre de numerales. Pueden ser
cardinales, ordinales, fraccionarios o multiplicativos.
Expresan cantidad en relación con la serie de los números naturales, incluido el cero, que representa
la ausencia de cantidad.
Del cero al treinta, todas las decenas, todas las centenas y el número mil se escriben con una
palabra.
A partir de treinta, los cardinales complejos se escriben tradicionalmente en varias palabras: treinta
y tres, cincuenta y ocho, trescientos mil veintiuno… Sin embargo, se admite escribir en una sola
palabra los números hasta el 100: cuarentaidós, sesentaiocho, ciento cincuentainueve, dos mil
quinientos ochentaiuno…
Ortografía de los numerales ordinales
Expresan orden o sucesión en relación con los números naturales. Indican el lugar que su referente
ocupa dentro de un conjunto ordenado de elementos de la misma clase.
Los ordinales complejos (formados por más de un ordinal) correspondientes a la primera y segunda
decena se escriben tradicionalmente en una sola palabra: vigesimocuarto…
A partir de la tercera decena, los ordinales complejos se escriben tradicionalmente en varias
palabras: trigésimo primero…
Números perfectos: números naturales iguales a la suma de sus divisores propios positivos. (por
ejemplo 6, 28, 496, 8128)
Números amigos: dos números enteros positivos a y b tales que la suma de los divisores propios de
uno es igual al otro número y viceversa (por ejemplo 220 y 284)