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CEDOMIL Go1c

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so. Es la novela laberíntica por excelencia en la que la figu- INFRARREALISMO
..¡::~ ra central aspira a encontrar, sin éxito, el hilo de Ariadna NOVELA ACTUAL (1980-2008)
~ ----~ que le permita salir al ámbito de la libertad. Pugnan en ella
dos movimientos: uno de amor y de vínculo con el otro, y
~
2 uno contrapuesto, de autoaniquilamiento, que en la novela
se ilustra con el imbunchaje de la figura -la obturación de
todas sus aperturas- y del orden establecido, que cierra
8 todas las comunicaciones con el mundo, pero en cuyo in-
~ consciente permanecen 'alertas hasta el final los impulsos ~L

-YL
~

4. a la comunicación en un ser S'ksfalleciente. .... .....

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Carlos Fuentes, el más prolífico novelista de su genera-
./ // . ·-r
?~ )··o--f·
ción, es autor de una veintena de novelas desde su primera ··.,_,-:"C. ·(/1
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:2. obra, La región más transparente (1958). Entre ellas La muerte
~ de Artemio Cruz (1962), un paradigma excepcional del frag-
·:5
•<fr
mentarismo y la división de la persona, Aura (1962), Cam-
_./ --:~·>') e; ¿
¡~ bio de piel (1967), Terra Nostra (1975), novela borgiana de un
sueño dimensionalmente excesivo por su extensión, Gringo
viejo (1985), Cristóbal Nonato (1987) y La campaña (1990), y
otras, dentro de los límites de la vigencia generacional, has-
ta las más recientes Los años de Laura Díaz (1999), Instinto de
Jnez (2001), La silla del águila (2003), Todas las familias felices
(2006) y Cantar de ciegos (2008). Estas últimas le muestran
como exuberante narrador de ochenta años de edad, que
rompe el límite convencional de la alta productividad junto
a otros exuberantes de su generación.

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A partir de 1980 se constituye el segundo período de la

época contemporánea, época que tiene ya a la fecha más de
setenta años de- quso. El superrealismo del primer perío-
do contemporáneo que se había extendido de 1935 a 1979,
aproximadamente, queda establecido como el momento de
ruptura y de definición de la novela contemporánea y con-
1r dicionante del desarrollo de posibilidades variadas de la
! novela de hoy. La novela actual, comprende el segundo pe-

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1
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ríodo contemporáneo que se extiende a partir de 1980.

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La generación de 1972 completó su
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GENERACióN DE 1972
NACIDOS DE 1935 A 1949
vigencia que se prolongó de 1980 a
~~ 1994. Se trató en su fase de gestación
1 -1965-1979- de una generación contestataria cuya expe-
I::¡ riencia se vio afectada por los golpes de estado militares y
~
f
f
87
 la represión y el exilio. Sin descontar la crítica de la repre-
sión en los países socialistas. Su período de vigencia coincide
precisamente con la desglobalización ideológica y el derrum-
be del socialismo. Sus figuras de relieve son muchas. Entre
ellas destacan de manera especial: Mario Vargas Llosa (Perú,
1936), Fernando del Paso (México, 1938), Mempo Giardinelli
(Argentina, 1947), tres destacados Premios Rómulo Gallegos
de Novela, Severo Sarduy (Cuba, 1936-1993), Reinaldo Arenas
(Cuba, 1943-199), Miguel Barnet (Cuba, 1940), José Emilio
Pacheco (México, 1939), Gustavo Sáinz (México, 1940),José
Agustín (México, 1944), Ángeles Mastretta (México, 1949),
Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos 1997, auto-
ra de Arráncame la vida (1985), Mujeres de ojos grandes (1990);
Fernando Vallejo (Colombia, 1946), Premio Internacional
de Novela Rómulo Gallegos 2003; Alfredo Bryce Echenique
(Perú, 1939); los uruguayos Napoleón Baccino Ponce de León
(Uruguay, 1947) y Tomás de Mattos (Uruguay, 1947); losar-
gentinos Abelardo Castillo (Argentina, 1935), Néstor Sánchez
(Argentina, 1935-2003), Juan José Saer (1937-2005), Abe!
Posse (Argentina, 1939), Rodolfo Rabanal (Argentina, 1940),
Fogwill (Argentina, 1941), Ricardo Piglia (Argentina, 1941),
Alberto Laiseca (Argentina, 1941), autor de la novela más
grande del mundo, Los Sorias, y César Aira (Argentina, 1949);
y los chilenos Cristián Hunneus (Chile, 1938-1988), Mauricio
Wacquez (Chile, 1939-2000), Antonio Skarmeta (Chile, 1940),
Isabel Allende (Chile, 1941), Luis Sepúlveda (Chile, 1941),
Carlos Cerda (Chile, 1942-2001), Darío Oses (Chile, 1949),
Ana María del Río (Chile, 1948) y Diamela Eltit (Chile, 1949).
Los más importantes novelistas de esta generación son
!(~
creadores de un tipo propio de «novela total», una variedad
de la 'nueva novela histórica hispanoamericana', caracteri-
zada por proponer el sinsentido de la historia y aspirar a la
vez a representar la complejidad infinita del mundo. La iro-
nía es un resorte amplio y variado que se manifiesta en los
momentos metanarrativos y autorreflexivos de este tipo de
novelas. Entre las más notables se cuentan La guerra del fin
88
del mundo de Vargas Llosa, Noticias del Imperio de Fernando
del Paso y Santo oficio de la memoria de Mempo Giardinelli.
Mario Vargas Llosa se distingue por la novedosa asun-
ción de las posibilidades de la novela contemporánea con
dominio de variados modos narrativos en novelas de múl-
tiple narración. Regularmente 1~ disposición n~rrativa /2..
com orta dos términos contrapue~~~d~ y si- ~
métrica construcción con otro de~ movilidad en
el montaje de tiempos y espacios diversos. Es un genial
creador de espacios y sus novelas en general ilustran sec:
tores sociales y humanos en su variedad y complejidad con
amblClosa visión de totalidad. Es autor de La ciudad y los pe-
rros (1962), La casa verde (1966), Conversación en la Catedral
(1969), Pantaleón y las visitadoras (1973), La tía Julia y el es-
cribidor (1977); El hablador (1987), La guerra del fin del mun-
do (1981), Historia de Mayta (1984), ¿Quién mató a Palomino
Manero?(1986), Elogio de la madrastra (1988), Lituma en los
Andes (1993), Los cuadernos de don Rigoberto (1997), La fiesta
del Chivo (2000), El paraíso en cada esquina (2003), Travesuras
de la niña mala (2006).
En 1972, cerrábamos nuestra Historia de la novela his-
panoamericana con el estudio de la generación designada
por esa fecha y el análisis de La casa vade. La obra que con-
sideramos ahora es ex resióii" simbólica de este mo o
y una e sus mejores obras y tal vez una de las grandes
novelas hispanoamericanas, La guerra del.fu del mundo. Es
ésta una ov a tota ue dec'OilsiñiYe el carácter totaliza-
dor de las i eo ogías en la comprensión de un momento
determinado de la historia hispanoamericana. la g_uerra de
Canudos en Brasil, y la comprensión ambigua del movi..-
miento sertanero de Ant · · . La obra tiene por
subtextp- s sertoe 1902) de Euclides da Cunha. Vargas
_Lles traza la imagen de un mundo de paradojas y con-
tradicciones alucinantes. Sus componentes principales son
el milenarismo de Consejero, la religiosidad popular y su
transformación forzada en un movimiento rebelde contra
89
...---,
CEDOMIL Go1c
~ la concepción institucional de ordem e progreso,
de temores monárquicos y de autoritarismo militar, que
se desatan en una conflagración de resultados paradoja-
les y desproporcionados. ~a se desarrolla en cuatro
etapas de incremento gradual de fuerzas militares partici-
pantes. La primera expedición de cien soldados al mando
de un teniente es derrotada en noviembre de 1896. La se-
gunda, en enero de 1897, está compuesta de 700 hombres
al mando de un mayor, que sufre igual suerte. La tercera,
en marzo, está formada por 2.500 hombres al mando de un
coronel y su ayudante, que resultan muertos. Finalmente,
5.000 hombres, al mando del general Artur Osear de An-
drade Guimaraes y del Ministro de Guerra Mariscal Carlos
Machado de Bittencourt, en octubre de 1897, terminan con
la resistencia aniquilando a los sertaneros en Belo Monte.
Al lado de este proceso ordenado, se superponen otras
dimenswnes constitutivas de una realida~
fi\ ja qüe lo meramente histórico y olítico. Por una parte, la
\V existencia de vanas ver a es: eligión, mito, ideología polí-
tica -anarquismo, positivismo, monarquismo- ~ciali za-
das en la ac · ' · ión olítica eriodí ·
n oposición al raciona ismo de las contraposiciones
político-socia es, a nove a propone el efecto incontrolable
y nivelador del sexo y la condición femenina en las rela-
ciones de jurema con Rufino, Galileo, Pajeu y el periodista
miope, y en las del Barón y Sebastiana. La §etanarraciQjl
duplica en diversos capítulos, pero especialmente, prime-
ro, en la parte Dos, i,ii,iii, en la crónica de la discusión en
la Asamblea Legislativa del estado de Babia escrita por el
periodista miope en el jornal de Noticias y los comentarios
¡;
·!¡ de su director y jefe del Partido Republicano Progresista,
¡,'i
1
Epaminondas Gon~alves. Por último, en la parte Cuatro, i,
li
¡:
ii, iii, iv,v,vi, en los segmentos iniciales, la metanarración
¡¡ más elaborada se realiza mediante las reflexiones del pe-
¡: riodista miope y del Barón, algunos meses después de la
destrucción de Canudos por los yagunzos.
1 j: 90
1 1:
1
¡-;
l
\-·,•
( -~ Brevísima relación de la novela hispanoamericana
En la I]Ultiplicidad de sus efectos y narraciones l:Hio-
vela gueda definida admirablemente en las palabr~
periodista miope al Barón, cuando, como conclusión de
sus investigaciones del personaje, describe la actuación de
Galileo Gall, frenólogo y anarquista, mezcla de cientificis-
mo y fanatismo, de realidad e irrealidad del personaje y
de su escritura, sin un destino aparente. Al describir los
acontecimientos que lo vincularon a Ca nudos -incluida la
macabra investigación frenológica y el informe oficial del
Doctor Nina Rodríguez que analiza el cráneo separado del
cuerpo del Consejero, que declara normal su complexión
frenológica-, sin inhibir la opinión discrepante de otros
especialistas, dirá: «(anudas no es una historia, sino un ár-
bol de historias».
La visión de Canudos como un «malentendido» queda
refrendada, luego, en esta parte final, por las apreciaciones
del periodista miope y del mismo Barón. Pero es la novela
entera la que muestra la conciencia y la manifestación de
este malentendido.
¡- La m~e y des~p~J~~~_e__Antonio Consejero mues-
~an los brutales manejos de la auiorlcf@)y sus temores
frente al fervor religioso popular, que opta por retener su
cadáver, cercenar su cabeza y luego deshacerse de ella arro-
jándola al mar en un saco lleno de piedras. El yagunzo León
de Natuba sin embargo, preguntado por el Consejero, dice
(
haberlo visto ascender a los cielos: «Se lo llevaron los ánge-
i1· les». Cuando esto a su vez se ha generalizado y todos pre-
guntan si lo ha visto subir a los cielos, el León de Natuba,
¡>
calla. La novela termina cuando una viejecilla responde a
la inquisición del coronel Macedo, que busca ajoao Abade:
«Lo subieron al cielo unos arcángeles ... Yo lo vi». Hay aquí
))una k.QnsohdaCión de la credulidad popular y una parodia
W ironización de lo real maravillosQ.,_ qu..sconfirma y su¡rri-.
1\me a la vez su_yerdacLEste dialogismo pluralizado muchas
veces domina con su incertidumbre la dimensión interpre-
tativa de la novela entregada a las voces de personeros y
91
....--
CEDOMIL G01c
personajes populares. El mundo de los yagunzos, la visión
milenarista, sebastianista, la gravitación de los romances
tradicionales y la historia de Roberto el Diablo constituyen
una de las más ricas elaboraciones de la novela. La esfera
del ejército y sus jefes y las campañas desastrosas son otras
dimensiones destacadas del mundo. Las esferas ambiguas
en que se mueven los intelectuales, por un lado, Galileo
Gall y, por otro, el periodista miope, las esferas políticas
y sus arquetipos republicanos y monárquicos, ilustran las
tensiones dominantes de la sociedad brasileña. Componen,
todas juntas, una gluralidad de mundos que se interrela-
cionan y com renden en formas totalmente arado"ales
absur as, pero fuertemente condicionadas por las mentali.
dades ue las minan caracterizan tenaz te.
- -tipo/ e nar s así la i.lli:oheren.0a. Las expresiones
sobre el malentendido y la locura debieran ser suficientemen-
te sugestivas de la percepción de la incoherencia del sentido
de lo real, es decir, no hay aquí un criterio de verdad o inter-
pretación dominanté""ni la ambivalencia de una .eroposición
rulfiana, esto es, de una fundamental ambigüedad. e imposh
bilidad de dirimir el criterio de verdad de la interpretación
de la realidad. Ni puede, tampoco, asimilarse a la polivalen-
cia o equipolencia de la novela de Dostoievsky que entrega
a los personajes, a sus voces, el rivile io de una infinita ~
variedad de puntos de vista sobre una misma cosa. ~
chazo manifiesto de la incongruencia del tipo de narrar de lª J
novela moderna en gue el narrador ostenta un conocimiento ~
r¡l
1 ·[
de la realidad que el mundo representado desconoce. Pero es,
l1i
de alguna manera, la nostalgia de la congruencia bizantina y
•¡1
barroca en que realidad y conocimiento del mundo se corres-
1¡
ponden estrictamente. El narrador juega retóricamente a estal
1
posibilidad como lo hacen· la metasarraciáiL.del periodista ,
r/¡i miope, en La guerra del 6n del mundo; la manifestación del de- \
1 ~.1
seo de su narrador autor, en Noticias del Imperio, de Fernando_ i
-
del faso; o la locura sin control del Tonto de la Buena Mewo ¡1
11 ria, en.e.l caso de Mempo GardiHelli. _J
!.·
1
92
1
Brevísima relación de la novela hispanoamericana
La obra de Fernando del Paso (México, 1938) compren-
de cuatro novelas de características novedosas: ]osé Trigo
(1966), Palinuro de México (1977), Noticias del Imperio (1987)
y Linda 67, Historia de un crimen.
La novela de mayor interés y éxito es Noticias del Impe-
rio. Una notable empresa narrativa y una singularísima ex-
presión de la nueva novela histórica hispanoamericana. En
esta novela, la extraordinaria variedad creativa, el humOL
y e~ alternan con un conocimiento enciclopédico del
contexto y del tiempo mexicano y europeo de que se ocu_l)a
y diíaS figuras y acontecimientos prominentes. Su asunto
trata del Imperio de Maximiliano durante los años 1861 y
1867 y su prolongación en la memoria alterada de la empe-
ratriz Carlota, hasta su muerte en 1927. La voz narrativa se
alar a en comentarios metanarrativos ue traen el tie o
de_la narración asta 1986. La novela se extiende por má.s
de seiscientas sesenta páginas.
La disposición, simple y com leja a la vez, alterna en
capítulos pares e impares la narración diversa múltiple
de la vida del imperio y el monólogo delirante de Car ota.
Este se desarrolla en los capítulos impares, de 1 al 23. Los
capítulos pares, divididos en tres segmentos, registran una
__ cronología de la historia mexicana progresiva de 1 .ha.s.:..-
ta 1986. Los segmentos corresponden a voces si dones -
diferentes y se ordeñiú;::t:omo queda dicho, en forma esta-
ble, en número de tres; a lo largo de los diversos capítulos
de la obra.
La elaboración más notable abarca tanto los aspectos
de la di,.sposición o el orden narrativo como los...modes--
de la narración con que se varía, en una gama infinita de
formas, las posibilidades de la expresión narrativa y del
hablar de los personajes. El monólogo de Carlota se si-
túa en el Castillo de Bouchout, en 1927. Adopta la forma
escrita de la carta y posee un carácter monódico, cuyo
destinatario es el muerto Maximiliano. Variadamente, su
discurso es dentro del carácter delirante, poético o crea-
93
 CEDOMIL Gorc
dor en enumeraciones sometidas a números armónicos,
rememorativo, actualizador, malicioso, escatológico, so-
ñador. Los modos narratbws empleaclo5 abarcan tod<Hi la¡;
gamas d'eT"'diSZurso escrito y del oral culto y popular: ¡;1
monólogo de conciencia rememorativo, percipiente o adi-
vinador del futuro; la meditación; los modos asintácticos
del monólogo interior y de la corrient€ ee la ceHcieH~a,
no sólo ni únicamente, aunque sí principalmente en el
discurso delirante de la Emperatriz; el diálogo de voces
interiores y exteriores; el montaje de voces en diálogos
trufados. Entre los modos escritos: la carta monódica o
de respuestas diferidas; y, especialmente los reglamentos
de protocolos, que abarcan las ceremonias de palacio y
así como el ritual que seguirá la ejecución del empera-
dor. Estos modos discursivos se postulan como efectivos,
como posibles o puramente desiderativos, al tiempo que
se realizan efectivamente: juegos del narrador autor.
Noticias del imperio, como parodia de la novela histórica,
modifica con espíritu innovador el género o especie na-
rrativa dentro de las posibilidades que le ofrece la nove-
la contemporánea. Destaca la excepcional elaboración de
los datos y la visión del mundo, que acepta y propone la
contradictoria aceptación y rechazo, pero esencialmente el
rescate de las figuras del desastroso imperio mexicano. Un
narrador historiador, externo al mundo narrado y distan-
te de él por más de un siglo, matiza su visión desde una
perspectiva ética en simpatía con las figuras imperiales.
El historiador considera la bibliografía existente y evalúa
sus insuficiencias y contradicciones. La elaboración de una
singular perspectiva interpretativa incorpora la reseña y la
compte rendu del estado de la bibliografía sobre el asunto
imperial, la animación de sus figuras y particularmente la
de los emperadores y Benito Juárez, además de un centenar
de figuras menores.
1 El comentario metanarrativo delimita 1 .ncias
de - la-in-ormación y de la documentación histór~. las
-
94
[
Brevísima relación de la novela hispanoamericana
construcciones de la historiografía y las posibilidades e
imposibilidades del saber histórico. Apoyándose en la obra
del dramaturgo mexicano Rodolfo Usigli, desarrolla la am-
bición de rescatar para México la figura de Maximiliano
cuya sangre impregnó la tierra mexicana.
La proposición importa una violencia a los hábitos in-
telectuales nacionalistas y al punto de vista común frente
al imperio. Este dialogismo ideológico responde al signo
novedoso del período y de la generación y de los comien-
zos de la nueva época. También comporta una ironización
de la historia humana y de las actuaciones imperiales que
contraponen a la historia la locura de Carlota, la locura
de la historia, de los hechos políticos historiados. La in-
sensata invasión de México, la irresponsable retirada de
las fuerzas francesas y el abandono de Maximiliano a su
suerte, las promesas falsas de Napoleón lll, su ignorancia
de los reclamos de Carlota. La solución, una proposición
metanovelística, es tratar de conciliar todo lo verdadeio.
que pueda tener la historia con lo exacto que pueda tener
la ínvención. En otras palabras, en vez de hacer · ·
la historia, colocarlaaTTaaO~ae la invención, de la ale oría,
e incluso al lado también de a antas1a es oca a. En ese
plan, el narrador se plantea posibilidades virtuales que pa-
radójicamente ya se han cumplido o se llevarán a cabo in-
mediatamente después en su obra. La novela propone his-
toria e intrahistorias, historiografía, biografía, memorial,
narración novelística. Pero su fundamental originalidad
consiste en la incorporación de historia y metahistoria, de
? novela y metanovela en su obra. El ideologema desarrolla-
do de esta manera tiene que ver fundamentalmente con el
! lugar en donde se sitúa el narrador, el punto de hablada
mexicano que integra todos los mundos: alto y bajo, inter-
no y externo, público y privado, propio y ajeno, americano
y europeo, pasado y presente.
Mempo Giardinelli es autor de una docena de novelas:
¿Por qué prohibieron el circo? (1971, 1983), La revolución en bici-
95
1
CEDOMIL GoiC
cleta (1980), El cielo con las manos (1981), Luna caliente (1983),
Qué solos se quedan los muertos (1986), La entrevista (1986),
Santo Oficio de la Memoria (1991), La Venus de papel (1993),
Imposible equilibrio (1995), El décimo infierno (1999), Final de
novela en Patagonia (2000), Cuestiones interiores (2003) y Vi-
sitas después de hora (2004). Varias de ellas pertenecen es-
pecialmente al género policial. A diferencia de la línea ar-
gumental de ese género su novela más importante, Santo
Oficio de la Memoria (1991), es una novela de voces múltiples
y argumento sesgado. Las voces corresponden a los miem-
bros de una misma familia, los Domeniconelle. Se trata de
una saga construida por la memoria intrafamiliar de cuatro
generaciones, desde los inmigrantes de 1892 hasta el retor-
no a Buenos Aires del exiliado Pedro, en 1987. La memoria
familiar es vivida y contada por los miembros de la fami-
lia, matizada de afectos positivos y negativos, de simpatías
y diferencias y marcada fundamentalmente por los rasgos
caracterizadores de ciertos personajes destacados. Entre
ellos, la Nona Angiulina y su vocación literaria virgiliana,
dantesca y rabelaisiana, que marcará a la familia entera;
Franca, lectora infatigable; Pedro, el exiliado, que en su dia-
rio y en sus memorias o «Cuaderno de apuntes», medita
sobre la significación de la memoria y el olvido; mientras
un niño, discapacitado mental, ~~El Tonto de la Buena Me-
moria», lleva con precisión absoluta la transcripción de la
memoria hablada de la familia. Aunque los dueños de las
voces designan con sus nombres cada uno de los 106 capí-
tulos numerados de la novela, a excepción del último, dos
de ellos llevan títulos diferentes y se ordenan secuencial-
mente: el mencionado «Cuaderno de apuntes» y «El Tonto
de la Buena Memoria». Los capítulos así diferenciados, y
muchos otros, admiten segmentos trufados, es decir, inter-
calados, impresos en letra cursiva, intromisiones de otras
voces, evocaciones de reconvenciones o de decires habitua-
les, comentarios del narrador que escribe explícitamente y
1 ¡
retiene con fidelidad la memoria familiar relatada por las
1 '
1
96
1 1
Brevísima relación de la novela hispanoamericana
voces de sus miembros a este testigo escritor transcriptor
de la memoria familiar. Los narradores hablan de sí mis-
mos, evocan su experiencia personal, y también hablan de
los otros miembros de la familia a propósito de si mismos.
No dejan ocasionalmente de hablar objetivamente de acon-
tecimientos ajenos de los que han sido testigos de vista o
de oídas. Su hablar va siempre dirigido a un interlocutor o
interlocutora definidos con inclusión de frecuentes apela-
ciones. Los datos familiares aparecen desperdigados y solo
excepcionalmente se propone el catálogo de nombres de hi-
jos e hijas. Es posible con esos datos reconstruir aproxima-
damente el árbol genealógico familiar, no sin dejar cabos
sueltos o extender la información en referencias laterales
extrafamiliares o extramatrimoniales. Originalísima como
saga, utiliza la dispersión para construir con gran rigor el
entorno familiar y la sucesión generacional.
La novela despliega sus capítulos entre dos tensiones de
signo diferente: una, en la evocación del pasado familiar
y de la experiencia personal, desde los orígenes hasta el
presente inmediato; otra, la expectación actual, en el pre-
sente cercano e inmediato, por el regreso después de doce
años de exilio en México de Pedro, biznieto de los primeros
inmigrantes, que se anuncia en el capítulo inicial y se deja
\"'
inconcluso en el último.
Por vías directas, explícitas, especialmente en el caso de
la Nona; o no explícitas, las distintas voces desenvuelven
una extensa y rica red de alusiones a toda la historia argen-
tina, así como alusiones, citas y parodias de la literatura
hispanoamericana, española y universal.
Una dimensión destacada de la novela, representativa
de la renovada coyuntura generacional es la frecuente e
igualmente variada autorreflexión de las voces en torno de
la novela, la literatura y la memoria. Ideológicamente la au-
¡" torreflexión apunta de igual manera a la inflación ideoló-
gica de los años 60 y 70 y resulta expresiva de la deflación
ideológica que la siguió en los años posteriores de vigencia
97
~
CEDOMIL Gmc
generacional. En su primera novela, y en Imposible equilibrio
(1995), esta dimensión se manifiesta de maneras diferen-
tes, de acuerdo a la diversidad de los contextos. Es también
una constante reflexión sobre la Argentina, su realidad y
su ficción, lo admirable y lo repudiable.
La novela también recurre por la vía de la pesadilla de-
lirante, a fuertes alegorías de los años del terror vivido en
Argentina. Pero es el mundo de las mujeres y los hombres,
y de aquéllas más que de éstos, de su hemiespecie y de ca-
racteres familiares determinados el que alcanza el máximo
relieve en esta obra. El mundo construido de esta manera
compleja y múltiple erige momentos específicos del pasado
histórico-político en una cronología definida e insistente.
El arribo en 1896, la figura tipificada del inmigrante, en la
cuerda de Armando Discépolo, en el caso de Antonio; en
el de Gaettano, los años 14 y 1933; y Enrico el año 1945 y,
luego, 1955; 1959, los 70 y los 80, en la del biznieto Pedro.
La construcción crítica y vehemente de la imagen política
de Sarmiento, Leopoldo Lugones, lrigoyen, justo y Perón,
atraviesa toda la obra.
La virtud más saliente de esta novela la constituye la
caracterización inmediata de los personajes en su propia
expresión, reveladora de temples de ánimo apasionados,
intenso, humanos. Los nuevos tópicos incidentales son fe-
ministas y críticos del machismo, la violencia, el exilio, la\
J política argentina, la inmigración, la literatura, y, funda-
1 (Argentina, 1962), Rodrigo Fresán (Argentina, 1963). En
¡ mentalmente, la memoria. El título de la obra no remite \
; menos a una forma de represión de la memoria que, en un ¡
sentido coloquial e informal o familiar, al oficio repetido e '
[ ineludible de lucha contra el olvido, dicho en palabras de
lla Nona. - (Chile, 1951), Ramón Díaz Eterovic (Chile, 1956), Rober-
La ~está en plena
GENERACióN DE 1987 vigencia literaria desde 1995 a 2009.
NACIDOS DE 1950 A 1964 .
Sus miembros conforman la plana
más visible de la novela actual que extiende su significa-
98
Brevísima relación de la novela hispanoamericana
ción sobre todo el ámbito de la lengua y se traduce a diver-
sas otras. Las características de su novela se ordenaiJ..hacia
el desarraigo y la fragmentacióp. La_dispersión__dcl~ra­
dou los efectos metanarrativos. El ~diseuJsos
variados, la parod@_y__la relación ínter artes -pintura,
cine, ~isión, mú_?ic~__ppp, historietas-crean fusiones
com~reflexivas. Entre 5l.l.S....llO_Illbres más des-
tacaaos están los novelistas J{Óberto Bolaño \Chile, 1953-
i- 2003), XI Premio lnternacion~mulo Galle-
gos 1999, Daniel Sada (México, 1953), Carmen Boullosa
(México, 1954), Juan Villoro (México, 1956), Xavier Velas-
ca (México, 1958), autor de El diablo guardián, Enrique Ser-
na (México, 1959), Cristina Rivera Garza (México, 1964),
Luis Zapata (México, 1951), Rodrigo Rey Rosa (Guatema-
la, 1958), Zoé Valdés (Cuba, 1959), Laura Restrepo (Co-
lombia, 1950), Enrique Serrano (Colombia, 1960), Mario
Mendoza (Colombia, 1964), jorge Franco Ramos (Colom-
bia, 1964), Alonso Cueto (Perú, 1954), Premio Herralde de
Alfaguara 2005, por La hora azul, Fernando Iwasaki (Perú,
1961), jorge Eduardo Benavides (Perú, 1964), ]. Claudio
Lechín (Bolivia, 1956), Cé Mendizábal (Bolivia, 1956); los
argentinos Ana María Shua (Argentina, 1951), Juan Forn
(Argentina, 1959), Alan Pauls (Argentina, 1959), Reina
Roffé (Argentina, 1951), Pablo de Santis (Argentina, 1963),
Guillermo Martínez (Argentina, 1962), Gustavo Nielsen
Chile, Marcela Serrano (Chile, 1951), Juan Mihovilovic
(Chile, 1951), Jaime Collyer (Chile, 1955), Gonzalo Con-
treras (Chile, 1958), Carlos Franz (Chile, 1959), Premio de
Novela La Nación-Sudamericana 2005, Marcela Serrano
to Brodsky (Chile, 1957), Premio Literario jaén de Novela
2007, Mauricio Electorat (Chile, 1960), XVIII Premio No-
vela Breve de Seix Barral, Pablo Simonetti (Chile, 1961),
Premio Casa de América 2006, por La muerte de Borges, Tito
Matamala (Chile, 1963), Sergio Gómez (Chile, 1962), Al-
99
l
CEDOMIL GOIC
berto Fuguet (Chile, 1964), Alejandra Rojas (Chile, 1958).
En Chile destacan en esta generación obras de signo di-
verso. Por un lado, la novela de Gonzalo Contreras, autor
de La ciudad anterior (1991), El nadador (1995), El gran mal
(1998) y La ley natural (2004). Por otro, Alberto Fuguet,
autor de Mala onda 0991), Por favor, rebobinar (1994), con
una tercera edición (1999) versión definitiva de diferente
extensión, Tinta roja (1996) y Las películas de mi vida (2003).
Tinta roja es un texto novelístico escrito como una memoria
de práctica de un estudiante de periodismo que es asigna-
do a la crónica roja de un periódico y tiene por mentor al
jefe de la sección. Esto le permite entrar en el mundo de
relaciones de esta clase de periodismo y en la singularidad
del personaje mentor, no solo un cronista, sino también
como alguien comprometido en el mundo de las drogas. Es
también un pretexto para ordenar medianamente el campo
de la novela del hampa chilena, el mundo del delito y de
los bajos fondos. La obra carece del estricto determinante
novelístico del género, como no sea la novela de formación
o su contrario, y diluye la acción interrumpiéndola con la
decepción moral del mentor y el fin de la práctica y desli-
zándose en un vuelo al extranjero.
R erto Bolan(J 0 el escritor cuya obra ha alcanzado el
)_
más alto re levE-en los últimos años, antes y después de su
fallecimiento, tanto en el marco hispanoamericano como
en el universal. Todo esto a pesar de que impone a sus tex-
tos novelísticos una disEosición fragmentaria_q~e se~
pri~Jil~~~licidad de los narr~~or~~j!l_cli-_
vi~es, disposición que caracteriza La literatura Y_lill.Ü11_
América y forma pan im ortante de su ~miada novela
Los detectives salv_ajes. as tensiones de unidad y dispersión
juegane-llfavÜr de la úTtima. Enlos detectives salvajes la for-
ma ael diano de Vlda,enlas partes I y III, mientras la
búsqueda de la musa del grupo literario real visceralista,
Cesárea Tinajero, proporciona una curva de desarrollo que
se resuelve en un éxito dudoso. Pero es el fragmentarismo
lOO
Brevísima relación de la novela hispanoamericana
y la discontinuidad lo que predomina. Desde e~~ ·
fr~ posible armar campos de referencias par-
ticulares. Así, por ejemplo, la admiraciones y relaciones de
los jóvenes con las figuras del estridentismo mexicano. Los
acontecimientos mexicanos de 1968 y la narración de las
experiencias de la mujer uruguaya, que permitirá luego u,n
1~ textoCOntinuo con el desprendimiento de la novela Amuleto
1\ ~(I,~v (1999). Esta desarrolla la historia y mitifica los ideales con-
Y\'' testatarios de la generación joven. La experiencia de vida
de la fase juvenil de una generación que se desarrolló entre
1976 y 1996 y a la que puede aplicarse lo que el narrador
dice de sus jóvenes personajes al llamarlos 'huérfanos por
vocación'.
La cronología de su obra narrativa no tiene siempre
que ver con la fecha de su publicación. Aunque la obra
en colaboración con Antoni García Porta, Consejos de un
discípulo de Morrison a un fanático de ]oyce (1984), parece
ser efectivamente su primera publicación novelística y la
primera premiada; Amberes, publicada en 2002, es obra
temprana, esquemática y difusa, fechada en Barcelona,
1980. Publicó más tarde La pista de hielo (1993), Premio
de Narrativa Ciudad de Alcalá de Henares; La senda de
los elefantes (1994), Premio Félix Urubayén, del Ayunta-
miento de Toledo; La literatura nazi en América (1996),
que es la novela que verdaderamente le da a conocer;
Estrella distante (1996), Los detectives salvajes (1998). Amu-
leto (1999), Monsieur Pain (2001) versión final de La sen-
da de los elefantes, Nocturno de Chile (2000), Una novelita
lumpen (2002), y, póstumamente, se publicó 2666 (2004).
De su extenso proyecto novelístico 2666, publicado en
un solo volumen, habría quedado incompleta su última
parte. Estamos en espera de la publicación de la obra
en cinco volúmenes, conforme a la voluntad de Bolaño.
A las novelas del autor se suman los libros de cuentos:
Llamadas telefónicas (1997), Putas asesinas (2001) y, pós-
tumamente, el último libro que alcanzó a completar en
101

CEDOMIL GOIC
vida, el volumen de relatos Un gaucho insufrible (2003).
En fecha más reciente, se publicó la compilación de sus
crónicas literarias y algunas entrevistas en el volumen
Entre paréntesis (Barcelona: Anagrama, 2004).
Una prim consideración sobre el conjunto de su
producción literaria se ace patente en el hipertextQ_de
B~ el texto continuo que establece relaciones de origen
\\LU,ioie~tua,1h es decir, t;!!_tre relatos breves del mismo autor,
:que'st~W~nsforman, que sirven de subtextos de un libro y
1 ge~an novelas independientes desarrolladas a partir.~ e
·e!}Qs,. De esta manera es posible aefinir el origen y relación
de distintos personajes o situaciones e historias de sus
novelas ulteriores. Así, por ejemplo, en las páginas finales,
en el Apéndice «Manuscrito encontrado en una bala»
-«Diario de Ángel Ros»-, de Consejo de Morrison a un
fanático dejoyce, escrito en colaboración con el autor catalán
Antoni García Porta, su primer libro publicado, emplea el
cauce del diario de vida y se menciona por primera vez
al poeta mexicano Mario Santiago, tipo real del personaje
Ulises Lima de Los detectives salvajes, a quien por lo demás se
ve leer un poema -parodiado por el título de la novela que
leemos: «Consejos de un discípulo de Marx a un fanático
de Heidegger» (152, 161).
@=dial io ~~ vic!<t·--~~tmto:~-_·r""a..,.!l"'_c:c;;~-;n~a:::r:::::ra~ anticipa al de
GarcíalVraCiero de Los detectives salvajes incluso al considerar
que las entradas pueden ir de la brevedad de una línea a
dos, tres y cuatro, a otras más extensas. La novela Amberes
en uno de sus breves fragmentos -22. El mar-, de una
sola y breve página, acompañada de las ilustraciones de
tres líneas: ~na recta, otra ondulada y la tercera, quebrada,
anticipa el segmento (II, 19: 398-401), de Los detectives
salvajes, de más extenso y complicado desarrollo que
ilustrará el único poema o criptograma de Cesárea Tinajera
y su interpretación.
La senda de los elefantes (Toledo: 1994) es el título
de la novela, que será más tarde la novela Monsieur Pain
102
.
1f
i¡
.
Brevísima relactón de la novela hispanoamericana
t\
~
~
(1998). N o conocemos la primera versión y por lo tanto no
estamos en condiciones de decir nada sobre sus posibles
1.
l;
~ . transformaciones o diferencias, aparte del título.
~ La literatura nazi en América (1996) nos propone
~
0
un primer modelo de la disposición de un _!!LQ.S;J.ico de_
treinta narraciQD~ -notas biográficas organizadas en
difeféñtessecciones-de personajes diferentes, y una
extensa nota bibliográfica comentada, que se relacionan
por su común referencia a la experiencia nazi y sus
figuras o a experiencias y figuras semejantes de abuso de
poder. De entre ellas se_ desprenderá la última narración
o capítulo -Ramírez Hoffman, el infame, 179-204-, de
solo 23 páginas, cambiando de nombre al protagonista,
para dar origen a La estrella distante (1996) a lo que se
refiere Bolaño en una breve nota preliminar a su novela
de ciento cincuenta y siete páginas.
De Los detectiveualvai~~ela de va~~~
se desprende ~~ll, 4: 190- f99Tcilya expansi.Qp,
de loaT)4páginas, dará origen a la novela Amuleto (1999),
---
novela de la urugu~.Yª--Auxj]ja I acouture, en~ el
---
bañoaeuñedificio de la UNAM durant€ les suc€~0~ del 68
mexicano, conservando el nombre del personaje y la voz
na~-
La novela Nocturno de Chile (2000) encuentra su argu-
mento sintético y completo en las últimas páginas de una
crónica literaria, «El pasillo sin salida aparente», publicada
por el autor en Ajoblanco 116 (Barcelona, mayo de 1999):
54-57, que se puede leer hoy día en su colección de cróni-
cas Entre paréntesis (Barcelona: Editorial Anagrama, 2004,
pp. 71-78). La expansión va aquí de dos breves páginas que
narran la anécdota, a las ciento cincuenta páginas de la
novela.
Su última obra 2666 (2004) propone cinco novelas o
partes que dispersan y ordenan la común referencia al es-
critor Benno von Archimboldi: objeto de investigación de
cuatro estudiosos de otros tantos países que le buscarán en
103
~
CEDOMIL GOIC
México; los ecos de su presencia en México en la historia
de Amalfitano, un catedrático chileno; la parte de un perio-
dista norteamericano en la ciudad de los crímenes; la parte
de los crímenes y la vinculación con su sobrino acusado
por los crímenes de mujeres; y la final biografía detenida
del escritor desde la infancia hasta los ochenta años a pun-
to de partir a México en busca de su sobrino.
La anticipación del título de 2666 -una alusión a la
imagen de la segunda bestia del Apocalipsis, 13:18 : et nu-
merus eius est sescenti sexaginta sex-se encuentra doblemen-
te en las referencias a la fecha que pueden encontrarse en
su obra anterior: la que hace Cesárea Tinajero (Los detectives
salvajes, III: 596) y, además, la hecha por Auxilio Lacouture
en Amuleto (76-77) con precisión matemática. Por último,
en Los detectives salvajes (II, 2: 170) se encuentra igualmente
la mención de un escritor, francés en este caso, cuyo nom-
bre es ].M.G. Arcimboldi. (Podría verse aquí también una
parodia del nombre, mentado en Consejos de un discípulo de
Morrison a un fanático de ]oyce, del autor francés j.M.G. Le
Clézio) [Jean-Marie Gustave], reciente Premio Nobel de Li-
teratura 2008.
De esta maner e ofre-
ce como un · antesco hi ertexto cuyQ..?.¿_ntecedentes se
pu;aen.- Í'lfslrear en vanos textos previos del autor y p..er-
miteg mostrar su origen~¡; transfarm~ciones que s..ufren
por¿mplificacíóp y otros cambios.
. La generación ~ -novissimi
GENERACION DE 2002 narratores- es la generación joven
NACIDOS DE 1965 A 1979 . .r ----
en plena fase aspirante desde 1995 a
2009. Destaca ya un número creciente de originales narra-
dores que alcanzan los treinta años de edad y más. Entre
ellos, primeramente, Jorge~i (México, 1968) de lo que
en México se llama la generación del Crack. Ignacio Padi-
lla (México, 1968), Eloy Urroz (México, 1967), Pablo Soler
Frost (México, 1965), Pedro Ángel Palou (México, 1966).
104
Brevísima relación de la novela hispanoamericana
Julio Rojas (Cuba, 1965), autor de Tumba sin sosiego, Premio
Anagrama 2006, Santiago Gamboa (Colombia, 1965), Jai-
me BailyJPerú, 1965), Iván Thays (Perú, 1968), Santiago
·R.oncaglío!9 (Perú, 1975), autor de Pudor, Abril rojo, Premio
'A.tbguabi 2006, Edmundo Paz Soldán (Bolivia, 1967). En
Argentina, Gonzalo Garcés (Argentina, 1974), autor de Di-
ciembre (1997), Los impacientes (2000), Premio Biblioteca
Breve 2000, y El Futuro (2003), Martín Kohan (Argentina,
1967), autor de El informe (1997), Los cautivos (2000), Dos
veces junio (2002), Segundos afuera (2005), Museo de la revo-
lución (2006) y Ciencias morales, Premio Herralde 2007, y
Andrés Neuman (Argentina,1977). En Chile, destacan los
nombres de Sergio Missana (Chile, 1966), Marcelo Simo-
netti (Chile, 1966), Gonzalo Lira (1968), Alejandra Cos-
tamagna (1970), autora de En voz baja (1996), Ciudadano
en retiro (1998), Cansado ya del sol (2002) y Dile que no es-
toy (2007). Andrea Maturana (1969), El daño (1997), Ra-
fael Gumucio (Chile, 1970), Memorias prematuras (2000),
Comedia nupcial (2002) y Los platos rotos (2004), lorge Ba-
radit (Chile, 1969), Ygdrasil (2005) y Synco (200~) ~­
drQ...Z.ambra (Cl;}Jg, 1975) y Carlos Labbé (Chile, 1977).
La obra derVcioJ, En busca de Klingsor (1999), es una ex-
traordinaria n6Vefa en ue se su er divers · .
la novela de investigación, detectivesca, el diar·
morías e mun o aue oree e v süwe a la Se2:u
MunillªLhasta la caída del muro de Berlín Estamos ante
una rec~eración irónica e ingeniosa de la novela orgánica
de~ontecimiento lineal y orientado con la expectación de
u~senlace. Se desarrolla todo esto bajo él control y la
presencia coherente de un narrador básico, un personaje
del mundo narrado que se sitúa dentro y fuera del mundo
para referirse a sí mismo -en el plan de la autobiografía y
el diario personal-, o al mundo conocido y a los demás, a
propósito de sí mismo, en el plan de las memorias. La pers-
pectiva interpretativa o ideológica del personaje narrador
es de rigurosa elaboración científica. La perspectiva lin-
105
~-- 1
CEDOMIL GOIC
güística se ciñe a la aptitud del personaje, que escribe en la
norma queJean Cohen llamaría lalangueaes-s(iwrts;Ja cual
-, /
se extiende a la designación de capitUlos--o- fra-gmentos o
secciones -leyes, corolarios, disquisiciones, hipótesis-.
Má.s...allá de su rigurosa consecuencia, los principios, teo_!jas
y ~ilogismos sirven para interpretar igualmente situaciones
n~rrativas y posibilidad~!_ comprensión del mundo _ua-
r~do y del comportamiento de los personajes. El temple y
la perspectiva ética son fríos, neutrales y controlados, aun-
que puede descubrirse humor y pistas falsas en las afirma-
ciones del narrador. Así, la advertencia hecha anticipándose
o respondiendo a la preocupación y dudas del lector sobre
la credibilidad del narrador, que se funda en su amistad con
Francis Bacon, el oficial investigador norteamericano, para
justificar el conocimiento de la privacidad y sentimientos
del personaje, puede alternat con el juego del punto de vista
objetivo que se prohíbe nanar lo que ocurre en el cuarto
vecino y registra tan solo le:) que es posible oír desde el lugar
en que está. Con todo, debe entenderse que el nar~r hace
uso de la liber.tad épica y de la om~a. A la manera
borgeana la coda ilumiriante -efecto final de la novela-
funciona como insinuatio más que como efectiva resolución
de lo investigado e identificación del personaje, aunque en
1~ el nombre del Doctor Gustav Links está encerrado el ana-
~
r: grama de Klingsor. Volpi extendió las características de esta
,l~1
~ novela a una trilogía que se completa con El fin de la locura
~
;¡ (2003) y No será la tierra (2006). Ha publicado en fecha re-
1
~ ciente El jardín devastado (2008).
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Brevísima relación de la novela hispanoamericana
LA NOVELA ACTUAL
esce as eneraci LUUL. L'!_..
primera con su vigencia cumplida entre 1980-1994. La se-
gunda, la generación de 1987, constituye el momento actual
y vigente, 1995-2009, con sus quince años de curso. Mien-
tras, paralelamente, durante estos años, se hace presente la
generación joven de 2002, en gestación, que ha cumplido
su fase aspirante o emergente que le da nombre y se prepara
para su entrada en vigencia hacia 2009.
Escritores pertenecientes a estas tres últimas genera-
ciones han recibido a la fecha de hoy el reconocimiento
internacional: Vargas Llosa recibió el Premio Cervantes
(1994), y con él lo han recibido Guillermo Cabrera Infante
(1997), Jorge Edwards (1999), y Álvaro Mutis (2001); siete
de ellos han recibido el Premio Internacional de Novela Ró-
mulo Gallegos -Vargas Llosa, Fernando del Paso, Mempo
Giardinelli, Ángeles Mastretta, Roberto Bolaño, Fernando
Vallejo y Elena Poniatowska (2007)-; los Premios HerraJ-
l;
de, Bolaño (1998), Alan Pauls (2003), Juan Villoro (2004),
Alonso Cuento (2005); cuatro el Premio Editorial Planeta
-Vargas Llosa (1993), Carmen Posadas (1996), Alfredo
Bryce-Echenique (2002) y Antonio Skármeta (2003)- y
otros cuatro el Premio Novela Breve de Seix Banal-jor-
ge Volpi (1999), Gonzalo Garcés (2000), Mario Mendoza
(2002), Mauricio Electorat (2004)- y entre los últimos
Premios Alfaguara -Xavier Velasco (2003), Laura Res-
trepo (2004), las argentinas Graciela Montes y Ema Wolf
.~ (2005) y Santiago Roncagliolo (200f)-.
El nuevo períod_<J_,gll_su_p_rimera etapa, tuvo pre~
P.Or el co o olítico-social contestatario ®e se mani-
festó en.~-talu a e a q rente
en ~1 período anterior y gue luego se exten_EiQ
lución cubana, mayo del 68, la masacre de Tlatelolco, las
dictaduras militares, el exilio. Pasado el período de gesta-
107
 , CEDOMIL Gotc Brevísima relación de la novela hispanoamericana
-~ 1~
ción de la g~neración del 72, desarro!.lado con ardor en el
marco vigente del eríodo anterior, vendr, dece ción
del socialismo la caída del muro e Berlín el derrumbe
.....::..:..::; - j

de la Unión Soviética y de ~~arias populare5-'Y

la de&c:i.Qn_ide.oJógic~ ~ue~efecto totalizador_ - - - - . . - ·trh">TI"T~HnPff?¡-f;:;-;:fi~~· . '

La vigencia generacional dará lugar a la manifestación ~

los antiguos contestatarios refo~ados o renovados
inclu_yó la denuncia de las falenci
El caso Heberto Padilla y el destierro de intelectuales cu-
banos -Cabrera Infante, Severo Sarduy, Reinaldo Arenas,
Zoé Valdés-, la publicación de Persona non grata (1975),

.l
de jorge Edwards, la participación crítica de Vargas Llo-
sa en la celebración, en 1987, de los cincuenta años del
Congreso de Intelectuales por la Libertad de la Cultura
de Valencia 193 7, la experiencia de los exiliados hispa- j
-,~

noamericanos en los países socialistas, son algunos hitos

~¡;
ineludibles de esta etapa que hallarán ecos en las novelas
del período. Ello no impedirá la visión crítica de la so-
ciedad de consumo y del neoliber;:Üsmo que la susten.ta
y los desafíos impuestos a la nueva sociedad. junto con
ello surgen nue~ferencias qilC proycrJJ!n los esqugnas
fin,~!_i~t!-_:;~~ión_.delrnundo como lucha en defensa de
la ~én.e.J::os, de la marginalidad, de lawt-
nias~ de las.cnlnuas originarias.ILa ~ac~~~n­
to e · l descubrimiento TeAmérica, en 1992, se
hizo en nombre de encuenlfoae os mun ó~ntre sus
consecuencias, los concursOSCie novela, patrocinados por
~-
la celebración dieron lugar a la 'n eva novela histórica' o
a la 'nueva crónica hispanoamerican~ en as que entro~
deTosparámetros narrativos de la nueva novela g mira ~
m.J,lJldo del descubrimiento, el e~ntro de dos mundos,
los viajes, la conquiát,a y la coloniz:aei&n.
El período ~~ume el irrealismo conquistado, junto con
la sup~ón_3elmegarrelato en las ciencias Iiumanas y
conduce el género a nuevos extremos de subje · ación, de
~r
fragm.Cmi~iól1 y_dis~rsión del re ato. evero ar u a de-

108 109
 CEDOMIL GoiC 1
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'
~'

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:.·.'."1
'

1 ÍNDICE

1 Presentación
Novela renacentista y barroca ..
7
9

i
~j
L Novela renacentista
2" Novela manierista
3. Novela barroca
12
16
25

~
Novela moderna 31
L Roc!ocó (1755-1800) 34
1 2. Neoclasicismo (1800-1845) 42
1 3. Romanticismo (1845-1889) 47
1 4. Naturalismo (1890-1934) 59
a) Criollismo . 59
b) Modernismo 63
e) Mundonovismo 67
Novela contemporánea 71
L Superrealismo (1935-1979) 73
a) Superrealismo (1935-1949) 75
b) Neorrealismo (1950-1964) 77
~'t,

e) Irrealismo (1965-1979) 81
Infrarrealismo. Novela actual (1980-2008) 85
L La novela actual 107