Urbanismo Colonial Hispanoamericano realizadas los días 22, 23 y 24 de noviembre de 2018 en la Universidad de León
Fernando Paniagua Blanc
En primer lugar y antes de entrar propiamente a lo que es el análisis de las
conferencias, quiero aprovechar la oportunidad que me brinda el presente documento para felicitar y agradecer a los organizadores por el excelente evento llevado a cabo, magnifico tanto en su ejecución formal como en el contenido del programa abordado, que posibilitó a los asistentes una aproximación clarificadora y sumamente interesante al urbanismo colonial hispanoamericano. Asimismo, me permito instar a los responsables de la Universidad de León a que se continúe y se amplíe la organización de este tipo de eventos académicos que, además de complementar la formación reglada convencional (grados, másteres y doctorados), sirven como acicate para despertar el interés en asuntos y aspectos concretos dentro de la comunidad universitaria en su conjunto. Centrándome ya en una valoración de las conferencias desde un punto de vista estrictamente personal, quiero hacer especial hincapié en el gran interés que me suscitó la impartida por el profesor Roberto Castrillo Soto que, bajo el título Arquitecturas coloniales hispánicas en el cine del Oeste, me resultó especialmente interesante fundamentalmente por dos motivos. Por un lado, porque pudo conectar dos mundos aparentemente tan distantes como el de las grandes producciones cinematográficas con el de la arquitectura colonial y, por otro, porque recuerda la fuerte influencia que el colonialismo hispano tuvo en el pasado norteamericano (estadounidense) que, si bien no es un hecho desconocido para quienes no somos absolutamente legos en la historia americana, si cuanto menos parece no haber tenido una especial difusión entre la mayor parte del público y, con frecuencia, se queda en un segundo o, incluso, tercer plano. También de especial interés me resultó la exposición de Jorge Alberto Navarro Serrano (Desarrollo de las ciudades en América Latina. El caso de Guadalajara), en la que se abordó con gran claridad el desarrollo urbanístico de la ciudad de Guadalajara, del que no tenía conocimiento y que me resultó sumamente interesante. Algo parecido me ocurrió con la conferencia del profesor Jesús Paniagua Pérez (Oficios mecánicos y cabildo en la ciudad colonial: Guayaquil), que presentó una perspectiva que entendí como sumamente atrayente al abordar este crecimiento urbano en la ciudad de Guayaquil asociado al desarrollo de los oficios gremiales en una ciudad portuaria como es la urbe ecuatoriana. Aunque sobre el desarrollo de la ciudad de México si contaba con cierto conocimiento, también la conferencia de María del Carmen Martínez Martínez fue gratificante e instructiva para ampliar y detallar mi saber sobre el asunto (Un paseo por la ciudad de México s. XVI). Algo parecido ocurrió con la conferencia del profesor Antonio Elías de Pedro Robles sobre la ciudad colombiana de Tunja, que me resultó especialmente instructiva por cuanto había tenido oportunidad de conocer la misma hace apenas unos meses (Tunja, una ciudad encomendera. Siglos XVI y XVII). Si bien es cierto que esta exposición fue en algunos momentos difícil de seguir debido a los problemas técnicos en la realización de la videoconferencia desde Colombia, en lo que opino puede ser una de las pocas críticas realizables a las Jornadas. Por otro lado, y debo reconocer este como el tema que más despertó mi curiosidad y sobre el que, con mucha probabilidad, más trabajaré en el futuro, cabe destacar la especial mención que, ligado al desarrollo urbanístico ilustrado, se hizo a la figura de Pablo de Olavide. En la conferencia de la profesora María Isabel Lafuente Guantes, Las dos ideas ilustradas de ciudad de Pablo de Olavide, no sólo obtuve referencias de un personaje del que poco conocía, sino que, además, se profundizó en su pensamiento, que me resultó “sorprendentemente” liberal y aperturista para el periodo en el que vivió, despertando, insisto en ello, lo que podría calificar como algo más que una simple curiosidad por el personaje. Finalmente, tampoco quiero dejar de cuanto menos citar la conferencia de clausura que estuvo a cargo de José Alberto Moráis Morán en la que se abordó la arquitectura neoárabe en Chile, que, además de por su contenido textual, resultó sumamente llamativa por el acompañamiento de imágenes con el que se presentó la exposición.