You are on page 1of 5

C a p ítu lo 24 — Hormonas hipofisarias 281

Subunidad p Subunidad p TSH mitentemente en respuesta a éstos. Adem ás, algunas horm onas
■SH 15,9 kDa tienen unos picos de secreción a determ inadas horas del día,
com o la som atotropina en las horas n octu rn as o la co rtic o tro ­
FSH TSH pina a prim era h ora de la m añ an a. La existencia del ritm o cir-
32,6 kDa 30,5 kDa cadiano implica que se debe considerar la hora de la extracción
Subunidad a común en la determ inación de la con cen tración de horm on as hipofi­
14,6 kDa sarias.

Subunidad p LH
14,8 kDa
S o m a to tro p in a
LH La som atotropina es la h orm on a m ás abundante producida
29,4 kDa p or la adenohipófisis. Es un péptido de 191 am inoácidos y tres
Figura 24-3. Estructura de las hormonas hipofisarias diméricas folitro- puentes d isu lfu ro , co n u n p eso m o lecu lar de 2 2 k D a. P or
pina (FSH), lutropina (LH) y tirotropina (TSH). ayuste alternativo, tam bién se produce un 5-10% de u n a iso-
form a de som atotropina m enos activa de 2 0 kD a, que tiende
a d im erizar. A dem ás de las isoform as de 22 k D a y 2 0 k D a,
R e g u la ció n h ip o ta lá m ica tam bién circu lan oligóm eros de éstas y fragm entos inm uno-
d e la p ro d u cció n d e h o rm o n a s rreactivos.
La secreción de som atotropina se regula m ediante dos pép-
p o r la a d e n o h ip ó fisis tidos h ip o talám ico s, la som ato statin a, y la som atoliberina
E n el hipotálam o existen unos grupos neuronales denom i­ (fig. 2 4 -4 ). La som atoliberina ejerce u n a acció n estim ulante
nados núcleos, que producen horm on as estim ulantes o in hi­ sobre la síntesis y liberación de som atotropina. La som atosta­
b idoras de la adenohipófisis, tal y co m o se in dica en la ta ­ tina, en cam bio, tiene u n efecto inhibitorio sobre la liberación
bla 2 4 -2 . H asta estas neuronas llegan diversas señales a través de som atotropina, sin afectar a su síntesis. A su vez, la som a­
de neurotransm isores, com o la noradrenalina (norepinefrina) totropina liberada ejerce u n efecto de retroalim entación nega­
o la serotonina, y producen horm on as en respuesta a factores tiva sobre el hipotálam o.
fisiológicos e, incluso, em ocionales. De esta form a, la p roduc­ La producción de estos dos fectores y, p or ende, la secreción
ción de h orm on as hipofisarias, com o la co rtico tro p in a o la de som atotropina está influida p or factores am bientales, h or­
som atotropina, puede estar alterada p o r situaciones de estrés. m onales y metabólicos que pueden actu ar com o estimuladores
E l sistem a in m u nitario tam bién ejerce u n efecto m odulador o inhibidores de la secreción:
de la secreción de horm onas hipotalám icas y, en consecuencia,
hipofisarias. Así, la interleucina 1, producida p or los m acrófa- L Estimulantes: la hipoglucemia, los aminoácidos (sobre todo,
gos, estim ula la liberación de corticolib erin a y, en consecuen­ la arginina), el ejercicio físico, el sueño y horm onas, com o
cia, de corticotrop ina. la testosterona, los estrógenos o la tiroxina.
U na vez que se han liberado, los factores hipotalám icos c ir­ 2 . Inhibitorios: la h ip erglu cem ia, los glu cocorticoid es o la
cu lan h a sta la hipófisis p o r el sistem a p o rta l h ip ofisario y depresión. La secreción de som atotropina tam bién puede
actú an sobre la síntesis y la secreción de horm onas hipofisa­ estar dism inuida en la obesidad.
rias. Dado que estos factores no pasan a la circulación general,
su evaluación debe realizarse indirectam ente midiendo la res­ Adem ás de p or la som atoliberina y la som atostatina, la libe­
puesta de las horm onas hipofisarias a estím ulos. ración de som atotropina está regulada p or la grelina, una h or­
Los estím ulos hipotalám icos se producen de form a pulsátil, m ona de 28 am inoácidos liberada p or las células neuroendo-
por lo que las horm onas hipofisarias también se secretan inter­ crinas de la m u cosa gástrica.

Tabla 24-2. Factores hipotalámicos que regulan la producción


de hormonas hipofisarias
Estructura Estim ula Inhibe
Corticoliberina Péptido de 41 am inoácidos Corticotropina

Tiroliberina Tripéptido Tirotropina


Prolactina

Som atoliberina Péptido de 44 am inoácidos Som atotropina

Dopam ina C atecolam ina Som atotropina Tirotropina


Prolactina

G onadoliberina Decapéptido Lutropina


Folitropina

Som atostatina Péptido de 14 am inoácidos Som atotropina


Tirotropina
282 Parte III— Alteraciones de órganos y sistemas

Arginina e hipoglucemia A c c io n e s d e la s o m a to tro p in a


Hiperglucemia
Ejercicio y sueño
Glucocorticoides Los recep tores de som atotrop in a están am pliam ente dis­
Testosterona, estradiol y tiroxina
trib u id o s en el o rg an ism o , esp ecialm en te en el h ígad o, y
tran sm iten la señal a través del sistem a JA K /ST A T -cinasas
Hipotálamo
(ñg. 24 -6 ). La parte extracelular del receptor puede ser liberada
p or m etaloproteasas y esta fracción constituye la GHBP, a la
cual se une la som atotropina. La p arte intracelular del recep­
tor está asociada con una tirosincinasa JA K 2. Tras la unión de
la som atotropina a su receptor, éste dim eriza y la enzim a JAK2
provoca una fosforilación cru zad a de ellas y del propio recep ­
ipófisis
tor. Posteriorm ente, la JA K 2 fosforilada tam bién fosforila la
proteína STAT5 que, a su vez, tam bién dim eriza e inicia una
cascada de señalización que lleva a la activación de factores de
transcripción.
M ed iante este recep tor, la som ato tro p in a estim u la en el
hígado la p rod u cción del fa cto r de crecim ien to sim ilar a la
insulina de tipo 1 (IGF-1, del inglés, insulin-like growth factor-1;
Figura 24-4. Regulación de la secreción hipofisaria desomatotropina. som atom edina C ), el cual ejerce una retroalim entación nega­
IGF-1: factor de crecimiento similar a la insulina de tipo 1 (del inglés, tiva sobre la producción de som atotropina. La som atotropina
insulin-like g row th factor-1). puede ejercer sus acciones biológicas directam ente o a través
del IG F -L D ich as acciones son fu n d am en talm en te an ab ó ­
licas:
Circulación de la som atotropina en plasma
L P rovoca el crecim iento óseo y estim ula la proliferación del
La liberación de som atotropina es pulsátil en respuesta a la cartílago en la epífisis.
acción coordin ad a de la som atoliberina y de la som atostatina, 2. Estim ula la síntesis de proteínas y la captación de am in oá­
co n picos de secreción a las 3 h tras las com idas y, sobre todo, cidos p or el m úsculo, lo que produce un increm ento de la
a los 9 0 m in del inicio del sueño profundo (ñg. 24-5). La co n ­ m asa m uscular.
centración de som atotropina durante gran p arte del día puede 3. Estim ula la lipolisis y reduce la lipogénesis y la reesterifi-
ser indetectable co n los m étodos habituales de m ed id a (< 2 cación de ácidos grasos libres en el tejido adiposo. Adem ás,
fig/L), pero se eleva en varios picos de secreción. P or ello, al increm enta la cantidad de LDL y H D L circulantes.
no ser interpretable, la determ inación de som atotropina en un 4. P ro d u ce h iperglu cem ia al estim u lar la gluconeogénesis
m om ento aislado no tiene interés. La edad tam bién afecta a la hepática y, adem ás, dism inuye la captación de glucosa por
concentración de som atotropina ya que existe una m ayor p ro ­ el m úsculo y p or el tejido adiposo.
ducción durante la pubertad, que desciende progresivam ente 5. Estim ula el crecim iento de los órganos y tejidos.
durante la edad adulta y es m en or en los ancianos.
La som atotropina tiene una vida m edia de unos 3 0 m in y,
ap ro xim ad am en te, el 50% de la som ato tro p in a circu la en
Factor de crecimiento similar
plasm a u n id a a la p roteín a de u n ió n de la som ato trop in a
a la insulina de tipo 1
(GHBP, del inglés, growth horm one bináing-protein). E n cuanto E l fa cto r de crecim ien to sim ilar a la in su lina de tip o 1 o
a su elim inación, aproxim adam ente el 65% de la som ato tro­ IGF-1 es una proteína con estru ctu ra sim ilar a la insulina, que
p ina se filtra en el riñ ó n y se d egrad a en las células tu b u ­ ejerce sus efectos m etabólicos y sobre el crecim iento al unirse
lares. al recep to r de IG F -L La co n cen tració n sanguín ea de IG F-1

Receptor

STAT5 ®
Hora del día Activación de factores
Figura 24-5. Ritmo circadiano de la concentración de somatotropina de transcripción
sérica. Se aprecian los niveles más elevados a las 3 h tras las comidas y Figura 24-6. Unión de la somatotropina a su receptor y activación de
ejercicio y a los 90 min del inicio del sueño profundo. la vía de señalización JAK/STAT-cinasa.
C a p ítu lo 24 — Hormonas hipofisarias 283

de IGF-1 y determ ina su con cen tración y su actividad bioló­


gica. Debido a la gran afinidad con la cual el IGF-1 se une a la
proteína transportadora IGFBP-3, su vida m edia es m ucho más
larga que la de la som atotrop in a ( 2 0 m in) y otras horm on as
polipeptídicas (unas 15 h). P or la m ism a razón, su co n cen tra­
ción es m ucho m ás estable que la de la som atotropina, lo que
proporciona una información que no se puede obtener de aqué­
lla. De hecho, suele m edirse una única vez durante las pruebas
de estim ulación de GH y, al m an ten erse los niveles estables
durante el día, es un indicador útil de la m edia de la con cen ­
tración de GH.

Hiperproducción de som atotropina


Edad
Figura 24-7. Evolución de la concentración sérica de factor de crecimien­ El exceso de som atotropina se produce en la mayoría de los
to similar a la insulina de tipo 1 (IGF-1) basa! en función de la edad. casos (95%) p or un adenoma hipofisario. Esta hiperproducción
provoca un crecimiento exagerado del esqueleto y los tejidos blan­
dos, cuyas consecuencias dependen de la edad del paciente:
depende, principalmente, de su producción en el hígado en res­
puesta a la som atotropina. Sin em bargo, otros factores pueden 1. Si el exceso de som atotropina se produce antes del fin del
afectar a su concentración, com o los genéticos, los nutriciona- crecim iento de huesos largos y cierre de la epífisis, se p ro ­
les o los horm onales (la tiro xin a, el co rtiso l o las h orm on as duce gigantismo.
sexuales). Su con cen tración sanguínea va aum entando desde 2. Cuando la hípersecreción se produce en adultos, en los cua­
el nacim iento hasta la pubertad, m om ento en el cual com ienza les ya se ha cerrad o la epífisis de los huesos, se p rod u ce
a descender (ñg. 24 -7 ). Sus niveles tam bién están influidos por acrom egalia. Las m an ifestaciones clín icas ap arecen de
la dieta: las dietas proteicas y grasas aumentan sus niveles m ien­ fo rm a lenta d uran te varios añ os an tes del d iagn óstico y
tras que la restricción calórica y las dietas ricas en hidratos de causan deformaciones óseas, alteraciones neurológicas, car­
carb on o los dism inuyen. Así, la p rod u cción de IGF-1 p o r el d íacas (h ip ertrofia, arritm ias y alteraciones valvulares),
hígado puede estar dism inuida en diversas situaciones patoló­ respiratorias (apnea del sueño p o r estrech am ien to de las
gicas, com o la m alnutrición, la enferm edad hepática, el hipo- vías respiratorias) y m etabólicas (com o la intolerancia a la
tiroidism o o la diabetes mellitus m al controlada. A l igual que glucosa, que se produce en la m ayoría de pacientes).
ocu rre con la som atotropina, los niveles de IGF-1 total también
están disminuidos en la obesidad. Sin em bargo, los niveles de
IGF-1 libre están elevados. Por tanto, la cuantifícación de IGF-1
Estudio bioquímico del exceso
de producción de somatotropina
no es una prueba ú tü en los pacientes obesos.
El IGF-1 puede circu lar en plasma unido a seis tipos de p ro ­ Se lleva a cabo de la siguiente m anera:
teínas, p ero sobre tod o lo hace unido a la proteína de unión
del fa c to r de cre cim ie n to s im ila r a la in su lin a de tip o 3 1. Seguim iento d el ritm o circadiano. La h íp ersecreción de
(IGFBP-3, del inglés, insulin-like growth facto r bindingprotein). som ato trop in a en la acrom egalia se c a ra cte riz a p o r una
La concentración plasm ática de esta proteína también depende alteración de la secreción pulsáti, de form a que la con cen ­
de la som atotropina. E l IGF-1 se disocia de la IG FBP-3 antes tración de som atotropina p erm an ece elevada durante las
de p asar a través de la m em brana capilar hacia las células dia­ 2 4 h sin descender a niveles indetectables a lo largo del día
na, de m odo que la IGFBP-3 actúa com o un depósito circulante (ñg. 24 -8 ). P ara observar esta alteración del ritm o, es n ece­

Secreción diaria Curva de sobrecarga de glucosa


(75 g vía oral)

12 15 18 21 24 3
Hora del día Minutos tras estimulación

— Control — Acromegalia Control — Acromegalia

Figura 24-8. Ejemplo de un paciente con acromegalia. Se muestra la alteración en el ritmo circadiano de la somatotropina y en la respuesta a la
sobrecarga oral con 75 g de glucosa.
284 Parte III— Alteraciones de órganos y sistemas

sario realizar múltiples extraccion es de sangre a lo largo capacidad intelectual norm al. La deficiencia puede ser congé-
del día. Sin em bargo, una con cen tración elevada de som a- nita, p or u n a lesión hipofisaria o h ipotalám ica, o p o r causas
totrop in a tam bién puede observarse secu n d ariam en te a desconocidas. Tam bién una situación de estrés social puede
otras enferm edades, com o diabetes m ellitus, insuficiencia con du cir a la supresión de som atotropina.
renal o m alnutrición. C uando esta deficiencia se produce en los adultos se obser­
2. Supresión con sobrecarga de glucosa. Debido a la elevada fluc­ van alteraciones en la com posición corp oral, con descenso de
tuación diaria de la concentración de somatotropina, la falta la m asa m agra e increm ento de la m asa grasa, sobre todo abdo­
de regulación de su secreción se pone de manifiesto mediante m inal, y m en or densidad m ineral ósea (lo que conlleva m ayor
pruebas dinám icas, com o la sobrecarga oral de glucosa. La propensión a padecer fractu ras). La causa m ás frecuente es un
adm inistración de 75 g de glucosa p or vía oral a individuos adenom a hipofisario o la irradiación cran eal. Puede o cu rrir
sanos produce un descenso de som atotropina a concentra­ que la deficiencia se produzca en un con texto de hipopituita-
ciones inferiores a 2 [xg/L durante las 2 h siguientes (fig. rism o generalizado, que se acom paña de hiposecreción de otras
2 4 -8 ). E ste descenso no se observa en los individuos con h orm on as, com o co rtico tro p in a, tiro trop in a o gonadotropi-
hiperproducción de somatotropina (acromegalia), en los cua­ nas. E n ese caso, el déficit de gonadotropina suele preceder al
les incluso puede elevarse. Se pueden considerar pacientes déficit de TSH y de A CTH .
en remisión o con acrom egalia controlada aquellos con un
nivel de som atotropina inferior a 1 n g/L y con niveles n or­
males de IGF-1 a las 2 h de la estim ulación con glucosa. Los
Estudio bioquímico d el déficit
pacientes en teórica remisión en que se observa un fallo de
de producción de somatotropina
la supresión presentan m ayor riesgo de recu rren cia de la Se lleva a cabo con el siguiente procedim iento:
enfermedad activa. E sta prueba de sobrecarga no es especí­
fica ya que también puede existir una respuesta alterada en 1. Seguim iento del ritm o circaáiano. L a con cen tración plas­
pacientes diabéticos, con enfermedad hepática u obesos. m ática de som atotropina en estos pacientes es indetectable,
3. Cuantificación de IGF-1. El exceso de som atotropina p ro­ sin pico n octu rn o. N o obstante, tal y com o se ha descrito
duce u n increm ento de IG F-1, que incluso puede ser más an teriorm en te, tam b ién en individuos sanos se pueden
in form ativo en el d iagn óstico de la h ip erp rod u cció n de observar concentraciones indetectables. Adem ás, los nive­
som atotropina que la cuantificación de la propia som ato­ les de IGF-1 tam bién suelen ser bajos respecto a los valores
tropina. De esta form a, es im portante la m edida de ambas de referen cia corregid os p o r edad. La sensibilidad de la
m agnitudes y se puede excluir la existencia de acrom egalia pru eba de IG F-1 es m ay or en n iños que en adultos. Sin
si la con cen tración de som atotropina es inferior a 0,4 n g/ embargo, m uchos de los pacientes poseen niveles norm ales
m L , y la de IGF-1 se en cu entra dentro de su intervalo de de IG F-1 ya que su producción es estim ulada tam bién p or
referencia (si el paciente no sufre otra enfermedad al mismo otras horm onas. P or ello, son m ás útiles las pruebas de esti­
tiem po). Adem ás, los niveles elevados de IGF-1 correlacio­ mulación.
nan habitualm ente m ejor con la gravedad de la enferm e­ 2. P ruebas de estimulación. Estos tests son im portantes para
dad. La d eterm inación de la IG F-1 es m uy útil en la eva­ d ia g n o s tic a r la h ip o se cre ció n de s o m a to tro p in a . Sin
luación de la eficacia del tratam ien to y la persistencia de em bargo, personas con una función n orm al pueden p ro ­
una con cen tración elevada se asocia con una inadecuada d u cir una respuesta inadecuad a, p o r lo que es n ecesario
supresión de la som atotrop in a y/o co n la continuidad de que se produzca una respuesta alterada, al m enos, en dos
los síntomas. tipos de pruebas de estim ulación p ara d iagn osticar una
deficiencia. Entre los tests de estim ulación se encuentran:
E l objetivo del tra ta m ie n to es n o rm a liz a r los niveles de
som atotropina e IG F-1, que se puede conseguir con un p ro ce­ a) La prueba de estim ulación con L-dopa o levodopa suele
dim iento q uirúrgico o farm acológico. El tratam iento q uirúr­ solicitarse en niños que presentan síntomas de déficit de
gico consiste en reseccion ar el tu m o r hipofisario. Sólo se p ro­ somatotropina, com o retraso en el crecimiento, con fun­
duce una pérdida de la función hipofisaria com o consecuencia ción tiroidea norm al, y en adultos cuando presentan sín­
de la cirugía en un núm ero m uy bajo de pacientes (<2 %), quie­ tom as de déficit, com o disminución de la densidad ósea,
nes a p a rtir de entonces deberán seguir u n tratam ien to h o r­ fatiga, cambios en el perfil lípidico y reducción de la tole­
m onal sustitutorio de p or vida. rancia al ejercicio. Se considera una respuesta adecuada
Tam bién existen tra ta m ie n to s farm aco ló g ico s, co m o la a estos estím ulos farm acológicos un increm ento de la
ad m in istració n de agonistas de la d o p am in a o análogos de concentración de som atotropina p or encim a de 10 fxg/L
la som atostatina. Estos últim os son los m ás empleados ya que durante las 2 h siguientes al estímulo.
tam bién controlan el crecim iento del tum or. b) La hipoglucem ia provocada p o r la ad m in istración de
El con trol del tratam ien to debe realizarse m ediante m ed i­ insulina (unas 0,15 U /k g p or vía i.v.) es uno de los más
ciones periódicas de IGF-1 después de las 12 prim eras semanas útiles. H ay que tener en cuenta que es u n test que co n ­
tras la ciru gía, es decir, cu an d o se estabilizan los niveles de lleva ciertos riesgos ya que provoca un descenso de la
IGF-1. glucosa p or debajo de 2 ,2 m m o l/L , p or lo que ha de ser
realizado p or personal experim entado y en condiciones
controladas.
Deficiencia de som atotropina c) O tras pruebas alternativas de estim ulación son la adm i­
nistración de clonidina p o r vía oral, de glucagón in tra­
Aunque no es una causa frecuente, la deficiencia de som a­ m u scu lar, de arg in in a p o r v ía i.v. o la ob ten ción del
totropina en los niños provoca retraso en el crecim iento con espécim en durante el sueño profundo o tras 2 0 m in de
C a p ítu lo 24 — Hormonas hipofisarias 285

Estimulación con insulina Estimulación con clonidina

•5.«=í •5.'=í
o g o O]

Minutos tras estimulación Minutos tras estimulación

Control — Insuficiencia — Control — Insuficiencia

Figura 24-9. Ejemplo de la evaluación de la insuficiencia de somatotropina mediante el uso de pruebas bioquímicas de estimulación con insulina
o con clonidina.

ejercicio intenso estandarizado. Todas estas son p ru e­ 2. D ím eros o trím ero s de u n o s 5 0 k D a (b igp ro la ctin ), que
bas de estim ulación de la secreción de som atotropina representan el 5-15% de la prolactina circulante.
con m en or riesgo que las anteriores (ñg. 24-9). 3. M acrop rolactin a form ada p o r complejos inactivos de p ro-
lactina con la inm unoglobulina IgG (big big prolactin), que
Los pacientes con insuficiencia de som atotropina se bene­ tienen u n peso m olecu lar superior a 100 kD a. La m a cro ­
fician de la terapia co n la h orm on a recom binante y la deter­ prolactina está presente en cantidad variable en sangre.
m inación de IGF-1 en suero es el m ejor p arám etro bioquím ico
p ara evaluar la eficacia de este tratam iento. Al contrario de lo que ocu rre con las demás horm onas hipo­
fisarias, el hipotálam o regula la secreción de prolactina fun­
dam entalm ente p or los estím ulos inhibitorios de la dopam ina.
Resistencia a la somatotropina
E l m ayor estím ulo de la liberación es la succión del neonato
(síndrome de Laron)
aunque tam bién hay otros estím ulos que p rovocan su libera­
La resistencia a la som atotropina es u n a enferm edad poco ción, com o el estrés (problam ente m ediante la supresión de la
frecuente, que puede deberse a: dopam ina), la hiperosm olalidad o la tiroliberina. Tal y com o
ocu rre con la som atotropina, esta secreción es pulsátil y m ayor
1. Deficiencia de IGF-1, p or alteración en el receptor de som a­ durante el sueño, y alcanza el m áxim o en las etapas de sueño
to tro p in a, en su señalización o en la síntesis del propio profundo y u n n adir diurno (fig. 24-10).
IGF-1.
2. Resistencia a IGF-1, p or una alteración en el propio recep ­
to r de IGF-1 o en su cascada de señalización. Acciones de la prolactina
La prolactina actú a uniéndose a sus receptores a través de
E sta alteración produce un notable enanism o, con estatura
la vía de señalización JAK/STAT-cinasas, un m ecanism o sim i­
inferior a 142 cm , obesidad, debilidad m u scu lar y osteoporo-
lar al d escrito en el caso de la som ato trop in a. La glándula
sis. A n alíticam en te, es ca ra c te rístic a u n a co n cen tració n de
som atotrop in a elevada y m uy dism inuida de IG F-1, excepto
en el caso de alteraciones en el recep tor de IG F-1. E n ese caso,
la con cen tración de IGF-1 tam bién se en co n trará elevada.
U n ejemplo de resistencia a la somatotropina es la población
de pigmeos africanos con talla m edia m uy baja (aproxim ada­
mente, 140 cm). Su secreción de somatotropina es norm al, pero
la concentración de IGF-1 es baja. Estos individuos presentan una
alteración de los receptores de somatotropina, que se traduce en
una concentración plasmática de GHBP disminuida. Por ello, no
responden a la administración exógena de somatotropina.

P ro la ctin a
La prolactina es un péptido sim ilar a la som atotropina, de
la cual existen tres form as circulantes: Hora del día
Figura 24-10. Ritmo circadiano de la concentración de prolactina sé­
1. Una forma monomérica de 22,5 kDa, que generalmente com ­ rica. La secreción tiene picos y es menor al mediodía y mayor durante
prende el 85-95% de la prolactina presente en la sangre. el sueño.

You might also like