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Te permiten captar nuevos clientes, interactuar con ellos, alcanzar notoriedad en internet, mejorar tu
reputación online y tu posicionamiento y son una fuente de tráfico web.
Muchas de las redes sociales más utilizadas permiten crear un perfil personal y una o varias páginas de
empresa. La diferencia es clara, los perfiles personales sirven para interactuar con tus amigos, mientras
que las páginas de empresa representan a una empresa, organización, marca o personaje famoso.
Facebook y Twitter son las imprescindibles, y luego ya tienes dónde elegir en función de tus intereses:
LinkedIn, Pinterest, Google plus…
No hay varita mágica para ello. Empieza por promocionar tu página entre amigos y conocidos y publica
contenidos relevantes y de calidad.
Hay varios errores que puedes cometer, pero yo diría que el peor es el abandono. Si eres una empresa, no
abras cuenta en una red social si luego no vas a tener tiempo para gestionarla.
Me temo que si te gusta la privacidad, las redes sociales no son el lugar más adecuado para ti. Compruébalo
leyendo las condiciones de uso (eso que )
Los lugares favoritos de actuación son foros, blogs, sitios de noticias abiertos a los comentarios. No
importa mucho la temática del sitio, ya que no tienen que saber de algo para comentar sobre ese tema. Es
más, cuanto menos sepan y más disparatadas sean sus opiniones, mejor, pues mayor es la perturbación
que generan.
Responder con agresividad e insultos tampoco sirve de nada, salvo para perder los nervios y quizás
buscarte un desagradable juicio por injurias o amenazas.
Si eres el dueño del sitio y crees que lo mejor es expulsar directamente al troll de internet, debes de saber
que esa estrategia no siempre funciona. En efecto, existen trolls muy insistentes que no dudarán en volver
bajo otros nombres o formas en busca de notoriedad. Además, ten cuidado, porque no pocos tienes
conocimientos avanzados de informática que pueden hacerte la puñeta.
Entonces, la forma más efectiva de deshacerte de los trolls es seguir la vieja norma de Don´t Feed the
Troll, es decir, no alimentar al troll. Para ello, nada mejor que ignorarle y hacer caso omiso a sus
provocaciones. Al principio insistirá y puede que se ponga verdaderamente pesado, pero tarde o temprano
comprenderá que no tiene nada que hacer, y se irá en busca de una nueva victima. Así son los trolls.
Y tu, ¿has tenido que lidiar con algún troll de internet? ¿Conseguiste salir indemne de sus ataques?
Este es un trabajo de investigación que puedes realizar en grupos con alumnos de
otros cursos y grados, profesores, padres y autoridades de tu colegio o escuela. El
objetivo es obtener datos estadísticos sobre cada uno de los puntos encuestados,
para saber qué tan inmersos están en tu comunidad educativa en las redes
sociales y cómo las utilizan. ¡Éxitos!
-Otras:
-Para contactar con amigos a los que hace tiempo que no veo
-Otras:
-Algunos días
-Solo subo fotos en las que aparezco yo. Si sale más gente, primero pido su permiso antes
de ponerlas.
5. ¿Tus amigos han subido alguna foto tuya en las redes sociales?
-Muchas veces
-Algunas veces
-Nunca
6. Cuando un amigo sube una foto tuya en una red social, ¿te pide primero permiso?
7. ¿Alguna vez has visto una foto tuya que hubieras preferido que no la hubiesen subido?
-Muchas veces
-Algunas veces
-No, nunca
-Sí, siempre, aunque no sepa quién esAcepto a mis amigos, y también a amigos de mis
amigos, aunque no los conozca en persona
-Casi nunca
-No, nunca
10. ¿Alguna vez has visto que insultan, dañan o humillan a alguien en la red social?
-Casi nunca
-No, nunca