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INTRODUCCION

Es de suma importancia que se hable y tomemos conciencia de este, el principal problema que
afronta el país en la actualidad; La corrupción.

La delincuencia y la falta de seguridad se ubican en segundo lugar con 55%. Le siguen una
educación inadecuada con 31% y el desempleo y la falta de trabajo con 25%.

En estos momentos, como sabemos a través de los diversos medios de comunicación mundiales,
se han producido numerosos casos de corrupción política. Esto viene a demostrar no sólo la
impunidad con la que pueden actuar los distintos dirigentes sino también la necesidad del
endurecimiento de las leyes para estas situaciones y de una reforma política para todos.

Antes de empezar a dar mi punto de vista con respecto a este tema; hay que resaltar el verdadero
significado de la corrupción, que personalmente resumo en una depravación moral o simbólica.

El tráfico de influencias, el soborno, la extorsión y el fraude son algunas de las prácticas de


corrupción, que se ven reflejadas en acciones como entregar dinero a un funcionario público para
ganar una licitación o pagar una coima para evitar multas o clausuras.

EJEMPLO
Dando un ejemplo claro de toda esta situación encontramos el caso de la desviación de fondos de
recursos públicos y donaciones de personas y entidades japonesas. Según las investigaciones,
Aken y Apenkai, ONGs creadas por Fujimori para recibir donaciones japonesas, una vez Alberto
Fujimori Ganó las elecciones de 1990, habría recibido 20 millones de dólares en donaciones de
diversas organizaciones y ciudadanos japoneses pero nunca se supo que fue de este dinero.

Otro caso resaltante es el de los congresistas trásfugas, dando un breve resumen, el asesor de
Alberto Fujimori, Vladimiro Montesinos crearon un fondo con recursos del Estado para inducir,
mediante sobornos, a los congresistas electos en 2000, a cambiarse de bancada e incorporarse al
partido de gobierno (Congresistas trásfugas) con la finalidad de construir una mayoría
parlamentaria o de lo contrario obtener su apoyo, a través de sus votos pero manteniéndose en
sus respectivas organizaciones (congresistas topos).

Lo relatado anteriormente me sirve para lograr de cierta manera de abrirles los ojos a esta
situación tan fuerte que se vive constantemente, porque a lo largo de nuestra historia republicana
se sabe de muchos casos de corrupción de altos funcionarios de la Administración Pública.
Inclusive, en el caso del gobierno actual, se conocen casos de corrupción de funcionarios.

Sin ir muy lejos en el tiempo y en el espacio, El caso de Lucho Torres, recientemente encarcelado;
por actos de corrupción, y tráficos de terrenos.
CONSECUENCIAS
En síntesis, podemos decir que la corrupción como tema central en el Perú, ha estado en toda
nuestra era republicana, –con gobiernos militares o elegidos por voto–. Lo más grave de esto es
que mientras más se va hacia el núcleo del Gobierno, encontramos mayor corrupción, lo que
golpea fuertemente, las estructuras morales y éticas de la Nación, y va en contra de los aspectos
económico-políticos del país.

La corrupción es negativa, pues atenta contra el desarrollo económico de la Nación y, al mismo


tiempo, ataca al núcleo ético y moral de la ciudadanía.

Sin temor a equívoco, puede establecerse que, la corrupción, es un factor grave de inestabilidad
política y económica, hecho este último, que interrumpe el flujo de nuevos capitales o
reinversiones.

CONCLUSIONES
Para concluir nosotros, como ciudadanos; nos favorece conocer la verdadera dimensión de la
corrupción, porque sabiendo de donde viene y a quiénes beneficia, podremos elegir mejor a
nuestros próximos gobernantes, porque son ellos los que finalmente, haciendo uso del poder
político conferido por la ciudadanía mediante las elecciones, toman decisiones económico-
políticas que nos afectarán en nuestra vida diaria; pero esto solo se lograra si mejoramos la
educación, concientizando a las personas sobre la importancia de tener un voto consiente, y como
la vida es mejor si nos esforzamos por conseguir algo, y no simplemente lo tomamos por la fuerza,
en como un país puede cambiar si de verdad lo queremos.

Siempre culpamos a los gobernantes cuando al fin de cuentas todo viene desde casa, si vemos que
esto es fácil, y no tenemos los valores, ni la moral suficientemente alta, jamás alcanzaremos los
estándares para ser verdaderamente el país que merecemos.

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