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Los Colores en la literatura, la poesía y la vida

Eduardo Mora-Anda*

Discurso del Embajador Eduardo Cada acto del hombre en su


Mora Anda al ingresar en la Acade- vida, si es libre, es la expresión de un
mia Ecuatoriana de la Lengua el 28 temperamento, del hecho de ser uno
de octubre del 2010. mismo y no otra persona y cada ex-
presión de ese modo de ser y de pen-
Señores: sar es, como diría Bergson, la explo-
Quiero agradecer profunda- ración de una variable en la infinita
mente al señor Presidente y a todos gama de posibilidades que supone
sus miembros por esta honrosa aco- la evolución creadora, la evolución
gida en el seno de la Academia de la universal y humana.
Lengua. En particular deseo agrade- Hoy he querido referirme a los
cer las generosas y siempre lúcidas colores en la Literatura, la Poesía y
palabras de Hernán Rodríguez Cas- la Vida, y este tema, que puede pa-
telo, un hombre que se distingue por recer muy caprichoso o banal, es en
la claridad y franqueza de su erudito realidad el tema del telón de fondo
pensamiento. de nuestras vidas y el tema de la
El Libro de los Proverbios dice manera como tomamos y llevamos
que las palabras dichas oportuna- nuestra existencia, porque el univer-
mente son como naranjas de oro so y la vida humana son como una
(Prov 25:11). Ojalá que en este día enorme gama de tonos y colores, y
mis simples palabras sean las apro- por tanto de opciones y de probabili-
piadas para esta ocasión tan impor- dades. La evolución, desde hace mu-
tante para mi, conforme a ese sen- cho tiempo, está en buena parte en
tencia que parece sevillana... nuestras manos, en manos de los hu-

* Embajador de Carrera del Servicio Exterior Ecuatoriano.

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Eduardo Mora-Anda

manos, y cada elección y experimen- templáramos un cuadro impresionis-


to no solo revela una preferencia, un ta, o un Van Gogh, y de ello fuéra-
gusto, un criterio o una cultura – o mos deduciendo sus implicaciones
una falta de criterio y de cultura-, en la vida diaria y en la historia....
sino también unos efectos prácticos, Ya mencioné al comienzo que
unas consecuencias efectivas, porque según los Proverbios las palabras
tiene incidencia en la vida cotidiana oportunas son como naranjas de
y en la vida individual y en el futu- oro. Dorados son también al sol los
ro de nuestras sociedades. Así pues hermosos naranjales y dorados los
la tarea del escritor y el filósofo y el trigales y dorados son los sueños
historiador, e inclusive la del pintor, de los años juveniles. Todo amane-
se convierten en una labor social cer y toda juventud implica tonos
porque, al influenciar la vida del lec- dorados. Con mis amigos, en lar-
tor y de la sociedad, no solo son una guísimas caminatas, cuántas veces
expresión deseada sino también la inventábamos diez mundos posibles,
obra magna de propiciar el Bien y la o los reformábamos, casi sin llegar a
Verdad y la Belleza y, como dice el nada, y cuántas veces también ima-
mismo Bergson, ir rechazando metó- ginábamos dulces e inefables idilios,
dicamente el error, para llegar a lo mientras por delante nuestro pasa-
verdadero...Y, desde luego, a la Li- ba, contradictoria y prosaica, la vida
bertad. Pues el espíritu es Libertad. cotidiana...
Y lo que vale, siguiendo al Pragma- “Juventud, divino tesoro...” El
tismo, es lo que tiene efectos reales, país ideal todavía no lo hemos for-
positivos y útiles, lo que funciona jado, excepto en la imaginación de
bien y sirve a la Vida... algunos escritores utópicos o tras-
Así pues al referirme a los colo- cendentalistas. En realidad la idea-
res no intentaré hablar de las teorías ción de las grandes utopías, cuando
de Leibnitz ni los descubrimientos de estas han sido buenas, ha tenido un
Newton y de los físicos modernos, y papel importante en la historia y el
apenas si rozaré la teoría de Goethe progreso de la humanidad, puesto
sobre los colores, sino que, en una que al promover nuevos modelos y
andanza mucho más modesta y un modos más amplios de pensar, han
poco caprichosa, como las que solía conducido a la mejora de las con-
hacer nuestro buen señor Don Qui- diciones de vida, a la tolerancia y
jote de la Mancha, ahora iré por esos a la libertad, al propio concepto de
caminos y campos de la literatura, el los derechos humanos y a generar
arte y los libros, anotando tal o cual transformaciones sociales positivas.
impresión, tal o cual colorido y fuer- Y este es el ámbito en el que brillan,
za o flaqueza, y sobre todo, tal o cual con luz interminable, desde Akena-
efecto o consecuencia, como si con- tón, el faraón monoteísta en el An-
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Los colores en la literatura, la poesía y la vida

tiguo Egipto, y Lao Tse en la vieja ...Ya suenan los claros


China, y el verdadero Zaratustra en clarines,
Persia hasta el grande Tomás Moro La espada se anuncia
con su “Utopia” y George Fox con con vivo reflejo,
su espiritualismo cuáquero, y Hen- Ya viene el cortejo,
ry David Thoreau y Emerson con su oro y hierro,
trascendentalista humanista, y por el cortejo de los paladines...
supuesto Gandhi, con su resplande-
ciente sencillez. Stendhal intituló “Rojo y Ne-
Como hoy he empezado por gro” a una de sus grandes novelas,
el glorioso dorado, debo reconocer para retratar las contradicciones so-
también que hay un vil dorado: el ciales de la época postnapoleónica.
oro de la usura, el codiciado por los Pero para nosotros esos colores no
avarientos, ese dorado que enloque- son los de la decimonónica burgue-
ció y produjo fiebres, muertes y es- sía sino los de la guerra... Para noso-
panto en las conquistadores de Amé- tros, como decía el Lao Tse, el sabio
rica, el dorado del cuento del Rey fundador del Taoísmo, ¨Cuando se
Midas, del oro que alucina y enlo- ha asesinado a muchas personas de-
quece pero que no se puede comer... bería reinar la tristeza: una victoria
Y también hay el falso dorado militar debería celebrarse como si
de las vanas glorias guerreras, de las fuera un entierro....”.
águilas romanas y la esvástica nazi, El falso dorado corresponde a
de los grandes imperios y los ruines los falsos dioses, a los ídolos y fal-
poderes, oro falso, oro para multitu- sos dioses del poder, la riqueza y el
des bobas que en realidad significa dinero...
sangre, dolor y muerte...No, no, las Doradas han sido las coronas
así llamadas glorias guerreras no son de los reyes, pero qué pocos reyes y
doradas. Ninguna guerra es gloriosa. gobernantes buenos ha habido...
La guerra es negra y roja, negra de Pero, a decir verdad, según el
la maldad que nada suelta y roja de investigador John Blofeld, el color
la sangre derramada...Y allí el único de los emperadores en la China clá-
color que es noble y que bien pue- sica no era el dorado sino el alegre
de cantarse es el de los héroes que amarillo. Sólo que para nosotros
se sacrificaron por salvar a sus pue- el amarillo no es color propio de
blos, y la sangre de los mártires, que los emperadores medievales o feu-
murieron por su Fe, por sus ideas y dales, sino el verdadero y simple
por las santas libertades...En vano amarillo de las florecillas silvestres
retumban en nosotros los perfectos y de las alegres mañanas. Como ya
versículos de la Marcha Triunfal de decíamos ayer, al anotar mis prefe-
Rubén Darío: rencias:
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Eduardo Mora-Anda

“Me gusta el color amarillo, y de creer y de orar y renovarse. El


color de sol y de miel y de manto mismo azul celeste de la Vir-
alegría gen parece que se ha extendido so-
Y el azul de mar abierto y el bre los cielos y ella nos acompaña
de cielo despejado...” mientras nosotros, simples poetas o
humanos soñadores, deambulamos
Ese azul claro y límpido, canta- caprichosamente, porque un paseo,
do en los cuadros de Monet y cuyo ya lo dijo alguien, no tiene otro pro-
nombre usó Rubén Darío para uno pósito que el de dar un paseo...
de sus más importantes libros...Azul Mi padre, que amaba el campo,
purísimo, azul del día alegre que se describió así esa hora bendita del día
abre a los campos y a las urbes no que comienza:
contaminadas, azul de la Naturaleza
renovada, que esta es la caracterís- “Todas las mañanas la zhulla
tica principal de la Naturaleza y, si (el rocío) mañanero le pone la
se quiere, del hombre: la renovación. camisa al campo. Cada hoja
Renovarse, renovación: hacer una es una estrella. Sobre el pra-
catarsis, y traer novedad a la vida, do brillan infinidad de aristas
abrirle a la vida todo aquello que como si en el mortero de la
hay de bueno, de humano, de cor- noche hubieren triturados las
dial y generoso, de positivo y libre.... estrellas... Los diamantes son
Henry Thoreau, el sabio de Concord gotas endurecidas. Las gotas
que se marchó a vivir en un bosque, sobre la yerba ríen con los ojos
decía que cada mañana es una invi- niños de las esmeraldas...”
tación para hacer una vida mejor y
más sencilla. Y anotaba una senten- No, el día, para nosotros, no
cia del sabio chino Tchiang Thang: debe comenzar con espantosos noti-
¨Renuévate por completo cada día y ciarios, ni con los gritos de la gente
hazlo una vez y otra vez, y así por impaciente y estresada, que principia
siempre..”. ¨Hay mañanas, dice el otro capítulo de apresuramientos, co-
mismo Thoreau, cuando el mundo rrerías y regateos mezquinos. No. La
parece que comienza especialmente temprana mañana es la hora del poe-
de nuevo.. Es la hora del poeta..” ta, es la hora del místico, es la hora
Quizá a lo lejos resuena la campana del caminante, es la hora del hombre
de una humilde iglesia. Las neblinas libre, libre de reglas, libre de dogmas,
se van esfumando, un sol todavía ti- libre de afanes pequeños, que sim-
bio tiende sus rayos sobre la yerba plemente pasea... Y bien podemos
niña y verde...Y salimos a caminar- imaginarnos a un pensador, digamos
pues nuestro sino es el del caminan- a Henri Bergson o a Montalvo, o a
te..Esta es la hora bendita de andar Montaigne, o a Don Miguel de Una-
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Los colores en la literatura, la poesía y la vida

muno, deambulando por esos cami- estas notas no son las que corres-
nos y calles de Dios, en la mañana ponden a nuestro temperamento y
traslúcida y celeste, pensando libres, a nuestro corazón. Son notas de-
serenos, felices, sin prisas, sin presio- safinadas, erróneas, metálicas, gri-
nes, quizá con un libro en la mano y tos de la desorientación y la vida
con una intraducible canción en el pe- malgastada...A nosotros nos llaman
cho.... O bien podemos pensar en un las voces humanísimas del optimis-
¨pequeño filósofo¨, como se llamaba mo. Benjamin Carrión, el admirable
a si mismo Azorín, que columbra la hombre que habitó esta casa, decía
azulada lejanía y los amistosos perfi- siempre que él prefería ser optimis-
les de la pequeña ciudad que despierta ta. El mundo, el país, la humanidad,
en medio de una milagrosa transpa- necesitan de una renovación moral y
rencia... Como decía Thoreau,¨Estar espiritual y ese optimismo es inmen-
despierto es estar vivo¨. samente importante para el desarro-
Un nuevo día es una renovación, llo humano y social, y ese optimismo
otra oportunidad que Dios nos da, es el que nos hace falta aquí, ahora,
un nuevo ciclo que vivir en el pere- en nuestras tierras, en nuestra pa-
grinaje que es la vida. Y lo podemos tria...
vivir como si fuera otro pedazo de lo Somos, seamos, al caminar
mismo, otro sección de la monoto- así, despreocupadamente, por un
nía o la repetición desesperante, que momento enteros, libres, tranquila-
es de la que se habla en el libro apa- mente, serenos. Para nosotros cada
rentemente pesimista y decepciona- día, cada recomenzar de la natura-
do que es el Eclesiastés cuando dice: leza, sea una oportunidad flamante
¨Qué es lo que fue? Lo mismo que y limpia, como el vuelo inédito de
será; que es lo que ha sido hecho? una ave... Y aquí cabe repetir ese
Lo mismo que se hará, y nada nuevo maravilloso poema de Juan Ramón
hay bajo al el sol...” Aburrimiento Jiménez:
o pesimismo que también asoma en
Bécquer cuando dice: “Dios está azul. La flau-
ta y el tambor
Hoy como hay, anuncian ya la luz de pri-
mañana igual que hoy, mavera.
Y siempre igual Vivan las rosas, las rosas
un horizonte gris, del amor
un cielo azul En el verdor con sol de la
y andar y andar...” pradera!...
Vámonos al campo por
Pero no, estas no son las notas romero,
con que nos afinamos, mejor dicho, Por romero y por amor...”.
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Eduardo Mora-Anda

Cuentan que San Vicente de rece, como vuelven las olas, como la
Paul, cuando salía temprano a reali- lluvia vuelve. Como decíamos antes:
zar sus caridades, solía decir: “Her- “Suelen las yerbas mostrar su
moso día de Dios para realizar el alegría hasta en los muros vencidos
Bien...”. Y la humanidad, señores, y las ruinas. En los corrales más sór-
ya sabe mucho de esto. La humani- didos, entre basura y despojos, tam-
dad ya ha pasado por innumerables bién asoma triunfante y sonriente, el
tragedias, por muchos horrores, por amable rostro de la vida...”
inútiles guerras, por horrendo ge- Muere un hombre, ilustre o no,
nocidios, por grandes calamidades con nada o mucho que mostrar de su
sociales, por ridículas estupideces y vida, vida vacía o rica, que eso es de
desperdicios de tiempos, y por gi- cada uno y de la sociedad también,
gantescas crueldades... pero nace también un niño, reapa-
Ahí está la historia de empe- rece una flor, canta una ave, gorjea
radores, Calígulas y Nerones, de un río y hoy en día las flores se han
Genghis Khans y puritanos e inqui- vuelto a abrir en los parques de Hi-
sidores, de Hitler y Mao, de Stalin y roshima y Nagasaki, que la barbarie
Pol Pot. El día, el color, la vida, no destruyó con la bomba atómica...Y
han sido hechos para esas barbari- con el nuevo día nosotros también
dades. La vida ha sido hecha para la podemos lavarnos del pasado, re-
vida, y felizmente, me atrevo a apos- novarnos, bañarnos en la pureza de
tar, que a la final la vida triunfará...A la oración y la inspiración, y salir a
la final, cuando uno mira las foto- hacer el bien, y no a repetir las vul-
grafías tomadas en la Alemania en garidades prosaicas y errores del pa-
ruinas de 1945 no hubiera podido sado...
pensar que después allí mismo, so- Por eso para nosotros el hori-
bre esas ruinas, aparecería un país zonte de la existencia tiene un color
próspero y ordenado, en el que se optimista: el color azul claro. Azul
disfrutaría de derechos y de liberta- de oxigeno, de cielos limpios, de
des, de cultura y de seguridad...La mares vivos, de nuestro planeta con
vida se agota, parece agotada en la Vida, con vida riendo y corriendo y
destrucción que hacen los hombres y cantando, como una quinceañera...
los cabecillas infames, pobres criatu- En un vuelo sobre la Isla anti-
ras que destruyen lo poco que hemos guamente llamada Española vi la
armado, y a nuestros prójimos y aun tierra del lado de Haití y la vi deso-
a nuestro Planeta. Pero la Vida, fe- lada y sin bosques y vi el mar y era
lizmente, no está completamente en gris, ya sin peces, agotado, esquil-
nuestras manos, hay una sincronía mado, un mar muerto, y al pasar,
natural y una Providencia en que gran frontera visual, al sobrevolar la
creo, y la vida vuelve, renace, reapa- República Dominicana, era la tierra
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Los colores en la literatura, la poesía y la vida

verde, pródiga y poblada de árboles cian repetitivamente que el Salvador


y sembríos, y la mar era azul y verde, retornará en breve, e igual esperanza
con ese color transparente y único está en otras religiones, en el Zo-
del Caribe, porque era un mar lleno roastrismo o religión parsi, en el Bu-
de vida, de algas y de peces y espe- dismo, aún en el Islamismo. ¨He aquí
ranzas, un mar y un país no agota- que yo vengo pronto y mi galardón
dos, un medio ambiente que se había conmigo para recompensar a cada
respetado más y en el que la vida se- uno según sea su obra” dice el Apo-
guía y cantaba... calipsis, pero la hora, afirma Jesús,
Un himno de los indígenas sioux solo la sabe el Padre de los Cielos.
de Norteamérica empieza diciendo: En vano ciertos predicadores mile-
naristas y fundamentalistas anuncia-
“Que nuestro día sea azul...” ban las fechas en que tal regreso se
produciría. No se produjo. Quedó
Y yo he tomado esta frase de ese la secta, o las sectas, pero no hubo
hermoso himno piel roja para ha- ese regreso programado. Es un mis-
blar de una de mis esperanzas: terio, puesto que para Dios, también
dice la Escritura, mil días son como
“Que nuestro día sea azul, un día...Y sin embargo se atribuye
Que yo te encuentre al profeta Mahoma una frase que a
más Allá de la angustia y la menudo se olvida : “Cuando llegue
distancia el fin del mundo no habrá nadie más
junto a los grandes bosques y para purificar la religión que Jesús,
los mares, el hijo de María”...
en el verdor soleado de los Pero volvamos al azul. Lo veo
campos... así como comienzo de día, como
que retornes a mí, como el sol renovación, o para usar el título de
vuelve, una buena novela, como “ La segun-
Como el tiempo y la luz da oportunidad”..
que nos dan ánimo,
Como el día regresa, “La vida quiere más
Amigo, vida,
Siempre...” La vida quiere cantar,
la plenitud, como el mar.
Puntualidad del día, puntuali- Quiere la azul libertad”.
dad del sol que regresa para alum-
brar la atmósfera y producir el mila- Y del azul pasamos al malva y
gro de la fotosíntesis en los prados y al violeta y al morado, que mezclan-
hojas, puntualidad de Dios que vuel- do el azul y el rojo en distintas pro-
ve. Las cristianas Escrituras anun- porciones, tienen significados distin-
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Eduardo Mora-Anda

tos....... El violeta en la Literatura se fuerte y violento. El rojo se identifica


asocia con la evocación, la melanco- con la energía, con la vitalidad, con
lía y la nostalgia. Leopoldo Lugones la sangre, con las pasiones. La ense-
escribía: ña de los Luises, de los reyes france-
ses, era azul y blanco. Como se canta
Largas brumas violetas en La Marsellesa, la Revolución de
flotan sobre el río gris 1789 tiñó de rojo esa bandera y así
y a allá em las dársenas quietas fue el rojo agresivo, que usaron tam-
sueñan oscuras goletas bién en el pasado las temibles legio-
con un lejano país... nes romanas, el rojo del cambio vio-
lento, el rojo de la guillotina, de la
El violeta y el gris aquí caracte- soberanía mitológica de Rousseau y
rizan rápidamente el ánimo y el esce- del Comité de Salud Pública, el rojo
nario y el poeta pone en las goletas, del racionalista Robespierre que aca-
proyecta en esas naves, su nostalgia, bó decapitado por el mismo mons-
su melancolía, su deseo innombrado truo que engendró... Desde enton-
de algo... De algo tal vez desconoci- ces, muchas revoluciones tuvieron
do, pero que le hace falta, que por al rojo por bandera: la comuna de
ahora no alcanza... Paris, la Revolución Rusa de 1917,
Algo parecido miramos en ese la Revolución de Mao en China... Y
sencillo y hermosísimo poema de fue una idolatría y el culto soberbio
Juan Ramón Jiménez: de la personalidad y un libro medio-
cre y rojo los que sembraron de ini-
Tristeza del dulce campo, quidad y muerte con la así llamada
La tarde viene cayendo. Revolución Cultural, que causo tan-
De las praderas lejanas tas víctimas y destruyó gran parte
Llega un suave olor a heno. del legado cultural de la antigua cul-
Sobre la colina el cielo tura china. Curiosamente, Mao Zé
Es tristemente violeta. Dong era un gran poeta pero com-
Canta un risueñor despierto... puso una cartilla mediocre...
El color rojo a solas es un des-
En este apunte bucólico, el poe- equilibrio, es una explosión, es di-
ta, el risueñor despierto, habla de los namita, es un desafuero. La Natu-
suaves matices del crepúsculo cam- raleza, tan sabia, no lo pródiga: lo
pesino, pero la impresión sentimen- dispersa, lo expande y lo transfor-
tal de melancolía está dada por el ma, como en las expansiones de la
cielo violeta... energía cósmica en el espacio sideral,
De esos tonos nostálgicos, me- que van cambiando de tonos y abar-
lancólicos, al rojo, no hay una transi- can toda la gama de las posibilidades
ción sino un salto. El rojo es un color cromáticas, o como en los paisajes
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Los colores en la literatura, la poesía y la vida

de la hermosa España: en medio de veniles. A mi no me parece así. Este


los dorados trigales, he visto la roja es un convencionalismo como otros.
amapola, como una pincelada de En Occidente el negro ha servido
dicha y de travesura. Y esto lo re- para expresar el duelo. En Oriente
cogió Juan Ramón Jiménez en una era el blanco, pero los primeros cris-
canción, que se hizo popular hace tianos iban a los entierros de blanco,
mucho tiempo y decía: porque creían ellos que quien los de-
jaba iba al Cielo...
Novia del campo, amapola, En realidad el amor parece mul-
que estás abierta en el trigo, ticolor porque representa muchas
Amapolita, amapola, cosas: la sorpresa del descubrimien-
¿Quieres casarte conmigo? to y el hallazgo, la ilusión, la química
personal, la intensidad, la perdida,
El mismo encanto del rojo lo la pasión desmesurada, la evocación
podemos hallar en los cuadros de sin medida...Pero en realidad, si po-
Joaquín Sorolla y los célebres retra- demos decir que la transparencia es
tos de Julio Romero de Torres. Un un color, hay que afirmar que el ver-
clavel en el pelo de la joven andalu- dadero amor es transparente porque
za, el pequeño traje o el juguete del el amor ideal, cuando lo rozamos o
niño que juega en la playa lumino- encontramos, en verdad no es do-
sa...La misma travesura que hemos rado, ni azul ni rosa, sino inefable,
encontrado, en un estilo completa- inexpresable y evanescente...Como
mente diverso, en los cuadros viva- bien anotaba el poeta Damaso Alon-
ces de Joan Miró... so:
Y me inclino a creer que el ver- ... Vino queda y suave.
dadero progreso de la humanidad Ni materia ni espíritu.
no se conseguido con la violencia Traía
del rojo desencadenado sino con las Una ligera inclinación de
reformas sensatas, firmes y oportu- nave
nas. Para implantar el Código Civil Y una luz matinal de
y el orden administrativo, Napoleón claro día.
tuvo primero que acabar con el te- No era de ritmo.
rror de la Francia enloquecida. El No era de armonía
verdadero progreso de la Humani- Ni de color.
dad es obra de la sabiduría. El corazón lo sabe,
Y del rojo atenuado por el blan- Pero decir como era
co llegamos a los distintos tonos del no podría
rosado. Se dice que este color más Porque no es forma
pasivo es el color de las niñas, de los ni en la forma cabe...
mitos amorosos y de los amores ju-
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Eduardo Mora-Anda

Hay rosados de mal gusto, vul- siones y de los suicidios. El agujero


gares, chillones, ¨chagras¨, como se negro que se traga la materia. No, en
diría en Quito, “huachafos”, como la vida histórica y en la historia na-
se dice en Lima...Para mi denme los tural pienso yo que el antónimo del
colores de la buganvilla, esta plan- negro es el verde de la vida, el glorio-
ta florida, aparentemente inútil, so verde de las praderas ubérrimas,
que hace la delicia y la decoración de los perfectos paisajes suizos y
de muchos lares hispanos...Con austriacos, de los bosques inmensos
nombre francés, porque la divulgó y solemnes de Finlandia, retratados
Monsieur de Bouganville, la decora- en un himno por Sibelius.....Verde de
tiva planta ha llenado de alegría los yerba, de fruto, de árbol nuevo. Ver-
paisajes y no sólo en Francia y sus de de mar con vida, con algas, con
antiguas colonias sino también en futuro. Y verde de tierras fértiles, de
España y las suyas y no solo con ro- países alegres y productivos...
sado: he encontrado hasta siete colo- Ya Nicolás Guillén descri-
res de buganvillas: blancas, rosadas, bió a Cuba como
amarillas, color ladrillo, violetas,
moradas más oscuras y discretamen- “ Un largo lagarto verde
te rojas oscuras como el buen vino Con ojos de piedra y
tinto...En Guatemala las he visto sil- agua...”
vestres, en los campos. Si la violen-
cia y la segregación, si el sectarismo Y no podemos dejar de citar la
y la codicia, ayudados siempre por preciosa muletilla poética de García
la ignorancia, no hubieran estropea- Lorca:
do la historia de Guatemala, ahora
ese país de clima perfecto y hermo- “Verde que te quiero
sísimos paisajes sería una pequeña verde,
Suiza de habla castellana y veintidós Verde viento y verdes
dialectos mayas.... ramas,
Ahora bien, volviendo a la Na- El barco sobre la mar
turaleza, pienso yo que en la vida Y el caballo
cotidiana y en la historia de la hu- en la montaña...”
manidad el antónimo del negro, que
es muerte y es nada, no es el blanco, Pero también, se da el verde que
como se piensa en Cromática. En la extrañamos, el verde de la ausencia,
teoría cromática el blanco es la suma el verde que ya solo es memoria, el
de todos los colores y el negro es su de la fecundidad que ya no existe, el
ausencia: la ausencia de oxígeno, de verdor de los campos que la ignoran-
atmósfera, de aire, el vacío del es- cia y la codicia humanas arrasaron y
pacio sideral, el vacío de las depre- pavimentaron o convirtieron en de-
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Los colores en la literatura, la poesía y la vida

siertos y tierras erosionadas...Como mejor el uso de las tierras y prohibir


escribíamos un día: la extracción de arena de los ríos. El
cronista Fray Bernardo de Lizárraga
“El torpe muro, el en sus descripciones de las Indias (de
inhumano hierro fines del siglo XVI) describía al valle
cubren la tierra inmaterial y de Cuxibamba ( ¨valle feliz¨ o ¨deli-
buena cioso¨¨, en lengua indígena ) como
donde cantaban antes los jil- ¨alegrísimo, de grata arboleda, por
gueros medio del cual corre un río de salu-
y el río hablaba sus murmu- dable agua¨ ( ahora muy contamina-
llos lentos...” do )... Y en la hermosísima llanura
de Tarqui, cerca de Cuenca, y aun en
En Gales, Richard Llewellyn Chaullabamba y también acá cerca,
escribo una hermosa novela para en Machachi, hemos visto también
narrar la tragedia de la gente que ya algunas industrias y bodegas,
perdió su verde país en manos de cuando ese esplendor bucólico, bien
los explotadores de las minas de car- podría preservarse para las labores
bón, que dejaron toneladas de hollín agrícolas y ganaderas…Y qué decir
y desperdicios y contaminación am- de los grandes bosques de Esmeral-
biental. Su título lo dice todo: “Cuán das…
Verde era mi Valle”. ¿Acaso no estamos viviendo
En nuestro país, lamentable- ahora los terribles efectos de los
mente, también podemos escribir cambios climáticos producidos por
algo semejante sobre algunas zonas la eliminación de los bosques, por
que han sido utilizadas torpemen- la sobreexplotación de los campos?
te. En Quito, por ejemplo, se urba- . ¿Acaso muchas de esas colinas y
nizaron muchas haciendas ubicada valles del Asia Menor y el Orien-
al sur que tenían la capa de humus te Medio no fueron un día bosques
más profunda del país!; cuando la ubérrimos que civilizaciones guerre-
población bien podía desarrollarse ras, depredadoras, temibles, como
hacia otros sectores menos fértiles... los asirios, fueron aniquilando,
En Loja, en mi terruño, se sigue ter- tronchando, hasta que se hizo el de-
minando con el hermoso valle de sierto? E igual sucedió en las partes
Cuxibamba- verde paisaje salpica- altas del gran Valle del Indo . En la
do de sauces – para hacer horribles Biblia, em el libro del profeta Za-
urbanizaciones baratas, depósitos carias, hallamos el patético clamor
de maquinaria y botaderos de basu- cuando este hombre santo clama por
ra y para explotar la arena, cuando los bosques arrasados para hacer los
bien se podían urbanizar las colinas caprichos de los reyes impíos:” Aú-
próximas a la ciudad, reglamentar lla, oh ciprés, porque el cedro cayó,
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Eduardo Mora-Anda

porque los árboles magníficos son ese concepto de la sacralidad de la


derribados. Aullad encinas de Ba- Vida? Sin ese valor, sin ese concepto
sán, porque el bosque espeso es de- de respeto a la vida, al agua y al aire,
rribado...! ”( Zac. 11:2).Y fíjense, la como diría Zaratustra, la supervi-
misma crónica bíblica registra que , vencia de la vida humana se halla en
para construir el templo de Jerusa- grave peligro. A Julio César y otros
lén, – supongo que el cronista exa- romanos que escribieron sobre los
gera- Salomón designó a ochenta mil celtas les admiró que sus sacerdotes,
hombres para que cortasen cedros los druidas, no tuvieran templos sino
del Líbano destinados a edificarlo que consideraban a los bosques por
( 2 Crónicas 2:2-3). Y otro caso: el lugares sagrados y que allí ellos rea-
Nordeste brasileño, era un territorio lizaran sus ritos, en vez de derribar-
fértil y verde hasta que llegaron ho- los para hacer fortines...
landeses y portugueses a talar todo Y llegamos al blanco . La luz
el ¨palo del brasil¨ y sembrar un mo- blanca se descompone en el arco iris:
nocultivo – la caña de azúcar… exhibe todas sus bellas posibilidades,
Y, volviendo al templo de Jeru- la infinita gama de los vivos colores.
salén, situado ahora en un lugar tan Según la Cromática el blanco con-
disputado, yo me pregunto: ¿acaso tiene a todos los colores. Y por eso,
era necesario ese templo triunfalis- lo sabemos todos, el blanco ha sig-
ta?, ¿no era mejor rezar en los bos- nificado y significa la integridad, la
ques, ante el verde inmaculado de santidad, la pureza. El Ser completo.
los campos, en la alegre soledad del En el Apocalipsis veinticuatro ancia-
Valle único?...El místico cristiano no vestidos de blanco, que supongo
ortodoxo Juan de Juan de Petchen- son los profetas y apóstoles, adoran
ga decía: “ Bienaventurado aquel a al Mesías, al Cordero...Y blanca es
quien el Señor llama a vivir y a orar la hostia consagrada, que recuerda
en los bosques...”.Por algo Jesús y es presencia del Mesías muerto en
afirma que ya llegará la hora en que la cruz. Como decía el muy quijotes-
no se adorará a Dios en Jerusalén co Don Miguel de Unamuno en “El
o en el monte sacro de los samari- Cristo de Velásquez”:
tanos sino espíritu y verdad...Y me
acuerdo ahora que el gran místico Blanco tu cuerpo está como el
y poeta bengali Rabindranath Ta- espejo
gore decía: ¨Corazón mío calla, que Del padre de la luz, del sol vi-
estos grandes bosques solemnes son vífico;
oraciones...” Y nosotros aquí, en el Blanco tu cuerpo, al modo de
Ecuador, en la América Latina, ¿te- la luna
nemos esa conciencia, tiene el pue- Que, muerta, ronda en torno
blo, ese respeto hacia el bosque y de su madre,
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Los colores en la literatura, la poesía y la vida

nuestra cansada vagabunda caballo de la paz, en el Apocalipsis,


Tierra; es blanco. Porque la paz es esa ple-
Blanco tu cuerpo está como la nitud de las naciones y la felicidad
hostia de los hombres buenos y generosos...
del cielo de la noche soberana, En el blanco se reúne toda la
de ese cielo tan negro como el gama cromática, todo la variedad
velo de la vida. Y, decimos entonces, una
de tu abundosa cabellera negra vida sabia, una sociedad equilibra-
de nazareno... da, son una reunión y un equilibrio
(...) triunfador de la muerte, de todos los elementos – alma, espí-
que a la vida ritu, cuerpo y aura- y de todos los
Por Ti quedó encumbrada (...) bienes de la Vida y virtudes...Tal vez
Mientras la tierra sueña soli- por eso Gandhi se vestía de blanco e
taria, igual lo hacían los sacerdotes drui-
vela la luna; vela el Hombre, das y lo hacen muchos jainas...
vela el hombre sin sangre, el Y blanco es el color del papel,
Hombre blanco de este invento que sucedió al papi-
como la luna de la noche negra; ro para la confección del libro. Del
vela el hombre que dio toda libro, que siempre ha sido un ins-
su sangre trumento de la civilización y de la
porque las gentes sepan que libertad, un elemento esencial para
son hombres...” la libertad humana. En la China, el
emperador Chi Huan Ti dio orden
Qué notable contraste logra de quemar todos los libros, todo el
aquí el poeta, y agudo pensador, pasado, y, en su megalomanía, que-
entre la noche negra y el blanco de ría así empezar todo de nuevo en su
la luna y el Jesús desangrado...Es el enorme su imperio amurallado, y
contraste que nos ilumina y esplende tanto la Inquisición como los nazis
en esa inmortal obra de Velásquez... hicieron quemas de libros, hogueras
El blanco es la suma de todos de libros heréticos o judaicos. Pero
los colores, el blanco es la plenitud. el libro siempre salió triunfante, li-
Blanca era la túnica de Jesús, y di- bre, suelto, ajeno al sistema, liber-
cen que era de una sola pieza... Un tario, instrumento de libertad, de
hombre cabal, un hombre libre, es reflexión, de vida personal y medi-
en verdad un hombre entero, bien tación personalísima. El Tao Te King
integrado, pleno. De una sola pieza. y el I Ching y los textos Confucio,
No un robot, no un desequilibrado, entre otros, sobrevivieron a las fo-
no un servidor de ídolos y mitos. gatas del emperador de la China y
Es también el significado de toda la a la Revolución Cultural de Mao, y
plenitud de las criaturas. Por eso el el libro triunfó sobre las hogueras de
AFESE 56 167
Eduardo Mora-Anda

la Inquisición, y no solo dio lugar al “ Moby Dick” , nos quiere presentar


Renacimiento y las Reformas reli- otra blancura, otra simbología, de
giosas, sino también a la Ilustración algo abominable: esa enorme balle-
y la vida de la Europa moderna. En na que encarna el mal y el daño y
vano la Unión Soviética proscribió al la fuerza brutal y que es la obsesión
“Doctor Zhivago”. del capitán Acab, su víctima. Moby
Bueno es que sepamos que la Dick es una representación del mal
egolatría y el poder de los reyes y ti- que hay que matar y combatir sin
ranos de la tierra son como imperios tregua... Borges aquí apunta a un
de barro que pasan y no duran y el blanco sucio y sin encanto, a una
viento sopla sus restos, pero quedan blancura monstruosa...Se trata de
los libros y queda la escritura y la pa- una blanco que lleva a la destruc-
labra. El libro.. Por eso en la novela ción, de un blanco sin sentido, des-
Farenheit 471 Ray Bradbury propo- tructor, totalitario, que aniquila a
ne bien al libro como un instrumento los seres pequeños, que aniquila las
subversivo, límpido, verdaderamen- libertades, la vida en su variedad. Es
te revolucionario. Después nadie sa- el Leviatán que aplasta al individuo..
brá los nombres de los politiqueros En la historia el escritor, el pen-
de turno, salvo quizá el de algunos sador y el reformador tienen que ser
tiranos que llegaron a grados apoca- predicadores de la libertad y, como
lípticos, pero la gente todavía amará caballeros andantes, han de acabar
al libro, su libro, esa computadora con el error destructivo, con el error
que no se daña y que no sirve para demoníaco y masivo, con el poder
vigilarnos. Y la humanidad sabrá de total de la ambición y la avaricia,
Lope y Cervantes, de Shakespeare y desde un principio predestinado al
Neruda y de Rubén Darío y de Ama- fin apocalíptico, porque lo que tiene
do Nervo. No sabemos bajo qué Rey que triunfar es la libertad, el bien y
o tirano pensaron y escribieron Pitá- la verdad y la belleza.
goras y Epicuro, pero sabemos sobre Muchas gracias.
Epicuro y Pitágoras...
Y hablando de colores y de li-
bros, no hay que olvidar que el gran
novelista ruso Fedor Dostoyevski re-
cogió mucho de la ternura y la poe-
sía del amor límpido en sus célebres
“Noches Blancas”... Muchas cosas
buenas son blancas, como las nu-
bes, como las olas que bailan, como
las garzas. Y sin embargo Herman
Melville, en esa gran novela que es
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