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Revista Iberoamericana de Diagnóstico y

Evaluación - e Avaliação Psicológica


ISSN: 1135-3848
associacaoaidap@gmail.com
Associação Iberoamericana de
Diagnóstico e Avaliação Psicológica
Portugal

Cohen Imach, Silvina; Esterkind de Chein, Ana Elena; Betina Lacunza, Ana; Caballero,
Silvina Valeria; Martinenghi, Constanza
Habilidades sociales y contexto sociocultural. Un estudio con adolescentes a través del
BAS-3
Revista Iberoamericana de Diagnóstico y Evaluación - e Avaliação Psicológica, vol. 1,
núm. 29, -, 2010, pp. 167-185
Associação Iberoamericana de Diagnóstico e Avaliação Psicológica

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=459645441010

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Habilidades sociales y contexto sociocultural. Un


estudio con adolescentes a través del BAS-3

Social skills and sociocultural context. A study with


adolescents through the BAS-3.

Silvina Cohen Imach1, Ana Elena Esterkind de Chein2, Ana Betina Lacunza3,
Silvina Valeria Caballero4 y Constanza Martinenghi5.

RESUMEN

El estudio tiene como objetivos: 1) describir las habilidades sociales en adoles-


centes de 11 y 12 años que viven en contextos de pobreza de Tucumán, Argentina;
2) explorar diferencias en las habilidades sociales en función del género; y 3)
analizar la incidencia de variables vinculadas al grupo familiar en las habilidades
sociales de los adolescentes estudiados. La muestra está constituida por 194 ado-
lescentes de 11 y 12 años escolarizados de contextos de pobreza. Se trata de un
estudio descriptivo realizado a través de la Batería de Socialización BAS-3 (Silva
Moreno & Martorell Pallás, 2001) y una encuesta sociodemográfica elaborada por

1 Lic. en Psicología. Terminó de cursar la Maestría en Sociología Aplicada. Institución: Facultad de Psicología de
la Universidad Nacional de Tucumán. Dirección Postal: España 941. San Miguel de Tucumán. (4000). Tel: (0381)
4216526. Correo electrónico: parolocohen@arnet.com.ar
2 Mag. en Psicología Educacional. Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán. Dirección
Postal: Sargento Cabral 17. San Miguel de Tucumán. Tel: (0381)4231915. Correo electrónico: chein@arnet.com.ar
3 Dra. En Psicología. Institución: CONICET/Consejo de Investigaciones de la Universidad Nacional de Tucumán.
Dirección Postal: Av. Avellaneda 898. 6º D. San Miguel de Tucumán (4000). Tel: (0381) 4223998. Correo electró-
nico: betinalacu@hotmail.com
4 Psicóloga. Institución: Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Tucumán. Dirección Postal: Las Tipas
500. Villa Carmela. Tel: (0381) 4931589. Correo electrónico: caballero.silvinavaleria@gmail.com
5 Estudiante de Psicología. Institución: Universidad Nacional de Tucumán. Dirección Postal: Tel: (0381) Correo
electrónico: constanzamartinenghi2009@gmail.com

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el equipo de investigación. Se analizan las habilidades sociales de los participantes co, académico y socia
según género y las características del grupo familiar (tipo de familia, posición del rosas investigaciones
sujeto en la fratría, número de hermanos y cantidad de personas que viven en el existencia de fuertes r
hogar). En cuanto al género, los resultados señalan que difieren estadísticamente desarrollo de habilida
en la escala de Ansiedad social/Timidez, siendo más alta en mujeres que en varo- infancia y adolescenc
nes. Respecto de las características de la familia, sólo se encuentra una relación el ajuste social, psicol
negativa entre números de hermanos y la escala de Liderazgo. No se registran co en la vida adulta,
diferencias con respecto a las otras características del grupo familiar. Greenwood, 1988; Lad
Monjas Casares, 2000
Palabras clave: Habilidades sociales – adolescentes - Contexto de pobreza & González Moreno,
Las relaciones en
la infancia contribuy
ABSTRACT mente al desarrollo de
namiento interperson
The study aims to: 1) describe social skills in adolescents of 11 to 12 years oportunidades únicas
living in poverty contexts of Tucuman, Argentina, 2) analyze the social skills of zaje de las habilidade
participants by gender and 3) analyze the impact of variables related to the family no pueden lograrse d
in the social skills of adolescents studied. The sample consisted of 194 adolescents en otro momento, e i
aged 11 and 12 years from schools in contexts of poverty. This is a descriptive gro de una personali
study through Socialization Battery BAS-3 (Silva Moreno & Martorell Pallas, la adultez. Como con
2001) and a demographic survey developed by the research team. We analyze de competencia interp
the social skills of participants by gender and household characteristics (family con baja aceptación,
type, adolescent’s position in the sibling group, number of siblings and number of miento de los pares, c
people living at home). In gender terms, the results show that differ statistically at escolares y personale
the level of Social anxiety / shyness, being higher in females than in males. Regar- baja autoestima, la in
ding the characteristics of the family, is only a negative statistical relation between adaptación en la adole
numbers of siblings and the scale of Leadership. No significant differences with cuencia juvenil o las
respect to other characteristics of the household. respecto a las problem
la incompetencia soci
Key words: Social- skills - Adolescents - Context of Poverty bajo rendimiento, fra
y expulsión de la esc
sares, 2000). En el p
INTRODUCCIÓN timos años (Monjas Casares & Gonzá- los adolescentes de co
lez Moreno, 1998). Este incremento se za este déficit en hab
La temática de las habilidades so- debe a la relación constatada entre habi- va a acelerar su expu
ciales en la infancia y la adolescencia ha lidades sociales en el desarrollo infantil educativo, lugar privil
recibido una marcada atención en los úl- y el posterior funcionamiento psicológi- clusión social de esto

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es de los participantes co, académico y social. Existen nume- Las relaciones sociales satisfacto-
e familia, posición del rosas investigaciones que confirman la rias en la adolescencia son una de las
sonas que viven en el existencia de fuertes relaciones entre el mayores fuentes de bienestar personal.
eren estadísticamente desarrollo de habilidades sociales en la Tal como señalan Ballester & Gil Lla-
mujeres que en varo- infancia y adolescencia, por un lado, y rio (2002) la competencia social pro-
ncuentra una relación el ajuste social, psicológico y académi- porciona sentimientos de autoeficacia
azgo. No se registran co en la vida adulta, por otro (Hops & que constituye un ingrediente funda-
familiar. Greenwood, 1988; Ladd & Asher, 1985; mental de la autoestima. Ser recono-
Monjas Casares, 2000; Monjas Casares cido y aceptado por otros produce un
exto de pobreza & González Moreno, 1998). impacto favorable en la autoestima, y
Las relaciones entre los iguales en ello refuerza la satisfacción vital.
la infancia contribuyen significativa- De las investigaciones acerca de
mente al desarrollo del correcto funcio- cómo surgen las habilidades sociales,
namiento interpersonal, proporcionan se ha concluido que la temprana rela-
nts of 11 to 12 years oportunidades únicas para el aprendi- ción madre-hijo cuenta como esencial
ze the social skills of zaje de las habilidades específicas que en la organización psíquica del niño y,
s related to the family no pueden lograrse de otra manera ni por ende, en el desarrollo de habilida-
ed of 194 adolescents en otro momento, e influyen en el lo- des de interacción social (Monjas Ca-
This is a descriptive gro de una personalidad saludable en sares, 2000). Sin embargo, no resulta
o & Martorell Pallas, la adultez. Como contrapartida, la falta de menor importancia en la adquisi-
ch team. We analyze de competencia interpersonal se asocia ción de estas habilidades, las relacio-
haracteristics (family con baja aceptación, rechazo o aisla- nes con los pares, siendo el período
iblings and number of miento de los pares, con problemáticas entre los 6 y los 12 años cuando se da
at differ statistically at escolares y personales, tales como la un mayor crecimiento emocional. Los
than in males. Regar- baja autoestima, la indefensión, la in- niños interiorizan ya plenamente los
tical relation between adaptación en la adolescencia, la delin- sentimientos de orgullo y vergüenza,
ficant differences with cuencia juvenil o las adicciones. Con emociones éstas que dependen de la
respecto a las problemáticas escolares, conciencia de sus acciones y del tipo
la incompetencia social se vincula con de socialización que hayan recibido.
y bajo rendimiento, fracaso, ausentismo También se consolida la opinión que
y expulsión de la escuela (Monjas Ca- el niño tiene de sí mismo, es decir, su
sares, 2000). En el particular caso de autoconcepto. Conforme va crecien-
jas Casares & Gonzá- los adolescentes de contextos de pobre- do el niño, llega a entender y contro-
8). Este incremento se za este déficit en habilidades sociales lar mejor las emociones negativas y
constatada entre habi- va a acelerar su expulsión del sistema expresarlas correctamente, como así
n el desarrollo infantil educativo, lugar privilegiado para la in- también logra entender las emociones
ionamiento psicológi- clusión social de estos jóvenes. de los otros (Shaffer, 2002).

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Monjas Casares (2000) señala que como un factor protector para el logro ciales son las conduct
las relaciones con los pares inciden no- de la salud en la adultez. Es por ello cesarias para ejecutar
tablemente en el logro de habilidades que se piensa que las habilidades so- una tarea interperson
sociales satisfactorias, ya que permi- ciales se inscriben en el paradigma de res, 2000). Esta autor
ten el conocimiento de sí mismo y de la Psicología Positiva (Contini, Cohen habilidades en la inf
los demás; el desarrollo de conductas Imach & Coronel, 2009). conductas necesarias
de reciprocidad; el intercambio en el Aproximación a una definición de relacionarse con los
control de la relación; la función de las habilidades sociales adultos de forma efect
colaboración, facilitando la tarea en Con respecto a la conceptualiza- satisfactoria” (p. 29). A
común; las estrategias sociales de ne- ción de las habilidades sociales, nu- que se hace referencia
gociación y de acuerdos; y el autocon- merosos autores plantean la dificultad tos adquiridos, o sea,
trol de la propia conducta en función para acordar una definición (Caballo, rasgos de personalidad
del feed-back que recibe de los otros. 1993a; Fernández Ballesteros, 1994) Según Caballo (19
Agrega que la relación con los iguales y que tal dificultad se vincula, entre 1993b) las habilidade
opera como apoyo emocional y como otras cuestiones, a que están referidas conjunto de conducta
fuente de disfrute, y por último, destaca siempre a un contexto específico. Las individuo desarrollars
que hace posible el aprendizaje del rol habilidades sociales se deben entender individual o interper
sexual y el aprendizaje de valores. siempre en relación a un marco social sentimientos, actitude
Guaita (2007) advierte que las re- y cultural determinado. En tal senti- nes o derechos de un
laciones interpersonales son cruciales do, para algunos autores, la conducta la situación. Generalm
para la socialización de las emociones, socialmente habilidosa debería ser de- la resolución de los
ya que estas ayudan al sujeto a definirse finida en términos de la eficacia de su vida cotidiana. Las ha
como emocionalmente competente, es función en una situación dada (Argyle, permiten así afrontar
decir, poder responder empáticamente, 1981; Kelly, 1982). Otro obstáculo personales, lo que las
tener facilidad para expresarse emocio- para hallar una única definición es que para la adaptación d
nalmente, tener la capacidad para co- un grupo de investigadores priorizan el biente más próximo.
municar la emoción o para responder a contenido de las habilidades (actitudes, supone poder trabajar
ella en forma saludable; a través de las conductas, emociones), mientras que estrategias de negocia
emociones los niños comienzan a apre- otros señalan solo los resultados. Ade- el autocontrol de la pr
ciar su importancia para sí mismos, más, existe una marcada controversia función del feedback
los demás y la cultura, y aprenden las en torno a la superposición de con- otros (Contini, 2008).
conductas que son apropiadas para la ceptos tales como competencia social, De lo desarrollado
expresión emocional. habilidades de interacción social, aser- te se desprende que
Se puede concluir, entonces, que la tividad o comportamiento adaptativo. sociales tienen un fu
relación con los pares es decididamen- Una de las definiciones más acepta- la organización psic
te importante en el proceso de desarro- das, es la brindada por Monjas Casares, lescente, en la calida
llo del niño y el adolescente y actuaría quien entiende que las habilidades so- inclusión escolar y so

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rotector para el logro ciales son las conductas específicas ne- Por su parte, a partir de la biblio-
adultez. Es por ello cesarias para ejecutar competentemente grafía existente entre los años 1920 y
e las habilidades so- una tarea interpersonal (Monjas Casa- 1960 sobre el concepto de socializa-
n en el paradigma de res, 2000). Esta autora define a dichas ción, del cual deriva el de habilidades
itiva (Contini, Cohen habilidades en la infancia como “las sociales, Kohn (1977) elaboró la Teoría
, 2009). conductas necesarias para interactuar y Bifactorial. Este autor afirmó que en la
n a una definición de relacionarse con los iguales y con los mayoría de los trabajos aparecían dos
ciales adultos de forma efectiva y mutuamente factores bien diferenciados. Los fac-
a la conceptualiza- satisfactoria” (p. 29). Advierte, además, tores encontrados fueron: retraimiento
lidades sociales, nu- que se hace referencia a comportamien- versus participación y agresividad y
plantean la dificultad tos adquiridos, o sea, aprendidos y no a conducta antisocial versus coopera-
definición (Caballo, rasgos de personalidad. ción (Martorell, González, Aloy & Fe-
z Ballesteros, 1994) Según Caballo (1987, 1991, 1993a, rris, 1995). Entre los instrumentos que
tad se vincula, entre 1993b) las habilidades sociales son un evalúan la conducta social, la Batería
a que están referidas conjunto de conductas que permiten al de Socialización BAS-3, de Silva &
ntexto específico. Las individuo desarrollarse en un contexto Martorell (1987) diferencia dos gran-
les se deben entender individual o interpersonal expresando des dimensiones, cada una de ellas
ón a un marco social sentimientos, actitudes, deseos, opinio- con tres niveles: Conducta prosocial
minado. En tal senti- nes o derechos de un modo adecuado a versus antisocial y Sociabilidad versus
autores, la conducta la situación. Generalmente, posibilitan baja sociabilidad. Desde esta teoría, las
lidosa debería ser de- la resolución de los problemas de la variables consideración por los demás
s de la eficacia de su vida cotidiana. Las habilidades sociales y autocontrol en las relaciones socia-
tuación dada (Argyle, permiten así afrontar situaciones inter- les aportan a la conducta prosocial,
82). Otro obstáculo personales, lo que las torna necesarias mientras que agresividad a la conducta
nica definición es que para la adaptación del sujeto al am- antisocial; del mismo modo, lideraz-
stigadores priorizan el biente más próximo. Esta adaptación go corresponde al factor sociabilidad,
habilidades (actitudes, supone poder trabajar con otros, poseer mientras que ansiedad/timidez y re-
iones), mientras que estrategias de negociación y acuerdos y traimiento señalan baja sociabilidad
o los resultados. Ade- el autocontrol de la propia conducta en ((Martorell, González, Aloy & Ferris,
marcada controversia función del feedback que se recibe de 1995). Así, los comportamientos co-
uperposición de con- otros (Contini, 2008). rrespondientes a las escalas de Consi-
o competencia social, De lo desarrollado precedentemen- deración por los demás, Autocontrol
teracción social, aser- te se desprende que las habilidades y Liderazgo son facilitadores de la so-
tamiento adaptativo. sociales tienen un fuerte impacto en cialización, mientras que los compor-
finiciones más acepta- la organización psicológica del ado- tamientos supuestos en las escalas de
a por Monjas Casares, lescente, en la calidad de vida y en la Retraimiento (pasividad) y Ansiedad/
ue las habilidades so- inclusión escolar y social de aquellos. timidez son perturbadores o inhibido-

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res de la socialización (Garaigordobil te. El país cuenta con alrededor de 12 mostrado en un estu
& García de Galdeano, 2006). millones de menores de 18 años, de los realizado con adolesc
Habilidades sociales y contexto cuales se estima que al menos 5 millo- to con la ley, que en
El contexto social y cultural en el nes residen en condiciones de pobreza lescentes del grupo
que se desenvuelve un niño ejerce un económica (Nacen más de 600 bebés ron mayores niveles
impacto decisivo en el desarrollo in- pobres por día, 2009, septiembre 11). que aquellos. Al mis
fantil y adolescente, influyendo sobre En Tucumán alrededor de 63.000 hoga- nes Torres, Cardelle
todo en sus estilos de socialización, res viven con NBI; es decir, que existe Mena & Muñoz Sán
por lo que resulta de gran importancia un gran número de personas que viven encontrado que adol
analizar cómo se desarrollan las habili- en condiciones de pobreza estructural 12 años residentes en
dades sociales en adolescentes de con- (Gutiérrez, 2005). midos de Andalucía
textos de pobreza. En la perspectiva de los efectos de tuaciones superiores
En la actualidad la pobreza cons- la pobreza sobre el desarrollo psicoló- sociales autoinforma
tituye un flagelo que atraviesa a todas gico, la literatura científica ha llamado que vivían en zonas r
las instituciones formadores de sujetos, la atención sobre el impacto que tie- tos resultados son c
debido a su incremento en los últimos nen las condiciones de vulnerabilidad hallazgos locales (
años. Este aumento de la brecha que se- social en la adquisición de habilidades Lacunza & Contini,
para a pobres de ricos en los países de sociales en adolescentes que viven en de manifiesto que niñ
América Latina supone una situación sectores desfavorecidos. ciales más desfavore
crítica, de la que Argentina no es ajena y Al respecto existe bibliografía que habilidades sociales q
que impacta negativamente en la reali- pone de manifiesto la relación entre la funcionar adecuadam
dad cotidiana de un importante porcen- pertenencia a contextos de pobreza y texto escolar. A pesar
taje de la población, siendo además la comportamientos agresivos y violen- asociada a la pobreza
infancia y la adolescencia el sector más tos (Farrington, 1991; Guerra, Hues- desarrollado habilida
castigado, ya que la mitad de los pobres man, Tolen, Acker & Eron, 1995; Hei- dan cuenta del aprend
son niños y adolescentes (Desprotegi- mer, 1997). Siguiendo esta línea, se ha modelos que favorec
dos por Cristina, 2009, junio 14). demostrado que menores delincuentes otros (pares y adulto
Distintos estudios muestran que du- evaluados con la Batería de Socializa- efectiva y satisfactor
rante el primer semestre de 2009, la po- ción BAS-3, han obtenido puntuacio- adquisición, aprendi
breza trepó al 31,8 por ciento y la indi- nes bajas en escalas facilitadoras de miento de habilidade
gencia al 11,7, quedando en evidencia la socialización como Consideración ser también un facto
que más de 17 millones de argentinos por los demás y Autocontrol (Silva adolescentes que viv
tienen sus necesidades básicas insatis- Moreno & Martorell Pallás, 2001). nes de pobreza.
fechas (NBI). Más impactante aún es Otros estudios, por el contrario, arro- Por su parte, en nu
saber que de los 10 millones de niños jaron resultados que relativizaron los se han analizado las
argentinos de 0 a 14 años, el 57 % es factores socioeconómicos. Herrero, habilidades sociales y
pobre, mientras que el 25 % es indigen- Ordoñez, Salas & Colom (2002) han (1997) encontró que

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a con alrededor de 12 mostrado en un estudio comparativo bajo estatus socioeconómico, los va-
ores de 18 años, de los realizado con adolescentes en conflic- rones parecen mostrar más problemas
que al menos 5 millo- to con la ley, que en general, los ado- de interacción social que las mujeres.
ndiciones de pobreza lescentes del grupo control presenta- Garaigordobil & García de Galdeano
en más de 600 bebés ron mayores niveles de impulsividad (2006) también hallaron diferencias
2009, septiembre 11). que aquellos. Al mismo tiempo, Tria- significativas entre varones y mujeres
dedor de 63.000 hoga- nes Torres, Cardelle-Elawar, Blanca respecto de la conducta empática. En
I; es decir, que existe Mena & Muñoz Sánchez (2003) han un estudio realizado con adolescentes
de personas que viven encontrado que adolescentes de 11 y de 10 a 12 años concluyeron que las
e pobreza estructural 12 años residentes en contextos depri- mujeres eran más empáticas que los
. midos de Andalucía obtuvieron pun- varones y que manifestaron significa-
tiva de los efectos de tuaciones superiores en habilidades tivamente más conductas de conside-
el desarrollo psicoló- sociales autoinformadas que aquellos ración, autocontrol, liderazgo y pocas
científica ha llamado que vivían en zonas residenciales. Es- de retraimiento-aislamiento. Por su
e el impacto que tie- tos resultados son coincidentes con parte, investigaciones realizadas sobre
nes de vulnerabilidad hallazgos locales (Lacunza, 2007; ansiedad en población adolescente,
isición de habilidades Lacunza & Contini, 2009) que ponen han demostrado que las mujeres pre-
scentes que viven en de manifiesto que niños de niveles so- sentan mayores índices de ansiedad
ecidos. ciales más desfavorecidos mostraron que los hombres (Briscoe, Vázquez-
xiste bibliografía que habilidades sociales que les permitían Barquero, Williams, Díez-Manrique
to la relación entre la funcionar adecuadamente en el con- & Pena, 1989).
ntextos de pobreza y texto escolar. A pesar de la adversidad Las relaciones existentes entre las
agresivos y violen- asociada a la pobreza, estos niños han características del grupo familiar y el
1991; Guerra, Hues- desarrollado habilidades sociales que desarrollo de las habilidades sociales
er & Eron, 1995; Hei- dan cuenta del aprendizaje de pautas y en adolescentes también han sido abor-
endo esta línea, se ha modelos que favorecía la relación con dadas en numerosas investigaciones.
menores delincuentes otros (pares y adultos) de una forma McLanahan & Sandefur (1994) han en-
Batería de Socializa- efectiva y satisfactoria. Al parecer la contrado que los adolescentes que cre-
obtenido puntuacio- adquisición, aprendizaje y entrena- cen en familias de un solo progenitor
alas facilitadoras de miento de habilidades sociales puede -familias monoparentales- tienen lazos
como Consideración ser también un factor protector para sociales más pobres con sus padres
y Autocontrol (Silva adolescentes que viven en condicio- que los adolescentes provenientes de
torell Pallás, 2001). nes de pobreza. hogares con los dos padres biológicos
or el contrario, arro- Por su parte, en numerosos estudios -familias biparentales-. Por su parte,
que relativizaron los se han analizado las relaciones entre la conexión entre ausencia del padre y
conómicos. Herrero, habilidades sociales y género. Heimer delincuencia surge de numerosos tra-
& Colom (2002) han (1997) encontró que en familias de bajos de investigación (Adams, Milner

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& Schrepf, 1984; Kellam, Ensminger formas de orientación interpersonal ni Instrumentos


& Turner, 1977; Stevenson & Black, sobre los tipos de afectividad que ex-
1988; Wilson & Herrnstein, 1985). perimentaban los adolescentes. a- Batería de So
Adams et al. (1984) encuentran una Los objetivos de este trabajo son: 3) de Silva Moreno &
fuerte asociación estadística entre au- 1) describir las habilidades sociales (2001): La BAS-3 es
sencia de padre y delincuencia juvenil/ en adolescentes de 11 y 12 años que pruebas de autoadmi
violencia, mientras que West & Kon- viven en contextos de pobreza 2) ana- dual que ha sido pub
ner (1976) advierten que las culturas lizar las diferencias en las habilida- cera edición en 2001
con mayor participación del padre en des sociales en función del género; y integrada por 75 ítem
la crianza de los hijos son las menos 3) explorar la incidencia de variables debe contestar eligien
violentas. vinculadas al grupo familiar (tipo de distintas situaciones d
Con respecto a la posición del su- familia, posición del sujeto en la fra- na, entre dos opcione
jeto dentro de la fratría, desde Galton tría, número de hermanos y cantidad diseñada para adolesc
(1874) se han hecho numerosas inves- de personas que viven en el hogar) en años de edad. Permit
tigaciones para estudiar su incidencia las habilidades sociales de los adoles- fil del comportamien
sobre inteligencia, logros educativos, centes estudiados. de sus cinco escalas
motivaciones, expectativas y rasgos Consideración con l
de personalidad (Elices, González, Ri- MÉTODO Autocontrol en las Re
vera & Crespo, 1989), ya que la posi- (Ac), Retraimiento So
ción ordinal entre los hermanos ha sido Participantes dad Social/Timidez
considerada como una variable media- (Li). A éstas se le su
tizadora importante para el desarrollo El estudio se realizó con 194 adoles- Sinceridad (S), que p
intelectual, emocional y social del niño centes (100 varones y 94 mujeres) de 11 consistencia interna d
(Baskett, 1984; Koch, 1956). Estos es- y 12 años, que viven bajo condiciones las escalas. Por cada
tudios están compendiados en Adams de pobreza; asistían a 6º y 7º curso de una puntuación bruta
(1972), Arranz (1989), Bradley (1968), EGB (turno mañana) de dos escuelas en percentiles, según
Cicirelli (1978), entre otros. Estudios públicas de la ciudad de S. M. de Tucu- puesto por los autores
realizados por Livianos Aldana, Sie- mán (Argentina). Este grupo constituye instrumento fue estan
rra San Miguel & Rojo Moreno (2010) una muestra intencional de una investi- muestra de 1770 ado
confirman que existe un estilo de crian- gación más amplia dirigida a estudiar las les cuyas edades osc
za singular, y por ende un estilo de so- habilidades sociales en adolescentes de 19 años y desde 6º cu
cialización, en función de la posición diferente nivel económico social (NSE General Básica (EGB
en la fratría. Por su parte, Sánchez-Ber- Bajo y Alto) . El criterio de exclusión de Bachillerato Unifi
nardos, Alonso Rodríguez, Hernández- utilizado fue el de protocolos incomple- (BUP) o Formación
Lloreda & Bragado (2007), observaron tos o dudosos y aquellos pertenecientes Los participantes per
que el orden de nacimiento en sí mis- a niños mayores a la edad señalada pre- ritariamente a niveles
mo no tenía efectos sobre las distintas cedentemente. ciales medio y medio

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ación interpersonal ni Instrumentos sus estudios en centros públicos. En


e afectividad que ex- relación con la fiabilidad, la BAS-3 se
adolescentes. a- Batería de Socialización (BAS- sometió a dos estudios: consistencia
de este trabajo son: 3) de Silva Moreno & Martorell Pallás interna (coeficiente alfa) y test-retest
habilidades sociales (2001): La BAS-3 es un conjunto de (intervalo próximo a los cuatro me-
de 11 y 12 años que pruebas de autoadministración indivi- ses). Se encontró que la consistencia
os de pobreza 2) ana- dual que ha sido publicado, en su ter- interna estuvo en límites muy satisfac-
cias en las habilida- cera edición en 2001; esta batería está torios (Co = .82; Ac = .78, Re = .81,
unción del género; y integrada por 75 ítems que el sujeto At= .78, Li= .73, S = .60) mientras que
cidencia de variables debe contestar eligiendo su respuesta, a la estabilidad temporal estuvo en lími-
upo familiar (tipo de distintas situaciones de la vida cotidia- tes satisfactorios para las escalas Ac,
del sujeto en la fra- na, entre dos opciones (SI - NO). Está At, Li y S pero fue baja en las escalas
hermanos y cantidad diseñada para adolescentes de 11 a 19 Co y Re. El estudio test-retest apor-
viven en el hogar) en años de edad. Permite obtener un per- tó datos sobre la validez concurrente
ociales de los adoles- fil del comportamiento social a partir del instrumento demostrando que para
s. de sus cinco escalas de socialización: las escalas Co y Re son necesarios
Consideración con los demás (Co), estudios más profundos para realizar
Autocontrol en las Relaciones Sociales estudios longitudinales (Silva Moreno
(Ac), Retraimiento Social (Re), Ansie- & Martorell Pallás, 2001). Para esta-
dad Social/Timidez (At) y liderazgo blecer las adaptaciones de la prueba en
(Li). A éstas se le suma una escala de la población local se realizó una adap-
ealizó con 194 adoles- Sinceridad (S), que permite analizar la tación lingüística de 9 ítems (1, 13, 26,
es y 94 mujeres) de 11 consistencia interna de las respuestas a 28, 40, 51, 53, 67, 75) de la versión
iven bajo condiciones las escalas. Por cada escala de obtiene original. Esta adaptación fue sometida
an a 6º y 7º curso de una puntuación bruta la que transforma a juicio de expertos. Posteriormente se
ana) de dos escuelas en percentiles, según un baremo pro- efectuó un estudio piloto con población
dad de S. M. de Tucu- puesto por los autores de la prueba. El adolescente escolarizada de Tucumán
Este grupo constituye instrumento fue estandarizado en una (Lacunza, Mejail, Caballero & Conti-
cional de una investi- muestra de 1770 adolescentes españo- ni, 2010). El análisis de las propieda-
a dirigida a estudiar las les cuyas edades oscilaron entre 11 y des psicométricas de la batería con la
es en adolescentes de 19 años y desde 6º curso de Educación población del presente estudio mostra-
onómico social (NSE General Básica (EGB) hasta 3º curso ron una fiabilidad adecuada (Alpha de
criterio de exclusión de Bachillerato Unificado Polivalente Cronbach = .736), lo que indicó una
protocolos incomple- (BUP) o Formación Profesional (FP). consistencia interna satisfactoria. Res-
quellos pertenecientes Los participantes pertenecieron mayo- pecto a la validez, se realizó un análisis
la edad señalada pre- ritariamente a niveles económicos so- factorial exploratorio de primer grado
ciales medio y medio-bajo y cursaban utilizando el método de análisis de

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176

Tabla 1: Puntuacion
componentes principales con rotación indicadores: tipo de grupo familiar (bi- BAS- 3. A
Varimax. Se encontró una estructura de parental - monoparental); posición del
6 factores, congruente con lo planteado adolescente en la fratría (hijo mayor -
por los autores. hijo del medio - hijo menor - hijo úni-
b- Encuesta sociodemográfi- co); número de personas incluidas en el
ca: fue elaborada por el equipo de grupo familiar; y número de hermanos.
investigación con objeto de obtener Se realizó un análisis descriptivo
información respecto de variables de las escalas del BAS-3. Se efectuó
económicas, sociales y culturales de un análisis de varianza (ANOVA) a fin
las familias de los adolescentes de de discriminar la existencia de diferen-
la muestra. Se trató de una encuesta cias estadísticas significativas según
administrada en forma colectiva. El las variables género, tipo de familia,
NSE fue estimado en base a lo pro- posición del adolescente respecto a la
puesto por la Asociación Argentina fratría. Se establecieron asociaciones
de Marketing (2006). Se indagó so- estadísticas entre el desempeño en la
bre distintas características del grupo BAS-3 y el número de hermanos, como
familiar, tales como tipo de grupo fa- así también puntuaciones en el BAS-3 Teniendo en cuen
miliar en el que vive el adolescente y número de personas que viven con nero, se realizó una
(biparental - monoparental); posición el adolescente. Los resultados fueron de un factor. Se obse
del adolescente en la fratría (hijo analizados con el programa estadístico Ansiedad/timidez pre
mayor - hijo del medio - hijo menor SPSS .17.
- hijo único); número de personas in- Tabla 2: Escalas
cluidas en el grupo familiar; y núme- RESULTADOS
ro de hermanos.
El primer objetivo del trabajo fue
Procedimiento describir el tipo de habilidades socia-
les de los adolescentes de NSE bajo
La administración de la prueba a partir de los puntajes obtenidos en
de habilidades sociales se realizó de la BAS-3. Se observó que los adoles-
forma grupal en el ámbito escolar. centes autoinformaban más comporta-
En esa oportunidad los adolescentes mientos vinculados con Consideración
respondieron también a una encuesta por los demás (X = 11,42, DE = 2,29),
sociodemográfica. En el presente tra- Autocontrol (X = 9,22, DE =2,59) y Li-
bajo se consideraron de la encuesta derazgo (X = 8, 04, DE = 2,07). Al con-
sociodemográfica aquellas variables siderar los puntajes máximos, se halló
vinculadas al grupo familiar. Para este que el valor promedio en Autocontrol
trabajo se consideraron los siguientes fue relativamente bajo (véase Tabla 1).

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Tabla 1: Puntuaciones Directas obtenidas en las Escalas de Socialización del


de grupo familiar (bi- BAS- 3. Adolescentes NSE bajo. Tucumán, Argentina
arental); posición del
fratría (hijo mayor -
hijo menor - hijo úni-
ersonas incluidas en el
número de hermanos.
n análisis descriptivo
l BAS-3. Se efectuó
ianza (ANOVA) a fin
existencia de diferen-
significativas según
nero, tipo de familia,
escente respecto a la
ecieron asociaciones
el desempeño en la
ro de hermanos, como
uaciones en el BAS-3 Teniendo en cuenta la variable gé- estadísticamente significativas (F =
sonas que viven con nero, se realizó una prueba ANOVA 15.586, p = .000) a favor del grupo de
Los resultados fueron de un factor. Se observó que la escala mujeres (véase Tabla 2).
programa estadístico Ansiedad/timidez presentó diferencias

Tabla 2: Escalas de Socialización según sexo. Adolescentes NSE bajo.


Tucumán, Argentina

etivo del trabajo fue


de habilidades socia-
scentes de NSE bajo
untajes obtenidos en
servó que los adoles-
maban más comporta-
os con Consideración
= 11,42, DE = 2,29),
9,22, DE =2,59) y Li-
4, DE = 2,07). Al con-
es máximos, se halló
medio en Autocontrol
bajo (véase Tabla 1).

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Con el objetivo de analizar la inci- personas incluidas en el grupo familiar Tabla 4: Escalas d
dencia de variables vinculadas al grupo y la cantidad de hermanos. familiar.
familiar en las habilidades sociales de Respecto al tipo de grupo familiar, no
los adolescentes, se analizaron los in- se hallaron diferencias estadísticas signi-
dicadores: tipo de grupo familiar (bi- ficativas en las escalas del BAS-3 entre
parental-monoparental), posición del los adolescentes provenientes de hogares
adolescente en la fratría, el número de biparentales y aquellos que viven en fa-
milias monoparentales (véase Tabla 3).

Tabla 3: Escalas de Socialización según tipo de grupo familiar. Adolescentes


NSE bajo. Tucumán, Argentina

Tabla 5: Correlaci
de hermanos y com

En relación a la posición del ado- Posteriormente se establecieron aso-


lescente en la fratría se observó que ciaciones estadísticamente significativas
el 50% de los adolescentes se ubicaba entre las distintas escalas de BAS-3 y el
como hijo del medio, y presentaban un número de hermanos y composición del
promedio de 5 hermanos (X = 4.52, DE grupo familiar de los adolescentes partici-
= 2.39). No se encontraron diferencias pantes. Se encontró una relación negativa
estadísticas en el desempeño de las es- entre la escala de Liderazgo y la cantidad
calas de BAS-3 respecto a la posición de hermanos del adolescente (r = -.172, p
del adolescente entre sus hermanos = 0.05) (ver Tabla 5). Es decir, que a ma-
(véase Tabla 4) en ninguna de las esca- yor puntuación en la escala de Liderazgo,
las de socialización del BAS-3. decrecía el número de hermanos.

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s en el grupo familiar Tabla 4: Escalas del BAS-3 según la posición del adolescente en el grupo
ermanos. familiar. Adolescentes NSE bajo. Tucumán, Argentina
o de grupo familiar, no
ncias estadísticas signi-
calas del BAS-3 entre
rovenientes de hogares
uellos que viven en fa-
tales (véase Tabla 3).

miliar. Adolescentes

Tabla 5: Correlaciones entre Escalas de socialización del BAS-3, número


de hermanos y composición del grupo familiar. Adolescentes de NSE bajo.
Tucumán, Argentina

se establecieron aso-
camente significativas
escalas de BAS-3 y el
nos y composición del
os adolescentes partici-
ó una relación negativa
Liderazgo y la cantidad
dolescente (r = -.172, p
5). Es decir, que a ma-
la escala de Liderazgo,
o de hermanos.

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DISCUSIÓN niveles de ansiedad ante situaciones en el espíritu de servicio


que se desea dar una buena impresión podrían indicar que es
Los resultados obtenidos en el estu- y que se duda acerca cómo los demás al tener un afecto exc
dio mostraron en primer lugar que los los consideran. Estos datos concuerdan atención por parte de
adolescentes escolarizados de 11 y 12 con lo ya señalado por Briscoe y otros cibirían un mayor ap
años provenientes de contextos de po- (1992), quienes a partir de un estudio estudio de Sánchez-
breza de San Miguel de Tucumán, Ar- realizado con españoles, encontraron (2007) encontró que
gentina, puntuaciones promedios más un mayor índice de ansiedad en las centes que percibían
altos en las escalas facilitadoras de la mujeres. y atención de sus pa
socialización respecto a las escalas in- Con respecto a la incidencia del de actividad y calida
hibidoras. Desde la propia percepción, grupo familiar en los comportamien- significativamente m
los adolescentes informaron más com- tos sociales de los adolescentes de la con los demás, más re
portamientos de sensibilidad social, muestra, no se hallaron diferencias es- controlados en las re
preocupación por los demás, populari- tadísticas significativas en las puntua- Sin embargo, estos re
dad, iniciativa, confianza en sí mismo ciones de las escalas del BAS-3 respec- considerarlos bajo la l
y espíritu de servicio. Estos datos con- to a la posición del adolescente en la familiar, ya que para
cuerdan con estudios realizados tanto fratría. Estas ausencias estadísticas sig- fluencia social respec
con población local (Lacunza, 2007) nificativas coinciden con los resultados ordinal e interacción
como extranjera (Trianes Torres, Car- preliminares de Sánchez-Bernardos, debe tenerse en cuent
delle-Elawar, Blanca Mena & Muñoz Alonso Rodríguez, Hernández-Lloreda dad de hermanos sino
Sánchez, 2003). Sin embargo en cuanto & Bragado (2007), quienes observaron bios en la interacción
a las puntuaciones en la dimensión de que el orden de nacimiento en sí mis- medida que la familia
Autocontrol, referidas al acatamiento mo no tenía efectos sobre las distintas (Díaz Aguado, 1986).
de reglas y normas sociales, las pun- formas de orientación interpersonal ni A modo de conclu
tuaciones fueron relativamente bajas. sobre los tipos de afectividad que ex- este estudio, cabe des
Con respecto al segundo objetivo, perimentaban los adolescentes. 1- Que los adoles
que apuntaba a estudiar la influencia Sin embargo, un análisis de co- tos de pobreza expre
de la variable género en las habilida- rrelación mostró que los adolescentes portamientos sociales
des sociales en los adolescentes de la con menor número de hermano o hijo interactuar con los o
muestra, los resultados obtenidos en la único puntuaron más alto que sus pares saludable, ya que m
Escala de Socialización BAS-3, confir- en la dimensión Liderazgo. Esto reveló ciones más altas en la
man que las mujeres registraban mayor que los adolescentes hijos único o con doras de la socializaci
índice de ansiedad frente a situaciones pocos hermanos presentaron mayores turbadoras. Presenta
sociales, unidas a reacciones de timi- comportamientos de liderazgo, en tan- social, preocupación
dez (escala Ansiedad social/timidez) to se percibían con características tales popularidad, iniciativ
respecto al grupo de los varones, es como la ascendencia, la popularidad, la mismo y espíritu de s
decir, que las mujeres informaron más iniciativa, la confianza en sí mismo y 2- Las mujeres pr

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ad ante situaciones en el espíritu de servicio. Estos resultados res comportamientos de ansiedad fren-
una buena impresión podrían indicar que estos adolescentes, te a las situaciones sociales y timidez
erca cómo los demás al tener un afecto exclusivo y una alta que sus compañeros varones.
stos datos concuerdan atención por parte de sus padres, per- 3- En relación a la posición del
o por Briscoe y otros cibirían un mayor apoyo parental. El adolescente en la fratría, no se hallaron
a partir de un estudio estudio de Sánchez-Bernardos et al. diferencias estadísticas significativas
pañoles, encontraron (2007) encontró que aquellos adoles- en su conducta social, en base a las
de ansiedad en las centes que percibían un mayor apoyo puntuaciones obtenidas en la BAS-3.
y atención de sus padres, en términos Sin embargo, un análisis de correlación
a la incidencia del de actividad y calidad, tendían a ser mostró que la dimensión Liderazgo
n los comportamien- significativamente más considerados crecía a medida que el número de her-
os adolescentes de la con los demás, más respetuosos y auto- manos descendía. Los adolescentes sin
allaron diferencias es- controlados en las relaciones sociales. hermanos o con un número reducido de
ativas en las puntua- Sin embargo, estos resultados hay que hermanos se percibían a si mismos con
las del BAS-3 respec- considerarlos bajo la luz de la dinámica mayor índice de liderazgo.
del adolescente en la familiar, ya que para este análisis (in- Los adolescentes de contextos so-
ncias estadísticas sig- fluencia social respecto a la posición ciales desfavorecidos presentan con-
den con los resultados ordinal e interacción con hermanos) ductas sociales que les permiten fun-
Sánchez-Bernardos, debe tenerse en cuenta no sólo la canti- cionar adecuadamente en su contexto.
z, Hernández-Lloreda dad de hermanos sino también los cam- A pesar de la adversidad asociada a la
), quienes observaron bios en la interacción con los padres a pobreza, estos adolescentes han logra-
nacimiento en sí mis- medida que la familia nuclear aumenta do adquirir habilidades sociales que
tos sobre las distintas (Díaz Aguado, 1986). dan cuenta del aprendizaje de pautas y
ación interpersonal ni A modo de conclusión, y a partir de modelos sociales que les permiten rela-
e afectividad que ex- este estudio, cabe destacar: cionarse con los otros efectiva y satis-
adolescentes. 1- Que los adolescentes de contex- factoriamente.
un análisis de co- tos de pobreza expresaron tener com- Si bien estos hallazgos son de re-
que los adolescentes portamientos sociales que le permiten levancia científica y social, es impor-
ro de hermano o hijo interactuar con los otros de un modo tante tener en cuenta que se trata de
más alto que sus pares saludable, ya que mostraron puntua- resultados parciales, y en tanto tal es
Liderazgo. Esto reveló ciones más altas en las escalas facilita- necesario relativizarlos. Señalan lo que
ntes hijos único o con doras de la socialización que en las per- el adolescente percibe de sí mismo,
presentaron mayores turbadoras. Presentaron sensibilidad sin contrastar este autoinforme con lo
de liderazgo, en tan- social, preocupación por los demás, señalado tanto por sus pares como por
n características tales popularidad, iniciativa, confianza en sí sus maestros o padres acerca de él. Por
cia, la popularidad, la mismo y espíritu de servicio. ello, se considera que la Batería de So-
fianza en sí mismo y 2- Las mujeres presentaron mayo- cialización BAS-3 debiera ser adminis-

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trada junto a sus dos instrumentos com- se considera necesario profundizar Cicirelli, V. G. (1978)
plementarios (BAS-1 y BAS-2) para el estudio, incluyendo en un próximo and achievement.
tener así una concepción más ajustada trabajo de investigación a un grupo de Contini, N. (2008). L
acerca de las habilidades sociales de adolescentes provenientes otros con- pectivas desde la
adolescentes de contextos de pobreza. textos socioeconómicos, comparando ciedad. 9, 15-27.
Por otro lado, es preciso señalar los resultados alcanzados entre adoles- Contini, N.; Cohen Im
que, dado que en la presente investi- centes de contextos de pobreza y grupo en adolescentes pr
gación no se utilizó un grupo control, control. 7º Congreso Iberoa
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