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UNIVERSIDAD VERACRUZANA

FACULTAD DE MEDICINA VETERINARIA Y ZOOTECNIA

FACTORES PARA EL ÉXITO EN LA


PRODUCCION INTENSIVA DE PECARÍ DE
COLLAR (Pecari tajacu Linnaeus 1758) EN LA
UMA RANCHO VIVEROS, MUNICIPIO DE
EMILIANO ZAPATA, VERACRUZ.

TRABAJO RECEPCIONAL EN LA MODALIDAD DE:

TRABAJO PRÁCTICO EDUCATIVO

COMO REQUISITO PARCIAL PARA OBTENER EL TÍTULO DE

MÉDICO VETERINARIO ZOOTECNISTA

PRESENTA:

SERGIO ALBERTO VIVEROS PEREDO

ASESORES:

MVZ LORENA LOPEZ DE BUEN


MVZ SERGIO VIVEROS COLORADO

VERACRUZ, VER. SEPTIEMBRE 2011


CONTENIDO
Cap. Pág.
DEDICATORIAS…………………………………………………………... Vi
AGRADECIMIENTOS…………………………………………………..... Vii
I INTRODUCCION………………………………………………. 1

II ANTECEDENTES……………………………………………... 3

III JUSTIFICACIÓN………………………………………………. 10

IV OBJETIVO…………………………………..…………………. 11

4.1 OBJETIVOS PARTICULARES…………………………………… 11


V METODOLOGIA……………………………..……….............. 12

5.1 ÁREA DE ESTUDIO……………………………………………….. 12


5.2 PROCEDIMIENTO………………………………………………… 12
VI MANUAL DE GUIA PARA PAQUETE TECNOLOGICO…. 13

6.1 REPRODUCCION DEL PECARÍ DE COLLAR…………………. 13

6.1.1 Manejo de reproductores…………………………………. 14


6.1.1.1 Madurez Sexual………………………………… 14
6.1.1.2 Cortejo y Apareamiento………………………... 14
6.1.1.3 La Gestación y el Período Post-parto ..……… 15
6.1.1.4 Diagnostico observacional de gestación…….. 16
6.1.1.4.1 Requerimientos para el DOG…… 17
6.1.1.5 Madre con sus crías……………………………. 17
6.1.1.6 Diferenciación Sexual.…………………………. 18
6.2 ALIMENTOS Y ALIMENTACION…………………………………. 19
6.2.1 Control de plagas en el alimento..………………………... 23
6.3 ASPECTOS SANITARIOS DE LA CRÍA INTENSIVA DEL
PECARÍ DE COLLAR……………………………………………… 24
6.3.1 Manejo preventivo…………………………………………. 24
6.3.2 Limpieza del recinto………………………………………. 24
6.3.3 Monitoreo Zoosanitario……………..…………………….. 27
6.3.4 Padecimientos y tratamientos……………………………. 27

ii
6.4 INSTALACIONES…………………………….………................... 29
6.4.1 Recintos…………………….……………………………… 30
6.4.2 Requerimientos de las instalaciones……………………. 31
6.5 MANEJO…………………..………………………………………… 34
6.5.1 Contención y manejo de ejemplares………………….... 34
6.5.1.1 Estructura de grupo…………………………..... 35
6.5.1.2 Comportamiento social ……………………….. 35
6.5.1.3 Comportamiento sexual………………………. 36
6.5.1.4 Interacción adulto joven……………………….. 36
6.5.1.5 Edad y sexo……………………………………... 37
6.5.2 Practica para la movilidad de ejemplares entre grupos
familiares (técnica de barullo)……………………………. 37
6.5.3 Manejo genético…………………………………………… 39
6.5.4 Registros……………………………………………………. 39
6.5.4.1 Cuarentena…………………………………....... 40
6.5.4.2 Manejo de reproductores…………………….... 41
6.5.4.3 Crías………………………………………….….. 42
6.5.4.4 Juveniles ……………………………………….. 44
6.5.4.5 Bajas………………………………………….….. 45
6.6 TECNOLOGIA BASICA PARA LA CONTENCIÓN FISICA
DEL PECARÍ DE COLLAR……………………………………...… 46
6.6.1 Contención física………………………………………….. 47
6.6.2 Aplicación de la manga para el adecuado manejo del
pecarí de collar bajo sistema intensivo........................... 47
6.6.2.1 Infraestructura y equipo para contención
física…………………………………….……….. 52
LITERATURA CITADA…………………………………………………… 55
ANEXO …………………………………………………………………….. 60

iii
CUADROS
Cuadro Pág.
1 La clasificación taxonómica del pecarí de collar (Pecari
tajacu)………………………………………………………… 5
2 Incidencia de los eventos reproductivos del pecarí de
collar………………………………………………………….. 13
3 Tabla de apoyo para el diagnostico observacional de
gestación (DOG)…………………………………………….. 16
4 Ingredientes implementados en la alimentación del
pecarí de collar en la UMA Rancho Viveros…………....... 20
5 Propuesta de 3 dietas usadas en la alimentación del
pecarí de collar……………………………………………… 21
6 Principales signos clínicos y tratamientos de los
padecimientos más comunes del pecarí de collar………. 28
7 Formato historia clínica y registro de alta del ejemplar
ingresado o en tratamiento……………………………….. 40
8 Formato de registro individual del vientre………………. 41
9 Formato de registro individual del semental……………. 42
10 Formato individual de registro de la cría y seguimiento
de su desarrollo hasta el final de la etapa juvenil……….. 43
11 Formato de bajas……………………………………………. 45
12 Formato de registro de necropsia…………………………. 45

iv
FIGURAS

Figura Pág.
1 Distribución del pecarí de collar (Pecari tajacu) en México…... 4
2 Hembra de Pecarí con crías próximas al destete……………… 15
3 Hembra de pecarí improntada (con mamila), con sus crías
de 2 meses de edad………………………………………………. 18
4 Pecarí adulto alimentándose de fruta local (papaya). ………... 22
5 Pecarí alimentándose de elote en hoja…………………………. 22
6 Pecarí comiendo grano (maíz) en comedero de cemento……. 22
7 Tanques de almacenamiento de alimento con capacidad de
200 lts y tapa hermética de rosca……………………………….. 23
8 Corral sin limpieza………………………………………………… 25
9 Limpieza de corrales……………………………………………… 26
10 Corral general vista frontal……………………………………….. 29
11 Corral general vista transversal., donde se observan los
corrales familiares ………………………………………………… 30
12 Unidad intensiva de producción de pecarí de collar UMA
Rancho Viveros……………………………………………………. 31
13 Bebedero de chupón……………………………………………… 33
14 Comederos de cemento………………………………………….. 33
15 Grupo de pecarí saliendo por la puerta de guillotina………….. 38
16 Pecarí seleccionado para incorporar a un grupo nuevo………. 38
17 Nuevo ejemplar de pecarí mezclado en el grupo
seleccionado……………………………………………………….. 38
18 Material para identificación………………………………………. 39
19 Pecarí aretado……………………………………………………... 39
20 Hembra con crías de 2 semanas de edad……………………… 43
21 Corral de hembras juveniles 8-10 meses de edad…………….. 44
22 Corral de manejo de pecarí de collar UMA Rancho Viveros…. 48
23 Cajón prensa………………………………………………………. 50
24 Pecarí aretado técnica de contención para el marcaje.....……. 51
25 Pecarí de collar inmovilizado en cajón prensa…………………. 51
26 Descripción del cajón prensa…………………………………….. 54
27 Descripción de hipoquinesis, en cajón trampa………………… 54

v
DEDICATORIAS

A MI MADRE
Por darme el don de la
vida y apoyo que da
directriz a mi vida.

A MI PADRE
Por darme ese
ejemplo de sabiduría y
honestidad.

A MI ABUELO
(PA GIL)
Por transmitirme su
seguridad, con su
ejemplo de humildad,
dignidad y trabajo.

vi
AGRADECIMIENTOS

A mis asesores, Dr. Lorena López de Buen,


por su paciencia y consejos,
y al MVZ Sergio Viveros Colorado,
de quien nació la idea de elaboración de este manual.

A mi hermana, padres y abuelos,


Por el apoyo y animo que siempre me infundieron.

A mi tio., Biol. Ignacio Cinta Fernández,


Con infinito agradecimiento por el cariño y apoyo que ha brindado,
en mi formación laboral. Y por dejarme entrar a su mundo… El manejo
de la vida silvestre.

A mis maestros.
Por transmitirme sus conocimientos.

A la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la U.V.,


Por darme los instrumentos para desarrollarme como profesionista.

A mi facilitador, MVZ J.A. Villagómez Cortés


Por la orientación y apoyo en todo momento.

A mi H. jurado
MVZ Roberto Castillo Tlapa,
MVZ Fabián Fco. Vanoye Lara,
MVZ Lorena López de Buen.

vii
I INTRODUCCION

El pecarí de collar (Pecari tajacu) es una especie silvestre de potencial elevado


debido a sus características reproductivas (dos partos al año con prolificidad de
1.5 crías por parto) además de fácil adaptabilidad al encierro (Sowls, 1997) y a
diferentes tipos de dietas (Mukul, 2003). Es por tanto que la crianza de estos
animales en cautiverio es una forma de promover procesos de diversificación
productiva en el sector rural, así como frenar las tendencias de deforestación,
erosión y alteración de ecosistemas en el país (SEMARNAP,1997). Ya que,
actualmente las poblaciones de pecarí de collar no se encuentran bajo ninguna
categoría de protección, de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana NOM-059-
SEMARNAT-2001. Por lo que su reproducción mediante un esquema sencillo de
producción, no tiene limitantes para su introducción al mercado como pie de cría,
en canal para consumo o para la producción de piezas de trofeo en UMA´s
(Unidades de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre) con fines
cinegéticos.

Actualmente, el grado de éxito que se ha logrado respecto a integrar


investigación y práctica conservacionista es limitado, entre otras cosas debido a la
urgencia planteada por varias necesidades prácticas que no ha podido aguardar
los lapsos –a veces largos– que requiere una investigación científica convencional.
Y a la inversa, porque no siempre se ha podido traducir los resultados de la
investigación en métodos y técnicas aptas para su aplicación (DGVS, 2006).

Por lo tanto, queda muy claro que el enorme reto de incorporar el avance
científico relevante a los protocolos de trabajo prácticos para la conservación de la
vida silvestre y la mejora de las disposiciones administrativas para lograr una
gestión exitosa de la vida silvestre en México aún persiste (DGVS, 2006). Para lo
cual deben practicarse estudios poblacionales a escala regional y local, que
pueden ser herramientas de gran valor para evaluar los estudios particulares
realizados en UMA´s (DGVS, 2006).
-1-
Varios intentos de desarrollar la cría intensiva del pecarí de collar con fines
comerciales han fracasado, ya sea por falta de conocimientos sobre la especie o
por falta de técnicas viables para la rentabilidad económica (Nogueira-Filho et al.,
1999). Por lo que este manual brinda bases zootécnicas, claves de éxito
productivo, para la cría intensiva del pecarí de collar (Pecari tajacu), enfocadas al
sector rural, de forma que puedan ser utilizadas por cualquier productor interesado
en la cría de esta especie, con fines productivos sustentables y a casi cualquier
escala económica.

-2-
II ANTECEDENTES

Las diferentes civilizaciones americanas criaron y aprovecharon las especies de


fauna silvestre mucho antes de la llegada de los europeos. Los fines para los
cuales fueron y continúan siendo aprovechados, son la alimentación, la protección,
la ornamentación, la práctica de cultos religiosos o festividades, la curación de
enfermedades y la economía (Jorgenson, 1990).

Por ser la fauna silvestre un patrimonio biológico, cultural y económico en


América, se ha propuesto establecer varios programas para la conservación y
manejo de estos recursos genéticos por instituciones particulares, estatales o
extranjeras, con el propósito de conservar y utilizar adecuadamente dicho
patrimonio (Dietrich, 1990). Por estas razones se realizan acciones para la
conservación del germoplasma y el aprovechamiento sustentable de la vida
silvestre en México, a través de la formación de áreas naturales protegidas y de
Unidades para la Conservación y Manejo de la Vida Silvestre (UMAs) extensivas e
intensivas (SEMARNAP, 1997).

Sin embargo, el aprovechamiento de la fauna silvestre en UMAs de


modalidad intensiva se ha realizado, generalmente, con deficiente administración,
lo que no ha permitido alcanzar una industria pecuaria rentable con las especies
comúnmente utilizadas. Pues para lograr esto se deben tomar en cuenta factores
esenciales de estrategia pecuaria, como el uso adecuado de los recursos, la
aplicación de tecnologías apropiadas y el seguimiento eficiente del calendario de
actividades programadas en la unidad de manejo animal (Miranda, 1993).

Además, el aprovechamiento de la fauna silvestre en las UMAs de


modalidad intensiva es bajo, ya que el aspecto de aprovechamiento no suele ser
rentable porque el número de animales es bajo y los costos de producción o de
mantenimiento de los animales es alto. Asimismo, la información existente es
incompleta, de modo que no se pueden plantear procedimientos de crianza en

-3-
cautiverio que permitan obtener una producción estable y redituable. Loría (2000)
sugiere que se pueden incluir ciertas actividades para crear fuentes de ingresos
dentro las unidades de manejo, como por ejemplo: venta de animales
reproductores desechados, venta de subproductos de animales muertos y
sacrificados (pezuñas, piel, pelo, etc.) así como la utilización de crías muertas para
taxidermia.

El Pecarí de Collar (Pecari tajacu) se distribuye desde el sur de Estados


Unidos hasta el sur de Argentina en una gran variedad de hábitats. En México se
encuentra distribuido en toda la república mexicana, excepto en Baja California
(William, 2005). Esta especie es altamente adaptable distribuyéndose desde
zonas tropicales hasta el norte semiárido de México (ver figura 1), Sin embargo,
las densidades más altas se encuentran en la vertiente del Pacífico desde Sinaloa
hasta Oaxaca (Leopold, 1997). Taxonómicamente se clasifica en la clase
Mammalia, siendo un Ariodactylo de la familia Tayassuidae, (Cuadro1).

Figura 1. Distribución del pecarí de collar (Pecari tajacu) en México (Tomado por
SEMARNAT, 2008)

-4-
Cuadro 1. La clasificación taxonómica del pecarí de collar (Pecarí tajacu)
Conforme a SEMARNAT, 2011
CLASE Mammalia (Linnaeus, 1758)
ORDEN Artiodactyla (Owen, 1841)
FAMILIA Tayassuidae (Palmer, 1897)
GÉNERO Pecari (Reichenbach, 1835)
ESPECIE (Pecari tajacu, Linnaeus, 1758)

En general, los pecaríes de collar son ungulados de talla mediana,


presentan cuerpo corto y robusto, cabeza grande y hocico alargado. Sus
miembros son cortos y delgados, los anteriores con cuatro dedos (dos reducidos y
los otros dos formando la pezuña) y tres en los posteriores (uno reducido y los
otros dos formando la pezuña). La cola de estos animales es corta y delgada,
poseen un pelaje largo y denso, donde se marca una porción delgada de pelo
blanco o amarillento que recorre el cuello bajando por los hombros (parecido a un
collar) del cual se deriva su nombre común “pecarí de collar” (SEMARNAT, 2011).

Cuando nacen las crías son de color pardo rojizo y conforme crecen
cambian a color grisáceo, presentan una glándula grande de 12 a 15 cm. en el
lomo, que produce un almizcle de fuerte olor (IUCN México, 2004; Rancho
Monteverde, 2003). Presentan un peso que varía entre 13 y 31 Kg y el largo de la
cabeza al tronco varía entre 80 y 90 cm. Se ha observado que el peso y tamaño
de este animal, va aumentando a medida que pasa de regiones cálidas a otras
más frías, llegando a pesar más de 30 Kg en el norte del país. Los machos adultos
se distinguen de las hembras, por su mayor tamaño y colmillos largos, tienen un
tejido cartilaginoso debajo de la piel que les sirve de escudo (SEMARNAT, 2008).

Los pecaríes son animales omnívoros, con una dieta amplia y variada donde
se incluyen principalmente frutos, y aprovechando también, según los lugares en
los que habitan, consumen raíces, cactáceas, tubérculos, rizomas, semillas y
brotes. El consumo de frutas implica asimismo la dispersión de semillas de las

-5-
especies ingeridas a través de la defecación, por lo que los pecaríes juegan un
importante papel en el establecimiento de la estructura vegetal de los ecosistemas
que habitan (SEMARNAT, 2011).

El apareamiento ocurre en cualquier época del año, aunque


preferentemente en verano. Las hembras adquieren la madurez sexual al año de
edad, pudiendo ser reproductoras prácticamente toda su vida. Los machos
maduran entre los 10 y los 11 meses de edad y la producción de esperma declina
a los 10 años. El macho es sexualmente activo durante todo el año y el estro en
las hembras dura de 3.5 a 4.8 días, en ciclos de 22 a 24 días durante todo el año.
El período de gestación es de 141 a 151 días (SEMARNAT, 2011).

Normalmente el tamaño de la camada es de dos crías y ocasionalmente se


presentan camadas de una o tres crías. Por lo general, la proporción de sexos en
una población silvestre es de 1:1. En cautiverio han llegado a vivir hasta 24 años,
mientras que en condiciones silvestres el promedio de vida del pecarí de collar es
de aproximadamente 7.5 años (SEMARNAT, 2011).

Es un animal gregario y altamente sociable, vive en grupos (piaras)


compuestos de 2 a 20 individuos, aunque normalmente son de 4 a 8 ejemplares;
usualmente se desplazan en grupos de 6 a 12 animales, aunque a veces se
agregan más ejemplares, registrando mayor actividad en las horas frescas del día;
cerca de fuentes permanentes de agua. En épocas de escasez de recursos, las
piaras pueden reunirse en zonas donde los recursos son más abundantes,
formando grupos de más de 40 individuos. Los miembros de una manada se
identifican entre sí, gracias al "olor característico de la piara," por la presencia de
la glándula odorífera que presentan en la región lumbar; con la cual se restriegan
mutuamente, impregnándose. La ubicación de la glándula puede identificarse a
simple vista por la presencia de un mechón de pelos amarillos en donde ésta
excreta su contenido (Rancho Monteverde, 2003).

En los últimos 25 años, la investigación científica sobre la vida silvestre se


ha intensificado, mejorado y consolidado sustancialmente en México. Hoy puede

-6-
decirse que, para numerosos tipos de ecosistemas y para varias especies, ya se
cuenta con conocimientos que permiten reconocer de mejor manera el estado y la
tendencia que guardan especies y hábitat, lo cual brinda un apoyo importante para
el diseño y el desarrollo de programas de conservación. Sin embargo, el grado de
éxito que se ha logrado respecto a integrar investigación y práctica
conservacionista es limitado, entre otras cosas debido a que la urgencia planteada
por varias necesidades prácticas no ha podido aguardar los lapsos –a veces
largos– que requiere una investigación científica convencional (DGVS, 2006).

A la inversa, debido a que no siempre hemos sido capaces de traducir los


resultados de la investigación científica en métodos y técnicas aptas para su
aplicación práctica (DGVS, 2006), queda muy claro que persiste el enorme reto (o
área de oportunidad, visto de manera propositiva), de incorporar todo avance
científico relevante a protocolos de trabajo prácticos para la conservación de vida
silvestre y mejorar las disposiciones administrativas que permitan lograr una
gestión exitosa en México (DGVS, 2006). Para lo cual deben practicarse estudios
poblacionales independientes (a diferentes escalas, regional y local) que pueden
ser herramientas de gran valor para evaluar comparativamente estudios
particulares realizados en UMA (DGVS, 2006).

Varios intentos de desarrollar la cría de este animal con fines comerciales


han fracasado por falta de conocimientos sobre la especie o por falta de técnicas
de manejo adecuadas que generen su rentabilidad económica (Nogueira-Filho et
al., 1999). Por tal motivo, este trabajo está orientado en la clave práctica y
transferible de un manual que evite fracasar en la producción por problemas
comunes y prevenirlos.

Existe otro tipo de producción y manejo; que es la cría extensiva o


“ranching” de pecaríes y se define como la posibilidad de criar la especie en
grandes superficies. El sistema aumenta su productividad al explotar sus
poblaciones silvestres de forma sostenible. Esta posibilidad es atractiva, ya que
teóricamente, permite reducir los costos de alimentación e infraestructura; los

-7-
cuales representan una parte muy importante de los costos de producción de esta
especie (Rancho Monteverde, 2003).

En el caso del pecarí labiado o de labios blancos (Tayassu pecari), existen


en Brasil algunos ejemplos documentados de ranchos o propiedades privadas, en
las cuales varios centenares de individuos son manejados con finalidad
productiva. No obstante, en el caso del pecari de collar (Pecari tajacu), no existe
información publicada sobre el manejo colectivo de grupos importantes de
individuos en espacios abiertos. A pesar de esto, los grupos familiares de pecari
de collar en cautividad, con una alimentación adecuada, desarrollan un
crecimiento exacerbado de sus poblaciones hasta llegar a densidades muy
elevadas, (Nogueira-Filho y Lavorenti, 1997).

Este comportamiento demográfico, puede permitir el manejo de grandes


grupos de pecarí de collar con finalidad productiva. Este hecho se ilustra con el
caso de un rancho en Irecé, Estado de Bahía, Brasil, que alberga una población
de 450 individuos en un área de 5 ha. Estos animales son manejados de forma
colectiva para la producción de individuos reproductivos para otros criaderos.
Dicho ejemplo ilustra que es técnicamente viable manejar colectivamente grandes
manadas de pecari de collar en condiciones semi-extensivas y abre la posibilidad
de experimentar este modelo para el desarrollo de sistemas más extensivos de
producción en otros ecosistemas de América Latina, a partir de animales criados
en cautividad (Nogueira-Filho y Lavorenti, 1997).

En la literatura no existen datos sobre el manejo del pecarí de collar. Esta


especie es a menudo mencionada como un candidato para la cria intensiva, ya
que se trata de una de las especies más cazadas por su carne y piel en
Latinoamérica, y presenta una elevada capacidad reproductiva (Sowls, 1997;
Mayor, 2004). Sin embargo, la mayoría de los trabajos publicados hasta la fecha
sobre la producción de pecarí, abordan sobretodo cría semi-intensiva (Rengifo y
Navarro, 2002; Bodmer et al., 1997; Nogueira-Filho et al., 1999; Mayor, 2004) lo
cual alienta a la realización de proyectos de transferencia hacia los productores,

-8-
con la utilización de técnicas novedosas enfocadas a la producción intensiva;
buscando aumentar las posibilidades de reproducción y su viabilidad.

Brasil es uno de los países del continente sudamericano donde la zoocria


está más desarrollada, pero menos del 10% de los más de 600 criaderos
oficialmente registrados por la administración pertenecen a esta especie. En
efecto, varios intentos de desarrollar la cría de este animal con fines comerciales,
han fracasado por falta de conocimientos sobre la especie (Nogueira-Filho et al.,
1999).

Esto se debe a que muchas granjas de pecaríes alimentan sus animales


con piensos comerciales que garantizan una buena productividad, pero muy altos
costos de producción (Nogueira-Filho y Lavorenti, 1997). En este caso se maneja
una alimentación rústica basada en un modelo sujeto para ser aplicado al sector
rural principalmente.

-9-
III JUSTIFICACIÓN

La realización de este trabajo técnico educativo es una compilación de


experiencias en la producción intensiva de pecarí de collar. Las tareas contenidas
en él, son producto de experiencias académicas y prácticas en la UMA Rancho
Viveros de 25 años atrás a la fecha y en otros criaderos intensivos de pecarí de
collar. Algunos aspectos podrán diferir de lo reportado en la literatura, pues aquí
se enfatiza su aplicación en proyectos campesinos. La naturaleza y alcances de la
experiencia, presenta su importancia en cuanto a la actual trascendencia social;
pues los proyectos campesinos de crianza de pecarí de collar que inicien con base
en las tecnologías propuestas de este manual, estarán siendo detonantes de
regiones prioritarias del estado de Veracruz y otras partes del país; donde la
especie necesita conservarse y aprovecharse racionalmente mediante una
producción sustentable. Por lo que, el presente trabajo práctico-educativo describe
experiencias propias en manejo de algunos puntos clave de la cría intensiva del
pecarí de collar, en los ámbitos de mas difícil control para la producción de esta
especie, la cual, mediante apego a los lineamientos de la normatividad justifica la
propuesta, en razón de disponer de una alternativa de adopción de tecnología
básica; con el fin de establecer una opción adecuada, segura y eficaz, en la
producción intensiva de pecarí de collar.

- 10 -
IV. OBJETIVO

Elaborar un manual práctico que permita a los interesados en el manejo y cría del
pecarí de collar, contar con un paquete tecnológico de apoyo didáctico básico para
establecer una alternativa adecuada, segura y eficaz en la producción intensiva
con base al sistema de producción aplicado en la Unidad de de Manejo para la
conservación de la vida silvestre.

4.1 OBJETIVOS ESPECÍFICOS

1. Brindar alternativas que permitan al productor contar con un paquete


tecnológico básicos en la producción intensiva de pecarí de collar.

2. Proponer una metodología sencilla, eficiente y segura para la contención


física del pecarí de collar en cautiverio.

3. Contribuir al conocimiento del manejo intensivo del pecarí de collar en el


estado de Veracruz.

- 11 -
V. METODOLOGIA

5.1 ÁREA DE ESTUDIO

El Rancho Viveros está situado en la comunidad de La Cumbre, en el Municipio de


Emiliano Zapata, en la zona centro del estado de Veracruz de Ignacio de la Llave
a 340 metros de altitud sobre el nivel del mar. El clima es cálido-húmedo-regular
(Aw1), con una temperatura promedio de 25.2º C. La precipitación pluvial media
anual es de 1350 milímetros (INAFED-e-local, 2010). El rancho consta de 12.3 ha,
de las cuales solo 4 ha como UMA bajo el registro INE/CITES/DGCERN-CR-IN-
032-VER/97. La principal actividad es de tipo agrícola, principalmente árboles
frutales. El propietario, Sr. Hermenegildo Viveros Jiménez, comenzó a criar
pecaríes de collar 25 años atrás, a partir de una población de cuatro ejemplares; y
de 3 años a la fecha desarrollando el nuevo sistema de producción. Actualmente,
su piara está constituido por un total de 78 animales, de ambos sexos y diferentes
estados fisiológicos, que son manejados por en grupos.

5.2 PROCEDIMIENTO

El contenido que se presenta en este reporte está estructurado con un sentido


utilitario; es decir, para una aplicación rápida y oportuna de los interesados en la
temática de tareas prácticas de la zootecnia, pero también, para los interesados
inexpertos que deseen emprender trabajos de crianza o investigación de la
especie. En todo momento utiliza un lenguaje sencillo, pero se acude a citar la
literatura cuando la discusión lo amerita, para comparar o apuntar discrepancias
entre la parte teórica y los resultados de la experiencia en la UMA Rancho Viveros.
Por lo que este manual cumple con una formalidad académica y está estructurado
para su uso como guía en un paquete tecnológico, anexando una propuesta de
metodología para la contención física, en base en los logros obtenidos en dichas
prácticas.

- 12 -
VI. MANUAL DE GUIA PARA EL PAQUETE TECNOLÓGICO

6.1 REPRODUCCIÓN DEL PECARÍ DE COLLAR

La elección de una especie silvestre para ser introducida en sistemas de


producción está determinada por los parámetros biológicos referentes a
reproducción, crecimiento, comportamiento en cautividad y requerimientos
energéticos. Algunos de estos factores pueden llegar a ser manipulados en
cautividad. Sin embargo, los parámetros reproductivos presentan una menor
variabilidad y menor capacidad de optimización a corto plazo (Feer, 1993).

El ciclo estral del pecarí de collar presenta una longitud de 21 y 25 días


(Sowls, 1997). Mauget et al. (1997) en la Guyana Francesa observaron una
ciclicidad ovárica mayor con un promedio de 27.8 ± 1.5 días, con una amplia
variabilidad entre individuos (desde 23 hasta 34 días). La duración de la
receptividad sexual por parte de la hembra varía entre 2.6 y 4.8 días (Lochmiller et
al., 1984; Mauget et al., 1997; Sowls, 1997). La tasa de ovulación del pecarí de
collar varía entre 2 y 2.1 ovulaciones por hembra (Hellgren et al., 1985; Gottdenker
and Bodmer, 1998), El tamaño medio de camada es de 1.7 a 1.9 fetos o neonatos
por hembra gestante (Lochmiller et al., 1984; Gottdenker and Bodmer, 1998;
Nogueira Filho and Lavorenti, 1997).

Cuadro 2. Incidencia de los eventos reproductivos del pecarí de collar.


May.
Ene.

Ago.

Sep.

Nov.
Feb.

Mar.

Jun.
Abr.

Oct.

Dic.
Jul.

Eventos

Cortejo y X X X X X X X X X X X X
Cópula
Gestación X X X X X X X X X X X X
Nacimiento X X X X X X X X X X X X
Destete X X X X X X X X X X X X
Monitoreo X X X X X X X X X X X X
Debido a que esta especie no presenta un periodo definido de reproducción, los
eventos biológicos pueden ocurrir en cualquier época del año.

- 13 -
6.1.1 Manejo de reproductores

El pecarí de collar se puede reproducir en cualquier momento del año, el celo en


la hembra dentro del grupo familiar se detecta por el interés por parte del macho
así como de la monta y aceptación de esta, y por medio visual que consiste en la
presencia de labios vulvares rojizos, tumefactos; esta estará dentro del grupo con
presencia de macho hasta un par de semanas antes del parto (diagnóstico de
gestación observacional).

6.1.1.1 Madurez Sexual.

Los machos maduran entre los 10 y los 11 meses de edad y la producción de


esperma declina a los 7 años. El macho es sexualmente activo durante todo el
año. El peso de la hembra de pecarí de collar a la primera monta fértil es de 16 kg,
y 23 kg al primer parto (Sowls, 1984). Por otro lado, Nogueira-Filho and Lavorenti
(1997) determinaron una edad al primer parto de 416 ± 88.94 días.

Las hembras adquieren la madurez sexual al año de edad, pudiendo ser


reproductoras prácticamente toda su vida. , llegando a presentar la primera monta
fértil a una edad similar a la del cerdo doméstico (Gordon, 1997) y a los valores
aportados por Nogueira-Filho and Lavorenti (1997). Es posible que las nuevas
generaciones mejoren el grado de adaptación a los sistemas de explotación
respecto a sus padres socializados ya a partir de la segunda generación (Smythe
y Brown de Guanti, 1995), mejorando en último término los parámetros
reproductivos.

6.1.1.2 Cortejo y Apareamiento

El macho puede estar con varias hembras por eso se recomienda tener un macho
con 7 hembras en el corral, no existiendo problema por tener mas de un macho
por corral, ya que este respetará la jerarquía, siempre montarán a la hembra que
presente celo primero el dominante y seguirán los machos que haya por orden de
jerarquía sin generarse disputas.

- 14 -
6.1.1.3 La Gestación y el Período Post-parto

El apareamiento ocurre en cualquier época del año aunque se presenta un pico de


mayor actividad en verano (junio a agosto). La longitud de la gestación varía entre
141 y 151 días (Lochmiller et al., 1984; Sowls, 1997).

Para la región de estudio se determina el pecarí de collar como especie no


estacional, sin embargo no presentan un celo post-parto y teniendo en cuenta el
intervalo parto-concepción, su potencial reproductivo es de 1.4-1.8 camadas por
año (Gottdenker y Bodmer, 1998). Y solo se presenta la existencia de celo post-
parto y que la monta de este celo puede ser efectiva si ésta tiene lugar entre los 6
y 16 días después del parto, siempre y cuando los neonatos son previamente
separados de la madre. Según estudios de Low (1970).

En la UMA la hembra separada se queda con las crías hasta su destete (3


meses), la cría ira a un corral de crecimiento y la hembra regresará al corral de
reproducción, evitando con esta acción la unión de la cría con los adultos (ver
figura 2).

Figura 2. Hembra de Pecarí con crías próximas al destete.

- 15 -
6.1.1.4 Diagnóstico observacional de gestación (DOG)

Es posible llevar a cabo un diagnóstico de gestación en base a un método


observacional de las características manifestadas en una hembra grávida. (Cessa
V., 2010). Las principales características que muestra una hembra en gravidez
para su diagnóstico son: (ver cuadro 3):

 Abultamiento del vientre, a partir del segundo mes de gestación.


 Patas traseras abiertas, a partir del tercer mes de gestación.
 Ritmo respiratorio acelerado a partir de los tres meses de gestación, sobre
todo en días calurosos.
 Presencia de vulva aumentada de tamaño, de color rosada, en algunos
casos a los dos meses de gestación, aunque generalmente se observa tres
días antes del parto.
 Aumento del la ubre a un tamaño visible a la observación, tres días antes
del parto.

Cuadro 3. Tabla de apoyo para el diagnóstico observacional de gestación (DOG).


Cuarto de Días de gestación Indicadores
gestación aproximada.
1 35 Abultamiento de abdomen.
2 70 Abdomen pendular (colgado).
3 105 Patas traseras abiertas, abdomen pendular,
algunas presentan vulva aumentada de
tamaño (visible), respiración agitada.
4 140-parto Hinchamiento de vulva, presencia de ubre.

Es muy importante que el diagnóstico observacional de gestación se haga antes y


después de que los animales se alimenten, pues regularmente las hembras llenas,
después de comer, no presentan más abultamiento del abdomen del que se
alcanza a observar en las hembras gestantes. (Cessa V., 2010)

- 16 -
6.1.1.4.1 Requerimientos para el DOG

Según Cessa V., 2010, para iniciar la observación de los ejemplares de pecarí de
collar y realizar un buen diagnóstico de gestación, es necesario:
 No generar ruido ni realizar movimientos bruscos que los altere, pues
actuaran a la defensiva.
 Una buena observación del grupo se puede producir desde diez minutos si
se mantienen en silencio o se les muestra confianza.
 Para un buen diagnóstico observacional es necesario ver a las hembras por
atrás y por ambos flancos.

6.1.1.5 Madre con sus crías

Por lo general la hembra tiene dos crías por parto, lo primero que hace después
de que nacen, es asearse y a sus crías no solo para limpiarlos sino para estimular
la circulación y luego les da de lactar.

La madre se torna agresiva y si está en un corral familiar no permite que los


demás miembros del grupo se acerquen a las crías, ya que en los primeros días
de reconocimiento, cualquiera puede desconocer a las crías y matarlas, (alto
porcentaje de muertes de críos por canibalismo), por dicha razón la hembra
deberá estar separada en un corral individual desde antes del parto; si esta no se
aparta cuando las crías cumplen una semana, esta agresividad disminuye y
empiezan a interactuar con todo el grupo.

El pecarí de collar separado de la madre y manejado por el hombre a


temprana edad es capaz de habituarse a la presencia humana (impronta). Si los
individuos jóvenes se manejan en la época de aprendizaje éstos seguirán al
hombre como si fuera su propia madre (Sowls, 1984). También se observa que
este periodo de aprendizaje se inicia a los tres días de edad. Sin embargo, los
neonatos que fueron amamantados en condiciones naturales mantuvieron el
carácter salvaje de sus progenitores (Sowls, 1997), en estos casos recomendando
como experiencias en el UMA, el destete precoz a los 2 días máximo, posteriores

- 17 -
al nacimiento, con el fin de que los críos tomen los calostros maternos el primer
día y al ser retirados no presenten una actitud defensiva a la mano humana, como
consecuencia acepten fácilmente la alimentación mediante mamila, (ver figura 3).

Figura 3. Hembra de pecarí improntada (con mamila), con sus crías de 2 meses
de edad.

6.1.1.6 Diferenciación Sexual

En el pecarí no presenta dimorfismo sexual aparente desde su nacimiento, hasta


algunos meses después, para realizar esta actividad es necesario inmovilizar al
animal y determinarlo mediante palpación de los genitales, fácilmente se puede
distinguir el prepucio y sentir el pene, esta actividad se realiza hasta el momento
del destete evitando el rechazo de la madre por el manejo de este; A partir de los
9-12 meses se puede observar a simple vista los testículos del macho al mirar por
detrás, estos están recubiertos con un pelo amarillento. Las hembras por lo
general son un poco más pequeñas y es difícil observar la vulva a simple vista.

- 18 -
6.2 ALIMENTOS Y ALIMENTACIÓN

El alimento suministrado a un animal silvestre como el pecarí de collar en


cautiverio deberá ser similar al que consumen en vida libre, además deberá ser
supervisado por personal con experiencia o un médico veterinario. Una
alimentación inadecuada genera en los animales problemas fisiológicos, de
desarrollo y conductuales, que pueden llevarlo a la muerte. Se recomienda
proporcionar una dieta balanceada, que incluya alimentos que consumen en vida
libre. (SEMARNAT, 2011).

La alimentación proporcionada es variada, y no sigue ningún protocolo


rígido ya que está sujeta a la productividad y disponibilidad de alimento en la UMA,
como es el caso de frutas, hierba y forraje de corte (ver cuadro 4), tal cual se va
realizando desde comienzo de este sistema de producción; La dieta estará dada
sin el balanceo en base a los requerimiento nutricionales de los ejemplares, motivo
por el cual no se mencionan en este manual.

Es muy importante tomar en cuenta que muchos animales en cautiverio no


comen en uno o más días hasta que se sienten cómodos y seguros. En la UMA,
los adultos y juveniles mantendrán la misma dieta solo variando las raciones. Se
proporciona diariamente una ración medida de grano (maíz) de acuerdo a la
cantidad de animales presentes en cada corral. Teniendo como promedio 200 grs
por animal, mas fruta y/o forraje ad libitum (ver cuadro 5).

En época de lluvias el sustento total es a base de materia vegetal verde


“forraje nativo” de las huertas, siendo lo único que se proporciona diariamente,
este se deberá brindar en cantidad suficiente para satisfacerlos procurando tengan
alimento todo el día, esta cantidad variará dependiendo del porcentaje madurez y
humedad del forraje, ya que son factores que modifican la cantidad y la velocidad
de consumo.

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Cuadro 4. Ingredientes implementados en la alimentación del pecarí de collar en la
UMA Rancho Viveros.
Ingrediente Nombre Científico
Calabaza Cucurbita máxima
Forraje de corte (maíz de riego) Zea mays
Forraje nativo
Guanábana Annona muricata
Maíz en elote Zea mays
Maíz en grano Zea mays
Maíz en mazorca Zea mays
Maíz forrajero Zea mays
Mango fruta Mangifera indica
Naranja C. sinensis
Papaya Carica papaya
Pipián C. argyrosperma
Plátano M. paradisiaca
Zapote Manikara zapota

A las hembras gestantes se deberá suministrar doble ración de la normal


por animal a partir de cuándo se incorpora al corral individual (paridera) hasta el
parto; así también en el periodo de lactancia. Mientras que a los ejemplares
destetados la cantidad de granos será entre 100 gr por animal al día, basado en la
misma dieta de los adultos (granos y frutas de temporada); dicha cantidad se
aumentará cada mes 50 gramos hasta alcanzar la etapa juvenil o el peso ideal,
pudiendo llegar a una ración de hasta 350 gramos. La elección de la dieta
dependerá de la disponibilidad de los ingredientes y de la capacidad de
adquirirlos, no se descarta que se utilicen varios insumos alternadamente, y con
el afán de reducir costos de producción se ofrece forraje de corte ad libitum como
hierba nativa o milpa de maíz de corte (ver figura 5).

- 20 -
Cuadro 5. Propuesta de 3 dietas usadas en la alimentación del pecarí de collar.

DIETA 1 MESES TIPO DE ALIMENTO CANTIDAD


Época de Junio – Forraje y leguminosas ad libitum
lluvias Octubre nativas
Forraje verde de corte 3-4 milpas c/elote
Frutas de temporada ad libitum - a
disponibilidad
DIETA 2 MESES TIPO DE ALIMENTO CANTIDAD

Época de Noviembre – Maíz en grano, 100-350g


sequia Mayo quebrado. destetes-
juveniles
Maíz en grano, 200g adultos
quebrado. reproductores
Maíz en mazorca o 2 - 4 piezas a
elote grande disponibilidad
Frutas de temporada ad libitum - a
disponibilidad
Forraje verde de corte 4 milpas c/elote
Calabaza o pipián A disponibilidad
DIETA 3 MESES TIPO DE ALIMENTO CANTIDAD

Hembras Desde la Maíz en grano, 200-400g


gestantes incorporación quebrado.
al corral Maíz en mazorca o 2 o 3 piezas.
individual de elote grande
gestación Frutas 4-6 piezas a
hasta el disponibilidad
destete Forraje nativo ad libitum - a
disponibilidad
Forraje verde de corte ad libitum - a
disponibilidad
Calabaza o pipián ad libitum - a
disponibilidad
En el cuadro se muestran 3 opciones de dietas para diferentes épocas y estados
fisiológicos, en la cual se deben suministrar dos ingredientes disponibles para
cada una, uno de los cuales debe ser ad libitum.

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Figura 4. Pecarí adulto alimentándose Figura 5. Pecarí alimentándose de
de fruta local (papaya). elote en hoja.

Figura 6. Pecarí comiendo grano (maíz) en comedero de cemento.

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6.2.1 Control de plagas en el alimento

En la unidad de producción donde exista disponibilidad de granos guardados


existirá el riesgo de pérdida por plagas como ratas y aves, aunado a que estas
pueden ser un vector de enfermedades o por dicha razón es necesario mantener
un control de las mismas mediante la conservación de los alimentos en recipientes
que eviten el acceso a dichas plagas, así como la incorporación del los registros
de alimentación, aplicando la cantidad necesaria por animal evitando el excedente
de granos en los corrales.

Basado en el caso de la UMA Rancho Viveros, para el control de las plagas


en el alimento, se propone el uso de tanques con capacidad de 200 litros de
plástico con tapa de rosca o presión para guardar los granos, pudiendo dejarlos en
el pasillo central de la UMA para la fácil distribución del alimento (ver figura 7).

Figura 7. Tanques de almacenamiento de alimento con capacidad de 200 lts y


tapa hermética de rosca.

- 23 -
6.3 ASPECTOS SANITARIOS DE LA CRÍA INTENSIVA
DEL PECARÍ DE COLLAR

6.3.1 Manejo preventivo

El pecarí de collar es una especie nativa, por lo tanto el riesgo de problemas


sanitarios y enfermedades es muy bajo, ya que están acostumbrados a las
condiciones del medio y han desarrollado defensas naturales a los posibles
agentes causantes de enfermedades.

Sin embargo en la cría intensiva el riesgo sanitario aumenta por la


limitación de espacio y el número de animales por corral. Así que se deben tomar
algunas medidas preventivas para garantizar el bienestar de los pecaríes.

En base a que la población de ejemplares existentes en la UMA Rancho


Viveros está confinada únicamente a los recintos de la unidad, que no ha sido
introducido ningún ejemplar ajeno a la misma desde hace 23 años, y de que todas
las muertes que se han registrado desde el inicio han sido producidas por agresión
y senectud aunado a que no existe ningún programa zoosanitario validado para la
inmunización del pecarí de collar, no se lleva a cabo ningún protocolo preventivo
de vacunación o desparasitación; sin embargo se remarca la necesidad de su
establecimiento para lo cual se deja este rubro abierto a buen análisis y
establecimiento por expertos en la materia.

6.3.2 Limpieza del recinto

Esta actividad se debe llevar a cabo en base al diagnóstico visual por parte del
técnico a cargo de acuerdo a la cantidad de materia fecal en la zona de
estercolero y la cantidad de residuos alimenticios de cada corral.

La limpieza de corrales y pasillo son factores importantes para disminuir y/o


controlar la incidencia de enfermedades que pudieran generarse. Así, cuando
consumen grano, se debe hacer limpieza total del corral aproximadamente cada

- 24 -
mes, esto en un corral de 6 a 10 ejemplares, en cambio cuando se les proporciona
forraje o alimento vegetal, esta deberá hacerse cada 15 días, hay que tener en
cuenta que hay que sacar del corral todos los ejemplares cada ocasión que se
efectúa la limpieza total del corral y esto genera estrés, por lo cual no es
recomendable realizar esta con mucha frecuencia.

Unas actividades de carácter obligatorio es el mantenimiento del comedero


limpio diariamente antes de proporcionar el alimento, por lo cual se requiere
realizar un barrido de los restos de alimento y suciedad que se encuentren en el
mismo así como la limpieza del canal de desagüe en cada corral evitando que se
pare el flujo del mismo (ver figura 8).

a)

Figura 8. Corral sin limpieza. En la imagen se muestra a) el canal de desagüe


tapado por falta de limpieza.

Antes de la entrada de los ejemplares cada vez que se muevan de un recinto


a otro es necesario realizar la limpieza del mismo sin importar el tiempo
transcurrido desde la anterior limpieza.

- 25 -
La época de alto calor resultante de la sequia, coincide con poco aporte de
materia vegetal y esta será consumida en su mayoría, por lo cual la limpieza se
hará en base al criterio del técnico.

En la época de lluvias la limpieza del recinto deberá aplicarse en base al


criterio del técnico encargado pudiendo ser necesaria hasta semanalmente,
evitando que se acumule materia orgánica que pueda tapar el canal de desagüe.

Cuando la temperatura disminuye sobre todo el invierno es posible permitir


la acumulación del forraje excedente realizando la limpieza solo del estercolero
con el fin que los ejemplares usen este forraje como cama, pudiendo dejarse hasta
2 meses siempre y cuando no esté húmedo (ver figura 9).

Las herramientas básicas con las que debe contar la unidad para la
realización de estas actividades son: escoba, palas, rastrillos y bieldos.

La materia orgánica resultante de cada limpieza será trasladada a un área


de composta para su procesamiento y se utilizará como abono en el área agrícola
de la UMA.

Figura 9. Limpieza de corrales, En la imagen se muestra al personal de la UMA


retirando los residuos de forraje de un corral de reproducción.

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6.3.3 Monitoreo Zoosanitario

Una buena UMA no es aquella que tiene muchos individuos, si no aquella que
tiene a sus ejemplares en buenas condiciones de salud. En el caso concreto de
los pecaríes del Rancho Viveros, cada ejemplar será monitoreado regularmente
solo mediante observación directa del ejemplar en base al mismo procedimiento
del diagnostico observacional obteniendo un dictamen cada vez (ver capitulo 6).
En caso de que se detecte en uno o más ejemplares, indicios de conducta
diferente o cualquier otro indicio anormal, se procederá a aislarlo, y se deberá dar
atención médico veterinaria.

En caso de que se presente alta mortalidad recurrente generada por


causas no identificadas, el técnico de la UMA deberá contactar directamente con
la Dirección General de Vida Silvestre o la Delegación Estatal de SEMARNAT en
la entidad, para conocer los procedimientos de toma de muestras y envío a
laboratorios vinculados con los programas de monitoreo sanitario en materia de
vida silvestre que actualmente operan en el país.

6.3.4 Padecimientos y tratamiento

Cuando se presentan problemas de salud, se debe actuar inmediatamente, Para


garantizar el bienestar de todo el grupo; los problemas más comunes son:

Los pecarí pueden agredirse entre ellos provocando heridas, la mayoría de


estas son menores las cuales no se les debe aplicar ningún tratamiento, ya que la
recuperación de las mismas, es más efectivo sin no se estresa el ejemplar
mediante el manejo en la curaciones; en algunas ocasiones las heridas son más
graves, cuando por diagnostico observacional se determina que esta pone en
riesgo la integridad del ejemplar se debe separar del grupo y dar un tratamiento
del problema. Si el técnico determina que la herida lo amerita es necesario
inmovilizar al animal (contención física propuesta), lavar muy bien con agua limpia,
cortar el pelo alrededor de la herida, y si dependiendo del tamaño de la herida
aplicar o no suturas. El ejemplar se debe revisar diariamente observando la herida

- 27 -
hasta que cierre completamente, es por eso que el animal debe estar en un corral
individual y una vez que se ha recuperado puede volver al corral, mediante la
técnica de barullo (ver capitulo de manejo).

El pecarí de collar, presenta algunos padecimientos comunes tanto en


cautiverio como poblaciones en vida libre, la atención de los ejemplares deberá
estar a cargo de un médico veterinario con experiencia en fauna silvestre.

Cuadro 6. Principales signos clínicos y tratamientos de los padecimientos más


comunes del pecarí de collar. SEMARNAT, 2011.

SÍGNOS CLINICOS PROBABLE CAUSA TRATAMIENTO


Diarrea Parásitos internos Sulfametazina al
(Protozoario) 12.5% IM
Diarrea con gusanos y Parásitos internos (helmintos) Mebendazole o
bajo peso corporal Febendazole VO
Diarrea mal oliente y Alimentos contaminados Cambiar el alimento y
falta de apetito dar mucha agua
limpia para beber
Diarrea de color gris Infección del intestino Enrofloxacina al 5%
IM
Excremento aguado Alimentos descompuestos o Cambiar alimento y
laxantes (mucha papaya) dar mucha agua
limpia parar beber
Tos frecuente, gruñido Infección en pulmones o vías Tetraciclina
ronco y decaimiento respiratorias Enrofloxacina al 5%
IM
Heridas infecciosas con Infección bacteriana Ampicilina
pus o malolientes Tetraciclina IM
Cojera e inflamación en Golpes por peleas Desinflamatorio
patas (dexametasona) SC
Canibalismo de crías Sobrepoblación en corral Reubicar a madres y
crías a corrales
individuales

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6.4 INSTALACIONES

Las instalaciones constituyen uno de los aspectos más importantes en el


programa de inversiones para la unidad de producción, pues representan gastos
absolutamente necesarios, que no producen ganancias inmediatas. De ahí, que el
capital invertido en las instalaciones, debe ser el más bajo posible, cumpliendo
siempre los requerimientos necesarios. En cualquier caso, es posible utilizar los
materiales disponibles en la región en adaptación a la propuesta de la UMA, ya
que estos influyen directamente en los costos totales, si esto aplica es importante
que los materiales seleccionados ofrezcan duración y resistencia, especialmente
en los sitios de contacto directo con los animales.

Se expone la unidad de producción intensiva de pecarí tipo granja para


grupos familiares y divisiones por etapa productiva, que ha funcionado en la UMA
Rancho Viveros aumentando la producción. La unidad de producción intensiva
está diseñado para una población total de 80 ejemplares, esta debe estar
construida una zona dentro de la UMA que cuente con un buen desnivel y debe
estar dividido para su buen manejo en: (ver figura 10 y 11)

Figura 10. Corral general vista frontal.

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Figura 11. Corral general vista transversal, donde se observan los corrales
familiares.

6.4.1 Recintos y dimensiones (ver figura 12)

a) 5 corrales familiares (reproductores).


 2 corrales de 5 m. x 5 m.
 3 corrales de 2.5 m. x 5 m.

b) 4 corrales de destetes y juveniles (crecimiento).


 2.5 m. x 5 m.

c) 5 corrales individuales (parideras).


 1.67 m. x 5 m.

d) 1 corral de manejo.
 2.5 m. x 5 m.

e) 1 corral de recuperación y tratamientos


 1.67 m. x 5 m.

f) 1 Pasillo central
 20.0 m. x 2.5m

- 30 -
Figura 12. Unidad intensiva de producción de pecarí de collar UMA Rancho
Viveros. En la imagen se muestra: A) Corral de manejo; B) Corral de
reproductores; C) Corral de destete y desarrollo; D) Corral individual (parideras);
E) Pasillo central; F) Tanque de almacenamiento de agua; G) Canal de drenaje; R)
Corral de recuperación; +) Puertas de guillotina; ++) Puertas abatibles

- 31 -
6.4.2 Requerimientos de las instalaciones

La construcción de la unidad de producción intensiva de pecarí de collar se diseño


en base a las características básicas utilizadas en unidades de producción
porcina, por lo cual las paredes son de block, totalmente repelladas con cemento ,
a una altura de 1.40 metros, evitando el riesgo de fugas de ejemplares.

Todos los corrales desembocan al interior de un pasillo central de 2.5


metros de ancho y 20 metros de largo, el cual tiene una entrada delantera y una
trasera de portones metálicos cerradas por cerrojos largos que aseguran tanto
arriba como abajo.

Los pecaríes prefieren los lugares sombreados y frescos, el diseño de las


instalaciones de la unidad de la UMA tiene una cubierta de lamina de zinc de dos
aguas de media sombra sostenida por pilares de metal, brindando el 50% de
sombra a cada corral y el 100% de sombra al pasillo central permitiendo el trabajo
del personal dentro de la Unidad a cualquier hora del día. La parte mas alta del
techo mide 3.10 m y la más baja 2.70.

El piso, lo más recomendable son los de concreto (fácil limpieza y


desinfección) con un espesor de más o menos 10 cm o los alisados de cemento
que se pueden hacer sobre un contrapiso de materiales de relleno. El declive debe
ser del 5-8% para facilitar el drenaje y la limpieza, este hacia el lado externo del
corral donde pasará un canal de drenaje, de esta manera se asegura el control de
la húmedad y facilita la limpieza del corral.

El agua debe ser de buena calidad, por lo cual se recomienda el uso de


bebederos tipo chupón metálico debiendo existir un bebedero por recinto, ubicado
en la esquina del mismo sobre el canal de desagüe para la captura del excedente
de agua, las líneas de entrada de agua deberán estar enterradas asegurando
agua limpia y fresca (ver figura 13), si los ejemplares no están familiarizados
responden satisfactoriamente a beber desde el chupón en un periodo máximo de
un mes, este comportamiento será copiado por los demás ejemplares del grupo y

- 32 -
las crias de la madre; para que este aprendizaje sea adquirido es necesario
instalar los chupones de forma suave permitiendo el goteo de agua por el mismo.
En algunos casos es necesario dejar un recipiente abierto que capte el agua que
gotea durante el período de aprendizaje para que beban en él.

Los comederos deben ser fijos al suelo de concreto a todo lo ancho del corral,
pegado del lado del pasillo, con 20 cm de ancho y 12 cm de alto, esto para permitir
depositar el alimento desde el pasillo central sin necesidad de entrar al corral y
proteger el alimento de la humedad. (Ver figura 14)

Figura 13. Bebedero de chupón

Figura 14. Comederos de cemento

- 33 -
6.5 MANEJO

6.5.1 Contención y manejo de ejemplares

Cualquier cambio de ambiente que exija del animal el reajuste de sus funciones y
características corporales debe ser considerado como un “estrés” (Cannon, 1935;
Levine, 1985).

Este proceso de reajuste temporal de un animal ante un cambio prolongado


del medio se denomina aclimatación o adaptación (Levine, 1985; Broom and
Johnson, 1993; Wan et al., 1994). Un estrés muy intenso puede llegar a
determinar cambios irreversibles sobre las funciones y las características
corporales, sobre las funciones fisiológicas (sobre todo la capacidad de
reproducción del animal), llevándolo hasta la muerte (Broom and Johnson, 1993.
Sin embargo, el pecarí de collar ha mostrado una capacidad de adaptación rápida
a los cambios ambientales. De esta forma, el grado de docilidad mostrado por el
pecarí de collar nos permite ser optimistas a la hora de plantear su incorporación a
sistemas de cría intensiva. Mayor, P. (2004)

Durante el transcurso de los experimentos de este trabajo, se han llevado a


cabo un manejo y manipulación del pecarí de collar mediante contención física y
sin necesidad de utilizar inmovilización con productos químicos (traslados de
animales de unas instalaciones a otras, variaciones en las proporciones de
grupos de edad y de sexo, restricción del espacio disponible aumentando con ello
la densidad de los animales, substitución de los alimentos comunes por otros,
restricción del contacto social y sexual, y mayor contacto con el hombre). Las
observaciones posteriores a cada uno de estos tipos de manejo muestran que las
funciones fisiológicas aparentemente no se vieron afectadas y que el pecarí de
collar mantuvo, después de un periodo de adaptación, un buen rendimiento
reproductivo.

- 34 -
Para el manejo de esta especie en cautiverio se deben tener en cuenta
algunos factores de su comportamiento y ciertas características que influyen en el
éxito de la producción. Algunos de estos aspectos son: (SEMARNAT 2011)

6.5.1.1 Estructura de grupo

Aunque en estado natural pecarí presentan un comportamiento muy gregario, si


desarrollan predisposición de vivir en grupos pequeños cuando se manejan en
corrales, por lo cual se debe tener cuidado con el número de pecaríes que se
agrupen en el corral. La estructura de la UMA para los grupos de reproductores es
de 1:6 (machos:hembras) por recinto; en los corrales de destete y juveniles 10
ejemplares separados por sexo, pudiendo tener hasta 15 destetes, reduciendo el
número de estos por recinto en base al crecimiento de los mismo.

6.5.1.2 Comportamiento social

El pecarí de collar es una animal gregario que mantiene una jerarquía muy
marcada basada la identificación por olor. Una conducta de bienestar, es frotar la
cabeza sobre la grupa del compañero donde se encuentran las glándulas de
almizcle, esta acción tiene una función social, pues de esta manera se impregnan
del aroma entre los integrantes de la manada. También frotan la glándula de
almizcle en troncos o piedras, para marcar con su aroma el territorio. Los pecaríes
se comunican a través del olfato y oído, su visión es defectuosa, a veces no logran
percibir objetos cercanos y pueden ser sorprendidos a corta distancia.

Ocurren encuentros amistosos o de reconocimiento entre pecaríes, las


conductas que más se ven son: contacto nariz con nariz, contacto nariz ha
costado, contacto nariz a glándula de almizcle; frotamiento entre cuello y nariz,
frotamiento entre cabeza y glándula de almizcle y olfateo de genitales. En
ocasiones hay peleas entre estos animales, pocas veces estas peleas causan la
muerte en alguno de ellos, hacen gruñidos de alerta y acercan el hocico abierto
mostrando los colmillos a la cabeza del compañero, y a veces lanzan mordidas;
estas conductas son el resultado del cambio en la jerarquía social de la manada,

- 35 -
donde las hembras o machos dominantes ejecutan las acciones de agresión y los
subordinados evitan la pelea, o si la inician no las terminan porque huyen. En
cautiverio la hembra o el macho dominante es seguido por los subordinados
formando una columna, uno a atrás del otro.

Aquellos animales ajenos al grupo o que por alguna razón hayan perdido el
olor característico del grupo serán rechazados y desplazados del mismo, en
sistemas intensivos por la reducción del espacio el resultado de la reintroducción
inmediata de un ejemplar sin realizar un manejo correcto, generalmente tiene
consecuencias de graves a letales.

6.5.1.3 Comportamiento sexual.

Una característica favorable para la producción de esta especie es su


promiscuidad, es decir que cualquier hembra puede aparearse con cualquier
macho, sin olvidar que existe un macho dominante que siempre se aparea
primero.

6.5.1.4 Interacción adulto joven

Para la cría en cautiverio es importante que los animales adquieran rápidamente


autonomía y que presenten un crecimiento precoz. El pecarí desde el momento en
que nacen hasta el primer mes depende completamente de la alimentación y
protección de la madre ya que los demás animales del grupo no reconocen a la
cría como del mismo durante los primeros días de vida, y si tienen posibilidades
las matarán. La mortalidad neonatal es la principal causa de muerte observada en
los criaderos intensivos, llegando a un valor del 33.3%. Las causas principales se
derivan del comportamiento materno-filial. Así que en cautiverio deben estar solo
con la madre evitando el contacto directo de otros individuos del grupo.

- 36 -
6.5.1.5 Edad y sexo

El número de animales mantenidos por área determinada varía dependiendo de la


estructuración del grupo (crías, jóvenes o adultos), pudiendo en experiencia
particular de la UMA, mantener hasta 10 pecaríes adultos en 25 m2. Esto es
posible cuando el grupo está conformado por animales de tallas similares, ya que
es necesario que se puedan defender de cualquiera del grupo.

6.5.2 Práctica para la movilidad de ejemplares entre grupos familiares


(técnica de barullo)

Esta técnica es necesaria para la incorporación de un nuevo integrante al grupo,


esta es aplicada en los casos de regreso de la hembra al corral de reproducción
separadas para su parto, la incorporación de nuevas hembras de remplazo, la
formación de nuevos grupos familiares o introducción de nuevos sementales.
Consiste en cambiar el ambiente, lo cual causa estrés. Esto se realiza con el fin de
evitar peleas y posibles muertes por competencia o rechazo del nuevo integrante.

Se selecciona el ejemplar a introducir en el corral familiar y por arreo se


separa, introduciendo tanto al ejemplar seleccionado como el grupo al cual se
pretende incorporar, cerrando el acceso de los corrales de origen evitando el
regreso a los mismos, todos los ejemplares en el pasillo se dirigirán al extremo
opuesto de la presencia del manejador mismo comportamiento generará que los
ejemplares se mezclen entre sí, sin importar que sean de diferentes grupos y
tengan olores diferentes, ya realizada esta acción de mezcla de individuos se
procede a dejarlos 24 horas en el pasillo central o en un corral ajeno todos los
ejemplares mezclados; de esta manera se pueden realizar movimientos de
ejemplares entre grupos o corrales evitando el rechazo y/o muerte por agresión.

En caso del rechazo de estos nuevos integrantes por parte del grupo en un
lapso de 2 a 5 días, es necesario separarlos e incorporar a un nuevo grupo.

- 37 -
c)

a)

b)

Figura 15. Grupo de pecarí saliendo Figura 16. Pecarí seleccionado para
por la puerta de guillotina. En la incorporar a un grupo nuevo. En la
imagen se observa a) arreador imagen se muestra c) la puerta de
abriendo puerta de guillotina; b) guillotina de acceso al pasillo; vista
ejemplares saliendo del corral. dentro del corral.

d)

Figura 17.Nuevo ejemplar de pecarí mezclado en el grupo seleccionado. En la


figura se observa, d) los ejemplares a la defensiva en el fondo del pasillo por la
presencia del arreador.

- 38 -
6.5.3 Manejo genético

En términos zootécnicos la consanguinidad es considerada por muchos expertos


un arma de doble filo, tanto por su beneficio como por sus efectos negativos. Es
benéfico para fijar caracteres deseables y detectar genes letales en el semental.
Para evitar problemas de consanguinidad es importante seguir las siguientes
normas: Identificación de los ejemplares mediante un sistema de marcaje
estandarizado, llevar registro detallado de cruzas, rotación de sementales,
separación rápida post-destete de hembras y machos, mantenimiento óptimo de
cercas y rotación adecuada de corrales.

6.5.4 Registros

En la UMA se debe rigorosamente manejar un sistema de identificación, el


cual se aplica en los animales juveniles a la hora del destete y en el cual nos
regiremos para llevar el control individual de cada animal, existen muchos tipos de
identificación sin embargo en la UMA Rancho Viveros, se selecciono por la
facilidad de reposición o modificación el arete de botón amarillo de uso ovino, con
la desventaja que este tiende a ensuciarse y dificultar su lectura.

A) B) C)

Figura 18. Material para Figura 19. Pecarí aretado. En la


identificación. En la figura se muestra. figura se observa el arete colocado
A) Pinzas de aretado; B) Aretes para en la oreja de un pecarí de 6 meses
identificación; C) libreta de registros de edad.

- 39 -
Cuadro 7. Formato historia clínica y registro de alta del ejemplar ingresado o en
tratamiento.
Alta No. Identificación:_________________

Arete padre:____________ Fecha de nacimiento:______________


Aretemadre:____________ Fecha de destete:_________________
Corral padres:__________ Sexo:___________

DX observaciones Actividad o Próxima


Talla-Peso

Corral No.

tratamiento actividad
Estrés
Fecha

(1-5)
C.C.

Periodo observación:
Fecha salida:

6.5.4.1 Cuarentena

Todo ejemplar adquirido deberá ser sujeto invariablemente a revisión médico-


veterinaria obteniendo su historia clínica, contar con su registro en base al
diagnostico por observación.

Para este caso no se propone el uso de cuarentena total a ningún ejemplar


ya que no se cuenta con las instalaciones para dicha actividad, pero aquellos
ejemplares ajenos a las UMA se debe separar permaneciendo en el área de
recuperación individual por un periodo mínimo de 15 días, para detectar posibles
enfermedades y lograr su adaptación al encierro; durante ese periodo, se
suministrará agua constante y dieta diariamente. Considerando que todo animal
entra en estrés por el encierro; es importante eliminarse cualquier otro factor que
pueda contribuir a este estado fisiológico.

- 40 -
6.5.4.2 Manejo de reproductores

Si se observa monta efectiva del macho hacia alguna hembra, o se diagnostica la


gestación por método observacional, es necesario anotarlo en el registro, (ver
cuadro 8 y 9).

Cuadro 8. Formato de registro individual del vientre.

Seguimiento individual de
vientres
No. arete:____________
Arete padre:_______________ Fecha de nacimiento:________________
Arete madre:_______________ Fecha de destete:___________________
Corral padres:______________ Sexo:___________
____________
Crías (M : H)
DOG (+ ó -)
Talla-Peso
Corral No.
Fecha

Arete Observaciones actividad Próxima


Edad

C.C.

semental o tratamiento actividad

- 41 -
Cuadro 9. Formato de registro individual del semental.

Seguimiento individual
del Semental
No. arete:_______________
Arete Fecha de nacimiento:______________
padre:_______________
Arete Fecha de destete:_________________
madre:_______________
Corral Sexo:___________
padres:______________ ____________
de Observaciones Actividad Próxima
hembras O actividad
Fecha

Corral
Edad

Talla-
Peso

tratamiento
C.C.

No.

No.

Fin zootécnico Reproducción ( ) Finalización ( )


Fecha:

6.5.4.3 Crías

Las crías permanecerán juntas con la madre hasta el destete. Se propone el


formato de registro de crías al nacer para la captura de la información, (ver cuadro
10). En contraposición de lo propuesto por SEMARNAT, 2011 donde identifican a
la cría en los primeros días de vida, y con la justificante de evitar el estrés en la
cría debido al manejo y marcaje después haber sido separada de la madre; se
propone que este no deberá realizarse, si no hasta el momento del destete
evitando así someter a estrés tanto a la madre como a la cría, y evitar con esta
acción el riesgo de agresión o rechazo a la cría.

- 42 -
Figura 20. Hembra con crías de 2 semanas de edad.

Cuadro 10. Formato individual de registro de la cría y seguimiento de su desarrollo


hasta el final de la etapa juvenil.

Seguimiento Destete - Juvenil No. Identificación:_________________

Arete padre:_______________ Fecha de nacimiento:______________


Arete madre:_______________ Fecha de destete:_________________
Corral padres:______________ Sexo:___________

Fecha Edad C.C. Corral Actividad o tratamiento Próxima actividad


Talla- No.
Peso

Fecha: Reproducción ( ) Finalización ( )


Autorización de aprovechamiento
( Si ) ( No ) Aprovechamiento:.____________________

- 43 -
La identificación de las crías, la generación a la que pertenecen y quiénes
son los padres; permitirá reconocer a cada ejemplar y planear de manera óptima
el manejo de reproductores (manejo genético) y evitar al máximo problemas de
consanguinidad. Una alternativa es procurar el intercambio de pies de cría con
otras UMA.

Figura 21. Corral de hembras juveniles 8-10 meses de edad.

6.5.4.4 Juveniles

Al cumplir 3 o 4 meses que es cuando se efectúa el destete, ya se consideran


juveniles, los cuales, serán separados de la madre y depositados en otro corral
para continuar con su crecimiento, (ver cuadro 10) para lo cual es recomendable
mantener registros como su edad, talla y peso. Esta etapa termina cuando los
ejemplares cumplen 11 meses.

- 44 -
6.5.4.5 Bajas

En la UMA se presentarán eventualmente bajas en la piara de pecaríes; las


causas pueden ser por intercambio, venta, liberación (cuadro 11) y por muerte
para la captura de la información de la necropsia en cualquier caso es necesario
anotar en el registro (ver cuadro 12).

Cuadro 11. Formato de bajas.


Formato Baja

No. arete:____________
Arete padre:_______________ Fecha de nacimiento:_______________
Arete madre:_______________ Fecha de destete:__________________
Corral No:______________ Sexo:___________

Causa de la baja_______________________________________________
(indicar si es por intercambio, autoconsumo, venta, liberación o muerte):
Destino: ______________________________________________________
Si fue donado o por intercambio anotar los datos de UMA y fecha; si fue por
liberación anotar la ubicación del lugar, incluyendo coordenadas y fecha.

Cuadro 12. Formato de registro de necropsia.

No. arete:
Edad: ___________________ Sexo:
Inspección externa:
Inspección Interna-Cavidades:
Aparato Respiratorio:
Sistema Cardiovascular:
Aparato Digestivo:
Sistema Linforeticular:
Sistema Endocrino:
Aparato Urinario
Aparato Reproductor
Sistema Nervioso
Sistema Músculo esquelético
Diagnóstico Presuntivo :_________________________________
Muestras y laboratorio:___________________________________
Diagnostico:________________________________
Nombre del Firma del Fecha: Hora:
Responsable: Responsable:

- 45 -
6.6 TECNOLOGÍA BÁSICA PARA LA CONTENCIÓN FISICA DEL
PECARÍ DE COLLAR, PROPUESTA UMA RANCHO VIVEROS.

Se plantean técnicas de manejo aplicadas en la UMA que han llevado al éxito en


la producción, como el uso de técnicas que han llevado a triplicar el número de
animales en la UMA en tres años de producción, para lo cual se trabaja con un
sistema de producción intensivo con 78 ejemplares de diferentes etapas
fisiológicas, así como el uso correcto de una manga de manejo con una prensa
individual que facilita el manejo de los animales permitiendo a una sola persona
manejar varios animales de forma segura y rápida; se establecen los criterios de
distribución de los animales en la unidad de manejo, estableciéndose grupos
familiares en reproducción, animales gestantes, paridas, destetes, desarrollo y
permitiendo opciones de modificación de acuerdo al criterio del técnico a cargo.

El enfoque de este manual está dirigido hacia productores y técnicos, para


lo cual se establecen actividades necesarias que pueden ser realizada y
modificadas por ellos aunado a eso, que sea una actividad técnica realizada por el
productor, que no requiera de la supervisión obligada de un médico veterinario;
para la realización de estas actividades, se requiere como premisa: a) preservar la
seguridad de los manejadores y quienes intervengan en ello; b) asegurar la
integridad física de los ejemplares; c) asegurar el éxito del objetivo a cumplir
(contención física).

El manejo de ejemplares sin una técnica segura de contención, pone en


riesgo la seguridad del personal, por lo cual este trabajo se propone como una
premisa de carácter obligatorio en todas aquellas Unidades de producción (UMA)
intensivas. Esta propuesta permite la hipoquinesis (limitación de los movimientos
voluntarios) del pecarí de collar para su manejo, utilizando solo la contención física
por parte de los productores, dejando el uso de contención química estrictamente
bajo supervisión del médico veterinario a cargo.

- 46 -
6.6.1 CONTENCIÓN FÍSICA

En análisis y como requerimiento necesario para la realización del manejo, es


necesario garantizar la seguridad de los manejadores. Un manejo invasivo de la
especie solo se puede lograr mediante la inmovilización de los ejemplares.
SEMARNAT, 2011 propone, La contención física, mediante el uso de una manga
de madera que mide 1 m de alto, 1.20 m de largo y 60 cm de ancho, con puertas
levadizas en cada uno de los extremos. En modificación de lo antes descrito por
SEMARNAT, se propone especificaciones metodológicas para el manejo eficaz y
seguro de la especie, mediante las siguientes prácticas realizadas en la UMA
Rancho Viveros.

En base a las experiencias logradas en la UMA Rancho Viveros, propone


como un método seguro y eficiente el uso de contención física en el manejo del
pecarí de collar, mediante la aplicación de la técnica de arreo, manga, prensa y
cajones. Con esto, se pretende realizar las actividades necesarias de hipoquinesis
que permitan la aplicación de marcajes, medicamentos, curaciones, selección de
ejemplares, etc., de manera manual.

Para una adecuada aplicación de este método, se sugiere el empleo de


mínimo de dos productores capacitados.

6.6.2 APLICACIÓN DE LA MANGA PARA EL ADECUADO MANEJO DEL


PECARÍ DE COLLAR BAJO SISTEMA INTENSIVO (UNIDAD DE
PRODUCCIÓN).

Pasos:
1. Determinación de actividad a realizar (curación, marcaje, etc.)
2. Selección de los ejemplares o grupos sujetos a manejo (edad, sexo, etapa
productiva, etc.)
3. Ubicación del corral a manejar dentro de la UMA (ver figura 12).

- 47 -
Nota: Uno de los errores más comunes es introducir más de un grupo familiar
al mismo tiempo, lo que generará peleas durante el manejo supervisión del
buen funcionamiento de material y equipo (manga, puertas, cajones,
instrumental, etc.)
.

Figura 22. Corral de manejo de pecarí de collar UMA Rancho Viveros. En la


imagen se muestra; A1) Área de trabajo; A2) Corral de abarrotamiento; A3) Manga
de manejo; A4) Cajón prensa; A5) Manga de salida; *) Puertas de guillotina.

4. Arreos:

a) Se abre la puerta, tanto del corral seleccionado (reproductores, crecimiento,


individuales), como la del corral de manejo.

b) Se estimula el arreo de los ejemplares hacia el pacillo central bloqueando


nuevamente la entrada a este, en cuanto salgan en su totalidad o el
ejemplar a trabajar.

c) Se estimula el arreo de los ejemplares hacia el corral de manejo,


bloqueando la salida de este, en cuanto entren en su totalidad o el ejemplar
a trabajar.

- 48 -
Nota: En el caso de quedar ejemplares en el pasillo central invertir el proceso del
paso (b), asegurando el desalojo total del mismo, con aseguramiento de las
puertas, permitiendo de esta manera la estancia segura de personal en esta área.

d) Ya dentro del corral de manejo, se estimula el arreo de los ejemplares del


área de trabajo (A1) hacia el corral de abarrotamiento (A2), bloqueando la
salida de este, en cuanto entren en su totalidad, asegurando que el área A1
quede vacía y las puertas cerradas y aseguradas. Cuando los animales
entren al corral de manejo buscarán una esquina del mismo y se colocarán
a la defensiva, (el estimulo debe de ejercerse desde el lado contrario del la
puerta de la manga (*A3). Un ejemplar calmado es más fácil de manejar
que uno exaltado. Para los animales muy estresados es necesario dejarlos
a que reconozcan el corral y se tranquilicen; para que un animal exaltado se
calme toma de 20 a 30 minutos. Ya en el corral de abarrotamiento (espera),
se abre la puerta de la manga (*A3). Por comportamiento los ejemplares al
recibir estimulo es buscar una puerta de escape, se recomienda solo dejar
pasar 1 o 2 a la vez ya que la aglomeración y el estrés son factores
predisponentes a la asfixia.

Nota: Cuando el corral de abarrotamiento se usa perfectamente, los animales se


acostumbran a entrar a la manga de manera autónoma.

e) Estimular el arreo hacia la manga (A3), en donde un manejador realizará la


actividad de apertura y bloqueo de la puerta de guillotina (*A3) el manejador
se coloca arriba de la manga de manejo (A3), y mediante observación y
administración de la puerta de guillotina permite la entrada solamente un
ejemplar a la vez.

5. Contar con el equipo e insumos necesarios para la actividad a realizarse.

6. Se coloca el cajón prensa en el espacio correspondiente, se abren las


puertas de acceso (guillotina *A3-*A4), se estimula el arreo de la manga de
manejo hacia la prensa.

- 49 -
Nota: La puerta de A5 debe ser de barrotes (ver figura 23), donde permita la
entrada de luz para que el animal avance en busca de escape e ingrese a la
prensa.

7. Al ingresar el ejemplar al cajón prensa, se cierran y aseguran las puertas de


guillotina de este.
Nota: Supervisar que solo entre un animal.

Figura 23. Cajón prensa. En la figura se muestra *A5) puerta de


barrotes;*)puertas de guillotina.

8. Una vez dentro del cajón prensa, de manera secuencial el manejador tirará
de las cuerdas (tensores figura 26), iniciando con las de la parte frontal del
animal en el siguiente orden (t1, t2, t3 y t4) hasta ejercer una presión firme
con la pared movible, de tal manera que limite la movilidad de ejemplar
(como defensa los animales tienden a colocarse en de cubito esternal).

9. Consecutivamente se tira de los extremos de la red (pasando por la


apertura i) asegurando de que el animal quede totalmente cubierto por ella,
(de hocico a cola, inmovilizándolo totalmente) y permitiendo abrir la puerta
anterior abatible (z) para realizar cualquier intervención (ver figura 26).

- 50 -
Figura 24. Pecarí aretado técnica de contención para el marcaje (arete).

Figura 25. Pecarí de collar inmovilizado en cajón prensa.

- 51 -
10. Posteriormente a cualquier actividad realizada al ejemplar, se cierra y
asegura la puerta abatible, se liberan los extremos de la red y
posteriormente se liberan los tensores (t1, t2, t3 y t4).

Nota: Ya inmovilizado el ejemplar el manejo debe hacerse lo más rápido posible


evitando seguir estresándolo. No es recomendable mantener al ejemplar más de
10 minutos inmovilizado.

11. Como fase final se abren las puertas de la manga hacia el pasillo central,
verificando que esté libre de personal, dirigiendo el ejemplar al corral
correspondiente revertiendo el paso 5b.

12. En caso de solo requerir el traslado de los ejemplares se coloca el cajón


para al transporte (A6) en lugar del cajón prensa (A4).

6.6.2.1 Infraestructura y equipo para contención física.

En todos los casos el manejo genera factores de estrés, y entre más tiempo se
presente el factor estresante mayor será el grado de este, para lo cual se trata de
reducir lo más posible los factores estresantes; en el traslado esto mediante el uso
de un cajón obscuro con buena ventilación, de madera con estructura de ángulo
metálico, en dimensiones de 80 cm de largo por 30 cm de ancho por 50 cm de
alto, con dos puertas tipo guillotina.

Para un correcto movimiento controlado de los animales, el corral de manejo


está integrado por 5 partes:

Área de trabajo (A1): Consiste en un corral de 2.5 X 2.5 metros con una
barda perimetral de 1.60 m de alto con piso de concreto de 10 cm de espesor, el
cual tiene una puerta de acceso de 50 cm de ancho.

 Nota: Se sugiere que el corral de manejo se encuentre en una esquina


de las instalaciones, para que la puerta de acceso a este se ubique en
un ángulo del pasillo central. Las características de esta, pueden ser
aumentadas o reducidas de acuerdo a las condiciones de la UMA.
- 52 -
Área de abarrotamiento (A2) también conocida como área de espera:
consiste en un corral de 2.5 X 2.5 metros con una barda perimetral de 1.60 m de
alto con piso de cemento, el cual presenta dos puertas tipo guillotina a los
extremos de la pared que divide el área de manejo y el área de abarrotamiento,
con dimensiones de 30 cm de ancho por 50 de alto.

Manga de manejo (A3 y A5): cuenta con las siguientes características de


forma y tamaño, 2 partes fijas sostenidas a la pared del corral de manejo; el área
A3 con características de 1.60m de largo, 50 cm de alto, cubierta y 30 cm de
ancho con dos puertas de lámina metálica tipo guillotina. Y el área A5 de 30 cm de
largo, 50cm de alto y 30 cm de ancho con una puerta de barrotes metálica tipo
guillotina*A5; Estas dejan un espacio entre ellas de 80 cm de largo, donde se
colocará el cajón de contención (prensa) o el cajón de traslado según sea
necesario.

Cajón tipo prensa (A4): Es una cajón de compresión para la inmovilización


de los ejemplares, con dimensiones, 80 cm de largo, 50 cm de alto y 30 cm de
ancho, con una estructura de ángulo metálico forrada de madera en techo y base,
debe tener 2 puertas metálicas tipo guillotina; la cara proximal al operador está
formada por una hoja fija (y) y una abatible (z) con una ranura intermedia (i) de 2
cm de ancho, La cara distal al operador es una pared movible (pm) la cual corre a
través de 4 aros metálicos montados en rieles a cada esquina del cajón. De la
base de la pared movible está sujeta una red de seda alquitranada calibre 26 de 2”
luz (j), la cual tiene una dimensión de 0.8 X 1 m., cuyo extremo libre atraviesa por
la apertura (i). (ver figura 26).

- 53 -
Figura 26. Descripción del cajón prensa. *A4) Puerta de guillotina; z) Puerta
abatible; y) Hoja fija; i) Apertura para el paso de la red; j) Red; t1) Cuerda tensora
superior izquierda; t2) Cuerda tensora inferior Izquierda; t3) Cuerda tensora
superior derecha; t4) Cuerda tensora inferior derecha; Pm) Pared movible.

Figura 27. Descripción de hipoquinesis, en cajón trampa. En la imagen se muestra


el cajón prensa donde se marca con rojo la red; 1) Cajón prensa preparado antes
de la técnica; 2) Cajón trampa aplicando la técnica de presión, donde se observa
el movimiento de la pared movible y el efecto de la red haciendo que el animal se
eche.
- 54 -
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- 59 -
ANEXO 1

Proyección estimada de gastos del sistema de producción intensiva de pecarí de


collar en al UMA Rancho Viveros.

Costo
diario Costo mensual Costo anual

Limpieza
1 trabajador de
Monitoreo planta $ 150.00 $ 4,500.00 $ 54,000.00

Alimentación 80 ejemplares $ 200.00 $ 6,000.00 $ 72,000.00

Tratamiento y MVZ consulta


control y
veterinario medicamento $ 1,000.00 $ 12,000.00

Total $ 138,000.00

Gasto anual /
animal $ 1,725.00

Hembra : (1.5 partos por


2.5 crias/
año)(1.5 cría por parto al Costo cría
destete) año destete $ 767.00

Costo
produccion $ 2,491.00

- 60 -

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