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Barriers and Conditions for the Involvement of Private Capital and Enterprise in Water Supply and
Sanitation in Latin America and Africa: Seeking Economic, Social, and Environmental Sustainability
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All content following this page was uploaded by Jose Esteban Castro on 16 December 2016.
Comité Editorial
Luis H. Antezana J., Carlos Crespo, Manuel De La Fuente, Fernando Mayorga, María Esther
Pozo, Alejandra Ramírez y Tania Ricaldi.
Informes y suscripciones
CESU-UMSS
Centro de Estudios Superiores Universitarios
Universidad Mayor de San Simón
…Caripuyo torrecita,
Colcha mayu qawarisqa
warmita munana qasqa,
sonqonchejta tapurispa
(Bonny Alberto Teran)
1. INTRODUCCIÓN
Existe el Norte de Potosí? Cuando hicieron esta pregunta a
un señor potosino “de cepa”, la pregunta le pareció ridícula, pues
para él “Potosí solo hay uno solo”. Pero está ahí, el “nortepotosí”
como se conoce entre los y las provenientes de aquella región. Los
estudios lo han evidenciado y las empresas turísticas lo han
folklorizado. Pero, la complejidad de las prácticas e interacciones
sociales y culturales han estado directamente conectadas con el
tipo de paisaje, piso bioclimático en el que se han ido
estructurando una diversidad de culturas locales post 52’, momento
fundacional territorialmente pues supuso el inicio del abandono
masivo de los pueblos nortepotosinos.
La diferencia entre pueblerinos y comunidades en el Norte
de Potosí es un tema que aún debe ser profundizado1; existe una
cultura pueblerina nortepotosina, con sus particularismos y
diferencias frente a las comunidades y ayllus, caracterizada por
ser cholo mestiza. El mestizaje de los pueblos nortepotosinos se
observa en su música, y su expresión por excelencia, el huayño.
En la década del 60’ el huayño nortepotosino estaba
racialmente estigmatizado en Cochabamba; los nortepotosinos de
1
Para el caso de Toro Toro, Fernando Galindo ha realizado el estudio “Líderes, emprendedores y
desarrollo en el municipio de Torotoro, Potosí, 1995-2012” (2013).
12 Decursos Nº 27-28
D: Su papa tocaba?
BAT: Don Exaltación, un gran charanguista, famoso en el
pueblo, mentado. El charango lo tocaba pero a la perfección,
entonces tal la inquietud del niño, escuchaba tocar a mi padre
con tanta armonía, con tanta perfección y con tanto gusto, y a las
ausencias de mi padre empecé a hurguetear el charango a
hurtadillas; y de a poco se me vino los acordes, con mucha
facilidad. Prácticamente en mi vida yo no he tenido un maestro,
ni quien me diga “esto así se hace”, no!!, solo el poder auditivo,
el oído.
D: Usted, ha aprendido a solfear?
BAT: Más después, para compaginar con la música
realmente, lo mío fue puro oído autodidáctica. “Quien le ha
enseñado? dicen, no, no me ha enseñado nadie, solo escuché y
tuve que trasladar esa cualidad auditiva al charango, experimentar
alguna nota, algún huayño y, como quien dice, “bastó la primera
patada” y ya está, las cosas se venían de por sí; esa experiencia
fue muy hermosa, porque hoy en día tocar el charango es en
academias, en escuelas, pero yo no. Otro caso muy importante,
nació mi hermanito menor, Clímaco, y claro, bebito él, era muy
llorón el niño, y mi madre me decía “anda a rasgárselo el
charango”, rasgaba y el niño se callaba con el ruido del charango,
pero la intensión ya no era hacer callar al niño, ya era, investigar,
entonces hacer callar al niño era una excusa de segundo plano,
por tanto lo importante era ya practicar a fondo. Entonces era
otra forma que me ayudó a seguir practicando el charango, yo le
rasgaba y él se callaba, se dormía y después de dormir, yo seguía
“puliendo el charango”. De modo que a los 7 años tocaba en las
veladas, horas cívicas de la escuela, haciendo ganar premios a la
escuela, y mucha gente me hacía tocar pagándome dulces,
naranjas, “chiquito tocá, dice que sabes tocar”, “si”, y me daban
caramelos, naranjas... Esa fue la experiencia más satisfactoria que
yo pude tener.
D: Y, cuál fue la reacción de su padre cuando vio que estaba
intentando con el charango?
18 Decursos Nº 27-28
hemos grabado mucho. Con Lauro creo que hemos llegado hasta
el año 97’.
LA ESPOSA, DOÑA TERESA, INTERVIENE. La gente estaba
con hambre de oír a él, estaban esperando su retorno y lo han
presentado en el teatro Ulises Hermosa.
BAT: Había comentarios de que había muerto, que me
habían metido a la cárcel por tráfico de drogas, llego y me da un
empujón Lauro, y otra vez la reaparición, hizo activar las neuronas
y Dios mediante seguimos hasta ahora pujando con el arte.
D: Como ha influido la migración y el hecho de ser migrante en
su música? Y haber llegado a Cochabamba?
BAT: Ha influido positivamente, la relocalización ha hecho
que mucha gente nuestra, norte potosina, se haya diseminado en
todas partes de Bolivia y más a Cochabamba; entonces al actuar
en diferentes actos festivos, siempre he encontrado norte
potosinos, gente minera, y esa gente lleva en el alma sus
costumbres, sus tradiciones, sus nostalgias; de ese modo ha
servido como un nexo de multiplicación, me ha servido como
una forma de garantía, más confianza. Después, he ido
detectando que no solo los potosinos, ni orureños se deleitan con
esta música, estoy muy seguro que los cochabambinos quieren
mucho este género musical. Por el lado de Ayopaya,
Independencia, Morochata y toda esa zona cantan esta música;
todos los años voy a la feria del guarapo, a Capinota, y no hay ni
una casa que no tengan un cassette o un cd de Bonny Alberto, y
eso me lo dice gente mayor.
D: Capinota es en realidad el territorio de Los Kjarkas, no?
BAT: Pero también han traído costumbres y tradiciones
norte potosinas, porque los padres de Los K’arkas son norte
potosinos; ellos han tenido la suerte de nacer en Capinota
(Cochabamba), el finado, el mayor, Wilson Hermosa, ha nacido
en Acacio y el resto en Cochabamba. Entonces también tienen
cierta sangre que jala a los Kjarkas, raíces norte potosinas, y
cuando nos encontramos siempre dialogamos un poquito de
nuestras cosas potosinas.
Entrevista a Bonny Alberto Teran 31
D: Entonces, no tiene nada que ver con algo místico, porque está
asociada con un ritual, no?
BAT: Claro que no perdamos de vista que las energías están
sustentadas en la naturaleza, y en eso fuertemente se arrima la
gente que ha probado; digamos, nos arrimamos a un árbol, da
energía, nos revolcamos en la arena a la orilla del río, otra forma
de energía, nos revolcamos en un pastizal, otra forma de energía,
si caminamos descalzos encima de una piedra bien caliente, otra
forma de energía, entonces la naturaleza tiene esas formas de
energía, pero no como para definir cierta característica
profesional, o la calidad de la interpretación.
D: Que importancia ha tenido en su obra cantar en quechua?
BAT: El quechua es nuestra comunicación cotidiana en mi
pueblo, lo manejan muy bien, el quechua potosino no el
cochabambino. El quechua potosino es bien fricadito, bien
agradable, cantadito, bien definido, parece que tuviera una
geometría, en eso ha influido mi madre, hablaba muy bien el
quechua, y mi papa también.
D: En su casa se hablaba quechua?
BAT: Sí, se hablaba, el castellano se ha perfeccionado en
la escuela y en el colegio, y ni negar que en la casa hablaban el
castellano, pero en la cuna de Bonny Alberto ha tenido mucha
preponderancia el quechua, de modo que yo no podía negar a
hacer versos en quechua, el uso y costumbre de mi pueblo no
podía negar; en ciertas actividades festivas siempre se maneja el
quechua, así sean los jóvenes estudiantes digamos, los que han
llegado de la ciudad, siempre están chacoteando en su quechua
y es más agradable y más aceptable; y no podemos decir que
para enamorar hay que siempre hablar en castellano, mentira,
porque se puede enamorar en quechua, ¡No es cierto!, las cosas
románticas en el huayño de Bonny Alberto Terán siempre han
necesitado del quechua.
D: Cuál es la importancia del amor en su música, algo recurrente
en sus versos, no?
Entrevista a Bonny Alberto Teran 37
DONATA
Kawaychaj machaykullanitaj,
ripuytapis konkapullanitaj,
mayllapitaj qasanqui Donata,
Ay imanasajtaj, Cholita caripuyeñita
Fotos
Homenaje
BEN KOHL
Manuel De La Fuente
Director General CESU-UMSS
Integración y Democratización en
América Latina y El Caribe:
cuestiones de la Ecología Política
1. INTRODUCCIÓN
América Latina y el Caribe pasan indudablemente por un
momento excepcional en su historia en relación a las perspectivas
de mayor integración de sus pueblos a través de la profundización
de las relaciones económico-financieras, comerciales, culturales,
de defensa, de infraestructura y, crucialmente, políticas. Es
importante reconocer el carácter apasionante de la experiencia
actual de los países de la región, especialmente, aunque no
solamente en América del Sur. No es necesario excedernos en el
romanticismo ni tampoco ignorar las contradicciones, errores,
obstáculos y peligros, para partir de un hecho difícil de negar
objetivamente: la región enfrenta el Siglo XXI en condiciones
inéditamente favorables a la consolidación de procesos de
integración con grados de autonomía potencialmente importantes.
En el plano institucional no puedo dejar de mencionar como
ejemplos los procesos de integración en América del Sur, con la
consolidación del funcionamiento de algunas esferas de acción
del Mercado Común del Sur (MERCOSUR), incluyendo sus
subregiones, y la creación de la Unión de Naciones Suramericanas
(UNASUR) y a nivel del continente el lanzamiento de la
Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC).
1 Una versión previa fue publicada como: “Apuntes para una ecología política de la
integración en América Latina y el Caribe”, en Anuario de la Red de Investigadores sobre
América Latina y el Caribe, México.
52 Decursos Nº 27-28
2. INTEGRACIÓN CAPITALISTA
Proposición Nº 1. Con independencia de la heterogeneidad
de las tradiciones intelectuales y políticas y de las condiciones
específicas que caracterizan a los distintos países y regiones, la
dinámica central del proceso de integración yace en el avance y
profundización de relaciones capitalistas de producción,
distribución y consumo, y sus correspondientes expresiones
socio-culturales y políticas. La evidencia sugiere que el proceso
de integración está dinamizado fundamentalmente por la
profundización de relaciones capitalistas, tanto sea mediante la
constitución de algunas autonomías emergentes como por la
consolidación y expansión de heteronomías prexistentes.
El análisis del proceso de integración nos invita a plantear
una serie de cuestiones básicas: ¿qué integración? ¿Integración de
qué y de quiénes? ¿Integración para qué y para quiénes?
¿Integración a qué costo? El costo, ¿es un costo para quién? No
pretendo dar respuesta plena a esas preguntas en un breve
capítulo, pero las mismas apuntan a una serie de cuestiones
centrales que no pueden ser soslayadas aun cuando se defienda
una visión positiva, incluso optimista del proceso de integración.
Al menos es importante plantearse estas y otras cuestiones similares
en el marco del necesario debate racional que debe acompañar al
proceso. En ese sentido, por ejemplo, a pesar de la retórica emitida
desde el grupo de países que componen la Alianza Bolivariana
para las Américas (ALBA), la dinámica de la integración regional
es motorizada por el proceso de acumulación capitalista global,
que impone determinaciones incluso a los países de dicha alianza,
que defienden la construcción de un “socialismo del siglo XXI”.
Esto no implica negar los avances de la democracia directa en
Venezuela ni desde luego los logros históricos de Cuba en una serie
de áreas clave para la democratización substantiva de la sociedad
Integración y democratización en América Latina y El Caribe 55
BIBLIOGRAFÍA
Eduardo Gudynas1
1
Centro Latino Americano de Ecología Social (CLAES), Montevideo, Uruguay. Contacto:
egudynas@ambiental.net El autor agradece a Lucía Delbene y Lylieth Varela, del equipo de CLAES,
la revisión de borradores del presente texto.
80 Decursos Nº 27-28
2
Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales: http://www.olca.cl ; véase además el
observatorio sobre conflictos mineros en: http://www.conflictosmineros.net
3
Los ejemplos ofrecidos en el texto resultan del trabajo de campo del autor y del equipo de CLAES,
desde 2005 en Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Perú y Uruguay; en la base de datos de
los observatorios en conflictos ambientales y mineros, y en revisiones de bibliografía y medios de prensa.
82 Decursos Nº 27-28
2. EL CONCEPTO DE CONFLICTO
La muy abreviada enumeración de conflictos frente al
extractivismo sirve para dejar en claro que existe una enorme
diversidad de situaciones. A su vez, los conflictos aparecen bajo
4
Se conformó el Movimiento por un Uruguay Sustentable; véase www.observatorio-minero-del-
uruguay.com/2011/06/por-un-uruguay-sustentable/
5
Disponible en http://www.movimientom4.org
84 Decursos Nº 27-28
6
Defensoría del Pueblo, definición en su glosario en: http://www.defensoria.gob.pe/conflictos-
sociales/glosario.php?pag=2
Conflictos y extractivismos: Conceptos, contenidos y dinamicas 89
7
Véase www.conflictosmineros.net
96 Decursos Nº 27-28
5. HORIZONTES Y CONTENIDOS
En la dinámica de los conflictos frente a los extractivismos
se observan distintos énfasis en los abordajes. En primer lugar, es
apropiado determinar las metas, finalidades u horizontes de los
contendientes en un conflicto. S refiere a cuáles son los objetivos
últimos que se buscan. Es apropiado reconocer al menos dos
finalidades, y que aquí denomino de “anulación” y “coexistencia”.
Las primeras se refieren a conflictos donde el centro de la
oposición está donde al menos un actor colectivo busca impedir
un emprendimiento extractivo, sea su instalación o bien la
clausura de uno en operación. Las segundas describen los
conflictos donde se tolera el emprendimiento extractivo, y los
objetivos están en asegurar cambios que se estiman
imprescindibles, tales como su ubicación, dimensión, intensidad,
etc. En el primero se rechaza el extractivismo, pero en el segundo
se lo acepta, y las oposiciones radican, por ejemplo, en una
zonificación territorial, el control ambiental, etc.
Los contenidos en la disputa, sea las que apuntan a la
coexistencia o hacia la anulación, son diversos, tal como se ha
señalado antes. Esto hace posible apelar a diversos criterios de
clasificación y análisis, como se enumeraron sumariamente en la
sección anterior. Pero es posible seguir otro criterio de clasificación,
en cierta medida más general, y que agrupa varias cuestiones.
Siguiendo esa postura, aquí se clasifican los conflictos ante los
8
Participan CEDLA (Bolivia), Fundación Jubileo (Bolivia), IBASE (Brasil), TERRAM (Chile), Foro
Nacional Colombia, CDES (Ecuador), Grupo FARO (Ecuador), FUNDAR (México), Grupo
Propuesta Ciudadana (Perú), DAR (Perú), Cooperacción (Perú); promovida por Revenue Watch.
9
Véase www.minesandcommunities.org
10
Véase www.oilwatchsudamerica.org
Conflictos y extractivismos: Conceptos, contenidos y dinamicas 97
Gestión Compensación
Reforma Indemnización
Reconocimiento
Legitimación
6. UMBRALES
Al considerar la dinámica de los conflictos surge
inmediatamente la particularidad que frente a emprendimientos
102 Decursos Nº 27-28
IMPOSIBLE
POSIBLE
CONFLICTO CONFLICTO
1 2
7. EL EMPUJE MERCANTIL
La situación actual sobre la conflictividad en los
extractivismos se ha vuelto todavía muy compleja. Durante un
buen tiempo, los conflictos alrededor del extractivismos
estuvieron dominados por actores que se oponían y resistían
emprendimientos. Pero más recientemente, han surgido conflictos
donde se organizan actores locales que desean llevar adelante
sus propios proyectos extractivos o sus disputas buscan el acceso
a compensaciones económicas. Ejemplos de estos son los
conflictos de quienes desean realizar pequeña minería, y que se
enfrentan tanto a otros agrupamientos en sus comunidades
locales, como eventualmente a empresas o el Estado. Esta
situación corresponde, por ejemplo, a algunas cooperativas
mineras bolivianas. Otros casos similares son las disputadas entre
organizaciones de la sociedad civil sobre representación o control
territorial para acceder desde allí a convenciones económicos con
empresas mineras o petroleras.
Un ejemplo de esta situación son los diversos y
superpuestos conflictos en Mallku Khota (Bolivia). La trasnacional
South American Silver, titular de los derechos de explotación (junto
a los de uso de superficie, aguas públicas y privadas, y de paso),
planeaba desarrollar megaminería a cielo abierto. Esto desató la
resistencia de actores locales por el riesgo socioambiental, las
protestas de otros grupos que deseaban realizar ellos mismos la
minería bajo una organización cooperativa, y distintas posturas del
gobierno (véase el detallado informe de Jiménez y Campanini,
2012). La explotación minera, enfocada especialmente en la plata,
generó entonces disputas no sólo con las empresas, sino entre
agrupamientos de la sociedad civil, a su vez articulados con el
gobierno, el que además cayó en actitudes cambiantes.
Consecuentemente, unos llevan adelante un conflicto
esencialmente basado en las compensaciones (quienes reclaman
hacer ellos mismos la minería), con un alto umbral de impactos
aceptables (de donde la cuestión ambiental no está en el centro
de sus reclamos). Otros consideran que los riesgos de ese tipo de
minería, sea transnacional o cooperativizada, son inaceptables, lo
que muestra que su umbral de tolerancia es bajo, y por lo tanto
Conflictos y extractivismos: Conceptos, contenidos y dinamicas 107
11
La CONFENIAE no apoya la explotación del Yasuní, El Comercio, 2 Setiembre, 2013, Quito.
Federación Shuar se suman a la iniciativa de explotar racionalmente el Yasuní, El Ciudadano, 11
setiembre 2013, Quito.
12
Quichuas están divididos por el tema Yasuní, El Comercio, 13 setiembre 2013, Quito -
http://www.elcomercio.com/noticias/Ecuador-Amazonia-Quichuas-divididos-tema-Yasuni-
indigenas-petroleo_0_992300832.html
Conflictos y extractivismos: Conceptos, contenidos y dinamicas 109
BIBLIOGRAFIA
Marc Gavaldà
1 La producción nacional de crudo (69.412 Bbld) declina anualmente debido a la madurez de sus
campos principales operados por Petroperú (antes Occidental) y Pluspetrol en los lotes 8, 8x y 1AB.
Datos de Perupetro 2011.
2 Informes de la administración ya detectaron en 2004 y 2006 que el 99,20% de la población adulta
superaba los valores límites de cadmio en sangre (OSINERG 2004; DIGAAP 2006).
3 6 roturas en el gasoducto de Camisea entre los años 2004 y 2006 causaron el vertido de miles de
barriles y la mortaldad masiva de peces (Lema 2011). En abril de 2012, un nuevo derrame fue
denunciado por el Consejo Machiguenga del Río Urubamba.
Compañías petroleras y pueblos indígenas. Una relación envenenada 119
Lote 88
En el Lote 88 se iniciaron operaciones con la entrada de
Total y Shell en la década de 1980 y se contiunaron en 2003 con
el Consorcio formado por Pluspetrol (Argentina), Hunt Oil (EUA),
SK Energy (Corea), Repsol YPF (España, EEUU), Tecpetrol
(Argentina , Perú) y Sonatrach (Argelia). Existen varios pozos en
operación - San Martín 1 y 3, Cashiari 1, 2, 3 - contectados a través
de ductos y líneas eléctricas a la planta Malvinas (Pluspetrol 2004).
En la ribera del río Urubamba, Malvinas es un complejo
petroquímico de decenas de hectáreas, donde se separa el gas,
licuados de gas y las aguas de formación. Tiene grandes depósitos
de diésel, gasolina, butano, propano, gas natural licuado (GNL),
varias unidades de enfriamiento, quema, piscinas de derrames,
compressores, etc... Además, existen varios edificacios de
hospedaje, un aeropueto con vuelos diarios a Lima y un puerto
fluvial con una intensa actividad de lanchas con destino y regreso
a las poblaciones de Sepahua y Atalaya, donde se está
construyendo un gran puerto y zona de descarga de barcos de
alto tonelaje. Existen planes de ampliar la extensión y capacidad
de la planta de Malvinas para albergar nuevos tanques de
fraccionamiento y almacén de gas, para el tratamiento y posterior
transporte de la nueva producción del lote 57. La capacidad de
Malvinas aumentaría entonces en los próximos años hasta 47.6
Millones de metros cúbicos diarios, para la cual será
imprescindible la construcción de nuevos ductos de nuevos
ductos a la costa (Pluspetrol 2009).
Lote 56
En 2005, Pluspetrol, como líder del consorcio formado por
Hunt Oil, SK Corporation, Sonatrach y Tecpetrol y Repsol YPF
inicia las actividades en el lote 56. Este bloque, un rectángulo
perfecto que afecta a 58,500 hectáreas incluye el territorio de 7
comunidades nativas y el asentamiento rural Shintorini , donde
la compañía ubicó el campamento La Peruanita. La presencia de
reservas de gas en este lote era conocida antaño, pues dos
estructuras hidrocarburíferas, conocidas como Mipaya y Pagoreni
ya fueron exploradas por Shell en 1987 y 1998 respectivamente.
Compañías petroleras y pueblos indígenas. Una relación envenenada 121
4 Repsol (operadora) tiene el 53.84%, mientras que Petrobras el 46.16% . Roberto Díaz, Kinteroni
Project, Peru Field Trip 2010, Repsol YPF, 2010
5 Recopiladas en el libro Leroy, Malerba, coord. Petrobas: Integración o explotación? . Fase/Projeto
Brasil Sustentável e Democrático, Río de Janeiro, 2005
122 Decursos Nº 27-28
6 Radio Amazónica Satipo, “Ashánikas paralizan actividades de Repsol en el Bloque 57, Río Tambo
(07/02/2007)” en Un Ojo en la Repsol Nº 43, 03/2007. http://repsolmata.ourproject.org
124 Decursos Nº 27-28
10 Alerta Amazónica, entrevista a Lily LaTorre, abogada de Earth Rigths International, Lima
(08/07/2012). http://alertamazonica.wordpress.com
128 Decursos Nº 27-28
11 http://servindi.org/pdf/convenio_Aidesep_Petrobras.pdf
12 “Retiran confianza a consejo directivo de AIDESEP y exigen asamblea extraordinaria” http://servindi.org
(01/12/12)
Compañías petroleras y pueblos indígenas. Una relación envenenada 129
15 Alerta Amazónica, entrevista a Alfonso Falla, director de Relaciones Comunitarias de Repsol Perú,
Lima (07/08/2011).
Compañías petroleras y pueblos indígenas. Una relación envenenada 131
16 Barrett inició operaciones en el lote 39. Luego ingresó Repsol YPF asociada con Burlington,
posteriormente con Conoco-Philips, la cual se retiró en 2011. Más tarde se asoció a PetroVietnam
y la compañía india Reliance.
17 Datos de la Sociedad Nacional de Mineria y Peetróleo . http://www.snmpe.org.pe/revista/edicion71/
PDF/Panorama.pdf
18 Ver artículo en: http://www.guardian.co.uk/environment/2009/jul/04/peru-amazon-rainforest-
conservation
Compañías petroleras y pueblos indígenas. Una relación envenenada 133
19 SHELL, Radiogram From: R Petterman Camp Sepahua To: D Sutto Sup Lima Date 09/05/84,
transcrito integralmente en inglés y traducido en Alvarez (2004).
20 Shepard (1999) estima una mortalidad del 42%, basado en entrevistas genealógicas, pero el número
exacto sería superior si se toma en cuenta que en algunos casos familias enteras murieron (Shepard
1999:38, Shinai 2004)
21 Formado por Pluspetrol (operadora), SK, Hunt Oil, Repsol y Tecpetrol. En 2011, el lote 88 producía
443,742.89 miles de pies cúbicos (Mcf ) de gas diarios.
134 Decursos Nº 27-28
4. CONSIDERACIONES FINALES
En portales web y en la prensa escrita abundan los reportes
que describen el difícil contexto que enfrentan las comunidades
nativas de la Amazonía afectadas por las concesiones
hidrocarburíferas. Sea petróleo o gas, las compañías adjudicatarias
de los lotes de exploración y producción gozan de un terreno
legal e institucional propicio para la ejecución de prácticas lesivas
para los pueblos que viven dentro de ellos. Se hace necesario
entonces, un cambio de rumbo urgente en las políticas de
relacionamiento entre las compañías y los pueblos afectados. Para
que ello ocurra, todos los actores deberán modificar su posición
y actitud frente al conflicto ambiental en el que están inmersos.
4.1. Cambiar las reglas de juego
Para empezar, hasta hace poco los pueblos indígenas no
disponían de un marco normativo que garantizara una consulta
previa informada. En este escenario aterrizaron la mayoría de
compañías que ocupan hoy tres cuartas partes de la Amazonía.
Es una extensión demasiado grande, entregada sin preguntar,
cómo para obviar su relevancia. Las consecuencias sociales de
esta injusticia fueron motor de los levantamientos amazónicos
ocurridos en 2008 y 2009, pero si las cosas no cambian, lo serán
de nuevo en el futuro.
En 2012, en Perú se reglamentó la normativa de la nueva
ley sobre Consulta Previa, aunque la redacción final de ésta no
fue aceptada por las organizaciones de los pueblos que harán uso
de ella. Mal comienzo. A pesar de representar un avance
significativo –más que nada, por el vacío legal que existía antes–
está por ver su cumplimiento y sobretodo, qué pasa con los
25 Alerta Amazónica, entrevista a Jackeline Binari, abogada del Consejo Machiguenga del Río
Urubamba, Quillabamba 21/07/2011. http://alertamazonica.wordpress.com
26 Alerta Amazónica, entrevista a P. David Martínez, Misión Dominica de Kirigueti , C.N. Kirigueti,
14/07/2011
136 Decursos Nº 27-28
27 “Según los prestigiosos índices de sostenibilidad Dow Jones Repsol es la petrolera más transparente
y sostenible del mundo”- La compañía fue galardonada en 2011. En http://repsol.com Se puede
contrastar esta afirmación por ejemplo con el informe de 2012 “Repsol en Deuda, Currículum
oculto”, disponible en http://omal.info
138 Decursos Nº 27-28
que sea. Enfocar una economía hacia afuera sería tan peligroso
como desatender las necesidades internas de la población. La
política extractiva de este país representa aún un modelo privado
exportador que limita un mejor desarrollo nacional y significa la
pérdida de soberanía sobre los recursos naturales (Gamboa 2010)
Porque el gas de Camisea, aún siendo quemado o
industrializado en su totalidad en el país - versión repetida por el
gobierno aunque se siga exportando a los mercados globales por
el consorcio Pacific LNG - surgen las dudas si no será esto “pan
para hoy y hambre para mañana”. Para empezar, toda la compleja
infraestructura gasífera (pozos, plantas de almacén y
fraccionamiento, ductos) requiere una millonaria inversión realizada
por consorcios extranjeros y estos no van a desatender sus
expectativas de negocio. Por tanto, es necesario visibilizar que los
millones de dólares invertidos, son deudas que contrae el país con
los consorcios inversionistas.
Habría que comenzar con aplicar una moratoria de nuevas
concesiones e infraestructuras petrolíferas, puesto que no existe
un consenso sobre la necesidad de éstas para el país. Por otro
lado, el uso industrial del gas puede terminar generando
productos necesarios para otras industrias extractivas, como la
minería. Lo cual, no deja de caer en el modelo de exportación de
materias primas con altos costos socio-ambientales y pocos
beneficios, aunque indirectamente. Se ha señalado también la
estrategia de dumping ambiental que ejercen los países ricos para
ubicar refinerías contaminantes en países con bajos estándares
ambientales. Podría ser el caso del gas de Camisea.
Pero más allá de todo eso, teniendo un horizonte de pocos
años de reservas hidrocarburíferas, el país no debería permitirse
demorar más años para iniciar un proceso de transición hacia un
modelo energético y social más justo y sostenible. La tarea sin
duda constituye un gran reto con obvias dificultades. Pasar de
una matriz basada en combustibles fósiles contaminantes, con la
producción y transporte concentrado en consorcios extranjeros a
otro modelo nacional basado en fuentes de energía limpia,
descentralizada y de control social no es irrelevante. La labor
Compañías petroleras y pueblos indígenas. Una relación envenenada 141
BIBLIOGRAFÍA
Tipo de Superficie
Lote Empresas (país) Áreas afectadas
contrato (hectáreas)
Pluspetrol (Argentina)
Hunt Oil (EUA)
SK Energy (Corea) Reserva Territorial
88 Explotación 143.500 Nahua Kugakapori
Repsol (España)
Nanti
Tecpetrol (Argentina y Perú)
Sonatrach (Argelia)
Pluspetrol (Argentina)
Hunt Oil (EUA) Límites de la Reserva
Territorial Nahua
SK Energy (Corea)
56 Explotación 580.000 Kugakapori Nanti
Repsol (España)
Reserva Comunal
Tecpetrol (Argentina y Perú)
Machiguenga
Sonatrach (Argelia)
Área de Amortiguación
del Parque Nacional
Exploración, Otishi
iniciando Repsol (España)
57 611.067 Reserva Comunal
fase de Petrobras (Brasil)
Machiguenga
producción
Reserva Comunal
Asháninka
Fuente: www.perupetro.com.pe
146 Decursos Nº 27-28
Operador
Condición
Área Lote Condición super- Área (ha)
operativa
suscripción
Reserva Territorial del
Estado (RT) Kugapakori, 88 Pluspetrol 143.500 Explotación
Nahua, Nanti y otros
RT Isconahua 138 Pacific Stratus 414.220 Exploración
1. CONTEXTO GENERAL
La incertidumbre y las dudas son características de este
nuevo siglo XXI. Las sociedades de hoy llamadas democráticas,
enfrentan múltiples problemas; entre ellos el contexto de la
globalización económica neoliberal que genera una nueva
desigualdad, cuya característica principal es la mercantilización
de los servicios públicos, y el deterioro medio ambiental. Lechner,
N. (1990) cree percibir una crisis de identidad expresada en una
falta de articulación de los distintos aspectos de la vida social,
que permite afirmar la experiencia de un mundo vital común; en
este sentido es necesario reflexionar sobre la articulación del
orden colectivo por medio de una cultura política democrática.
Asimismo, se considera que el feminismo, el indigenismo
y ecologismo serán los movimientos sociales importantes de este
siglo. Ya que son parte de los temas que se han posesionado en
las agendas y en la autoconciencia en las organizaciones sociales
como colectividades, de donde parte la necesidad de crear
modelos de desarrollo sostenibles, en términos de desarrollo
tecno-económico y social. Los problemas tipificados en la
actualidad están referidos sobre todo a la injusticia social, al
1
Socióloga, doctora en Historia de América Latina.
150 Decursos Nº 27-28
2
Se concibe por otro lado, el género como una forma primaria de relaciones significantes de poder;
es decir que el género es un campo primario (no es el único) dentro del cual, o por medio del cual,
se articula el poder.
Recursos naturales y género 153
3
Entendiéndose hasta hace poco como un gobierno central con poderes iguales y plenos.
162 Decursos Nº 27-28
Artículo 66.
I. Se garantiza a las mujeres y a los hombres el ejercicio
de sus derechos sexuales y sus derechos reproductivos.
Artículo 338.
I. El estado reconoce el valor económico del trabajo del
hogar como fuente de riqueza y deberá cuantificarse en
las cuentas públicas.
Artículo 402.
2. Promover políticas dirigidas a eliminar todas las
formas de discriminación contra las mujeres en el
acceso, tenencia y herencia de la tierra.
Sobre el tema de tierra y territorio, fue una preocupación
constante de las mujeres, este enfrentaba el problema de que esta
demanda pasaba a las comunidades desde las nuevas
formulaciones, ya no sería el Estado quien decidiera sino las
comunidades a través de las tierras comunitarias de origen (TCO),
reglamentadas en la Ley INRA, de tal forma que el acceso al
derecho propietario de las mujeres a la tierra se “enfrentarían a
los usos y costumbres, que en la mayoría de los casos,
constituyen relaciones de desigualdad y discriminación que
limitan no sólo el acceso, sino el privilegio de la titularidad”
(Coordinadora de la mujer 2005:5). En la lectura conjunta de la
nueva CPE se mantiene este riesgo.
Es de notar que el tema de género está vigente en el
sistema de gobierno, en los derechos fundamentales y garantías,
salud, laboral, familiar y tierra y territorio, esto se debe a los
aportes de los movimientos de mujeres que en realidad tuvieron
un trabajo integral en sus propuestas para la nueva CPE.
En cuanto al medio ambiente y los recursos naturales en el
Capítulo Cuarto referido a los Derechos de las Naciones y Pueblos
Indígenas originarios Campesinos de manera específica menciona
en el artículo 33. El derecho a vivir en un medio ambiente sano,
con manejo y aprovechamiento adecuado de los ecosistemas, la
participación en los beneficios de la explotación de los recursos
166 Decursos Nº 27-28
BIBLIOGRAFIA
Miriam Lehnert
1. INTRODUCCIÓN
Desde la constitucionalización del modelo alternativo de
desarrollo del Vivir Bien en 2009 se provocaron amplios debates
y críticas hacia la política económica de Bolivia sobre una
aplicación auténtica y coherente del planteamiento descolonizador
y anticapitalista. Un proceso que refleja estas tensiones es el
conflicto del proyecto de carretera en el Tipnis.
También para los estudios y debates sobre los modelos de
desarrollo en Latinoamérica, el Vivir Bien presenta un concepto
interesante, formulando alternativas a los paradigmas conven-
cionales.
No obstante, todas estas críticas, debates y reflexiones dejan
por un lado un asunto de gran importancia: No toman en cuenta
el nivel empírico del Vivir Bien y la relación directa que existe
entre este y la concepción de los políticos mismos del actual
gobierno, protagonistas principales de la realización subversiva
de este nuevo paradigma.
Preguntas tales como: ¿Cuál es la concepción de los políticos
del MAS-IPSP sobre el desarrollo económico en el Vivir Bien? ¿En
qué contexto histórico y socio-cultural se construyó su significado
económico en el gobierno actual? son indispensables no solamente
para reflexionar de manera coherente a nivel teórico sobre las
178 Decursos Nº 27-28
4. CONCLUSIONES
Como aspecto principal de una conclusión es indispensable
mencionar al mismo tiempo tanto paralelismos como divergencias
existentes entre la concepción del desarrollo económico del Vivir
Bien a nivel teórico respecto a su estado actual del conocimiento
en los debates de los modelos de desarrollo y la realidad de su
190 Decursos Nº 27-28
BIBLIOGRAFÍA
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El TIPNIS
¿una región de refugio?
1. INTRODUCCIÓN
El área conocida actualmente como Territorio Indígena
Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS) históricamente ha sido
refugio de los pueblos indígenas mojeño, yuracaré y chimán,
que huyeron a esta región casi inaccesible, en su anhelo de evadir
a procesos como la reducción misional, el enganche cauchero o
la colonización por campesinos andinos; encontrando el espacio
apropiado para reproducir sus sistemas económicos, sociales y
culturales.
En 1965, mediante D.L Nº 07401, esta área fue declarada
Parque Nacional Isiboro Sécure (PNIS), ante la necesidad de
conservar las nacientes de los ríos, los recursos naturales y la
belleza escénica que podrían ser afectadas por la construcción de
un camino siguiendo el piedemonte y por la colonización. Sin
embargo, el instrumento legal ignora absolutamente a la
población indígena que habitaba el PNIS, debido a que entonces
la amazonia boliviana era considerada como tierra vacante e
inhabitada. Bajo esta concepción, las siguientes dos décadas
ocurrieron procesos de colonización por cocaleros en la parte sur,
y de explotación descontrolada de recursos naturales por
madereros y cazadores furtivos, en la parte norte.
1
Economista. Msc. en medio ambiente y desarrollo sustentable. El texto es parte de la investigación
doctoral en curso en la UMSS.
198 Decursos Nº 27-28
2
En una región de refugio, los grupos étnicos minoritarios que no se adaptan al proceso civilizatorio
y que habitan alrededor de un centro de poder mestizo, están sujetas a relaciones de dominación
económica y política que fluyen de este último (Muñoz 2002:4).
3
Scott (2009) denomina Zomia al conjunto de tierras con una altitud mayor a los 300 msnm, que
va desde las partes montañosas de Vietnam al noreste de India, atravesando cinco naciones (Vietnam,
Camboya, Laos, Tailandia y Birmania) y cuatro provincias de China (Yunnan, Guizhou, Guangxi
y Sichuan). Se extiende sobre más de dos millones y medio de kilómetros cuadrados y contiene
alrededor de cien millones de habitantes de una gran diversidad de etnias y grupos lingüísticos
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 199
minoritarios. Para Scott, Zomia es la región más grande del mundo cuyos habitantes aun no fueron
plenamente incorporados dentro de las naciones estado.
200 Decursos Nº 27-28
4
La movilidad poblacional en el TIPNIS y los espacios aledaños, es un componente esencial de la
vida de los tres pueblos indígenas y es el mecanismo sociocultural que permite el continuo acceso a
recursos naturales pues, al abandonar un área con pocos recursos permiten su recuperación
(SERNAP 2007:29-44).
5
Las familias de los indígenas que no huyeron, fueron asimilados por la sociedad local, normalmente en
condiciones desventajosas, pese al discurso oficial de que lograrían desarrollo, progreso e integración social.
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 205
6 Es ilustrativo el apunte de D’Orbigny (1945:1541): “…los yuracarés parecen haber vivido en estos
mismos parajes desde los tiempos más remotos, pero se retiraron hacia el oeste para sustraerse de
los ataques de los cruceños, que les daban caza para venderlos como esclavos”.
7 Al igual que en Zomia, los conquistadores presentaban la población india como la verdadera riqueza
del país colonial, la que sería ocupada como fuerza de trabajo gratuita (yanacona) en la agricultura
(Kelm, 1966 en Ribera et al. 2008:151).
206 Decursos Nº 27-28
que se hizo fue por cuenta del cura de Tarata” y que “el proyecto
de los hacendados es establecer población en la inmediación del
río San Mateo” (1836:96-97). Con ello, una parte de la población
indígena también se sometía al sistema colonial, aunque, otra parte
importante pudo mantenerse al margen (D’Orbigny 1945:1544).
La formación del estado en los valles de Zomia implicó la
captura de la población, con estrategias amigables, como súbditos
del estado y conversos a la religión oficial; o mediante la violencia,
a través de guerras de conquista en calidad de esclavos. En ambos
casos, la finalidad era apoderarse de la mano de obra9 y los
impuestos (Scott 2009:64-72). Esto mismo sucedió con los
yuracarés por medio de las misiones franciscanas, como anota
Viedma (1836:95) “…Fray Francisco Bayas reparó el daño causado,
atrayendo con dulzura y política la mayor parte de los fugitivos
(…) y haciendo plantíos de cocales, cacaguales y algodonales, con
lo cual logró destinarlos al trabajo de la agricultura, e irlos
haciendo útiles…”. Por su parte el estado colonial se beneficiaba
de los impuestos “Por 500 cestas de coca de Yuracarés, á 7 pesos,
3500” (1836:98). En este sentido, las misiones parecían tener
objetivos más terrenales, como dice Haenke (1974:157): “Varios
particulares fomentaron al principio esta conquista espiritual, pero
más por sus intereses propios en el plantío de la coca…”
Empero, para retener a los yuracarés había que superar dos
obstáculos: uno, su espíritu libertario, aludido por Haenke
(1974:155): “en su estado selvático no reconocen otro gobierno
que el de la fuerza”, y por el propio D’Orbigny (1945:1545):
“enemigos de cualquier especie de restricción que pudiera quitar
algo de su independencia, viven en familias que se ignoran las
mutuas consideraciones y la subordinación”. Esto era una
motivación más que suficiente para promover la fuga: “En el
Mamoré, el teniente Vicente Ayeiliyu, el año pasado iba incitando
a las gentes para que abandonaran la Reducción ponderándoles
la sujeción y trabajo en que vivían, y acordándoles la libertad de
sus bosques” (Soto; Lacueva 1912:255), y también “… la única
9 Según Scott (2009:43), el recurso de la mano de obra era un aspecto central en Zomia, no solo por
su crucial importancia como fuerza de trabajo para la producción de alimentos, sino también porque
era esencial militarmente para la defensa o la expansión de los estados frente a sus rivales.
208 Decursos Nº 27-28
causa verdadera fue sin duda la más poderosa que indujo a unos
y a otros a abandonar sus Reducciones, veían que parientes
suyos vivían a su libertad…” (1912:257).
El otro era el problema de acceso10. En 1780, Ignacio Flores
gobernador de Mojos logró el permiso y recursos de la Audiencia
de Charcas para conectar Mojos con Cochabamba pasando por el
Chapare, que “abriría esas tierras feraces a colonos cochabambinos
para que cultiven coca, azúcar, ají y quizás añil, y permitiría
‘civilizar’ a los yuracarés que viven en la zona” (Platt 2012:1). Sin
embargo el proyecto no prosperó por rivalidades entre los
administradores coloniales de Santa Cruz y Cochabamba, éstas que
aún persistían cuando en 1832, D’Orbigny a encargo del gobierno,
hizo una exploración para encontrar una ruta más segura11.
Estos dos obstáculos evitaron la consolidación de las
misiones desde su objetivo espiritual, pero fueron útiles para lograr
la apertura de esta área y su gente al sistema económico colonial.
Las misiones ocupaban grandes espacios, como la de Asunción
que tenía unos 15 Km de largo por 20 Km de ancho (Viedma
1836:95), donde introdujeron plantaciones de arroz, algodón, café
y cacao. Pero también alteró el sistema de producción yuracaré,
por el acceso a bienes externos como abalorios, ropa de tela,
herramientas de hierro, e incluso aguardiente, originando un fuerte
cambio cultural que luego marcaría una relación de casi
dependencia hacia los misioneros; constituyéndose en una razón
para que muchas familias en reiteradas ocasiones quisieran volver
temporalmente a las misiones franciscanas.
El periodo republicano representó una continuidad de las
políticas coloniales. Por un lado, la búsqueda de caminos menos
peligrosos entre Mojos y Cochabamba, como fue el encargo del
presidente Andrés de Santa Cruz al naturalista francés Alcides
10
Haenke (1974:149) revela: “El establecimiento de los cocales en los montes de yuracarés, ha sido
fuerte empresa; y sus fundadores tuvieron que vencer más dificultades que en ninguna otra parte
por lo fragoso y precipitado del terreno y el difícil tránsito de la cordillera…”.
11
Al respecto D’Orbigny (1945:1428) confiesa: “cuarenta días de fatigas y de privaciones de todo
género de mi empresa había disgustado mucho a los funcionarios de Mojos, que estando en Santa
Cruz de la Sierra, veían con malos ojos el establecimiento de esas comunicaciones más directas por
Cochabamba”.
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 209
13
Puerto Todos Santos, que en 1939 tenía 1500 habitantes, contaba con servicio de transporte hacia
Trinidad, vía fluvial mediante barcos con motor, y vía aérea mediante hidroavión. En 1942 se
concluyó el camino hacia Villa Tunari. En 1946 el pueblo comenzó a desaparecer, por efecto de las
riadas del río Chapare (Querejazu 2005:78).
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 211
14
La misión de Trinidad es considerada como la cuna de los mojeños que habitan el TIPNIS y por
eso se auto identifican como pueblo mojeño trinitario, pese a que espacialmente Loreto está mucho
más próximo.
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 213
15
Viedma (1836:86;137;140;142) plantea un alegato del porqué era necesario esta liberalización,
cuestionando el trabajo indígena durante cuatro días a la semana, sin que sean dueños de sus
productos, lo cual perjudicaría además al Rey y a la iglesia, porque perdían tributos.
214 Decursos Nº 27-28
16
Nordeskiold (1911:1) lo ilustra de esta forma: “Antes de llegar a Trinidad pasamos por la
desembocadura del Sécure. Una parte de los mojos civilizados de Trinidad se han retirado a estas
tierras salvajes para poder vivir independientes del hombre blanco. Están dirigidos por Santos Noco.
Durante la década de 1880 escaparon a las selvas del mencionado río donde ahora Santos Noco
gobierna un pequeño e independiente estado que cuenta con iglesia y escuela”.
17
Para Lehm (1999:131), la búsqueda de la loma santa constituye un movimiento milenarista, en la
que una sociedad descontenta y oprimida, anhela el encuentro de un paraíso. Más que un lugar, la
loma santa es “la utopía de una nueva situación para el pueblo mojeño, que propugna la instauración
de una sociedad en la cual no existen las presiones que los blancos y mestizos ejercen sobre la
población indígena”.
216 Decursos Nº 27-28
18
Entrevista con Rubén Yuco, realizada a principios de abril de 2012 en la ciudad de Trinidad.
218 Decursos Nº 27-28
19
Scott (2009:x) sostiene que la formación de los distintos tipos de estado en los valles de Zomia, ha
implicado violencia. Por ello los pueblos de las montañas, buscaron estrategias para escapar al Estado,
(que encarna pago de impuestos, reclutamiento, trabajos forzados o guerra), las que se manifiestan
en sus formas de vida, organización social, ideología y culturas orales.
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 219
20
Nordenskiöld (1911 en Ribera et al. 2008:51) es bastante taxativo: “Los yuracares no son tan
comunitarios. Una o dos familias viven juntas, eso es todo”. Esto mismo se advierte en Richter (1930
en Ribera et al. 2008:91): “Los diferentes grupos familiares o tribales habitaban bastante separados unos
de otros en el bosque”.
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 225
21
Algo ilustrativo sobre el tema vemos en Querejazu (2005:70) incluido en el informe de un misionero:
“Para ellos no hay mayor dicha que arco, flecha y mujer, y su bienaventuranza venidera que consiste
en una grande abundancia de jabalíes, los aleja no poco de las verdades de nuestra religión, y más
prefieren vivir en sus chacos que en el pueblo”.
226 Decursos Nº 27-28
áspera y sin mangas, que les llega hasta las rodillas. Es fabricada
de corteza de árbol”. D’Orbigny (1945:1361), hizo algunos dibujos
de yuracarés con estos vestidos y anotó: “Todos estaban vestidos
con una túnica sin mangas de corteza de morera, adornada con
pinturas rojas muy regulares”. Para Nordenskiöld (1922 en Ribera
et al. 2008:55), los diseños pintados en sus camisones era una
expresión de la gran habilidad artística de los yuracarés.
En este sentido e independientemente de las influencias
externas a lo largo del proceso de aculturación, los yuracares “han
conservado juntamente con la forma original de asentamiento y
de economía, así como su organización sociopolítica, los rasgos
determinantes de su cultura” (Kelm 1966, en Ribera et al.
2008:124)
En el caso de los mojeños del TIPNIS, éstos adoptaron una
gran parte del orden misional que se expresa en los patrones
arquitectónicos de la comunidad en torno a la plaza y el cabildo.
Como organización social se fueron estructurado en comunidades
que están regidas por un cabildo, cuyos valores fundamentales
son la autoridad, el respeto y la edad. El ritual católico convive
con la tradición amazónica, visible en la fiesta, la música y en
toda la tradición artesanal de las artes y oficios introducidos
durante el periodo de las reducciones.
En el caso de los chimanes, se trata de una sociedad
estructurada en torno a la familia extensa, con apenas tolerancia
a formas políticas centralizadas, por lo que su ocupación espacial
era dispersa y su organización, flexible. Las frecuentes visitas a
parientes, significaba recorrer grandes distancias y acceder a
recursos de un gran sector del piedemonte, construyendo
espacios de sociabilidad, que se constituyó en una de las
características medulares de este pueblo.
En síntesis, a pesar de la enorme influencia externa, que
desencadenó profundas transformaciones en la vida de los
pueblos indígenas del TIPNIS, éstos conservaron muchos
elementos centrales y distintivos de cada etnia. Pero lo más
importante es que también subsistieron elementos comunes a
todos ellas, como estructuras sociales flexibles y más igualitarias,
El TIPNIS ¿Una región de refugio? 227
BIBLIOGRAFÍA
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traves-del-tipnis-un-proyecto-colonial-del-siglo161702_338318.html
1. VIVIR EN EL LUGAR
Vivir en el lugar significa seguir las necesidades y los
placeres de la vida, ya que se presentan de forma única por un
sitio en particular y las formas de evolución para asegurar una
ocupación de largo plazo de tal sitio. Una sociedad que practica
el vivir en el lugar mantiene un equilibrio con su región de
soporte, a través de vínculos entre seres humanos, otros seres
vivos y los procesos del planeta –estaciones, clima, ciclos del
agua, según lo revelado por el lugar en sí. Es lo opuesto de una
sociedad que “hace una vida”, a través de una explotación
destructiva cortoplacista de la tierra y la vida. Vivir en el lugar es
una antigua forma de existencia, interrumpida en algunas partes
del mundo hace unos cuantos miles de años por el surgimiento
de la civilización explotadora, y en general durante los últimos
dos siglos por la propagación de la civilización industrial. Sin
embargo, no es para ser considerado como antagónico a la
civilización, en el más sentido humano de la palabra, pero puede
ser la única manera por la cual una verdadera existencia civilizada
puede ser mantenida.
1
Originalmente publicado en The Ecologist, 1977, Vol 7, No 10; pp 399-401. Traducido por Carlos
Crespo y Laura Crespo.
240 Decursos Nº 27-28
vivido allá antes, tanto aquellos que trataron de hacer una vida
como aquellos que vivieron en el lugar, pueden contribuir. Los
rehabitantes pueden aplicar esta información hacia la formación
de sus propios patrones de vida y establecer relaciones con la
tierra y la vida alrededor de ellos. Esto ayudará a determinar la
naturaleza de la bioregión dentro la cual están aprendiendo a
vivir en el lugar.
La rehabitación involucra desarrollar una identidad
bioregional, algo que la mayoría de los norteamericanos han
perdido, o nunca lo han poseído. Definimos bioregión en un
sentido diferente de la provincia biótica de Dasmann (1973) o la
provincia biogeográfica de Udvardy (1975). El término se refiere
tanto al terreno geográfico y a un terreno de la conciencia –a un
lugar y las ideas que se han desarrollado acerca de cómo vivir en
aquel lugar. Dentro una bioregión las condiciones que influyen
la vida son similares y estas a su vez han influido la ocupación
humana.
Inicialmente una bioregión puede ser determinada por el
uso de la climatología, la fisiografía, la geografía de animales y
plantas, la historia natural y otras ciencias naturales descriptivas.
Los límites finales de una bioregión son mejor descritas por las
personas que han vivido mucho tiempo en ella, a través del
reconocimiento de las realidades de vivir en un lugar. Toda vida
en el planeta está interconectada en algunas maneras obvias y en
muchas más que se mantienen apenas exploradas. Pero existe
una resonancia distinta ente las cosas vivientes y los factores que
los influencian que ocurre específicamente dentro de cada lugar
separado del planeta. Descubrir y describir esa resonancia es una
manera de describir una bioregión.
Las realidades de una bioregión son obvias en un sentido
amplio. Nadie confundiría el desierto Mojave con el valle fértil de
California Central, tampoco la tierra semi árida del Gran Cañón
con la costa de California. Entre las bioregiones más grandes las
diferencias están suficientemente marcadas, tanto que la gente
usualmente no intenta practicar la forma de vida del desierto de
Sonora en el área costera de Oregón. Pero existen muchas
242 Decursos Nº 27-28
que las cuencas afectan las vidas humanas también, pero toda su
importancia es más sutil y penetrante. Las comunidades nativas
fueron desarrolladas expresamente alrededor de aprovisiona-
mientos locales de agua y los límites tribales fueron a menudo
establecidos por los límites de las cuencas hidrográficas. Los
asentamientos pioneros siguieron el mismo patrón, a menudo
desplazando a los grupos nativos, con la intención de asegurar
su agua.
Definir la cuenca local, restringir el crecimiento y el
desarrollo para adaptarse a los límites de los suministros de agua,
planificar el mantenimiento y restaurar la condición de libre flujo
de los tributarios que están bloqueados o la pureza de cualquiera
que haya sido polucionado, y explorando las relaciones con los
sistemas de agua más grandes, conectarlas, podrían convertirse
en direcciones básicas para comunidades rehabitatorias. Ellas
podrían verse a sí mismas como centradas en y responsables de
la cuenca.
El Valle central se ha convertido en uno de los centros
planetarios de alimentos. La actual escala de la agricultura allá es
enorme: miles de millas cuadradas bajo cultivo constante para
producir múltiples cultivos anuales. Equipo pesado dependiente
de combustibles fósiles aparece en cada etapa de las operaciones
agrícolas, y hay un constante aumento de la tasa de uso de
fertilizantes artificiales. La mayor parte de la tierra es poseída o
alquilada por corporaciones agrocomerciales ausentes. Es un
lugar naturalmente productivo. El Norte de California tiene un
clima templado, un continuo suministro de agua y la capa
superficial del suelo es entre las más ricas de Norte América. Pero,
la actual escala de agricultura es insostenible en el largo plazo.
Los combustibles fósiles y los fertilizantes químicos solo pueden
hacerse más caros, y el suelo está siendo simultáneamente
arruinado y desapareciendo.
Es necesario que haya una redistribución masiva de la tierra
para crear explotaciones agrícolas más pequeñas. Ellos podrían
concentrarse en cultivar un amplio rango de especies alimenticias
(incluyendo plantas alimenticias nativas), incrementar los valores
Rehabitando California 245
1. INTRODUCCIÓN
Doña Giovana Jimenez1, cholita de Quewiña Pampa (Pocona),
recuerda cuando tuvo que trabajar como vendedora de tomate en la
acera oeste del mercado La Pampa, en la década del 90’:
Me quedé con mi prima trabajando por casi un año,
vendiendo tomates en la cancha. Vendíamos en la avenida
República casi Punata, del “barrio chino” avanzando un
poco hacia la Punata, por el frial Criollito, ahisitos nomás
era el puesto de mi tía. Con mi prima los sábados nos
levantábamos a las dos de la mañana y vendíamos hasta
las once, doce de la noche. Primero teníamos que recibir
tomates, de los mayoristas, de los que traían del lado de
Saipina; ella tenía ya sus caseras, les daba para semillas,
para sus tomates. Entonces traían directamente a venderles,
yo te doy semilla y vos obligado también me tienes que
vender, no ve? Traían camionadas, era mayorista mi prima,
y después entregábamos por cajas; vendíamos también por
cuartillas todos los días (Jimenez, 2013:32).
El relato es una descripción etnográfica precisa del
funcionamiento de una economía familiar altamente articulada a
las redes de intermediación del tomate, los acuerdos que se
1
Doña Giovana es miembro de la Coordinadora de Mujeres del Valle Alto (COMUVA) y actualmente
presidente de la CIOEC-Cochabamba.
250 Decursos Nº 27-28
2. SOBRE LA BIOREGION
Etimológicamente, bioregión procede de la palabra griega
“bio”, vida, y “región” viene del latín regere o territorio para ser
2
Las “millas alimento” hacen referencia a la distancia que deben transportar los productos
agroalimentarios, desde el lugar de producción hasta la mesa del consumidor, expresado en gasto
de hidrocarburos, otras formas de energía, produciendo impactos ambientales y destruyendo la
producción local.
Ferias agroalimentarias en Cochabamba. Apuntes bioregionales 251
3
No forma parte de esta comprensión, la perspectiva instrumental a la globalización capitalista de
Sergio Bousier ubica la bioregion dentro los conceptos multidimensionales que permitirán entender
la geografía compleja y diversa del siglo XXI globalizado. De hecho, el capitalismo global ha
incorporado la bioregión como espacio a explotar, como sucede con la artesanía indígena “de marca”
o el turismo ecológico. Objetos creados (productos los llama Bousier) vinculados a una cultura de
producción, de representación simbólica (lo que muestra el objeto), al mismo tiempo una cultura
territorial de una región, que son ofertados en el mercado (Bousier s/f:7).
4
Ver la traducción al español del texto de Berg y Dasmann en el presente número de Decursos.
252 Decursos Nº 27-28
5
Rehabitar- el proceso que involucra aprender a vivir en un lugar (Berg y Dassman 1977:399). Es lo
contrario de una sociedad que “makes a linving” through short term destructuve exploitation of
land and life. Este proceso ha sido interrumpido hace unos miles de años por el crecimiento de la
civilización explotadora, y más generalmente en los últimos dos siglos por el spread de la civilización
industrial (Berg y Dassman, 1977:399).
Al final la vida humana depende de la continuación de otra vida. Vivir en un lugar (living in place)
provee para tal continuación (Berg y Dassman, 1977:399).
254 Decursos Nº 27-28
BIBLIOGRAFÍA
1. PRESENTACION
La problematización de la calidad de vida ha cobrado
relevancia en los últimos años, tanto por que explicita las
condiciones de vida individuales y colectivas de los grupos
humanos, como porque es el objetivo que persigue el ciudadano
común, los movimientos sociales y la gestión del desarrollo.
Usualmente, toma cuerpo en distintos Sistemas de Indicadores
Sociales destinados a medir el desarrollo de países y regiones.
Así, aun cuando esté integrado por aspectos objetivos y
subjetivos, en un corte temporal estático, homogeniza y neutraliza
condiciones de vida diferenciadas.
En contraposición, para este artículo, la calidad de vida
hace referencia al modo en que hombres y mujeres estructuran
cotidianamente sus procesos de reproducción individual y social
mediados por el espacio y configurados en el tiempo. Articulan
1
Este artículo tiene base en la Tesis Doctoral “Calidad de vida y espacio urbano, Sebastián
Pagador 1er. Grupo y Trafalgar, Barrios periféricos de Cochabamba, Bolivia, 2003-2004”,
dirigida por el Dr. Sergio Tamayo y leída por la autora en la Universidad Autónoma
Metropolitana, Sede Azcapotzalco, México D.F, en abril del 2008.
2
Arquitecta de la Universidad Mayor de San Simón, Cochabamba, Bolivia, maestra en
Desarrollo Urbano por el Colegio de México, México, D.F., doctora en Diseño, línea de
Estudios Urbanos por la Universidad Autónoma Metropolitana, sede Azcapotzalco,
México, D.F. Actualmente es docente en la Universidad Mayor de San Simón, Facultad
de Arquitectura y Ciencias del Hábitat y Coordinadora Bolivia de We EFFECT, antes
Centro Cooperativo Sueco. myareb@hotmail.com
268 Decursos Nº 27-28
3
Los imaginarios son ese conjunto de representaciones, pensamientos, imágenes,
suposiciones y aspiraciones que le dan sentido a la acción (Aguilar, Sevilla y Vergara,
2001, citado en Tamayo, Cruz, 2002).
270 Decursos Nº 27-28
4
Julio Boltvinik, afirma la existencia de dos ejes conceptuales relacionados con la búsqueda
de fundamentos para la definición del umbral de la pobreza. En el eje del “florecimiento
o bienestar humano” está el ser humano completo, con todas sus necesidades y
capacidades, en tanto que en el eje del “nivel de vida”, están solamente los elementos
económicos de dichas necesidades y capacidades, corte que es usado para distinguir a
los pobres de los no pobres y negarles una serie de derechos sociales (2003: 11).
5
Al igual que el llamado Índice de Desarrollo Humano, los Sistemas de Indicadores de
Bienestar, los distintos Sistemas de medición de la Pobreza, del Nivel de Vida, del
Standard de vida y del Progreso Social, entre otros.
Calidad de vida y espacio urbano 271
6
Es coincidente como actualmente el “vivir bien” es uno de los conceptos fundamentales
que maneja el discurso político del Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Evo
Morales. El Plan Nacional de Desarrollo, Bolivia Digna, Soberana, Productiva y
Democrática para Vivir Bien 2006-2010, explicita que se trata de una concepción de las
culturas originarias e indígenas de Bolivia que hace referencia al bienestar colectivo en
términos materiales y espirituales, en una convivencia comunitaria, con interculturalidad,
sin asimetrías de poder y en armonía con la naturaleza. Textualmente dice: “[A]sí, el Vivir
Bien será entendido como el acceso y disfrute de los bienes materiales y de la realización
efectiva, subjetiva, intelectual y espiritual, en armonía con la naturaleza y en comunidad
con los seres humanos” (Ministerio de Planificación del Desarrollo 2006: 10).
7
Para Kant, el establecimiento de “la norma” y la capacidad de juzgar, son el resultado
de la facultad de pensar lo particular y de interés individual como contenido de lo
universal y relacionado con el bien común (Brugger 1972: 304).
272 Decursos Nº 27-28
8
Dicho a la manera de José María Tortosa (2001), por tanto sólo puede ser estudiada con
“perspectiva de género, perspectiva de edad y perspectiva local”.
274 Decursos Nº 27-28
9
Los marcos interpretativos que al momento están respaldando la comprensión de la
“vida cotidiana”, con muchos matices diferentes, pueden polarizarse entre aquellos que
la conciben solamente como una rutinización que asegura el mantenimiento y la
continuidad de una estructura social dada a través de la reproducción social (Heller,
Lukács, Goofman, Bourdieu y Habermas entre otros ); o en el otro, polo, los que piensan
que además lleva adentro las improntas sociales que posibilitan innovación, ruptura,
cambio social y transformación de la sociedad (Alberoni, León). Los primeros, con
algunas diferencias, han puesto en escena los matices de la determinación estructural
económica en la vida cotidiana, abandonando concepciones mecanicistas y mostrando
sus contradicciones, paradojas e interdependencia con otros aspectos, como el hábitus
en Boordieau, el carácter emancipador de la acción comunicativa en Habermas. Afirma
Emma León (1999: 41) que ven el problema desde dentro el sistema. En contraposición,
desde la otra vertiente, la reproducción social tiene una permanencia relativa, equilibrio
transitorio y estabilidad limitada. A decir de León, miran el sistema desde afuera.
276 Decursos Nº 27-28
10
Considero que una práctica no es solamente una actividad en tanto acción en el espacio;
supone el carácter reflexivo, rutinizado y situado que le otorga Giddens, está de acuerdo
con la fórmula de Bourdieau: [(habitus)(capital)] + campo = práctica)] en su carácter
de transformación complejo en el tiempo, y en la línea de Certeau, es asimilable a los
modos de empleo, como “maneras de hacer”, de caminar, de leer, de producir, de hablar,
etc., que crean un espacio de juego con una estratificación de funcionamientos
diferentes e interferentes.
Calidad de vida y espacio urbano 279
11
Podría además añadir que se define a partir de las relaciones entre el suelo como plano
horizontal continente y los volúmenes en sus distintas expresiones formales como planos
verticales y horizontales contenidos y contenedores de las prácticas sociales.
282 Decursos Nº 27-28
12
Dice Claude Bataillon (1997: 33) que “[a] nivel teórico, la organización espacial puede
concebirse como un juego de escalas entre unidades ‘iguales’ de un cierto nivel
(municipios, por ejemplo) que dependen de un centro polarizador”. En Bolivia, desde
1994, las ciudades bolivianas están organizadas a partir de distritos municipales y estos
a su vez están conformados por las Organizaciones Territoriales de Base (OTB’s). Así,
la escala espacial correspondiente a la “célula menor”, el barrio, es la OTB respectiva,
y complementariamente, la escala de planificación intermedia es el Distrito Municipal.
Ambos recortes territoriales están ya fuertemente arraigados y determinan la forma de
organización de la sociedad boliviana. Es posible que estas determinaciones sean
cambiadas en próximas fechas con función en la Nueva Constitución Política del Estado
Plurinacional de Bolivia.
284 Decursos Nº 27-28
Gráfico N°. 1
Tejidos espacio temporales de la calidad de vida
CUADRO Nº 1
LA REPRODUCCIÓN SOCIAL
PRACTICAS E INTERACCIONES POR ÁREA
AREA DE REPRODUCCIÓN
PRACTICAS E INTERACCIONES
SOCIAL
• De reposición de las condiciones de vida
física y orgánica
• Para el cuidado de la salud
• Para el abastecimiento de alimentos y vestidos
REPRODUCCIÓN DE LA
VIDA • De abastecimiento de agua, alcantarillado,
electricidad y basura
• De movilidad y desplazamiento
• De articulación y percepción del medio
ambiente
• De acceso al trabajo y la producción
• De dedicación al trabajo doméstico
REPRODUCCIÓN
ECONOMICA • De acceso a los servicios económicos
formales e informales
• De acceso a bienes de consumo.
• De sociabilidad familiar
• De sociabilidad barrial
• De sociabilidad en el Distrito
REPRODUCCIÓN DE LA • De sociabilidad en la ciudad
SOCIABILIDAD
• De legitimación de marcos institucionales y
normativos
• De recreación y ocio
• De seguridad ciudadana
• De apoyo a la educación y/o capacitación, en
la casa
• Educativas y de capacitación formales
REPRODUCCIÓN DE • Educativas y de capacitación en programas no
SABERES Y formales
CONCEPCIONES
• De uso de los sistemas de comunicación
• De recreación simbólica de la realidad
• De ciudadanización y participación ciudadana
BIBLIOGRAFÍA
1. INTRODUCCIÓN
La Guerra del Pacífico (1879-18843) librada entre Chile,
Bolivia y Perú, tal vez es uno de los acontecimientos históricos
del Siglo XIX que tiene una continua interpelación actual por los
Estados de aquellos países con fines políticos diversos. Como
consecuencia, la contienda bélica trajo una serie de
interpretaciones históricas diferentes en estos países que han
edificado fuertes mitos e imaginarios colectivos.
Desde el fin de la guerra, a pesar de los tratados que
finalizaron el conflicto, no parece haber acuerdo entre los tres países
1
Este trabajo está basado en algunos de los hallazgos de investigación de la Tesis Doctoral
denominada “El pasado en el presente: La construcción del imaginario histórico sobre
la Guerra del Pacífico en Bolivia, Chile y Perú y su influencia en las relaciones
trilaterales” realizada por la autora para el Doctorado en Estudios Latinoamericanos
(Mención Historia) de la Universidad de Salamanca. La Tesis está en la fase de redacción.
2
La autora es socióloga, Licenciada en Sociología de la Universidad Mayor de San Simón,
Bolivia. Máster en Estudios Latinoamericanos, Mención Política, Universidad de
Salamanca, España. Candidata a Doctora en Estudios Latinoamericanos, Mención
Historia, Universidad de Salamanca. Es docente de la Universidad Mayor de San Simón
y del Programa de Gobernabilidad y Gerencia Política en Bolivia, columnista del
Periódico Los Tiempos y consultora independiente.
3
Si bien Chile y Perú firmaron un pacto de tregua en 1883, con Bolivia tal acuerdo se
realiza en 1884, con lo que se da por finalizada la intervención bélica, aunque Bolivia
se retira de la guerra en 1880. Los tratados definitivos de Paz serán en 1904 entre Bolivia
y Chile y en 1929 entre Chile y Perú.
298 Decursos Nº 27-28
4
Tomando en cuenta aquello, por ejemplo, tanto Evo Morales como Sebastián Piñera,
actuales Presidentes de Bolivia y Chile respectivamente, rearticulan algunos imaginarios
nacionalistas y populistas que asombran por su similitud, a pesar de las diferencias
ideológicas de sus gobiernos. Así, en ambos países, la interpretación de la Guerra del
Pacífico se sigue constituyendo como principal referente identitario y testaferro
generalmente ligado a políticas de distracción. Como ejemplo de una “lectura” actual
relacionada con la Guerra del Pacífico y sus consecuencias, no hay que olvidar que
uno de los imaginarios que mayormente movió a la población en Bolivia contra el ex
Presidente Gonzalo Sánchez de Lozada el 2003 y allanó el camino para la incursión de
Evo Morales y el Movimiento al Socialismo (MAS), fue el proyecto de exportación de
gas por Chile, lo que hirió al “sentimiento nacionalista” boliviano que construyó como
antagonista al “Chile roba mar”. Por supuesto, ello sin desconocer la crisis social y
política que se condensó en estos sucesos.
Bolivia como el “mal menor” 299
5
De acuerdo a Concha (2011: 28-30) la clase dominante chilena y sus FF.AA. estuvieron
fuertemente influenciadas por pensadores como Clausewitz y Bismark, no pudiendo
evitar comparar la Guerra del Pacífico con la Guerra Franco-Prusiana, donde Chile se
asemejaba a una Prusia que conquistó la hegemonía en Europa a desmedro de Francia.
Bolivia como el “mal menor” 301
6
También conocida como la Guerra Hispano-Sudamericana, se gestó entre 1865 y 1866
entre la alianza de Perú, Chile, Bolivia y Ecuador contra España. El motivo principal de la
guerra fue la toma por España de las islas Chinchas, de soberanía peruana. Dichas islas
encerraban gran cantidad de guano y salitre, por lo que despertaron la ambición española.
Bolivia como el “mal menor” 303
7
Al respecto ver Becerra de la Roca (2006) y Albarracín (2005). La vinculación entre
Melgarejo, como sinónimo de despotismo , tiranía y entreguismo y sus buenas
relaciones con Chile, marcarán el imaginario histórico boliviano “antichileno”,
asegurando que el Estado chileno, además de todos los “agravios” cometidos contra
Bolivia, apoyó a uno de los dictadores más odiados de su historia.
304 Decursos Nº 27-28
8
Nos referimos a una serie de discursos y ceremonias desde los púlpitos de las iglesias
y desde las plazas que alentaban a la población al apoyo incondicional de la causa
bélica. Carmen Mc Evoy, (2010) ha analizado y recopilado estos discursos que presentan
claramente los imaginarios que ha ido edificando Chile sobre la Guerra del Pacífico y
su interpretación sobre las causas del conflicto.
306 Decursos Nº 27-28
9
Se refiere al bombardeo de Valparaíso por la escuadra española en marzo de 1866 en
el marco de la Guerra Hispano-Sudamericana.
Bolivia como el “mal menor” 307
10
Máximo héroe chileno de la Guerra del Pacífico. Murió en el enfrentamiento entre la
corbeta chilena “Esmeralda” y el monitor peruano “Huáscar”. Su construcción mítica es
similar a la de Eduardo Abaroa en Bolivia, ya que de su supuesta negativa a rendirse ante
el enemigo y de su muerte consiguiente, se desprende la mayor gesta heroica para Chile.
312 Decursos Nº 27-28
11
Todos estos aspectos son trabajados a profundidad por la autora en la Tesis Doctoral
mencionada en la Nota 1.
Bolivia como el “mal menor” 313
12
Ver Concha (2011) y Maira (2004).
13
Presidente de Chile entre 1881 y 1886, se destacó, igualmente, como Ministro de
Relaciones Exteriores en el periodo del Presidente Aníbal Pinto entre 1876 y 1881.
Bolivia como el “mal menor” 315
14
Diplomático chileno.
316 Decursos Nº 27-28
15
Según Concha (2011: 134) la carrera armamentista de ambas naciones las situó entre las
diez potencias navales más poderosas en el mundo en ese momento.
318 Decursos Nº 27-28
16
Algo similar ocurrió con la pulseta entre Chile y Argentina por el Canal Beagle en la
década de 1970 cuando ambos países se encontraban gobernados férreamente por sus
FF.AA. En ese contexto, se gestaron los intentos de acuerdo en Charaña entre Hugo
Banzer y Augusto Pinochet, que según la historiografía boliviana, quedan en nada
cuando nuevamente, Chile y Argentina resuelven sus diferencias.
Bolivia como el “mal menor” 319
chilena, se percata que los mayores rivales para Chile fueron Perú
y Argentina. A juicio de Concha (op.cit.), la desgracia del entonces
litoral boliviano, fue encontrarse en medio de Chile y Perú, siendo
además que las riquezas salitreras de Tarapacá eran mayores a las
de las costas de Bolivia y por tanto fueron el mayor objetivo de
guerra de Chile.
En ese sentido, como ya se dijo en los puntos precedentes,
en la retórica que justifica la guerra en Chile son mucho mayores
las referencias a Perú, algo similar sucede respecto a los
antagonismos y alteridades que se construyen en Chile a partir de
la Guerra del Pacífico, donde Perú tiene un papel central respecto
a Bolivia. En algunos casos, cuando Bolivia es mencionada por
las interpretaciones chilenas de la guerra, claramente, se percibe
más que un tono hostil, una especie de cariz paternalista,
tomándola como un segundo enemigo, después de Perú. Por
ejemplo, en esta alocución del ilustre ciudadano de Valparaíso,
Álvaro Covarrubias, en ocasión de un banquete en honor de
Manuel Baquedano17 en marzo de 1881, se expresó lo siguiente:
Hace dos años apenas vivía la República tranquila,
entregada a las gratas y provechosas labores de la paz.
Nada podía presagiar entonces que habían de romperse
en breve las amistosas relaciones que se había esforzado
en cultivar con las Repúblicas del Perú y de Bolivia.
Los servicios que en diversas épocas había prestado al
primero de esos países con el espíritu más elevado y
previsor, y las concesiones tan generosas como benévolas
que había dispensado al segundo, la autorizaba para contar
no solamente con la consideración y respeto que se deben
los pueblos cultos, sino además con su amistad sincera.
Al servicio del primero, habíamos puesto nuestros ejércitos
y nuestra pequeña escuadra para ayudarle a conquistar su
independencia.
17
Comandante en jefe del Ejército de Chile, ascendido a este rango durante la Guerra del
Pacífico. Se le atribuye la victoria chilena de las batallas de Pisagua y Los Ángeles, entre
otras.
320 Decursos Nº 27-28
18
En 1883 Chile y Perú firmaron un pacto de tregua conocido como el Tratado de Ancón.
Como Chile había tomado Tacna y Arica, en dicho acuerdo se establecía que un
plebiscito en las zonas disputadas, programado para realizarse veinte años después de
la firma del tratado, definiría su futura soberanía. Finalmente, nunca se dio el plebiscito
y en cambio de firmó el Tratado de 1929 donde se “partieron” los territorios, es decir,
Tacna volvió a Perú y Arica pasó a manos de Chile.
Bolivia como el “mal menor” 325
19
Quien apunta esta metafórica opinión es Salazar (2006:134).
Bolivia como el “mal menor” 327
BIBLIOGRAFÍA
1
La reseña fue escrita en octubre del 2012.
Reseñas 333
2
Lo más preocupante es que sean los jóvenes los que más aprueben la justicia por mano propia.
Reseñas 335
3
Ver por ejemplo Bareiro (1997).
338 Decursos Nº 27-28
Abriendo la discusión.
Y ahí sí, ya entrando a la última parte que consiste en abrir
el debate, surge una discusión frente al texto y es que en el texto
se plantea que siendo complementarios la auto-identificación
indígena con mestizo, la pregunta del CENSO solo busca medir
la identidad de sus ciudadanos. Frente a ello, si la identidad es
negociable y es algo que cambia continuamente: ¿Cómo y porqué
medirla, si es algo que se negocia constantemente?
Por último, como parte de la metodología planteada para
la elaboración de la encuesta, se explica haber utilizada una
suerte de tabla de colores para detectar el color de la piel de las
personas y cruzar esa variable con otras variables de la encuesta.
Y en base a ello se llegan a conclusiones como que los de color
de piel más oscuro, son más pobres y discriminados. Frente ello
Reseñas 339
Bibliografía citada
Bareiro, Lina. “Construcción Femenina de Ciudadanía”. En
Bareiro; Soto (ed.) Ciudadanas. Una memoria inconstante.
Paraguay: Centro de Documentación y Estudios; Nueva Sociedad,
1997: 2–15
Alejandra Ramírez S.
340 Decursos Nº 27-28
Bibliografía citada
Kelley, J. y Klein, H. 1981. Revolution and the rebirth of
inequality. A theory applied to the National Revolution in Bolivia.
Berkeley: University of California Press.
Manuel De La Fuente
Reseñas 345
4
Berríos sigue esta definición de gramática: “La Gramática qheshua es el Arte que dá reglas para hablar
i escribir correctamente y con propiedad el idioma qheshua” (p. 16).
350 Decursos Nº 27-28
5
ELEMENTOS DE GRAMÁTICA / de la / LENGUA QHESHUA / por / D. José David Berrios
/ PARIS / GARNIER HERMANOS, LIBRERO-EDITORES / 6, Rues des Saints-Pères, 6.
6
ELEMENTOS DE GRAMÁTICA / de la / LENGUA QHESHUA / por / D. José David Berrios
/ GONZALEZ Y MEDINA / LIBREROS EDITORES / LA PAZ BOLIVIA.
352 Decursos Nº 27-28
7
De hecho, los opúsculos de Beltrán (doctrina, silabario, ortología, etc.) son parte de una serie que
tiene por título “Civilización del indio”.
Reseñas 353
8
Es interesante señalar que en el capítulo referente a la preposición, Berríos afirma que “Lo que en
otros idiomas se llama preposición, podría denominarse, más propiamente, en qheshua, posposición;
porque el régimen y dependencia que tienen entre sí dos palabras ó cláusulas se expresa, como en
todo idioma aglutinante, por medio de partículas afijas” (p. 85).
Reseñas 357
9
Tanto en el Prefacio a la primera edición como en la p. 83 nuestro autor hace referencia a un
Diccionario que tendría dos volúmenes y algo más de ocho mil páginas. No se conoce dicho
diccionario hasta la actualidad.
10
En el fondo, lo que hace Berríos es ampliar la denotación de los términos en cuestión; así, Inka se
resemantiza como ‘monarca’, kuraka ‘gobernador’, qoya ‘reina’, palla ‘señora noble’, etc.
11
De ahí que la presente edición no debe considerarse un texto pedagógico, en el sentido que no se
restituye toda la ortografía normalizada del quechua boliviano actual, sino sólo las grafías mencionadas.
358 Decursos Nº 27-28
Bibliografía citada
Anónimo
1586 Arte, y vocabvlario en la lengva general del Perv llamada
Quichua, y en la lengua Española. Lima: Antonio Ricardo
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Barnadas, Josep
1998 Carlos Felipe Beltrán (1816-1898). Un párroco boliviano
amigo de los indios. Oruro: CEDIPAS.
Beltrán, Felipe
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Imprenta Boliviana de C. F. Beltrán.
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Tornero y Torres (12ª ed., 1878).
Bertonio, Ludovico
1612 Vocabvlario de la lengva Aymara. Arequipa: El Lector
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Berríos, José David
1904 Elementos de gramática de la lengua qheshua. La Paz:
Gonzalez y Medina (2ª ed., 1919).
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126.
2005 De la voz al papel. La escritura quechua del Periódico
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2009 ¿Colonialidad o interculturalidad? Representaciones de la
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360 Decursos Nº 27-28
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Santo Tomás, Domingo de
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los Reynos del Peru, por el maestro Fray Domingo de
Santo Tomás de la orden de Santo Domingo. Cuzco:
Centro de Estudios Regionales Andinos “Bartolomé de las
Casas” (1995).
Thomson, Sinclair
2006 Cuando sólo reinasen los indios. La política aymara en la
era de la insurgencia. La Paz: Muela del Diablo, Aruwiyiri
(1ª reimpr. 2007).
Fernando Garcés V.
362 Decursos Nº 27-28
Suma qamaña? No, gracias
A propósito del libro Suma Qamaña y Desarrollo. El
T’hinkhu necesario
1
A pesar de las diferencias que según Yampara existen entre los tres conceptos, me interesan los
patrones comunes, por tanto los asumo como conceptos similares.
2
Entiendo el Suma Qamaña como un discurso, en términos de producción de sentido y realidad.
364 Decursos Nº 27-28
Estado vs Autonomía
El discurso del Suma Qamaña es estadocéntrico, sus
creyentes asumen que su realización pasa necesariamente por el
Estado, de ahí la importancia de un presidente indígena, que
facilite ese proceso. Y su justificación se halla en la misma
organización comunitaria aymara. El ayllu es considerado una
“célula estatal con población, territorio y autoridad originaria con
población, territorio y autoridad originaria” (Torres, 2012:21). El
estado como horizonte a conquistar está presente a lo largo del
libro; la fuerza de los pueblos en el Qullasuyu según Torres
proviene de los tiwanakus, llegando luego a los Inkas quienes
“llegan a Estado con naciones” (2012:121). Habla de la
“reconstruccion del estado y la nueva economía” como el desafío
del tercer Pachakuti, que tienen las nuevas generaciones de los
pueblos “que enfrentan y reconstruyen el bienestar de los
pueblos” (Ídem, 2012:177). Uno de los fundamentos del Sumaj
366 Decursos Nº 27-28
3
Hay más de un capítulo que ha sido escrito producto de diálogos con Yampara, o escritos con él y
hasta un texto del mismo Yampara producto de la plática.
Suma qamaña? No, gracias 367
4
“Gobierno prevé puente o túnel para proteger núcleo del TIPNIS” http://www.la-razon.
com/nacional/Gobierno- puente-proteger-nucleo-TIPNIS_0_1739226110.html
370 Decursos Nº 27-28
Referencias