Precarización y marginalización laboral y el desempleo en la actualidad
Como se puede apreciar en el estudio de caso se hace relevancia a un porcentaje alto de
la población dentro del país que tienen trabajos ocupacionales, por lo que se nos permite analizar y plantear de acuerdo a lo investigado que se puede plantear la población que tienen un rango académico tienen trabajos en la mayoría son dueños de una micro o pequeña empresa que esto les conlleva a que se genere los subempleos. Cabe resaltar que en las pequeñas y micro empresas se puede observar con más claridad lo que son los trabajos “informales” como existe un alto índice en la población que tienen trabajos informales es porque aceptan las condiciones de trabajo dentro de estos empleos. Lo que nos permite hacer referencia a las condiciones de empleo, subempleo y la precarización laboral nos demuestra que en estos conceptos se puede distinguir que no existe una seguridad laboral también analizamos que las condiciones socioeconómicas son suficientes para una supervivencia que esto de igual forma repercute en el entorno familiar y social del trabajador. La discusión sobre la precarización está en relación no sólo en la relación entre asalariados y capital, sino que en el efecto del crecimiento de grupos de empresas con una posición ventajosa en el resto de la competencia lo que produce generalmente la concentración del mercado. Esto tiene generalmente efectos perniciosos en los equilibrios económicos de un país o una región; básicamente porque limita la capacidad de libertad de consumo y por otro lado porque provoca a mediano plazo un techo para el crecimiento de las micro y pequeñas empresas tienen mayor auge. La profundización del mercado puede provocar el desempleo estructural. La precarización se inscribe también en la lógica de la sociedad del riesgo; es decir, una sociedad que se mueve en incerteza respecto a diversos temas entre los que destacan los valores sociales, el medio ambiente, función civilizatoria e ideología, etc. La desprotección social es un proceso que se da de distinta manera según la realidad socio económica de cada región a estudiar. Por lo tanto, no es asociable directamente a pobreza, vulnerabilidad o riesgo, Por tanto también se puede señalar que parte de esta precarización laboral se centra en la marginación por que estas micro y pequeñas empresas antes de realizar un subempleo lo primero que preguntan es la edad del trabajador, porque los mayores de 40 años ya no son productivos?. Pues bien algunas empresas tiene como límite de edad para acceder al empleo es que sea menor de cuarenta años e incluso de 35 años, pero acaso las personas mayores y que tengan amplia experiencia en el manejo de determinada área puede contribuir en la enseñanza a los más jóvenes, de cierta manera aprovechar la experiencia de estas personas, lo anterior hace que las personas mayores se sientan inútiles y poca oportunidad a acceder a un empleo digno y según su educación. Es una de las razones por lo que la taza de desempleo es aun alto, el empleo juvenil continua en los ámbitos de la informalidad, la precariedad, condiciones adversas, bajos salarios y falta de beneficios sociales. Un porcentaje considerable de los jóvenes se encuentran en situación de desempleo, y mas de la midad de los jóvenes tiene empleos informales y siete de cada 10 cuentan con empleos inestables, temporales o eventuales, con ingresos que no alcanzan ni para cubrir los alimentos básicos. La perspectiva de más y mejor trabajo para los jóvenes no cambiará en el corto y mediano plazo, porque seguirán generándose empleos de menor calificación, en el sector terciario y más precarios. Por lo que que podemos ver que el gobierno ha generado diversas políticas de genracion de empleos dignos para jóvenes personas mayores que oscilan entre la edad de 35 a 40 años. Este panorama revela que los jóvenes bolivianos en su gran mayoría trabajan en condiciones de informalidad, de mala calidad y escasa productividad, con salarios bajos, sin estabilidad ni perspectivas, sin protección social ni respeto de sus derechos. Todos estos factores alimentan los índices de pobreza y exclusión social a corto y largo plazo. Un fenómeno que está presente a nivel internacional y se da con mayor intensidad en Bolivia es que el desempleo juvenil es tres veces mayor que el de los adultos, donde hay un porcentaje muy grande de jóvenes que no logran graduarse. La creación de estos empleos dignos que son programas del gobierno permite evidenciar que la economía del país debe crecer rápida y sostenidamente, fomentar e impulsar el desarrollo productivo y la industrialización del país, ya que las actuales condiciones obligan a los jóvenes a optar por los puestos menos remunerados y más precarios. Por último y como conclusión podemos constatar que aún existe la precariedad laboral dentro del país generando los subempleos, y con ello se va percibiendo la informalidad de los empleos, donde los trabajadores aceptan sin reclamo alguno.