You are on page 1of 155

ENERO 2

(PREÁMBULO DE ALATEEN 9UGBVDO RARA LOS


DOCEM808)

Alateen, parte de los Grupos de Familia Al-Anón, es una


hermandad constituida por jóvenes cuya vida ha sido
afectada por el alcoholismo de un familiar o un amigo íntimo.
Se ayudan rnutuamenle comrjaniendo su experiencia,
ftglale/a y espamuA

Estamos convencidos de que d alcoholismo es un


enfermedad que afecta a la familia desde el punto de vista
emocional y, a menudo, físicamente. Aunque no podemos
cambiar ni controlar a nuestros padres, pedemos
desprendemos emocb-naknente de sus problemas y aun
seglar amándoles.

No discutimos sobre religión ni nos comprometernos con


ninguna organización ajena. Nuestro objetivo primordial es
solucionar nuestros problemas. Tenemos sumo cuidado en
proteger el anonimato de cada miembro, al igual que d de
todos los miembros de Al-Anon y A-A

Apocando los Doce Pasos a nosotros mismos, empezarnos


a crecer mental, emocional y espm&iakrierie. Estaremos
siempre agradecidos a Alateen por brindamos un programa
tan maravffloso y saludable para disfrutarte y seguirte en
nuestra vida.

Preámbulo Sugerido Alateen para los Doce


Pasos

Comienza otro nuevo año. ¿Qué me depara? ¿Será el


momento de hacer muchas promesas para no cumplirlas
ENERO 3

cuando el mes apenas empieza? ¿O será el momento de un


nuevo comienzo?
Con la ayuda del programa, puede ser un nuevo
comienzo. Es el momento de desprenderme de
resentimientos y heridas que he estado soportando, y de
examinarme con mayor sinceridad.
Quizá empiece con un lema o enfoque algún Paso. O tal
vez logre conocer a alguien diferente. Procuraré practicar
con ganas el programa, un día a la vez, y encontrar una
nueva chispa de energía que me ayude acrecer.

Para reflexionar
~ Hoy tengo la oportunidad de empezar nuevamente.
Examinaré más de cerca el programa y trataré de saber
realmente lo que ello significa en mi vida. Me desprenderé del
pasado para mirar hacia el futuro con una actitud positiva.
¡Sé que este año va a ser estupendo!
2) ENERO 4

Vine a Alateen porque no pude enfrentarme al


alcoholismo de alguien muy querido. Pero ¿es acaso ésta la
razón por la cual sigo viniendo?
Si pienso en esto, Alateen probablemente significa
paramí mucho masque aprender a vivir con el alcoholismo.
Esta es una hermandad donde puedo conocer a otros
adolescentes que tienen problemas similares a los míos. Es
un lugar donde puedo ser franca y sincera acerca de cómo
me siento; y más que nada, Alateen es un programa que me
ayuda en todos los aspectos de mi vida: en el hogar, en la
escuela, con mis amistades y conmigo misma.

Para reflexionar
Alateen no sólo me ayuda a enfrentarme a las
dificultades que surgen de la convivencia con el
alcoholismo; también me ofrece la oportunidad de hacer
algo relacionado con cada aspecto de mi vida.
Practicar el programa "en todas nuestras acciones'*, me
ayudará hoy a sacarle el máximo provecho a la vida.
6) ENERO 5

ENERO 3 (3

Estoy atravesando por una nueva etapa de mi vida: el


cambio. Mi cuerpo estácambiando. Me siento diferente.
Algunos días estoy de mal humor, otros días me siento
incómoda y desconcertada. A veces me siento en la cima del
mundo.
Al pensar en todos estos cambios, es difícil enfrentarme
también a los cambios en el hogar. Hay altibajos. Es como si
cada día tuviera algo diferente que enfrentar.
Alateen me ayuda para que estos cambios tengan
sentido en mi vida. Estar con otros adolescentes que viven
con un alcohólico, me ayuda a darme cuenta de que no
estoy sola. Todos nosotros estamos pasando por los mismos
cambios, y lo estamos logrando juntos.

Para reflexionar
No es cosa fácil ser adolescente. Tampoco es fácil vivir
con un alcohólico. Y al juntar ambas cosas, el resultado es
que la dificultad se duplica. Pero hoy, con la ayuda del
programa, estoy aprendiendo a enfrentar esto.
Cuando pasaba por momentos difíciles mientras me
ocupaba de las cosas que sucedían a mi alrededor, solía
escaparme al pequeño mundo de mis ensueños, en el cual
me refugiaba para no sufrir tanto. Me imaginaba que era
una estrella de cine o un héroe o que, sencillamente, era yo
algo especial en la vida de otra persona.
En el programa estoy aprendiendo a enfrentarme a la
realidad, en vez de sumergirme en el mundo de la fantasía.
Los Pasos y los lemas me están ayudando a ver las cosas
como son y a enfrentarme al sufrimiento.
Todavía sigo siendo un soñador, pero está bien, porque
ahora sé cuál es la diferencia entre la realidad y el sueño. Mis
sueños pueden ayudarme a ver el aspecto más luminoso de
las cosas, con tal que no pierda de vista lo que realmente está
ocurriendo en mi vida el día de hoy.

Para reflexionar Estoy en libertad de soñar; pero la


forma en que yo sueñe puede hacer que los sucesos de mi
vida sean diferentes. En vez de escaparme al mundo de los
sueños, puedo utilizar el programa para confirmar la
realidad de las cosas y hacer que mis sueños me ayuden a
pensar positivamente el día de hoy.
ENERO 7 (7

Después de mis primeras reuniones en Alateen, empecé a


leer algo de la literatura. Al principio tuve la impresión de
que casi todo lo que leía no tenía que ver conmigo. Los
Pasos y las Tradiciones me parecían confusos, y los Lemas
demasiado sencillos.
Después de un tiempo noté que estaba
practicando los Lemas; sólo que no había
reconocido las palabras, pues tenía mis propias
interpretaciones. Por ejemplo: Vive y deja vivir,
para mí significaba Dar un poco y Tomar un poco.
Pensé en otros Lemas que expresaran el
programa: Piensa y da las gracias, Encontré uñ
amigo, Aprovecha todo lo que puedas. Pero lo
importante no era inventarlos, sino vivirlos. Eso es
lo que estoy tratando de hacer.

Para reflexionar
Para actuar con sencillez voy a apegarme a los
Lemas. Las palabras y las ideas son fáciles de
captar, pero cuando éstas entran en acción tienen el
poder de cambiar mi vida.
8) ENERO 8

Sentía ganas de hacer añicos al mundo entero. Mi


madre siempre estaba borracha y yo estaba segura de que a
ella no le importaba lo que puediera ocurrirme. Yo quería
gritar a todo pulmón, pero en lugar de hacerlo, hervía por
dentro.
Cuando llegué a Alateen me enteré que no puedo hacer
nada respecto a la bebida de mi madre. Ella es una enferma,
y sólo cuando esté dispuesta obtendrá la ayuda que necesita.
Pero yo puedo hacer algo respecto a mis sentimientos. Puedo
dejar salir la rabia en vez de reprimirla, sabiendo que los
miembros Alateen me comprenderán y aceptarán. Y en vez
de tratar de hacer añicos al mundo, puedo utilizar el
programa para analizar mis problemas grandes y verlos
más pequeños, desde otra perspectiva, fEso para mí tiene
mucho más sentido!

ParjL^reflexionar
A veces estoy tan furiosa que quisiera gritar. Esto no
tiene en sí nada de malo; pero la diferencia está en saber
dónde y cuándo debo expresar mi ira. El lugar apropiado
para hacerlo es en una reunión donde los que escuchan
comprenden; donde las personas están dispuestas a
ayudarme para indagar el origen de la ira y encontrar una
forma positiva y saludable de enfrentarla.
(9

'' Cuando yo era más joven, tenía una idea personal ¡ de


Dios, un Poder Superior que conocía mis \ problemas y que
estaba dispuesto a ayudarme. No f pensaba en El todos los días,
pero sabía que estaba ! allí cuando necesitaba de El.
I - •>! Después, a medida que fue empeorando el j alcoholismo
en nuestro hogar, empecé a creer que I Dios se había puesto en
contra mía. Cuando las cosas | no andaban bien, lo culpaba a El
por todo: cuando ;. estaba en apuros con las tareas de la escuela
y cuando \ mis amistades no entendían por qué las cosas en mi
hogar eran diferentes a las de ellos.
El programa me ayudó a recobrar lo que antes había
sentido por Dios. En vez de emplear mi antigua forma negativa
de culpar a Dios por mis problemas, ahora puedo acudir a El
en busca de ayuda. No siempre obtengo lo que le pido, pero es
mejor que no lo obtenga, pues Dios sabe mejor que yo lo que
me | conviene y me encanta que así sea.
Para reflexionar
: Las cosas se vuelven más difíciles cuando yo obstaculizo a mi
Poder Superior. Tratar de hacer las [, cosas por mí mismo me
deja una sensación de l aislamiento y temor. Cuando aprendo a
confiar en mi Poder Superior y a pedir su ayuda, las cosas van
tomando un curso mejor. El programa siempre me da a
escoger, pero creo que es preferible apegarme a mi Poder
Superior, para solucionar mis problemas con Alguien que me
ama.
10) ENERO 10

Asistí a mi primera reunión con los puños bien


apretados. Estaba enojado, frustrado y dispuesto a
pelear con cualquiera.
Ahora me doy cuenta que aquello no era más que
una pantalla para disimular todo el dolor que estaba
sintiendo. Por dentro me sentía sumamente
nervioso, deshecho, y lo único que quería era echar
a correr y escapar de todo.

Entonces la hermandad hizo el milagro. El


sufrimiento que sentía sirvió de instrumento para
ayudar a otros; al acercarme a un miembro nuevo,
le decía: "Sé cómo te sientes, porque yo he pasado
por lo mismo". Era verdad en aquel entonces y lo
sigue siendo ahora. Compartir mi sufrimiento fue la
clave para liberarme.

Para reflexionar
Sufrí mucho en el pasado. En cierta época creí
que el dolor iba a matarme. Ahora me alegro de
haberlo experimentado, porque puedo ayudar a
otros, y decirles que comprendo cómo se sienten.
Ese mensaje fue claro y rotundo cuando llegué a
Alateen, y yo quiero pasarlo a otras personas.

PKEROll (11

m' Cuando asistimos por primera vez a Alateen, para ■Ifiiian de


nosotros es duro ver cuan deshonestos nos Habíamos vuelto. Creo
que ahora somos sinceros cuando decimos que no robamos ni
decimos (Mentiras. Pero hay otras formas de ser deshonestos con
nosotros mismos.
Algunos de nosotros, al meternos en líos, rechazar amistades y
hasta estudiar la forma de burlarnos de otras personas, estamos
encubriendo nuestros verdaderos sentimientos de soledad y miedo.
Tratamos de convencernos a nosotros y a los demás, que ésta es la
forma en que queremos vivir, pero en lo más profundo de nuestro
ser, sabemos que no somos sinceros y que sólo nos estamos
perjudicando. I En el programa aprendemos que no tenemos por
Revivir así. Podemos dejar de escondernos detrás de nuestras
mentiras y decir las cosas como son en realidad. En la medida que
somos sinceros acerca de nuestros sentimientos, es mucho más fácil
vivir con nosotros mismos y con la gente que nos rodea.

Para reflexionar
En Alateen no necesito fingir, pues ya no tengo miedo a
mostrar mis verdaderos sentimientos. Ser sincero conmigo mismo
me hace sentirme mucho mejor, pues los demás pueden llegar a
conocerme como realmente soy. Después de todo ningún
encubrimiento puede substituir a mi verdadero YO.
Cuando mis padres no me dieron la atención que esperaba de
ellos, los acusé de que no me querían en absoluto, y les di la espalda.
Al llegar a la hermandad descubrí lo equivocada que había estado.
En lugar de aceptar, rechacé loque me habían brindado.
La práctica del programa me ayudó a comprender que cada
persona ama de diferente manera. Cuando dejé de esperar que mis
padres me amaran como yo quería, pude aceptarles a ellos y a sus
sentimientos para conmigo. No tardé mucho en darme cuenta que,
en realidad, nunca habían dejado de amarme.

Para reflexionar
Es posible que otros no sean capaces de amarme en la forma que
yo deseo. ¿Puedo aceptar esto sin guardar resentimiento, y ro
10) ENERO 11

obstante seguirles amando? Claro que puedo, con tal que


eatédispuesta a aceptarlos como son y recordando que el verdadero
amor es incondkáonal, sin ataduras.
A veces me gusta usar una salida fácil; hago lo que quiero y no
lo que debo. Es más divertido salir con mis amigos en vez de hacer
la tarea escolar que durante horas he estado aplazando; es más fácil
quedarme en la casa, de brazos cruzados, en vez de cumplir con
mis quehaceres.
Cuando se me antoja hacer algo en lugar de hacer lo que
necesito, voy a acordarme del lema Primero lo primero. Si tomo
el lema en serio, éste me ayudará a decidir lo que es más
importante. Cuando me haya ocupado de las responsabilidades
que tengo para conmigo y para con los demás, podré disponer de
más tiempo para disfrutar las cosas que me gusta hacer.

Para reflexionar
¿Qué es importante en mi vida? ¿Qué es lo que quiero? ¿Qué
necesito? Alateen me ayuda a responder estas preguntas. Para
ordenar mis prioridades, hoy haré Primero IQ primero.

Antes de venir a Alateen, la vida no tenía mucho sentido


para mí. No entendía por qué las personas se perjudicaban
unas a otras en la forma que lo hacían. Tampoco sabía qué
esperar de la vida ni en quién confiar o qué camino tomar.
Esa confusión realmente me consternaba. Yo
pretendía abordar todos mis problemas a un tiempo. Me
sentía frustrada y a veces quería darme por vencida.
Pero el hecho de estar confundida fue lo que me hizo
profundizar en el programa para poner las cosas en claro.
Los Doce Pasos me ayudaron a separarlas poquito a poco.
Mi pensamiento, gradualmente, retornó al buen camino y la
vida fue cobrando más sentido para mí.

Para reflexionar
Alateen es la llave que abre la puerta de mi mente
confusa. Tengo un programa que me ayuda a imprimirle
sentido a la mezcla de mis pensamientos y sentimientos
confusos. Viviéndolo me mostrará cómo lograr hoy un poco
de paz mental y tranquilidad espiritual.
El Primer Paso me dice que soy incapaz ante el alcohol -
lo que le hace a la persona que lo bebe, o la cantidad que
bebe. De hecho, no puedo controlar a ninguna otra persona.
Si empleo mucho tiempo tratando de controlar a otros, estoy
dejando que mi vida se descontrole y se vuelva ingobernable.
Si puedo aceptar el hecho de que yo soy la única persona
a quien puedo cambiar, entonces no tendré que enfrentarme
a sentimientos de culpabilidad que brotan cuando trato de
controlar al alcohólico y a otras personas en mi vida. Tengo
bastante con vivir mi propia vida.

Para reflexionar
La aceptación es la parte más importante del Primer
Paso. Es el comienzo de estar en control de mi propia vida
otra vez. Si pongo empeño en practicar el Primer Paso,
puedo lograr hoy ese control.
10) ENERO 12

Antes de entrar a Alateen había momentos en que no


sabía qué decirle a la gente. Quería que se enteraran que
realmente me interesaba por ellos, pero no dio resultado.
Aunque sabía que estaban dispuestos a escucharme, había
algo que me impedía que yo tes dijera cómo me sentía.
Hoy estoy aprendiendo a obrar con sencillez. Ya no me
preocupo por las palabras. Simplemente trato de decirle a la
gente lo que siento. Les digo, "¡Magnífico!", o bien: "No,
realmente no me gusta". Trato de decir lo que de verdad
siento. No me preocupa si no les gusta lo que les diga. Digo la
verdad, pues soy sincera conmigo misma y con la gente con
quien hablo.

Para reflexionar
Cuando estoy tratando de decir algo, los sentimientos
son tan valiosos como las palabras. El programa me ayuda a
ser sincera con mis sentimientos, y a "decirlo tal cual es".
Hoy trataré de que mis palabras sean sencillas y que sean
mis sentimientos los que hablen.
La gente se plantea esta pregunta: "¿Con encontrar a
Dios?". La respuesta es: buscand escuchando y aprendiendo
de las experiencias de otr¡ personas.
Creo que Dios está dentro de cada uno de nosotro Mi
Dios es cariñoso. Sólo quiere lo que es bueno pai mí. Me
ayuda a sentirme satisfecho conmigo mismi Creo en El
porque le he visto reflejado en mis amigc de Alateen.
Lo que siento durante el cha va íntimamente ligad con
hacer ¿% voluntad de Dios. Me siento muy mi cuando trato
de manejar las cosas a mi manera. Pee si procuro vivir cada
día de la mejor manera posibh haciendo lo que Dios quiere
que yo haga, me sient mucho mejor.

Para reflexionar
En Alateen encontré un Poder Superior a m mismo. El
me ama y me da la fortaleza suficiente par que yo pueda
finalizar el día. Creo en El y sé que E cree en mí.
18) ENERO 13

Mis pensamientos y sentimientos se asemejan a los


Ingredientes de un pastel; pueden ser estupendos, pero no
sirven de nada hasta que quedan bien mezclados y
adquieren consistencia antes de vaciarlos en el molde. Tengo
muchísimos pensamientos y sentimientos buenos, pero si no
concuerdan con mis acciones se desperdician.
Yo elijo la consistencia que le doy a mis pensamientos
y sentimientos, de acuerdo con la forma en que me
desenvuelvo cada día. Cuando trato de manejar las cosas a
mi modo, termino por entristecerme. Hay días en que creo
poder controlar las situaciones de mi vida, pero realmente no
puedo.
El Tercer Paso sí lo logra, y en mejor forma. Al confiar
mi voluntad - mis pensamientos y sentimientos - y mi vida
-mis acciones - al cuidado de Dios, según mi propio
entendimiento de El, me proporciona una vida más vigorosa
y más sana. Cuando mis pensamientos, sentimientos y
acciones trabajan como un todo armonioso, la "receta*'
cuenta con más probabilidades de éxito.

Para reflexionar
Algo de lo mío, que considero importante, es mi forma
de pensar y sentir, y también mi forma de actuar. Pero si mis
pensamientos y sentimientos no concuerdan con mis
acciones, me creo problemas. El Tercer Paso puede ayudar a
reforzar esta conexión. Me muestra la forma en que Dios
cuida de mi voluntad y de mi vida, para que cada día pueda
yo actuar en forma más positiva.
ENERO 14

Bill W., cofundador de AA, descubrió qu<


momentos de desesperación, la única forma en podía
recobrar la serenidad era ayudando a alcohólico
atribulado. En Alateen, cada día ten< la oportunidad
de ayudar a otros.
Compartiendo nuestra experiencia con
miembros del grupo, podemos ayudarles para
comprendan y se enfrenten a sus problemas, hacerlo
estamos recibiendo más de lo que da Vemos cómo van
progresando, y eso nos ayi crecer a nosotros también.
Esta clase de ayuda no consiste en enseñar
predicar, sino en compartir experiencias, fortal
esperanza. Es ser franco con los demás, par; entren en
nuestra vida.

Para reflexionar
En la medida en que ayudo a los demás, ]
comprender mejor mis propias necesidades fortaleza.
Poco a poco, mis pensamien sentimientos van
aclarándose, y empiezo a hall soluciones para mis
propios problemas; mi ayudo a que otros se enfrenten
a los suyos. Ex mi mano a otros es interesante, por las <
personas y por mí mismo en forma muy es] Hoy me
acercaré a la gente para ayudar a algui lo necesita.
ENERO 15

Cuando en una reunión escuché por primera vez que se


hablaba de aceptación y rendición, creí que estaban locos y
así se los dije. Por supuesto que ellos no esperaban que yo me
dejara caer al piso para fingirme muerta y que la gente me
pasara encima. Yo había estado en guerra constante contra el
alcohólico y me parecía que ahora no iba a darme por
vencida para que él ganara.
Por fin, cuando logré calmarme, alguien logró
comarcarse conmigo. Me ayudó a darme cuenta que había
arrumado mi vida al tratar de controlar la situación y
cambiar a todos los que me rodeaban. Esto dio en el clavo y
me hizo detenerme a pensar.
Ahora sé que hay algunas cosas que no puedo cambiar,
especialmente a otras personas. Admito que no es fácil, pero
me doy cuenta que cuando me rindo y lo acepto, y no soy
aquella persona débil que pensaba que era; ahora, soy
mucho más fuerte. No es que me dé por vencida sin ninguna
esperanza; sencillamente, estoy tratando de dejar las cosas
que no puedo cambiar, para ocuparme de cambiar yo
misma.

Para reflexionar
Aceptar y rendirse, son dos actitudes que abren las
puertas a la vida. Cuando me desprendo de mi terquedad y
obstinación, y acepto el hecho de que no puedo controlarlo
todo y a todos en mi vida, doy un paso enorme hacia mi
crecimiento personal. Me proporciona tiempo para
ocuparme de mí y realmente ése es el propósito del
programa.
ENERO 16 (

Apenas había estado unos cuantos meses Alateen,


y no dejaba de preguntarle a mis amigos, i y otra vez, si
habían notado algún cambio posit en mí. Me sentía más
feliz y más serena; pero, i así, quería que otros me
dijeran que el programa estaba ayudando a
recuperarme.
De lo que no me daba cuenta era que yo necesit la
aprobación de otras personas para adular mi eg<
Ahora me siento mejor. Estoy empezand sentirme
bien con lo que hago, y me dejo guiar poi conciencia. Si
sigo asistiendo a las reuniones Alateen con una mente sin
prejuicios, mi Pe Superior entrará en acción a partir de
ese instante.

Para reflexionar
Aunque puedo escuchar y aceptar las cosas buc que
la gente dice sobre mí, no tengo que e buscándolas para
sentirme mejor. Sé que eí viviendo el programa en la
mejor forma que pu< un día a la vez. Esa es la mejor
razón para sentí satisfecha de mí misma.

No me es fácil admitir que, en ocasiones, hago cosas


despreciables. Busco pleitos porque me complace gritar, y a
veces detesto a la gente. ¿Quién quiere decirle a alguien cosas
como éstas?
Es duro estar soportando esta carga, pero el Quinto
Paso, - admitir ante Dios, ante mí mismo y ante otro ser
humano - me ayuda a liberarme de esa carga. Cuando
admito estos sentimientos puedo desprenderme de ellos y
eliminarlos de mi mente, lo cual me hace sentirme Ubre.

Para reflexionar
El Quinto Paso es un gra*. alivio. Me resulta
beneficioso no tener que ocultar y reprimir mis sentimientos.
Al expresarme sin rodeos, admitiendo mis faltas, se me
despeja la mente, y me resulta más fácil pensar en sacarle al
día el máximo provecho.
Dios nos tiene muchísima paciencia cuando
tropezamos al tratar de mejorar como personas. En algunas
ocasiones, después del Quinto Paso queremos aferramos a
algunas de nuestras faltas predilectas. Sabemos que tenemos
que desprendernos de ellas pero, sencillamente, no estamos
dispuestos todavía.
El Sexto Paso puede ayudarnos. El texto de este Paso
tiene pocas palabras, pero dice mucho. Dios nos ayudará
cuando estemos dispuestos a darnos por vencidos en la
lucha por hacer nuestra propia voluntad. Es otra forma de
decir Suelta las riendas y entrégaselas a Dios.

Para reflexionar
El Sexto Paso nos da la oportunidad de cooperar con
Dios. Mi meta es estar dispuesto a desprenderme de mis
faltas, y dejar que Dios se encargue del resto.
24) ENERO 17

Cuando en mi casa las cosas iban de mal en peor, empecé


a escaparme. Al regresar, mí madre no podía tenerme
confianza; ella nunca sabía lo que iba yo a hacer. De modo
que se quedaba conmigo en casa y yo no podía salir a
ninguna parte. Durante cierto tiempo, me portaba bien, pero
cuando me daban permiso de salir, volvía yo a las andadas.
En cierta ocasión que regresé al hogar, me encontraba
físicamente enferma a causa de todas mis correrías. Fue
entonces cuando mi madre me habló de Al-Anon y Alateen.
Me atrapó en el preciso momento, pues yo hubiera intentado
cualquier cosa con tal de no sentirme tan mal.
A la noche siguiente fui a mi primera sesión, y
personalmente pude darme cuenta de lo que ella me había
descrito. Por primera vez sentí la sensación de estabilidad. Al
salir de la reunión me sentí mejor, y supe que en vez de huir,
podía regresar a la sesión y resolver mis problemas con estas
personas tan comprensivas.

Para reflexionar
Parecía fácil evadirme de mis problemas pero, por lo
general, ellos me siguen por dondequiera que vaya. Se
necesita tener mucho valor para enfrentarlos cara a cara.
Cuando hago esto utilizando el programa, nunca estoy sola.
Hay una hermandad de amigos aguardando para recibirme
y ayudarme a encontrar las soluciones que necesito.
Cuando era más chica, creía que la vida era como los
melocotones con crema; pero ahora veo que parecen como
fresas congeladas. Tuve que pasar por un verdadero infierno
para poder descongelarlas; gritos, escándalos, sentimientos
heridos y promesas incumplidas. No fue fácil, pero ahora
tengo un programa que me ayuda a enfrentarlo.
A veces creo que mi papá no se preocupa gran cosa por
mí, mi mamá trata de abrumarme con cuidados, y mi
hermano, su único interés es en sí mismo. Pero ahora me doy
cuenta de que todos nosotros quedamos afectados por el
alcoholismo, y sólo puedo ayudarme a mí misma.
Casi siempre puedo manejar las cosas en casa, pero
cuando empiezan a deprimirme, cuento con el apoyo de mi
H
nueva familia", mis amistades de Alateen.

Para reflexionar
No es fácil vivir con el alcoholismo en el hogar. Hay
momentos muy duros, y no siempre puedo resolverlos sola.
Pero eso no importa porque ahora puedo acudir a mis
amigos de Alateen, y ellos me ayudan a encontrar la fuerza
que necesito.

La Primera Tradición sí funciona. Esta es la


forma en que un grupo la utilizó: "Frecuentemente,
nuestras sesiones eran tranquilas y aburridas, hasta
que pudimos captar el sentido pleno de la Primera
Tradición". Sin la unidad grupal no hubiéramos
tenido buenas reuniones, y los recién llegados no
hubieran recibido la ayuda que necesitaban.
ENERO 18 (18

Después de leer y estudiar a fondo la Primera


Tradición, todos nos dimos cuenta de que teníamos
que dar un poco más de nosotros mismos para que
el grupo funcionara.
"Empezamos a compartir mutuamente, luego
empezamos a tener confianza entre nosotros. Tal
confianza facilitó la solución de nuestros problemas,
y los nuevos miembros se sintieron también más a
gusto".
"Hoy nos sentimos agradecidos por esta
confianza. Nuestro grupo actúa de común acuerdo,
y sabemos que cuando surjan problemas podemos
ayudarnos mutuamente".

Para reflexionar
Trabajar juntos significa ayudarnos los unos a los
otros. Esto requiere gran confianza y comprensión.
La Primera Tradición abre esa puerta. Hoy puedo
utilizarla para ayudar a que mi grupo se fortalezca.
Siempre andaba sonriendo, pero a veces mi sonrisa
no expresaba precisamente lo que estaba sintiendo por
dentro. El sonreír disimulaba mucho mi llanto e impedía
que la gente llegara a conocer mi verdadero yo.
Ahora formo parte de esta hermandad, estoy
aprendiendo a enfrentarme a esos sentimientos íntimos,
para que pueda revelarlos como realmente son. Ya no estoy
sonriendo a todo momento, pero cuando lo hago, la sonrisa
exterior sí refleja ahora lo que llevo por dentro.
Cuando sonrío me siento contenta. Mientras más
rodeada estoy de gente, más consciente soy de que los
sentimientos pueden contagiarse. Cierta mañana que
caminaba por la calle, empecé a sonreír y los resultados
fueron increíbles. La gente me devolvía la sonrisa y algunos
hasta me dieron los "Buenos días". Esto me ayudó
realmente a empezar mi día estupendamente.

Para reflexionar
No tengo que estar dando vueltas con una sonrisa de
oreja a oreja; pero una sonrisa natural es mucho más
efectiva que una mirada agria. Cuando empiezo el día con
una sonrisa, eso me pone en un estado de ánimo positivo, y
el resultado es que todo mi ser se siente mucho mejor. Quién
sabe si eso es precisamente lo que alguien necesite ese día
para reanimarse.
28) ENERO 19

A veces necesito asistir a más de una reunión semanal,


pero sólo hay un grupo Alateen en mi pueblo y sesiona una
vez a la semana. ¿Quehacer?
No hay problema, asistiré a una reunión de Al-Anon.
Encontré un grupo en el que realmente me siento a gusto, y
sus miembros hacen que me sienta como en casa. Ellos me
dan lo que necesito, justo cuando lo necesito. A medida que
asisto a esas reuniones, estoy cada vez más consciente de lo
agradecida que me siento de que Al-Anón y Alateen sean
parte de la misma gran "Familia".

Para reflexionar
Cuando no cuento con una reunión en mi grupo, voy al
grupo Al-Anón más cercano. Allí encuentro lo que ando
buscando; amistad, comprensión y un programa bueno y
firme. Para mí es una gran ayuda y lo añado a los grandes
logros que he obtenido en Alateen. Juntos hacen una
excelente combinación.
El Duodécimo Pato es uno de mis favoritos parque éste
envuelve a los otros once. Muchos miembros tienen
problemas en la parte del Paso que dice "despertar espi-
ritual". A mí me pasó lo mismo, pero ahora lo considero
como algo queme hace ser más consciente de mí misma y de
mi Poder Superior.
Otra parte dice: "tratamos de llevar este mensaje a otras
personas." La mejor forma de lograrlo es vivir el programa
y dar un buen ejemplo a los demás.
Cuando recaigo en mi antigua forma de pensar, tengo
que recordar que hay que "practicar estos principios en to-
das nuestras acciones": en el hogar, en la escuela, el trabajo y
con mis amistades; no solamente cuando voy a mis
reuniones Alateen. Esto tengo que aplicado un día a la vez,
para que me ayude a olvidar mi antigua forma de ser y a
empezar renovada cada día.

Para reflexionar
Desde que adopté esta nueva forma de vida en Alateen,
me siento más viva que nunca Para seguir creciendo, la
respuesta está en el Duodécimo Paso. Tengo que tenderles la
mano y ayudar a otros adolescentes que necesitan la ayuda
de Alateen; y tengo que mantenerme practicando el
programa en todos bs aspectos de mi vida todos los días, un
día a la vez.
Siempre pensaba que la serenidad era una vida sin
problemas. No es cierto. Estoy aprendiendo a vivir con ira,
discusiones, sentimientos heridos, es decir, con todas las cosas
que me hacen humano.
El programa me da paz mental, lo cual me ayuda a
orientarme en mis dificultades. Dispongo de un equipo
instrumental que me ayuda a abordar mis problemas, de
amigos que me apoyan y me comprenden, y de un Poder
Superior que me ama. Trato de sacarle el mejor partido a la
vida, incluyendo las dificultades.
La serenidad no consiste en librarse de los embates de la
vida. Es la calma en medio de la tempestad, lo que me hace
que los venza. Aunque la tormenta empeore, de mí depende
que trate de conservar la calma.
Para reflexionar
La serenidad no es algo que me protege de los momentos
difíciles, sino una especie de fortaleza que me ayuda a
enfrentar mis problemas para irlos resolviendo. Hoy,
cuando le pido a Dios que me conceda serenidad, recordaré
que puedo meditar detenidamente y sacar el mejor partido a
cada situación en que me encuentre.
ENERO 20 (20

Cuando los miernbros de AA tienen una recaída, significa


que vuelven a beber. También bs miembros Alateen tienen
sus recaídas. Para nosotros recaer es un retroceso hacia
nuestras antiguas actitudes.
Otando nuestra familia, amigos o la escuela nos tienen
hartos, ¿volvemos a obrar como antes, huyendo de nuestros
problemas o echándole la culpa a alguien o a algo? ¿O más
bien utilizamos nuestro programa?
Los lemas, por ejemplo: ¿Cuan importante es?, Vive y
deja vivir, y Suelta las riendas y entrégaselas a Dios,
nos ayudan a superar las dificultades. Podemos volcar
nuestras actitudes sobre nuestro Poder Superior y pedirle
que nos ponga de nuevo en el camino correcto.

Para reflexionar
Una recaída puede hacerme tropezar y reincidir en mi
antigua forma de pensar, o bien puede motivarme para
poner más empeño en utilizar el programa. Quien lo decide
soy yo. Hoy le pediré a mi Poder Superior que me ayude a
enfrentar sinceramente mis problemas y a regresar al
camino correcto para seguir progresando.
Antes de entrar a Alateen, yo simplemente existía.
Vagaba. Daba la vida por sentado y muchas veces creía que
no valía la pena m el esfuerzo de quedarse en este mundo.
Entonces empecé a ir a Alateen. Al principio, subsistía en
la hermandad con el amor que encontré allí. Pero cuando
comencé a examinar los Doce Pasos, la vida fue adquiriendo
para mí un nuevo sentido.
Todavía hay veces, cuando me siento satisfecha de mí
misma, que me alejo del programa. Pero cuando me observo
con atención y practico los principios del programa en todas
mis acciones, vuelvo a comprometerme con la vida y
realmente empiezo a vivir.
Para reflexionar
La vida es algo más que la sola existencia. El programa
me enseña a vivirla al máximo. Hoy voy a procurar sacarle el
mejor provecho a la vida, practicando el programa en todo lo
que haga.

La gente velas cosas en forma diferente. Unos miran la


vida y ven bondad, belleza, amistad y esperanza; otros,
miran la misma vida y ven problemas, fealdad, soledad y
desesperación.
¿Dónde está la diferencia? En las actitudes.
En Alateen aprendí que considerar una situación hará que
me sienta alegre o triste, resentido o comprensivo, enojado o
tranquilo, amable u odioso. El practicar los Pasos, Tradi-
ciones y lemas me ayuda a fomentar una actitud más feliz y
positiva, y a fijarme más en las cosas buenas de mi vida.

Para reflexionar
La diferencia no está en las "cosas" sino en las actitudes
que adoptarnos al respecto. El programa me proporciona los
instrumentos para pensar positivamente. El utilizarlos me
ayuda a ver el lado brillante de cada situación en que me
encuentre hoy.
Cuando mi padre empezó a beber mucho, mi madre
trataba de impedirlo, pero de nada servía. Acababa
28) ENERO 21

sentándose en el bar y tomando al parejo con él. Cuando yo


los necesitaba, parecía que nunca estaban en la casa. Me
sentía sola e indeseable, como si nadie se preocupara por mí
en lo absoluto.
Empecé a buscar una solución para salir de esa vida
infame que tanto odiaba hasta que, finalmente, decidí que la
única respuesta era el suicidio. En realidad, yo sabía que no
quería morir; sencillamente quería que alguien se ñjase en
mí.
Antes de intentarlo, alguien me llevó a una sesión de
Alateen, y desde entonces he estado en Alateen. Esto me ha
ayudado a comprender muchas cosas que antes desconocía
respecto a mis padres y a mí. Los pensamientos suicidas
están ahora muy lejos de mi mente, pues me doy cuenta que
no tengo por qué castigarme para que alguien se ñje en mí.

Para reflexionar
Cuando me siento entre la espada y la pared, quiero
encontrar una salida. Encontré una: el programa. Es como
un nuevo comienzo y me demuestra realmente que vale la
pena vivir.
FEBRERO 4 (22

Antes de Alateen estaba dominada por la


autocompasión, la cual casi me destruyó. Intenté todo para
solucionar mis problemas, pero nada me dio resultado. Me
sentía aislada y deprimida. Toqué fondo, y me di cuenta que
tenía que hacer algo.
Alateen fue mi último recurso. Jamás olvidaré la
cordialidad y la amistad que encontré allí en mi primera
sesión. Fue el empujón que necesitaba para seguir adelante.
Ahora el programa es para mí una forma de vida. Al
compartir experiencia con los miembros y al tratar de
aplicar el programa a mi vida, estoy empezando a sentirme
mejor. La Oración de la Serenidad me ha ayudado a hallar
aceptación, y el Primer Paso me recuerda constantemente
que sólo puedo tener dominio de mí misma. Los Lemas me
han ayudado en forma muy especial; existe uno para cada
situación en la vida.
Aún tengo batallas diarias que superar - así es la vida -,
pero ahora puedo ver los aspectos positivos, gracias a
Alateen, que me enseña el camino hacia una vida más sana,
más feliz y más productiva.

Para reflexionar
Cuando dejo la autocompasión y empiezo a practicar
el programa, logro una nueva perspectiva de la vida. Los
obstáculos que se presentan ya no me parecen tan grandes si
utilizo los Pasos, los lemas y la Oración de la Serenidad para
enfrentarlos. Alateen es para mí una nueva forma de vida, y
hoy es mi día para empezar a vivir el programa.
23) FEBRERO 5

Todos tenemos malos días, pero cuando yo pasaba por uno


de ellos, me despertaba muy tenso. Me pasaba casi todo el
tiempo maldiciendo mi suerte y cometiendo un error tras
otro.
Ahora trato de recordar el lema "Hazlo don calma", y
hacer algo que me guste. Si me apetece descansar, entonces
me relajo. Si deseo hablar con alguien, llamo a mi padrino y
salimos a tomar un café o un refresco. Si lo que necesito es
pasar el día solo, me pongo al día en mi lectura, escribo
algunas cartas o disfruto uno de mis pasatiempos.
No tengo por qué estar amargado cuando el día es
desabrido. Calmarme y hacer algo que me guste, me ayuda a
pasar el día más fácilmente. Un día que parezca destinado al
fracaso, puede convertirse en algo magnífico.

Para reflexionar
No puedo esperar sentirme a gusto todo el tiempo. No soy
un robot sino un ser humano. Cuando tenga un mal día,
trataré de aceptarme tal como me sienta, me despreocuparé
y descansaré. Una buena forma de transformar totalmente el
día es tomar tiempo para disfrutar yo mismo.

Al aceptar el Primer Paso, sé que mi vida es mgobernable.


Ahora es el momento de pensar en recibir ayuda de alguna
parte. El Segundo Paso me muestra cómo encontrar esa
ayuda, al creer ai un Poder Superior a mí mismo.
Un Poder Superior obra por medio de otras personas, así
que no tengo que buscarle como aguja en un pajar. Lo único
que tengo que hacer es asistir a las reuniones y compartir con
la gente que está allí. A medida que haga amistad con ellos
podré platicarles de mis problemas. Averiguaré lo que les dio
resultado, y empezaré a creer que también a mí me dará
resultado.
Quizá no sea fácil creer en un Poder Superior; pero esto
puede iniciarse cuando pido ayuda a los demás, y tengo fe en
que ellos me ayudarán con mis problemas.
Para reflexionar
Cuando estoy buscando la ayuda de un Poder Superior no
tengo que mirar muy lejos. Los miembros de mi grupo
Alateen están dispuestos a ayudarme. Todo lo que tengo que
hacer es pedirla. Aprender a conocerlos y amarlos me ayuda
a creer en un Poder Superior.
Solfa ser una persona solitaria. Creía que nadie Quería
escucharme, y por eso no hablaba mucho.
Al llegar a Alateen me encontré con gente dispuesta a
escuchar. Así que recuperé el tiempo perdido. Hablé hasta
por los codos. Después de un tiempo dejé de hablar tanto y
me di cuenta que yo casi no escuchaba. Terna un sensación
de vacío dentro de mí. Al no escuchar, no estaba aprendiendo
nada.
Apenas empecé a escuchar a otros comencé a crecer y a
cambiar. Ellos tenían mucho que compartir lo cual me ayudó
venladeramente, en especial lo que les había ayudado a ellos a
resolver sus problemas.

Para reflexionar
Escucha y aprende es un buen lema para habladores
como yo. Hablar es una buena forma de expresar
abiertamente mis sentimientos; pero si sólo escucho mi voz,
no voy a aprender gran cosa para encauzarlos. Necesito
concentrarme un poco más en oír, y menos en hablar.
Escuchar a mis amigos Alateen es una magnífica forma para
aprender a ayudarme a mí mismo.
24) FEBRERO 5

La ira es algo normal. De vez en cuando todos nos


enojarnos. Pero sucede que yo soy una penxm acostumbrada
a reprimir la ira. Dejo que ésta se acumule en mi interior
hasta que una nimiedad me provoca y estalla Aprendí a
duras penas a darme cuenta que esto no era muy saludable.
Estaba perjudkándome y perjudicando a otras personas, al
deckyhacercx)6assmiráencii6n.
Mis amigos Alateen me ayudaron a examinar esto para
que me librara de la ira. A veces agarro una almohada y la
golpeo, o hago algún ejercicio físico, como montar en
bicicleta o correr. También me ayudó el telefonear a mis
amigos para hablar de mis problemas.
Me ha ayudado mucho utilizar sus ideas. Ya no exploto
como antes, y ahora me siento más relajado.

Para reflexionar
Está bien enojarse, pero lo más importante es b que
haga con mi enojo. Si b reprimo, puedo herir a otras
personas y perjudicarme yo también. Elmimarb en forma
sana me da la oportunidad de calmarme y de disfrutar de la
vida.
25) FEBRERO 9

A mi me enseñaron que había que amar a todo el


mundo. Que odiar era algo malo. Odiaba al alcohólico
porque bebía, y odiaba a mis padres cuando se ponían a
discutir. No podía refrenar estos sentimientos de odio, de
modo que me consideraba una mala persona.
En Alateen me di cuenta que hay otras personas con los
mismo sentimientos. Ellos me ayudaron a comprender que,
en realidad, yo no odiaba a mis padres sino lo que hacían.
Después de esto, ya no me sentí tan mal.
Ahora estoy aprendiendo a reemplazar mis
sentimientos de odio con amor y comprensión. Después de
todo, sé que no soy una mala persona. Me siento satisfecho
de mí mismo y de mis padres, y hoy en nuestro hogar hay
mucho más amor.

Para reflexionar
El programa me ayuda a entender mis sentimientos -
algunos de ellos tan fuertes como el odio. Ahora sé que mis
malos sentimientos no me convierten en una mala persona.
Hoy me concentraré en desprenderme de esos malos
sentimientos y en empezar a sentirme satisfecho de mí y de
lo que me rodea.
Cuando vine por primera vez a Alateen, me encerré en
mí mismo y no me tomé la molestia de compartir mis
problemas con nadie. De hecho, no quería intimar con la
gente, pero lo tergiversaba todo diciéndome que ellos me
estaban ignorando.
Por lo tanto, decidí dejar de ir a las reuniones, y empecé
a buscar gente que me aceptara y se hiceran amigos míos.
En la pandilla que frecuentaba bebían alcohol y usaban
drogas. Al principio pensaba que era gente audaz, pero
pronto me sentí desubicado. Después probé con los grupos
de oración. La gente era bastante amable, aunque tampoco
me sentí a gusto con ellos.
Finalmente comencé a darme cuenta de que había
estado buscando aceptación y amistad en sitios equivocados.
Alateen tenía todo eso y más de lo que esperaba. Regresé a
las reuniones y decidí prestar ayuda en vez de quedarme
sentado sin hacer nada. Pronto encontré lo que andaba
buscando, lo cual me ayudó a resolver mis problemas.

Para reflexionar
Si busco amor y comprensión no tengo que ir muy lejos.
El grupo Alateen más cercano tiene todo lo que necesito y
más. Es gratis y todo lo que tengo que hacer es pedir ayuda y
aceptarla.
Eliminar mis defectos, es como ir desprendiendo las
capas de una cebolla. Primero quito una, luego otra, y otra,
hasta llegar al centro. Esa es la parte más difícil.
No es fácil pelar una cebolla, y tampoco, es fácil hacer el
Séptimo Paso. Este dice que necesito ser humilde cuando le
pida a Dios que elimine mis defectos de carácter. Pero el
orgullo me impide llegar al "centro1*. No estoy
verdaderamente segura de querer cambiar tanto, aún
cuando ello signifique para mí mejorar como persona.
Pero cuando examino a mi alrededor y veo la mirada
en los ojos de mis compañeros Alateen, sé que este Paso sí da
buenos resultados. Cada día están trabajando sus defectos,
aunque no tratan de lograrlo por sí mismos, sino piden la
ayuda de Dios y obtienen la serenidad que desean. También
yo puedo lograrla si estoy dispuesta a dejar que Dios me
ayude.

Para reflexionar
Deshacerse de capas y más capas de malos
sentimientos no se logra de la noche a la mañana. Pero con la
ayuda de mi Poder Superior sí es posible. Todo lo que tengo
26) FEBRERO 9

que hacer es pedírselo. El Séptimo Paso me da precisamente


la oportunidad de lograrlo.
Por mucho tiempo pensé que era culpable del
problema de bebida de mi madre. Sentí un gran alivio
cuando me dijo que el culpable era mi padre. Por supuesto,
le creí. Mi padre casi nunca estaba en la casa a causa de su
trabajo, y yo estaba segura de que mi madre se sentía
abandonada, y por eso se había dado a la bebida. Yo amaba
a mi madre y detestaba lo que le estaba sucediendo. De
modo que decidí castigar a mi padre por perjudicarla y por
haber arruinado nuestra familia. Me burlaba de él y le
respondía sarcásticamente a más no poder. En forma
morbosa, me deleitaba viéndole sufrir.
En aquel tiempo, yo no sabía que nadie es causante del
alcoholismo. Tuve que escuchar esto en muchas sesiones,
antes de aceptar realmente este hecho y de librarme de mi
necesidad de castigar a mi padre. El compartir con otras
personas afectadas por el alcoholismo, me abrió los ojos.
Empecé a darme cuenta que mi padre estaba
profundamente lastimado y traté de dejar de humillarle.
Oportunamente, pude reparar el mal y concentrarme en
resolver nuestros problemas en vez de estar contra él.

Para reflexionar
Es fácil echarle la culpa de todo al padre o madre no
-alcohólico. Eso me elimina la tensión, pero no es justo. El
padre o madre no-alcohólico también tiene sus problemas.
Quizá ahora es el momento en que debo tratar de
comprender esto para darle al no-alcohólico el apoyo que
necesita.
27) FEBRERO 13

El alcoholismo es una enfermedad que me afecta


emociona], espiritual y físicamente. A veces, puedo usarla
como una excusa. Justifico mi mal compartamiento,
diciendo: "Vivo con un alcohólico". Utilizo la enfermedad
como pretexto en vez de examinarme con sinceridad.
¿Qué tengo miedo de ver? Quizá no quiera verme como
realmente soy. Quizá no esté dispuesto a cambiar. Eso
equivaldría a dejar de usar el alcoholismo como una excusa.
Si deseo mejorar, tengo que dejar de dar excusas. No es
fácil, pero al examinarme sinceramente, estaré dando un
gran paso hacia mi adultez.
Para reflexionar
Vivir con un alcohólico es una gran excusa para mi
ccinportarniento. Si lo permito, esta excusa puede impedir
que me enfrente a mi verdadero yo. Pero si soy sincero, me
daré cuenta que tengo que hacer algo con mi vida. Hoy
trataré de no usar más el alcoholismo como pretexto, y de
seguir adelante con mi propia recuperación.

Creía que el amor era sólo una atracción física. Pero


cuando logré conocer a algunos compañeros en mi grupo
Alateen, descubrí que esto es en realidad muchas cosas
diferentes. Es aceptar a otras personas como son, en vez de
tratar de cambiarlas; es comunicarse y ser sinceros entre sí;
es compartir mutuamente nuestros sentimientos íntimos.
Esta clase de amor hace que el grupo esté unido y se
fortalezca. La gente se interesa de verdad cuando se ayuda
mutuamente. Cuando los nuevos miembros sienten este
amor en nuestro grupo, se animan a regresar. Es un
sentimiento estupendo, y me siento contento de ser parte de
ello.

Para reflexionar
El amor es algo especial en Alateen. Me dice que me
aceptan como soy. Hace que yo quiera compartir de corazón
mis sentimientos, y ayudar a otras personas. Es una fuerza
poderosa en nuestro grupo y, personalmente, me infunde
más fortaleza.
Mantener las cosas simples es un don de Dios. Yo soba ver
simplemente las cosas, pero mis reacciones hacia la gente y
las cosas a mi derredor encubrían mucho de esa sencillez en
mí. El Segundo Paso me ayudó a recobrarla. Me mostró que
parte de "devolvemos el sano juicio" es aprender a
"mantenerlo simple".
Hoy, cuando las cosas parecen confusas y complicadas,
trato de imaginarme a Dios sosteniéndome en la palma de su
mano. Es un simple pensamiento que me infunde
tranquilidad y endereza mis pensamientos. Me da una idea
clara de lo que hay que hacer, y sigo adelante haciéndolo tan
simple como sea posible.

Para reflexionar
A veces mis pensamientos están embrollados. Alateen me
muestra una salida. Miro las cosas sencillas que me rodean -
una sonrisa, un hermoso amanecer, un sentimiento de afecto
hacia un amigo - y trato de Mantenerlo Simple en mi vida
el día de hoy.
FEBRERO 16 (28

Muchos de nosotros sufrimos de culpabilidad. Nos


preocupamos por todo lo malo que hemos hecho, y dejamos
que nuestros sentimientos nos carcoman el alma. A veces
creemos que hemos hecho más daño que el que realmente
hemos cometido, y exageramos desmedidamente las cosas.
Cuando dejamos que nuestras culpas nos dominen, nos
enojamos con nosotros mismos y nos desquitemos con gente
inocente.
Los Pasos Cuarto y Quinto, pueden ayudarnos a
librarnos de nuestros sentimientos de culpa. Nos ayudan a
localizar la culpabilidad hasta encontrar su verdadera raíz.
Después, con el Octavo y Noveno Pasos, podemos hacer las
enmiendas necesarias.
Al ser sinceros, rompemos el cerco en que éramos presa
de la culpabilidad. Ya no tenemos que desquitar nuestra ira
en la gente que nos rodea, y así nos libramos de los malos
recuerdos del pasado.

Para reflexionar
Cuando el sentido de culpabilidad me domina, exagero
los pequeños problemas a un grado superlativo y lastimo a la
gente a quien quiero. El programa me ayuda a penetrar
hasta el meollo de mis sentimientos de culpabilidad. Cuando
me enfrento a ellos sinceramente y los enmiendo, me siento
libre para empezar a sentirme bien nuevamente.
Había una vez un grupo Alateen en una ciudad donde
había muchos grupos de AA y Al-Anón.
Desafortunadamente, era escasa la asistencia al grupo
Alateen, sólo unos cuantos asistían a las reuniones. Algunos
de sus miembros sólo venían a socializar y no para aprender
el programa de recuperación. Otros querían realmente tener
un grupo, pero no estaban dispuestos a asumir la
responsabilidad de planificar las reuniones.
En ocasiones, alguien llegaba a este grupo con un
problema...se quedaba unas dos semanas, y dejaba de venir
cuando mejoraba el problema, pero nunca se sentía
responsable para quedarse allí a ayudar a alguien que
tuviera un problema. El grupo se fue dispersando poco a
poco, hasta que se desintegró. Si cada miembro de este grupo
hubiera hecho un esfuerzo por asumir más responsabilidad
para su recuperación personal y por ayudarse mutuamente,
todos habrían permanecido en el grupo, y estos miembros
Alateen habrían llegado a ser adultos con una mejor actitud
hacia la vida.

Para reflexionar
En nuestro grupo Alateen, yo soy responsable de dar y
recibir. No soy la persona más importante. Todos nosotros
andamos en busca de respuestas, y cuando yo logro lo que
necesito, puedo ayudar a otros. Cada uno de nosotros es
responsable de construir el tipo de grupo en el que podamos
confiar y querernos unos a otros. Hoy depende de mí
contribuir en lo que pueda.
FEÉRERO 18 (29

Nuestra familia se estaba desintegrando. Mi padre nos


había abandonado, y mi madre se pasaba casi todo el tiempo
visitando bares. Me sentía desamparado, y estaba dispuesto
a dejarlo todo y huir.
Fue cuando Alateen entró a mi vida. Los compañeros me
dieron cariño, se preocuparon por mí y me ayudaron a
recuperarme. Por esa razón, los consideré como mis nuevos
amigos.
Sé que no me abandonarán y yo no quiero abandonarlos.
Creo que voy a quedarme algún tiempo y procurar sacar
provecho a las cosas. Quizá llegue alguien buscando apoyo y
yo esté allí para ayudarlo a hallar la satisfacción que yo
encontré.

Para reflexionar
Cuando no marchan bien las cosas en mi familia, puedo
acudir a la hermandad en busca de ayuda. Lo considero
como un segundo hogar después de mi casa, pues está lleno
del amor y la comprensión que siempre necesité, y cuando
me encuentro allí, cuento con ellos.
Se me hada difícil respetar a mi padre a causa de sus
numerosas recaídas. Por un tiempo había logrado la
sobriedad en AA, pero poco después siguió tomando. A veces
me acusaba de ser yo el causante de que él bebiera.
Realmente me dolía. Empecé a creer lo que decía y, por
consiguiente, lo odié. Llegué al punto en que ya no me
importaba si él realmente iba a recuperarse o no.
Ahora ya regresó a AA, pero gracias a mi programa
tengo una actitud diferente. Sé que no tengo que culparme
por sus recaídas, y estoy aprendiendo a no dejarme deprimir
si él volviese a tomar. Esta clase de desprendimiento me ha
ayudado a ser más paciente y comprensivo.

Para reflexionar
Cuando el alcohólico tiene una recaída es difícil respetarlo
si creo que es un fracasado. Pero las recaídas son simples
reincidencias que ocurren en otras enfermedades. Cuando
trato de comprender eso, es mucho más fácil soltar las
riendas y practicar el desprendimiento. En vez de enredarme
en la lucha del alcohólico por lograr la sobriedad, puedo
demostrarle un poco de atención y comprensión, alentándolo
cuando más lo necesite.

Cuando asistí a mi primera sesión de Al-Anón,


todavía estaba en Alateen y no me sentí a gusto. No
dije nada porque pensé que hubiera sido una
pérdida de tiempo. Poco después dejé de asistir y
regresé a mi grupo Alateen.
Sucedió que me pidieron que hablara en una
sesión de Al-Anón respecto a la transición de
Alateen a Al-Anón. Una señora dijo lo agradecida
que estaba por la perspicacia que los Alateen podían
ofrecer a los miembros Al-Anón. Eso me hizo sentir
bien, y decidí regresar al grupo Al-Anon que había
dejado.
Desde entonces, he sacado mucho provecho de esas
reuniones. Ahora me doy cuenta de que cuando los
miembros Al-Anón discuten sus problemas, puedo
evitar tales problemas en mi vida personal. Y si no
puedo lograr esto, al menos me queda la sensación
de que alguien más ha pasado también por ellos, y sé
exactamente a dónde tengo que acudir para
ventilarlos.
FEÉRERO 18 (30

Para reflexionar
Los miembros de Al-Anón me dicen que me
necesitan. Esto me da una gran satisfacción.
Mientras más asisto a sus reuniones, me doy cuenta
que también yo los necesito. Ellos comparten su
experiencia, yo pongo mi esperanza y juntos
logramos una fortaleza muy especial.
Yo era un gran especialista en arrastrar el ayer dentro
del día de hoy. Estaba preocupado por todos los errores que
había cometido. No importaba que aquellos días ya
hubieran pasado para siempre, tenía que aferrarme a ellos
hasta que reparara todos los problemas que había causado.
¡Qué lío! Tenía el cerebro tan abrumado por los
pensamientos del pasado, que no disponía de un momento
de paz para disfrutar el presente.
Por eso fue muy agradable llegar a una hermandad que
se ocupa del día de hoy. Con la ayuda de los Lemas Un día
a la vez y Sólo por hoy, en forma lenta pero segura, estoy
aprendiendo que el día de hoy es un regalo valioso. Si puedo
poner el ayer a descansar y sacar el mayor provecho de este
día, sé que no quedaré defraudada.

Para reflexionar
Hoy es un nuevo día. Es una oportunidad para volver
a empezar. Puedo olvidar los errores del ayer, pues todos
ellos pertenecen al pasado. Puedo hacer cosas nuevas, hacer
nuevas amistades, y dar gracias a mi Poder Superior por
tener vida para disfrutar el día de hoy.
Yo acostumbraba aborrecer a la gente que me gritaba.
Era como algo que tenía una enorme cabeza, sin rostro, sin
ojos y sin nariz, y una inmensa boca que me gritaba. Aveces
me sentía como si fuera yo a explotar, pero casi todo el
tiempo lo único que quería era arrastrarme hasta un rincón
y morir.
El programa me devolvió el respeto por mí mismo, y no
voy a permitir que nadie me despoje de él. Ahora, cuando
alguien estalla a gritos contra mí, trato de que la rabia se
quede en la persona a quien pertenece, y procuro manterme
encalma. Esto lo puedo lograr manteniéndome en comuni-
cación con mi padrino, planeándole de mis sentimientos
respecto a esa situación y utilizando el desprendimiento.

Para reflexionar
Yo soy una persona, y tengo el derecho a ser tratado
como tal. A veces permito que otros me dominen,
especialmente cuando dejo que su ira penetre dentro de mi
Pero si me concentro en practicar «1 programa, la calma
que siento puede permanecer conmigo, y nadie puede
quitármela.
El alcohólico bebe, y la bebida ocasiona un
comportamiento inaceptable. Yo no soy responsable de ese
comportamiento; yo sólo soy responsable de mí mismo.
Eso significa que no tengo que sentirme culpable
cuando otros quieran echarme la culpa por su forma de
sentir o actuar. No necesito pelearme con nadie; si vociferan
y gritan, no tengo por qué intervenir. Puedo tratar de
entenderlos, pero no tengo que sentir lo mismo que sienten
ellos o hacer lo que están haciendo.
Yo tengo mi propia vida. Por fin, con la ayuda del
programa, me siento en libertad de vivirla.

Para reflexionar
Otras personas no pueden hacer que me sienta
responsable por sus vidas. Puedo desentenderme de lo que
oigo, olvidar lo que he visto, y no dejar que me afecte. Yo
soy responsable de mi vida personal. Tengo mucho que
hacer en la vida, y hoy es un buen día para empezar.
Estoy empezando a darme cuenta de la grandeza del
programa. Mi vida solía ser muy incierta. Ahora puedo
acudir a los muchachos de mi grupo en busca de ayuda.
FEÉRERO 18 (31

Estoy aprendiendo que no estoy en el mundo para mane-


jarlo todo yo sola.
También estoy aprendiendo a ser más paciente. Durante
mucho tiempo me tocó vivir una vida de ira, odio, temor y
confusión antes de llegar a Alateen. A veces todavía siento
que todo tiene que cambiar de la noche a la mañana; peto
me detengo y me doy cuenta de que si necesité años para
llegar al punto en que ahora me encuentro, voy a necesitar
más de un día para cambiar.

Para reflexionar
Aveces tengo que mirar más allá de mí misma buscando
ayuda. Mis amigos Alateen están más que dispuestos a
dármela, y esta ayuda me hace seguir creciendo día a día.

Para algunos miembros de un grupo Alateen que tengan


experiencia, les es fácil controlar las reuniones, influir en
otros miembros y monopolizar las discusiones. Se creen un
sabelotodo. Por el hecho de llevar algún tiempo en el
programa, se creen con derecho de hablar por el grupo.
La Segunda Tradición declara que no podemos permitir
que nuestro grupo esté dominado por este tipo de miembros.
Hay que recordar que "nuestros dirigentes son tan sólo fíeles
servidores". Nadie puede fungir como la conciencia de
nuestro grupo. Una discusión franca y sincera entre todos los
miembros que asisten a nuestras reuniones, es la mejor
forma de saber cuál es la verdadera voluntad de nuestro
Poder Superior para nuestro grupo.

Para reflexionar
Algunas personas son dirigentes, pero nadie tiene el
derecho de usurpar el territorio de Dios. La única forma en
que un grupo Alateen puede seguir adelante, es cuando
cada uno tiene la oportunidad de conpartir sus sentimientos
e ideas. La Segunda Tradición podría lograrlo en nuestro
grupo, si ponemos manos a la obra y la aplicamos.
Cuando yo era mas joven, me enseñaron que Dios
me andaba vigilando, listo para castigarme por
haber obrado mal. Aprendí a temerle.
En Alateen, encontré algo diferente. Los Pasos
hablaban de un Poder Superior. Para mí, un Poder
Superior era alguien que caminaba delante de mí. Yo
quería que Dios anduviera también a mi lado, de
modo que empecé a trabajar en base a una relación
personal con El.
Hoy, Dios no es únicamente mi Poder Superior. Es
un amigo con el que puedo hablar. Me siento
contenta con El, y sé que ya no tengo por qué
temerle.

Para reflexionar
Gracias al programa, ahora tengo un amigo muy
especial: Alguien que me ama y me comprende, y
que no se enoja porque no soy perfecta; Alguien que
conoce mis altibajos. Alguien con quien puedo hablar
y a quien puedo amar. A este Alguien le llamo
"Dios", y El es el mejor amigo que tengo.
32) FEBRERO 27

Alateen es algo más que mi grupo; es una hermandad


que abarca a todo el mundo. Hay grupos por todas partes,
que procuran seguir las mismas ideas, como el grupo en el
cual milito.
Es fácil olvidar que tengo una responsabilidad para con
estos grupos. A veces estoy totalmente concentrada en mi
pequeño mundo y olvido que todos somos parte de Alateen.
Cada uno de nosotros es responsable de que Alateen siga
vivo y bien firme en todo el mundo, para que pueda ayudar
a más personas.
Puedo cumplir con esa responsabilidad cada día,
procurando vivir el programa en la mejor forma posible, y
haciendo lo que esté de mi parte para que mi grupo se
fortalezca. La otra forma es tomar parte en la labor de
Servicio, esto me ayuda a desplazarme más allá de mi grupo
y comprometerme con Alateen a nivel mundial. Es una
forma estupenda de desarollo personal, y mi manera de
ayudar para que se afiancen nuestros vínculos como
hermandad.

Para reflexionar
Cuando me comprometo en la labor de servicio, me doy
cuenta de que hay miles de grupos y muchachos alrededor
del mundo, que procuran practicar el mismo programa que
yo. Si todos nosotros tratáramos de ayudarnos mutuamente,
seríamos mucho más fuertes. Necesito a Alateen, y Alateen
me necesita. Hoy podemos tener un mundo mejor: Juntos
podemos lograrlo.
FEBRERO 28 (33

Alguien me criticó y estoy enojada. ¿Debería haberme


enojado? No lo sabré hasta que disponga de tiempo para
pensar lo que en realidad se dijo.
¿Se justifica esa crítica? Si se justifica,' lo mejor es
aceptarla y hacer algo al respecto para que yo cambie. Si no
se justifica, voy a desprenderme de ella y a dejar de
preocuparme en este mismo momento.

Para reflexionar
La crítica puede realmente afectarme, a menos que
reflexione al respecto. Si es falsa, no tengo necesidad de estar
desperdiciando mi energía y andar enfadada. Si es
verdadera, puedo tomarla en serio y utilizar mi programa
para hacer que las cosas cambien y mejoren.
34) FEBRERO 29

Mucho después de haber llegado a Alateen, me instalé


cómodamente para observar cómo actuaban los demás.
Pensé que si me involucraba con ellos, mi programa de
recuperación se esfumaría.
Me equivoqué. Ahora sé que yo soy el perjudicado al no
dedicarle un poco más de tiempo y esfuerzo a este programa.
Cuando me comprometí, comprobé que el servicio me
había ayudado con mi programa. Empecé a devolver un
poco de lo que estaba recibiendo, al compartir mis
sentimientos en las reuniones, escuchando a otros miembros
y asumiendo puestos de servicio en el grupo. Así descubrí
que estaba obteniendo más de lo que podría dar jamás.

Para reflexionar
La gente dice que recibes del programa lo que has puesto
en él. ¡Qué gran verdad! Cuando devuelvo al programa lo
que puedo - aunque sea un poquito -, logro mucho más de
Alateen. Al tratar de ayudar a otras personas, también yo
recibo ayuda.
MARZO (61
1

A veces me siento atrapada por las cosas que me han pasado


en la vida. Me siento sin ayuda e imposibilitada para cambiar mi
situación.
Es cuando tengo que pensar que hay alternativa. Necesito
recordar que aunque soy incapaz para cambiar a otras personas,
siempre puedo elegir una actitud personal ante una situación
desagradable.
El programa me brinda la oportunidad de escoger bien; por
ejemplo: leer literatura Al-Anon/Alateen, practicar los Doce Pasos,
seguir trabajando en mí misma, y muchas cosas más. De mí
depende si las utilizo o no, pero tengo que recordar que mis
reacciones son siempre el resultado de lo que yo elija.

Para reflexionar
Cuando creo que algo o alguien está dominando mi actitud,
tengo que recordar que siempre estoy en libertad de elegir mis
reacciones. El programa me enseña a adquirir más libertad para
elegir con sabiduría lo que me conviene. Actualmente, deseo que
esa libertad obre en mi vida.
36) MARZO 2

¿Qué disposición tengo para estudiar y aplicar el programa


a mi vida? ¿Me limito simplemente a hablar del programa
pocojje esto suena agradable? ¡Q lo utilizo de verdad? JJO uso para
lucirme ante los demás? ¿O lo utilizo para ayudarme a
crecer?
Si no estoy dispuesto a crecer conforme a una guia espiri-
tual, entonces no puedo afirmar que estoy aplicando las ideas
de Alateen. Formar parte de Alateen, es el resultado de vivir
los Doce Pasos. Tengo que profundizar un poco más y estar
dispuesto a practicar el programa en la mejor forma posible.
Todo lo que se me pide es estar dispuesto. Según llegue a
estar más y más dispuesto, me doy la oportunidad de crecer.

Para reflexionar
La buena voluntad es la llave que me abre la puerta a una
nueva vida. Si estoy dispuesto a que el programa forme
parte de mí, pueden surgir cosas buenas. Resolveré algunos
de los problemas en mi vida y empezaré a crecer un poquito
cada día.
Fui a Alateen porque mi madre quería que fuera. Estaba
convencida de que no tenía ningún problema. Cuando mi
dije que "SI" para tenerla contenta; pero en mi corazón las
detestaba. Estuve así varías semanas. Después, cuando las
cosas empezaron a empeorar en la casa y en la escuela, dije
que el programa no me servía, y dejé de ir a las reuniones. Yo
estaba segura de que podría ocuparme de las cosas por mi
cuenta.
No pude. Me sentía como si estuviera sola en contra del
mundo. Pero era demasiado orgullosa como para regresar a
Alateen en busca de ayuda. Estuve al borde de un ataque de
nervios. Mi madre me sugirió nuevamente intentar en
Alateen. No quería regresar por temor a k> que la gente
pudiera pensar de mí. Hasta que finalmente puse a un lado
mi orgullo y asistí.
En esta ocasión fui por mí misma, y sentí el amor que
necesitaba tan desesperadamente. Puedo conpartir mis
sentimientos y problemas con otras personas, en vez de tratar
de manejarlo todo por mi cuenta.

Para reflexionar
El orgullo puede hacer que me aleje de la hermandad. Ello
me impide que reciba la ayuda que necesito cuando la
situación se pone difícil. Cuando pueda superar mi orgullo,
encontraré un grupo de personas dispuestas a ayudarme a
practicar el programa.
A todos nos gusta que se nos respete, incluyente al
alcohólico. Pero no es fácil respetar a alguien que parece estar
destruyendo su propia vida y la nuestra.
Llegué a creer que la razón por la que me era tan difícil
respetar a otras personas en mi vida, era porque yo mismo no
me respetaba. Me sentía fatal, y mi compartamiento hacía
muy difícil que yo le cayera bien a alguien, incluyéndome a mí
mismo.
Alateen me ayudó a apreciar quien soy, y a tener
confianza en lo que diga o haga. Conforme voy recorriendo
los Pasos y utilizo las Tradiciones, adquiero un mayor respeto
por mí mismo, y ahora, parece que es más fácil comprender y
respetar a la gente que me rodea, a la par que al alcohólico.

Para reflexionar
La palabra respeto tiene un doble sentido. Si quiero que la
gente me respete, tengo que estar dispuesto yo a respetarlos a
ellos. Pero ¿cómo puedo esperar que eso ocurra si yo mismo
no me respeto? En Alateen estoy aprendiendo a sentirme
muchísimo mejor respecto a mí mismo, y a medida que ese
sentimiento de bienestar se desarrolla en mí, tiene la forma de
llegar a otras personas. Hoy creo en mí y puedo respetar a la
gente en la forma en que me gustaría que otros me
respetasen.
Siempre había pensado que los alcohólicos eran los
borrachínes de barrios bajos. Sabía que mis padres tomaban
mucho, pero como teníamos mucho dinero yo estaba segura
de que no era posible que ellos tuvieran problema con la
bebida. Cuando empeoraron las cosas, empecé a sentir enojo
y resentimiento» Pero aparentaba que todo andaba bien. Era
demasiado orgullosa para admitir que mi vida se estaba
desintegrando. Cuando alguien me sugirió que fuera a
Alateen, le dije que yo no pertenecía a esa clase de gente.
37) MARZO 2

Durante mucho tiempo seguí disimulando - a tal grado,


que mi padre y mi madre por poco mueren de alcoholismo.
Creo que esto fue lo qué finalmente me hizo despertar, Lle-
gué a la hermandad, y los chicos de Alateen me pusieron en
mi lugar. Me dijeron que dejara de representar mi papel de
la "pobre niña rica" y me enfrentaron a los hechos: mis
padres padecen la enfermedad del alcoholismo. Esto puede
afectar a cualquier familia, incluso a la mía. Cuando acepté
esto, me desprendí de mi actitud engreída y dejé que otras
personas me mostraran la forma de obtener ayuda para mí.

Para reflexionar
El alcoholismo es verdaderamente una enfermedad.
Afecta a gente de carne y hueso, de cualquier posición social,
y causa verdadero sufrimiento. Me gustaría cerrar bs ojos y
pretender que no existe; pero sí existe. Mientras más pronto
deje de pretender y admita que el alcoholismo es parte de mi
vida, más pronto podré aceptar la ayuda que necesito para
mejorar.
Cuando era más joven, me sentía aislada e indeseable.
Traté de agradarle a la gente, irnpreskmáridolos con mis
tareas escolares. Creía que cuando vieran mis buenas cali-
ficaciones, pensarían que yo era algo especia], y me pres-
tarían mayor atención. No dio resultado. De hecho, hizo que
me sintiera más aislada. Obtuve muchos premios en la
escuela, pero siempre me sentía fracasada porque eso no era
lo que yo deseaba. Necesitaba saber que la gente me amaba y
se interesaba por mí.
Ahora me doy cuenta de que estaba tan ocupada en tratar
de ser perfecta, que hice que la gente se alejara de mí; en
aquel tiempo, nadie hubiera logrado comunicarse conmigo.
Desde que llegué a Alateen aprendí a mitigar un poco mis
normas. Aún sigo obteniendo calificaciones excelentes, pero
ya dejé de alardear ante la gente. Trato de aceptarme como
soy, sin "darme" aires de ninguna clase, y esto hace que me
porte con más naturalidad con los demás. Ya no me siento
aislada porque sé que hay mucha gente que verdaderamente
se interesa por mí como yo soy.

Para reflexionar
Cuando me siento sola, a veces me olvido que soy
realmente una buena persona. Pienso que debo hacer y decir
cosas para agradarle a la gente. Pero no es así. Sencillamente
tengo que ser yo misma. Con el programa que me enseña a
utilizar el lema ¡Hazlo con calma! Hoy puedo ser mejor, sin
tener que ser perfecta.
Durante muchos años traté de cambiar a mi familia,
diriéndole a todos loque tenían que hacer y en qué forma
debían hacerlo. Si no cambiaban, me enojaba y perdía la
paciencia.
En Alateen me di cuenta de que no podía cambiarles, que
no podía controlar el comportamiento de nadie. Aprendí que
era yo la única persona a quien podía cambiar.
Con la ayuda de otros miembros comencé a considerar mis
aspectos buenos y malos. Poco a poco me puse a trabajar
para deshacerme de los malos y mejorar los buenos. Hoy me
siento mucho mejor concentrándome en cambiar yo, en vez
de cambiar a los demás.

Para reflexionar
Alateen me da la oportunidad de cambiar. Conforme me
quite la idea de cambiar a los que me rodean y empiece a
ocuparme de mí mismo, me sentiré mucho más feliz. Hoy,
cuando pido 'Valor para cambiar las cosas que puedo",
recordaré que lo único que puedo cambiar es a mí mismo.
Antes de venir a Alateen no sabía como enfrentarme a
todos los problemas que surgían en mi familia. Todos
nosotros estábamos afectados por la enfermedad del
alcoholismo. Yo tenía mucho resentimiento y odio hacía mi
papá, pero creía que la mala era mi mamá, de modo que le
echaba a ella la culpa de casi todo lo que ocurría- Tenía tantos
malos sentimientos que ya no podía vivir conmigo misma.
Entonces llegué a Alateen. Los chicos me ayudaron a
comprender por qué mi papá obraba así y por qué yo
reaccionaba en la forma que lo hacía. Empecé a entender
mucho más a mi mamá, y ahora me doy cuenta de que ella lo
único que trataba era mantener unida a la familia.
38) MARZO 2

Hoy mis amigos Alateen me dan muchas sugerencias de


cómo utilizar el programa para manejar mis problemas. Con
la ayuda de ellos, me siento mucho mejor respecto a mi
familia.

Para reflexionar
A veces se me olvida que no soy la única en mi familia que
tiene problemas. Alateen me ayuda a recordar que el
alcoholismo es una enfermedad familiar y que todos estamos
afectados por ello. Hoy puedo ayudar mucho tratando de
comprender e interesarme por mi familia y haciendo lo
posible por vivir el programa.
No somos perfectos. Solos no podemos resolver todos
nuestros problemas. Un Poder Superior puede hacer las
cosas más viables. Pero El, no se va a encargar de nuestras
vidas mientras nos quedamos cruzados de brazos. Tenemos
que decidir soltar las riendas y dejar que El nos ayude. Aquí
es donde el Tercer Paso puede ayudarnos.
El confiar nuestra voluntad al cuidado de un Poder
Superior, es una parte importante de nuestro programa. Nos
ayuda a romper con el pasado teniendo un nuevo sentido de
orientación. Dejamos de controlar a la gente y las situaciones
en nuestra vida. Al practicar el programa, regresan nuestros
sentimientos de bondad y logramos la paz mental

Para reflexionar
Siento un gran consuelo al saber que hay un Poder
Superior a mí misma, que me hace seguir adelante en la
dirección correcta. Alateen me enseña cómo soltar las riendas
y dejar que ese Poder obre.
Acostumbraba criticar a otras personas. Cuando hacían
cosas que me molestaban, me gustaba desquitarme dkáén-
doles b equivocadas que estaban. Esto hacía que me sintiera
grande e importante.
Ahora que estoy en Alateen me doy cuenta de que no debo
demeritar a otros para sentirme mejor. Mi tarea es hacer mi
propio inventario. Tengo que rectificar lo que está erróneo en
mí, no lo que yo crea que está mal en los demás. No tengo el
derecho de criticar al alcohólico, al no-alcohólico ni a ninguna
otra persona. Yo no soy responsable de sus vidas, y pueden
prescindir de mis críticas.
Ahora, cuando la gente me critica, ya sé b que hice para
que ellos se sintieran así. En vez de resentirme por la crítica
considero b que se ha dicho, trató de aprender de esa lección"
y aplicar b que pueda a mi vida,

Pam reflexionar
Los demás pueden ocuparse de sí mismos; no necesitan
que yo les señale sus faltas. En vez de criticar a otros para
sentirme bien, me ocuparé de mi inventario personal. Si hoy
me examino, quizá encuentre más cosas buenas de las que
esperaba.
En el Cuarto Paso examiné mis problemas. En el Quinto
Paso los admití. Ahora, en el Sexto Paso, tengo que
preguntarme: "¿Qué haré con mis problemas?" Tengo la
idea de lo que hay erróneo en mí, y deseo cambiarlo de
inmediato.
Quizá es el momento de meditar y pensar lo que voy a
hacer. Esto me ayudará a adivinar k> que requiere un
cambio sin demora y lo que puedo dejar para después. Luego
sabiendo que estoy enteramente dispuesta a que mis defectos
de carácter sean eliminados, podré seguir adelante.

Para reflexionar
No es bueno precipitarse al practicar los Doce Pasos. El
Sexto Paso es un buen lugar para hacer una pausa y pensar.
Yo recorrí un largo trecho y ahora me conozco mejor que
antes. Pero aun tengo un largo camino por recorrer. Si me
precipito, quizá me extravíe por sendas equivocadas. Estando
enteramente dispuesta antes de emprender de nuevo, me
dará un mejor entendimiento de lo que realmente quiero.
Antes no me importaba tener o no tener amigos, a no ser
que obtuviera algo de ellos. Si tenían dinero, los rondaba. Si
tenían buenas relaciones procuraba su amistad para poder
alternar en sociedad. Hice cosas que hirieron profundamente
39) MARZO 2

a algunos, pero eso no importaba si significaba obtener el


mayor provecho posible.
Cuando llegué a Alateen conocí a personas que realmente
sabían lo que es la verdadera amistad. Se interesaron por mí,
aunque nunca hice nada por ellos. Con su ejemplo me
mostraron cuan importante podría ser la gente para mí - no
en la forma en que solía hacerlo, sino como amigos dignos de
confianza. De ellos aprendí que la amistad consiste en dar y
recibir. Recibí mucho; ahora ya es hora de empezar a dar.
Cuando empecé a dar más en mis relaciones con la gente, me
sentí mejor. Hallé el valor para hacer rectificaciones respecto
a mi pasado, y empecé a mostrarle a mis nuevos amigos lo
mucho que me importan realmente.

Para reflexionar
La verdadera amistad no es una bagatela que se da por
sentada. Es algo que necesito para sentirme una persona
íntegra. En la hermandad he conocido buenos amigos que me
estiman de verdad. Cuando pienso en lo mucho que han
hecho por mí, eso me estimula a darles un poco de mí mismo
para demostrarles b mucho que significan en mi vida.
MARZO 13 (40

Yo estaba muy unido a mi hermano. Cuando descubrí


que tenía un problema de alcoholismo me quedé pasmado.
Sentí lastima por él y quise protegerlo. Cuando mis padres le
pidieron que se fuera de la casa, les dije lo que pensaba de
ellos y juré que yo también me iría a vivir con él tan pronto
pudiera.
Pero mi hermano se desapareció durante algunas
semanas, y fracasaron mis planes. Cuando volví a verlo, me
dijo que iba a entrar en AA, mencionó que Alateen podría
convenirme. Como estaba dispuesto a hacer cualquier cosa
por ayudarle, fui a Alateen la siguiente noche.
Al principio me dio rabia cuando me dijeron que no
podía hacer nada por ayudarle. Pronto me di cuenta de que
le podía ayudar mucho si cambiaba mi actitud. Dejé de
tratar de protegerle y compadecerle. Así, me quedé más
tranquilo, y creo que él también. Respecto a mis padres, ya
no les guardo rencor, pues me doy cuenta de que obraron en
la forma que pensaron era correcta.

Para reflexionar
Como quiero al alcohólico, quiero protegerlo para que
no sufra. Pero, al mismo tiempo, quizá con esto impido que
logre la ayuda que necesita. Cuando acepto la verdad
respecto al alcoholismo, sólo puedo hacer lo único que
realmente puede ayudar: quererle a él y desprenderme del
problema.
MARZO 14

Antes creía que todos en el grupo me respetaban. Como


era la que llevaba más años en el grupo, pensaba que ellos
esperaban que yo hablara para que las reuniones siguieran
adelante. Así que eso hice. En ocasiones sólo quería sentarme
y escuchar, pero hacía a un lado esos sentimientos para
poder cumplir con mis responsabilidades para con el grupo.
Sucedió que una noche, un miembro dijo que ella nunca
tenía suficiente tiempo para hablar porque yo siempre
comentaba acerca de todo. Realmente me dolió, y durante
algunas semanas me alejé <te las actitud de "Me las van a
pagarM. Pero al reinarme me di cuenta de algo importante:
No es mi responsabilidad dirigir las reuniones. Ahora sí
puedo sentarme y escuchar, si así lo quiero, porque sé que
soy un miembro más, no una supervisóla. Me siento mucho
más tranquila, y creo que el grupo también.

* Para reflexionar
Las reuniones son para compartir. Cuando cada uno
participa, todos se benefician. Si me tomo mucho tiempo
hablando, es posible que esté perjudicando a otros del grupo,
a la vez que me perjudico yo. Quizá es tiempo de que use los
oídos en vez de la boca; además, podría
«prawte n o t a cosas escuchado * alguien que ño sea
yo.
¿Si fuera a otro país, esperaría que la gente entendiera mi
idioma? Lo rnismo poaría aplicarse a la insensatez de hablar con
un alcohólico mientras está bebiendo. Yo no puedo hablar su
idioma, ni él el nub.
Es frustrante. He tratado de razonar con él, le he gritado, he
llorado y he huido. Parece que nada dk> resultado.
Cuando Dios actúa como intérprete entre nosotros, las cosas
mejoran muchísimo. En vez de reaccionar a sus discusiones y
enojarme, procuro quedarme quieta y refrenar mi genio. Esto
me ayuda a conservar la calma y elegir el mejor momento para
comunicarme con el alcohólico, y demostrarle algo de los
verdaderos sentimientos que tengo hacia él

Para reflexionar
Tratar de comunicarme con el alcohólico cuando está
bebiendo es una forma de acabar disgustada. Parece que no tiene
ganas de escuchar lo que le estoy diciendo. Utilizar el lema Suelta
¡as riendas y entrégaselas a Dios me ayuda a enfrentarme a la
frustración. Me doy cuenta de que en ocasiones el alcohólico no
puede entenderme. Aceptar eso me ayuda a ser paciente y
esperar el momento oportuno para tratar de hablar con él.

Todos los que venimos a Alateen es porque tenemos un


pariente o amigo con un problema de bebida. Eso es lo
importante. Sabemos que compartimos nuestros pensa-
mientos y sentimientos íntimos con otras personas que los
comprenden.
En Alateen nos ayudamos mutuamente con el fin de
mejorar. Cuando trabajamos juntos en un problema,
compartiendo nuestras experiencias, fortaleza y esperanza,
nos prestamos mutua ayuda. Esto es lo que nos mantiene
unidos.
Si nuestro grupo se involucra con otras organizaciones, se
perdería ese sentimiento tan especial. No tendríamos tiempo
ni energía para ayudarnos unos a otros. ¿Prodría-mos
perrnitirnos hacer eso, sabiendo lo importante que es Alateen
para todos nosotros?

Para reflexionar
La Tercera Tradición es nuestro vínculo en común. Es ser
aceptado, no rechazado. Es saber que no estoy solo, que otra
gente de mi edad ha pasado por lo mismo que yo. Es un
MARZO 14

tremendo sentido de pertenencia. No quiero que nada me


quite esos sentimientos.
¿Qué necesitamos para llevar una vida sana? Alimento,
descanso y ejercicio. Estas son necesidades físicas. Estas
parecen estar siempre presentes en nuestra mente, especial-
mente cuando las descuidamos.
Pero también tenemos otras necesidades. Necesitamos que
nos amen y que nos atiendan, necesitamos sentir que nos
aprecian y saber que hacemos algo útil por nuestras vidas.
Estas son necesidades espirituales. A veces ni siquiera somos
conscientes de ellas; a veces, sencillamente las ignoramos
porque nuestras necesidades físicas parecen más
importantes.
El programa nos da la oportunidad de hacer algo respecto
a nuestras necesidades espirituales. Conocemos a personas
que de verdad se interesan por nosotros, y nos hacen sentir
especiales. Llegamos a creer en un Poder Superior que nos
ama. Empezamos a utilizar el programa y descubrimos que
nuestra vida tiene un objetivo verdadero.

Para reflexionar
Alateen es un programa espiritual que llega hasta el fondo
de lo que necesito. Cuando me ocupo de mis necesidades
espirituales, el resto de mi vida se ingenia de cuidarse por sí
mismo. Hoy practicaré el programa porque quiero ser
saludable por dentro y por fuera.

Cuando el alcoholismo se apoderó de nuestra familia, casi


todos nosotros nos preguntábamos "¿Por qué yo?" Algunos
nos apartábamos. Dábamos excusas para no salir o para no
recibir a la gente. Creíamos que teníamos que enredarnos
para ser arbitros en las peleas entre nuestros padres. Pero
esto sólo nos dio más tiempo para sentirnos desdichados y
aislados.
Algunos de nosotros casi salíamos disparados de la casa.
Cada vez que había disgustos nos íbamos por largo tiempo.
Era nuestra forma de afrontar lo que estaba ocurriendo en el
hogar.
Escapar y apartarnos no hace más que perjudicarnos. Con
la ayuda del programa y de las nuevas amistades que hace-
mos, empezamos a encarar el hecho de que vivimos con un
alcohólico. Pero eso no tiene que dominar nuestras vidas.
Quizá no podemos cambiar la situación en el hogar, pero sí
podemos cambiar nosotros mismos y nuestras actitudes al
respecto, y eso es un buen comienzo.

Para reflexionar
Huir y apartarme de mis problemas nunca me ayuda a en-
frentarme a la verdad. Vivo con un alcohólico, y eso no lo
puedo cambiar. Pero si hoy practico el programa, los Pasos,
las Tradiciones y los Lemas, puedo empezar a cambiar yo, y
no tendré que huir nunca más de la verdad.
Había momentos en que tenía ganas de darme por
vencida; pero gracias a Dios y a mis amigos Alateen, no lo
hice. Ellos me dieron fortaleza para seguir adelante en vez de
retroceder.
Por mucho tiempo dudé del programa. Pero al asistir a
las reuniones, hablar con otros miembros y tratar de vivir un
día a la vez, gradualmente acabé por aceptarlo.
Ahora me siento feliz. Tengo fortaleza y valor para
seguir avanzando, y sé que adondequiera que vaya, nunca
estaré sola. Mis amigos me han mostrado el camino para que
me desprenda de mis dudas y comience a confiar en mí
misma.

Para reflexionar
Duda es sinónimo de cobardía. Estoy aquí para dar lo
mejor de mí y seguir adelante. El programa me ha mostrado
MARZO 14

precisamente la forma de lograrlo. Me ha dado el valor para


ser la persona que soy hoy.

Me pasé las primeras reuniones de Alateen con los ojos


fijos en el piso. Me sentía como un cero a la izquierda. No
hablaba, simplemente llegaba, me sentaba, escuchaba, y me
iba apenas acababa la sesión. La gente trataba de comuni-
carse conmigo, pero yo no les dejaba.
Sucedió que una noche oí a alguien contar mi historia. Al
levantar la vista me di cuenta de que la muchacha era una
amiga de mi infancia. Al acabar la reunión me acerqué hasta
que tuve el valor de hablarle. Me sentí contenta de reanudar
nuestra amistad, pero sentí que había algo más entre noso-
tras. Entonces le pedí que mera mi madrina, y ella aceptó
gustosamente.
Desde esa noche cambié. Me siento a gusto con ella,
porque me da la libertad de ser yo misma. Se ríe conmigo, no
de mí, y me deja llorar cuando necesito aliviar mi dolor.
También ella comparte conmigo sus altibajos. Es sincera, y
no me permite depender de ella cuando responde a mis
preguntas. En lugar de eso me muestra en qué forma puede
darme el programa todas las respuestas que necesito.
Para reflexionar
Mi madrina es una persona especial en mi vida. Se
interesa por mí me quiere, y habla conmigo sin rodeos, que es
lo que yo necesito. Pero lo más importante de todo es que
conmarte conmigo el programa. Este le da las respuestas
cuando las necesita, y sé que espera que el programa me dé
también a mí las respuestas que necesito.
¡Qué belleza hay en la lluvia! Refresca algunas ñores -
reviven con más vigor que antes - mientras otras mueren
para dejar que otras nuevas broten. Las plantas crecen y
reverdecen; algunas se vuelven más vigorosas cuando se
limpian del polvo con el agua. La lluvia hace resurgir la
verdadera belleza que está en nuestro derredor.
Alateen es como la lluvia. Me refresca. Antes me sentía
sucia; no era sincera conmigo ni con los demás. Me ponía
una máscara que decía: 'Todo está perfectamente", cuando
era todo lo contrario.
Con la ayuda del programa nú vieja máscara y mis
temores desaparecieron, dejando espacio para nuevas y
mejores cualidades. Así como la lluvia fortifica las nuevas
plantas y las ayuda a crecer, el programa me da la
oportunidad de ser una persona fuerte y madura.

Para reflexionar
Empezamos como las semillas. Con el cuidado que
obtenemos en Alateen, retoñamos. Nuestros tallos toman
altura y se robustecen; nuestras raíces se vuelven profundas
y fuertes. Nuestras ramas se van extendiendo. Después
brotan nuestros capullos y, con la ayuda del programa,
seguimos creciendo.
44) MARZO 22

Me siento muy agradecido con los adultos que se


interesan lo suficiente para emplear su tiempo y
energía apadrinando un grupo Alateen. Los
padrinos de mi grupo me ayudaron cuando estaba
pasando por momentos difíciles para aceptar a mis
padres. Estaba resentido con mi madre alcohólica
por todo lo que nos había privado como familia, y
aborrecía a mi padre porque creía que él podía
habernos dado más de lo que nos dio.
Nuestros padrinos no fungían como si fueran mis
padres. Ni siquiera trataban de defenderlos.
Sencillamente aceptaban con comprensión lo que yo
tenía que decir. Después me presentaron a otros
miembros Al-Anón y AA. Cuando los escuché, supe
entonces cómo se sentían mis padres.
Oportunamente conocí a algunos Alateen que no
tenían padre ni madre y se me ocurrió que, después
de todo, yo tenía muchas cosas por las cuales
sentirme agradecido.
Hoy me doy cuenta de que mis padres guardan
mucho amor en su interior. Aunque no siempre
sepan expresarlo, sé que están tratando de hacerlo
en la mejor forma posible, y eso me basta.

Para reflexionar
Espero mucho de mis padres, a tal punto que a
veces me olvido de mis sentimientos. Muchos de los
muchachos que conozco darían cualquier cosa por
tener la oportunidad de vivir con su papá y su
mamá. Hoy trataré de recordar esto y me empeñaré
en ser un poco más agradecido por todo lo que mis
padres hacen por mí.
MARZO 23 (45

Estoy en Alateen para empeñarme en cambiar


personalmente. Me gustaría liberarme inmediatamente de
todos mis defectos de carácter, pero sé que si pretendo hacer
todo a la vez, no me va a dar resultado.
En lugar de eso voy a tratar de practicar el lema Primero
lo primero. Me tomaré mi tiempo para decidir qué es lo más
importante. ¿Qué necesito hacer primero? Cuando lo haya
decidido, empezaré con eso. Y si hay algo que pueda hacer
hoy respecto a ello, lo haré.
Tengo muchas cosas que cambiar en mí. Cuando me
ocupo de una sola cosa a la vez, paso a paso, el camino que
lleva a la recuperación resulta más fácil de recorrer.

Para reflexionar
Si examino todas mis faltas al mismo tiempo, eso resulta
demasiado para mí y no puedo con ello. El lema Primero lo
primero me ayuda a trabajar en mis aspectos conflictivos,
uno a la vez, concentrándome primero en los más
importantes. Mis defectos ya no me deprimen y puedo
empezar a trabajar de nuevo para llegar a ser una persona
integra.
46) MARZO 24

Me creía el centro del universo. Quería que todo el


mundo se compadeciera de mí por la terrible niñez que
había vivido. Pensaba que mi familia debería haber sentido
remordimiento por la forma en que me habían tratado. Se
suponía que todos tenían que hacer las cosas a mí manera y
vivir según mis normas. Al mismo tiempo, no me sentía
obligado a hacer k> que no quería, sin importar quien
quisiera que yo lo hiciera.
Ahora que estoy en el programa, tengo una actitud
diferente. Creo que he madurado un poco. Me doy cuenta de
que el mundo no fue creado sólo para mí, que la gente no
existe sólo para mi conveniencia. Estoy empezando a
entender que mi padre tiene una enfermedad, y que él no
quiere ser como es. Yo no puedo echarle la culpa a él, ni a
nadie, por ser como soy. Tengo que tener los pies muy bien
puestos sobre la tierra y enfrentar cada día de la mejor
forma que yo pueda.

Para reflexionar
Antes pensaba que el mundo giraba a mi alrededor.
Ahora me siento feliz de que no sea así. Simplemente formo
parte del mundo, y gracias al programa puedo ser una parte
positiva. Si cuido la porción del mundo que me corresponde
y dejo que los demás cuiden de la de ellos, todos, incluso yo,
crearemos hoy un mundo muchísimo mejor.
MARZO 25 (47

Hace poco llegó un muchacho a nuestra reunión. Era


mucho más joven que el resto de nosotros, pero por su
mirada podría asegurar que andaba muy mal. No dijo gran
cosa en la reunión, pero cuando habló, el tono de su voz
correspondía al dolor que reflejaba su rostro.
Al acabar la reunión, quise ponerme de acuerdo con él
para llamarlo en el curso de la sanana; pero parecía tener
prisa, y salió antes de que pudiera hablarle, Me imaginé que
regresaría a la semana siguiente. Pero no regresó, y hasta hoy
ninguno sabe quién era ni de dónde vino. Pienso mucho en él.
A veces incluso me preocupo porque vi en él algo de mí
mismo. He compartido mis sentimientos con mi grupo, y me
han ayudado a ubicarlos en su verdadera perspectiva. Lo
único que puedo hacer es confiar a este muchacho al cuidado
de mi Poder Superior, y esperar que él encuentre a alguien
que pueda ayudarle a que deje de hacerse daño.
Para reflexionar
El sufrimiento no conoce límites de edad. Por tal razón el
programa sí funciona. Pero no todos pueden aceptar su
ayuda. Como el programa significa mucho para mí, me dolía
cuando alguien se iba y no regresaba. Ahora sencillamente
me limito a ayudar a los que vienen, con la esperanza de que
se queden el tiempo suficiente para que encuentren algún
alivio a su dolor.
El orgullo me impidió llegar mucho antes a Alateen.
Quería que todo el mundo me creyera perfecta. No quería
que se enteraran que me resultaba imposible resolver mis
propios problemas.
Cuando por fin llegué a Alateen, empecé a ser más sincera
conmigo misma y con los demás. El programa me ayudó a
admitir que tengo problemas, y aprendí a aceptar la ayuda
que otras personas me brindaban para enfrentar dichos
problemas.
Mi orgullo todavía hoy puede ser un problema. Si no me
cuido será el pretexto perfecto para ir dejando las cosas para
después, pero si lo tengo en cuenta, puedo incluso ayudar a
otros a superar el suyo, para que no tengan que esperar tanto
como yo en lograr las cosas buenas que ofrece el programa.

Para reflexionar
El orgullo me crea muchas dificultades. Me dice que soy
mejor de lo que realmente soy y me impide pedir la ayuda
que necesito. El programa tiene una buena forma para que
me libre de este orgullo: ser sincera al comunicarme con los
demás y dejar que ellos se comuniquen conmigo.

He tenido problemas y malos sentimientos mucho después


de que el alcohólico abandonó el hogar. Mi cambio de actitud
no ocurrió de la noche a la mañana, tomó tiempo. Todavía
hoy sigo trabajando en esto.
Tengo que recordar que el alcoholismo es una enfermedad
No tengo poder para que un alcohólico beba o deje de beber.
Sólo soy responsable de mí misma.
Me doy cuenta de que aunque haya sido afectada por la
bebida, ya no puedo culpar al alcohólico ni dar excusas por
mi mal comportamiento. Tengo que fijarme en mí y utilizar
el programa para llegar a ser la persona que deseo ser.

Pam reflexionar
Es fácil pensar que cuando el alcohólico se haya ido, mi
vida se va a deslizar suavemente. ¡No es cierto! Aún tengo
muchos problemas por resolver. Con la ayuda del programa
hoy dejaré de culpar al alcohólico y empezaré a hacer algo
por mí.
A veces rechazo a la gente que intenta ser agradable
conmigo. Se me hace difícil aceptar un cumplido, y me siento
MARZO 25 (48

incómoda cuando alguien trata de hacerme un favor, pues no


creo merecerlo.
Necesito recordar que es correcto aceptar las cosas
buenas que me dan los demás. Quizá vean en mí algo que yo
no puedo ver.
Merezco mucho más de lo que estoy dispuesta a
reconocer en mí. Examinándome más de cerca y con la
ayuda del programa, puedo otra vez volver a confiar en mí,
así como otra gente lo hace.

Para reflexionar
La gente insiste en decirme que soy una persona de
mérito. Quizá éste es el momento de que empiece a creerles.
Trabajar con ahínco en el programa me infundirá
sentimientos positivos que también me ayudarán a ver lo
bueno que hay de mí.
49) MARZO 29

Cuando me voy de pesca, tengo que ponerle carnada al


anzuelo para poder atrapar al pez. No siempre logro pescar
uno, pero siempre que siento que muerden la carnada,
tengo que poner otra en el anzuelo. Si no pesco ninguno,
recojo mis avíos y regreso a casa.
Desde que llegué a Alateen y me enteré del alcoholismo
y sus efectos en la familia, me di cuenta de que a menudo
me siento como un pez, y estoy aprendiendo a no morder la
"carnada" del alcohólico. Cada vez que tengo la tentación
de hacerlo, me digo: ¡Hazlo con calma! y recuerdo que si
abro la boca para morder, hay un anzuelo oculto, bajo la
jugosa mordida. Entonces me pregunto: "¿Cuan
importante es esto?".
Si nado, alejándome de la carnada, puedo captar la
imagen clara de un hombre al final del cordel. Después de
todo, él no parece tan monstruoso. Al contrario, se ve
enfermo. Si evito la carnada, el hombre recoge sus cosas, se
va, y me deja solo. Y si se quedara, me siento seguro
sabiendo que he sido bueno conmigo al apartarme cada día
de su anzuelo.

Para reflexionar
El alcohólico quiere que me trague sus ideas: "anzuelo,
cordel y plomada". Con la ayuda del programa ya no tengo
que dejarme pescar. En vez de eso puedo tratar de entender
que él está enfermo, alejarme del cordel que él me prepara,
y disfrutar de la libertad que tengo hoy.
50) MARZO 30

Tenía la costumbre de hacer planes con dos o tres semanas


por adelantado, y me preocupaba si iban a salir bien o no.
Siempre estaba desorientada por tener tentó en que pensar a
un tiempo.
Ahora estoy aprendiendo a ir más despacio y a vivir la
vida Un día a la vez. Claro que tengo que pensar en mi
futuro y en b que quiero ser y hacer. Pero no tengo que vivir
en el mañana, ni preocuparme por cosas que están fuera de
rm control.
El día de hoy sób tiene veinticuatro horas. Puedo usarlas
muy bien si dejo que el programa guíe mi vida. Puedo
ayudar a alguien que tenga un problema, hacer mi
inventarío personal o trabajar algún aspecto importante del
programa, para mi beneficio personal. Esto me ayudará a
sacar de mi pensamiento el futuro, y regresar al día de hoy,
que es donde me pertenece estar.

Para reflexionar
¿Qué me depara el destino? No estoy segura, pero sé que
no debo sentir temor a enfrentarb. Lo que cuenta es el día de
hoy, y gracias al programa tengo a mi disposición una gran
forma para aprovecharb al máximo.
A medida que voy crecienao en el programa, cada vez, me
doy más cuenta de que ayudando a los demás me ayudo yo.
Telefonear a los nuevos miembros, compartir mis pensa-
mientos y sentimientos, y participar en los grupos hace que
me sienta satisfecho de mí mismo.
Una forma de llevar el mensaje" es hablar en equipo en
reuniones públicas. EUo me da la oportunidad de ayudar a
alguien que quizá nunca haya oído mencionar a Alateen.
Pero, más que eso, me ayuda a comprender lo que el
programa significa para mí, lo cual es un verdadero
incentivo.

Para reflexionar
El hacer la labor del Duodécimo Paso me beneficia. Es
una gran oportunidad para reflexionar en todo lo que el
programa ha hecho por mí, y ponerlo en práctica al llevar el
mensaje a otras personas. Cuando paso el mensaje, en cierta
forma el programa se queda en mí y me ayuda a crecer.

Una mañana, mientras caminaba, divisé un charco


terso y brillante. Era simple y hermoso. Luego lo atravesé
corriendo y lo dejé obscuro y turbio.
Ahora me doy cuenta de que esto se asemeja a nuestra
vida. En nuestro interior todos tenemos charcos de
sentimientos. Permanecen claros y luminosos si no dejamos
que otros los enturbien. Pero si empezamos a permitir que
la gente controle nuestra vida, éstos se vuelven oscuros y
lóbregos.
Alateen me muestra que tengo alternativas. Puedo
hacer que mis charcos sean transparentes y serenos, o bien
permitir que otros me los enturbien. Todo depende de mí.

Para reflexionar
Yo estoy a cargo de mi persona. ¿Deseo que otros se
lleven mis buenos sentimientos del día de hoy? Alateen me
da el derecho a decidirlo por mí.
Yo misma decidí ir a Alateen. Al principio estaba
asustada, pero cuando los miembros empezaron a
compartir, me di cuenta de que tenían los mismos
51) MARZO 30

problemas que yo. Durante cierto tiempo me fue


difícil comprenderlos a todos. Creía que yo era la
única en el mundo que tenía problemas, pero al
mismo tiempo quería recibir ayuda.
Me animaron a seguir viniendo a las reuniones,
lo cual hice. Gradualmente, empecé a
comprenderme yo misma y a entender a mi familia.
Mientras más entendía, más fácil era ayudarme.
Practicar el Duodécimo Paso me abrió las
puertas. Descubrí un nuevo tipo de amor hacia mis
padres y para conmigo misma. Hice a un lado las
dificultades y empecé a tener buenas calificaciones
en la escuela.
El programa me parece que es un milagro, sólo
porque me empeño en practicarlo. Tengo la
voluntad de hacer lo que quiero, y sé que quiero
seguir asistiendo.

Para reflexionar
Cuando realmente anhele lo que el programa
tiene para ofrecerme, haré cualquier cosa por
lograrlo. Asistir a las reuniones, compartir mis
problemas con los demás, practicar los Pasos; todo
esto forma parte de una nueva forma de vida, a la
que llamo Alateen. El hoy me pertenece, si estoy
dispuesta a realizar una buena labor para lograrlo.
52) ABRIL 3

No había tenido gran experiencia en ver a alguien


borracho. Aunque mi padre es alcohólico, ha estado sobrio
desde que yo era muy chico. Sólo puedo recordar unas
cuantas veces cuando realmente lo vi tomado.
Pero eso no significa que yo no saque provecho de
Alateen. El programa es una gran ayuda en otros aspectos de
mi vida, aparte del alcoholismo. Me ayuda a pensar que mi
Poder Superior es alguien que puede ayudarme y no alguien
a quien tenga que obedecer todo el tiempo. Es una gran
ayuda cuando me saca a fióte en días difíciles, y cuando estoy
de mal humor.
El hecho de que mi papá siga asistiendo a AA es para mí
toda una inspiración. Me motiva para entender más acerca
de él y su alcoholismo. Pero, más que eso, me motiva para
seguir practicando mi programa para mí.

Para reflexionar
Alateen me ayuda a comprender el alcoholismo. Pero eso
no es todo. Es un programa de vida, que me ayuda a
conocerme y me da un sentido de dirección sobre cada
aspecto de mi vida.
Yo sé que hay muchas cosas en la vida aparte de mis
problemas. Pero a veces se me hace difícil recordar que
apenas empiezo a pensar en lo que está haciendo el alco-
hólico, me olvido de lo que puedo hacer para ordenar mi
vida.
Por eso estoy en Alateen. El Primer Paso me enseña a
desprenderme de los problemas del alcohólico y a empezar a
resolver los propios. El resto de los Pasos me muestra cómo
reducir mis problemas para que pueda manejarlos y así
disfrutar un poco de la vida.
Algunas veces las cosas son aún difíciles de afrontar, y mis
problemas parecen insuperables. Pero ahora sé que los
problemas que tengo que encarar no son ni con mucho tan
superiores, como el Poder que me sostiene.

Para reflexionar
A veces mi mente se desvía y me paso mucho tiempo
pensando en problemas que no son de mi incumbencia. Hoy
utilizaré el programa para desprenderme de estos
problemas, para que no puedan quitarme los buenos ratos
que quiero disfrutar. Los Doce Pasos me ayudan a ubicarme
para resolver mis propios problemas.
Cuando convivimos con el alcoholismo, con frecuencia
descargamos nuestra ira en los que están más cerca de
nosotros. Tenemos temor de mostrar nuestros sentimientos
al alcohólico y nos desquitamos con los demás miembros de
la familia. A veces cuando estamos realmente enojados, quizá
hasta les golpeamos. Sabemos que somos injustos, y esto nos
hace sentirnos culpables, pero nada nos detiene. Finalmente,
desplazamos la ira contra nosotros mismos.
Al compartir en las reuniones nos enteramos que no
somos los únicos en sentir ira. Otras personas han sentido lo
mismo y han hecho las mismas cosas que nosotros. También
aprendemos que la ira es un sentimiento que no tiene nada
de malo en sí; sencillamente, tenemos que cambiar la forma
de expresarla para no perjudicarnos ni perjudicar a otros.
Hoy estoy empezando a desprenderme en forma positiva
dé mis sentimientos de ira. Ya dejé de criticar a mi familia, y
me siento mucho mejor.
Para reflexionar
La ira se las ingenia para sacar a relucir lo peor de uno
mismo, a no ser que la enfrente. Alateen me muestra cómo
ser honesta con mis sentimientos de ira, lo cual me ayuda a
canalizarlos en algo constructivo. Hoy me siento mucho más
contenta, y ¡la gente que me rodea también!
Cuando llueve o hay neblina parece que el sol se ha
marchado. Pero sé que sólo está escondido detrás de las
nubes. Tengo fe en que el sol siempre está allí.
A causa del alcoholismo en mi hogar, a veces siento que el
amor ha desaparecido. Me afano arduamente por
encontrarlo, pero no puedo verlo. Está nublado por mis
malos sentimientos.
Cuando ocurre esto, tengo que tratar de esforzarme para
creer que ese amor, al igual que el sol, siempre está allí. No es
53) ABRIL 3

fácil tener esa clase de fe, pero el programa me da el Segundo


Paso para que comience.

Para reflexionar
Alateen me ha ayudado a tener fe en cosas que no puedo
ver. En el Segundo Paso me encontré con un Poder Superior.
Cuando creo en tal Poder puedo creer en el amor.
Los que asisten a las reuniones de Alateen comparten dos
problemas comunes: un alcohólico en sus vidas, y muchísimo
dolor.
Lo grandioso de la hermandad es que podemos identi-
ficamos mutuamente. Comprendemos ta ojie es vivir con un
alcohólico y, en cierta forma, el sufrimiento no es tan difícil de
sobrellevar cuando otros saben cómo nos sentimos.
Para mí, compartir el sufrimiento es algo inicial. Es una
forma franca de liberarme de todos mis sentimientos
negativos. Después de un tiempo, cuando empiece a crecer en
el programa, podré compartir cosas más positivas.

Para reflexionar
Cada uno en Alateen sabe lo que es sufrir. Eso hace que se
me facilite mucho compartir el dolor que llevo muy dentro de
mí. Alateen es un buen lugar donde hoy puedo empezar a
hablar de mis problemas. Cuando llegue el momento, voy a
compartir también muchos buenos sentimientos.
Cuando vine por primera vez a Alateen, simulaba un
personaje, pues yo era tímida y no tenía confianza en mí
misma. Pronto aprendí que en el programa todos somos
iguales. Como quería sentirme mejor, empecé a autoexa-
minarme.
El Cuarto Paso me ayudó a cambiar mi vida. Al principio
hice mucho análisis, pero no funcionó. Aspirar a la
perfección no era ciertamente el camino. Así que lo mantuve
simple: primero busqué el lado bueno que hay en mí, y
después el lado malo, atendiendo solamente una cosa a la vez.
Esto me hizo caer en cuenta de que tengo muchas buenas
cualidades que antes no había notado, pues había estado
empleando mucho tiempo concentrándome en mis faltas.

Para reflexionar
Hoy me siento mucho más feliz porque estoy tratando de
mejorar como persona. Hacer mi inventario personal me
ayuda a saber quién soy yo, y de lo que soy capaz. Soy más
sincera conmigo misma, y estoy aprendiendo a ver todo lo
bueno que hay en mi interior en vez de ver solamente lo
malo.
Después de haber hecho mi inventario, deseo cambiar en
muchas formas. A veces soy más impaciente. Quiero
recuperar el tiempo perdido, y trato de cambiar demasiado y
muy rápidamente. A veces me desanimo y acabo pregun-
tándome: "¿Para qué?1
Aquí es cuando el lema "Hazlo con calma" puede ayudar.
Hace que lo tome con calma y a la vez percibo con claridad b
que debo hacer. Sé que no puedo cambiar de la noche a la
mañana, pero puedo mantenerme alerta hasta hallar el
ritmo apropiado a mi persona.

Para reflexionar
Se necesita tiempo para que la semilla germine y se con-
vierta en árbol. También se necesita tiempo para que yo
cambie. Cuando quiero que esos cambios ocurran AHORA,
trataré de relajarme utilizando el lema: "Hazlo con calma",
y ser más paciente conmigo mismo.
Antes de venir a Alateen, pasé por momentos difíciles para
controlar mi mal genio. Tenía la costumbre de culparme y de
culpar a mi mamá por el problema del alcoholismo de mi
papá. A ella Je respondía con impertinencia, y cuando ya no
se podían controlar las cosas, incluso le pegaba.
Leer literatura, utilizar los lemas y la Oración de la
Serenidad, practicar los Doce Pasos y Tradiciones me ayudó
a apaciguarme y comprender más acerca de mí mismo y del
alcoholismo. Ahora me doy cuenta de que no es culpa mía el
que mi padre tenga un problema de alcoholismo. También
ya dejé de echarle la culpa a mi mamá. Mi mal genio dañó
muchísimo nuestras relaciones, de modo que ahora he
54) ABRIL 3

comenzado a enmendar mi actitud hacia ella. La mejor


rectificación que puedo hacer es simplemente practicar en mí
mismo el programa.

Para reflexionar
A veces me dejo dominar por mi mal genio. El programa
me muestra la forma de invertir la situación. Cuando tomo
las cosas con calma y domino mi mal humor, aprendo más
acerca de mí mismo, y mis relaciones con otras personas
mejoran muchísimo.
La oración consiste en pedirle a nuestro Poder Superior
que nos guíe y dirija nuestra vida. La meditación consiste en
escuchar su respuesta. Pero ¿cómo podernos saber, cuando
hemos oído la respuesta?
Practicar el Undécimo Paso nos mantiene en "contacto
consciente" con nuestro Poder Superior. Mantener abiertas
las líneas de comunicación nos ayuda a reconocer las
"señales", y algunas cosas parecen encajar en el lugar que les
corresponde.
Es posible que las respuestas que obtenemos no sean las
que queremos oír. Pueden ser difíciles de aceptar. Pero hay
que tener fe en que nuestro Poder Superior está allí para
ayudarnos.

Para reflexionar
La gente dice que Dios tiene tres formas de responder a las
oraciones: Sí, No y espera. Alateen me ayuda a escuchar Sus
respuestas a mis oraciones y a aceptar cualesquiera que sean
esas respuestas. Hoy voy a procurar escuchar a mi Poder
Superior de modo que pueda llegar a conocer lo que El me
tenga deparado.
A veces pienso que es difícil encontrar gente en quien
confiar. Quiero comunicarle mis sentimientos, pero tengo el
temor de que los divulguen por todas partes. Esa es la razón
de que el anonimato sea tan importante.
En las reuniones tengo la oportunidad de expresar lo que
llevo por dentro. No tengo por qué sentir que me encuentro
en otro mundo, que estoy sola y callada, sin nadie a quien
recurrir. El anonimato me infunde la confianza para hablar,
sabiendo qué nadie va a chismear sobre lo que diga. El
anonimato es ese "vínculo" especial que nos une a todos con
toda confianza.

Para reflexionar
El anonimato saca a relucir lo mejor que hay en mí. Me
brinda la oportunidad de explayarme y ser sincera con los
demás, pues sé que nadie va a decir nada de mí o de k> que
haya dicho. El anonimato me protege y a la vez abre ante mí
un mundo nuevo lleno de amistad y confianza.
55) ABRIL 13

Mis padres trataron de sobornar mi amor y mi cariño. Me


imagino que cada uno de ellos pensó que si me HpagabaM lo
suficiente, me pondría de su lado en los pleitos familiares. A
veces me divertía porque solía apostar a uno o al otro, y yo
siempre salía ganando. Pero al fin y al cabo, obrar así hacía
que me sintiera realmente culpable.
En Alateen aprendí que cambiando de actitud, yo podía
liberarme de mi culpa y ayudar a mis padres. En vez de
permitirles que me "sobornaran" trataba de decirles cómo
me sentía. Dejé de ponerme de parte de uno u otro y empecé
a mostrarles un poco de gratitud por las cosas buenas que
habían hecho por mí.
Ahora me siento libre de la culpa que antes sentía acerca
de nuestra relación. Creo que ellos también se sienten como
yo. Ahora podemos relacionarnos mejor, como personas
razonables. Mis padres saben que tengo hacia ellos un amor
muy especial, y sé que ellos también me quieren en forma
muy auténtica.

Para reflexionar
Cuando me encontraba atrapada en medio de mis
padres, pensaba que el amor era algo despreciable. Ahora sé
que el amor no puede comprarse. Quiero amar a mis padres,
y quiero que ellos me amen. El ser sincera con mis
sentimientos puede ayudar. Hoy me quitaré de en medio y
así le demostraré a mis padres el verdadero amor que siento
por ellos.
A causa de mi autocompasión me siento a veces tan
confundida, que le echo la culpa de mis problemas a los que
me rodean. El autoexaminarme con sinceridad aclara mi
confusión, pues reconozco que muchos de mis problemas
empiezan en mí.
Y el punto de partida para resolverlos sigo siendo yo. Si
puedo ocuparme de un problema que me está mortificando,
y reflexiono con calma sobre ello, preguntándome cómo
podría enfrentarlo de otra forma, quizá hallaría la respuesta
para mi problema. ¿He leído alguna de nuestras
publicaciones o he pensado en hablarlo con otros en la
hermandad?
No es fácil que yo asuma la responsabilidad de mis
acciones, pero apenas lo hago, dejo de sentir autocompasión
y me dispongo a resolver mis dificultades. Todo eso empieza
por mí.

Para reflexionar
Si hay algún problema en mi vida y lo he causado yo, es
duro afrontarlo pero es honesto hacerlo. Eso me ayuda a
empeñarme por solucionarlo con la ayuda del programa.
Recién Degado: "Yo sé que si mi madre dejara de beber,
todo sería magnífico, y que nuestra vida volvería otra vez a la
normalidad."
Miembro: "Yo también pensaba lo mismo. Contaba con
que la vida fuera un juego divertido. ¡Qué soñador! Me
siento realmente agradecido de que mi padre esté sobrio,
pero librarse de la bebida fue sólo el principio. Me imagino
que yo esperaba que con la sobriedad se resolvieran todos
mis problemas. No fue así. Todavía tengo que ocuparme de
mi vida. Y por eso sigo viniendo a Alateen.

Para reflexionar
Mi vida no depende de si el alcohólico está bebiendo o esté
sobrio. Estoy en Alateen para ocuparme de mí. El programa
tiene las respuestas a mis problemas, y me infunde el valor
para resolverlos por mí misma.
¿A quién le hacen falta las Tradiciones? A NOSOTROS,
para que nuestro grupo permanezca unido. La fuerza de
nuestro grupo Alateen depende de lo bien que practiquemos
las Tradiciones.
56) ABRIL 13

Cuando no tes prestamos atención, salimos perjudicados, y


perjudicarnos también al grupo. Ignoramos algo que podría
darle a cada uno de nosotros la oportunidad de crecer.
Pero cuando tomamos en serio las Tradiciones, las encon-
tramos más interesantes de lo que pensábamos. A medida
que vamos conociéndolas empezamos a darnos cuenta de
que son otra gran forma de compartir nuestra experiencia,
fortaleza y esperanza.

Para reflexionar
Hoy haré cuanto pueda por instruirme acerca de las
Tradiciones. Esto es el resultado de lecciones aprendidas con
mucho esfuerzo. Quizá si todos ponemos algo de nuestra
parte, no tendríamos que cometer los mismos errores y
nuestro grupo podría prestarle ayuda a todos los que te
necesitan.
Soy una persona especial, soy único. Nadie se parece a mí,
ni siente exactamente lo mismo que yo. En el mundo entero
no existe ni un solo duplicado de mi persona.
Creo en un Dios bondadoso, y esto hace que me sienta
bien. Gracias a mis creencias y al programa, ya no soy un
peón en el juego de ajedrez. Yo soy quien soy. Estoy
creciendo y aprendiendo, y me propongo vivir así este día y
todos los días de mi vida.

Para reflexionar
Antes de llegar a Alateen, siempre pensaba que yo era
diferente. Ahora me doy cuenta de que sí lo soy, en forma
muy positiva. Soy uno de los milagros de Dios. En el mundo
no existe nadie como yo. Soy una persona valiosa, lleno de
cosas buenas, y dispuesto a sacarle al día de hoy el mayor
provecho posible.
En ocasiones, antes de llegar a Alateen me sentía muy sola.
Mientras más trataba de comprender el sentido de todo Jo
que estaba ocurriendo en nuestro hogar, más sentía que
estaba compitiendo con el mundo.
Hoy, gracias a Alateen, soy un eslabón importante en una
cadena de amor y comprensión, a nivel mundial. Las
siguientes palabras de un miembro de Alemania me
recuerdan lo poderosa que es esta cadena:
"Realmente, es algo extraordinario formar parte de
Alateen, donde tengo verdaderos amigos que me
comprenden. Mis nuevos amigos y yo compartimos
mutuamente un profundo sentimiento".
Es este profundo sentimiento mutuo lo que mantiene
unida a la hermandad de Alateen en todo mundo. Yo formo
parte de ella, y ya no tengo que sentirme sola.

Para reflexionar
Formar parte de la hermandad Alateen es como tener
buenos amigos en todo el mundo. No importa el lugar donde
vivamos, todos nosotros compartimos los mismos
sentimientos. Esta clase de comprensión disipa la soledad
Nos une, y hace que se borren las distancias.
Promesas no cumplidas y decepciones me hicieron perder
la fe en la gente. Es difícil confiar en alguien que me ha
defraudado.
Aprender nuevamente a confiar no sucede de la noche a la
mañana. Requiere tiempo, porque la confianza es algo que
hay que ganarse. Aumenta cuando la gente cumple lo que
me ha prometido.
Pero también mi actitud tiene mucho que ver. Si estoy
dispuesta a darle a los demás una segunda oportunidad y
tenerles cada cha un poco más de confianza, de nuevo
empezará a resurgir algo de esa fe en la gente.
57) ABRIL 13

Para reflexionar
No voy a despertarme algún día y decidir que voy a
confiar otra vez en todos. La confianza requiere tiempo para
crecer. La forma en que la gente me trata desempeña una
función en la medida en que confíe en ellos. Pero la forma en
que pienso puede también significar una gran diferencia.
Hoy, cuando me desprendo de mis desilusiones del pasado,
puedo empezar a tener fe en los demás, y nuevamente les doy
otra oportunidad de ponerse en comunicación conmigo.
Me preocupaba por muchas cosas, sobre todo cuando
estaba en la escuela. En vez de pensar en mis tareas escolares,
me preocupaba por mi papá: ¿estaría otra vez borracho y
portándose mal con mi familia? Esto no me ayuda a tener
buenas calificaciones.
Ahora estoy aprendiendo que no debo preocuparme por
esas cosas. Me siento mucho más calmada, y esto también me
ha ayudado a concentrarme en mi trabajo en la escuela.
Uno de los lemas que me ayuda es Vive y deja vivir. No
puedo hacer nada respecto al comportamiento de mi papá;
de modo que, ¿para qué preocuparme? Necesito ocuparme
de mi vida, incluyendo mis tareas escolares, y hacerlo en la
mejor forma posible.

Para reflexionar
Cuando me preocupo por cosas que no puedo controlar,
lo único que hago es perjudicarme. Alateen me enseña a
dejar de preocuparme por otras personas y por sus vidas,
para que pueda sacar el mayor beneficio de la mía. Hoy voy
a concentrarme, procurando hacer lo que mejor me
convenga, y así ya no me quedará tiempo de preocuparme
por cosas que están fuera de mi alcance.
Cuando me siento frustrada no puedo lograr casi nada.
Mis pensamientos están revueltos y mis sentimientos
agitados. Empiezo a reaccionar a todo, y desquito mis
frustraciones en todos los que me rodean. Cuando estoy
disgustada, necesito un minuto para calmarme y pregun-
tarme si aquello era realmente importante. Relajarme me
ayuda a eliminar la tensión que se va acumulando en mi
interior, y empiezo a pensar con más claridad.
El estar frustrada me da la oportunidad de examinarme.
Compendo que aquella frustración se inicia cuando no me
siento contenta conmigo misma. Alateen me enseña a
cambiar esto, para no dejar que mis frustraciones se lleven lo
mejor de mí y de otra persona.
Para reflexionar
El estar frustrada me paraliza el pensamiento. Mientras
más lucho, empeoro. El programa me da esta respuesta:
relájate y mira las cosas en su verdadera perspectiva.
Cuando hay paz mental, la frustración sale sobrando.
Yo era especialista en responder con demasiada rapidez.
Decía y hacía cosas de las que después me arrepentía.
Tomaba decisiones precipitadas, olvidando que las cosas
importantes hay que pensarlas con todo cuidado.
Los problemas que creaba hubieran podido evitarse si me
hubiera detenido a pensar las cosas con cuidado. Ahora, con
la ayuda de Alateen, es eso, precisamente, lo que estoy
aprendiendo. Cuando utilizo el lema Piensa, puedo planificar
las cosas antes de actuar y, como-resultado, las cosas se van
resolviendo muchísimo mejor.

Para reflexionar
Algunas veces hablo primero y pienso después, pero esto
me crea dificultades. Alateen me enseña a voltear eso.
Utilizar el lema Piensa, me ayuda a pensar antes de actuar, y
me impide que diga y haga cosas de las que me arrepentiré
después.
¿Quién soy? Acostumbraba ser un payaso de quien la
gente se reía y se burlaba. Cuando me despreciaban, trataba
de convertirme en lo que ellos querían que yo fuera.
58) ABRIL 13

Ahora, gracias al programa, soy diferente. Si quiero,


puedo ser un payaso y reír, pero cuando me siento triste, si
quiero puedo llorar. Soy nuevamente una persona de
verdad, que frunce el ceño y siente temores; y en Alateen, no
me despreciaran por ser como soy. ¿Quién soy? ...Soy yo y
eso es lo que quiero siempre ser.

Para reflexionar
La gente er. la hermandad me da la libertad para ser yo
mismo. En lugar de tratar de hacer y ser lo que otros piensan
de mí, puedo ser la persona que quiero ser. Gracias al
programa que me guía, puedo ser yo mismo y convertirme
en algo mejor de lo que nunca soñé que fuera posible.
ABRIL 24 (59

Cuando un carpintero desea crear algo hermoso con


una buena pieza de madera sencilla, tiene que usar los
instrumentos adecuados. Es necesario que sepa lo que tiene
en su caja de herramientas y cómo funciona cada pieza.
Para lograr el mejor uso de cada herramienta, tiene que
conservarla en buenas condiciones. Eso significa cuidarlas y
usarlas con la frecuencia necesaria.
Nosotros nos parecemos mucho a ese carpintero en su
taller. Una de las herramientas del programaes la
Literatura Aprobada por la Conferencia. Si la dejamos
guardada en el anaquel y nunca nos tomamos la molestia de
utilizarla en nuestras reuniones o en nuestra vida personal,
nuestro programa de recuperación quedará oxidado y
tendrá necesidad de reparación. Si nos proponemos
conocer lo que está en nuestra literatura, leer un poco cada
día, y tratar de aplicar las ideas a nuestra vida, esto puede
consumir otra forma de crecer en el programa. Podemos
transformar una vida aparentemente aburrida y sin
atractivo, en algo realmente hermoso.

Para reflexionar
La Literatura Aprobada por la Conferencia puede ser
un instrumento importante en mi recuperación. Es
precisamente otra- forma en que los miembros de la
hermandad comparten consigo sus experiencias, fortaleza y
esperanza. Puedo sacarle el mayor provecho cuando estoy
dispuesto a leerla y utilizarla en mi vida todos los días.
60) ABRIL 25

Tengo muchas formas para no enfrentarme a mis


problemas. Puedo retraerme de los problemas y tratar de
ignorarlos, o esquivarlos. Pero eso no resuelve absolutamente
nada. No puedo convertirme en ovillo, cubrirme los ojos o
hacerme el sordo para que se esfumen los problemas.
Además, si sigo retirándome y evitando enfrentarme a mis
problemas, voy a perder la mejor parte de mi vida: vivir.
Así que, ¿qué tengo qué hacer? Primero, reconocer que
hay un problema. Examinarlo cómo si perteneciera a otra
persona, puede ayudarme a ver la forma en que podría
resolverlo. Puedo examinar los hechos, hablar al respecto, y
tratar de hallar las soluciones. Después, hacer algo para
poner las soluciones en acción y cambiar lo que puedo: Yo.

Para reflexionar
Puedo escapar de mis problemas durante largo tiempo,
hasta que por fin me alcance. En vez de desperdiciar tiempo
y energías tratando de evitarlos, ¿no sería más fácil empezar
a examinarlos con sinceridad? Es de sentido común. Cuando
lo hago, puedo buscar soluciones que sean adecuadas para
mí, y empezar a actuar basándome en ellas.
Durante largo tiempo, no entendí como podía amar y
odiar a mi padre alcohólico. Cuando todo marchaba bien y
se preocupaba por mí, me sentía satisfecho con él. Pero
cuando surgía una crisis y parecía no interesarse por mí en lo
absoluto, k> odiaba. Yo estaba confundido. Alternaba una y
otra vez mis sentimientos, a tal punto que me enfermé.
El programa me mostró que no puedo permitir que mis
sentimientos estén controlados por el comportamiento del
alcohólico. Cuando empecé a entender su enfermedad, esto
me ayudó a que yo dejara de reaccionar ante su mal humor.
Ahora me doy cuenta de que lo que yo realmente aborrecía
era el alcoholismo, y de que amo al alcohólico como persona,
mucho más de lo que yo me imaginaba.

Para reflexionar
El alcohólico, como las monedas, tiene dos caras: una que
está verdaderamente interesada por mí, y que me ama; y la
otra, que sólo se interesa en tomarse otro trago. Si pierdo el
control y me enfurezco para estar de acuerdo con la cara que
el alcohólico está mostrando, resurgirá mi mezcla de
sentimientos. Pero cuando trato de comprender la
enfermedad y lo acepto a él tal cual es, puedo amarle sin
importarme la cara que muestre.
Hubo una época en mi vida en que me daba trabajo
rezar. Le tenía miedo a Dios, y creía que a El no le interesaba
lo que tuviera que decirle. Yo oía muchas cosas preciosas,
pero cada vez que trataba de decírselas, simplemente no me
salían. Hasta que me di por vencido.
Cuando llegué a la hermandad, en el Undécimo Paso,
aprendí mucho sobre la oración. Había dentro de mí algo
muy sencillo que me decía: "Sé tú mismo, y dile a tu Poder
Superior lo que estás sintiendo". Nada me garantizaría que
El lo arreglaría todo, pero en vez de reprimirme, el hablar
con El hizo que me sintiera mejor.
Ahora se me hace más fácil rezar. A veces lo hago de
rodillas, aunque también puedo rezar al ir caminando a la
escuela, sentado en casa y hasta en el salón de clases. Estoy
aprendiendo que la oración no consiste sólo en pensamientos
y palabras; también mis acciones son oraciones. De hecho, la
forma en que vivo hoy puede que sea la forma más sublime
de oración en mi vida.

Para reflexionar
La oración es algo sencillo y natural que puede hacerse en
cualquier parte. No necesito muchas palabras especiales; tan
sólo el deseo auténtico de hablar con mi Poder Superior. Al
poner las palabras en acción, puedo hacer que mis oraciones
cobren vida.
Cuando un alcohólico logra por primera vez la sobriedad,
pensamos que se han acabado nuestros tormentos. Entonces,
algunos de nosotros descubrimos que es tan difícil vivir con
61) ABRIL 25

un alcohólico sobrio como con uno activo. Y no estamos muy


seguros de si esto nos gusta.
Pasamos largo tiempo esperando a que el alcohólico
dejara de beber. Ahora, que ha dejado de beber, todavía no
nos sentimos contentos. Creemos que merecemos ser más
felices. Comprendemos que le está costando mucho el
mantenerse sobrio, pero resentimos el hecho de que le sea tan
difícil dominar su mal genio. A veces pensamos que las cosas
marchaban mejor cuando estaba bebiendo.
Necesitamos el programa ahora más que nunca para
enderezar nuestro pensamiento. En vez de sentir
autocompasión, podemos estar agradecidos de que el
alcohólico esté sobrio. Podemos aceptar el hecho de que la
sobriedad no es la solución a todos nuestros problemas, y
utilizar el programa para empezar a enfrentarnos a los
cambios que esto conlleva.

Para reflexionar
A veces parece que la sobriedad puede acarrear aun más
problemas que los que yo tenía cuando el alcohólico estaba
bebiendo. Cuando practico el programa percibo una imagen
más clara de la situación. Esto es a veces duro, a causa de
todos los cambios, pero de cualquier modo, más vale la
sobriedad que las borracheras. Hoy estaré agradecido por la
sobriedad en nuestro hogar, y voy a trabajar respecto a mi
actitud, para que pueda ajustarme a esta nueva forma de
vida.
62) ABRIL 29

Tenía por costumbre hablar mucho de mis problemas en


la escuela. Muchas personas me escuchaban y se
compadecían de mí. Decía, por ejemplo: "Mi papá es
alcohólico*'. Esto hacía que me sintiera bien, hasta que un
día alguien me dijo que escuchara y recordara que no era yo
la única persona del mundo que tenía problemas. Entonces
empecé a darme cuenta de que había estado echándole la
culpa a mi padre por cada problema que yo tenía.
Poco después, vine a Alateen, y oí que la gente
mencionaba una frase: "hacerse la mártir". La descripción
me cuadraba a la perfección. Había estado alardeando de
mis aflicciones para llamar la atención de todos, y estaba
verdaderamente encantada por la atención y compasión que
me prestaban. En Alateen aprendí a dejar de desempeñar
este papel y a reconocer mi autocompasión como lo que es en
realidad.

Para reflexionar
A veces, me siento importante cuando me quejo de todos
los malos momentos por los que paso. Ahora puedo verlo
claramente - no era más que autocompasión. Cuando deje de
autocompadecerme y me ponga a practicar el programa,
podré ayudar a otras personas que aún están sufriendo.
El vivir con un alcohólico muchas veces me desquicia.
Nunca tema la seguridad de lo que iba a sobrevenir, y
tampoco podía garantizar mis propias acciones.
En ocasiones, mis defectos de carácter me despojaban de
lo mejor de mí misma, y empezaba a reaccionar ante todo.
Parecía como si tuviera los dos pies izquierdos, y cada vez
que abría la boca me equivocaba. Me sentía como si yo
misma fuera un error mayúsculo.
Alateen me recuerda que todos cometemos errores.
Ahora sé que si cometo uno, no se va a acabar el mundo. Esto
no tiene por qué desquiciarme ni echar a perder cuanto esté
haciendo. Si así lo quiero, puedo aprender de mis errores y
usarlos para ayudarme a crecer. El máximo crecimiento
llega cuando procuro recordar que yo no soy un error
porque haya cometido uno.

Para reflexionar
Cada día cometo muchísimos errores. Esto no tiene nada
de malo, a no ser que yo permita que esto me deprima. Con
la ayuda del programa ya no tengo razón para deprimirme.
En lugar de eso, puedo compartir con otros miembros
Alateen y dejar que los errores abran la puerta a un mejor
conocimiento de mí misma.

Antes de Alateen, casi toda mi vida me la había pasado


recorriendo muchos caminos. Cada uno de ellos parecía
conducir en diferentes dilecciones. Estaba acostumbrada a
hacer las cosas a mi manera, y si una ruta me parecía buena,
la emprendía sin trazar ningún plan, ni comprobar en qué
condiciones se encontraba. Anduve por rutas confusas y
accidentadas, largas, y no muy agradables. Casi siempre
acababa perdida o en un callejón sin salida.
Por medio de Alateen y con la ayuda de los miembros del
programa, aprendí a trazar planes para recorrer mi ruta,
antes de iniciar cada día. De antemano averiguo en qué
condiciones se encuentra y sigo las instrucciones, procurando
estar alerta con los obstáculos que pudiera encontrarme en el
camino. Ahora se me hace mucho más fácil viajar, y mi
mente está libre para disfrutar de todo k> que se presente en
el camino de mi vida.

Para reflexionar
Alateen es la mejor forma de "viajar" que conozco. Con
los Pasos y las Tradiciones como señales, sé que estoy en el
camino correcto y siguiendo la dirección correcta. Mi
destino: recuperación.
MAYO 2 (63

Alateen se parece mucho al juego de tenis. Cierto


día, cuando estaba calentándome el brazo me di
cuenta de que el rebote de la pelota me llegaba en la
misma forma en que había dado el tiro. Cuando
daba un buen saque, recibía un buen rebote. Si él
saque era mediocre, el rebote era igual de mediocre.
Lo mismo me pasa con el programa. Cuando trato
de practicarlo en todas mis acciones, me da buenos
resultados. Pero si no lo hago, los resultados no son
buenos.
Días después, mientras jugaba un partido, se me
rompió la raqueta. Y aunque sabía que tenía que
cambiarla, decidí seguir jugando, y en cada jugada
que hacía me quedaba cada vez más frustrada. Me
acordé entonces de los días antes de Alateen, cuando
hacía yo las cosas según mi voluntad. Claro está que
yo tenía "al mejor equipo", pero no me importó.
Simplemente seguí adelante, y cada vez más
disgustada. Entonces Alateen me introdujo a los
Doce Pasos, un "equipo" digno de confianza, un
instrumento que no falla.

Para reflexionar
Lo que yo ponga en el programa, determinará lo
que reciba de él. Si rechino los dientes y trato de
resolver mis problemas a mi manera, ando
buscando problemas. Pero cuando utilice los Doce
Pasos, obtendré cada día un mayor beneficio del
programa.
Antes de Alateen, mi actitud y mi comportamiento
variaban de acuerdo a la gente con quien andaba. Creía
que tenía que estar de acuerdo con todos y actuar igual que
ellos. Cuando estaba con gente pendenciera, gritaba y decía
groserías. Otando estaba con gente tranquila, me portaba
en forma agradable y de buenos modales. Cuando estaba
en compañía de personas de la iglesia, ya no hacía
juramentos y procuraba parecer un santo. Andando con
gente ruda, creía que debía actuar también con rudeza.
Estaba tratando de imitar a toda la gente. Mi desazón era
que nunca supe quién era yo.
Hoy, gracias al programa, soy mi propia persona. Mi
personalidad se basa en lo que yo siento y en lo que yo soy.
Ya no tengo que estar cambiando cada vez que ando con
diferentes personas. Soy tranquilo por naturaleza, lo cual
me parece bien. Y puedo serlo, sin importar con quien esté,
y espero que así me respetarán. Si no lo hacen, es problema
de ellos y no mío, porque ahora me estimo a mí mismo, y
actualmente me siento contento de ser como soy.

Para reflexionar
Si trato de ser como un duplicado de otra persona, jamás
llegaré a saber quién soy en realidad. Cuando me apego al
original, descubro que ser como soy es más emocionante de
lo que pensaba. El programa me da el valor para ser yo
mismo, alguien sin igual y extraordinario. Creerlo, sólo
depende de mí.
No recuerdo gran cosa de las borracheras de ira padre,
El ha estado sobrio desde hace tiempo. Mi madre ha estado
en Al-Anón casi por el mismo tiempo. Ambos me pidieron
que fuera a Alateen, pesque me haría bien. Aunque no me
agradó la idea, fui a las reuniones para tenerlos contentos.
Poco después, me puse a pensar: "¿Para qué voy?" Decidí
entonces que podía progresar sin asistir a las reuniones y
dejé de ir.
Entonces toda mi vida cambió. Despertaba de mal
humor, que persistía varios días. Mis amigos empezaron a
llamarme presumida, y cada vez que me acercaba a eDos
MAYO 2 (64

me pedían que me alejara. En general, me sentía muy


deprimida.
Me di cuenta de la gran necesidad que tenía de Alateen.
Comencé a asistir nuevamente a las reuniones porque yo
quena ir, no porque otros me dijeran que tenía que hacerlo.
Ahora veo que no voy a Alateen por tener un padre
alcohólico; voy porque el programa puede hacer que mi
vida sea muy diferente.
Para reflexionar
¿Estoy en Alateen porque así b quiero? Otras personas
puede que me digan que vaya, pero yo soy quien tiene que
escoger cuánto me puedo aprovechar de ello. Cuando
decido asistir a las reuniones y vivir de acuerdo al
programa, soy yo quien se beneficia al escoger madurar y
crecer.
Durante mucho tiempo tenía la costumbre de
concentrarme en los aspectos negativos de mi vida.
Envidiaba a la gente que tenía más dinero para gastar,
casas más bonitas, padres sobrios y hermanos y hermanas
que no se incomodaban entre sí. Creía que mi vida era
terrible y así lo hacía saber a todo el mundo.
Entonces, vine a Alateen y tuve la oportunidad de ver
cómo otros muchachos enfrentaban la vida en sus hogares.
Algunos, que tenían de sobra para estar agradecidos, con
frecuencia estaban de mal humor y se sentían desdichados.
Vi mucho de mí mismo en ellos, y eso no me gustó en
absoluto. Otros, que tenían una vida llena de calamidades,
procuraban sonreír y ser felices con lo poco que tenían.
Ellos me hicieron caer en cuenta de que la vida era algo más
que el solo hecho de lamentarse.
Es verdad que a veces, los problemas en el hogar pueden
deprimirme. Pero no tengo por qué sentir conmiseración
por lo que me esté pasando. En vez de eso, puedo
concentrarme en estar agradecido por las cosas buenas que
tengo.

Para reflexionar
El alcoholismo puede tratarme con dureza. Si aún
siento autocompasión, no tengo tiempo para mi crecimiento
personal. Quizá es el momento de despertar y darme
cuenta de que puedo desprenderme de esta vieja rutina de
autocompasión, cambiar mi actitud, y procurar cada día,
estar un poco más alegre. Quizá pronto descubra que esto
realmente sí funciona.
MAYO 6 (65

A veces me siento como si estuviera dando vueltas a 100


Km por hora y no puedo pensar con claridad. Me acelero,
dejo que las cosas se vayan amontonando hasta que me veo
forzada a tomar decisiones al instante, que a menudo me
salen mal.
Recuerdo entonces el lema: ¡Hazlo con calma! que obra
maravillas en mí, pues me ayuda a aflojar el paso. Me
desprendo de las cosas que me molestan y pienso antes de
actuar. Cuando estoy más relajada puedo seguir adelante
con mi vida.

Para reflexionar
Hoy trataré de conformarme y pensaré antes de actuar.
Seré buena conmigo misma, y tomaré las cosas como vengan.
El resentimiento es una de las emociones mas difíciles de
desarraigar. Se apodera de nuestro pensamiento de forma
inquebrantable. Nos perjudica a nosotros y también a los
demás.
Por medio del programa estoy aprendiendo a ocuparme de
mis resentimientos, antes de que ellos despojen lo mejor que
hay en mí. Utilizando los lemas: ¿Cuan importante es? y
Suelta ¡as riendas y entrégaselas a Dios, realmente me
ayudan a enfrentarme a ellos.
Si un resentimiento es demasiado fuerte para mí, acudo
entonces a mis amigos Alateen. Platicar de esto me ayuda a
calmarme y a ver las cosas con mayor claridad. Estos amigos
no me dan soluciones rápidas ni tampoco me dicen lo que
tengo que hacer. Simplemente me escuchan y comparten
conmigo la forma en que ellos vencieron algunos de sus
resentimientos. Y esto me da el incentivo que necesito para
resolver las cosas por mí mismo.
Para reflexionar
El resentimiento es una emoción poderosa. Si hoy permito
que me controle, acabaré haciéndome daño y perjudicando a
los que me rodean. Platicar de mis resentimientos con mis
amigos de Alateen me ayudará a obtener una mejor imagen
de las cosas. Empezaré por relajarme y desprenderme de mis
sentimientos de ira.
Una de las primeras cosas que oí cuando vine a Alateen fue
la palabra "enfermedad''. Jamás pensé que la forma de
beber de mi madre fuera una enfermedad, y al principio no
lo creía. Me dije para mí que, antes de aceptar esa idea tenía
que instruirme más acerca del alcoholismo.
Escuché en las reuniones y leí literatura Alateen y Al-
Anón. Gradualmente empecé a comprender mucho más
sobre alcoholismo, como esto había afectado a mi madre y
por qué hizo nuestra vida familiar tan desdichada. Al
comprenderlo se me hizo más fácil entender el Primer Paso y
admitir que yo era un inepto ante el alcohol.
Ahora puedo aceptar a mi madre como persona. Me doy
cuenta de que realmente padece una enfermedad, y que sólo
ella puede confrontarla. Todavía sigo tratando de
informarme cuanto puedo al respecto, pero ahora lo que
considero para mí más importante es mi recuperación
personal Me ocupo de esto utilizando los instrumentos del
programa.

Para reflexionar
Antes del programa creía que mi alcohólica era una
persona cruel y poco cariñosa, que bebía demasiado. Ahora
comprendo que padece una enfermedad, y que solamente
ella puede hacer algo acerca de ello. También yo he sido
afectado y gracias a Alateen, puedo hacer algo por cambiar
yo mismo.
A veces no sé qué hacer cuando surge un problema. Me
siento frustrado por no poder resolverlo por mí mismo.
Acudo entonces a los miembros del programa y por mucho
que traten de ayudarme, parece que eso no funciona. Sé que
existe una solución aunque rao siempre pueda encontrarla.
Casi siempre estoy tan involucrado en el problema, que no
puedo ver dónde hallar la solución. Pero cuando retrocedo y
veo las cosas en una mejor perspectiva, la solución se hace
evidente: los primeros cuatro Pasos. En los tres primeros
me desprendo del problema, diciendo: "Yo solo no puedo, El
sí puede, y creo que se lo dejo a ET. Me empiezo a dar cuenta
de que yo soy el causante de la mayor parte de mis
problemas, de modo que hago mi inventario para cambiar
mi forma de pensar y de actuar. Con tiempo y un poco de
paciencia el problema casi siempre se resuelve por sí solo.
MAYO 6 (66

Para reflexionar
Cuando estoy tratando de resolver un problema, el
Primero, Segundo y Tercer Pasos me ayudan a poner el
problema en mejores manos. Después utilizo el Cuarto Paso
para empezar a resolverlo. Para cada problema que tenga
hoy, existe una respuesta en los Pasos.
Después de practicar loa primeros cuatro Pasos, creí que
el Quinto Paso iba a hacer fácil. Admitir ante Dios y ante otro
ser humano que las cosas no marchaban correctamente en
mi interior no era algo tan malo. Hasta yo podía admitir
algunas de ellas.
Pero admitir la naturaleza exacta de nuestras faltas, no
fue nada fácil Tuve que profundizar más para averiguar por
qué yo era como era. Por ejemplo, la ira: se me hacía fácil
decir que sentía rabia porque la gente me hacia sentir de esa
forma. Pero la verdad es que siento rabia porque yo lo
permito. Esto no tiene nada que ver con otras personas, sino
conmigo.
El Quinto Paso me ayudó a aceptar la verdad respecto a
mí mismo. Cuando me enfrenté a mi verdadero yo, me fue
mucho más fácil llegar a la raíz de más problemas, lo cual me
dio el incentivo que necesitaba para librarme de ellos.
Para reflexionar
La sinceridad hace que el Quinto Paso realmente funcione.
En esta forma dejo de fingir y admito la verdad ante Dios,
ante mí mismo y ante otro ser humano. Me deshago de las
cosas que me gustaría creer de mí, y de las cosas que quiero
que otras personas piensen de mí, y me concentro en lo que es
realmente cierto. Cuando me examino profundamente y me
pregunto el por qué, encuentro las verdaderas respuestas que
necesito para resolver mis defectos de carácter.
Cuando estaba recién llegado a Alateen, preguntaba:
"¿Por qué bebe el alcohólico?" Siempre tuve el temor de
haber sido yo el causante del problema de bebida en nuestro
hogar, y quería saber lo que yo podía hacer para detenerlo.
Me dijeron que probablemente había tantas respuestas a
esa pregunta como alcohólicos en el mundo. Pero la simple
verdad es que el alcohólico bebe porque es un alcohólico. Y
eso no tiene nada que ver conmigo. ¡Qué alivio!
Ahora me doy cuenta de que lo que es importante no es
saber por qué bebe el alcohólico, sino el aceptar el hecho de
que lo que él hace y la bebida, es lo que causa los problemas.
Sé que no tengo que echarme la culpa por el problema y que
no hay nada que yo pueda hacer por detener la borrachera,
ya que en primer lugar no fui yo quien lo inició.

Para reflexionar
El por qué un alcohólico bebe, nadie lo puede adivinar.
Gracias al programa sé que yo no soy una de las razones.
Cuando empiece a aceptar el alcoholismo como una
enfermedad, dejaré de tratar de responder preguntas
respecto al alcoholismo y seguiré adelante con las preguntas
importantes respecto a mí mismo.
Antes de conocer Alateen estaba aislada y asustada. Me
sentía desconcertada, avergonzada y convencida de que mi
familia era diferente, y que nadie mas tenía un problema de
bebida en su familia.
En las reuniones conocí a muchos otros adolescentes con
los mismos sentimientos que yo tenía. Nuestros problemas
eran muy similares, de modo que ya no tengo que sentirme
desconcertada ni avergonzada. Me siento Ubre para hablar
de lo que pienso, y lo que necesito precisamente ahora es
comprensión y ayuda para enderezar mi vida, siempre que
esté dispuesta a utilizar el programa.
Para reflexionar
Saber que otras personas están pasando por lo mismo que
yo, hace que mi vida sea hoy mucho más fácil. Todos nos
prestamos mutua ayuda al compartir nuestros sentimientos,
al escuchar y al interesarnos los unos por los otros. Eso es lo
que hace de Alateen un programa ¡fenomenal!
Mensaje de un grupo Alateen: "Hemos descubierto a duras
penas que tener más de un proposito lo único que hace es
debilitar el mensaje de Alateen. Nuestro grupo había
decidido que sería una buena idea dar a nuestros miembros
la oportunidad de socializar, de modo que empezarnos a
tener bailes después de las reuniones. Pronto corrió la voz, y
los muchachos empezaron a venir sólo al baile pero no a las
reuniones. Los planes de los bailes se volvieron tan
importantes que se olvidaron de las sesiones o los miembros
asistían sin entusiasmo.
MAYO 6 (67

"Por fin el grupo se reunió y decidió eliminar los bailes. Se


puede bailar en otros muchos lugares, pero sólo se puede
obtener el programa Alateen en una reunión Alateen".

Para reflexionar
Nos reunimos para ayudarnos mutuamente y para llegar
a otros adolescentes que necesitan enterarse de que existe
Alateen. Si querernos que se difunda el verdadero mensaje
del programa, necesitamos aplicar seriamente Alateen en
nuestras vidas y en nuestro grupo. La Quinta Tradición es la
clave para hacer que esto suceda.
Fui a mi primera reunión buscando soluciones a los
problemas de nú madre. Como ella no hacía nada por
resolverlos, entonces yo asumí la responsabilidad de
hallar las soluciones.
Pronto descubrí que Alateen no daba este tipo de
respuestas. Al principio sentí deseos de dar la vuelta y
regresarme por donde había llegado. Pero como
Alateen fue el último lugar al que podía acudir, decidí
quedarme y probar el programa.
¡Qué bueno que lo hice! Ahora me doy cuenta de que el
programa tiene muchas soluciones.. .para mí. Cuando las
aplico en mi vida, aprendo a ocuparme de lo mío, y 1 dejar
que mi madre halle sus respuestas a su tiempo y a su manera.

Para reflexionar
Todo el tiempo ando en busca de soluciones. Encontraré
muchas de ellas si estoy dispuesta a utilizar el programa. Las
soluciones son para mí y para nadie más. Hoy quizá tenga
que escudriñar un poco para hallarlas, pero esto es \ lo que
me fortalece hoy para crecer como persona adulta.

i
Muchas veces nos sentimos heridos porque nuestros
padres parecen tratarnos como si realmente no nos amaran.
A menudo, lo que están diciendo no es lo que estamos
oyendo. A veces, simplemente, somos demasiado tercos para
escuchar o hablar con ellos.
Si no hablamos con nuestros padres nos estamos perju-
dicando nosotros mismos, más que a nadie. Si reprírnimos
nuestros sentimientos ¿quién podrá ayudamos? ¿Cómo
podrá la gente saber lo que sentimos si no se lo decirnos?
Nadie, ni siquiera nuestros padres, pueden leer nuestra
mente. Depende de nosotros decirles cómo nos sentimos y
también emplear un poco de tiempo para escucharlos.

Para reflexionar
Aprendo mucho al comunicarme con otras personas. El
compartir nuestros sentimientos con ellos - hablando y
escuchando - nos ayuda a desprender la "estática'' en
nuestras líneas de comunicación. Alateen ayuda para que
estas líneas se mantengan despejadas.
Estaba acostumbrada a esperar mucho de los demás.
Cuando no me respondían, los menospreciaba. Creía que eso
era inofensivo hasta que ellos me volvían la espalda. Fue así
como empecé a alimentar grandes resentimientos.
Cuando llegué a Alateen, escuché muchas charlas sobre
aceptar a los demás. Al principio no quería aceptar a nadie, a
causa de la forma en que me habían tratado. Poco después
empecé a pensar que yo podía tolerar a otras personas si lo
deseaba. En aquella época ésta era mi idea de aceptación.
Ahora sé que dista mucho de serlo.
Tuve que cambiar mi actitud. Al principio practiqué con
las personas de mi grupo. Conforme fui aceptando a estas
nuevas amistades, aprendí a aceptar a las personas hacia las
cuales aun guardaba resentimientos. Traté de dejar de
esperar demasiado de ellos, hasta que al fin incluso algunos
de nosotros volvimos a llevarnos bien.

Para reflexionar
Aceptación es algo más que tolerar a otras personas. Es la
clase de actitud que me hace sentir interiormente satisfecha.
Ello me permite darle a la gente la libertad de ser realmente
lo que son en vez de esperar que ellos sean lo que yo piense
que deberían ser. Cuando dejo de tratar de obtener de la
MAYO 6 (68

gente lo que no pueden darme, puedo aceptarles y disfrutar


todo lo que quieran brindarme.
Algunas personas creen que Alateen es para alcohólicos
jóvenes. Otras dicen que nuestras sesiones son para chismes y
quejas, donde los muchachos hablan de sus padres. Aún hay
otras que piensan que Alateen consiste en simples reuniones
sociales para adolescentes, mientras que otros creen que es
un servicio de niñeras para los padres que desean asistir a sus
propias reuniones.
Nada de esto es verdad. Pero mientras unas pocas
personas piensen así, muchos futuros miembros Alateen
quizá no reciban la ayuda que necesitan.
Esta es la razón por la que es necesario que cada uno de
nosotros ponga de su parte, para asegurar que la gente logre
la imagen correcta de nuestra hermandad. Hemos sido
afectados por el alcoholismo, y necesitamos ayuda. Al utilizar
lo* instrumentos del programa podremos poner orden en
nuestras vidas. Mostrarlo en nuestras acciones es el mensaje
más poderoso que podemos transmitir.
Para reflexionar
Unos cuantos malos ejemplos pueden dar a la gente una
impresión equivocada de lo que realmente es Alateen.
Sorprende ver lo difícil que es cambiar la mentalidad de la
gente. Alateen significa mucho para mí y deseo hacer lo que
pueda por atraer a la gente al programa. Si tomo el
programa con seriedad y demuestro lo que ha hecho por mí,
el mensaje del programa se difundirá claro y rotundo y a la
gente podría quizas gustarle k> que ve y oye.
Para muchos de nosotros los hijos de alcohólicos, aupar a
la gente, los lugares y las cosas es casi una forma de vida.
Culpamos a las escuelas por tener reglas disciplinarias, a los
maestros porque esperan que aprendamos, a las iglesias
porque nos ayudan» Culpamos a nuestros padres porque no
nos aman lo suficiente, pee omxernos demasiado o muy poco,
y sobre todo, nos culpamos a nosotros mismos por creer que
somos la causa de la bebida.
Parece que pensamos que sin tan sólo ellos cambiaran,
todo en nuestra vida quedaría arreglada Pero, ¿es eso
verdad? ¿Se necesita esperar que cambien las personas,
lugares y cosas para cambiar nosotros?
La respuesta de Alateen es clara y rotunda: Qué empiece
por mí. Aprendemos a aceptar responsabilidades por
nuestra propia vida en vez de echarle la culpa a los demás.
Sinos ponemos a esperar a que cambie la gente que nos
rodea, quizá nunca lo haga, y perderemos toda una vida de
oportunidades para crecer y madurar. Depende de nosotros,
hoy, el que le saquemos provecho a la vida.
Para reflexionar
Es fácil echarle la culpa a los demás por lo que está mal en
mi vida. Eso puede que me aligere la carga, pero Alateen me
ayuda a poner las cosas en su verdadera perspectiva; y a
ocuparme de mi propia vida. Si hoy quiero ojie las cosas
marchen bien, tengo que entrar en acción, para lograr que
esto se realice.
Cuando había problemas en nuestro hogar, me escapaba
y me alejaba de allí, para poder vivir el día. Creía que podía
ignorar esa parte de mi vida, y seguir viviendo la gran vida
como mis amigos lo hacían. Cuando finalmente me fui de
casa, me llevé la sorpresa de mi vida. No había dejado atrás
mis problemas en lo absoluto; los había traído conmigo.
Todo el tiempo andaba preocupado, especialmente por mis
hermanitos, pensando si a mi madre le sería posible
enfrentarse a la situación en el hogar sin contar con mi
ayuda. No pude concentrarme en mi propia vida, y poco a
poco empecé a decaer.
Llegué a la hermandad justo a tiempo. Tuve que admitir
que al alejarme no había resuello nada, porque no podía
escapar de mí mismo. Ahora estoy procurando enfrentarme
a mis problemas y solucionarlos uno a la vez. También le
platiqué a mi familia sobre el programa, y les dije que los
quiero y pueden contar conmigo si me necesitan. También
estoy aprendiendo a desprenderme y dejar que ellos
enfrenten sus propios problemas.

Para reflexionar
No vale la pena abandonar el hogar para escapar de mis
problemas. La mayor parte de las veces acabo sintiéndome
peor que nunca, porque me preocupo. Para cambiar voy a
MAYO 6 (69

tratar de "perseverar" y resolver mis problemas. Esto


requiere mucho más valor, y si lo hago tendré mucho más
respeto por mí mismo.
MAYO 20 (70

Antes de llegar a Alateen, siempre trataba con ahínco de


impresionar a todos. Hice cuanto pude por caerle bien a la
gente, y cuando no lo lograba me sentía terriblemente mal.
Cualquier cosa mala que me pasara, aunque fuera la cosa
más insignificante, parecía que era el fin del mundo.
Hoy tengo el beneficio de Alateen. Antes de que mi mente
se distorsione por todo, me pregunto: ¿Cuan importante es?
No hay razón para que ande toda ofendida y eche a perder el
día entero. En vez, de esto puedo relajarme y dejar que la
gente me quiera como soy, tomando las cosas a medida que
lleguen.
Para reflexionar
Hacer una tempestad en un vaso de agua es desperdiciar
mi tiempo y mi energía. Hoy usaré el lema: ¿Cuan
importante es? Me ayudará a pensar las cosas antes de
actuar, y esto me dará justamente una mejor imagen de lo
que es importante en mi vida.
Tengo el derecho a sentirme feliz. Nadie puede
quitármelo. Como cualquier otra persona, cuento con una
buena oportunidad para disfrutrar una vida dichosa. Todo
depende de mi actitud.
Hay un alcohólico en mi familia. Eso hace que me sea
difícil - aunque no imposible - el ser feliz. Ese hecho no puede
quitarme mi derecho a ser feliz, a

La felicidad no es cosa del azar. No tiene nada que ver con


el lugar donde viva, ni con la gente que me rodea. Es una
obra interior. Yo labro mi propia felicidad, basado en cómo
me siento respecto a mi vida.
Para reflexionar
Esperar a que otras personas me hagan sentir bien es
perder el tiempo. Mi felicidad depende de cómo piense yo.
Hoy me tomaré un tiempo para pensar en las cosas que me
hacen feliz, darme cuenta de que mi felicidad está en mis
manos.
En cierta época me culpaba por todo lo equivocado en mi
vida. Me sentía terriblemente mal. Pero, poco después, me
convencí de que toda la culpa era de Dios. Esto me hizo
sentirme mejor, pues ahora se trataba de Su culpa, y cuando
las cosas no salían bien, ya no me echaba yo la culpa.
Cuando llegué al Tercer Paso no había forma de que yo
confiara mi voluntad y mi vida al cuidado de Dios. Hasta ese
momento pensaba que El había hecho conmigo una labor
pésima; así que ¿para qué el querer mejorar? Nadie más que
yo iba a controlar mi vida.
Ahora las cosas son diferentes. Me tomó cierto tiempo
pero, finalmente, empecé a comprender cuál era el
problema. Había estado demasiado ocupado echándole la
culpa a Dios por mis errores, que no podía oír lo que El de
verdad me estaba diciendo. Me imagino que no era muy
buen oyente. Todavía no soy el mejor oyente, pero al mejorar
mí contacto con Dios, las cosas están mucho mejor.
Para reflexionar
Echarle la culpa a Dios es darle una salida fácil a mis
problemas, pero de nada me sirve para relacionarme con El.
El Tercer Paso me muestra cómo trabajar junto con Dios y
dejar que El me ayude a ocuparme de mi vida.
Cuando llegué a Alateen por primera vez, tenía muchos
temores acerca de mi alcohólica. Estos temores me ofus-
caban tanto la mente, como si yo tuviera los malestares que
se sienten tras una borrachera. ¿Qué tal si bebe esta noche y
tiene una accidente automovilístico? ¿Qué tal si pierde su
empleo? ¿Cuándo va a ir a AA y lograr la sobriedad?
El programa me ayudó a darme cuenta de que estaba
perdiendo el tiempo con semejantes preguntas. En vez de
eso, me motivó a examinarme con más detenimiento.
Cuando así lo hice empecé a descubrir por qué sentía tanto
miedo. Entonces recurrí a un Poder Superior a mí misma, y
le pedí me ayudara a librarme de mis temores.
Hoy el temor ya no controla mis pensamientos. Sé que no
puedo hacer nada acerca de la bebida de la alcohólica. Soy
impotente ante elfo. Quizá sea ella una de esas desdichadas
que jamás dejaran de beber. Eso también puedo aceptarlo y
tratar de tenerle compasión en vez de permitirme pasar por
otro temor al malestar de una borrachera.
Para reflexionar
Mis temores respecto al alcoholismo, pueden provocar en
mí pensamientos obsesivos. El programa me ayuda a
romper su impacto en mi mente. Averiguo cuáles son mis
temores y le pido ayuda a mi Poder Superior para
MAYO 20 (71

superarlos. Desprenderme de los temores, me da la libertad


de seguir adelante para lograr un mejor cono-miento de mí
misma y de la alcohólica.
MAYO 24 (72

En Alateen descúbranos k> que es la verdadera amistad.


El ser sinceros y abiertos al compartir nuestros problemas en
las reuniones, hace que nos Sintamos más cerca unos de
otros.
Este tiempo de amistad abre cantidad de posibilidades.
Hace que aumente nuestra confianza. Nos comprometemos
en nuevas actividades y conocemos gente nueva. Mejoran las
relaciones con nuestra familia y empezamos a progresaren la
escuela. En forma especial, empezamos a sentir que la vida,
después de todo, vale la pena vivirla.
Para reflexionar
Un sabio dijo en cierta ocasión: "Los amigos son regalos
que nos hacemos a nosotros mismos". Pudo haberse referido
a Alateen. Las amistades que he hecho en mi grupo me han
demostrado que la gente se interesa de veras por los demás.
Me han ayudado a sentirme satisfecha de mí misma, y esto
me infunde confianza para seguir adelante.
Vivir con un alcohólico casi me puso al "borde del
abismo". Estaba seguro que Dios me había abandonado, de
modo que renuncié a El y traté de desarrollar yo solo un plan
para solucionar las cosas. Al hacer esto, todo pareció que iba
de mal en peor. Me sentí como si estuviera solo, llevando
encima una pesada carga cuesta arriba.
Llegué a Alateen desesperado. Pasó mucho tiempo antes
de que pudiera sentir algo. Por fin, hallé la fe en un Poder
Superior a mí. Es diferente a cualquier otra cosa que hubiera
experimentado antes. Es corno una sociedad. El suministra la
sabiduría y yo hago el trabajo. Actualmente parece que todo
marcha verdaderamente bien.

Para reflexionar
En cierta época, mi vida era una lucha constante porque
no tenía fe. Hoy necesito el programa para hacer que mi fe
funcione. Ahora no puedo concebir una vida sin fe. Es una
sensación de bienestar saber que existe un verdadero poder
que me respalda y que cada día me ayuda a crecer.
Cuando llegué a Alateen mis padres ya estaban en AA. No
pasé por muchos de los problemas que algunos miembros de
Alateen atraviesan por vivir con un alcohólico activo. Creí
que sena fácil vivir el programa habiendo sobriedad en el
hogar. En realidad yo no estaba viviendo el programa en lo
absoluta porque actuaba por impulso propio.
Entonces alguien me recordó que lo que obtengo del
programa depende de mí, independientemente de que el
alcohólico beba o esté sobrio. Esto fue, finalmente, lo que me
hizo despertar y darme cuenta de que me hacía mucha falta
crecer. Empecé a aplicar el programa en mí mismo.
Descubrí sentimientos que ni siquiera sabía que estaban allí:
temor, resentimiento, ira, frustración, y traté de enfrentarme
a ellos utilizando los Pasos y los lemas.
Ahora creo que la sobriedad es un beneficio adicional. No
garantiza una travesía sin dificultades; es, sencillamente, otro
comienzo. Si espero que el programa me dé resultado, tengo
que practicarlo como cualquier otra persona.
Para reflexionar
Es fácil ocultarme detrás de la sobriedad de mis padres y
olvidarme de que hay que practicar el programa. Pero obrar
así es negarme a mí mismo la oportunidad de crecer. En vez
de esto estaré agradecido por la sobriedad, y pensaré que es
un buen punto de partida. Hoy "saldré de mi escondite" y
empezaré a vivir el programa para mi propio beneficio.
Hasta que llegué a Alateen no creía que nadie tuviera un
problema tan grande como el mío. Esto me dio muchos
motivos para autocompadecerme. A medida que fui
asistiendo a más reuniones, empecé a abrir los ojos. Los
problemas de otras personas hicieron que los míos
parecieran más pequeños, aunque ellos los enfrentaran con
valentía. Algunos de los muchachos estaban en situaciones
tan terribles como las mías, pero no reaccionaban como si eso
fuera el fin del mundo; aceptaban el hecho de que su familiar
alcohólico padecía una enfermedad, y empezaban a hacer
algo acerca de sí mismos.
Al abrir los ojos ante la realidad de los problemas de otras
personas he detenido el diluvio de mi auto-compasión. Ahora
utilizo el programa para investigar mis problemas. Sé que no
son fáciles de resolver, pero enfrentarse a ellos y solucionarlos
es muchísimo mejor que permanecer con los brazos
cruzados y sentir autocompasión.
Para reflexionar
La autocompasión no es la solución para mis problemas.
Otras personas también tienen problemas, pero no se
quedan de brazos cruzados sintiendo autoconmiseración.
Ellos utilizan el programa para hacer algo al respecto. Ya era
tiempo de que yo hiciera algo acerca de mis problemas.
MAYO 24 (73

Algunas personas pueden ser muy farsantes. Sé muy bien


lo que es eso, pues yo era de esa forma. Siempre estaba
simulando que las cosas marchaban mejor de lo que
aparentaban. Tenía una sonrisa fingida, y mentía entre
dientes acerca de cómo me sentí interiormente.
En Alateen aprendí a ser auténtica, es decir, a ser sincera
conmigo misma y con todos los demás. Cuando estoy
deprimida, puedo manifestarle a otras personas que estoy
dolida, y aceptar su ayuda. Y cuando me siento feliz, también
puedo compartir con otros, diciéndoles lo contenta que me
siento.
Ya no tengo porque disimular. No hay nada que fingir.
Gracias al programa las cosas van mucho mejor.
Para reflexionar
Después de muchos años de estar encubriendo la verdad,
es bueno saber que puedo mostrarle al mundo mi verdadero
yo. Unos días me siento feliz, y otros me siento triste. Pero
saber que me aceptan tal como soy, es la mejor sensación de
todas.
No es fácil aprender a vivir sólo por hoy. Algunos de
nosotros pasamos muchísimo tiempo preocupándonos por el
pasado y el futuro.
Obramos tan precipitadamente que no nos relajamos lo
suficiente para disfrutar de cada día. Atestamos esas
veinticuatro horas con tareas escolares, pruebas, empleos,
citas y amigos, y luego nos damos cuenta de que a veces no
podemos con ello. Nos llegamos a sentir frustrados y
agotados.
Un día a la vez es un Lema sencillo para gente com-
plicada como nosotros. Nos ayuda a calmarnos y a vivir. De
nuevo empezamos a pensar correctamente y a ordenar otra
vez nuestra vida. Aprendemos a establecer prioridades, a
tomar las cosas con calma y a disfrutar cada día en la forma
que venga.
Para reflexionar
El ayer ya se fue y el mañana no ha llegado. El día de hoy
es el único que tengo para vivir. Es como una cápsula para
tomar cada veinticuatro horas; si tomo una por la mañana,
con un "vaso" de actitud positiva, me relajará y obtendré un
mejor provecho del día.
Yo era la clase de personas que necesitaba que me
demostraran las cosas antes de creer en ellas. Se
parecía a la forma en que creía en Dios. No aceptaba
lo que otros dijeran, porque ellos no podían
mostrarme a Dios.
Hice cantidad de indagaciones por mi cuenta. Leí
libros, hablé con gente religiosa, medité, me pasé
mucho tiempo pensando, pero no podía hallar las
respuestas que andaba buscando. Pasé por momentos
difíciles, incluso después de haber llegado a la
hermandad. Los Doce Pasos me dieron cierta
orientación, pero aún no me sentía satisfecho.
Entonces, una noche sucedió que mientras estaba en
la reunión, observé a un compañero consolando a un
nuevo miembro, y supe que había encontrado lo que
había estado buscando: la obra de Dios por medio de
la gente.

Para reflexionar
No necesito libros ni teorías extravagantes para
comprobar que mi Poder Superior existe. Ahora sé
que mi Poder Superior es muy real, cuando me pongo
a mirar a mi alrededor en una reunión Alateen, y veo
la evidencia que necesito: miembros que se prestan
mutua ayuda amándose y auxiliándose entre sí.
¿Hasta qué punto estoy practicando bien mi programa?
¿Tomo lo que me gusta de las sesiones y lo practico, o
simplemente lo guardo hasta la próxima sesión? ¿Tengo mis
libros y folletos arrinconados en casa, o reservo tiempo para
leerlos e instruirme acerca del programa? ¿Comparto con
los miembros sólo en las reuniones o me comunico con ellos y
platicamos entre sesión y sesión? Cada noche, preguntas
como éstas podrían formar parte mi Décimo Paso.
Responderlas con sinceridad me ría que para practicar
el programa se requiere /JM práctica diaria. Esto
significa aplicar los principios tttel programa en todas mis
acciones, y no solamente en \s reuniones.

Para reflexionar
MAYO 24 (74

Es fácil ser un buen miembro en las reuniones. Pero otra


cosa es utilizar cada día el programa. Al hacer un inventario
diario, con la ayuda del Décimo Paso, hace que empiece a
pensar en qué forma practico el programa.
JUNIO 1 (75

Vine a Alateen buscando el cariño y la aceptación de otras


personas, pues me había dado por vencida. Hallé ambas
cosas cuando el grupo me dio la bienvenida y me hizo sentir
que pertenecía a él. Fue una sensación muy buena, pero no lo
suficiente como para regresar, necesitaba más.
Entonces empecé a utilizar los Doce Pasos. Estos me
llevaron más allá de esa buena sensación y me mostraron el
camino a seguir para iniciar mi recuperación.
Al principios los Pasos me ayudaron a enfrentarme a la
situación de convivir con un alcohólico. Hoy los practico en
un nivel profundo. Cada experiencia que tengo me ayuda a
entender la forma en que puedo aplicar estos Pasos a todos
los aspectos de mi vida.
Me había acostumbrado a pensar que tenía que entender
cada Paso a la perfección antes de pasar al siguiente. Ahora,
sencillamente voy repasando todos los Pasos, procurando
utilizarlos en todo cuanto hago, para que cada día pueda
seguir creciendo y recuperándome.

Para reflexionar
Las gratas sensaciones que logro al pertenecer a Alateen,
son como "el merengue azucarado que cubre el pastel". Los
Doce Pasos constituyen la verdadera esencia del programa.
Son fáciles de decir pero difíciles de practicar, aunque
siempre me dan la orientación que necesito para realizar
algo en mi vida. Hoy empezaré a practicarlos y a tomar más
en serio mi recuperación.
76) JUNIO 2

El Primer Paso es como admitir una derrota. Creía que


podía hacer que el alcohólico dejara de beber, pero no puedo.
Es como luchar una batalla perdida.
Estuve tratando tanto tiempo de controlar su vida, que la
mía se estaba descontrolando. No me estoy ocupando de mí
como debiera, tampoco me está yendo bien en la escuela, y no
tengo muchos amigos. Siento como si nada me saliera bien.
Cada vez que trato de hacer las cosas a mi manera, lo que
realmente hago es un lío.
No ouiero pensar que soy un perdedor, pero tengo que
enfrentarme a esto si deseo ser un "vencedor". Aceptar todo
esto resulta difícil pero el primer Paso puede ayudarme.
Para reflexionar
Tratar de controlar la bebida de otra persona es igual que
"dar palos a ciegas". El Primer Paso es un nuevo comienzo.
Cuando no tengo miedo de admitir que soy un perdedor,
puede ser el principio de una "racha de victorias" para el
futuro.
El Primer Paso me mostró que mi vida es como un equipo
que pierde todos los juegos. Se necesita un nuevo entrenador.
El Segundo Paso me ayuda a econ-trar a ese nuevo
entrenador, un Poder Superior a mí que pueda darme un
nuevo sentido de dirección.
Intenté gobernar mi propia vida, pero era demasiado
para mí hacerlo solo. Necesitaba ayuda.
Mi nuevo entrenador puede darme la ayuda que necesito.
Me ayuda a poner en orden mis pensamientos y a hacer que
el equipo" trabaje otra vez parejo. Pero depende de mí tener
la suficiente fe para dejar que El me ayude.
Para reflexionar
Para que un buen equipo rinda lo mejor de sí, necesita un
buen entrenador. Lo mismo ocurre con mi vida. He tratado
de manejar las cosas a mi manera, pero no me dio resultado.
Ahora, con la ayuda del Segundo Paso, encontré un nuevo
entrenador un Poder Superior que cuida de mi vida. Con su
ayuda, pronto seremos un "equipo triunfador".
Estoy tan acostumbrado a gobernar mi vida que es duro
dejar que otro tome las riendas. Pero ahora sé que si con-
tinúo tratando de controlar las cosas por mi cuenta, voy a
seguir perdiendo.
El Segundo Paso me pidió confiar en mi Poder Superior
para que hiciera una buena labor con mi vida. Claro que eso
sí puedo hacerlo. Pero soltar las riendas y permitir que El
naga la tarea, es otra cosa. El Tercer Paso me pide que tome
una decisión al respecto. No es fácil lograrlo sin asustarme.
Soltar las riendas es correr un gran riesgo. Pero resultaría
más fácil si recuerdo que un buen equipo cuenta con un buen
entrenador.
Realmente, todavía no puedo soltar completamente las
riendas. Está bien. Todo lo que me piden que haga es decidir
hacerlo. Si logro hacer un poco, el resto de los Pasos me
mostrarán cómo poner la decisión en acción.

Para reflexionar
Todavía quiero dirigir mi vida. Esto hace que me sea difícil
soltar las riendas. Hoy, con la ayuda del Tercer Paso, decidiré
hacer eso y dejaré que mi Poder Superior me muestre lo que
yo necesite. Tomar la decisión será el principio para dejar
que El se haga cargo de mí.
JUNIO 5 (77

El nuevo entrenador de un equipo tenía por costumbre


hacer un inventarío para saber con qué clase de equipo
tenía que lidiar. Lo mismo pasa con mi Poder Superior.
Cuando suelto las riendas y empiezo a dejar que El se
encargue de mí, las cosas marchan bien. El quiere que yo
utilice el Cuarto Paso para que me fije en mí al
examinarme.
Durante mucho tiempo he necesitado una buena
"limpieza de casa". Antes, cuando yo era el que controlaba
las cosas, pensaba en cambiar de actitud, pero nunca era lo
suficiente. Ahora tengo que escudriñar más a fondo.
Es de miedo, pero eso me ayuda a recordar que no todo lo
que llevo en mis adentros es malo. También poseo algunas
buenas cualidades.
Sé que no puedo hacerlo todo al instante. Lo importante
es hacerlo. Tampoco tengo que hacerlo yo solo, porque mi
Poder Super está a mi lado para ayudarme a hacerlo al
máximo. Y aunque sé que a veces es difícil enfrentar una
situación, lo que halle solamente puede ayudarme a
progresar.

Para reflexionar
Si obré seriamente en el Tercer Paso al confiar mi vida y
mi voluntad al cuidado de mi Poder Superior, el Cuarto
Paso logrará que yo continúe en esa dirección, y me
ayudará a enfrentarme al estado que voy adquiriendo y a
estar dispuesto a trabajar con mi Poder Superior para que
las cosas mejoren.
78) JUNIO 6

En el Cuarto Paso descubrí que algunas de mis fallas


impedían que se revelaran mis buenas cualidades. Ahora, en
el Quinto Paso, necesito preguntar: "¿Por qué?", y decir
exactamente lo que anda mal en mí.
Primero tengo que hablar con mi Poder Superior que es
un oyente estupendo. Quiere que yo sea sincero con El y
conmigo mismo. Se necesita tiempo para superar ese
sentimiento de culpabilidad a causa de todas las cosas malas
que he cometido. Pero cuando enfrento a mi verdadero yo, es
más fácil aceptarme como soy.
El también me presenta a otras personas con quienes
hablar, por lo regular a alguien en quien puedo confiar.
Cuando converso con esa persona, me da otra perspectiva de
las cosas. A veces soy más exigente conmigo de lo que debiera
ser. El tener a alguien que me escuche, me ayuda a ver las
cosas con mayor claridad.
Para reflexionar
Una vez que haya reconocido mis errores en el Cuarto
Paso, la única forma de resolverlos es enfrentarme. El Quinto
Paso me da la oportunidad de hacerlo. Hablar sobre estas
cosas con mi Poder Superior y con otra persona, y admitir yo
mismo mis faltas me ayuda a comprender por qué siento y
actúo en la forma que lo hago.
Es difícil desprenderme de mis defectos pues ellos no
quieren desprenderse de mí, y tampoco estoy seguro de que
yo quiera desprenderme de ellos. A veces los uso como
pretexto en mi forma mediocre de actuar.
Traté de eliminarlos por mi cuenta, pero no pude. Esa
tarea le corresponde a mi Poder Superior, pero El no hará
absolutamente nada si yo no estoy dispuesto.
El Sexto Paso me dice que el estar dispuesto es tan
importante como eliminar mis faltas. No puedo acudir a una
cita importante o participar en un gran juego sin estar
preparado; lo mismo pasa con la eliminación de mis defectos.
Cuando estoy dispuesto a dejar de usarlos como excusa, mi
Poder Superior puede ayudarme.
Para reflexionar
Si quiero acabar con mis defectos, tengo que dejar de
poner pretextos y estar dispuesto a aplicar el Sexto Paso.
Cuando esté dispuesto, mi Poder Superior me dará la ayuda
que necesito.
79) JUNIO 8

Ahora que estoy dispuesto a eliminar mis defectos, el


Séptimo Paso me muestra cómo hacerlo. Mi Poder Superior
está dispuesto a ayudar, pero a mí me toca pedírselo.
Pedírselo es una experiencia de humildad. Yo solía sentir
vergüenza de pedir ayuda a alguien; me hacía sentir
empequeñecido y apocado. Pero ahora conozco la verdad:
Necesito ayuda; y la verdad es que no puedo hacerlo solo y
tampoco tengo miedo de admitirlo.
Mi Poder Superior tiene lo que se necesita para librarme
de mis defectos. Me encantaría que El los eliminara todos de
una vez por todas. Pero tengo que recordar que necesité
mucho tiempo para estar donde ahora me encuentro, y no
puedo esperar a cambiar de la noche a la mañana.
También yo tengo que poner de mi parte. Si me cruzo de
brazos y doy por sentado que El siempre me ayudará, mis
viejos problemas regresarán en un instante. Pero si procuro
reemplazar cada defecto con una nueva cualidad que me
gustaría tener, me sentiré libre para disfrutar cada día las
cosas buenas que hay en mí.
Para reflexionar
Necesito la ayuda de mi Poder Superior para eliminar
mis faltas. El está dispuesto a ayudarme, pero yo tengo que
pedírselo. Eliminar mis defectos de carácter es mucho más
que el simple hecho de quitarlos; es reemplazarlos con las
cosas buenas que El quiere que yo sea. Hoy, con su ayuda, un
mejor yo está a mi alcance.
En el pasado, yo perjudiqué a muchísimas personas:
familia, amigos, e incluso espectadores inocentes. El Octavo
Paso me pone en disposición de hacer rectificaciones. Se
parece al Sexto Paso porque me demuestra que estar
dispuesto es tan importante como hacerlo.
Parte de estar dispuesto es anotar los nombres en una lista.
Decir que todo fue error "de ellos" resulta más fácil para mí.
Pero el escribir sus nombres me ayuda a enfrentar el hecho
de que he perjudicado a otra gente.
Hacer mi lista no significará nada, a no ser que esté
dispuesto a hacer algo al respecto. Puedo darle largas al
asunto y dar un montón de pretextos, pero mi Poder
Superior no me lo va a permitir. El quiere que yo esté
dispuesto a disculparme, para que cuando llegue el momento
de rectificar mis errores, sea mucho más sincero.
Para reflexionar
He perjudicado a mucha gente, y por eso me siento muy
mal. Sé que tengo que pedir que me perdonen, pero antes
debo estar dispuesto a realizarlo con toda sinceridad. El
Octavo Paso me guía para lograrlo. Cuando complete la lista
y piense sería y verdaderamente en hacer mis rectificaciones
con ellos, estaré dispuesto a expresar, con toda sinceridad,
¡Lo siento!
Con todos los problemas que yo provoqué, me
perjudiqué inmensamente. Cuando llegó el momento de
terminar mi lista en el Octavo Paso, me di cuenta de que me
había olvidado de una persona importante: Yo.
El Noveno Paso me ayuda a perdonarme. No siempre
siento que merezco ser perdonado, pero cuando me acuerdo
de que mi Poder Superior me perdona, me resulta más fácil
perdonarme yo mismo y pedirle a las demás personas que
me perdonen.
Puedo empezar por decir sencillamente ¡Lo siento
mucho! y aunque fuera rechazado, sé que hice todo lo
posible para dejar en paz el pasado.
A veces, por traer a colación el pasado, otras personas
pueden sentirse perjudicadas. Entonces es cuando tengo que
"Soltar las riendas y entregárselas a Dios".
Para reflexionar
Del Noveno Paso aprendo muchísimo sobre el perdón.
Perdonarme yo mismo me facilita el pedirle a otras personas
que me perdonen. Muchos de ellos lo harán si se los pido
directamente con una disculpa sincera. Hacer rectificaciones
conmigo y para con los demás, es triunfar sobre el pasado, y
me ofrece la oportunidad de empezar de nuevo el día de hoy
victoriosamente.
80) JUNIO 8

Ahora que nuevamente estoy en la pista de los


vencedores, quiero mantenerlo de esa forma. No puedo dejar
que las cosas se escapen; de lo contrario retrocedería en un
Instante a la situación en que me hallaba.
A mi Poder Superior le gusta que yo tenga mis "manos
limpias" al empezar cada día y el Décimo Paso es una buena
forma para comenzarlo. Tengo que examinar mis actitudes
y acciones con toda regularidad, para ver si hay algo que
pueda mejorarse. Cuando cometo un error (y todavía los
cometo con frecuencia), necesito admitir de inmediato que
estoy equivocado, en vez de dejar que los problemas se
acumulen, como antes ocurría.
Cuando cada día estoy pendiente de las cosas, siento que
de verdad estoy al día. Esto me ayuda a concentrarme en el
día de hoy, en vez de tratar de compensar los errores que
cometí en el pasado.
Para reflexionar
Un inventario no es un convenio realizado en otro tiempo.
Sino algo que necesito hacer cada día, para perseverar en mi
sinceridad. Cuando me examino cada día, y trato de ocu-
parme de los problemas según vayan llegando, las cosas sin
importancia no llegan a convertirse en grandes problemas.
Esto hace que mi mente se ubique en el presente, y me
permite concentrar todas mis energías en este día para
vivirlo a plenitud.
Mi Poder Superior y yo hemos estado muy juntos al
tiempo que tratábamos de reconstruir mi vida. Pero a veces
no me siento tan cerca de El. Me gustaría llegar a conocerle
mejor. Puedo lograrlo cuando utilizo el Undécimo Paso.
Cuando ando en busca de Dios no me es difícil encon-
trarle. El no tiene oficina ni está sentado detrás de un
escritorio. El está conmigo a toda hora. Puedo hablar con El,
y El siempre está dispuesto a escucharme, aunque sean
solamente quejas. Algunas veces El quiere que yo le escuche.
Entonces es que empiezo a comprender por qué, en cierto
modo, llama juegos a sus obras.
En ocasiones, cuando estoy ocupado y me olvido de
ponerme en contacto con El, empiezo de nuevo a sentir
pánico. El simplemente se sonríe y me da un leve codazo
para que yo me acuerde quién es el que manda. Después me
da el plan del juego para el día, y mucha fortaleza y
confianza para ayudarme a llevarlo a cabo.
Para reflexionar
Me siento más cerca que nunca de mi Poder Superior,
gracias al Undécimo Paso. El es un oyente extraordinario, y
siempre está dispuesto a compartir Sus planes conmigo
cuando estoy dispuesto a escucharle. A veces siento temor de
hacer las cosas como El quiere. Pero cuando me acuerdo que
El cree en mí y que está allí para ayudarme, entonces hago la
prueba.
Ahora tengo más vigor espiritual gracias a los Doce Pasos.
Con la ayuda de mi Poder Superior las cosas van
progresando verdaderamente. Estoy más interesado en lo
que estoy haciendo, y tengo más energía para realizarlo.
Hoy me siento como un triunfador. En un tiempo hubiera
querido tener este sentimiento en exclusiva. Pero ahora,
cuando miro a mi alrededor y veo a tanta gente que creen
que son perdedores porque viven con un alcohólico, quiero
que ellos sepan cómo lograrlo. Cuando extiendo la mano,
puedo ayudar a que se recobren y al mismo tiempo me
fortalezco más como persona.
Las cosas no se acaban aquí con el Duodécimo Paso. Es
tan sólo el principio, porque practicar el programa es cosa de
todos los días. Es como cualquier buen equipo: para estar en
forma hay que seguir practicando cada día.
Para reflexionar
Sé que el practicar los Doce Pasos, no me garantiza que
cada vez salga yo vencedor. El plan a seguir ha de tener sus
momentos difíciles, pero ahora tengo el valor para creer que
soy un triunfador. Y esto es algo más que un simple
sentimiento; gracias al programa esta es una actitud que hoy
es parte de todo lo que hago con mi vida.
81) JUNIO 8

"Hazlo con calma". Este lema me ayuda a controlarme


en situaciones tensas. Si estoy teniendo un examen en la
escuela y empiezo a apurarme por acabarlo, el pensar en este
lema hace que me de cuenta de lo acelerada que voy, y me
ayuda a ir más despacio.
El decir Hazlo con caima puede ser de gran ayuda
cuando alguien me insulta o me pone apodos. Me recuerda
que gritarle a esa persona sólo puede crearme dificultades.
Incluso cuando en la casa me pegan o me gritan, este
Lema puede ayudarme. Cuando siento ganas de atacar a
alguien, o cuando creo que me gustaría hacerle daño a
alguien, respiro profundamente, repito el lema y me retiro.
Para reflexionar
Cada día suceden muchas cosas que pueden ponerme en
tensión. Pero cuando utilizo el lema ¡Hazlo con calma! nada
tiene por qué afectarme. Puedo disminuir la velocidad y
tener una mejor oportunidad de disfrutar el día.
Cuando nuestro grupo tiene un problema y alguien trata
de imponer sus ideas a todos, esto perjudica al grupo. Así, ya
nadie tiene la oportunidad de compartir sus ideas con los
demás, y a veces acabamos tomando decisiones sin haber
examinado suficientemente el problema.
Dios tiene las respuestas que necesitamos, y nos guiará en
la dirección correcta si utilizamos la conciencia de grupo
para resolver nuestros problemas. Tenemos dirigentes, pero
son tan sólo fieles servidores que llevan a cabo lo que el grupo
desea. Cada miembro es importante, y tiene el derecho para
hablar con claridad. Cuando trabajamos juntos somos un
verdadero grupo, y todos nosotros tenemos que participar en
buscar las soluciones que nos harán fuertes.
Para reflexionar
Los problemas de grupo necesitan soluciones de grupo.
Una persona no puede decidir lo que es mejor para el grupo;
todos necesitamos involucrarnos. Cuando todos nosotros
ayudamos para resolver los problemas, cada cual tiene la
oportunidad de crecer. Esa es la conciencia de grupo en
acción, la forma en que Dios quiere que así sea.

Jamás olvidaré lo que sentí cuando asistí a mi primera


reunión. Supe que me encontraba en el lugar adecuado. La
gente me comprendió y ofrecieron ayudarme. Me di cuenta
de que tenía mucho que hacer. Estaba dispuesta a hacer
cualquier cosa para lograr lo que estas personas poseían.
Traté con tesón de cambiar, pero las cosas no marchaban
con la rapidez que deseaba. Entonces alguien me sugirió que
dejara de concentrarme en cambiar, y que primero pensara
en aceptarme. Esto me dio el incentivo que necesitaba.
Ahora, en vez de pensar en "lo que supuestamente debo
ser", puedo disfrutar la agradable sensación de estar
satisfecha conmigo misma. Todavía deseo cambiar mi forma
de ser, pero ahora me doy cuenta de que esto ocurrirá con
más naturalidad cuando me concentre en aceptarme como
soy.
Para reflexionar
En este instante no me siento contenta como soy. Quiero
hacer algunos cambios en mi vida. Antes de empezar a
hacerlo tengo que estar dispuesta a aceptarme como soy.
Esta es la clave para encontrar el valor de cambiar mi modo
de ser en la clase de persona que realmente quiero ser. •
Solía haber un problema de comunicación entre nue
grupo Alateen, el de Al-Anon y AA Estábamos denu do
ocupados con nuestras cosas para estar interesado,1 lo que
ellos estaban haciendo, y asumimos que ellos ] saban que
éramos simplemente un montón de muchac que estaban allí
para crear dificultades.
82) JUNIO 8

Cuando examinamos la última parte de la Sexta Tr ción,


las cosas empezaron a cambiar. Invitamos a algí oradores Al-
Anon y AA a una de nuestras reuniones al tas, y
programamos una sesión de preguntas y respue para que
pudiéramos hablar con unos y con otros. 1 dimos cuenta de
lo mucho que nos parecíamos. Aquí ta en una u otra forma,
estamos tratando de recuperar del alcoholismo siguiendo los
Doce Pasos.
Ahora nos damos cuenta de que todos necesitar
escuchamos mutuamente. Oír a los miembros de < nos
ayuda a comprender al alcohólico. Escuchand los oradores
Al-Anon nos damos una idea de lo < sienten los no
alcohólicos. Y nosotros, hijos alcohólicos, podernos compartir
con ellos lo que s timos. Tener despejadas las líneas de
comunicac nos ayuda a entendernos entre sí.
Para reflexionar
Puedo aprender mucho de los miembros de Al-Ar y AA.
Ellos pueden ayudarme a comprender a mis pad y a
compartir conmigo sus ideas respecto a la práct del
programa También ellos pueden aprender de mí. Te
empieza con la cooperación que surge al tratar de practi la
Sexta Tradición. Este es el comienzo de la comunicack
Cuando reflexiono me arrepiento de todo el tiempo que
desperdicié tratando de hacer las cosas por mí cuenta. Vivir
con un alcohólico me hizo sentir muy aislado. Pensaba que
estaba solo; estaba seguro de que nadie sabía cómo me sentía.
El programa me mostró lo equivocado que yo estaba. A
medida que compartía con las personas de mi grupo, empecé
a comprender que, después de todo, no estaba solo. Aquí
estábamos todos juntos, con sentimientos similares y
tratando de hacer algo con nuestras respectivas vidas.
Poco después empecé a aplicar el lema: Juntos podemos
lograrlo. Ahora se qué tengo conmigo a mis amigos Alateen y
a Dios como yo lo concibo. Juntos vamos a lograrlo.
Para reflexionar
Alateen es un programa solidario. Nos hace salir de
nosotros mismos y compartir con otras personas. En esta
forma crecemos. Hoy, en vez de tratar de abordar yo solo
mis problemas, dejaré que Alateen me muestre cómo
resolverlos con la ayuda de otras personas.

Mi padre y yo nos perjudicábamos muchísimo entre sí.


Parecía que no importaba cuánto yo hubiera cambiado con
la ayuda del programa; siempre había una muralla entre los
dos. Quería decirle como me sentía en realidad, pero tenía
miedo de hablar con él, pues generalmente acabábamos
peleando.
Decidí escribirle una carta a mi padre, contándole de mis
sentimientos. Le conté como su alcoholismo me asustaba y
me hacía enojar y estar resentido y cómo me
afectaba. Le pedí disculpas

que lo quería, a pesar de todo lo que había ocurrido entre


nosotros. Cuando acabé la carta se la entregué. Necesité
mucho valor para hacerlo, porque nunca había sido tan
sincero con él.
Qué bueno que la escribí. Todavía no somos muy unidos
-y quizá nunca lo seamos tanto como a mí me gustaría-, pero
la muralla se ha ido derrumbando y ya no tengo miedo de
ser como soy en lo que se refiere a él. Y por eso me siento
contento de haber corrido este riesgo.
Para reflexionar
83) JUNIO 8

Los sentimientos heridos pueden poner barreras entre


otras personas y yo. No siempre es posible derribar esas
barreras. Pero si nos armamos de valor para intentarlo, esto
podría abrir líneas de comunicación que hubieran quedado
truncadas para siempre. A pesar de cuál sea el resultado,
puedo sentirme feliz sabiendo que hice lo mejor que pude.
¿Por qué empleo tanto tiempo tratando de que el
alcohólico deje de beber? Debido a su enfermedad él tiene
ansias de beber alcohol. Sería inútil tratar de detener esto
con palabras o acciones, como lo sería en el caso de cáncer o
diabetes.
Pero hay una forma en que sí puedo ayudan cambiando
de actitud. Puedo tratar de comprender la enfermedad y
aceptar al alcohólico como un ser humano. Puedo utilizar
palabras bondadosas y acciones consideradas, recor-dando
que él ya siente suficiente culpabilidad.
Alateen me muestra cómo lograrlo dándome el Primer
Paso y el resto del programa para vivir. Cuando ya no trato
de "curar" al alcohólico y lo acepto por quien es y por lo que
es, puedo ayudarle más, simplemente ayudándome yo
misma.
Para reflexionar
Claro que quiero ayudar al alcohólico -es lo más natural,
cuando veo lo que se está haciendo a sí mismo. La diferencia
consiste en saber cómo ayudarle. El programa me dice que
no puedo controlarle ni curarle, pero sí puedo cambiar mi
actitud hacia él. Si hoy acepto el alcoholismo como una
enfermedad y trato al alcohólico con respeto y comprensión,
eso me ayudará mucho, y es la mejor ayuda que puedo dar
al alcohólico.
Tengo muchísimos problemas. Y es deprimente pensar
que tengo que trabajar en ellos para siempre, aunque puedo
hacer algo al respecto Sólo por hoy, con la ayuda del

Empezaré por pensar en todas la cosas buenas que


tengo, en vez de estar quejándome de todo cuanto me parece
equivocado. Si quiero, puedo ser feliz; el programa me
ofrece esa alternativa.
Me pondré a practicar los Pasos y comenzaré a aplicar lo
que estoy aprendiendo en el programa. La gente está
tratando de ayudarme. Ya es tiempo que se los permita. Si
aprendo a escuchar mejor, quizá oiré lo que estén diciendo y
tal vez pueda ayudar a otras personas a que resuelvan sus
problemas.
Para reflexionar
A veces parece que mis problemas nunca se resolverán.
Tengo que seguir luchando por solucionarlos; pero lo que no
puedo hacer para toda la vida, puedo hacerlo Sólo por hoy.
Aplicar el programa a mi vida hace que mis problemas se
vuelvan mucho más manejables.
Los padrinos del grupo Alateen al cual asisto me han
motivado a pensar más en pasarme de Alateen a Al-Anon.
Por ser la clase de miembros que son, me han mostrado lo
mucho que Al-Anon puede hacer por mí.
A veces pienso que el temor hace que me olvide de esto.
Tengo miedo de no encajar. Soy un adolescente y ellos son
adultos. ¿Cómo puede ser posible que nos relacionemos
entre sí?
Mis padrinos comprenden cómo me siento. Me han dicho
que también los miembros de Al-Anon sienten temor. Pero
la clave consiste en darnos mutuamente una oportunidad. El
mejor punto de partida es olvidar la diferencia de edad y
recordar que todos nosotros tenemos el mismo tipo de
sentimientos. Compartir esos sentimientos puede ser el
principio para ayudarnos mutuamente a crecer todos juntos.
Peora reflexionar
Cuando hablo de mis sentimientos en una reunión de Al-
Anon, sé que los otros miembros me comprenden. Este es el
gran vínculo entre ellos y yo. Me ayuda a poner a un lado
mis pretextos de ser diferente, para que pueda concentrarme
y compartir un programa de crecimiento humano.
84) JUNIO 8

Cuando encarcelaron a mi padre pensé que asi me


liberaría de todos los tormentos que su bebida me había
causado. Pero en mi interior tenía sentimientos que me
mantenían encerrado en mi propia prisión. Sentía vergüenza
cuando pía a otra gente hablar de sus padres. Yo odiaba al
mío por haberme convertido en "el hombre de la casa". Y en
lo más profundo de mi ser, estaba que moría de miedo de
pensar que yo me volvería igual que él.
Un día, cuando mi madre fue a visitarle a la cárcel, mi
padre le platicó que él se había unido a A A y quería que ella
fuera a Al-Anón y yo a Alateen. Lo primero que pensé fue:
"¿Por qué tengo que ir, si él nunca ha hecho nada por mí?",
Pero mi madre me convenció para que lo intentara, y me
alegro de que lo haya hecho.
Aprendí que el alcoholismo no es algo de lo que haya que
avergonzarse; es una enfermedad. No me siento orgulloso de
que mi padre esté tras las rejas, pero tampoco tengo que
pasarme todo el tiempo pensando en esto. En vez de eso,
puedo empezar a enfrentarme a mis sentimientos respecto a
él. El programa puede que no logre que mi padre salga de su
prisión, pero sí puede ayudarme a mí a salir de la mía.
Para reflexionar
Me había acostumbrado a vivir en mi pequeña prisión,
encerrado por mis sentimientos de odio y vergüenza. Ahora
estoy libre. La clave consiste en utilizar el programa para
hacer algo por mí.
Acostumbraba tener sentimientos monstruosos cada vez
que tenía un problema con mi familia o con mis amigos. Era
algo espantoso. No podía mirar a nadie de frente por temor a
que se diesen cuenta.
En Alateen descubrí que ese sentimiento aterrador es la
ira. Cualquier cosa puede hacerlo estallar, y muchas veces no
hay lógica para ello. Pero también aprendí que enojarme es
decir, desahogar mis sentimientos, no tiene nada de malo,
con tal que yo no perjudique a alguien.
Ahora estoy descubriendo que puedo hacer buen uso de
mi ira. Cuando estoy furioso salgo a correr, monto en
bicicleta o simplemente le doy de puñetazos ami almohada.
Estas cosas me ayudan a descargar mi ira, en vez de dejar
que se acumule en mi ser o la desquite a costa de la gente que
me rodea. Cuando me siento más tranquilo puedo
considerar las razones por las cuales estaba enojado y tratar
de cambiar lo que pueda.

Para reflexionar
En Alateen estoy aprendiendo que mis sentimientos son
importantes. Tengo que fijarme en ellos y no ignorarlos ni
reprimirlos en mi interior. Hoy, cuando sienta ira, trataré de
darle salida a esos sentimientos y hacer algo constructivo con
la energía que se haya acumulado dentro de mí.
Cuando tengo resentimientos hacia otras personas, ¿por
qué no puedo decirles cómo me siento? /Por qué se me hace
tan difícil hacerles saber qué me esta mortificando?
Casi todo el tiempo el temor me detiene. Tengo miedo de
decir algo que pudiera herir los sentimientos de ellos y
acabar por caerles mal. Sé lo mucho que me hiere el
resentimiento, pero me es difícil hacer algo al respecto.
El Cuarto Paso puede ayudarme. Cuando hago mi
examen de conciencia, veo la causa de mi resentimiento. Lo
pongo aparte y examino las causas, punto por punto, para
ver qué existe debajo de todo esto. Eso me ayuda a salirme
de mis sentimientos negativos y me infunde la confianza para
hablar las cosas con claridad.
Para reflexionar
Cuando oculto mi resentimiento, el único que se
perjudica soy yo. Necesito desarraigarlo de mí, antes de que
me cause más daño. El Cuarto Paso es un buen punto de
85) JUNIO 8

partida. Me ayudará a ver cuál es la causa de mi


resentimiento, para que me disponga a resolverlo.
En mi hogar todos acostumbrábamos a asumir la
responsabilidad por lo sentimientos de otras personas.
Cuando uno de nosotros andaba disgustado, todos
acabábamos igual. A menudo esto provocaba amargas
peleas.
Creía que muchos de los pleitos eran por mi culpa. En
ocasiones tenía miedo de expresar algún sentimento para no
incitar a otra discusión y lastimar a alguien de la familia.
En Alateen estoy aprendiendo a expresar mis verdaderos
sentimientos. Cuando afectan a otras personas causan
menos impacto de lo que yo pensaba. Sabiéndolo, ya no
tengo por qué preocuparme tampoco de que los sentimientos
de otros me afecten. Ahora me doy cuenta de que no soy
responsable por lo que otros sientan, y de que ellos tampoco
son responsables de lo que yo sienta. Eso es algo que yo
mismo decido.

Para reflexionar
Otras personas tienen el derecho de expresar sus
sentimientos, pero no pueden cambiar mis sentimientos, a
no ser que yo lo desee. Taripoco puedo cambiar los de ellos,
pero si hoy acepto esto, quedaré en libertad de mostrar mis
verdaderos sentimientos, y asegurarme de que mi forma de
sentir está en mis manos, exactamente donde quiero que esté.
¿Por qué tengo que ser tan cuidadoso cuando se trata de
anonimato? ¿Para protegerme de no estar en aprietos? ¡No!
Una razón más importante es que los nombres realmente no
cuentan. Muchas veces, si se mencionan nombres, la
personalidad se antepone a tos principos. Si se hace una
buena acción y se le añade el nombre a la acción, existe la
posibilidad de que el nombre reciba más reconocimientos
que la acción misma.
Mantener mi anonimato me ayuda a ser humilde. No
tengo necesidad de que otros me rindan reconocimientos,
pues mi Poder Superior lo hace cada día.
Para reflexionar
El anonimato me ayuda a seguir siendo humilde. No
tengo que estar buscando la alabanza en todo cuanto hago.
Mis buenos sentimientos surgen de saber que estoy haciendo
lo que mi Poder Superior quiere que yo haga.
Muchos de nosotros mtentábamos ser arbitros. Nos
sentíamos amlxüados entre el alcohólico y el no-alcohólico,
creyendo que teníamos que estar de parte de algunos de
ellos. Entrábamos en discusiones, peleando a favor de uno y
luego a favor de otro, para acabar confundidos y frustrados.
A pesar de todo el bien que tratábamos de hacer,
aparentemente, las cosas empeoraban. Y acabábamos
hechos un lío. Empezamos a odiar a nuestros padres y, al
mismo tiempo, a tener sentimientos de culpabilidad sabiendo
que debíamos amarlos.
Alateen nos quita la necesidad de ser arbitros, y nos mues-
tra cómo hacer para desprendernos. Aprendemos a dejar los
problemas ¿nuestros padres, dejando que ellos se ocupen de
las dificultades que tienen entre sí. Esto nos da más tiempo
para ocuparnos de nuestros propios problemas,
especialmente de nuestros sentimientos - de culpabilidad y de
las murallas que hemos construido entre nosotros y nuestros
padres.
Para reflexionar
Me enredo en los problemas de mis padres porque creo
que puedo ayudarlos. El programa tiene un mensaje para
mí: DESPRÉNDETE. Cuando dejo que mis padres
"discutan para decidir algo" sin que yo me involucre,
descubro que cuento con grandes reservas de tiempo y
energía para amarlos después de que se acaba el pleito.
Vivir con un alcohólico hacía que me sintiera perdido,
asustado, confundido y amargado. Me odiaba a mí mismo y
le echaba la culpa al mundo entero, ya no podía soportar
más esa situación.
86) JUNIO 8

Llegué a Alateen como a mi última esperanza. Los miem-


bros me orientaron hacia una nueva forma de vida. Com-
partieron conmigo sus experiencias y me mostraron la forma
de vivir conmigo mismo. También aprendí a desprenderme
de la gente que amo, y vivir mi vida en vez de enredarme en
ladéenos.
Hoy me siento agradecido al programa y a las personas
que lo integran. Ellos me han mostrado cómo puedo hallar la
felicidad cada día, y gracias a ellos estoy aprendiendo
nuevamente a sentirme satisfecho de mí mismo.
Para reflexionar
Los miembros de Alateen me comprenden porque han
pasado por lo mismo. Saben lo que es sentirse herido,
humillado, temeroso y avergonzado. Pero también saben la
alegría de poder reubícar sus vidas. Me siento agradecido
por los instrumentos que me han dado para valerme de ellos.
Hoy voy a procurar hacer un esfuerzo especial para
utilizarlos.
De pequeña, cuando me caía y me lastimaba, mi
madre siempre me ponía una "curita"en la herida
diciéndome que el dolor desaparecería. Y por lo
general así ocurría. A medida que fui creciendo y
empecé a tener problemas en mi vida, acudí a mi
madre para que me aplicara una "curita" y así
eliminar una vez más el dolor. Ella me protegía y me
decía que todo saldría bien. Durante un tiempo
parecía que ella estaba en lo cierto, pero el dolor
siempre regresaba.
En Alateen aprendí que las "curitas" que mi
madre usaba para solucionar mis problemas no me
darían resultado. Tan sólo cubrían lo que realmente
andaba mal dentro de mí. Cuando empecé a aplicar
el programa, me examiné con detenimiento. Así fue
como comencé a llegar al fondo de lo que me estaba1
hiriendo tanto. Y cuando lo descubrí, fue mucho más
fácil hacer algo por mí para eliminar el daño.

Para reflexionar
En ciertas ocasiones aún me siento dolida. Otras
personas pueden hacer que me sienta bien por un
momento, pero si de verdad deseo eliminar el dolor,
tengo que hacer algo por mí misma. Una forma de
lograrlo, es dejar que el programa actúe en mi vida.
Me ayuda a ubicar el dolor para que pueda empezar
a obtener una mejoría.
JULIO 1 (87

Entré al programa poco tiempo antes de que mi madre


dejara de beber. Después empecé a preguntarme si yo
todavía necesitaba Alateen. ¿Pedía aún ayudar a otros y
podían ellos ayudarme aunque la alcohólica ya no bebiera?
Volví a leer las preguntas en mi libro Alateen, en el
capítulo ¿Necesitas Alateen? respondí sí a muchas de ellas.
Esto me ayudó a darme cuenta de que lo que logre en
Alateen depende de mí, y no del estado en que se encuentre la
alcohólica.
Hoy necesito el programa más que nunca. De hecho, creo
que no podría vivir sin el programa, pues me hace la vida
más llev adera.
Para reflexionar
Considero que Alateen es una forma de vida; pero esto no
tiene nada que ver con que la alcohólica esté sobria o
bebiendo ¿Necesito Alateen? ¡Por supuesto que sí!, si quiero
aprender a vivir.
182) JUNIO 88

De pequeña, cuando me caía y me lastimaba, mi


madre siempre me ponía una "curita"en la herida
diciéndome que el dolor desaparecería. Y por lo
general así ocurría. A medida que fui creciendo y
empecé a tener problemas en mi vida, acudí a mi
madre para que me aplicara una "curita" y así
eliminar una vez más el dolor. Ella me protegía y
me decía que todo saldría bien. Durante un tiempo
parecía que ella estaba en lo cierto, pero el dolor
siempre regresaba.
En Alateen aprendí que las "curitas" que mi
madre usaba para solucionar mis problemas no me
darían resultado. Tan sólo cubrían lo que realmente
andaba mal dentro de mí. Cuando empecé a aplicar
el programa, me examiné con detenimiento. Así fue
como comencé a llegar al fondo de lo que me estaba
hiriendo tanto. Y cuando lo descubrí, fue mucho
más fácil hacer algo por mí para eliminar el daño.

Para reflexionar
En ciertas ocasiones aún me siento dolida. Otras
personas pueden hacer que me sienta bien por un
momento, pero si de verdad deseo eliminar el dolor,
tengo que hacer algo por mí misma. Una forma de
lograrlo, es dejar que el programa actúe en mi vida.
Me ayuda a ubicar el dolor para que pueda empezar
a obtener una mejoría.
JULIO 89 (183

Entré al programa poco tiempo antea de que mi madre


dejara de beber. Después empecé a preguntarme si yo
todavía necesitaba Alateen. ¿Podía aún ayudar a otros y
podían ellos ayudarme aunque la alcohólica ya no bebiera?
Volví a leer las preguntas en mi libro Alateen, en el
capítulo ¿Necesitas Alateen? respondí sí a muchas de ellas.
Esto me ayudó a darme cuenta de que lo que logre en
Alateen depende de mí, y no del estado en que se encuentre la
alcohólica.
Hoy necesito el programa más que nunca. De hecho, creo
que no podría vivir sin el programa, pues me hace la vida
más llevadera.
Para reflexionar
Considero que Alateen es una forma de vida; pero esto no
tiene nada que ver con que la alcohólica esté sobria o
bebiendo ¿Necesito Alateen? ¡Por supuesto que sí!, si quiero
aprender a vivir.

Antes de Alateen, cuando planeaba algo tenía por


costumbre proyectar los resultados. Si hacia planes para ir a
algún baile, tenía la seguridad de que sería estupendo; si
estudiaba para algún un examen, sabía que lo aprobaría sin
ninguna dificultad. ¿Cómo podrían fallarme las cosas
estando yo al mando de los controles?
Cuando fracasaba en mis planes me saina desanimada y
resentida jera una fracasada! A veces hasta buscaba a
alguien para echarle la culpa.
Hoy, todavía hago planes, pero estoy aprendiendo a
Soltar las riendas y entregárselas a Dios. Yo pongo los
cimientos y El se encarga del resultado final; y en esta forma
los resultados son mucho mejores.
Para reflexionar
Hacer planes está bien, pero los resultados están fuera de
mi alcance. Cuando trato de arreglar las cosas para que den
resultados, quizá me lleve un chasco. Si suelto las riendas y le
dejo los resultados a mi Poder Superior, El se encargará de
las cosas mucho mejor que yo.
El alcoholismo es un asunto serio. Pero, ¿significa esto que
tenemos que estar dándole vueltas y mirarlo como si
estuviéramos cargando el mundo entero? Algunos de no-
sotros pensábamos asi hasta que llegamos a Alateen.
En mi primera reunión me sorprendí cuando oí que
muchas personas se reían de cosas que siempre las había
considerado serias, y pensé: "No se rían de cosas como
éstas".
Pero, cosa rara, fue esta risa la que me hizo regresar,
parecía quitarme algo del dolor que sentía, y me ayudó a
reducir mis problemas a un tamaño mas fácil de manejar.
Esta risa era también contagiosa. Llegó el momento en que
yo mismo empecé a reírme por cosas que había dicho o
hecho, que antes me habían parecido devastadoras. ¡Y de
veras me hicieron sentir muy bien!
Para reflexionar
Alguien dijo que al hallarle el buen humor a un problema,
puede ser el comienzo para empezar a resolverlo. Al
perseveraren Alateen, aprerio^aremnedemímisrrio. Hoy
trataré de encontrar algo de qué refirme y tomar la vida con
un poco menos de seriedad.
Se necesita valor para ser independiente. Es mucho más
fácil seguir a la multitud y, por lo general, más divertido. No
es muy popular ser el Sr. Pulcro o la Srita. Impecable.
Pero el hecho de seguir a la multitud puede hacer que me
involucre en cosas que compliquen mi vida. Se requiere valor
para "ser uno mismo" y no hacer lo que están haciendo los
demás.
JULIO 90 (183

Alateen me ha ayudado a encontrar esta clase de valentía.


Creo en mí misma, y estoy aprendiendo a permanecer con
tos triunfadores.

Para reflexionar
He decidido seguir el camino de los miembros Alateen que
me precedieron. Seguir el ejemplo de ellos y saber que yo soy
responsable de mi vida, me ayudó a llenar el vacío entre lo
que acostumbraba ser y la persona que quiero, ser.
Quisiera poder imitar a mis antecesores en Alateen.
JULIO 5 (187

Mi padre echó a perder lo que hubieran podido


ser tiempos felices en nuestra familia. £1 malgastó el
dinero que necesitábamos para cosas importantes,
tales como comida y ropa. No mostraba el menor
interés en lo que yo estuviera haciendo, y cuando de
verdad necesitaba hablar con él, nunca estaba en la
casa.
£1 programa me ayudó a comprender que mi
padre padecía una enfermedad. Esto aclaró mucho
de su comportamiento, pero aún se me hacía difícil
perdonarlo por lo que había hecho. Quise vengarme
de él y demostrarle lo mucho que me había
perjudicado; pero ni se dio por enterado de lo que
hice, y yo sencillamente me quedé refunfuñando.
Llegó el momento en que aprendí a criticarle
menos; procuré ser más paciente y comprensivo.
Con la ayuda de los Pasos decidí desprenderme del
pasado. Sentí como si me hubieran quitado un gran
peso de encima. Quedé ubre para concentrarme en
practicar mi programa, para mi beneficio personal.

Para reflexionar
A veces quiero desquitarme con el alcohólico por
todo lo que me ha hecho. De momento me siento
bien hasta que me doy cuenta de que en esta forma
lo único que consigo es castigarme yo mismo.
Cuando logro calmarme y trato de comprender al
alcohólico en vez de condenarle, me siento mucho
mejor, y eso me ayuda a mantenerme concentrado
en lo que me pertenece: mi propia recuperación.
188) JULIO 6

Se me hacía difícil utilizar el lema Piensa. Algunos


miembros Alateen dicen que, antes de empezar a hacer algo
importante, pensar las cosas con todo cuidado, les ayuda.
También a mí me ayudó; pero a la vez se convirtió en un
problema.
Pensaba tanto que no hacía otra cosa más que pensar.
Tenía que desmenuzarlo todo y escudriñar todos los detalles,
algo así como observar un insecto en el microscopio. Llegado
el momento, después de haber pensado en todo, ya no me
quedaba energía para hacer absolutamente nada.
Aprendí entonces que emplear mucho tiempo para
pensar las cosas, era realmente otra forma de retrasarlas.
Empecé a utilizar algunos de los otros lemas para dejar de
posponer las cosas, ¡Hazlo con calma! y Suelta ¡as riendas y
entrégaselas a Dios me ayudaron a relajarme y a
desprenderme de mi necesidad de ver todo detalladamente y
a tener la fe y el valor para seguir adelante y entrar en acción.
Ahora trato de pensar cuidadosamente, pero no tanto que
vaya a olvidarme de "hacerlo".
Para reflexionar
Tengo que pensar las cosas, pero no demasiado, porque
realmente puede hacerme daño; es una forma de impedir
que haga algo. En vez de estar empleando el tiempo
pensando qué hacer, trataré de dejar de aplazar las cosas y
poner mi pensamiento en acción.
Cuando mi madre me dijo que tenía que ir a Alateen, le
dije que "¡De ninguna manera!, ¡eso no es para mí! Vivo
muy feliz sin ello y, de todas formas yo no estoy afectada por
la enfermedad". Eso no era cierto y yo lo sabía. Era sólo un
pretexto para quedarme en casa.
Mi madre me llevó a la fuerza a mi primera reunión
-tengo que admitirlo. Pero después de esa primera reunión
no necesité de más persuasión. Alateen y yo hicimos buenas
migas enseguida. Las sonrisas hicieron que me sintiera a
gusto, y la forma en que la gente se franqueó me hicieron
sentir que realmente podía confiar en ellos.
Ahora asisto a las sesiones porque quiero. Me están
ayudando a mejorar como persona. A veces no me dan
ganas de ir, pero cuando pienso en todo lo que me ha dado el
programa, sé que estoy obrando correctamente.

Para reflexionar
Buscaba pretextos para alejarme de Alateen. Ahora me
siento contenta de haber llegado a pesar de que me llevaron a
la fuerza. Tengo muchos nuevos amigos y la oportunidad de
hacer algo positivo con mi vida. Si alguna vez tengo la
tentación de pensar en alejarme nuevamente, al recordar lo
mucho que el programa ha hecho por mí me ayudará a
cambiar de idea.

Los miembros de Alateen insistían didéndome que el


alcoholismo es una enfermedad que afecta a toda k familia.
Al principio no tes creí porque mi madre era la única que
bebía. Pero mientras más cavilaba en como andaban las
cosas en casa, mejor comprendí lo que ellos querían decir.
La forma en que bebía mi
vulgar. Chillaba madre la volvía irritable y
gritaba aunque no
estuviéramos
haciendo nada. Todos nos poníamos tensos y nos
afectábamos, y a pesar de que me destrozaba, nunca le dije a
mi madre lo que sentía Sencillamente la dejaba hacer lo que
quería con tal de tener paz en la casa
Fue entonces cuando noté lo afectado que estaba Me
asustaba y a la vez quería hacer algo para remediarlo. Mis
amigos Alateen me guiaron hacia el Primer Paso. Al
practicarlo comencé a aceptar el alcoholismo como
enfermedad familiar, y al poco tiempo hallé el valor para
expresar mis verdaderos sentimientos.
Para reflexionar
No es difícil entender por qué al aktfholismo se le llama
enfermedad familiar. A veces me siento maniatado a la
188) JULIO 6

alcohólica Su malhumor es mi malhumor, sus reacciones son


mis reacciones y su enfermedad es mi enfermedad. Pero
ahora hay algo que me ayuda a apartarme de esto: el
programa de los Doce Pasos. Si lo utilizo cada día puedo
recuperarme y hallar una mejor forma de vida para mí.
En Alateen encontramos personas que son como nosotros.
Todos somos iguales. No hay maestros -sólo aprendices que
están tratando de mejorar sus vidas mediante el compartir
de experiencia, fortaleza y esperanza entre sí.
Nos necesitamos mutuamente. Nos apoyamos el uno en el
otro hasta lograr la fortaleza suficiente para ponernos de pie.
Después dejamos que otros se apoyen en nosotros. Lo que no
podemos hacer solos, podemos hacerlo unidos. Así es como
funciona el programa.
Para reflexionar
Formo parte de una hermandad de gente que ayuda a
gente. Saber esto me facilita mucho el que yo me acerque a
otros para decirles: "Solo no puedo hacerlo, pero ¡Juntos
podemos lograrlo!H.
En cierta ocasión escuché una canción sobre alguien que
no había podido ver un hermoso arcoiris porque se le fue
mucho tiempo mirando las grietas de la acera. Esto me
recordó mi propia vida. Las grietas eran como mis
problemas, y el arcoiris todas las cosas buenas a mi
alrededor.
Naturalmente que tengo que estar preparado a enfrentar
mis problemas; pero cuando hago nada más que fijarme en
ellos, me engaño dejando escapar todas las cosas buenas de
cada día. ¿Qué hacer para dejar de ver 'las grietas en la
acera"? Utilizo la Oración de la Serenidad y los Pasos del
Tercero al Séptimo para confiar mis problemas al cuidado
de mi Poder Superior, pidiéndole me dé fortaleza para
empezar a hacer algo para librarme de ellos. Eso me ayuda a
"mirar hacia arriba" para que cada día pueda disfrutar de
las cosas buenas que hay en la vida.
Para reflexionar
Mis problemas pueden deprimirme si no tengo algo o
alguien que me ayude a levantar el ánimo. Gracias al
programa tengo un Poder Superior que está dispuesto a
darme la mano. Cuando esté dispuesto a abordar mis
problemas podré ver mejor los aspectos luminosos de mi
vida.
La vida es más divertida si adopto una actitud positiva.
Cuando me libro de frases como: Mno puedo" "no podré" y
"no quiero..." y las reemplazo con: "sí puedo", "sí podré" y
"haré la prueba", las cosas marchan con más suavidad y
logro hacer mucho más. Si busco lo bueno en algo en vez de
buscar lo malo, me siento mucho más feliz. Y cuando sonrío
y le digo a alguien una palabra amable, en vez de fruncir el
entrecejo y refunfuñar, me da la impresión de que a la gente
le gusta estar conmigo, y eso contribuye a que el día sea más
ameno.
Sin embargo, hay días en que todo parece que es casi
imposible lograrlo, especialmente cuando me sale mal todo lo
que hago. Adoptar una actitud positiva como una lección de
música: mientras más la practico más fácil se vuelve. Si estoy
dispuesto a darme una oportunidad, posiblemente descubra
que estoy contemplando un día más luminoso.
Para reflexionar
¡Piensa positivamente! Es más fácil decirlo que hacerlo,
particularmente en días cuando las cosas realmente me
deprimen. Pero jamás sabré lo que es una actitud positiva si
no la intento. Si hoy aprovecho el tiempo para ser una
persona más positiva, quizá me sorprenda ver todas las cosas
buenas que me rodean.
Yo acostumbraba centrar mi vida en la de mi padre
alcohólico. Cuando estaba sobrio me sentía feliz. Si él bebía,
me sentía deprimido y enojado, y contagiaba a bs demás con
mi malhumor. También me sentía responsable por mis
hermanitos, constantemente los regañaba, pero al final el
resultado era mi propia frustración.
El Primer Paso del programa cambió totalmente mi
panorama. Admití que soy incapaz ante el alcohol. Seque
mi padre alcohólico está enfermo, y me doy cuenta de que lo
188) JULIO 6

que odio es su enfermedad, no a él. Ya no permito que esa


enfermedad gobierne mi vida. Ahora que lo reconozco,
puedo desprenderme con amor y dejar que desaparezcan mi
ira y mi odio.

Para reflexionar
Por medio del programa estoy aprendiendo a olvidar el
pasado y a aprovechar cada día al máximo. Para lograrlo,
una de las claves es el desprendimiento. Esto significa vivir
mi vida y, al mismo tiempo, dejar que otros vivan la de ellos.
Practicando el desprendimiento, puedo aprender de nuevo a
aceptarme y apreciarme y a transmitir a los demás esta
aceptación y este amor.
Antes de Alateen usaba a mi familia para tapar mis
errores. Estaba dispuesto a abalanzarme sobre alguien por
cualquier cosa que no gozara de nú aprobación. Cuando en
nuestra casa las cosas no marchaban bien, de inmediato le
echaba toda la culpa a mis padres y hermanos.
Entonces, en una reunión de Alateen oí decv que cuando
señalas a alguien con el dedo, los otros tres te señalan a ti.
Estuve cavilando si yo no estaría algo equivocado en la forma
en que juzgaba a mi familia.
Hoy estoy aprendiendo a dejar de echarle la cufpa a otras
personas. Empiezo a aceptar la responsabilidad de mis
propias acciones. Me siento mucho más feliz y también mi
familia.
Para reflexionar
Cuando dejo de echarle la culpa a otras personas por "mi
mala suerte" y cuando empiezo a poner mi parte para
mejorar la situación, es indicio de un verdadero crecimiento.
El programa cuenta con los instrumentos para ayudarme a
lograrlo. Utilizarlos depende de mí.

Aveces pienso que tengo un programa y que sé lo que


quiero. Pero debo tener cuidado de que lo que quiera no se
convierta en querer dominar a otras personas. Es fácil
ponerse a pensar que tengo todas las respuestas correctas y
espero que los demás hagan las cosas a mi modo. Puedo
incluso, enojarme con otros por no hacer lo que yo considero
correcto.
Pero el Primer Paso implica concentrarme en mí mismo y
no tratar de dominar a los demás. La Oración de la
Serenidad me pide "aceptar las cosas que no puedo
cambiar". Esto significa aceptar a los demás por lo que son,
no por lo que yo quiero que sean. El ponerme en el lugar de
ellos y tratar de comprender sus sentimientos, me ayuda a
"volver en sf* y a tratar de dejar de dominar a otros,
aceptándoles como son, y volver yo a practicar el programa.
Para reflexionar
Cuando trato de dominar a alguien, esto me impide
ocuparme de mi propia vida. Si la gente actúa en forma
diferente a la mía, eso es asunto de ellos. No tengo que darles
mi opinión si no me la piden. Dejar que otros hablen y actúen
por sí mismos es una clase de aceptación que me ayuda a
ocuparme de mis asuntos personales. Hoy tengo que
ocuparme de las cosas que me incumben y a emplear mi
tiempo para reflexionar sobre esto.
En Alateen todos estamos en busca de la recuperación. Es
igual que seguir por un camino y a lo largo del sendero nos
encontrarnos con amigos especiales que nos comprenden y
nos unimos a ellos para caminar juntos.
En ocasiones, vamos caminando y tropezamos. Pero allí
están nuestros amigos para ayudar a enderezamos. Si en un
188) JULIO 6

momento dado nos desviamos del camino, nos esperarán


pacientemente a que regresemos y caminemos nuevamente
con ellos.
Y aunque para cada uno de nosotros la palabra recu-
peración tenga diferentes acepciones, es bueno saber que
podemos caminar juntos. Si tenemos paciencia
encontraremos lo que estamos buscando.
Para reflexionar
He quedado afectado por el alcoholismo y necesito
recuperarme. Alateen me da la oportunidad de recorrer el
camino de la recuperación junto con otras personas que
desean mejorar. El sólo saber que andamos todos juntos por
el camino me infunde esperanza para seguir adelante más
fácilmente.

Creo que mi Poder Superior me ha dado aptitudes para


que las utilice. Aunque trato de ser agradecido por ellas, a
veces mi actitud es un verdadero obstáculo, pues me
comparo con otras personas y pienso que son mejores que
yo.
El programa me hace ver que compararme con otros es
una forma muy cómoda de inventar pretextos para no
utilizar lo que poseo. Si miro en tomo mío con toda sin-
ceridad percibiré muchas oportunidades para utilizar mis
capacidades dentro y fuera de la hermandad. Una manera
adecuada de llevarlo a cabo es hacer algo por ayudar a otras
personas. Es una forma de servicio que me recuerda, que
tengo que darle las gracias a mi Poder Superior por las
aptitudes que me ha otorgado, y por el crecimiento que
ocurre cuando las utilizo.
Para reflexionar
Poseo ciertas aptitudes especiales. Son como regalos

oe mi Poder Superior. Pero tengo que hacer lo que está de mi


parte y utilizarlos. Ayudar a la gente es una buena manera
de utilizarlas y de demostrarle a mi Poder Superior lo
agradecido que estoy.
Las flores necesitan del sol y la lluvia para poder crecer y
florecer. Si tuvieran sólo la luz del sol se marchitarían.
Lo mismo pasa con la vida. Tengo que contar con la lluvia y el
sol. A veces quisiera no tener problemas. Pero sin ellos mi vida
sería aburrida y perdería algunas de las grandes oportunidades
de crecer.
£1 crecimiento puede ser muy doloroso, pero los problemas
que tengo pueden hacerme ahondar profundamente para hallar
las soluciones. Me ayuda a arraigarme en el programa. Hacen
que cada día madure y me fortalezca más como persona.
Para reflexionar
No me agradan los obstáculos en mi vida, ajunque a menudo
me ayudan a fortalecerme como persona. Con la ayuda del
programa, hoy no tendré miedo de enfrentarme a mis
problemas, ellos me ayudarán a crecer y a mejorar como ser
humano.
Para mí el silencio es bueno, especialmente cuando me
encuentro tenso y disgustado. Me alejo de todo el mundo y me
paso un rato solo y en paz. Estos momentos de silencio,
realmente me ayudan a calmar mi temperamento impetuoso.
Pero si me descuido también puedo usar el silencio como una
arma. A veces, cuando la gente me irrita, los trato a base de
silencio para que se den cuenta de que no quiero nada con ellos.
Y esto no nene absolutamente nada de pacífico. Este tipo de
silencio implica daño, tanto para la otra persona como para mí.
La forma en que utilizo el silencio depende de mí. Pero si
tengo verdadero interés en ayudarme a mí mismo, la opción es
188) JULIO 6

muy sencilla. El silencio puede ser exactamente lo que necesito


hoy para "volver en mí" y tener un poco de sosiego.
Para reflexionar
El silencio es elocuente. Puede vociferar a través de la rabia o
puede permanecer en mi interior como un murmullo apacible y
discreto. Si hoy ando buscando un poco de silencio, "sintonizaré"
los gritos y empezaré a escuchar los murmullos.
Tratar de hacer la voluntad de Dios es como ir por un camino
y encontrarse con un plantío de fresas que se extiende hasta
perderse de vista. Y aunque sepamos que deberíamos
permanecer en el camino principal, lo que realmente deseamos
son las fresas. Por breves momentos no sabemos qué hacer.
Después empezamos a pasearnos por el terreno, pensando que
sólo vamos a probar unas cuantas. Pero seguimos arrancando
más y más fresas hasta que nos alejamos tanto que estamos
perdidos y seguros de que ya no hay esperanza de poder
encontrar el camino de regreso.
Cuando hacemos las cosas a nuestro capricho y nos
metemos en apuros, pensamos que Dios no nos va aceptar de
nuevo; pero si estamos dispuestos a intentarlo, El nos aceptará.
Con la ayuda de Alateen, podemos regresar nuevamente al buen
camino.
Para reflexionar
Es difícil saber cuál es la voluntad de Dios en mí, Y es aún
más difícil llevarla a cabo. A veces me desvío y quiero hacer las
cosas a mi manera, pero nunca me da resultado. El Undécimo
Paso puede ayudarme. Cuando estoy en contacto con mi Poder
Superior y le pido Su ayuda, me dará a conocer lo que El piense
que es lo mejor para mí y me dará la fuerza para cumplir Su
voluntad.
Yo era irascible y caprichoso. Si las cosas no se hacían como yo
quería, me salía muy enojado del lugar y no quería hablar con
nadie. O si la gente decía algo desagradable de mí, les replicaba y
luego me iba pensando que todo el mundo me odiaba.
El programa me está ayudando a ser un poco menos
egocéntrico. Ya no tengo tan malhumor como antes, y si no me
salgo con la mía, probablemente sea mejor así. Si la gente me
dice algo que no sea muy agradable, ya no salgo disparado como
solía hacerlo antes. Trato de recordar que ellos están expresando
su opinión, y lo dejo pasar.
Para reflexionar
A veces imagino que el mundo entero gira a mi alrededor,
pero allí está el programa para recordarme que no es así.
Cuando la gente no me trata en la forma en que deseo ser
tratado, o si no hacen las cosas como pienso que deberían
hacerse, recordaré que todo el mundo tiene derecho de expresar
su opinión. Sé lo que pienso de mí, y para sentirme a gusto hoy,
voy a utilizar el programa.
Algo importante en nuestro grupo es que todos estamos
involucrados. Compartimos responsabilidades para que todos
los miembros puedan sentirse parte del grupo. Cada uno de
nosotros da un poco de su tiempo para ayudar. Es una de las
formas en que practicamos la Séptima Tradición.
También podemos ayudar al grupo dándole algo de nuestro
dinero. Al principio, cuando llegamos, algunos no pueden
aportar nada; otros, todavía no podemos dar gran cosa; damos
lo que podemos.
Una buena forma de lograrlo es practicando la Séptima
Tradición. El resultado es que todos nos sentimos
recompensados porque estamos cooperando para que nuestro
grupo siga adelante.
Para reflexionar
Puedo ayudar a mi grupo en muchas formas. Cuando pasan
la canasta doy lo que puedo. También es importante saber que
puedo dar mi tiempo y apoyo moral para ayudar a que el
nuestro, sea la clase de grupo al que me honro en pertenecer.
Cuando mi serenidad anda por los suelos, reacciono
exageradamente ante todo cuanto me rodea. Un rápido
inventario del Décimo Paso me revela que estoy perdiendo la
verdadera perspectiva de las cosas, que me estoy descontrolando.
Apenas reconozca el problema, puedo empezar a ocuparme
de ello. Para ayudarme a recobrar el dominio de mis emociones
utilizo la Oración de la Serenidad. Después me pregunto: "¿Por
qué reaccioné exageradamen te?". Cuando descubro algunas
respuestas a esta pregunta, rectifico y pido disculpas, y trato de
efectuar cambios en mí, para evitar que eso vuelva a ocurrir.
188) JULIO 6

Para reflexionar
A veces dejo que mis emociones se desboquen. Al reaccionar
exageradamente perjudico a mucha gente, incluyéndome a mí.
El programa tiene algo que hace que me calme: La Oración de
la Serenidad. La utilizaré hoy, cuando sienta que voy a perder el
control.
JULIO 25 98)

Tenía la costumbre de traer a mis amigos a casa para ver


la televisión y jugar. Apenas traspasábamos la puerta, se
percibía el olor de la cerveza. Me quedaba desconcertada, al
igual que mis amigos, al ver la facha en que estaban mis
padres. Hasta que al fin ya no pude soportarlo más, y dejé
de invitarlos a casa.
El programa me ayudó a comprender que mis padres
están enfermos. Aprendí a no sentirme humillada o
avergonzada de sus borracheras, pues ellos padecen una
enfermedad llamada alcoholismo.
Ahora me siento más a gusto, y ya empecé a invitar otra
vez a mis amigos. Cuando los invito les platico acerca de la
situación familiar y cómo me siento al respecto. Muchos de
ellos pueden aceptarla, aunque no todos. Me parece bien,
porque en un tiempo yo tampoco podía aceptarlo. Lo
importante para mí es que ahora sí puedo aceptar a mis
padres como son.

Para reflexionar
El alcoholismo es una enfermedad, no una ignominia.
Ahora estoy convencida de esto, gracias a todo lo que estoy
aprendiendo en Alateen. Ya no me siento avergonzada a
causa de mis padres, porque sé que están enfermos. Esto
hace que mis amigos los acepten más fácilmente. Aunque
no todos pueden aceptar la situación, eso no importa. Yo si
la acepto, y hoy me siento a gusto.
Tenía resentimiento cuando mi grupo sesionaba "mal".
Pensaba que si realmente se preocuparan por mí. No debía
perder el tiempo en tonterías o llegar a la reunión sin estar
preparados. En algunas ocasiones me enfadaba tanto que
me sentaba en un rincón, enfurruñada y sin participar en la
reunión.
Cierta noche, al salir de una de estas sesiones para irme a
la casa, hablé con mi madrina. Me preguntó si estaba yo
pendiente de que ocurrieran cosas malas con tal de tener un
pretexto para sentir autocompasión. Esto me hizo
detenerme y pensar. Me di cuenta de que yo era quien
creaba la mayoría de los problemas. ¿Cómo podía
aprovechar algo de las reuniones si estaba tan concentrada
en la autocompasión?.
Ahora procuro recordar que cuando tenga algún
resentimiento, la única que sale perdiendo soy yo. Si una
sesión no anda bien, lo digo claramente y trato de poner de
mi parte para que se encarrile. Ahora saco mucho provecho
de nuestras reuniones, y me pregunto si mi cambio de
actitud tendrá algo que ver en ello.
Para reflexionar
Cuando en una sesión las cosas no marchan tan bien
como yo quisiera, puedo desanimarme y sentir
autocompasión. Pero esto no conduce a nada. En vez de eso
puedo compartir sobre el tema y que esta diferencia haga
que alguien aproveche la reunión y así también yo me
beneficiaré.

JULIO 27 1209

Puedo desempeñarme de muchas formas. A veces no tengo


ganas de estudiar para un examen, de modo que yo mismo me
convenzo de que lo más probable es que me repruebe. Esta clase
de actitud la uso como pretexto para no estudiar, y finalmente
acabo perjudicándome. Insisto tanto al pensar que me
reprobarán que eso es lo que realmente ocurre.
En Alateen aprendo a cambiar las actitudes que me
perjudican. Hay muchísimas cosas que no quiero hacer, pero
JULIO 25 99)

inventando pretextos para justificar mis acciones es, ni más ni


menos, una forma de evadir la responsabilidad. Cuando me
esfuerce por aprobar (entiéndase estudiar) aprenderé mucho
respecto a cómo enfrentar mis problemas, y eso constituye un
paso enorme para llegar a ser responsable.
Para reflexionar
Puedo eludir cualquier cosa que no quiero hacer,
sencillamente inventando algún pretexto. El programa me hace
ver que esto es una buena forma de engañarse a uno mismo. En
vez de hacer esto voy a aprovechar el programa para cambiar mi
forma de pensar y enfrentarme a las responsabilidades que por
tanto tiempo he estado tratando de eludir.
100) JULIO 28

Cuando ios problemas de mi hogar me


exasperaban, cualquier cosa me hacía estallar. Me
enojaba cuando alguien me miraba de mala forma o
me decía algo que no me agradaba. La gente de mi
escuela era la que más me incomodaba, pero yo me
desquitaba pegándoles .
Ahora que estoy en Alateen las cosas están
empezando a cambiar. Estoy aprendiendo a
enfrentarme a esa gente de la escuela. Ahora me doy
cuenta de que mis frustraciones están en mi interior, y
que esto no tiene nada que ver con nadie. Estoy
empezando a hallarle solución a mis sentimientos al
platicar con mis amigos y al utilizar lemas
talescomo: ¡Hazloconcalma! Ahora domino mejor mi
malhumor. De hecho, hace tiempo que no golpeo a
nadie. Hasta mis tareas han mejorado. Estoy
progresando, y todo esto gracias al programa.

Para reflexionar
Cuando pierdo los estribos acabo descontrolado y
lastimando a gente inocente. El programa me ayuda
a recobrar el dominio de mí mismo. Cuando
empiezo a comprender mejor mis problemas puedo
aprender a desprenderme de muchas de mis
frustraciones. Hoy, cuando sienta que las cosas
empiezan a mortificarme, recordaré el lema Hazlo
con calma y practicaré un poco del dominio de mí
mismo.
JULIO 29 (101

Creía que Dios era sólo una palabra, un nombre que para
mí casi no significaba nada. En el transcurso del tiempo
aprendí a temer esa palabra, pues estaba segura de que Dios
había resuelto castigarme por todo lo que yo había hecho
mal.
Ahora, gracias al programa, creo que Dios es algo real. El
es comprensión y carino. El es el verbo "amar" y también
cualquier acción que se conjugue con este verbo.
Yo puedo formar parte de Su "amor en acción". Al
ayudar a un miembro nuevo percibo un punto de vista
diferente, o cuando reservo cierto tiempo para escuchar a
alguien que desea hablar, aprendo a conocer esa especie de
amor tan especial que hace de nuestra hermandad lo que es.
Para reflexionar
Hay un Poder en cada reunión a que asisto. Algunos lo
llaman Dios, otros lo llaman amor. Para mí es ambas cosas.
Yo ayudo a los demás y ellos me ayudan a mí. Juntos
ponemos al amor en acción, y esto es lo que nos mantiene
vivos.
Después de ingresar a Alateen me di cuenta de que mis
padres estaban enfermos. Los odiaba, pero cuando em-
K cé a comprender que padecían la enfermedad del aleo-
lismo, los quise mucho más.
En Alateen he aprendido que la bebida es un problema de
ellos no mío. No puedo hacer que se detenga; ésta es una
opción que ellos mismos tienen que hacer.
Cada día trato de recordar el lema Vive y deja vivir. En
vez de vivir la vida de mis padres y de asumir sus
responsabilidades, me ocupo de lo mío.
Para reflexionar
Hoy viviré mi propia vida dejando que los demás vivan la
suya. No voy a desanimarme por lo que otros digan o hagan
ni quiero que los que me rodean influyan en mí. Seré mi
propia persona, yo misma.
Si deseo ayudar a la gente debo mantener una forma de
pensar correcta. Tengo que asegurarme de saber cuál es la
diferencia entre lo que es responder a las necesidades de otros
y asumir su responsabilidad.
Cuando alguien solicita mi ayuda, puedo llevarle el
mensaje, pero no tengo que forzarle a que lo acepte. Puedo
tratar de escuchar lo que esta persona tenga que decir y
compartir con ella lo que el programa me ha dado. Pero
luego tengo que darle tiempo a que la persona digiera el
mensaje y lo ponga en práctica en su propia forma y en su
propio momento. Esto le muestra el respeto a que tiene
derecho y yo mantengo mi ecuanimidad y mi salud.
Para reflexionar
A veces me altero tanto cuando ayudo a otra persona que
se me olvida lo que la ayuda significa realmente. Si estoy
tratando de llevar gente en vez de llevar el mensaje del
programa, podría perjudicar a muchas personas,
incluyéndome a mí. Pero si dejo que la gente sepa que me
intereso por ellos, que los respaldo y permito que hagan las
cosas a su tiempo y a su modo, les estaré ayudando a que
logren un poco de respeto de sí mismos, y a que yo también
conserve mi dignidad.

Al principio vine a Alateen con tal de salirme de mi casa.


Estaba harta de quedarme sentada, sin nada que hacer, y
creía que era un buen pretexto para alternar con gente de
mi edad. Nunca falté a ninguna sesión, pero en realidad
nunca estuve "allí". Me hacía la tonta y jamás escuchaba lo
que otros decían. Iba sobre todo para hablar y pasar un buen
rato.
Entonces, una noche el coordinador del grupo pidió que
todos dijeran algunas palabras expresando por qué venían a
Alateen. Me quedé fría. No pude decir la verdad, y tuve que
inventar cosas que creí que causarían una buena impresión.
No creí ni una sola palabra de lo que dije y creo que nadie las
creyó. Cuando me fui aquella noche a la casa, pensé mucho
tiempo sobre el por qué estaba yendo a Alateen.
Regresé a la semana siguiente por voluntad propia. Escu-
ché y decidí que d programa se convertía en mi norma de
JULIO 29 (102

vida. Empecé a practicar los Pasos y traté de que fueran


parte de todas mis acciones.
Pam reflexionar
Alateen no es sólo un lugar al que se va cada semana. Es
una reunión que me brinda una nueva forma de vida, míe
tiene soluciones que ofrecerme, pero tengo que estar dis-
puesta a buscarlas.
Cuando empecé a asistir a Alateen no me daba cuenta de
por qué debía sentirme agradecida. Un pensamiento me
dominaba: "Si la gente me tratara mejor, todo marcharía
bien". Se me iba mucho tiempo soñando despierta, y
sintiendo autocompasión. No me fijaba en la enorme
influencia que mis actitudes tenían en mi vida.
A medida que observaba el crecimiento de mis amistades
en el programa, llegué a estar consciente de que había una
forma diferente de vivir. Al ver su felicidad, también yo la
deseaba. El primer paso que di para lograrla fue aplicando
un nuevo pensamiento de la literatura Al-Anon: "Sólo por
hoy seré feliz; casi todo el mundo es tan feliz como se lo
propone".
Esto fue para mí un nuevo comienzo. Empecé a darme
cuenta de que mi felicidad dependía de mí y no de los demás.
Me esforcé por ser feliz, y después de mucha práctica se
convirtió en hábito.
Para reflexionar
Cuando me siento desdichada y trato de echarle la culpa
a la gente, es el momento de que me fijé en mi actitud. Soy
responsable de mi felicidad. Si trato de utilizar las ideas del
programa en mi vida, puedo llegar a ser tan feliz como me lo
proponga, el día de hoy.
103) AGOSTO 3

Es penoso vivir sin uno de los padres. Mi papá


abandonó a nuestra familia cuando se divorció de
mi mamá. Yo era muy joven, y no podía entender
por qué mi padre no se había quedado con nosotros
como lo hacían los padres de mis amigos. Cada vez
que mi padre regresaba, por lo general venía
borracho, y yo me escapaba y me escondía de él por
que le tenía miedo.
Cuando crecí entré a Alateen. Al principio no
me gustó, pues me hacía recordar todos los
sentimientos malos respecto a nuestra familia; pero
poco después empecé a hacerme amigo de algunos
de los muchachos. Al igual que yo, muchos de ellos
sólo tenían a uno de sus padres; cuando los oí
platicar de sus sentimientos me sentí más a gusto.
Ellos me ayudaron a comprender que aunque no
cambiara el hecho del divorcio de mis padres, el
programa podía ayudarme a hacer algo por mí con
tal que yo quisiera. Esto hizo que decidiera
quedarme en el programa y practicarlo para mi
beneficio personal.

Para reflexionar
Alateen no puede "arreglar" mi situación
familiar, pero puede ayudarme a modificar mi
actitud al respecto. En vez de querer que las cosas
sean diferentes, puedo aceptarlas como son y
dedicarme aresolvermis problemas. El programa me
ayudará a lograrlo en gran medida si hoy le doy una
oportunidad.
AGOSTO 4 (104

Cuando oigo la palabra "unidad" me acuerdo de la


Primera Tradición. Es el lazo de unión mediante el cual el
grupo permanece junto, a medida que los miembros
comparten sus experiencias, fortaleza y esperanza entre sí.
Pero la unidad comienza realmente en mi interior. Me la
imagino como un sentimiento de "juntar las cosas" en mi
cabeza. Ahora puedo pensar con más claridad, y mis
sentimientos ya no son tan confusos como antes. Puedo
incluso tomar algunas decisiones por mi misma.
La unidad es el resultado de la práctica diaria de los
Doce Pasos en mi vida, lo cual me ayuda a sentirme otra vez
una persona íntegra. Como mi aspecto de hoy es mejor de lo
que solía ser, tengo mucho más que ofrecer a mi grupo y la
hermandad como un todo.

Para reflexionar
Ya no tengo la sensación de estarme desmoronando.
Practicar el programa me ayuda a recobrar la vida. Es un
sentimiento precioso -una "unidad" interna-, que me da la
oportunidad de prestar algún apoyo a la hermandad lo cual
me ayuda a encontrar de nuevo el sendero de mi vida.
Mis amigos de Alateen están dispuestos a ayudarme con
tal que yo se los permita. Cuando comparto con ellos un poco
de mí misma puedo acercarme a ellos para dejar que me
conozcan mejor.
No tengo por qué sentir miedo de hablar con ellos, ya que
han pasado por las mismas cosas que yo. Se toman un
tiempo para escuchar lo que yo tenga que decirles, luego me
dejan saber cómo ellos enfrentaron sus problemas. A veces
algunos de ellos dicen cosas que no quiero oír, pero no lo
tomo a mal porque sé que lo único que tratan es de
ayudarme.
Confío en mis amigos. Lo que hablamos entre nosotros se
queda con nosotros. Nadie sale de allí y habla de k> que se ha
dicho. Saber eso me ha ayudado más que todo. Al fin puedo
decir cómo realmente me siento y sé que alguien desea
escucharme y ayudarme.
Para reflexionar
Los miembros Alateen son amigos especiales que hacen
que me sea más fácil hablar de mí porque están dispuestos a
escucharme y a compartir sus sentimientos conmigo. Les
confio mi vida. Cuando necesito ayuda, sé que siempre
puedo contar con ellos.
Cuando el alcohólico estaba bebiendo, constantemente me
preguntaba "¿Por qué yo"? Estaba avergonzada y sentía
que todo mi mundo estaba en pedazos.
Ahora, poco a poco, estoy reconstruyendo mi vida. El
programa me va dando forma, como escultor que crea una
nueva estatua. Practiqué el Primer Paso y admití que era
incapaz ante el alcohol, y estoy aprendiendo a Vivir y dejar
vivir. Sé que no puedo cambiar a un alcohólico ni a nadie.
Tengo que vivir mi vida y quiero vivirla a plenitud. Con la
ayuda del programa me será posible aprovechar lo más que
pueda de cada día.
Para reflexionar
Hoy siento que soy una persona diferente, íntegra y
nueva. Me he liberado de la autocompasión y puedo erguir la
cabeza adondequiera que vaya. Me siento estupendamente, y
quiero seguir de esa forma. El programa me mostrará cómo
lograrlo, si estoy dispuesta a vivirlo cada día.
¿Qué hay de importante en tener la razón? ¿Por qué
pelearme con mis padres si sé que voy a hacer que
empeoren? Toda nuestra familia está afectada a con-
secuencia de vivir con el alcoholismo. No necesitamos de más
problemas.
Tengo que aprender a dejar de discutir. En vez de pelear
por todo lo que dicen mis padres, necesito respetar el punto
de vista de ellos aunque esto tenga o no tenga sentido para
mí.
Me ayuda mucho utilizar los lemas. ¡Hazlo con calma! me
ayuda a que me calle y que escuche; Vive y deja vivir me
recuerda que también mis padres tienen derecho a expresar
sus sentimientos; Suelta las riendas y entrégaselas a Dios
me muestra cómo desprenderme y dejar que mi Poder
Superior se encargue de nuestra familia. Juntos, todos los
lemas son una forma magnifica para impedir una explosión
antes de que se inicie.
Para reflexionar
Tengo que defender lo que creo, pero no siempre estoy en
lo correcto. Pelear por ello no conduce a nuestra familia
AGOSTO 4 (105

ninguna parte. Tenemos ya bastantes problemas para estar


creando más. Los lemas poseen algunas soluciones para mí.
Cuando los uso, tengo una visión más amplia de lo que
ocurre en nuestra familia, y puedo poner de mi parte para
hacer de nuestro hogar un lugar más tranquilo para vivir.
Para mí la palabra "Alcohólico" era una grosería. Crecí
con una actitud negativa hacia el alcoholismo y los alcohó-
licos. Tal actitud persistió en mi durante mi adolescencia.
Cuando mi hermana desarrolló un problema de bebida, yo
reaccioné en mi forma habitual, llamándola mala persona y
la "oveja negra" de la familia.
Poco después mi madre se unió a Al-Anon y mi hermana
fue a AA Percibí erare ellas una relación que se fue conso-
lidando, y me puse celoso; de modo que empecé a ir a Al-
Anon para ser parte de las cosas. En Al-Anon me enteré
acerca de Alateen, y decidí probarlo.
Ahora empecé a ocuparme de mí y he cambiado de acti-
tud hacia mi hermana y su enfermedad. Estoy tratando de
ser más comprensivo, y pienso que el lazo entre nosotros
cada vez es más firme.

Aferrarme a mis ideas negativas respecto al alcoholismo


puede impedir que entienda lo que realmente está pasando
en nuestra familia. Si estoy dispuesto, el programa puede
abrirme mentalmente nuevas puertas a mi forma de pensar
y puede ayudarme a cambiar algunas de mis antiguas
actitudes, para que así pueda disfrutar hoy de una mejor
relación con mi familia y con los demás.
Tengo una boca y dos orejas. Esto debería haber sido
evidente para mí; pero antes de llegar a la hermandad
actuaba como si tuviera dos bocas y una oreja. Hablaba y
hablaba, y apenas escuchaba lo que la otra persona me decía.
El programa me ayudó a poner en orden mis prioridades.
El Cuarto Paso me ayudó a reconocer que hablaba mucho a
fin de disimular mis sentimientos de inseguridad. Me
imagino que yo creía que si hablaba bastante, algo de lo que
decía tendría sentido, y alguien me escucharía.
El Undécimo Paso me ayudó a ser un oyente mejor. Al
principio se me hizo difícil practicar el silencio, porque
siempre pensaba que necesitaba llenarlo con mi voz. El
practicar la oración y la meditación me mostró cómo utilizar
los momentos de silencio para escuchar la guía de mi Poder
Superior. A medida que fui practicándolas se me hizo más
fácil también escuchar a la gente, y me di cuenta de los
grandes beneficios que se obtenían al escuchar más y hablar
menos.
Para reflexionar
Hay tiempo para hablar y tiempo para escuchar. El
programa me ayuda a elegir cual es cual. Al pacticar los
Pasos puedo aprender a utilizar mejor mis orejas y mi boca,
y sacar mayor provecho al conversar con los demás.
Antes de llegar a Alateen fluctuaba entre sentir miedo, o
fingir ser valiente y no tener temor. A veces me daban miedo
cosas específicas, pero lo encubría; otras veces ni siquiera
sabía a qué le tenía miedo, y pasaba el tiempo sobresaltada;
en otras ocasiones, simplemente sentía miedo de sentir
miedo. ¡Y esto, definitivamente, no era vivir!
Hoy sí puedo admitir que tengo miedo. Esto, en sí, no
tiene nada de malo. Ahora estoy aprendiendo a identificar
mis temores y a enfrentarme a ellos. Por ejemplo, tener
miedo a fracasar en la escuela, como amigo, o como hijo o
hija; o quizá temor de mostrar mis sentimientos. No importa.
Escuchar en las reuniones me ayuda a darme cuenta de que
muchísima gente tiene la misma clase de temores que yo. El
practicar el programa nos da la oportunidad de superarlos
todos juntos.
Para reflexionar
"¡Tengo miedo!" Admitir eso es dar el primer paso para
superar mis temores. El compartirlo con otros miembros me
ayuda a concentrarme en las cosas que me infunden miedo, y
me da los instrumentos y amigos comprensivos que me
ayudan en la tarea de librarme de mis temores.
A veces estamos tan enojados por las cosas malas que nos
suceden que nuestra ira nos ciega. No tenemos tiempo de ver
las cosas buenas que nos han ocurrido. Le echamos la culpa a
Dios y a otras personas por nuestros problemas, y nos
negamos a aprender de nuestros errores.
En Alateen aprendemos a asumir la responsabilidad de
nuestras acciones. Tratamos de aceptar lo que es, y ver lo
bueno que hay en ello. A veces se necesita tener verdadero
AGOSTO 4 (106

valor. Pero ahora sabemos que Dios nos ayuda a serenamos


y a lograr una mejor perspectiva de las cosas para que
podamos aprender algo valioso de cada situación.
Para reflexionar
En vez de culpar a Dios y los más allegados a nosotros, por
todo lo que hoy nos salga mal, me fijaré en mi propia actitud.
Procuraré tener un criterio abierto y ver lo bueno de las
situaciones para poder aprender algo de mí mismo en todo
cuanto me ocurra el día de hoy.
Al hacer el Quinto Paso, hay tres personas ante las cuales
tengo que admitir mis defectos de carácter: Dios, yo y otro
ser humano. Este orden no es pura coincidencia. Mi Poder
Superior es el más accesible para admitir mis faltas. Sé que
El siempre está allí, dispuesto a escucharme y perdonarme.
Pero la segunda persona es más difícil. Mi "yo" interno
nunca quiere aceptar que haya algo equivocado en mí.
Admitir lo que soy en realidad, me ayuda a superar este
problema y a hallar cierta humildad.
Lo más duro es admitir mis faltas ante otra persona. No
importa b valiente que yo sea, parece que esa valentía se me
escapa por temor a lo que la otra persona pudiera pensar de
mí. Pero hablar de mis faltas y las razones que las sostienen,
es una oportunidad para crear confianza entre ambos.
No importa qué difícil sea practicar el Quinto Paso, es un
alivio librarse de tantos sentimientos que he ocultado a los
demás, incluyéndome a mí. Es como descubrir una clase de
libertad muy especial.
Para reflexionar
Admitir mis defectos ante Dios, ante mí mismo y ante otra
persona me da una auténtica imagen de b que soy. Me hace
emprender el camino hacia la verdadera humildad.
Admitir mis errores ante otra persona es una forma de
empezar a superarlos. Pero hay que ir más allá de todo eso.
Tengo que estar dispuesto a eliminarlos y el Sexto Paso me
muestra cómo lograrlo.
Para estar dispuesto no tengo que dar más vueltas al
asunto, sino hallar la forma de librarme de mis defectos;
simplemente tengo que estar dispuesto a dejar que mi Poder
Superior me ayude. Si me presto a hacerlo, El me enseñará
la forma de lograrlo.
No espero ser perfecto, pero sé que empezaré a mejorar si
muestro el verdadero deseo de pedirle a Dios que me ayude
con mis faltas. Esto me ayudará a tener la disposición de
trabajar con ellas Un día a la vez, hasta eliminarlas.

Para reflexionar
Dios no puede ayudarme hasta que esté dispuesto. Esa es
la clave del Sexto Paso. Si sigo aferrándome a mis faltas
favoritas, estoy arruinando mis oportunidades de lograr
serenidad. Pero si estoy dispuesto a desprenderme de ellas,
Dios me ayudará con el resto.
Cuando vivía con un alcohólico, dejé de tratar a muchas
personas. Estaba tan enfrascado en mis problemas que no
escuchaba a nadie y creía que nadie me escuchaba.
Al llegar a Alateen encontré a un grupo de amigos que
estaban dispuestos a escuchar. Me hicieron sentir bienvenido
y a gusto porque prestaban la suficiente atención para
escuchar lo que yo estaba diciendo. Me daban la impresión
de que hasta podían oír lo que no expresaba verbalmente.
Mientras ellos más me escuchaban, más me ayudaban
mis amigos Alateen a que yo les escuchara. liego el
momento en que me di cuenta de que escuchar a los otros me
ayudaba a aprovechar mejor el programa. Aprendí mucho
sobre cómo manejar mis problemas. Esto me dio la
oportunidad de ayudar a que otros hicieran lo mismo.

Para reflexionar
El lema Escucha y aprende adquiere sentido cuando lo
pongo en práctica. Las personas que escuchan a otros parece
que aprenden más sobre cómo poner el programa a
funcionar en sus vidas. Si puedo lograr que mi mente se
desprenda de mis problemas y escuche a los demás, hoy
aprenderé muchísimo más acerca de las cosas buenas que
Alateen tiene para ofrecerme.
AGOSTO 4 (107

¿Tengo valor para enfrentarme a los problemas que el


alcoholismo ha llevado a mi vida? ¿Puedo derribar la
"muralla" de soledad que he estado construyendo?
La respuesta podría ser "sí", si dejara de esconderme
detrás de mi "muralla" cuando me sucede algo que no me
gusta. Cuando me hago a un lado me siento más desdichado
porque reprimo mis malos sentimientos y evito a las demás
personas.
En Alateen la gente comprende cómo me siento. Muchos
de ellos han vivido también detrás de "murallas". Con ellos
puedo compartir mis temores y mis sufrimientos y me
ayudan a derribar mi muralla y a comenzar a construir un
puente que me lleve a un mundo de valor y paz espiritual.
Para reflexionar
Es fácil esconderse detrás de una "muralla" en vez de
enfrentar mis problemas; pero cuando obro así el que sale
perdiendo soy yo. Cuando me encierro en mí mismo, la gente
no puede comunicarse conmigo. El programa me ayuda a
traspasar mi "muralla" y a construir un puente hacia una
nueva forma de vida.
Cuando estoy pasando por un mal día y veo que el
alcohólico está bebiendo, quisiera decir algo, pero reconozco
que lo único que logro es enojarme. El alcohólico está
acostumbrado a decir cosas impensadamente, y a veces sus
palabras hacen que me sienta indesea-da e insegura.
¿Qué puedo hacer? Puedo tratar de desprenderme.
Cuando el alcohólico dice algo que me hiere, no dejo que los
ceméntanos me hagan mella. Después procuro buscar un
lugar tranquilo en donde pueda estar un rato conmigo
misma. Leo algo de literatura de Al-Anon, medito profun-
damente las cosas y platico con mi Poder Superior. Pos-
teriormente, llamo a algún miembro Alateen y ventilo con él
mis sentimientos.
Para reflexionar
El programa me da la alternativa de involucrarme o no en
la vida del alcohólico. Si aprendo a desprenderme, podré
evitar muchas escenas desagradables. Si hoy siento que estoy
reaccionando ante el alcohólico, trataré de desprenderme,
serenarme y dominar mejor mis sentimientos.
A veces me imagino cosas inauditas. Que soy el
centro de la atención y pienso que de veras la hice.
Tengo la seguridad de poder hacerlo por mi cuenta y
que ya no necesito del programa. Luego me meto en
problemas y noto que sí necesito ayuda y que no
puedo hacerlo solo.
Esta ayuda puede que venga de mi Poder Superior.
El Séptimo Paso me recuerda que humildemente se lo
pida a El. A veces doy por hecho a este Poder
Superior. Sé muy bien que si no fuera por el amor, la
comprensión y la paciencia que recibo, no tendría
hoy la vida que tengo. Eso es algo que nunca quiero
olvidar.

Para reflexionar
Cuando necesito a alguien para rehacer mi vida,
Dios está allí. Pero para que El me ayude, tengo que
pedírselo^ La forma en que le doy las gracias a mi
Poder Superior por Su ayuda, es practicar el
programa en la mejor forma que pueda.
Llegué a Alateen cuando estaba deprimido y me sentía
terriblemente mal. Habían dicho de mí tantas cosas crueles y
falsas que acabé por creerlas.
Las personas de mi grupo Alateen eran diferentes, me
escucharon y se interesaron por mí. Vieron lo bueno que hay
en mí y me ayudaron a reconocerlo. Me hicieron recordar
que k> que realmente importaba era que Dios y yo
supiéramos lo que en mí había de verdad. Me ayudaron
muchísimo al mostrarme cómo poner en práctica los Pasos.
Esto me dio la oportunidad de creer en mí mismo y de seguir
cimentando las cosas buenas en mi interior.
Hoy me doy cuenta de que soy alguien. Me porto en la
forma en que mis buenos amigos y compañeros Alateen me
dicen que soy. Aunque la gente diga cosas malas de mí y me
sienta herido o desanimado, yo no tengo que dejar que ellos
me depriman. Hoy puedo tratar de ser feliz y acordarme de
que nadie puede quitarme mis buenos sentimientos respecto
a mí mismo.
AGOSTO 4 (108

Para reflexionar
Muchos de nosotros no llegamos a creer en nosotros
mismos hasta que alguien hace notar b bueno que hay en
nosotros. Eso es lo que hacen mis amigos Alateen al
comparar cómo viven ellos los Doce Pasos. Hoy ya no
necesito depender de nadie para sentirme bien, Ese bienestar
reside en mi interior, y puedo verb con toda claridad cuando
trato de vivir el programa.
A veces tratamos de encubrir nuestros verdaderos
sentimientos. Quizá sintamos temor por lo que pueda
deparamos nuestra vida en el hogar, o enojamos por la
forma en que nos trata la gente. Quizá nos sintamos
inadecuados o inferiores en el círculo de nuestras amistades,
o frustrados con las tareas y maestros en la escuela. Pero en
vez de mostrar estos sentimientos a la gente que nos rodea,
fingimos y pretendemos que todo marcha sobre ruedas.
Los sentimientos forman parte de nosotros mismos; no
podemos dominarlos. Pero sí podemos controlar lo que
nacernos con ellos. Es aquí donde el programa puede
ayudarnos. Nos da la orxnturiidad de hablar sinceramente
de nuestros sentimientos y de hacer algo positivo al respecto.
Para reflexionar
Durante mucho tiempo usaba una máscara para
convencer a todos de que me sentía bien, cuando realmente
estaba destrozado por dentro. Hoy trataré de ser sincero
respecto a cómo me siento. Resolveré mis sentimientos en
forma adecuada para mí y dejaré que la gente conozca mi
verdadero yo.
No creo que haya alguien que pueda decir que nunca ha
perjudicado a nadie. Todos nosotros cometemos errores,
yaque no somos perfectos.
La persona que más perjudiqué fue a mí mismo. Durante
mucho tiempo sentí autocompasión. La preocupación, el
temor, el odio y la vergüenza que sentía por mi familia me
hizo sentir inseguro. No tenía confianza en mí mismo ni
podía aceptarme.
Después de examinarme atentamente, ahora que me doy
cuenta de que tengo que incluirme en mi lista de enmiendas.
Tengo que estar dispuesto a disculparme ante mí mismo si
quiero dejar atrás el pasado y seguir progresando en el
programa.
Para reflexionar
Si realmente me he dejado ir cuesta abajo, el Octavo Paso
me ayudará a cambiar esta situación. En vez de autoconmi-
serarme, puedo prepararme para decir "¡Lo siento mucho¡"
y estar dispuesto a ser bueno conmigo y con los demás.
Cuando vine por primera vez a las reuniones, Alateen era
sólo un lugar para pasar el ralo. Para mí no significaba nada.
Después de notar que no estaba sacando ningún provecho
ael programa, empecé a practicar tos Pasos. Comencé a cap-
tar algunas ideas de Alateen. Hice muchos nuevos amigos de
confianza y encontré muchas respuestas a mis preguntas.
Ahora que me doy cuenta de mi responsabilidad para con-
migo, estoy tratando de emplear mejor mi tiempo. Estoy
aprovechando mucho mas el programa y disfrutando la vida
de la forma que siempre quise hacer.
Para reflexionar
Hoy cuento con veinticuatro horas para vivir. Puedo des-
perdiciar el tiempo o usarlo sabiamente, tratando de
practicar el programa en todas mis acciones. La decisión es
sólo mía.
Había una vez un miembro Alateen que asistía
regularmente a sus reuniones. Las disfrutaba, pero en
semanas recientes parecía que faltaba algo que él
verdaderamente necesitaba oír. Sabía que no eran las
reuniones; pero llegó el momento de tomar una desición: irse
o pasarse a Al-Anon.
No quería abandonar el programa y renunciar a todo lo
que representaba tanto para él; pero, al mismo tiempo temía
a pasarse. Era como aventurarse a dar un gran paso en lo
desconocido. ¿Qué ocurriría si no sabía lo suficiente sobre el
programa? ¿Y si incomodaba a los demás? ¿Y si ellos no lo
querían?.
Al fin se decidió a hacer la prueba. Al principio se sintió
un poquitito torpe, pero había en el salón un ambiente tan
acogedor, que le hizo darse cuenta de que Al-Anon no era
tan diferente a Alateen. A medida que se fue relajando y dejó
que otros miembros le ayudaran, observó que Al-Anon es
realmente otro peldaño en la labor del programa.
Para reflexionar
AGOSTO 4 (109

Es bueno saber que Al-Anon está presente cuando llega el


momento de la transición. Es la continuación de Alateen, con
la misma clase de gente cariñosa y comprensiva. Quiero
seguir progresando por el resto de mi vida, y Al-Anón puede
ayudarme a lograrlo.
A veces me ofendo por cualquier cosa que me
digan mis padres. Ellos me dicen que soy demasiado
susceptible, pero las groserías y enfrentamientos a
gritos realmente llegan a lastimarme.
El programa me está ayudando a ver que cuando
ellos explotan, es debido a su enfermedad que
convierte en un caos nuestra vida hogareña. Cuando
reacciono, lo único que hago es empeorar las cosas.
Descubrí una buena manera de aceptar las cosas
que no puedo manejar, y ahora trato de ponerla en
práctica. Me imagino que mis reacciones son como
un conmutador de la luz. Cuando las cosas van bien,
lo dejo "prendido", me involucro, y paso un buen
rato. Pero cuando éstas no andan bien, "apago" el
conmutador para que la ira de mis padres no logre
penetrar en mí. Así se me facilita escuchar lo que
están diciendo, y luego podemos sentarnos a dialogar
sobre las cosas.

Para reflexionar
Si mis padres se enojan, esto no significa que
también yo tenga que estarlo. Cuando dejo de
reaccionar a lo que están diciendo, sus palabras no
pueden herirme tanto. Hoy trataré de entender por
qué se enojan mis padres y seguir queriéndolos a
pesar de todo.
Crecer en el programa es como volver a vivir los primeros
años de nuestra vida. Primero aprendemos a caminar. Con
cada paso que damos, crecemos un poco más fuertes hasta
que nos es posible caminar derechos y erguidos.
Después aprendemos a hablar. En vez de vociferar y
gritar, aprendemos a comunicarnos de corazón, poco a poco,
hasta que podemos compartir lo que sentimos por dentro.
Finalmente, aprendemos a adentrarnos en el mundo y a
sostenernos en nuestros propios pies. Empezamos a pensar
por nosotros mismos y a ser responsables de nuestras
acciones. No siempre es fácil. A veces nos caemos y nos
raspamos las rodillas. Pero eso no nos detiene mucho tiempo,
pues sabemos que la única forma de mantenerse creciendo es
levantarse y seguir adelante.
Para reflexionar
Ahora que estoy en Alateen estoy empezando a crecer por
dentro. Se necesita tiempo. Los Doce Pasos me dan un
sentido de orientación y me ayudan a seguir creciendo, un
paso a la vez.
110) AGOSTO 25

Yo era verdaderamente un amargado durante mis


primeras semanas en Alateen. Mis preguntas eran
interminables: "¿Por qué tengo yo que contemplar a mi padre
bebiendo a morir? ¿Por qué tengo que escuchar todas las
discuciones sin sentido cuando casi todos mis amigos están
disfrutando de un sueño placentero? ¿por qué tengo que
soportar tantos empellones y que me estén gritando a todo
momento?" Cuando otros compartieron conmigo, me di
cuenta de que el alcohólico padecía de una enfermedad que
había afectado a toda nuestra familia; pero a pesar de todo,
parecía que esto no me ayudaba gran cosa. Estaba harto y
cansado de sufrir tanto, y quería escapar de todo.
¡Qué bueno que no lo hice así! Me quedé y busqué un
padrino. Nos pasamos mucho tiempo platicando sobre el
dolor que yo llevaba por dentro. Con su ayuda empecé a
comprender que aunque no había mucho que yo pudiera
hacer por cambiar la situación en el hogar, en cambio sí podía
cambiar mi reacción al respecto. Podía protegerme para no
sentirme lastimado, tratando de desprenderme, y rechazando
a dejar que las cosas me afectaran íntimamente.
* Para reflexionar
Si deseo sentirme mejor, tengo que hallar la forma de
librarme de mis heridas en vez de permitir que me mor-
tifiquen. Un buen padrino puede ayudar. Al practicar juntos
el programa aprendo a cómo vencer el dolor y comprender lo
que me está sucediendo a mí y al resto de mi familia.
Al llegar á Alateen, alguien me dijo que todos
nosotros necesitábamos creer en un Poder Superior a
nosotros mismos. No lo creí. Hacía ya mucho tiempo
que me había acostumbrado a arreglármelas yo solo, y
no tenía necesidad de que nadie me cuidara.
Me tomó algún tiempo llegar a cambiar de actitud.
Cuando las cosas iban mal, confiaba en la gente de mi
grupo. Es allí donde encontré la fortaleza que
necesitaba.
Ahora sí reconozco que necesito un Poder personal,
a alguien coíi quien hablar cada día. Me doy cuenta
que se trata de una conversación silenciosa de Su
parte, pero algo con respecto a ello me da resultado.
En mi vida me están sucediendo cosas buenas, y sé que
esto tiene mucho que ver con este contacto personal
tan especial con mi Poder Superior.

Para reflexionar
En Alateen nadie me dice en qué tengo que creer.
Esto hace que me sienta bien, especialmente cuando a
mí se me dificulta creer en algo. Cuando necesito algo,
hay muchos lugares a los cuales acudir. Puedo
empezar creyendo en el programa y en la gente de mi
grupo. Llegará un momento en que quizá me
encuentre con un Poder Superior a mí mismo para
que me ayude a llegar al final de cada día.
Llegamos a Alateen con un problema enorme que no
podemos manejar solos. Pero eso no importa, porque en
Alateen todos jalamos parejo para ayudarnos mutuamente.
Para muchos de nosotros, ésta es la primera vez en mucho
tiempo que tenemos confianza en otras personas. Nos hemos
acostumbrado a sentirnos aislados de todos, que estorbamos,
que no nos quieren, y con miedo a contar con alguien o con
algo. Ahora formamos parte de algo donde la solidaridad es lo
que cuenta. Nos necesitan, confían en nosotros. Pertenecemos
a un grupo de gente que ayuda a la gente.
Cada uno de nosotros adquiere del grupo algo de nuestra
fortaleza, de modo que mientras más fuerte sea el grupo más
fortaleza podemos lograr. Esta es una de las razones por la
que es bueno que el grupo tenga la preferencia, incluso antes
que el bienestar de cualquier persona.
111) AGOSTO 25

Para reflexionar
Todos nosotros merecemos la oportunidad de crecer. Una
de las formas de disfrutar esta oportunidad es trabajar juntos
para hacer que se fortalezca nuestro grupo. La Primera
Tradición lo llama unidad; verdaderamente es jalar parejo
para prestamos mutua ayuda y recordar que las palabras
nosotros y nuestros tienen mucha más fuerza que yo y mi o
mío.
Cuando se desbocó el alcoholismo en mi hogar, me
pasaba tantísimo tiempo pensando sobre el alcohólico,
que nunca tuve tiempo de pensar en mí. Me puse a
esperar a que todos los demás me cuidaran, y cuando
no lo hacían, acababa resentida porque me ignoraban.
Realmente me fui cuesta abajo. Me sentaba frente al
televisor durante tanto tiempo que mi mente era como
una esponja. No descansaba lo suficiente, comía
muchas golosinas, y mi aspecto exterior era
desastroso. No en balde la gente no quería tener
mucho que ver conmigo, y me evitaban.
Ahora sé que hay cosas que necesito hacer para
mantenerme con vida y con salud. Soy responsable de
mi mente y de mi cuerpo. Yo puedo cuidar de mí y
hacerlo sin culpar a otros por no hacer la tarea por
mí. Puedo mantener mi mente alerta, descansar
convenientemente y comer los alimentos adecuados.
Una forma en que puedo demostrar que realmente sé
cuidarme, es conservando mi aspecto interior y
exterior en buen estado.

Para reflexionar
Cuando mi mente está muy involucrada con otra
persona hasta el punto de descuidar de mi persona,
me quedo fuera de onda, y necesito hacer algunos
cambios. Cuando dispongo de tiempo para ocuparme
de mí en primer lugar, estoy en vías de hallar algo que
siempre he querido: el respeto de mí misma.
El mundo se asemeja a un cajón atestado con alboroto y
empujones de la vida diaria. Durante mucho tiempo creí que
no podría escapar de esta sensación de "encajonamiento".
Después noté que podía hacer las cosas más felices para mí en
el cajón, si de veras me k> proponía.
Empecé a fijarme en otras personas. Unas habían logrado
su felicidad en la religión, pero yo no estaba dispuesto a eso.
Otras procuraban adquirirla por medio de drogas, pero al
salir de su mundo de sueños se encontraron en la misma
situación u otra peor. Otras trataban de comprar su felicidad
utilizando dinero y el poder, pero eso aparentemente tampoco
les dio resultado.
Entonces llegué a Alateen. Allí conocí amigos que
verdaderamente se interesaron por mí. Pensé que había
encontrado el secreto para ser feliz. Pero la felicidad no me
duré mucho. Yo no podía comprender, hasta que oí que
alguien dijo: "Solo puedes cosechar lo que siembras". Ahora
me doy cuenta de que tengo que luchar por lo que quiero,
pues las cosas no me las van a traer en bandeja de plata.
Para reflexionar
Si ando en pos del secreto de la felicidad, hoy puedo
detenerme. No existe tal secreto: soy yo el que labro mi propia
felicidad. Practicar el programa me ayudará a alcanzarla.
AGOSTO 30 (112

Mis padres tenían muchísimas dificultades


enfrentando el problema en nuestro hogar. En
realidad ninguno de nosotros prestábamos atención
a nuestros sentimientos; lo único que hacíamos era
fingir que todo andaba bien. También yo entré en
ese juego. Por fuera todo parecía estupendo. De
hecho yo había alcanzado muchos éxitos, pero muy
dentro de mí llevaba ocultos la ira y el temor. Un día
en un estampido, se desbordaron años de
sentimientos reprimidos y lloré por horas. Acabé en
el hospital, bajo los cuidados de un psiquiatra.
En el hospital había una reunión Al-Anon, el
doctor se aseguró de que yo asistiera. Las personas
allí presentes me escucharon y comprendieron cómo
me sentía. Me hablaron de Alateen, e hicieron
arreglos para que algunos miembros me llevaran a
una reunión cuando fuera dado de alta.
Ahora me siento bien y puedo expresar cómo me
siento. Todavía recaigo en mi antigua forma de
pensar, pero al menos puedo platicar sobre esto, y
también estoy aprendiendo a reírme de mí mismo.

Para reflexionar
Es difícil actuar como si todo estuviera bien
cuando no es así. Cuando reprimo mis sentimientos
en lo más profundo de mi ser, algo tiene que ceder y,
por lo general, soy yo el que cede. En Alateen ya no
tengo nada que esconder. Puedo expresar mis
sentimientos y aprender a manejarlos en tal forma
que sea para mi bien.
113) AGOSTO 31

No creía que mis problemas tuvieran solución. Aveces,


cuando me siento perezoso o contundido, termino pensando
igual.
Ahora sé que existen soluciones para mis problemas, pero
depende de mí hacer algo por encontrarlas. Con la ayuda de
mi Poder Superior y de mis amigos Alateen, trato de abordar
mis problemas Un día a la vez. También me ayuda mucho
hablar de los lemas y los Pasos en las reuniones. Soy como un
niño que está aprendiendo a caminar. Cada vez que caigo
necesito fuerzas para poder levantarme y seguir adelante,
sabiendo que la siguiente caída no me dolerá tanto.
Estoy aprendiendo que las cosas van mejorando de
acuerdo con el esfuerzo que pongo por superarme. A medida
que trato de hacer eso un poco más, cada día, empiezo a
encontrar un poco de serenidad, y muchos de mis problemas
se resuelven por sí mismos.
Para reflexionar
Alateen me da una forma para resolver mis problemas,
pero soy yo quien decide en qué medida voy a hacerlo. No es
fácil; se requiere valor y paciencia. Pero si hoy me empeño
lograré superar los momentos difíciles y empezaré a darme
cuenta de lo mucho que Alateen puede hacer por mí si yo lo
permito.

Después de haber estado viviendo durante años


con un alcohólico, había perdido la esperanza en mí
mismo y en mi familia. Lo había intentado todo:
lágrimas, amenazas y abandono de hogar. También
intenté suicidarme pero, aparentemente, no surtió
efecto.
Entonces me enteré de Alateen en un periódico de
la escuela. El artículo se refería a una hermandad de
adolescentes que viven con un alcohólico. Como me
sentía bastante desesperado como para probar
cualquier cosa, así lo hice.
Recobré la esperanza que había perdido. La gente
me comprendió y me acepto tal como era. Me dieron
cariño, y seguían dándomelo aunque lo rechazara.
Pero sobre todo me mostraron cómo cambiar al
utilizar el programa. Con esta clave aprendí a vivir,
y la sigo usando hoy.

Para reflexionar
Sin el programa no podría haber logrado lo que
tengo. El programa me ha dado la oportunidad de
"vivir otra vez". Lo que ha hecho por mí, quiero
compartirlo con otras personas que se sientan tan
desesperadas como yo lo estaba antes. Cuando lo
hago, es mi forma de decir: "Gracias, Alateen".
Un mes después de haber entrado a Alateen, estaba
entusiasmada por los resultados del programa. Mis nuevos
amigos me animaron y ayudaron al compartir conmigo los
rasos, la Oración de la Serenidad y los lemas; pero, sobre
todo, lo que me hizo regresar fue su cariño y comprensión.
Me aceptaron y me manifestaron su afecto y aprendí a
confiar en ellos.
Cuando empecé a asisitír a convenciones, reuniones de
Asamblea de Distrito, conocí a mucha gente de Al-Anón,
cuyos relatos me atraían de muchas maneras. Hicieron oue
me acordara de mis padres, pues hablaban, como yo, délos
mismos problemas, necesidades y esperanzas. Com-
partieron conmigo su experiencia, fortaleza y esperanza.
Me ayudaron a comprender que los Pasos son los princi-
pios que nos unen, sin importar nuestra edad. Y su
sinceridad me caló muy hondo, cosa que ames casi nunca
había experimentado. Entonces me di cuenta que en Al-
Anón había un lugar para mí.
Paro reflexionar
114) AGOSTO 31

A veces es difícil pensar en pasarse de Alateen a Al-Anón.


Me encanta estar con mis amigos Alateen y quiero retrasar
mi crecimiento. Esto me ayuda a recordar que todos noso-
tros formamos parte de Al-Anón. Cuando esté dispuesta a
efectuar la transición no me olvidaré de mis amigos
Alateen; nada más voy a conocer a otro grupo de amigos
oue pueden ayudarme a crecer y a obtener lo que necesito
del programa.

Cuando vine a Alateen por primera vez, me quedaba muy


desconcertada cuando alguien decía: "Eso es problema de
ellos". A mí también me estaba molestando el problema de
ellos.
Poco después empecé a darme cuenta que, en realidad,
mis amigos se estaban refiriendo a la última frase de la
Oración de la Serenidad. Reconocer "a quien le corresponde
el problema" es tener la sabiduría para conocer la diferencia
que hay entre lo que pueda cambiar y lo que tenga que
aceptar. Los problemas de otras personas son míos
solamente en la medida en que yo no sepa o no quiera
conocer la diferencia.
Necesito valor para cambiar mi actitud y mi com-
portamiento. La Oración de la Serenidad puede ayudarme a
locarlo, Y cuando cada día llegue a formar parte de mi
pensamiento diario, me recordará que no puedo resolver los
problemas de ellos; eso depende de ellos.
Para reflexionar
Sólo puedo cambiar una vida: la mía. La Oración de la
Serenidad lo aclara. Me ayuda a aceptar las cosas que no
puedo cambiar y me da el valor para cambiar mi forma de
pensar y actuar. Lo mejor de todo es que me da la sabiduría
que me ayuda a ocuparme hoy de mis propios asuntos.
Después de que mi papá ingresó a AA, pensé que él era
digno de admiración. Pero odiaba a mi madre. Cuando me
gritaba, bastaba con que ella me mirase, y en seguida
pensaba que me estaba echando la culpa de todo. Mi mamá
empleaba muchas excusas para justificar por qué mi papá
llegaba tarde a casa, pero apenas él llegaba le gritaba. Me
daba pena de él y pensaba: "No me extraña que beba tanto,
si ella no para de gritar". Un día le pregunté que por qué no
se divorciaba de ella para que viviéramos solos él y yo. Fue
entonces que él me sugirió que probara Alateen.
El programa me ayudó a darme cuenta que los problemas
en nuestro hogar, causados por el alcoholismo, habían
afectado a toda nuestra familia. Cuando empecé a entender
lo profundamente afectada que mi madre había quedado,
dejé de odiarla. Noté que había perdonado a mi padre por
todo lo que había hecho, pero no había pensado en perdonar
a mi mamá. Actualmente me llevo mucho mejor con ella.
Ahora se interesa por mí como persona, y estoy tratando de
hacer lo mismo con ella.

Para reflexionar
Al instruirme en lo que es la enfermedad de la familia,
compruebo que todos hemos quedado afectados. Cuando lo
acepto, empiezo a restablecer mis relaciones con la persona
no-alcohólica y con el resto de mi familia.

Entre el cerebro y el corazón hay unos cincuenta


centímetros, pero algunas veces son los centímetros de mayor
longitud que conozco. Cuando oigo una idea del programa,
pienso en ello y le doy vueltas en la cabeza unas cuantas veces.
Al rato, empiezo a captarla, pero sólo cuando la acepto se
convierte en parte de mi vida diaria.
Esto fue lo que me pasó cuando aprendí a desprenderme al
practicar el Primer Paso. Lo habían mencionado mucho en
las reuniones y comprendí su significado. Pude incluso
admitir que era incapaz ante el alcohol y que mi vida se había
vuelto ingobernable. Pero aunque lo admití, de allí no pasé.
Más tarde, después de repasar varías veces los Pasos, empecé
a aceptar el hecho de mi incapacidad ante el alcohol. Fue la
115) AGOSTO 31

clave que me ayudó a desprenderme, tanto del corazón como


del cerebro, y a soltar verdaderamente las riendas.
Para reflexionar
Es fácil ser un pensador del programa. A veces puedo
hasta impresionar a la gente con mi fantástico cerebro. Pero
cuando siento el programa de corazón es que puedo
aceptarlo como mi forma de vivir, porque yo vivo con el alma
en el corazón.
¡Hazlo con caima! es un gran lema para utilizarlo toaos los
días. Ayuda a tranquilizarnos cuando nos sentimos
frustrados. Podemos usarlo en el hogar» con nuestra familia,
en nuestras tareas escolares y hasta en nuestros quehaceres
diarios.
Un miembro de Alateen compartió en su grupo cómo el
emplea este lema cuando lava los platos. "El domingo en la
noche me toca lavar los platos* Somos ocho de familia y no
tenemos lavaplatos automático; pero hay platos del desayuno,
del almuerzo y de la cena, ¡cuánto trabajo! Platos y más
platos que parece que no se acabaran, y empiezo a sentirme
abrumada por el trabajo.
Entonces me acuerdo del lema ¡Hazlo con calma!, y me
voy calmando. Ordeno las cosas por separado y lavo primero
los vasos, después las tazas, mego los platos, cubiertos y ollas
«uno a la vez* Y de pronto, veo que ya acabé".
Para reflexionar
Cuando tengo algún trabajo grande que hacer, es fácil
desanimarse aun antes de emprenderlo. Pero cuando hago
una cosa a la vez, poquito a poco, el quehacer ya no parece
tan agobiante después de todo, y lo acabo sin ciarme cuenta.
El secreto de hacer las cosas es ¡nacerlo con calma!
Tenía la costumbre de reaccionar cada vez que alguien
quería provocar un pleito conmigo. Empezaba defendién-
dome a puñetazos, y con la boca, pero acababa confundido y
haciendo el ridiculo.
Ahora estoy aprendiendo a alejarme de los pleitos. Me
ayuda mucho confiar mi voluntad y mi vida al cuidado de mi
Poder Superior. Todas las mañanas practico el Tercer Paso y
tomo la siguiente decisión: Suelta las riendas y entrégaselas a
Dios. Esta resolución de soltar las riendas, determinará la
clase de día que lograré disfrutar. Si le doy a mi Poder
Superior el 50%, tendrá sólo la mitad de mí mismo para
obrar y así no puedo alcanzar resultados extraordinarios.
Pero si le doy el 100% de mí mismo, mi entrega total, creo
que me guiará en todo cuanto haga el resto del día,
especialmente en los momentos tensos, cuando sienta la
tentación de empezar a reaccionar otra vez.
Para reflexionar
Yo solo no puedo detenerme y dejar de reaccionar
cuando alguien me está provocando. Pero puedo lograrlo con
la ayuda de mi Poder Superior. Cuando estoy dispuesto a
soltar totalmente las riendas y a dejar que Dios me ayude,
puedo librarme de mi mal genio y calmarme.
En las reuniones he oído muchas, muchísimas veces, que
el alcoholismo es una enfermedad. Es posible que yo misma
se lo diga a otras personas, aunque en algunas ocasiones
todavía piense que el alcoholismo en mi familia es mi
enemigo.
Necesito Alateen para recordar que tal actitud realmente
me está perjudicando, y en esa forma nuestra situación
familiar no puede mejorar en nada. En vez de eso, tengo que
acordarme que el alcohólico es un enfermo. Cuando lo juzgo
o cuando trato de desquitarme con él, soy injusta porque no
se castiga a la gente por estar enferma.
Tengo que desprenderme del alcohólico y empezar a
ocuparme de mí. No es fácil hacerlo pues aún hay momentos
en que siento que él "está dispuesto a hacerme una mala
jugada" y entonces quiero devolverle golpe por golpe. Pero
con la ayuda del Primer Paso y de la Oración de la
Serenidad, estoy empezando a aceptar lo que escucho en las
reuniones sobre el "desprenderse con amor", y procuro
practicarlo en mi vida.

Para reflexionar
Con el alcohólico tengo que usar la consigna de "¡Afuera
las manos!", y concentrarme en mi progreso personal. Es
duro hacerlo, pero da buenos resultados cuando oigo a otras
personas hablar de sus experiencias con el desprendimiento y
cuando procuro adoptar sus ideas en mi situación. Hoy
116) AGOSTO 31

puedo enfrentarme a mis problemas cambiando mi manera


de pensar respecto al alcohólico y dejar que él mismo se
ocupe de sus problemas mientras yo me ocupo de los míos.
SEPTIEMBRE 9 (117

Cuando practiqué el Cuarto Paso no me fue fácil admitir


que tenía algunas fallas. Quería olvidar algunas de ellas. Ni
siquiera quería admitirlas para mí mismo, pero tenía que ser
sincero.
Hice mi inventario y descubrí que tenía muchos defectos.
Pero había también un montón de cosas buenas. Esto me
estimuló e hizo que me enfrentara más fácilmente a mis
faltas.
Apenas admití mis defectos ante mí mismo, empecé a
ver en qué forma podía progresar como persona. Hice una
lista de defectos y comencé a trabajar en ellos, uno a la vez,
un poco cada día.
Para reflexionar
Reconozco que tengo muchas faltas, pero en mí también
hay muchas cosas buenas. Hacer un inventario sincero me
presenta ambos aspectos. Cuando examino las cosas
positivas que hay en mí, me es más fácil enfrentarme a las
negativas y hacer algo hoy por mejorar yo mismo.
Tenía por costumbre ser extremista. Si todo iba bien, me
creía perfecto. No podía equivocarme; era el mejor en todo y
tenía soluciones para todo. Pero si las cosas se ponian difíciles,
creía que algo andaba mal en mí y no podía atinar a nada ni
podía darle respuestas a nadie.
Por el tiempo en que llegué a la hermandad, estaba
agotado de actuar como un yoyo. Con el programa empecé a
hallar el justo medio en mi vida. Aprendí a aceptarme -lo
bueno y lo malo- y a notar que lo que pase fuera de mí no
tiene por qué determinar la clase de persona que soy.
Tengo días buenos y malos. Soy buenísimo para hacer
ciertas cosas y terrible para otras. Tengo respuestas para
algunas personas, pero casi siempre soy yo el que pregunta.
Gracias a todo esto sé que no soy ni perfecto ni mentecato.
Me encuentro más bien en el medio y esto hace que me sienta
más a gusto que antes.
Para reflexionar
Muchos de los altibajos en mi vida son naturales. En vez
de dejar que me arrastren de arriba para abajo, trataré de
pisar terreno firme. Hallar el justo medio entre ambos
extremos me ayudará a recordar que soy una buena persona
a pesar de lo que ocurra a mi alrededor.
Para mí no es fácil perdonar, especialmente si tengo
algunos grandes resentimientos. Pero si acepto el alcoholismo
como una enfermedad, puedo entender que la gente haga
ciertas cosas porque son enfermos. Al comprenderlo, puedo
empezar a librarme de algunos de mis resentimientos.
Deseo que me perdonen mis errores; por tal razón tam-
bién necesito aprender a perdonar a los demás. Esto puede
ser material para mi Séptimo Paso. Cuando le pida a mi
Poder Superior que me perdone, también puedo pedirle que
me ayude a perdonar.
Perdonar al alcohólico y a otras personas no es algo que yo
pueda hacer sólo con palabras. El perdón tiene que brotar
del corazón. Cuando esto sucede, puedo desprenderme de
mis resentimientos y seguir mejorando mis relaciones.
Para reflexionar
No quiero que otros me guarden rencor, por eso a mí me
toca desprenderme de mis malos sentimientos hacia ellos. El
Séptimo Paso es un buen punto de partida. Al pedirle a Dios
que me perdone los errores que he cometido, esto me ayuda
a perdonar los que otros han cometido contra mí. Cuando
perdono a otras personas, esto me ayuda a enfrentarme a
mis resentimientos.
Me beneficio mucho de asistir a las reuniones. Cuando
tengo un problema en la escuela, sé que puedo acudir a mis
padres para que me aconsejen, pero que ellos hace mucho
tiempo que dejaron la escuela y que realmente no pueden
identificarse conmigo.
Mis amigos Alateen sí pueden. Por lo general, me ayudan a
practicar el programa para poder solucionar el problema.
Pero en caso de que nadie supiera de verdad qué hacer, con
sólo hablar del asunto me siento mejor. Esto me ayuda a
tener mucha más confianza en la escuela. Ahora, cuando
tenemos debates, puedo participar muy a gusto, en vez de
quedarme sentado escuchando a los demás.
Para reflexionar
Platicar con mis amigos Alateen de muchos temas me ha
ayudado a tomar la palabra en la escuela. Cuando tengo un
problema, recurro a la gente que comprende -los miembros
Alateen-, sabiendo que me orientarán hacia aquellos
aspectos del programa que pueden ayudarme a resolver mi
problema.
SEPTIEMBRE 9 (118

El Noveno Paso es la acción que sigue a los planes que


hicimos en el Octavo Paso para hacer rectificaciones.
Empezamos a actuar y a tratar de disculpamos por los
errores cometidos en nuestras relaciones con la gente.
Cuando sale a colación el pasado, pedimos perdón y después
procuramos evidenciar en nuestras acciones que
verdaderamente hemos cambiado.
No siempre puede uno disculparse. Es posible que la
gente haya fallecido o se haya cambiado de domicilio; a veces
sólo ofenderíamos a la gente con tal de sentirnos mejor. En
tales casos se hace lo que se puede, y luego empezamos a vivir
el día de hoy con un cariño especial por aquellas personas
que estimamos importantes.
Podrán percibir por nuestras acciones que sí nos intere-
samos por ellos.
Para reflexionr
El Noveno Paso me ayuda a disculparme ante las per-
sonas a quienes he lastimado. Puedo enfrentarme a mis
errores, desecharlos después, y procurar vivir una nueva
vida dedicándome al programa.
Antes de Alateen había adoptado una actitud perjudicial
tocante a muchas cosas. No me importaba lo que hacía ni lo
que decía a otras personas, especialmente a mi familia y a
mis amigos. A veces los trataba como si fueran unos
mentecatos.
Ahora noto que hay otras personas que me tratan en la
misma forma en que yo las trato. Si quiero que cambien las
cosas, de mí depende cambiar de actitud. Me sentiría mucho
más feliz conmigo mismo si así lo hiciera, y en esta forma
sería más fácil que la gente se llevara bien conmigo.
Para reflexionar
En vez de pensar en criticar a los demás, hoy me con-
centraré en mejorar mi vida. Voy á procurar no lastimar a la
gente con lo que yo diga o haga. Algunas veces debería
morderme la lengua, pues sé que las cosas mejorarían
muchísimo si me acordara de no meterme en lo que no me
importa, y practicar el lema Vive y deja vivir.
Por las mañanas, camino de la escuela, dispongo de
mucho tiempo para pensar. Trato de planear mi día; todas
las cosas buenas que puedo hacer y todas las cosas malas que
no quiero hacer.
Esta es para mí una buena oportunidad para practicar el
Undécimo Paso. Trato de "enchufar" con mi Poder
Superior. Pienso en todas las cosas buenas queme ha dado.
Recuerdo en el estado que me encontraba cuando llegué a
Alateen y le doy las gracias porque ya no soy así. Después
procuro quedarme callada para escuchar lo que El me va
diciendo.
Hablar a mi Poder Superior y escucharlo cuando voy
camino de la escuela realmente me "eleva". Me conduce por
el buen camino, y así franqueo las puertas de un magnífico
estado de ánimo, y dispuesta para empezar el día.
Para reflexionar
El ponerme en contacto con mi Poder Superior puede
ocurrir donde sea y a la hora que sea, y cuando lo intento por
la mañana, me deja dispuesta para todo el día. Darle las
gracias y pedir Su ayuda, me recuerda que El es la fuerza
que me sostiene en todo lo que haga hoy.
Cierta noche, mi padre regresó a la casa después de su
reunión Al-Anon, y puso unos folletos en la meca de la
cocina. Por curiosidad empecé a imaginarme qué serían, y
me los llevé para verlos.
Era literatura Alateen. Inmediatamente me quedé
intrigado. Me dio el mensaje de que no estaba solo, que otros
habían pasado por lo mismo que yo. Al leer la palabra
"comprendemos" decidí ir para comprobar si era cierto
todo aquello.
A la semana siguiente asistí a mi primera reunión
Alateen. Al principio no me sentí muy a gusto con esos
desconocidos. Pero cuando empezaron a franquearse y a
compartir conmigo, terminé por conocerlos a todos y cada
uno, y ahora somos grandes amigos. Ahora sé que es
definitivamente verdadero lo que leí: de verdad que
comprenden.
Para reflexionar
La literatura es 'la voz de la hermandad" en letra impresa.
Difunde el mensaje de esperanza y comprensión. Cuando
asisto a las sesiones oigo una y otra vez el mismo mensaje. Es
puesto en acción por personas que, como yo, se interesan
verdaderamente por tos demás.
Este verano jugué mucho el golf. Aveces lo hacía bien, pero
casi todo el tiempo me sentía frustrada al no lograr
SEPTIEMBRE 9 (119

concentrarme en el juego. Por fin me di cuenta de que no


podría perfeccionar mis jugadas si no lo practicaba todos los
días a fin de alcanzar la maestría requerida.
Esto se asemeja mucho a la frase final del Duodécimo
Paso. Practicar los principios del programa en todas mis
acciones puede ejercer una gran diferencia en mi vida. Si
estoy dispuesta a intentarlo, muchos de los altibajos de cada
día serían reemplazados por un firme deseo de crecer.
Para reflexionar
Para cualquier cosa que se desee hacer bien, es importante
practicar diariamente. ¿Por qué habría de ser diferente con
mi programa? Si pongo interés de mi parte en todo lo que
haga, empezaré a emparejar los altibajos de mi vida.
Los recién llegados a Alateen generalmente se sienten
abandonados en un mundo hostil, ahogados en un mar de
dificultades. No se dan cuenta de que ellos mismos han
creado muchos de sus problemas. Todos nosotros hemos de
instruirnos para saber qué es la enfermedad del alcoholismo,
antes de que podamos empezar a sentir paz y tranquilidad
en sí mismos. Esto requiere tiempo.
Los recién llegados son gente especial. Cuando llegan a
Alateen enriquecen nuestra vida y se enriquecen ellos
mismos. Pero no hay que acelerarse demasiado a saturar con
muchos consejos a estas personas atormentadas. Lo que ellos
pueden utilizar al principio es nuestra cordial bienvenida y
algunas palabras de esperanza. Esto los hará regresar. Los
pensamientos profundos pueden venir después, en el
momento oportuno.
Para reflexionar
Cuando yo era un recién llegado, lo que me hizo querer
regresar a Alateen fueron los sentimientos más que las
palabras. El cariño y la aceptación me manifestaron que ese
era mi lugar. Hoy aprovecharé el tiempo para darle la
bienvenida a alguien nuevo en la hermandad. Esto nos
ayudará a ambos a recordar que pertenecemos a un grupo
de gente muy especial.
Aveces nos preocupamos tanto por la unidad del grupo
que se nos olvida lo que realmente significa la Primera
tradición. Nos confabulamos contra gente cuya opinión
difiere de la del resto del grupo, y tratamos dé forzarlos a que
cambien su forma de pensar, o sencillamente ignoramos sus
ideas.
Unidad no significa que todos tengamos que pensar de la
misma manera. Una de las cosas fundamentales de Alateen
es que todos nosotros gozamos del derecho de expresar lo
que pensamos y sentimos. Esto es parte de lo que hace que
nuestro grupo permanezca firme y unido.
Cuando la gente tiene opiniones diferentes, no hay que
discutir con ellos. Hay que escucharlos y examinar con todo
cuidado lo que están diciendo. Después, cuando todos
nosotros hayamos tenido la oportunidad de compartir
nuestras ideas, votamos como queremos y seguimos la
decisión de la mayoría. Esto es lo que guía al grupo. Los que
opinan en forma diferente ya lo han manifestado así, y todos
juntos empezamos a trabajar para que el grupo se conserve
unido.
Para reflexionar
Quiero que otras personas respeten mi opinión y que yo
respete la de ellos. Comprender nuestras diferencias puede
proporcionar verdadera fortaleza. En Alateen eso se llama
unidad, la cual surge cuando comprendemos y practicamos
la Primera Tradición.
¿Abandonar el hogar? ¿Verdad que no es nada fácil
tomar una decisión como ésta? Es duro tomar decisiones que
afecten el resto de nuestra vida. A veces tenemos que optar
por decisiones difíciles, por ejemplo, en dónde vivir, con
quién vivir, en dónde estar, en dónde trabajar.
Necesitamos tener confianza en nosotros mismos y poseer
una voluntad de hierro. El programa puede ayudarnos.
Podemos fiarnos de nuestro Poder Superior y de nuestro
grupo Alateen. Al compartir un problema, éste se reduce a la
mitad.
Nadie ha dicho que crecer signifique navegar en aguas
pacíficas, pero es más fácil cuando contamos con un Poder
Superior y con nuestros amigos Alateen para que nos
ayuden.
Para reflexionar
La vida está llena de opciones, especialmente cuando estoy
dispuesto a lanzarme al mundo. No es fácil que yo adopte
mis propias decisiones. El programa me da un Poder
superior y un magnífico grupo de amigos. Hoy les pediré su
ayuda.
SEPTIEMBRE 9 (120

Me había acostumbrado a excusarme por todo: por no


haber hecho mi tarea escolar, por no devolver el dinero que
había pedido prestado, por no haber llegado a tiempo a la
casa. Dar excusas era la forma que usaba para zafarme de
problemas; pero cuando lo hacía me sentía culpable.
Persistían largo tiempo en mi conciencia, pues era como
decir una mentira.
Ahora estoy aprendiendo a ser sincera. En vez de tratar
de justificarme estoy procurando decir las cosas como son.
Ya dejé de estar inventando cosas y ahora me siento mucho
mejor porque ya no me escondo detrás de mis excusas.
Para reflexionar
Estar excusándose es ser egoísta. Cuando lo hago sólo
trato de encubrirme. Alateen me dice que hay que ser
sincera -ser responsable de mis acciones. Decir la verdad
requiere menos energía, y funciona mejor, en beneficio de
todos los que estamos involucrados.
Antes de Alateen tenía miedo de vivir.
Probablemente me hubiera suicidado, pero fabriqué
una muralla a mi alrededor para que no me
lastimara, y muy rara vez salía de allí. Sencillamente
existía de un día al otro. Vivía de esa forma porque
así me sentía segura.
Alateen me amaba y me devolvía la vida. Me daba
el valor para arriesgarme y sacar la cabeza por
encima de la muralla. Descubrí que la vida no era tan
espantosa como creía.
El Duodécimo Paso le dio a mi vida un verdadero
objetivo, y la Oración de la Serenidad me infundió
un profundo amor por mi Poder Superior, el cual
guía mi vida. Ahora sé que la vida es para vivirla, y
trato de vivir cada día a plenitud.

Para reflexionar
Cuando vivo una vida resguardada, pierdo el
completo sentido de lo que es vivir. Alateen me ayuda
a salirme del "carapacho" y a descubrir lo que la
vida es en realidad. Hay muchas cosas que aprender,
y con la ayuda del programa tendré el valor para
vivir la vida cada día.
Soy especialista en dejar las cosas para después. Me
encanta posponer las cosas tanto como pueda. A veces el
dejar las cosas hasta que es demasiado tarde, me crea
problemas: una tarea escolar , algún quehacer importante en
casa, o telefonear a un amigo en especial.
Cuando tengo lamente absorta en las responsabilidades de
ayer, no me puedo concentrar en el día de hoy. Alateen es un
programa para hoy. Si quiero sacarle el jugo, tengo que
dejar de atascarme y seguir adelante. Leer el folleto "Alateen
Sólo por Hoy" es un buen punto de partida. Su mensaje es
tan sencillo como aquel viejo refrán: "No dejes para mañana
lo que puedes hacer hoy".
Para reflexionar
Si tengo alguna carta que escribir, un libro que leer, una
tarea escolar pendiente, o alguna limpieza por hacer, lo haré
ahora, en vez de dejarlo para más tarde. Tratar de vivir Sólo
por Hoy, me ahorrará muchas preocupaciones y
frustraciones, y hará del día de hoy un día mejor.
¿Para qué tengo que ir a Alateen? ¿Por qué el alcohólico
tema que ser mi papá y no el padre de otra persona?
A veces siento enojo y autocompasión porque mi padre
tiene un problema de bebida y creo que los demás tienen una
vida más llevadera que la mía. Entonces me acuerdo que lo
primero que me trajo a Alateen fue el hecho de tener un
padre alcohólico. El programa me dio la oportunidad de
descubrir una forma de vivir que puede ayudarme a través
de los años de mi adolescencia, y eso es algo de lo cual me
siento agradecida.
Para reflexionar
En vez de quejarme porque convivo con un alcohólico,
trataré de aceptar el hecho y pensar que ello es una opor-
tunidad para hacer algo por mi vida. No todo adolescente
tiene la oportunidad de usar este programa para resolver sus
problemas diarios. Estoy agradecida de contarme entre los
afortunados.
Si quiero que mi Poder Superior me ayude, tengo que estar
dispuesta a hacer algún esfuerzo. Confío en que El me dé los
instrumentos, pero tengo que estar a la expectativa de las
oportunidades para utilizarlos.
SEPTIEMBRE 9 (121

Cuando tengo un problema acudo a mi Poder Superior.


Rezo, después espero, pero muchas veces la respuesta no
llega y tengo que tomar alguna desición. Puedo ir a una
sesión y empezar a hablar de lo que tengo en la mente. O
bien, puedo platicar con mi madrina para buscar la forma
en que puedo resolver lo que me está molestando. Y, sin
darme cuenta, ya encontré algunas soluciones adecuadas al
problema, y estoy en vía de resolverlo.
Para reflexionar
No puedo rezar simplemente y esperar a obener las
soluciones de inmediato. Pero puedo buscarlas en los
miembros de mi grupo Alateen, en la literatura que leo, y en
otros muchos lugares. La clave es empezar a buscar. No
todas las respuestas que recibo serán adecuadas para mí,
pero si continúo indagando es probable que encuentre lo que
necesito para solucionar cualquier problema que esté
afrontando.
¿Cómo puedo obsequiarle a otros el don del amor si yo
mismo no me amo? La clave es la aceptación. Cuando me
acepte como soy, nuevamente podré empezar a sentirme
satisfecho de mí mismo. Se trata de una forma especial de
libertad que va creciendo en la medida en que esté dispuesto
a examinarme con sinceridad y a cambiar para mejorar.
El hecho de señarme satisfecho me permite poder amar a
los demás. Puedo aceptarlos y dejar que aprendan de sus
propios errores. Esto no significa que no pueda hablar con
ellos o ayudarlos, sino que tengo que permitirles decidir por
sí mismo lo que sea mejor para ellos. Asi, mientras gozan de
su libertad, yo sigo gozando de la mía, y en esta forma el
amor podrá seguir aumentando entre nosotros.
El verdadero amor brota cuando las personas se sienten
en libertad de ser ellas mismas. Esto es algo hermoso que se
inicia con la aceptación, y que sigue creciendo en la medida
en que practique el programa y b viva en mis relaciones con
los demás.
Para reflexionar
Cuando me permita la libertad de ser yo mismo, podré
obsequiarla a los demás. Esto es lo que se llama aceptación, y
es la clave para amar, en el programa que abre la puerta al
amor de sí mismo y me permite compartir ese amor con la
gente que me rodea.
Mi padre murió borracho. Durarle mucho tiempo no lo
había visto, pero cuando me enteré, me dolió la noticia. Al
principio, sentí compasión por él por todo lo que había
sufrido, pero después le odié por habernos abandonado.
Entonces recordé el Primer Paso y traté de serenarme en vez
de sentirme agraviado. No fue fácil desprenderme, pero al
pensar en el Paso supe que podía aceptar el hecho de que
algunos alcohólicos mueren sin lograr la sobriedad.
Ahora que ha muerto mi papá, ¿todavía necesito del
programa? Claro que sí, más que nunca. Mi vida no ha
terminado. De hecho, apenas empieza, y sé que cada día voy
a necesitar el programa para que mi vida marche en
dirección positiva.
Para reflexionar
Aunque ya no vivo con un alcohólico, aún pertenezco a
Alateen, porque es un programa para mí. Es mi forma de
vida. Sin él estaría luchando por "encontrar de nuevo el
camino". Pero con la ayuda de los Pasos y del resto del
programa, puedo enfrentarme a las situaciones más
dolorosas y seguir viviendo cada día.
Siempre andaba en busca de las malas cualidades de la
gente. Las juzgaba por b que aparentaban, con el resultado
de que jamás tuve amigos. En la escuela, cuando llegaba
gente nueva al salón de clase, me bastaba con echarles un
vistazo para fijarme en todo k> malo. De inmediato decidía
no juntarme con ellos. Esto pasaba antes de venir a Alateen.
Ahora, con la ayuda del programa, estoy aprendiendo a
ser más tolerante con los demás. Para mí k personalidad
significa más que la apariencia exterior, lo que cuenta es su
interior. Trato de observar las buenas cualidades de la gente
en vez de fijarme en las malas. Hoy estoy descubriendo que
muchas de las personas a quienes evitaba son realmente
buena gente. De hecho, algunos de ellos son ahora buenos
amigos nubs.
Pava reflexionar
El viejo dicho: "no hay que juzgar según las apariencias"
es bueno para mí. Quiero que se me acepte como soy, de
modo que debo estar dispuesto a hacer k> mismo por los
demás. Esto significa mirar más allá de b exterior y conocer
por dentro a las personas. Al ser menos críticos con los
demás y practicando el programa el día de hoy, descubriré lo
SEPTIEMBRE 9 (122

fácil que es hacerse de amigos y que la gente es más amistosa


conmigo.
Cuando llegué a Alateen por primera vez no creía en un
Poder Superior. No podía entender cómo podía existir
alguien que fuera tan cruel para ponerme en la cíase de vida
que estaba viviendo. Como me sentía llena de temor y no
confiaba en nadie, me encerré en mi pequeño mundo,
enteramente aislada de todos.
Con el Segundo Paso vi que sí había ayuda para mí. Me
mantuve receptiva y comencé a comprender que no había
que echarle la culpa a nadie por mi situación en el hogar.
Poco a poco empecé a creer en un Poder Superior a mí, el
cual lentamente, fue poniendo un poco de equilibrio en mi
vida.
Claro que sí existe mi Poder Superior, y sé que cada vez
que necesito ayuda cuento con El. La prudencia y
comprensión del programa son también una gran ayuda.
Aún sigo empeñada en recobrar el sano juicio. Para mí esto
significa simplemente estar satisfecha de mí misma.
Para reflexionar
Antes pensaba que mi Poder Superior quería lo peor
para mí. Ahora reconozco que sí quiere ayudarme. Hoy
cuento con esa ayuda, si la pido. La encontraré en el Segundo
Paso y en el cariño de mis amigos Alateen.
Verdaderamente estoy tratando de cambiar, pero a veces
pretendo hacer demasiadas cosas juntas. Acabo
autocompadeciéndome y me cuesta mucho quitarme ese mal
humor.
Necesito hacer las cosas Un día a la vez y recordar que
este día me pertenece. Nadie en el mundo dispone de un día
como el mío. La forma en que lo emplee depende de mí.
Puedo arruinarlo con pensamientos negativos, o poner en él
pensamientos felices y transformarlo en un día agradable.
Si mis problemas me parecen enormes para solucionarlos,
le pediré a mi Poder Superior que me ayude a resolverlos. Ni
siquiera tengo que explicárselo todo. El sabe lo que estoy
pensando y lo que más me conviene.
Para reflexionar
Cuando me extralimito me siento frustrado y soy presa
de la autocompasión. Mis problemas se convierten en
montañas, y me siento abrumado. La diferencia está en la
forma que los manejo. Cuando procuro vivir Un día a la
vez y le pido ayuda a mi Poder Superior, la carga es más
liviana. Me siento más a gusto conmigo mismo y puedo
transformar el día de hoy en algo verdaderamente especial.

Quiero cuidarme bien, pero es más fácil decirlo que


hacerlo. A veces es duro dejar de revivir los malos ratos de
mi vida. Y no siempre es fácil dejar de resentirse y echarle la
culpa a otros por lo que me sucede.
Nadie me pide que sostenga este terrible peso de malos
sentimientos. ¿Por qué lo hago? Al obstinarme en mis
preocupaciones lo único que consigo es lastimarme más.
Quizá necesite darme un trato especial: reírme con ganas.
Posiblemente no me sienta con muchas ganas de reír, pero si
trato de añadirle un poco de buen humor a mis problemas
quizá logre un efecto sorprendente en mi actitud. Puede que
el daño desaparezca y me ayude a llegar más rápidamente al
fondo del problema.
Para reflexionar
Cuando tengo un problema, nada parece sor muy
divertido. Pero en ciertas ocasiones mi mayor problema
consiste en tomar las cosas demasiado en serio. Una pizca de
buen humor podría ser precisamente lo que necesito para
encontrar la forma de solucionar mis dificultades. Esto
puede levantarme el ánimo y darme una nueva perspectiva
de lo que por tanto tiempo me ha estado deprimiendo.
A veces sigo odiando a la alcohólica. Como sigue
tomando, no puedo hacer nada. Tengo que ocuparme de mis
hermanos en la casa, de modo que no puedo
comprometerme con nada de la escuela. No tengo amigos, y
los maestros siempre están detrás de mi porque no puedo
hacer las tareas. Hay días en que quisiera empacar todo e
irme. Lo que quiero realmente es disponer de un poco de
tiempo para mí.
Me acuerdo entonces de mi grupo Alateen. Lo considero
como un hogar lejos del mío; estos amigos sí me
SEPTIEMBRE 9 (123

comprenden. Cuando no puedo salir de la casa, se ponen en


comunicación conmigo. Me aceptan, y desean ayudarme. El
hecho de que se preocupen por mí hace que yo desee
profundizar en el programa y empezar a practicar los Pasos.
Cuando logro hacer esto, parte de este odio desaparece. Me
reservo un poco de tiempo, llamo a mi madrina, y me
empeño en cambiar de actitud.
Para reflexionar
Es fácil resentirme cuando estoy deprimida por todas mis
responsabilidades en casa. Pero ¿qué salgo ganando con
esto? Al resentirme, soy la única que se siente desdichada. Al
estar en contacto con mis amigos de la 'hermandad, se me
aligera un poco la carga que llevo encima. Por consiguiente,
mucha de la energía que empleaba en mis resentimientos
puedo utilizarla ahora para ser feliz.

A veces pienso que otros son mejores que yo. llenen cosas
que yo no tengo, y además una suerte estupenda.
Cuando me pongo a cavilar en lo que no tengo, me siento
inferior. Empiezo a deprimirme y a sentirme celoso de otras
personas.
Alateen me hace reconocer lo mucho que tengo que
agradecer cuando observo la "buena" columna de mi
inventario y doy gracias a mi Poder Superior por todos los
dones que me ha otorgado, es difícil sentir celos. Siempre
habrá gente que tenga mejores cosas que yo, pero nadie
podrá quitarme lo bueno que hay en mi interior.
Para reflexionar
No puedo sentir celos y agradecimiento al mismo tiempo.
En vez de compararme hoy con otras personas, voy a
sentirme agradecido por todo lo que Alateen me ha dado, y a
reconocer que soy una buena persona. Mientras más respeto
tenga por mí mismo, más fácil me será aceptar las cosas
buenas en la vida de otras personas.
Cuando éramos pequeños y tratábamos de caminar,
errtrjezábamos dando el primer paso. También en Alateen
tenemos que dar pasos, pero tenemos que practicar el
Primero, antes de continuar con el resto de k» Pasos. Esto es
tan importante como cuando empezamos a caminar, pues
demuestra que estamos tratando de modificar nuestra forma
de pensar. Nuestra vida es un desastre, pues hemos estado
tan urgidos por resolver los problemas del alcohólico, que ya
no nos queda tiempo para los nuestros. Ahora admitimos
que somos incapaces ante el alcohol; no podemos hacer nada
para cambiar al alcohólico ni a nadie, pero sí podemos
empezar a hacer algo por nosotros mismos.
A veces es difícil dar el Primer Paso. Si damos un traspié,
ya no nos duele levantarnos, "sacudirnos el polvo" y
empezar otra vez. Cuando comenzarnos a aceptar el
alcoholismo como una enfermedad y a admitir que nuestra
vida necesita cambiar, se abre ante nosotros un nuevo
mundo: el mundo de Alateen. Es nuestro primer paso en el
camino que nos conduce a una mejor forma de vivir.
Para reflexionar
Para mí el programa no tendrá mucho sentido sino
cuando dé el Primer Paso. Cuando deje de concentrarme en
los problemas del alcohólico y empiece a hacer algo por mi
vida, se me abrirán las puertas hacia una nueva forma de
vida.
Es bueno que adopte normas elevadas, pero tengo que ser
realista. Cuando espero mucho de mí mismo, quedo
frustrado. Creo que soy una especie de superpersona que de
la noche a la mañana puede resolver todos los problemas de
la vida.
Cuando me siento superpersona empiezo a esperar
demasiado de otra gente. Tengo para ellos grandes planes,
pero cuando no dan la talla, me siento deprimido y enojado.
Alateen me muestra la forma de aspirar a cosas
superiores y, al mismo tiempo recordar el lema ¡Hazlo con
calma! Empiezo a observar atentamente lo que he planeado
para mí, y veo que el programa me está ayudando a
relajarme y a ser un poco más realista con lo que espero de
mí mismo y déla gente.
Para reflexionar
A veces tengo que conformarme con menos de lo que
hubiera querido aceptar . Hoy no voy a esperar demasiado
de nadie ni siquiera de mí mismo. Voy a tomar las cosas con
calma y fijarme metas un poco más accesibles para que
pueda disfrutar de lo que esté haciendo.
SEPTIEMBRE 9 (124

Cuando hice mi inventarío por primera vez, fue


superficialmente, olvidándome de todo lo demás. Fui todo lo
sincero que pude haber sido en aquel momento, pero rozar la
superficie fue tan solo el principio. Oportunamente, aprendí
a escudriñar a mayor profundidad. Fue como si el agua me
hubiera llegado a las rodillas en vez de mojarme apenas la
punta de los pies. Al crecer en el programa, esto me dio el
valor de examinarme para ver quién era yo en realidad.
Ahora, cada vez que me encuentro con algo que me está
mortificando -por ejemplo, si ando buscando pleito-, me
detengo un momento y me pregunto: "¿Qué estoy naciendo
para provocar esta pelea? ¿Qué es lo que me hace sentir y
obrar así?" Sencillamente, tomo lo que necesito en aquella
ocasión, en lugar de seleccionarlo para hacer de inmediato
todo un inventario. Al actuar en esta forma, descubro que
me es más fácil enfrentarme a mis defectos de carácter y que
soy más sincero conmigo mismo.
Para reflexionar
Hacer un inventarío es algo más que "arañar la
superficie". Exige examinarme más a fondo. Necesito mucho
valor para hacerlo. Puedo sentarme y acabarlo de un tirón,
pero a veces se me facilita hacerlo poquito a poco. No
importa la forma en que lo haga; la clave es ser sincero. Esto
me ayudará a afrontar la verdad de mí mismo y a aceptar la
responsabilidad de mis acciones.

"¡Ese no es mi problema, es problema del alcohólico!"


¿Cuántas veces hemos oído esa frase en labios del recién
llegado? Quizá también nosotros la hayamos pronunciado.
Pero después de sentimos atrapados en la lucha que libran
nuestros padres, y de observar en el seno de nuestra familia,
en qué forma el amor se transforma en odio, compréndanos
que el problema sí es nuestro, y no sólo del alcohólico.
Cuando en Alateen nos enteramos de que el alcoholismo es
una enfermedad de la familia, esto adquiere un sentido muy
amplio. Qué alivio enteramos de que hay una razón por la
forma en que nos sentimos acerca de las cosas.
Toda nuestra familia ha sido afectada por el alcoholismo.
Ahora, con el programa, podemos prestar ayuda, al
concentrarnos en nuestra recuperación personal.
Para reflexionar
Formo parte de una familia que ha sido afectada por el
alcoholismo. Lo mejor que puedo hacer por mí es practicar
cada día el programa. A medida que voy 'mejorando", mi
cambio de actitud, definitivamente, podría ayudar a otros en
mi familia, incluyendo al alcohólico.
Los miembros Alateen son gente especial, porque:

Siempre me ayudan con mis problemas.


Me escuchan cuando tengo necesidad de hablar,
Me aceptan como soy,
Tratan de ayudarme a comprender el alcoholismo,
Me dan ánimo, al interesarse por mí,
Se alegran de estar conmigo,
Se fijan en mí y me recuerdan que también yo soy
alguien especial.

Para reflexionar.
El cariño y la amistad en Alataeen no se encuentran
en cualquier grupo de adolescentes. Siento que me
aceptan, que me necesitan y que soy importante para
otros. Los Alateen me han ayudado a lograr un
cambio radical en mi vida, pues se preocupan por
uno.

A veces mis papas me dan la impresión de que son muy


anticuados en su forma de pensar. Yo estoy creciendo, pero
SEPTIEMBRE 9 (125

todavía me siguen tratando como si fuera un chiquillo. Me


gustaría que abrieran los ojos para darse cuenta de que
estamos viviendo en el siglo XX.
En un tiempo, sentimientos como éstos, hicieron que me
fuera difícil amar a mis padres; pero ahora el programa me
está ayudando a ver que esto es algo natural del crecimiento.
Estoy aprendiendo a respetar las diferencias que existen
entre nosotros. No siempre estoy de acuerdo con sus ideas,
pero en lo más profundo de mi ser estoy convencido de que
quieren para mí lo mejor, y yo también quiero para ellos lo
mejor.
Una buena señal: en nuestras conversaciones, ya no hay
frases como 'Te voy a querer si... " o " Voy a quererte
cuando..." Creo que ahora estamos aprendiendo a amarnos
mutuamente a pesar de nuestras diferencias, y esto hace que
todos seamos mejores seres humanos.
Para reflexionar
No puedo esperar que mis papas ni nadie sean lo que yo
quiero que sean. Ellos son seres humanos, y merecen mi
respeto. No tienen que gustarme todas sus acciones, pero sí
puedo amarlos por lo que son, y permitir que eso sea la clave
en nuestras relaciones.
La honradez es algo que necesito practicar. Sin ello no me
sería posible confiar en nadie.
Me tomó mucho tiempo darme por vencido y ser honrado
conmigo mismo; pero apenas lo hice, empecé a sacar un gran
provecho de Alateen. Me acepté tal y como realmente era.
Tuve confianza en mí mismo para hacer ciertas cosas, y tuve
más fe en mí mismo como persona.
Ser honrado conmigo mismo también me ayuda a ser
más honrado con otras personas. Ellas confían en mí y yo
confío en ellas. En Alateen nos franqueamos mutuamente,
compartimos nuestros sentimientos íntimos, y empezamos a
cimentar algunas amistades sólidas.
Para reflexionar
Las mentiras inocentes tienen la facultad de aumentar
hasta ensombrecer la confianza verdadera. Ser honrado
corta todo esto de raíz. Alateen me enseña a ser honrado.
Mientras más honrado sea hoy, me será más fácil confiar en
mí mismo y en los demás, a medida que voy creciendo en el
programa.
A veces hay descofi£rol en nuestras reuniones. Algunos
tienen ganas de perder el tiempo en tonterías y convierten la
reunión en una hora social. Después cuando al fin se
encarrila la reunión, unos cuantos acaparan la palabra y no
le dan a otros la oportunidad de compartir. Se va
acumulando en mí el resentimiento y quiero decir algo; pero
entonces me acuerdo que la Primera Tradición k> expresa
mejor que yo: "Nuestro bienestar común debiera tener la
preferencia; el progreso individual del mayor número
depende de la unión".
Bien sé que no soy la única persona que llegó aquí en
busca de ayuda; pero mi vida depende de lo que yo logre del
programa, y las reuniones son una parte importante del
mismo. Cuando algunos se salen por la tangente todos salen
perjudicados.
El grupo es sólo tan fuerte como sus más débiles
eslabones. Por consiguiente, todos nosotros necesitamos
prestar atención a la Primera Tradición. Si trabajamos
juntos, como lo enuncia la Tradición, podremos lograr que
nuestro grupo sea tal que todos nosotros podamos conseguir
la ayuda que necesitamos.
Para reflexionar
La ramera Tradición nos expone la historia de cada
sesión: Necesitamos estar juntos para prestarnos mutua
ayuda. Cuando practique seriamente esta Tradición, estaré
contribuyendo a mantener la unidad del grupo.
Cuando las diferencias interfieren en mi camino, es
fácil que mis antiguos sentimientos de temor e
inquietud se apoderen de mí. Acabo cansada y
deshecha. Ni siquiera puedo pensar debidamente.
Es aquí cuando necesito recordar el lema Suelta las
riendas y entrégaselas aDios. Si ya hice todo lo que pude
en determinada situación, puedo dejarle a Dios los
resultados y confiar en El para que me sostenga
hasta el ñnal del día. Si ayer y antier El lo ha hecho
así, ¿hoy por qué no?
Quizá las cosas no resulten como yo quiero, pero
es bueno saber que ocurrirán en la forma en que se
supone que deba ser.
SEPTIEMBRE 9 (126

Para reflexionar
Cuando ya hice todo lo posible por solucionar un
problema y no mejoran las cosas, sé que ha llegado el
momento de decir: "¡Oye Dios, esto depende de Ti!".
Si yo pongo los cimientos, El se ocupará de los
resultados finales.
Cuando un miembro me pide que yo sea su padrino, el
mensaje es claro y rotundo. Es como si me dijera: "Confío
enn". Durante mucho tiempo no pude tener confianza ni
siquiera en mí mismo; mucho menos podía esperar que la
gente confiara en mí De modo que el hecho de que yo sea
padrino de alguien significa mucho para mí.
Como padrino estoy aprendiendo a escuchar sin dar
consejos. Puedo tratar de entender lo que le está ocurriendo
a la otra persona y responder a lo que está sintiendo, sin
enredarme en sus amnistías. Puedo comparta sus penas y
sus temores, y decirle en qué forma el programa me ha
ayudado para enfrentarme a situaciones similares.
El padrinazgo es un upo de relación muy especial que trae
muchas recompensas. La mejor de todas es observar cómo
va creciendo la persona a medida que empieza a utilizar las
ideas de Alateen en su vida cotidiana.
Para reflexionar
Apadrinar a alguien es algo más que tener una simple
amistad con esa persona. Es la oportunidad de ayudarla
para que su vida cobre sentido; es una relación cimentada en
la confianza. Si estoy en disposición de aceptar esa confianza
y a compartir con aquella persona mi crecimiento en el
programa, podré obtener muchas recompensas especiales.
Cuando hice por primera vez mi inventario no logré una
buena puntuación. Me asusté tanto que me limité a encubrir
mis faltas y luego me olvidé de ellas.
En Alateen aprendí que al encontrar yo algo qué
criticarme, tenía que admitir que se trataba de un problema,
el cual había que resolver de inmediato. Comencé a
enfrentarme a las cosas a medida que iban surgiendo, en vez
de dejarlas para después, y en esa forma practiqué mi
Décimo Paso. Dejé de pensar que estaba mal en todo, ya que
sólo examinaba una sola cosa a la vez, en lugar de un montón
de cosas a un tiempo.
Necesité tiempo pero al fin hallé en mí algunas cualidades
positivas. Esto aumentó la confianza en mí mismo y me dio la
fortaleza para seguir en mi empeño cada día.
Para reflexionar
Cuando surge algo negativo, el Décimo Paso me ayuda
para ocuparme en ello inmediatamente, en vez de dejarlo
para después, y luego no poder deshacerme de tantos malos
pensamientos. Desde que aprendí a practicar el Décimo Paso
en mi vida cotidiana, me siento mucho más feliz.
Yo era de ese tipo de persona que a nadie le diría que
andaba enojada. Todo lo encerraba en mí, hasta que me
quemaba por dentro. En ciertas ocasiones, la presión era tan
intensa que sentía como si fuera a explotar. Luego, cuando
surgía alguna pequenez, me hacía estallar con la persona que
estuviera junto a mí provocando sentimientos muy
perjudiciales.
En Alateen estoy aprendiendo la forma de prevenir esto.
En vez de aplazar las cosas, procuro abordar a las personas
dkectarnente involucradas en la situación, y hablarles acerca
de la rabia que siento. Aveces grito, pero casi siempre puedo
hablar de las cosas ski tanto alboroto. Puedo ventilar las
cosas abiertamente. Parece que esto me está dando buenos
resultados, pues en mi interior ya no sufro tanto como antes.

Cuando me acostumbro a reprima* mis sentimientos, no


es fácil empezar a hablar de ellos, pero si puedo hacerlo,
ciertamente me ayuda. En vez de encerrar en mí la ira y el
resentinúento, puedo exteriorizarlos al hablar de eflos con
alguien para empezar a utilizarlos en una forma mas sana.
127) OCTUBRE 16

Estaba convencido de que en realidad a nadie le


importaba lo que me pasaba. No tenía amigos ni
nadie con quien hablar, y casi todo el tiempo, a
cualquier hora, mi mamá estaba afuera bebiendo.
Muchas veces me despertaba por la noche,
preocupado por lo que pudiera pasarme. Me sentía
solo y con un gran vacío en el alma. Poco después ya
no podía soportar seguir sufriendo, y por eso me
aislaba en una especie de confinamiento solitario.
Cierto día, vino a verme un muchacho a quien
había conocido en la escuela. Al principio traté de
evitarlo, pero cuando se puso a hablar de sí mismo
loescuché. Compartió conmigo lo que sentía al vivir
con un alcohólico y me platicó de cómo Alateen lo
había ayudado. Me pidió que fuera a algunas
reuniones con él. Me encontraba tan desesperado
que aquella misma noche me fui con él a la sesión.
Desde entonces he seguido yendo. Mamá no ha
mejorado mucho, pero yo sí. Ahora tengo algo con
que llenar ese vacío, y sé que no estaré solo nunca
más.

Para reflexionar
¡No estoy solo! Qué alivio decir esto y creerlo. El
programa satura los espacios vacíos de mi vida y me
brinda una razón para vivir. Una y otra vez, la gente
de la hermandad me recuerda que alguien
verdaderamente se preocupa por mí.
En realidad tomé muy * pecho hacer mis tareas escolares.
Lo único que querían mis padres era que yo sacara unas
calificaciones aceptables, pero mis expectativas eran
mayores. No estaba interesado en aprender nada, sólo quería
la aprobación de ellos. Esto, con el tiempo, se convirtió en mí
en una obsesión. Creía que el éxito en la escuela era lo único
que me daba categoría como persona* Necesitaba ser lo
mejor en todo. Con está clase de actitud me granjeé muchos
enemigos.
Ahora, cuando me pongo a recordar, me doy cuenta de
que en aquel entonces la vida era para mí como si llevara
puesta una camisa de fuerza. Pero con la ayuda de los Pasos
Cuarto y Quinto, estoy aprendiendo a no tomarme tan en
serio. Empiezo a notar que hay algo en mí más valioso que
los grados y las calificaciones y comienzo a sentirme
satisfecho conmigo mismo, aunque no siempre "sobresalgo
en la clase".
Para reflexionar
Ser bueno en algo me da a veces une sensación agradable.
Pero si me aferró á esto podría convertirlo en una especie de
"manto de seguridad". Es entonces cuando empiezo a
meterme en líos. El programa me ayuda a darme cuenta
que ser el mejor no lo significa todo, lo que realmente cuenta
es saber quién soy.
Durante mucho tiempo tuve fe en Dbs. Le pedía Su
ayuda, y El me la daba. Pero poco después empecé a sentir
que El ya no vivía de acuerdo a mis expectativas, así que me
puse al mando de las cosas. Tampoco esto me dio resultado
y tuve mis problemas de los que esperaba.
Cuando practiqué los Doces Pasos y las Doce Tradiciones,
descubrí un nuevo tipo de fe. Una Mdoble feH. Tengo fe en
mi Poder Superior, al reconocer que El me orienta cuando
lo necesito, y tengo fe en mí mismo, al saber que puedo
solucionar mis problemas con la ayuda de Dios.
Al concebir así la fe se ha abierto ante mí todo un nuevo
mundo de libertad y crecimiento. Los problemas ya no son
obstáculos, sino experiencias de aprendizaje que puedo
utilizar para ayudarme a crecer, Un día a ¡a vez.
Para reflexionar
128) OCTUBRE 16

El primer paso para resolver mis problemas es enfren-


tarme a ellos. A partir de esto necesito fe que me ayude a
elaborar un plan de acción. Cuando tengo fe en mi Poder
Superior y fe en mí mismo, mis problemas abrirán la
puerta hacia una vida mejor.
Vivir es crecer. Nosotros cambiamos a cada tic-tac del reloj.
En la actualidad no soy el mismo que cuando era joven. No
parezco el mismo y pienso y siento en forma diferente.
Desde entonces he aprendido mucho y puedo hacer muchas
más cosas. A veces creo que no estoy creciendo con la
debida ra-Soy realmente irnpaciente conmigo
mismo. Aminas. Necesito saberlo todo, tenerlo y
estar al mismo tiempo en todas partes.
Tampoco tengo mucha paciencia con los demás. Cuando
hacen exactamente k> que quiero, las cosas se resuelven
como creo que debiera ser.
Cuando me tomo tiempo para cavilar en esto, puedo
advertir que el ser impaciente interfiere con mi crecimiento.
Es posible que esté creciendo constantemente, pero sólo lo
demuestro cuando soy paciente conmigo mismo y con la
gente que me rodea.
Para reflexionar
Siempre estoy pidiéndole a los demás que me tengan
paciencia. Un dicho popular lo expresa cabalmente: Por
favor, ténganme paciencia, que Dios todavía no terminó su
obra conmigo". El programa me ensena a ser más paciente
conmigo y eso me ayuda a recordar que también otras
personas podrían estar por "terminar".
Muchas veces me siento como si estuviera totalmente
aislado con mis problemas, que soy diferente. En Alateen he
llegado a saber que la mejor forma de librarse de estos
sentimientos es compartiéndolos con otros miembros
Alateen.
Necesito encontrarme con alguien y hablarle de mis
sentimientos. Al expresar verbalmente mis pensamientos,
me doy cuenta de que no estoy solo, esta es una de las cosas
estupendas que Alateen puede darme.
Como no estoy acostumbrado a compartir con nadie mis
verdaderos sentimientos, se me hace difícil confiar en mis
amigos Alateen. Pero mientras más lo hago más fácil resulta
y más voy progresando. He comenzado a encontrar
soluciones para mis problemas y a notar que confiar en los
demás es una de las claves de mi felicidad en el programa.
Para reflexionar
Se me dificulta confiar en los demás a causa de mi
orgullo. No es fácil, pero si hablo de las cosas con mis amigos
Alateen descubriré que no estoy solo con mis problemas.
Hoy voy a confiar en otra persona y aprovecharé la
oportunidad de sentir algo de la serenidad que me brinda
este programa.
Alateen me ha dado la clase de libertad que siempre
anhelé. No tengo que dejarme llevar por resentimientos y
sentimientos de culpa, ni dejar que domine mis pen-
samientos, como ocurría en el pasado.
Hoy soy libre de los errores que cometí en el pasado,
puedo aprender de ellos para no repetirlos.
Me siento en libertad de "hablar abiertamente**. Cuan-
do me encuentro con mis amigos Alateen, puedo compartir
con ellos mis sentimientos, sin temor a que se burlen de mí o
de sentirme culpable por querer defenderme.
Ahora, con la ayuda del programa, me siento libre para
seguir creciendo.
Para reflexionar
Antes de Alateen me sentía como un prisionero. Guar-
daba herméticamente en mi interior todos mis malos
sentimientos y errores del pasado. Actualmente disfruto de
la libertad de librarme de ellos. Hoy soy una nueva persona
con la oportunidad de progresar y de hacer algo
constructivo con mi ayuda.
Todos nosotros pasamos por problemas y dificultades. A
veces sentimos pánico o dejamos que las cosas nos
129) OCTUBRE 16

exasperen. Es entonces cuando para apaciguarnos nece-


sitamos recordar el lema ¡Hazlo con calma!
Pero el lema no nos sugiere calmarnos al punto de
detenernos. Yo sí me detuve. Tenía varios quehaceres: lavar
platos, cuidar niños, tirar la basura, asear mi cuarto. Como
me disgustaba hacer esto, decía ¡Hazlo con calma! y me
olvidaba de hacer cualquier cosa. Esto me perjudicó pues
estaba usando el lema para evadir mis responsabilidades
para con mi familia, amigos y maestros. Me enteré de una
versión un poco más amplia, que me agradó más: "¡Hazlo
con calma ...pero hazlo!" Ahora puedo vivir la vida a un
ritmo más acompasado y seguir ejerciendo mis
responsabilidades para conmigo y para con las demás
personas.
Para reflexionar
El lema ¡Hazlo con calma! no me dice que me paralice.
Es un lema que implica acción. Hace que sea sensata y me
serene cuando estoy por reventar, al mismo tiempo que me
ayuda a progresar a un buen ritmo.
Traté de asistir a algunas reuniones de Al-Anon además
de mis sesiones regulares de Alateen, para tener una idea de
k> que me esperaba cuando se terminara mi tiempo en
Alateen. Al principio me asusté un poco, pero cuando los
miembros me dijeron que se sentían contentos de verme,
me sentí como en mi casa.
Semana a semana regresaba, y ahora tengo muchos
amigos Al-Anon. Algunos tienen bastante edad como para
ser mis abuelitos, pero nos comunicamos en una forma
sencilla y agradable: de persona a persona compartiendo
con sinceridad, igual que en Alateen. La edad no es ninguna
barrera, pues lo que nos une mutuamente es el programa.
Nos motiva a permanecer unidos al prestarnos mutua
ayuda para recuperarnos y crecer.
Para reflexionar
Ir a las reuniones de Al-Anon me ayuda a darme cuenta
de que hay un lugar para mí después de Alateen. Es una
forma buena de hallar nuevos amigos en la hermandad,
pero más que eso, Al-Anon es una continuación del gran
programa que he descubierto. Si ando en busca de más
cosas especiales que el programa me ha dado, Al-Anon es el
lugar que me corresponde.
A veces creo que si le dijera a la gente que me siento
satisfecho de mí, creerían que soy presumido. Pero si no
fuera así, ¿cómo podría esperar caerle bien a tos demás?
El que me guste como soy, no significa que crea lo
máximo o que sea mejor que cualquier otro. Sencillamente
quiere decir que estoy satisfecho por lo que Dios me ha
dado. Cuando me examine interiormente, encontraré la
evidencia: muchas buenas cualidades.
Gracias al programa puedo sentirme bien respecto a mí
y aceptarme como realmente soy.
Para reflexionar
¿Qué es lo que me agrada de mí mismo? Cuando hago
una pausa y me doy un vistazo, me doy cuenta de que estoy
lleno de buenas cualidades. Hay un dicho popular que reza
así: "Yo soy especial porque Dios no hace basura".
Vivo con un alcohólico. Sea que todavía beba o noy la
situación es demasiado difícil pora que yo pueda manejarla
sin ayuda. Necesito desprenderme del problema y no
permitir que me involucre emocionalmenfe. Pero del dicho
al hecho hay mucho trecho.
El programa puede proporcionarme la ayuda que nece-
sito. Voy a empezar con la Oración de la Serenidad.
También me ayudaran los Doce Pasos, las Tradiciones y los
lernas. Practicaré el programa en la mejor forma posible,
tratando de desprenderme de lo que me perjudica o me
disgusta.
Para reflexionar
Al desprenderme se me aclara la mente, y las cosas ya no
me afectan en "carne viva". Puedo relajarme y conducirme
con toda naturalidad. Hoy dejaré de concentrarme en todo
130) OCTUBRE 16

lo que me desagrada, y trataré de mantener mi mente en mi


fuente de ayuda: el programa.
El temor es algo que todos experimentamos en una u otra
forma. Puede ser temor a lo que vendrá mañana o temor a
los malos recuerdos de ayer.
Yo tenía tanto miedo al futuro y al pasado que no pocha
gozar el presente. Ahora estoy aprendiendo a enfrentar mis
temores utilizando el lema Un día a la vez. Esto me ayuda
ano atormentarme por los chas venideros y por los
recuerdos que pueden alterarse, recordando que noy es el
único día que puedo vivir. Empiezo a librarme de mis
temores y a usar el valor queme da el programa para lograr
algo bueno de este cha.
Para reflexionar
Cuando dejo que el temor del pasado o del futuro se
infiltren cautelosamente en mi vida, se me hacer difícil
practicar el programa hoy, en la mejor forma posible.
Recordar el lema Un día a la vez, pone las cosas en su
verdadera perspectiva, me da la oportunidad de afrontar
mis temores con valentía, y hace que casi todo me salga bien.
Creía que ya había admitido mi incapacidad ante el
alcoholismo de mi mache. Pero cuando empecé de nuevo a
reaccionar exageradamente por sus acciones, ya no estuve
tan segura. De hecho, comencé a dudar si de veras había
practicado el Primer Paso.
En una sesión Alateen sobre el Primer Paso, me di
cuenta de lo que ocurría. Yo había practicado el Primer
Paso apenas entré a Alateen. Pero recaí. Creí haberlo dado
perfectamente bien desde la primera vez, y creo que lo
olvidé. Descubrí que de esa forma no da buenos resultados.
Necesito practicar nuevamente el Primer Paso, y tendré
que seguir practicándolo en el futuro durante largo tiempo.
Me alegro de que así sea, pues ahora comprendo que no se
trata de algo que se hace sólo una vez y luego se olvida. Al
igual que el resto del programa, es para vivirlo y practicarlo
cada día.
Para reflexionar
No puedo dejar de pensar en el programa por el solo
hecho de haber practicado una vez los Pasos. Soy un ser
humano y estoy muy lejos de ser perfecto. Si quiero
saturarme" del programa tengo que seguir practicando
cada día estos pasos, Un día a la vez.
Antes de Alateen mis problemas eran como un granito.
Cuando la infección se empezó a formar por dentro, sentí
dolor. Quise exprimir el barro antes de que madurara, pero
me dolió mucho. Y cuando otro quiso exprimirlo, empeoró
el dolor.
Cuando llegué a Alateen descubrí que no estaba sola, y
que nadie me criticaba ni se burlaba de mí. Empecé a
confiar y a franquiarme. Cuando hablé por primera vez
sentí dolor en mi interior, pero al extraer la infección que se
había acumulado, sentí un verdadero alivio.
Si la primera vez no k> saqué todo, tengo que seguir
tratando. Cuando se elimine la infección, no se debe
exprimir ni rascar nada, sino dejar que sane solo.
Para reflexionar
Los problemas duelen, pero hay una forma de
manejarlos. Cuando comparto el dolor y lo exteriorizo, se
empieza a eliminar el sufrimiento y se inicia la curación.
Alateen me enseña la forma dé conservarme Msana".
¿Estoy dándome cabezasos contra la pared, tratando de
cambiar las cosas que no se pueden cambiar? ¿O estoy
aplicándome el lema Un día a la vez?
Si me paso el tiempo afanándome en tareas imposibles,
rechinando los dientes y refunfuñando ¡No voy a darme por
vencida!" es probable que me sienta muy desdichada. Ese
es el resultado de ser terca.
Pero si me esfuerzo por perseverar, pugnando por el
bien aunque el obstáculo sea serio, estoy usando mi
"tenacidad". Esta cualidad específica es el resultado de
practicar el programa Un día a la vez, y me motiva para
seguir adelante aunque la prueba sea dura.
131) OCTUBRE 16

Para reflexionar
Cuando soy terca, usualmente estoy luchando tan duro
conmigo misma, que no logro gran cosa, porque quiero que
las cosas se resuelvan a mi manera y enseguida. Pero
cuando uso mi "tenacidad", puedo enfrentarme paso a paso
con mis problemas, y disfrutar una sensación de bienestar
que procede de esforzarme por hacer lo mejor que puedo.
Hoy dejaré de ser tan terca y voy a concentrarme en
practicar el programa.

Antes de llegar a Alateen yo reprimía mis sentimientos. No


quería que nadie se enterara de lo que sentía. Me parecía
que era más fácil guardármelo en mis adentros que
contárselos a alguien.
En Alateen aprendí a expresar mis sentimientos y a
aceptarlos como son. Empecé a aceptarme a mí misma como
una persona confusa, y después seguir adelante, a partir de
este punto.
Hoy estoy aprendiendo a dirigir mis sentimientos a
medida que los voy ubicando en su verdadera perspectiva, y
a enfrentarlos en vez de dejar que me arruinen la vida.
Para reflexionar
Confío en mis amigos Alateen. Comparto con ellos mis
verdaderos sentimientos y me ayudan a aceptarme como
soy. Gracias a ellos estoy empezando a relajarme y a
encontrar la forma de deshacer los nudos de mis
sentimientos.
¿Vine a Alateen buscando una forma para que el
alcohólico dejara de beber? Si esto fue así, pronto aprendí
que no podría lograrlo, pese a todos mis esfuerzos.
Lo mejor que puedo hacer ahora es ayudarme a mí
mismo, aprendiendo cuanto pueda sobre el alcoholismo.
Todos los días leeré un poco de literatura Alateen y Al-Anon,
y asistiré a mis reuniones de Alateen, tanto como pueda.
Compartiré mis sentimientos con gente comprensiva,
tratando de librarme de pensamientos y acciones que me
perjudiquen.
Para reflexionar
Puedo ayudar al alcohólico y a toda mi familia al
ayudarme a mí mismo. Quizá mi cambio de actitud podría
motivar al alcohólico para que pida ayuda. Pero en caso de
que no lo consiga, yo no voy a permitir que esto me detenga
de hacer todo lo posible por mejorar yo.

366) DICIEMBRE 31

Mirando el pasado y recordando lo que era antes de llegar


por primera vez a Alateen, hace que me dé cuenta de lo
agradecido que estoy al programa. Los amigos de la
hermandad, mi Poder Superior y hasta mi familia me han
ayudado, lo cual agradezco.
También, en forma muy especial, quiero darme las gracias
porque soy yo mismo el que me permití cambiar. No fue una
132) OCTUBRE 16

tarea fácil. Ahora sé que soy un ser humano, y admitirlo me


da un gran alivio. Cometo errores, pero me doy cuenta de
que a pesar de ellos todavía estoy bien. Hasta puedo sentirme
a gusto conmigo mismo y aceptarme como soy.
Asimismo, he empezado a expresar mis sentimientos en
vez de reprimirlos dentro de mí. Puedo amar, enojarme y
llorar si así lo deseo, pues soy yo el que elijo mis sentimientos
y la forma en que me enfrento a las situaciones de mi diario
vivir. He progresado mucho, y saberlo hace que me sienta
satisfecho de haber contribuido en gran medida a obrar estos
cambios en mí.
Para reflexionar
Tengo mucho que agradecer por mi nueva forma de vida.
Mucho le debo a otras personas, pero también estoy
agradecido conmigo mismo. He mejorado hoy como
persona, pues me estoy dando la oportunidad de dejar que el
programa obre en mi vida.
(133

ORACIÓN DE LA SERENIDAD
Esta oración se lee en la mayoría de las reuniones de los
grupos y con frecuencia es analizada en las deliberaciones de
grupo. También sirve como inspiración en la meditación
diaria de los individuos.
Dios, concédeme la serenidad para aceptar las
cosas que no puedo cambiar, Valor para cambiar
aquéllas que puedo, y Sabiduría para reconocer
la diferencia.

LOS LEMAS DE AL-ANON


Estos lemas se utilizan en la misma forma que la Oración
de la Serenidad, para obtener guía espiritual al enfrentar
nuestros conflictos y retos. Los grupos utilizan los lemas
como tema de reuniones; los individuos los utilizan como
recordatorios en tiempo de dificultades.
A continuación una lista de lemas que se mencionan en
este libro.

Sólo por la gracia de Dios.


Suelta las riendas y entrégaselas a Dios.
Hazlo con calma.
Vive y deja vivir.
Primero lo primero.
Un día a la vez.
Mantenlo simple.
Piensa.
Escucha y aprende. ¿Cuan
importante es? Manten un
criterio abierto. Juntos
podemos lograrlo.
134) OCTUBRE 30

Cuando hablo sobre Alateen, algunos no me ponen


atención. Esto hiere un poco mi orgullo; fiero entonces me
acuerdo de que hay algunas personas a las cuales no les
agrada lo que el programa puede ofrecerles.
El Duodécimo Paso me pide llevar el mensaje a otras
personas". Es todo cuanto puedo hacer. Pero no puedo
hacerme responsable por la forma en que sea recibido el
mensaje. Si la gente no desea aceptar la ayuda que se les está
ofreciendo, eso es elección de ellos. Lo único que yo puedo
hacer es "Soltar las riendas y entregárselas a Dios",
esperando que hallen la solución a su forma y a su debido
tiempo.
Para reflexionar
A veces tengo ganas de que todos disfrutaran lo que yo he
encontrado en el programa, pero no siempre lo estiman así.
En las actividades del Duodécimo Paso soy tan sólo un
mensajero. Llevo el mensaje, y lo demás tengo que dejarlo en
manos de Dios.

OCTUBRE 31 (305

Acostumbraba a lucir bien por creyeran que yo era algo


especial. Pero por dentro estaba hecha una verdadera rustía. Me
sentía llena de odio; no sentía amor por nadie. Tenía celos de otros
y me conmiseraba. No podía permitir que la gente conociera mi
verdadero yo, de modo que tenía que disimular.
Alateen me hizo descubrir mi yo interior. El solo hecho de
hablar de mis sentimientos en las reuniones me ayudó a
desahogarme mucho. Empecé a emplear la Oración de la
Serenidad y los lemas, lo cual me ayudó a aceptarme como soy, y a
darme el valor para efectuar los cambios necesarios en mi vida.
Hoy procuro ser honrada con lo que siento en mi interior.
Tengo muchos problemas, pero ahora los estoy solucionando con
la ayuda de los Doce Pasos y de mis amigos Alateen. Todavía sigo
pendiente de mi apariencia "exterior", pero ahora sé que ya no
tengo que disimular.
Para reflexionar
En Alateen me recupero totalmente de dentro hacia fuera. Ya
no tengo que ocultarme detrás de una máscara pues, de todas
maneras, todos pueden mirarme de frente. Puedo ser sincera y
afrontar la verdad de mí misma. Después de haber desempeñado
por tanto tiempo el papel de "La gran simuladora", siento una
gran satisfacción al revelar mi verdadero yo.
Hoy puede que descubramos que no estamos rxactkaaido
programa como quisiéramos. Eatamoe recayendo
antiguo modo de pensar, inquietándonos por cosas que
realmente no valen la pena. Nos damos cabe-zaaos contra la pared,
pensando que somos un fracaso.
Quizá nos sonamos así porque no estemos escuchando o
aceptando el mensaje que nos está dando Alateen.
Si prestamos atención ú compartir en nuestro grupo iterio
abierto ]
i un criterio abierto y creemos que el ota de
hoy podemos aprender aleo de alguien, entonces podramos
realegramos al ritmo de las cosas y empezar a practicar
nuevamente el programa.

El lema Escucha y aprende tiene sentido común. Al usarlo en mi


vida puede ayudarme en la casa y en la escuela. Otando preste
atención a los demás, puedo aprender ideeflosydemíi '
NOVIEMBRE 2 (135

Acostumbraba ser un seguidor. No tenía mucha


confianza en mi propia opinión, así que dejaba que
la gente decidiera por mí. Además, me costaba
menos esfuerzo dejar que otros pensaran por mí.
Algunas personas a quienes seguía me indujeron a
hacer cosas que no me gustaban, pero sentía tanto
miedo de decirles algo, que sencillamente seguía con
ellos. Me metí en muchos líos, y por dentro me
sentía despreciable.
Cuando llegué a Alateen conocí a personas que
buscaban solución para sus problemas. Con toda
claridad me dijeron que no podían resolverme ios
míos. Que tenía que aprender a pensar y hallar mis
propias soluciones a su debido tiempo y esa es la
forma que ha dado resultado. Estoy empezando a
tomar mis decisiones. No ha sido fácil volverles la
espalda a las personas que regían mi vida antes de
Alateen. Pero ahora puedo decir "No" sin lugar a
dudas, y sentirme mucho mejor porque ahora soy yo
mismo.

Para reflexionar
Es tentador aceptar la forma fácil, y dejar que
otros me digan lo que tengo que hacer. Pero así,
¿cuándo aprenderé a valerme por mí mismo? El
programa puede ayudarme. Cuando me aferró a la
nueva confianza que me brinda, puedo decidir por
mí mismo en cuál dirección quiero encaminar mi
vida, y empezar a utilizar los Pasos para llegar allí.
Había decidido que el alcohólico nunca mejoraría. Pero
me daba lástima y quería quedarme con él cuando el resto
de la familia estaba lista a abandonarle. Aunque mi papá
fuese un borracho, él era estupendo en comparación con mi
mamá. Ella daba la impresión de disfrutar por ser
desdichada. Llegué al punto de no poder soportarla, y
ansiaba el momento de escapar y abandonarla.
Cuando mi mamá fue a Al-Anon, todo parecía marchar
mejor. Ella no cambió de la noche a la mañana, pero pude
notar que había ocurrido un cambio. Empezó a
escucharme en vez de gritarme a todo pulmón; me hablaba
como un ser humano. Al principio sentía rabia, pues había
arruinado todos mis planes. Pero fue pasando el tiempo, y
quedé tan impresionado con el cambio que ella había
logrado, que cuando me sugirió que fuera a Alateen así lo
luce, sin preguntar nada más. Así descubrí un programa
para ayudarme a trabajar en mis actitudes.
Para reflexionar
Es fácil compadecerse del alcohólico y echarle la culpa al
no-alcohólico por la forma de ser de aquél. Pero el
alcohólico no necesita de mi conmiseración, y el no-
alcohólico tampoco necesita que yo le eche la culpa. Mi
cambio de actitud quizá sea el primer paso para darle a
ambos lo que realmente necesitan ele mí: mi amor y mi
respeto.
Antes de llegar a Alateen, acostumbraba a hacer una
montana de un grano de arena. Por ejemplo: si alguien me
decía algo, ellos k> olvidaban, pero yo no, y le daba vueltas y
más vueltas en la cabeza hasta crear todo un caso de
autocompasión y de resentimiento por ello. Y mientras más
lo pensaba, la situación empeoraba.
Si quiero hacer una montaña de un grano ele arena, sólo
tengo que seguir lanzando más insultos. El programa me
dice que eso es una perdida de energía. Entonces me
pregunto: ¿Que importancia tiene estol Si más tarde parece
tener más importancia que cuando ocurrió, reconozco que
estoy otra vez exagerando las cosas, y puedo detenerme.
NOVIEMBRE 2 (136

Hoy tengo una mejor perspectiva de las cosas. Estoy


aprendiendo a desprenderme de mis resentimientos, y a
disponer de mucho más tiempo para disfrutar de la vida.
Para reflexionar
Es mucho más fácil pasar por alto un grano de arena
que una montaña. Y toma mucho menos esfuerzo. Gracias
a Alateen estoy manteniendo mi "ascenso a la montaña" al
mínimo.
Muchos de mis amigos opinan que depender de un Poder
Superior es señal de debilidad. Dicen que mientras crea en
un Poder Superior a mí, jamás seré libre para tomar mis
decisiones acerca de algo.
Antes de Alateen yo estaba de acuerdo a esta forma de
pensar. Ahora veo qué equivocado estaba al dejar que otras
personas me dijeran en lo que debía o no debía de creer. La
fe en un Poder Superior es algo muy personal. Las
soluciones que necesito nadie me las puede dar, yo mismo
tengo que encontrarlas.
Con la ayuda del Segundo Paso y el resto del programa
estoy haciendo eso precisamente. Yo no soy la clase de
persona débil y despreocupada que creían mis amigos que
yo era. De hecho, creo que soy mucho más fuerte, pues
cuento con un Poder Superior que me sostiene, y así me
siento libre para sondear las cosas en el momento oportuno,
y alcanzar mis propias conclusiones.
Para reflexionar
Algunas personas creen que tienen que hacerlo todo por
su cuenta. Yo prefiero trabajar en equipo, con una fuente de
ayuda en la que puedo confiar, mi Poder Superior. No
importa lo que la gente pueda decir, se requiere mucho
valor para poner mi confianza en ese Poder Superior.
Hacerlo me da la fortaleza que necesito para cumplir con
cada día.
Cuando empezó nuestro grupo Alateen, era numeroso;
pero habían pandillas y poco después la gente se fue
retirando por diferentes razones. El grupo estaba desor-
ganizado. Nunca sabíamos quién iba a coordinar la reunión
cada semana. Los miembros regulares dejaron de asistir y a
la larga el grupo llegó a ser muy pequeño.
Entonces hicimos un inventarío de grupo, y hablamos de
problemas de grupo. Fue como si el grupo hubiera hecho
los pasos Cuarto y Quinto. Nos esforzamos por corregir los
elementos conflictivos, y nuestro grupo empezó a crecer de
nuevo.
Hoy mucha gente viene al grupo y se queda. Cada mes
tenemos una reunión sobre un Paso y una Tradición, y
sabemos quién va a coordinar cada semana. Lo mejor de
todo es que en nuestro grupo existen nuevamente el afecto y
la amistad.
Para reflexionar
Si nuestro grupo está en dificultades, nosotros también k>
estamos. Encarar los problemas y hacer algo al respecto
puede ayudarnos. Mantener nuestro grupo firme mantiene
vivos el afecto y la amistad y lo hace un lugar donde todos
obtenemos la ayuda que necesitamos.
He hallado muchos amigos en Alateen. Cada vez que voy
a una reunión, sé que voy a estar entre amigos. No tengo
que sentir miedo de decir algo, porque ellos han tenido
problemas similares y comprenden.
Cuando estoy en una reunión, sé que lo que diga, no
saldrá fuera de las cuatro paredes de ese recinto. Si tengo un
pleito con mis padres, puedo platicárselo a los miembros de
mi grupo Alateen y ellos me sugerirán algo que me ayude.
Todavía tenemos pleitos en casa, pero gracias a mis amigos
Alateen, poco a poco estoy aprendiendo a enfrentar esto y a
saber qué hacer.
Ahora, en vez de tratar de resolver las cosas por mí
misma, puedo entregar mis problemas a mi Poder Superior
y trabajar junto con la gente que verdaderamente se
preocupa por mí.
NOVIEMBRE 2 (137

Para reflexionar
Mi grupo Alateen me da el apoyo que necesito. Ellos son
el grupo de muchachos más sinceros que he conocido en mi
vida. Me ayudan cuando estoy deprimida o cuando tengo
una actitud negativa, pero también me dicen cuándo estoy
actuando bien. No pocha haber encontrado otro grupo de
amigos tan francos y serviciales. Hoy recordaré estarles
agradecida por todo.
¿Cómo manejo el éxito? Cuando empieza a
materializarse todo aquello por lo cual me afané, cuando
todo parece tener éxito y cuando creo tener la solución
adecuada en el momento preciso, ¿cómo actuó?
¿Me siento siempre tan segura de tener la razón, que
ignoro lo que otras personas tengan oue ofrecer cuando
comparten sus experiencias? ¿Exijo que los demás me
oigan siempre? ¿Incurro en el hábito de anhelar alabanzas
y reconocimientos?
Alateen me muestra cuándo la gloria del éxito se apodera
de mí. Me ayuda a comprender que el verdadero éxito
consiste en tratar de vivir cada día el programa, en la mejor
forma posible.
Para reflexionar
"iYa la hice!" Pensar de esa forma es un verdadero
peligro. Puedo tomarme un tiempo para disfrutar mi
recuperación, pero si me cruzo de brazos, justamente
recaeré en mis pensamientos egoístas. Hoy es mi día para
seguir adelante.
Cuando fallo en mis tareas escolares, ¿de quién es la falta?
¿Puedo echarte U culpe a mi progenitor alcohólico? Me
encantaría, pero Alateen no me lo permite. Mis estu-dios y
mis calificaciones son mi lesponsacaJidad Cuando falto a
clase y evito estudiar para los exámenes, no estoy aceptando
esa responsabilidad.
En Alateen, aprendí a ser responsable al practicar los
Doce Pasos. En vez de culpar a otros por mis fracasos y
decepciones, hago un sincero esfuerzo por practicar mi
proa/ama y empezar a aceptar la responsabilidad por mis
acciones.
Para reflexionar
Estoy aquí para llevar mi propia carga. Soy responsable
para hallar mis propias soluciones y tomar mis propias
decisiones. Tengo el programa para que me ayude a rea-
lizarlo. Si lo utilizo en mi vida el día de hoy, aprenderé miicho
pera ««Ponsabk conmigo mismo. ¡Es una buena forma
para empezar a crecer!
NOVIEMBRE 10 (138

Recién llegado: "Mis amigos ya no quieren venir a


nuestra casa. Me dicen que se sienten incómodos porque
ven que mi mamá se emborracha. No los culpo. También
yo me avergüenzo de ella".
Miembro: "Lo mismo me pasaba a mí, hasta que vi que
la enfermedad de mi papá no era motivo para sentirme
avergonzada o desconcertada. Si él hubiera padecido de
cáncer o diabetes no me habría sentido así, de modo que no
tengo que sentirme diferente cuando se trata del
alcoholismo. El recordar que es un enfermo me ayuda a
comprenderle mucho mejor".
Cuando empecé a sentirme más a gusto con mi papá, lo
mismo sintieron mis amigos, los cuales empezaron a volver
a nuestra casa. Algunos de ellos llegaron a preguntarme
qué había ocurrido y entonces les hablé de Alateen; este
amigo me dijo que le gustaría intentarlo, pues estaba
pasando por los mismos problemas.

Para reflexionar
El alcoholismo es una enfermedad. Cuando trato de
recordarlo, ya no estoy tan dispuesta a humillar al
alcohólico. Cuando lo trato con comprensión, tanto él como
yo nos sentimos más a gusto uno con otro, y parece que
también mis amigos lo respetan más. Mi cambio de actitud
hace que las cosas sean diferentes; esto puede ayudar a otra
persona que esté pasando por el mismo tipo de problemas.
139) NOVIEMBRE 11

¿Me acuerdo de mi primera reunión Alateen? No llegué


porque tuviera ganas de divertirme sino poique tenía
necesidad de venir. Estaba enojada con todo y con todos. ¿Ir
yo a una reunión donde se iba a hablar de alcoholismo,
cuando que mi único deseo era eliminar el alcoholismo de mi
vida? Me preocupaba de quiénes estarían allí, y si podría
confiar o no en ellos. Tenía la seguridad de que se reirían de
mí si les decía cómo me sentía.
Por supuesto, nada de esto sucedió. Pero, a pesar de todo,
k> que sentí sí fue algo autentico. Si pretendo alejar de mí
estos pensamientos, quizá me olvide de la ayuda que pueden
darle a alguna persona que acabe de llegar a nuestro grupo.
Quizá sea esto lo primero que comprendan, y al compartirlo
tos motive a regresar y aprendan a aplicar el programa a su
vida.
Para reflexionar
Las experiencias buenas y malas del pasado son un
pequeño obsequio que brindo a los recién llegados. Necesitan
enterarse de que lo que yo he experimentado, es lo que ellos
están viviendo ahora. Recordar mi pasado y compartirlo es
una forma de relacionarme con ellos. Puedo abrirles las
puertas hoy, para demostrarles que alguien les comprende.
NOVIEMBRE 12 (140

Cuando llegué a Alateen, pasé mucho tiempo


aprendiendo cómo desprenderme del alcohólico. Pero al
mismo tiempo descubrí que también tenía que
desprenderme de otras personas. Yo era dominante, y
estaba obsesionado con la idea de ocuparme de todo y de
todos. Siempre pensaba que los miembros de mi familia
eran demasiado
endebles hacer modo
que me hice cargo de la situación. En la escuela y en el
vecindario organizaba todo y dictaba las reglas, porque tenía
Ta seguridad de que nadie más sabía hacerlo.
Cuando empecé a perder muchos amigos y mi familia
comenzó a reaccionar en mi contra, me di cuenta del gran
daño que estaba haciendo. Quería dejar de controlar a otras
personas antes de arruinar las pocas amistades que me
quedaban. Los tres primeros Pasos me fueron de gran
ayuda. Primero tuve que admitir que mi problema consistía
en aferrarme a cosas que no me incumben. Segundo, llegué
a creer que un Poder Superior a mí mismo podía ayudarme.
Y tercero, le pedía a mi Poder Superior que eliminase mis
problemas, mientras yo me esforzaría por ser más positivo
en mis pensamientos y acciones.
Para reflexionar
No practico el desprendimiento únicamente con el
alcohólico. También tengo que desprenderme de otras
personas, y dejar que ellos se ocupen de sus* vidas. Cuando
lo haga, descubriré que saben mucho más de lo que me
imaginaba, y así podré disponer de más tiempo para
mejorar como amigo y como miembro de mi familia.
141) NOVIEMBRE
13

Durante mucho tiempo había tenido la impresión de que


las Tradiciones se aplicaban solamente a los grupos. Mi
punto de vista sobre las Tradiciones cambió cuando me
involucré en la labor de servicio.
Ahora considero que las Doce Tradiciones son para mí tan
importantes como los Doce Pasos. Hablan de llevarse bien
con las personas, trabajar de común acuerdo, ser una
persona en quien los demás puedan conñar, tener un
objetivo, y tratar de vivir según los principios de Alateen.
Mi responsabilidad consiste en practicar las Tradiciones en
mi vida personal. Haciéndolo así, contribuyo para que
nuestro grupo sea firme, de forma que todos nosotros
podamos aprender a utilizar el programa cabalmente.
Para reflexionar
Las Tradiciones se aplican a nuestros grupos, pero
también pueden ayudarme a mí. Cuando surjan problemas
en mis relaciones con los demás, acudiré a las Tradiciones en
busca de ayuda. Estas me indicarán las soluciones que
pueden fortalecerme en cualquier situación.
Cuando vine a Alateen no sabía nada de la enfermedad del
alcoholismo ni qué parte jugaba yo en ello. A medida que fui
aprendiendo, se me hizo más fácil comprender y perdonar al
alcohólico y a los demás miembros de mi familia.
La aceptación vino en el momento oportuno. Con la ayuda
del programa, es decir, leyendo literatura, usando la Oración
de la Serenidad, los lemas y los Pasos, y hablando de mis
problemas con otros miembros, empezó a despejarse la
niebla, y comencé a amar y a aceptar al alcohólico y alas
demás personas.
Alateen me dio también la oportunidad de aprender más
acerca de mí misma. Según empecé a entender algunos de
mis pensamientos y sentimientos, aprendí a perdonarme. Al
fin comencé a aceptarme tal como era.
Para reflexionar
Es más fácil aceptar algo cuando sé de lo que se trata. El
programa me ayuda a instruirme más acerca del
alcoholismo y de mí misma. Esto me facilita aceptar,
comprender y hasta amar a mi familia y a mí misma.
142) NOVIEMBRE
15

Vivía solo con mi padre. Cuando bebía me pegaba, de


modo que casi todo el tiempo yo estaba en la calle huyendo de
él. Finalmente, me atraparon infringiendo la ley y fui enviado
a un centro de detención. Traté de actuar con firmeza, pero
por dentro tenía mucho miedo y me sentía totalmente solo.
Cierta noche vinieron al centro de detención algunos
muchachos del grupo Alateen de la localidad para conducir
una reunión. Fui obligado a asistir, y aparenté frialdad. Pero
cuando los muchachos compartieron sus sentimientos me
enternecí. Me eché a llorar, y uno de los muchachos me
abrazó. De momento guise zafarme, pero sentí tranquilidad
en lo más profundo de mi ser, al saber que alguien se
preocupaba verdaderamente por mí. Desde entonces he
estado asistiendo semana a semana a todas las reuniones.
Cuando llegó el momento de que me pusieran en libertad,
estaba asustado, pero mis amigos Alateen me esperaban
afuera, dispuestos a ayudarme. Cuando me fui calmando me
animaron a venir al grupo de ellos y desde entonces he
seguido asistiendo. En casa las cosas no han mejorado
mucho, pero para mí sí han mejorado muchísimo. Apenas se
pueda, quiero regresar al centro de detención para
demostrarle a los muchachos como yo, que también hay
ayuda para ellos.
Para reflexionar
El hecho de que alguien se preocupara por mí, derribó las
barreras de mi soledad. Si ayudo a otros y les hago ver que
me preocupo por ellos, también esto puede derribar sus
barreras.
Cuando me pidieron que desempeñara un cargo en el
grupo, se me subió a la cabeza. De verdad creí que yo era una
gran cosa. Se me infló el égó, y todo empezó a descontrolarse.
Un miembro del grupo me recordó la Segunda Tradición, la
cual me hizo volver a la realidad, en la cual me encuentro
todavía.
Desde entonces me he dado cuenta de que soy un fiel
servidor del grupo, ni mejor ni peor que cualquier otro. Fui
elegido para asumir esta responsabilidad, porque los demás
miembros confían en mí. El grupo espera que yo preste
servicio, no que tome las decisiones. Saberlo me ayuda a ser
humilde, lo cual hace que el grupo reciba mejor servicio de su
fiel servidor.
Para reflexionar
Es para mí una satisfacción tener la oportunidad de
servir a mi grupo. Cuando me siento tentado de creer que
esto es cosa del otro mundo, es prudente recordar que el
servicio es una verdadera oportunidad de realizar cosas para
los demás. Esto no me hace más importante; sencillamente,
significa que la gente confía en mí para que la tarea se
cumpla.
Tenía la costumbre de juzgar a los demás por la primera
impresión que me causaban. Cuando me presentaban a
personas que no me simpatizaban, hacía todo lo posible por
evitarlas.
Después de llegar a Alateen empecé a aprovechar la
orjortunidad de tratar mejor a la senté. El lema Manten un
criterio abierto, marcó la diferencia. Descubrí que la gente a
la que criticaba no era tan mala después de todo. Cometían
errores, igual que yo, pero esto no tenía realmente la menor
importancia.
Ahora trato de buscar k> mejor en la gente. Cuando me
desagrada la gente que acabo de conocer, procuro
concederles el beneficio de la duda. Por lo general, esto me da
buenos resultados, y en ocasiones hasta llegamos a ser buenos
amigos.
Para reflexionar
Si me apresuro demasiado a juzgar a la gente, jamás
podré tener muchos amigos. Tratar de practicar el lema
Manten un criterio abierto, me ayuda a ser más tolerante y
comprensivo. Cuando me proponga pensar en lo bueno de
otras personas, tendré una mejor oportunidad de encontrar
los amigos que siempre había anhelado.
NOVIEMBRE 1S (143

En nuestro grupo teníamos muchos problemas.


Hablábamos del alcohólico en vez de procurar ayudarnos
entre tí. Antee y después de nuestras sesiones* en vez de estar
hablando con los nuevos miembros acerca del programa,
perdíamos el tiempo en tonterías, platicando de todo menos del
programa.
Cuando empezaron a ir mal las cosas, muchos dejaron de
asistir a las reuniones, en vez de tratar de progresar. Cuando
vuestro grupo estuvo al borde del fracaso, alguien sugirió que le
echáramos un vistazo a la Quinta Tradición.
El tratar de aplicarla nos demostró que tenemos un solo
propósito: prestarnos mutua ayuda. Observamos que para
lograrlo teníamos que ayudarnos nosotros mismos. Dejamos
de hacer inventarios a otras personas y empezamos a hablar
de cómo nos sentíamos. Empleamos más tiempo para com-
partir unos con otros respecto a la forma en que nos estaba
ayudando el programa.
Hoy nuestro grupo está mejorando. Aún tenemos
problemas; pero todos, incluyendo a los nuevos miembros,
seguimos viniendo a las reuniones. Ahora, gracias a la Quinta
Tradición, sabemos para qué venimos a Alateen.
Para refUxiamar
La Quinta Tradición me dice pata qué estoy en Alateen. Ya
no tengo tiempo para hablar de nadie más ni permito que
nada me desvíe de mi camino. Necesito concentrarme para
ayudarme a mí mismo y estar dispuesto a compartir con otras
personas. Cuando lo haga, ayudare a que nuestro grupo siga
adelante para poder ayudar al que venga.
144) NOVIEMBRE
19

Cuando fui a mi primera reunión de Al-Anon estaba


asustada, pues temía que me rechazaran. Luego vine a
darme cuenta de que también ellos estaban tan asustados
como yo; soy una muchacha, y los muchachos, asustamos a
algunos adultos. Pero tan pronto les acepté y ellos me
aceptaron, se rompieron las barreras, y todo anduvo bien.
Ahora sé que tengo algo que ofrecer a los miembros Al-
Anon, del mismo modo que también ellos tienen algo que
darme. Todos nosotros somos miembros de la misma
hermandad, y tratamos de practicar el mismo programa. En
vez de considerarlos como adultos o padres, trato de
Mantener un criterio abierto, y recordar que los miembros
Al-Anon son personas que necesitan ayuda, igual que yo.
Para reflexionar
Al ir a una sesión de Al-Anon, tengo que estar lista para
"dar y recibir". Tengo que desprenderme de mis temores y
recordar que los miembros Al-Anon son también personas.
Todos nosotros compartimos los mismos sentimientos de
vivir con un alcohólico, y tratamos de vivir el mismo
programa. Estamos todos juntos, ayudándonos mutuamente.

En Alateen descubrí que el alcoholismo es una


enfermedad. Comprenderlo y aceptarlo me ayuda a dejar de
sentirme culpable cada vez que mi mamá me echa la culpa
por su forma de beber. A ella no se le puede ayudar hasta
que esté dispuesta a buscar ayuda para sí misma.
También aprendí que el alcoholismo es una enfermedad
familiar. Ahora entiendo que no puedo echarle la culpa a mi
papá por la bebida de mi mamá y demás problemas
nuestros. El hace todo lo posible por enfrentarse a esta
penosa situación. Ahora, gracias al programa, puedo
entender mejor a mis padres, y se ha afianzado la relación
entre nosotros.
Para reflexionar
Cuando entiendo que estoy enfrentándome a una
enfermedad, puedo dejar de echarme la culpa y de echarle la
culpa a los demás por el alcoholismo que hay en mi familia.
Si el alcohólico no quiere, no se le puede ayudar; pero la
ayuda que yo logro puede mantener abiertas las líneas de
comunicación entre mis padres y yo.
Antes de venir a Alateen creía que mi vida no tenía
remedio. Estaba seguro de que ninguna persona en el mundo
vivía peor que yo. Me quejaba mucho, pero las cosas nunca
cambiaban. Mi papá siempre me decía que yo vivía en un
mundo de "cuento de hadas'', pero me imaginaba que no
perseguía nada fuera de lo común. Lo que realmente
deseaba era un sentimiento de amor.
Ahora que estoy practicando el programa, noto que lo
que deseo en nuestro hogar depende de mi actitud. Si ando
buscando cariño, debo estar dispuesto a expresarlo en vez de
quejarme por carecer de él. Uno de los instrumentos que me
ayuda es la Undécima Tradición. Procuro usar la "atracción
más que la promoción". Me siento más feliz con lo que hago
y con lo que digo, y esto también le llega a otras personas.
Para reflexionar
Cuando quiero que cambie mi vida en el hogar, a veces
tengo que tomar la iniciativa. Puedo lograrlo con la ayuda de
la Undécima Tradición. En vez de estar machacando en
cómo podrían mejorar las cosas, puedo "atraer" a mi familia
hacia una nueva forma de vivir, practicando hoy el
programa en mi vida.
Antes de Alateen creía que Dios era un hombre que hacía
milagros; pero como a mí no me hizo ninguno lo rechacé, y
no me sentí arrepentido en lo absoluto.
Al llegar a la hermandad y oír las palabras "Poder
Superior", me pareció estupendo. Necesité dos años para
encontrar a mi Poder Superior, y al suceder esto se obró un
verdadero cambio en mi actitud, mejorando mucho el
panorama de mi vida.
El Undécimo Paso me indica cómo establecer contacto
con mi Poder Superior y conmigo mismo. Medito: me voy a
145) NOVIEMBRE
19

algún lugar para estar a solas y pensar quién soy yo, cuáles
son mis valores y qué estoy haciendo respecto a mí mismo.
Trato de descubrir cuál es la voluntad de Dios para conmigo.
A veces es difícil, pero si hago lo que yo creo que El quiere de
mí, en vez de hacer siempre lo que yo quiero, las cosas
funcionarán mejor, y estaré yendo por el sendero correcto.
Para reflexionar
El Undécimo Paso es el momento para pensar y para
hablar con mi mejor amigo: mi Poder Superior. Trato de
comprender cuál es Su voluntad para conmigo, y pedirle que
me dé fortaleza para expresarla en mis acciones. El poder de
Dios es un dinamismo en acción.
Una de las cosas más importantes que aprendí en Alateen
fue poner Primero lo primero. Lo primero que necesitaba
trabajar era en mí misma. En vez de tratar de cambiar al
instante todo lo que a mí se refiere, tomé una cosa a la vez.
Me falta mucho por terminar, pero a medida que transcurre
el tiempo se me hace más fácil.
Sé que nunca seré perfecta, pero al menos hoy puedo decir
con toda sinceridad que me siento satisfecha conmigo
misma. Alateen me ha ayudado a darme cuenta de que,
aunque nunca llegue a ser absolutamente buena, tampoco
soy absolutamente mala.
Para reflexionar
Mi principal prioridad en Alateen es que yo cambie.
Mientras más me esfuerce por lograrlo, mucho mejor me
sentiré. El lema Primero lo primero me da el incentivo que
necesito para seguir adelante.
En cierta ocasión un miembro Alateen le escribió a su
antiguo grupo, explicando la razón por la que dejó de asistir
a las reuniones, pues cerca de su casa no había ningún grupo.
Cuando los miembros oyeron la noticia, se dieron cuenta de
que se trataba de una carta de gratitud.
"Yo no había notado antes lo mucho que significaba para
mí Alateen, hasta que no lo tuve mas. A veces esta situación
es muy dura. Ahora necesito el programa mas que nunca.
No podría decirles en dónde estaría hoy si no fuera por el
programa. Probablemente hubiera dejado la escuela, me
hubiera escapado de casa o hubiera empezado a beber. En
lugar de eso, ahora tengo la mente más despejada, y puedo
aceptar a mi madre tal como es, porque la quiero. Gracias a
Dios por haberme dado Alateen."
Para reflexionar
Cuando tengo oportunidad de asistir a las reuniones,
trataré de no darlo por sentado. Si no puedo ir a las sesiones,
aún puedo estar en contacto con otros miembros, escribiendo
a la Oficina dé Servicio Mundial, al servicio de "Miembros
aislados".
No podría soportar el día si no contara con la Oración de
la Serenidad. Especialmente aquellos días en que parece que
todo me sale mal. Antes, contaba hasta diez y después
estallaba, pero ahora es distinto. Uso la Oración de la
Serenidad, y esto me da una clase de paz interior que me
ayuda a ser más paciente.
Me ayuda en muchas situaciones, por ejemplo cuando mi
papá se enoja conmigo o cuando mi mamá se emborracha.
Me tomó algún tiempo, pero ahora hasta puedo usarla con
mis amigos. Cuando empiezo un pleito con uno de ellos, el
rezarla hace que me detenga y me doy cuenta de que lo que
estoy discutiendo es realmente una estupidez.
Sobre todo la Oración de la Serenidad me ha dado
"sabiduría para reconocer la diferencia" entre lo que era yo
antes de Alateen y lo que ahora soy. No hay comparación, y
me siento estupendamente.
Para reflexionar
Desde que empecé a usar todos los días la Oración de la
Serenidad he progresado mucho. Ya no estallo como antes.
Estoy aprendiendo a aceptar los problemas como son, y a
enfrentarlos con la ayuda de mi Poder Superior. También
me ayuda a cambiar lo que sí puedo: yo misma. Una forma
segura de hallar paz y tranquilidad es la Oración de la
Serenidad.
Acostumbraba a pedirle a Dios queme ayudara, pero sólo
cuando yo realmente necesitaba algo. Cuando no conseguía
nada de lo que pensaba que debería tener, renunciaba a El.
Creía que El me había despreciado al no responder a mis
oraciones.
146) NOVIEMBRE
19

Ahora que estoy en el programa, he llegado a creer que


Dios realmente se preocupaba por mí. Me doy cuenta de que
a pesar de que yo había renunciado a El, El nunca me
abandonó y está siempre dispuesto a ayudarme con tal que
yo me esfuerce por ayudarme.
Aún no he obtenido todo lo que deseo, pero ahora sé que
lo que logro es lo que Dios cree que necesito, y en eso estoy de
acuerdo con El.
Para reflexionar
Dios no es inaccesible. Es un buen amigo que nunca me
abandona. Puedo platicar con El, no sólo para pedirle algún
favor sino para darle las gracias y decirle cómo me va el día
de hoy.
No podía entender por qué mi papá padecía de doble
personalidad: tenía un problema de bebida. Tampoco podía
comprender por qué mi mamá estaba tan susceptible a toda
hora. Ella podía ser agradable un rato y luego sin avisar,
gritaba a todo pulmón. Esto me daba mucho qué pensar,
quería platicar con ella, pero era muy difícil saber cómo ella
iba a reaccionar. Así que me di por vencido, y dejé de
intentarlo.
Qiando llegué a Alateen estaba resentido con mi mamá, y
necesité mucho tiempo para cambiar de actitud. Sólo
después de haber escuchado a muchas personas que pasa-
ban por la misma situación, empecé a darme cuenta de lo
presionada que vivía mi mamá. No recurría al alcohol para
encubrir sus sentimientos, como lo hacía mi padre; vivía con
los nervios de punta. Cuando noté el estado en que realmente
se encontraba, quedé conmovido. Al principio me fue difícil
expresarlo, pero a medida que me esforcé me fui sintiendo
mejor. Con el tiempo, empecé de nuevo a compartir mis
problemas con mi madre, y nuestra estrecha mtimidad fue
aun mayor.
Para reflexionar
A veces me aislo de los demás antes de aprovechar la
oportunidad de comprender los sentimientos de ellos. Esto
puede ocurrir en mi familia cuando no pienso en lo que le
está pasando a mi madre no-alcohólica. En vez de apartarla
de mi vida, trataré de que las líneas de comunicación
permanezcan abiertas, y decirle que sí me preocupo por ella.
Me empeñaba por complacer a otros porque
deseaba que me quisieran. Pero no podía aceptar su
amor ni su respeto, pues yo mismo era incapaz de
apreciarme. Creía que era un inútil y que no servía
para nada.
Alateen me infundió esperanza de poder ser
alguien especial. Al examinarme descubrí en mi
interior muchas cosas buenas que sí me agradaban.
Hoy me siento mucho más satisfecho de mí
mismo. En ocasiones no me ocupo de mí como
debiera, pero ya no me deprimo. El programa me
está ayudando a convertirme en alguien que yo
aprecio y respeto realmente.

Para reflexionar
Alateen me dice que si no me aprecio a mí mismo,
es difícil que acepte el aprecio de otras personas. Hoy
sé que estoy dotado de toda clase de buenas
cualidades. Estoy aprendiendo a apreciarme y a
permitir que otras personas me expresen su amor.
Antes de Alateen me sentía solo y frustrado. Intenté toda
una serie de cosas para huir de mis problemas. Me sentía
como si estuviera solo en un cuarto oscuro. Creía que ya no
podía esperar nada.
Qué equivocado estaba. Alateen estaba allí. Al asistir a las
reuniones y compartir con otros miembros, pude observar
diminutos rayos de luz que llegaban a la obscuridad. A
medida que seguí viniendo a las reuniones, los rayos se
fueron haciendo cada vez más potentes.
Un día espero que podré salir de ese cuarto obscuro, y
dejar en paz mis pasadas angustias. Hoy me siento
agradecido porque soy uno de esos adolescentes que tienen la
suerte de estar en Alateen. Esto cambió por completo mi
vida.
Para reflexionar
147) NOVIEMBRE
19

Gracias al programa las cosas están yendo bien para mí.


Es magnífico sentir esperanza y vivir el día con una buena
actitud. Hoy es otra oportunidad para "contemplar el
porvenir**.
Le debo mucho a Alateen. Fíjense loque me ha dado: una
alternativa entre mi antigua forma de pensar y una nueva y
mejor forma de vida; la oportunidad de llegar a conocer un
Poder Superior, y el reto de que se cumpla en mí Su
voluntad.
Quizá yo pueda tratar humildemente de resarcir a Alateen
por los beneficios que he recibido. Puedo lograrlo al darle la
bienvenida a los recién llegados, al compartir con los demás
mis experiencias, fortaleza y esperanza, y confiando mi vida
al cuidado de Dios, según mi propio entendimiento de EL En
cierta forma, es como estar al servicio de mi Poder Superior.
Después de todo, ¿quién es el que lleva la batuta?
Dios me dio este maravilloso programa para que lo practi-
que y lo viva. Si deseo conservarlo, tengo que regalarlo a
otros.
Para reflexionar
Para mí Alateen es una nueva forma de vida. Contando
con amigos que se preocupan por uno, y un Poder Superior
que me indica el camino, mi vida, en realidad, ha cambiado
totalmente. Ahora puedo también ayudar a otros que
necesitan a Alateen. Esta es una de las formas en que puedo
compensar en algo las cosas grandiosas que me ha dado el
programa.
Al vivir con un alcohólico, algunos de nosotros sentimos
que no nos queda más remedio que quedarnos en casa y
compadecernos de nosotros mismos. Otros se escapan,
solamente para descubrir que no son más felices que antes
efe haberse ido. Algunos tratan incluso de evadir el problema
consumiendo alcohol y drogas.
El programa nos da la alternativa de quedarnos y hacer
algo constructivo con nuestra vida. Aprendemos a no dejar
que nos depriman nuestros problemas en el hogar. Cuando
las cosas andan mal, podernos acudir a alguien con quien
platicar. Procuramos tomar decisiones juiciosas y utilizar el
programa para que nos ayude a enfrentarnos valerosamente
a nuestros problemas un día a la vez.
Para reflexionar
Ahora comprendo que vivir con un alcohólico no significa
que estemos en un callejón sin salida. La vida está llena de
posibilidades. Cuando me haga cargo de mi vida podré vivir
con un alcohólico, y aún así sacarle gran provecho a la vida,
día a día.
'Tenemos que aceptarnos a nosotros mismos antes de
poder aceptar a otras personas." ¿Cuantas veces hemos oído
eso en las reuniones? El aceptarnos a nosotros mismos es tan
fácil como aceptar a otros; y a veces resulta más difícil
aunque esencial.
Encontraba faltas en otros que hiego descubría en mí
misma. Me disgustaba con mis familiares o amigos porque se
equivocaban o porque se olvidaban de algo. Pero nunca me
detenía a pensar sobre las veces que yo cometía alguna falta
o se me olvidaba algo.
Alateen me ayuda a admitir que soy humana. No puedo
dirigirlo todo. Cometo muchos errores. Aceptar esto en mí
misma me' facilita el aceptar las faltas en los demás.

Para reflexionar
Hoy trataré de aceptarme como soy, con lo bueno y lo
malo. Seré paciente conmigo misma y tomaré las cosas como
vengan. Esto me ayudará a aceptar a otras personas como
son: seres humanos igual que yo.
Hace poco aprendí una lección de hurnildad En una
sesión conocí a una recién llegada, y tuve la impresión. de que
habíamos hecho buenas migas. Nos pusimos de acuerdo
para estar en comunicación; pero después de haberla
llarnado un par de veces, esperaba que también ella me
ñamaría. No lo hizo, y quedé contrariada. Cuando me enteré
de que había llamado a otro miembro, mi orgullo se sintió
herido.
Después me di cuenta de que yo estaba tratando de
dominar su vida. Ella es libre de hablar con q^enquiera.
Aunque yo tenga soluciones, no soy la única persona de
quien ella puede aprender. Es posible que lo que yo tenga
que decir no sea lo que ella necesite oh* en este momento.
Gracias a que me desprendí, hoy somos buenas amigas.
Me alegra que esté logrando de otras personas la ayuda que
148) NOVIEMBRE
19

necesita, y me siento contenta de haber tenido la oportunidad


de aprender una lección importante.
Para reflexionar
Me encantaría ayudar a todos los recién negados que
vienen a nuestro grupo. Puedo ayudar a algunos de ellos,
pero no tengo soluciones para todos. Cuando dejo que otros
pasen el mensaje, la resportsabilidad se comparte y ayuda a
cimentar un sólido fundamento para el apadri-namiento en
el grupo. ¡No existe mejor forma para que los recién llegados
regresen!
Siempre fui una solitaria. Creía que todo el mundo quería
evitarme, y por eso me hice a un lado. Me dolió mucho, pero
no tanto como el sufrimiento de que se burlaran de mí o
cuando me pedían que desapareciera cuando trataba de
alternar con otros.
Cuando llegué a Alateen estaba harta y cansada de que se
olvidaran de mí. Por eso para mí fue muy importante la
sincera y cálida bienvenida que me dieron, ya que expresaba
el deseo de esas personas de que yo me uniera a ellos. Si se
hubieran mantenido en pequeñas pandillas esperando a que
yo tomara la iniciativa, quizá nunca hubiera regresado.
Hoy sé que estoy en el lugar adecuado. Siempre estoy al
tanto de los recién llegados que parecen tímidos y tristes.
Abundan. Quiero ofrecerles una cordial bienvenida, como la
que yo recibí, para que ellos también se queden.
Para reflexionar
Después de muchos años de aislarme de todos, ahora es
bueno sentirme parte de algo. Este es uno de los secretos de la
hermandad: la gente quiere quedarse con nosotros gracias a
la sincera y cordial bienvenida que reciben. Quiero estar allí,
cuando los recién llegados se sientan solos y apartados.
Siempre fui más exigente conmigo mismo, que con otras
personas. Podía admitir que otros cometieran errores, pero
esperaba más de mí mismo.
Esto se convirtió en un verdadero problema. No podía
equivocarme, porque eso cambiaría la imagen que tenía de
mí mismo. Era como si en el hombro derecho tuviera un
garrote enorme. Listo a pegarme en la cabeza, si me salía de
la raya.
Hoy me va mejor. Con el lema \Hazlo con calmal y los
Doce Pasos estoy aprendiendo a ser más flexible conmigo y a
darme cuenta de que equivocarse no \ es cosa del otro
mundo. También estoy empezando \ a notar que puedo
aprender mucho de los errores que cometo.
Para reflexionar
Esperaba mucho de mí mismo, pero tengo que ser justo.
Tengo derecho a equivocarme. Cuando me tomo esta
libertad, los errores que cometo pueden convertirse en las
mejores experiencias de aprendizaje de mi vida.
He estado viniendo a Alateen durante largo tiempo, pero
recientemente me di cuenta que nunca había sido parte del
grupo. Fue bueno que tocara fondo, pues de no haber sido
así, nunca habría empezado a practicar el programa. Los
Pasos me han abierto muchas puertas que jamás creí que se
me abrirían. Existe solución para todos mis problemas y han
dado un nuevo rumbo a mi vida.
Asi mismo, he descubierto a un Poder Superior, y creo
que ésta es la clave para que yo practique el programa.
Creer en ese Poder Superior ilumina todo mi mundo. En
ocasiones obstruyo la luz a causa de que mi obstinación se
interpone en el camino. Aquí es cuando yo misma me creo
problemas. Incluso en esos momentos de depresión, que sé
que mi Poder Superior está allí. Desde que adopté este
programa nunca ando sola, y ésa es una sensación
maravillosa que tengo.
Para reflexionar
Estoy contenta porque al fin desperté y me di cuenta de la
importancia que tiene para mí el programa. Me da una
nueva imagen de mi vida. Cuando procuro que el programa
intervenga en todo cuanto hago, ya no me siento sola, y
parece que así las cosas van saliendo mejor de lo que
esperaba.
Antes de entrar a Alateen creía que mi padre era débil de
carácter, tenía la seguridad de que si él hubiera querido ya
habría dejado la bebida. Pensaba que él era el causante de los
pleitos familiares y del odio que sentíamos unos por otros.
Después de unirme a Alateen empecé a comprender que
el alcoholismo es una enfermedad. Aprendí que no puedo
149) NOVIEMBRE
19

suplicar o amenazar para hacer que él deje de beber.


También aprendí a no sentirme culpable por sus acciones.
Le achacaba la culpa a las borracheras de mi papá por
mis bajas calificaciones, por no tener amistades y por otras
muchas cosas. Ahora, gracias a Alateen, sé que yo soy
responsable de estas cosas.
Para reflexionar
Cuando uno se entera de que el alcoholismo es una
enfermedad, muchas cosas van cayendo en su lugar. Aunque
el alcohólico dice y hace cosas que me ofenden, observo que
muchas de estas acciones son parte de su enfermedad.
Saberlo me ayuda a desprenderme y a enfrentarme al <*olor
para poder seguir viviendo el día de hoy.
Antes creía que lo que yo deseaba era que alguien se
ocupara de mí. Ahora sé que lo único que quería era que
alguien se interesara por mí. Antes de Alateen tenía la
seguridad de que nadie se interesaba por mí, y me sentía sola
y deprimida.
Gracias a la hermandad cuento ahora con personas que
sí se preocupan realmente por mí. Una de mis posesiones
más valiosas es la amistad de ellos. Cuando me siento mal y
pienso que "a nadie le importo", entonces me acuerdo de
ellos. Pienso en lo que pue do platicar con ellos, contándoles
lo que verdaderamen te me está fastidiando. Ellos me
aceptan como soy, sin importar lo que haya hecho y
procuran ayudarme y compartir conmigo todos los días.
Para reflexionar
Sin tener amigos es fácil que me sienta confundida y
desdichada. Pero cuando hay alguien que se interesa por mí,
ya no me siento sola. Tener amigos Alateen significa mucho
para mí, y sé que ellos también se sienten contentos de que yo
me preocupe por ellos.
Se supone que en el Primer Paso admito que soy incapaz
ante el alcohol. ¿Cómo puede ser esto si yo ni siquiera bebo?
Lo que este Paso dice en realidad es que no tengo
dorninio sobre el alcohol o el alcohólico. No puedo hacer
nada respecto a la cantidad que ingiere, ni tampoco saber
por qué bebe o qué le ocurre cuando bebe. De hecho, no
puedo controlar la vida de nadie, excepto la mía.
También me piden que admita que mi vida se había
vuelto ingobernable. Sé que esto es cierto, al notar la forma
en que he estado viviendo. No estoy progresando en la
escuela y ya no traigo amigos a mi casa. Digo unas cosas que
de verdad no siento y estoy dejando que mi vida esté
dominada por la situación de mi hogar; además, ya no tengo
ningún dominio de mí mismo.
Aceptar el Primer Paso puede ser el comienzo para
recobrar nuevamente el dominio de sí mismo.
Pmra reflexionar
El Primer Paso es un buen comienzo, y después el resto
del programa me ayudará a ocuparme de mí mismo. Por
mucho tiempo he dejado que ciertas situaciones y personas
dominen mi vida. Hoy es el día en que puedo tomar el
control de mi propia vida.
Un niño pequeño tiene une especie de fe Inocente en su
padre o madre. Cuando esta criatura se está columpiando,
tiene fe en que su papá no va a dejar que se caiga. Confuí en él
Y si se cae, quizá no vuelva a subirse al columpio en mucho
tiempo, pues teme que el papá vuelva a dejarle caer. Tal vez
necesite cierto tiempo para recobrar su fe y su confianza.
Cuando vine a Alateen era como ese niño. Se me hacia
muy difícil tener fe después de tantas decepciones; necesitaba
una razón para creer. Siempre andaba preguntándome:
¿Porque?
Con la ayuda del Segundo Paso encontré el valor para
confiar otra vez. Creo en un Poder Superior a mí misma. No
importa qué nombre le dé a ese Poder; sencillamente creo
que esto me dará buenos resultados todos los días.
Para reflexionar
A veces necesito tener la fe de un nulo. El Segundo Paso sólo
me pide que crea, ni más ni menos. Si estoy dispuesta a
hacerlo y me libro de dudas y temores, éste será el principio.
Hoy confiaré en un Poder Superior a mí y espero que ese
Poder me muestre el camino.
A algunos de nosotros se nos dificulta mucho el Tercer
Paso porque no practicarnos el lema Suelta las riendas y
entrégaselas a Dios. NOS apegamos a nuestras viejas ideas.
Creernos que Dios está aguardando a que cometamos erro-
150) NOVIEMBRE
19

res para castigamos. O bien creemos que Dios quiere que


suframos al vivir con un alcohólico. Quizá nos sentimos
demasiado asustados para confiar en algo o alguien.
En el Tercer Paso hallarnos una palabra que significa una
gran diferencia. Confiamos nuestra vicia y nuestra voluntad
al cuidado de Dios, según nuestro propio entendimiento de
El. Un Poder Superior es como un amigo que realmente se
preocupa por nosotros y quiere comparar nuestros
problemas. Al saber esto nos desprendemos de las viejas
ideas. Es mucho más fácil confiar nuestra vida a un amigo y
tener fe en que las cosas se resolverán de la mejor manera.
Para reflexionar
Me resulta más fácil desprenderme cuando me acuerdo
que mi Poder Superior se preocupa por mí. El es mi amigo
en las buenas y en las malas. Y estará conmigo hoy y todos
los días para ayudarme.
Venimos a Alateen para aprender a vivir a gusto en un
hogar que ha sido afectado por el alcoholismo. Soportamos
muchas penas y temores. Muchos de nosotros dejamos de
confiar en los demás.
Alateen nos ayuda a encontrar de nuevo esa confianza.
Podemos hablar de nuestros sufrimientos a otras personas
que nos comprenden, y podemos plantearles preguntas sin
que nos hagan sentir torpes. Sabemos que lo que decimos en
las reuniones no será repetido. Esta clase de anonimato nos
protege, y al practicarlo aprendemos a confiar en otras
personas, y ellas a su vez empiezan a confiar en nosotros.
Para reflexionar
En Alateen me siento seguro porque confío en las
personas con quienes estoy. Puedo decir lo que pienso y saber
que nadie va a divulgarlo. En esta forma todos nosotros
recibimos mucha ayuda; así, pues, mi responsabilidad es
proteger el anonimato de i» jdemás.
He estado desde hace muy poco tiempo en Alateen y ya me
siento que pertenezco. Formo parte de un grupo de personas
que nos comprendemos y queremos entre sí. Puedo
enfrentarme a mis problemas gracias al compartir, al afecto
y a la esperanza que me dan los miembros Alateen. En vez
de contemplar el pasado o el futuro, ahora puedo vivir Un
día ala vez.
Algunos de los miembros son mis amigos más queridos y
me ayudan a sentirme satisfecha de mí misma. En esta edad
confusa de la adolescencia, en la que todos andamos
buscando un sitio adonde pertenecer, me siento realmente
agradecida por tener a Alateen.
Para reflexionar
Todo el mundo quiere sentirse en armonía con los demás
en algún lugar. Mi lugar lo encontré en Alateen. Sé que
pertenezco aquí por el bienestar que siento al estar con mis
amigos Alateen. Me hacen sentir que me necesitan y me
aceptan; y ésta es una de las razones que hace que yo siga
viniendo.
Yo era un experto para decir "sí" a todo. Quería caerle
bien a todo el mundo, así que decidí hacerle favores a o-tras
personas aunque no me alcanzara el tiempo ni supiera lo que
iba a hacer. Finalmente, quedé tan agotado que quería decir
"no" con mayor frecuencia. Pero con sólo desearlo no
cambió en nada la situación.
Adopté el programa para ayudarme a desarrollar la
capacidad de decir "no". De hecho, el verdadero problema
era lo que yo sentía. Al practicar los Pasos del inventarío fui
recobrando un poco la confianza en mí mismo, y me di
cuenta de que si yo quería cambiar y hacer algo por mi vida,
tenía que empezar a decirme "sí" a mí mismo.
Ahora cuando me piden que haga algo, lo pienso un poco.
Si francamente puedo hacer algo para ayudar, me alegro
diciendo que "sí". Pero si no puedo o el tiempo apremia,
puedo decir que "no" sin sentirme culpable. Ahora tengo el
respeto de mí mismo, y eso es lo que cuenta.
Para reflexionar
Si se me dificulta decir "no", ese es mi problema. Puedo
hacer algo por cambiarlo, si estoy dispuesto a practicar los
Pasos Cuarto y Quinto para trabajar en mi actitud hacia mí
mismo. No quiero decir "no" todo el tiempo, pero sí quiero
sentirme a gusto conmigo y poder elegir cuándo decir "sí" y
cuándo "no".
Antes de empezar a asistir a las reuniones no podía hablar
de mi padre alcohólico sin que me disgustara y rompiera a
151) NOVIEMBRE
19

llorar. Creía que era una tonta, de modo que intenté


disimular mis sentimientos fingiendo que no sentía nada.
En el programa aprendí que disgustarse no tiene nada de
malo, y que no es ninguna tontería ni nada de que
avergonzarse. Es algo natural. Y no hay razón para que diga
que no siento nada, porque sí lo siento, y eso forma parte del
ser humano.
Aún lloro y me disgusto, me enojo y me pongo de
malhumor. Pero ahora estoy aprendiendo a dominarme un
poco más, a medida que trato de ser sincera respecto a cómo
me siento.
Para reflexionar
No existen sentimientos buenos o malos -sencillamente
existen, y ya. Son una parte especial de mí misma. Alateen
me da la libertad de sentir y la oportunidad de compartir mis
verdaderos sentimientos con otros que comprenden.
Una noche un miembro Alateen compartió en el grupo su
opinión sobre lo que es preocupación.
"En cierta ocasión mi mamá me gritó por algo que yo no
había hecho. Me dijo que estaba tan enojada que se iba a
emborrachar. Me quedé muy preocupada y salí de la casa.
Pero mientras estuve afuera, todo el tiempo anduve
preocupada pensando en lo que me encontraría al llegar a
casa.
Cuando por fin regresé, respiré tranquila al ver que no se
había emborrachado. Pero al día siguiente presenté un
examen en el que no salí muy bien. La noche anterior había
estado tan preocupada que no me quedó tiempo de estudiar.
Ahora sé que no puedo darme el lujo de preocuparme de si
mi mamá se va a emborrachar o no; eso es decisión de ella.
Puedo acudir a mi Poder Superior y usar la Oración de la
Serenidad, y así no tendré que desperdiciar tiempo en
preocuparme por cosas que no puedo controlar."
Para reflexionar
De nada me sirve preocuparme si el alcohólico beberá o
no. Yo no puedo controlar estas cosas. En lugar de eso, hoy
me concentraré en las cosas importantes de mi vida y en
utilizar mejor mi tiempo.
Antes discutía y lanzaba improperios en vez de tomarme
tiempo para pensar. Así me metí en muchos líos. Cuando
estaba iracundo decía cosas que hubiera querido no decir. De
palabra y de obra hería gente inocente e hice muchas cosas
de las cuales me arrepentía después.
Ahora, con la ayuda de Alateen, antes de hablar estoy
empezando a pensar, y ya no son tantos los pleitos en mi vida.
Al pensar en la consecuencia de mis acciones, estoy
aprendiendo a no decir ni hacer cosas de las cuales mas tarde
me arrepentiré.
Pensar las cosas en vez de reaccionar me está ayudando
realmente a tranquilizarme.
Para reflexionar
Podría evitar muchos de mis problemas si sencillamente
usara el lema Piensa. Cuando sienta que van a surgir
problemas, usaré el lema Piensa para serenarme antes de
actuar. Esto me brindará una mejor oportunidad de con-
centrarme en mi paz mental.
Dios es como un superdramaturgo, y al mismo tiempo, su
propio director escénico, que trata de organizamos a todos
nosotros en una superproducción. Cada uno tiene un papel
único que interpretar, y El nos espera pacientemente para
que cooperemos unos con otros y sigamos Su guión.
La mayoría de nosotros estamos demasiado ocupados
para escuchar. Tratamos de actuar de acuerdo con nuestras
ideas personales en vez de actuar de acuerdo con las de El, y
acabamos molestos y discutiendo mucho. Pero Dios
permanece tranquilo, sereno y sosegado, absolutamente
seguro de que todo va a salir muy bien.
Cuando empezamos a practicar el Undécimo Paso
aprendemos aprestar atención y a trabajar conforme a Sus
instrucciones. En cierta forma, así sale muchísimo mejor.
Nos sentimos más felices y tranquilos cuando mejoramos
nuestro contacto consciente con Dios, siguiendo Su guión
original.

Para reflexionar
152) NOVIEMBRE
19

Cuando trato de gobernar mi vida, echo a perder las cosas.


El Undécimo Paso me enseña a seguir las instrucciones del
mejor director del mundo. Hoy escucharé a mi Poder
Superior y trataré de vivir el papel que El elija para mí.
Tengo dos amigos: uno llamado "Sí, pero", y el otro
"¿Qué tal si...?" Con la ayuda de ellos puedo quedarme de
brazos cruzados, y olvidarme del programa.
"Sí, pero" me da la razón para que rechace cuanto oiga.
Cuando alguien dice algo que tenga sentido y me sugiere que
lo intente en mi vida, k> único que tengo que hacer es llamar
a mi amigo "Sí, pero" y hallar una razón de que esa
sugerencia no me daría ningún resultado.
También mi amigo "¿Qué tal si...?" me ayuda de verdad.
Cada vez que tengo ganas de emprender algo nuevo, insiste
en llenarme de dudas y temores para que no me arriesgue en
lo absoluto.
Tener por amigos a "Si, pero" y a "¿Qué tal si...?" es una
forma certera de impedir mi crecimiento.
Para reflexionar
¿Cuántas veces he usado "Sí, pero" y "Qué tal si...?"
como pretextos para no tratar de vivir realmente el progra-
ma? Si quiero que la vida me rinda más mantendré un
Criterio abierto y tendré valor para aplicar lo que oigo en mis
reuniones en vez de buscar soluciones fáciles.
El Duodécimo Paso habla de un "despertar espiritual".
No tiene que tratarse de algo grandioso sino de algo muy
sencillo, por ejemplo un cambio en mí mismo, notar algo en
mí, que antes no había percibido. Es como despertar a un
nuevo sentimiento respecto a mí mismo.
El despertar espiritual surge al tratar de practicar un día
a la vez los Doce Pasos del programa. Puedo lograr que estos
instrumentos se mantengan bien afilados viviendo una vida
honrada y enfrentándome a las cosas con firmeza. Pero la
mejor manera de seguir creciendo es ayudando a los demás.
Ayudar a otros me ayuda muchísimo. Cuando me concentro
para ayudar a otras personas ya no me parecen tan grandes
mis problemas.
Para reflexionar
La labor del Duodécimo Paso consiste en difundir el
programa. Es como comerse una naranja. Si simplemente
me la como y tiro las semillas, al rato volveré a sentir
hambre. Pero si planto las semillas crecerán otras matas de
naranjas y habrán naranjas para mí y para los demás.

DIOS, CONCÉDEME SEREMDAD-Fácü de decú; pero


esta paz mental tan especial es muy difícil de lograr. No puedo
fabricarla por mí mismo. Por mucho que me esfuerce por
relajarme, sin ayuda no puedo alcanzar la verdadera paz
mental.
Necesito que Dios me conceda el don de la Serenidad para
poder ACEPTAR LAS COSAS QUE NO PUEDO CAM-
BlAR-especialmente a otras personas. Es difícil aceptar algo
con lo que no esté de acuerdo o no entienda. Duele ver cómo
se van destruyendo los que queremos, sin que podamos hacer
nada al respecto.
Parece que la aceptación llega mas fácilmente cuando
empiezo a entender el alcoholismo y a darme cuenta de que
nadie puede ser ayudado si no está lisio. Nada de lo que yo
pretenda podrá hacer que el tiempo se adelante. Si el lema
Suelta ¡as riendas y entrégaselas a Dios se encarga de ellos,
estaré en mejores condiciones de ayudar cuando llegue el
momento, si es que llega.
Para reflexionar
Al decir la Oración de la Serenidad le pido a Dios que me
conceda cierto sosiego. Me ayuda a aceptar el hecho de que
no puedo cambiar al alcohólico o a otras personas, ni su
153) NOVIEMBRE
19

manera de vivir. Hoy aceptaré las cosas que no puedo


cambiar y seguiré adelante viviendo mi vida.
El don de la serenidad que Dios me concede me da
VALOR PARA CAMBIAR LAS COSAS QUE PUEDA.
No puedo cambiar a nadie, pero yo sí puedo cambiar y
cambiar mi actitud.
Aveces siento miedo de hacerme cargo de mi vida. No
quiero fracasar. ¿A quién le echaría la culpa de mis errores?
A mí, y solamente a mí.
Alateen me ayuda a asumir la responsabilidad de mi vida.
Me da un programa para vivir, el cual me ayuda a cambiar y
a tener confianza en mí mismo. Me da la oportunidad de
rodearme de buenos amigos que me quieren, y de un Poder
Superior que me guía y cuida muy bien de mi vida.
Quiero cambiar. Al principio puedo fallar, pero si me
desprendo y escucho a mi Poder Superior obtendré toda la
ayuda que necesito para ordenar mi vida.
Para reflexionar
Por mucho que quisiera cambiar a las personas y las
cosas que me rodean, yo soy lo único que puedo cambiar. No
es fácil; necesité mucho tiempo para poder llegar hasta donde
ahora estoy y no puedo cambiar de la noche a la mañana.
Pero con la ayuda de Dios puedo empezar hoy.

Antes de Alateen empleaba mucho tiempo tratando de


cambiar las cosas que no podía cambiar e ignorando otras
que sí podía cambiar. Estaba agotado y confundido.
¿Cómo saber lo que puedo y lo que no puedo cambiar? A
veces tengo que arriesgarme y confiar en que Dios me dará
sabiduría para saber discernirlo.
Gracias a la Oración de la Serenidad estoy empezando a
descubrir la SABIDURÍA PARA RECONOCER LA
DIFERENCIA. Esto realmente ahorra mucha energía.
Ahora, en vez de tratar de cambiar a los demás, puedo
aceptar a la gente y las cosas que me rodean, y aprender a
vivir con ellas. Esto me da más tiempo y energía para
realizar lo que Alateen me dice que he de hacer aquí:
cambiar yo mismo.
Para reflexionar
El programa me ayuda a aceptar las cosas que no puedo
cambiar. Me da los instrumentos para cambiar las cosas que
puedo. Necesito sabiduría para reconocer la diferencia. Hoy
le pediré a El esa serenidad que es un don de Dios.
Cuando tengo celos sólo veo en los demás y en mí mismo
lo que quiero ver. Veo en la vida de los demás todas las cosas
buenas que tienen, y en la mía únicamente lo que no tengo.
En ambos casos sólo veo lo que quiero ver en vez de abarcar
una visión de conjunto.
Los celos se asemejan mucho a la autocompasión. Me
hacen sentir egoísta y centrado en mí mismo.
Pero sé que puedo cambiar. Necesito ver las cosas como
son en realidad. La clave consiste en pensar más en las cosas
buenas que hay en mi vida. Eso me ayudará a sentirme más
feliz con lo que tengo, y así poder apreciar las cosas buenas
que hay en la vida de los demás.
Para reflexionar
Me engaño a mí mismo cuando siento celos de otras
personas. Siempre salgo podiendo. El programa me enseña a
sentirme más a gusto conmigo mismo, y eso me ayuda a
practicar el lema Vive y deja vivir. Hoy trataré de "contar
mis bendiciones" y de ser justo conmigo y con los demás.
Acostumbraba a confiar en las promesas que me hacía el
alcohólico. Me emocionaba mucho hacer algo de lo que
habíamos planeado; pero luego me decepcionaba al verlo
llegar tarde a la casa, diciendo que se le había olvidado. Me
sentía mal, pero en mi interior iba reprimiendo esos
sentimientos que se convertían en resentimientos y
desconfianza.
El programa me enseñó a comprender que las promesas
no cumplidas pueden formar parte de la enfermedad del
154) NOVIEMBRE
19

alcohólico. Ahora no me fío de cosas como éstas y no me


siento tan decepcionada. Cuando el alcohólico hace una
promesa, trato de recordar que en ese momento él sí quiere
cumplirla. Pero si no la cumple, entonces procuro
comprenderlo y seguir adelante haciendo otra cosa, en vez de
estarle dando vueltas y más vueltas al asunto.
Para reflexionar
Promesas, promesas, -montones de promesas no
cumplidas me hacían pensar que al alcohólico no le
importaba. Ahora sé que eso no es cierto. Posiblemente el
alcohólico sí quiere cumplir sus promesas, pero no puede a
causa de su problema. Hoy recordaré que las promesas no
cumplidas no deben romper nuestras relaciones.

DICIEMBRE 26 (361

Cuando llegó el momento de ir a Alateen me sentía agotado y


harto de jugar como atonto en los pleitos entre mis padres. Creía
que era deber mío intervenir, pero siempre resultaba que me
quedaba atrapado en la línea de niego. Si trataba de ayudar a mi
mamá para que explicara su punto de vista, mi papá me pegaba.
Cuando intentaba defenderlo, entonces mi mamá gritaba y
chillaba. Hasta que por fin quedaba tan confundido y lastimado,
que ya ra sab& qué partido tomar.
Por eso le agradezco mucho al Primer Paso y a la idea del
desprendimiento. No es responsabilidad mía resolver los
problemas de mis padres. Hoy, cuando estén de pleito, me haré a
un lado, y dejaré que ellos mismos arreglen sus cosas. Esto me
ahorrará muchos golpes y heridas, y me dará más tiempo para
ocuparme de mis problemas personales.
Pam reflexionar
No es nada agradable quedarse atrapado entre dos personas
llenas de ira. Gracias al programa ya no tengo que adoptar esa
postura. Cuando deje de pensar en enredarme en asuntos ajenos,
progresaré mucho en mi práctica del desprendimienta Entonces
podré disponer de mucho más tiempo para concentrarme en lo
que realmente me interesa: mi propia vida.
¿Qué me trajo a Alateen? Quería que me quisieran. Me sentía
frustrado y aislado, y creía que todo el mundo recibía cariño,
menos yo. Vine aquí para lograr algo.
Encontré el cariño que andaba buscando. La gente se interesó
por mí y compartió sus sentimientos conmigo. Pero aprendí que
ese 'logro" depende mucho de mi buena voluntad de dar y ayudar
a los demás.
Hoy reconozco que si quiero seguir logrando lo que necesito del
programa, tengo que "regalarlo".
Para reflexionar
No puedo conservar lo que no regalo. Es algo curioso, pero
cierto, así pasa en el programa. "Regalarlo" significa compartir mi
experiencia, fortaleza y esperanza, comprometerme a servir en mi
grupo, realizar un trabajo como voluntario y estar en contacto con
el recién llegado. Más que nada, en una palabra: ser miembro
activo de Alateen.
A veces, como miembros Alateen, sentimos que no formamos
parte de la hermandad Al-Anon. ¿Qué hacer para que Alateen y
Al-Anon se unan más?
Podemos cooperar tratando de practicar en nuestra vida los
Doce Pasos y las Doce Tradiciones, compartiendo nuestra
experiencia, fortaleza y esperanza con los miembros Al-Anon en
juntas abiertas, involucrándonos en nuestro grupo. Distrito o
Zona; y escuchando y hablando con los miembros Al-Anon
cuando tengamos la oportunidad de hacerlo.
Alateen es parte de Al-Anon. Compartimos el mismo programa
porque todos nosotros estamos tratando de aprender a vivir con
problemas causados por el alcoholismo. Asimismo, compartirnos
la responsabilidad de ayudar a fortalecer a nuestra hermandad y
procurar que permanezca unida para que todos nosotros, Alateen
y Al-Anon juntos, podamos lograr la ayuda que necesitamos.

Para reflexionar
Como miembro Alateen formo parte de una familia: los
Grupos de Familia Al-Anon. Aunque tengamos diferencias,
trataré de tener presente todas las cosas que nos hacen iguales, y
155) NOVIEMBRE
19

procurar colaborar para mantenemos unidos. Lo mejor que


puedo hacer es seguir trabajando en mí mismo y compartir con los
miembros Al-Anon y Alateen que me rodean.

You might also like