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Recomendaciones para el manejo multidisciplinar del complejo esclerosis


tuberosa

Article  in  Medicina Clínica · May 2016


DOI: 10.1016/j.medcli.2016.04.004

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2 authors:

Alfons Macaya Roser Torra


University Hospital Vall d'Hebron Fundació Puigvert
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MEDCLI-3616; No. of Pages 6 ARTICLE IN PRESS
Med Clin (Barc). 2016;xxx(xx):xxx–xxx

www.elsevier.es/medicinaclinica

Artículo especial

Recomendaciones para el manejo multidisciplinar del complejo


esclerosis tuberosa
Recommendations for the multidisciplinary management of tuberous sclerosis complex
Alfons Macaya a,∗,1 y Roser Torra b,∗,1 , en representación del Grupo Español Multidisciplinar de Expertos
en Complejo Esclerosis Tuberosa (GEM-CET)♦
a
Sección de Neurología Pediátrica, Hospital Universitari Vall d’Hebron, Barcelona, España
b
Enfermedades Renales Hereditarias, Fundació Puigvert, IIB Sant Pau, Universitat Autònoma de Barcelona, REDINREN, Barcelona, España

información del artículo

Historia del artículo:


Recibido el 3 de marzo de 2016
Aceptado el 5 de abril de 2016
On-line el xxx

Introducción Siguiendo los recientes avances en el conocimiento científico


en el CET, estas recomendaciones pretenden armonizar el proceso
El complejo esclerosis tuberosa (CET) es una enfermedad rara asistencial de esta enfermedad en España.
(1/6.000-8.000), hereditaria, multisistémica y con un amplio espec-
tro fenotípico.
El protocolo diagnóstico-terapéutico adecuado del CET pre- Diagnóstico clínico complejo esclerosis tuberosa
cisa de coordinación entre múltiples especialidades pediátricas y
del adulto: obstetricia, genética, neurología, nefrología, urología, El CET es una enfermedad con gran variabilidad de expresión
cardiología, oftalmología, psiquiatría, dermatología, odontología, fenotípica. No se conoce ningún hallazgo presente en todos los
neumología y radiología. pacientes ni signo patognomónico de esta enfermedad. El diag-
Las presentes recomendaciones responden a la necesidad de nóstico viene determinado por la presencia de criterios clínicos
proporcionar pautas para facilitar un mejor conocimiento y acti- definidos en consensos de expertos (tabla 2): se definen 11 crite-
tud diagnóstico-terapéutica multidisciplinar de la enfermedad, rios mayores y 6 criterios menores1 que determinan 2 situaciones
un uso racional de las pruebas complementarias y el empleo diagnósticas:
adecuado de los tratamientos disponibles. Su elaboración se ha
basado en el consenso de 15 expertos en CET, a fin de pro- • Diagnóstico definitivo: presencia de 2 criterios mayores o un cri-
porcionar criterios de diagnóstico, tratamiento y seguimiento terio mayor y al menos 2 menores
específicos para cada manifestación, contando asimismo con el • Diagnóstico posible: presencia de un criterio mayor o al menos
punto de vista de la asociación de pacientes (tabla 1). Se especifi- 2 criterios menores
can niveles de evidencia de acuerdo con la metodología del Centro
para la Medicina Basada en la Evidencia (Universidad de Oxford)
La presencia de cualquiera de los síntomas y/o signos consi-
(http://www.cebm.net/?o=1025).
derados como criterios mayores y/o menores requiere la revisión
del resto de los criterios para establecer o descartar el diagnóstico
definitivo o posible de CET.
∗ Autores para correspondencia.
Correos electrónicos: amacaya@vhebron.net (A. Macaya), Estudio y asesoramiento genético
rtorra@fundacio-puigvert.es (R. Torra).
1
Ambos autores han contribuido por igual en el presente manuscrito.

Los nombres de los componentes del Grupo Español Multidisciplinar de Expertos en El CET sigue un patrón de herencia autosómica dominante con
Complejo Esclerosis Tuberosa (GEM-CET) están relacionados en el anexo. penetrancia prácticamente completa y expresividad variable.

http://dx.doi.org/10.1016/j.medcli.2016.04.004
0025-7753/© 2016 Elsevier España, S.L.U. Todos los derechos reservados.

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Tabla 1 (biopsia de vellosidad corial o amniocentesis) para tranquilidad


Retos en la asistencia al CET: la perspectiva de la Asociación Nacional de Pacientes
de los padres, pero no el diagnóstico preimplantación.
de Esclerosis Tuberosa

• Mejorar la formación de profesionales sanitarios para reconocer las Recomendaciones


diferentes presentaciones del CET
• Acceso a diagnóstico rápido y a información clara y exhaustiva sobre la
• Ofrecer asesoramiento genético a todas las familias con CET, inde-
enfermedad
• Protocolos de actuación consensuados que garanticen equidad de pendientemente de la indicación o no del estudio genético y/o del
diagnóstico, seguimiento y tratamiento resultado del mismo. (A)
• Creación de equipos multidisciplinares para el enfoque multisistémico del • Indicar estudio genético1 : ante sospecha diagnóstica sin crite-
CET
rios de CET definitivos, especialmente en niños2 ; para ofrecer
• Creación de unidades de referencia en las comunidades con mayor
incidencia de la enfermedad asesoramiento genético preciso y considerar distintas opciones
• Optimización de la transición para seguimiento en la edad adulta reproductivas3 ; para ampliar asesoramiento genético a otros
• Acceso a ensayos clínicos y resultados de investigación en general miembros de la familia. (A)
• Acceso equitativo a medicamentos huérfanos y productos sanitarios • El análisis molecular debe incluir la secuenciación de regio-
CET: complejo esclerosis tuberosa. nes codificadoras y regiones intrónicas (aceptoras y donantes
de splicing) del gen, que debe ser complementada con técnicas
que permitan detectar deleciones parciales o completas del gen
El diagnóstico del CET es fundamentalmente clínico, pero la (MLPA o matriz-CGH). (B)
detección de una mutación patógena en TSC1 o TSC2 confirma el • Si se detecta una variante de significado incierto, debe inten-
diagnóstico1 . tarse determinar su patogenicidad, bien mediante estudios de
En un 10-25% de los casos no se logra identificar mutación, lo segregación familiar, análisis in silico, bien, idealmente, estudios
cual no excluye el diagnóstico1 . El estudio genético es útil para la funcionales. (B)
confirmación precoz del diagnóstico, la prevención de complicacio-
nes y el asesoramiento genético preciso1 . Manifestaciones neurológicas

Asesoramiento genético Las manifestaciones neurológicas aparecen en un 85% de los


pacientes con CET. La epilepsia afecta a un 80-96% de los casos,
• Progenitor afectado con mutación patógena identificada: riesgo seguida de diversas manifestaciones cognitivo-conductuales como
de recurrencia del 50%, sin poder predecir el grado de afectación trastorno de conducta (40-50%), trastorno por déficit de atención e
en un feto portador; indicado el diagnóstico genético preim- hiperactividad (30-55%), autismo (25-50%), déficit intelectual (30%)
plantación o el diagnóstico prenatal convencional (biopsia de y distimia o ansiedad (20-50%). La neuropatología muestra túberes
vellosidad corial). corticales y líneas de migración radial en sustancia blanca en el
• Progenitor afectado sin mutación identificada: riesgo incierto; 70-90%, nódulos subependimarios en el 80-90% y subependymal
por la posibilidad de mosaicismo somático podría alcanzar el 50%, giant cell astrocitomas (SEGA, «astrocitomas subependimarios de
pero no sería posible ofrecer diagnóstico genético preimplanta- células gigantes») en el 5-20%4 .
ción o prenatal y habría que recurrir a neuroimagen fetal. Epilepsia: Su presentación típica en el primer año de vida son los
• Progenitores no afectados y no portadores de mutación identifi- espasmos infantiles. Pese a la respuesta generalmente favorable a la
cada en un hijo afectado: riesgo de recurrencia por mosaicismo vigabatrina, suelen asociarse a un pronóstico cognitivo desfavora-
gonadal (2-3%)2,3 ; indicado el diagnóstico prenatal convencional ble. Las crisis focales en niños y adultos deben tratarse según guías
de práctica clínica en epilepsia con otros fármacos antiepilépticos,
dieta cetogénica, estimulación del nervio vago o cirugía en casos
Tabla 2
Criterios para el diagnóstico de complejo esclerosis tuberosa seleccionados. Está en estudio el efecto antiepileptogénico de los
inhibidores mTOR, eficaces en un 50-60% de los casos en estudios
Criterio diagnóstico genético
abiertos5 . La cirugía resectiva del área epileptogénica tiene su
La identificación de una mutación patogénica de TSC1 o TSC2 implica
diagnóstico definitivo de CET
papel en casos refractarios a la medicación, alcanzando resultados
del 59% libres de crisis6 . Para las crisis frontales bilaterales o las
Criterios clínicos
atónicas, la callosotomía parcial proporciona libertad de crisis en
Criterios mayores
Máculas hipomelanóticas (≥ 3, al menos de 5 mm de diámetro) un 67% y la total en un 90% de casos7 .
Angiofibromas (≥ 3) o placas cefálicas fibrosas Tumores del SNC: Mientras que los túberes y los nódulos sube-
Fibromas ungueales (≥ 2) pendimarios son lesiones estables, los SEGA pueden crecer, en
Placa chagrín especial durante las 2 primeras décadas, y originar hidrocefalia
Hamartomas retinianos múltiples
Displasias corticales (incluye túberes y líneas de migración radial de
aguda. Constituyen la principal causa de mortalidad por CET en la
sustancia blanca cerebral) infancia y adolescencia. El diagnóstico precoz facilita el tratamiento
Nódulos subependimarios médico o quirúrgico, por lo que se recomiendan controles radioló-
Astrocitoma subependimario de células gigantes gicos periódicos8 , más estrictos en lesiones de diámetro superior
Rabdomiomas cardiacos
a 1 cm, marcado realce con contraste, localización próxima a los
Linfangioleiomiomatosis
Angiomiolipomas (≥ 2) (la asociación de linfangioleiomiomatosis y forámenes de Monro, calcificación incompleta o crecimiento entre
angiomiolipomas renales sin otros criterios no se considera suficiente 2 pruebas sucesivas. El tratamiento de elección es quirúrgico y suele
como únicos criterios mayores para el diagnóstico definitivo de CET) ser curativo. Los inhibidores mTOR están indicados en casos no
Criterios menores tributarios de cirugía y se ha demostrado su eficacia mantenida
Lesiones cutáneas en confeti
Defectos en esmalte dental (> 3)
durante al menos 5 años9 .
Fibromas orales (≥ 2) Menos frecuentemente pueden verse tumores de la glándula
Parches retinianos acrómicos pineal, glioblastomas multiformes, espongioblastomas, ependimo-
Quistes renales múltiples mas o neurinomas. Se han descrito aneurismas de la circulación
Hamartomas extrarrenales
intracraneal, donde afectan principalmente a la carótida interna10
CET: complejo esclerosis tuberosa. y quistes aracnoideos en hasta un 5% de los casos.

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El trastorno neuropsiquiátrico asociado a CET tiene una pre- • En caso de hipertensión arterial usar un antagonista del sistema
valencia del 90%. Se le adscriben 5 dimensiones: Psiquiátrica, renina-angiotensina pero evitar inhibidor de la enzima conver-
Conductual, Intelectual, Académica, Neuropsicológica y Psicosocial. sora de angiotensina si se administra un inhibidor de mTOR. (C)
Existen «checklists»11 en proceso de validación en nuestro país para • Realizar RM abdominal en el momento del diagnóstico del CET
el cribado de estos síntomas que, al permanecer infradiagnostica- con el fin de identificar AML pobres en grasa que no se ven bien
dos, son causa de discapacidad adicional en los pacientes con CET por ecografía (ECO) o TC.(B)
y sus familias. • Posteriormente se puede personalizar el seguimiento
anual/bianual con RM/ECO/TC según características del paciente
y de las lesiones. En niños se priorizarán la ECO/RM para evitar
Recomendaciones
la radiación acumulada.(B)
• Realizar angioTC para descartar la presencia de microaneurismas
• En niños menores de un año con CET y espasmos infantiles o
en AML > 3 cm.(D)
crisis focales se debe iniciar tratamiento con vigabatrina, con • Para AML con riesgo de hemorragia (≥ 3 cm) se debe valorar tra-
tratamiento hormonal o glucocorticoideo de segunda línea. (A)
tamiento con inhibidores de mTOR como primera opción (B)
• La elección del fármaco antiepiléptico en niños menores de un año
• La actitud conservadora en AML > 3 cm es una opción a discutir
y adultos con CET y crisis focales debe seguir las recomendaciones
con el paciente dado el riesgo de hemorragia espontánea.(C)
de guías de práctica clínica de epilepsia reconocidas. (A) • La embolización es la técnica de elección en caso de hemorragia
• La cirugía de la epilepsia debe considerarse en pacientes con CET
aguda. Si no se dispone de medios se realizará nefrectomía parcial
y epilepsia focal refractaria a tratamientos médicos. (B)
o total. (C)
• Deben efectuarse controles de resonancia magnética (RM) cere-
• La embolización selectiva con administración de glucocorticoi-
bral cada 1-3 años para monitorizar aparición o crecimiento de
des para evitar el síndrome postembolización es una segunda
SEGA a lo largo de las 2 primeras décadas de la vida. (D)
línea terapéutica en tumores > 3 cm, así como los tratamientos
• La cirugía es el tratamiento de elección en tumores únicos y rese-
dirigidos con ablación por energía. Si estos últimos no estuvieran
cables, con inserción de derivación de LCR cuando sea necesario.
disponibles, puede optarse por la nefrectomía parcial. Debe evi-
(D)
tarse en la medida de lo posible cualquier técnica que elimine
• Los inhibidores mTOR son de elección en caso de tumores múlti-
parénquima renal funcionante dada la condición de «crónico»,
ples, no resecables o ante contraindicación de cirugía. (D)
«múltiple» y «bilateral» de los AML. (C)
• Ante la duda de benignidad de una lesión renal en CET se reco-
Manifestaciones renales mienda realizar una punción biopsia diagnóstica (C).
• Si se diagnostica un tumor maligno renal, las opciones irán
La afectación renal del CET consiste en angiomiolipomas (AML), encaminadas a salvaguardar la mayor cantidad de parénquima
quistes y tumores. Los AML renales son tumores benignos formados posible.
por vasos anómalos, tejido muscular liso inmaduro y adipocitos12 .
Suelen ser bilaterales y múltiples, pueden detectarse por ecografía, Manifestaciones pulmonares
tomografía computarizada (TC) o RM y su incidencia aproximada
en el CET es del 55-75% en función de la edad12 . El riesgo de rotura El daño pulmonar característico en pacientes con CET es la lin-
y hemorragia espontánea se relaciona generalmente con el tamaño fangioleiomiomatosis (LAM), que también puede presentarse de
del AML, siendo especialmente frecuente cuando supera los 3 cm forma esporádica. Se caracteriza por la proliferación de células mus-
o existen microaneurismas > 5 mm. La tasa de crecimiento de los culares lisas atípicas en el intersticio pulmonar y por la destrucción
AML varía entre sujetos y entre tumores. Los quistes son relati- del tejido en forma de quistes. Conlleva pérdida progresiva de la
vamente frecuentes pero no suelen dar problemas excepto en un función pulmonar y, en fases avanzadas, hipoxemia. Ocurre más
2-3% de pacientes con CET quienes tienen en realidad un síndrome frecuentemente en mujeres, afectando al 30-50% de las mismas.
de genes contiguos con una deleción que implica a los genes TSC2 y Un valor en sangre del factor de crecimiento del endotelio vascular
PKD1, adyacentes en el cromosoma 16p13.313 . Este síndrome oca- D > 900 pg/ml es muy indicativo de LAM17 .
siona CET asociado a poliquistosis grave con nefromegalia quística La disnea de esfuerzo, que suele aparecer en la 3.a -4.a década,
al nacimiento, hipertensión e insuficiencia renal crónica terminal es el síntoma más frecuente de LAM. El neumotórax es una compli-
hacia la segunda década de la vida. Exceptuando este síndrome, la cación frecuente (un tercio de los pacientes) y rara el quilotórax18 .
mayoría de las lesiones renales en niños con CET son silentes, si Otras manifestaciones menos frecuentes son la hiperplasia multi-
bien la afectación aumenta con la edad. La incidencia de carcinoma focal micronodular de neumocitos, normalmente asintomática, y el
renal en el CET es similar a la de la población sana12 . Sin embargo, los tumor benigno pulmonar de células claras.
tumores se diagnostican a edad más temprana y presentan una gran Las pruebas complementarias para el estudio de la LAM son la
variedad histológica (tumores de células claras, papilares, cromó- TC de alta resolución de tórax y la función pulmonar (espirome-
fobos y oncocitomas), aunque suelen ser de agresividad baja. Se ha tría y difusión del monóxido de carbono). La espirometría muestra
demostrado la eficacia y seguridad del everolimus en el tratamiento un patrón obstructivo que permite monitorizar el curso de la
de los AML14,15 siendo aceptado como primera línea terapéutica enfermedad.
cuando hay riesgo de hemorragia16 . El tratamiento de la LAM incluye: medidas generales (vacu-
nación antigripal y antineumocócica), tratamiento farmacológico
(broncodilatadores e inhibidores mTOR), tratamiento de las com-
Recomendaciones plicaciones y trasplante pulmonar en fases avanzadas (difusión del
monóxido de carbono < 35%, disnea grado iii-iv, necesidad de oxi-
• Controlar evolutivamente la afectación renal de los pacientes genoterapia continua) de la enfermedad19 .
pediátricos con CET. (C)
• Medir la presión arterial y función renal de forma periódica en
Recomendaciones
adultos o niños con síndrome de genes contiguos (anual en ausen-
cia de insuficiencia renal). En niños pequeños con formas graves • Se debe realizar una TC de alta resolución de tórax como cribado
suele ser necesario asociar varios fármacos antihipertensivos. (B) de LAM en mujeres con CET a los 18 años y cada 5-10 años si

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es negativo o a cualquier edad en presencia de sintomatología pits dentales consisten en 3 o más pequeñas depresiones irregular-
respiratoria. A los varones con CET solo se debería realizar en mente distribuidas en la superficie anterior de los dientes incisivos
presencia de síntomas respiratorios. y caninos que están presentes en más de la mitad de los pacientes.
• Los inhibidores mTOR podrían estar indicados en pacientes con
LAM progresiva. Recomendaciones

Manifestaciones cardiovasculares • Es necesaria la evaluación dermatológica y odontológica minu-


ciosa al diagnóstico tanto en niños como en adultos. (E)
La mitad de los pacientes con CET tienen uno o más rab- • Dada la distinta cronología de aparición de los criterios cutáneos,
domiomas cardiacos20 . Son tumores localizados en las paredes se recomienda revisión anual dermatológica al menos durante la
ventriculares y/o septo interventricular y son más frecuentes infancia. (E)
en genotipos TSC2. Pueden ser sintomáticos cuando por su • Se recomienda la revisión odontológica cada 6 meses en niños
tamaño o localización causan obstrucción intracardiaca, arritmias y la realización de una ortopantomografía a los 6-7 años para
supraventriculares o ventriculares o, raramente, bloqueo auricu- descartar quistes mandibulares (o antes si existe asimetría o alte-
loventricular. Se observan fácilmente por ecocardiografía, técnica raciones en la salida de los dientes). (E)
diagnóstica de elección, aunque en algunos pacientes pueden ser • Es aconsejable utilizar la luz de Wood en niños con convulsiones
necesarias la RM o la TC. Pueden diagnosticarse prenatalmente y un examen de la piel negativo bajo la luz solar. (E)
durante el cribado por ecografía fetal. La mayoría de los pacien- • Es imprescindible la confirmación histológica de las lesiones cutá-
tes tienen buen pronóstico, puesto que los rabdomiomas tienden a neas en los casos de CET sin diagnóstico definitivo. (E)
involucionar espontáneamente. Su rara aparición o crecimiento en • Las lesiones desfigurantes o sintomáticas pueden tratarse con
la adolescencia justifica el seguimiento ecocardiográfico en CET. distintos métodos (láser colorante pulsado o ablativo, cirugía o
El tratamiento quirúrgico está indicado ante obstrucción inhibidores del mTOR tópicos u orales) pero la recurrencia de las
intraventricular grave. Las arritmias cardiacas son casi siempre lesiones es habitual. (E)
benignas, pero pueden requerir fármacos antiarrítmicos. En casos
graves puede recurrirse a la ablación con radiofrecuencia o la inser- Otras manifestaciones
ción de marcapasos21 .
Lesiones oculares: Los hamartomas retinianos afectan al 30-50%
Recomendaciones de los pacientes con CET y son un criterio mayor en caso de 2 o
más lesiones. La lesión típica en «palomita de maíz» es fácilmente
• El hallazgo de rabdomiomatosis cardiaca obliga a descartar el reconocible en la papila, pero son más frecuentes las formas pla-
diagnóstico de CET. (D) nas semitransparentes localizadas en la retina media y en el polo
• La ecocardiografía está indicada en todo niño con sospecha de posterior. La mayoría de las lesiones permanecen estables y son
CET. (D) asintomáticas. No obstante, se han descrito casos de crecimiento
• En el momento del diagnóstico, debe realizarse un ECG de y malignización23 . Las manchas acrómicas retinianas ocurren en el
12 derivaciones y repetirse cada 3-5 años. (D) 40% de los pacientes y se consideran un criterio diagnóstico menor1 .
• Existe indicación quirúrgica en pacientes con obstrucción intra- Afectación del sistema endocrino: Se han descrito hamartomas
ventricular grave. (D) en glándulas adrenales, pituitaria, páncreas, gónadas y tiroideos,
• Las arritmias cardiacas y los defectos de conducción deben tra- normalmente asintomáticos1 . Los tumores pancreáticos neuro-
tarse de forma similar a las de los niños sin CET. (D) endocrinos parecen ser más frecuentes en CET, aunque no son
considerados un criterio diagnóstico por el momento.
Manifestaciones dermatológicas y dentales Manifestaciones gastrointestinales: Un 10-25% de los pacientes
con CET presentan AML hepáticos. Los pólipos rectales han sido
Las lesiones cutáneas suelen ser un signo guía en el diag- eliminados recientemente como criterio menor de CET por su
nóstico del CET1,22 . Las máculas hipomelanóticas son el signo inespecificidad1 .
cutáneo más precoz y frecuente (95%) del CET. Debe haber 3 o más Lesiones óseas: Los quistes óseos, considerados durante mucho
lesiones > 5 mm de diámetro. La presencia de un mechón blanco tiempo un criterio menor diagnóstico, fueron eliminados en el
(poliosis) en el cuero cabelludo equivale a una de estas lesiones. último consenso de 20121 debido a su inespecificidad. Las lesiones
Los angiofibromas son 3 o más pápulas eritematosas que aparecen escleróticas óseas, detectadas en raquis al realizar TC pulmo-
en la zona central de la cara sobre los 3 años y aumentan su expre- nar o RM abdominal, son muy frecuentes en CET y suelen ser
sividad clínica paulatinamente. Son el segundo signo cutáneo más asintomáticas24 . Es importante conocerlas ya que podrían con-
frecuente (75%). Las placas fibrosas, de tono rosado o parduzco, fundirse con metástasis osteoblásticas. También se ha descrito de
son de tamaño y forma variable y se localizan en cuero cabelludo forma rara la afectación ósea en forma de displasia fibrosa.
y/o cara. Aparecen en una edad variable en el 18% de los casos. Cordoma: es un tumor raro que parece ser ligeramente más fre-
La placa chagrín es una lesión de tono blanquecino o de la piel cuente en CET. Los cordomas asociados a CET aparecen mucho más
normal, ligeramente sobreelevada y con aspecto de piel de naranja, precozmente, afectan con mayor frecuencia al sacro y son menos
localizada preferentemente en la región lumbosacra de la espalda. agresivos que los cordomas esporádicos25 .
Su prevalencia aumenta con la edad y está presente hasta en un
48% de los pacientes. Los fibromas ungueales aparecen durante la Recomendación
adolescencia y consisten en 2 o más lesiones nodulares de tono
rosado que se originan en la zona proximal de la uña, sobre todo de • Es aconsejable un control anual del fondo de ojo. (B)
los pies y pueden sangrar, doler y/o distorsionar el crecimiento de
la uña. Los fibromas gingivales aparecen durante la infancia y son Aspectos prácticos del tratamiento del complejo esclerosis
2 o más nódulos o placas que aparecen en las encías, la mucosa oral, tuberosa con inhibidores de mTOR
el paladar y la superficie dorsal de la lengua. Las máculas hipocró-
micas en confeti son lesiones poco frecuentes (3%), milimétricas, La conferencia internacional de consenso sobre CET de 201216
habitualmente localizadas en parte distal de las extremidades. Los reconoció el uso de los inhibidores de mTOR en el tratamiento

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de la enfermedad. El documento de consenso propone la utiliza- condiciones o ante infecciones menos comunes, hasta la resolu-
ción de inhibidores de mTOR como tratamiento de primera línea ción del proceso. (D)
del SEGA y AML renales y recomienda su uso en la LAM pulmo- • El tratamiento de la neumonitis no infecciosa incluye ajustes
nar. También menciona la evidencia preliminar de la utilidad de de dosis y/o interrupción temporal o discontinuación del trata-
los inhibidores de mTOR en el tratamiento de tumores de otros miento según la gravedad de los síntomas. (D)
tejidos, angiofibromas faciales, epilepsia y trastornos neurocon- • Están contraindicadas las vacunas vivas durante el tratamiento. Si
ductuales. En la actualidad solo el everolimus está aprobado para alguna es necesaria, hay que suspender el medicamento al menos
el tratamiento de SEGA y AML en el CET (http://www.aemps. 2 semanas antes y 2 semanas después para garantizar su seguri-
gob.es/cima/fichasTecnicas.do?metodo=buscar) y, en EE. UU., dad y respuesta óptima. Están permitidas vacunas atenuadas. La
recientemente se ha aprobado el sirolimus para el tratamiento vacuna anual antigripal está recomendada. (D)
de LAM. Las dosis deben individualizarse según el perfil del • Se recomienda la suspensión del tratamiento una semana antes
paciente9,14,26 : la toma concomitante de fármacos inductores hepá- de un procedimiento quirúrgico y reintroducirlo cuando se dé una
ticos puede requerir incrementos del 50-100% inhibidor de mTOR. correcta cicatrización. (D)
El everolimus y el sirolimus son bien tolerados en pacientes con
CET y presentan efectos secundarios parecidos. Son frecuentes las Transición del paciente pediátrico con complejo esclerosis
aftas orales y la hipercolesterolemia, en general leves, así como la tuberosa a la edad adulta
microalbuminuria, el aumento de LDH y la microcitosis con cierto
grado de anemia. En el ensayo clínico EXIST2 (everolimus para AML) Los pacientes afectos de CET precisan un seguimiento multidis-
alrededor de un 13% de las mujeres presentaron amenorrea, que ciplinar en un hospital pediátrico y que continúe en una unidad
se autolimitó14 . La neumonitis no infecciosa se observa muy rara- de adultos referente en esta enfermedad. En la práctica nos encon-
mente. Se han notificado casos de elevaciones de creatinina sérica, tramos con la dificultad para identificar unidades de adultos con
normalmente leves, y proteinuria. Se recomienda consultar la ficha experiencia en CET, resultando de todo ello la pérdida de continui-
técnica para conocer más en detalles los efectos adversos asocia- dad en el seguimiento integral de estos pacientes a lo largo de su
dos a cada fármaco. En cuanto al efecto inmunosupresor, se ha vida. Tanto los pacientes como las familias se sienten muchas veces
comprobado que la frecuencia, gravedad y tipos de infección son desorientados, desprotegidos al dejar atrás a su equipo referente y
parecidos entre los grupos tratamiento y placebo27 y sin variación esto genera mucha ansiedad.
a largo plazo28 . Debido a su efecto antiproliferativo, puede haber Dada la alta incidencia de manifestaciones neurológicas y
problemas de cicatrización tras cirugía29 . comorbilidad neuropsiquiátrica que padecen planteamos que este
proceso de transición debe ser coordinado por un neuropediatra
que tenga un conocimiento específico de la enfermedad y pueda
Recomendaciones establecer el vínculo en el proceso de transición del paciente de
acuerdo con las manifestaciones prevalentes de la enfermedad al
• La dosis inicial recomendada de everolimus en el tratamiento del momento del traslado con otros profesionales experimentados de
SEGA es de 4,5 mg/m2 /día. (A) diferentes especialidades de adultos. Se debería planificar la tran-
• En la práctica se empieza con 2-2,5 mg (10-25 kg), 5 mg sición en un momento de estabilización del paciente entre los 14 y
(25-40 kg), 7,5 mg (40-55 kg) y 10 mg (> 55 kg) cada mañana. Se 18 años30 .
recomiendan dosis más bajas en lactantes de menos de 10 kg e
incluso dosis a días alternos o 2-3 dosis semanales según efec-
Recomendaciones
tos adversos. Para sirolimus la dosis inicial es 1,5 mg/m2 /día.
(C) • Es necesario establecer un protocolo de transición del paciente
• El intervalo terapéutico de ambos fármacos se estima en
con CET a la unidad de adultos, donde se resuman todos los datos
5-15 ng/ml. Se aconseja determinar niveles 2 semanas después
relevantes del historial clínico facilitando la coordinación de los
del inicio del tratamiento o cambios de dosis del inhibidor u otros
especialistas que intervienen en su cuidado en cada etapa de la
medicamentos y luego cada 3-6 meses. (A)
enfermedad (tabla 3).
• La dosis inicial para el tratamiento de AML con everolimus es
• Asimismo, es crítica la participación activa del paciente y sus
10 mg/día (A).
familiares durante todo el proceso de transición y seguimiento
• Es recomendable la monitorización periódica de niveles plasmá-
multidisciplinar.
ticos y mantenerlos entre 5-15 ng/ml. (A)
• No hay recomendación específica para determinar la respuesta.
No debe esperarse una marcada reducción del componente cal- Conflicto de intereses
cificado pero sí del componente de los tejidos blandos.
• Deben controlarse hemograma, función hepática, renal, microal- AM y RT recibieron honorarios de Novartis Farma por testimonio
buminuria/proteinuria y, colesterol. Si existen efectos adversos de expertos y conferencias.
se pueden reducir las dosis o interrumpir el tratamiento según la
gravedad. (A) Anexo. Grupo Español Multidisciplinar de Expertos
• Se recomienda tratar las aftas orales mediante soluciones anesté- en Complejo Esclerosis Tuberosa (GEM-CET)
sicas con lidocaína o glucocorticoides tópicos con triamcinolona.
(D) Gema Ariceta, Hospital Universitari Vall d’ Hebron; Susana Boro-
• Si son graves o frecuentes se puede añadir el suplemento natural nat, Hospital Universitari Vall d’Hebron; Jaume Campistol Plana,
levo-leucina o reducir la dosis del fármaco (D). Hospital Sant Joan de Déu; Álvaro Casanova Espinosa, Hospital Uni-
• Se recomienda tratar la hipercolesterolemia modificando los versitario del Henares; Sixto García-Miñaúr, Hospital Universitario
hábitos dietéticos y, si es necesario, mediante administración de La Paz; Ángela Hernández-Martín, Hospital Infantil Universitario
estatinas. (D) Niño Jesús; Darcy A. Krueger, MD, Cincinnati Children’s Hospital
• Se aconseja mantener el tratamiento durante las infecciones Medical Center; Javier López-Pisón, Hospital Universitario Miguel
víricas comunes sin síntomas preocupantes que no requieren tra- Servet; Yolanda Angélica Palomo Castaño, Presidenta de la Asocia-
tamiento específico. Debe suspenderse cuando no se dan estas ción Nacional de Esclerosis Tuberosa; Fredy Hermogenes, Hospital

Cómo citar este artículo: Macaya A, Torra R. Recomendaciones para el manejo multidisciplinar del complejo esclerosis tuberosa. Med
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Cómo citar este artículo: Macaya A, Torra R. Recomendaciones para el manejo multidisciplinar del complejo esclerosis tuberosa. Med
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