Zúñiga Figueroa José Emiliano

Grupo: 1702
10/10/18
Diseño de Intervención
Una vez que se ha integrado toda la información recogida en un modelo de
formulación clínica, que permite identificar las relaciones existentes entre las
variables que controlan la aparición de los problemas de la persona, se está en
disposición de pasar a diseñar el tratamiento más adecuado. Dicho diseño será lo
más personalizado posible, esto mediante el establecimiento de una relación directa
entre formulación y tratamiento. El modelo de formulación, necesariamente único y
dinámico, es la base sobre la que construir y diseñar el tratamiento ajustado a la
situación y a las necesidades personales de cada caso.
Objetivos de la intervención
El psicólogo habrá de convenir con el usuario una lista de objetivos de la
intervención ajustada y pactada entre ambas partes. Dichos objetivos deben ser
realistas al mismo tiempo que ajustados a las necesidades y posibilidades del
usuario. De cualquier forma, la meta final de esta fase es el establecimiento de una
lista de objetivos. Siendo el cumplimiento paulatino de los mismos durante la
intervención, lo que irá indicando el final del tratamiento; suponiendo uno de los
mejores indicadores de su éxito relativo.
Diseñando un tratamiento
Ya habiendo dispuesto de la formulación y lista de objetivos, se está en disposición
de comenzar a diseñar o derivar un tratamiento. Para diseñar un tratamiento a partir
de la formulación es necesario identificar las variables sobre las que se quiere y se
puede intervenir, deben seleccionarse las técnicas para controlar o modificar dichas
variables y, finalmente, ha de especificarse un plan temporal y de recursos de
actuación. El primer paso en la derivación del tratamiento a partir de los modelos de
formulación clínica siempre será el de decidir sobre que variables intervenir; en
relación a esto existen algunas estrategias útiles a utilizar: Basadas en respuestas,
fundamentadas en las consecuencias, basadas en los antecedentes, relacionadas
con el desarrollo, con el propósito de cambiar la forma de enfrentamiento y basadas
en un diagnóstico.
Selección de técnicas
Una vez decididas la variables y situaciones objeto de intervención, se debe pasar
a la selección de técnicas psicoterapéuticas más adecuadas en cada caso. Si bien
se puede seguir la línea propuesta para el caso, al momento de ajustarlo para
nuestro usuario es útil considerar los siguientes criterios:
  Cada técnica seleccionada de disponer de un cuerpo de investigación que
avale su utilidad en el control de este tipo de variables, no necesariamente
trastornos
 Ha de existir la posibilidad real de puesta en marcha de cada técnica en
nuestro caso
 Debe disponer de un correcto entrenamiento antes de pasar a la aplicación
de las distintas técnicas de psicoterapia
 Hay que considerar los criterios económicos; la opción más barata es
siempre la más recomendable
 Se deben tener en cuenta las estrategias previas de las que dispone la
persona, su estilo de afrontamiento y otras variables implicadas. Igualmente,
es muy beneficioso contemplar la opinión de la persona respecto a qué
técnica le conviene más o le resultaría más fácil de llevar a cabo
Temporización del tratamiento
Finalmente se diseña la aplicación en el tiempo de las técnicas elegidas. Deben
contemplarse cuatro grupos de criterios:
 De gravedad: Se trata de comenzar la intervención por el problema que
cause mayor malestar a la persona
 Constructivos: Siempre habrá que comenzar entrenando a la persona en
aquellas habilidades más básicas, y posteriormente, ir construyendo sobre
las primeras
 De momentos críticos de la intervención: La investigación derivada de los
modelos de cambio propuestos ha puesto de manifiesto la existencia de
momentos críticos para el cambio y, por tanto, la intervención
 De adherencia: Para aumentar la adherencia al tratamiento parece
adecuado incluir en los primeros momentos técnicas muy eficaces o de
efectos visibles que produzcan cambios fáciles de identificar por las
personas, de modo que se facilite el “enganche” al tratamiento.