El documento describe el Estado constitucional, incluyendo su surgimiento como una nueva dimensión del concepto de constitución como norma fundamental, y las características esenciales como la división de poderes, la primacía de la constitución sobre la ley, y la obediencia a la constitución de todos los poderes públicos y particulares dentro de un marco legal establecido. También discute la existencia de una jurisdicción constitucional especializada como un elemento clave del Estado constitucional.
El documento describe el Estado constitucional, incluyendo su surgimiento como una nueva dimensión del concepto de constitución como norma fundamental, y las características esenciales como la división de poderes, la primacía de la constitución sobre la ley, y la obediencia a la constitución de todos los poderes públicos y particulares dentro de un marco legal establecido. También discute la existencia de una jurisdicción constitucional especializada como un elemento clave del Estado constitucional.
El documento describe el Estado constitucional, incluyendo su surgimiento como una nueva dimensión del concepto de constitución como norma fundamental, y las características esenciales como la división de poderes, la primacía de la constitución sobre la ley, y la obediencia a la constitución de todos los poderes públicos y particulares dentro de un marco legal establecido. También discute la existencia de una jurisdicción constitucional especializada como un elemento clave del Estado constitucional.
El surgimiento del Estado constitucional significó una nueva dimensión
del concepto de constitución, en el que adquiere el carácter de norma fundamental que sustenta todo el ordenamiento jurídico. Se plantean las características y los elementos esenciales del Estado constitucional como el marco institucional necesario instituido para la defensa de una serie de principios y valores que han sido elevados a un rango superior, con el fin de orientar la vida política, social, económica y cultural de un país. Para evitar que sean subvertidos o modificados arbitrariamente, se establecen algunos límites al poder de reforma.
El Estado Constitucional, que ha ejercido una influencia en la garantía
de la aplicación de los llamados derechos sociales, ha sufrido una evolución a la |par del modelo de Estado durante los últimos 200 años, que sin los movimientos sociales y los cambios socio-políticos, no se hubieran convertido en factores reales de poder en los modelos de Estado.
El Estado Constitucional
El marco institucional necesario a partir del cual se puede hablar de
una norma suprema que condiciona no solo el actuar de los órganos del Estado sino la validez del resto de normas que hacen parte del ordenamiento jurídico no es otro que el Estado Constitucional. Así que es preciso enunciar las características que configuran al Estado constitucional, y qué papel juega la constitución en este marco institucional.
El Estado Constitucional se caracteriza por tener una norma suprema
que rige sus actuaciones, que deja de ser un documento meramente enunciativo y programático, que no establece ningún tipo de obligación directa para las autoridades estatales, como ocurría bajo el esquema del Estado de Derecho clásico y por el contrario, a partir de su carácter de norma fundamental, esta se puede aplicar directamente, sin necesidad de un previo desarrollo legal. Esta transformación en la concepción del Estado se traduce en esto: la “novedad que trae la fórmula Estado Constitucional es la siguiente: La ley, por primera vez en la época moderna, viene sometida a una relación de adecuación, y por tanto de subordinación, a un estrato más alto de derecho establecido por la Constitución”.
En una sociedad democrática, existen ciertas características básicas
en que debemos someternos a la ley y acatar la Constitución dentro de un marco legal debidamente constituido, generándose así el llamado Estado de Derecho.
El Estado Constitucional propone la Supremacía de la Constitución en
el ordenamiento jurídico, reconociendo su carácter de norma de normas y su fuerza legitimadora.
LAS CARACTERÍSTICAS DEL ESTADO CONSTITUCIONAL
a) La División de Poderes:
A diferencia del Estado de Derecho donde se hacía la distinción
clásica entre los poderes legislativos, ejecutivo y judicial en el Estado Constitucional de Derecho, la denominada separación de poderes se da dentro de una relación distinta, ya que si bien es cierto en ambos casos se mantiene la división primaria y fundamental entre el poder constituyente y los poderes constituidos, al demostrar la realidad que, no existía garantías de su cumplimiento, en el Estado Constitucional de Derecho, teniendo en cuenta el presupuesto de que los poderes constituidos fueron fundados por el constituyente quien normativamente a través de la Constitución estableció sus competencias y límites de acción, el respeto a los mismos es la garantía de la diferencia entre poderes.
Esto ha cambiado radicalmente en el Estado Constitucional de
Derecho, en estos no se permite a ningún poder la facultad de tomar decisiones absolutas, ya que la validad de las mismas van a depender de su correlación con la Constitución, que los poderes del Estado e incluso de los particulares deben ejercerse dentro de los límites fijados por la Constitución, siendo los Tribunales constitucionales quienes jurídicamente tienen la misión de mantener y defender jurisdiccionalmente la constitucionalidad al resolver los conflictos entre los poderes constitucionales del Estado.
b) La primacía de la Constitución sobre la ley:
En el Estado de derecho, si bien es cierto se asemeja el Derecho con
la ley o con las normas dictadas en función de una ley, sucedía que frecuentemente se reconocía la significación jurídica de la Constitución, pero sin que se conocieran remedios a sus posibles contravenciones por parte de los poderes públicos. Sólo el Parlamento en cuanto representaba la soberanía popular en el desarrollo de su función legislativa se le reconocía competencia para interpretar de la Constitución, lo cual no evitaba conflictos con otros poderes que habían de resolverse por la vía política.
En el Estado constitucional de Derecho, no sucede esto, al elevarse la
Constitución al mundo de las normas jurídicas vinculantes e incorporar el principio de la supremacía de la Constitución sobre la ley y sobre todo el ordenamiento jurídico, se origina la consiguiente anulación de las normas en la medida que en su totalidad o en algunos de sus preceptos estas no se adecuen a la norma constitucional. Esta primacía de la Constitución sobre la ley se sustenta, en primer lugar, en la doctrina adoptada por Kelsen y hoy generalmente admitida según la cual el orden jurídico constituye un sistema jerárquico que, iniciándose en la Constitución, se extiende por los sucesivos momentos en el proceso de su creación a través de la ley, el reglamento, el acto administrativo, la sentencia y la ejecución, es decir, en el Estado Constitucional de derecho, todo el orden jurídico deriva de la Constitución y queda legitimado por su concordancia directa o indirecta con la Constitución.
c) La obediencia a la Constitución de la totalidad de los poderes
públicos y de los particulares.
Es propio del Estado constitucional de Derecho que todos los poderes
públicos particularmente los poderes legislativo, ejecutivo y judicial estén sujetos a la Constitución, es decir, que actúen dentro de los límites fijados por la constitución sin invadir la esfera de autodeterminación de las personas y la de autorregulación de la sociedad, también dentro de los límites de las competencias específicas le señala la Constitución a cada uno de ellos frente a las competencias atribuidas a los demás órdenes constitucionales.
Pero la subordinación a la constitución no solamente alcanza a las
entidades públicas, sino que se hace extensiva a los particulares, quienes en su facultad auto reguladora tiene la obligación de respetar los preceptos constitucionales y en su calidad de ciudadanos deben obligatoriamente defender la constitución.
d) La existencia de una jurisdicción constitucional.
En el Estado Constitucional de Derecho, al ser la Constitución una
norma sustantiva cualitativamente superior y recurrible jurisdiccionalmente, la estabilidad del régimen requiere una serie de dispositivos de control para asegurar que tanto los poderes públicos como los actos de los particulares se mantengan dentro de los parámetros constitucionales, e imposibiliten todas las posibles violaciones, en ese sentido serán válidos únicamente lo fielmente coherente con la constitución.
Uno de esos controles es la existencia de una jurisdicción
especializada en materia constitucional, representada por Tribunales Constitucionales que tienen la capacidad para decidir la constitucionalidad o no tanto de los actos del Estado como de los particulares, con ello se puede colegir que el Estado Constitucional de Derecho sólo será tal cuando se evidencia un conjunto de mecanismos de control de constitucionalidad entre ellos principalmente una jurisdicción especializada en materia constitucional, que se encargue de resolver los conflictos que se presenten entre una norma de menor jerarquía con la constitución , o los actos tanto de gobernantes como de gobernados que afecten derechos reconocidos constitucionalmente haciendo de esta manera al derecho constitucional en un verdadero derecho y no un simple postulado de principios políticos o de buenas intenciones.
Por último cabe resaltar que si no se respetan el principio de
constitucionalidad y los pilares fundamentales que lo sustentan, estaremos frente a un Estado con Derecho más no frente a un Estado Constitucional de Derecho. ELEMENTOS DEL ESTADO CONSTITUCIONAL
a) Existencia de una Constitución Rígida,
b) garantía jurisdiccional de la Constitución, c) aplicación directa de la Constitución, d) fuerza vinculante de la Constitución, e) sobre interpretación de la Constitución, f) interpretación conforme a la Constitución e g) influencia de la Constitución en el debate político, y un último elemento propuesto por el profesor Celestino Del Arenal, cual es h) la circularidad e integración normativa.
a) Existencia de una Constitución Rígida.
La rígidez constitucional se configura como criterio definitorio de la
supremacía de la Constitución, es ésta norma la que ilustra al ordenamiento jurídico y lo subordina, excluyendo las contradicciones entre la carta política y el ordenamiento en general, es decir, una Constitución se considera rígida cuando sus mecanismos de reforma o modificación, bien sea por el actor o por el procedimiento, son mucho más exigentes que los señalados para crear la ley.
“Una constitución rígida, en primer lugar es escrita y en segundo
término, está protegida garantizada contra la legislación ordinaria y en donde, además, se deben distinguir dos niveles en el que la Constitución está por encima de la legislación común, no pudiendo ser derogada, modificada o abrogada por ésta última” (Hoyos, 2015)
b) Garantía jurisdiccional de la Constitución:
Es la consecuencia lógica de la superioridad de la Constitución, ya que
“tiene la pretensión de vincular los demás poderes a los mandamientos constitucionales, pues de nada serviría la previsión de contenidos materiales o formales si no hubiera ninguna instancia propia de apreciación de lo que es conforme o contrario a la Constitución”. La garantía jurisdiccional se ata a la existencia de controles judiciales de constitucionalidad que brinden una garantía efectiva respecto del cumplimiento y desarrollo de la Constitución.
Actualmente se reconocen dos modelos o niveles de control de
constitucionalidad: el concentrado, es ejercido por un tribunal constitucional con competencia exclusiva para estudiar de manera abstracta la constitucionalidad de los mandatos jurídicos y el difuso o por vía de excepción, adjudicado en esencia a todos los operadores judiciales, quienes tienen la potestad de no aplicar una disposición jurídica en caso concreto por considerarla contraria al texto constitucional.
c) Fuerza vinculante de la Constitución:
Una Constitución “es una norma jurídica genuina, vinculante y capaz
de producir efectos jurídicos, elemento afinadamente adaptable al neo constitucionalismo ideológico” (Hoyos, 2015)
Guastini sobre el particular admite dos concepciones diferentes, “La
primera refiere la posibilidad de repeler leyes que contraríen de forma no aceptable a las normas constitucionales, sean estas formales o materiales; el segundo más específico, consiste en la consideración de todos los dispositivos de la Constitución como verdaderas normas jurídicas y por lo tanto, aptas para producir efectos jurídicos. Este último sentido tiene por objetivo romper con el carácter meramente político, que con frecuencia se solía atribuir a las normas materiales de la Constitución, principalmente en lo que se refiere a los derechos fundamentales” (Guastini, 2015)
d) Sobre interpretación de la Constitución.
Hace alusión a que ante cualquier vacío normativo que lleve al
operador judicial al plano de la duda, éste no deberá acudir a la discrecionalidad con aparente fundamento en los criterios auxiliares del a justicia, sino directamente a premisas constitucionales que den solución al problema. Esto sin lugar a dudad proyecta el carácter invasivo de la Constitución en las diferentes ramas del derecho, planteando que es obligación del operador judicial fundamentarse en disposiciones constitucionales para que ninguna decisión concreta resulte lesiva frente a valores y principios superiores.
e) Aplicación directa de la Constitución:
Es un desarrollo de la fuerza vinculante que debe tener la
Constitución, y básicamente se diferencia en que si en ese punto se habló de instrumentos que pudiesen hacer efectiva la aplicación de las directrices constitucionales, en este campo, se reflejará respecto de la posibilidad que tenga la norma constitucional de ser aplicada directamente, bien sea ante un vacío como en el caso de la sobre interpretación, o cuando se necesite ampliar una disposición normativa inferior o inclusive, cuando se requiera dejar de aplicar una norma vigente por vulnerar los postulados constitucionales en un caso determinado.
“De esta forma, la aplicabilidad directa consiste en un argumento
ideológico del neo constitucionalismo que propone un cambio de postura de los jueces, debiéndose aplicar directamente las normas constitucionales, sacando de ellas todos los efectos jurídicos posibles. Ante esa nueva postura, muchos de los derechos previstos en una Constitución adquieren una nueva dimensión, tal como lo afirma el profesor Vieira de Andrade, cuando manifiesta que ‘ya no es posible sostener que los derechos fundamentales solamente tengan aplicación en razón de la ley, sino que poseen validez en sí mismos, pues sólo la ley les facilita la aplicación, pero no su extensión’” (Hoyos, 2015)
f) Interpretación conforme a la Constitución.
Este elemento permite que el ejercicio del control de constitucionalidad
trascienda de la declaración de exequibilidad o inexequibilidad, sino que permite que el tribunal constitucional condicione la interpretación de determinada norma, siendo esa la interpretación válida a los ojos de la Constitución.
En primer lugar, es un punto de extrema importancia para la teoría neo
constitucionalista la defensa de una interpretación conforme a la Constitución, algo un poco más sofisticado que el simple control de constitucionalidad. Por interpretación conforme a la Constitución se entiende la posibilidad de que el tribunal constitucional atribuya una interpretación obligatoria a determinada ley, de modo que se evite considerarla inconstitucional. (Hoyos, 2015)
g) Incidencia de la Constitución en el debate político.
Se refiere en cierta manera a la necesidad de limitación que también
merece el poder decisorio de las mayorías. Es por eso que este modelo teórico ha sido tildado de antidemocrático e ilegítimo, sobre todo entre aquellos que no tienen en cuenta que el tipo de legitimidad que envuelve a esta corriente es la legitimidad de resultado y no de origen. Los neo constitucionalistas tienen la visión de que el principio democrático de las mayorías, sin restricciones, puede reproducir vulneración de Derechos Humanos a los sectores minoritarios, posición polémica, en especial a la luz del Constitucionalismo Popular y el Nuevo Constitucionalismo Latinoamericano.
Un concepto más correcto de democracia para el neo
constitucionalismo ideológico demanda exactamente una protección en contra del poder de decisión de las mayorías. Esta concepción diferenciada es una de las características que distingue al Estado constitucional del Estado democrático simple (Hoyos, 2015)
h) Circularidad e integración normativa:
Se refiere al diálogo jurídico que sostienen las normas de alcance
nacional en relación con las normas de plano internacional. Como ya se ha mencionado, el neoconstitucionalismo propende por una protección efectiva de los Derechos Humanos, es por eso que sus Estados constitucionales, por medio del bloque de constitucionalidad, se hacen parte de sistemas internacionales de protección de Derechos Humanos, convirtiendo las cartas internacionales sobre la materia, en norma de alcance constitucional.
“La interacción entre el Derecho Internacional de los Derechos
Humanos -DIDH- y el Derecho Constitucional, es el escenario en el que aparece el control de convencionalidad y tiene especial importancia debido a que la protección de los derechos fundamentales y humanos es uno de los propósitos esenciales del Estado constitucional y a su vez la fuente que originó el DIDH” (Suárez, 2015) CONCLUSIONES
El Estado Constitucional podemos definirlo fundamentalmente en base
a tres elementos: la supremacía del texto constitucional, el control, la limitación del poder el reconocimiento, respeto y tutela de los derechos fundamentales. El surgimiento del Estado constitucional significó una nueva dimensión del concepto de constitución, ya que adquiere el carácter de norma fundamental que sustenta todo el ordenamiento jurídico, en el que se plantean las características y los elementos esenciales del Estado constitucional como el marco institucional necesario instituido para la defensa de una serie de principios y valores que han sido elevados a un rango superior, con el fin de orientar la vida política, social, económica y cultural de un país.