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Queridos egresados:

En este día tan especial sus vidas soy yo, en representación de todos los desarrollamos la tarea de
enseñar, quien tiene el privilegio de despedirlos de este lugar que ha sido su casa durante, algunos
más y otros menos, casi una década.

Puedo mirarlos y recordar para cada uno una anécdota, algunas divertidas y otras no tanto. Puedo
mirarlos y verlos tan distintos y tan iguales, tan chiquilines y tan maduros, tan humanos y tan
combativos. Puedo mirarlos y verlos rodeados del amor de sus seres queridos. Puedo mirarlos y
verlos esperando que la vida los sorprenda.

Hoy una gran parte de su vida, la escuela secundaria, queda atrás y se abre ante ustedes un futuro
con infinitas oportunidades. Y fíjense que palabra curiosa que es oportunidad: significa “hacia un
puerto” y antiguamente era utilizada por los marineros cuando su capitán había decidido adónde
ir y sabía cómo llegar.

De esta manera, oportunidad es asumir total responsabilidad de nuestras acciones y empezar a


construir el futuro que realmente queremos. Como siempre les dije; nada se consigue sin
perseverancia, sin estar preparados para equivocarse, sin asumir riesgos. Sus oportunidades
dependen principalmente de ustedes.
Cuando una oportunidad aparece puede ser el comienzo de nuevas amistades, momentos
emocionantes, descubrimientos audaces. Las oportunidades son invitaciones para grandes
aventuras, boletos para experiencias inolvidables y puertas para mundos completamente nuevos.
Las oportunidades ayudan a ver quién soy, qué deseo y adónde quiero ir.
Es normal sentir miedo ante una oportunidad, pero de ustedes depende por cuanto tiempo.
Pueden pasar toda su vida imaginándose fantasmas, preocupados por el camino que tendrá el
futuro, pero lo único que estará siempre es lo que pasa aquí y las decisiones que tomamos en cada
momento. Muchos eligen su camino por miedo disfrazado en practicidad. Lo que realmente
queremos parece imposible, fuera del alcance y ridículo de esperar, entonces nunca nos
atrevemos a pedírselo al universo.

Las oportunidades requieren coraje, que las abracemos con todas nuestras fuerzas. Por eso, sean
libres, tomen, construyan y, si es necesario, reconstruyan sus propias oportunidades porque
pueden ser el comienzo de algo increíble. Trabajen por ellas y dejen ir el cómo es que podrían
llegar a suceder. No depende de ustedes saber eso, simplemente abran la puerta de su cabeza y
su corazón y caminen a través de ellas.

Y cuando se sientan perdidos, vuelvan a los recuerdos de esta etapa que llega a su fin: las batallas
ganadas, las guerras perdidas, las sonrisas, las miradas cómplices, las peleas superadas, los gritos,
las equivocaciones, aciertos, alegrías y tristezas. Que todo eso que guardaron en el alma y la
memoria los impulse a continuar esforzándose en maneras que se conviertan en mejores
versiones de sí mismos. Promoción 2018: les deseo el mejor de los éxitos en su viaje hacia nuevas
oportunidades.

Los quiero, verdaderamente los voy a echar de menos. No nos olviden porque los profes no lo
vamos a hacer. ¡Hasta siempre!

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