Universidad Autónoma de Guadalajara

Campus Tabasco
FACULTAD DE INGENIERÍA

Nombre del alumno: Jorge Alberto Izquierdo Pérez

Materia: Geología Parcial #: 2
Grupo: 1013 Fecha:
Prelectio #: Ensayo

Metamorfismo
El metamorfismo es la transformación de un tipo de roca en otro. Las rocas
metamórficas se forman a partir de rocas ígneas, sedimentarias o incluso de
otras rocas metamórficas. Todas las rocas metamórficas tienen una roca
madre, la roca a partir de la cual se formaron.

El metamorfismo que significa cambio de forma, es un proceso que provoca

cambios en la mineralogía, la textura y a menudo, la composición química de
las rocas. Tiene lugar cuando las rocas se someten a un ambiente físico o
químico significativamente diferente al de su formación inicial.
Se trata de cambios de temperatura y presión y la introducción de fluidos
químicamente activos.

Desde cambios ligeros a cambios notables, en ambientes más extremos, el

metamorfismo produce una transformación tan completa que no se puede
determinar la identidad de la roca fuente. En el metamorfismo de grande alto,
desaparecen rasgos como los planos de estratificación los fósiles y las
vesículas que puedan haber existido en la roca original. En los ambientes
metamórficos más extremos las temperaturas se aproximan a la de la fusión de
las rocas, durante el metamorfismo la roca debe permanecer esencialmente en
el estado sólido, pues si se produce la fusión completa entraríamos en el
ámbito de la actividad ígnea.

La mayor parte del metamorfismo ocurre en uno de estos tres ambientes:

1.- Cuando una masa magmática instruye en las rocas, tienen lugar el
metamorfismo de contacto o térmico. El cambio es impulsado por un aumento
de la temperatura en el interior de la roca huésped que rodea una instrucción
ígnea.
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2.- El metamorfismo hidrotermal implica alteraciones químicas que se producen

conforme el agua caliente ricas en iones circula atreves de las fracturas de las
rocas.

3.- Durante la formación de montañas grandes volúmenes de rocas están

sometidas a presiones dirigidas y a las elevadas temperaturas asociadas con
deformaciones a gran escala, denominado metamorfismo regional.

El metamorfismo regional tiene lugar en los límites convergentes.

Factores del metamorfismo
Los agentes del metamorfismo son el calor, la presión esfuerzo y los fluidos
químicamente activos.

El calor como factor metamórfico

El factor más importante proporciona la energía que impulsan el cambio
químico que proporciona la re cristalización de los minerales existentes o la
formación de minerales nuevos. Cambios provocados por el calor, fomenta la
re cristalización de granos minerales individuales, lo cual sucede, en particular,
con las arcillas, los sedimentos de grabo fino y algunos precipitados químicos.
Las temperaturas más elevadas provocan la re cristalización cuando los granos
más finos tienen a unirse y forman granos de mayor tamaño de la misma
mineralogía.

Fuentes de calor procede principalmente de la energía liberada por la

desintegración radioactiva y la energía térmica almacenada en el interior de la
tierra gradiente geotérmico. Los ambientes donde las rocas pueden ser
transportadas a grandes profundidades y calentarse son los bordes de placas
convergentes.

La presión como la temperatura, también aumenta con la profundidad con

forme aumente el calor de las rocas supra yacentes, las rocas enterradas están
sometidas a una presión de confinamiento que es análoga a la presión
hidrostática, donde las fuerzas se aplican por igual en todas las direcciones.
Cuando más se profundiza en el océano mayor es la presión de confinamiento.
Las fuerzas que deforman las rocas son desiguales en todas las direcciones y
se les denomina esfuerzo diferencial.
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A diferencia de la presión de confinamiento, que comprime la roca por igual, los

esfuerzos diferenciales son mayores en una dirección que en las demás. Las
rocas sometidas a esfuerzo diferencian se acortan en la dirección de la mayor
presión y se alargar en forma perpendicular a dicha presión.

Como consecuencia, las rocas implicadas suelen plegarse o aplastarse en los

ambientes superficiales, donde las temperaturas son comparativamente bajas,
las rocas son frágiles y tienen a fracturarse cuando son sometidas a esfuerzos
diferenciales.