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SIMPOSIO 1994
Dr.Guillermo Brudny
A pesar de ello, tal vez sea útil recordar cosas ya sabidas, que no sólo expresan el
pensamiento de Freud acerca de esta problemática, sino que son la base de la cual han
partido muchos de los desarrollos de los autores posteriores.
Pero en esa primera época, la sexualidad causante de las neurosis era la sexualidad
del adulto. En 1897 cristalizaron tres descubrimientos que orientaron en otro sentido las
investigaciones de Freud: el descubrimiento de la importancia de la fantasía en la génesis
de las neurosis, con el abandono de la teoría de la seducción; el descubrimiento del
complejo de Edipo; y el descubrimiento de la sexualidad infantil. Entre 1897 y 1905 los
conocimientos que Freud fue adquiriendo acerca de la sexualidad infantil lo llevan a
formular, en "Tres Ensayos", una teoría del desarrollo psicosexual. En esta teoría la
sexualidad está presente desde el nacimiento y sus características, evolutivamente
cambiantes, se manifiestan en forma predominante en las distintas zonas erógenas. En el
curso del desarrollo cada organización pregenital va dando lugar a la siguiente con la
intervención de la represión primaria. y las psiconeurosis no van a depender ahora de la
sexualidad adulta sino que van a tomar su fuente dinámica de la persistencia de la
sexualidad pregenital, manifestada en el Complejo de Edipo, que va a ser considerado por
Freud como el complejo nuclear de las neurosis. y en el contexto del Complejo de Edipo, es
el complejo de castración el desencadenante fundamental de la represión patógena de la
sexualidad pregenital.
En 1914, con la teoría del narcisismo las fuerzas en oposición son la pulsión de
conservación sumada a la libido yoica, localizadas en el Yo, que, por demandas del Ideal
del Yo reprimen la libido objetal. Al decir que la represión es ejecutada por el Yo en
respuesta a demandas del Ideal del Yo, estamos señalando un importante cambio cualitativo
en la concepción del conflicto. No se trata, como era el caso hasta ahora, de una oposición
entre distintas metas pulsionales, sino de un conflicto entre pulsiones sexuales y objetos
introyectados, que continúan desde dentro del aparato mental vínculos que hasta entonces
existían con los objetos en el mundo externo.
Antes de seguir adelante con la teoría de Freud, vamos a puntualizar como concebía
la patología en ese período. En la primera serie complementaria Freud incluía lo heredado
más lo vivenciado en la infancia, durante el desarrollo psicosexual. Durante el período
pregenital, el pasaje de una organización pregenital a la siguiente va dejando puntos de
fijación. Durante este desarrollo, cualquier vivencia especialmente significativa transforma
un punto de fijación en un punto disposicional. El desarrollo sigue su curso y estando ya en
la segunda serie complementaria, un suceso, que Freud llama conflicto actual
desencadenante, genera una situación que desde un punto de vista económico es
considerada como una privación externa, privación actual de la pulsión sexual.
Pero esta culpa, esta angustia frente al objeto externo primero y frente al Superyó
luego, tienen una causa primaria, la ambivalencia presente en todo vínculo con un objeto.
La ambivalencia no es un hallazgo nuevo de Freud. Pero en este momento la ambivalencia
tiene un status teórico distinto, no se trata simplemente de una reacción del Yo frente a una
frustración, como por ejemplo, la rabia de Juanito por que su padre amado era un obstáculo
a sus deseos edípicos con su mamá, sino que ahora la ambivalencia es expresión del
dualismo pulsional y explica que el sentimiento de culpa conciente o inconciente esté
presente en toda relación de objeto, complicando de esta manera las vicisitudes del
Complejo de Edipo.
Pero no solamente la desmentida conduce a una escisión del Yo, sino que Freud
afirma que la utilización de cualquier mecanismo de defensa conduce a una escisión en el
Yo. Este daño al Yo es fuente de patología por un lado, y por otro lado impone una seria
limitación a la acción terapéutica del análisis, junto a la angustia de castración y a la
envidia fálica, como señala en "Análisis Terminable e Interminable".
Para terminar quisiera ejemplificar esta evolución del pensamiento de Freud acerca
de la psicopatología, señalando cómo fueron modificándose sus afirmaciones sobre alguna
patologla. Para este fin tomaré a la perversión.