INSTRUMENTOS DE MEDICION A DISPONER EN ESTACIONES

METEOROLÓGICAS.

Una estación meteorológica es una instalación colocada estratégicamente para analizar el

comportamiento de distintos fenómenos meteorológicos que se desarrollen en un espacio específico
y en un período de tiempo determinado, con el objetivo de recopilar información que permita
estimar, y hasta predecir, su evolución.

Las mismas pueden ser de dos tipos: mecánicas o automatizadas; diferenciándose estos por
el hecho de que las Estaciones Meteorológicas Mecánicas (también llamadas tradicionales)
requieren personal calificado para la lectura de las medidas generadas y para el cambio de las
bandas de registro, mientras que las Estaciones Meteorológicas Automatizadas (conocidas por las
siglas EMA) almacenan y transmiten la información de manera automática. Más allá de esto, en
ambos casos se miden y registran distintas variables meteorológicas (como viento, temperatura,
precipitación, presión atmosférica, evaporación, humedad, radiación solar, nubosidad y visibilidad),
haciendo uso de instrumentos especiales, de los cuales destacan los siguientes:
Viento.
Veleta: Es un implemento mecánico que indica la
dirección horizontal del viento. Su forma y material puede
variar según el fabricante y el uso particular, pero siempre
debe contar con un elemento que se mantenga perfectamente
recto y paralelo al suelo al enfrentarse al viento; dicho
elemento se coloca a una altura mínima de 10m, evitando
cualquier obstáculo que pueda cortar el flujo del viento.
Comúnmente se presenten acopladas a un anemómetro y/o
con indicadores de los puntos cardinales.
Estos instrumentos no registran directamente la información, sino que la transmiten a una
memoria de acceso aleatorio (RAM) ubicada en la estación, por medio de señales eléctricas
emitidas por un motor sincro-repetidor o por un disco confinado de sensores infrarrojos.
Anemómetro: Se emplea para medir la velocidad del viento en función de las variaciones
de velocidad, posición, o presión hidrodinámica que éste genera sobre una pieza del instrumento o
un fluido ubicado en su interior. De allí que se hable, respectivamente, de anemómetros de cubeta,
de empuje y de presión hidrodinámica.
En este sentido, los anemómetros de cubeta son los más utilizados en estaciones
meteorológicas, tanto por su larga vida útil como por la precisión y simplicidad de medición, lo que
 se logra a partir del análisis de los cambios de velocidad que
experimenta un conjunto de cubetas (cónicas o semiesféricas) al
incurrir en sucesivos movimientos rotatorios en torno a un eje fijo
como consecuencia de la incidencia del viento sobre las caras
cóncavas de los cucharones (nombre alternativo de las cubetas). Por
lo general, no son instrumentos de registro; emplean impulsos
eléctricos generados por contadores para traspasar las medidas
obtenidas a una memoria RAM de la estación meteorológica. Dicho
esto, existen dos variaciones que cuentan con una faja de papel (llamada anemograma) donde
quedan registradas las medidas:
 Anemógrafo: Mide y registra la velocidad del viento.
 Anemocinemógrafo: Mide y registra la velocidad y dirección del viento

Sensores integrados: Básicamente combinan las funciones de las

veletas y los anemómetros, es decir que miden la velocidad del viento e
indican su dirección horizontal, manteniéndose el criterio de colocar el
instrumento a al menos 10m sobre el plano horizontal, sin ningún elemento
que obstaculice el flujo del viento. Se distinguen de los
anemocinemógrafos por no registrar datos.
Temperatura.
Termómetro: Es uno de los instrumentos de medición más populares de la
historia, siendo utilizado para estimar la temperatura atmosférica en cualquier
momento del día, bien sea aprovechando la variación de volumen que experimenta
una sustancia al ser sometida a cambios de temperatura mientras se encuentra
contenida en un cilindro de vidrio de pocos milímetros de diámetro interno
(termómetro de mercurio o alcohol), o mediante sensores eléctricos (termómetros
digitales).
Con respecto a su ubicación, los termómetros deben disponerse en el interior
de la estación meteorológica (por protección ante posibles daños y alteraciones en
las mediciones), a una altura de entre 1,5m y 2m sobre el nivel del suelo.
Vale mencionar que los termómetros digitales ofrecen la ventaja de
poder registrar y transmitir información de forma continua, cosa que no es
posible para los termómetros tradicionales. Sin embargo, estos últimos
derivan en tres tipos adicionales de termómetro que resultan
extremadamente útiles para efectos del seguimiento de las temperaturas
atmosféricas a través del tiempo:

 Termómetro de mínimas: Sirven para identificar la temperatura atmosférica más baja que se
presentó en el período de estudio. Cuentan con las particularidades de emplear alcohol en lugar de
mercurio y de presentar un rango de medición entre -44,5°C y 40,5°C.
Cumple con su función por medio de un índice coloreado de vidrio o marfil que se coloca
en el interior del cilindro y se mantiene sobre el alcohol por tensión superficial. Este índice es
arrastrado por el líquido cuando se contrae por temperatura, pero queda atrapado en la posición más
baja a la cual llegó, al darse la posterior dilatación del alcohol, quedando así definido el valor limite
deseado. Culminado el lapso de tiempo definido para la medición, se sacude el termómetro para que
el índice vuelva a entrar en contacto la superficie libre del alcohol.
 Debe colocarse dentro de la estación meteorológica, en posición horizontal y sobre un
soporte adecuado.
 Termómetro de máximas: Miden la temperatura atmosférica durante un periodo de tiempo
establecido y registran el valor más alto. Para ello, presentan un estrangulamiento hacia la parte
superior del cilindro de vidrio, el cual impide que el mercurio regrese al bulbo una vez que se ha
dilatado por efecto de la temperatura, de manera que la mayor medida se mantiene. Su rango de
medición va de los -31,5°C a los 51,5°C.
A diferencia del termómetro de mínimas, se coloca en la parte interna de la estación
meteorológica con el bulbo inclinado hacia abajo en ángulo de aproximadamente 2º con la
horizontal. Para lograr que el mercurio regrese al bulbo, tal como con los termómetros de mercurio
sencillos, debe sujetarse el cuerpo del termómetro por la parte inferior y luego sacudirlo con el
brazo extendido para forzar a la sustancia a desplazarse.

 Termógrafo: Registra gráficamente la temperatura a través de intervalos que varían entre un

día y una semana. Su mecanismo de medición y de registro puede ser tradicional o digital, pero
siempre debe cumplirse que se coloque dentro de la estación meteorológica para garantizar su
protección.
Geotermómetro: Conocidos alternativamente como “termómetros
de suelo”, consisten en termómetros tradicionales (generalmente de
mercurio) que se entierran en el suelo hasta una cierta profundidad (se
estila 5cm, 10cm, 15cm, 20cm, 30cm, 50cm y 100cm) con el fin de medir
la temperatura del material encontrado. Lo ideal es que todo el
instrumento esté enterrado para así disminuir la probabilidad de errores
por columna emergente, y que solo el bulbo entre en contacto con el
suelo, de manera que la medición sea precisa; por esta razón, el resto del
instrumento se coloca en el interior de cajones de plástico, cerámica o
materiales similares.
Sensores de temperatura atmosférica: Son propios de estaciones
meteorológicas automatizadas y funcionan por medio de mecanismos de
medición programados especialmente para cada sistema, de manera que las
medidas de temperatura atmosférica sean lo más precisas posibles. A diferencia
de los anteriores, los sensores de temperatura atmosférica se encuentran fuera de
la estación meteorológica, sin que eso signifique que deban dejarse a la
intemperie (se cubren con un accesorio de plástico llamado “pantalla solar”, que
le brinda protección del sol para evitar errores en las mediciones).
 Precipitación.
Pluviómetro: Se presenta como un instrumento para medir
la cantidad de agua de lluvia caída sobre un espacio determinado,
en un periodo de tiempo definido. Cuenta con una abertura
superior (de área conocida) por donde entra el agua, seguida de un
embudo que dirige al fluido hasta un colector, sobre el que se
realiza la medición de forma visual a través de marcas de
graduación en sus paredes; la medida obtenida se traduce en altura
de columna de agua en milímetros (mm), recordando que un
milímetro de agua recogida equivale a un volumen de un litro de
agua precipitada sobre un metro cuadrado de superficie
(1mm=1l/m2).
El lapso de tiempo transcurrido entre mediciones es,
generalmente, de 24horas, pero esto dependerá del uso y la capacidad del instrumento, y de las
precipitaciones recibidas. Indiferentemente de ello, el pluviómetro debe ubicarse con su parte
superior a 1m sobre el suelo y de forma perfectamente paralela a él para evitar pérdidas de agua y
salpicaduras, con un radio de 4m libres a su alrededor.
Pluviógrafo: Es una derivación del pluviómetro que permite medir y registrar la cantidad
de agua liquida que cae como precipitación sobre su posición durante un evento (con lo que queda
establecida la duración de éste). El sistema de registro puede ser de dos tipos:
 De sifón: Se vale de un tubo de sifón que se conecta a una cámara de acumulación de 10mm
de capacidad máxima, y que descarga hacia el fondo del instrumento. Mientras la precipitación se
mantenga, el agua se acumulará en la cámara hasta alcanzar la entrada del sifón, momento en el que
se vaciará completamente el contenido y se reiniciará el ciclo de funcionamiento del instrumento.
En este proceso, la variación del nivel de agua en la cámara se registra por medio de una pluma
inscriptora acoplada a un brazo rígido que se conecta a un flotador ubicado en el interior de la
recámara.
  De cangilones: Emplea un recipiente dividido en
dos compartimientos, los cuales se llenan uno a la vez.
Cuando uno de los compartimientos alcanza su capacidad
máxima, vuelca su contenido (0,2mm de precipitación) y
provoca que el otro comience a llenarse. Cada vuelco
representa una fracción de giro de una rueda dentada, que
se transmite, por medio de una leva, a una palanca con una
pluma inscriptora que registra la precipitación sobre una
banda de papel; puede darse también que el vuelco de los
compartimientos se registre (junto con el volumen de
precipitación) a través de sistemas de sensores electrónicos.

Nivómetro: Esta diseñado para medir la profundidad y espesor de la capa de nieve,

aguanieve o granizo que precipita sobre una zona en particular, durante un tiempo dado. Hay de dos
tipos: los nivómetros láser, que deben clavarse en el suelo para poder hacer el registro, y los
acústicos, que no necesitan entrar en contacto con la superficie de la nieve gracias a un transmisor-
receptor de ondas de frecuencia ultrasónicas.

Presión Atmosférica.
Barómetro: Es el instrumento utilizado para medir la presión ejercida por la atmósfera
sobre la corteza terrestre a determinada altura sobre el nivel del mar. Obligatoriamente deben
colocarse dentro de la estación meteorológica, pues la incidencia del viento y el sol pueden
provocar daños al cuerpo del equipo y errores de medición.
Puede ser de dos tipos:
 Barómetro de mercurio: Consta de un tubo de vidrio de unos 850mm de altura, que se
encuentra cerrado por el extremo superior y abierto por el inferior. Dicho tubo se llena de mercurio,
se invierte y se coloca el extremo abierto en un recipiente lleno del mismo líquido. Así se logra que
la columna de mercurio en el interior del tubo suba o baje según la presión atmosférica disminuya o
aumente (hallazgo realizado por el físico Torricelli en 1643).
 Barómetro aneroide: Está fundamentado en la deformación que provoca la presión
atmosférica sobre una cápsula metálica (usualmente de cobre o berilio), ondulada, elástica y
cerrada, en la que se ha generado un vacío casi absoluto. Dicha cápsula se coloca dentro de una
carcasa de metal y se une a un resorte y una aguja indicadora, los cuales muestran la lectura de la
presión atmosférica sobre una escala circular graduada según la deformación que se haya
producido.

Barógrafo: Cumple la función de un barómetro, y además grafica las variaciones de presión

atmosférica percibidas en un período de entre un día y una semana. Está constituido por un conjunto
de cápsulas aneroides apiladas, cuya deformación por
presión atmosférica se traslada a través de un mecanismo
a una pluma, la cual grafica la variación de la presión
atmosférica sobre una faja de papel cilíndrica que gira
cada cierto tiempo (según se configure el aparato).
No puede colocarse junto con los demás
instrumentos de la estación meteorológica, sino alejado
de ellos y de cualquier elemento que pueda generar
vibraciones o presiones que afecten su funcionamiento y
medición, dentro de una caja protectora ante golpes, agua
y suciedad.

Evaporación.
Tina vaporimétrica: Es esencialmente un tanque
metálico de 1,5m a 2m de diámetro, y entre 30cm y 40cm
de altura, que se llena de agua hasta dejar un margen libre
de 5cm respecto al borde superior a fin de definir la
cantidad de fluido evaporado en 24h, calculando para ello
la diferencia de volumen de agua contenida antes y
después del tiempo señalado.
Es recomendable colocarla junto con un anemómetro y con un termómetro sumergido en el
agua, para así estimar y considerar la influencia del viento sobre la evaporación del fluido.
Evaporímetro: Brinda un estimado de la evaporación que potencialmente puede darse en un
ambiente, gracias a un tubo de cristal lleno de agua destilada o de lluvia. Una vez que se ha llenado
el tubo, se tapa su extremo abierto con un disco de papel secante, el cual evita que el agua se
derrame al invertir el tubo con el lado abierto hacia abajo, permitiendo, sin embargo, su
evaporación. La medida se lee directamente en el exterior del tubo, en una escala graduada en
milímetros, de forma creciente desde arriba hacia abajo.
 Humedad.
Higrómetro: Permite obtener una aproximación de la humedad
relativa del aire de una locación, con lo que informa simultáneamente
sobre la cantidad de vapor de agua en la atmósfera.
El mecanismo de medición depende del tipo de higrómetro, pero
siempre se expresa en una escala porcentual que va de 0% a 100%. Los
tipos de higrómetro más comunes en estaciones meteorológicas son:
 Psicrómetros: Incorpora dos termómetros, uno húmedo y uno seco, a fin de
definir la diferencia de lectura entre ambos (en igualdad de condiciones). Para que
el método funcione ambos termómetros deben disponerse verticalmente,
acompañados por un aspirador, y debe cubrirse el bulbo del termómetro húmedo
con una tela fina (como la muselina) humedecida con agua. Las condiciones
indicadas garantizan que el termómetro seco indique la temperatura del aire,
mientras que el termómetro húmedo señale una temperatura inferior debido al
enfriamiento que experimenta al evaporarse parte del agua de la tela por la
corriente de aire que genera el aspirador, siendo posible calcular el valor de
humedad a partir de la diferencia entre las mediciones.

 Higrómetro de punto de rocío: Aprovechan el concepto de punto

de rocío (temperatura a la que una muestra de aire húmedo, a presión
constante, alcanza la saturación de vapor de agua) para medir la humedad
relativa del entorno a partir de la velocidad con que se presenten gotas de
condensación sobre un espejo enfriado por retroalimentación electrónica.
La detección de la condensación en el espejo es función de un mecanismo
optoelectrónico.
Con estos instrumentos se alcanzan una precisión de hasta 0,2°C,
pero presentan la desventaja de necesitar limpieza constante, un operador
experto y calibración periódica.
 Higrómetro capacitivo: Funcionan gracias a sensores de tipo
capacitancia, permitiendo medir la humedad relativa del aire analizando el
efecto de esta sobre la constante dieléctrica de un material polimérico y
oxido metálico: conforme la humedad relativa percibida por el sensor
aumente o disminuya, éste absorberá o liberará vapor de agua.
Su costo es elevado, pero igualmente lo es su precisión, siempre que
se mantenga adecuadamente calibrado y protegido.
Humidígrafo: Se valen de la capacidad del cabello para variar en longitud al estar sometido
a diferentes condiciones de humedad relativa para poder medir y, simultáneamente, registrar los
valores de este parámetro para un lapso de tiempo específico. Para detectar los alargamientos y
retracciones del filamento de cabello se dispone un sistema de palancas, que se conecta a un brazo
inscriptor de punta de plomo, siendo éste ultimo el responsable de registrar las medidas obtenidas.
Su escala va desde 0% hasta 100%, en intervalos de 5%, ofreciendo una precisión del 2% y
un rango de funcionamiento de -35°C a 70°C. Debe mantenerse en el interior de la estación
meteorológica.

Radiación Solar.
 Piranómetro: También llamado solarímetro, está diseñado para medir la radiación solar
global (difusa) recibida de todo el hemisferio celeste sobre una superficie horizontal terrestre.
Realizan la medición a partir de impulsos eléctricos generados por la diferencia de
temperatura inducida por la radiación solar sobre dos sensores especiales (uno negro y uno blanco).
Como es de esperarse, debe ubicarse al descubierto, expuesto al sol, a una altura de 1,20m.
Pirheliómetro: Se diferencian de los piranómetros porque miden la irradiación solar directa
que incide de forma perpendicular sobre una determinada superficie, para lo cual se colocan
normalmente al foco solar o sobre un montaje ecuatorial.

Heliógrafo: Se utiliza para medir con precisión el tiempo

de irradiación solar diaria sobre un punto de la Tierra, debiendo
ajustarse a la latitud geográfica (en la cercanía a los Polos se
coloca doble) y a la estación del año por la influencia de estos
factores sobre la intensidad de la radiación solar.
El más conocido y utilizado en meteorología es el
heliógrafo de Campbell-Stokes. El mismo presenta una esfera de
vidrio que se comporta como una lente convergente, que provoca
la ignición parcial de una cartulina registradora ubicada en su
parte baja. Si el sol brilla durante todo el día se forma un trazo
carbonizado continuo, mientras que, si la irradiación solar es sido
intermitente, el trazo se muestra discontinuo.
Radiómetro ultravioleta: Mide radiación solar de longitud de onda menor a 0.4µm.

Nubosidad.
Nefobasímetro: También conocido como ceilómetro, es un instrumento utilizado para
medir la altura de la base de las nubes en el punto donde se coloque, existiendo modelos que
permiten determinar, además, la concentración de aerosoles en la atmósfera. Consiste en un emisor
de luz ultravioleta y un receptor que se mueve formando un ángulo
entre 0° y 80°, los cuales se colocan a cierta distancia para, a partir
de este valor (L) y el del ángulo formado por el receptor con la
horizontal (α), definir la altura de las bases de las nubes (h) por
trigonometría:
Cateto opuesto h
tan α = = → h=L* tan α
Cateto adyacente L

Visibilidad.
Transmisómetro: Sirve para obtener información sobre la
visibilidad en un espacio a partir de la evaluación de la atenuación
que sufre un haz de luz, dirigido desde un emisor hasta un receptor situado a ciertos metros de
distancia, como consecuencia de las partículas existentes en la atmósfera. El resultado es un dato de
fuerza electromotriz, arrojado por el aparato receptor en concordancia con la cantidad de luz que
haya llegado a él.
 REFERENCIAS

Estaciones meteorológicas e instrumentos de más uso en

Costa Rica (s.f). Recuperado de
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