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CARACAS - VENEZUELA
INTRODUCCIÓN
Los modos de extinguir las obligaciones son aquellos actos jurídicos que
resuelven el vínculo obligatorio existente entre acreedor y deudor, es decir cuando
desaparece el vínculo que liga al acreedor y al deudor. La doctrina suele distinguir
entre modos de extinción ipso iure y modo de extinción ope exceptionis. Mediante
el presente trabajo se pretende discernir sobre el tema en cuestión a objeto de
satisfacer las necesidades del lector.
Las obligaciones se extinguen por una serie de hechos que han sido
reunidos bajo el título de modos de extinción de las obligaciones, que no tiene un
carácter uniforme y que no poseen todos una eficacia igual. El Vínculo de derecho
entre el acreedor y el deudor no estaba llamado a perpetuarse indefinidamente.
Debía llegar un momento en que el deudor se libertara de la carga de su
obligación y entonces esta última quedaba extinguida. El medio propio y natural de
extinguirse toda obligación era el pago, es decir, la satisfacción del objeto de
aquella por parte del deudor.
Capiti deminutio: Era una injusticia para con el acreedor, por lo que el
pretor dio a este, acción contra el que adquirió los bienes del deudor y
hasta el monto de dichos bienes.
Fraude de acreedores.
Se define el fraude como el engaño no violento por el cual una persona
obtiene beneficios económicos en perjuicio de otra. Hay distintos tipos de fraude,
pues el engaño perjudicial puede darse en variados campos. En este caso nos
referiremos al fraude del deudor. El deudor comete fraude hacia sus acreedores
cuando comprometido por una relación obligacional, dilapida su patrimonio,
dejándolo con saldo negativo, siendo el patrimonio, la garantía con la que cuentan
sus acreedores para satisfacer sus créditos. Ya en la antigua Roma era común
este tipo de engaños, y para evitarlos, se idearon distintos remedios jurídicos, para
no perjudicar a los acreedores, cuando el deudor se insolventara ex profeso.
El pretor creó el interdicto restitutorio, que permitía accionar contra el
comprador de mala fe, durante el año en que se había concretado la venta, para
que restituyera el objeto adquirido.
Si esto no se lograba, podía accionarse por su valor, por medio del
interdicto fraudatorium. El jurista Paulo creó la acción Pauliana, que permitía
revocar todos los actos de disposición del deudor a título gratuito, como las
donaciones, y los que se hubieran hecho a título oneroso mediando mala fe. Por
ejemplo, si se hubiesen vendido los bienes a precios demasiado bajos.
Por el contrario, los actos de disposición donde se hubiera fijado un precio real, no
se revocaban, ya que no producían empobrecimiento, reemplazando el dinero a la
cosa vendida, dentro del patrimonio del deudor. Por supuesto debía tratarse de un
deudor insolvente, ya que de lo contrario, si aún tuviera bienes en su patrimonio
para responder por sus obligaciones, los acreedores no podrían alegar perjuicio.
También debe probarse que el acto ha provocado la insolvencia del obligado, o la
ha acrecentado, y que el crédito que detenta el actor, sea anterior al acto del
deudor.
Sponsio: Como su nombre lo indica se trata del contrato verbal, que sólo podía
celebrarse entre ciudadanos romanos.
Al fiador (sponsor) se le pregunta luego de celebrado el negocio principal:
¿prometes darme lo mismo? La obligación contraída por el sponsor no se
transmite a los herederos.
Fidepromissio
Se realizaba por medio de una stipulattio accesoria —para que pudiera ser
celebrada por no ciudadanos—, rigiéndose por las mismas reglas que la sponsio.
Varias leyes reglamentaron en la República ambas clases de fianza. Así, la lex
Apuleia disponía que, habiendo varios fiadores, si uno de ellos pasaba más que su
parte, podía haberse reembolsar de los otros el excedente por medio de una
acción.
Fideiussio
Por medio del verbo empleado en la pregunta y respuesta (se sigue la mecánica
de la stipulatio) se da a entender que el fiador queda obligado por su fe y lealtad.
Efectos
Efectos de la Fianza entre el Acreedor y el Fiador: El acreedor puede
perseguir al fiador desde que la obligación se haya hecho exigible; no siendo
necesario perseguir al deudor principal (a no ser que este interponga el beneficio
de excusión). El fiador, antes de ser requerido de pago, puede pagar la deuda. En
este caso, las obligaciones del fiador son las siguientes: Entre fiador y acreedor
Obligaciones y derechos del fiador. El fiador es el garante del deudor principal.
Su obligación tiene carácter accesorio y subsidiario, contando con los
siguientes recursos:
a) Que el acreedor dirija su acción primero contra el deudor,
b) Si son varios fiadores se obliga por su parte,
c) Puede oponer todas las excepciones que el deudor principal podría
oponer.
Extinción
Por vía consecuencial con la extinción de la obligación principal.
Por haber ocurrido respecto de la fianza misma cualquiera de las causas por las
que se extinguen las obligaciones