Los niños pequeños usan el juego espontáneo para asimilar todo aquello que les rodea, adentran

sobre él las experiencias que han vivido, a través de él son capaces de expresar sus emociones
respecto a una situación establecida, experimentan, crean, imitan, repiten el comportamiento de
los adultos y las personas que le acompañan, cambian de rol para comprender el comportamiento
de unos y otros. En pocas palabras, es una herramienta para entender el mundo.

Entre los adolescentes es la forma que tienen de descubrir, experimentar, explorar, crear por si
mismos una experiencia divertida, es poco practicado el juego espontaneo en esta edad. Se puede
o no contar con materiales y su fin es únicamente el de entretener.

Es importante conocer las características que considero tiene esta modalidad de juego, sin
embargo debo aclarar que esto es una opinión empírica y de investigación, por lo tanto no debe
tomarse como una fuente cien por ciento absoluta.

EL ROL DEL ADULTO: Sentir que un adulto les acompaña, no les juzga y les ayuda a recordar las
normas y límites permite una convivencia armónica.

NO DIRIGIDO: El niño lo necesita para crecer con autonomía. Consta de sólo acompañamiento sin
dar órdenes, sólo estar atento. Está basado en la escucha y el respeto al niño, a sus intereses y
necesidades, a su ritmo individual de llevar la actividad.

IMAGINACIÓN: Quisiera compartir una experiencia que tuve en un curso de verano del que estuve
a cargo: Faltaban 10 minutos para ir al desayunar, así que los di para que los niños jugaran
libremente. Nos encontrábamos en una cancha. Había pequeños entre los 6 y 12 años, fui a ver si
ya estaba listo el comedor y cuando regresé pregunté a mis monitores que qué era a lo que
estaban jugando. Ellos sólo me dijeron que un niño gritó “¡SOY UN ZOMBIE, LOS VOY A MORDER!”
y todos empezaron a correr por todas partes evitándolo.

El juego anterior constó de 15 niños en un ambiente recreativo, sin embargo una sola persona
puede inventarse un juego para sí, apoyándose de juguetes, historias, bailes o simplemente de
nada ¡La imaginación es el límite!

REGLAS: Puede o no tenerlas, todo depende de la persona o grupo de ellas que haya iniciado el
juego.

TIEMPO: El inicio, desarrollo y fin de la actividad es libre

LIBRE: Es una característica sumamente importante, porque depende que tanta libertad pueda
tener, es ahí donde entra el rol del adulto: la supervisión. Cuando me refiero a libertad, englobo al
espacio, al tiempo, al desarrollo de la actividad. Pero si es necesario, se debe interferir si la
libertad se convierte en libertinaje.

Estas características pueden aplicar no sólo para niños pequeños, también para adolescentes,
incluso la del rol del adulto. En pleno siglo XXI, debemos encaminar a la juventud al buen camino.
No olvidemos nunca que el juego es la mejor herramienta de aprendizaje y socialización.
 Centro Regional de Educación Normal “Benito Juárez”

Licenciatura en Educación Física

Características del juego espontáneo que realizan los niños y los adolescentes.

Por: Viridiana Guevara Hernández

Segundo semestre

Pachuca, Hgo., 9 de marzo de 2017