You are on page 1of 3

Clarisse Nikoidski

cuando se abra la boca de la tierra


gritarán las sombras a sus madres
gritarán las madres
a sus hijos

cuando se abra la boca de la tierra


escucharemos una sola palabra de fuego
y la sed
nos recordará el sabor del agua

cuando se abra
sólo aquel silencio que puede dar el espanto
nos echará a la cara
la respuesta
que de ahí llega

La palabra
​Ida Vitale

Expectantes palabras
fabulosas en sí
promesas de sentidos posibles
airosas
aéreas
airadas
ariadnas.

Un breve error
las vuelve ornamentales.
Su indescriptible exactitud
nos borra.
Nombre en el viento
Ida Vitale

Busca ese nombre y se le esconde


en el orden del diccionario.
Olió la hoja y su recuerdo,
saltó la palabra a sus labios
y las letras danzaron,
unidas por un instante
antes de volver a ser libres.

El misterio escapó vuelto aire


en la increíble fragilidad del tiempo,
hacia aquel patio,
el sitio verde de la infancia,
un instante en la historia
de una casa
y ésta en la de un país.
Un coágulo agreste
cuyos cimientos pocos ya
conocen, aman.

La palabra infinito

Ida Vitale

La palabra infinito es infinita,


la palabra misterio es misteriosa.
Ambas son infinitas, misteriosas.
Sílaba a sílaba intentas convocarlas
sin que una luz anuncie su dominio,
una sombra señale a qué distancia de ellas
está la opacidad en que te mueves.
Van a algún punto del resplandor y anidan,
cuando las dejas libres en el aire
esperando que un ala inexplicable
te lleve hasta su vuelo.

¿Es más que su sabor el gusto de la vida?


La palabra

Enriqueta Ochoa

Ahora,
cuando se apaga el fuego que arrasó mis llanuras
con su gemido estéril,
convalezco bajo un sol tibio
con la fuerza enarcada.
Sabiamente me alimenta la miel
de una colmena inefable;
acaricio la exactitud de las celdillas
e infatigable, se enardece mi espíritu,
aletea,
protege el panal de la hermosura
para que no muera su reina
la palabra.

Rafael del Río (fragmento)

XV

Tenía tu voz ese toque profundo


de la expresión iluminada
que descubre el significado oculto de las cosas;
ágil y limpia tu palabra
tan pronto era agua que arde,
o viento tierno, transparente.
Ni tu silencio,
largo silencio inexplicable,
pudo menguar el esplendor del verso
grabado ya en esta línea recta de infinito.

You might also like