LA FE PÚBLICA

Ante el desenvolvimiento acelerado de la sociedad, las relaciones entre individuos,

instituciones públicas y privadas, el ordenamiento jurídico creo una figura en la que los actos
y hechos tuviesen certeza, veracidad en sus relaciones contractuales, se les confiere a
ciertos individuos capaces de la envestidura de fe pública como garantía y aceptación
forzosa ante otros. Dada así por el estado, otorga al notario la fe pública, herramienta para
coadyuvar en la seguridad jurídica.

La fe pública conlleva seguridad objetiva, establece y avala una garantía ante los hechos,
situaciones o actos demostrados a su valer.

Código Notarial, artículo 1°.- Notariado público

El notariado público es la función pública ejercida privadamente. Por medio de ella, el

funcionario habilitado asesora a las personas sobre la correcta formación legal de su
voluntad en los actos o contratos jurídicos y da fe de la existencia de los hechos que ocurran
ante él.

Tribunal Contencioso Administrativo, Sección II, Resolución Nº 320 - 2001

05-Oct-2001 Expediente: 96-000236-0177-CA

"V.- Por otra parte, el documento que se intenta anular, al ser público, hace plena prueba
de la existencia material de los hechos que el Notario afirma haber realizado – artículo 370
del Código Procesal Civil -. En términos generales, la función notarial consiste en anotar lo
que los otorgantes le indican y de ello, es precisamente, de lo que se da fe. Además, la fe
pública, por medio de la cual se da autenticidad a actos realizados en presencia de un
funcionario de esta naturaleza, ha sido definida como “Veracidad, confianza y autoridad
legítima atribuida a notarios (…) acerca de actos, hechos y contratos realizados o
producidos en su presencia; y que se tienen por auténticos y con fuerza probatoria mientras
no se demuestre su falsedad (…)” (Guillermo Cabanellas. Diccionario Enciclopédico de
Derecho Usual. Editorial Heliasta, 1989. Tomo IV. Pág. 37). Respecto al tema, la Sala
Constitucional, en su sentencia número 6821-97 de 15 horas 57 minutos del 21 de octubre
de 1997, expresó: “ II.- Posiblemente el concepto de fe pública se asocia a la función notarial
de manera más directa que a cualquier otra actividad humana y ello es elemento esencial
para que al Derecho notarial se le reconozca autonomía orgánica y científica, que se lo
define como la rama científica del Derecho público que constituyendo un todo orgánico,
sanciona en forma fehaciente las relaciones jurídicas voluntarias y extrajudiciales mediante
la intervención de un funcionario que obra por delegación del poder público.
Consecuentemente, el notario es el funcionario público, que por delegación del poder del
Estado, y revestido con plena autoridad para el ejercicio de su función, aplica
científicamente el derecho en su estado normal cuando a ello es requerido. Así, la doctrina
nacional señala que la fe pública notarial consiste en la potestad delegada en el notario por
el Estado, a efecto de que otorgue autenticidad a ciertos documentos contentivos de actos
o hechos jurídicos, que las partes voluntariamente otorguen o realicen en su presencia,
respectivamente, cumpliendo los requisitos de fondo y forma que la ley establece. Y en
consecuencia, la función de dar fe, es una función eminentemente pública, atribuida por el
Estado a un órgano o funcionario dependiente, como resultado de una necesidad social
que tiene por objeto dotar a ciertas relaciones jurídicas privadas de fijeza, certeza y
autoridad, para que surtan los efectos consiguientes. La fe pública se encuentra ligada de
una manera más directa a un profesional privado (notario), en vista del ejercicio coetáneo
de una función pública, que tiene como esencial objetivo dotar de autenticidad a los
documentos que con su intervención modelan las relaciones jurídicas privadas. (…) III.- LA
RESPONSABILIDAD DEL NOTARIO.- La sola idea de la responsabilidad tiene como
supuesto principal la violación de una norma jurídica por parte del sujeto obligado. Si el
ejercicio del notariado es una función del poder público, la responsabilidad es la garantía
de la actuación correcta y de estos principios generales se infiere que existe
responsabilidad del notario en los diversos aspectos del ejercicio profesional:
responsabilidad civil, penal, administrativa y disciplinaria (…)”. Como se obtiene de lo
expuesto, lo pasado ante Notario Público, en el entendido de que actúa en forma neutral y
objetiva, concede certeza y autoridad, desde que autentica, lo expresado en las escrituras,
y en estos términos, no tiene razón alguna este órgano colegiado para dudar de lo
consignado en la número ocho de once horas del siete de noviembre de mil novecientos
noventa y uno. Los autorizantes se limitaron a plasmar en el documento, la voluntad de las
partes contratantes, en los términos y modo en que pactaron, sin que por la sola
manifestación del señor Campos Brenes, sea posible dejar sin efecto lo indicado en una de
las cláusulas de esta escritura.-"
El cumplimiento de los deberes y obligaciones del notario que nutre la fe pública está en la
normativa a que es sujeto.

La imparcialidad asesora para perfecta formación legal de la voluntad de las partes, hacer
las advertencias del valor y trascendencias legales de sus renuncias, de conformidad con
el ordenamiento jurídico.

CN Artículo 6°.- Deberes del notario

Además de las obligaciones y los deberes resultantes de la presente ley, los notarios
públicos están obligados a tener una oficina abierta al público y brindar los servicios que se
les requieran, de lo cual solo pueden excusarse por causa justa, moral o legal. (…)

El notario debe ajustarse a los límites, esto implica que vele lealmente por el cumplimiento
de la ley en sus funciones y servicios por el principio de legalidad al que debe su
compromiso.

La imparcialidad en la función notarial es de suma envergadura en la que se manifiesta

hechos, sucesos o actos como ciertos.

Una definición de FE PUBLICA es la expresada por el letrado y jurista Iván Palacios

Echeverría en el libro, “Manual de Derecho Notarial” y que versa, “Potestad del notario
asegurar la verdad de hechos y actos jurídicos que le constan y deben de tenerse como
ciertos mientras no se demuestren su falsedad. Cuando no hay falsedad, sino simples
inexactitudes, no es necesario argüirla”.

Concepto
“La fe pública notarial es la potestad que el Estado confiere al notario, para que a
requerimiento de parte, y con sujeción a determinadas formalidades, asegure la verdad de
hechos y actos jurídicos que le consten, con el beneficio legal, para sus afirmaciones, de
ser tenidas por auténticas mientras no se impugnen mediante querella de falsedad.

Fe quiere decir creencia, convicción, persuasión, certeza, confianza en la verdad de algo

que no se vio pero se tiene, por la honradez o autoridad moral y jurídica del funcionario que
certifica o expide testimonio de ellos.

Además se puede citar Pedro Verdejo Reyes doctrinalmente, “El fundamento de la fe

pública notarial lo constituye la necesidad de certidumbre que deben tener los actos de los
particulares, a fin de que el Estado pueda proteger los derechos dimanantes de éstos
garantizándolos contra cualquier violación, y en tal sentido, la fe pública notarial llena una
misión preventiva al construir los actos que ella ampara en una forma de prueba
preconstituida suficiente para resolver e impedir posibles litigios. De dicho concepto se
desprenden las siguientes ideas:

• Necesidad de certidumbre es la primera idea que sale de este concepto de Verdejo. El

Estado mismo da la seguridad de que lo escrito en el instrumento se presume verdadero.

• Función preventiva. La función del notario latino es preventiva, lo que no tiene el notariado
anglosajón. El notario latino busca prevenir un conflicto.

• Prueba preconstituida. Se hace un contrato válido, apegado a derecho, diseñado para

que las partes eviten una controversia futura.

Fundamentación

a) Sin la fe que da el notario, comenzarían las dudas y los interrogantes sobre la validez de
los actos celebrados y las usurpaciones y suplantaciones de personas, los fraudes y
cualquier otra maquinaria delictiva, serían frecuentes.

b) Se establece la debida correlación entre titulares, partes comparecientes.

c) Evita la nulidad de las relaciones jurídicas.

d) Es calificación o juicio que sólo será desvirtuada muy difícilmente por la querella de
falsedad.

e) Es expresión de íntimo conocimiento del notario. Su Juicio se lo forma en base a

innumerables factores que llegan a formar su convicción, desde la fisonomía, el aspecto, la
voz las intenciones exteriorizadas, expresiones, consultas y tantas otras actitudes o
aspectos que lo otorgantes, que concretarán en la psiquis del notario el juicio de valoración
definitivo que servirá para la conclusión final: conocer, tener conocimiento, certeza,
seguridad de que tal persona es la que corresponde al titular cuyos derechos u obligaciones
viene a ejercer o cumplir.

f) Ese juicio lo emite el notario como perito en derecho y tiene un extraordinario contenido
moral. De ese juicio dependerá en muchos casos, la tranquilidad espiritual y material de
muchas personas.

Código Notarial Artículo 31°.- Efectos de la fe pública

El notario tiene fe pública cuando deja constancia de un hecho, suceso, situación, acto o
contrato jurídico, cuya finalidad sea asegurar o hacer constar derechos y obligaciones,
dentro de los límites que la ley le señala para sus atribuciones y con observación de los
requisitos de ley.
En virtud de la fe pública, se presumen ciertas las manifestaciones del notario que consten
en los instrumentos y demás documentos autorizados por él.

La fe pública está dirigida a una colectividad y es obligatoria, debe constar siempre en forma
documental, y el Estado la tiene y crea con el fin de brindar seguridad jurídica. Es deber
tener por cierto y verdadero lo que emana de ella. "El fundamento de la fe pública notarial
lo constituye la necesidad de certidumbre que deben tener los actos de los particulares, a
fin de que el Estado pueda garantizarlos contra cualquier violación". La fe estatal es
obligatoria: no depende de la voluntad de los individuos, la sociedad tiene el deber de creer
en ella y nace del Estado por su derecho a autodeterminarse de manera soberana; es así
como determina la forma de otorgar seguridad jurídica.

Características de la fe publica

 Imperativo jurídico: en el tanto que es forzoso tener por cierto lo que se contiene en
cualquier instrumento emanado por el Estado, por medio de un individuo con
carácter de fedatario público o una autoridad.
 Pasivo contingente: es decir, el efecto erga onmes, por lo que es oponible frente a
cualquier persona, el contenido de un documento autentico.
 El contenido de documentos que relatan hechos o actos con carácter de fe pública
se deben de tener como ciertos y verdaderos.
 El Estado, al no poder percibir por sus propios sentidos estos hechos o actos, crea
mecanismos por lo que puede creer en algo que no se ha captado personalmente.
  Todo lo anterior es válido mientras no se pruebe lo contrario por nulidad o falsedad,
según los procedimientos oficiales establecidos para tal efecto.

La fe pública por su naturaleza y para que tenga plenitud probatoria y cumpla su papel
demostrativo, es necesario que contenga los siguientes requisitos:

 Evidencia: es la relación que existe entre el autor del acto jurídico y del instrumento
notarial. Por lo tal, existe un autor de la fe pública y un destinatario Aquí, el autor
toma conocimiento directo a través de los sentidos (videncia) para la materialización
del acto, del cual dará fe. El notario narra el hecho propio y constata el hecho ajeno.
Es aquí donde el notario da importancia de su carácter de fedatario público, por
ejemplo en una certificación, que no solo da fe de los documentos relacionados con
la escritura, sino también de las partes, de las fechas y horas; de la lectura, de la
asesoría y del otorgamiento de la voluntad.
 Solemnidad o rigor formal: el acto de evidencia debe de ir acompañado por un
ritual, regulado por los trámites de ley.
 Objetivación: El hecho histórico debe de quedar fielmente objetivado en la dimensión
del papel. El documento exige corporeidad, por lo que narrado se debe en ese
momento plasmarse en un instrumento notarial
El notario debe dejar por escrito, dentro de un instrumento público, todo lo que ha
percibido de manera sensorial o por el dicho de otros.
 Coetaneidad o simultaneidad: Debe darse una unidad del acto o sea la evidencia, la
ceremonia del acto solemne y su conversión al papel, debe producirse coetáneamente
para poder interponerse como prueba.
 La exactitud: es la adecuación entre el hecho y la narración y dota de eficacia
probatoria erga omnes al instrumento.
 Integridad: proyecta hacia el futuro esa actitud

Igualmente para la fe pública notarial, se dice en este punto que todo lo que es narrado se
debe en ese momento plasmarse en un instrumento notarial. Es en este punto en que la
rogación de parte ocurre la dación de fe al invocar al notario en la narración de hechos ajenos
o mismos del notario.
La fe pública tiene varios fines, que se relacionan con el deber del Estado de otorgar
seguridad, autenticidad y veracidad a los hechos y actos jurídicos tanto en la administración
como de los particulares. Tales fines son:

• Fe pública como creencia: La fe que la sociedad deposita en lo afirmado por el notario,

o en el documento que autoriza, a pesar de que no haya podido ver, basta con lo afirmado por
el notario, en el caso de fe pública notarial.

• Fe pública como calidad: es la calidad que los notarios otorgan a ciertos documentos,
dándoles eficacia, que puede servir de prueba para demostrar ciertos hechos.

. Fe pública como atribución de poderes: Entre varias actividades desarrolladas por el

Estado, en el ejercicio de sus facultades, se encuentra la función notarial, que es realizada por
los notarios, con la misma nota de autoridad otorgada por el Estado

Clasificación de Fe Pública

Realizada por el Licenciado Iván Palacios Echeverría

 Judicial: Se le reconoce a las acciones judiciales que certifica el secretario respectivo.

 Registral: Los documentos que expiden los funcionarios competentes de los
respectivos registros.
 Administrativa: La de los servicios competentes para ello, de hechos, actos o
documentos de la Administración Pública.
 Notarial o extrajudicial: la expedida por los notarios públicos, en su función de
fedatarios públicos, bajo los requisitos de ley.

Al respecto, la jurisprudencia, en relación con el tema de la fe pública, ha manifestado

que: “la veracidad de las manifestaciones y consentimiento de las partes intervinientes,
elemento subjetivo, quedan al margen del documento y su autenticidad, y admiten prueba en
contrario, sin que ello vaya en detrimento de la fe pública notarial atribuida al instrumento
público. Es decir, no se ataca la verdad objetiva contenida en el documento, sino su
sinceridad, la cual no puede garantizar el notario... La fe pública notarial protege lo que el
notario afirma haber realizado el mismo o haber pasado en su presencia; pero no se extiende
a hacer verdaderas las manifestaciones de los otorgantes.” Por esa razón lo que dice el
Notario, cumpliendo con las solemnidades y exigencias de la ley, hace plena fe por sí mismo
y no necesita ser corroborada por otras pruebas: “Instrumento es probatio probata et non
probanda. Y para negar la fe del documento público en los hechos atestiguados por el Notario
de visus et auditus es indispensable que se produzca la prueba de su falsedad, porque si bien
es cierto que toda prueba puede ser combatida por otra prueba contraria, la ley hace a ese
principio general una grave restricción tratándose de documentos públicos, y prescribe que
no se puede atacar la fe debida a estos instrumentos si no mediante el juicio o querella de
falsedad que se promueve con sujeción a normas especiales fijadas expresamente en la ley
procesal. La verdad de lo que dice el Notario con relación a hechos en que él interviene por
ministerio de sus funciones, no se puede dudar, mientras no se demuestre que él es un
falsario, por lo que ninguna otra prueba es admisible en ese caso. “Contra scriptum
testimonium, non sscriptum non fertur”. La fe pública tiene como característica que el contenido
de los documentos dotados de fe pública pasan a ser un imperativo jurídico; a tener efectos erga
omnes; y para rebatir lo expresado por ellos es necesario probar lo contrario por nulidad o
falsedad por los procedimientos oficiales. Para lo cual los notarios deben de cumplir con los
siguientes requisitos: evidencia ; solemnidad; objetivación del hecho u acto; todo lo anterior debe
de hacerse de manera simultánea; resguardando en todo momento el notario la exactitud entre
el hecho u acto y lo narrado y la integridad a la hora de la materialización del hecho o acto en
un documento.

TIPOS DE FE PÚBLICA.

 Estatal: Estado da certeza de que los actos realizados por este son ciertos y
apegados a derecho.
 Notarial: facultad que otorga el Estado por ley, al notario por consiguiente, su fe es
pública.
FE PÚBLICA ORIGINARIA

La fé pública originaria es cuando se ha tenido en cuenta lo percibido por los sentidos del
notario público, por ejemplo, cuando se otorga ante dicho funcionario una escritura pública,
en este caso el referido funcionario da fé o brinda la misma de la manifestación de voluntad
de los comparecientes u otorgantes, entre otros tantos hechos, los cuales pueden aparecer
en el protocolo notarial.

FE PÚBLICA DERIVADA

La fé pública derivada es cuando lo que se certifica no ha sido percibido por los sentidos
del notario público, por ejemplo, cuando expide una copia certificada (de un libro de actas,
o de un registro de socios, o de una matrícula de acciones, entre otros tantos documentos),
o una legalización de reproducción, los cuales no conforman el protocolo notarial.

FE PÚBLICA NOTARIAL

Donde el Notario es el profesional del derecho que está autorizado para dar fe de los actos
y contratos que ante él se celebren. Es decir, que los notarios dan fe de actos (entre los
que podemos citar los siguientes actos y contratos.

FE PÚBLICA ADMINISTRATIVA

La brindan los funcionarios públicos de las instituciones públicas pueden expedir copias
certificadas de hojas de los expedientes administrativos que ante ellos se tramiten y a esta
fe pública se le denomina fe pública administrativa.

FE PÚBLICA REGISTRAL

La que brindan los Registradores Públicos que se aplica cuando los Registradores Públicos
expiden copias literales del archivo registral, es decir, se refiere al publicidad formal por la
cual se garantiza que toda persona acceda al conocimiento efectivo del contenido de las
partidas registrales y, en general obtenga información del archivo registral.

FE PÚBLICA JUDICIAL
La que brindan los especialistas judiciales a los cuales se les denominaba secretarios de
juzgado, respecto de las copias certificadas que ellos expiden, y demás diligencias que ante
ellos se celebran, entre otros.

FE PÚBLICA CONSULAR

La que brindan los funcionarios de los consulados.

FE PÚBLICA DEL DERECHO ECLESIASTICO

La que brindan los funcionarios de la Iglesia Católica para efectos de expedir copias de las
partidas de matrimonio de los matrimonios religiosos ya celebrados.

Conclusión

Al término de este trabajo la información recopilada da idea de la responsabilidad en que

se debe manejar el notario con esta envestidura y su aplicación en el ejercicio profesional.
La credibilidad de los actos y contratos deben apegarse a las formalidades, a los buenos
principios morales, honorables de un fedatario, quien debe ser un representante digno en
sus actuaciones, brindando seguridad jurídica y certeza en las transacciones de las que da
fe.

Bibliografía
Naturaleza Jurídica De La Fe Pública Notarial, María Leoba Castañeda Rivas.

Fe Pública, Fernando Jesús Torres Manrique

Fe Pública Notarial, CIJUL

La Fe Publica Notarial en Actos Protocolares y Extraprotocolares de la Mala Praxis, Tesis de

Angelo Cavallini Vargas 2002

Código Notarial ley 7794