CapiruLo 2
EI curriculo prescripto
ingresa al Jardin
de Infantes
diagnéstico como herramienta clave
su traduccién o contextualizacién
Maria Renée Candia
Griselda Callegari
Contextualizar e! curriculo implica ia puesta en didiego
entre lo que el disefio curricular, prescribe que “deberia
ser” ensefiado con aquelio que ios nifios “realmente
necesitarfan aprender”. Este didlogo tiene como princi-
pal protagonista, ademas det curricule prescripto, fa
presencia de tres tipos de diagnéstico: el socio-comuni-
fario, el institucional y el dulico.
La tarea diagnéstica debe ser revalorizada y dotada de
sentide pedagégice come base para el disefio de pro-
yectas institucionales y propuestas didacticas contex—
tuatizadas.
Para comprender el “sentido pedagégico” de la taree
diagnéstica se presentan fragmentos variados de diag-
nésticos y las propuestas que de ellos podrfan despren-
derse, tomando como referencia diferentes contextos
sociales y urbanes.La educacién en los primeros afios / 81
Del curriculo prescripto
u oficial a la construccién
del Proyecto Curricular
de la institucion
El proceso de reformas curriculares de
los noventa puso en escena nuevos tér-
minos que atin estan intentando ser
comprendidos y apropiados por los
docentes. Asi aparecen conceptos tales
como curriculo prescripto o curriculo off-
cial o diserios curriculares jurisdicciona-
les proyectos educativos institucionales
- proyectos curriculares institucionales -
planes anuales - propuestas didacticas -
contextualizaci6n del curriculo~.
Estos términos dan cuenta de concep-
ciones y procesos curriculares que estan
directamente relacionados con el pasaje
de un sistema educativo centralizador
~con un alto nivel de prescripcion y
control— a un modelo de regulaci6n del
curriculo, en donde las instituciones tie-
nen cierto margen de autonomia en la
toma de decisiones curriculares (J.
Gimeno Sacristin, 1988). Al respecto,
Gvirtz y Palamidessi (2006) dan cuenta
de este proceso de descentralizacion
utilizando el término autonomia mode-
rada y nosotros referimos a la autono-
mia relativa, como veremos en los
parrafos siguientes.
El modelo centralizador fue caracteristi-
co de la educacién primaria en América
Latina, ejerciendo el Estado (a través de
los ministerios 0 secretarfas de Educa-
cién) un rol protagénico en el disefo y
control del curriculo, estableciendo nor-
mas, determinando contenidos y méto-
dos de ensefianza (prescribiendo de
manera detallada qué se debia ensefiar
y cémo). En este modelo, el docente
era considerado como un ejecutor,
siendo su tarea supervisada por sus
superiores de manera estricta, continua
y sistematica, Los cuademos de clase se
convirtieron en uno de los dispositivos
de vigilancia més utilizados para contro-
lar lo ensefiado (Gvirtz,1997).
La educacion infantil vivié una situacion
diferente. Al no ser obligatoria, no conte
con un documento oficial que prescri-
biera qué ensefiar. Recién hacia fines
del siglo XX, en gran parte de los paises
latinoamericanos se comienza a estable-
cer su obligatoriedad, al menos para la
seccién de cinco afios, y con ella apare~
cen los primeros documentos oficiales
determinando qué ensefiar (curriculo
prescripto).
‘Actualmente, la mayoria de los paises
latinoamericanos cuenta con un disefio
curricular 0 curriculo prescrito u oficial
en el marco de un modelo mas descen-
tralizado, lo cual permite comprender —
en este nuevo contexto— el concepto di
autonomia “relativa”. Hablamos de
una autonomia porque, como veremos
en el capitulo siguiente, hay decisiones
institucionales que permiten imprimirle
una identidad propia a las propuestas
que el jardin de infantes lleve a cabo e”
materia curricular. Y “relativa", porque
no se puede desconocer la existencia
de un disefio curricular —en tanto ins-
trumento oficial y legitimo— a través d
cual el Estado ordena las practicas de
ensefianza y determina el saber oficiali-
zado que es deseable ensefiar.
Cuando el documento oficial es recibi
por cada institucién, se inicia un proce
so de interpretacidn o traduccion, Securriculum prescripto u oficial
el documento escrito elaborado
Ja Administracién (secretarfas
ministerios de Educacién) que se
sponde con un determinado
ecto politico-educativo, Es una
puesta oficial formalizada en
effo curricular o en un plan
estudios (G. Friggerio y otros,
92).
sdas estas conceptualizaciones
3remos como sindnimos curricu-
prescripto, curriculum oficial y
efo curricular.
ean asi ciertos margenes de liber-
las escuelas para tomar decisiones
ecto de qué y como ensefiar, en
del context en que est inserta
titucién. En este sentido, el con-
de “autonomia relativa” esta
ente ligado al enfoque curticu-
to.
esta interpretacién del curriculo
est teflida de una historicidad
ecto de la funcion del curriculo. En
encia, puede realizarse desde
adiciones diferentes, una propia
l inicial, la otra proveniente de la
ela primaria.
era tradicién esta inspirada en
ssgos fundantes de la educacién
‘i, con fuerte peso de las practicas
aneistas de fuerte impronta en
nivel. Desde esta posicién, en el
se trabaja con el interés circunstan-
los nifios, dando escaso o nulo
alo que se prescribe que hay que
jar. Dan cuenta de ello las expre-
siones: “Estuvimos mucho en el patio
porque los nifios lo eligieron”, “Trabaja-
mos mucho con plastilina porque ellos
me lo piden”.
En este caso, el curriculo oficial no regu-
la las practicas de ensefianza, queda
guardado en la biblioteca del jardin, no
se consulta ni se toma como referencia.
Se parte de aquello que los nifios mani-
fiestan desde su interés -emergente—
para darle forma de contenido cuando
ya fue desarrollado con el grupo clase.
En consecuencia, el curriculo oficial es
un documento que se considera sdlo
desde el discurso.
Desde esta tradicion, la planificacion de
propuestas de ensefianza —en tanto
“anticipacién” de aquello que se preten-
de ensefiar— no tiene lugar. La tarea
que realiza el docente es hacer una
narracién y/o descripcién de las activi-
dades realizadas. De esta manera se
confunde planificar con informar, siendo
la légica del espontaneismo la que
organiza las practicas de ensefianza.
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