¿ES POSIBLE UN CAPITALISMO QUE TENGA COMO PRIORIDAD

ESTRATÉGICA LA RESPONSABILIDAD SOCIAL?

1. Introducción
Desde el marxismo se puede definir el Capitalismo como un sistema
económico social donde los medios de producción son propiedad del
capitalista, quien busca obtener mayores utilidades a partir de la
valorización constante del capital en el proceso de circulación 𝐷 − 𝑀 − 𝐷´.
Así mismo, hay que destacar que el mercado es el ámbito de dicha
circulación donde prima el intercambio de equivalentes y se desarrolla en
una sociedad donde priman los principios de libertad, igualdad, derecho a la
propiedad y el interés privado.
En la actualidad este sistema capitalista ha acumulado gran cantidad de
capital los cuales están concentradas en pocas personas teniendo como
referencia que el 80% de la riqueza está en manos del 20% de la población
del mundo. Esto evidentemente trae como consecuencias una gran
desigualdad social en buena parte del mundo, los conflictos sociales y
laborales y también los conflictos medioambientales, entre otros.
Con base a algunas propuestas para reformar el capitalismo, podemos
plantearnos la siguiente pregunta, ¿es posible un capitalismo que tenga
como prioridad estratégica la responsabilidad social por encima o en
iguales condiciones que la búsqueda estratégica de una mayor rentabilidad
económica? En mi opinión este tipo de gestión de la “nueva empresa” no
resuelve los problemas de fondo. Por ello, mi objetivo es demostrar que aun
siendo responsable con la sociedad y el medio ambiente las empresas
continúan con ese afán, parte de la ideología liberal, de valorizar cada vez
más el capital.
2. El desarrollo de actividades económicas con objetivo social, del tipo
social business es una de las propuestas que busca generar un vínculo
estratégico del gran capital con la sociedad en su conjunto.
Según señalan Giraud & Renouard (2013):
Ya sea por una mayor conciencia de sus responsabilidades o por
interés estratégico, se han iniciado cambios en las empresas. Desde
hace una década estas ejecutan programas de desarrollo sostenible
y de responsabilidad social de empresa, mediante certificaciones,
alianzas con ONG especializados en el medio ambiente, derechos
humanos, desarrollo, etc. Un cierto numero de empresas lanzan
proyectos verdes, eco concepción, eco embalaje, ecología industrial,
economía de la funcionalidad etc.
Sobre este argumento, antes debemos subrayar que no siempre el gran
capital y sus empresas se preocuparon por los efectos negativos que
generan sobre la sociedad y medio ambiente. Fueron las protestas y
movilizaciones sociales a nivel del mundo los que marcaron la pauta para
que las empresas asuman un rol más “social”.
Respecto al capital Marx (1986) señala lo siguiente: “la circulación del
dinero como capital lleva en sí mismo su fin, pues la valorización del valor
solo se da dentro de este proceso constantemente renovado. El movimiento
del capital es, por tanto, incesante” (p.108).
Esto significa, que por más reformas que se impulsen dentro del sistema de
valorización del valor, no se verán cambios significativos en la atención de
las necesidades básicas de los más desposeídos. Esta es una de las tantas
formas de como el capitalismo busca perpetuarse como un modelo único y
que además de ello se preocupa por el desarrollo de la sociedad. Pero
¿qué ganan los capitalistas realizando gastos en la mejora de la sociedad y
el medio ambiente? Para el caso peruano y las leyes respectivas Flores
(2014) señala lo siguiente:
Los gastos de responsabilidad social son deducibles de impuestos
siempre y cuando acrediten no solo la naturaleza del gasto, su
 carácter indispensable y el destino de los gastos, sino que además
respondan efectivamente a los intereses de la comunidad o de la
sociedad y que repercutan –a largo plazo– en la viabilidad del
proyecto empresarial, así como la generación de mayor renta
gravada en el tiempo.

Entonces, vemos que, por encima de las necesidades de la sociedad y el

medio ambiente, están los intereses del gran capital, quienes buscan la
manera de continuar aumentando sus utilidades a costa de las leyes de
nuestro país, por ejemplo.

Por otro lado, este gasto, debe ser recuperado por el capitalista, ya sea
porque este es deducible o subcontratando obreros y demás empleados,
como lo hacen en la minería, por ejemplo. Se sabe que, actualmente las
grandes corporaciones tercerizan la contratación de personal. Con ello
evitan gastos relacionados con los beneficios laborales (gratificaciones,
CTS, vacaciones, utilidades, entre otros).

3. Conclusiones
Toda reforma ya sea económica, política o social dentro del sistema
capitalista no genera grandes cambios a nivel social y mucho menos
medioambiental. Estas reformas solo son mecanismo para continuar
valorizando el valor, dado que es la razón de ser del capital.
Por otro lado, las utilidades de estos grandes inversionistas están muy por
encima de lo gastado en ejecutar estas reformas. Además, aun no se ha
resuelto el impacto negativo a futuro que dejan las grandes compañías
mineras. Aun en nuestro País hay fuertes contradicciones entre la inversión
privada y el respeto a las poblaciones rurales e indígenas.
4. Bibliografía

Flores, J. (2014). ¿Los gastos de responsabilidad social de las empresas

son deducibles para el impuesto a la renta. Atualidad Empresarial, 20.
Giraud, G., & Renouard, C. (2013). 20 propuestas para reformar el
capitalismo. Paris: Mad Corp.
Marx, C. (1986). El Capital TOMO I. México D.F.: FONDO DE CULTURA
ECONÓMICA.
Renouard, C. (2007). La responsabilité ethique des multinationales. Paris:
PUF.