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AYUDE A SUS HIJOS A CRECER EN GRACIA PARA CON

DIOS—ESPIRITUALMENTE

Un padre y su hijo subían por un camino angosto por la montaña. El hijo


seguía de cerca a su padre. El muchacho dijo: “Fíjate bien dónde pisas, papá,
porque yo voy poniendo los pies sobre tus huellas”.
Un día, un hijo de 3 años comenzó a seguir a su padre a dondequiera que
éste iba. Esto le hacía difícil hacer su trabajo.
El niño lo seguía tan de cerca que a veces cuando el padre se detenía, se
tropezaba con él. Su papá le decía que fuera a jugar, pero él solamente
sonreía y decía: “Está bien papá. Solamente quiero estar aquí contigo”. El hijo
continuó siguiéndolo, pero después de tropezar con él por quinta vez, se le
acabó la paciencia. “¿Por qué me estás siguiendo constantemente?” le
preguntó su papá. El hijito contestó: “Mi maestra de Escuela dominical me
dijo que siguiera los pasos de Jesús. Como no puedo verlo a Él, estoy
siguiendo los tuyos”.

I. LOS EJEMPLOS DE LOS PADRES AYUDAN A LOS HIJOS A


CRECER ESPIRITUALMENTE.

Los hijos imitan lo que ven hacer a sus padres. Así que por esta razón los
padres sabios se esfuerzan por darles un buen ejemplo. Los hijos aprenden
de sus padres al estar juntos con ellos e imitando su comportamiento. Así que
los padres deben pasar tiempo con cada niño, contarles historias, escuchar
las suyas y jugar con ellos. En muchos hogares las madres y sus hijos están
juntos con frecuencia.

A. EJEMPLOS NEGATIVOS:

Los líderes infieles hacen que el pueblo peque. 1 Sam. 2:22, “Pero Elí era muy
viejo; y oía de todo lo que sus hijos hacían con todo Israel, y cómo dormían con las
mujeres que velaban a la puerta del tabernáculo de reunión. 23 Y les dijo: ¿Por qué
hacéis cosas semejantes? Porque yo oigo de todo este pueblo vuestros malos
procederes. 24 No, hijos míos, porque no es buena fama la que yo oigo;
pues hacéis pecar al pueblo de Jehová”.
1. ¿Por qué eran así los hijos de Elí? V. 29, Dios dijo a Elí, “has honrado
a tus hijos más que a mí”. Pero ¿cómo? 1 Sam. 3:13, “porque sus hijos han
blasfemado a Dios, y él no los reprendió”.

2. Por lo tanto, Elí compartió la culpa de sus hijos. Los padres que no
disciplinan a sus hijos los hacen pecar. Es reacción en cadena: los padres no
disciplinan a sus hijos, entonces los hijos son rebeldes y pecan, y hacen pecar a
otros (“hacéis pecar al pueblo de Jehová”).

3. El ejemplo malo de los padres “hace pecar” a los hijos. La enseñanza


mala o la falta de enseñanza buena “hace pecar” a los hijos. Efes. 6:4, “Y vosotros,
padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del
Señor”.

B. EJEMPLOS POSITIVOS

Abram, sin la “hache” al medio y sin la otra “a”, significaba: “El Padre
es exaltado” y nació en Ur de Caldea, donde vivió con su padre y sus
hermanos Nacor y Harán y donde se casó con la entonces Saraí. Usted
conoce poco, mediano o mucho su historia. Yo quiero rescatar, de esa
historia, varias claves esenciales que están allí, escritas desde siempre
y que son eslabones obligados para poder convertirnos en de Abram
en Abraham. Esto es: de El Padre es Exaltado, en “Padre de
Multitudes”. Aspectos que hoy lo están esperando a usted para que, si
los capta y los cumple, no tenga nada que envidiarle al patriarca.
1. De buena enseñanza y hágala una prioridad en su vida. Gen.
18:17-19. Eduque a sus hijos para que crezcan amando a Dios.
Cada día está lleno de oportunidades para enseñar los caminos de
Dios. Deut.6:9
2. Enséñeles a sus hijos a ser obedientes. Hebreos 11:8 nos dice
qué fue lo extraordinario de esta partida: “Por la fe Abraham, siendo
llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como
herencia; y salió sin saber a dónde iba”. Abraham partió, y el confió
y creyó que Dios lo guiaría a él y a su familia en medio de ese
territorio desconocido. No hubo preguntas ni dudas. Él mostró su fe
al salir. Este fue un profundo acto de fe.
3. Fomente el buen carácter en sus hijos.
Hebreos 11:17 nos relata la prueba suprema de la fe de Abraham: “Por la fe
Abraham, cuando fue probado, ofreció a Isaac; y el que había recibido las
promesas ofrecía a su unigénito, habiéndosele dicho: en Isaac te será
llamada descendencia; pensando que Dios es poderoso para levantar aun de
entre los muertos, de donde, en sentido figurado, también le volvió a recibir”.

Abraham creyó que Dios podía levantar a Isaac de la muerte, si era que Dios
no le perdonaba la vida a Isaac (Génesis 22).

Pedro 1:5-9 presenta una lista de ocho cualidades que el Señor desea para
nuestros hijos y para nosotros. Después de la lista sigue una gran promesa
“ver.10...porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás.11Porque de esta
manera os será otorgada amplia y generosa entrada en el reino eterno de
nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (2 P 1:10-11). Podemos estar
seguros de que nuestros hijos tendrán el favor de Dios si les ayudamos a
desarrollar estas ocho cualidades.

1.1.Fe—confiar
Fe—confiaren en Dios
Dios
2.2.Virtud—hacer
Virtud—hacer locorrecto
lo correcto
3.3.Conocimiento—aprender
Conocimiento—aprenderde deDios
Dios yy sus caminos
sus caminos
4.4.Dominio propio—permitir que Espíritu Santo controlenuestros
Dominio propio—permitir que Espíritu Santo controle nuestrosdeseos
deseos carnales
carnales
5.5.Paciencia—perseverar
Paciencia—perseveraryy terminar la tarea
terminar la tarea
6.6.Piedad—ser como Dios
Piedad—ser como Dios
7.7.Afecto
Afectofraternal—ser
fraternal—serconsiderado
considerado con losdemás
con los demás
8.8.Amor—pensar
Amor—pensaren enotros
otros (Lea
(Lea 11 Co 13:4-8.)
Co 13:4-8.)

2. LOIDA, EUNICE Y TIMOTEO.

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