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1 Síntesis biográfica
1.1 Estudios
1.1.1Historiadores conocidos
1.2 Críticas
1.4 Muerte
2 Citas
3 Referencias
4 Fuentes
Wilhelm Dilthey.
La filosofía ha de comenzar por el análisis de la conciencia, dado que sólo este análisis –
según él– proporciona el medio de captar la esencia de la vida natural y del espíritu
partiendo de las vivencias inmediatas del «Yo». La base de todas las ciencias del espíritu
es una psicología, pero no la psicología explicativa, apoyada en la causalidad, sino la
descriptiva. Al caracterizar la creación artística, Dilthey hacía hincapié en la importancia
de la imaginación: gracias a ella el poeta eleva lo causal al rango de lo significativo y
representa lo típico como base de lo individual. El eslabón de enlace entre la filosofía y las
ciencias históricas forma, según Dilthey la «teoría de la interpretación» o hermenéutica
Síntesis biográfica
Estudios
Tras tres semestres en Heidelberg se traslada a Berlín, en el año 1853. En Berlín tomó
contacto con grandes figuras de la ciencia histórica de la época y de la filología floreciente
en Alemania.
Historiadores conocidos
Entre los grandes historiadores que pudo conocer cabe destacar: Ranke, Ritter o
Mommsen y conoció a figuras de la talla de Grimm o Boeckh.
En este ambiente terminó sus estudios en 1856 y emprendió una breve etapa de docencia
en la educación secundaria, tras la cual pasará a dedicarse íntegramente a la
investigación. Se interesó mas por la historia de la Iglesia y es en esta período cuando
estudió la obra de un autor que marcaría el resto de su realización teórica, éste fue el
teólogo y filósofo Friedrich Daniel Ernst Schleiermacher, naciendo así el proyecto de
publicar una detallada historia de Schleiermacher, cuyo primer tomo saldrá en 1870 con el
título de "Vida de Schleiermacher".
Crítricas
Desde 1883 hasta sus últimos escritos, Dilthey concibió su empresa como una crítica de
la razón histórica, o como dice Raymond Aron -acertada aunque parcialmente- como una
crítica histórica de la razón.
La misma Introducción a las Ciencias del Espíritu alude a tal proyecto, no solamente a
través de la célebre dedicatoria a su amigo el conde de York, sino remitiendo, en el último
capítulo de su primer libro, a la búsqueda de una solución al problema de una
fundamentación de las ciencias del espíritu.
Dentro de este programa era preciso, ante todo, oponerse a la epistemología positivista,
que subordinaba las ciencias históricas a las ciencias de la naturaleza. El desafío a que
se enfrentaba Dilthey consistía, por una parte, en no ceder al vértigo del subjetivismo, y
por otra en tratar de desembarazarse de las ilusiones del positivismo, sin anular por ello
toda idea de verdad y aceptar como una fatalidad la disolución del objetivo.
El deseo más violento que siempre he abrigado - escribía en una de sus últimas obras -
es la sed de verdad objetiva. Esa era, precisamente, la cuestión fundamental: determinar
qué dimensión de objetividad puede pretender alcanzar el conocimiento histórico.
Aportes a la teoría hermenéutica
Dilthey puede ser considerado como un tipo empirista, sin embargo, sus trabajos
empíricos no son exactamente iguales a los de los empiristas ingleses en lo que respecta
a los presupuestos epistemológicos, quedando muy interesado en lo que hoy podríamos
llamar sociología.
Muerte
En los últimos años de su vida Dilthey trabajado ve colmadas sus aspiraciones al lograr
una cátedra en Berlín donde se quedará hasta su muerte. Mientras pasaba sus
vacaciones en Seis, en el Tirol, fallece repentinamente, dejando inconcluso el segundo
tomo de la obra "Vida de Scheleiermacher".He died there, in 1966, from the consequences
of pneumon
Allí murió, 1 de octubre de 1911, a la edad de 78 años. Su última publicación fue: "Los
tipos de la concepción del mundo y su constitución en sistemas metafísicos" en 1911.
Citas
Se trata, como ha dicho Julián Marías, de ‘la promoción positivista en la que empieza ya a
filtrarse el descontento y que intenta evadirse por diversos poros de sus limitaciones; pero
sólo Dilthey lo conseguiría, no sin permanecer en buena parte presa todavía del
positivismo’.
"No hay ningún estudio tan magnífico y rico como la historia de la Iglesia, con la cual estoy
completamente ocupado."
"La idea fundamental de mi filosofía -dirá - es que hasta ahora no se ha puesto como base
del filosofar la experiencia total, plena, sin mutilar, es decir, toda la realidad entera y
verdadera.".
"La Historia es no más que la vida captada desde el punto de vista del todo de la
humanidad, que constituye una conexión".
Referencias
Fuentes