En este ensayo hablaremos sobre un tema alarmante para la
sociedad, el cual hasta la actualidad ha aumentado de manera significante que es el abuso sexual infantil. Consideramos que el abuso sexual con personas menores de 18 años, es una forma de violencia sexual que atenta contra la integridad y la dignidad de los niños, niñas y adolescentes. Ocurre cuando ellos son estimulados sexualmente por una persona que quiere obtener placer propio (o el de otros), son abusados sexualmente y puede ser con o sin contacto físico. El Perú afronta su lado más crítico en cuanto a casos de violación sexual, y los niños son los más vulnerables. Esta cruda realidad se refleja en las cifras. Durante los dos primeros meses del año, 600 menores de edad fueron víctimas de violación sexual a nivel nacional, es decir, 10 al día, según el Ministerio de la Mujer. Los violadores, con frecuencia son personas adultas que los niños conocen y que pueden ejercer influencia sobre ellos. Su nivel socioeconómico puede ser bajo, medio o alto, pero siempre buscan estar a solas con la víctima y tienen cuidado de levantar sospechas. Para poder proteger a los menores de estas atrocidades, es importante que ellos también conozcan sobre el tema, que sepan cuidar y respetar su cuerpo, y que aprendan a decir “no” en situaciones donde se sientan amenazados. Pienso que esto les dará más confianza a los padres cuando dejen al niño con otra persona o mientras estén en el colegio, ya que no podemos estar todo el tiempo detrás de ellos. Las violaciones sexuales en contra de menores en el Perú es un tema para indignarse y preocuparse. Según cifras oficiales en lo que va del año 365 niños entre 0 y 5 años de edad fueron ultrajados. Dicha cifra es un escalofriante y pequeño panorama del gran problema que tiene el Perú. El país se indignó ante el caso de una bebé de tan solo 2 meses que fue ultrajada por su propio padre en Huaraz. La violación a la bebe de dos meses ocurrió a fines de setiembre, cuando los médicos del hospital de apoyo Antonio Caldas Domínguez advirtieron sobre lo ocurrido a la Policía Nacional. Según se informó, Salcedo introdujo sus dedos en el cuerpo del bebe y esto le provocó una severa hemorragia. Tras interrogar a la madre de la menor, los agentes determinaron que el padre era el culpable del ultraje. Vale recalcar que si bien este es un panorama de la terrible realidad que vive nuestro país, se trata de una base de datos solo de casos registrados. Es decir, las cifras podrían ser mayores. En el Perú, el 76% de víctimas de violación sexual está conformado por menores de edad. El preocupante diagnóstico, además de demostrar la poca protección a los niños y adolescentes de nuestro país, refleja que este execrable delito tiene como 100% de imputados a un hombre. Según la citada investigación de la Fiscalía de la Nación, el momento del día para perpetrar el abuso sexual se produce mayormente entre la tarde y la noche, ya sea en la casa del victimario, en el de la víctima o en ambas locaciones. Para concluir cabe agregar que el abuso sexual infantil en la infancia y en la adolescencia genera un desmantelamiento y una detonación psíquica, una catástrofe en la vida de la víctima que la padece. Es fundamental no concebir el abuso sexual como una cuestión únicamente concerniente a la sexualidad del individuo, sino como un abuso de poder. El abuso sexual infantil es claramente una relación de poder, por lo que se sostiene que el abusador no tiene un goce genital sino un goce de abuso de poder.