Pobreza, inflación, hambre, baja de subsidios, caída de la actividad
industrial, desempleo. Indicadores oficiales y no oficiales exponen el lamentable estado de la economía nacional.
Quedan 9 meses de administración macrista y no hay un solo indicador
económico positivo para una gestión que no hizo nada de lo que anuncio: no corrigió la inflación, no aumento el empleo, no bajo impuestos y no frenó los precios de los alimentos básicos de la mesa argentina. Son 13 millones de pobres los que la Argentina acumuló en el 2018, según el dato que el Observario de la UCA informó hace algunas horas atrás, el que fuera calificado como el informe mas "duro" elaborado por dicho organismo y considerado así por medios de prensa con tono editorial mas amigable con el gobierno. Es decir que hasta los voceros de la oligarguía rural y económica nacional, descalifican por su probada ineficiencia a sus mejores subalternos, ahora en la conducción del país al menos hasta diciembre. En un año, 2018,la cantidad de pobres en nuestro país por poco no alcanzó los 2 millones, ciertamente a una enorme distancia de la "Pobreza 0" pregonada durante la campaña política presidencial de hace casi cuatro años. Ya resulta repugnante la reiteración de la frase "los bolsos de lopez", cuando se habla del precio de carnes,Las cajas fuertes de Florencia, ya no tapan el aumento casi mensual de la nafta - 70%el año pasado- y la prisión de DeVido, Boudou y López, ya no mellan el aumento del gas y la energía eléctrica, esta última1300% entre 2015 y 2018 Al menos en lo que hace a los indicadores económicos, es obvio que el "Cambio" se produjo, pero para empeorar. Desdramatizar, ningunear, relativizar, son los recursos mas utilizados por el macrismo y agitar los fantasmas kirchneristas cuando la respuesta de inclusive sus propios aliados económicos no se hacen esperar. El sector agrícola desacelera la liquidación de divisas y el empresariado económico que lo uso para desembarazarse del gobierno anterior, nunca le confió sus dineros ni antes y mucho menos ahora. La destrucción del empleo en todas sus formas, privado y estatal, directo o indirecto es un denominador común de las políticas nacionales en materia de aliento a la inversión. Con un dolar en la estratosfera y una tasa de interés altísima, especular financieramente da mejor rentabilidad que producir. Tal afirmación se fundamenta en datos concretos que fueran informados por la Fundación Fiel, que indica una merma de la actividad industrial cercana al 8% durante el primer bimestre del 2018. La caída durante toda la gestión (?) "Cambiemos", alcanza el 8,6% según el Centro de Estudios Economicos y Sociales . El desplome de la demanda eléctrica, un indicador objetivo de la baja de la actividad industrial, también es contundente para todos los rubros censados por el Instituto Argentino de la Energía. Somos líderes mundiales en baja de la actividad industrial. Un informe especial del Observatorio de Coyuntura Internacional y Política Exterior (OCIPEx) reporta que " del total de 76 mostraron un saldo negativo en su producción industrial. De esos 13, Argentina registró la mayor caída interanual,.." La información estadística, el dato objetivo, la cifra concreta es insignificante para los asalariadxs que lo saben antes que nadie, porque su sueldo compra lo indispensable, por lo que su capacidad de ahorro o crédito está difunta, y festeja poder mantener su fuente de trabajo. Ni siquiera la mejor paritaria pudo empatar a la inflación, al contrario, en el promedio la diferencia a favor de la inflación fue de 18%. Eso sí nuestro presidente ostenta un récord o al menos lo disputa, ser el mandatario con mas días de vacaciones en su mandato. Y marzo no podía cerrar de peor manera, anunciando otro aumento de naftas y gas, con el consiguiente impacto inflacionario y en la canasta familiar. Hasta cuando seguirá aumentando la pobreza en la Argentina?. De “Pobreza 0”, ahora asistimos a la “Pobreza 32”, de acuerdo al más reciente informe del INDEC, que solo promovió un estado de “tristeza” en el gabinete macrista. Siendo Chubut la que más sufre en este aspecto, con el mayor índice de pobreza de la Patagonia. Es imperativo no dejarse avasallar por la desesperanza, los argentinos ya estamos a pérdida, pero jamás perdamos la fe, es tiempo de transformar la bronca en acción y dedicarle unos minutos a hacer valer esta oportunidad de oro, que cada dos años nos da la democracia.