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N T T E ST F.0 S E Ñ O R .
TOMO PR IM E R O .
Q W J ÍN V A J E O F V IO IV ,
©<S>E^j> EDITOR:
IMPRESOR Y LIBRERO j CALLE DE OAURKT.iS, NÚMERO 8.
1841.
-ttleeonocida la necesidad de reimprimir la Recopilación de las Leyes de
Indias, sobre lo cual consultó su dictamen la Sala del tribunal supremo
de Justicia que entiende en los negocios de las provincias de Ultramar,
trató el gobierno de que se verificase la reimpresión por medio de algun
empresario particular, y se hizo sobre ello un anuncio en la Gaceta y en
el Diario de Avisos de Madrid; pero este espediente quedó sin resolu
ción difinitiva en el año de 1 8 5 9 , sin que lo hayan promovido despues
los que pudieran decirse interesados. Ahora se ha publicado un Pros
pecto para la misma reimpresión por Don Ignacio R oix, y la Regencia
provisional del R ein o , en el deber de defender la propiedad de los códi
gos legales que pertenece al Estado, y con el deseo al mismo tiempo de
no privar al público del beneficio de tener fácil y cómodamente una obra
tan necesaria, ha hecho y obtenido esplicaciones 5 con presencia de Jas
cuales, en nombre de S. M. la Reina doña Isabel II decreta lo siguiente:
Art. l.° Se autoriza á Don Ignacio Roix para que pueda reimprimir
3^ espender por su cuenta la Recopilación ele las Leyes de Indias en los
términos anunciados por su Prospecto inserto en la Gaceta de Madrid
de 1 0 de este mes, y colocando este decreto despues de la portada del
tomo primero.
c 2;° La* reiinPresion se hará bajo la inmediata inspección de la
Sala de Indias del Tribunal Supremo de Justicia, que por medio de uno
de sus ministros, ó de otra persona de su elección y confianza , cuidará
atentamente de que sé mantenga en su perfecta integridad el texto de las
L ey es, para que la nueva edición pueda considerarse como autentica v
oficial. J
Art 5. Don Ignacio Roix entregara seis ejemplares bien encuader
nados, y en pasta ó tafilete, para los archivos de las Cortes, del Minis
terio y del Tribunal Supremo de Justicia. Tendreislo entendido, y lo co
municareis á quien corresponda para su ejeeucion.=El Duque de la Víc-
to n a , Presidente.==En Palacio á 1 6 de diciembre de 1840.*= A don
Alvaro Gómez Recerra.
EL BET.
YO EL R E Y .
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don Ii"811 i' S a !‘ tehc®s 5 don Antonio de Castro, don Juau de Corral v
asistie “ 8®id» .A lvarado > todf d«i d>dio nuestro Consejo de Indias, V» que
la casa de Cn .Ce“C,a<1° ‘ on Fernando Jiménez Paniagua , Juez Letrado^de
fuviese el fio 1 S.C10nase > ‘“terpomendo los medios necesarios, para que
Visto V L n s X 6 ,desean£ s’ y P ° ^ ue sa,8a con la autoridad que conviene
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nucniaies, Islas y Iserra-ímne del Mar Oeearm
y sus viages, Armadas, v Navios „ i„ „J:
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YO EL R EY .
Por mandado del Rey nuestro Señor.
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LIBRO PRIMERO.
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TITULO PRIMERO.
D e la sa n ta f é católica.
L E Y P R IM E R A . sean castigados con las penas impuestas por de
recho, según y en los casos que en él se con
Exortacion á ía santa f é católica y como la (fabo tiene.
creer todo fie l cristiano. L E Y II.
Dios nuestro señor por su infinita misericor El emperador don Carlos en Granada a 17 de noviem
dia y bondad se ha servido de darnos sin mereci bre de 1526. Y don Felipe IV nuestro señor en esta
mientos nuestros tan grande parte en el señorio recopilación.
de este mundo, que demas de juntar en nues
Que en llegando los capitanes del Rey d cualquiera
tra real persona muchos y grandes reinos, qué provincia y descubrimiento de las Indias, hagan /«e-
nuestros gloriosos progenitores tuvieron, sien go declarar la santa fé á lo s indios.
do cada uno por si poderoso Rey y señor, ha
dilatado nuestra real corona en grandes pro Los señores Reyes nuestros progenitores
vincias, y tierras por Nos descubiertas, y se desde el descubrimiento de nuestras Indias
ñoreadas hacia las partes del Mediodía y Ponien Occidentales, islas y Tierra-firme del mar Océa
te de estos nuestros reinos. Y teniéndonos por no., ordenaron y mandaron á nuestros capita
mas obligado, que otro ningún príncipe del nes y oficiales, descubridores, pobladores y
mundo á procurar su servicio y la gloria de su otros cualesquier personas, que en llegando á
santo nom bre, y emplear todas las fuerzas y aquellas provincias procurasen luego dar á en
poder que nos ha dado, en trabajar que sea co tender, por medio de los intérpretes, á los in
nocido y adorado en todo el m undo, por ver dios y moradores, como los enviaron á ense
dadero Dios, como lo es, y Criador de todo lo ñarles buenas costumbres, apartarlos de vicios
visible é invisible •, y deseando esta gloria de y comer carne humana, instruirlos en nuestra
nuestro Dios y señor, felizmente hemos conse santa fé católica y predicársela para su salva
guido traer al gremio de la santa iglesia católi ción y atraerlos á nuestro señorio, porque fue
ca romana las innumerables gentes y naciones sen tratados, favorecidos y defendíaos co
que habitan las Indias Occidentales, islas y mo los otros nuestros súbditos y vasallos, y
Tierra-firme del mar Océano, y otras partes que los clérigos y religiosos les declarasen los
sujetas á nuestro dominio. Y para que todos misterios de nuestra santa fé católica: lo cual se
universalmente gocen el admirable beneficio de ha ejecutado con grande fruto y aprovecha
la redención, por la sangre de Cristo nuestro miento espiritual de los naturales. Es nuestra
señor, rogamosy encargamos á los naturales de voluntad, que lo susodicho se guarde, cumpla
nuestras Indias, que no hubieren recibido la y egecute en todas las reducciones, que de aquí
santa fé, pues nuestro fin en prevenir y em- adelante se hicieren.
biarles maestros y predicadores, es el provecho
de su conversión y salvación, que los reciban y LEY III.
oigan benignamente, y den entero crédito á su
doctrina. Y mandamos á los naturales y espa Don Felipe IV en esta recopilación.
ñoles, y otros cnalésquier cristianos de diferen
tes provincias ó naciones, estantes ó habitantes Que los ministros eclesiásticos ensenen primero dios
en los dichos nuestros reinos y señorios; islas y indios los articulos de nuestra santa j é católica.
Tierra-firme, que regenerados por el santo sa
cramento del bautismo hubieren recibido la Piogamos y encargamos á los arzobispos,
santa fé, que firmemente crean y simplemen obispos, curas de almas y otros cualesquier mi
te confiesen el misterio de la Santísima Trini nistros, predicadores ó maestros, á los cuales
dad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, tres perso por oficio, comisión ó facultad pertenece la en
nas distintas y un solo Dios verdadero, los artí señanza de la doctrina cristiana, que tengan
culos de la santa fé y todo lo que tiene, ense muy particular cuidado y pongan cuanta dili
ña y predica la santa madre iglesia católica ro gencia sea posible en predicar, enseñar y per-
mana ; y si con ánimo pertinaz y obstinado er suad ir á los Indios \ os artículos de nuestra san
raren y fueren endurecidos en no tener y creer ta fé católica •, y atendiendo ¿ la capacidad de
lo que la santa madre iglesia tiene y enseña, \os naturales, se les repitan muchas veces, cuan
TOMO I.
2 Libro i. Título i.
tas sean necesarias para que ios entiendan, se carán con los prelados de las iglesias de s«s
pan y confiesen, como los tiene predica y en distritos cada uno en el suyo, y nos enviarán
seña ia santa madre iglesia católica romana. relación de ello, y de lo que á todos pareciere
se debe proveer, para que visto su parecer man
LEY IV . demos lo que convenga; y entre tanto los vire-
yes, con los oidores y prelados, proveerán lo
Don Felipe II en la ordenanza 144 de poblaciones, en conveniente; de forma , que por falta de doc
el Bosque de Segovía á 13 de julio de 1575.
trina y ministros que la enseñen, los indios no
Que no queriendo los indios recibir de paz la sania reciban daño ni perjuicio en sus ánimas sobre
/ * . se use de los medio $ que por esta ley se mandan. lo cual pondrán toda la diligencia y cuidado que
de ellos se confia , con que descargamos nues
Mandamos á nuestros gobernadores y pobla tra real conciencia, y encargamos la de ios mi
dores, que en las partes y lugares donde los na nistros.
turales no quisieren recibir la doctrina cristia LEY VI.
na de paz-, tengan el orden siguiente en ia pre
dicación, y enseñanza de nuestra santa fé. Con Don Felipe III en Madrid á 1 ° de junio de 16Í2.
ciértense con el cacique principal, que esta de
Que los vireyes , presidentes y gobernadores ayu
paz y confina con los indios de guerra, que los den á desarraigar las idolatrías.
procure atraer i su tierra à divertirse, ó á otra
cosa semejante, y para entonces estén alli los pre Mandamos á nuestros vireyes, presiden
dicadores con algunos españoles, ¿indios ami tes y gobernadores , que pongan mucho cuida
gos secretamente, de manera que baya seguri do én procurar se desarraiguen las idolatrías
dad, y cuando sea tiempo se descubran à los que de entre los indios , dando para ello el favor y
fueren llamados; y á ellos juntos con los demas ayuda conveniente á los prelados, estado ecle
por sus lenguas é intérpretes, comiencen à em siástico y religiones, pues esta es de las materias
señar la doctrina cristiana: y para que la oigan mas principales de gobierno y á que deben
con mas veneración y admiración, esten revesti acudir con mayor desvelo , como tan del ser
dos á lo menos con albas ó sobrepellices y esto vicio de Nuestro Señor y nuestro , y bien de
las, y eon la santa cruz en las manos, y los cris las almas de los naturales.
tianos la oigan eon grandísimo acatamiento y ve
neración, porque a su imitación los infieles se
aficionen á ser enseñados. Y si para causarles,
L E Y VIL
mas admiración y atención pareciere cosa con El emperador don Carlos en Valladolid á 26 de junio
veniente, podrán usar de música de cantores y de 1525 La emperatriz gobernadora alli á23 de agos
ministriles, eon que conmuevan á los indios áse to de la58. El príncipe gobernador en Lérida a 8 de
juntar, y de otros medios para amansar, paci agosto de 1551.
ficar y persuadir á los que estuvieren de guer
ra^ y aunque parezca que se pacifican, y pidan Que se derriben, y quiten los ídolos , y prohíba á
los indios comer carne humana.
que los predicadores vayan à su tierra sea con
resguardo y prevención, pidiéndoles á sus lujos Ordenamos y mandamos á nuestros vire-
para los .enseñar, y porque estén como en rehe yes, audiencias y gobernadores de las Indias,
nes en la tierra de los amigos, persuadiéndoles que en todas quellas provincias bagan derri
que hagan primero iglesias, adonde los puedan bar y derriben, quitar y quiten ios ídolos,
ir á enseñar; y por este medio, y otros, que ares y a dora torios ue la gentilidad, y sus sa
parecieren mas convenientes, se vayan siempre crificios; y prohíban espresamente eon graves
pacificando y doctrinando los naturales, sin penas à los indios idolatrar y comer carne hu
que por ninguna via ni ocasión puedan recibir mana, aunque sea de los prisioneros y muer
daño, pues todo lo que deseamos es su bien y tos en la gu erra, y hacer otras abominaciones
conversión. contra nuestra santa fe católica y toda razón
LE Y V. n atural, y haciendo lo contrario , los castiguen
Don Felipe II en Mouzon á 4 de octubre de 1563, y con mucho rigor.
á 4 de abril de 1568.
Que los indios sean bien instruidos en la santa f é
L E Y V III.
católica, y los vireyes , audiencias y gobernadores Don F elipe III en Madrid á 5 de octubre de 1607.
tengan de ello muy especial cuidado.
Qite los indios sean apartados ele sus falsos sacei'-
Mandamos y encargamos á nuestros vire- dotes idólatras.
yes, audiencias y gobernadores de nuestras In
dias, que tengan muy especial cuidado de la Porque conviene para servicio de Dios nues
conversión y cristiandad de ios indios, y tro Señor, y bien espiritual de los indios, que
que sean bien doctrinados y enseñados en sean apartados de sus pueblos los falsos sacer
las cosas de nuestra fé católica y ley evangé dotes de ídolos y hechiceros, y está preveni
lic a , y que para esto se informen si hay m i do por el concilio celebrado en la ciudad de
nistros suficientes, que enseñen, bautizen y Lima de nuestros reinos del Peni el año de
administren los santos sacramentos á los que mil y quinientos y ochenta y tre s , por el da
tuvieren habilidad y suficiencia para recibirlos; ño é impedimento que causan i la conversión
y si en esto hubiere alguna falta, loeom uni- de los naturales, rogamos y encargamos á lo?
De la santa fé católica.
prelados de nuestras Indias", que aparten de
la comunicación de los naturales á estos super- LEY XII.
ticiosos idólatras , y no los consientan vivir
«n unos misinos pueblos con los indios , cas vlSTfEu
vaii.Hiolid 30 <« C Vo
ar|0S de
noviembre e,mP r« triz
1537. Dongobernando
Felipe Ií en
en
tigándolos conforme à derecho. a ordenanza 81 de Audiencia*, en Toledo á 25 de mayo
de 1596.
Declaramos, que las erecciones de las igle Que los prelados de las Indias, dén cuenta al conse
jo sobre dudas de las erecciones de mis iglesias en la
sias metropolitanas y catedrales se entiendan form a que se ordena, y los vireyes , presidentes y
desde el dia que tuviere efecto la división que audiencias lo resuelvan por ahora , y en las presen
se mandare hacer de los distritos y diócesis de taciones al Patronazgo.
los arzobispados y obispados y estuvieren se Porque algunos prelados eclesiásticos de
ñalados y divididos. nuestras Indias escediendo de la facultad que
L E Y X I. por las erecciones de sus iglesias se les concede,
resuelven muchas cosas contra nuestro real pa
Don Felipe II y la princesa gobernadora en Valla
dolid á 16 de abiil de 1559.
tronazgo, y nunca fue nuestra intención per
mitirles que pudiesen resolver ni disponer con
Que la parte de los diezmos que pertenece ti las f á tra él en todo ni en parte alguna. Ordenamos
bricas de iglesias se gaste conforme á esta le y , y
los prelados guarden las erecciones. y mandamos, que en las erecciones que estu*
Mandamos, que la parte de diezmos que (5) Por ccd. de 17 de julio de 97 está mandado que
estos libramientos se den en catedrales por dos diputados
que nombren el prelado y cabildo para facilitarlos, y que
(4) Concuerda la 1. 5 , tit. 3 de este lib. en las parroquias los dé el cura,
TOMO I. 3
10 labro i. Título xx.
vieren hechas y se hicieren de aquí adelante, LEY XVII.
se ponga cláusula de que cuando se ofreciere que Don Felipe III en san Lorenzo, á i de setiembre
enmendar, am pliar, corregir, establecer de de 1615.
nuevo ó declarar , los prelados nos lo avisen en
Que las cantidades procedidas de mercedes en va
nuestro real consejo de indias: y si la materia cantes y novenos, se gasten como se ordena.
fuere tal que pueda tener peligro en la tardan
za , la resuelvan por ahora nuestros vire ves, Mandamos à los vireyes y presidentes , y
presidentes y audencias, y esto se egeeute con rogamos y encargamos á los prelados de nues
calidad de que en la primera ocasión den cuen tras Indias , que cuando Nos hiciéremos.-mer
ta ai Consejo : y si dentro de tres años no se ced de alguna parte de las vacantes y novenos
aprobare lo que los vi reyes , presidentes y au á Jas iglesias, se gaste y distribuya con sus pa
diencias hubieren resuelto y ejecutado , no se receres é intervención en cosas que pertenez
continúe en la ejecución , y se suspenda lo re can al servicio y culto divino , y en lo mas
suelto , hasta que Nos proveamos io que con forzoso y necesario á las iglesias. Y para que
venga , y si se ofreciere duda sobre las colacio se baga con toda justificación , no salga el di
nes que el prelado ha de hacer á los por Nos ó nero de poder de los oficiales reales sin sabidu
por nuestros ministros presentados, ios vireyes, ría y libramiento del virey 6 presidente , los
presidentes y Gobernadores usen de la facultad, cuales provean se Jes dé cuenta muy puntual
que según las leyes de nuestro patronazgo les d élo gastado, que asi es nuestra voluntad. ( 6 )
concedemos.
LE Y X V III.
LEY XV. Don Felipe IV en Madrid á 1 de agosto de 1653.
Don Felipe IV en Madrid á 50 de noviembre de .1651, Que de bienes de iglesias no se hagan gastos en re*
Que. los vireyes y prelados , tengan cuidado de que cibirnientos.
se acaben las iglesias catedrales comenzadas y cien Ordenamos que no se hagan gastos en re
cuenta al consejo.
cibimientos de vireyes , arzobispos ni obispos
Conviene que las Iglesias catedrales y m e de los bienes de fábricas, ni de los comunes de
tropolitanas de las Indias se acaben de fabricar las iglesias. Y mandamos y encargamos à los
y poner en toda perfección para aumento, de vireyes y prelados, que en ninguna manera
cencia y servicio del cuito divino. Y rogamos lo consientan. (7)
y encargamos à los prelados de nuestras Indias,
que tengan mucho cuidado de que se acaben y LE Y X IX .
perfeccionen con la mayor brevedad que sea El emperador don C arlos, en Toledo i» 3 de abril
de 1534.
posible las que no estuvieren acabadas, pues
osle cuidado es tan propio de su obligación. Y Que los indios edifiquen casas para los clérigos , y
mandamos á los vireyes y presidentes de nues queden anexas d las iglesias.
tras reales audiencias, que pongan en esto par Mandamos que los indios de cada pueblo ó
ticular atención , y unos y otros nos den aviso bar rio edifiquen las casas que parecieren bas
en las ocasiones de armadas del estado en que tantes, para que los clérigos de Jos pueblos ó
se hallaren estas fabricas. barrios puedan cómodamente vivir y morar,
las cuales queden anexas á lá iglesia en cuya
L E Y X V I. parroquia se edificaren , y sean de ios clérigos
El emperador don Carlos y el cardenal G ., en Tala- que tuvieren la Iglesia y se ocuparen en la
vera á L5 de febrero de 35-11. Don Felipe il en san Lo instrucción y conversión de los indios parro
renzo a 23 de oclabre de 1597. quianos de ella , y no se puedan euagenar ni
Que los prelados cuiden de las fábricas , reparos aplicar á otros usos.
ornamentos y servicio de las iglesias desús distritos.
Rogamos y encargamos á los arzobispos y Don Felipe II y la princesa G . , en Valladolid à 23
obispos de nuestras Indias, que informados por de mayo de 1559. Y el mismo en Lisboa á 20 de no
sus personas o las de sus visitadores del estado viembre de 1583.
que tienen las fábricas de iglesias de sus distri Que se hagan inventarios de los bienes de las iglesias*
tos en los pueblos de españoles é indios , estan y ningún doctrinero los Ujtve cuando se mudare d
cias y asientos de minas , y la decencia con otro beneficio, y las audiencias tengan cuidádo de
que se egecute.
que está colocado el Santísimo Sacramento,
cálices y ornamentos, y todo lo demas que Rogamos y encargamos á los arzobispos y
pertenece al culto divino, provean que las igle obispos de nuestras Indias, que provean y or
sias comenzadas se acaben de edificar, levan denen que en todas las iglesias de sus distritos
ten y reparen las arruinadas, y hagan de nue se hagan inventarios de los ornamentos, cáli
vo las que fueren m enester, y todo lo demás ces, custodias, libros y tocio lo demás tocante
necesario para su servicio, sin permitir .esee- al servicio y ornato de las iglesias, y que se
.so ni desorden , y advirtiendo á ios vireyes recoja lo que se hubiere llevado de unas á otras,
y gobernadores de lo que conviniere y pare
ciere , para que ayuden por sus partes á lo Te ((>) Véase la ley .37, tit. 7 de.este libro.
lendo, y nos avisen de lo que lucieren , y de (j) Esta ley se lia mandado observar en ced. de 20 de
donde y como se podrá socorrer á la fábrica, diciembre de 1799, declarando que ios gastos de recibi-
mienlo se llagan de los vencidos por los prelados á su in
ornamentos y servicio de las iglesias. greso, y de ninguna manera del caudal de fábricas.
De las iglesias catedrales y parroquiales. 11
y por el mismo inventario se entreguen en ca LEY X X III.
da pueblo á quien tenga cuenta, y la dé de to
do lo que recibiere. Y mandamos que cuando Congregación de nueva España, año de 4546. En ce -
los doctrineros se mudaren de las iglesias par dula del emperador Carlos V , y el príncipe G. dada
en Valladolid a' 10 de mayo de 1554.
roquiales á otros lugares de repartimientos 6
doctrinas , no lleven cosa alguna de las que Que los encomenderos deben proveer lo necesario al
hubiere en las iglesias donde han residido , y culto divino , y ornamento de las iglesias.
si la llevaren, nuestras audiencias reales den Declaramos que Jos encomenderos tienen
orden como lo vuelvau y restituyan adonde obligación de proveer lo necesario al culto di
toca* ( 8 ) vino y á los ministros, ornamentos, vino y ce-
LEY X X I. ta , al parecer y disposición'del diocesano, se
Don Felipe III en Aranjuez à 20 de mayo de 1618. gún la distancia y calidad de los pueblos: y
nuestros oficiales reales deben proveer lo mismo
Que los mayordomos de las iglesias sean legos, lla
nos y abonados. en los que tributan y están incorporados en
nuestra real Corona.
Encargamos á los arzobispos y obispos de
nuestras Indias, que provean los oficios de ma.
yordomos de sus iglesias en personas legas, lla Que no se puedan dar ni vender capillas en las
nas y abonadas, sin dar lugar á lo contrario. iglesias catedrales sin licencia del Me y como
patrón, ni se pongan otras armas que las
LEY X X II. reales, ley 42, tit. 6 de este libro.
Don Felipe II en san Lorenzo á 28 de de agosto de Que en el votar y vestuario de los aliares, ves-
1591. Don Felipe III en Madrid á 24 de marzo de tirse los dignidades y otras cosas, se’g uar
1621. Y don Felipe IV en esta recopilación. de lo que en la iglesia catedral de Sevilla,
Que los prelados visiten los bienes de las fábricas de ley 1 , tit, I 1 de este libro.
iglesias y hospitales de indios , y tomen sus cuentas, Que ¿os religiosos prediquen sin estipendio en
asistiendo persona por el patronazgo real. las iglesias catedrales los sermones de tabla
Declaramos y es nuestra voluntad , que los lejr 79, tit. M de este libro. *
arzobispos y obispos de nuestras Indias , cada Que en cada iglesia catedral se suprima una
uno en sú diócesi, por sus personas ó las de sus canongia para salarios de inquisidores y mi
visitadores, puedan visitar los bienes pertene nistro s,ley 24, tit. 19 de este libro.
cientes á las fábricas de las iglesias y hospita Que ¿os oidores no lleven salario por comisa
les de indios, y tomar las cuentas á los mayor rios de fábrica de iglesia, ley 38, tit. 16
domos y administradores de las dichas fábri lib. 2 . *
cas y hospitales , cobrar los alcances que se Ies Que en cada reducción haya, iglesia con puer
hicieren, y ponerlos en las cajas adonde toca ta y llave, ley 4, tit. 3, lib. 6.
ren, para que de allí se distribuyan eu cosas ne Que la parte de las iglesias de pueblos de la
cesarias y útiles, conforme á lo proveído por el real Corona se guarde con separación, ley 31,
gobierno de cada provincia •, con que en cuanto tu . 5, lib. 6 , los tributos aplicados d iglesias
á tomar las cuentas por lo que toca á nuestro no se saquen del arca sin licencia ni libran
patronazgo y protección real, haya de interve za , ley 32. Y ajústese la parte de tributos
nir y asistir á ellas la persona que tuviere eí go que se debe emplear en iglesias y orna
bierno de la provincia, ó la que él nombrare mentos ley 33 , de que haya libro , ley 34.
en su lugar. (9) Que la contratación de los hombres de negocios
de Sevilla no se haga en la santa iglesia, y
(8) De las alhajas de la iglesia catedral de Lima se
hace todos los años inventario por un oidor que nombra sea en la lonja, ley 59 , tit. 6 , lib. ' 9 .
el virey, y un canónigo que nombra el arzobispo; cuya
diligencia se remite à España, según lo dispuesto por real
eed. de 24 de setiembre de 1/5-1, y por otra de 12 de ju --- yy «ira cíe si <je diciembre de IG^
nio de 1763 se declaró que el ministro debía preceder al en que se eslembo la facultad de los obispos por sí ó ms
canónigo. visitadores a los hospitales de real Patronato.- y se añade
Por cédula de 17 de julio de 1/97 se lia mandado por calidad precisa b de intervenir e! gobernador ó per
cu pipi ir esta ley con esta parte que ordena el inventario sona «minorada por este, y que anote en el auto úe^vi-
de alhajas. sita que se provea para su principio que todo esto lo
(9) Por real ced. de Madrid de 18 de diciembre de P
Je% Al. °S 0ÜlSP°S P0>‘ PaHiailar comúion y encargo
12 Libro i. Título in.
TITULO TERCERO.
D e los m on asterios de religiosos y r e lig io s a s , hospicios y re
cogim ientos de huérfanos.
L E Y P R IM E R A . distrito, no permitan que se tome mas sitio del
que fuere precisamente necesario para la fun
Don Felipe II en Madrid ;í 19 de marzo de 1591; y en
11 de junio de 1594. Don Felipe III allí á 5 de diciem dación y cómoda habitación de los religiosos,
bre de 1(508. El mismo en Lisboa á 24 de agosto de 16í9 á los cuales señalen térm ino, para que dentro
D. Felipe IV en Madrid á postrero de diciembre de 1635- de él hagan, ejecuten y perfeccionen la fun
Y en 18 de setiembre de 1653. Y en esta Recopilación»
Véase con la ley 2 tit. (i de este libro. dación ; y no la haciendo dentro del dicho tér
Que se funden monasterios de religiosos y religio mino , los vireyes lo puedan dar à otra reli
sas , procediendo licencia del rey ♦ gión , que tenga nuestra licencia para el mis
ino efecto.
Ordenamos y mandamos que en las ciuda
des y poblaciones de nuestra; Indias se edifi- L E Y III.
uen y funden monasterios de religiosos, sien- D. Felipe II en Aranjuez á 4 de marzo. Y en Madrid á 9
o necesarios para la conversión y enseñanza de agosto de i 56i .
de los naturales y predicación del santo Evan Que los monasterios se edifiquen distantes seis
gelio , con calidad de que antes de fabricar leguas.
iglesia , convento ni hospicio de religiosos, se Los monasterios de religiosos que se hubie
nos dé cuenta y pida licencia especialmente, ren de hacer en pueblos de indios, conforme
como se ha acostumbrado en nuestro consejo á lo que por Nos está mandado, se hagan dis
de lnd ias, con el parecer y licencia del pre tantes uno de o tro , por lo menos seis leguas,
lado diocesano, conforme al santo Concilio de que asi conviene al servicio de Dios nuestro Se
T ren to , y del virey, audiencia del distrito ó ñor, y nuestro, y bien de los dichos indios.
gobernador, é información de que concurren
tan urgente necesidad y justas causas , que ve L E Y IV .
risímilmente puedan mover nuestro ánimo, y D. Felipe II en Madrid á 16 de agosto de i563. Y en
quedar informado para io que Nos fuéremos Aranjuez á postrero de noviembre de i568.
servido de proveer : y si de hecho ó por di Que donde se hubieren de fuudar monasterios sea la
simulación se hicieren ó comenzaren à hacer costa conforme d esta ley .
algunos de estos edificios, sin preceder la di Mandamos que habiéndose de fundar mo
cha calidad , los virey es, audiencias ó goberna* nasterios en pueblos de indios, y precediendo
dores los hagan dem oler, y todo lo reduzcan licencia nuestra, conforme á la ley primera de
al estado,que antes tenia, sin. admitir escusa este título, sean las casas moderadas y sin es-
ni dilación ; y sea capítulo de residencia ó ceso, y estando las encomiendas incorporadas
visita para ios dichos nuestros ministros si los en nuestra real corona, se hagan à nuestra cos
consintieren comenzar, ó comenzados lo disi ta , y si à personas particulares se hagan à
mularen, y no nos dieren cuenta en la prime nuestra costa y de los encomenderos , y ayuden
ra ocasión. los indios de los pueblos encomendados , con
Don Felipe Ilí en Madrid á 16 de abril de 1618. forme á su posibilidad.
Otrosí mandamos , que lo contenido en es
ta ley se guarde y ejecute en los monasterios LEY V.
de monjas ( I ;. D. Felipe II en San Lorenzo á 24 de agosto de r588. Don
Felipe IV en esta Recopilación.
L E Y II. Que á cada convento que de nuevo se fundare se dé
D. Felipe II y la princesa G. en Valladolid á 18 de agos un ornamento , cáliz con su patena y una campana.
to de i556.
Que no se tomen mas sities para monasterios de los
A cada uno de los conventos de religiosos,
tjue se pudieren poblar , y no poblándose dentro del que de nuevo se fundareu en las Indias con li
termino señalado se den á ot/'a religión. cencia nuestra y en pueblos nuevos, se les dé
de nuestra hacienda real, por una vez, un orna
En los casos que hubiere licencia nuestra
mento y un cáliz con su patena para celebrar, y
para fundar monasterios, nuestros vireyes, una campana.
presidentes ó gobernadores, cada uno en su
L E Y V I.
(i) En red. de 4 de octubre de 97 se mandó guardar D. Felipe II en Madrid á 7 de enero de i588.
Ja bula de Gregorio XV, Jnesci'iitabili según se iiabia or
denado en otra de l.° de julio de 177 Üj y en virtud de Que reservando las capillas mayores de los monaste
ella todos los obispos pueden y deben visitar anualmente riosfundados ó dotados de la real Hacienda , se pue
los conventos de monjas sujetas á regulares, y examinar da disponer de las de mas*
si se guarda clausura, como se administran las rentas, y
tomar sus cuentas acompañados de los prelados regulares, Mandamos que en los monasterios de reli
y si cumplen las demus cosas que previene la citada bulaj
con advertencia que solo en caso de ausencia ó enferme— giosos y religiosas de las Indias, dotados y futi-
pad podrá hacer las veces del prelado otro religioso. J dados de nuestra real hacienda, queden reser-
De los monasterios. 15
vados á Nos los cruceros y capillas mayores ; y y nos envien relación particular en cjada un año
los religiosos y religiosas puedan disponer délas de lo que montare la limosna , y á qué religio
demas capillas y entierros , en la forma que en sos , y cómo se debe dar. (3)
estos reinos lo hacen y pueden hacer los otros
monasterios de fundación y dotación real, y no LEY IX .
los puedan dar sin aprobación de los vireyes y Don Felipe II en Madrid á 11 de noviembre de 1571.
audiencias del distrito, á los cuales mandamos, Que el vino se dé d los religiosos conventuales y no
que tengan consideración á las personas seña d los doctrineros.
ladas en nuestro real servicio y de los reyes Declaramos que el vino deque por nuestras
nuestros sucesores, para que sean mas honra cédulas hemos hecho ó hiciéremos limosna á
das, y los monasterios tengan mas autoridad.( 2 ) los religiosos para celebrar y decir misa, se de
LEY V IL be dar y proveer solamente á los religiosos con
ventuales que actualmente sirvieren eu los mo
D Felipe II en Madrid á i3 de enero de i594. D. Feli
pe III en Aranjuez á i4 de a?osto de 161O. Y en Madrid nasterios , y no á los que residen en los pueblos
á i4 de marzo de i620. I). Felipe IV allí á i7 de agos y doctrinas de indios, atento á que estos lle
to de iC24. Y en esta Recopilación. van sus salarios. Y mandamos à los oficiales de
Que ¡a limosna del vino y aceite se dé solamente a nuestra real hacienda que asi lo guarden y
los conventos pobres en dinero ó especies de vino y cumplan. v
aceite , y no plata , y no se les lleve derechos de
los despachos. LEY X .
Don Felipe IIIen Madrid á 13 de diciembre de 1620. Don
Porque hemos concedido á algunos monas Felipe IV en Madrid á 17 de agosto de i624. Y á postrero
terios pobres de religiosos y religiosas limosna de marzo de x633. Y enBalsainá 24 de octubre de i655.
de vino y aceite con que alumbrar al Santísi Que la situación del vino y aceite se haga en éneo-
mo Sacramento y celebrar el santo sacrificio de mietulas y pensiones.
la Misa, y conviene que con toda buena cuen En todas las cabezas de gobierno se haga
ta y razón se administre. Mandamos á nues cómputo de lo que monta en cada un año ía
tros vireyes, presidentes y gobernadores, que limosna de vino y aceite, que se ha acostum
con intervención de oficiales reales dei distrito, brado dar à los conventos de religiosos, que ha
se baga información de oficio de lo que se Ies de ser por certificación de los oficiales de nues
hubiere dado en los seis años antes, y confor tra real hacienda de la provincia y su gobierno
me á esto tásenla cantidad necesaria para en y la renta de encomiendas de indios puestas en
cada un año, y solamente se dé á los conven nuestra real corona, y encomendados à per
tos y monasterios cuya pobreza fuere tan gran sonas particulares, y lo que montare esta
de , que sino se socorriesen en esta forma ce limosua se proratee en la renta de todas las
saría el culto divino : y concurriendo estas cali encomiendas, regulándolo por tributos, según
dades, sea sin esceso ni desorden en las tasas y lo que paga cada indio , para que ésto menos
estimación de las cosas, ni en el número de re perciban nuestra reai hacienda y sus encomen
ligiosos sacerdotes, lo cual se guarde, cumpla deros, y entre en nuestras cajas reales por cuen
y egecute, sin embargo de que algunos con ta à p arte, para que de allí se pague la limos
ventos tengan cédulas nuestras , para que se na , y nuestros vireyes , presidentes y gober
les acuda con esta limosna, y por el tiempo nadores lo ejecuten puntualmente sin omisión
que fuere nuestra voluntad. ni dilación alguna , y en todos los títulos de
D. Felipe III en Madrid á 5 de marzo de i 6 i 2. D. Feli
pe IV en Madrid á postrero de marzo de io33. encomiendas pongan los que tuvieren facultad
Otrosí mandamos que esta limosna se dé à de encomendar cláusulas especiales, espresan-
los prelados de los conventos en dinero de con do eu ellos la cantidad con que cada tributa
tado ó especies de vino y aceite , según se es- rio , y cada encomienda de las de su gobierno,
presare en nuestras cédulas de mercedes y pro* ha de acudir à nuestra caja real y à su encomen
rogaciones, y no en plata en pasta, y que dero para la paga y satisfacion de esta limosna,
uueslros oficiales reales no les lleven derechos la cual se ha de dar conforme á las cédulas de
por los despachos, atento à que son de orde mercedes y prorogaciones que concediéremos co-
nes mendicantes. moestá proveidoporla ley séptima de este titulo
y no en otra forma, y las presentarán los religio
LEY v m . sos ante los vireyes, presidentes, gobernadores y
Don Felipe III en el Pardo á 29 de noviembre de 1603. oficiales de nuestra real hacienda. Y es nuestra
Q«e la limosna de el vino y aceite se dé con modera voluntad, que esta situación se prefiera á las de
ción , computada a precio mediano, y se avise en cada mas cargas que tuvieren las encomiendas, y que
un año lo que monta. lo mismo se entienda en las pensiones ó ayudas
de costa que sobre ellas se hubieren dado y die
Mandamos á nuestros oficiales reales que ren de aquí adelante j y para que conste pun
den la limosna del vino y aceite á los conven tual y ajustadamente la cantidad que será ne
tos y monasterios con la moderación convenien cesario situar, los vireyes, presidentes y gober-
te , y donde hubiere vino de la tierra lo den
para celebrar, computando el valor, no al (3) En una ley del nuevo codigo que inserta la ced.
mayor precio , ni al menor, sino al mediano, de 14 de febrero de 1791 se manda que Jos agraciados en
éstos manifiesten las mercedes que tengan para ello.* que
se suspendan las cumplidas: que se proroguen las que
(2) Sobre las limosnas de que habla esta ley y sieuieO' aparecieren aun necesarias.- que sobre las perpetuas se haga
tes debe verse la real ced. de 14 de febrero de 1791 examen de la necesidad y yeu si subsisten los motivos Scc.
TOMO I. *
4
14 Libro i, Título in.
«adores, pidan relación á los prelados de las LEY XIV.
religiones de sus distritos, del número de reli Don Felipe III en Madrid á 15 de mayo de 1620.
giosos sacerdotes que tiene cada convento 5 y
Habiendo precedido información de oficio y to Que en Filipinos se de' limosna de harina solamente
d los religiosos descalzos de S. Francisco y agustinos
do lo demas proveído por la dicha ley séptima, Recoletos.
ordenen que se ajuste la cuenta, sitúen la can
tidad que montare, y acudan con ella para este Mandamos los oficiales de nuestra real ha*
efecto. (4) cienda de las Islas Filipinas, que la harina con
cedida de limosna por orden nuestra á los con
LEY XI. ventos de religiosos de ellas, la dén solamente
á los descalzos de la orden de san Francisco, y
Don Felipe IV en Madrid á postrero de marzo de i633. á los recoletos agustinos.
Que donde no hubiere encomiendas en que situar las
limosnas de vino y aceite, se busquen ejectos y se LEY X V .
avise. Don Felipe II en Madrid á 4 de Febrero de i588. T dode
Felipe IV en «sta recopilación.
Mandamos á nuestros vi reyes y gobernado Que d los monasterios que tuvieren cédulas se dén
res, y especialmente á los délas partes donde medicinas y dietas.
no hubiere encomiendas de indios, que se in Porque se han despachado diferentes cédu
formen en que otros efectos convendrá situar las nuestras , haciendo merced á los religiosos,
las dicha» limosnas que no sean de nuestra ha que enfermaren en los monasterios de nuestras
cienda, y nos lo avisen en todas las ocasiones, Indias, sobre quesean socorridos por cuenta de
para que Nos proveamos y mandemos en ello lo nuestra real hacienda de medicinas para su cu
que mas convenga. ración y de las dietas necesarias para los reeieu
llegados , que estuviereriehfermos. Mandamos
L E Y X II. que las cédulas despachadas, y que adelante
se despacharen, sean guardadas y cumplidas,
Don Felipe IV en Madrid á 30 de diciembre de iG39. 1
en esta recopilación. corneen ellas se contiene. (6)
Que lo procedido de feble en las casas de moneda LEY X V I.
sea pura la limosna de vino y aceite. Don Felipe II en Madrid á 1O Je novienbre de *578. Don
Felipe IV en san Lorenzo á 27 de octubre de iG26.
Ordenamos y mandamos que de lo procedi Que en los monasterios de monjas no se reciban mas
do de el feble, que por nuestras órdenes se ha de las que pudieren sustentar y fueren de número
mandado recoger aparte en las casas de moneda de su fundación, y en las renunciaciones se guarde
de las Indias, se pueda acudir y acuda á la paga el santo concilio de Trento.
de el vino y aceite que diéremos de limosna á Rogamos y encargarnos á los prelados de
las religiones, lo cual sea y se entienda sin tle- nuestras ludias, que no consientan entrar en
rogancion de lo dispuesto sobre que se pague de los monasterios de monjas mas de las de el nú
las encomiendas, porque lo determinado en ellas mero de sus fundaciones , y si en algunos hu
se ha de guardar y ejecutar en prim er lu biere mas , las reduzcan como fueren vacando,
gar. (5) al número, pudiéndose sustentar : y en caso de
que aun las del número no se puedan susten
LEY X III. ta r, también las reduzcan hasta quedar las
que tuvieren eóugrua sustentación, que asi
Don Felipe III en Evor.i á 18 de mayo de iGi9. Cédula de eouviene, y está mandado por el santo conci
23 de febrero de iüt9
lio de T rento, el cual también se guarde y
Que no se pague d los conventos que declara , vino , cumpla en cuanto à poder las que entraren á
aceite ni doctrina sin que conste que no hay en ellos ser monjas, y despues profesaren, renunciar
religiosos para Filipinas.
libremente sus legitimas. (7)
Los oficiales de nuestra real hacienda de la
Nueva España, Nueva Galicia y Yucatán , no
paguen las limosnas de vino aceite, ni doctrina Don Felipe III en san Lorenzo :í 11 de junio de i Gi 2 ca
pítulo *5 de instrucción Don Felipe IV cu Madrid ú 8 de
á los conventos de la orden de san Agustín, ni junio de i624 capitulo i5 de instrucción.
á los de san Francisco de la observancia y des Que el virey de Méjico tenga cuidado con la casa de
calzos, si primero no constare por certificacio huérfanas de aquella ciudad.
nes juradas de sus provinciales, que en sus pro Habiéndose reconocido que en la ciudad de
vincias no.hay uingun religioso que haya ido
para pasar á Filipinas , ni le adm itirán, y asi lo (6) Sobre lo concernienlc á esta 1. 16 lo último que
guarden y cumplan precisa y puntualmente. hay es la cédula de 8 de agosto de 1790 en que se refiere
haberse ordenado ni Sr arzobispo Reguera reformase los
conventos de la Encarnación , Concepción y Trinidad;
que si para ello fuere necesario el auxilio del gobierno se
(4j Ced. de Madrid do 23 de setiembre de 1700: otra le prestase, y que si despues de esto las tales monjas no se
del Fardo de 27 de enero de 1725, donde se manda for enmendaren, proceda el virey de acuerdo con el arzobis
mar cierta junta, i lindel informe de esta materia: y po, y con inhibición de todo otro tribunal.
con feclm de I I de marzo de 17G8 se repitieron las ante (7 ) Real cédula de 5 abril de 1770 al arzobispo de Li
riores y otras dirigidas al propio asunto, á que se respon ma , en que se supone que los cinco conventos estaban re
dió que solo á los de san Francisco se acudia á la sazón. ducidos á 150 pesos por cada religiosa de velo negro, y á
(5) Hácese menciou del feble y fuerte en la 1. 29 75 las donadas, para alimentos y vestuario como so parti
tit. 2 1 lib. 5 de Castilla. cipó al señor Amat en otra de 17 de abril de 1?74.
D e los monasterios. j
Méjico de la nueva España y sus comarcas ha
bía muchas mestizas huérfanas, se fundó una tadas en algunas ciudades de sus distritos mr*
casa para su recogimiento ^ sustentación f doc SSanta
* X 7 be¿ rCatólica
° f e r r a.enalgunas
trina. Mandamos á nuestros yireygs, que ten
, l0S
indias <doncellas
1« nuestra
gan mucho cuidado eon este recogimiento, ren y ensenarlas otras cosas necesarias i la T¡da nn'
tas y limosnas que gozare para su conservación, l * r t P·'O'ureti sa·bei· las casas que liay de est¡
y procuren y dispongan, que pór cúantos m e calidad ; que orden y gobierno tienen, |a for!
ma y efectos de que se sustentan, y cIe |0 „ lle
dios sean posibles se aumenten, pues asi convie
ne para servicio de Dios nuestro señor , crianza convendrá proveer para su conservación, recoei-
y recogimiento de aquellas huérfanas. ( 8) mien o y honestidad. Y porque es justo n?le
obra tan piadosa y importante para servicióle
LEY X V III. Dios nuestro Señor y bien de aquellas provin!
cías, tenga el aumento que conviene, la enco
El emperador don Carlos y el príncipe G. en Monzon de
Aragón .á 18 de diciembre de i552. mendamos mucho á nuestros vireyes. Y m a!
damos, que con muy particular cuidado pro
Que los vireyes visiten cada año el colegio de las ni-
Mas de Méjico y lefavorezcan en laform a que se or-~ curen su conservación y donde no las hubiere
. dena. se funden y pongan en ellas matronas de buena
k a y egempfo, para qué se comunique el fru-
Mandamos u nuestros vireyes de la Nueva
to de tau buena obra por todas la provincias v
Rspapa >; que en cada un año por su turno vi- ¡
les encarguen, que pongan muchL atención í
site e viléy actual un ano, y un,oidor d e ja diligencia diligencia en en enseñará
enseñará esK« d /n / 'i
estas doncellas la ien«ul .
jeal audiencia de Méjico
---------ijuc pairael.
e uque
o n opava
ill- ello nom- i esnauola
espillóla ,. yv en < ella
*]!.•» la
U dooü infe • _ f...e * hu<l
J>rare, otro año, el colegio de las Niñas Reco
cí a.s 5J or«eneu el Cplesiu
(j (le leng^4la 4 « * « yHeco-
doctrina reco I eU , t f e r C í “m
gimiento necesario, y que liava personas que i f e J T o ) 1" perm,tan fiabi- ‘- g - 8. r :
miren por ellas y se crien en toda virtud y ocu
pen en (o que convenga para el servicio de Dios,
y Sl? y aprovechamiento,' v sepan en qué Qlrio?á V ’1'0lta en, t iglesias *•
y como se gasta la limosna que se hace á la caéa J a f /U, j 2
J .,Z tit.
? ° rodÍde en Sozar
J la tenga,, por muy encomendada, y ayuden dad, este libro.* innuni.
/ favorezcan en lo que hubiese lugar, y esto Que los oidores visitadores de la tierra r otros
nns.no se entienda en las démas que se fundaren
■de esta calidad. (9) • : Z
de T¡eligieses,
í° - " ° m,l eranJ P°sar
j 8 9 , tit. d ,os o n * * * ,
|<5, ¡ib. 2 . ( 1 | )
«2«.
. debe considerárseles en E sm ñ i ,s •
! de 19 de febrero de 94 P‘ ‘ 1 >vense la cédula
I ... O®) En cédula de 4 de octubre 1790 ‘ -1
I bcitiul di; erigir cu ventado™ f e a a ofe, >1 Í " X ° •’ Sr
Copacabana de L im v v de
d.«fe,,fe:nf * “■» .la observancia d«l rH a L n l S ° e . V* e y > cu¡(iase d«
• luabnnnte se - o b i ^ '^v J ° T ' 'V ° Utís Por (i™ ac‘
, espíritu de c u , |c r y \ ’J xl¡ 3 aoc'" ‘ *“ ¡omi'nto *e«un el
i», .odo do atnordo cor, ol
ÓcsPóú'f> recomendación y
P 0 11 38 ^ $• M- b* querido declararles y coa qué
16 Libro i. Título iv..
TITULO CUARTO.
D e los hospitales y cofradías.
L E Y P R IM E R A . premio. Y asimismo mandamos á los presiden
tes y gobernadores, que en las ciudades don
El emperador don Carlos y el cardenal gobernador en de residieren tengan esta orden y cuidado (2 ).
Fucnsalida á 7 de octubre de i51i.
L E Y IV .
Que se funden hospitales en todos Jos pueblos de Don Felipe II en Tordesillas i 22 de junio de i592. T en
españoles ¿ indios. Madrid é i2 de febrero de i589.
Que de lo tocante d los hospitales de indios no se
Encargamos y mandamos & nuestros vire- saque para los seminarios , y en las donaciones se
yes, audiencias y gobernadores, que con espe guarde lo dispuesto por los concilios provinciales»
cia! cuidado provean, que en todos ios pueblos
de españoles é indios de sus provincias y juris De lo repartido á los hospitales de indios,
dicciones, se funden hospitales donde sean cu no se saque tres por ciento para los seminarios,
rados los pobres enfermos y se egercite la cari ni por esta razón se haga descuento alguno; pero
dad cristiana ( 1). en cuanto a las donaciones hechas por los enco
menderos à los hospitales, se guarde lo dis«
puesto por los concilios provinciales.
LEY II.
Don Felipe II en la ordenanza i22 de poblaciones en el
LEY V.
bosque de Segovia á i ’i de julio de i573. Dnn Felipe IV por auto del Consejo en Madrid á 20 de
abril de i652,jr cédulas de 4 de setiembre de el dicho
Que los hospitales se funden conforme d esta le y año.
Cuando se fundare ó poblare alguna ciudad, Que los religiosos del beato Juan de Dios en lo ad
villa ó lugar, se pongan los hospitales para po ministración de los hospitales que tuvieren d su car
bres y enfermos de enfermedades que no sean go # guarden la form a que por esta ley se dispone.
contagiosas, junto á las iglesias y por claustro Mandamos que los religiosos del Beato Juan
de ellas, y para los enfermos de enfermedades de Dios, guarden en la administración de los
contagiosas en lugares levantados, y partes que hospitales la orden siguiente.
ningún viento dañoso, pasando por los hospi 1 Primeramente, que en ninguno de los
tales, vaya à herir en las poblaciones. hospitales que fueren á cargo de los dichos re
ligiosos, haya mas de los que fueren necesarios
LEY III. para su servicio y ministerio, cura y limpieza
Don Felipe II en Madrid á i9 de enero de t587. Y en la de los pobres, que en cada uno se curaren.
Instrucción de i596, cnp. i • Don Felipe III en S. Lorenzo 2 Que el número de religiosos para cada
;i ti tle junio de i6i2. cap. i5 de Instrucción de vireyes.
Don Felipe IV en Madrid á 18 de junio de i624, cap. i 6 . hospital , le hayan de señalar los vireyes ó los
presidentes y audiencias reales de las Indias,
Que Jos vireyes, audiencias y gobernadores pongan con comunicación de los arzobispos ú obispos en
cuidado tn los hospitales.
los lugares donde los hubiere, y donde no, los
Mandamos á los vireyes del Perú y Nueva gobernadores ó corregidores y comisarios, que
España, que cuiden de visitar algunas veces para este efecto se nombraren por los cabildos
los hospitales de Lima y Méjico, y procuren que seculares con intervención de los oficiales rea
Jos oidores por su turno bagan lo mismo, cuan les, donde los hubiere, habiendo primero lla
do ellos no pudieren por sus personas, y vean la mado y oido al vicario general ó prior del hos
cura , servicio y hospitalidad que se hace à los pital para.que informe y dé razón de lo que con
enfermos, estado del edificio, dotación, limos viniere y fuere preguntado, y reservamos al
nas y forma de su distribución, y por que mano consejo, el proveer sobre el dicho número lo
se hace, con que animarán à los que adminis que mas convengan cuando se ofrezca ocasión ó
tran á que con el egemplo de los virreyes y se pida (3).
ministros, sean de mayor consuelo y alivio à 3 Que para el nombramiento ó señalamien
los enfermos, y i los que mejor asistieren á su to , hayan de considerar y consideren las calida
servicio iavorecerán, para que les sea parte de des del hospital de que se tratare y enfermos
que en él se suelen recoger y curar unos años
con otros, asi de españoles como de indios, y
(i) El a fio de t790 se celebró en Lima tm capítulo ge las rentas fijas que tiene el hospital y las limos**
neral del orden Helcimitico; y elegido cu él por prefecto ñas que se suelen juntar , y las demas circuns
general fray Pascual de S José, se hicieron en él varias tancias que les parecieren que se pueden ofrecer,
ampliaciones y declaraciones á Ja primitiva constitución de
este orden: las q«e vistas por'el Consejo se mandaron re y antes nombren y señalen uno ó dos de mas,
coger, y que estos religiosos se arreglasen exactamente á que de menos, por si acaso alguno de los precisa-
*us primitivas constituciones, observasen lo prevenido por
derecho y concilio sobre la edad para profesar, se guar
dase lo ordenado sobre renuncias, no se hiciese perjuicio (2) El cumplimiento tic esta ley se encarga en cédula
a las leyes sobre la facultad de testar hasta el último mo de 22 de diciembre de 180U.
mento antes tic profesar, con otras declaraciones dignas (3) Véase la 24 tit. 14 de este libro y la cédula allí
de verse. Todo en cédula de i3 de agosto de i796. notada.
De los hospitales y cofradías * 7
mente necesarios muriere y estuviere enfermo ó dan recibir en los de Panam á, Lima y Méjico,
ausente, y en esta conformidad en los hospitales como en CasasMatrices, y en los de Santa Fé del
donde hubiere mas hermanos de losque fueren nuevo reino de Granada , Santiago del reino de
necesarios,se quiten y remitan álos que no tu> Chile y villa imperial de Potosí-, de manera que
vieren los bastantes, ó sé vuelvan :á las Casas estas; sean Casas Conventuales y de noviciado,
Matrices de donde hubieren salido, Ódonde de y de los hermanos que en ellas se recibieren,
Vayan çnviandolos que por tiempo hubieren de
bieren estar. ^
4 Que de los religiosos que asi se nombra asistir y fueren menester en los hospitales de las
ren, se pueda permitir que uno ó dos sean sa islas de Barlovento , Tierrafirme , nuevo reino
cerdotes, para que puedan decir misa á los e n -de Granada-, Nueva España y Perú.
fermos y administrarles los Santos Sacramentos, 1.1 Que en las tres Gasas Matrices de Pana-
atendiendo en esto à la. comodidad, calidad y •màn, Lima y Méjico , puedan tener y tengan
cantidad que para ello tuviere el tal hospital, tres comisarios 6 vicarios generales de su reli
con que en las Casas Matrices no haya mas de dos gión, á los cuales estén subordinados los religio-
sacerdotes en cada’üna , y en los demás hospi sos y hermanos que hubiere en las otras tres
tales uno y dos , conformé á la cantidad y posi • Gasas Conventuales de Santa Fé, del Nuevo Rei
bilidad de ellos. no, Santiago de Chile y Villa imperial de Po
5 Que los religiosos sacerdotes en ninguna tosí, y los que como dicho es, se diputaren y
de las Casas Matrices, ni en otra ninguna casa ni señalaren para la asistencia y ministerio de los
hospital, sean ni puedan ser prelados como está hospitales cada uno en su distrito •, y a estos ta
dispuesto por bulas apostólicas,‘admitidas y pa les comisarios ó vicarios les. dé sus veces el ge
sadas por el consejo. neral'de.la dicha orden para que pueda visitar,
6 Que los sacerdotes que asistieren en los corregir y deformar los conventos y hospitales,
hospitales para la administración de los Santos conformeá su regla, y por lo tocante á ella, por
Sacramentos, hayan de ser examinados y apro la dificultad que habria en hacerlo desde este
bados por los ordinarios, y tener licencia d e: reina respecto á la mucha distancia.
ellos para la‘administración. 1*2 Que en las otras tres Casas Conventuales
7 Queá los religiosos se ha de dará entender, de Santa F é , Santiago y Potosí, los superiores
que se nombraren puedan intitularse priores, y
3 ue los hospitales que se les hubieren encarga-
o ó encargaren, no se les dan para que en ellos no comisarios ni vicarios generales, porque no
tengan convenios de su religión, ni la vayan ha de haber mas Casas Matrices con comisarios
propagando por esta forma, pues aun á las mas ó vicarios generales , que las tres referidas de
antiguas no se les permite esto sin particular li Panamá, Lima y Méjico.
cencia nuestra , ‘y otras estan del todo prohibi 13 Que hecho el señalamiento de los her
das de pasai* ¿fundar en las Indias, y nuestro manos que en cada hospital hubiere de haber y
ánimo é intención en encargarles los dichos hos se juzgaren por necesarios, este número se llene
pitales, solo es de que asistan en ellos á los en délos que hubieren pasado de España, ó hubie
fermos, conforme á su primero y principal ins ren entrado y profesado de nuevo en la dicha
tituto, lo cual lian de guardar y cumplir, es- religión en las indias, y los.demas si fueren en
cepto en las casas que por esta nuestra ley irán número considerable, se recojan y manden Ve
declaradas, que estas solas serán convento y te nir á estos reinos en la primera ocasión-
nidos por tales, y los que por particular per 14 Que si por tiempo sucediere faltar los
misión y licencia nuestra se les permitiere. nombrados, y no haber en las dichas seis Casas
8 Que en cuanto á si los hospitales que no otros que puedan entrar en su lugar, de suer
fueren conventos, han'de tener Sagrario é igle te que sea necesario enviarlos de estos reinos,
sia abierta y campana , y acudir pura ello á los el virey , gobernador ó corregidor de la ciudad
ordinarios, para que Íes den la licencia, siendo ó villa donde estuviere el hospital que nece
conveniente se guarde en el hospital de la ciu sitare de los religiosos, dé cuenta de ello al con
dad de Portobelo, lo proveido por nuestro con sejo y los que en él quedaren, ó los comisarios
sejo, y para los demas hospitales se suspende por ó vicarios se la dén también à su general, para
ahora lo determinado, sobre que hubiesen de que se envíen dos que-fueren menester procu
acudir y acudiesen á los ordinarios, á que les rando que estos sean tales, cuales convenga , y
diesen la dicha licencia siendo conveniente. el general hará presentación de los que para
9 Que en los hospitales que no fueren con este efecto nombrare en el consejo, y por él se
ventos, señalen los prelados los que hubieren le darán las licencias necesarias para su viage,
de ser superiores y gobernar los hospitales, los como se suele hacer con los religiosos que se
cuales no usen títulos de priores, sino de her envían de otras religiones.
manos mayores. 15 Que los hermanos que se conservaren
10 Que por esta razón no han de poder, en el ministerio de los hospitales, y los que en
ni puedan dar el hábito de la dicha religión en traren en los que se les encargaren de nuevo
los hospitales, á ninguno que le pidiere y qui han de entender, que no entran como dueños
siere entrar de nuevo en ella, ahora sea criollo y señores de ellos y de sus rentas y limosnas,
de aquellas partes, ahora natural de estos rei sino corno ministros y asistentes de los hospita
nos ; pero porque se ha entendido, que en ellos les y de sus pobres, y para servir á Dios en ellos,
no hay tantos hermanos que basten á proveer y crecer el pió y loable instituto y vocación de
y enviar los que serán necesarios para el servi su religión.
cio de los hospitales, se les permite que los pue- 1(5 Que en esta conformidad y con este
TOMO I. 5
18 Libro i. Titulo IV.
supuesto lian de recibir por cuenta y razón to Nos en todo ó en parte, ó con rentas, limosnas
dos los bienes de los buspitales, asi muebles y contribuciones que para ello hayan hecho
como raíces ó semovientes, juros,:censos, de las ciudades y villas.en común ó en particular,
rech o s y acciones que tuvieren rentas y situa se puedan asimismo visitar y visiten cada año
ciones en las cajas reales, y la lian de dar. de ó cuando pareciere conveniente por los gober
lo que hubieren recibido, cobrado, gastado .y! nadores ó corregidores, con algunos diputados
pagado siempre que se les pida à las personas de sus cabildos ó las personas que. para ello se
que luego irán declaradas. señalaren por los vi rey es, y se podrá procurar
47 Que la misma cuenta y . razón han de que estas visitas se hagan á: un mismo tiempo
tener y dar de las limosnas que juntaren’y re por el eclesiástico y seglar para escusar em
cogieren para los hospitales, mandas ó legados barazo. ( 6)
que se les hicieren, ó bienes que quedaren-¡¿le. 22 Que en los hospitales de ciudades y de
los pobres enfermos que se entran á curar ó particulares tome las cuentas el ordinario, y
asistan á ella los diputados de la ciudad para
mueren en ellos.
18 Que lo que adquiriere la religión como poder representar io que hubiere contra ellas.
suyo por herencias de sus religiosos, en tanto 2 i Que la sujeción á que conforme al capí
se entienda ser de los hospitales, en cuanto los tulo 18 de este Auto se han de reducir los re
religiosos fueren conservados en ellos. ligiosos, sea y se entienda en cuanto á la hos
19 Que asi para dar las cuentas como para pitalidad y cuentas que hubieren de d a r, por
ser visitados cuando convenga por lo tocante que en io demas que no mirare á esto sino á
al modo y forma que han tenido en el:.minis sus personas, se les reserva su derecho á su re
terio de los hospitales y cura de^ los pobres, de ligión y á los prelados de ella á quien estu
ellos, no lian de poder alegar ni aleguen exeri' vieren sujetos.
cion ninguna, ni los privilegios de su. orden, 24 Que si en algunas ciudades, villas ó lu
aunque sean sacerdotes; antes se han de alla gares donde hay ó hubiere los dichos hospita
nar á ello, y si fuere necesario, traer, par ageste les estuvieren, como es ordinario, nombrados
efecto breve y declaración de su banlidad, ó se nombraren algunos venticuatros ó diputa
quedando en cuanto a lo demas, tocante á su dos para que por meses ó semanas acudan á
regla ¿instituto, sujetos y subordinados á las ver cómo se sirven los hospitales y se curan los
visitas y correcciones de sus vicarios y priores, enfermos de ellos, esto se conserve, y los h er
en la forma que entre ellos se lia acostum manos asi sacerdotes como legos tengan toda
buena correspondencia y subordinación en lo
brado. (5) i t i i que fuere justo y honesto á .los dichos venti-
20 Que las dichas cuentas las hayan de dar
á los gobernadores, corregidores y cabildos se cuatros y diputados, por cuanto es cierto y
culares de las ciudades ó villas donde estuvie notorio, que con las limosnas que contribuyen
ren los hospitales, 6 á los diputados que para ayudan macho á los hospitales y regalo de los
este efecto se nombraren ó señalaren por los enfermos en mucha mas cantidad de la que tie
susodichos con que el tomarlas, siendo de hos nen de renta fija y ordinaria, y no es justo en
pitales de nuestro real patronazgo, sea por m a tibiarles ni retraerles de obras tan piadosas.
no de los oficiales de la real hacienda donde 25 Que supuesto que los dichos religiosos
los hubiere, y donde no los hubiere, por mano no entran en estos hospitales para hacer con*
de la persona ó personas que nombrare la jus ventos de la religión sino para asistir y curar
ticia ordinaria-, y no siendo los hospitales del los pobres, no se les ha de perm itir ni perm ita
patronazgo real, tome las cuentas el ordinario . que muden las fábricas de ellos, ni hagan igle
eclesiástico, con que si tuvieren renta situada sias, claustros ó celdas á su voluntad, en. que
por Nos, ó en encomiendas ó repartimientos se sabe que en algunas partes han escedido y
de indios ó en la caja real, asista é intervenga escedeu, sino solamente aquellas obras, ofici
al tomarlas uno de los oficiales de la real ha nas y reparos que convinieren para la hospita
cienda, y en uno y otro caso se tomen una lidad. ó cómoda vivienda de los religiosos, y
vez cada año y no mas, y esto sea dentro ele esto habiendo primero precedido consulta y
los hospitales y sin sacar de ellos los libros, obtenido licencia del virey ó gobernador para
en cuanto á que á los religiosos no se les lleven los hospitales de nuestro patronazgo real o la
derechos por tomar las cuentas, se guarde io del ordinario eclesiástico y cabildo secular , y
de los demás de fundaciones y dotaciones par
acordado. . ticulares, y de los que tuvieren derecho de to
2 1 Que en las visitas de los dichos hospita
les intervenga el ordinario eclesiástico, espe mar las cuentas de ellos, para que no les pasen
cialmente en los que tuvieren iglesia., alUu y sino lo que en esta forma hubieren gastado.
campana, conforme al sacro concilio de ícu
to. Y los que inmediatamente fueren del pa (6) Véase la cédula que se cita sobre la ley 22 , tít. 2,
!¡b. 1 .° que se mandó observar en otra dirigida al presi
tronazgo real por estar fundados ó dotados por dente de Chile, sobre consulta que se ofreció en la Con
cepción sobre visita; y mandó el iiey que no se impida,
antes se ausilie á los obispos para que visiten dicho hos
pita} y demas que sean de rea! Patronato, siempre que les
( 5 ) En cédula de fi de enero de 1713, se manda parezca tomar cuentas á ios administradores ó mayordo
guardar este capitulo y el 20 y 2 b mos y cobrar alcances, entregándolos en las cajas donde
IU:pillóse el cumplimiento de los 30 capítulos-de usía corresponda, con arreglo á la citada ley 22 y cédula que
1«.y en cédula de Buen Retiro de 13 de febrero de 1/ab, se cita, concurriendo precisamente otra persona nombrada
con motivo de pase de privilegios que se pulió en el Con por el vice patrón y demas que se ha dicho. Cédula de
Madrid.de.4 .de julio de i 77í>.
sejo.
D elo s hospitales y cofradías. 19
26 Que puedan los dichos religiosos tomar para su.hospitalidad, que entra en poder de
y tomen, ele las rentas y limosnas de los hospi los corregidores y alcaldes mayores de sus pue*
tales lo que buenamente hubieren menester blos, y se gasta el noveno y medio, que según
para su sustento y vestuario y honesta pasadía, la erección de cada iglesia está aplicado para
conforme á su estado y profesión$. de manera su curación en los hospitales de cada ciudad,
que no haya en ¿lio nota ni eseeso, y esto solo y padecen mucha necesidad los que viven fuera
se les pase en cuenta en las que hubieren de de ellas. Mandamos á los vireyes, audiencias
dar, habida consideración á las provincias y lu y-gobernadores, que con cuanto cuidado sea
gares donde vivieren/y gastos, carestia ó abun posible tomen cuenta de esta contribución á
dancia c!e; ellos. • , .. los dichos corregidores y alcaldes mayores, y el
27 Que ios comisarios ó vicarios generales dinero*que se juntare y alcances que se les hi
que han de residir en Panamá, Méjico y Lima cieren esto siempre pronto para que. se gaste
puedan con justas causas mudar los hermanos en el benefiçio y regalo de los indios enfer-
que estuvieren señalados para unos hospitales inos; y si hallaren que los corregidores y al
à otros, cuando les pareciere que hay causas caldes mayores se. han aprovechado de este
que oblguen á ello, electo, procedañ conforme á derecho y está
28 Que en las iglesias de los dichos hospi proveído contra los que no enteran las cajas de
tales nó puedan enterrar ni entierren mas di su cargo ( 7).
funtos qué los qué murieren en ellos, si no
fuere pagando enteramente los derechos que - . LEY V III.
pertenecieren y legi tunamente se debieren á Don Felipe III en S. Lorenzo i 3 de setiembre de 1616-
las catedrales ó parroquiales, qué ya han pare
Qitelosdél cabildo y hermandad del hospital de san
cido en el Consejo, agraviándose de ésto. Andrés de Lima sean reservados de los alardes como
29 Qué los hefiïíanÒs'de la dicha relígióíi se declara.
que salieren y hubieren salido de ella y deja
ren el hábito, sean traídos á est.os reinos y no Mandamos á nuestros vireyes de las pro
se consiénta que estén ni residan en las Indias. vincias dél Perú, que en conformidad de un
30 Que sean enviados y traídos á estos rei capítulo del asiento y capitulaciones hechas con
nos los qué no guardaren en las Indias las cons los del cabildo y hermandad deí hospital de
tituciones de la dicha-religión/ S. Andrés dé la ciudad de los Reyes sobre la
fundación de él en que se les concede, que
. LEY VI. respecto de sus muchas ocupaciones en la ad
ministración y cura en los enfermos, no ten
Don Felipe TV en Madrid á -1 de enero de 1653. .
gan obligación dé salir á los alardes que se
Que d los hermanos del beato Juan ele Dios nq se lle hicieren éri la dicha ciudad, ni sean apremia
ven los derechos (fue esta ley declara. ' ; dos á salir à ellos, si no fuere cuando la misma
Reconocido que en alguúas provincias de persotia del virey se hallare presente, ó ios ene
nuestras Indias Occidentales pretenden los obis migos estuvieren tan cerca que sea necesario
pos y sus visitadores cobrar derechos á los her hacer prevención para resistirles.
manos del beato Juan de Dios, por dar cuenta
de los bienes, limosnas, testamentos y mandas
que se dan á sus hospitales, y poderlos cobrar Don Felipe III en S. Lorenzo á 3 de setiembre de 1616
en dinero, mantenimientos ó vestuario^ con Que se confirman lafiundacion y ordenanzas del hos
pretesto de lo que dispone el santo concilio de pital de santa Ana de Lima.
Trento en la sesión 24, capítulo 3, de que se
siguen dudas, diferencias y menoscabos en las Porque los hermanos del hospital de Santa
rentas y limosnas, y los hermanos no pueden Ana de Ja ciudad de los Reyes fundaron una
acudir al egercicio de hospitalidad que tienen hermandad en él con la advocación de esta
á su cargo. Declaramos, que los hospitales del gloriosa Santa, que tuviese á su cargo el go
beato Juan de Dios que estuvieren fundados y bierno, administración y hospitalidad en la
se deben fundar, y administraren con licencia forma que lo hacen los hermanos del hospital
nuestra en todas nuestras Indias, no deben pa de S. Andrés de la dicha ciudad, y por nues
gar los derechos refer idos en ninguna cantidad. tra rea! Audiencia, teniendo el gobierno de
Y mandamos a los vi reyes, audiencias y gober las provincias del Perú, se les concedieron los
nadores y otros cualesquier nuestros jueces y preeminencias y exenciones de que gozan los
justicias. Y rogamos y encargamos á los arzo hermanos del hospital de S. Andrés, en ouva
bispos y obispos de nuestras Indias y á sus razón despachó.su carta y provisión, y les dio
oficiales, provisores y vicarios generales, que facultad {jara que pudiesen hacer ordenanzas
cada uno en su distrito y en lo que le tocare, para el buen gobierno de la hermandad, y en
provea como asi se guarde y cumpla. esta conformidad las hicieron y presentaron
ante nuestro virey del P en i, que las aprobó
LEY VII. y mando egecutar con las declaraciones conte
Don Felipe IV en Morcón á 8 de marzo de 1626. Y
nidas en algunos capítulos de ellas. Por la pre
en Madrid a 18 de mayo de 1610. sente confirmamos y aprobamos la fundación de
Que d los corregidores se tomen cuentas del tomin (7) Véasela 22, tit. 2 de este libro, y Ja ordenau-
que los indios contribuyen para los hospitales. za 18, tit. 9, ley 2, que habla de Jos hospitales de los pue
Porque los indios del Perú pagan un tomín blos, y se haga cargo ai mayordomo del Tomín; y la 29
y 30, tit. 2, lib. 2.
20 Libro i. Título iv.
la-hermandad, preeminencias y ordenanzas de en la administración de su hacienda y limos
ella; según y como están aprobadas. '• nas haya el buen cobro que conviene, orde
namos y mandamos al nuestro vi rey* que es ó
LEY X fuere, que cuando ie pareciere necesario y lo
Fl emperador don Carlos y el cardenal gobernador á 29 tuviere por conveniente, nombre persona de
de noviembre de 1510. Y don Felipe IV en esta .Recopi satisfacción ¿ inteligencia que tome las cuen
lación.
tas del hospital.. <
Que el hospital real ele Méjico sea d cargo del ario-.
hispo. LEY X IÍI,
Por cuanto don fray Juan de Zumarraga, Don Felipe IV en Madrid á 26 de de junio de i624.
obispo que fué de la santa iglesia de Méjico, Que las cuentas del eolegio de san Juan de Letran
vista ia estreñía necesidad que entonces hablá y hospital real de Méjico se tomen por los contado-
en la dicha ciudad de un ¡hospital donde se res de cuentas.
aeogiéseu los pobres enfermos y llagados de
el mal de las bubas, ie hizo á su costa, y nos Mandamos, que cuando fuere necesario
tomar las cuentas á los mayordomos de! cole
suplicó que admitiésemos 'el titulo dé Pátron:
gio de S. Juan de Letran.de la ciudad de Mé
del hospital, y proveyésemos qué se llamase é jico y del Hospital .Real de los indios de ella,
intitulase el Hospital R eal, y se mandó asi; el virey de la Nueva España por nuestro real
y aceptado el patronazgo de él para que Nos Patronazgo, y conforme á él, haga que se to-*
y ios royes que sucedieren en nuestra Corona men por los contadores de cuentas ó algun
real fuésemos patrono, y como tales proveyé oficial mayor de ellas, pues estas casas son de
semos lo conveniente al bien del hospital y sus nuestro Patronazgo, y que tomándolas el oficial
pobres, se mandaron poner en él nuestras a r : mayor se le dé moderada ayuda de costa.
mas reales, y que los obispos que adelante
fuesen de aquella santa iglesia , tuviesen la ad L E Y X IV .
ministración del dicho hospital, y que las cons Don Felipe IV ea Madrid á i3 de julio de i627.
tituciones que para él se hubiesen de hacer, ,
Que la administración del hospital de Cartagena de
las hiciese el dicho obispo y nuestro virey, Indias estéd cargo del regimiento de aquella ciudad.
que entonces era de la Nueva España, y se
mandó que los obispos que adelante sucedie Ordenamos y. mandamos, que la adminis
sen diesen cuenta de la administración y ren tración del hospital de la ciudad de Cartage
tas de él, sin que por ello hubiesenni lleva na , donde se curan los pobres y soldados en
sen interés alguno. Es nuestra voluntad, que fermos del presidio y armadas, se vuelva al
todo lo susodicho se guarde y cumpla con el regimiento de la ciudad, para que la tenga co
arzobispo que. es ó fuere de la dicha iglesia y mo antes, y no otra religión ni hermandad.
con el hospital como hasta ahora se hubiere LEY X V .
guardado y cumplido.
Don Felipe IV en Madrid á 9 de agosto de 165*.
LE Y X I. Que el hospital de san Lázaro de Cartagena goce del
Don Felipe II en Lisboa i 11 de junio de 1582. derecho del anclaje y preeinihencias de los 'hacina
dores y enfermos.
Que se confirman las ordenanzas del hospital de san
Lázaro de Méjico. Habiéndosenos hecho relación en nuestro
real consejó dé las Indias de que al hospital de
Porque los pobres que acuden ai hospital san Lázaro de la ciudad de Cartagena acude
de S. Lázaro de la ciudad de Méjico de la mucho número de enfermos, y por no haber
Nueva España fuesen bien curados y goberna con que sustentarlos, ni asistir á la necesidad
dos, se hicieron ciertas ordenanzas que fue para su cura, andan divertidos por lá ciudad y
ron confirmadas por nuestro real consejo de estancias, de que resulta el quedar otros chu
las Indias el año pasado de mil y quinientos y chos tocados de aquel contagio ; tenemos por
ochenta y dos. Por la presente de nuevo las bien de conceder, como por la presente con
confirmamos y aprobamos, y mandamos que cedemos al dicho hospital de S. Lázaro de la
se guarden, cumplan y egecuten como en ellas dicha ciudad de Cartagena el derecho del an
y en cada una se contiene y declara, por el claje de los navios que entran en el puerto de
tiempo que fuere nuestra voluntad y Nos no ella , en la forma que se cobra en otras partes
mandáremos otra cosa. y puertos de aquellas costas. Y asimismo los
L E Y X II. privilegios de que goza el de S. Lázaro de Se
villa , concedidos por los señores reyes D. E n
Don Fdipe IV en Madrid á 11 de mayo de i62i. Don rique IV , D. Fernando y doña Isabel, doña
Felipe III en S. Lorenzo á ïi de junio de iGi2.
Juana y D. Carlos , D. Felipe II y 0 . Feli
Que el virey de Nueva España pueda hacer tomar las pe III, nuestros predecesores, que santa gloria
cuentas del hospital de san Hipólito de Méjico. hayan, con calidad de que solamente se ejecu
Por breve de la santidad de Paulo V, de ten en lo que en esta ley se declara, y no en
felice recordación, se da la forma y orden mas.
que los hermanos del hospital de S. Hipólito Que en dicho hospital haya un mayoral, un
de la ciudad de Méjico han de tener y guar procurador y un capellán, y en ia dicha ciu
dar para la conservación, aumento y buen dad de Cartagena dos hacinadores, y en las de
gobierno de él y cura de los pobres. Y porque más ciudades del arzobispado del nuevo reino
De los'hospitales y cofradías. 21
de Granada y obispado de santa Marta, siendo Francisco, provincia de S. Gregorio de las is
ciudades que remitan á este hospital sus en las Filipinas, administran el hospital real de
fermos, en cada una de ellas baya su hacinador los españoles de Manila, y asimismo otros que
solo, los cuales hayan de ser y sean nombrados funda ron con limosnas en la dicha ciudad, acu
por el mayoral, y los haya de poder remover diendo á los ministerios espirituales y tempora
à su voluntad , con que los nombramientos y les de los enfermos cou grande edificación.
revocaciones sean y ios haga ante el escribano Mandamos que no se haga novedad, y esta hos
de cabildo, que tenga registro de ellas, y que pitalidad esté á cargo de los religiosos descal
hayan de tener las bacinicas, y demandas por zos , como hasta ahora, qué así es nuestra vo.
sus personas, y no puedan gozar de los nom luntad.
bramientos en otro modo: y que los dichos ba~
cinadores no tengan ni puedan traer de ha LEY XVIII.
cienda mas de sesenta mil maravedís, y de es Don Felipe III en san Lorenzo á 9 de setiembre de 16O8,
ta; cantidad abajo, y si se aumentare, cese lue Que se dett dos. mil ducados cada año al hospital de
go en su oficio, y no pueda usar de su nom Portobelo, eon cargo deque en él se curen los sol
bramiento, y que siendo nombrados con estas dados.
calidades y condiciones,.sean libres de pagar al Porque en el hospital de la ciudad de san
cabalas hasta el respeto de los sesenta mil ma Felipe de Portobelo, donde se curan los solda
ravedís, que se les permite de hacienda, ó de dos , se gasta cada año mucha hacienda, y Nos
esta cantidad abajo lo que tuvieren menos : y deseamos socorrer á los pobres enfermos, hace
que asimismo sean libres de aposentar solda mos merced y limosna al dicho hospital de dos
dos, salir á los alardes, y de contribuir en los mil ducados, que valen setecientos y cincuen
donativos que se pidieren; y en cada pueblo de ta mil maravedís cada año, lodo el tiempo que
indios que no tengan menos de cincuenta tr i fuere nuestra voluntad, y no proveyéremos y
butarios , pueda haber un indio hacinador, el mandáremos otra cosa en contrario, librados en
cual sea libre de acudir á las mitas y servicios nuestra caja real de Portobelo en lo que proce,
personales *, pero no de pagar su tributo, y es diere de ios derechos de Almojarifazgo, que
to se entienda en los pueblos qué pudieren re nos pertenecieren en aquel puerto ó en otra
mitir sus enfermos al dicho hospital, y que el cualquier hacienda nuestra que hubiere y en
escribano del cabildo Heve, de cada nombra-?, trare en aquella caja, la mas pronta y mejor
miento de hacinador cuatro reales, y no mas arada, con cargo y obligación dé que en él se
por el registro y testimonio que diere siendo ayan de curar y curen los soldados y gente de
para español; y siendo para indio no lleve de las fábricas que en ella hubiere, y esclavos
rechos ningunos , y solo los; hacinadores y los nuestros. Y mandamos à los oficiales de nuestra
enfermos que actualmente y con'enfermedad real hacienda de la dicha provincia, que acu
de esta calidad estuvieren en el dicho hospi dan al hospital real con éstos dos mil ducados
te! >y 1)0 otros, gocen de los privilegios que en eada.un año, para que se gasten y distribu
aquí van espresados , y no usen de otros algu yan en la hospitalidad y curación de los en
nos , aunque esten concedidos al hospital de fermos, y no en otro efecto alguno, y al pre
San Lázaro de Sevilla, por quedar estos refor sidente de la audiencia real de Tierra-firme,
ja d o s y moderados solamente á lo que aquí que tenga muy particular cuidado de ver y
queda espresado ( 8). y entender como ésto se ejecuta, y de hacer
LEY XVI. tomar las cuentas cada un año.
Don Felipe IV en Madrid á 27 de jallo de i627.
LEY. XIX.
Que al hospital de san Lazar o de Cartagena se lle
ven con los enfermos los bienes muebles de su ser Don Felipe IV en Madrid á 2i de enero de x634.
vicio. t Que en la Habana se cobre un real de cada plaza por
Ordenamos y mandamos á nuestro gober via de limosna para el hospital.
nador de la ciudad de Cartagena de las Indias, Es costumbre antigua en la ciudad de san
que si se ofreciere llevar al hospital de S. L á Cristóbal de la Habána separar un real cada
zaro, diputado para curar los enfermos / á al mes de cada una de las plazas de los soldados
gunos tocados de este m a l, hagan llevar con para el hospital de ella, por el beneficio de cu-?
las mismas personas los bienes muebles que rar los enfermos y enterrar los difuntos, sin re
fueren de su servicio al tiempo que les hubiere servar ninguna, y asimismo de todas las ¡pla
dado la enfermedad y los llevaren al hospital, zas que con orden del gobernador se borran, y
para que eon esta prevención no pase el con de los que mueren habiendo hecho testamen
tagio á otros.
to. Mandamos á nuestro gobernador y capitán
LEY XVII. general de la dicha ciudad , y á los oficiales de
Doo Felipe IV en Madrid á 2 de mayo de i624. nuestra real hacienda, que guarden y cum
plan precisa é inviolablemente la costumbre an>-
Que los religiosos descalzos de san Francisco tengan
en Filipinas la hospitalidad que se ordena. tigua que basta ahora ha habido en razón de
que se pague este real de limosna, y que el go
Los religiosos descalzos de la orden de san bernador tenga mucho cuidado de que en el
(8) Véase la ley 13, tit. 43, lib. 9, en míe general hospital haya camas y todo lo necesario para
mente estan prohibidos estos derechos en los puertos, sin la curación y regalo de los enfermos que ocur
especial precedente orden de S. M. 1 rieren à él, y obligación de dar cuenta de ha-
TOMO I,
6
22 Libio i. Título ív.
bcrse cobrado ; y no lo haciendo, sea capítulo hospital para que sin embargo de que haya
de residencia. puente, se conserve la barca y goce def usu
fructo y disposición de ella, aun en caso que;
LEY XX. falte la puente, ó por otro accidente, con que
Don Felipe IÍI en Madrid a 3 de marzo de x619. otro tanto como valiere se baje de lo que se ha
Que los ¡tospítales de Manila estén d carao de un de sacar de ia caja de comunidad.
oidor.
LEY XXII.
Ordenamos y mandamos que uno de los oi
Don Felipe IIIen Valladolid á 22 de marzo de í(30x. .En
do res de nuestra real audiencia de Manila, à san Lorenzo á 22 de.agosto de iG20.
quien tocare por su turno en cada un año, sea Que se puedan asentar los que quisieren por cofra
visitador del hospital real de la dicha ciudad, des de ia casa de Monsevrale.
revea las cuentas y reduzga la hacienda al ma
yor provecho que fuere posible ; y en cuanto á Los arzobispos y obispos' de las Indias no
las costumbres y forma de vivir de los minis impidan á las personas que quisieren en ellas
tros que se ocuparen en aquella hospitalidad, por su devoción ser cofrades de la casa de núes*
si fueren legos y habiendo escedido, los casti tra Señora de M onserrate, y los procuradores
gue conforme á sus culpas-, y si fueren eclesiás los asienten y reciban por tales cofrades, favo
ticos los despida y remita el conocimiento de rezcan y dejen recoger las limosnas que se die-
las que tuvieren á su juez : y asimismo tengan reu y ofrecieren para la dicha casa, con calidad
á su cargo los demás hospitales que hubiere en de que no se entienda por ahora con los indios,
la dicha ciudad ; y las pascuas, cuando se ha sino solamente con los españoles que de su vo
cen visitas generales de cárceles, los visite el luntad quisieren entrar en esta cofradía y dar
presidente de la audiencia por su persona, y limosnas ^9).
vea si los enfermos son tratados con limpieza y
tienen camas suficientes, para que con este Don Felipe III en Madrid á x4 de marzo de x6x8. ;
ejemplo se animen todos á mayor cuidado y
caridad. Y en cuanto á nombramiento de ma Que en las Indias se pueda publicar la cofradía de
Santiago en Galicia.
yordomo y los demas oficíales, sea siempre en
las personas mas honradas y ricas de íá ciudad, Mandamos à nuestros vireyes y audiencias,
y el mayordomo lia de usar su oficio tiempo de y encargamos á los arzobispos y obispos de
dos años ; y si para él se hallare persona tan nuestras Indias, que en sus distritos y jurisdic
conveniente que sea necesario obligaba à su ciones dejen y consientan publicar la cofradía
ejercicio, se haga por el mejor modo que sea de señor Santiago, que está fundada en el hos
posible-, de manera que tenga entendido, que pital real de su advocación en Galicia, y no
demás del servicio que hará á Dios nuestro pongan en ello embarazo ni impedimento algu^
S eñor, lo tendremos en consideración para n o , ni estorben el asentarse por cofrades á las
otros empleos, conforme á sus partes y calida persouas que por su devoción quisieren alistar
des. se cu ella.
LEY XXL L E Y X X IV .
Don Felipe IV en Madrid á 26 de noviembre de i630. Don Felipe III en el Pardo á i.* de diciembre de i6x3.
Que el hospital de los Sangleyes de Manila tenga Que en las Indias se puede publicar la cofradía de la
venta como se dispone. orden de San Anton.
En la ciudad de Manila de las Islas Filipi Permitimos que las gracias ó indiligencias
nas hay un hospital de nuestro real patronaz que por los sumos Pontifices estan concedidas
go, donde son curados Jos chinos ó Sangleyes á los que se asentaren por cofrades de la orden
infieles, y los religiosos de santo Domingo tie de S. A ntón, y fueren bienhechores de ella,
nen cuidado de su conversión y curación , con se puedan publicar en las provincias del Perú
grande fruto de estas almas , por las muchas y Nueva-España por dos prevendados, uno de
que reciben nuestra santa fé católica; y el año la iglesia metropolitana de la ciudad de los re
de mil y quinientos y noventa y cuatro, el rey yes del Perú, y otro de la de Méjico de la Nue-
D. Felipe I I , nuestro señor y abuelo, tuvo por va-España, cuales los arzobispos dé las dichas
bien de hacer merced al hospital de el pasage iglesias señalaren para ello, estando pasadas por
que hay desde el Parían de los Sangleyes chi nuestro consejo de la santa Cruzada.
nos , que está de [a otra banda del rio, para su
sustento, que le valia cada año dos mil pesos, LEY X X V ..
los cuales gozó basta que se hizo una puente Don Felipe III en Aranjuez á x5 de mayo de i600. Y don
desde el dicho Parian á este hospital, con que Felipe IV eu esta Recopilación.
cesó la renta. Y para que la pueda gozar en Que no se funden cofradías sin licencia del Rey, ni
mejor finca y de la misma calidad, mandamos se junten sin asistencia del prelado de ¿acusa y minis
á nuestros gobernadores de las Filipinas que tros reales.
señalen cu la caja de comunidad de Sangleyes Ordenamos y mandamos que en todas nues
dos mil pesos en cada un año al dicho hospi tras indias, islas y Tierra-Firme del mar Océa
tal con que preceda su consentimiento: advir n o , para fundar cofradías, juntas , colegios ó
tiendo que se lia de librar solamente lo preci
so y necesario. 1 damos licencia y facultad al (9^ Véase ley 8, tit. 21 , üb, 1 .°
De los hospitales y cofradías. 25
cabildos de españoles, indios,' negros , mulatos Que los prelados visiten los bienes de las f á
ú otras personas de cualquier estado ó calidad, bricas de las iglesias y hospitales de indios, y
aunque sea para posas y fines pios y espiritua tomen sus cuentas, asistiendo persona por
les, preceda licencia nuestra y autoridad del el patronazgo real ¡ le j 22 y tit. 2 , de este
prelado eclesiástico,, y habiendo lieclio sus or libro, ( I2 )
denanzas y estatutos, las presenten en nuestro Que á los religiosos del beato Juan de Dios no
real consejo de las Indias, . para que en él se se les encarguen los hospitales, sino es obli
vean y provea lo que convenga, y entretanto gándose conforme ála ley^tá, tit. 14 de este
no puedan usar ni usen de ellas*, y si se confir7 libro.
ruaren ó aprobaren, no se puedan juntar ni ha Que el colegio y hospital de Mechonean sean
cer cabildo ni ayuntamiento, sino es estando del patronazgo real¡ ley 12, tit. 23 de este
presente alguno de nuestros ministros reales, libro.
que por el-virey, presidente ó gobernador fue Que los prelados informen de los hospitales y
re nombrado, y el prelado de la casa donde se cofradías de sus distritos , ley 2 5 , tit. 14,
juntaren. (10 y 11) lib. 3. (13)'
(10) En cédula de 8 d« febrero d e '17/58 se mandó ob
servar esta le y ,y que no se continuasen las que se hubie
sen fundado sin real licencia. (x2) Véanse las cédulas de ï 6 de marzo de 76 y'2.3 de
(11) Por real cédula de S. Lorenzo de 9 de noviembre noviembre de 94, que declaran la autoridad del gobierno
de 1773, S. M, extrañó en 19 cofradías de Lima la falta y de tos ministros conservadores en la congregación de
de esta observancia; y aunque las aprobó, previno al virey iu orden llamada de nuestra sonora de la O «ieLimu.
que en adelante no lo permita. (13) Por cédula de^S de.febrero.de i759 se mandó que
Por otra de i7 de setiembre de i766 6e aprobó la de la
caridad fundada por el virey y arzobispo en i 8 de abril el corregidor. de Yca profiriese al cura en las juntas de co
de j765. fradía de Concepción ,sin que dicho curadas íivme ni ten
En cédula de 8 de marzo de i792 está declarado ga otra inspección que presenciar las que se.fo.rmcn, y que
que la necesidad d éla asistencia de ministro real á estas no se consienta el u«o. de cofradías aunque sean erigidas
juntas de cofradías se entiende también á estas prepara con autoridad eclesiástica , si no se presenta real aproba
torias , y que sin esccpcion todas se han de presidir por ción."Véase la cédula de 27.de marzo.de i772 sobre el hos
ministro real. pital del Espíritu* Sanio de Lima.
T ÏT tifio Q U I N T O *
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*> ¿ ¿ U
TITULO ¡SEPTIMO.
D e los a r z o b is p o s, obispos y visita d o res eclesiásticos.
Deseamos siempre que los naturales de nues Q ue los p rela d o s no c o n s ie n ta n e n su s dió cesis cleri~
gos vagabundos, ó s in d im is o r ia s , los cuales n o sea n
tras Indias sean doctrinados y bien instruidos a d m itid o s d lo s beneficios.
en las cosas de nuestra santa fé católica , y ele
gir personas virtuosas que cumplan con el mi Rogamos y encargamos á los prelados que
nisterio de su enseñanza ; y somas informados no consientan en sus obispados á ningún clé
que de estos reinos pasan muchos clérigos y rigo que hubiere residido en otro de aquellas
religiosos sin nuestra licencia , en los cuales provincias si no llevare licencia, dimisorias f
no concurren las partes de buena vida y ejem aprobación del prelado de aquella diócesi, y á
plo que requiere su estado, porque á los vir los que fueren sin estos despachos los hagan
tuosos y ejemplares se la mandamos d a r, y á volver á los obispados de donde hubieren salí*
los religiosos el aviamiento necesario.Por tanto do, y no los permitan vagar de unos lugares
rogamos y encargamos a los arzobispos y obis en otros , ni administrar los santos sacramen
pos que a los clérigos y religiosos que hubieren tos. Y mandamos á nuestros vireyes, presiden
pasado ó pasaren á aquellas provincias sin es- tes y gobernadores, que no admitan a los be
presa licencia nuestra, no les permitan decir neficios á ningunos clérigos que se ausen
misa, administrar los santos sacramentos, ni taren de sus obispados y fueren á otros sin di
entender en la doctrina de los naturales, y los misorias y aprobación ? y asi se practique la
hagan embarcar y volver á estos reinos *, y si ley 15, tít. 12 de este libro.
favor ó ayuda hubieren menester, mandamos
à nuestros vireyes, presidentes y oidores, y LEY XI.
otras cualesquier justicias, que se le den y ba D. Felipe II en Madrid á 25 de noviembre de 4578.
gan d a r, según y como les fuere pedido , y los Y en San Lorenzo á 30 de octubre de 1563.
que llevaren licencia nuestra , la presenten an
te nuestros jueces oficiales de la casa de con Q ue los p re la d o s c a stig u e n d los c lé rig o s q u e co m e
tie r e n d elito s, ó m a ltra ta re n d los in d io s .
tratación de Sevilla, los cuales noten en ella
como el clérigo ó religioso que la lleva es el Otro si habiendo clérigos escandalosos en
contenido. sus distritos, ó de quien iiayá queja de m uer
tes ó malos tratam ientos, que cometan y ha
LEY IX. gan á los indios, ó fuerzas á sus. mugeres ó
D, Felipe II en San Lorenzo á 22 de junio de 4588. " hijas, ó imposiciones, ó robos de sus hacien
Y en Madiid á 27 de julio de 4567. das , porque estos delitos son en gran ofensa de
nuestro Señor y daño de los indios, los reme
Q ue los p rela d o s d e n d los p r e te n d ie n te s e c le siá sti
cos aprobaciones y e n v ie n su s p a re c e re s al consejo, dien y castiguen con el cuidado que conviene,-
y no les den licencia p a ra v e n ir d e sto s re in o s. y como se fia de su buen celo y religión.
Por Nos está ordenado lo que ha parecido LEY XII.
convenir sobre el hacer las informaciones de
oficio y á pedimento de los pretendientes ecle D . Felipe 11 en Madrid á 25 de noviembre de 4578. .
siásticos en las audiencias reales, y que parti Q ue los p re la d o s c a stig u e n las cu lp a s d e los sa c erd o
cularmente se advierta que demas de ellas han te s d o c trin e ro s, c o n fo rm e d d erec h o .
de enviar aprobación de sus prelados , sin la
cual no se les recibirán à los susodichos otros Cuando los sacerdotes puestos en las doc
papeles ni recaudos. V rogamos y encargamos trinas de pueblos de indios viven m al, ó son
á los arzobispos y obispos que den la dicha apro- notados de algun vicio, si dado aviso al prelado
Lacion á los de sus distritos que la pidieren y los hallare culpados , rogamos y encargamos á
m erecieren, la cual se presente con las infor los de nuestras Indias no les impongan penas
maciones, y aparte nos envien en cada ilota pecuniarias, dejándolos en las doctrinas, ó m u
parecer secreto y particular de las letras, virtud, dándolos à otras partes, pues con tan leves cas
ejemplo, vida y costumbres, edad y calidad de tigos noquedan corregidos, y causan mal ejem
todos los clérigos del distrito de cada uno y de plo à los indios, y e n casos semejantes pro
lo que hubieren servido, y de la aprobación vean lo conveniente al servicio de Dios nues
que tuvieren de sus personas y del empleo en tro Señor y bien de las almas de sus súbditos,
que pareciere a los prelados , que cada uno^se- castigando las culpas de los doctrineros confor
rá mas necesario y á proposito , para que visto me á lo dispuesto por los sagrados cánones } de
todo en nuestro consejo de Indias, les hagamos forma que sean ejemplo à los demas, y guar
merced conforme á lo que constare de sus pa den lo dispuesto por nuestro patronazgo en ca
peles, y tengan especial adverteucia y cuidado sos de remoción.
Be los arzobispos y obispos. 59
LEY XIII. mera ocasión, y venir á eétos reinos á hacer vi
da maridable con sus mugeres.
D. Felipe II en Lisboa á 17 de mayo de 1582. Don
Felipe i Y en Madrid á l.° de marzo de 1629. Y en LEY XV.
esta Recopilación.
Que los prelados procuren en las visitas, y en todas D. Felipe IU en Madrid á 12 de febrero de 1608.
las ocasiones la educación, enseñanza y buen trata- D. Felipe IV allí á 4 de abril de 1627.
•' miento de los indios. Que los arzobispos y obispos no hagan concierto con
Los indios son personas miserables, y de tan los cle'rigos sobre la cuartafuneral.
débil natural, que fácilmente se bailan moles Resultan grandes inconvenientes de que los
tados y oprimidos, y nuestra voluntad es que jrelados y sus visitadores bagan conciertos con
no padezcan vejaciones, y tengan el remedio y
Íos doctrineros por la cuarta funeral, redu
amparo conveniente - por cuantas vias sean po ciéndola á cantidad señalada, y mucho perjui
sibles, y se han despachado muchas cédulas cio á los indios, por las molestias y vejaciones
nuestras proveyendo que sean bien, tratados, que reciben de los doctrineros , introduciendo
amparados y favorecidos; las cuales se deben ofrendas y contribuciones. Por lo cual rogamos
ejecutar sin emisión, disimulación ni toleran y encargamos á los prelados de nuestras Indias
cia, según esta encargado à nuestros ministros que ño hagan, permitan ni d.en lugar á tales
reales, Rogamòs y encargamos á los arzobispos conciertos con los doctrineros, y cobren esta
y obispos que habiendo visto y considerado lo porción en la forma que les pertenece, confor
prevenido en estos casos , usando de los reme me á derecho. ( 3)
dios que les ofreciere su inteligencia y pruden
cia , para mayor y mejor cumplimiento de , LEY XVI.
nuestra voluntad, dispongan por lo que les to D. Felipe II en Madrid á 3 de setiembre de 1572.
ca en las visitas que hicieren de sus diócesis y Véanse las leyes 18, tit. 13 y 16, tit. 15 de este libro.
en todas las demas ocasiones con toda atención
y vigilancia, lo que convenga para evitar la Que los obispos no lleven cuarta parte de los salarios
de doctrineros, ni se paguen d los que no asistieren.
opresión y desórdenes que padecen los indios,
y procuren que sean doctrinados y enseñados Otrosí no lleven ni pretendan llevar á los
con el cuidado, caridad y amor conveniente á clérigos que entienden en la doctrina de los in
nuestra santa fe , y tratados con la suavidad y dios cuarta parte de los salarios ó estipendios, y
templanza que lautas veces está mandado,, sin provean que estos no se paguen à los que no re
disimular con los que faltaren á esta universal sidieren por el tiempo que lo dejaren de hacer.
obligación, y mucho menos con los ministros
y personas que debiendo entender en el reme LEY XVII.
dio de cualquier daño, hicieren de la omisión D. Felipe II en Madrid á 17 de enero de 1593. Don
grangería, pues demas de que los prelados cum Felipe l l i en Valladolid á 10 de febrero de 1601. Y
plirán con su ministerio en lo mas esencial de don Felipe IV en esta Recopilación.
su oficio pastoral, desde luego descargamos Que las iglesias, prelados y clérigos no pidan, ni li
nuestra conciencia, fiando de la suya, que asis tiguen ante jueces eclesiásticos sobre mercedes, li
tirán á lo que tanto importa y deseamos; y por mosnas, salarios ó estipendios que tuvieren por mer
ser la materia en que nos daremos por más ced de el Rey, y lo que se pagare de las cajas á pre
obligado y bien servido, se la volvemos á en lados, y clérigos sea por los tercios de el año.
cargar repetidamente, y que nos den aviso dei Porque los estipendios de los curas y doc
fruto y buenos efectos que resultaren de su trineros y otros beneficios eclesiásticos , están
desvelo. consignados y se pagan de nuestras cajas y ren
tas reales, y de los frutos y demoras que per
LEY XIV. tenecen á nuestra regalía y gozan los enco
El emperador don Garlos en Valladolid á 19 de oc menderos por merced nuestra , y algunos pre
tubre de 1544. D. Felipe lie n Madrid á 10 de mayo lados de nuestras Indias proceden por censuras
do 1569. En Navalcarnero á 21 de junio de 1579. Y contra nuestros oficiales reales y encomenderos
en el bosque de Scgovia á 29 de julio de 1565. Véa
se la ley 2, tit. 3 , Iib. 7. sobre la paga de los estipendios, tocando y
perteneciendo à nuestra jurisdicción real. Man
Que los prelados se informen de los españoles que damos que eualesquier iglesias, monasterios,
hay allí casados ó desposados en estos reinos, y prelados, prebendados, clérigos, curas y doc
avisen d los vireyes, presidentes, audiencias y gober
nadores para que ¿os hagan embarcar. trineros que por merced nuestra ó de los seño
res reyes nuestros antecesores tienen algunas
Rogamos y encargamos á los prelados de mercedes ó limosnas de dineros ó especies ó de
nuestras Indias que por sus propias personas, ó otros derechos, sean obligados à pedir y de
las de sus visitadores, se informen si en sus dió mandar ante los vireyes, presidentes y gober
cesis viven algunos españoles casados ó despo nadores que ejercen nuestra jurisdicion real,
sados que tengan en estos reinos sus mugeres,
y constándoles que hay algunos de esta calidad, (3) Por cédula de 12 de abril de 1767 se manda
avisen de ello á nuestros vireyes, presidentes, guardar las de 27 de octubre de 680 y 8 de diciembre
audiencias y gobernadores, los cuales, sin re de 690 para que. los obispos solo lleven de cuartas
misión , tolerancia, dispensación ni proro^a- 200 pesos, como se habia determinado cou parecer
del Acuerdo de Lima para Arequipa. Véase las le
cion de término, los hagan embarcar en la p ri yes 50 y 51 de este título.
40 Libro i. Título vil.
los cuales hagan justicia, sabida solamente la que se tome resolución en los lugares que batí
verdad, lo mas breve que ser pueda, cono de tener en tales actos, por escusar las compe*
ciendo de todo ello simplemente y de plano. tencias, diferencias é inconvenientes que se
Y encargamos á los prelados eclesiásticos que han reconocido de lo contrario.
no procedan por censuras ni en otra forma en
la cobranza de los estipendios, mercedes ó li- LEY X X .
mosnas, porque nuestra voluntad es que esto D. F elipe II en Badajoz á 26 de mayo de 1580.
corra por la mano y jurisdicción de nuestros
ministros reales. Q ue los arzobispos y o b ispos n o te n g a n relig io so s
p o r p ro v iso re s, y e n e sto g u a r d tn e l d e re c h o canó
E! emperador D Carlos y el príncipe G. en Monzón n ico .
de Aragón á 25 de noviembre de 1552. Y en Aran-
juez á í.°d c junio de 1551. Rogamos y encargamos á los arzobispos y
obispos de nuestras Indias que no tengan reli
Otro sí mandamos á los oficiales de nues giosos por provisores, y los que nombraren sean
tra real hacienda, que paguen á los pre tales, que deban ejercer este ministerio, con
lados y clérigos de las iglesias de sus d is tr i forme á lo que dispone el derecho canónico. (4)
tos, lo que hubieren de haber y les pertenecie
re , conforme à las leyes de este libro por los L E Y X X I.
tercios de cada un año luego que sean cumpli
dos sin dilación ; y no lo haciendo, nos avisen D. Felipe II eu Madrid á 8 de mayo de 1568.
los interesados para que Nos proveamos del L o s arzobispos g u a rd e n lo d e te rm in a d o en e l sa n to
remedio conveniente. co ncilio.de T r e n to e n cu a n to á v is ita r d lo s obispa
dos su fra g á n e o s. *
LEY X V III.
Porque algunos arzobispos de las Indias en*
Don Felipe III yen Madrid postrero de octubre de vian visitadores á los obispados sufragáneos sin
1599. El mismo allí á 28 de marzo de 1620. Y don observar la forma del santo concilio de Trento,
Felipe IV en esta Recopilación.
de que los obispos reciben agravio : ordenamos
Q ue los p rela d o s y ju e c e s eclesiá stico s concedan lla y encargamos à los arzobispos que sobre esto
n a m en te las absoluciones d los ju e c e s seculares, y las
audiencias reales d esp a ch en p r o v is io n e s d e ru eg o y
guarden y hagan guardar lo contenido en el
encargo, p a ra que a si se ejecu te. santo Concilio, sin esceder de lo que dispone
en niugun caso.
Rogamos y encargamos à los arzobispos y
obispos de todas y cualesquier iglesias m etro LEY X X II.
politanas y catedrales de nuestras Indias Oc
cidentales , asi de las provincias del Perú como D. Felipe III en el Pardo á 14 de noviembre de 162Q.
de la Nueva-España y á sus vicarios, oficiales, Q u e se g u a rd e lo d isp u e sto p o r e l sa n to concilio d e
provisores y demas jueces eclesiásticos de ellas, T re n to , en no lle v a r los p re la d o s d erec h o s d e las vi
sita s, n i p ro c ed e r co n tra legos.
que cuando sucediere algun caso en que hayan
de absolver á alguno de nuestros oidores, al Otrosí encargamos á los arzobispos y obis
caldes, corregidores, gobernadores ú otros pos de nuestras Indias que guarden lo dispues
nuestros jueces y justicias, ó sus ministros y to por el santo concilio de Trento y concilios
oficiales contra los cuales hubieren procedido provinciales de ellas, en razón de no llevar de
por censuras, por algunas de las causas que rechos en las visitas que hicieren de iglesias y
conforme á derecho Ío puedan hacer, les con ermitas, ni recibir comidas, y en el proceder
cedan la absolución llanamente , como se prac contra legos.
tica en estos nuestros reinos de Castilla , y no
ios obliguen á ir personalmente á recibirla de
sus propias personas, y en sus casas episcopales (4) Por cédula de 4 de' agosto de 790 se ha mau-
ó iglesias, ni para dársela saquen cruz alta cu dado que los obispos comuniquen á los vireyes y pre
sidentes los nombramientos ae provisores, y que con
bierta, ni ios hieran con vara ni hagan otros su aprobación se pongan en posesión. Véase la ley 14,
actos semejantes. Y mandamos á nuestras au tit. l.°, lib. 2 de la Novísima.
diencias reales que libren provisiones ordina Por carta acordada del Consejo fecha 10 de agos
rias de ruego y encargo, para que sucediendo to de 1796, se desaprobó al virey don Francisco Gil
haberse conformado con el nombramiento de provi
el caso los dichos prelados y jueces eclesiásticos sor que el reverendo obispo de Arequipa, el señor
absuelvan llanamente à nuestras justicias y á Chave/, de la Rosa, hizo en don Tacfeo Llora, cura
sus ministros, como se practica en estos nues de Santa Marta de aquella ciudad , por estar prohi
tros reinos de Castilla. bido que los curas sean vicarios, visitadores, hscales
y secretarios.
LEY X IX . Por cédula de 20 de setiemhro de 97 se ha decla
rado que la de 4 de agosto de 90 no comprende á los
D ojj Felipe líl eu San Lorenzo á 5 de octubre de cabildos en sede-vacante.
1604. Y don Felipe IV eu esta Recopilación. La prohibición real á que puede referirse la carta
acordad» que se cita, puede ser la cédula de 12 de
Q ue los p rela d o s no a sista n d ed icto s d e la f e , n i r e junio de 1/52, eu que se mandó no dispensar en la
cib im ien to s de la cruzada. residencia ni aun á pretesto de necesitar los prelados
Encargamos á los arzobispos y obispos que de algun cura para el servicio de su dignidad , y me
nos para el de su persona: y que en el caso de ser in
los dias que hubiere edictos de la fé ó recibi evitable echar mano de alguno para fiscal, secretario,
mientos de la bula de la Cruzada , se escusen visitador etc. , se baga con asenso del vice-patro-
de ir à las iglesias donde se publicaren, hasta uatc.
De los arzobispos y obispos. 41
te , que cuando nombren visitadores no con
LEY XXIII. sientan ruegos , intercesiones ni otros medios
D. Felipe III en Eiras á 12 He mayo de 1619. injustos y reprobados. Y porque se ha enlen-
Que los indios no paguen com ida d los p rela d o s cu a n didoque los procedimientos de algunos no han
do sa lieren d v is ita r , y los v ir e y e s y aud ien cia s los sido cuales conviene, interpongan su autori-,
a m p a ren y den. ¿as p ro v isio n e s tiecesa? ia$)
dad , y usando de la jurisdicción que les da el
'Exortamos à los dichos prelados eme cuan derecho , procedau con tanto rigor y severa de
do visiten sus diócesis no lleven dineros en po mostración , que sea ejemplo y ocasión de en
ca ni en mucha cantidad a los indios para su mienda de aqui adelante, y nos informen eri
comida y la de sus familias, y en todo se con cada un año con relación firmada de sus nom
formen con la disposición del santo concilio de bres de las personas que hubieren nombrado
Trento. Y mandamos à nuestros vireyes y au por visitadores; qué tiempo lo han sido, en
diencias que amparen à los indios; y si algunos qué lugar , y en qué ministerios se habían ocu
prelados intentaren lo contrario, nuestros fis pado antes que se les encargaran las visitas y
cales pidan que lo contenido en esta ley se cum las causas que tuvieron para nombrarlos, para
pla y ejecute, y para ello se den las provisiones que visto eu nuestro consejo , provea lo que
necesarias. convengaO al servicio de Dios nuestro Señor y
LEY XXIV. bien de nuestros vasallos.
D.
D.
Felipe II en San Lorenzo á 5 de ago9to de 1577.
Felipe 111 en Madrid á 12 de febrero de 1608. Y
LEY XXVI.
en San Lorenzo á 22 de agosto de 1610. Don l'eli- D. Felipe 11 v la princesa G. en Valladolid á 12 He
pe IV en Madrid á 22 de enero de 1636. Y eu 13 de junio de 1559. D. Felipe III et) Lenna á 17 de junio
abril de 1611. de 1607. Don Felipe IV en Madrid á 8 de agoslo
de 1621.
Q ue los p rela d o s v isite n sus\dióce sis, y cuando n o m
b ra re n v is ita d o r e s , ó los cabildos e c le siá stic o s en Q ue los v isita d o re s eclesiá stico s no lleven a p ro v ec h a
sede vacante, sean cuales con vien e. m ie n to s ilícito s, c a m a ric o s, c o m id a s, n i p ro c u ra cio
nes, n i m as de lo q u e p e r m ite e l d e r e c h o , sa n to c o n
Encargamos á los prelados de nuestras In cilio d e T r e n to , y los prelados lo hagan g u a rd a r y
dias que personalmente visiten todas sus dióce e je c u ta r.
sis y reconózcan el estado de las doctrinas, pre
Los visitadores eclesiásticos no lleven á los
dicación del santo Evangelio y conversión de
legos aprovechamientos ilícitos , camaricos, co
las almas, y administren el santo Sacramento
midas, ni procuraciones en especie ni en dine
de la confirmación , procurando informarse de
ro , pues conforme á derecho, no tienen obli
todo tan particularmente , como encargan los
gación de pagarlos, y especialmente los indios,
sagrados Cánones y Concilios y nuestras leyes
y procuren llevar la menos gente, vagaje y car
reales, y hagan estas visitas con moderadas fa
ruaje que sea posible, deteniéndose en los pue
milias , porque sin molestia de los naturales
blos el tiempo que fuere preciso para que no
sean de ejemplo y edificación : y hallándose le.
gítimamente impedidos y con precisa necesidad causen costa ni molestia ; y a los curas y ecle
de nombrar visitadores, los prelados y cabildos siásticos no lleven inas de lo permitido por de-
eclesiásticos en sede-vacante elijan personas rechoy santo Concilio de T ren to ; y sus pre
eclesiásticas, y no seculares, de ciencia, temor lados y cabildos en séde-vaeante asi lo hagan
de Dios, buena vida y ejemplo ; y tales, que guardar , cumplir y ejecutar precisa é invio
conforme la vida con la profesión, y todos vi lablemente ; y nuestros vireyes y audiencias
van con grandísimo cuidado y desvelo de no amparen á los indios, y no consientan que re
recibir ni consentir se reciba por sus familias ciban vejación ni agravio, librando las provi
cosa alguna en poca ni en mucha cantidad; de siones necesarias conforme á la ley 23 de este
forma que los naturales queden persuadidos á título.
que solo se trata del servicio de Dios y aborre LEY XXVII.
cimiento de la avaricia, y acabadas las visitas,
nos envien los prelados y cabildos en sede-va D. F élip e II en Madrid á 15 de enero de 1569. Y don
Felipe IV en esta Recopilación. Véase la ley 6 , ti
cante relación distinta, clara y especial de to tulo 10 de este libro.
dos los lugares y doctrinas de sus distritos , lo
Q u e lo s p rela d o s y ju e c e s eclesidticos no saguen in
que proveyeron en cada uno , qué cosas re d io s d e s ú s p u e b lo s; y s i algun d elito h u b ie re n co
mediaron, y de cuáles será bien , tengamos en m etid o , los ca stig u en en ellos.
tera noticia en nuestro consejo de Indias pat*a
que se provea lo conveniente. Por los graves inconvenientes y daños que
se siguen de sacar los indios de sus pueblos, y
LEY XXV. lo mucho que se debe atender à su flaqueza de
D. Felipe 111 en Madrid á 16 de mayo de 1620. Don animo, y lo que conviene, que cuando los jue
Felipe IV alii á 4 de abril de 1627. ces eclesiásticos y visitadores hallaren que han
Q ue e n el n o m b ra m ien to de los v isita d o re s no in te r cometido algunos escesos , cuya corrección y
v e n g a n ruegos, in te rc e sio n e s , n i o tro s m edios in ju s castigo les pertenezca conforme á derecho, los
tos y repr o'bados, y los prela d a s y cabildos en sede corrijan por medios tan suaves, que ellos mis
v a c a n te ca stig u e n su s ex ce so s y e n v ie n re la ció n al mos les obliguen á su enmienda y á la perseve
consejo.
rancia en nuestra santa fé católica : rogamos
Item , rogamos y encargamos á los dichos y encargamos á los arzobispos y obispos, vica
prelados y cabildos eclesiásticos en sédc-vacan- rios, visitadores y otros cualesquier jueces eole-
TOMO I. lX
42 Libro i. Título vil.
fiíàsticos, que por ninguna causa manden asear (Tflnvíene que los eclesiásticos den buen ejem
ni saquen indios ni indias de sus pueblos y na plo con su vida y costum bres, especialmente
turalezas, ni sean llevados á otros, yen los rasos los euros doctrineros y predicadores, pues pro
de su jurisdicción los castiguen en.sus pueblos cediendo como d eben, y sin cediera, harán
atendiendo á la flaqueza , cortedad de animo y mayor fruto en los indios que no soben distin»
caudales de estos nuestros vasallos, porque mies» guír la vida de la doctrina , y los edificarán y
tra intención y voluntad es que no reciban convertirán de sus vicios a l)ies nuestro señor.
agravio ni molestia, y sean favorecidos y ayu Y porque este es el medio mas eficaz para conse
dados. guirlo, rogamos y encarg;amosá los arzobispos y
obispos de nuestras Indias-que en la elección de
LEY X X V III. personas para estos ministerios pongan todo su
D. Feline III en Madrid íí 20 do marzo de i ñ l i , Don cuidado y los elijan cuales conviene, por lo
Felipe IV allí tí 7 de junio de dicho tillo. Y en esta mucho que importa para la conversión y sal
Recopilación. vación de todos.
Que los visitadores no den esperas d los (¡¡buceas, ni
testamentarios, L E Y X X X I.
Porque los visitadores eclesiásticos que los Ü. Felipe II en Madrid á ü>de setiembre fh i§/2,
prelados nombran para reconocer los te/íuiméri Que las audiendas reales remedien los agravios que
tos y mandas que lucieron los testadores difim» hicieren ios obispos y visitadores en casos que m
son de su jurisditlon.
tos, y ejecutar su voluntad despues de haber
cobrado las limosnas de W misas, y todo lo En nuestro consejo real délas Indias senes
que toca tí las iglesias, dan esperas para la hizo relación de que algunos obispos y sus vi
paga de los legados y mandas, medíante lo sitadores se Introducen á contarlos indios en
cual las personas á quien tocan reciben agra aquella» provincias/ ha cor procesos contra ellos
vio, v particularmente los indios por sus nece eu casos que no tocan á la jurisdicción ecle
sidades, y ser procedido del trabajo personal; siástica, y les llevan muchos derechos, coa
rogamos y encargamos à loa prelados que orde que ios naturales son molestados $ y nos fue
nen a sus visitadores que no den estas esperas, suplicado mandásemos que los prelados y sus
pues solo les toca la ejecución de los testamen visitadores con color ue protectoría ni en
tos , por ser ordinariamente en perjueío de los otra manera no se Introdujesen á conocer entre
indios, y proceder de su trabajo- ( 5) ludios de negocios pertenecientes h nuestra
jurisdicción real $ y en los que fuesen de la
LEV X X IX . jurisdicción eclesiástica-no hiciese», procesos
I>, Felipe IH en Madrid íí 12 de diciembre de ifiió. ordinarios, ni ellos ni sus notarlos les llevasen
derechos esees!ves, sino que sumariamente ce»
Que. ios audiendas despachen provisiones sobre que nociesen de ellos y se hiciese justicia f manda
no se se echen derramas d los indios para tos ¡trola*
dos y visitadores. mos í nuestros presidentes y oidores que ae»s
díendo algunas personas à nuestras reales au
Muestras audiencias reales, con asistencia diencias sobre los agravios que los obispos y sus
de los fiscales y a su pedimento, despachen las visitadores íes hicieren ó 4 los indios, use» de
provisiones necesarias para que los eb'rígos y el remedio que conforme á derecho nos perte
religiosos que asisten en pueblos de indios no nece , y hagan justicia-
les echen derramas y ni hagan repartimientos Á
título del gasto que hacen con los obispos, vi L E ¥ m u .
sitadores o provinciales de las órdenes ó de 0 - Felipe H §n Toledo si 2 de mano da i§ÚQ, Y es
rechos de visita , aunque los indios los de» vo Madrid é í í de enero de Y don Felipe ÍY en
luntariamente y para que esto se ejecute con esta Jteeepdaetóíi,
*ua$ puntualidad, despachen asimismo provi Que tos prelados m pongan.fismles, sino fuere en
siones dirigidas h los prelados de las órdenes, las ciudades donde residieran las catedrales, y no
escodan de su jurisdicción,
para que en las comisiones que diere» h los vi
sitadores pongan cláusula de que m bagan es Porque ha llegado é nuestra noticia que al
tos repartimientos ni los lleven $ con apercibi genos arzobispos y obispos han escedídoen po
miento de que será» removidos de las doctri ner fiscales en las ciudades y pueblos de sus oís*
nas , y se proveer/* de el remedio que pareciere Irítos, prender y azotar indios é indias m
mas necesario- (üj perjueío de nuestra jurisdicción real <rogamos
y encargamos á los prelados que no pongan ni
LEY XXX. consienta» poner fiscales mas que en las-ciuda»
des donde hubiere iglesias metropolitanas y ca
©- Felipe lit en f>m t&renzo 4 22 de agesto de 4$W, tedrales, en las cuales tenemos por bien que
fi- Felipa ÍY en Madrid 4 $ de agosto de ÍÓ21-
so puedan poner y nom brar, y un e» otras
Que los pretales dijan selesidsliaos virtuosos pora ciudades, villas y pueblos de sus diócesis, y que
auras doctrineros y ¡tredicadores,
no bagan prender ni azotar Indios ni indias
Para descargo de nuestra real conciencia, en los casos que no fueren de su jurisdicción-
y que los prelados cumplan su oficio pastoral, Y mandamos á nuestros presidentes y gobéroa--
deres que no den lugar ¿ que los prelados esee*
" W LeylbMÍS, ifííh ..% =
(Ó) Ley !! luí* dicha» título, líb, $, tíf- i3 , disfee d an , guardando lo dispuesto ñor las leyes de
líbfo>- estos nuestros remos de Castilla-
De los arzobispos y obispos 45
y á Nos por nuestra regalía, y como patrón
L E Y X X X III. universal de todas las iglesias toca eí cuidado
D. Felipe 11 cii Burgos á II de setiembre de 1592. de proveer que se guarda y ejecute. Y porque
Que los obispos óobren lo que dejaren los indios de venirse ¿ estos reinos los arzobispos y ubis*
pura cupellanias y obras piuS. y tomen tai cuentas. t pos de nuestras Indias , Islas y Tierra-firme
del mar Océano, dejando sus ovejas sin pas*
Mandamos que délas cajas de eomnnidades
to r, y á los clérigos sin el gobierno personal
de indios donde está ordenado entren los bie que tanto importa, se siguen gravísimos daños
nes de los difuntos, se saque y pague lo que é inconvenientes* mandamosá los vireyes, pre*
hubieren dejado para capellanías, obras pías y sidentes y oidores , qtte no den á los arzobispos
hospitales en dinero 6 rentas* Y encargamos á ú obispos licencia para venir a estos reinos, y à
los arzobispos y obispos que tomen cuentas á los gobernadores y alcaldes mayores y otros
cualesquier poseedores de estos efectos , y ba nuestros jueces, que no los consientan ni dejen
gan cumplir y ejecutar las disposiciones de los venir si no fuere teniendo eSpresa licencia
testadores , y los vireyes, y audiencias y gober nuestra para venir, ni los dejen embarcar en
nadores no se entrometan en lo sobredicho , y ninguna manera ti i por ninguna vía, porque
lo dejen á cargo de los prelados* (7) asi conviene al servicio de Dios nuestro señor
LE Y X X X IV . y al nuestro, y bien de los naturales y espa
ñoles que residen en aquellas provincias*
El emperador D. Carlos y el cardenal 'Pavera G* en
Talayeras 6 de julio de 154CK D. Felipe IV eti Ma LEY X X X V II.
drid á 8 de noviembre de 16o8. Véase la ley 28, lí
talo 16 de este libro. D. Felipe IV en Madrid á 5 de octubre de 1626, 2o
Que cuando los diezmos no llegaren d quinientos de junio de 1627 , y 17 de julio de 1648. Y en esta
mil maravedís, se pague d los obispos lo que faltare Recopilación. Véase la ley 2 , til. 24 , lib. 8*
de la hacienda real, Que los vireyes ordenen d los oficiales reales , que
cobren y administren las vacantes y espolios, y ellos
Los oficiales reales de todas las provincias lo ejecuten , y Se ponga cobro en los bienes de los
de nuestras Indias, Islas y Tierra-firme del prelados,
mar Oeéano> averigüen y sepan loque valie
re en cada un año Uparte de diezmos que per De los diezmos que á Nos pertenecen por
tenece á los obispos de aquellas provincias •, y concesiones apostólicas, hemos dolado todas las
hallando que no llega ¿quinientos mil mara iglesias de nuestras Indias, arzobispados y obis
vedís en cada un año, se los suplan y paguen pados de ellas, supliendo de nuestra real ha
de cualquier hacienda nuestra desde el fíat de cienda lo necesario para su dotación , alimen
tos y congrua sustentación *, y por ser las di
su Santidad*
chas iglesias, arzobispados y obispados de noeS*
LEY X X X V . tro patronazgo real , y estar debajo de la inme
diata protección nuestra, atendiendo á lo que
D. Felipe IV en Monzon à 25 de febrero de 1626. Y
en esta Recopilación. convierte, que lo que montaren las vacantes y
espolios de los arzobispados y obispados este
Que los prelados tengan conformidad con sus cabil siempre de manifiesto para quien lo hubiere de
dos , y sobre dudas en las erecciones guarden la
ley 14, tit. 2 de este libro . haber conforme á derecho : mandamos á los
vireyes demuestras Indias que denlas órde
Porque conviene que los eclesiásticos vivan nes'que convengan á nuestros oficiales reales
con toda paz y buena conformidad , pues de lo de todos sus distritos y jurisdicciones, para que
contrario se pudieran escandalizar los recien cobren lo que montaren todas las vacantes y es-
convertidos á nuestra santa fé católica: roga polios de los arzobispados y obispados, y lo ten
mos y encargarnos á los prelados de nuestras gan en su poder por cuenta ap arte, para dis
Indias que procedan con sus cabildos, como tribuirlo según nuestras órdenes , y los dichos
padres y pastores, y los súbditos como hijos oficíales reales lo cumplan y ejecuten precisa y
obedientes á sus prelados, ese-usando cuanto puntualmente. Y asimismo hagan tomar cuen
fuere posible quejas y sentimientos , porque tas délas vacantes y espolios que hasta ahora se
de esto resulta faltar al servicio de la iglesia han causado á las personas en cuyo poder hu
con desconsuelo de todos ; y si se ofreciere al bieren parado , y nos avisen en todas las oca
guna duda sobre las erecciones, guarden lo siones de armadas , del estado que tienen estos
proveído por la ley 14, tít, 2 de este libro. efectos, y con qué órdenes se han distribuido,
LEY X X X V I. para que visto en nuestro consejo real de lai
Indias provea lo que convenga* ( 8)
D. Felipe II eti Madrid á 26 de octubre y á 14 de
diciembre de 1561. Y don Felipe IV en esta Reco
pilación. (8) La real cédula de vacantes mayores y me
nores es dada en S. Ildefonso á 5 de octubre
Que d ningún arzobispo ni obispo se consienta venir de 1/37, Por cédula de 23 de junio de 1712 se pro
d España sin licencia del Rey. viene, que pagadas las deudas, él residuo de espo
Los arzobispos y obispos de nuestras Indias lios se ha de remitir al Rey para distribuirlo* Por
están obligados á residir en sus prelacias con otra de 5 de octubre de 1/37 cstiin aplicados á la
Iglesia. Por el reglamento dul Monte Piedad se aplicó
forme á derecho y al santo Concilio de Trento, la vigésima parte íi éste en virtud de la facultad quo
en el concordato de 20 de febrero de 1/53 se dió al
(7) Véase la ley 145, tit. 15, lib. 2 iuf* Rey para distribuirlos ón usos piadosos*
44 Libro i. títu lo vií.
D. Felipe III en Madrid á 28 de marzo de 1620. tuviere el arzobispado ú obispado, y que inter
Otro sí ordenamos y mandamos á los vireyes, vengan personalmente en las partes <íonde re
presidentes, audiencias reales y gobernadores siden ; y donde no fuere posible, las personas
de nuestras Indias, que en muriendo algun de toda satisfacción , confianza y buena con
arzobispo ú obispo en los distritos desús pro ciencia que los fiscales nombraren , juntamente
vincias y gobernaciones, pongan luego cobro con dos prebendados de sus iglesias, y los pre
en los bienes que dejaren , en conformidad de lados declaren en ellos todos sus bienes y deu
las provisiones y carla.s acordadas que en se das , y la causa de que proceden. Y Ies rogamos
mejantes casos se despachan en nuestro consejo y encargamos que asi lo guarden y cumplan con
real de Castilla , de forma que en esto baya la la legalidad que conviene, y á sus prebenda
buena cuenta y razón que es justo , sin dar Ju dos que asistan á los inventarios. Y mandamosá
gar á ocultaciones , ni que se defraude nada de nuestros vireyes, presidentes , oidores, gober
lo que fuere debido á la iglesia y á los que pre- nadores y otros cualésquier nuestros jueces y
tendieren tener derecho à lo;dichos bienes, y justicias , que den las órdenes necesarias para
envien á nuestro consejo de Indias copia de los que precisa y puntualmente se cumpla lo con
inventarios que de ellos hicieren en las prime tenido çn esta nuestra ley , y que nuestros fis
ras ocasiones ([lie hubiere para estos reinos. (9j cales asistan en las partes donde se pudiera ha
cer , sin faltar al despacho, y pongan trasla
LEY XXXVIII. dos autorizados en los archivos de ías audien
cias. Y encargamos à los deanes y cabildos cíe
D. Felipe IV en Madrid « 50 de marzo de 1651. Y
en esta Recopilación.. las iglesias que hagan lo mismo, para que cons
te cuantío convenga.p
Que los bienes inventariados por los prelados, cuan
tío van d servir sus Iglesias, no se incluyan en los LEYr XL.
espolias.
D. Felipe III eu S. Lorenzo a 28 He setiembre de
Mandamos’ á los oficiales de nuestra real i 618. Y don Felipe IV en esta Recopilación.
hacienda que sucediendo fallecer los prelados
de sus distritos, pongan cobro en los espolies, Que las cansas de espolios en concurso de las iglesias
se traten donde muriet « el obispo, y que. el pontifi
y no incluyan en las diligencias los bienes que cal pertenece d la segunda iglesia.
los prelados hubieren inventariado cuando en
traron á servir sus 'iglesias conforme á la ley Por escusar las competencias de jurisdic
siguiente , ni conozcan de ellos, y en la canti*, ciones, pleitos y diferencias que se suelen oca
dad que montaren no reciban vejación m mo sionar en caso ele morir el obispo en una iglesia
lestia sus herederos. estando presentado por Nos para otra, y dado
el fiat por su Santidad. Declaramos y manda
LEY H U I . mos que todo lo que fuere espolio, paga de
deudas y pretensiones de unas y otras partes,
I). Felipe IV en Madrid sí 9 de agosto de 1652. Y en se lia de tratar en el distrito y audiencia en cu
esta Recopilación.
ya jurisdicción y territorio muriere el obispo,
Forma que han de guardar los arzobispos y obispos y que nuestras reales audiencias deben pro
en hacer los inventarios de sus bienes adquiridos an ceder v procedan en esta forma. Y en cuanto
tes de entrar en las iglesias.
a! pon lineal que dejare, pertenece à la segun
Conviene dar forma á los inventarios que da iglesia de donde fuere obispo al tiempo de
hacen los arzobispos y obispos de nuestras fu su nm erte, cuya propiedad y frutos fueron
dias cuando llegan á tomar posesión de sus suyos desde el fiat de su Santidad , y mas si
iglesias ; y para que la causa pública y los in estuvieren despachadas las bulas y hubiere en
teresados tengau entera satisfacción, ordena* viado á tomar posesión de la segunda iglesia:
mos que se bagan con citación de los fiscales de da cual se requiere para los actos jurisdicciona
nuestras audiencias reales en cuyo distrito es- les, y no para otro efecto. Y en cuanto á las
piezas y preseas que se comprenden en el pon
Por cédula de 51 de julio de 79 se había fijado este tifical, se guarde y ejecute lo que está declara
haber del Monte en 5000 pesos; pero nuevamente en do por proprio inotu de su Santidad.
cédula de 3 do julio de 1791 se ha cargado esta can
tidad á la tercera parte decimal de las mitras de Mé
jico, Lima, Santa F é, Charcas, Puebla, Mechoaeau,
LEY XLL
Guadal ajara, Cuzco, Arequipa y la Paz. Las nuevas D. Felipe IV en Madrid;! 3 de diciembre de 1631. Y
reglas sobre el manejo de estos bienes esüín en los en 29 cíe abril de 1018. Y en esta Recopilación.
artículos 196 v siguientes de la Instrucción de In
tendentes do buenos Aires. Que se remita cada año la tercia parle de lo proce
Poro sobre todo, véase el art. 78 de la Orde dido de vacantes de abzobispadosy obispados d Es
nanza de intendentes y la cédula de i.5 de febrero paña, como se acostumbra.
do 1791, en que se ha declarado estensamente sobre A los señores reyes nuestros progenitores,
su inversión y destino; debiéndose igualmente tener y ¿N os, pertenecen los diezmos eclesiásticos
.¡ ¡a vista sobre las vacantes mayores y menores el
art. 2 11 de la Ordenanza de Intendentes de Nueva de nuestras Indias Occidentales por concesión
España, v sobro espolios los arts. 225, 226, 227, 228, apostólica, mediante la cual se incorporaron en
Y 229 de'la misma, y el lit. 21 de la partida 1 . a nuestra real corona como bienes libres y tem
' (9) Kn donde no haya fiscales, la citación se ha porales , con cargo de dar congrua sustentación
de entender con el oficial real que ha surrogado el
promotor-fiscal, de que habla el art. 226 de la Orde y alimeutu á los prelados y ministros eclesiás
nanza de Intondentes de Nueva España, ticos, y lo hemos hecho, y mandamos hacer
De los arzobispos y obispos. 48
larga y copiosamente. Y porque desde el tiem veido por la ley 27, tit. 25, lib. A de la Nuc.
po que mueren los arzobispos y obispos, has va Recopilación de estos reinos de Castilla, in»
ta que los sucesores presentados por Nos tieneti serto el arancel, de suerte que por todas par
el fíat de su Santidad, vacan estas rentas asig tes se ponga el remedio conveniente. Otrosí
nadas para sus alimentos durante.sus vidas, y mandamos que en los títulos de vireyes, presi
deben acabarse con ellas y quedar por hacien dentes, gobernadores y alcaldes mayores y otras
da nuestra incorporada en nuestro real patri cualesquier justicias, se pongan cláusulas de
monio, y está mandado que todo lo que pro que so pena de privación de los oficios, y per
cediere de las tercias partes de vacantes de ar dimiento de los salarios nos envien relación en
zobispados y obispados que liemos reservado todas las ocasiones de armada, si los prelados,
para repartir en obras pias, se remita á estos jueces eclesiásticos y sus ministros guardan lo
reinos á poder del tesorero general de nuestro contenido en esta nuestra ley. ( 11)
consejo real de las ludias, como se acostumbra,
y fuere cayendo, y conviene que asi se ejecute. LEY X L IV .
Mandamos á los oficiales de nuestra real ha
D. Felipe II en Madrid a 18 de marzo de 1597. Y
cienda dé todas las Indias que remitan á poder don FeJipe IV en esta Recopilación.
del dicho tesorero general lo que hubiere pro
cedido y procediere de las tercias parles de Qlj e ¿os prelados castiguen conforme d derecho ca
nonico d los clérigos y doctrineros culpados en tra
vacantes de arzobispados y obispados, con to tos y granjerias.
da puntualidad, sin reservar u¡ detener ningu
na cantidad ; estando advertidos que si asi no Encargamos à los prelados de nuestras In
lo hicieren mandaremos proveer del remedio dias qup pongan mucho cuidado en castigar á
conveniente. los clérigos y doctrineros que fueren culpados
en tratos y grangerias, ejecutando lo dispuesto
LEY X L ÏÏ. por los sagrados Cánones y Breves apostólicos.
D. Felipe IV en Madrid á 16 de febrero de 1635. Y
en esta Recopilación. LEY XLV.
Que los obispos nombren clérigos y no religiosos por El emperador D. Carlos y el príncipe gobernador
vicarios y confesores de Monjas. en \ alladolid á ó l de julio de 1545.
Por los inconvenientes que se siguen de que Que los prelados regulares hagan publicaren sus mo
los religiosos vivan fuera de sus conventos, y nasterios las cartas y censuras de los diocesanos.
particularmente asistan à monasterios de reli De escusarse los prelados de las religiones y
giosas que no estan sujetos á sus prelados , ni los demas religiosos de leer y publicar las cartas
son de sus mismas órdenes. Rogamos y encar y censuras de los prelados diocesanos ó sus m i
gamos á los arzobispos y obispos que nombren nistros, se puede seguir que muchos de sus súb
á clérigos seculares por vicarios y confesores de ditos iiose confiesen ni paguen los diezmos, que
las monjas .sujetas á sus jurisdicciones, y no à dándose con las cosas hurtadas ó robadas, sin que
religiosos, que asi se acostumbra y observa en se pueda tener cuenta con ellos ni ejecutarlos,
estos nuestros reinos de Castilla. (10) haciendo ilusorio el oficio episcopal: encargamos
LEY X L III. a los provinciales , priores, guardianes, vica
rios y otros religiosos de los monasterios de
D. Felipe IV en Zaragoza a 16 de agosto de 1612. Y nuestras Indias , que cuando los prelados dio
en esta Recopilación.
cesanos ó sus ministros les dieren algunas car
Que los prelados y ministros eclesiásticos guarden los tas y censuras para que las lean y publiquen,
aranceles, conforme á derecho de estos reinos de las hagan leer y publicar en sus monasterios
Castilla, y las audiencias lo hagan, ejecutar, y ¿os
vireyes y justicias informen si se cumple lo "pro para que cesen tales pecados. En que será
veído. nuestro Señor servido , y los religiosos cumpli
rán su obligación.
Rogamos y encargamos à los prelados de
nuestras ludias que den las órdenes necesarias LEY XJLYI.
á sus provisores y notarios y otros cualesquier
ministros, curas, beneficiados y clérigos, so D. Felipe IV en Madrid a' 42 de febrero de 1663.
bre que guarden lo dispuesto por el santo con Çue los obispos puedan embarcar los fru to s episco
cilio de I remo, y señalado por aranceles en la pales y hacer matanza de ganados como los vecinos
cobranza de los derechos de dimisorias, títulos Permitimos que los obispos puedan embarcar
y otros despachos, y en los entierros. Y por los frutos episcopales en los navios de las pér-
que nuestra voluntad es que esto tenga cum misiones, como los vecinos igualm ente , y ha-
plido erecto, mandamos à nuestras audiencias cei la matanza de ganados, y pesar la carne de
reales que es ten con especial cuidado de que elios por su turno.
no haya esceso, y en caso necesario despachen
las provisiones ordinarias, conforme está pro.
(11) Sobre esta ley 43 es digna de versó la cedida
de 24 de marzo de 1754 espedida mu ocasión de Jos
( iO) En cédula de^4 de octubre de 797 se mandó recursos del marqués d<U Valle del Toxopara repri
que los obispos visiten todos los años los conventos mir los abusos de los curas que exigían derechos á
oc mou ¡as en cuanto <í clausura y rentas, acompaña*- ios yanaconas de sus haciendas: está declarado en
dos de los prelados regularos ú otro religioso si aque ella, que entre estos y los demás indios lio hay dife
llos estuviesen ausentes ú enfermos. rencia en cuanto á la exención.
TOMO I.
40 Libro i. Titulo v il,
LEV XLV1I. LEV LL
t). Felipa tí fin T.ilfiilo i( 27 do aaosto fie 1500. Don D. Felipe IV en Madrid tí 20 de mayo de 1051.
Felipa lii cu til Ihirdo A lt tic dícícmbie de 16i3.
Que ningún obispo perciba fas cuartas funerales del
Que fas prelado s no ex co m u lg u e n p o r cansos fa ves, tiempo de la Vacante de su antecesor, hasta el fíat de
n i condenen d fagos en p e n a s p ecu n ia ria s. su Santidad.
Rogamos Y encargamos n los arzobispos y Rogamos y encargamos a.los arzobispos y
obispos , provisores y viciarlo» generales y otros obispos de nuestras Indias que con ningún pre
Cllalesquíer jueces eclesiásticos de nuestras lu testo perciban las cuartas funerales causadas en
dias , que tío excomulguen en los casos que tu el tiempo que estuvieren vacas sus iglesias, des
vieren jurisdicción , por cosas y casos leves, de la muerte de sus antecesores hasta que su
conforme está dispuesto por el santo Concilio Santidad les conceda el fíat, ni sobre esto pro
de Tro uto , ni condenen en penas pecuniarias cedan contra los cabildos de Süs iglesias, guar
á los legos por losi inconvenientes quede ello dando la costumbre y lo que en esta razón es
resultan. ( V2>j tuviere resuelto y mandado.
LEV X L V liL
D, Felipe 11 an Madrid tí 18 de febrero de 1588. 0 . Felipe ÍV en Madrid tí 14 de julio de 1638.
Que ¡os prelados y jueces eclesiásticos apliquen par -
Q ue fas p rela d o s no o rd é n e n d titu lo de beneficios de te de las condenaciones para las guerras contra itt*
que el R e y sea p a tró n , a n tes de la p re se n ta c ió n . fieles y gastos de armadas.
Encargamos á los prelados de nuestras In Otrosí rogamos y encargamos à los prela
dias que no ordenen á titulo de beneficios, de dos , provisores y vicarios generales, que de las
que Nos somos patrón, sin haberse primero condenaciones ó multas que hicieren en sus
tlado presentación del beneficio en la forma juzgados apliquen alguna parte para las guer
que está dispuesto al que asi se hubiere de orde ras contra infieles y gastos de nuestras armadas.
n a r, y si hubieren hechu ó hicieren lo contra Y mandamos que se cobre y recoja en nuestras
rio, nuestros vi cuy es, presidentes y goberna cajas reales con buena cuenta y tazón, para que
dores, á cuyo Cargo estuvieren , preseuteulue- se nos remita distintaiy separadamente con la
go los tales beneficios à olrus clérigos. demas hacienda nuestra, y se gaste en los di
chos efectos. Y encargamos á los prelados y jue
LE V X M X . ces que nos den aviso en todas ocasiones de lo
D. Felipe III en Madrid á 5 de d ciembre de 1008. que por esta cuenta juntaren, y cajas en que
entrare.
Que loé arwbispós en sede vacante de iglesia sufra
gánea usen de el derecho de metropolitanos. LEY LIÜ.
Porque se han experimentado muchos in D. Felipe IV en Madrid á 15 de diciembre de 1629.
convenientes en el gobierno de las iglesias ca Y en esta Kecopilaeion.
tedrales sede-vacantes, y las provisiones y elec Que los prelados procuren que Susfeligreses y sdb*
ciones de visitadores, y presentaciones para las ditos vivan ejemplar y virtuosamente, y hagan elec
doctrinas no han sido tan acertarlas como con ción Y den noticia al Rey de los que fu eren mas d
viene ; encargamos á los arzobispos demuestras propósito para empleos y puestos eclesiásticos y se
cutares.
Indias que si hubiere negligencia en las sede-
vacantes y sucedieren casos en que los metro \ Porque solamente deseamos la dilatación de
politanos deben conocer, conforme à derecho nuestra monarquía para servicio de Dios nues
canónico, usen de la facultad y jurisdicción tro Señor, aumento y conservación de su santa
que les concede, procurando que loá cabildos fe y religión católica , y con los males que en
eclesiásticos procedan en todo como conviene. estos tiempos esperimentamos debemos temer,
que está gravemente ofendido por nuestros pe
LEY L. cados > y merecemos estos y mayores castigos
fecotiocieudo lo que importa el ejemplo públi
t)t Felipo ÍV én Madrid a' 1/ de julio de t63l.
co de los prelados y ministros eclesiásticos, pa
Q ue en tu a d m in istra c ió n de la cu a rta ep iscopal se ra conmoverá la divina Misericordia, (Hedían
gu a rd e la c o s tu m b re . te la reformación de costumbres: rogamos, en
Mandamos que nuestros vireyes, presiden cargamos y exortamos à los arzobispos , obis
tes y gobernadores no envíen jueces á la admi pos , abades, cabildos eclesiásticos y prelados
nistración de los frutos y rentas de la cuarta de iüá religiones, que con la atención, pruden
episcopal en sede-vanante, y que hagan guar cia V celo que fiamos de sus personas, pongan
dar la costumbre que se hubiere observado en los medios mas eficaces para aplacar y servir á
su administración. Dios nuestro Señor , y que en sus subditos se
oigan y vean los frutos de nuestra amonesta
ción por todos los medios posibles á la provi
(12) Esta ley tiii cuanto tí no excomulgar, se dencia cristiana y religiosa, procurando que
manda guardar ñuuvamcute por cédula de Madrid los ministros eclesiásticos, curas, confesores y
de 22 de marzo do 780.
Y cu cuanto tí no Imponer penas pecuniarias sü predicadores tengan la suficiencia , pureza tle
huida mandado untes por otra de 1756. vida y costumbres que pide tan graude miste*
De los Arzobispos y obispos. 47
río , v sean elegidos sin algün respeto humano, cualquier d o ctrin ero , ley 3 8 , til, 6 de osle
ayudándonos 6 que descarguemos nuestra con* libro.
c ie n d a , y llagamos elección, mediante su noti Que los clérigos y religiosos tío sean admitidos
cia , de ios «ugetos de mas aprobación, virtud, á doctrinas sin saber la lengua general de los
ejem p lo , letras y esperiencías para el gobierno indios t¡m han tío adm inistrar) le y 30, tit. 6
de las iglesias y «ifícios y ministerios seculares, de o /le libro.
de que nos daremos por bien servido. Qu§ los prelados no prefieran en las doetrinas
d los parientes ni dependientes de m inistros,
L E ¥ LIV. n i las provean p o r sus intercesiones, le y 34,
Den Felipa II en Cdideba á 20 de marae da 40*0, Iti. 6 do este libro.
Véaée 1« ley 4 , lit, 4«®, lib. I. Que los doctrineros no lleven d los indios mas
Que n§ se impida d tos preladas la jurlsdlmlm sete- de lo que les per tenere , ni los prelados co
sltisiiea, y se les de favor y msllio, üofífonm d bren de los doctrineros la m a rta fu n e r a l y
(tereeho, de oblaeiom s donde no hubiere costum bre le
Mandamos á ios presiden tes 7 oidores d i gitima f le y 13, tit. 13 de este libro.
nuestras audiencias reales de las Indias que no Que los obispos y visitadores visiten las igle
impidan à los prelados ni jueces eclesiásticos, sias de las doetrinas y no ¡os conventos, le y
ni <t sus ministros ni odciales la jurisdicción 29, Ut, 1 5 de este libro,
ielesídstlca, antes para la ejecución de ella Jes Que los clérigos sean exentos de ¡a jurisdicción
den y haga» dar todo el favor y auxilio que se episcopal p o r ministros de C ruzada, le y 18,
les pidiere y debiere dar conform e á derecho. lili 2(jde este libro,
Que lós prelados no den orden sacerdotal sin
aprobado n del catedrático de la letuiua. l e y
B, Felipe IV en Madrid rf 2a de abril de 4013, bü, tit, 2'¿ de este libro,
Que en la pena de temporalidades se com pren -
Que tes prelados remitan tes breves y búlelos *0 pa» den tus rentas episcopales, le y 1 4 5 , tit, i 5 ,
sudos por el eonsefo,
lib, %
llega mas y encargamos ó los arzobispos y Que las audiendas puedan remover las cítenlas
obispos de nuestras Indias que por lo que les de te stm w n ie s, m andas ij legados de tjue ha
toca bagan que se recojan todos los breves, asi y a n conocido los visitadores eclesiásticos,
de su Santidad como de sus m uidos apostóla ley tit, id , lib » 3 ,
eos que hubiere m sus distritos y se llevaren á Que los p ir e y e s y audiendus puedan dar p ro
aquellas provincias, no habiéndose pasado por visiones para que los prelados visiten sus
nuestro consejo real de las In d ias, y no con= M a n d o s y se hallen m los concilios , h v
sientan ni den lugar que §§ use «le ellos en nln = i\i, tu, ¡a, ub, %
, ’ 7
p n a formal y recogidos, los remitan al dicho Que las audiendas no den provisiones generate
nuestro consejo en la primera ocasión , dando m e n te , e x o m n d e d los prelados ú m e no
para todo las órdenes convenientes, y poniendo procedan con censuras , le y 149, t it , 10 . li
en su ejecución §1 cuidado necesario» bro %
Que tes audiencias atiendan mucho d la auto
LEY LVE ridad y dignidad de los prelados , y m se en»
D, Felipe IV en Madrid á 20 de marge de 4041, tr m e tu n m s u jurisdicción, le y íd ú , til, 10,
Que tes vhhjm no den lugar d que en su* eam se lib t 2,
pongan eneraos de guama, y tomando armas tes Que presentándose p e tte ím con palabras inde*
clérigos seu eon trage modeste. ceníes m i t r a prelado, cl escribano de edma*
Otrosí encargantes á los obispos de nuestras va dé prim ero cuenta d la audiencia, ley | § 1 ,
Indias que no permitan id den lugar a que en ttt, 1o, líbi 2,
sus casas se Ies pongan cuerpos de guardia de Que el obispo , presidente de audiencia real m
clérigos ni otros ministros aelesídslieos | y §j la su diócesis no conozca de los pleitos celestes--
necesidad obligare ú que el estado eclesiástico ticos que ocurrieren d la audiencia por vía
tome armas para la defensa de la ciudad, lo ha* de.fuer*a é en otra fo rm a , ley |g, m , ¡u
ga con trage modesto y deeente ¿ sus personas hro 2 ,
y dignidad < de suerte que escusen nota en los Que miaudo les obispos p ro veyeren sobre te
tragos y proeeder, y den §1 ejemplo que de= contenido en la le y i I, til; i í , lib, % el //*■ *
«en en todo, ca l use del remedio que hubiere lugar de de?
f BüthBt
Q ue los mayordomos de las Iglesias sean le= Que ios arzobispos y obispos avisen a l Mey de
g o s , íte m s y abonados, le y 2 1, tit, 2 de es* tiempo en que hab len r tomado posesión ds
te Itero,
sus iglesias, y si han residido , ley Un U ,
Que tes prelados vtsiien ¡os bienes de te s fá =
¡m e a n te tes iglesias y hospitales de tedios , Que envíen relación de sus ventas, y tes de sus
y tom en sus c u m ia s , m istm u te persona por iglesias y c u r a to s , le y , % tit: 14, lib, 3-
el p atronazgo r e a l , l e y 22, til, 2 de este Ite Que inform en si ka n visitado sus tiiú m is f tes
UPÓt
efectos que hubieren resu lta d o , le y ¿te
Que p o r concordia del prelado y del que tu* tute i ó , lite 3*
olere el m d p a i m m g o pueda ser removido Que e m ie n copla de t e s m s í h m i e m s j arde*
48 Libro i. Título v iï.
nanzas y autos de gobierno de sus iglesias, ocasión que h a y a , conforme su Santidad
conforme d la ley 34, tit. i, ¿ib. 2 , ley 24, ordena. Auto 1 16.
til. 14, lib. 3. Por resoluciones de S. M . , á consultas de el
Que informen de los hospitales y cofradías, consejo de 19 de agosto de 1643, y II de
ley 25, tit. 14, lib. 3. febrero de 1644 , está prohibido que los ar
Que informen del numero de personas , doctri zobispos y obispos de las Indias se consagren
nas y parroquias de sus distritos, ley 26, en Espada, y mandado que asi se guarde, sin
tit. 14 , lib. 3. dispensar, si utos 131 y 133. Y por otra de
Que no procedan con censuras contra las ju s octubre de 1649 mando S. M . que el conse
ticias reales que hicieren diligencias en ave jo escusnse consultarle sobre esta materia.
riguar los agravios de indios, aunque resul Auto 153.
ten contra eclesiásticos, ley 27, tit, 14, lib. 3. S. M . por decreto de 1 1 de febrero de 1644
Que informen de los predicadores, y si acuden fu e servido de resolver que por la dilación
d su ministerio, ley 28, tit. 14, lib. 3. que ha habido en despachar las bulas de al
Que avisen al rey si las personas de que hubie gunos presentados para obispados de las ln -
ren informado se hicieren indignos de la pri dias , el consejo, sin particular orden de
mera aprobación, ley 51, t.il. \A, lib. 3. S. M ., no le consulte para obispos personas
Lo ceremonial se vea en el tit 15; hb. 3. que por su estado y naturaleza tengan emba
S. M . por decreto de su real mano en S . Lo razo notorio para el despacho de sus bulas, ó
renzo d 14 de octubre de 1638 fue servido de para pasar de España d las Indias, como
dividir y ratear , reduciendo d clases Jijas d son los religiosos que tienen voto particular
los acreedores e interesados en las mercedes de no aceptar obispados, 6 los (pie actualmen
de limosnas y obras pías que había hecho e te son generales o provinciales de sus religio
hiciese en la tercera parte de vacantes de nes, por las discordias é inconvenientes que
obispados de las Indias, dándoles fo rm a y d ellas se les siguen de hacer capitulo fu e ra
reala , y distribuyendo en tres clases a los de tiempo , con cuyo motivo procuran dilatar
acreedores, poniendo en la primera á los que el despacho de las bulas. Auto 132.
tienen mas particulares razones de preferen Las bulas de observancia del patronazgo, cuyo
cia : en la segunda d los que idas se acerca duplicado se manda guardar, y quedan en
ren á estos ; y en la tercera á los últimos *y poder de los agentes fiscales cuando se despa
mandó que todo lo que viniere de vacantes chan las de ¿os obispos , se entreguen en la
de obispados se divida en cuatro partes , las secretaria donde tocan, y allí se guarden en
dos se repartan pro rata de sus debitos entre cajón distinto con toda custodia. Auto 159.
los que tienen su consignación en la primera Cuando S. M. nombrare para los obispados de
clase, y d los de la segunda y tercera se les las Indias en segundo lugar otro sugeto se en
rateen de la misma manera las otras dos par víe orden por el consejo para que el prime
tes: una d los de la segunda clase, y otra d los ro dina dentro de ocho días si acepta o no el
de la tercera. Y que si algún año hubiere tan obispado , y no lo haciendo pase el nombra
particular razón que obligue a alterar o mu miento al segundo. Auto 174. Asi lo declaro
dar algo, ó para colocar en alguna de las di S. M. por decreto señalado de su real mano
chas tres clases lo que S. d/í. concediere de en 29 de octubre, de 1652. 0 3 )
nue vo en este genero de vacantes, pueda el
consejo consuitur le lo que se ofreciere, a u
to 111 . (15) Sobro este auto y el siguiente véase la cédu»
la que se cita sobre la ley 1.a cíe este título, priuci-
Todos los obispos que se consagraren en estos •pabuente en la parte que trata del lugar de la consa-
reinos y han da pasar a las Indias, junio i gracion de los obispos, y que se haga en Lspana para
con el juramento de guardar el patronazgo, I evitar los inconvenientes que la esporiencia lia he*
le han'de hacer de embarcarse en la primera I eho ver se seguían de la disposición de este auto 155.
49
© O T A Y O.
«— —
TITULO ¡DECIMO.
D e los ju eces eclesiásticos y con servadores.
------------ —r Q)
« ■■ ■ w v a l mm •
D e los clérigos*
Ordenamos y mandamos a ios vireyes, pre (2.). Es en consecuencia de esta ley, que iio deben
sidentes y oidores de nuestras audiencias W (i) remitirse á España estos clérigos incorregibles sino ’
castigarse aquí conforme á ella; y de esto se previno
( i) Véase ia ordenanza 2 1 , tit. 1 1 , l¡b. 3 de] Y V. S <jyl Rerú en cédula reservada de 11 dé julio
Terú. de i/9 ó . También téngase preseute Ja cédula de 18
de enero de 1758.
TOMO h
1.6
62 Libro i. Título xii.
güen, y con sit parecer los echen de ella , sin echaren y repartieren sisas, no se consienta n í
otro res pedo que el que se debe al bien co dé Iugar que ios clérigos paguen ni contribu
mún. (3) yan mas de aquello á que de derecho son obli
LEY X. gados.
D. Felipe II en ...... á 17 de febrero de 1575. LEY XIII.
Que contra los culpados en motines, que se hicieren D. Felipe 111 en el Pardo á 14 de diciembre de 1615-
clérigos, ó entraren en religión, se proceda como se
declara. Q u e a l estado eclesiástico d e M éjico no se hag a r e -
fa c c ió n d e la sisa im p u esta p a r a e l d esagüe.
Los vi reyes y justicias reales manden ege-
cutar lo dispuesto por derecho , en casos de Porque la sisa impuesta para el desagüe de
que los seculares sean culpados en motines y la Laguna de Méjico resulta én utilidad inme
traiciones, y por evadirse del castigo se hicie diata al¡ estado eclesiástico, 'y es justa y con
ren clérigos ó entraren en religión , quedando* viene al provecho público y particular de todos
se en la tierra (sin embargo de haberse entra los que residen en aquella ciudad. Ordenamos
do en religión los que antes estuvieren proce y maudamos que al estado eclesiástico de ella
sados) y si no estuvieren procesados' antes, y el no se le vuelva ninguna cosa de la dicha sisa,
escándalo y daño que hicieren fuere notable, ni Se le haga refacción nf descuento alguno. Y
encarguen á sus prelados que los castiguen , y rogamos y encargamos alarzobispo, que si los
sean echados de la tierra, enviándolos á estos eclesiásticos se quisieren escusar de pagarla,
reinos registrados y con sus causas * los procure amonestar, advirtiéndoles la nece
sidad y conveniencia pública y particular por
LEY XL medios suaves ; y en caso que no1 aprovechen
El emperador don Carlos en Valladolid á 23 de agos» se valga de los rigurosos, y los compela y apre
to de 1538.
mie de suerte que por estos medios tenga efec
Q u e las ju s tic ia s re a les n o im p id a n á lo s p re la d o s to ; y si todavía tío se pudiere conseguir, man
echar de sus obispados d los clérigos exentos . damos que nuestra real audiencia ío haga en
Item mandamos á todas nuestras reales jus conformidad y cumplimiento de lo que por
ticias, que si los prelados eclesiásticos quisie derecho está dispuesto.
ren echar de sus obispados algunos clérigos
exentos de su jurisdicción ordinaria, no se lo LEY XIV.
impidan. D. Felipe II en el Pardo á 17 de noviembre de 1593'
LEY 111. Q ue d los re p a rtim ie n to s que to q u en d eclesiá stico s
El emperador don Carlos en Granada á 28 de julio a sista n d o s ca p itu la re s.
de 1526.
Mandamos que cuando en alguna provincia
Q ue los clérig o s no p a g u en sisa en m a s d e lo que so n
o b lig a d o s.
de nuestras indias se echaren derramas y re
partimientos á los eclesiásticos, sea con asis
Mandamos que cuando en las Indias se tencia del cabildo de la iglesia, sin que en esto
se ponga impedimento.
(3) Se advierte, que por una real resolución de 17 de
agosto de 1799 se na declarado de resultas de dispu LEY XV.
tas con ios militares que en las causas de sublevación
y sus incidencias ú otras de igual naturaleza, es pri El emperador don Carlos en Madrid « 17 de mar
vativo do las audiencias el conocimiento (siendo la se zo de 1553.
dición contra los magistrados y gobierno del pueblo)
contra cualquier delilicítente ae cualquier fuero ó Q ue tos c lé rig o s que e s tu v ie re n cu a tro m eses e n u n
obispado, no p u e d a n sa lir d e é l s in d im iso ria s.
clase que sea; y también que por real orden de 19
de uovieinbre de 1799 manda £>. M., que en los deli Encargamos que los clérigos mercenarios
tos atroces ó privilegiados de clérigos conozca la ju ue estuvieren en las Indias, habiendo residi-
risdicción real con la eclesiástica hasta poner la causa
cu estado de sentencia, y que entonces se remita ú
3 o 6 residiendo en cualesquiera arzobispados y
S. M. por la via reservada para la determinación á obispados cuatro meses, no puedan salir de
que haya lugar. También se mandó á la audiencia de ellos sin dimisorias del prelado en' cuyo arzo
Guatemala con ocasión de haber muerto un religioso bispado ú obispado residieren, y asi se guar
á otro, que en casos semejantes de delitos atroces de de lo proveído por la ley i 9 , tit. 7 de este li-r
eclesiásticos se proceda conforme á ta dispuesto por
el Consejo de Castilla en el del homicidio que hizo b ro ; y que si se ausentaren sin ellas, ningún
un religioso de S. Lucar, con prevención de que otro prelado les permita celebrar, y no por
conclusa la causa para definitiva pase el juez real co esto dejen de dar las dimisorias á los dichos
pia de ella al fiscal de la audiencia para que pida lo clérigos, si no hubiere en ellos deméritos por
conveniente acerca de que por ei juez eclesiástico se
baga la degradación y libre consignación del reo, la que se les deban negar.
que verificada, se pronunciará sentencia , que para
egecutarse se consultará antes con S. M. Se advierte, LEY XVI.
que por cédula de 14 de octubre de 1796 se desapro D. Felipe II en Madrid á 27 de junio de 1563, y à
bó al arzobispo de Méjico, que para proceder á de 10 de enero de 1589. D. Felipe IV allí á 7 de di
gradar á un religioso en otro ca»o semejante al ante ciembre de 1626.
rior hubiese liedio por sí solo actuaciones, despues
de estar concluida la causa por el juez real, y se le Que n in g ú n c lé rig o , n i religioso pu ed a v e n ir d esto s
permitió, que sí pudiese reclamar á la sala cualquiera lie in o s s in las licencias que esta le y d ec la ra .
falta substancial que hubiese notado en el proceso, á
fin de que subsanada pudiese proceder á la degrada Ordenamos y mandarnos que cuando cuales-
ción. quier clérigos ó religiosos que residieren en
De los clérigos. 03
muestras Indias, Islas y Tierra-firme <lel mar ren licencia pa.ra ello, se la darán conforme á
•Océano quisieren venir a estos ¡reinos ¿leías par lo dispuesto por las leyes 3.ntes de esta \ y ad
tes donde residieren , sean obligados á pedir vertirán que ahora vengan por ssu voluntad ó
licencia á sus prelados donde hubieren residido, consuelo suyo,, ó á negocios de su orden ó pro*'
y siendo los tales clérigos ó religiosos de los que vincias , generales ó particulares, ó por otra
hubieren ido á titulo de ¡tratar de la predicación, cualquier causa, uo les mandaremos dar licen
conversión y enseñanza de los indios , los pre cia para volver á las Indias ni á parte alguna
lados >no Jes darán licencia si no les constare de ellas. Y rogamos y .encargamos á los prela
que han residido diez años par lo menos en dos y provinciales de las Iglesias y órdenes, qne
aquellas provincias para el dicho ministe- hagan lo mismo enando algún clérigo ó religio
xio-Y asimismo han de tener licencia del vireyó so súbdito suyo tratare de venir à estos reinos,
gobernador en cuyo distrito hubieren estado, y advirtiéndoles que si la venida fuere áproeurar
Í>ara sacarla ba de preceder ii>formación, por su acrecentamiento enviando los recaudos -.de
a cual conste desús partes y virtud., y la apro sus calidades y méritos, con aprobación de los
bación de sus prelados , y con estos requisitos, prelados, lo podrán escusar, porque Nos man
y no-siendo de los que Nos precisamente tene daremos se tenga cuenta con ellos para hacerles
mos mandado que no vengan sin especial licen merced en loque hubiere lugar.
cia nuestra , y .guardando lo que está dispu.es- ¡
to en razón de las licencias que se han de dar á LJEY XVIII.
los que pasan de.aquellas provincias á estos rei D. Felipe II en fian borenzo.á 2 2 -de '.junio de 158$.
mos se la darán , declarando en ella haber^cum Q ue los v ir e y e s no d e n licencias d clérig o s p a r a ve
plido con lo en esta nuestra ley contenido, n ir d p r e te n d e r d esto s R ein o s, a u n q u e las te n g a n
y certificando haber residido los diez años en d e su s pr.elacios.
el dicho ministerio í y si no trageren las dicen- ! Conviene que ios clérigos beneméritos sean
-cías en esta form a, mandamos á los generales gratificados y consigan desde sus casas el premio
de las armadas y flotas de la .carrera de Indias^
de sus servicios, escusando los riesgos, trabajos
cabos, capitanes, maestres y pilotos .de ellas,
y costas de viage , y á los prelados de ¡nues
y de cualesquiejr otros navios, que no los .con
tras Indias se les ha dado la .orden que ha pa
sientan embarcar , ni los traigan en d io s, pena
de privación .des.us oficios y de cincuenta .mil recido conveniente sobre esta materia : man
damos à nuestros vireyes que tengan particu
maravedís para nuestra cámara á cada uno;que
lo contrario hiciere., y que mandaremos volver ; lar cuidado de no dar licencias á clérigos para
á su costa los clérigos y religiosos que de otra ! venír.á estos reinos á sus prestensio.nes , aunque
las tengan.desus prelados. ,
suerte trajeren, (4)
m m ita W? uní h í w M i
LEY PRIMERA.
D. Felipe II y la princesa en su nombre en Vallado-
Íradiere doctrinar y administrar , conforme á
a ley 46, tit. 6 de este libro. Y mandamos á
lid á 30 de mayo de 1557. El mismo en Madrid á 9 nuestros vireyes, presidentes y gobernadores,
de agosto de 1561. y encargamos à los prelados diocesanos y pro
Que donde hubiere religiosos puestos por doctrine vinciales Je las órdenes, à cada uno en su ju
ros no propongan los obispos d cle'rigos. risdicción y distrito, que juntos comuniquen,
Rogamos y encargamos á los arzobispos y determinen y señalen los sugetos que cada mo
obispos que en los pueblos y reducciones de nasterio hubiere de tener para la administra
indios donde hubiere monasterio y estuviere la ción de los santos sacramentos ; dé tal forma,
doctrina encargada á religiosos, no propongan que baya suficientes ministros, y á los religio
curas clérigos hasta que otra cosa se provea*, pe sos, que tengan todo cuidado y diligencia en
ro fuera de los limites señalados á los religiosos, confesar y administrar á los enfermos, enter
propongan curas clérigos para que administren, rar los difuntos, y hacer todo lo dem asque
y à cada uno se le señale los que buenamente pertenece á su ocupación y ministerio.
De. los euros '■doctrineros. 05
obispos que provean y den orden en sus dióce
LEY II. sis que los curas y doctrineros de indios, usan
D. Felipe II Y la princesa gobernadora en Vallado- do de los medios mas suaves , dispongan y en
lid á 23 de mayo de 1559. caminen que á todos los indios sea ensenada la
Que donde hubiere curas clérigos, no haya religio- lengua española, y en ella la doctrina cristia
V sos, ni se funden conventos. na , para que se hagan mas capaces de los mis
Mandamos que en el pueblo de indios don terios de nuestra sania fé católica, aprovechen,
de hubiere cura clérigo puesto por el arzobispo para su salvación, y consigan otras utilidades,
ú obispo no se funde monasterio de ninguna en su gobierno y modo de vivir. (2 )
orden*, y si algunos religiosos fueren á predicar LEY VI.
á los pueblos donde los curas estuvieren, el ar
zobispo ú obispo dé orden que habiendo predi D. Felipe II en Madrid o 11 de junio de 1591. Y en
Toledo á 4 de setiembre do 1560. D: l'elipe IIL en
cado pasen á Otra parte, ó se vuelvan à sus mo Madrid á 6 de mayo de 1611. D Felipe IV allí á óO
nasterios, y no traten de hacer conventos sino de agosto de l6 2 t.
fuere en las partes y lugares dondé a nuestro
Que los clérigos y religiosos doctrineros no pren-
virey , audiencia ó gobernador , y al prelado dan, ni hagan condenaciones d los indios, ni nom
pareciere que conviene, y hay necesidad y po bren fiscales, y guarcle.u los aranceles.
sibilidad y licencia' nuestra , para qüe'se fun
de monasterio conforme alo proveído. Nuestros vireyes , gobernadores y justicias
no permitan ni consientan a los curas y doc
LEY 1IL trineros, clérigos ni religiosos (pie tengan cál
D. Felipe II en Zaragoza á 8 de marzo de 1585.
celes, prisiones j grillos y cepos para prender,
ni detener à los indios, ni les quiten el cabello,
Que si los obispos apremiaren d los clérigos d-acep ni azoten, ni impongan condenaciones sirio ■
tar doctrinas, las audiencias provean de form a que
los indios sean doctrinados. fuere en aquellos casos que tuvieren comisión
de los obispos, y en que confórme a derecho
Q u e r ie n d o a lg u n o s p r e la d o s a p r e m ia r à lo s y leyes de esta Ptecopilación la pudiere'ú dar, ni
clérigos por censuras á que vayan a servir doc tengan ni pongan fiscales , porque esto toca a
trinas, si acudieren por via de agravio a nues sus obispos, según y en la forma dada por la
tras audiencias , les mandamos que en los ne ley 32; tit. 7 de este libro, y en los derechos
gocios de esta calidad, que.a ellas fueren, pro de entierros, matrimonios', bautismos y todo
vean de manera que los indios no carezcan de lo demas se conformen con los aranceles. Y ro
la doctrina necesaria. ga ráos y encargamos á los prelados diocesanos
que asi lo bagan cumplir y ejecutar. ..........
* LEY IV.
D. Felipe III en Madrid á 17 de marzo de 1619.
•■ q y
LEY VIL
Que los virey es, áudieiicias y gobernadores tengan D. Felipe II en el Pardo á 2 de diciembre d e 4578.
cuidado de que los doctrinero$ sepan la lengua de^
1 los indios, ó sean, removidos. Que los indios no sean apremiados a ofrecer en las
misas.
Ordenamos y mandamos á los vireyes, pre
sidentes, audiencias y gobernadores que eslen Otrosí: nuestros vireyes, audiencias reales,
advertidos y con particular cuidado en bacer gobernádores y justicias no consientan ni^ per
que los curas doctrineros sepan la lengua de los mitan que los indios de sus distritos y jurisdic
indios que lian de doctrinar y administrar, ciones sean obligados á ofrecer en ninguna de
pues tanto importa para el cumplimiento de su las misas que se les dijeren, antes los amparen
obligación y salvación de las almas de sus feli y defiendan, que los obispos , clérigos, reli
greses: y con los superiores de las órdenes que giosos ni otros ministros eclesiásticos les obli
remuevan á los religiosos que no supieren la guen á ello*, pues aunque el ofrecer es cosa loa
lengua é idioma de los indios en la forma que ble y recibida en la santa iglesia el hacerlo ha
está dada, y propongan otros en su lugar, aper de ser voluntariamente como las demas obras
cibiéndoles que si los doctrineros actuales, y los de caridad , y el compeler á que se haga el
que despues lo fueren no la supieren, sema re abuso mal introducido, mayormente con los
movidos de las doctrinas *, y á los catedráticos indios, que son miserables y de poco caudal.
de la lengua donde los hubiere, que á ningún Y rogamos y encargamos à los prelados que
clérigo ni religioso den aprobación sino tuviere guarden y hagan guardar lo contenido en esta
la dicha calidad. Y rogamos á los arzobispos y nuestra ley.
obispos que lo bagan ejecutar. ( 1) LEY VIII.
LEY V. D. Felipe II en el Pardo á d.° de diciembre de 1573.
D. Felipe IV en Madrid a 2 de marzo de 1634. Y á Que lo que se repartiere d los indios por tos doctri
4 de noviembre de 1636. neros , se les quite de sus salarios, y siendo excesi
Que los curas dispongan d los indios en la enseñan vo, se les quite la doctrina .
za de la lengua española, y en ella la doctrina cris Ordenamos que si repartieren los doctri
tiana. neros alguna cosa á los indios para ornamentos2
Rogamos y encargamos á los arzobispos y
(2) El espíritu de esta ley es el mismo de la .18,
( i ) Sobre esta ley véase la nota puesta á la ley 30, tit. l.° , lib. 6, véanse sus notas y ¡la cédula última,
til. 6 de este libro,, y á la 18, tit. l.° , hb. 6. sobre el particular de 17 de julio de 1/70.
TOMO 1. »7
66 Libro i. Título xiii.
/
ú otros efectos, se les quite de sus salarios en doctrina, se ocupen en su servicio, y especial
Ja misma suma ; y si fuere escesiva la cantidad mente en hilados y otros ejercicios, sin pagar
que repartieren, se les quite la doctrina, por les nada por su trabajo y ocupación, con lo cual
evitar los fraudes que en esto suele haber. no pueden asistir à sus padres ni hijos: manda
mos á nuestros vireyes, presidentes y gober
LEY IX . nadores, y rogamos y encargamos á los arzo
D. Felipe III en Madrid á 4 de abril de 1609. Don bispos y obispos que bagan guardar nuestras
Felipe IV allí u 8 de octubre de 1631. Véase la ley cédulas y ordenanzas y los concilios provincia
52 , til. l .° , lib. 6. les y sinodales con toda precisión y cuidado,
Q ue se re m e d ie n los exceso s d e los d o c trin e ro s e n proveyendo y ejecutando todo lo que vieren
c u a n to á tos te sta m e n to s d e los in d io s . que conviene, para que los indios é indias no
reciban agravio ni molestia con ningún preles-
Porque ordinariamente mueren los indios
sin testamento, y cuando disponen de sus ha to, y en las visitas que hicieren de las doctrinas
ciendas es en memorias simples y sin solemni* procedan contra los clérigos y religiosos doctri
d ad , y conviene ocurrir á los daños que pro neros que hallaren culpados, y quiten los que
ceden de introducirse los doctrineros y otras juzgaren que no admiten enmienda , dando
personas, recogiendo sus bienes' y alhajas, y cuenta à los vireyes, presidentes ó gobernado
disponiendo que se gasten en limosnas.y sufra res de la provincia, conforme está dispuesto
gios. Y para que no se queden ex-heredados por las leyes de este libro.
los hijos , padres ó hermanos , y los demas que L E Y X II.
conforme à derecho deben suceder , rogamos y
encargamos á los arzobispos y obispos y provin D . Felipe I lt en el Pardo á 8 de noviembre de 1608.
ciales de las religiones, que con efecto remedien Q ue s i los cu ra s d o c tr in e r o s to m a re n d los indios
ios escesos qiie’en estos casos intervinieren, ha m a n te n im ie n to s , ú o tra s co sa s s in p a g a r su ju s to va -
ciendo las diligencias que son obligados. Y man lo r, las au d ien cia s rea les lo p r o c u r e n re m e d ia r.
damos á nuestros vireyes, audiencias y gober Mandamos á nuestras audiencias que lle
nadores, que cerca de lo susodicho hagan guar- gando á su noticia , aunque no sea á pedimento
dar y guarden lo dispuesto por derecho y leyes de parte, que algunos curas y beneficiados, clé
de estos reinos de Castilla, y libren las provi rigos ó religiosos hubieren tomado á los indios
siones y mandamientos necesarios. ( 3 ) mantenimiento ú otra cualquier cosa sin pagar
les su justo valor, procuren poner en este es-
LEY X. ceso el remedio que convenga, pues tanto im
Don Feline IV en Madrid a postrero de rinarzode porta al servicio de Dios y nuestro ocurrir á
1663. este daño con particular cuidado.
Q ue los c u r a s y d o c trin e ro s no d e te n g a n , n i reco ja n
los in d io s de mita., que se h u y e r e n d e la s m in a s.
L E Y X III.
Encargamos á los obispos que ordenen á los Don Felipe IV en Zaragoza á 21 de setiembre de
4643.
curas y doctrineros que asisten en las doctrinas
de los lugares donde se suelen ocultar los in Q ue tos d o c tr in e r o s no lle v e n d los in d io s m a s d e lo
q u e les p e r te n e c e , n i lo s p re la d o s c o b r e n d é l o s doc
dios repartidos de mita á las labores de minas, tr in e r o s la cu a rta f u n e r a l y d e oblaciones do n d e no
y se huyen de ellas, que no los admitan, reco h u b ie re c o stu m b re le g itim a .
jan ni tengan en sus haciendas y servicio, con
graves penas y censuras , à la ejecución de las Los estipendios y sínodos señalados á los cu
cuales procedan contra los que contravinieren ras y doctrineros de pueblos d e indios, son
á ello ; y lo mismo encargamos á los provincia bastantes para su congrua sustentación : man
les y prelados.de las religiones, por lo que loca damos á nuestros vireyes, presidentes y gober
á los religiosos doctrineros. nadores que tienen á su cargo nuestro real pa
tronazgo, que por lo que les toca prevengan y
L E Y X I. provean que á título de obvenciones, oblacio
nes, limosnas y derechos de administración de
D . Felipe IV en Madrid á 8 de octubre de 1631. V sacramentos, no cobren de los indios ningún di
allí á 6 de junio de 1640. nero ni otras cosas en poca ni en mucha canti
Q ue se rem ed ie n las vejaciones q u e lo s d o c trin e ro s dad, y hagan guardar las órdenes dadas en esta
h a cen á los ind io s, y se a n re m o v id o s lo s culpados razón pira el buen tratamiento y enseñanza
Porque se ha entendido que los curas doc de los indios, y lo dispuesto por el santo conci
trineros, clérigos y religiosos hacen muchas ve lio de Trento y otros provinciales y sinodales,
jaciones y molestan gravemente á los indios, y y aranceles que en su conformidad se han he
obligan á las indias viudas y à las solteras que cho ó hicieren, procediendo con tal desvelo
viven fuera de los pueblos principales y cabe que aseguren sus conciencias, con que descar
ceras, en pasando de diez años de edad, i que gamos la nuestra , supuesta la libre facultad
con pretesto de que vayan todos los dias à la que les concedemos, para escusar los inconve
nientes que de lo contrario podían resultar.
(3) Véanse las cédulas de 18 de agosto de 1775-y
Y rogamos y encargamos, á los arzobispos
la de 22 de diciembre de 1800, enteramente confor que no cobren de los curas doctrineros la
mes <í lo dispuesto en la ley 1 5 , tit, 20, lib. 10 de la cuarta funeral y de oblaciones que en algunas
Novísima Recopilación. partes han acostumbrado llevar, pues gozan
De los curas doctrincros. 67
rentas tan cuantiosas, y esto no se puede per dad, del tiempo que en virtud de el dicho
mitir fuera de los casos en que dispone el dere nombramiento lo sirvieren, como no. pase de
cho y hay cootumbre legítimamente prescrip- cuatro meses , lo cual, con la fé del prelado
ta, y asi lo ejecuten, sin omisión ni tolerancia, en cuya diócesis residieren, firmada de su nom
mirando principalmente por la enseñanza, ali bre , se les libre y pague sin otro recaudo al-
vio y buen tratamiento de los indios. guno. (4)
TOMO I
70 Libro i. Título xiv.
T X T W t íV W A , T W £ V v ? fifc
JP e i t a r d ig to so s.
LEY XV. Que los religiosos que pasan d las Indias a costa del
liey, pasen donde van consignados.
El emperador D. Carlos y la emperatriz dona Isabel
gobernadora en Ocaña á 1 / de febrero de 1531. Mandamos á les vi rey es, audiencias y go
Que no pasen días Indias religiosos que no sean cua-
bernadores, que con toda diligencia y cuidado
; les conviene. se inform en, qué religiosos hay en sus distritos
de los que lian pasado á las Indias a costa de
Ordenamos que no se dé licencia por nues nuestra real hacienda, y si residen en las par
tro consejo, ni consienta por los jueces oficia tes adonde fueron enviados, y hallando que al
les de la casa de contratación pasar á las Indias gunos no están , ni residen en ellas , liarán con
algunos religiosos, sin tener primero noticia de comunicación de sus prelados, que se vayan
quien son, y de qué p arte, y <Ie su vida y luego, sin embargo de cualquier causa ó im
doctrina, y que sean celosos de uuestra santa pedimento que propongan para no lo cumplir.
religión, y que darán tan buen ejemplo, que
Y rogamos y encargamos á los prelados regula
Dios nuestro señor sea servido. res, que de su parte hagan las diligencias que
convengan en orden á la egecücion de lo sobre
dicho,asistiendo y ayudando con el celo y cui
D. Felipe III en Valladolid á 29 de marzo de 1601. dado, que de ellos fiamos: y que los religiosos
Q«e los religiosos que llegaren d los puertos , no te que hubieren ido para la doctriná y enseñanza
niendo casas en las Indias, sean enviados á estos de los naturales, se egerciten en éste ministe
reinos. rio. (3)
Mandamos á los gobernadores de los puer D,'Felipe 111' en S. Lorenzo á 11 de junio de 1612.
tos de Indias, que si llegaren á ellos en flotas, I). Felipe IV en Madrid á 18 .de junio de 1624.
armadas, ú otros navios algunos religiosos de Y porque se ha esperimentado que cuando en
órdenes que no tengan casas fundadas en viamos religiosos á las provincias del Perú y
aquellas provincias, no los dejen pasar adelan
te, y los hagan volver á embarcar y traerá Es
paña , si no llevaren espresa licencia nuestra. (5) Y que no se empleen en oficios de la reli
gión con pretesto algu no, lo manda la cédula de
LEY X V II. 26 de octubre de 1751, y que no queriendo seguir
el instituto de misioneros se les haga restituir á Es
La emperatriz gobernadora en Medina del Campo á paña. Por otra de 17 de abiíl de 1753 tit. 4 , se man
22 de junio de 1532. dó guardar acjueNa, añadiendo que los que cumpli
do un decenio no quisiesen continuar convírliendo,
Que para pasar d las Indias religiosos, infórmen los sean enviados irremisiblemente á E spaña, sin que
provinciales . los que vienen de ella puedan ser elegidos en oficios.
Por otra de 30 de abril de 1754 se les permitió
Item mandamos que cuando algunos reli poderse incoimorar despues dei deceuio sin habili
giosos quisieren pasar á las Indias, precedan á tarles para oficios. Se repitió lo mismo en cédula de
la licencia de su embarcación, informes denlos 22 de junio de 1764. Pero por fin , por cédula de l4
provinciales de las provincias de España, don de julio de 65 han logrado ser habilitados para ofi
de fueren conventuales, y relación à los de cios.
En real orden de 10 de diciembre de 1784 , se
nuestro consejo de las Indias de la calidad de declaró que no comprendía á los religiosos de pro
sus personas, y si conviene que los dichos reli paganda la providencia general de no conceder á
giosos pasen á aquellas provincias. persona alguna licencia para ir á España.
TOMO I. *9
74 Libro i. Título XIV.
Nueva España, consignados á Jas fronteras de curso a otra limosna, ni socorro, por la suma
Chiriguanaes, Nueva Galicia, Chicliimeeas, pobreza de aquella provincia, con que padecen
Nueva Vizcaya, Nuevo Mégíco, Islas Filipinas muchas necesidades. Mandamos a nuestro go
y otras partes , con tanta costa de nuestra real bernador y capitán general, que cuando en
hacienda, luego que llegan al Peni ó Nueva viare por el situado del presidio, no impid
España se quedan en las ciudades y lugares que un religioso de los que allí asistieren, vay
grandes, y no pasan á los de su consignación, con la persona que nombrare para este efecto,
con mucho dispendio de nuestra real hacienda á comprar los bastimentos y vestuario que e
y en fraude del fin para que son enviados, y religioso y sus compañeros hubieren menester,
conviene que lo proveído en esta razón se guar y para ello ordene se (es de en Mégico el dine
de precisa y puntualmente. Mandamos á todos ro que a el y a todos los otros tocare . y lo que
nuestros jueces y justicias reales, que tengan comprare el religioso se lleve por cuenta á par
muy especial cuidado de hacer que ios religio te al dicho presidio, embarcado con lo demas,
sos pasen donde fueren consignados, advirtien y los oficiales de nuestra real hacienda, le lla
do á los prelados que si los dichos religiosos se gan bueno el sueldo, que tuviere por todo el
quedaren en diferentes partes, y en esto pro tiempo del viaje . sin baja ni descuento. ( 4)
cedieren con relajación y resistencia á nuestras
reales órdenes, los harán embarcar y volver á LEY X X III.
estos reinos.
I). Felipe II en Madrid á 24 de marzo de. 1572.
LEY XX. Que no se impida d los religiosos de la- compañía de
Jesús el ser mudados de unas provincias y colegios
I). Felipe III en Madrid á 8 de junio de 1617. d otros.
aunque los religiosos quieran enterar en las ca
jas la costa del viaje, vayan donde fu e re n enviados. Mandamos à los vireyes, presidentes, au
diencias y gobernadores, que cuando algunos
Los vlreyes, audiencias y gobernadores de religiosos de !a Compañía de Jesús que hubie
las Indias por ningún caso consientan, ni dén ren pasado de estos reinos con licencia nuestra,
lugar à que los religiosos destinados para algu fueren mudados de unas provincias ó colegios á
na provincia, y que á nuestras es pe usas hayan .otros, los dejen y consientan hacer su viaje sin.
pasado.de España, vayan ni pasen à otras, aun ponerles impedimento y llevando licencia de
que vuelvan á nuestras cajas reales ia costa de sus superiores, se les dé el favor y ayuda de
su aviamiento, y sin embargo egeouten lo que que tuvieren necesidad : y en cuanto á los doc
está ordenado por las leyes de este titulo. Y ro trineros se guarde y egecute lo proveído por esta
gamos y encargamos á ios prelados de las reli razón. ( 5)
giones, que de su parte hagan las diligencias
que convengan en orden à la egeeucioi» de lo LEY XXIV. . -
sobredicho, asistiendo y ayudando con el celo D. Felipe IV en Madrid á 50 de noviembre da 1630.
y cuidado que de ellos fiamos.
Que no se consienta estar , ni fundar en las Judias
d los religiosos del Beato Juan de Dios, que hubieren
/ L E Y XXL pasado sin. licencia , y d los que la tuvieren para pa
El emperador don Carlos y el consejo en carta de sar no se les encarguen los hospitales sino se obli
Valladolid a 19 de agosto de 1555. D. F elip e.II en garen. conforme d esta ley .
Madrid á 19 de mayo de 1598. . . . , Los vireyes, presidentes y oidores de las
Que d ningún religioso se consienta pasar d las L i audiencias reales no consientan estar ni residir
dias parientes, ni parientas. en las Indias à ninguno de los religiosos de san
Mandamos á nuestros presidente y jueces Juan de Dios que hubiere pasado sin licencia
oficiales de la casa de contratación, que á nin nuestra, ni que funden conventos, ni dén há
gún religioso consientan llevar á las Indias en bitos, ni profesión á ningunas personas, y á los
su compañía, ni en lugar*'de criados, á sus que estuvieren en las provincias de sus distri
hermanos, primos ni parientes, y estén adver tos, ó de nuevo, fueren á ellas con licencia nues
tidos de no dejarles pasar hermanas , primas, tra, no se Ies encarguen los hospitales, asi de
sobrinas ni otras deudas, aunque las lleven indios, como de españoles, ni la administración
para casarlas en aquellas provincias, por lo que de las rentas y limosnas de ellos, si no fuere
conviene que las personas religiosas vayan li obligándose primero á que darán cuenta, y se
bres de estos embarazos.
(4) Todas las prerogativas y ventajas concedidas
.. LEY X X II. à los misioneros de San Francisco se lian comunica
do á ios de Santo Domingo que se empleen en las
R. Felipe IV en Madrid á' 4 de diciembre de 1650., misiones de América , y ademas se les han dispen
sado las que contiene el Breve deí Papa Pio V I
Que un religioso de San Francisco pueda ir d Meji- de 8 de julio de 94, de que hace relación la cédula
co y traer ti ia Florida- con el situatlo lo que tocare de 4 de mayo de 95.
d su. orden. (.5) Esta religión se cstraño de todos los dominios
del rey, por real decreto de 27 de febrero de 1767.
Porque los religiosos de la orden de san Clemente X IV por su Breve de 2.1 de julio de 1773
Francisco, que están ocupados por disposición estinguló esta religión e» todo el mundo. En Roma
nuestra en la conversión y educación de los se hizo la secularización de personas y ocupación de
indios de la Florida, solo tienen para su sus bienes la noche del 16 de agosto del mismo año. El
Breve apostólico se dirigió y mandó cumplir en
tento eí estipendio señalado por Nos, sin re América por cédula de 12 de octubre de 17/5.
De los religiosos. 75
dejarán visitar en lo tocante á esto por las jus escándalo y no conforme á su instituto, hábi-
ticias eclesiásticas ó seculares que lo pudieren 6 to y profesión, y otros espulsos de sus religio
debieren hacer, sin que se puedan eximir por nes que los provinciales no puedan echar de
razón de decir que tienen bula de la sede apos aquella provincia, por la dificultad de embar
tólica para ser religiosos, y que estan ordena carlos á Mágico, acuda al remedio de esto,
dos de orden sacro, y por esta causa solo han siendo necesario y como mas convenga al ser*
de estar subordinados á su prelado regular, ni vicio de Dios nuestro S eñ o r, de manera que
por otra ninguna escusa de que. se puedan no queden semejantes religiosos* en aquellas
valer. ( 6) partes. (7)
LEY X X V . LEY X X IX .
D. Felipe 11 en Mon zon á 5 de setiembre de 1585. D. Felipe II en San Lorenzo á 9 de agosto de 4589.
D. Felipe í l í en Madrid á 4 de junio de 1620.
Que tí los religiosos que quisieren ir d Filipinas no
se les impida el a¿age. Que sin mucha consideración y causa razonable no
se de licencia d ningún religioso para salir de Fili
Encargamos á los provinciales, priores, pinas,
guardianes y otros superiores de las religione8 Considerando lo que se gasta de nuestra
cíe estos nuestros reinos, y de los de Nueva Es real hacienda en el pasage de los religiosos á
paña, que no detengan ni impidan el viaje a las islas Filipinas, y la falta que hacen los que
los religiosos que con licencia nuestra quisieren •se vienen, y el lugar que ocupan en los navios,
ir en compañía de '¡sus comisarios á la conver y que algunos persuaden á otros á que no pa
sión y doctrina de los naturales de las Islas F i sen á aquellas partes: mandarnos á nuestros go*
lipinas, antes les den el favor y ayuda que bernadores de las dichas islas que cuando Hu
convenga. bieren de salir de ellas algunos religiosos para
LEY X X V I. estos reinos ó para otras partes, se junten con
el arzobispo, y habiéndolo conferido, no les
D. Felipe III en Madrid á 18 de setiembre de 1609 den licencia para salir de las islas sin mucha
Que los religiosos, quefu eren d Filipinas sean favo consideración y muy razonable causa.
recidas, bien despachados, y sin derechos.
Nuestros vireyes de la Nueva España favo LEY X X X .
rezcan k los religiosos que por nuestra orden y D. Felipe II en Barcelona á 8 de junio de 1585. Y
cuenta pasaren á las Islas Filipinas, y los ofi en Toledo á 25 de mayo de. 1596. Y don Felipe IV
en esta Recopilación.
ciales de nuestra real hacienda y otros cuaies-
quier ministros nuestros les den breve despa Que ¡w pasen de Filipinas d la China religiosos doc
cho y hagan buen tratamiento, y no les lleven trineros , ni los tfue han ido d costa de el lley sin li
derechos por sus personas, libros y libranzas cencia del gobernador y arzobispo.
que se Ies dieren para cobrar la costa del viaje. Porque algunos religiosos de los que asis
ten en las islas Filipinas suelen pasar á la Chi
L E Y X X V II. na sin la orden que conviene, dejando las doc
D, Felipe II en Araujuez á 27 de abril de 1594. Don trinas que tienen á su cargo, de que se siguen
Felipe J.LI en S. Lorenzo á 17 de setiembre de 1611. muchos inconvenientes y daños por la falta que
Que los religiosos enviados d Filipinas , no se queden hacen á lo comenzado y asentado en la ense
en otras partes- ñanza y educación de los indios, encargamosà
los prelados regulares de las Islas Filipinas, que
Mandamos á nuestros vireyes y gobernado no den lugar á que ninguno de los religiosos
res de la Nueva-España , y encargamos á los de sus órdenes vaya á la China ni desampare
prelados de las religiones, á cada uno por lo la doctrina que tuviere á cargo sin licencia
que le toca, que procuren con toda diligencia particular y orden del gobernador y arzobis
y especial cuidado , que los religiosos enviados po, con es presa mención de que no es contra
á las islas Filipinas pasen sin detenerse y no los esta le y , teniendo en ello mucha cuenta y vi
consieutan en otras provincias ni admitan algu gilancia. Otrosí, mandamos que los religiosos
na escusa.
que van à nuestra costa à las dichas islas desti
L E Y X X V III. nados á estar en ellas de asiento, no pasen ni
les consientan pasar á la Tierra Firme de la
Don Felipe III en San Lorenzo á 17 de setiembre China y á otras partes sin licencia de los go
de 1616.
bernadores y arzobispos, pues los enviamos pa
Que no se consientan en las Filipinas religiosos es ra cumplir nuestra obligación de dar doctrina
candalosos. á nuestros vasallos, y ningún español secular
Ordenamos á nuestro gobernador y capitán les pueda dar fragata ni matalotage sin parti
general de las islas Filipinas que habiendo en cular orden nuestra ó licencia de los goberna-
ellas algunos religiosos que vivan con mucho6
(7) Por real cédula de Madrid de 28 de marzo
(6) Esta ley se manda observar por medio de es de 1769 se estendió esta ley á toda la América por
critura solemne de los Betlemitas de Córdoba del identidad de rnzon, y que no se permita á los pre
Tucum an, por real cédula de Aranjuez de 17 de lados espeler súbditos, sin justa causa, y que los
abril de 1774. asi espulsos se envien á España.
76 Libro ï . t ítu lo xiv.
dores y arzobisqos, no obstante c[ue se valgan LEY X X X III.
de algunos privilegios.
D. Felipe IV en Madrid á 22 de febrero de 16o2.
(87 Fuera dei Breve de Clemente IX á que es Que d los religiosos no se impida predicar en pue
relativa esta ley , se prohibió toda negociación de se blos de indios.
mejante clase por Pio IV y Urbano VIH ; y lo con Ordenamos y mandamos que ningunas per
firmó Benedicto X IV en su consti lucio a Apostólica}
servitutis, y por su sucesor Clemente XIII en su sonas, y especialmente las que tuvieren indios
epístola ad patriarcas de 17 de setiembre de 1759,
que confirma las constituciones promulgadas contra (9) A este fin se estableció en Chile una junta
eclesiásticos negociantes, y principalmente las cita que llamaron de misioneros por cédula de l i de
das de Pio IV y Urbano VIH. mayo de 1697 , en que se mandan muchas cosas con
TOMO I. ao
78 Libro i* Título xiv.
en encomienda, ni sus criados , no sean osados
a impedir á los religiosos que tuvieren licencia LEY X L II.
de los prelados , predicar y enseñar libremente D. Felipe IV en Madrid á 17 de agosto de 1636.
la doctrina cristiana y misterios de nuestra san
Que los vireyes y presidentes in formen *ada tres
ta fé católica á los indios, y estar en ios pueblos años sobre el estado de las religiones, para dar li
todo el tiempo que quisieren y por bien tuvie cencia d los visitadores.
ren, conforme à fo proveído por la ley 2 tít. 13
de este libro, pena de que por el misino caso Por los grandes inconvenientes que se si
hayan perdido y pierdan cualesquier indios que guen de que pasen á las Indias visitadores ó vi
carios generales que visiten las religiones sin
tuvieren encomendados, y mas la mitad de sus
necesidad precisa: Mandamos á nuestros vire-
bienes para nuestra camara y fisco, y que nues
yes, presidentes y gobernadores, que cada tres
tras justicias tengan cuidado de favorecer y
años nos informen muy particularmente del es
ayudar á los religiosos y ejecutar las penas. tado de las religiones, sus distritos y necesidad
de ser visitados, porque cuando sus generales
LEY XL. pidieren licencia para enviar vicarios ó visita
dores, Nos proveamos lo que convenga.
D Felipe II en la ordenanza 14 de el Patronazgo.
Que\ningitn prelado regular pase alas Indias sin. L E Y X L IIL
presentar sus patentes en el cotisefo.
D. Felipe II en Aranjuez á 10 de enero de 1561.
Las órdenes y religiones guarden y conser Que se dé el auxilio d los prelados y visitadores que
ven el derecho de nuestro patronazgo r e a l, y fueren d reformar sus religiones.
ningún general, comisario general, visitador, Mandamos à los vireyes, presidentes y oi
provincial ni otro prelado de orden ó religión, dores de las audiencias reales, y otras cuales-
pase á las provincias de Indias sin presentar quier nuestras justicias de las Indias, islas y
número en nuestro consejo las facultades que
Íleva *, y habiéndosenos dado relación de eifas,
Tierra-Firm e, que siéndoles pedido por parte
de cualquier visitador ó provincial de alguna
se le conceda permisión, y despache cédula pa orden , favor y ayuda para reformar , visitar ó
ra poder pasar, y los vireyes, audiencias y jus enviar á estos reinos los religiosos que por bien
ticias, y los otros nuestros vasallos le admitan tuviere, se le den y hagan d ar, tanto cuanto
y reciban al ejercicio de su oficio, y den todo hubiere lugar de derecho, pena de lá nuestra
favor y ayuda. merced , y de cien mil maravedís para nuestra
cámara á cada uno que lo contrario hiciere. ( 11)
LEY X LÏ.
D. Felipe IY en Zaragoza á 31 de agosto de 1644. LEY X L IV .
D. Felipe’l l l en Lerma á 24 de abril de 1610.
Q«e los comisarios generales , ni otros religiosos, no
ejecuten breves sin estar pasados por el consejo; y lo Que los visitadores de las religiones sean instruidos
mismo se guarde con el oficio de comisario general de lo que conviene, y no resulte escándalo ni daño d
de San Francisco. los indios,
“ Mandamos á los vireyes, audiencias, gober Conviene que los vicarios ó comisarios ge
nadores, corregidores, alcaldes mayores y ordi nerales y visitadores de las religiones dispon
narios, y encargamos à los arzobispos y obispos gan los medios para mejor conseguir el lia á
que provean lo que convenga, sobre que los co que se ordenan. Y mandamos á los vireyes, pre
misarios generales que pasaren á aquellas pro sidentes , audiencias y gobernadores que llegan
vincias, y otros prelados y religiosos no pongan do los religiosos visitadores á sus distritos les
en ejecución bajo ningún pretesto cosa alguna adviertan el estado en que se hallan sus religio
que por breves de su Santidad ú otros despa nes , y sobre cuáles materias conviene que ha
chos se ordenare y dispusiere , sino constare ya reformación, porque sin tocar ni alterar lo
estar pasado por nuestro consejo de Indias. lo que estuviere bien, se trate solamente de lo
Otrosí, en lo que toca al oficio de comisario que convenga ai buen gobierno, perfección de
general de Indias de la orden de san Francis vida de los religiosos y guarda de sus reglas é
co, que reside en nuestra corte , no ejecuten
ningún despacho sin esta calidad. ( 10) (11) Sin que baya recurso de las audiencias en
las causas que nacieren de visita ó de disposición del
Santo Concilio de Trento por cédula de Madrid á
cernientes á este importante objeto ; y se reencar 21 de junio de l6 9 i. Peco véase la nota de la ley 67
gó en cédula de 26 de lebrero de 1704 , fol. 93 y 96, de este titulo. Sin embargo el virey del Perú don
tit, 2. Manuel A tnat, constólo si en las causas de los visi
tadores, reformadores, se admitiría el recurso , por
Los gastos en estas misiones se han de hacer del que este acaso retardaria la reforma; y por real cé
ramo de vacantes, según el art. 201 de la nueva or dula de Aranjuez de 6 de mayo de 1774 se le res
denanza de intendentes de N. E. y la Novísima R pondió: « íle resuelto que pascis como o s lo mando,
cédula de 15 de febrero de 1791. «todos los recursos de fuerza á mi real audiencia
Por cédula de 2L de marzo de 787 se ha manda » para que determine lo que con arreglo á las leyes
do que de dos en dos ó en tres años , se dé cuenla «corresponde « D. Manuel de Guerzar sucesor del
por los gobernadores y provinciales del adelanta anterior, representó el daño que causaban á la re-
miento espiritual de estas misiones. fon na estos recursos: y eu cédula de 15 de setiem
(1 0 ) Y c a n s e las le y e s 51 y 76 d e c-ste títu lo . bre Je 76 se le dijo que se tomaria providencia.
De los religiosos. 79
institutos, sin dar lugar á alteraciones ni es según y de la forma que lo hacían antes del
cándalos , y á que por ninguu caso se sigan eos- santo Coucilio de Trento. (13)
¿ítos, daños ni vejacionos à los indios, y de lo
que ejecutaren nos den aviso. L E Y X L V III.
LEY X LV . D. Felipe II en S. Lorenzo á 18 de junio de 1577.
A llí á 2 de junio de 1584. En el Pardo á 9 de noviem
bre de 1591.
D. F elipe IY en Aranjuez á 9 de mayo de 1622.
Que no se nombren vicarios generales de la religión Que se guarde el breve para que los comisarios ge
de la Merced, sino visitadores, para las Indias, por nerales de San Francisco, que pasaren d las Indias,
tiempo limitado y dando cuenta al Consejo, no sean removidos hasta que lleguen los sucesores.
Porque se siguen grandes inconvenientes- La santidad del papa san Pio V , y del pa
de haberse enviado muy de ordinario vicarios pa Gregorio X IV , de felice recordación, die
de la orden de nuestra señora de la Merced á ron sus breves, por los cuales mandaron que
las provincias de las Indias , y conviene pro los comisarios generales de la orden de san
veer de remedio : rogamos y encargamos à Francisco que pasasen á nuestras Indias no
los generales, provinciales, definidores, co fuesen removidos de sus oficios , aunque se tu
mendadores y procuradores de los capítulos viese capítulo general de la dicha o rd en , y
generales de la dicha orden, que no nombren los continuasen su ejercicio hasta que llegasen los
vicarios generales que han acostumbrado para proveídos en su lugar por'el general ó quien
aquellos reinos , y dispongan que estos nom tuviese su comisión para los proveer.* Manda
bramientos cesen, y en su lugar se envien visi mos à nuestros vireyes y audiencias de las In
tadores de las partes y religión que se requiere dias que provean y den orden como los dichos
por tiempo limitado , á los tiempos , ocasiones breves sean guardados, y que contra lo en
y provincias que pareciereu necesarios, dando ellos coutenido no se vaya, ni pase en ninguna
primero noticia á nuestro consejo de las ludias forma.
de la persona que se nombrare por visitador, LEY X L IX .
y la causa y razón que hay para ello , y que
este nombramiento le haga el general que fue D. Felipe IY en Madrid á 3 de abril de 1627.
re de la religión. ( 1*2) Que se guarde el breve que revoca algunos privile
gios de religiosos♦
LEY L X V I. Habiendo entendido que las religiones des
D. Felipe III en Madrid á 19 de diciembre de 1620* caecían de la observancia religiosa , y se iban
• D. Felipe IV en el Pardo á 18 de enero de 1622. En relajando, y que esto nacia de la diversidad de
Madrid á 23 de febrero. Y en esta Recopilación.
privilegios y exencioues con que los religio
Que los visitadores de la. orden de la Merced no se sos en muchos casos se eximían de la vida co
vengan sin dar residencia. mún , defendiéndose contra la obediencia y
Encargamos á los prelados,. capítulos y re sujeción debida á sus prelados, y que era causa
ligiosos de la orden de nuestra Señora ele la dé embarazarles é impedirles el gobierno, de
Merced, que guarden inviolablemente sus cons seando el remedio suplicamos á su Santidad
tituciones en cuanto por ella se dispone ; que mandase revocar generalmente estos privile
los visitadores desús provincias y conventos no gios y exenciones para dar vigor á los institutos
sje vengan de las Indias , sin dar sus residencias comunes y su observancia , y al gobierno de
aunque hayan cumplido el tiempo de su pro los superiores , y su Beatitud fue servido con
visión. cederlo asi : Por tanto encargamos á los pro
vinciales de las religiones de las provincias de
LEY X L V II. nuestras Indias que poniendo en ejecución lo
resuelto hayan desde luego por revocados los
D. Felipe II en Galapagar á 15 de enero de 1568.
dichos privilegios, y libres de ellos gobiernen
Que se publique el breve pura que los religiosos men sus súbditos por las leyes comunes de sus reli
dicantes puedan administrar los Santos Sacramen giones, atendiendo á que habiéndose quitado
tos d los indios. el impedimento que padecía el gobierno si hu
Los vireyes, presidentes y oidores, y otros biere de aquí adelante desórdenes, se atribui
cualesquier justicias de las indias hagan publi rán á la negligencia de los que gobernaren-, y
car el breve concedido por nuestro muy santo si para la ejecución del dicho breve ocurriere
padre san Pio V en veinte y cuatro de marzo alguna conlradicion , ó para el fin que se lia
de mil y quinientos-y sesenta y siete á nuestra pretendido, fuere eu alguna cosa necesario
suplicación , para que los religiosos de las ór nuestro patrocinio y favor, acudirán á los vi-
denes mendicantes puedan administrar los san reyes ó presidentes , á los cuales mandamos se
tos sacramentos en todos los pueblos de indios, les den tan prontamente como fuere m e
nester. (14)
LE Y L X V IÏI. LEY LX X L
D. Felipe II en la Instrucción de vireyes, cap. 11* D. Felipe II en N. S. de la Esperanza á 3 de febrero
Vease ía ley 5 0 , tit. 3 , lib. 5. . r de 1574,
Que los vireyes y audiencias procuren ajustan las Que sean enviados d estos reinos los religiosos (fttt¡
discordias de los religiosos. sus prelados entregaren por excesos.
Por haberse entendido en nuestro real con Deseamos que los religiosos virtuosos y ajus
sejo que entre los religiosos de las órdenes que tados sean favorecidos y respetados , y los que
van de estos reinos , y los naturales de 'las ín- dieren mal ejemplo de sus personas castigados
mdias hay discordias, de que se siguen m u con mucho rigor. Y mandamos á los vireyes,
chos daños é inconvenientes, y conviene que audiencias y gobernadores, que á los religiosos
vivan en paz y conformidad religiosa: Manda que los provinciales ó capítulos provinciales de
mos á los vireyes y audiencias gobernando, que las Judias les entregaren por escesos , para que
sean traídos à estos reinos de Castilla, los ha
tengan mucho cuidado de informarnos, parti
gan enviar en los primeros navios à todo buen,
cularmente de el estado en que estuviere esta recaudo, de modo que en ninguna manera se
materia en cada una 1*de las órdenes 5 y si ha queden en aquellas partes.
llaren que estas diferencias u otras semejantes
tienen necesidad de remedio pronto, lo traten LEY L X X IL
con sus prelados y superiores , y procuren con
cordarlos, dándoles a entender los inconvenien D. Felipe IV en Madrid á 6 de abril de 1629.
tes que se siguen á su gobierno, y á la admi Que las audiencias en la ejecución de las penas im
nistración de la doctrina cristiana , para cuyo puestas d los religiosos guarden el derecho, y santo
efecto pasaron y resideo en aquellas provincias, concilio de Trenio.
lodo lo cual harán con mucho recato y secreto, Habiendo sido informado que los prelados
valiéndose de las personas de mas virtud y con de las religiones en nuestras Indias pretenden
fianza para saber cómo se gobiernan las reli castigar algunos religiosos con penas de destier
giones en lo espiritual y temporal, y de todo ros ó galeras , y nuestros presidentes y audien
nos informarán con sus pareceres, para que se cias reales rehúsan ejecutar las sentencias sin
ver primero los procesos originales, y los mé
ritos de las causas; y porque de publicarse los
1 *7^ 0 Vdase sin em!)arS° la cédula de 16 de julio
V? cIue se pone como nota á la ley 136, tit. 15
libio 2. 5
(2 1 ) V e a s e la le y 75 d e e ste títu lo y lib ro .
84 Libro i. Titulo xiv.
delitos secretos de personas religiosas se siguen
gravísimos inconvenientes: Ordenamos y man L E Y L X X Y I.
damos que en la ejecución de las penas en que D. Felipe IV en Madrid à l.° de agosto de 1626, Y
condenaren los superiores á los religiosos de sus allí á 5 de abril de 1627.
órdenes, los presidentes y audiencias guarden
lo que está dispuesto por derecho común, ca Que los generales de las religiones no den magiste
rios supernumerarios.
nónico y santo concilio de Trento , sin esceder
ni contravenir , que asi conviene al servicio de De conceder los generales de las órdenes de
Dios y nuestro , y buen gobierno, de las reli san Agustin, santo Domingo y la Merced mas
giones. magisterios de los que están dispuestos y or-
denados'paracada provincia de sus religiones, se
LEY L X X Ü I. siguen muchos inconvenientes respecto de Ja
D. Felipe II en Madrid á 6 de junio de 1565. reserva que por esto tienen algunos religiosos
Que no se hagan informaciones contra religiosos, de asistir á las obligaciones del coro y otras, de
sino en casos de publicidad y escándalo. qne son exentos , por io cual les encargamos
que no den semejantes patentes, ni escedan
Mand amos á los presidentes , audiencias y del número á que estan reducidos los m aes
gobernadores y otras justicias de nuestras In tros, sin permitir mas de aquellos que debe
dias que no bagan informaciones públicas ni haber en cada provincia, ni dispensar en el nú
secretas contra ningún religioso ele los que en mero ni calidades. (23)
aquellas partes estuvieren , salvo cuando el ca
so fuere público y escandaloso, y solo para LEY LXXVIÏ.
efecto de informarnos , que entonces permiti
mos y tenemos por bien , que las puedan ha D. Felipe III en Madrid á 20 de marzo de 1620.
cer secretamente y requerir al provincial ó Q ue los ■generales de las religiones escusen el dar
prelado en cuya provincia estuviere el religio magisterios para Filipinas.
so , que le castigue conforme al esceso que bu
biere cometido, y no lo haciendo de forma que Encargamos á ios generales de las religiones
satisfaga al escándalo y esceso, envíen á nues que con nuestra licencia habitan en las islas F i
tro consejo de Indias la información que lipinas, que esensen dar magisterios en ellas,
hubieren hecho, para que provea lo que con pues estos grados son superfluos , y sin. precisa
venga y sea justicia. (22) necesidad de concederlos, y solo se debe tra
tar, en partes tan nuevas y remotas, de la con
LEY L X X ÍV . versión de los naturales à nuestra santa fé cató
lica.
D. Felipe IV en S. Lorenzo à postrero de octubre de
1624.
LEY LXXVfilí. ‘
Quedos arzobispos y obispos procuren evitar los es-
cesas de los religiosos conforme d lo dispuesto por el D. Felipe l l í en Madrid á 24 de marzo de 4621. Don
santo concilio de Trento. Felipe IV á 8 de diciembre de 1650. Y á 26 de agos
to de 4656.
Rogamos y encargamos á los arzobispos y
obispos qne esten muy atentos á las abligacio Que en los conventos no haya pila de bautismo, ni
los prelados bauticen, ni casen.
nes de su oficio., para que si los superiores
de las religiones , habiendo sido amonestados En algunos conventos de religiosos de nues
de delitos y eseesos de sus religiosos no los cas tras Indias, á título de costumbre, lian usado
tigaren, usen en tal caso de la jurisdicción que casar y bautizar indios forasteros y naturales,
por derecho y santo Concilio de Trento les como si fueran curas propios, no lo pudiendo
com pete, con la prudencia que en tales casos ni debiendo hacer í Rogamos y encargamos á
se requiere. los arzobispos y obispos que no consientan que
en los conventos de sus diócesis baya pilas de
bautismo, nisus religiosos bauticen, ni casen,
D. Felipe II en el Escorial á 29 de junio de 1568* ni bagan en ellos oficios de párrocos, y que to
Que los provisores no conozcan contra los religiosos dos los indios naturales y forasteros acudan à
de mas casos de los que el derecho permite. los dichos prelados como á padres y pastores su
yos, y á los curas legítimos en iodo io que se
Mandamos á nuestras audiencias que procu
les ofreciere.
ren que los provisores de los prelados cíe sus
distritos no se entrometan á proceder contra
ningún comisario, prelado regular, ni religio (25) Corrobora á esta ley la cédula de Madrid
so de ninguna orden, sino en los casos y sobre de 4 de diciembre de 1/U8.
aquellas cosas que según derecho pudieren y En consideración sí esta ley y á la de no estar pa
sados por el Consejo varios títulos de maestros y pre
debieren conocer, con apercibimiento que si sentados que obtuvieron del Papa y de su general
así no lo hicieren mandaremos proveer lo que varios frailes de ¡a Merced de Lima se mandaron re
convenga y sea justicia. coger por cédula de i.° de mayo de 1762, precisán
doseles a que manifiesten los breves pontificios y pa
tentes de sus generales; y de sus resultas se adoptó
(22) Véanse las leyes 7, tit. 8 , hb. 7, la 11 y 27, la providencia ue pasar billetes con lista de los suge-
iit. 14, lib. 5 , la 49, tit. 5 del mismo libro 5 , y la 7, tos al vicario general, el que los convocó á capítulo,
til. 8,9 lib. l . ° de la Novísima Recopilación. y recogió y remitió al virey los breves y patentes.
De los religiosos 8-5
LEY L X X IX . i’a su abasto, porque lo contrario seria grave
indecencia de las religiones, y mucho daño y
D. Felipe IV en Madrid á 17 de julio de 1631. perjuicio de la república.
Que los religiosos prediquen sin estipendio en las
iglesias catedrales los sermones ele tabla. LEY LXXXIII.
Encargamos á los prelados de las religiones El emperador don Carlos y el cardenal gobernador
que hagan que los religiosos de sus órdenes pre en Fuensalida á 28 de octubre de 4541. D. Felipe III
diquen sin estipendio en las iglesias metropoli en Madrid á 8 cíe junio de 1617. Y en Madrid á 10 de
octubre de 1618.
tanas y catedrales los domingos de la septuagé
sima, domingos, miércoles y viernes de cuares Que los religiosos vagabundos sean reelucidos á sus
ma , y los demas dias de tabla; y para que esto monasterios.
sea con mas comodidad, repartan el trabajo Mandamos á los vireyes y justicias, y encar
entre todas las religiones con que será mas to gamos á los prelados regulares, que teniendo
lerable, y Dios nuestro Señor servido. noticia de que algunos religiosos estan fuera de
sus monasterios, ó vagabundos de una provin
cia ó población à otra , los hagan reducir á sus
h . Felipe IV en Zaragoza á 14 de octubre de 1646. monasterios, habiéndolos de sus órdenes, y si
no los hubiere y anduvieren discolosy sin nues
Que no se permita ci los religiosos solicitar negocios tra licencia y de sus prelados , [los hagan salir
seculares.
-de aquellas provincias, para que reducidos á la
Mand amos á los vireyes, presidentes, au clausura vivan cotí el ejemplo que conviene.(25)
diencias y gobernadores, que á ningún religioso
permitan en sus tribunales solicitar negocios se LEY LXXXIV.
culares, ui les den audiencia, ni oigan sobre
El emperador don Carlos en Barcelona á l.° de ma-
ellos , sino fuere en los casos que la caridad cris 3"° de lo 43. 0. 1'elipc H en San Lorenzo á 15 de
tiana y prudente permite para socorrer á po abril (le 1588. \ en Aranjuez á 26 de octubre de
bres faltos de personas que Ies ayuden , y esto 1560.
con aprobación y licencia del superior. Y en Que los religiosos que anduvieren fuera de la obe
cargamos á los provinciales de las religiones que diencia de sus prelados, y los que hubieren dejado el
den las órdenes convenientes para la ejecución habito de sus religiones, y puéslose el de clérigos
de esta resolución, sin embargo de cualesquier sean echados de las Indias . ° *
órdenes y decretos que Nos hubiéremos man Ordenamos y mandamos à nuestros vireyes
dado dar en contrario antes de ahora. (24) yaudiencias reales de las Indias, que tengan mu.
cho cuidado de informarse y saber qué religio
sos de las ordenes que no tienen conventos en
D. Felipe H en San Lorenzo á 18 de junio de 1594. las Indias, residen en ellas fuera de la obedien
cia de sus prelados, y asimismo q.ué clérigos
Que los religiosos no se sirvan de los indios, y en
casos muy necesarios, sea pagándoles. hay que habiendo sido religiosos hubieren de
jado en aquellas provincias los hábitos de sus
Los vireyes, audiencias y gobernadores den religiones; y averiguada la verdad, á ]0s que
orden que los religiosos no se sirvan de indios asi se hallaren, hagan embarcar y venir á estos
sino fuere en casos y cosas muy necesarias, y en remos en la primera ocasión que se ofrezca, sin
tonces pagándolesUo que merecieren, y el go dar lugar a que en iiinguna forma queden en
bierno luí hiere tasado por sus jornales. Y en aquellas partes, ni se les admita escusa por nin
cargamos á los prelados de las religiones y á sus guna razón, favor y negociación. Y mandamos
súbditos el cumplimiento de esta ley , pues so a nuestros fiscales que con el mismo cuidado
lamente toca á los religiosos la doctrina y alivio soliciten el cumplimiento de esta lev en sus dis
de los naturales. tritos. (26)
Nuestras audiencias reales provean lo con Que sean enviados á estos reinos los reliaiosos aue
no tuvieren conventos y vagaren en ¿as Judias r
veniente sobre que las religiones no tengan los arzobispos y obispos intervengan en la ejecución.
tiendas ni pulperías, «í atraviésenlas reses que
van á las provincias, ciudades y poblaciones pa- Han resultado gravísimos inconvenientes de que
en las provincias de nuestras Indias residan al-
(21) Por real orden de 25 de noviembre de 1764
se manda, que á ningún eclesiástico secular ó regu (2,5) Sobre esta ley y siguientes debe tenerse pi
lar se baga agente, procurador ó administrador, ni sente la instrucción que sobre esto contiene h, céfíe
que ninguno entienda en cobranzas á no ser de igle In^v- 16 dCí °Clíl.tbre de b 6 9 , en que so anuncié
sias suyas, ó de sus beneficios, ó desús monasterios, los vireyes la reforma que se enviaba, v que no lu
m ha tenido efecto hasta ahora. " 1
debiendo para ser oidos en este caso, exhibir ante
todo la licencia de sus prelados. (26) Lo dispuesto en esta ley se entiende respe
_Véanse las leyes 1 y 2, tit. 27, Iib. l.° de la No to de los religiosos que han ido de España, y no ,
vísima Recopilación, y la última de éste. los naturales de la América, según io previene h e
dula de 2ü do marzo de 1696.
TOMO I.
86 Libro i. Título xiv.
ganos religiosos Je estos reinos fuera Je sus otras religiones que no consientan estar ni resi
conventos, contra io dispuesto y establecido por dir en aquellas provincias ni parte alguna à
la santa Sede apostólica, reglas y constituciones ningunos religiosos exentos, aunque tengan
de sus religiones, sobre que se lian despachado exención , sin espresa licencia nuestra y obe
muchas cédulas de los señores emperador, y diencia de sus prelados, y los apremien en la
reyes, nuestro padre, abuelo y vísabuelo, y se misma forma á que salgan de las Indias. Y man
contiene en las leyes antecedentes: Ordenamos damos á los vireyes, audiencias y justicias que
y mandamos á nuestros víreyes, presidentes y asistan á la ejecución de lo susodicho, y den to
audiencias reales, que tengan muy especial cui do el favor y ayuda que convenga.
dado de informarse qué religiosos residen en
las dichas provincias cuyas religiones no tie LEY LXXXVII.
nen conventos fundados, y á los que así halla
ren, pidan los despachos y licencias nuestras y D. Felipe III en Valladolid á 15 de junto de 1615«
de sus superiores; y si vistas y examinadas les Y don Felipe IV en esta Recopilación.
constare ser ciertas, verdaderas y sin sospecha, Que no se impida el tomar el hábito ele la tercera
se las vuelvan y hagan notificar que dentro de orden de San Francisco .
un breve término vengan á estos reinos á resi-> Encargamos y mandamos á los vireyes, au
dir en sus órdenes y conventos , y provean so diencias y gobernadores, que à ninguna perso
bre esto lo que les pareciere mas conveniente, na impidan tomar el hábito de la tercera orden
y procedan à su ejecución con toda celeridad y de san Francisco que traen los seglares por de
cuidado, valiéndose de los ordinarias eclesiásti voción , antes para la buena y mejor ejecución
cos en todo lo que á ellos tocare , conforme al de su intento les den la ayuda y favor que fue
santo concilio de Trento; y si conviniere les im re menester, que de ello nos tendremos por
partan el auxilio necesario, y lo mismo se servido, no ofreciéndose inconveniente; y si le
guarde, cumpla y ejecute eon los religiosos que hubiere, nos le avisen para que le tengamos en
aunque tengan conventos de sus religiones en tendido, y se provea y mande lo que conven
aquellas provincias no han pasado con licencias ga, y por ahora, en cuanto á los dichos terce *
nuestras y de sus superiores, ó habiendo pasa ros, guarden lo que por leyes de estos reinos
do con ellas por tiempo limitado se hubiere está dispuesto.
cumplido ; y en lo que toca á los religiosos, cu
yas licencias y despachos fueren falsos ó sospe LEY LXXXVIIL
chosos se los quiten y envíen á nuestro consejo
de Indias, y á ellos los embarquen para estos D. Felipe II en San Lorenzo á 31 de marzo de 1583*
reinos, sin admitir réplica, escusa ni dilación Que caela seis años pueda venir un difinidor ele San
alguna. Todo lo cual se ejecute tan precisa y j i gustin del P erú , en laform a que se declara.
puntualmente , que no baste notificarlo á los
religiosos, antes provean y den órdenes tan efi Los generales de la orden de san Agustín,
caces y precisas, que por ningún caso se pue en virtud de santa obediencia, tienen ordenado
dan quedar ni torcer camino, y de todo nos que cada seis años vengan de las provincias del
den cuenta en carta particular, con testimonio Perú á estos reinos un difinidor de su orden
auténtico en cada uno, de los accidentes espe para hallarse en el capítulo general que se ce
ciales que se ofrecieren. Y rogamos y encarga lebra en Roma: Mandamos à los vireyes del
mos á los arzobispos y obispos, que participán P erú , que mostrándoseles recaudos por donde
dolo primero con los vireyes, presidentes y au les conste que su orden y estatutos obligan á
diencias reales, provean lo conveniente para que los religiosos á lo sobredicho, no les impidan
por todos y à un mismo (iempo se hagan tales su venida, sin embargo de lo que en contrario
diligencias, que tenga efecto io contenido en tenemos proveido y ordenado por la ley 90 y
esta nuestra ley. otras de este título, sobre que no vengan reli
giosos de nuestras Indias, y á los que vinieren
LEY LXXXVL á lo susodicho advertirán que vengan á nuestra
corte á dar cuenta en nuestro consejo de los ne
El el emperador don Carlos en Burgos á 17 de ju gocios de su cargo, y de lo que han de pedir
nio de 1j 21. D. Felipe i V"en HLidrid á 50 de setiem en los capítulos generales.
bre de 1655.
Que los religiosos claustrales, estraclaustrales, ter LEY LXXXIX.
ceras ele ¿>an Francisco y exentos, sean enviados d
estos reinos. . D. Felipe II en Aranjuez á 10 de setiembre de 1561.
Y D. Felipe IV’ en esta Recopilación.
Rogamos y encargarnos á los comisarios ge
Que los religiosos que vinieren d negocios de sus ór
nerales de la orden de sau Francisco que resi denes traigan instrucciones de lo que han ele peelir.
den en nuestras Indias, que si pasaren á ellas
algunos religiosos claustrales ó estraclaustrales,. Rogamos y encargamos á los provinciales de
ó religiosos terceros, ú otros cualesquiera de su las religiones de nuestras Indias que cuando al
instituto y religión, sin licencia nuestra y de sus gunos religiosos de sus órdenes vinieren á es
prelados, les obliguen con apremio à que sal tos reinos á algunos negocios, les den instruc
gan y se embarquen-para-estos reinos en la pri ciones firmadas de sus nombres, de lo que han
mera ocasión, sin admitir sobre esto escusa, ré de pedir y hacer, porque de otra forma no se
plica ni dilación alguna, y á los prelados de las rán oídos, ni* se les dará crédito á cosa alguna.
De los eligiosos. 87
donde vinieren , y lo mismo bagan los geneia-
LEY XC. j les, almirantes y demas ministros de la armada
D, Felipe 111 en Villacastin á 27 de febrero de 1610Í del mar del S u r; con apercibimiento de que
O. Felipe IV en Madrid á 2 de setiembre de 1621. de lo contrario nos tendremos por deservido, y
Que d ningún religioso que haya ido d cuenta del se les hará cargo en sus visitas ó residencias, y
Rey, se dé licencia para venir, sin causa muy justa¡ esto sea capitulo de instrucción de los genera
A ningún religioso que haya pasado á las les de galeones y flotas, como en sus títulos se
Indias por cuenta nuestra se dé licencia pa dispone, y orden para los cabos de navios suel
ra venir á estos reinos si no fuere con urgente tos para que no puedan pretender ignoranciaj
y particular causa, examinada por el presiden y en los puertos se tenga gran cuenta y adver
te y oidores de la audiencia del distrito en el tencia de no dejar venir à ningún religioso de
acuerdo, y e n este caso tendrán la mano todo otra forma ; y si alguno viniere y trajere oro Ó
Jo posible para no darla, sino fuere muy es- plata, nuestros gobernadores de los pu.ertos, al
traordinario, y en que la utilidad y necesidad caldes mayores y oficiales de la real hacienda
sea tan pública y necesaria qpe no se pueda secuestren y bagan secuestrar lo que asi traje
remediar sino mediante la ausencia de los tales ren, y en los primeros navios envien ante Nos
religiosos, por la falta que allá hacen, y el al consejo de Indias relación de lo que se hu
grande inconveniente que acá tiene su asis biere secuestrado, y de qué religión era, para
tencia, (27) que vista se provea lo que convenga , y hagan
volver al religioso á la parte de donde hubiere
LEY XCI. salido, y no den lugar á que se embarque ni
D. Feíi pe II y la princesa doña Juana gobernadora
venga à estos reinos en ninguna forma ni por
en Valladolid a 13 de febrero de 1558. En Madrid á ninguna via, pena de la nuestra merced, y de
21 de diciembre de 1597. D. Felipe 111 allí a 7 de cincuenta mil maravedís para nuestra cámara;
, margo de 1615. D. Felipe IV allí á 8 de junio de y á los cabos y maestres de los navios sueltos
1628, y á 26 de marzo de 1638 , y <í 26 de mayo, condenen en las penas que de nuestra parte les
3, 8, y 18 de setiembre de 1650. En Buen Retiro á
22 de mayo de 1651. Y. en esta Recopilación. Véase impusieren, con ejecución en sus personas y
la ley 72 , tit. 26, üb. 9. bienes, lo contrario haciendo, sin remisión ni
dispensación alguna. Y porque la Santidad de
Que ningún religioso pueda venir de las Indias sin
guardar laJornia de esta ley , y no traiga mas dine Pio IV, de buena memoria, por sus letras apos
ro del que hubiere mehester para el viaje, y lo ma tólicas dadas á instancia del señor rey don Fé-
nijaste, y la persona que lo recibiere en confianza, lipe II, nuestro abuelo, proveyd y ordenó que
lo pierda con el cuatro tanto. ninguno de los religiosos que viniesen de las In
Los vi reyes, presidentes, gobernadores y dias pudiese traer mas dinero del que tuviese
otras justicias de nuestras Indias no consientan necesidad para su viaje, y esto manifestándolo
ni den lugar que ningún religioso de las órde ante su superior, y son muchos los inconvenien
nes que en ellas hubieren fiindado y estuvie tes que se siguen de que los religiosos se em
ren , venga á estos reinos sino fuere con espre baracen en adquirir ni tener dineros, respecto
sa licencia de sus prelados que en aquellas pro de que es ocasión de distraimiento y relajación
vincias residen , trayéndola por escrito , firma en el cumplimiento riguroso de sus institutos,
da y sellada con el sello de la orden, y para y por otras causas especificadas en el breve de
darla el prelado haya de comunicar primero el su Santidad, à que no conviene dar lugar:
negocio á que el religioso viniere, con el vírey, Mandamos á los vireyes, audiencias y goberna
presidente ó gobernador de la provincia donde dores, y demas justicias de nuestras Indias, que
estuviere; y pareciéndole justo, y no de otra procuren la publicación, guarda y ejecución de
forma, el virey, presidente ó gobernador le de las dichas letras apostólicas en todas las ciuda
licencia y carta para el general de los galeones des, villas y lugares de sus distritos. (28)
ó flota en que hubiere de embarcarse, para que
le permíta la embarcación, y no trayendo esta LEY X C il.
carta no sea admitido á ella. Y es nuestra vo D. Felipe IV en Madrid á 18 de setiembre de 1650.
luntad que los dichos religiosos hayan de mani
festar y manifiesten el dinero que trajeren; y Que viniendo religiosos de las Indias se informe co
si alguna persona lo recibiere de ellos en con rno se ordena.
fianza, sea condenado en la cantidad con. el Mandamos á los vireyes, presidentes y oi
cuatro tanto. Y para que esto se cumpla y eje dores, gobernadores, corregidores y demas
cute con debido efecto, mandamos à los gene justicias de las Indias Occidentales, que con
rales, almirantes, capitanes de nuestras arma forme está dispuesto ordene» que los religiosos
das y flotas de la carrera de Indias, y otras per que vinieren de aquellos reinos para pasar á
sonas á cuyo cargo vinieren en cualquiera for Roma, ó à esta Corte, les informen primero, que
ma navios sueltos, que no traigan ni consien se les conceda la licencia, quién los envia, y á
tan traer ni embarcar en las armadas , flotas ó qué negocios vienen, y nuestros ministros nos
navios á ningnno de los dichos religiosos, .sino avisen muy individualmente , particularizando
Ies constare que traen licencias de los vireyes, los nombres de los religiosos, y los negociosde
presidentes ó gobernadores de las partes de
(28) La cédula de 21 de noviembre de 1707 pre
(27) Tengase presente la ley 16, tit. 12 de este viene rio se traigan á España dinero ni otros cauda
libro. les de espolios de religiosos.
t
88 Libro i. Titulo "%IT,
su religión que trajeren á su cargo, para que palabras escandalosas, ley 19, tit. 12 de
en nuestro consejo de Indias se tenga la noticia este libro.
conveniente del gobierno político y económico Que los religiosos vayan d los llamamientos
de las provincias y religiones, y cesen los in que les hicieren los vireyes y audiencias rea
convenientes que de lo contrario lian resul les, Ley 2 2 , tit. \'l de este libro.
lado. (29) Que los vireyes, audiencias y gobernadores
tengan cuidado de que los religiosos doctrine-
LEY XCIÏL res sepan la lengua de los indios, ó sean re
D. Carlos II y la reina gobernadora en Madiid á 17 movidos, ley 4 , tit. 13, y leyes 5 , 6 , 7 , 8
de noviembre de 1668. y 10 , tit. lo de este libro.
Que el religioso que, no hubiere pasado á las
Que los religiosos no agencien negocios seculares, ni
sean oidos sin licencia de sus prelados en ¿a corte y Indias con licencia del rey y su prelado, no
casa de contratación. sea nombrado por calificador del Santo Ofi-
cio, ley 29, tit. 10 , c. 17, y el que lo fu e re
Habiendo entendido que muchos religiosos pueda ser mudado d otra parte por. su pre
se introducen en negocios y dependencias del lado, y los inquisidores no se ¿o impidan allí,
siglo, con título de agentes, procuradores ó so cap. 18 de este libro.
licitadores de reinos, comunidades, parientes Que contra los caballeros de las órdenes en
y personas estríalas, con relajación del estado causas criminales procedan las audiencias y"
que profesan, y menos estimación y decencia justicias de las Indias, ley 90, tit. ) 5 , li
de sus personas, hemos resucito, que ni en bro % "
nuestro consejo de Indias ni audiencia de la casa A los comisarios de la orden de san Francisco
sean oídos los religiosos de cualquier orden, an que fueren á las Indias se dé aviamiento so
tes esc! u idos totalmente ele representar, inten lamente de seis en seis años, uno ai Perú y
tar ni seguir negocios seglares deba jo de ningún otro a Nueva España , y si antes de los seis
protesto ni titulo, aunque sea de piedad, si no años se ofreciere algun caso porque conven
fuere en los que, tocan á la propia religión que ga hacer mudanza de comisarios, y enviar
profesan, y con licencia de sus prelados, que otros, se avise al consejo para que provea
primero deben exhibir. (30) lo que convenga, auto 40.
fían se de poner señas de los religiosos que se
Que se funden monasterios de religiosos y re presentaren en las memorias dadas en el
ligiosas , precediendo licencia del rey, ley \ } consejo, y dar noticia d ambas secretarias,
til: 5 de. este libro. auto 41.
Que los religiosos jio sean admitidos á doctri Los religiosos que no tienen conventos en las
nas sin saber la lengua general de los indios Indias no pasen d ellas sin fianzas de volver
que hunde administrar, ley 30, tit. 6 de este en el termino señalado, y no queriéndolas
libro. dar, se les quiten las Ucencias, auto 71.
Que los obispos nombren clérigos y no religio En la cuenta que se hace para el aviamiento de
sos , para vicarios y confesores de monjas, religiosos-, que con licencia de S. M . pasan
ley 42, tit. 7 de este libro. ’ a las Indias , solo se computen los religiosos
Que los religiosos no puedan beneficiar minas, concedidos, y los criados, conforme d la or-
ley 4 , tit. 12 de este libro. den que estd dada, sin añadir al que ios ha
Que los legos por cuya mano trataren y con de llevar, si no lo ordenare especialmente el
trataren los religiosos, sean castigados por consejo, mayormente si hubiere venido de
las justicias reales , y se dé noticia d (os su las hullas á pedir religiosos, en caso que ten
periores de los reliyiosos, ley 5 , tit. 12 de ga dispensación y licencia para haber venido,
este libro. ó fu e re procurador de su provincia, y hu
Que contra los culpados en motines, que entra biere asistido en esta Corle d los negocios de
ren en religión, se proceda como se declara, ella, auto 102.
ley 10 , tit. 12 de este libro. A los religiosos de las cuatro órdenes mendi
Que ningún religioso pueda venir d estos reinos cantes se despachen los auiamientos en papel
sin las licencias que contiene, ley 16, tit. 12 de oficio \ auto 105.
de este libro. Para cada cuatro religiosos se ponía un criado
Que si los religiosos quisieren venirse de las In entre lo demas que habían menester para pa
dias , les persuadan los superiores que no de sar á las Indias, y id consejo por decreto de
jen la enseñanza , predicación y oficio apos 9 de abril de 1630, proveyó en lo de ade
tólico , ley i7, tit. 12 de este libro, lante no se haga asi, sino que para cada ocho
Que los predicadores no digan en los pulpitos religiosos se dé un lego, y no criado ¿ y esto
se observe y guarde , auto 113.
S . M . por decreto señalado de su real mano
(29) Por real cédula de S. Lorenzo de 14 de oc en Zaragoza d 3 de setiembre de 1646 man
tubre de 1775 se manda guardar estrechamente esta
ley y la 88 por los incoo venien tes que han origina dó , que no se admitan religiosos d la solici
do los repetidos viages de religiosos sin estas calida tud de negocios y agencias de seglares , y el
des. Era sobre esto aun mas estrecha la de 51 de ma consejo y sus ministros no les den audiencia,
yo de 1686. auto 141.
(50) Véase la ley 80 y sus notas de este título y En § de. julio de 1647 mandó el consejo, que
libro. cuando se pidan religiosos para las Indias,
De los religiosos. 89
. sea trayendo los procuradores que 'vinieren dan y se dé vista al fiscal de S. M . , dando-
d.pedir los informes de los vireyes, presiden- le noticia de este decreto para que pida lo
• tes, gobernadores, oficiales reales, y de los que tuviere por mas conveniente, auto 149.
• obispos en cuyos distritos cayeren las pro A los religiosos de todas las órdenes, que vie
vincias, que necesitan de tales religiosos, y nen de las Indias, no se les ha de admitir p e
del número que ¿es parece se, les puede con tición ni memorial en el consejo, sin preceder
ceder; para que vistos en el consejo se tome las dos calidades de traer Ucencia de sus pro
resolución, advirtiendo que no se han de dar vincias yy de tos superiores de sus conventos
sin estos informes, que han de ser de seis en de esta Corle de estar sujetos á la comuni
seis anos como va notado, y cuando se p i dad , auto i 75.
KH ¡29 da a
El emperador D. Carlos y el cardenal y el príncipe Que los diezmos que se cobraren en cada iglesia se
gobernador, cap. 5 de la dicha sentencia. dividan , repartan y administren conforme d esta
ley.
Que no se paguen rediezmos.
Ordenamos y mandamos que en cuanto à Ordenamos y mandamos que de los diez
mos de cada iglesia catedral se saquen las dos
rediezmos , que es de los arrendamientos de
ios ingenios , y de los otros heredamientos de par Les de cuatro para el prelado y cabildo, co
mo cada erecciou lo dispone, y de las otras dos
que una vez se ha pagado el diezmo de lo que
en ellos se coge y labra por las personas que lo se bagan nueve parles, las dos novenas de ellas
tienen, no se pidan ni ileven, ni dé otra cosa sean para Nos, y de las otras siete, las tres sean
para la fábrica de la iglesia catedral y hospital,
alguna de lo que se criare y naciere, habién
y lasotrascuatronovenas partes, pagado el salario
dose diezmado una vez enteramente.
de los curas que la erección mandare, lo restante
(4) Por cédula tío 25 de diciembre de í79ó se ha (5) Estos escusados. son la segunda casa mas rica
mandado que estos caballeros, los de S. Juan ni nin de cada parroquia, y pertenecen á la íábrica de las
gún otro 1raile, clérigo ni comunidad deje do pagar catedrales, y toma su cuenta el vice-patrono por el
diezmo como eualesqnior otro particular. \é a s e con artículo 165 de la Ordenanza de Intendentes de Bue
e i breve que acompaña. nos Aires.
De los diezmos. 101
de ellas se dé al mayordomo del cabildo, para á Nos en los diezmos de las iglesias metropo”
que se baga de ello lo que la erección dispusiere litanas, catedrales y parroquiales de nuestras
’y se junte con la otra cuarta parte de los diezmos Indias pertenecen á nuestro patrimonio real, y
que. pertenecen á la mesa capitular, de todo lo la cobranza y administración de ellos á los ofi
cual, que al diebo cabildo perteneciere, se pa ciales de nuestra real hacienda, que los darán
guen las dotaciones y salarios de las dignida de su mano a las iglesias o personas que por
des, canongías y raciones, y medias raciones, y merced nuestra los han de haber. Y les orde
otros oficios que por la erección estuvieren eri namos y mandamos, que habiéndose cumplido
gidos y criados para servicio de la iglesia cate el tiempo, por el cual hubiéremos hecho ó hi
dral, y donde los diezmos no fueren suficien ciéremos merced y limosna de los dos novenos,
tes , para que de ellos se pague la dotación de ó parte de ellos, cobren y retengan en las cajas
la iglesia, conforme a su erección ó á la que por reales de su cargo todo lo procedido, teniendo
abora tuviere, los oficíales de nuestra real ha en su cobranza y administración cuenta y ra
cienda cobren todos los diezmos y los metan zón particular,. y de lo que en cada arzobispa
en nuestras cajas reales por cuenta aparte, y de do ú obispado monUre, haciendo cargo de ello
esta y la demas hacienda nuestra, que en las á los tesoreros, asi como lo deben hacer de las
dichas cajas hubiere, se sustente el prelado y otras cosas de nuestra hacienda y patrimonio
clero, conforme á lo que por Nos está ordenado real, y lo envíen en cada un año á estos reinos
y dispuesto, y habiendo diezmos bastantespara por cuenta aparte. Y ordenamos à las reales au
pagar la dicha dotación y eu terar la erección diencias, que si se presentare por parte de los
de la iglesia , los diezmos se administren por el oficiales reales pedimento ó querella sobre la
prelado y cabildo , y por las personas que por administración y cobranza de los dos novenos,
ellos para la dicha administración fueren nom despachen las provisiones ordinarias que con—
bradas, precediendo para esto cédula y lieeu- vengan, para que luego y sin dilación tenga
cia nuestra , la cual mandaremos dar con cono efecto lo contenido en ellas. Y rogamos y en
cimiento de causa y pedimento del prelado y cargamos à los prelados y cabildos eclesiásti
cabildo eclesiástico, y en este caso los oficíales cos, que por su parte no pongan impedimento
de nuestra real hacienda solo cobren los dos a los oficiales reales en la cobranza y adminis
novenos que nos pertenecen según la división tración, y todos procedan puntualmente y sin
de los diezmos. Y en cuanto á las parroquias, dilación, con apercibimiento de que no lo ha
que se hicieren, habiéndoles señalado sus limi ciendo pondremos el remedio necesario.( 7)
tes distintos, de forma que no haya diferencia
sobre la declaración de ellos, despues de hecho
el arrendamiento de sus diezmos, se sacarán- D. Felipe III en Madrid á 28 de marzo de 1620.
también de ellas las dos cuartas partes para el Que los dos novenos se cobren de la gruesa de los
nrelado y cabildo, y de las otras nueve que se diezmos y no despues de repartidos.
hacen de las dos cuartas, se sacarán asimismo
los dos novenos para Nos, y los otros tres de Mandamos á los oficiales de nuestra real
los siete se gastarán en la fábrica de la iglesia hacienda que siempre llagan la cobranza de los
parroquial y en el hospital que ha de haber en d-s novenos que nos pertenecen en los diez
la parroquia, de forma que ei un noveno y me mos de las iglesias en la gruesa, sin aguardar á
dio sea para la fábrica y el otro para el hospi
(7) Con Ocasión de ciertas dudas que se ofrecie-
tal, y los otros cuatro novenos que quedaren se lon en la Habana de resultas de los procedi míenlos
gasten en sustentar los clérigos y ministros que de un juez hacedor de diezmos de Cuba, se espidió
se han de poner en la dicha iglesia para la ad cédula circular a !ó de abril de ly /y para que se ob
ministración de los santos Sacramentos y ser servase la instrucción de la contaduría, en la que se
vicio de ella, y no en otra cosa. (6) previene, que antes del remate de diezmos se han
de publicar Jas condiciones con previa intervención
de los yireyes, gobernadores etc. Que no se han de
apeicibú ni conminar a Jos deudores, sino seguirse
El emperador D. Carlos en Madrid á 3 de octubre estas causas por la vía ordinaria.
de 1559. D. Felipe III en Madrid á 10 de diciembre Que los rematadores legos se han de someter à la
de 1617, y 10 de noviembre de lü i8 . Y D. F eli jurisdicción unida de junta de ambos, y no previa
pe IV en esta Recopilación. Para esta ley y las si mente del eclesiástico: que aunque los diezmos no
guientes se vea la ley 1, tit. 24, lib. 8. sean licorosamente real hacienda, mas por la protec
ción, patronato etc. los arrendamientos, recaudación
•Que los dos novenos pertenecen al patrimonio real: y en las cuentas de fábrica deben intervenir, con ju
su administración y cobranza d los oficiales reales: risdicción igual y unida al propio fin, el y ¡rey ó Go
las audiencias les despachen las provisiones ordina bernador y el juez ó jueces hacedores: que Jas lian
rias que convengan , y los prelados y cabildos no lo zas respectivas lian de ser á satisfacción cíe la junta,
impidan. como también los libros de arriendos ó administracio
Declaramos que los dos novenos reservados nes que se han de exhibir á la tal junta. Que el no
tario ha de sor escribano real. Que la junta tase los
derechos que no han de percibir los ministros reales,
(6) Sobre estos cuatro novenos se ha despachado y ios eclesiásticos que no sean canónigos que se com
una real ccdula en 23 de agosto de 1786. pongan con los obispos, que suelen señalarles algo de
Y en lo respectivo á novenos reales debe tenerse SUS cuartas.
presente, que por cédula de 26 de diciembre de 1804 Esta ley 24 se derogó por el artículo 193 de la Or
se ha mandado deducir en cada obispado un noveno denanza de Intendentes de Nueva España en la par
aun antes ae Ja casa cscusada y demas divisiones que te que daba recurso á las audiencias para la cobranza
por esta ley se mandan, y que se remita su importe de novenos.
á la casa de consolidación. Véase el artículo 187,
TOMO I. j»6
102 Libro i. Titulo xvi.
que estén repartidos en ios terceros eclesiastí- LEY X X IX . -
ticos, sacando siempre los novenos del monton.
D. Felipe IV en Madrid á 28 de diciembre de 1638.
LEY XXVI. Y en esta Recopilación.
Que donde tos diezmos bastaren para la congrua del
D. Felipe IV en Madrid á 9 de agosto de 1651. prelado y capitulares, seles deje la administración
Que los dos novenos se cobren sin descuento de se de ellos. . -
minor io ni de gastos. Mandamos que donde no hubiere diezmos
Otrosí mandamos, que los oficiales reales suficientes para la dotación de las iglesias se
cobren los dos novenos aplicados á Nos, y á cobren los que hubiere por los oficiales reales,
nuestra distribución, sin descuento del tres por conforme á lo proveído, y se sustente el clero
ciento para ios seminarios ni gastos de cobran de nuestra real hacienda *, y donde por ser íos
za, haciéndola de la gruesa de todos los diez diezmos considerables no se diere ai prelado y
mos, sin aguardar á que so repartan como está capitulares de las iglesias cosa alguna de nues
proveído. Y asimismo que los arrendadores se tra real hacienda, alcen la mano de la admi
obliguen particularmente à pagará los oficiales nistración de los diezmos de la iglesia y pro
reales del distrito donde estuvieren las iglesias, vincia, y se la remitan y dejen gobernar al pre
lo que montaren los dos novenos, y ellos lo co- lado y cabildo de ella, precediendo;.para esto
bren de. los arrendadores, donde ios hubiere, cédula y licencia nuestra, para que esto corra
>or su cuenta y riesgo ; y desde el dia que asi
con toda puntualidad. fo hicieren no les acudán mas por cuenta de
LEY XXVII. nuestra real hacienda con cosa alguna de lo
que antes les hubieren dado para su estipendio,
D. Felipe III en Madrid á 28 de marzo de 1620. Don con tal que los dos novenos que en los diezmos
Felipe IV allí á 13 de noviembre de 1626.
de la iglesia nos pertenecen, y han de entrar
Que los oficiales reales asistan d los arrendamientos en poder de nuestros oficiales, los cobren, y
tic tos diezmos para la cobranza de los novenos como en su cobranza tengan particular cuidado, ha
se ordena. ciendo para su ajustainento las diligencias ne
Ite m : mandamos que los oficiales reales cesarias, y hallándose al alzamiento y remate
asistan á los arrendamientos de los diezmos, to de los diezmos, como está dispuesto, de forma
mando la razón de los remates, y sacando re que los dos novenos entren enteramente en
cudimiento contra los recaudadores, por lo que nuestra real caja, sin fraude, colusión ni usur
toca á los novenos que nos pertenecen, hacien pación. ( 8)
do que por escritura aparte se obliguen á pa LEY XXX. .
gar lo que montaren*, y donde hubiere au
diencia asista también uno de los oidores de D. Felipe II en Monzon á 4 de octubre de 1563 en la
ella. ordenanza 63 de Audiencias. Y ordenanza 71 de A u-,
diencias de 1596.
LEY XXVIII. Que al hacer la cuenta de los diezmos se halle un oi
El emperador D. Carlos y los reyes de Bohemia go dor y oficial real.
bernadores en Valladolid á 12 de marzo de 1549. Y Ordenamos y mandamos que al tiempo que
D. Felipe IV en esta Recopilación. se hicieren las cuentas de los diezmos, para que
Que al arrendamiento de los diezmos se hallen los se repartan conforme à la erección, asista á ellas
oficiales reales. uno ae los oficiales de nuestra real hacienda, y
un oidor, siendo en parte donde haya audien
Está ordenado por la ley 34, tit. 7 de este cia real.
libro que si la cuarta parte de los diezmos de
cada obispado perteneciente al prelado, no lle LEY XXXI.
gare en cada un año á quinientos mil marave
El emperador D. Carlos y la emperatriz gobernado
dís se le supla lo que faltare al cumplimiento ra en Toledo á 23 de mayo de 1539. Los reyes de
de ellas de cualquier hacienda nuestra, y lo Bohemia gobernadores en Valladolid á 24 de abril
den y paguen los oficiales reales, y que esce- de 1550. l>. Felipe lie n Madrid á 25 de enero de 1588.
diendo de la dicha congrua cobren para Nos D. Felipe III allí á 12 de diciembre de 1619. Y D. F e
los dos novenos de la gruesa. Para que esta ave lipe IV en esta Recopilación.
riguación y cuenta se pueda hacer, y en ella Que los eclesiásticos y interesados en los diezmos no
no haya fraude, mandamos á nuestros oficiales los arrienden.
reales de cada provincia que se hallen presen Asi en el tiempo como en la forma del re
tes á los remates y almonedas de los diezmos, mate de los diezmos, se guarde el derecho ca
porque los arrendamientos de ellos se hagan co nónico , y las audiencias reales no consientan
mo convenga, asi en sede-vacante de prelado ni den lugar á que los prelados, prebendados,
como no habiéndola, y vean y entiendan como clérigos ni personas interesadas en ellas por sí,
se hacen . y miren por lo que toca al aprove ni por interposición de otras, hagan posturas
chamiento y buen recaudo de los diezmos, y ni se les rema ten; y si en alguna parte los ar-
que no se cometan fraudes ui haya otros incon
venientes. (8) Sobre la practica y cumplimiento de esta ley
véase el artículo 166 de la Ordenanza de Intendentes
de Buenos Aires,
De los diezmos. i 03
rendaren, la ciudad, o villa donde se hiciere que puedan hacer ajustamientos y conciertos
el arrendamiento los pueda tomar por el tanto; sobre diezmos á las puertas de las iglesias,
•porqué Ib contrario 6erá de grave perjuicio a presentes ¿os curas doctrineros y caciques,
nuestro patronazgo real, y'á la fábrica de las ley 16, tit. 1 de este libro.
iglesias, (9) Que los prelados en la distribución de los diez•
Par escusur molestias á los indios se permite mos guarden las erecciones de sus iglesias, y
los vireyes ¿es den el fa v o r necesario, ley 9,
tit. 2 de este libro.
(9) Debe tenerse presente el artículo 158 de la
Ordenanza de Intendentes de Buenos Aires, en <jue
Que ¿a parte de los diezmos que pertenece d
se prohibe rematar diezmos en personas eclesiás lasfábricas de iglesias se gaste en lo que allí
ticas. se refiere, ley 11, tit. 2 de este libro.
( i ) Por decreto de 22 de febrero de 1815.espedi actos públicos que egercen los ministros.y depen
do en Cádiz por las Corles generales y extraordina dientes de la Inquisición, su objeto y circunstan
rias, fue abolido este tribunal del santo oficio de la cias respecto á que ni en ello se revela el secreto
lnquisictou, y restablecido al tenor de la ley 2 , tí mediante la publicidad del caso, ni se agravia á la
tulo 26, part. 7. . jurisdicción del santo oficio. Y últimamente, por lo
Despues fue restablecido por cl Sr. D. Fernan respectivo al modo con que deben las justicias reales
do V il y suprimido por el mismo en el año. de 1820. impartir el ausilio á los ministros de la Inquisición, se
Sobre esta materia tengase presente la cédula declara, que si se pide para asuntos de íé^ (cuya de
de 12 de diciembre de 180/ , la que declara, que los claración, si no se espresa, puede exigirla el juez
familiares del santo oficio presenten sus titulos .no real) debe prestarse inmediatamente el ausilio sin
solo á los ayuntamientos, sino también á los jueces procurar instruirse de las razoues ó mérito con que
reales; pues aunque esto no sea para obtener el pa obra el santo oficio, porque en este género de causas
se , interesa para saber si hay esccso en el número es privativa su jurisdicción, no hay términos hábiles
de los familiares, para que se les guarden sus exen para competencias con otro tribunal, ni se admite
ciones y para otros objetos conformes á la ley do la recurso de queja ó agravio sino para el consejo de la
concordia, y consiguientes al instituto y funciones Inquisición , ni es adaptable al caso la ley 2 , lit. 1.®,
de dichos empicados: que los comisarios de Inquisi lib. 3 de las Indias; pero sí tendrá esta lugar criando
ción presenten igualmente sus títulos á las justicias se pide el ausilio en casos que pertenezcan á la juris
reales para los mismos fines que. se han espresado dicción del santo oficio en materias de su fuero, por
respecto do los familiares: que á los'Vireyes se les que en estas cesan los inconvenientes y motivos que
instruya de lodos los comisarios y:familiares que re én las de f é , y cabe osceso y duda que retraiga del
sidan en el distrito del virematoa¡{ya .presentándole; ausilio ó incite la competencia, á que no puede lle
los títulos directamente, ó..ya.por. p?edio de los go garse sin el conocimiento é instrucción que previene
bernadores a quienes se haga la presentación, de la ley.
biendo también estax” enterados los vireyes de los
De los tribunales del santo Oficio. 109
de censuras ó entredichos , ó por otra causa 6 les ha de hacer se tenga la orden siguiente.
razón alguna , y dejen proceder libremente á Que en llegando los inquisidores al puerto
los inquisidores ó jueces de bienes, conocer y de la tal ciudad, si fuere m aritim a, envien la
hacer justicia, y no les pongan impedimento ó carta nuestra que llevaren al gobernador de la
estorvo en ninguna forma , pues la persona ó tierra, el cual dé orden de aposentarlos en el
personas, pueblos ó comunidades que se sintie monasterio ó parte que inas decente y á propó
ren agraviados de los inquisidores y jueces de sito pareciere, conformándose con los inqui
bienes, ó de alguno de ellos pueden tener y tie sidores , y al desembarcar los inquisidores
nen recurso á los del consejo de la santa y gene se les haga salva , disparando Ja artillería
ral Inquisición que en nuestra corte reside, pa de tierra y la de las armadas, galeras ó flo
ra deshacer y quitar los agravios que los inqui tas que hubiere en el puerto, con mas demos
sidores y jueces de bienes, ó alguno de ellos tración de la ordinaria. Aposentados los inqui
hubieren hecho, desagraviandoá los que halla sidores y demas oficiales que fueren con ellos,
ren ser agraviados, y absolviendo y alzando las desde la parte donde posaren, un dia de fiesta
censuras y entredichos conforme á justicia, y por la mañana, en el cual se haga el recibi
consultando con Nos los negocios que convenga miento con la mayor autoridad que ser pueda,
despachar para el buen expediente de ellos, según la comodidad de la tierra, saldrán á re
dando las provisiones y cédulas reales que sean cibirlos el obispo y su cabildo, el gobernador
necesarias, y á los del consejo de la santa y ge y el suyo , y el obispo lleve á la mano derecha
neral Inquisición, y no á otro tribunal alguno, al inquisidor mas antiguo, luego el gobernador
se ha de tener este recurso, pues solos ellos tie á su mano derecha al inquisidor mas nuevo : y
nen facultad de su Santidad y sede apostólica, hallándose el obispo ausente, vayan los dos in
y en lo demas nuestra y de los reyes nuestros quisidores y el gobernador todos tres juntos,
antecesores de gloriosa memoria, para conocer yendo el inquisidor mas antiguo enmedio, y
y deshacer los agravios que los inquisidores y el mas nuevo á su mano derecha, y el gober
jueces hubieren hecho ó hicieren. Y así man nador á la izquierda ; luego se siga el fiscal , el
damos se guarde y cumpla en todo y por todo, cual ha de entrar con el estandarte de la fé en
según y como dicho es, y que si sobre los ne medio del deán y del teniente de gobernador,
gocios de que los inquisidores y jueces conocie y á falta del deán y teniente enmedio de las
ren, algunas personas, pueblos ó comunidades, dos personas mas preeminentes que se siguie
ó alguno de los nuestros fiscales ó ministros re ren despues de ellos. El alguacil mayor de la
currieren, los remitan sin entrometerse á co inquisición irá enmedio de fas dos personas
nocer de ellos, á los inquisidores y jueces, ó à que despues de los dichos se siguieren: el recep
los del consejo de la general Inquisición, por tor enmedio de los otros dos que se siguieren,
que asi conviene ai servicio de Dios nuestro Se y de esta forma irán hasta la iglesia, á donde
ñor y nuestro, y derogamos y revocamos todas serán recibidos con cruz, cantando ei Te Deum
y cualesquier cédulas que hasta ahora hayan laudamus los cantores y clérigos que para esto
sido dadas, que sean en algo contrarias á lo so estarán prevenidos por el obispo; y los inquisi
bredicho, ó que contengan otra orden ó forma dores con todo el acompañamiento se irán á
de la contenida en esta nuestra ley, lodo lo cual su asiento, el cual ha de ser en la capilla mayor
sea ¡y se entienda sin perjuicio de el recurso á al lado del Evangelio, à donde estarán tres si
nuestra real junta de competencias, en los ca- llas de terciopelo para inquisidores y fiscal, con
sos que hubiere lugar de derecho. (*i) una alfombra y dos almohadas para los dos in
quisidores, que al fiscal no se ha de dar, por di
LEY V. ferenciarse en esto en los actos públicos de los
D. Felipe III en Lerma á 22 de inayo de 1610. inquisidores ; y los oficiales se sentarán eu un
banco cubierto con una alfombra en el luo-ar
Que si sefundare tribunal del Santo Oficio en algu
na ciudad, sea recibido en laform a que por esta ley que les toca ; y el obispo y su cabildo asistirán
se ordena] la cual se guarde en los actos que declara. en el coro; y el gobernador y el cabildo secu
lar al lado de la Epístola, y de esta forma oi-
Cuando los inquisidores apostólicos llegaren rán aquel dia misa solemne con sermón en ha*
á alguna ciudad á fundar tribunal del Santo Ofi cimiento degradas por la introducción del San
cio, mandamos que en el recibimiento que se2 to Oficio en aquella provincia. Y el gobernador
y los demas harán el juramento canónico en la
(2) Por cédula de 19 de marzo de 1754 se declaró
forma que se acostumbra, y se leerán las cé
que la poligamia es delito de mixto fuero, en que dulas y provisiones que llevaren los inquisido
pueden á prevención conocer las justicias reales: con res, y asi en este acto como en todos los de
calidad, que si la Inquisición quisiere castigar el reo mas en que los inquisidores se hallaren en la
por la sospecha de heregía, se le haya de remitir des iglesia en forma de oficio, se les haya de dar
pues de egecutadas en él las penas.
Pero esta misma cédula se revocó despues por y dé la paz , como se dá al gobernador y jus
otra de 7 de setiembre de 1766, en que se dejó á ia ticia, advirtiendo que ha de ser de forma que
Inqiiisicion el conocimiento privativo de este crimen, se entienda la precedencia que ios dichos .in
permitiendo solo a la justicia el poder hacer sumarias quisidores hacen al gobernador y justicia. Y
y prender á los reos para entregarlos á dicha Inqui
sición. Pero últimamente por cédtda de 10 de agosto acabados todos estos oficios en la iglesia, desde
de 788 se ha declarado privativo de las justicias rea ella llevarán á los inquisidores á su casa con la
les el conocimiento de este delito, y que por él se misma orden y acompañamiento que se hubie
impongan las penas que prescriben las leyes. re hecho al recibimiento. Despues de algunos
TOMO I.
110 Libro i Título xix.
(lias publicarán los inquisidores el edicto de la El obispo y su cabildo á la mano derecha de
fe en la forma acostumbrada, y antes entrega los inquisidores, y á la izquierda el gobernador
rán al gobernador la cédula nuestra .que lleva* y su cabildo, y enmedio de entrambas estarán
ron para él, para que vaya con su cabildo aquel asentados debajo de dosel los inquisidores , y
día á acompañarlos; y el dia antes que hubiere en ausencia del obispo irá su provisor, el cual
de ser la publicación, los inquisidores enviarán lia de tener su lugar al lado izquierdo del in
un recado con el notario del secreto al gober quisidor mas nuevo ; y cuando el obispo estu
nador con la cortesía que es razón, para que viere ausente, en el acompañamiento vaya el
tenga tiempo de prevenir al cabildo, con el gobernador en el lugar que el obispo había de
cual en forma vendrá á la inquisición, é irá con ir, que es á la mano izquierda del inquisidor
los inquisidores á la publicación , yendo el in mas antiguo, y el provisor irá á la izquierda del
quisidor mas «antiguo eumedio del dicho go inquisidor mas nuevo ; pero en llegando al ta
bernador, y del inquisidor mas nuevo, el cual blado, el gobernador se ha de poner en el lado
ha de ir al lado derecho de su colega, y el go izquierdo, porque aunque á falla del obispo
bernador al lado izquierdo, y el fiscal irá en en el acompañamiento lleva él à su mano dere
medio de las personas mas preeminentes des cha al inquisidor mas antiguo, no se entiende
pues del gobernador ; y los tres oficiales, al mas que hasta el tablado, yen este caso se asen
guacil , receptor y notario del secreto irán con tarán los inquisidores y ordinario, y el inqui
los regidores, y de esta forma llegarán á la igle sidor mas antiguo enmedio, y á su mano de
sia, y á la puerta estarán dos capitulares que recha el inquisidor segundo, y á su mano iz
darán agua bendita á los inquisidores, y los quierda el ordinario, lo cual es nuestra volun
acompañarán basta su asiento ? y se repartirán tad que asi se haga y cumpla, según y como
los demás á sus lugares ; y esta misma orden se arriba va declarado. Y mandamos á nuestro go*
guardará en los (lias de los demas edictos y ac bernador y capitán general que es ó fuere de
tos de la foque se hubieren de hacer en la igle la tal ciudad, y al concejo,, justicia y regimien
sia; y los inquisidores en estos actos se sentaran to de ella, que en lo que les tocare cumplan lo
en la capilla mayor en sillas, teniendo delante susodicho. Y rogamos y encargamos al ohispo
una alfombra, y los oficiales en un banco cu que es ó fuere, y ai deán y cabildo eclesiástico
bierto con una alfombra, y en el dar la paz y por lo que les tocare que hagan lo mismo.
i o demas se guardará el orden que arriba está
dicho. Y porque por su devoción los inquisido LEY Y I.
res en algunas inquisiciones de estos reinos acos
tumbran á ir cu forma de oficio ala iglesia ma D. Felipe IV en Madrid á 11 de junio fie 1621.
yor, ú otras iglesias y conventos los dias de Pas
cua, y el del ¿jautísimo Sacramento y otras fies Que los oficiales de la Inquisición, aunque no tengan
tas solemnes, y es razón y conviene que cuan litulos del inquisidor general , vayan çon el tri
do los (liclios inquisidores del tribunal del San bunal.
to Oficio fueren en esta forma, sean bien reci
bidos, honrados y respetados como ministros Porque cuando los ministros están incorpo
de la santa fé y de tan santo tribunal, se adver rados con su tribunal todo él se hace un cuer
tirá que aunque en cuanto al acompañamiento po , sin considerarse las mayores ni menores
y forma que lia de haber.los dias de edicto de personas ni oficios, sino que conforme á su todo
la le, no habrá obligación de hacerse cuando se ha de juzgar lo mismo de los unos que délos
fueren en forma de oficio; mas en el lugar y for otros, y esta orden se guarda en estos reinos de
ma de asiento que han de tener en la iglesia, ha Castilla en las concurrencias y actos públicos
de ser como esta declarado en los dias^de edic délos tribunales: Guando se publicaren edic
to. En el acompañamiento del acto publico de tos de la f é , el contador, letrado de la inqui
la fé, en que han de concurrir el gobernador y sición , y otros oficiales de ella, aunque no ten
su cabildo, y el obispo y el suyo irán en esta gan título del inquisidor general, puedan en el
forma. El obispo llevará á la mano derecha al acompañamiento preceder à quien ei tribunal
inquisidor mas antiguo, luego el gobernador á del Santo Oficio precediere, yendo incorpora
la suya al inquisidor mas nuevo, y hallándose dos con éb
el obispo ausente, vayan los dos inquisidores y
el gobernador todos tres juntos, yendo el in LEY Y IÏ.
quisidor mas antiguo enmedio y el mas nuevo D. Felipe IV en Madrid á 11 de junio de 1621.
á la mano derecha, y el gobernador a la izquier
da : luego se seguirá el fiscal, que ha ele llevar Que los cabildos eclesiástico y secular ocupen los lu
el estandarte de la fé enmedio del deán y te gares que se declara, y el alguacil mayor de la ciu
niente de gobernador , y a falta de el deán y dad asista y ande en la plaza.
teniente, de las dos personas mas preeminentes
que se siguieren. Despues de ellos el alguacil de En los actos Je la fé ocupen la segunda
la inquisición irá enmedio de las dos personas grada el cabildo eclesiástico á la mano derecha,
que despues de los dichos se siguen. El recep y el secular à la izquierda, y el alguacil mayor
tor en medio de los otros dos, y el notario del de la ciudad asista y ande en ia plaza, pues
secreto en medio de los otros dos que se siguie este dia es de su oficio, sin embargo que en ella
ren , y de esta forma irán hasta el tablado, y haya gente de guerra, y c«ida uno cumpla con
en él estarán sentados en la forma que se sigue. lo que le toca.
De los tribunales del santo Oficio. 111
LEY V IH . por deservido , y se descontará de sus salarios
ío que montare. Y mandamos à los oficiales de
D. Felipe II en S. Lorenzo á 23 de agosto de 1595. nuestra real hacienda que lo bajen y desquíten
Que el iliu de el Corpus y Semana Santa dejen los ai tiempo de la paga.
vireyes y gobernador de' Cartagena desocupada la
iglesia de Sto. Domingo dios inquisidores. LEY X I!.
Mandamos á los vireyes y gobernador de D. Felipe IU ea S. Lorenzo á 26 de agosto de ±618.
Cartagena que los dias de Semana Santa y oc Que los vireyes hagan tomar las cuentas de penas y
tava del Corpus dejen á los inquisidores la confiscaciones d los receptores del Santo Oficio.
iglesia de santo Domingo ú otra que esté cer Mandamos á los vireyes de las Indias y pre
cana á la inquisición, desocupada, donde los sidente del Nuevo Reino de Granada, que den
inquisidores puedan asistir; y cuando al virey la orden conveniente para que en cada un año
pareciere por alguna justa causa ir á aquella se tome cuenta ai receptor del Santo Oficio de
misma iglesia en las dichas fiestas y-«lias, lleve la Inquisición de sus distritos, de! dinero que
consigo la audiencia, para que asi queden des hubiere entrado en su poder de confiscaciones,
embarazadas las d o n a s, y en cualquiera de penas y penitencias, y cometan tomar estas
ellas puedan asistir los inquisidores. cuentas á los oficiales (le nuestra real hacienda
LEY IX . de la ciudad donde asistiere el tribunal, los que
hallaren mas á propósito para este efecto, y les
D. Felipe II en Madrid á 16 de agosto de 1570. Don
Felipe 111 en Lerma á 22 de mayo de 1610.
den las instrucciones y ordenes que hubieren
de guardar, dándonos aviso de lo que resul
Que los inquisidores conozcan de los bienes confis - tare»
cados pura la cántara
L E Y X III.
Es nuestra merced y voluntad que los in
quisidores apostólicos de las ludias conozcan y D. Felipe II en Madrid á 7 de febrero de 1594.
determinen las causas de bienes confiscados por Que losfiscales y ministros del Santo Oficio que sir
el Santo Oficio para nuestra réal cámara. vieren en ínterin , tengan la mitad del salario.
TITULO TSÏ1TTB.
D e la sa n ta C ruzada.
i
140
TITULO TEIltTE T TE.ES.
D e la colegios y sem in arios.
LEY P R IM E R A . LEY IV .
D. Felipe IV en Alcoba á 12 de noviembre de 1622.
D. Filipe 11 en Segovia á 8 , y en Tordesillas á 22 de
junio de lá¡92. Que de los seminarios asistan cada dia cuatro colegia>
les d los divinos oficios, y las fiestas seis.
Que sefunden colegios seminarios conforme al san
to Concilio de. Y renlo, y los vireyes, presidentes Porque las principales rentas de que se sus
y gobernadores los favorezcan y den el auxilio ¡ne tentan los seminarios, estan situadas en las de
cesarios. las iglesias catedrales, encargamos á los arzo
Encargamos à los arzobispos y obispos ele bispos y obispos que ordenen y hagan que de
nuestras Indias que funden, sustenten y con los seminarios asistan á las iglesias todos los
serveu los colegios seminarios que dispone el dias cuatro colegiales, y en las fiestas solemnes
santo concilio de Trento. Y mandamos á los vi- seis, para que sirvan en ellas á los Divinos Ofi
reyes, presidentes y gobernadores, que tengan cios, no obstante que algunos seminarios es ten
muy especial cuidado de favorecerlos, y dar el a eargo y administración de eualesquier reli
auxilio necesario para que asi se ejecute, de giosos.
jando el gobierno y administración á los prela LEY V.
dos; y cuando se ofrezca que advertirles, lo ha D Felipe II en Segovia a 8 de junio , y en San Lo
renzo á 50 de octubre de 1591 y 20 de Mayo de 1592.
gan y nos avisen , para que se provea, y dé la D. Felipe IV en San Lorenzo á 27 de octubre de
orden que pareciere conveniente. 1626.
LEY II. Que para nombrar personas en los seminarios y
visitarlos el prelado , se acompañe conforme al San?
D. Felipe 11 en Segó vi a á 8 de junio de 1592. Véase to Concilio de Trento.
con la ley 42 , til. 6 de este libro.
Por el Santo Concilio está dispuesto que
Que en los seminarios se pongan las armas reales y cuando los obispos nombraren sugetos para que
puedan poner las de los prelado».
sean recibidos en los colegios seminarios : y
fin los colegios seminarios se pongan nues cuando ios visiten se acompañen con dos capir
tras armas reales, ocupando el lugar mas pree talares que el cabildo nombrare : Mandamos á
minente en reconocimiento del patronazgo uni los prelados de nuestras Indias que asi lo guar
versal, que por derecho y autoridad apo.'tólica d en, cumplan y ejecuten; y los vireyes, pre
nos pertenece en todo el estarlo de las Indias; sidentes gobernadores dejen la nominación y
y permitimos à los prelados que puedan poner elección de los colegiales y personas que ten
las suyas en lugar inferior. ( 1) gan á cargo los colegios á disposición de los
prelados.
LEY III, LEY V I.
D. Felipe II en Tordesillas á 22 de junio de 1592.
D. Felipe IU allí á 12 de junio , y en Valladolid á oO D. Felipe l i en Burgos á 21 de setiembre de 1562.
dé agosto de 1605. L>. Felipe IV"en Granada á 4 de D. Felipe III cu Madrid a l5 de marzo de 1619. Y á
b abril de 1621. ' 24 lie marzo de 1620.
Que para los seminarios sean preferidos los que se Que los vireyes y prelados presenten y propongan
declara ,y qué personas no se han de admiiii • para las doctrinas d colegiales de los seminarios y
otros colegios, y en iguales méritos sean preferidos-
En la provisión de sugetos que han de ha-
cer los prelados para colegiales délos semina Los vireyes, presidentes y gobernadores
rios , prefieran en igualdad de méritos á ios hi presenten para las doctrinas á colegiales de los
jos y descendientes de los primeros descubrido- seminarios y otros colegios de sus distritos, te
res, pacificadores y pobladores de aquellas pro niéndolas partes de habilidad y suficiencia que
vincias, gente honrada, de buenas esperanzas disponen las leyes de nuestro patronazgo real,
y respetos, y no sean admitidos los hijos de ofi y en igualdad de calidades ios prefieran á otros
ciales mecánicos, y los que no tuvieren las ca opositores que no hubieren sido colegiales. Y
lidades necesarias para orden sacerdotal y pro rogamos y encargamos à los prelados eclesiásti
visión de doctrinas y beneficios. cos que en las proposiciones de sugetos hagan
lo mismo.
LEY VIL
(I) En un!» cédula de 20 de maya de 1592 se es-
presa el hecho cjuc dio ocaston á esta ley y cédula, D, Felipe II en el Pardo á 8 de noviembre de 1594.
y sucedió entre Slo. Toribio, y el viroy, marqués de Que los tres por ciento que se rebajan d los reli
C añete, que por mano del capitán de su guardia giosos doctrineros de la orden de San Francisco
matnló quitar las armas del Santo y poner Jas del para los seminarios, sean en dinero , y no en es
1U‘V. Ifuho censuras y entredichos á que no cedió el pecie.
virév; de sus resultas se ocurrió ;¿ España, y la reso
lución lúe lo prevenido en esta lev Mandamos á nuestros oficiales reales del
De los colegios y seminarios. 141
Perú que rebajen ele los estipendios con que los colegiales profesen la sagrada teología, por
acuden á los religiosos doctrineros de la orden lo mucho que importa que los naturales de
«le S. Francisco los tres por ciento, qué con aquellas provincias la estudien, para que se
forme á la ley 35, tít. 15 de este libro lian de ocupen en la estirpacíon de las idolatrías, y se
Haber los seminarios, en dinero, y no en es ha introducido admitir en él legistas y canonis
pecie, y con la restante cantidad acudan á los tas: Mandamos a nuestros vireyes de! Perú que
religiosos. (*X) cumplan con nuestra intención en lo que toca
L E Y VIH ,: á la presentación de estas becas, en la forma
que las acostumbran proveer, guardando y ha
D. Felipe IV en Madrid á 25 de setiembre de 1627. ciendo guardar la constitución del colegio.
Que en. el colegio de San M artin de Lima asistan dos
colegiales de cada seminario que fundaren ¿os pre LEY X I.
lados, y graduados de bachiller , se vuélvan y en
tren otros. El emperador don Garlos y la emperatriz goberna
dora en Madrid á 8 de diciembre de 1535. Y el car
‘ Ordenamos y tenemos por bien que de cada denal gobernador allí á 19 de junio de 1540. La prin-
uno de todos los colegios seminarios que coa- cesa^ gobernad ora en Valladolid á 27 de abril de 1554
forme á ia disposición de! santo concilio de D Itíhpe H en San Lorenzo á 22 de julio de 1579,
Treiito han fundado y fundareu los arzobispos y en la Instrucción de vireyes de este año, cap. 59.
O. Felipe l l l en Madrid á 17 de marzo de 1 6 l9 . Y
y obispos de las iglesias metropolitanas y cate á 20 de marzo de 1620.
drales de las provincias del Perú y Tierra F ir
me, desde Cartagena á Chile y Rio dé la Plata, Que sean favorecidos los colegios fundados para
nombren los prelados ó sus cabildos en sede- criar lujos 'de Caciques, y se funden otros én las
vaca nte> dos colegiales, á los cuales envíen al ciudades principales.
colegio de S. Martin de la ciudad de los Reyes,
para que en el estudien hasta recibir el grado Para que los hijos de caciques que han de
de bachiller en la universidad de aquella ciu- gobernar á los indios sean desde niños instrui
óad, y Habiéndole obtenido, los muden y pue dos en nuestra santa fé católica, se fundaron
dan nombrar ios prelados , ó cabildos sede-va- por nuestro orden algunos colegios en las pro
cantes, otros dos en su lugar, con calidad de que vincias del Perú, dotados con renta, que para
nunca han de concurrir mas de dos colegiales este efecto sé consignó. Y por lo que' importa
de un seminario, y se sustenten de las rentas qüe sean ayudados y favorecidos, mandamos à
de ios seminarios de donde fueren enviados, y nuestros vireyes que los tengan por muy enco
de esta suerte gocen de educación y doctrina en mendados, y procuren su conservación y au-
los estudios de las ciencias. Y mandamos al rec meuto, y en Jas ciudades principales del Perú
tor y colegiales dei colegio de S. Martin , que V Nueva-España'se fúnden otros, donde sean
reciban á los -que asi fueren enviados, sin poner llevados los hijos de caciques de pequeña edad,
les impedimento. y encargados à personas religiosas y diligentes
que h.s enseñen y doctrinen en ;ristiañdad,
LEY IX. buenas costumbres , policia y lengua castella
D Felipe IV en el Pardo á 2 de febrero de 1625. n a, y se Ies consigne renta competente à su
crianza y educación- (3)
Que pone ¿as calidades que ha de tener el rector
del colegio de San Felipe de Lima.
Mandamos que para ser rectores del colegio
de S. Felipe y 8 . Marcos de la ciudad de los El emperador don Carlos en Barcelona á l . ° de ma-
Reyes, los colegiales de el Hayan de ser colegia <yo de 4543.
les actuales : y que lo Hayan sido dos años : y Que el colegio y hospital de Mechoacan sean del Pa
tengan veinte y tres de edad : esten graduados tronazgo real.
de bachilleres, o licenciados en teologia , ó de
rechos canónico ó civil: ia elección sea hecha Declaramos que pertenecen á nuestro pa
por el gobierno: y dure el oficio un año, que ha tronazgo real el colegio de españoles, mestizos
de comenzar desde ei dia de S. Felipe. é indios, para que estudien gramática, y el
hospital de pobres enfermos de la ciudad de
Mechoacan déla Nueva-h.spaña, y aceptamos
D. Felipe IV en Madrid á 17 de agosto de 1623. Y á la cesión que en nuestra real corona hizo el fun
17 de noviembre de 1626. dador, porque Jos estudiantes y pobres sean
en cuanto d ser los colegiales de San Martin mas bien favorecidos y administrados.
de Lima teólogos ó ju rista s , se cumpla la intención
del liey y guarde la Constitución.
A Nos se ha hecho relación que habiéndose (3) Se ha acostumbrado en Lima nombrar á un
acostumbrado desde la fundación del colegio de ministro por juez protector de estos colegios, y ha
S. Martin de la ciudad de los Reyes, que todos biéndose hecho novedad en el particular, se mandó
observar la costumbre en cédula de 43 de acosto
de 1764. &
^obre esta ley téngase presente la cédala de En el antiguo colegio de caciques de Lima se ha
. de febrero de 9 6 , en que se mandó que los inte mandado por real orden de 8 de setiembre de 1787,
rinos paguen el 3 por 100 de los cuatro rneses que que se limite la enseñanza de estos á la lengua Caste
perciben sínodo, y la caja real del tiempo de la va- l l a a > Catecismo y Doctrina Cristiana, leer, escri
caute. A
bir, contar, y gramátiga La lio a.
TOMO I.
36
142 Libro i. Título xxiM.
cuidadlo de avisarnos el estado en que se halla,
LEY XIIL. y si los que en él concurren aprovechan en bue
D. Felipe III en Madrid á 29 de-mayo de 1612. na doctrina y costumbres , y reconociendo al
Que el colegio fh San Pedro y San Pablo de Méjico guna falta ó descuido , lo remedien y hagan
sead cargo de la Compañía de Jesús , y de d Pa roco'>-er todos cuantos niños mestizos hubiere,
tronazgo real y ordenen se tome la cuenta a lus .que la debie
Encomendamos y encargamos el gobierno y ren dar de lo que se ha distribuido, y con qué
administración del colegio (le S. Pedro y S. Pa órdenes, y cobren los alcances y lo gasten .en
blo <le Méjico á la Compañía de Jesús y sus re lo mas necesario yj provechoso el colegio.
ligiosos, reservando para Nos,'y los reyes nues
tros sucesores, él patronazgo de é l , y es nues LEY XV.
tra voluntad que los vireyes de la Nueva-Espa- í>. Felipe IV en Aranjuez à 10 de abril de 1625.
ña presenten ios colegíales, conforme à nues Que et\colegio de San Antonio del Cuzco preceda
tro patronazgo real, para que estudien artes y al de San Bernardo.
teología. Declaramos ¡y mandamos que en todos los
LEY X IV . • actos públicos y particulares -9 y otras euales-
D Felipe II y la princesa gobernadora en Vallado- quier concurrencias , debe preceder y preceda
lid á 8 de setiembre de 1557. Instrucción a loá vi re ei colegio de seminario de San Antonio de la
yes de Nueva España , cap. iO.
ciudad del Cuzco al colegio de San Bernardo,
Que se guarden las ordenanzas del colegio de los
niños pobres de Méjico y sea bien administrado. que en aquella ciudad por orden y provisión
del gobierno se cometió y encargó à los padres
En la ciudad de Méjico esta fundado un de la Compañía de Jesús. Y rogamos y encar
colegio donde se recogen muchos niños pobres gamos á los religiosos que no dejen de admitir
mestizos , y se les enseña la doctrina cristiana a las elecciones y estudio de su colegio por es
y buenas costumbres, procurando'que no se ta causa a los del seminario de San Antonio.
crien viciosos y vagabundos. Y porque le he
mos hecho algunas mercedes , y es nuestra vo Que los vireyes visiten cada año el colegio de
luntad que esta obra se continúe y aumente cuan las niñas de M éjico, y le favorezcan en la
to fuere posible , mandamos a los vireyes de ia form a que se ordena , ley 18, tít. 3 de este
Nueva España, que hagan guardar las ordenan libro.
zas dadas á este colegio el año de mil y quinien Que ios religiosos doctrineros contribuyan para
tos y cincuenta y siete , y tengan particular ¿os seminarios, ley 35, tit* 15 de este libro.
LIBRO SEGUNDO.
TITULO P&XME&O.
Porque las ciudades, villas y lugares de las Que al principio del año hagan leer los gobernadores
las ordenanzas.
Indias presentan algunas veces sus ordenanzas
ante nuestros vireyes, los cuales las confirman, Mandamos que los gobernadores de nuestras
y otras veces las hacen de nuevo en materias de Indias y sus tenientes hagan leer las ordenanzas
Gobierno: Mandamos que si se apelare de ellas en sus gobernaciones por lo menos una vez al
para las audiencias reales donde los vireyes pre principio de cada año, y asistan los susodichos
sidieren, se guarden, cumplan y ejecuten, has y los demas ministros de la república, y los es
ta que por justicia se vean y determine en re cribanos y procuradores, para que sepan y en
vista por las audiencias lo que se debe hacer, y tiendan lo que está ordenado y proveído para
despues se ejecute lo proveído por la ley ante su buen gobierno y administración de justicia,
y que se guarde y cumpla, y los escribanos de
cedente. gobernación las lean y pongan por auto en for
L E Y X X X IV . ma que baga fé de que asi se ha ejecutado.
D. Felipe 111 en Madrid á 8 de marzo de 1619.
Que los vireyes, audiencias, prelculos y cabildos en LEY X X X V II.
vien al Consejo las ordenanzas y autos de gobierno, D. Felipe 11 en Segovia á 8 de junio de 1592.
que tuvieren y fin eren haciendo.
Que en el Perú se guarden las ordenanzas del virey
Para que en todo se provea lo que mas con D. Francisco de Toledo.
venga al servicio de Dios nuestro Señor , bien
de la causa pública, y conservación de las lu Los vireyes del Perú vean y hagan guardar
dias : Mandamos á nuestros vireyes, presiden y cumplir todo lo ordenado por D. Francisco
tes y oidores, que con intervención de los fis de Toledo, virey que fue de aquellas provincias
cales hagan sacar traslado de todas las ordenan en la visita general que hizo en materias de go
zas y demas autos y acuerdos con que se gober bierno espiritual y temporal y guerra, y admi
naren y tuvieren proveídos para la conservación nistración de nuestra real hacienda, y otras to
de la tierra, y administración de la justicia, y nos cantes al bien común. Y porque en muchas de
le envien autorizado y en lorma que haga le; y ellas no se guarda lo proveído, y en otras se
siempre que determinaren en el acuerdo al han introducido novedades, de que resultan
gún auto tocante al gobierno publico, sobre graves inconvenientes, es nuestra voluntad que
materias que bagan regla ó se de orden para lo en todo lo que no estuviere derogado por las
venidero, nos avisen de ello con los motivos en leyes de este libro, ó por otras cualesquier nues
que se hubieren fundado. Y rogarnos y encar tras órdenes , se guarden y cumplan precisa
gamos á los arzobispos y obispos que de todo lo mente ; y si les pareciere que por la mudanza
de los tiempos, ú otra justa causa, es necesario
enmendar o proveer nuevamente, nos den avi*
(1) Véase la ley 17, lit. 5, Hb. 4.
De ïas leyes provisiones y títulos. 151
so, para que en nuestro consejo de las Indias LEY X L I.
se provea lo que convenga.
D. Felipe IV en Madrid á 30 de diciembre de 1619.
LEY X X X V III.
Qííc los vireyes , gobernadores y oficiales reales, ar
D. Felipe 111 en el Pardo á 14 de diciembre de 1613. zobispos, obispos, deanes y cabildos eclesiásticos sede
Que los vireyes, audiencias y gobernadores avisen vacantes, envien con sus cartas copias de las cédulas
al Consejo de Indias de lo que por otros Consejos se y ordenanzas que hubiere sobre ¿as materias y ne
les escribiere gocios en que escribieren al Rey.
Mandamos á los vireyes, presidentes, y au En nuestro consejo real de las Indias se ha
diencias y Gobernadoras, que sucediendo al conocido que en muchas cartas escritas á Nos
gun caso en que por otro consejo que no sea el por los vireyes, presidentes, gobernadores, ar
nuestro de las ludias, se les escribiere sobre zobispos, obispos y oficiales de nuestra real ha
cualquier cosa ó m ateria, nos avisen de la cor cienda en materias eclesiásticas, seculares , de
respondencia que tuvieren, advirtiendo que en gobierno, gracia, guerra y hacienda de su car-
la sustancia ni el modo de ella los demas conse go, al principio , o en su discurso alegan , que
jos no adquieran ninguna jurisdicción, y cum lo que refieren está dispuesto por ordenanzas
plan corno deben la obligación que tienen de y cédulas reales, y en unas no citan las fechas
guardar las leyes y ordenanzas de las Indias. de ellas, y en otras lo hacen con tanta incerti-
dumbre, que cuando se piden por el consejo ó
LEY X X X IX junta de guerra de Indias, sucede muy de or
D. Felipe III en Madrid á 15 de diciembre de 1614* dinario no hallarse por este defecto, ó por fal
D. Felipe IV en Barcelona á 23 de abril de 1626. Y
en Valencia á 20 de noviembre de 1645. tar algunos libros antiguos, con que se dilata
mucho el espediente de ios negocios. Y para que
Q«e no se cumpla cédula ni despacho de otro Conse- se pueda tomar con entero conocimiento de cau
jo que nofu ere pasado por el de Indias, y lo mismo sa, y la brevedad <jue conviene á nuestro real
se egecute con ¿os despachos de visitadores de las
ordenes militares; y en cuanto d provisiones para servicio y causa publica, mandamos á ios vire-
informaciones no se haga novedad por ahora. yes, presidentes, gobernadores y oficiales de
nuestra real hacienda, y rogamos y encargamos
Mandamos á los vireyes, presidentes y oi á[los arzobispos, obispos, y á los venerables
dores, gobernadores y justicias de las Indias, que deanes y cabildos sede-vacantes, que cada uno
obedezcan y no cumplan las cédulas, provisio por lo que le toca, demas de citar puntual y
nes y otros cualesquier despachos dados por ajustadamente en sus cartas las cédulas y orde
nuestras reales consejos, sino fueren pasados nanzas que hubiere en razón de lo que nos es
por el de las Indias, y despachada por él nues cribieren , envien juntamente con ellas copias
tra real cédula de cumplimiento, y de ningu auténticas de las dichas cédulas y ordenanzas,
na forma permitan que se use de comisiones para que con esto se pueda tomar mas breve y
dadas y que se dieren por el consejo real de las acertada resolución, y asi se guarde, si el pun-
Ordenes para visitar los comendadores, caba to no estuviere decidido por las leyes de este
lleros y frailes de ellas, sin preceder este despa libro.
cho , y las recojan y remitan originales á nues
tro consejo de Indias, y constando que los vi Qae para hacer leyes precedan entera noticia
sitadores hubieren pasado i aquellas provincias de ¿o ordenado en la materia, parecer é infor
sin licencia nuestra , despachada por el dicho me si en la dilación no hubiere inconveniente,
consejo de Indias, los hagan venir luego á es ley 12, iit. 2 de este libro.
tos reinos, y no los consientan en ellas. Y en Que las leyes que se hicieren para las Indias
lo que toca á las provisiones para informaciones sean lo mas conformes que ser pudiere á las
de hábitos, por ahora no hagan novedad hasta de estos reinos, ley 13, tit. 2 de este libro.
que tengan orden. 5) Que para hacer leyes ó derogarlas no baste la
LEY XL. mayor parte de votos del consejo , sino que
concurran en un parecer las dos partes
D. Felipe IV en Monzon á 8 de marzo de 4626. de tres, y consulta, ley 15, tit. 2 de este li
Que no se guarden en las Indias las pragmáticas de bro.
estos reinos que no estuvieren pasadas por el Con Que las leyes y provisiones se publiquen donde
sejo. y cuando convenga) salvo si pareciere que al
Otrosí mandamos á los vireyes, presidentes, guna sea secreta , ley 24 , tit. 2 de este li
audiencias, gobernadores y otras cualesquier bro.
justicias de todas nuestras Indias, Islas y Tierra Que el consejo procure saber como se ejecuta
birm e del mar Océano, que no permitan se lo proveicb, y castigue á quien no lo guarda
ejecute ninguna pragmática de las que se pro re ley 25, tit. 2 de este libro.
mulgaren en estos reinos, si por especial cédula Que lodos los del consejo firmen las provisiones
nuestra, despachada por el consejo de Indias y cédulas que hubieren librado, aunque no ha
no se mandare guardar en aquellas provincias. y a n intervenido en la determinación , ley 66,
tit. 2 de este libro, y no se pasen por el sello
(5) Por cédula de 8 de agosto de 90 se ha recor y registro sino estuvieren firmadas por ¿o me
dado la. observancia de eHa ley y siguiente con mo nos del presidente y cuatro consejeros, y re
tivo de la impresión del libro del licenciado £>. José frendadas del secretario, ley 5, tit. 4 de este
.Lebrón sobre la pragmática de matrimonios. libro.
152 Libro ii. Títnlo i.
Que las provisiones de justicia para estos reinos j Las órdenes y cédulas generales se envien por
no las firm e el rey, y para las Indias vayan mano de los vireyes, no habiendo inconve
firmadas como las de gracia y gobierno, ley niente, y cuando por alguna causa no se pu
23, tit 6 de este libro. diera hacer, se envíe d los vireyes copia de
Que los contadores tomen la razón de las mer lo que se ordenare *,pero esto no se entienda
cedes en hacienda real, y en las cedidas se de las audiencias pretoriales, auto 30.
ponga por cláusula especia!, ley 22, tit. 11
de este libro.
TITULO SEOUJSOO.
LEY X II.
D. Felipe II en la ordenanza 2 del consejo. D. Feli
pe IV en la 9 de 1656. D. Felipe 11 en la ordenanza 32 de el Consejo. Don
Que el Consejo provea lo conveniente para el buen Felipe IV en la 12 de 1636.
tratamiento de los indios.
Que para hacer leyes precedan entera noticia de lo
Por lo que deseamos favorecer y hacer bien ordenado en la materia, parecer é inform e , si en la
á los indios naturales de nuestras indias, senti dilación tío hubiere inconveniente.
mos mucho cualquier daño ó mal que se les ha
ga , y de ello nos deservimos , por lo cual en Con mucho acuerdo y deliberación deben
cargamos y mandamos á los de nuestro consejo ser hechas las leyes y establecimientos de los
de las Indias que con particular afecto y cuida- reyes, porque menos necesidad pueda haber de
dado procuren siempre y provean lo que con las mudar y revocar : y asi mandamos que
venga para la conversión y buen tratamiento cuando los de nuestro consejo de las Indias hu
de los indios, de forma que en sus personas y bieren de proveer y ordenar las leyes y provi
haciendas no se Ies haga mal tratamiento ní siones generales para el buen gobierno de ellas,
daño alguno, antes en todo sean tratados, mi sea estando primero muy informados y certifi
rados y favorecidos como vasallos nuestros, cas cados de loantes proveído en las materias so
tigando con rigor á los que lo contrarío hicie bre que hubieren de disponer, y precediendo
ren , p3ra que con esto los indios entiendan la la mayor noticia é información que ser pueda
merced que les deseamos hacer, y conozcan que de las cosas jy negocios , y de las partes para
haberlos puesto Dios debajo de nuestra protec donde se proveyeren , con información y pare
ción y am paro, ha sido por bien suyo, y para cer de los qae las gobernaren ó pudieren dar
sacarlos de la tiranía y servidumbre en que an de ellas alguna luz , sien Ja dilación de pedir
tiguamente vivían. información no hubiere algun inconveniente.
O
156 Libro ii. Título ii.
consejo, sino que han de concurrir en un pa
LEY XIII. recer las dos partes de tres de los que se halla
D .Felipe 11 en la ordenanza 14 de el Consejo. Y ren y nos lo han.de consultar , y en las mate
don Felipe IV en la 13 de 1656. rias de justicia se guarde lo dispuesto.
Que las leyes que se hicieren para las Indias sean lo
mas conformes, que ser pudiere , d las de estos LEY XV I.
reinos. .
D. Felipe IV por decreto de 19 de abril de 1628. Y
Porque siendo de una corona los reinos de en las consultas y ordenanzas 16 de 1656;
Castilla y de las Indias, las leyesy orden de Que en fas consultas de gobierno se pongan los vo
gobierno de los unos y délos otros , deben ser
f o mas seme[antes y conformes que ser pueda^
tos singulares.
Porque conviene á nuestro real servicio., y
los de nuestro consejo en las leyes y estableci al mayor acierto de las materias de gobierno,
mientos que para aquellos estados ordenaren, que cualquier consejero diga libremente su
procuren reducir la forma y manera del gobier parecer, y que venga de por sí en las consultas,
no de ellos al estilo y jorden con que son re .y no cou la común dei consejo, siempre que se
gidos y gobernados los reinos de Castilla y de lia liaren causas para no conformarse con él: O r
León en cuanto hubiere lugar y permitiere la denarnos.que en nuestro consejo de indias pue
diversidad y diferencia, de las tierras y n a dan hacer .votos singulares los que votaren en
ciones. las consultas de las materias de gobierno con
LEY XIV. las razones en que los fundaren , para qué con
D. Felipe IV en la ordenanza 14 de 1636. mayor noticia de lo que sintiere el que se apar
tare de: 1a común del consejo resolvámoslos ne*
Que en materias graves de gobierno concurra todo
el Consejo : en las demas no menos de tres , y en las • gocios ;.y fiamos tanto de ios que enéi nos sir
de justicia los que está dispuesto. ven , que entendemos será igual en todos el
■celo de que se acierte à disponerlo mejor*
Para las materias universales de gobierno
como hacer leyes y pragmáticas, declaración ó
derogación de ellas, fundaciones de audiencias)
D. Felipe IV por decreto de 5 cíe agosto de 1628. Y
erecciones de iglesias y desmembración , divi eu la ordenanza 17 de i656.
sión y unión de ellas y otras materias que al
parecer del presidente ó gobernador sean gran Qué sé guarden las órdenes del R e y , y en tas con
sultas se espresen las que. pudieren embarazarlas.
des: Mandamos que concurra y esté junio todo
el consejo y los que.se bailaren presentes en Por cuanto nuestras reales órdenes deben
él antes que se aparten y dividan salas ; y que ser observadas ¡)ara mejor disposición y acierto
en las demas cosas que no sean tan grandes ni de las materias, encargamos á los del consejo
graves ,, baste concurrir y concurran los conse de Indias la ejecución do ellas; y ¡>ara que sea
jeros que pareciere al dicho presidente o go mas puntual de aquí adelante en los casos que
bernador ; de modo que como en las materias se ofrecieren , en que en todo ó en parte se
de justicia hay menor cuantía , la pueda haber pueda contravenir á alguna orden , sin inter
y haya también en las de gobierno, asistiendo pretarla ni declararla , se nos dará cuenta en las
para estas en la sala mayor dos consejeros con el consultas ele ia dicha orden que puede embara
presidente ó gobernador, y no tres consejeros, zar loque se consultare; con las causas que pue
y para las visitas y residencias y pleiLus de jus den obligar á disponer en aquel caso.
ticia los declarados en otras leyes de este tí LEY XVML
tulo.
D, Felipe IV por decreto de t.° de julio de 1651. Y
en la ordenanza 18 de 1656. Para la junta de Guer
D. Felipe II en la ordenan/.a 52 de e! Consejo. Y ra se vea la ley 81 ele este título.
1). Felipe IV en la 15 de 1656. Que dé las órdenes del R ey, que calificadas por el
Que las causas de gobierno y gracia se resuelvan con Consejo puedan tener dos sentidos, se le pida decla
la mayor parte., y en iguales se consulte; y para le ración.
ves ó derogarlas, concurra las dos partes , y con
sultu. Mandamos à los de nuestro consejo ele In
dias que de las órdenes que le envia mos'en que
Cuando en el consejo se trataren negocios que pudieren caber dos sentidos ó mas.nos pre
de gobernación y gracia, y resumidos los votos, gunten la inteligencia que deben tener,^ babien-
o ^ 53 l
no fueren conformes, se esté por loquela ma do calificado el consejo por mayor parte, si hay
yor parte determinare , y habiendo votos igua duda ó no la hay en las dichas órdenes; y que
les , se espere al consejero ó consejeros del con en todo aquello que fuere de esta calidad, aun
sejo que aquel día no hubieren asistido, y con que este* en ejecución , se nos pregunte en esta
sus pareceres , y de los que concurrieron p ri forma, avisándonos lo que se ¡practica, para que
mero se esté à la resolución de la mayor parte Nos declaremos loque mas conviniere y hu
de votos; y en caso que los vuelva á haber igua biere sido nuestra intención.
les , se nos consultará con los motivos de una
parte y de otra, para que sobre,ello tomemos LEY XIX..
la resolución que convenga, cou declaración D. Felipe IV por decreto de 14 de agosto de 1627.
que para hacer leyes nuevas , ó revocar las an Y en la ordenanza 19 de 1656.
tiguas, no baste la mayor parte de ios votos del Que el Consejo remedie los daños que se hubieren
Del consejo y junta de guerra 157
causado d terceros por órdenes que se hayan dado. estuvieren ausentes u ocupados en otros minis
terios, se nos consulte con el ultimo acuerdo el
Ordenamos á los de nuestro consejo de lu - primero que se tuvo, y por que jueces, y los
• días que si en las materias que le tocan por h e
motivos en que se fundaron.
cho propio nuestro, o por órdenes que haya
mos dado, sé hubieren causado algunos danos LEY IIÍI .
ó agravios de terceros, los remedien y hagan D. Felipe II en la ordenanza 2 de el Consejo. D. F e
que se les dé satisfacción , y procuren saber y lipe IV en la 23 de L656.
entender si en los tributos (que pagau los rei Que el lunes primero del mes se avise al Rey de lo
nos, -cuyo gobierno toca al dicho consejo , y en que hubiere que consultar , y siendo negocio de pri
la administración y cobranza de ellos hay algo sa , lo consulte el presidente solo , y todos señalen
que reformar y remediar, y lo hagan de .forma . las consultas.
que en esta parte quede segura nuestra con El primer lunes de cada mes, habiendo én
ciencia, y Nos cierto de que se hace todo lo que el consejo algunas cosas y negocios remitidos' á
cabe en la posibilidad de nuestra hacienda, y se consulta, sé nos dé aviso de ello, para que Nos
.compadece con los otros gastos precisos y ante ordenemos cuando y como se nos hayan de ve
riores, á que está obligada , ordenándolo asi á nir á consultar-, y si entretanto se ofreciere al
ios tribunales inferiores por quien esto corriere, gún negocio que requiera presta y breve deter
\y pidiéndoles cuenta; de lo que hicieren. minación , es nuestra voluntad que nos lo ven
ga a cousultar el presidentfe ó gobernador sólo
si á él no le pareciere alguna vez traer alguno
D. Felipe IV por decreto de 26 de noviembre de del consejo, que en tal caso lo podrá hacer
1622. Y cada, ordenanza 20 de 1656. cuándo'Convenga; y cuando la consulta se h u
■' Que en »1 resolver ycoasultar los negocios por eon- biere de hacer por escrito, mandamos que ven
secuencia de otras , se advierta el estado presente de ga señalada del presidente y los del consejo.'
las cosas,
El consultar y resolver algunos negocios 0 . Felipe II en la ordenanza 16 de el Consejo Y don
por la consecuencia de lo que se lia hecho en D. Felipe IV en la 21 de 1636.
utros, trae consigo muy grandes hincón venien Que las leyes y provisiones se publiquen dónde, y
tes, porque no en lodos pueden concurrir unas cuando convenga , salvo si pareciere que alguna sea
mismas causas y circunstancias*, y asi encarga secreta.
mos à nuestro consejo deludías, que cuando se Los del consejo de ludias procuren siem
hubiere de tratar y consultar negocios de esta pre dar orden que nuestras leyes y provisiones
calidad, y que se tuvieren por ordinarios, sé que de aquí adelante diéremos se publique»
advierta mucho al estado, que las cosas tuvie donde y cuando convenga , y que de la publi
ren al tiempo que se tratare de ellas y se hu cación y cumplimiento de eilas se tenga siem
biere de haeer la consulta, para que con esta pre en el consejo aviso y certificación , salvo si
consideración se traten y resuelvan las materias pareciere, que alguna provisión sea secreta,
mas ajustadamente. porque en tal casó mandamos que no sé baga
publicación. Y para que se entienda las qué se
han dé publicar ó n o , ordenamos que en las
D. Felipe IV por'decreto de 29 de setiembre de
l628. Y .en la ordenanza 21 de 1636. que se:hubieren de publicar se ponga 1-á forrUa,
tiempo y lugar en que se publiquen,
Que espresil las calidades que ha de tener (a costum
bre á que se refieran las mercedes del Rey. / LEY &%. V, .
Cuando Nos fúcrémós servidos de confor : O. Felipe ÏÏ en la ordenanza 8 de el Consejo. D F e
marnús en respuéitá de consulta, éoh! lo: qúe lipe iV en ia 25 de 1Ó36. .
parece, siendo costumbre: Declaramos que esta Qüe él Consejo procure saber cómo se egecuta lo
no se ha de entender en dos o tres actos solos, proveído , y castigue d quien no U) guardare. .
sino en muchos continuados, sin interrupción De poco fruto y'provecho seria e! continúo
ni orden en contrario,. Y para que tengan efec cuidado qué tenemos y mandamos poner én
to las mercedes que hiciéremos con este presa-: proveer cosas acordadas y convenientes para éi
puesto, se han de fundar en costumbre.asenta buen gobierno de las Indias , si en Ja ejecución
d a, íija, sin alteración ni prohibición en con y cumplimiento de ellas hubiese remisión ó ne
trario, y con muchos actos ¿h: él. iüisnio género gligencia, .por lo cual los de nuestro consejo de
que la confirmen. indias procuren siempre saber y entender co
mo se cumple y ejecuta lo proveído y ordena
do por Nos, castigando con rigor y demostra
D. Felipe III en la ordenanza dada en Valladolid á
16 de marzo de 1609. L>. Felipe IV en la 22 de 1636^ ción de justicia á las porsonas que por malicia
ó negligencia lo dejaren de cumplir ó ejecutar.
Que lo acordado por el Consejo no se pueda alterar
sin los que lo votaren, ó por consulta.
Ordenamos y mandamos que lo que una D. Felipe i l en la ordenanza i 8 v 36 del Consejo. D.
vez se acordare en el consejo , siendo materia ó Felipe LY en la 26 de X656.
cosa que so nos haya de consultar, no se pueda Que en el Consejo haya libros de acuerdos y consul
alterar sino fuere en presencia de ios que se tas de inventarios, descripciones y bulas.
hallaron á lo primero ; y si fueren muertos ó Mandamos que en nuestro consejo de in-
TOMO r. 4o
5<í>
t> 0 Libro n. Título n.
dias haya un ïïbr'o en que luego como se acord las demas cosas de gobierno, de manera que de
elare que algún negocio se nos consulte, (lemas todas pueda ir, y vaya.respuesta en las prime
de-tomarlo por memoria el que hubiere de or ras ocasioues de navios , ilota ó barco de aviso.
denar la consulta , se ponga la substancia de lo
(pie se nos hubiere de consultar, y en él se pon
gan también loS acuerdos del consejo que al
presidente pareciere y haya otro en que se pon- D. Felipe IV en la ordenanza 28 de 1636,
an todas las consultas que se nos hicieren, y
S espues en ellas lo .(pie nía miáremos y respon
Que el Consejo ponga rriudho cuidado en el despacho
de tas filólas-y avinadas y administración dé la
diéremos, todo reducido ai estilo de los secreta averia.
rios , como se practica en todos nuestros conse
jos y tribunales que nos consultan, y el uno y Porque una de las cosas rnas necesarias y
convenientes para la es tensión y publicación dei
Otro libro esteu guardados en ei consejo con mu
Santo Evangelio, exaltación de nuestra santa fe
cho secreto; y'haya otros dos libros de inveuta
católica y religión en nuestras Indias, bien uni
rios, para cada secretario el suyo, donde por
versal de süs naturales, y aumento y conserva
mayor y menor se pongan los papeles y pliegos
ción de tan grandes reinos y provincias^ ha si-
que vinieren de las Indias, y Se tenga razón de
todos ellos, y por ella se puedah pedir y ver; y d o y es la dependencia y correspondencia que
otro libro de las descripciones en la forma que han tenido y tienen con estos, v porque esto se
ha hecho y hace por medio de las flotas, armadas
se previene por la ley tí de este titulo; y otro
y navios que han ido y van á las Indias y vienen
libro en que se pongan traslados autorizados de
todas las bulas y breves apostólicos, y otros ins de ella, de que también se ha seguido y sigue ha
trumentos y escrituras importantes que baya ber crecido y engrosado el trato y comercio de
en el consejo, y pueda ser necesario verse algu estos y aquellos reinos, en gran beneficio de
nas veces, y los origínales de ellas esten en el nuestros vasallos y naturales de ellos, y de nues
archivo del consejo, ó en el de Simancas, de las tra real hacienda, y para su continuación y
cuales asimismo haya algunos traslados sueltos, eenservaeiott se fundó, y está fundada en Sevi
también autorizados, para que siendo necesario lla la casa de contratación, y los jueces oficiales
usar de ellos en alguna parte fuera del consejo, y ministros que tenemos en ella, y la averia con
que se despachan las armadas, y capitanas y al-
se puedan llevar sin el dicho libro-
mirantas de flotas y otros navios necesarios:
LEY XXVII. Mandarnos que nuestro consejo de las Indias
ponga todo el cuidado y diligencia que fuere
D. Felipe 11 en la ordenanza 15 de el Consejo D, Fe posible en esto , como lo acostumbra hacer, y
lipe IV en la 27 de 1G56<
de él confiarnos, y para que las dichas flotas,
Que el inventariar y leer cartas de Indias se prefie armadas y navios se despachen y vayan á sus
ra d otros negocios, y se vaya luego respondiendo tiempos, sin perderle en ello, de buenas naos
d ellas. y bajeles, bien prevenidas y pertrechada?, y
Porque de las cartas de los vi reyes, audien en la buena administración de la dicha avería,
cias y otras personas, asi públicas como particu y que en todo esto se guarde con mucho rigor
lares, que de las ludías y de la casa de la con y puntualidad lo que está dispuesto, ordenado
tratación de Sevilla , y otras partes se nos escri y mandado por órdenes, cédulas e instruccio
ben, resultan las mayores noticias para mate nes que estan dadas, como eii cosa de tau gran,
rias de gobernación, á que se debe mucho aten de importancia, y en que tanto se aventura la
der, por lo que importa : Mandamos que luego pérdida de gente y hacienda , comercio y de
que se recibieren cuatesquier cartas ó despa pendencia, no yendo las dichas ilotas, armadas
chos que se nos enviaren , se lleven al'consejo, y navios à sus tiempos y como conviene.
y en el se lean todas consecutivamente, y el
consejo no se detenga mientras se leyeren, á
proveer ni determinar cosa alguna de lo que en D. Felipe IV por decreto de 18 de diciembre de 16¿6.
ellos se escribiere, mas de ir apuntando lo que Y en ia ordenanza 29 de 1636.
pareciere convenir proveerse, prefiriendo siem Que no se libre por el Consejo cosa alguna en las
pre el abrirlas y leerlas á todos otros cualesquier cajas de las Indias sin consulta particular.
neo-ocios, aunque mas graves é importantes sean,
hasta haber visto y sabido lo que en ellas se es Conviene à nuestro servicio que en las ca
cribiere, porque à causa de no se leer luego 1 jas reales de las ludias no se libre de aquí ade
no se deje de saber de algun negocio importan lante ninguna cantidad para niuguu efecto; y
te, en que convenga proveer con brevedad, y aunque las que estuvieren dadas es justo que se
siendo leídas, los nuestros secretarios saquen en cumplan y también las cosas ordinarias que allí
velación la sustancia de ellas , y dejando en el se suelen librar, nuestro consejo de las Indias
arca ójarchivo del consejo las que pareciere estará con cuidado de no librar nada de aquí
que queden, lleven las demas á sus oficios, y adelante en las dichas cajas-, y si alguna ves fue
sóbrela mesa del consejo no quede jamas carta re preciso hacerlo, primero nos lo consulte, ha *
ni escritura secreta-, y en los primeros consejos ciendo relación de esta ley.
que se siguieren se platique y vaya respondien
do apuntadamente, y resolviendo lo que de ellas
resultare que proveer, por ia orden y (orina que D. Felipe III en la dicha orden, dada en Madrid á
Del consejo y junta dé guerra. 159
16 de marzo de 1609. D. Filipe XV en la ordenanza tír y doctrinar los naturales de ella, conforme
30 de ióofí. à las leyes dé este titulo, y de nuestro patro
Que. el Consejo con mucha atención inquiera perso nazgo real
nas, que consulte para lo eclesiástico y seglar de las\ ■ LEY XXXIII.
Indias.
D. Felipe II én las ordenanzas 7 y 9 del Consejo.
Considerando lo mucho que importa el :¡ • B. Felipe IV en la 35 de 1656.
acertamiento de las elecciones y ministros Que para ministros de justicia y hacienda se bus-
para el bien público y bueq gobierno de nues ■ quen personas convenientes.
tras ludias , islas y provincias de ellas : Man Ordenamos y mandarnos à ios de nuestro
damos y encargamos à los de nuestro con consejo de Indias que con graneles diligencias
sejo de Indias , que teniendo presente el ser y cuidado busquen siempre para ministros de
vicio de Dios nuestro Señor y nuestro, y la justicia tales personas, y de tanta virtud, cien
confianza que hacemos de sus personas, esten cia y espériencia, cuales convengan al servicio
siempre muy atentos, y con el- cuidado y reca de Dios nuestro Señor y nuestro, encargando
to que es menester, para proponernos, asi para les que la administren igualmente y como de
las prelacias, dignidades, prebendas y otros be ben, y castigando con rigor a'los que asi no lo
neficios eclesiásticos, como para las presidencias, hicieren: y para nuestra real hacienda, minis
plazas de asiento, y los demas oficios de justicia tros y oficiales de quien se puede confiar que
y hacienda, personas de las calidades, letras, será acrecentada, y que habrá en ella el buen
virtud, entendimiento, suficiencia espénéiicia recaudo, seguridad y guarda que conviene.
y aprobación que conviene, y res pe.cti ya nien té
fuere, y es necesario para ellos, y nos las con
sulten con relación de sus partes y calidades, D. Felipe III en 3a ordenanza <le 1609, D. Felipe IV
como lo tenemos ordenado. por decreto de 23 cíe julio de 1627. Y en la ordenan
za 34 de 1636.
Que se consulten en las plazas mayores sidor es de
las menores , y se atienda á la promoción de todos.
D; Fél ipe IV por dec.r^io de 8 de marzo de 1625. Y
24 de marzo de 1628. V eu la ordenanza 5 1 4 tí 1636; Nuestro consejo de las Indias tenga cuidado
Que en proponer sugetos pura iglesias se tenga mu de consultarnos en plazas menores á los que
cha j tención , y no se consulten los presentes no comenzaren á servir; y cuando vacaren plazas
siendo de muchas partes. mayores nos consulten sugetos de plazas meno
La elección de los buenos prelados, asi para res de una audiencia para otra. Y porque las
descargo de nuestra real conciencia, eomo para promociones en los oficios de justicias son muy
el gobierno espiritual de los feligreses, es de convenientes, asi para premiar á los que lo me
tanta consideración , que en ninguna cosa, de recen (que suele ayudar mucho à hacer ellos, y
seamos mas el acierto, por lo cual encargamos otros con ia esperanza loque deben) como p a
mucho á los de nuestro consejo de Indias la ra desarraigarlos de las amistades, que cobran
atención en los que se nos propusieren para las en las partes donde estan largo tiempo: los del:
iglesias de ellas, y que hagan particular examen dicho nuestro consejo en las consultas que nos
de la virtud, letras y demás partas que requie hicieren tendrán atención á ello.
re el ministejio, en que tanto cuidado se debe
poner, por la obligación precisa que corre de D. Felipe 111 en la.dicha ordenanza de 1609. Y don
elegir á los que. fueren mas beneméritos, y no Felipe I V en la 55 t ic 1656.
nos consulten sugetos, asi clérigos como reli Ql>c para una audiencia no se propongan parientes , .
giosos que se hallaren presentes en la corte que deudos ni allegados.
hubieren venido do las Indias « pretender y es
tén en ella ó en Sevilla, por esc usar lo masque Los de nuestro consejo de Indias estarán ad
se pueda todo género de negociación , no sien vertidos de no proponer cuñadosni primosiliev-
do estos sugetos de tales partes y de tanta satis manos, ni otros deudos mas propinquos-para
facción del consejo que se escluya toda sos una audiencia', por escusar ¡a parcialidad' que
pecha. de ordinario es de mucho inconveniente. Y
porque podría haber el mismo en los que son
de un colegio, y casi tan grande en los natu
D. Felipe II en la ordenanza 46 de el Consejo. Y don rales de un pueblo, tendrán consideración a to
Felipe IV e u iu 3 2 de 1636. do esto en lo que sernos consultare.
Que en la. provisión de beneficios y oficios sean pre L E j. X X X Y l.
feridos los que hubieren servido en las Indias.
D. Felipe II en la ordenanza 47 de el Consejo. Y don
Mandamos que los de nuestro consejo de In Felipe IV eu la 56 de 1656.
dias, y los que tuvieren a su cargo la provisión Que no pueden ser proveídos en oficios, ni beneficios,
y nombramiento de personas para los oficios y parientes de consejeros , ni sus fam iliares, ni di
cargos, dignidades y beneficios que.para las In otros, como se declara..
dias, y en ellas se hubieren de proveer, prefie Mandamos que ningún pariente.por eonsa-
ran siempre á los beneméritos y suficientes que guinidad , ni afinidad dentro del segundo gra
en aquellas partes hubiere, ó que en ellas nos do , criado ni familiar de los del consejo de In
hubieren servido ó sirvieren , asi en pacificar, dias, ni de los oficiales salariados de é l? ni de
poblar y ennoblecer la tierra, como en eonver- los vireyes, presidentes nroidores de iasaudien-
IGO Libro ii. Título- a.
cías, ti i de otras personas que los liaban cíe pro éiori de las qué nos pareciere mejor, y dé lo que
veer1, puedan ser proveídas en nhigu» oficio, Nos resol viéremos, se le dará aviso al presiden
dignidad ni beneficio perpetuo, ni temporal de te, para que lo diga á la parte, y despues que
las’ í tulias, ([lio Nos por su nombramiento lia 1lo haya aceptado, lo díga asimismo en el dicho
ya uros do proveer y presentar, ó ellos por co consejo.
misión o poder nuestro, pena de que ios pro • LEY XXXIX.: -
veidos pierdan los oficios y salarios que de ellos
D. Felipe iV por decreto de 25 de mayo de 1625.
hubieren llevado, con otro tanto mas para núes T en la ordenanza 39 de 1656.
tra cámara y fisco, y de los que los proveyeren
y propusieren nos tendremos por deservido, Que en las consultas solo se propongan tres per •
sonas.
salvo cuando por justas causas pareciere con ve»
mente en algun caso particular hacer lo contra En las consultas que nos hicieren para
rio, porque entonces permitirnos que se pueda prelacias , prebendas eclesiásticas’) plazas de
hacer, diciéndolo y declarándolo es presamente, asiento, corregimientos y otros oficios , se nos
en las consultas, para que con noticia de ello propongan solamente para cada uno tres per
hadamos lo que fuere nuestro real servicio. sonas.
LEY X X X VIL LEY XL.
D. Felipe IV por decreto de 14 de agosto de 1627. Y
D. Felipe II en la ordenanza 45 de e! Consejo. Y don en la ordenanza 40. Y en esta Recopilación.
Felipe IV en la 57 de 16 j 6.
Que el Consejo castigue « los (fue en sus oficios hiele-
Que en la provisión de los oficios no intervenga p re· ren cosas indebidas.
ció ni interés.
Ordo liamos y mandamos que en la provisión Encargamos á los do nuestro consejo de In-
de los cargos y oficios, los del consejo no con dias que si los ministros de justicia , y otros
sientan ni permitan que intervenga ningún gé cualesquiera sujetos á su jurisdicción, asi en es
nero de precio ni interes por via de negocia tos reinos corno en los estarlos de las Indias, hi
ción, venta, ni ruego, directa ni indirectamen cieren vejaciones ó agravios á las partes, ó cosas
t e , pena de ser mandado castigar por Nos gra indebidas, los castiguen severamente, porque
vemente el que lo consintiere ó disimulare , y no se les imputen las culpas que los susodichos
que las personas proveídas en cyalesquier ofi cometieren, y los delitos sean castigados.
cios por semejantes medios los pierdan, con to LEY X'fLI,
do lo que hubieren dado por ellos para nuestra
cámara, y queden inhábiles para poder tener D. Felipe l i en la ordenanza 21 de el Consejo. Y don
Felipe IV en la 4 i de 1636.
de Nos otro algunos.
Que lodo el Consejo haga las gratificaciones f tner~
LEY X X X V íII* cedes.
D. Felipe II en Madrid á postrero de enero de 1591. Mandamos que ninguna petieion de merced
[>; Felipe IV en bi ordenanza 38 de 1636 se responda ni decrete, y que ninguna merced
Que las consultas de oficios se hagan por todo el ó gratificación de servicios se pueda hacer «i
Consejo en la forma que estuviere dispuesto. haga sino se ballaren à ello el presidente y to
Cuando estuvieren vacos, ó vacaren en nues dos los del consejo que estuvieren en él.
tras Indias, islas y Tierra Firme del mar Océa LEY XLII.
no algunos arzobispados, obispados, dignidades,
prebendas, canongtas y otros cuaiesqirier bene D. Felipe II en las ordenanzas 19 y 20 del Consejo.
ficios eclesiásticos que fueren á nuestra provi Y don Felipe IV en la 42 de 1636.
sión, y los cargos de v¡reyes, presidencias, pla Que en las consultas de mercedes se pongan los ser·
zas , gobernaciones, corregimientos y otros ofh vicios y por donde constan, y haya libro de ellos.
cios de asiento ó temporales, y los que se pro En las consultas que se nos hicieren de
vee» y han de proveer para la administracion mercedes y gratificación de servicios se decla
de nuestra hacienda en las Indias y casa de ren cumplidamente las calidades, méritos y ser
contratación de Sevilla, como son contadurías, vicios de las personas por quien se hicieren la-s
tesorerías, factorías, veedurías ú oficiales de consultas y los testimonios, y razón por dónde
nuestro consejo de las Indias, que fueren de se sabe, declarando cómo y dónde hubieren
consulta, y todo lo demas que estuviere vaco y servido, y la gratificación que seles hubiere
vacare, eclesiástico 6 seglar que Nos hayamos hecho en dinero, ayudas de costa y otras cosas,
de proveer y se nos haya de consultar, se trate y la contradicion de nuestro fiscal, en los casos
en el dicho consejo de todas las personas que y cuando la hubiere j y para que esto se cum
parecieren á proposito, y demas partes asi pro pla mejor, en poder de nuestros secretarios ba
puestas por el presidente, como por los del con ya libro y razón de las dichas ayudas de costa y
sejo, y de estas se nos consulten las que ai pa mercedes que hubiéremos hecho, y le tenga ca*
recer de cada uno tengan mas partes para lo que da uno de ellos de las provincias y parles que
se hubiere de proveer, en la forma que por ór tocan á su oficio.
denes ó decretos nuestros estuviere dispuesto, y
la consulta que se hiciere, señalada de todos en LEY X LIIL
la forma dicha , se nos envie, para que de las D. Felipe IV por decreto de el Pardo á 5 de febre
dichas personas ó de otras , Nos llagamos elec- ro de 1625, cap. i.° Y en la ordenanza 45 de 1656.
Del consejo y junta de guerra. i G1
Que no se admita memorial de servicios ele que no tender oficios ú ocupación en nuestro servicio,
constare por certificaciones. y el consejo podrá ponderarlos en sus consul
No se admita ningún memorial ele servicios tas, aunque esten premiados •, pues en este ca
de ninguna persona, si no constare de ellos por so, teniendo las partes necesarias , es justo se
nertifieaciónes de vireyes, generales u otros ge- tenga consideración á haber servido sus pa
fes, debajo de cuya mano hubieren servido, sados.
escepto de los que sirvieren en los consejos. LEY XLIX.
D. Felipe IV en Madrid á 11 de octubre de 1635. Y
' LEY XLIV. en esta Recopilación.
D. Felipe 1Y en el dicho decreto fie 625 , cap. 3. Y Que los que pretendí eren por haber tenido cargos y
en la ordenanza 44 de 163o. oficio*, presenten testimonio de la residencia que de
Que el pretendiente por servicios de otro haya de ellos dieron.
verificar que le pertenecen. Mandamos que á todas y cualesquier perso-
El que pretendiere por servicios de otro, ñas que acudieren á nuestro consejo de las indias
aunque sean de su padre, demas de mostrar con sus papeles, y certificaciones, y representa
que no estan premiados , ha de verificar que le ren servicios de haber gobernado, y tenido à su
pertenecen : y los papeles que se presentaren cargo algun oficio, ú oficios de administración
para esto, los califique el consejero togado mas de justicia en las Indias, se les pida en las secre
antiguo y el secretario, declarando si le perte tarías testimonio de haber dado residencia, y de
necen, y cuánta parte de ellos, y conforme á la la sentencia de ella , y.se añada en sus relacio
calificación que se hiciere se consulte por el con nes lo que por ei dicho testimonio constare , y
sejo. de otra forma no se les admitan sus papeles, ni
LEY LXV. pongan sus relaciones en ninguna de las pro
D. Felipe IY en el dicho decreto de 1625 , cap. 7. Y
posiciones que se nos hicieren.
en la ordenanza 45 de 1636.
LEY L.
Que en el memorial que se diere se pongan .todos los
servicios, y despues no se admitan. D. Felipe IV por auto acordado del Consejo 172, en
Madrid á 25 de noviembre de 1638. Y en esta Re
Cuando alguna parte diere memorial, pdn- copilación.
ga en él todos los servicios que hasta entonces Que d los que hubieren servido oficios no se les des-
hubiere hecho, porque despues no se le admi pachen titulos de nuevas mercedes si no presentaren
tirán, y los de nuestro consejo real de las ludias certificación de haber satisfecho las condenaciones
estarán advertidos de no admitirlos. que resultaren de sus residencias.
TITULO TE23.0EE.0.
+áa"*
TITULO GIMO®.
D e l fiscal de el consejo re a l de las In dias.
LE Y P R IM E R A . mas de la obligación y cargo que por razón de
D. Felipe II en la ordenanza 51 del Consejo. D. F e su oficio tiene de defender o pedir lo tocante á
lipe IV en la 98 de l.° de agosto de 1636. nuestra jurisdicción , patrimonio y hacienda
Que a l fis c a l toca la d e fe n sa d e la ju r is d ic c ió n , p a
real, tenga particular cuenta y cuidado de in
trim o n io y h a cienda rea l, y sa b e r cóm o se c ú m p le lo quirir y saber cómo se cumple y guarda lo que
p r o v e íd o , y la p ro te cc ió n d e los in d io s.
por Nos está proveído y ordenado para la bue
El fiscal de nuestro consejo de Indias, de- ! na gobernación de las Indias, y pedir que se
TOMO . 45
178 Libro in. Título v.
guarde y ejecute, dándonos aviso en nuestro viere necesidad, y que pidiere para el cumpli
consejo cuando no se hiciere , especialmente lo miento de su oficio, dejando conocimiento de
que fuere en favor de los indios, de cuya pro Lodos los que recibiere, y que habiendo usado
tección y amparo, como de personas pobres y de ellos los vuelva á quien se los hubiere en
miserables, se tenga por muy encargado, y con tregado.
grande vigilancia y cuidado pida y solicite LEY V.
siempre lo que para el bien de ellos convenga. D. Felipe II en la ordenanza 55 de el Consejo; Y don
Felipe IV en la 102 de 1636.
L E Y II.
Que el fiscal se hallé d la vista de ¡as visitas y resi
Provisión del Consejo de 9 de junio de 1584. Orde dencias, y para las cosas de su oficio se pueda escu^
na nza de 1571. Y don Felipe lV en la 99 de 1636. sar las tardes con licencia de el presidente.
Y en esta Recopilación.
El fiscal tenga vistas las visitas y residencias
Que el fiscal tenga cuidado de saber el estado de los cuando se hubiere de ver en el consejo, y se ha
pleitos de la real hacienda que se siguieren en la
casa de contratación de Sevilla, y en las Indias. lle presente á la vista, y para que tenga mas lu
gar de verlas, ordenar las peticiones y otras co
Mandamos que los fiscales de nuestro con sas que tocan á su oficio, teniendo en que ocu
sejo de Indias tengan continuo y especial cui parse, pueda dejar de ir al consejo las tardes,
dado de saber si los ministros, oficiales y escri pidiendo licencia para ello al presideuté; *
banos de la casa de contratación de Sevilla acu
den con la puntualidad que conviene al breve LEY V I.
y buen despacho de los pleitos y negocios to D. Felipe II en la ordenanza 58 de el Consejo.'Y don
cantes à nuestro fisco y real hacienda, que an Felipe IV en la 403 de 4636.
te ellos pendieren y se trataren, de forma que Que el fiscal no dilate los pleitos, y con haberle dado
sean preferidos á otros particulares cualesquier, traslado; ó llevándose el proceso . se tengan por he
que en la dicha casa se siguieren: y para que chas las notificaciones.
mejor se cumpla lo susodicho, y lo demas por Ordenamos al fiscal que no dilate los plei
Nos mandado y proveído, tengan á su cargo tos en que el fisco fuere reo, ni detenga los pro
informarse, y saber sí los proveídos y ocupados cesos de ellos*, y para que las notificaciones de
en oficios de nuestras Indias dejan de enviar en peticiones , y otros autos que se le hicieren, se
cada un año á nuestro‘consejo razón dé la for tengan por hechas, baste haberle dado traslado
ma y puntualidad conque cumplen lo susodi de ellas, ó llevádole el proceso, constando de
cho, y las demas obligaciones de sus oficios, se ello por testimonio de escribano, sin ser nece
gún les está mandado y ordenado, y contra los sario que ponga de su mano que se las da por
<pie lo dejaren de hacer asista, y haga las ins notificadas.
tancias necesarias.
L E Y V IL
LE Y III. I). Felipe II en la ordenanza 59 de el Consejo. Y don
D. Felipe II en la ordenanza 53 de el Consejo, Y don Felipe IV en la 404 de 4656.
Felipe IV en ia 100 de 1636.
Que al fiscal se dd traslado de las peticiones de mer
Que al fiscal se entreguen los despachos dados de cedes ó gratificaciones que pidiere , y pueda decir
oficio , ó d su pedimento, para que el los envíe d las contra ellas.
Indias.
El fiscal pueda decir y alegar lo que le pa
Para que el fiscal mejor pueda cumplir que conviene á nuestro servicio, contra
r e c ie r e
con su oficio: Mandamos que todos ios despa las peticiones de mercedes ó gratificaciones de
chos que en el consejo se proveyeren de oficio, servicios, y contra las informaciones y parece
á pedimento suyo, se le entreguen, para que res de las audiencias que para ello se presenta
el los envíe à los fiscales de las Indias, ó á las ren , de todo lo cual se le dé traslado todas las
personas á quien fueren dirigidos , los cuales en veces que le pidiere.
nuestro nombre, y del oficio, hagan las ins
tancias y diligencias necesarias á los negocios LEY V III.
que se les entregaren, y hechas las envien al D. Felipe II en la ordenanza 60 de el Consejo. Y don
dicho fiscal, y de los despachos que se le en Felipe IV en la 105 de 4656.
cargaren quede memoria en poder de los se» Que cuando el fiscal pusiere demanda u otro contra
creíanos y escribano de cámara del consejo, él, el Consejo si le pareciere, la pueda admitir y co
para que por ella se le tome cuenta de las dili nocer de ella
gencias que hubiere hecho. Cuando el fiscal de nuestro consejo pusiere
LEY IV. nueva demanda en él à alguna persona sobre
negocios tocantes á Indias: Mandamos, que pa
D. Felipe IV eu la ordenanza 54 del Consejo. Y en la reciendo á los del consejo que conviene se trate
.101 de 1056. del dicho negocio en él, se puede admitir la
Que cd fiscal se entreguen las informaciones, me demanda y conocer de ella, y lo mismo se ha
moriales, capítulos de cartas y escrituras de que tu ga cuando alguna persona pusiere demanda al
viere necesidad, dando conocimiento de ellos.
fiscal en el consejo.
Mandamos que se entreguen al fiscal todas
las informaciones, memoriales, capítulos de
cartas y otras escrituras y papeles de que tu
Del fiscal dei conscio. 179
LEY IX . costa otro tanto como uno de los del consejo, y
su lugar y asiento sea en éi el primero despues
D. Felipe II en la ordenanza 61 de el Consejo. Y don
Felipe IV en la i0 6 de 1636.
de los de el consejo.
Que elfiscal cumpla en las recusaciones candar por LEY XV.
depositario de la pena al receptor de el Consejo.
D. Felipe IV en Madrid á postrero de-julio de 1653.
Declaramos que en las recusaciones que el Y en la ordenanza 112 de 1636.
fiscal de nuestro consejo de Indias luciere en Qué el fiscal cumpla con que la certificación de ha~
lugar de depósito para la pena de la recusación, ber traído al Consejo cada lunes relación de los plei-
cumpla con dar por depositario de ella al re tos fiscales sea del secretario mas antiguo.
ceptor de penas de cámara de el dicho con
sejo. Porque tenemos ordenado y mandado, que
todos los fiscales de nuestros consejos para co
LE Y X. brar sus salarios, tengan obligación de presen
D. Felipe II en la ordenanza 56 de el Consejo. Y don tar al pagador de los dichos consejos certifica
Felipe IV en la 107 de 1656.
ción del escribano de cámara mas antiguo del
Que el fiscal tenga libro y copia de los asientos y consejo donde nos sirvieren , de que todos los
cuenta del cumplimiento de ellos. lunes de cada semana traen relación y memorial
Mandamos que el fiscal tenga libro y copia délos pleitos fiscales que están pendientes, y en
de todos los asientos y capitulaciones que se to que Nos somos actor, para quese vean y determi
maren y asentaren con Nos, y á sus tiempos y nen con relación del estado que cada uno tuviere.
plazos, solicite el cumplimiento, y tenga cuen Y porque en nuestro consejo de las Indias ha
ta y razón de lo que de ellos se cumpliere ó estado siempre en costumbre desde que se des
dejare de cumplir. pachó esta orden, el dar la dicha certificación
el secretario nuestro mas antiguo, que en él re
LE Y XI. side, y no el escribano de cámara: Ordenamos
D. Felipe II en la ordenanza 56 de el Consejo. Y don
Felipe IV en la 108 de 1636.
y mandamos que asi se guarde, y que en vir
tud de la dicha certificación, dada por el nues
Que elfiscal tenga libro de lo que pidiere , y d ello tro secretario mas antiguo del consejo, el pa
se proveyere.
gador, ó receptor á quien tocare la paga del
El fiscal tenga un libro donde asiente todo salario y crecimiento de é l, de y pague al fis
lo que pidiere en el dicho consejo, y lo que á cal que fuere, lo que por él se debiere y hu
ello se proveyere. biere de haber en cada un ano, sin poner en
L E Y X II. ello reparo, ni dilación alguna, que en virtud
de esta ley, y con las dichas certificaciones y
f). Felipe II en la ordenanza 57 de el Consejo. Y dou cartas de pago de lo que en esta conformidad
Felide IV en la 109 de 1636 pagare al fiscal: Mandamos se le reciban y pa
Que elfiscal tenga libro de los pleitos fiscales , y los sen en cuenta, y que lo sobredicho se cumpla
refiera en el Consejo el lunes de cada semana , y se y guarde asi, mientras Nos no ordenáremos y
vean los primej'os. mandáremos otra cosa en contrario, sin embargo
Ordenamos y mandamos que el fiscal ten de lo dispuesto en la dicha orden, la cual para
ga libro y memoria de todos los pleitos fiscales en cuanto á lo que toca al fiscal de nuestro con
que hubiere y del estado de ellos, y el lunes sejo de las Indias, en esto derogamos y damos
de cada semana lo refiera en el consejo , para por ninguna, y de ningún valor y efecto.
que se vean, ó señale dia, y como está ordena
d o , prefiriendo siempre en la visita los en que LEY X Y I.
el fisco fuere actor á todos ios otros. D, Felipe II e n la ordenanza 24 de c! Consejo. Y don
Felipe IV en la 113 de 1636,
LEY X III. •
D. Felipe 11 en la ordenanza 62 de el Consejo. D, Fe g Que. haya dos solicitadores fiscales en el Consejo.
lipe IV en la 110 de 1636
Porque intervenga mayor solicitud y cui
Que el fiscal tenga libro de lo que se librare para dado en las cosas de nuestro fisco: Mandamos
causas fiscales. que haya dos solicitadores fiscales, que solici
Ordenamos que el fiscal tenga libro de to ten y procuren las cosas que el fiscal del con.
dos los maravedís que se libraren para prose sejo de Indias les encargare: el uno para los
cución de las causas fiscales, para que por él y negocios de las provincias del Perú: y el otro
por el descargo del receptor haya claridad de para los de Nueva-Es paña, los cuales tengan
todo lo que se gastare, y se puedan cobrar las el salario que les mandáremos dar, y no pue
costas de las personas que eu ellas fueren con dan llevar otros, de pleiteantes jr negociantes,
denadas. ni de otra persona alguna, y estén los tales so
licitadores advertidos, que han de tener cui.
LEY X IV . dado y obligación de tomar de las secretarías
I). Fejipe lie n la ordenanza 52 de el Consejo. Don y contaduría|los papeles que se remitieren, cui-,
Felipe IV en la l l i de 1656.
dando mucho de esto.
Que elfiscal tenga el mismo salario que los del Coiii
sejo , y el primer lugar despues de ellos. Que los fiscales no reciban dádivas, préstamos
El fiscal haya y lleve de salario y ayuda de ' ni otra cosa de los litigantes ni personas que
^80 Libro H. Título v.
tengan negocios, de que sean ó esperen ser de S. M . , en vacantes ríe agentes fiscales
jiscales, ley 16*, tít. 3 de este libro. nombren para estos oficios d sugetos que sean
Que donde no hubiere jiscales, los factores de letrados, auto 168- ' '
iíi real hacienda hagan las probanzas tocan- Los jiscales tienen repartimiento de obras pias
tes al fiscal del consejo, leu 4 6 , tit. 18 de aunque estén ausentes y fu era de estos rei
este libro. nos* Auto de el consejo de 17 de junio de 1658
Por decreto del consejo, proveído en 7 de no referido en el tit. 3 de éste libro.
viembre de 16o!, se mandó que los fiscales
iUX.UJu1 H
O
TITULO SIETE.
dos del consejo 142 y 143. Ve'ase con las leyes 23,
LEY PRIMERA. ■ tit. 3 de este libro , y 19, tit..i6 de él.-
Que el tesorero envíe las egécutorias d las Indias , y
£). Felipe II en la ordenanza 106 de él consejo. Y don qué diligendas han de hacer para su cobranza.
Felipe IV en la 215 de l.° de agosto de 1056.
Que él tesorero general ríe el Consejo de' fianzas del El tesorero tenga particular cuidado de en
uso de su Oficio, y que dará cuenta con .pago , y de viar las ejecutorias que recibiere de nuestro fis-
ellas haya traslado en la contaduría., : : cal á las partes de las Indias donde fueren d i
Ordenamos y mandamos que el tesorero ge rigidas y y porque de haberlas enviado a los oi
neral1de: nuestro consejo: de' I od¡ás antes de ser dores mas antiguos de las reales audiencias dón
recibido ai uso de su oficio dé fianzas legas, lla de tocaban , resulta que no se tenga noticia de
nas y abonadas en lá cantidad que se mandare las diligencias que «íi esta razón han hecho > ni
en su título, y no estando señalada en é l, en de las cantidades que han cobrado por cuenta
la que pareciere á los de el consejo, dé -qtíe ha dé las dichas condenaciones : Mandamos que
rá-las-diligencias necesarias eri la cobranza de lásique se despacharen y fueren por mano1ele el
lo qúe fuere à su cargo cobrar, ó que pagara dicho tesorero sé remitan a los 'oficiales de
de su hacienda lo que por su culpa ó negligen nuestra real hacienda dé-las partes donde re
cia se dejare de Cobrar, y qUe tendrá pro tito lo siden liuestras reales audiencias para quedas en
que cobrare, y de ello dará cuenta con pago, y treguen á lós oidorés mas antiguos que las han
pagará el alcánce dé las cuentas que se le toma de ejecutar , y tomen recibo de ellas , y escri
ren, y de las fianzas y abonos que diere haya ba á los fiscales que-tengan cuidado de solici
traslado én los libros de nuestra contaduría dé tar que se hagan las cobranzas>-y avisen todos
iás Indias por:cabeza de la cuenta’qué con el di los años a! consejo de las diligencias que hicie
cho tesorero general lia de tener. ren y estado en que las tuvieren ; y también
escriba á los dichos oidores que las ejecuten, y
LEY 1Ï. con nuestra hacienda envien lo que hubieren
D. Felipe II en la ordenanza 105 de el consejo. Y don
cobrado por cuenta aparte a la casa de contra
F elipe IV én ía 216 de 1636. tación de Sevilla consignado al dicho tesorero,
sobre todo lo cual se le den las cédulas necesa
Que el tesorero general cobre laspenas^ condenacio rias; y para que conste que ha enviado las ejecu
nes y\depósitos,, y lo demas que fu e re de su cargo, torias , ha de mostrar testimonio del secretario á
pena de pagar lo que por negligencia no cobrare , y
dé conocimiento de los despachos. quien tocaren del dicho consejo , en que dé fé
que á tantos días de tal mes le entregó un plie
Mandamos que el tesorero general sea obli go euque iba tal y tal ejecutoria, dirigidas á
gado à cobrar y recaudar todas y cualesquier tales oficiales reales, para que con su carta las
condenaciones que en el consejo se hicieren y metiese en el pliego re a l, de lo cual ha de ha
aplicaren para nuestra cámara y estrados del ber un libro en casa del dicho secretario adon
consejo, y para el gasto y pasage de los religio de se asiente todo muy particularmente: y por
sos y ministros de doctrina y otras obras pias, que podrá ser que algunas de las dichas ejecu
y las que estuvieren hechas y no cobradas, y torias se pierdan las enviará ordinariamente du
cualesquier otros maravedís y depósitos que el plicadas para que vayan en diferentes navios, y
consejo le mandare cobrar y depositar en él, y escribirá á los dichos oidores, fiscales y oficíales
para la cobranza de lo susodicho haga las dili reales en los pliegos en que fueren las ejecuto
gencias necesarias, pena de pagar de su hacien rias , y fuera de ellos , por otras vías que le den
da loque por su culpa y negligencia dejare de aviso si las han recibido, para que si se hubie
cobrar, y lome la razón y memoria de las di ren perdido se vuelvan á enviar como está o r
chas condenaciones dé! libro de ellas, que ha denado , lo cual ha de hacer hasta tener reci
de tener el escribano de cámara de justicia, y
bo de ellas.
dé en él conocimiento de los despachos que se
le entregaren para cobrarlas como está dis LEY. IV .
puesto. D, Felipe II en Madrid ó 3 de abril de 1574, cap. 5-
Y D.. Felipe IV en la ordenanza 218 de 1636.
LEY III. ■Que en- llegando flo ta s , el tesorero sepa lo que se
responde d las cobranzas, y avise de los inconvenien
J). Felipe IÏ en Madrid á 5 de abril ’de 1574, cap. 2- tes que tuvieren .
* í). Felipe 1V en la ordenanza 2i7 de 1636. Y por cé
dula de Zaragoza á 18 de setiembre de l6 í6 . Acuer El tesorero á la venida de las armadas y fio-
192 Libro u. Tltlllo TU.
tas (le las Indias ha de tener cuidado de ver si le LEY VIH.
viene la respuesta de sus pliegos, y de los in
convenientes que en la cobranza se pusieren, si Fehpe II en Madrid a 26 de octubre de 1574.
D. Felipe III allí a 15 de noviembre de 1611. Y en
hubiere algunos, dará cuenta en nuestro conse herma á 10 de noviembre de 16i2. D. Felipe IV en
jo de Indias para que lo remedie, y si no le res Ja ordenanza 222 de 1656.
pondieren , los oidores , fiscales y oficiales rea
Que las partidas de condenaciones que vinieren d la
les á quien hubiere dirigido los despachos, ni le casa se remitan al Consejo de Indias,
enviaren el dinero, asimismo ha de dar luego
cuenta de ello al consejo para que provea lo que Las partidas que vinieren de las Indias á la
convenga, lo cual todo ha de tomar por testi casa de contratación de Sevilla, asi por cuenta
monio el secretario de el consejo, para que con del crecimiento y consignaciones que estan he
estas diligencias los contadores de cuentas de él chas en ellas para salarios de los de nuestro con
le descarguen y pasen en cuenta loque no hu sejo de las Indias , como por cuenta de conde
biere cobrado. naciones y otros géneros que en cualquiera for-
ma hayan de entrar en poder del tesorero del
L E Y V. consejo, se entreguen à la persona que tuviere
D. Felipe II en la ordenanza 108 de el consejo. Y poder del dicho tesorero, y no haya ninguna
D. Felipe IV en ia 2 l9 de 1636. dilación, poniendo en ello mucho cuidado y d i
ligencia, y en el beneficio y venta de loque vi
Qae al tesorero se le entregen las egecutorias y des- niere en pasta, y aunque las condenaciones de
pachos para la cobranza, de que se tome la razan y
la dé de lo que cobrare, ó diligencias bastantes. que vinieren algunas partidas sean aplicadas pa
ra diferentes efectos en que se han de distri
Mandamos que ai tesorero del consejo se den buir conforme á las sentencias, de que resulta
las ejecutorias y despachos necesarios para co la separación, que por esta razón hay de ellas á
brar las penas , condenaciones y depósitos de él: la demas hacienda real, como en las Indias se
y en los despachos se mande que los contadores cobran en virtud de las ejecutorias las dichas
tomen la razón, y ellos le hagan cargo de lo que partidas, suelen venir ó enviarse con réplicas y
hubiere de cobrar, y el dicho tesorero dentro pretensiones cjue tienen las partes en que se ha
del tiempo asignado en las provisiones y recau de hacer justicia, no se pueden ni deben entre
dos , haga las diligencias que convenga para su gar con la demas hacienda nuestra, ni com*
cobranza, y de lo que cobrare dé certificación prenderse en la distribución de ella , que por
en el consejo, firmada de su nombre, para que otro de Jos nuestros consejos ordenáremos, y de
el cargo se le baga perfecto, y de lo que no p u como asi lo hubieren hecho nuestros presiden
diere cobrar muestre las diligencias bastantes tes y jueces oficiales de la dicha casa, nos avisa*
que hubiere hecho á satisfacción del consejo, rán en nuestro consejo de las Indias, enviando
para que quede descargado de no lo haber co relación muy particular y distinta de lo que
brado. hubieren entregado por cada cuenta,
LEY V I. LEY IX .
D Felipe II en Madrid á 5 de abril de 1574. Y don D. Felipe II en la ordenanza 109 de e! consejo. Y don
Felipe IV en ia ordenanza 220 de 1636. Felipe IV en la 225 de 1636.
Que el tesorero reciba delJiscal las egecutorias. Que los jueces, ojiciales y fiscal de la casa de Sevilla
egecuten los despachos que el tesorero les enviare,
El tesorero ha de recibir las ejecutorias de y le acudan con lo que cobraren. *
mano de nuestro fiscal, y darle carta de recibo
de ellas. Los jueces oficiales y fiscal de la casa de con*
tratación de Sevilla hagan ejecutar con dili
L E Y V II. gencia las ejecutorias y despachos que se les
D. Felipe III en Madrid u 20 de mayo de 4605. Y á
enviaren por eí tesorero del consejo para cobrar
:t'2 de diciembre de 1619. Y D. Felipe XV en la orde las penas y condenaciones que en él se hubieren
nanza 221 de 1636. hecho , y los depósitos y lo demas que se hu
Que lo procedido de condenaciones por egecutorias biere de cobrar por é l, y lo que se cobrare sé
del Consejo se traiga d poder de el tesorero. envíe luego al dicho tesorero, y de lo que en
viaren den aviso á los contadores del consejo
Mandamos que todas las condenaciones que
para que de ello le hagan el eargo perfecto y
se hicieren por nuestro consejo de indias, y se cumplido,
mandareu traer á poder del tesorero del dicho
consejo, nuestros vireyes, audiencias, gober L E Y X.
nadores y oficiales reales de las dichas ludias no D. Felipe II en la ordenanza 110 del consejo. Y don
las conviertan ni gasteu en otra cosa alguna, Felipe IV eu la 224 de 1636.
aunque sea justa y conveniente, sino que pun Que los gastos de la cobranza sean d costa de lo que
tualmente se cobren y remitan à poder de el se cobrare.
dicho tesorero: con apercibimiento que no se Declaramos que los gastos que se hubieren
tendrá por bien gastado, ni se recibirá en cuen de hacer é hicieren en la cobranza de las penas
ta lo que en contrario se hiciere , y se nombra de cámara y otras condenaciones que se hayan
re» persona á costa de quien lo gastare , para de cobrar por el tesorero, sean y se hagan á costa
que lo cobre y remita. de ellas, con que de lo que se gastare, el dicho
tesorero muestre recaudos bastantes al tiempo
que se le tomare la cuenta.
Del tesorero general. 195
LEY X I. (¡uíer hacienda que tenga en su poder, de las
D. Felipe 11 en Insordenenzas 115 y 115 de el conse penas aplicadas á nuestra cámara y fisco, res
jo. Y \). Felipe IV en la 225 de 1636. tituyéndolo quede ellas se tomare, del pri
Que el tesorero no pague libramiento sin estar to
mer dinero que haya de penas de estrados.
mada la razón por los contadores, y en los libra
mientos se mande tomar. LEY X V .
Felipe ÏI en Madrid á 7 de noviembre de 1581.
El tesorero no pague ni cumpla libramien D. 1'elipe IV eu la ordenanza 229 de 1656.
to alguno de lo que en él se librare, si en el Que el salario que en la casa de Sevilla tuvieren los
dicho libramiento ó cédula que para ello se die oficiales del Consejo se envie d poder del tesorero.
re, no luere tomada la razón por los contadores
del consejo-, con apercibimiento que lo que de El presidente y jueces oficiales de la casa de
otra forma pagare no se le será recibido, ni pa contratación de Sevilla, en virtud de las cédu
sado en cuenta •, y en todas las cédulas y libra las que tuvieren asentadas en los libros de la di
mientos que por Nos ó por el dicho consejo se cha casa, y de las que mandáremos dar de sa
hicieren en el tesorero, se ponga y mande que larios de oficiales de nuestro consejo de las In
los contadores tomen la razón de lo que asi se dias que les estuvieren señalados en la dicha
librare. casa , envien al principio de cada un año los
LEY X II. maravedís, que conforme á ollas montaren, á
poder del tesorero del dicho consejo, para que
D. Felipe II en la ordenanza 11-1 de el consejo. Y los oficiales los puedan cobrar de él.
D. Felipe IV eu Ja 22b de 165(3.
Que los contadores tomen la razón de los depósitos LEY X V I.
que entraren en poder del tesorero. D. Felipe 111 en Madrid á 11 de marzo de 1608. Y
De cualquiera cosa que se haya de deposi JL>. Felipe IV en ia ordenanza 250 de 1656.
tar en el tesorero, asi para pleitos que en él se Que la casa envie relación al Consejo de lo que en
trataren, como para recusaciones y otras cosas, tregare al tesorero.
de cualquier suerte que sean, los contadores Porque conviene que nuestro consejo ele In
del consejo tomen la razón para lo cargar al te dias tenga noticia del dinero que cobra el teso
sorero eu las cuentas, que acerca de semejan rero, asi del que viene de las Indias á la casa de
tes cosas se hubieren de tener con él. conlrataciou de Sevilla por cuenta de condena
ciones, como en otra cualquier forma: Ordena
D Felipa 111 por auto acordado de el consejo en Ma
mos y mandamos al presidente y jueces oficia
drid á 26 de junio de 1620. Ü. Felipe i Y cu la or les de la casa de Sevilla, que siempre avisen y
denanza 227 de l6 j ó envien relación particular al dicho consejo de
Que lo que se librare en el tesorero del Consejo so todo el dinero que se entregare al tesorero, ó
bre gastos de estmclos, no los habiendo, lo pueda su á la persona que con poder suyo lo cobrare.
plir de otro genero.
LEY 'XVII.
Por cuanto el género de gastos de estrados
D. Felipe IV en S. Lorenzo á postrero de octubre
que se aplican por nuestro consejo de Indias de 1624, Y en la ordenanza 251 de 1656.
para servicio de él, suele estar alcanzado y se
ofrecen gastos, á que sin embargo es forzo o Que el tesorero junte las consignaciones de salarios
y casas de aposento del Consejo.
acudir: Ordenamos y mandamos ai tesorero que
lo que se librare y hubiere de pagar de cosas Mandamos al tesorero de nuestro consejo de
que estan situadas en el género de estrados, no Indias, que las dos consignaciones de marave
lo habiendo, lo supla y tome prestado de cual dís que están hechas para la paga de los salarios
quier género de maravedís que haya en su po • y casas de aposento del presidente, y los del di
d er, ó en él entraren de los de su cargo, en el cho nuestro cónsejo,'ministros y oficiales de él,
ínterin que hay condenaciones tocantes á gastos que se traen cada año de nuestras'ludia*, y
de estrados, porque habiéndolas ha de restituir entran en poder del dicho tesorero, y las ha te
de ellas lo que hubiere tomado, al género de nido separadas la una de la o tra, las junte y
donde lo hubiere sacado, con tal que no se to haga de todo un solo cuerpo de hacienda, y
que é los depósitos, porque no se pueda seguir una misma cuenta y consignación , y de ello
perjuicio á tercero, á quien se hayan de volver pague á los susodichos sus salarios y casas de
con brevedad. aposento, en la forma que se acosLumbra.
X IV . LEY X V III.
D. Felipe 111 en Madrid á 11 de febrero de 1611. f). Felipe IV por auto acordado del consejo, en Ma
D. Felipe IV en la ordenanza 228 de 1656. Y en esta drid ú 15 de marzo de 1625. El mismo por la orde
Recopilación. nanza 252- de 1656.
Que si el Consejo librare alguna cantidad para avio Que lo que se da para casas de aposento del Consejo
de religiosos en penas de estrados y no las hubiere , y sus oficiales se pague adelantado.
la supla y pague el tesorero de penas de cámara. Ordenamos y mandamos que el tesorero del
Cuando al consejo pareciere librar en penas consejo de las Indias pague á los nuestros presi
de estrados para avío de religiosos alguna can dente, y del dicho consejo, y á los demas mi
tidad: Mandamos al tesorero que si no las hu nistros y oficiales de él, á quien se dan las can
biere, supla y pague los libramientos de cual- tidades que está ordeuado y dispuesto para las
TÓ.MO* 1. 49
194 Libro ii. Título vn.
casas en que habitan, la mitad de lo que han ces de cobranzas dr maravedís ioran?e$ á él le
de haber para los alquileres de las dichas casas, ordenaren, de ¡o (jue se fuere cobrando , asi de
conforme á la nómina que está hecha en prin las condenar, ioí, e s , penas de cám ara , mesadas
cipio de cada un año ; y pasados los primeros y efectos , como d t otros tualtsquier géneros,
sois meses, la otra mitad, de (orina que siem aunque las dichos cunlidad.es sean menores de
pre traigan el medio año adelantado, .para que lo que las p uries de bit ven pagar , y que estas
asi puedan tener con que acudir á la paga de partidas que se pagat m, cobraren y entregaren,
los alquileres de sus posadas. se hag •n buenas tn la contaduría , cobrándose
en (sta villa poi los d-'chos jtuces ó por sus
LEY X IX . subdelegados fuera de ella en Sevilla y otras
D. Felipe II en la orden miza 116 del consejo. Y don pa trs. Auto 9 7 .
Felipe IV en la 253 de 1656. P or sentencias de v’sla y revista del constjo de
Que se tome cuenta al tesorero cada dos años, ó i3 de junio de 633 y 10 de noviembre de 6 4 3 ,
cuando al Consejo pareciere , y se le haga cargo del en ple to litigado entre e ’fiscal de S. M. y Diego
último alcance y de lo no cobrado. de Vcryarn G avicia , receptor del consejo,
Mandamos que eada dos años se tome cuen que pretendia no tocarle por sn ofi ¿o diligenciar
ta al tesorero por ios contadores del consejo.; y las cobranzas de su cargo , asi en estos reinos
demás de esto, todas las veces que al consejo como <n los de las Indias , y solo cumplía cok
pareciere mandársela tomar, haciéndole cargo d'<■r cuenta de lo que se le e: irega ir , se mondó
del último alcance que se k: hubiere hecho á que cumpliese con /«r ordenanzas del consejo,
él ó á su antecesor, y de todo lo demas que fue obligación de su oficio, y t<n pliego d do pt-r la
re à su cargo cobrar, de lo cual no se le reciba contaduría-, y habiendo sucedido en este oficio
en cuenta cosa que no tuviere cobrada , sino don FcanC'sco Gutiérrez de íht turnante , con
mostrare hechas las diligencias últimas que de- nombre de tesorero get eral se le mandaron ha
lúcre haber hecho para la cobranza de ello \ y cer notorias las d e has Sentencias , y que él y
habiéndolas hecho y mostrado, se le vuelva à sus sucesores cumpliesen con las ordenanzas y
hacer cargo de lo que asi se le descargare, pa obl'gac o oes .de la tes. reda, diligenciando y ha
ra que lo vuelva à cobrar. ciendo diligenciar las <obra czus en <sta r o ite y
fuera de ella, en esto < m.-nos, ante U s jueces á
Que los despachos de gracia pro "Calidos de ef#c> quen se comí lit re su decir ion, r en los délas
tos no se entreguen sin carta de pago del te Indias lo que esta dispuesto por las ord< ñamas
sorero , tomada la razón, le y 2 9 , lit. í>, de y ácere 'os pa Hadares .t pena d- pagar de su
este libro. hacienda lo que por su omisión ó n-gligencía
Que el tesorero stupie memoria de las condena dejasen d# colear, como por las dichas s<aten
ciones tpic ha de cobrar del libro del escriba e a s esta declarado. A uto 1 2 2 .
no de cámara, le y 0 , lit. 10 de este libro. Por auto del consejo proveído en 27 de eneio
Que los contadores tomen las cuentas a l teso de i()£l3 se mandó que en cuanto á tom ar las
rero , y en que J a r mu las ha de d a r , le y 8 , t í cuentas la contaduría al tesorero > haga su
tulo 1 1 de este libro oficio cumplidos los dos añ os, como su con
T i tesorero del consejo endrogue en fas secre tiene en las leye s de este libro, y de a llí ade
tarias de el las ejecutorías y recados que en lante precisa y puntualmente: den (os tesore
viare á las In d ia s , conforme á sus p io vin ros relación ju rada por vía de tanteo cada
cias, y los oficiales mayor#* les den certifica cuatro meses, do lo que en cualquiera form a
ción de lo.', que cada uno recibiere, y tengas# hubieren recibido dentro y fuera de osla cor
particular cuidado de encaminar eslos d espa te en estos reinos ellos , ó cyalesquier perso
chos á muy buen recaudo , con los de mas d# nas , con sus poderes , con distinción y cla ri
S. ñ l., y .en los ojudos h a ya libro donde se dad.de las partidas que hubieren cobrado , y
asienten por memoria ios dias y pliegos, y los por que causa, para que se eje a; le en sil dis
pliegos en qu# se enviaren. A cuerdo del con tribución Lo que el consejo m an dare, y los
sejo á '2S de junio de ifídó. A u to 19. tesoreros no han de poder pagar maravedís
JYo se haga cargo a l tesorero de lo que viniere . ningunos á ninguna persona que no sea por
p a ra derechos de los relatores y escribanos via de repartimiento, y en la fe,una referida,
de cámara. Decreto del consejo á 20 de f e y que se acostum bra ; escoplo los libramien
brero de 1 (i 25, referido en los titulos 9 y 10 tos de gastos y servicio del consejo, ó los en
de este libro. A uto 58. que señalare efecto , y la contaduría tenga
11 n las cartas de pago que el tesorero diere de particular cuidado de pedir relacion a los p la
dinero procedido de mesadas prevenga que zos referid o s, y dar cnenia al cansejo . A u
tomen la razón los contadores. Auto 01, re to 133.
ferido, tit. 87. Iib. I. E l lesororo de ni i.gusta form a pueda pegar,
Todas las mercedes que S, M. fu e r e servido de aunque sea con hbramiculos del consejo, por
hacer en efectos del consejo , s.e han de p a su arbitrio y elección , sino aquellas partidas
itar en vellón , como no se e*prese en la or • en (¡uc hiriere, especial orden del presidente,
den que sea p la ta , y esto se entienda tam prefiriendo los salarios de m inistros , alimen
bién en las que no están ejecutadas. Decreto tos del consejo, y gastos de estrados ordina
de S . ítí. ti 5 de agostn.de «634. Auto 89. rios \ y cu h que tora á penas de cám ara,
T I corsé o ni 30 de julio de l()3í> m auló que el gastos de ju stitia , efectos , mesadas, vacan-
tesorero reí iba cual¡¡ui<r cantidad que tos ju e fes de obispados y todos los demás géneros ?
Del tesorero real. 195
debe observar la misma orden : con aperci ciere asi se dará por perdida la partida pa
bimiento de que volverá á pagar de su hacien gada, y que no lo haciendo dentro del dicho
da lo que hubiere pagado en otra forma , es- término, sean ningunas y de ningún valor y
cepto los libramientos que se dieren en los efecto ; y no haciendo esta prevención, el te
efectos que se beneficiaren, para que seña sorero quede condenado en el cuatro ta n to \y
ladamente se paguen de ellos , que estos los si la partida se cobrare fu era de esta corte
podrá pagar el tesorero, sin que sea necesa en Sevilla ú otras partes, se ha de prevenir
rio este requisito. Decretos del consejo de 28 lo mismo, poniendo un mes de término. De*
y 29 de mago de 1649, y 17 de diciembre cretos del consejo de 20 de octubre de 1649,
de 1655, en los autos acordados 151 , Í 5 2 y y 7 de setiembre de 1650. Autos acordados
188. ‘154,>*138.
E n las cartas de pago ó recibos que diere el Sobre la cobranza de condenaciones causadas
tesorero de dinero , ú otras cosas que entra y que se han de cobrar en las Indias, y por
ren en su poder, prevenga que dentro de ocho qué mano han de correr, se vea la nueva
dias se tome la razón en ¿a contaduría del fo rm a en la ley s¡3, til. 3 de este libro.
consejo, con apercibimiento que si no se hi
TITULO OOSO.
TITULO MTUBTB.
D e los rela to res d el consejo re a l de las In dias.
TITTXL' »
»«» I ga.
TITULO O lfO S .
TITULO DOOE.
T2&ECE
TITULO 0'
7 '1‘r imenlos que conforme al negocio pareciere, sin Porque algunas de nuestras audiencias y oi
dores de ellas han pretendido que les toca ei
%iií>Ueiiluil; y si no bastaren , y no se ctutstue m -
Ü e t i d en la tierra , « cumpla ¡o proveído por tos
depositar indias en las casas de españoles , y
1 vireyes ó presidentes , y avisen al rey..
asentarlas para que sirvan por algun tiempo, y
p ornue en algunas ocasiones han sucedido dar provisiones para que no vivan españoles en
diferencias entre los vireyes ó presidentes y os tre indios, y para mudarlos de unos pueblos a
oidores de nuestras reales audiencias de las In- otros, y dar comisiones, y nombrar los jueces,
dias sobre que los vireyes o presidentes esce- y los presidentes tienen la misma pretensión,
et;’.le lo que por nuestras facultades les con por decir son causas de gobierno, sobre que sue
cedemos, ¿'impiden la administración y qeeu- le haber diferencias: Mandamos que se guar
c on de la ¡ustieia : Mandamos que sucediendo de en esto la costumbre que en cada audiencia
casos en que i los oidores pareciere que el u - hubiere, y que si tuviere inconveniente se nos
: c/ ¿ presidente escude y no guarda lo orde informe de el, para que visto se ordene lo que
nado Y se embaraza y entromete en aquello inas convenga.
que lio L ilia , los oidores bagan con el v.rey O LEY XXXVIII.
presidente las diligencias, prevenciones, cita
ciones y requirimientos que según la calidad D. Felipe XY en Madrid á 22 de noviembre de 1631.
Que los v i r e y e s y p r e s id e n te s p u edan d ec la ra r si e l
p u n to d e que se tr a ta es de. ju s tic ia o g o b ie r n o , y
M il En cédula de 1» de mayo d . 1788 se pro- todos los oid o res f ir m e n lo que r e s o lv e r e la m a y o r
"...rulo se interpusiesen estas apelaciones p a r te , aun q u e n o lo h a y a n v o la d o
lò 'u s a ï de la formalidad de pedir venia, que se ha-
Cuando se ofreciere duda sobre si el punto
^posterior de H de febrer, d , 1797 que se trata es de justicia ó gobierno, los oido
1 I.dn nae en las apelaciones se observe el
so lia 1“ » '" 'U 1 donde llunamcme se apela i la res esten y pasen por lo que declararen y orde
'" T el h enal manda que el escribano pase a naren los vireyes y presidentes, y firmen to
Í " í « r e ú c L para eali6 ear el grado o devolver, dos lo que resoivieren en el negocio, aunque
prévb.lendÓ quedara d arcu n ip liu n cto se pida per- hayan sido de parecer contrario y si se trata
re de escribir á Nos algunas cartas, cada uno
í l nrictiea de Méjico está repetidamente indi
vote libremente, y pueda pedir que se ponga
cada en F.j d iiú n u - « « i d - 1 « comprende la c u -
en ellas su voto-, y si no le hubiere especial,
cubar de 6 de 10 1j '* i C(i¿ula de S. Ildefonso dígase que lo resolvió la mayor parte y el que
A 20 lio ' v 'o ^ o 'd e’iSüG , circular á las A m eneas se lo tuviere contrariónos pueda escribir por s.
de 29 (Sl ,aq ,; 1- , cédulas y prácticas anteriores que
derogan Contenido , jy se manda solo lo que sintiere: y hecho esto, firmen todos
n° CtrratiU cacion dc si el asunto es de gobierno lo que se acordare, como dicho es.
que U V V, «os vireyes y presidentes, pero que si
sea propia d .Jo. ) ;0 „ oe es , ó se hubiere LEY X X X IX .
en el progreso dt “ or los vireyes y
declarado d e^ o n ti definitiva, ó que teu- D. Felipe 111 eu Valladolid á 22 de marzo de 1602.
l>l’T.erï' deUd , precedan en estos casos presentarse 0«e los p re sid e n te s p u ed a n h a c e r in fo rm a c io n es
ga uei ¿a j \ • ln audiencia , la que sin mas c o n tra los o id o re s , y e n v ia rla s al c o n s e jo , y ellos
de hecho las .1« vireyes y presidentes/o ¿w.e- no , co n tra los p re sid e n te s.
deberá mandar que
dan unpeda por ^ ¿ hacer e la c ió n , ó Damos comisión y facultad á los presiden
el escribano <• » .q cscnba«o del tribunal , en tes de nuestras audiencias reales de las Indias
que la calificación del grado toca á la para que puedan hacer y recibir informaciones
la u tclipe(K. vireves y ni estílenles , quienes
» P w c í r í e . p . e a . r l . . la. cali- cuando convenga, y sea necesario contra cua
Voi un .11 » 1 scr la materia ele gobierno, lesquiera de los oidores de las audiencias en que
hcacion, «» ’¡o s'asulitos de este genero es cu lo s presidieren, y enviarlas cerradas y señalladas a
m m c á l.lin e u t» t i c o lugar I» i:<m buen recaudo á nuestro real consejo de las in-
glü á la loy 3b autenor.
De las audiencias y cliancillerias reales. 217
dias, para que en él vistas se provea lo que con LEY X L II.
venga*, pero no han de poder los presidentes
enviar á estos reinos á ninguno de los oidores D. Felipe IV en Madrid a 22 de noviembre de 1631.
Véase la ley 5, tit. i.° lib. 7.
por su autoridad. Y es nuestra voluntad, y
mandamos, que ninguno de los oidores pueda Q«e declara la form a de inhibir los vireyes d las
hacer por sí solo in formaciones contra su presi audiencias.
dente públicas ni secretas por ningún caso ni En los casos que se ofrecieren de gobierno,
causa que baya para ello, sin particular orden ó en otros, en que hubiéremos dado orden ó co
y comisión nuestra *, como quiera que han de misión particular à los vireyes, podrán avisar
tener libertad para escribirnos y darnos cuenta á las audiencias que se abstengan de su conoci
de lo que se ofreciere. ( 13) miento, haciéndoles notorias nuestras comisio
nes, ó declarando que los casos de que tratan
LEY XL. son comprendidos en ellas , y en esta confor
D. Felipe III en San Lorenzo à 25 de agosto de 1620. midad se guarden las leyes y cédulas dadas so
bre lo referido.
Que los oidores puedan informar al r e y , y enviar
le los testimonios que quisieren sin dar noticia al vi- LEY X L I IL
rey ó presidente . D. Felipe II en Madrid á 24 de marzo de 1593. En el
Campillo á 21 de octubre de 1595. En Madrid á l t
Los oidores de nuestras audiencias en par de enero de 1598. D. Felipe l l l en Toledo á 18 de
ticular nos puedan avisar é informar de lo que marzo d>? 1600. En Ventosilla á 4 de noviembre de
les pareciere justo, y enviar los testimonios y 1606. Y en Madrid á 17 de diciembre de 1607.
recaudos necesarios, aunque sea sin orden ni Q mc d los vireyes y presidentes toca el gobierno , y
licencia del vírey ó presidente de la audiencia, la guerra d los capitanes generales.
como no sea haciendo información conforme á Las materias y negocios de gobierno tocan
la ley antecedente, porque tales casos se po- privativamente á los vireyes y presidentes, y
drán ofrecer que no convenga [que el virey ó eu apelación á las audiencias, como se declara
presidente tenga noticia de la queja o preten en la ley 35 de este título. Y mandamos que en
sión que contra él se tuviere por la conserva duda se ejecute lo que ordenaren los vireyes y
ción de la paz y otros justos respetos, pues cuan presidentes, de que nos darán aviso las audien
do sea necesario ei oir al virey ó presidente, co* cias, con las razones y motivos que tuvieren pa
mo siempre lo haremos , nuestro consejo de In ra que Nos proveamos lo que conviniere: y á
dias mandará que informe, para que con ple los capitanes generales tocan las de guerra, go
no conocimiento se provea lo que fuere jus bierno de guerra y presidios, de que no han de
ticia. conocer las audiencias nijaun por via de apela
LEY XLL ción : porque nuestra voluntad es que si algún
interesado se sintiere agraviado de lo que pro
D. Felipe II en Madrid a' 26 de mayo de 1573. Y don veyere el capitán geueral, se le otorgue la ape
Felipe IV en esta Recopilación. lación en los casos que hubiere lugar de dere
Que pareciendo d la mayor varíe de los oidores que cho para nuestra junta de guerra de Indias; y
conviene provecer algo en los estrados, el virey ó en cuanto á las causas de soldados se guarden
presidente no lo detenga ni estorbe; y si tocare al las leyes del título que de esto trata. (»5)
virey ó presidente , ó su familia , lo puedan hacer
los oidores ó audiencias solos , y tomar la razón o LEY X L 1V .
información que convenga.
D. Felipe II eti S;»n Lorenzo á l i de mayo de X588.
Ordenamos y mandamos á los vireyes ó pre Y en Toledo á 25 de mayo de 4596. Ordenanza 5
sidentes que cuando pareciere á la mayor par y 6 . Véase la ley 55 de este título.
te de los oidores que conviene proveer algo en Que los vireyes y presidentes no siendo letrados
los estrados no lo impidan, detengan ni estor no conozcan de pleitos ó causas pendientes por ape
ben y les dejen el libre uso y ejercicio que con laciones , ó stiplicacacion en las audienc ¿as , aunque
forme à derecho les compete. sea en materias de guerra.
Los vireyes y presidentes que no fueren le
D. Felipe 111 en S. Lorenzo á 5 de setiembre de 1610, trados , aunque seau gobernadores y capitanes
Otrosí las audiencias en cuerpo de oidores ó generales no tengan conocimiento ni voten en
cuerpo de audiencia , hallando que conviene pleitos y causas civiles ó criminales que pen
avisarnosen nuestro consejo real de las Indias dieren en las audiencias por apelación ó supli
alguna cosa que toque á los vireyes ó presiden cación, porque el conocimiento de ellas solo to
tes de ella ó su familia, lo puedan hacer sin ca a los oidores y alcaldes del crimen, y asi se
hallarse presente el virey ó presidente, y ia au ejecute, sin embargo de que las materias sean
diencia tome la razón ó información que con de guerra; y si el presidente fuere letrado, pue
venga, cómo, cuándo y en la forma que pare da conocer de ellas , no habiendo sido juez en
ciere mas necesaria para la administración de primera instancia , ó estando impedido por
justicia y buen gobierno, que asi lo tenemos otra causa, conforme á derecho.
por bien. (14)
TITTJL >
de despachar todos los negocios y cosas tocantes ordenare ó resol viere que vaya ejecutor ú otra
¿ ia gobernación, con los escribanos de cámara ó persona à alguna comisión, hará la elección y
con sus tenientes, y no con otra persona alguna, nombramiento el presidente que fuere de
asi en las audiencias como fuera de ollas, sino aquella audiencia, y no los oidores, los cuales
fuere en caso que haya y estén proveídos por no pongan impedimento en lo susodicho, y
IVos escribanos particulares de gobernación, guárden lo proveído.
ante los cuales pasen los negocios de esta ca
lidad. ( 2j LEY VIH.
LEY V. D. Felipe lí en Madrid á 26 de mayo de 1573.
D. Felipe III en Madrid á 31 de diciembre de 1606. Que. los presidentes no conmuten destierros sin es
pecial facultad del rey manifestada d la audiencia.
Que los presidentes gobernadores puedan despachar
con sus secretarios negocios secretos. Mandamos que ningún presidente ni go
Los presidentes gobernadores puedan des bernador pueda conmutar los destierros en que
pachar con sus secretarios ó personas que qui las audiencias condenaren, sin especial poder
sieren todos los negocios en que por cualquiera dado por ISos, y manifestado á las audiencias.
vía les pareciere conveniente que se guarde se
creto , sin embargo de lo proveído*, pero es LEY II.
nuestra voluntad y mandamos que no despa D. Felipe II en la ordenanza 7, en Toledo á 25 de
chen con sus secretarios sino en casos y cosas mayo de 1596.
que asi convenga guardar secreto, y no perju Que ¡os 'presidentes tengan buena correspondencia
diquen al derecho de los escribanos de cámara con los oidores y ministros y sean respetados.
y gobernación que hubieren beneficiado estos Ordenarnos á los presidentes que procuren
oficios. (3) tener toda buena correspondencia con los oido
LEY \ 71. res y los demás ministros, y ellos les tengan
D. Felipe IV en Madrid ¡í 9 de agosto de 1611. Véase todo el respeto que es justo y conviene, para
la ley 4 l , til. 5, lib. 3. Oirás sejeíieren en la ley 1, que bagan sus oficios como deben.
til. 16, li)>. 3.
Que pone la form a en que los vireyes, presidentes , LEY X.
gobernadores y ministros han de escribir .U r e y .
El emperador D. Carlos y la emperatriz gobernadora
Para mayor claridad y espedicion de los en Madrid á 27 de octubre de 1555. Y D. Felipe IV
negocios y correspondencias que ios vireyes han en esta Recopilación.
de tener con Nos, ordenarán à sus secretarios Que los presidentes provean lo conveniente d la po
que numeren y dividan lascarlas por materias, licía-y gobierno de tas ciudades , y ios oidores no
y escriban á medía margen, sacada en la otra impidan U ¿os cabildos y concejos el cuidado de lo
relación sucinta de lo que contienen , comen- que se declara.
Mudo por las eclesiásticas, y siguiéndose à es Los presidentes ordenen lo que mas con
tas las de gobierno político, y luego las tocan venga á la buena gobernación y policía de las
tes á materias de hacienda , y despues las de ciudades y poblaciones de sus distritos , y los
lo m ilitar, refiriendo sustancial mente en cada oidores no impidan á los cabildos y concejos
una lo (jiie se les ofreciere, aunque con ellas el cuidado de entender cotí los españoles é in
remitan autos y otros papeles de las diligencias dios eu hacer fuentes, puentes, calzadas, alcan
que se hubieren hecho, pues como quien ios ha tarillas, salidas de las calles para las aguas, en
criado podran los secretarios hacer la relación ladrillar, em pedrar, tasar mantenimientos,
conveniente para las resoluciones que en cada aderezar caminos, y hacer las demás cosas que
uno de estos casos conviene tom ar, citando los deben proveer para su conservación, y traten
papeles correspondientes para su comprobación de espedir y librar los pleitos y negocios, con
y mayor inteligencia , si necesitare de ella, y forme á su obligación.
el índice se liará por sus números, guardando
la misma forma, y ios presidentes, oidores, go LE Y X I.
bernadores y tollos los demas ministros que nos D. Felipe II en Madrid a' 24 de agosto de 1569. Don
escribieren harán lo mismo por io que les to Felipe l i l en Madrid á 18 de setiembre de 1609. Yéa*
care. (d) se la ley 15, tit. l.° , lib. 7.
LEY VÏÍ. Que los presidentes sean obedecidos y cumplidas sus
D. Felipe II cu Córdoba á 20 de abril de 1570, órdenes , y no den comisiones d los ministros f u e
ra de las audiencias.
Que el presidente nombre los ejecutores y comi
sarios. Todas las veces que los presidentes ordena
Todas las veces que por las audiencias se ren y mandaren à los oidores , alcaldes, fisca
les y ministros que hagan alguna diligencia en
(2) Estas leyes se mandan guardar por cédula io que toca al oficio de presidente , los obedez
ele 16 de febrero de 1701 y por otras muchas. can y cumplan sus ordenessin remisión algu
(5) Véase la ley 47, tit. 3, 111). 5.
(4) Por cédula de buen Retiro de ¿5 de diciem
na , y asi es nuestra voluntad que se ejecute,
bre de 1718 se inunda guardar de nuevo esta ley pol Otrosi mandamos á los presidentes que no
la confusión que resultaba de su omisión. saquen los jueces de las audiencias para comisio
Posteriormente por diversas reales órdenes se ha nes ni otras ocupaciones si no fuere eu casos
mandado practicar lo de la relación sucinta de la nu de mucha importaticia , y que convenga no
meración y del índice y demás cjue debe vcise en
real orden de 20 de noviembre de 1784. fiarlos de otras personas.
De los presidentes y oidores. 241
les ó delegados hayan sido jueces, no conozca
de el el prelado presidente, porque nuestra
D. Felipe II en Madrid á 6 de febrero de 1595. Don
Felipe 111 en San Lorenzo á 17 de setiembre de 1616. voluntad es que en estos casos soto conozcan
los oidores.
Que si de orden de los vireyes, presidentes ó go
bernadores cíe audiencias fueren llamados los oi
dores , alcaldes ó Jiscales no se escusen. El emperador D. Garlos y la reina gobernadora en
Madrid a' 24 de agosto de 1550 D. Felipe II en la ■
Porque es justo que los vireyes y presiden ordenanza 36 de audiencias de 1563. D. Felipe 111
tes , y los que conforme á las leyes de este l¡ eu San Lorenzo á 5 de setiembre de 1620.
bro gobernaren las audiencias, comuniquen Que faltando el presidente presida el oidor mas an
las materias-y cosas importantes, y tomen para tiguo y lo cometido d solo el presidente lo hagan
resolverlas el parecer de los ministros de ellas: todos.
Mandamos que cuantas veces fuere necesario y Ordenamos y mandamos que cuando falta
el vi rey, presidente ó gobernador de audien re el presidente en cualquiera de nuestras rea
cia enviare á llamar á los oidores, alcaides ó les audiencias por m uerte, enfermedad ú otro
fiscales, acudan à sus llamamientos y asistan impedimento, el oidor mas antiguo que por
á las juntas que se ofrecieren. Y ordenamos á tiempo fuere baga las funciones y las demás co
los vireyes, presidentes y gobernadores de sas de la audiencia que el presidente podia y d e
nuestras reales audiencias que cuando bagan es bía hacer , conforme á las leyes de este libro; y
tas convocatorias ó llamamientos sea para mate si algun pleito se hubiere de ver en que deba
rias y cosas graves y de importancia y á horas asistir el presidente le vea ei que presidiere. Y
que noles ocupen el tiempo necesario para des • por cuanto por nuestras instrucciones y cédu
pacho de los negocios, si la gravedad é impor las se cometen algunas cosas á los presidentes
tancia de los que nuevamente ocurrieren no de las audiencias para que ellos solamente las
obligare á mas brevedad. (5) bagan : Mandamos que estas y las demás come
tidas por Nos á solo el presidente, las bagan
LEY X III. todos los oidores juntos y no el oidor mas anti
D. Felipe III en S. Lorenzo à 5 de setiembre de 1620. guo solo : y asimismo lo que se cometiere á
Que los vireyes y presidentes no llamen d los oido presidente y oidores , lo puedan hacer y hagan
res ni alcaldes para que los acompañen en actos ios oidores solos en ausencia ó falta del pre
privados. sidente. (7)
Ordenamos à los vireyes y presidentes que LEY X V II.
en los actos privados por ninguna vía llamen á D. Felipe IV en Madrid á 26 de agosto de 1653.
losoidores ni alcaldes para que los acompañen;
y si voluntariamente lo quisieren hacer no so Que ¿o cometido al oidor mas antiguo se entienda
conforme d esta ley .
lo consientan, y para los casos ocurrentes que se
pudieren ofrecer lleven los vireyes un alcalde Declararnos que las comisiones dadas al oi
que Nos lo tenemos por bien. ( 6) dor mas antiguo ele alguna audiencia se entien
dan al que obtuviere la antigüedad, por mas
antiguo ó por enmeferdad, recusación ú ocu
D. Felipe 111 en San Lorenzo á 15 de mayo de 1609, pación legitima del mas autiguo.
Que el presidente de Santo Domingo pueda tener d
un oidor por asesor. LEY X V III.
, El presidente gobernador y capitán gene'* D. Felipe II y la princesa gobernadora en Valladolid
ral de nuestra real audiencia é isla Española en á 8 de abril de 1559.
en los casos que con venga pueda tener por ase Que el oidor mas -antiguo , presidiendo , traiga vara
sor uno de losoidores déla dicha audiencia de como los demas , y se guarde justicia y confor
midad.
quien mas satisfacción tuviere.
El oidor que por mas antiguo presidiere trai
ga vara si los demas oidores de la misma audien
El emperador D. Carlos y e! cardenal gobernador en cia la debieren traer , y como tal oidor mas an
Talavera á 28 de enero de 1541. tiguo haga lo que los otros oidores de ella sin
Que el obispo y presidente de audiencia real en su hacer novedad, presidiendo como está proveí
diócesi, no conozca de los pleitos eclesiásticos que do, y en todo procure que se guarde justicia,
ocurrieren d la audiencia por via de fu e rza , ó en y haya paz y Conformidad.
otra jornia.
Siendo presidente de alguna de nuestras
LEY XIX.
reales audiencias el arzobispoú obispo enNcuya D. Felipe IV eo Madrid á 24 de setiembre y á 6 de
diciembre de 1621. Y en 20 de setiembre de 1619.
diócesi estuviere, y llevándose por via de fuer Y en esta Recopilación. Véase con la ley 25, tit. 3
za ó en otra cualquier forma, el pleito de que de este libio.
los dichos prelados ó cualquiera de sus ofieja- Que el oidor mas antiguo cobre las ejecutorias del
consejo, con tres por ciento de lo que cobrare, y de
cuenta al consejo del estado en que estuvieren.
(5) Véase la ley 45, tit. 3, lib. 5 y su nota, y tam
bién la 22, tit. 15, lib. 5. Ordenamos y mandamos que los oidores mas
(6) Esta ley parece opuesta á la 26, tit. 15, li
bro 5 , que es posterior y mandada observar por la (y) Véase la 10, tit. 2, lib. 5, y la nota de la 57
Instrucción de Regentes. del tit. 15 «ie este libro.
TOMO 1. 61
242 Libro ii. Título xvi.
antiguos, y en ausencia 6 impedimento los in de haber en la cobranza, sean para todas las costas
y no los lleve de situaciones.
mediatos en antigüedad, hagan la cobranza de
las condenaciones contenidas en todas las ejecu Los tres por ciento concedidos h los oidores
torias de visitas y residencias , despachadas por mas antiguos en la ley antecedente sean por
nuestro real consejo de las Indias, y las penas todas las costas que se hubieren de hacer en
que se ponen por vía de proveído y composi las cobranzas de ejecutorias , cédulas y otros
ciones en negocios de gracia ó en otra cualquier despachos que remitieren el fiscal ó tesorero de
forma , y recojan todas las ejecutorias, cédulas nuestro consejo de Indias, y no se hagan ni cau
y otros despachos que se hubieren presentado sen otras por esta razón; y el tres por ciento no
ó presentaren ante las justicias y oficiales reales lo puedan cohrar ni cobren délos salarios y ca
de sus distritos con todos los autos y diligencias sas de aposento de los del consejo, ministros y
que en razón de su cobranza se hubieren cau oficiales, ni de otras consignaciones fijas seme
sado } y hecho esto prosigan en la ejecución y jantes áestas , ni otra cantidad alguna , ni pue
cumplimiento de los despachos y ejecutorias, dan introducirse en su cobranza , dejándola á
haciéndolas ejecuciones, trances y reinales de las personas que tuvieren comisión del consejo.
hienes, y todas las detrias diligencias que para
cobrar lo que por dichos despachos se debiere, LEY -XX L
convinieren y fueren necesarias, hasta que - D. Felipe IV en Madrid á 26 de febrero de 1636.
con efecto se acaben de cobrar. Y por cuanto Que los oidores jueces de cobranzas no envien eje
Nos tenemos ordenado que ios fiscales y teso cutores.
reros generales de nuestro consejo remitan a Mandamos que los oidores jueces de cobran
los oidores mas antiguos todas las ejecutorias zas no {Hiedan enviar ni envien jueces particu
y despachos referidos , y nuestra voluntad es lares» ellas ni áotrasalgunasdecualquier calidad
que ellos solos acudan á sil ejecución y cum quesean y cometa irá los gobernadores, corregí-
plimiento, sin embargo de tque hablen y se flores y justicias ordinarias' de los lugares, lasque
diríjan á cualesquíer otros jueces y justicias, in se hubieren de hacer fuera de las partes donde
hibimos á todos nuesLros tribunales , jueces y residieren , para que cobradas las cantidades
justicias del conocimiento de dichas causas pa* se las remitan , y los gobernadores, corregido
ra que no se entrometan en ellas en todo ni en res y justicias asi lo cumplan y ejecuten, y unos
parte por viade apelación , esceso , agravio ni otros procedan con todo cuidado, sin omitir di
cu otra cualquier forma. Y mandamos que las ligencia y excusando cuanto convenga costas y
ejecutorias y demas despachos que en razón de menoscabos á los deudores.
las cobranzas se les hubieren enviado , las re
mitan y entreguen á los oidores mas antiguos
con los autos y diligencias que hubieren hecho í>. Felipe IV en Madrid á 11 de junio de 1610. Con
sin réplica ni coutradieion alguna , y si no lo la ley 52, til. 29, líb. 8.
hicieren los dichos oidores , les compelan á que Que los jueces de cobranzas den cuenta, en los tri
bunales de sus distritos , y avisen al consejo.
se los entreguen por todo rigor de derecho, i
es nuestra voluntad que por el trabajo y ocu Porque en estas cobranzas se proceda con
pación estraordinaria que en lo susodicho han toda puntualidad , cuenta y razón , ordenamos
de tener los oidores mas antiguos lleven á tres y mandamos á los oidores que las tienen a su
por ciento de todo lo que asi cobraren, y se ba cargo que den en cada un año relación jurada-
gan pago de ello con las limitaciones contenidas de lo que hubieren hecho >y estado de las que
en la ley siguiente , y todo lo demás lo remitan faltaren por ejecutar á los contadores del tribu
á estos reinos en la primera ocasión por la or nal de cuentas de sus distritos ; y porque tam
den y forma que se acostumbra y en los des bién conviene saber lo que obraron los oidores
pachos se les diere , y avisen en todas ocasiones sus antecesores en virtud de las ejecutorias y
al consejo del estado en que quedan estas cau otros despachos que recibieron, les encargamos
sas con relación del dinero que hubieren co que den á los dichos contadores las noticias que
brado y enviaren , diligencias que se hicieren, tuvieren ; y si para su justificación fuere ne
y testimonio de los impedimentos que ocur cesario usar de algunas diligencias las puedan
rieren en la cobranza, para que en él se ten hacer de suerte que en cada contaduría se ha
ga entera noticia de todo ; y si fuere necesario lle de todo la claridad que es menester , y
proveer algún remedio (lemas de los preveni- conste el paradero que hubieren tenido las co
dos en las leyes de este titulo se haga. branzas, comunicándose para todo con los con
tadores , de modo que cada año nos puedan en
En Madrid ¡i 14 de julio de 1G50. viar relación cierta de su cobro y paradero.
Otrosí los oidores jueces de cobranzas pon En Madrid á 5 de febrero de 1641.
gan muy especial y particular cuidado en ellas,
'haciendo continuas y precisas diligencias, sin Y mandamos á nuestros contadores de cuen
permitir en ningún caso la retardación que bas tas que en conformidad de lo referido tomen
cuenta cada uno año á todos los oidores, jueces
ta ahora se lia esperi mentado.
de estas cobranzas de lo que resultare de ella%
LEY XX. y estado en que estuvieren, y de lo cobrado y
I>. Felipe IV en Madrid á 19 do junio y á 22 de julio dejado de cobrar , y que ejecuten los alcances
do ;Lo2b. Yiíasc con la ley 23, tit. ó do este libro. que hubiere sin alguna omisión ó dilación que
Que los tres por ciento que el oidor mas antiguo ha para todo lo tocante á esto, anejo y dependien-
De los presidentes y oidores. 245
t e , damos y concedemos é los contadores tan LEY X X V I.
bastante poder, comisión y facultad , cuanto
de derecho se requiere ; y que en todas ocasio El emperador D. Carlos en Madrid á 5 de abril de
nes nos avisen de lo que obrareu en el cum pli 1528. Y el príncipe l>. Felipe gobernador en Guada
miento de esta nuestra ley. lajara á 21 de setiembre de 1516. Y el año de 1563.
En Madridá 11 de julio de 1650. Que donde no hubiere alcaldes del crim en, los oi
dores conozcan de lo civil y criminal, y traigan va
Otrosí mandamos que los dichos oidores den ras de justicia.
eu los tribunales de cuentas la relación jurada, Los oidores de audiencias donde hubié
que conforme á lo ordenado deben presentar, remos proveído alcaldes del crimen, conozcan
tan á tiempo , que no se espere á la partida de de las causas civiles y criminales, según y como
las armadas. pueden conocer los oidores y alcaldes de Valla
EY L X X III. dolid y Granada, y traigan varas de justicia,
D. Felipe 1Y en Cádiz á 21 de marzo de 1624.
como las traen los alcaldes de nuestra casa y
corte, y los presidentes les obliguen á que asi
Que el oidor asesor de cruzada se pueda hallar en lo hagan y cumplan.
los acuerdos en que se trataren negocios ele cru
zada. LEY X X V II.
Todas las veces que se ofreciere tratar en
los acuerdos algunos negocios tocantes a la San D. Felipe IV en Madrid á 28 de diciembre de 1634.
ta Cruzada, se pueda bailar presente el oidor, Que los oidores que en Lima y Méjico sirven de al
que fuere asesor de! tribunal de Cruzada ; y caldes del crimen en cuanto al rondar estén d la or
cuando no hubiere causa particular que toque den del virey.
á él ó á sus deudos, por lo general del oficio, no Porque se ha dudado si los oidores que ett
sea excluido de hallarse en los acuerdos que en las audiencias de Lima y Méjico, á falta de los
estos casos se hicieren. alcaldes del crimen, suplen por ellos, han dé
LEY X X IV . rondar de noche : Declaramos, que como quie
ra, que la regla general que en esto se ha dé
D. Felipe II en el Pardo á 17 de marzo de 1587.
guardar es, que no ronden: todavía porque se
Que en las juntas de hacienda entre también el oi ha considerado que pueden ofrecerse casos y
dor nías antiguo. accidentes de tal calidad que obliguen á lo con
En todos los acuerdos tocantes á la real ha trario: tenemos por bien que entonces los vire-
cienda, en que concurren los vireyes, presi yes ordenen loque mas convenga; y á los oidores
dentes, fiscales de nuestras reales audiencias, y mandamos, que su puesto que esto está ya intro
oficiales reales , entren y se hallen presentes, y ducido, siempre que ei virey resol viere que ron
tengan voto los oidores mas antiguos, den , lo hagan ; y á los vireyes encargamos que
esto se practique en ios casos convenientes, y
LEY 'XXV. que obliguen áesta resolución y no en otros. ( 9)
D. Felipe II en en Valladolid á 29 de abril de 1559.
Y D. Felipe IV en esta Recopilación.
Que los oidores tengan la antigüedad desde el dia jico ó al contrario , en cuyo caso se manda observar
da la posesión , y los de Lima y Méjico conserven esta ley por real cédula de 26 (le enero de 1807.
la antigüedad que tenían si pasaren de una de estas Estos ministros eu sus promociones ó pasos de
audiencias d la otra. unas audiencias á otras y los oficiales reales, según
una orden envidar de 15 de mayo de 1766, disfrutan
Declaramos y mandamos que los oidores los sueldos que gozaban cu sus.anteriores destinos
proveídos para que nos sirvan en . las reales au hasta que loman posesión de los nuevos.
Por otra de 4 de mayo de 1792 se declaró que esta
diencias, han de gozar la antigüedad desde el gracia era estensiva á todo empleado en real hacien
dia que lomaren la posesión, aunque hayan sa da no interviniendo demora voluntaria.
lido de otras audiencias donde fueron mas anti Pero donde debe verse todo esto esplicado esten-
guos; pero si la promociou fuere de Lima á Mé samente es en la real orden de 28 de jimio de 92, en
que se espusícron las distintas providencias y reso
jico, ó de Méjico á Lima, han de conservar la luciones del asunto; y porque se dice debió en Bue
antigüedad que tenían en la audiencia de don nos Aires haberse resuelto la solicitud de un oidor
de salieron, comose practica en las chancille- de Lima, promovido á regente de aquella audiencia;
rías de Valladolid y Granada de estos reinos de teniéndose presente, que en el caso de tener que
Castilla. ( 8) embarcarse el agraciado, gana el sueldo del nuevo
destino desde el dia inmediato ai del embarque.
(9) Por real cédula de 16 de diciembre de 1772
desaprobó al virey D. Manuel de Amat, y mandó de
(8) En cédula de 21 de agoste» de 1789 se declaró volver la mulla ó suspensión de sueldo hasta quinien
á favor de D José Rozahal la antigüedad en la ciu tos pesos , mandada hacer á los alcaldes de corte, por
dad de Lima respecto de D. Nicolás V elez, por el no haber rondado en la forma que les previno: esto
principio de la mayor antigüedad del título de aquel e s , queá las diez de la noche ocurriesen á su palacio
no obstante que era oidor del Cuzco y ser puramen á dar cuenta c¡ue saltan , para que á esta hora les ausi-
te honorario de Lima, pero con antigüedad. liase una patrulla que con este fin estaba dispuesta en
Por real cédula de Madrid de 8 cíe julio de 780 se el cuartel de palacio. Y aunque se le aprobó al virey
mandó contar y regular la antigüedad, no por el dia que los excitase á la ronda; pero no de aquel modo
de la posesión, sino por el dia de la fecha del real tí ojmeslo al grado de respeto y recomendación con que
tulo; y que si hubiese dos ó mas de una misma dehe quiere el rey sean mantenidos sus ministros togados
ser preferido el provisto en la plaza señalada por pri para la recta administración de justicia. Véanse las
mera, esceptuándose las traslaciones de Lima á Mé- leyes 170, tit. 15., y Ja 53 lit. 17 de este lib.
244 Libro ii. Tltlllo X V !.
brados en ellas, 6 estuvieren impedidos, de for
LEY XXV ma que no las puedan usar y egereer, el pre
E! emperador D. Carlos y la princesa gobernadora en sidente de la audiencia nombre otro oidor ó al
Valladolid ;i ll de octubre de 1535 P. t e lip e ll en el calde, el que le pareciere masa propósito, y de
Escorial á 7 de marzo de 1563. D. L' elipe M en el 1 ai-
(Jo á 21 de noviembre de 1600. la inteligencia que se requiera , que vaya á en
tender en su egecucion y cumplimiento, si no
Que ningún oidor conozca de pleitos en particular> fueren nombrados dos ó mas, porque ios nom*
no haciendo oficio de alcalde del crimen.
brados han de ser primero, que Nos le damos
Ningún oidor pueda conocer, ui conozca cíe poder y facultad cumplida para lo susodicho, y
pleitos, ní otros negocios , solo, y en particu el presidente procure que el juez salga con la
lar, no egerciendo oficio de alcalde del crimen mayor brevedad que fuere posible, y en la pri
en las audiencias donde lo Iiteren , porque esta mera ocasión nos dé aviso de lo que se hubiere
jurisdicion solo toca y pertenece á la sala, con efectuado.
forme á lo dispuesto por leyes de estos reinos
de Castilla.
D. Felipe II en la ordenanza 24, en Toledo á 25 de
mayo de 1596. En Madrid á 19 de diciembre de 1568
D. Felipe IV en Madrid a 7 de diciembre de^l659- Y en ia ordenanza 17 de 1565.
Véase la ley siguiente , y la 45, tit. 2. lib. ó. Que los oidores no lleven derechos , penas, ni ase
Que en vacante de fiscal sirva el oficio el oidor mas sorías , pena del cuatro tanto , y la parte que se
moderno de la audiencia. aplica al ju e z, sea para la. cámara.
Ordenamos y mandamos que en todos los Los oidores y alcaldes en el egercieio de la
casos de vacante de fiscal supla por él , y haga jurisdicción civil y criminal, no lleven algunos
su oficio durante la vacante el oidor mas mo derechos, ni penas, ni calumnias, ni otra aU
derno de la audiencia donde sucediei*e, habien guna , con color ó pretexto de asesoría, y las
do en ella suficiente número de jueces para ia penas en que condenaren , en que la ley aplica
expedición y despacho de los negocios fiscales y alguna parte al juez, sea para nuestra cámara y
de parte , de suerte que el oidor no haga falla fisco, y no para otra persona, y si llevaren algo
en ellos : y asi se observe general y uniforme de lo susodicho, lo vuelvan con el cuatro tan
mente en todas nuestras audiencias de las In to. (10)
ir
dias.
LEY XXX. El emperador D. Carlos y el príncipe gobernador en
D. Feli pe IV en el Fardo á 12 de cuero de 1650. Valladolid á 5 de junio de 1554.
One el oidor mas moderno, que hiciere oficio de. fis Que cada oidor por su turno asista seis meses d las
cal , preceda d los alcaldes del crimen y escuse el almonedas reales , no habiendo costumbre de que
* ir á su sala. sea el mas moderno.
El oidor que por mas moderno hiciere ofi Cada oidor asista por su turno á las almone
cio de fiscal de lo civil en las audiencias de L i das de nuestra real hacienda seis meses conti
ma y Méjico, ha de preferir en todas las juntas nuos, y cumplido este tiempo, el que saliere
ai alcalde del crimen mas antiguo y á ios demas-, dé relación al que entrare de lo que estuviere
y porque no concurran en la sala del crimen, hecho, no habiendo costumbre de que asista el
cuando se vea en ella algun negocio en discor oidor mas moderno, que esta se ha de guardar.
dia ó por otra causa ó accidente , se ha de es-
cusar de ir á ia sala, y para estos casos nombre
el vírey un abogado, que en ella defienda a la D. Felipe i l l en Snn Lorenzo á 26 de abril de 1618.
Y á 22 de agosto y 26 de setiembre de 1620. Y don
parte de nuestro real fisco. Felipe IV en esta Recopilación.
LEY X X X I. Sobre si los oidores y ministros reales se han de
D . Felipe 11 en Madrid á 18 de mayo de 1572. aplicar parte en los descaminos y contrabandos.
Oiie los oidores y otros ministros no salgan a hacer Habiéndose ordenado que los oidores y otros
vistas de ojos sin Ucencia de los presidentes. nuestros ministros y oficiales no perciban te r
Mandamos que los oidores, alcaldes, fisca cias partes, ni otra alguna cantidad de los des
caminos y contrabandos, por haber conocido de
les y ministros, estando proveído, que vayan a
hacer vistas de ojos en algun pleito o causa, no estas causas, y condenado los géneros y merca
sahum de las audiencias, ni hagan ansencia de derías por perdidos, guardando las leyes en lo
que á esto toca, y que los fiscales tengan parti
ellas, si no fuere con licencia de los presidentes.
cular cuidado de que asi se egecute por lo pa
sado, y que adelante sucediere: Tenemos por
D. Felipe 111 cu Aranjuez á i t de agosto de 1610.
bien de remitir la determinación á lo que nue
Que dándose alguna comisión d oidor ó alcalde, y no vamente se halla resuelto-por Nos en la ley 11,
podiendo ir d presidente nombre otro que use de tit. 17 , libro 8.
1 ella.
Todas las veces que por Nos se cometieren
abrimos negocios á oidores, ó alcaldes de nues
tras reales audiencias, y cuando llegaren lasco- (10) Sobre esta ley y las dos siguientes véase lo
misiones hubieren fallecido los ministros nom notado sobre las leyes 7 y 11, tit. 1 /, lib. 8.
De los presidentes y oidores. 245
LEY X X X V I. LEY XL.
D. Felipe II en Madrid a 26 de mayo de 1573. D. Felipe IV en Burgos a 28 de abril de 1660. Véase
la ley 15, til. l.° , üb. 7.
Que los ministros no pulan cosa fiada de la real
Hade tula, ni d cuenta de sus salarios , hasta que Que señala el salario que los ministros togados de
huyan corrido. ben percibir saliendo d (omisiones.
Mandamos que ninguno de nuestros vire- Ordenamos y mandamos que cuando los mi
yes, presidentes, oidores, y los demas minis nistros togados salieren á comisiones lleven ca-
tros, pida , ni cobre de nuestra hacienda nin da día de salario fijo doce pesos , demas de lo
guna cosa fiada, ni á cuenta de sus salarios has que gozan por sus plazas: y en caso de haberse
ta que hayan corrido, ni los oficiales reales se de embarcar lleven diez y ocho ducados por el
lo d én , ni paguen : con apercibimiento de que tiempo que estuvieren embarcados, y no mas,
haciendo lo contrario, se cobrará de los bienes siendo la embarcación en los mares del Norte ó
de los dichos ministros y oficiales, y proveere S u r, y que esto se observe asi: con calidad de
mos lo que nuestra voluntad fuere. que por ningún caso se esceda, y apercibimien
to de que si se contraviniere á lo susodicho, se
LEY X X X V II. procederá por nuestro consejo de las Indias, y
D. Felipe 1Y en el Pardo á 12 de enero de 1650. castigara a cualquiera que lo ejecutare y per
mitiere. O I )
Que no se provean los oficios en ínterin sin testi
monio de que estan vacos, ni d los proveídos se so LEY XL!.
corra con salario anticipado, ni ayuda de costa. D. Felipe 111 en Madrid á 16 de abril de 1618.
Porque en algunas ocasiones han nombrado Que mas el oidor que fu ere d comisión no pueda llevar
salario qu.e el suyo y el de la comisión.
los vireyes y presidentes gobernadores de nues
tras reales audiencias á personas que sirvan en Ordenamos que al oidor que saliere á algu
na comisión se le pague solo el salario de oidor,
ínterin dos gobiernos y corregimientos, que
y el de la comisión, y que el de gobernador ó
son á nuestra provisión, con solo noticia ó voz
de que son fallecidos los propietarios, y hecho corregidor, aunque lo haya de ser en ínterin,
no lo cejare ni lleve mas.
socorrer anticipadamente à los nombrados, con
dinero de nuestras cajas reales por cuenta de LEY X LII.
sus salarios, de que resultan gravísimos incon El emperador D. Carlos y la emperatriz gobernadora
venientes: Ordenamos y mandamos á los suso en una ordenanza antigua del año de J.550, D. F eli
dichos, que no hagan tales provisiones en ínte pe i i en Toledo, ordenanza 31 y 59 de las de 25 de
mayo de 1596. Y en la ordenanza 27 y 32 de audien
rin , si no les constare por testimonio auténtico cias del año de 1565.
de la vacante de ios oficios; y en cuanto á los Sobre el conocimiento de los pleitos y demandas en -
socorros y anticipaciones de nuestra hacienda y tre presidentes , oidores , alcaldes , fiscales y otras
cajas reales, se guarde la prohibición por Nos personas.
hecha , de que á ninguno de ios proveídos en Mandamos que los presidentes, oidores, al
oficios, con cualquier causa 6 pretexto, aunque caldes y fiscales no puedan traer pleito, ni de
sea de nuestro real servicio, se le socorra, ni manda civil en primera instancia en nuestras
anticipe alguna cantidad por ayuda de costa, ni reales audiencias por ínteres suyo ni de sus mu-
salario, y los vireyes y presidentes no puedan geres, hijos, ni hermanos, que del conocimien
dispensar en esto, y asi se egeeute inviolable to de estos pleitos y denmndas inhibimos à los
mente. oidores de ellas, y permitimos que conozcan
LEY X X X V III. solamente los alcaides ordinarios de las ciuda
D. Felipe IV en Madrid á 28 de junio de 1630.
des y villas donde residieron los demandados, y
vengan en grado de apelación à nuestro conse
Que ¿os oidores no lleven salario por comisarios de jo de Indias, siendo la causa de mil pesos ó mas
fábrica de iglesia.
cantidad; y si el demandado quisiere apelar pa
Los oidores que fueren nombrados por co ra la audiencia y no para el consejo, lo pueda
misarios de fábrica de alguna iglesia metropo hacer ; mas el presidente , oidor, alcaide , fis
litana, 6 catedral de las Indias , y señalado sa cal, sus mugeres, hijos y hermanos no tengan
lario por esta ocupación, no le puedan llevar, tal elección ; pero si la demanda ó pedimento
y nuestros oficiales reales retengan del salario se pusiere a los presidentes, oidores, alcaldes ó
de sus plazas la concurrente cantidad, y ios vi- fiscales, sus mugeres, hijos ó hermanos, pue
reyes y presidentes lo hagan egecutar. dan los actores pedir, demandar y usar de su
derecho ante las mismas audiencias, ó los alcal
LEY XXX IX. des ordinarios, y mas puedan los actores inter
D. Felipe II en Madrid á 26 de mayo de 1573. poner las apelaciones de los alcaldes ordinarios
Que á los presidentes y oidores y los demas minis para las mismas audiencias. ( 12)
tros que gozan salario se les pague , estando ausen
tes por justas causas. ( U ) Esta lev su espliea en cédula de Madrid de
9 de julio de 1685, y se mandó poner ejecución en
Es nuestra merced y voluntad que á los pre favor de D. Fernando Marques, alcaide del crimen
sidentes y oidores y los demas ministres de de Lima , y gobernador (fe líuancabéíica en real or
nuestras reales audiencias que gozan salario por den de 9 de marzo de 4787. Véase la lev 47 , lit. 15,
lib. 5.
sus plazas y ocupaciones, se les pague, estando (12) Por real cédula de 15 de noviembre de 1758,
ausentes por justas causas. se declara no estar comprendidos en esta ley Jos
TQMO I. 62
24G Libro ii. Título xvi.
LEY XLTII. LEY XLV.
EI emperador 0. Carlos y la reina de Bohemia go D. Felipe III en Valladolid á 3 de mayo de 1695. .
bernadora en 7 de julio ríe 1550. Y e! príncipe don Que los oidores no puedan conocer de las causas cri -
Felipe gobernador en 5 de junio de 1552. Y reinando minutes de vireyes ó presidentes.
en la ordenanza 55 de audiencias. Y en ia 24 de Ma
nila. D. Felipe III (mí Valladolid á 3 de mayo de L(i05 Ordenarnos y mandamos que si los vireyes
Que tos //residentes juntamente con los alcaldes Or é) presidentes cometieren delitos, los oidores de
dinarios conozcan de las Cansas criminales de oido nuestras reales audiencias no conozcan de ellos.
res y fiscales de las audiencias.
Otrosí ordenamos que los presidentes conoz LEY XLVL
can de las causas criminales de los oidores y El emperador D. Carlos en las ordenanzas de 1530.
fiscales, juntamente con los alcaldes ordinarios, Que los jaeces de residencia de oidores , alcaldes y
sin embargo de cualquier ordenanza que dis fiscales , hallando que merecen pena de nuter le, pro
cedan d prisión y embargo y los remitan <i estos
ponga lo contrario: y en cuanto á los vi reyes reinos con los procesos fenecidos.
presidentes de nuestras reales audiencias de Li
ma y Méjico se guarde la ley siguiente. (13) Mandamos que los jueces por Nos proveídos
para tomar residencia á los oidores, alcaldes
LEY XLIV* del crimen y íiscales de las audiencias, confor
£). Felipe 111 en San Lorenzo á 5 de setiembre de me á las leyes de este libro, y à las ordenanzas
1620. de ellas, y á las otras instrucciones que de Nos
Que los oiré yes puedan conocer de causas crimina llevaren, hagan y administren lo que hallaren
les contra oidores, alcaldes y fiscales. por justicia, así á nuestro fiscal como a las par
Los vi reyes de Lima y Méjico tengan juris tes que lo pidieren ; y si los residenciados hu
dicción para proceder de oficio, ó á pedimento bieren cometido delito por el cual merezcan
de parte criminalmente contra los oidores , al p. ni corporal, les bagan prender los cuerpos y
caldes y íiscales de las audiencias que fueren secuestrar sus bienes, y en el primer navio los
delincuentes y sentencien sus causas; y si la envíen presos á estos reinos, conforme á la ca
pena fuere personal ó corporal, ñola puedan lidad del delito, con el traslado de los procesos
ejecutar si nu procediere consulta hecha sobre que contra e’l. s se hubieren hecho, conclusos
ello al nuestro consejo de las ludias, y conforme y fenecidos, de forma que en el consejo no sea
á lo que resol viere se determinará la ejecución necesario hacer mas probanza ni descargo.
ente se hubiere de hacer; y si fuere algun caso LEY XLVII.
de sedición é> alboroto popular, ú otro delito
El emperador D. Carlos y los reyes de Bohemia go
tan enorme «pie por la pública satisfacción con bernadores en Valladolid á 7 de julio de 1550 Don
vetiga hacer en el delincuente alguna demos Felipe il en la ordenanza 40, en Toledo á 25 de ma
tración, en osle caso particular, y especialmen yo de 1596.
te el vi rey , tenga obligación á conferirlo con Que cuando algún oidor fuere presentado por testi
ia audiencia , y siendo de las calidades referi go , la audiencia provea si ha de declarar.
das, se proceda à hacer la ejecución que conven Ordenamos que cuando algun oidor fuere
ga ; y aunque en semejantes casos criminales el presentado por testigo, la audiencia provea de
vi rey puede proceder y prender, y en conse forma que por falta de probanza no sé falte a
cuencia de esto quedará el ministro susp -adido la justicia de las parles, mandándole que diga
de su ejercicio, no por esto podrá el vi rey pri lo que supiere, salvo si pareciere que malicio
varle, ni suspenderle de su plaza por sentencia samente le presentan para eseluirle de juez.
con ejecución; porque en este caso se ha de
consultar á nuestro cotisejo, que resolverá en LEY XLVIII.
la ejecución lo que mas convenga, y no le po D. Felipe 1Y en Madrid á 20 de octubre de 1627.
drá hacer embarcar por via de destierro y es- A llí ií 20 de febrero de 1628.
pulsion, si no fuere guardando lo que el conse Que los presidentes, oidores, alcaldes y fiscales,
jo resoiviere á ia consulta. (M ) no sean padrinos de matrimonios ni bautizos, ni
tos vecinos lo sean sayos, y los ministros lo puedan
suegros y cuñados de los ministros ni otros parien ser unos de otros.
tes por consanguinidad ó afinidad que los espresados Mandamos que los presidentes, oidores, al
en ella.
En otra de 22 de diciembre del mismo año so ha caldes del crimen y fiscales en ningún tiempo
bía m a n d a d o y declarado en los propios terminos. y por ningún caso puedin ser ni sean padrinos
Cuando ia sentencia es interlocutoria puede ape de matrimonios ni bautismos de ningunas per
larse para ante los vireyes ó presidentes, quedando sonas de sus distritos y jurisdicciones, en cuyas
en su fuerza lo prevenido en esta ley ; por lo que
mira ¡i las definitivas, por cédula do 22 de diciembre
causas y pleitos fueren ó pudieren ser jueces,
de 1755. conforme à derecho y leyes de estos nuestros rei
(13) Mandada observar en cédula dirigida aljpre nos de Castilla, y que estos tales tampoco lo
sidente de Clnle en cédula de 22 de setiembre d e /25.
( U ) Ni ios vireyes ni presidentes parece pueden
imponer ninguna pena á los oidores sin el acuerdo y Perú para suspender y remitir en partida de regis
concurrencia de los regentes. Véase el artículo 62 de tro á los ministros omisos en el cumplimiento de su
Instrucción de R egentes, que parece altera á esta obligación, laque sin embargo parece está revocada
ley. por otra que **e dirigió al virey del Perú A m a t, des
Véase la cédula de San Lorenzo de 19 de no aprobándole ciertas providencias que tomó contra el
viembre lie 1 /4 9 , en que se dio facultad al virey del alcalde de corte £>. Juan José de la Pueute.
De los presidentes y oidores. 247
puedan ser en matrimonios y bautismos de pre audiencia, siendo en caso grave , sea en acuerdo
sidentes, oidores, alcaldes y fiscales, nijde sus cerrado, y no teniendo esta calidad sea en presen
hijos; pero bien permitimos que los dichos m i cia del oidor mas antiguo.
nistros sean padrinos de matrimonios unos dé Mandamos á los vireyes, presidentes y go
otros y ele sus deudos y parientes, en cuyos plei bernadores de las audiencias que cuando suce
tos y causas estan prohibidos de ser jueces, y diere algun caso de escándalo ó publicidad en
de los bautismos de sus hijos, y asi se guarde y que sea necesario reprender ó advertir á algu
cumpla inviolablemente, sin contravenir en no de los oidores, alcaldes ó fiscales , lo llagan
ninguna forma, porque de lo coutrario nos ten en el secreto del acuerdo , asistiendo los oido
dremos por deservido , y se les hará cargo en res y no otra persona; y si él caso no fuere pú
las visitas y residencias, y serán castigados con blico ó escandaloso, ni la materia de tanta gra
rigor de derecho. (15) vedad que obligue á esta demostración, hagan
llamar al oidor mas antiguo, para que se halle
LE Y X L IX . presente, y sin tomar motivo de pasiones par
D. Felipe II en Madrid á 22 de mayo de 1583 , y á 7 ticulares , guarden la moderación debida en el
de euero de 158S. Con esta ley y la siguiente se vea tratamiento de nuestros ministros, de que nos
la ley 101, tit. 15, lib. 3. darán cuenta en la primera ocasión; y los mi
Que los presidentes, oidores, alcaldes y fiscales no nistros reprendidos ó advertidos estaran con la
visiten d persona alguna , ni vayan d desposorios modestia, sufrimiento y compostura que se re
ni entierros. quiere; y si despues tuvieren que satisfacer,
Ordenamos à los dichos ministros que pedirán licencia y darán su razón, de forma que
no visiten á los vecinos, ni á alguno de ellos se entienda la verdad; y siendo necesaria algu
por ningún caso, ni á otra cualquier persona na averiguación secreta, por escrito ó de pala
particular, tenga ó no tenga, pueda ó no pueda b ra, la hará el oidor mas antiguo, para que se
tener negocio ó pleito : y asimismo que no va dé satisfacción á la justicia.
yan á desposorios, casamientos ni entierros en
cuerpo de audiencia, ni alguno en particular, ^ LII.
si no fuere en casos muy señalados y forzosos. El emperador D. Codos en la ordenanza de audien
cias de 1550.
Que los abogados , relatores y escribanos no vivan
D. Felipe IV en Madrid ;í 30 de marzo de 1634. Y en con los jueces , ni estos consientan d los pleitean
13 de setiembre de ¿617. Vcase la ley 12, título 2, tes que ios sirvan nifrecuenten sus casas.
libro 8. Ningún abogado, relator ni escribano de
Que los presidentes, oidores, alcaldes, fiscales y audiencia viva con los oidores ó alcaldes, ni los
contadores de cuentas . no puedan asistir en las igle pleiteantes los sirvan ni tengan comunicación,
sias a fiestas , honras o entiei ro s, y en qué casos continuación ni conversación con Jos dichos jue
y form a pueden asistir.
ces o en sus casas, ni ellos los consientan ; y ei
Ordenamos y mandamos que ninguno de que luciere lo contrario sea reprehendido por
nuestros presidentes , oidores , alcaldes del cri el presidente y oidores , hasta dos veces, j a l a
men, fiscales de nuestras reales audiencias, y tercera multado en eí salario de aquel día; v si
contadores de cuentas de nuestras Indias, va las partes, ó sus abogados 6 procuradores qui
yan, asistan, ni puedan ir ni asistir como par sieren informarlos de su derecho, ó descubrir
ticulareseu ninguna iglesia ni convento donde les algunos secretos de la causa, bien nermiti-
haya fiesta, honras o entierro de ninguna per mos que los puedan oir. 1
sona, si no íuere en los diaseo que eoneur
rieren en cuerpo de audiencias á las fiestas de
tabla ó en casos muy señalados y forzosos, con D. Felipe II en Madiid á 23 de julio de 1580.
forme à la ley antecedente, que entonces lo ha Que los ministros no se dejen acompañar de nego
rán en la forma que hasta ahora s.e lia estilado, ciantes , ni den lugar d que acompañen d sus mu
y en nada han de alterar. Lo cual se guarde, ge res
cumpla y ejecute precisa é inviolablemente, sin Los oidores, alcaldes y fiscales no se dejen
dispensación ni disimulación alguna, asi en las acompañar de personas qué trajeren pleitos en
ciudades en que residen las audiencias, como las reales audiencias, ni den lugar á que acom
en todas las demás ciudades, villas y lugares de pañen á sus mugeres, por los inconvenientes
sus distritos, porque conviene à nuestro real que de lo contrario resultan.
servicio. (16)
LEY LI. El emperador Ï). Carlos y la reina de Bohemia go
-D. Felipe III en San Lorenzo á 5 de setiembre de bernadora en Valladolid a 29 de abril de 1549. ftia-
1620. Y D. Felipe IV en esta Recopilación. xi m iban o y la reina allí á 16 de abril y 2 de mayo
de I ooO D. 1* elipe II allí a 9 de tnayodc 1569. Para los
Que cuando conviniere reprehender d alguno de la contratos y^graogerías de los vireyes se vea la ley 74,
.tit, o, lib. ó. Por io que loca á gobernadores, corre-
(15) Mandada observar por cédula de 25 de no ridoi e s , alcaldes mayoi es y sus tenientes se vea la
viembre de 1688. ley 47., til. 2, lib. 5.
Ï por una cédula de 17 de julio de 1775 dirigida Que los presidentes y ministros de las audiencias
á 1« audiencia de Guatemala se prohibe también que no traten ni contraten ni se sirvan de los indios,
los ministros encompadi en entre sí. ni tengan grangerias.
(16) Véase la ley 104, tit. 15, lib. 3 y su nota. Ordenamos y mandamos que los presiden-
248 Libro ii. Tit. xvi.
tes oidores, alcaldes del crimen y fiscales no brediohas, aunque las hayan vendido y pasado
tengan do ninguna suerte grangerías de gana con efecto á otro poseedor, hayan perdido el
dos mayores ni menores , ni estancias , ni l<i~ precio en que se hubieren vendido: y demas de
1)rao/as, ni tratos de mercaderías, ni otras ne lo susodicho, la persona en cuya cabeza hubie
o-aciones, ni labores, por sus personas ni otras ren estado puestas en confianza, incurra en pe
interpuestas, ni se sirvan de los indios, de agua, na de otro tanto como montó el precio en que
ni yerba , ni lefia, ni otros aprovechamientos, se hubieren vendido las huertas , casas , tierras
ni servicios directa ni indirectamente, pena de ó estancias.
la nuestra merced, y de perdimiento de sus LEY L V I!.
oficios, y de lodo lo que contrataren, y gran- D. Felipe II en Valladolid á 9 de mayo de 1565.
gerias que tuvieren, y mas mil ducados, lo cual
aplicamos por tercias partos : las dos á nuestra Que los ministros no puedan sembrar trigo ni maíz.
ical cámara y íisco • y la otra a la petsona que Los presidentes, oidores, alcaldes y fiscales
lo denunciare. Y permitimos que los indios los en ninguna forma puedan sembrar trigo ni
puedan servir con la calidad, contenida en la ley maíz para sus casas ni para vender.
77 de este titulo: y asimismo ia persona ó per
sonas que contrataren con los dichos ministros, LEY L V III.
ó con alguno de ellos, por el mismo caso hayan El emperador D. Carlos y la reina de Bohemia go
perdido y pierdan todos sus bienes, y sean bernadora en Valladolid a 2 de mayo de 1550, capi
aplieados'de la misma forma, las cuales dichas tulo 3. D. Felipe 11 en Lisboa á 27 de julio de Io82.
penas mandamos á los presidentes de las au Que los ministros no den dineros d censo.
diencias que las ejecuten y hagan ejecutar en Ordenamos y mandamos que por ninguna
las personas y bienes de los que incurrieren en via ni forma nuestros oidores, alcaldes ni fisca
ellas. (17) les puedan dar ni den dineros à censo perpetuo
LEY LV. ni al quitar.
El emperador D. Carlos y la reina de Bohemia go
bernadora en Valladolid á 2 de mayo dy Don LEY L IX .
Felipe II allí á 9 (le mayo de 1565. D. Felipe l l l en San Lorenzo á l.° de noviembre
Que los oidores , alcaldes y fiscales no tengan casas, de 1610. D. Felipe IV en Madrid á 30 de junio de
chacras, estancias , huertas ni tierras. 1629.
Que la prohibición de tratar y contratar se entien
Mandamos que los oidores, alcaldes y fis da también para no tener canoas de perlas.
cales en ningún caso ni en manera alguna pue Declaramos que la prohibición hecha a los
dan tener ni tengan casas propias para su vi ministros de las Indias de tratar y contratar,
vienda, ni para alquilar, ni cimeras , ni estan comprende y se ha de entender para que nin
cias, ni tierras, ni huertas , ni labren casas, ni guno pueda tener canoas de perlas, ni para otra
tiendas en las ciudades donde residieren, ni fue pesquería que les pueda ser de alguna ganan
ra de ellas, ni en otra parte ciqtodo el distrito cia ni trato, v siendo necesario, de nuevo las
de la audiencia, en su cabeza; ni eu las de otras prohibimos: Y mandamos que no las tengan por
personas directamente o indirectamente, so las si ni por interpuestas personas, ni en compañía
penas en que esta dispuesto, que incurran ios de otros, so las penas que les esten impuestas
que trataren ó contrataren ó tuvieren otras eu ios demas tratos.
grangerías.
LEY LV I. L E Y LX.
D. Felipe l l l en Madrid a 21 do diciembre de 1615. El emperador D. Cavíos en Barcelona a 20 de no
viembre de 1512. La reina de Bohemia gobernadora
Que ¡os ministros contenidos en la ley antecedente en Valladolid á 29 de abril de 1519. Y á 16 de abril
incurran en pena del precio de las estancias , huel I y 2 de inayo de 1550. O. Felipe 11 en la ordenan
las , casas o tierras <pie compraren , aunque las ha- za 50 de audiencias do 1565. La Valladolid á 9 de
yon vendido , y en otro tanto las pet sonas en cuya mayo de 1565. Y en la ordenanza 3 / de audiencias
cabeza hubieren aludo . 3 de 1596.
Porque sin embargo de lo proveüo por los Que los ministros no entiendan en armadas, descu
señores emperador y rey, nuestro abuelo y pa brimientos ni minas.
dre, ios dichos ministros interponen terceras Los presidentes, oidores, alcaldes y fiscales
personas en cuyas cabezas tienen casas y gian-
no entiendan ni puedan entender en armadas
gerias , siendo ellos los verdaderos dueños, y á ni descubrimientos sin nuestro espreso manda
nuestro servicio conviene, que se castiguen los
to, ni en minas, en mucha ni en poca cantidad
escesos cometidos, sin aguardar a tiempo de en todo el distrito donde residieren' y los que
visitas: Mandamos que demás de las dichas pe contravinieren a lo susodicho , incurran en las
nas , constando en cualquier tiempo que h u penas contenidas en las leyes antecedentes.
bieren comprado o compraren, ó puesto, ó pu
sieren en cabeza ageua alguna de las cosas so- LEY LX I.
D. Felipe IV en Madrid á 27 de marzo de 1629.
(17) Véase la ley 17, lit 2, [ib 5, y allí la nota
do 1» cédula do 15 do junio do 1 /5 1 sobi e la juntaba- Que los oidores y fiscales de Santo Domingo no car-
nmda de corregidores V sobre las otras circunstancias unen frutos, y délo (pie se les llevare paguen los
con rpio se permitió ol repartimiento ¡« los pobres in derechos.
dios; y ia posteriormente espedida en 2/ de noviem Sin embargo de un capitulo de cédula del
bre de 1761.
De los presidentes y oidores. 249
señor emperador don Carlos nuestro visabuelo, por inclusos y comprendidos en ella , no solo
su fecha en dos de mayo de mil y quinientos en los casos referidos, sino en todos y cuales
y cincuenta, por la cual está permitido á los quiera que se probare haber tenido compañía
oidores de nuestra real audiencia de Santo Do pública ó secreta, ó tratado en cabeza de ter
mingo qué se les envíe de estos reinos en retor cera é interpuesta persona. Y mandamos que la
no de lo procedido de algunos frutos' de aque. probanza de estos escesos sea de los testigos y
lia isla lo que han menester para sus casas, sin cou las calidades que se disponen por derecho
pagar derechos por el perjuicio y daño quede es- en la probanza de Jos cohechos y baraterías de
to se sigue , hemos prove ido que se les paguen los jueces y otros ministros ; y para que esto-
sus salarióse» dinero. Y mandamos que el pre tenga me|ory mas cumplido efecto , y se pue
sidente no consienta á los oidores nt fiscales de da saber y entender si se han castigado estos
ella que carguen para estos reinos de los dichos escesos : es nuestra voluntad cjue en las residen
frutos, y que d^e todo lo que llevaren paguen cias y visitas que se tomaren a los vireyes, pre?
los derechos que justamente debieren, coino sidentes, oidores, alcaldes y fiscales, goberna-
generalmente está prevenido respecto de los nadores, corregidores y otros cualesquier jue
demas ministros de nuestras reales audien ces, justicias y ministros de las Indias, se pon
cias. ga por particular y especial capítulo lo que re
LEY L X IL sulta de estas leyes, para que asi respecto del
tiempo pasado como del futuro se proceda,
D. Felipe III en Madrid á 19 de diciembre de 1618. averigüe y haga justicia contra los culpados.
Que los presidentes y oidores de Manila no carguen
en ¿as naos. LEY LX V .
Mandamos que los presidentes y oidores de D. Felipe II en Lisboa à 27 de julio de 1582.
Manila no carguen mercaderías ni otras cosas Que cada uno de los ministros comprendidos en esta
en los navios que salen à otras provincias, ley no pueda tener mas de cuatro esclavos.
ni introduzcan con este fin ni otro à sus cria Es nuestra voluntad que los presidentes, oi
dos en los oficios que deben ocupar los bene dores, alcaldes, fiscales, alguaciles mayores de
méritos , por ser contra la causa pública y per las reales audiencias y sus tenientes, que aho
juicio de partes, guardando las leyes y orde ra son y ios que fueren, no puedan comprar
nanzas; con apercibimiento de que se ejecuta ni tener en su servicio mas de cuatro esclavos
rán sus penas. cada uno entre varones y hembras, pena de
LEY L X ÍIL nuestra m erced, y de que mandaremos pro
El emperador D. Carlos y la reina de Bohemia go
veer lo que convenga.
bernadora en Valladolid á 2 de mayo de 1550, ca
pítulo 4. D. Felipe 11 en Lisboa á 27 de julio de 1582
LEY L X V I.
Que los oidores y ministros puedan enviar d estos El emperador D. Carlos y los reyes de Bohemia go
reinos por lo necesario para sus personas y casas bernadores eu Valladolid á 2 de mayo de de 1550.
con que vaya registrado en sus nombres. D. Felipe l i allí á 9 de mayo de 1565. Véase la ley
49, tit. 4 , lib. 8.
Permitimos que los oidores y ministros de
las audiencias de nuestras Indias puedan enviar Que la prohibición de tratar y contratar los minis
tros , comprende d sus mugeres é hijos , estando en
á estos reinos por lo que hubieren menester de su potestad.
paño, seda y otras cosas para su vestuario y
provisión de sus casas, con calidad de que es Declaramos que ia prohibición de tratar y
to se compre y vaya registrado eu sus nom contratar los vireyes, presidentes y los demas
bres. (18) ministros de las audiencias comprehende a sus
mugeres é hijos qtie no fueren casados y vela
LEY I,X IV . dos y vivieren á parte.
D. Felipe III en Lisboa á 31 de agosto de 1619. Por
lo que loca á los alguaciles mayores, se vea la ley 32, LEY L X V II.
título 20 de este Hbi o. D. Felipe IV en el Pardo á 15 de febrero de 1627.
Que declara la prohibición de contratar los minis- Que las mugeres de ministros no intervengan en ne
tros, y que baste para averiguarlo probanza irre gocios suyos ni agenos.
gular. .
Declaramos que se comprenden en la pro Mandamos que las mugeres de oidores, al
hibición de tratar y contratar, contenida en caldes del crimen, fiscales, corregidores, ofi
las leyes de este título, los secretarios, fami ciales de nuestra real hacienda, y de los demás
liares y criados de los vireyes, presidentes, ministros que nos sirven en las ludias no solici
oidores, alcaldes y fiscales de las audiencias, ten ni intervengan en negocios propios , ni áge
y los relatores y escribanos de cámara y todos nos, públicos, ni particulares, ni escriban car-
los demas ministros nuestros de las indias, las tasderuegos ni intercesiones: con apercibimien
cuales guarden y cumplan lo dispuesto, como to deque liaremos poner el remedio convenien Le
si especial y particularmente hablasen con los en los casos, cosasy tiempos que conforme à de
susodichos, porque desde luego los declaramos recho se hallare establecido y determinado.
LEY L X V III.
(18) Por real orden de 15 de agosto de 1790 está
declarado, que lo que estos ministros hicieren llevar D Felipe II ordenanza en Toledo á 25 de mavo de
de España para su consumo y el de sus casas , debe 1596. Y en la 29 de 1565.
pagar derechos conforme á la ley 61 de este título. Que los presidentes y oidores y sus mugeres é ki-
TOMO I. (53
250 Libro ii. Título x v i.
os no hagan partido con ahogados ni receptores , ni LEY LXXI.
reciban dádivas.
El mismo allí.
Nuestros presidentes y oidores no hagan
partido con abogado ni receptor sobre que les Que las cosos que vacaren no se repartan entre los.,
den parte de su salario ó receptoría , ni pue oidores , sus hijos , deudos , ni criados , ni las qui
ten d los beneméritos.
dan recibir cosa alguna, aunque sea de comer,
de universidad ni de particular alguno, ni de Los oidores en vacante de.virey ó presiden
otra persona que haya traído pleito ante ellos te no apliquen para sus personas, hijos, deu
durante sus oficios, ó que verosímilmente se es dos y criados las cosas de utilidad y convenien
pere que le ha d e tra e r, y lo mismo se entien cias, que vacan , ni viviendo los vireyes ó pre
da con sus mugeres é hijos, pena de per juros y sidentes se intruduzgan con ellos para este fin,
de perdimiento desús oficios, y quedar inhá y procediendo con la justificación que todos
biles para otros, y volverlo que asi llevareu deben, cumplan con las obligaciones de sus
con el doblo, y no tengan conversación ni trato concienciasy de nuestro servicio , sin divertir á
con pleiteantes, abogados ni procuradores, con otras personas los premios que tocan á los be
forme está proveído por las leyes de estos reí- neméritos.
uos de Castilla y de este titulo.
LEY LXIX. El mismo allí á 19 de diciembre de 1618.
I). Felipe ÏÏ en Badajoz á 3 de junio de 1680, cap. 48 Que los presidentes , oidores y oficiales reales de
de instrucción. í>. Felipe t il en San Lorenzo á 5 de Filipinas no repartan entre si los tributos de arroz
setiembre de 1620. de la Pampanga.
Que los presidentes y oidores no reciban dineros Porque los presidentes y oidores de la a u -.
prestados ni otras cosas , dádivas , m presentes, y
no tengan familiaridades estrechas, ni las permi diencia de las islas Filipinas y oficiales de nues
tan d sus familias. tra -real hacienda suelen repartir entre todos
los tributos de arroz que nos pertenecen en la
Los presidentes y oidores no reciban de Pampanga para el gasto de sus easas, tomán
ningún genero de personas dineros prestados dolo al j>recio que por la tasa lo dan los tribu
ni otras cosas, dádivas ni presentes en poca ó tarios á la cosecha, lo cual es causa de que ven
en mucha cantidad , so las penas contenidas ga à faltar para las raciones que se dan por
en las leyes y pragmáticas de estos reinos y le nuestra cuenta, y de que se compre á es-
yes de este libro (pie cerca de ello disponen , y cesivos precios. Y por ser esto tan en perjuicio
no tengan familiaridad estrecha con personas de nuestra real hacienda , mandamos al presi
eclesiásticas ni seglares, ni la permitan ásus fa dente y oficiales reales que lo escuscn y quiten
milias, yen lim pieza y buen ejemplo procedan tan perniciosa costumbre, que asi conviene i
todos como deben. nuestro servicio.
LEY LXX.
D. Felipe 111 en Madrid á 13 de diciembre de 1620^ D. Felipe l í en Madrid á 17 de julio de 1572. D. Feli
pe 111 en el Pardo á 25 de febrero de 1618.
Que ios ministros de las reales audiencias atiendan
td cumplimiento de sus obligaciones , esc usen amis Que los ministros y sus criados y allegados no usen
tades y negocios , y se sustenten de sus bienes y de poderes ágenos para cobranzas.
salarios.
Los presidentes y oidores., alcaldes y fisca
Los oidores, alcaldes del crimen, fiscales y les, sus criados, ó allegados no reciban , ad mir
los demas ministro» de nuestras audiencias de lan, ni acepten poderes de parles, ni usen de
las Indias vivan con particularísima atención al ellos para negocios ni cobranzas de hacienda-, y
cumplimiento de todo lo que son obligados co si los aceptaren para cobrar de nuestra real ha
mo buenos y rectos ministros, procurando es- cienda, mandamos, que por ei mismo casólos
cusar comunicaciones y amistades estrechas y oficiales reales no io paguen.
correspondencias : no se encarguen de nego
cios de cualquier calidad que sean : susténten
se de sus haciendas y salarios, siti valerse de 0 . Felipe 111 en Sao Lorenzo á 3 de de agosto de
otros medios, pues todos son prohibidos en sus 1615.
personas, mugeres y hijos, especialmente el Que se remedien los juegos , amistades y visitas de
recibir dineros ni otras cusas prestadas ; por- i ministros de audiencias.
que en consideración de que conviene escusar
los grandes gastos y tiempos que se consume Deseando remediar el esceso de juegos de
en remediar estos desórdenes serán castigados naipes, y otros, prohibidos entre hombres ó
los culpados severamente. (19) mugeres, y particularmente en casas de oido
res, alcaldes del crimen y ministros de las au
diencias: y asimismo las visitas de ministros con
vecinos particulares, y de mugeres de ministros
con las de los vecinos, de que resultan amista
des y parcialidades : Mandamos á los viyeres y
(19) Esta ley 70 se mandó guardar por real cé
dula de 21 de lebrero de 1789 en que se hace el ajas
presidentes, que no lo consientan , permitan ni
estrecho encargo «i sus ministros para que se dedi toleren, y pongan el remedio que convenga,
queu al cumplimiento de sus obligaciones. conforme á las leyes y pragmáticas do estos reí-
De los presidentes y oidores. 251
nos y los de las Indias, para que se haga .justi gán á ninguna persona sus casas para habitarlas
cia con •:libertad , y los ofie ios tengan la autori ni para otro efecto, queriéndolas vivir sus due
dad q u e se les debe. ños.
LEY XXXV. . LEY L X X ÍX .
D. Felipe III en Martin Muñoz á 27 de diciembre d e
D. Felipe III a .20 de noviembre de 1610 1608.
Que ¡os ministros de justicia, sus parientes y cria Que los oidores y fiscales de Pánamd viv^n en ¿as
dos no tengan, tablages de juego, aunque sea con casas reales, y no habiendo'comodidad sé les den
protesto de sacar limosnas. doscientos ducados de la real Hacienda en cada un
Mandamos que los oidores y ministros de año.
audiencias,- sus parientes y criados, y. los go Es nuestra merced y voluntad , que los oi
bernadores, corregidores y alcaldes mayores no dores y fiscales déla audiencia de Panamá,‘que
tengan en sus casas tablages de juego, aunque cómodamente pudieren vivir, y estar.en nues
sea con pretexto de sacar limosnas para hospi tras casas reales de la dicha ciudad , vivan en
tales, y otras obras de piedad» ellas, y no habiendo comodidad,, se dén dos
LEY L X X V I. cientos ducados ai año,de nuestra real hacienda
á cada uno para alquilarlas, entretanto que hu
D. Felipe II en Madrid á 20 de junio de 1567. biere aposento suficiente en nuestras casas rea
Que el presidente y oidores, y los demas ministros les.
paguen á los indios lo que les compraren.
LEY LXXX.
Ordenamos y mandamos, que los presiden D. Felipe III en Madiid á 6 de febrero de 1616.
tes, oidores y otros ministros de las audiencias Que los ministros de la. audiencia de Panamá , sien
paguen , y hagan pagar à los indios la yerva, do jubilados , desocupen las casas reales.
pescado y huevos, y las demas cosas que hubie
ren menester, á los precios, y como valen en las Los oidores y fiscales de la audiencia de Pa
ciudades, y lo pagan los demas vecinos de ellas, namá, que fueren jubilados, desocupen las ca
y en esto no haya diferencia alguna, pena de sas reales, para que las habiten los oidores y
lo pagar con el doblo. fiscales á quien tocaren, conforme á lo dis
puesto.
LEY I, X X V II. LEY L X X X !.
L1 príncipe gobernador en Toro á 2L de setiembre D. Felipe lie n la ordenanza 55. En Toledo á 2 5 de
de 1551. D. Felipe 111 en Valladolid á 24 de noviem mayo de 1596. Y en la 28 de 1563.
bre de 1601. Y en Aran juez á 26 de mayo de 1609.
Que los jueces y fiscales de las audiencias no abo
Que los indios sirvan d los oidores como d los de mus guen ni reciban arbitramentos , y en qué caso lo
vecinos. podran hacer.
Por evitar la ociosidad à que naturalmente Ordenamos, que los oidores, alcaldes y fis
son inclinados los indios, y por su propio bien cales no aboguen en sus audiencias en ningún
y conveniencia permitimos, que puedan servir genero de causas , ni reciban arbitramentos de
y sirvan á los oidores, alcaldes y ministros de las que puedan ocurrir à ellas, salvo si comen
nuestras reales audiencias, en los casos, y como zado el pleito se comprometiere en todos los
está permitido á los vecinos de las ciudades, vi susodichos, ó con licencia nuestra , pena de ser
llas y lugares de las Indias, y en la paga y tra estrañado de ia audiencia el que lo quebrantare
tamiento no haya ninguna diferencia. por treinta dias, y de que pierda el salario de
dos meses.
LEY L X X V III.
D. Felipe II ¿en Lisboa á 27 de julio de 1582, en LEY L X X X II.
San Lorenzo á 19 de julio de 158« , en Madrid a 17 D. Felipe 11 en Madrid á 10 de febrero de 1575. Don
de enero de 1593. Felipe 1U en Elvas á 17 de marzo de 1619.
Que los oidores, alcaldes y fiscales no tomen ni ocu Que ningún virey , presidente , oidor , alcalde del
pen las casas contra voluntad de los dueños. crimen ni fiscal, nt-sus hijos ó hijas se casen en
sus distritos, pena de perder los oficios.
Mandamos qué los oidores, alcaldes y fisca
les no puedan tomar, ni ocupar casa para su vi Por los inconvenientes que se han recono
vienda, ni para otro efecto por fuerza, y alqui cido y siguen de casarse los ministros que nos
len las que hubieren menester de quien con li sirven en las Indias, y sus hijos en ellas; y por
bre voluntad se las quisiere dar eu arrenda que conviene á la buena administración de núes*
m iento, como á los demas particulares; y si de tra justicia, y lo demas tocante á sus oficios, que
esta forma no las hallaren, el virey, presiden estén libres de parientes y deudos en aquellas
te , ó gobernador de la audiencia les haga dar partes, para que sin afición hagan y egerzan lo
de las que se alquilan comunmente, lo necesa que es a su cargo, y despachen y determinen con
rio para su aposento y familia, pagando e! pre toda entereza los negocios de que conocieren,
cio que los demas particulares, siu consentir ni y no haya ocasión, ni necesidad de usar las par
dar logará que se haga molestia ni agravio á los tes de recusaciones, ni otros medios, para que
dueños, y siendo necesario se nombre tasador. se hayan de abstener del conocimiento: Prohi
D. Felipe III en Madrid á 4 de marzo de 1599.
bimos y defendemos, que sin nuestra licencia
particular, como en estos nuestros reinos se ha
Otrosí los susodichos no ocupen, ni reten- ce, los vireyes, presidentes y oidores, alcaides
252 Libro ii. Título xvf.
<3el crimen y fiscales de nuestras audiencias de demas comprendidos en la prohibición de ca»*
las Indias, se puedan casar, ni casen en sus dis sarse en sus distritos, sobre pedir licencia para
tritos s y lo mismo prohibimos á sus hijos e h i esto, sin egecutar antes las penas impuestas, y
jas, durante el tiempo que los padres nos sirven queda absolutamente prohibido el dar semejan
en los dichos cargos, pena de que por el mismo tes licencias para casarse los dichos ministros, ni
caso queden sus plazas vacas, y desde luego las sus hijos, conforme á lo proveído.
declaramos por tales, para las proveer en otras
personas que fuere nuestra voluntad. (20) LEY -LX X X V I.
D. Felipe l l i en Lerma á 19 de julio de 1608.
LEY L X O III. Que d los ministros que se casaren , estándoles pro
D. Felipe 11 en el Pardo á 8 de julio de 15/8. hibido , no se les acuda con el salario desde el din.
que lo trataren.
Qne los hijos de ministros se puedan casar fuera de
los distritos en que sus padres gobernaren Mandamos á los oficiales de nuestra real ha¿
Damos licencia y facultad á los vireyes, pre* cíenda, que desde el día que les constare que
sidentes, oidores, alcaldes del crimen y fisca alguno de los oidores y demas ministros hubie
les , para que en cualquiera parte de las Indias re concertado casarse en su distrito, no le pa
puedan casar sus hijos, con que sea fuera del guen , ni acudan con el salario de su plaza#
distrito de la audiencia en que cada uno resi LEY L X X X V II.
diere . (21)
D. Felipe IV en Madrid á 20 de noviembre de 1621.
LEY L X X X IV . Y en esta Recopilación.
D. Felipe U en Viana á 15 de diciembre de 1592. Que los presidentes conozcan de causas de casamien
tos y parcialidades de oidores y otros ministros, y
Q kc por solo tratar ó concertar de casarse los mi- las de audiencias subordinadas remitan las informa
nistros prohibidos pierdan los oficios. ciones al virey y den cuenta al consejo.
Declaramos que por el mismo caso que cual Declaramos que cuando sucediere casarse al
quiera de los ministros y personas contenidas guno de los ministros prohibidos, ó sus hijos, ó
en las leyes antes de esta, tratare, ó concertare concertar de casarse en sus distritos, ó haber
de casarse por palabra, ó promesa, ó escrito, ó parcialidades de oidores u otros ministros, toca
con esperanza de que les habernos de dar licen al presidente de la audiencia , como punto uni
cia para que se puedan casar en los distritos versal, escribir y hacer las informaciones que
donae tuvieren sus oficios, ó enviaren por ella, convengan ante el escribano de camara que eli-^
incurran asimismo en privación de sus oficios, giere. Y mandamos que si i» audiencia fuere su
como si verdaderamente efectuaran sus casa bordinada, haga las informaciones, y las remi
mientos, y que no puedan tener, ni obtener ta al virey, y le de cuenta de todo, y conforme
otros algunos, de ninguna calidad que sean, en á lo que resultare proceda el presidente y avise
las Indias. al consejo.
LEY LXXXV. LEY L X X X V IIL
D . Felipe 111 e» Elvas a 12 de mayo de 1619. Y don
Felipe IV en esta Recopilación. D. Felipe 11 en las ordenanzas 57 y 44 de Audiencias
de los años de 1563 y 1596 Y en el Bosque de Segò
Que no se admita memorial en el consejo sobre pe via «i 29 de julio de 1565. D. Felipe III en Madrid a
dir licencia para casarse los ministros ni sus.hijos 13 de febrero , y 7 de junio de 1620. D. Felipe IV
_en sus distritos allí á 18 de abril de 1640. Véase con la ley 3 4 , tí
tulo 2 , libro 5.
En nuestro consejo de Indias no se admita
m em orial, ni petición a los ministros, ni a los Que ningún ministro de audiencia real, gobernador
ni oficial real se pueda ausentar sin Ucencia del rey .
(20) En la prohibición de esta ley se compren Ordenamos à los vireyes, presidentes y oi
den los auditores de guerra que sirven en ludias en
calidad de tenientes de gobernador, y como tales dores, y á todas nuestras reales audiencias de
ejercen por sí jurisdicción , según lo previene la real las indias, que no den licencias por ninguna
cédula dada en hun Ildefonso a 16 de agosto de 1 v/O. causa, ni razón, para salir de sus distritos, ni
Y por otra de 5 de julio de 1775 se declaró á los venir á estos reinos, ni á otra cualquier parte á
protectores de indios comprehcndidos en la prohibi
ción que los otros ministros.
oidores, alcaldes del crimen, fiscales, alguaci
Con motivo de las distintas inteligencias que se les mayores, gobernadores, oficiales de nuestra
dieron á esta ley , se hi/.o general la prohibición de real hacienda', ministros, ni oficiales de las au
casarse los oidores siu licencia por cédula de 25 de diencias, ni á alguno de los que por rozon de
euero de 1/54. sus oficios deben estar y residir en ellos, sin es
Estas licencias se piden por la vía reservada , y
no en el consejo, según la ley 85 de este titulo y li pecial y expresa licencia nuestra, despachada
bro. . . . . . por el consejo de Indias, la cual declaramos que
Para cuando los lujos de ministros se hayan de los vireyes, presidentes, oidoi'es y audiencias
casar debe tenerse presente la cédula de 20 de abril no puedan conceder’, y si contraviniendo a lo
de 9 0 , en que se declaró que á aquellos les hasta
por toda probanza de nobleza el titulo de sus pa referido la concedieren, mandaremos procedet
tires. contra los susodichos egemplarmente, demas de
Sobre esta ley y la 81 so recncargo el cuidado y que las personas que usaren de tales licencias,
vigilancia en una real orden circular de 21 de mar y en virtud de ellas hicieren ausencia de sus dis
zo de 1791. tritos, ó vinieren á estos reinos, ó a otra cual
(21) Esta ley y la 84 se mandan observar cu real
orden de 24 de marzo de 91. quier parte, no serán relevados de culpa ni pe
D e los presidentes y oidores- 253
í»a, y jpor el mismo caso declaramos por vacos, res n o entren en los monasterios de monjas, ni va
yan d ellos d ninguna hora estraoi dinaria.
y por la presente vacamos sus plazas y oficios
para disponer de ellos como mas convenga; pero Mandamos á los presidentes y oidores, y 4
üien-permitimos, que cuando alguno tuviere todos los demas ministros de nuestras reales au
necesidad de salir de su provincia, o venir a es diencias, que ninguno de los susodichos, ni sus
tos reinos, nos avise de la causa y necesidad mugeres entren en la clausura de los monaste
ue para ello hubiere, para que por Nos se le rios de monjas á ninguna hora del día ni la no
é la licencia, ó provea lo conveniente. (22») che: y asimismo, que no vayan à hablar por
los locutorios, y puertas reglares á horas ex
LEY L X X X IX . traordinarias, y esto se guarde con la precisión
D . Felipe II en Madrid á 30 de octubre de 1578. necesaria y conveniente á la decencia de ios mo
Que los oidores visitadores de la tierra y otros m i- nasterios. (23)
mistros no vayan d posar d los conventos de reli-
. giosos. LEY X C II.
Mandamos á los presidentes y oidores , que D. Felipe II en Madrid á 5 de febrero de 1596.
no vayan á posar á los conventos de religiosos Que el presidente , oidores y fiscales de Filipinas
cuando salieren á visitar la tierra , ó á otros ne sean acomodados en las naos que d ellas fu eren .
gocios que se ofrecieren, y los presidentes or Los vireyes de la Nueva-España ordenen á
denen, que los alcaldes del crimen , donde los los cabos de las naos, que de aquella provincia
hubiere, ó escribanos de cámara , y otros cua- hicieren viage á las Islas Filipinas, que sean
lesquier ministros, hagan lo mismo. acomodados en ellas los presidentes, oidores y
LEY XC. fiscales de la real audiencia de Manila, que por
merced nuestra pasaren á servirnos.
D. Felipe 111 en Valladolid á 28 de marzo y 3 de
abril de 1605. En San Lorenzo á 7 de octubre de
4618. En Evora á 48 de marzo de 1619. D. Felipe IV LEY XC III.
en Madrid á 22 de febrero de 1627. D. Felipe II en Madrid à 21 de abril de 1573. Don
Felipe IV en Zaragoza-á 29 de octubre de 1643.
Que el oidor que saliere d visitar la tierra o a otros
negocios, ni Heve d su muger, ni parientes, y el con« Que el ministro suspendido no entre en su plaza, si
• sejo lo procure saber, y que se egeeute la pena. el rey la hubiere proveído, sin nueva orden.
Ordenamos y mandamos, que ios oidores Declararnos que cuantío alguno de nuestros
visitadores de la tierra , y los demas, que salie ministros fuere suspendido por tiempo limita
ren de las audiencias à cualesquier negocios que do del uso y egercicio de su plaza, ú otra ocu
se ofrezcan,' no puedan llevar, ni lleven consi pación, y Ños proveyéremos otro en su lugar,
go á sus mugeres, hijos, hijas, parientes, ni aunque sea por eí mismo tiempo limitado, si
parientas, ni á los hijos, ni. parientes de los de- pasado este tiempo pretendí ere el suspendido
mas oidores, fiscales, ni ministros délas au entrar al uso y egercicio de la plaza , á ocupa •
diencias donde residieren, ni mas de tres cria cion, no lo pueda hacer, ni se le permita usar
dos, procurando conseguir el .fin de la visita, y en ninguna forma, si no fuere llevando prime
remediar los escesos, pena de privación de ofi ro licencia nuestra para ello. Y mandamos que
cio, en que desde luego los darnos por conde el que asi estuviere proveído, aunque sea por
nados. Y mandamos á ios presidentes y oidores, el término de la suspensión, sea amparado y
que guarden y cumplan, y hagan guardar, cuni defendido, hasta que el suspendido lleve la li
plir y egecutar esta ley precisa e iuviolableuien cencia, y asi se guarde y cumpla en todos los
te, so las mismas penas, y ai presidente , y les casos que ocurrieren.
de nuestro consejo de Indias, que tengan parti
cular cuidado de inquirir y saber si se excede LEY X C IV.
en lo susodicho en alguna manera , y de que se El príncipe Maximiliano y la reina gobernadora en
egeeute la pena de privación en los transgreso- Valladolid á 2 de mayo de i550.
res, y ordenen que en las visitas ó residencias Que no es desacato pedir Ucencia los ministros para
se les haga cargo de los excesos que se cometie dejar los ofe ios.
ren en estas visitas, y procedan contra ios cul Sí alguno de nuestros ministros con |causa
pados , y los que lo hubieren disimulado y con justa y decente nos suplicare y pidiere licencia
sentido. para dejar el oficio que egerce de nuestro real
LEY XCL servicio: Declaramos que no será desacato, por
D. Felipe IV en Madrid á 2 de (setiembre de 1631.
que de ninguna persona nos queremos servir
contra su voluntad.
Que los presidentes, oidores, ministros, ni sus muge.
LEY XCY.
(22) Por real cédula dada en Madrid á 23 de ju D. Felipe IH en San Lorenzo á 17 de agosto de 1613,
nio de 1765 se permite que los vireyes puedan con Véase con la ley 10 , lit. 26 , lib. 8.
ceder licencia á los corregidores y demas ministros Que informen ¿as audiencias para hacer merced d
enfermos ó convalecientes para ausentarse por el viudas de oidores.
tiempo preciso de las ciudades y pueblos donde re
sidieren , si justificasen la urgeute necesidad de sa Mandamos à las reales audiencias, que su-
lir de allí, y restablecer su quebrantada salud Véan
se ademas las leyes 24 , lit. 2 , lib. 3 ; y ia 34 , tit. 2. (25) Mandada observar en cédula de 7 de no
lib. 5. viembre de 64.
TOMO I.
254 Libro ii. i itnlo xvi
cediendo fallecer los oidores, alcaldes, ó fisca Que Iris audiencias de Cruzada sean d tiempo
les de ellas, nos don aviso por nuestro consejo que el oidor asesor pueda asistir d ellas, le y
real de las Indias, con las causas y razones que ‘2 , tit. ‘2 0, lib. 1. s
hubiere para hacer merced á las viudas, y la Que en vacante de v ir e y , el oidor mas antiguo
necesidad ó.sustancia de hacienda con que hu no sea asesor de Cruzada?y lo sea el siguien
bieren quedado y por Nos entendido, se pro te , ley 3, tit. 20 , lib. 1.
veerá conforme à las ocurrencias de loá casos. Que el oidor i««í antiguo de cada audiencia co
nozca privativamente de las causas, sobre in
LE Y XC VI. troducir libros en las Indias, contra el pri
El emperador D. Carlos y la emperatriz gobernado vilegio de,San Lorenzo el R ea l, ley 12, tit.
ra en la ordenanza de Audiencias de 1530. 24 , lib . 1.
Que ningún oidor ni otro oficia/ de la audiencia ten Que las condenaciones que se aplicaren á la cá
ga nuis tic un oficio. mara de los que hubieren llevado libros del
Ordenamos y mandamos que ningún oidor, Rezo sin licencia, se pongan aparte, y el oi
ni otro oficial alguno, ni escribano de nuestras dor pueda llevar la que le tocare, lev 13, tit.
audiencias, y de otro cualquier juzgado, no ha 24 , /ib. 1.
ya, ni tenga, ni use por sí, ni por sustituto, ni Que los presidentes y oidores asistan en los es
por poder de otro, ni |de otra forma alguna, trados las horas señaladas, ó se escusen, y
mas de un oficio, y escribanía de uno, ni di no conozcan de pleitos en sus casas t le yó fl,
versos juzgarlos, pena de que cualquier oficial tit. de este libro.
ó escribano que lo contrario hiciere , por el Que los presidentes puedan hacer informacio
mismo hecho pierda el oficio, y sea inhábil para nes contra los oidores, y enviarlas al conse
usar aquel , y cualquiera otro en adelante para jo , y ellos no contra los presidentes, ley 39,
toda su vida, y pague diez mil maravedís de tit. 15 de este libro.
pena por cada vez que lo hiciere. Que el presidente de Panamá despache igual
mente los negocios de gobierno y justicia que
LIÍY XCVIK. le tocaren, con los escribanos de cámara,
D. Felipe II en Tomar íí 22 de mayo de 1581. ley 63, tit. 23 de este libro.
Que los oidores, alcaldes y fiscales traigan garna Véanse las leyes 4, 38, 40 51 , 54 , 55, 58,
chas ó ropas talares, y si anduvieren d caballo, pue 59, 62, 70# t>t. 3, lib. 3, que tratan de otras
dan usar de gualdrapas. obligaciones de los presidentes gobernadores
Ordenamos a los oidores, alcaldes del cri NOTA.
men y fiscales de las audiencias, que usen y D Felipe IV en Zaragoza.
traman garnachas ó ropas talares siendo segla-
res, según usan los de nuestros consejos y ehau- En primero de octubre de mil seiscientos
y cuarenta y cinco se declaró por cédula de este
cillcrias de estos reinos, V permitimos que tra>
dia, consultada con S. ¡VI., que los tenientes
ycndolas puedan andará caballo con gualdrapa,
de gobernadores, y capitanes generales dé las
sin embargo de lo dispuesto por las leyes dees-
provincias de Cartagena, Yucatán y la Habana,
tos reinos. Y prohibimos y defendemos, que y del corregidor de la villa imperial de Potosí,
otras algunas personas, de cualquier estado, son comprendidos en la prohibición de casarse
calidad y condición que sean, traigan las gar en sus distritos.
nachas ó ropas talares, pena de que el que la
tragere la pierda, é incurra en pena de eiu- E>. Carlos II en Madrid.
cuenta mil maravedís, aplicados todos ellos Y asimismo se declaró y mandó, que las ór
para nuestra cámara, y que esté treinta diasen denes y prohibiciones contenidas en las leyes de
la cárcel. este título, sean y se entiendan también, para
que ninguna de las personas y ministros refe
LEY XGV1IL ridos puedan casarse, ni tratar casamientos
D. Felipe III por auto tlel consejo en Madrid á 18 de ellos, ni sus hijos, ni bijas, con los hijos, ni
junio de 1608.
hijas de los gobernadores, corregidores y alcal
Que los oidores, alcaldes del crimen y fiscales pro des mayores, que actualmente lo fueren de sus
veídos para las Indias no se pongan garnachas ó ro distritos, ni las hijas de los dichos ministros se
pas en la corte.
puedan casar con los dichos gobernadores, cor
Mandamos que los alcaldes y fiscales que regidores y alcaldes mayores, ni ellos con hijas
proveyéremos para las audiencias de las Indias, de los dichos ministros, hasta que tengan dadas
no se puedan poner, ni pongan garnachas, ó sus residencias, y estén sentenciadas y deter
ropas talares en esta corte, ni en otra ninguna minadas, asi por el consejo, como por las dichas
parte de estos reinos, sino fuere en la ciudad audiencias, so las mismas penas impuestas por
de Sevilla, habiendo ido á ella para embarcar las dichas leyes. Dada en Madrid á i de junio de
se á servir sus oficios. 1(376 años.
255
TITULO OI T OCHO.
D e los fiscales de las audiencias y chancillerias reales de las
In d ia s.
T2TTO'
SPe los ju zg a d o s de p r o v in c ia , de los oidores y alcaldes del crt*
m en, de las audiencias y chancillevias reales de las Indias»
TITULO YEXMTE.
D e los alguaciles m ayores de las audiencias.
>
mSSSSSi
(2) Ycase la ley 29 de este título , y la 14 del 28. (5) Yease la ley 22 de este título y libro.
De los relatores de las audiencias. 277
oficiales y deudores, cuyos salarios y deudas no
Í>ueda ver y leer los derechos que recibieren de
as partes, de que les den conocimiento, aun procedieren de titulos nuestros.
que no se le pidan , lo cual todo cumplan, pe
na de veinte pesos por cada vez que lo contrario LE Y X X X IV .
hicieren. D. Felipe 11 ordenanza 191.
Que los relatores y los demás oficiales procuren te
LEY X X X I. ner sus posadas cerca de las audiencias.
El mismo ordenanza 194. Ordenamos que los relatores procuren tener
Que los relatores no reciban dádivas. sus posadas cerca de las audiencias, y que lo
Ningún relator reciba dádivas en poca ó mismo hagan los demas oficiales que no tuvie
mucha cantidad, pena del doblo y de perjuros, ren casas px-opias.
y privación de oficios.
Que tos relatores no vivan con Jos jueces ,
LEY X X X II. ley 52, til. 16 de este libro.
D. Felipe 0 1 en el Pardo á 20 de febrero de 1609. Que los relatores y sus mugeres é hijos se com
Que los oficiales reales no paguen salario á relator prenden en la prohibición de tratar y contra
sino con libranza de su audiencia. tar, y basta para averiguarlo probanza ir
Mandamos á nuestros oficiales reales que no regular, ley 04 y 66, tit. 16 de este libro.
paguen salario á los relatores de las audiencias Que los ministros sean diligentes en el despacho
sino fuere por libranzas de las mismas audien de los pleitos fiscales, ley 40, tit. \ 8 de este
cias, y que no se les reciba en cuenta lo que de libro.
otra forma pagaren. Que los relatores lleven los derechos por el
arancel, y los firmen en los procesos, ley 43.
LEY X X X III. tit. 23 de este libro.
D. Felipe IV en Madrid á 12 de agosto de 1623. Qiie los relatores luego en acabando de poner
Que d los relatores se pague su salario con forme d el caso del pleito, digan y manifesten si los
sus títulos, prefiriéndolos d los demás oficiales que abogados, receptores y procuradores han
no los tuvieren del rey. cumplido con la fo rm à que da la leu 2 2 , ti
Los receptores de penas de cámara y gastos tulo 27 de este libro.
de justicia paguen á los relatores los salarios Que el relator traiga para la primera audiencia
asignados por sus títulos, conforme á nuestras el proceso que se le llevare en provisión, pena
cédulas reales, prefiriéndolos à todos los demas de tres pesos, ley id, tit. 28 de este libro.
LEY X X IX . L E Y X X X III.
D. Felipe XV en Madrid á 4 de junio de 1627. D . Felipe 1H allí, cap. 5.
Que no se reciba en cuenta libranza, aunque sea Que el receptor de audiencia cobre las condenacio
del v ire y , dada sobre gastos de justicia y pagada de nes hechas en la ciudad y su distrito , y los algua
penas de cámara. ciles ejecuten los mandamientos sin llevar interes.
Mandamos à los oficiales de nuestra real ha Los receptores generales tengan particular
cienda que no paguen ni aun à titulo de em cuenta y cuidado de cobrar y hacer cobrar y
préstito, de penas de cámara ninguna de las traer á su poder las penas y condenaciones que
consignaciones que están situadas en gastos de en cualquier forma, causa y razón fueren he
justicia, aunque sea con libranza del virey ó chas, asi en las audiencias y ciudades donde
presidente, y á los contadores de cuentas, que residieren, como en las demas ciudades, villas
si contra esto los dichos oficiales pagaren algu y lugares de sus distritos, y hagan las diligen
na cosa, no se lo reciban en cuenta en las que cias neeesanas, conforme a las leyes que cerca
les tom aren, y guarden lo proveído por la ley de esto tratan, y los alguaciles mayores de las
5 de este título. audiencias y sus tenientes, y otros cualesquie
ra de las ciudades, villas y lugares, reciban de
LEY XXX. los receptores generales ó de Jas personas que
D. Felipe 111 allí, cap. 4. nombraren, los mandamientos que les entrega
Que en poder de los receptores generales entren to ren , y ejecuten y cobren las condenaciones, y
das las condenaciones, y alli se libren, y no en los les acudan luego con ellas, sin llevar por esta
condenados en ellas ni en sus fiadores. razón ningún ínteres, pena de suspensión de
En poder de los receptores generales de oficio por seis meses.
nuestras audiencias entren con la cuenta y ra L E Y ' X X X IV .
zón que está dispuesto, todas las condenaciones D. Felipe IV en Madrid a' 16 de abril de 1659, eaní-
de penas que en las audiencias se hicieren en tulo 8. 1
las salas de civil y criminal, aplicadas á nuestra Que se tenga cuidado con las comisiones dadas para
cámara , gastos de justicia, penas de estrados y cobrar penas , y si se ha dado cuenta de ellas.
otras cualesquiera, aunque se apliquen para Mandamos que se ponga particular cuidado
ciertos y determinados gastos, ó pagas de aigu- y diligencia en averiguar y saber qué jueces y
TOMO I.
294 Libro iit. T itulo xxv.
comisarlos sé lian despachadlo por los distritos ban fianzas de los jueces, ïègas, llagas y abona
y partidos de las audiencias, para cobrarlas pe das, de que darán cuenta de todas las conde
nas, condenaciones y multas que hubieren he* naciones que hubieren hecho durante su comi
cho las justicias ordinarias en los pleitos que no sión, y que entregarán lo procedido de ellas
hubo apelación, o fue desierta la que se inter al receptor general ó á la persona que tuviere
puso , y por cuya orden se despacharon, y con su poder, sin tomar ni retener cosa alguna,
qué fianzas, y si han dado cuenta de las comi aunque hayan de ser pagados de algunas libran
siones, y a quién y con qué orden, para que zas; y los escribanos tíe cámara entreguen al re
de todo se pueda hacer cargo á las personas que ceptor general testimonio de las fianzas que
se debiere hacer. dieren los jueces, y los escribanos de sus comi
LEY XXXV. siones den testimonio de las condenaciones y de
las que se hicieren y no se cobraren, declaran
El mismo a llí, cap. 10. do la cantidad, persona y causa, lo cual cum
Que las comisiones para cobrar condenaciones, y plan los jueces dentro de veinte dias primeros
sus fianzas y cuentas se den conforme d esta ley.
siguientes despues de acabado el término que
Las comisiones que se despacharen para co les fuere dado para entender en los dichos ne
brar las condenaciones que hubieren hecho las gocios; y si no fueren con término limitado
justicias ordinarias en los negocios en que no se dentro de cuarenta dias despues de cobrada la
interpuso, ó no se siguió la apelación , lian de condenación; y si mas tiempo la retuvieren, in
refrendar los escribanos de cámara y juzgados curran en pena del doblo para nuestra cámara,
ordinarios, -y tomar por su cuenta las fianzas conforme á las leyes de estos reinos de Castilla
que han de dar los comisarios y los oficiales de que cerca de esto tratan , las cuales los escri
nuestra real hacienda tomaran la razón de ellas, banos de cámara guarden y cumplan en la for
y de vuelta las cuentas á los comisarios > para ma y con las penas en ellas contenidas.
asentar en sus libros las partidas qué fueren a
cobrar, y las que de ellas han entregado á los LEY X X X IX .
receptores. El misino allí, cap. 8 y 9.
LEY X X X V I. Que en las condenaciones que hicieren las justicias
El misino allí <í 11 de marzo de 166ó. ordinarias , se guarden las leyes de estos reinas de
Castilla. auc ñor esta se declaran.
Que los receptores de penas de cámara den fianzas.
Ordenamos y mandamos que los receptores En las condenaciones que los corregidores
<lc penas de cámara de nuestras audiencias den y alcaldes, ordinarios, y otros jueces y justicias
fianzas legas, lianas y abonadas, y que el re de la ciudad donde residiere audiencia nuestra,
ceptor de la audiencia de los Reyes dé seis mil y de las demas ciudades y villas del distrito de
pesos ensayados de fianzas ¿ y los de las demás la audiencia hacen en sus juzgados, se guarde
audiencias al respecto. la léy 35 , título 6 del libro 3 de la Recopi
lación de leves de estos reinos de Castilla, con
forme á la cual hechas por las justicias cuales-
i). Felipe 111 allí, cnp. 6. quier condenaciones, el escribano público ó real
Que el receptor general pueda nombrar personas ante quien se hicieren, el mismo día las noti
para lo que hubiere de cobrar fuera de la ciudad, fique al escribano de cabildo de la tal ciudad ó
y den fianzas cuino se ordena. villa en un libro que para este efecto tenga ci
Para lo que se hubiere de cobrar de penas dicho escribano de cabildo, numeradas todas las
de cámara fuera de las ciudades donde residen hojas, y rubricadas del corregidor donde le
nuestras audiencias reales], puedah los recepto hubiere , y donde no, dé un alcalde ordinario,
res generales nombrar y nombren personas que con distinción y claridad , día , mes y año y
con su poder y facultad usen, ejerzan y cobren nombre del juez qué las condenare, y allí fir
las penas y condenaciones con que cada uno de men las partidas los escribanos, pena del cua
los nombrados de fiauzas a satisfacción de los tro tanto para.nuestra cámara , y el escribano
receptores generales, ó del corregidor ó justicia dé cabildo tenga cuidado de cobrar las dichas
ordiuaria de la ciudad, villa ó lugar de dar penas y condenaciones y gastos de justicia donde
cuenta con pago, y las justicias envien testi no hubiere receptor, y esté obligado á las dar
monio de haberlo hecho á los receptores gene y entregar todas al dicho receptor general ó á
rales. la persona por él nombrada, cada mes, sin dis
tribuir ni gastar cosa alguna antes de entrar en
LEYr X X X V III. poder de el receptor general, y de lo que to*
El mismo a llí, cap. 7. care á nuestra cámara no se gaste cosa alguna,
Que los escribanos de cámara reciban fianzas de los conforme á lo dispuesto por ley de estos reinos
jueces de comisión por las ñas de cámara , y den de Castilla: y las demüs partes aplicadas á gas
testimonio de ellas al receptor general. tos de justicia y obras públicas, se libren en ei
Cuando en nuestras audiencias reales se pro* receptor genéralo en las personas por el nom
veyeren algunos jueces y se pudiere presumir bradas por los dichos jueces y justicias y no de
(pie habrá condenaciones para la cámara, gas otra forma, para que en todo haya buena cuen
tos de justicia u otros efectos : Mandamos que ta y razón , pena de que el escribano de ca
los escribanos de cámara, antes de entregarles bildo lo pague desús bienes con el cuatro tan
las carias y provisiones «pie despacharen, reci to conforme h la dicha ley, el cual entregue
De los receptores y penas de cámara. 295
testimonio de todo al receptor general ó á la gado y gastado por mandamientos justa y legí
persona por el nombrada, para que él la pre timamente , y lo que loca à las penas de cáma
sente en comprobación de su cargo. Y asimismo ra , deque no se puede ni lia de gastar cosa al
mandamos se guarde y cumpla con efecto lo guna, lo saque por alcance, y la dicha cuenta,
contenido en el capitulo 18 de la ley 15, titu demas de la juntar con ia residencia del corre
lo H del libro 2 de la dicha Recopilación, qúe gidor , envie á poder del receptor general, con
es del tenpr siguiente : Otrosí mandamos que fas penas de cámara y alcánce que hubiere,
los jueces ordinarios , corregidores y jueces de dentro de veinte dias despues de pasado el tér
residencia de todas y çualesqiüer ciudades, vi mino de la residencia, para que el receptor ge
llas y lugarés de nuestros reinos y señoríos, en neral lo reciba y se haga cargo, pena de que el
N lo que loca á las condenaciones que hicieren corregidor que asi no lo cumpliere lo pague con
para nuestra cámara, guarden y cumplan loque el doblo para nuestra cámara , y pueda el re
por las pragmáticas y capítulos de corregidores ceptor general enviar persona á su costa, y de el
está dispuesto y ordenado. Y mandamos á íassu* cobrador con salario competente', para que trai
sodiclias personas que en fin de cada un año fco ga á su poder la cuenta y alcance, y para ello
men cuenta á los escribanos de concejo y recep sé le den las provisiones necesarias, y no se vea
tores ápuyo cargo es ó fuere cobrar las dichas la residencia del corregidor sino constare estar
penas, y que dada la cuenta de ellas, loque pa cumplido lo susodicho por certificación de el
reciere estar en su poder despues que la hubie receptor general. Y mandamos que en los títu
ren dado dentro de quince dias lo envíen al los que se despacharen en los oficios de el go-
dicho nuestro receptor general y no á otra per bierno para los corregimientos se ponga la ra
sona , pena de veinte mil maravedís por cada zón de esta ley.
vez que lo dejaren de hacer. Y mandamos à los
nuestros corregidores y jueces de residencia, LEY X L I.
que hecha la dicha cuenta y alcance envien al D. Felipe II en Madrid á 17 de agosto de 1572.
dicho nuestro receptor general la razón depila Ou* las mercedes hechas en penas de edmara d ciu
firmada de su nom bre, dentro de los dichos dades , villas o lugares , íe entiendan en las que apli
quince dias , para que él sepa cuando se cuui- caren las justicias ordinarias , y les pertenezcan
pÜeron *, y pasados, si los dichos escribanos de aunque sean ejecutoriadas por las audiencias. ’
concejo y receplores.no hubipreu hecho, ni Declaramos que por virtud de las mercedes
cumplido lo susodicho, pueda el dicho recep de f>enas de cámara que hubiéremos hecho é
tor general, á costa de ios dichos escribanos de hiciéremos en algunas ciudades, villas ¿ luga
cabildo y receptores, enviar personas con el res de las Indias, hayan de gozar y gocen , y se
salario que le pareciere que sea justo , y tráiga les acuda solamente con lo que montaren las
a'su poder las cuentas y alcances que se les hu
penas y condenaciones que se aplicaren a nues
bieren hecho, y los dichos veinte ni¡i marave tra cámara y fisco por las justicias ordinaria» de
dís de pena eu que cada uno de ellos hubiere aquella ciudad, villa ó lugar : y que si estando
incurrido. Y mandamos » los.del nuestro con
pendientes algunas causas ante las justicias or
sejo que para lo susoJíchodep á nuestro recep
dinarias, pronunciaren en ellas sentencias en
tor general las provisiones que convengan y
que haya alguna condenación, de que se apela
sean necesarias, y asi se ejecute en lo que no
re para ante el presidente y oidores de la au
estuviere especialmente determinado por leyes
de este título. diencia del distrito, y fueren confirmadas en
todo ó p a rte , que asimismo se entienda per
JLE.Y XL. tenecer, y que haya de gozar la ciudad , villa
D. Felipe ÏII allí, cap. 10. ó lugar de las dichas condenaciones que por el
Que enjos corregimientos de indios donde el recep presidente y oidores se aplicaren á nuestra cá
tor general no nombrare persona que cobre las con mara por el tiempo que durare la merced, bien
denaciones , la nombre el corregidor y se le tome
cuenta como se dispone. asi como si Jas causas se feneciesen y acabasen
ante las justicias ordinarias. 7
Ordenamos que en los corregimientos de
indios donde el receptor general deí distrito LEY X LIL
no hubiere nombrado persona que cobre las D. Felipe II en S. Lorenzo á 11 de setiembre de 1596.
condenaciones y penas, el corregidor del par Qué los gobernadores y corregidores tengan M,ro
tido luego que comenzare à usar de su oficio ia de condenaciones de penas de cámara.
nombre y elija a su satisfacción por receptor y En las residencias que han dado algunos £0 .
cobrador de las que durante el tiempo de su bernadoresse les ha hecho cargo que” duran te
oficio fueren por él ó sus tenientes aplicadas á el tiempo de sús oficios no tuvieron libro donde
nuestra cámara y gastos de justicia ó para otros se asentasen las condenaciones aplicadas à nues
afectos, el cual las reciba y cobre, y se guarde tra cámara y fisco, con que esta hacienda no ha
la misma orden que está mandado haya respec tenido la cuenta y razón necesaria, y conviene
to dei escribano de cabildo en las ciudades y vi no dar.lugar á usurpaciones: Mandamos á ]ÜS
llas de españoles , y el corregidor no las reciba presidentes y ,oidores de nuestras reales audien
nientren.cn su poder çon la pena de la. ley: y cias qpe provean y den orden para qne los go-
el corregidor que le sucediere tome cue.nta á bernadores y corregidores de las indias, donde
la tal persona luego que comenzare à usar su no hubiere este libro, le hagan y tengan, y en
oficio, pasándole en cuenta lo que de las dichas
el se asienten las condenaciones qué pertenecie
condenaciones y gastos de justicia hubiere pa«. ren á nuestra cámara y fisco.
296 Libro ii. Título xxv.
LEY X LIII. LEY X LV I.
D. Felipe III en Lisboa a 2 de julio de 1619. D. Felipe IV en Madrid á 16 de abril de 1639, ca
Que se cumplan los mandamientos que dieren los re pítulo 4.
ceptores. Que no se pague libranza de penas sin estar toma
da la razón de ella.
Mandamos á los corregidores, alcaldes ma
yores y otros cualesquier jueces y justicias, que Los receptores de penas de cámara ni los
guarden y cumplan cualesquier mandamientos oficiales de nuestra real hacienda no han de pa
que los receptores de penas de cámara y gastos gar ninguna libranza que sobre ellos y las di
de justicia de sus provincias, á quien tocare la chas condenaciones se dieren , sin estar tomada
cobranza de ellas les enviaren, para que sin al la razón por nuestros oficiales \ porque demas
guna dilación ni escusa entreguen todos y cua- de que no se les ha de recibir en cuenta, se les
lesquicr maravedís que hubiere en su poder, hará cargo y capítulo de residencia, como tam
procedidos de las dichas penas y gastos, y à los bién al ministro que lo permitiere.
escribanos de los juzgados que den los testimo LEY X L V II.
nios que por parte de los receptores se les pi
dieren. D. Felipe III en Madrid á 12 de diciembre de 1619.
LEY X L IV . Que las condenaciones que se mandaren traer al con
sejo no se gasten en otra cosa,
D. Felipe III en Valladolid á 5 de abril de 1605.
Mandamos que todas las condenaciones que
Que se reserve de las penas de cámara lo necesario se hicieren por nuestro consejo de las Indias, y
para gastos de galeotes.
se mandaren traer á poder del receptor de él,
Es necesario que los gastos de justicia y pe no se conviertan ni gasten por los vireyes, pre
nas de cámara estén libres y haya siempre al sidentes, audiencias, gobernadores ni oficiales
guna cantidad de dinero para lo que se ofrecie en otra cosa alguna, aunque sea justa y conve
re, conforme à nuestras órdenes: Mandamos á niente, sino que puntualmente se ejecute lo que
los v¡reyes, presidentes y audiencias que ten enviáremos à mandar: con apercibimiento que
gan ia mano en dar libranzas de las que pue no se tendrá por bien gastado, ni recibirá en
den dar sobre los dichos gastos y penas, porque cuenta lo que en contrario se luciere.
lo que procediere de condenaciones, sirva y sea
principalmente para el sustento y demas gas LEY X L V IIL
tos que se lucieren con los galeotes, y que para £1 mismo allí, cap. 11.
esto no se toque por ningún caso en nuestra real Que de las cartas y pliegos que el receptor gene
hacienda. ( 2) ral ó ¿os por él nombrados , enviaren, no se. paguen
\portes al correo mayor.
LEY XLV, De todas las cartas, pliegos y despachos que 1
D. Felipe II en Tomará 17 de abril de 1581. Y eu el receptor general ó las personas por él nom
Madrid á 20 de marzo de 1584. Para esta ley y la si bradas enviaren, tocantes á las penas de cáma
guiente se vea la 23, tit. 8, lib. 7. ra, no hayan de pagar ni paguen portes nin
Que las penas se apliquen , depositen y gasten, con gunos ai correo mayor ni á sus tenientes, como
júrate á derecho. no se pagan de ios demás despachos de nues
Algunas de nuestras audiencias aplican la tras audiencias reales.
mayor parte de las condenaciones que hacen á
gastos de estrados, y éstas, y las que aplican á
LEY X LIX .
nuestra cámara, las hacen depositar en personas D, Felipe II en Madrid á 29 de diciembre de 1595.
Y D. Felipe IV en esta Recopilación.
que nombran para ello, y en ellas libran hasta
Que los oficiales reales de una caja no paguen de las
que se acaban, y despues obligan á los recepto penas de cámara que se les enviaren de otras , y las
res u que se hagan cargo de todo sin haber en remitan á estos reinos enteramente.
trado en su poder cosa alguna mas que las li
branzas: Mandamos que conforme á lo dispues Mandamos á los oficiales reales que en nin
to por nuestras leyes apliquen las condenaciones, guna forma toquen en las penas de cámara que
y las unas y las otras se pongan en poder de los á su poder vinieren de otras partes, y las remi
receptores de ellas, donde los hubiere, proveí tan à Nos enteramente, y que cumplan las li
do por Nos, y donde no, en poder de los ofi branzas que por nuestra orden se hubieren da
ciales reales, y no de otra persona alguna , y en do y dieren en las penas que pertenecen tan so
ellos hagan sus libranzas el presidente y oido lamente al distrito de cada caja real.
res de lo que se les permite por derecho y le LEY L.
yes de este titulo.2 D. Felipe II en San Lorenzo à 20 de mayo de 1578.
Que las penas de cámara causadas en Cartagena,
(2) Por cédula de 25 de octubre de 91 se ha no se lleven á Sarita Fe.
mandado que los jueces que destinen reos cuiden de
que su avio, alimento y transporte hasta el lugar de Los visitadores que pbr comisión de nuestra
su destino se costeen de sus bienes si los tuviere, y real audiencia del Nuevo Reino de Granada van
en su delecto del ramo de gastos de justicia o penas á visitar la provincia de Cartagena, no saquen
de cámara del distrito de donde procedan ó hubieren
delinquido, al cual corresponde hacer espender lo de ella ni remitan al Nuevo Reino las condena
necesario para ia cgeeueion de Injusticia.- ciones que hacen para nuestra cámara, Y asi-T
De los receptores r penas de cámara. 297
mismo la diclia audiencia no envíe á cobrar las cales de condenaciones aplicadas á la cáma-
<jue se hubieren causado en los pleitos , causas ru, ley 53, titulo 23 de este libro.
o negocios de que hubiere conocido en grado Que al alguacil y escribano de las risitas de la
de apelación , por haber caja reai en la ciudad ¿ierra se payuen los salarios de penas de cá
de Cartagena donde poderlas enterar , sin el m ara, ley 30, tit. 31 de este libro.
riesgo y dilación de los caminos. Y mandamos Que las ciudades que tuvieren merced de las pe
al presidente y oidores que den las órdenes ne nas de cámara y pidieren proroyaeion de
cesarias á los visitadores, para que no se entro ellas, envien testimonio de su gasto, y de los
metan en hacerlas sacar de allí. propios, ley 9, tit. 13, libro 4.
Que los presos por pena de ordenanza no sean
Que los presidentes tengan libro en que cada sueltos sin depositarla, y haya en las audien
semana escriban los escribanos de cámara las cias sala de relaciones de estas causas, ley 17,
condenaciones, y en ellas se Ubre para gas tit. 7, lib. 7.
tos de justicia, según su aplicación, ley 163, Que se gaste de penas de cámara lo necesario
tit. 15 de este libro. para conducir presos del Perú, ley 12, tit. 8,
Que la pena en que la ley aplica parte al oidor libro 7.
ó alcalde sea para la cámara , ley 33, tit. 16 Que no se apliquen las penas de cámara en las
de este libro. sentencias, ley 23, tit. 8 , lib. 7.
Que (os fiscales sigan los pleitos de condena N i para posadas de los oidores, ley 24.
ciones hechas por los fieles ejecutores , apli La condenación de setenas pertenece á la cá
cadas á la cámara, si se apelare para las au mara, ley 25.
diencias, ley 14, tit. 18 de este libro. Súplase de penas de cámara lo que fa lta re de
Que los escribanos de cámara asienten las penas gastos para seguir delincuentes, ley 20 .
de cámara en el libro de ellas, dentro de tres Las penas aplicadas por introducción, del rezo
dias« ley 33, tit, 23 de este libro. se ponyan por cuenta aparte, ley 27.
Que los escribanos no lleven derechos á lo s fs -
TITULO YEI2STE T O O S O ..
LEY P R IM E R A .
LEY III.
D. Felipe 11 eií la ordenanza 252 de audiencias-de
1563. El emperador D. Carlos en Toledo i 19 áe mavo
de 1525. 3
Que cn cada audiencia haya número cierto de pro Que donde no pudiere haber procuradores lo puedan
curadores, " ser unos vecinos por oíros.
Mandamos que en cada una de las audien Los que entran á descubrir nuevas tierras
cias y chanciHerías reales de las Indias haya con nuestra, licencia suelen capitular, que por
número señalado de procuradores y ño mas. cierto tiempo no puedan entrar ni entren en
ellas letrados ni procuradoras por no dar causa
L E Y II. a pleitos y diferencias entre los vecinos, y pue
D. Felipe II e» Monzoa á 4 de octubre de 1563 or de ofrecerse que algunos tengan necesidad de
denanza 232. En S. Lorenzo a 2 de setiembre de 1577 hacer ausencia por algún tiempo, y p o n ió pó-
Allí á 5 déagosío de 1579. En Eíyas t 24 * der dejar procurador para sus causas, piérdan
de 1581. Y á 21 de octubre- de 1578. B» U s to , 2 17 su justicia, y nuestra voluntad ¿ intención solo
de noviembre de 1582.
es en semejantes prohibiciones éscuáar que'ha-
Qué no usen oficios de procuradores , sino ¿os que ya procuradores generales qtfe lo tengan por
tuvieren titulo d e lr e y , 1
oficio: Declaramos y mandamos que sin em
Ningunas personas pueden usar ni" usert en bargo de íaá capitulaciones puedan unos vecinos
nuestras audiencias oficios dé procuradores, ni procurar por otros en las causas y negoéiosque
sé entrometan á hacer peticiones ni despacha? les‘ fueren encomendados, y entiendan én ellos
negocios en ellas, sino tuvieren título ú orden no siendo procuradores’ generales ni teniéndolo
nuestra para los poder usar y ejercer. por oficio', sin incurrir‘por !esto en pena al
guna * ni Ies sea puesto embargo ni impedí,
mento. r
504 Libro ii. Tit. xxvm .
de dos pesos para los estrados, y las que hicie
LEY IV . ren y presentare» sean firmadas so la dicha
D. Felipe II en la ordenanza 230 de 1563. pena.
Que ninguno use oficio de procurador de lu audien LEY X I.
cia sin ser examinado en ella, y se le de licencia.
El mismo allí, ordenanza 240 y 243.
Mandamos que los procuradores que se hu Que los procuradores no presenten peticiones sin
bieren de recibir no useu sus oficios antes que firm a de abogado.
sean examinados por los presidentes y oídoies,
y les den licencia para usar y ejercer. Ordenamos que ningún procurador presen
te petición de letrado no siendo recibido por
LEY V . abogado de la audiencia, pena de tres pesos
D. Felipe II en la ordenanza 258 de audiencias de para los estrados.
1506. Y eo la 275 de 1563.
Que el procurador no diga en los estrados cosa (¡ue LEY X II.
no sea verdad. El mismo allí, ordenanza 234.
El procurador que en el hecho dijere en los Que los procuradores manifiesten y depositen el di
estrados cosa no verdadera, pague un peso para nero que sus partes les enviaren , como se ordena.
ellos. Mandamos que los procuradores luego que
LEY V I. sus partes les enviaren cualquier dinero para
El mismo allí, ordenanza 235,237, 238. los negocios que ayudaren, el mismo día lo He*
Que no hablen los procuradores en los estradas sin ven y depositen en poder de los escribanos de
licencia de ¿a audiencia. las causas realmente y sin encubrir cosa alguna,
Los procuradores no hablen sin licencia de pena de pagar con el cuatro tanto lo que pare
la audiencia en los estrados, pena de dos pesos ciere haber encubierto para nuestra cámara sin
para los estrados-, y si hablando el abogado en ninguna remisión, y que ios escribanos reciban
el derecho de su parte , el procurador de la los dineros, y los tengan en su poder por via de
causa ó su parle contraria se atravesare à ha depósito, y no en otra forma, para que de ellos
blar, pague un peso. se pague lo que cada oficial hubiere de haber,
y los escribanos tengan un libro y memorial
LEY V II. aparte del cargo y descargo, para dar cuenta y
El mismo allí, ordenanza 219. razón cuando conviniere ; y para ver y saber si
Que no lleven nías salario del señalado por el pre el depósito se guarda y cumple, cada escribano
sidente y oidores. por su antigüedad y orden, lleve en fin de to
No lleven los procuradores mas salario del dos los meses á mostrar el libro al oidor sema
que les lucre señalado por el presidente y oi nero que lo vea, visite y sepa como se guarda
dores, especialmente en negocios y pleitos de lo resuelto, pena de veinte pesos para nuestra
indios, y con ellos pena del doblo para nuestra cámara à cada uno que lo contrario hiciere.
cámara. LEY X III.
LEY V III. D. Felipe II allí, ordenanza 239.
El mismo allí, ordenanza 250.
Que no hagan autos sin presentar poder.
Que no reciban dádivas ni presentes por dilatar las
causas El procurador que sin tener poder presen
O trosí, no reciban dádivas ni presentes de tado hiciere autos, pague dos pesos para los es
las partes jorque dilaten las causas en que pro trados.
c u r a n , pena de privación de oficio. LEY XÍV .
El mismo allí, ordenanza 240.
LEY IX . Que el procurador vaya d ver tasar el procesa ,
El mismo allí, ordenanza 2 o l.
El procurador que no fuere á ver tasar Jas
One los procuradores y abogados no hagan partidos costas del proceso, siéndole notificado por el
tíc seguir los pleitos (t su costa. escribano, pague un peso para los estrados.
Mandamos que tos procuradores y letrados
no bagan partido con las partes de seguir los LEY XV.
pleitos á su propia costa, pena de que por el El mismo allí, ordenanza 241.
mismo caso, sin o tn sentencia, incurra el que Que concluso el pleito en provisión , el escribano lo
lo contrario hiciere por cada vez en pena de encomiende , y el procurador lo lltve al relator , el
cincuenta m 1 maravedís para nuestra camara cual le traiga para la primera audiencia.
Concluso el pleito en provisión, el escriba
LEY X. no le encomiende para el primer acuerdo, pena
El mismo allí, ordenanza 253. de tres pesos para los estrados; y el procurador
Que no hagan peticiones sino en rebeldías y con en cuyo favor estuviere pedida la provisión lle
clusión, pena de dos pesos, y firm en las (¡ue hi ve el proceso el mismo dia al relator, y él re
cieren, lator lo traiga en provisión á la audiencia pri
O trosí, los procuradores no hagan peticio mera con la misma pena a cada uno,
nes sin firma de abogado , salvo de rebeldías, y
para concluir pleitos y otras semejantes, pena
De los procuradores. 30S
LEY XVL Los escritos y peticiones que presentaren los
El mismo allí, ordenanza 244 procuradores ú otras cuaiesquier personas sean
Que el que perdiere escritura pague el ínteres y de buena letra, y no esten enmendadas ni ra
la pena impuesta. yadas en parte alguna, y las preguntas de los
El procurador que perdiere alguna escritu interrogatorios que presentaren esten cer
ra , demas del interes de la parte, pague seis radas al fin de cada pregunta, pena de dos pe
pesos para los estrados, y esté preso en la cár sos para los estrados por cada vez que lo con
cel à arbitrio del presidente y oidores, y esto trario hicieren.
haya lugar contra otros cuaiesquier oficiales. LEY X IX .
LEY X V II. D. Felipe 1Y en Madrid a' 4 de setiembre de 1632.
Que lot procuradores de las audiencias no sean
El mismo allí, ordenanza 245. apremiados d acudir d los alardes.
Que en. las peticiones , autos y sentencias se nom Ordenamos á los vi reyes y presidentes que
bren ios procuradores de las partes contrarias.
sin embargo de que hayan de hacer alistar á
En todas das peticiones que los procurado los procuradores, no los obliguen à salir á los
res presentaren de cualquier calidad que sean, alardes ordinarios, sino cuando hubiere ocasión
nombren espresamente á los procuradores de tan precisa que no se pueda escusar.
las partes contrarias, para que oyéndose nom
brar puedan hacer sus defensas, y los escriba Que ¿os procuradores presenten las peticiones
nos no las reciban de otra forma, y asienten antes de la audiencia, y los escribanos de cá
en las cabezas de los autos y sentencias los nom ■ mara no las reciban despues, ley £>, tit. 25
bres de los procuradores; pena de veinte pesos de este libro
por cada vez que no io hicieren. Que escriban á sus partes y procuradores ausen
LEY X V III. tes que no hagan probanzas por los mismos
D. Felipe II allí, ordenanza 248. articulos ó derechamente contrarios, ley 21 »
Que las peticiones sean de buena letra , y los inter tit. 27.
rogatorios como se ordena.
— -------- ..........................................................
LE Y P R IM E R A . LEY II.
D. Felipe II en Aranjuez á 10 de mayo de 1583. D. Felipe II en Monzon à 4 de octubre de 4563, or-
Que los interpretes de los indios tengan las partes dennnza 297 de audiencias.
y calidades necesarias , y se les pague el salario de Que haya número de intérpretes en las audiencias,
gastos de justicia, estrados, ó penas de cámara. y juren conforme á esta ley.
Muchos son los daños é inconvenientes que Ordenamos y mandamos que en las audien
pueden resultar de que ios intérpretes de la len cias ha ya número de intérpretes, y que antes de
gua de los indios no sean de la fidelidad , cris ser recibidos juren en forma debida, que usa
tiandad y bondad que se requiere, por ser el rán su oficio bien y fielmente, declarando é in*
instrumento por donde se ha de hacer justicia, terpretando el negocio y pleito que les fuere
y los indios son gobernados y se enmiendan los cometido, clara y abiertamente, sin encubrir
agravios que reciben ; y para que sean ayuda ni añadir cosa alguna, diciendo simplemente
dos y favorecidos: Mandamos que los presiden el hecho, delito ó negocio, y testigos que se
tes y oidores de nuestras audiencias.cuiden mu examinaren, sin ser parciales á ninguna de las
cho de que los intérpretes tengan las partes, ca partes, ni favorecer mas á uno que á otro, y
lidades y suficiencia que tanto importan, y los que por ello no llevarán interes alguno mas del
honren como lo merecieren, y cualquier delito salario que les fuere tasado y señalado, pena de
que se presumiere y averiguare contra su fide perjuros , y del daño é ínteres, y que volverán
lidad, le castiguen con todo rigor, y hagan la lo que llevaren, con las setenas y perdimiento
demostración que conviniere. de oficio.
O. Felipe III en Lisboa á 1 de octubre de 1619. LEY III.
O trosí, mandamos que se les pague el sa D. Felipe II eu la ordenanza 298 de 1563.
lario de gastos de justicia y estrados ; y si no Q«e los intérpretes no reciban dádivas ni presentes.
los hubiere, de penas de cámara.
Los intérpretes no reciban dádivas ni pre
sentes de españoles, indios ni otras personas
TOMO I. 77 '
306 Libro i!. Título xxix.
que con ellos tuvieren ó esperaren tener pleitos L E Y V III.
ó negocios en poca ó mucha cantidad , aunque El mismo allí, ordenanza 302.
sean cosas de comer ó beber, y ofrecidas, dadas Que los intérpretes no se ausenten sin Ucencia del
ó prometidas de su propia voluntad, y no lo presidente.
pidan, ni otros por ellos, pena de que lo vol
verán con las setenas para nuestra cámara, y Mandamos que los intérpretes no se ausen
esto se pueda probar por la via de prueba que ten sin licencia del presidente, pena de perder
las leyes disponen, contra los jueces y oficiales el salario del tiempo que estuvieren ausentes,
y de doce pesos para los estrados por cada vez
de nuestras audiencias, que lo contrarío hicieren.
LEY IV . LEY IX .
El mismo allí, ordenanza 30X.
El mismo allí, ordenanza 303.
Que los intérpretes acudan d los acuerdos, audien
cias , y visitas de cárcel. Que cuando los intérpretes fueren d negocios fu e r a
del lugar, no lleven de las partes mas de su salario.
Ordenamos que los intérpretes asistan á los Ordenamos que cuando los intérpretes fue
acuerdos, audiencias y visitas de cárcel ca ren á negocios ó pleitos fuera del lugar donde
da dia que no fuere feriado, y á lo menos á reside la audiencia no lleven de las partes di
las tardes vayan y asistan en casa del presiden recte ni indirecte cosa alguua mas del salario
te y oidores. Y para que todo lo susodicho, y quedes fuere señalado, ni hagan conciertos ni
cualquiera cosa y parte se cumpla , tengan en
contratos con los indios, ni compañías en nin
tre sí cuidado de repartirse , de forma que por guna forma, pena de volver lo que asi llevaren
su causa no dejen de determinarse los negocios, y contrataren, con las setenas, y de privación
ni se dilaten, pena de dos pesos para los pobres
por cada un dia que faltaren en cualquier cosa perpetua de sus oficios.
de lo sobredicho, demas de que pagarán el da LEY X.
ño, interes y costas á la parte ó partes que El mismo allí, ordenanza 304.
por esta causa estuvieren detenidas. Que se señale el salario d los intérpretes por cada
un dia que salieren del lugar y no puedan llevar otra
L E Y V. cosa.
El mismo, ordenanza 306. Cada un dia que los interpretes salieren
Que los dias de audiencia resida un intérprete en del lugar donde residiere la audiencia por man
los oficios de los escribanos. dado] de ella, lleven de salario y ayuda de cos
Mandamos que un intérprete resida por su ta dos pesos, y no mas, y no comida ni otra co
orden los dias de audiencia en los oficios de los sa, sin pagarla, de ninguna de las partes di-
escribanos à las nueve de la manaría, para tomar recté ni indirecté, pena de las setenas para nues
la memoria que e) fiscal diere, y llamar los tes tra cámara.
tigos que conviniere examinarse por el fisco,
pena de medio peso para los pobres de la cár
cel por cada dia que faltare. Que de cada■testigo que se examinare lleve el in
LEY V I. térprete los derechos que se declaran.
El mismo allí, ordenanza 298. De cada testigo que se encaminare por in
Que los interpretes no oigan en sus casas ni fuera terrogatorio que tenga de doce preguntas ar
de ellas dios indios, y los lleven d la audiencia. riba lleve el intérprete dos tomines-, y siendo
Ordenamos que los intérpretes no oigan en el interrogatorio de doce preguntas y menos,
sus casas ni fuera de ellas a los indios^ que vi un tornin, y no mas, pena de pagarlo con el
nieren á pleitos y negocios, y luego sin oirlos cuatro tanto para nuestra cámara1, perosi el in
los traigan á la audiencia, para que allí se vea terrogatorio fuere grande, y la causa ardua, el
y determine la causa conforme á justicia, pe oidor ó juez ante quien se examinare lo pueda
na de tres pesos para los estrados por la prime tasar, demás de los derechos, en una suma mo
ra vez que lo contrario hicieren \ y por la se derada , conforme el trabajo y tiempo que se
gunda la pena doblada, aplicada según dicho ocupare.
es ; y por la tercera, que demas de la pena d o LEY X II.
blada , pierdan sus oficios. El emperador D. Carlos y la emperatriz gobernadora
LEY V IL en Valladolid á 12 de setiembre de 1557.
Que el indio que hubiere de declarar , pueda llevar
D. Felipe II allí, ordenanza 500. otro ladino cristiano que esté presente.
Que los interpretes no sean procuradores ni solici
tadores de los indios ni les ordenen peticiones. Somos informado que los intérpretes y na
Los intérpretes no ordenen peticiones á los guatlatos que tienen las audiencias y otros jue
indios, ni sean en sus causas y negocios procu ces y justicias de las ciudades y villas de nues
radores ni solicitadores, con las penas conteni tras Indias, al tiempo que los indios los llevan
das en la ley antes de esta, aplicadas como allí para otorgar escrituras o para decir sus dichos,
se contiene. ó hacer Otros autos judiciales y estrajudiciales,
y tomarles sus confesiones, dicen algunas co
sas que no dijeron los indios, ó las dicen y de
claran de otra forma, con que muchos han per-
De los intérpretes. 307
dido su justicia, y recibido grave daño: Man cion: Mandamos que los gobernadores, corregi
damos que cuando alguno de los presidentes y dores y alcaldes mayores de las ciudades no ha
oidores de nuestras audiencias ú otros cuales- gan los nombramientos de los intérpretes solos,
quier juez enviare a llamar á indio ó indios, que sino que preceda examen, voto y aprobación de
no sepan la lengua castellana, para íes pregun todo el cabildo ó comunidad de los indios, y
tar alguna cosa ó para otro cualquier efecto, ó que el. que una vez fuere nombrado no pueda
viniendo ellos de su voluntad á pedir ó seguir su ser removido sin causa , y que se les tome resi
justicia, les dejen y consientan que traigan con dencia cuando la hubieren de dar los demas
sigo un cristiano amigo suyo que esté presente, j oficiales de las ciudades y cabildos de ellas.
para que vea si lo que ellos dicen á lo que se les j
pregunta y pide, es lo misino que declaran los { L E Y X IV .
naguatlatos é intérpretes, porque de esta for El emperador don Garlos y la reina gobernadora en
ma se pueda mejor saber la verdad de todo, y i Toledo á 24 de agosto de 1529.
los indios esten sin duda de que los intérpre Que los intérpretes no pidan ni reciban cosa alguna
de ¿os indios , ni los indios den mas de lo que deben
tes no dejaron de declarar lo que ellos dijeron, d sus encomenderos.
y se escusen otros muchos inconvenientes que
se podrían recrecer. Mandamos que ningún intérprete, ó lengua
de los que andan por las provincias, ciudades y
L E Y X III. pueblos de los indios à negocios ó diligencias
D. Felipe IV en San Lorenzo à 16 de octubre de 1630. que les ordenan los gobernadores y justicias, ó
de su propia autoridad, pueda pedir, ni recibir,
Que el nombramiento de los intérpretes se haga co ni pida, ni reciba de ios indios para sí, ni las
mo se ordena , y no sean removidos sin causa y den
residencia. ( justicias, ni otras personas, joyas, ropas, iman-
* tenimíentos ni otras ningunas cosas ; pena de
Nombran los gobernadores à sus criados por que el que lo contrario hiciere pierda sus bie
intérpretes de los indios, y de no entender la nes para nuestra cámara y fisco, y sea dester
lengua resultan muchos inconvenientes: Te rado de la tierra, y los indios no den mas de lo
niendo consideración al remedio, y deseando que sean obligados á dar á las personas que los
que los intérpretes, demas de la inteligencia tienen en encomienda.
de la lengua, sean de gran confianza y satisfac-
TITULO TREINTA.
D e los p o rtero s y otro s oficiales de las audiencias y chancille-
ría s reales de las In dias*
te debe verse en la cédula de 27 de junio de 753, in Los albaceas, testamentarios , herederos y
serta en otra de 3 de abril de 791, en que dice que tenedores de bienes de difuntos que conforme
estos juzgados son para recoger los bienes de los que á sus testamentos tuvieren obligación á resti
mueren dejándolos á ausentes por testamento ó sin el. tuirlos ó parte de ellos, á personas que viven
Sobre esta ley 42 y siguiente debe tcnciso presen en estos nuestros reinos , sean obligados á en
te que fallecida en Lima la condesa de Vista-florida,
dejando por su heredero en España á su hijo primo viarlos dentro de un año, habiendo cumplido
génito, que tenia dado poder para el caso á su cuna y ejecutado lo que toca al anima del difuntoj
do D. Domingo Ramírez, inteutó el juzgado conocer y sí lo que restare no estuviere cobrado,
de la testamentaría de la condesa; y por cédula de envíen lo que fueren cobrando, con el tes
30 de octubre de 92 se mandó pasasen los autos al tamento, inventario, almoneda y relación
alcalde ordinario ií quien el juzgado disputaba la ju
risdicción sobre este negocio. Igual declaración con de lo que faltare por cobrar á costa de los
tiene la cédula de 25 de octubre de 1794 en la testa bienes, registrado en navio de registro, y
mentaría de D. N. Panizo; y debe notarse cu ella, consignado á la casa de contratación de Sevi
que allí aprobó S. M. el auto del gobierno en que lla á riesgo de los mismos bienes, para que con
notó que la audiencia hubiese intentado tomar cono
cimiento del artículo de competencia formado por el forme á las leyes y ordenanzas que de esto tra
defensor del juzgado. tan , se entreguen á quien los ha de haber •, y
(5) P e r o debe advertirse, que por cédula de 19 si por falta de navios ú otro justo impedimen
de noviembre de 89 se declaró, que luego que el juz to no lo pudieren cumplir dentro del año,
gado baya decidido ser bastantes los bienes, debe co sean obligados á dar ,cuenta con pago al juez
municarlo a la intendencia para el uso de su autori
dad y facultades en todo lo que es real hacienda. general y oficiales reales, los cuales envien la
Del juzgado de bienes de difuntos. 321
cuenta y razón firmada de su nombre con lo LEY X L V III.
procedido y alcance, y los albaceas y testamen D. Felipe III en Aliñada á l.° de junio de 1619. Y
tarios no puedan tener estos bienes en su poder D. Felipe IV en esta Recopilación.
mas de un año , aunque sucedan unos á otros, Q ue no habiendo h e re d e ro s e n tas I n d ia s , se en v ie n
pena de pagar con el doblo lo que mas tiempo los bien es d e d ifu n to s d E sp a ñ a
retuvieren en su poder, que aplicamos mitad Mandamos á los jueces generales y oficiales
para nuestra cámara y fisco , y la otra mitad
para los herederos y personas que lo hubieren haya en esos juzgados de difuntos ú otros cualesquie
ra de invertir el quinto de ios que mueren ab intes
de haber, demas de pagarles todo el daño y tato en fundaciones piadosas por el alma del difunto
costas que por la retención se recreciere á los en patronatos de legos, capellanías ni en otra forma,
interesados, salvo si el testador en su testamen y todos guarden y cumplan precisa y literalmente,
to mandó otra cosa , porque aquello se ha de la cédula de 20 de jui i> de L766, entregando inte
cumplir. (6) gros y sin deducción alguna los bienes y herencias
de los que mueren ah iutestato á los parientes que
LEY XLVI1. deben heredarlos, quienes harán por si mismos el
funeral y sufragios que se acostumbran eu el pais
El emperador don Oarlos y el principe D, Felipe y con arreglo à la calidad , caudal y circunstancia del
reyes de Bohemia allí, capítulo 15, y ordenanza JLOl. difunto , sín hacer novedad por lo pasado. Sétima,
Q u e en fas m a n d a s , le g a d o s , d eudas , obras p ía s y que con arreglo á lo declarado en cédula de 7 de
o tr a s d isp o s ic io n e s , se g u a rd e la le y a n te c e d e n te . mayo de 1782, con motivo de la testamentaria del
brigadier don José Molina , que falleció en Nueva
En las mandas, legados y disposiciones España, no conozcan esos juzgados de difuntos de las
que los testadores hicieren por descargo de sus testamentarias en que los herederos están presen
conciencias, deudas, obras pías y otras cosas, tes , aunque haya mandas ó legados ultramarinos,
bastando que los herederos ó albaceas en estos casos
á personas que residen en estos reinos, los he cumplan con lo dispuesto por las leyes 46 y 47 del
rederos , albaceas, testamentarios y tenedores tit. 52 , lib- i.° S endo mi real ánimo queden abso
de bienes , guarden y cumplan lo contenido en lutamente derogadas cualesquiera de ellas, como
la ley antecedente, con las penas y aplicación- las reales cédulas que se hallen espedidas en cuanto
fueren contrarias á estas declaraciones. Por tanto,
lies allí contenidas. ( 7) mando á mis vireyes, audiencias y gobernadores
de mis. reinos de las Indias , Islas Filipinas adyacen
(6) Estinguida la casa de contratación por real tes , guarden , cumplan , y ejecuten y hagan guar
decreto de ití de junio de 1/90 se han. mandado en dar , cumplir y ejecutar esta mi real resolución ha
cédula de 19 de julio de 1792, que supuesto que en ciéndola entender á todos aquellos á quienes corres
consecuencia solo deben entrar estos bienes por vía ponda , por ser asi mi voluntad. Fecha en San Ilde
de depósito en la tesorería de real hacienda de Cádiz, fonso á 28 de setiembre del797.=Yo el Rey.c=aLa cé
corriendo su cueula y razón á cargo de la contaduría dula de 27 de abril del año de 1/84 que se cita,
dei consejo para escusar embarazos en aquella ciudad manda que el juzgado general en los casos de su co
sobre los fletes, los oficiales reales de América los nocimiento observe las mismas reglas que las justi
ajusten allí al tiempo dol embarque. cias ordinarias en cuanto á validación ó nulidad de
{ ! ) Debe tenerse muy presente en la materia la testamento, facción de inventarios etc., cuando la he
real cédula de 28 de setiembre de 97 , la que por su rencia corresponda á obras pías ó los testadores y he
suma importancia se copia casi literalmente , y con rederos sean clérigos. La misma cédula ordena que
tiene los artículos ó reglas siguientes: la jurisdicción eclesiástica no se mezcle acerca de la
Primera , que d ehos juzgados no conozcan con validación ó nulidad de testamentos, hacer inventa
ningún motivo de las herencias ab intestato ó ex- rios, sequestros etc., aunque los testadores y herede
testamento de los que dejan en las partes en que ros sean clérigos ó hayan iustítuido á su alma ó de
mueren descendientes legítimos, ó ascendientes, ó jado alguna otra obra pía, por corresponder todo es
parientes transversales dentro del grado que por de to á las justicias ordinarias. La cédula de 20 de junio
recho deben heredar. Segunda , que para que estos de 1766, que también se cita, ordena , que se ob
juzgados puedan lomar conocimiento haya de cons serve literalmente la ley 10, tit. 4, lib. o de Casti
tar de público ó notorio, ó por diligencias judiciales lla, y que en su consecuencia las herencias délos
que los (herederos estan ausentes en provincias ül~ que mueran intestados se entreguen sin deducción
ti amarinas de estos ú de esos mis reinos, y que es alguna á los que por derecho les correspondan , y
mayor el número de ios ausentes, en caso de haber que solo en ei caso de no hacer estos las exequias y
los ausentes y presentes. Tercera, que dichos juz demas sufragios que se acostumbra» en el pais con
gados no conozcan de las herencias ex-testamento ó arreglo ai caudal y circunstancias del difunto po
ab intestado de los indios, caciques ó plebeyos con dran ser compciidos á ello por sus propios jueces, sin
ningún pretesto. Cuarta , que lo? juzgados dichos que de ningún modo se mezcle el juzgado eclesiásti
no conozcan indistintamente de los hienes de los co , ni que el secular solo por esta omisión proceda
clérigos-naturales y originarios de aquellos domi á hacer inventario de los bienes. Se advierte tam
nios ,* y en su consecuencia declaro íuudada la ju bién: 1 ° Que por cédula de 9 de mayo de 785 en
risdicción ordinaria por la presunción de que existen tre otras cosas ordena, que los qqe perciban heren
eu aquellas partes los que deben heredarlos mien cias ó legados pertenecientes á herederos ó legata
tras no conste que la hereucia pertenezca á personas rios ultramarinos con poder de estos afiancen á satis
residentes en estos reinos, ó que en ellos se debe facción al juzgado, debidos de bienes de difuntos
convertir en obras pías , teniéndose muy presente la de que efectivamente entregarán á los referidos he
real cédula de 27 de abril de 1784 para su observan rederos y legatarios : 2.° Que por cédula de 5 de no
cia en defensa de Ja reai jurisdicción. Quiuta , que viembre de 95 se ordena, que no se haga por ahora
asi los jueces de bienes de difuntos como los ordina novedad en cuanto no obligará los testamentarios de
rios cuando pareciere testamento con herederos ó ultramarinos á que muestren al juzgado las memo
ejecutores presentes , dejen cobrar los bienes á los rias ó comunicados secretos que les hayan dejado:
herederos testamentarios con arreglo á la ley 42, tí 3.° Por cédula de 20 de noviembre de 1801 dirigida
tulo 32 , lib. 2 , sin molestarlos con facciones de in al juez de alzadas dei consulado de Guatemala , se
ventarios ; venta de bienes , costas indebidas ni en declaró que el juez de difuntos y noel consulado de
otra forma : en razón de Jo cual mis audiencias esta bía conocer del ab intestato de don Francisco Galin,
rán á la mira para corregir cualquier desorden v á pesar de haber sido comerciante y haber muerto
contravención. Sesta, que cese desde luego cual en quiebra por ser aquel europeo y haber dejado eu
quiera práctica <jo<? hubiese habido, ó al presente
TOMO í. 81
522 Libro it . Tit. xxv.
<le nuestra real hacienda que en todas ocasio LEY LSI.
nes de armadas y flotas remitan á la çasa de D. Felipe 111 en Valladolid a 4 de agosto de 1605.
contratación de Sevilla , registrados por cuen Eu Ualsaiu á 5 de setiembre de 1609. Y en Lerma ;í.
ta aparte todos ios hienes de difuntos que no 15 de mayo de 1610.
hubieren dejado herederos en las indias, redu Q ue las p a rtid a s d e bien es d e d ifu n to s y re d en c ió n
ciéndolos géneros áslinero, consignado á la ca d e c a u tiv o s ve n g a n separadas d e la re a l H a cie n d a .
sa de contratación dq Sevilla , para que hechas
Mand amos à los oficiales rea les'de las Indias
aili las diligencias necesarias, contenidas en las
que en las cartascuentas que enviaren en ilotas,
leyes y ordenanzas que de esto tratan , justifi y armadas , pongan distintas y separadas las,
quen los herederos vías demás personas que lo partidas que tocau à bienes de difuntos y re
han de haher , y se les entregue para que ha
dención de cautivos sin mezclarlas con las de;
gan las obras pias, íunden capellanías, y ejecu nuestra hacienda , con relación particular de Iq
ten la voluntad de los difuntos*, con apercibi
que viniere , y orden de que se paguen las cos
miento de que s¡ los jueces generales escedie- tas de las mismas partidas.
ren de lo susodicho, se cobrará de sus personas
y bienes lo que en otra forma hicieren pa- LEY L U I.
g a r.( 8)
El emperador don Carlos y los reyes de bohemia go
LEY XLIX. bernadores en la dicha carta acordada , cap. 5. El
D. Felipe IV en Madrid ;í 22 de setiembre de 1629* principe gobernador en la ordenanza 91 de la Casa.
Y L>. Felipe IV en esta Recopilación.
Que los bien es d e d ifu n to s se en víen co n d istin c ió n
de ios que tu viet e n d u eñ o s conocidos ó f u e r e n va Que los ju e c e s no lle v e n d erech o s p o r a s is tir d los
ca n tes. in v e n ta r io s y a lm o n e d a s , y a l escrib a n o y p r e g o
n e r o se les pa g u e d tasación.
Los bienes de difuutosy vacantes por falta
de herederos se traigan i» estos reinos en la for- Los jueces generales y ordinarios no lleven
que hasta ahora, y el juez que los remitiere derechos en pora ni en mucha cautid.ad por
envíe relación particular al consejo de los que asistirá los inventarios y almonedas délas bie
tuvieren dueños conocidos , y aparte de ios nes de difuntos , y tasen y paguen de los mis
bienes vacantes cuyos dueños no parecieren. inos bienes al escribano y pregonero lo que me
recieren, seguu su trabajo, diasque se ocupa
L E Y L. re n , y calidad de hacienda, y no les consien
ill mismo allí á 20 de abril de 1639, cap. 11. Y en tan llevar derechos de tanto por ciento, pena^
.esta Recopilación. de voLerlo cou el cuatro tanto.
Que ¿o que m o n ta re n ias d em andas p u e s ta s d bienes LE Y LIV.
de d ifu n to s no se r e m ita , y las d em andas se sig a n
y fe n e z c a n . D. Fclipq III eu Valladolid á 2 de abril de 1605.
Ordenamos que si se pusieren demandas à Que los te n ed o re s d e b ie n es no lleven d erec h o s, y
los bienes de difuntos, y estas montaren menos co n los d ep o sita rio s se g u a rd e lo p ro v e íd o .
cantidad de lo que importaren los bienes, se
remíta lo demas a la casa de la contratación, re Ordenamos que los tenedores de bienes de
teniendo solamente lo necesario para satisfa difuntos no lleven derechos de ellos, y en cuan
cer á los acreedores, con relación particular de to á los depósitos hechos eu géneros se guarde lo
proveído.
todo , y de el estado de las demandas y pleitos,
los cuales encargamos mucho que se sigan con LEY LV.
todo cuidado , de suerte que el año siguiente El emperador don Carlos y los reyes de Bohemia
venga á estos reinos el residuo. en la acordada, y ordenanza 89 déla casa. El empe
rador en Granada á 9 de noviembre de 1526. D. Fe
LEY LI. lipe 111 en S. Lorenzo á 20 de junio de 1609. Y don
Felipe IV. en esta recopilación.
D. Felipe II y los royes de bohemia gobernadores
on Valladolid á 6 de mayo de 1550. El mismo y la Q u é d a la f o r m a d e in v e n ta r ia r y v e n d e r los te sta
princesa doña Juana gobernadora en Valladolid a l.° m e n ta r io s y albaceas los bien es d e d ifu n to s.
de mayo de l5o7.
Guando los testamentarios, albaceas y le-
Que ¿os te s ta m e n to s , in v e n ta rio s y p a p e le s , se tr a i
g a n separados d e l o ro y p la ta , en p a r te d o n d e no
nedores^ de bienes de difuntos , que dejaren
se p u e d a ro m p er. herederos en estos reinos, ó conforme á su vo
luntad tuvieren que cumplir y ejecutar en las
Los ministros y oficiales á cuyo cargo estan Indias los hubieren de vender , sea en publica
los bienes de difuntos , envien á la casa de con almoneda , con autoridad, del juez general y en
tratación los testamentos , inventarios, obliga su presencia, donde estuviere ó ante la justi
ciones y las demas escrituras por duplicado y cia , si no estuviere en el lugar, con las solem
en diferentes vageles, separados del oro y pla nidades y por los términos de derecho y no de
ta en parte «pie no se m altraten, y lleguenen- otra forma , y es ten obligados á dar noticia eu
teros y sin romperse, para que sirvan al efec el juzgado m ayor, para que alli se ordene al
to que se remiten. defensor si le hubiere en el lugar que asista al
inventario y venta de bienes, y se haga con to
(S ) Mambida guardar con la 58 por cédula dada da justificación , pena de pagar con el doblo
cu Buen Retiro á 27 de l'cbicro de L 18 , por la omi todo lo que por su autoridad ó cu otra forma
sión e.^pei imen talla. vendieren, mitad para nuestra cámara y fisco,
Bel juzgado de bienes de difuntos. 525
y la otra mitad para el juez y denunciador, y enterar las cajas de bienes de difuntos de las
declaramos la venta por de ningún valor ni cantidades que se les debieren, y de ellas sé hu
efecto-, pero si el testador hubiere mandado bieren sacado de hecho , y que se remitan en
otra cosa, sé ha de cumplir su última vo la forma que se acostumbra á la casa de la con
luntad. ( 9) tratación de Sevilla, y que por ninguna cau
LEY LV I. sa ni razón se valgan de este género para nin
D. Felipe II en Madrid á 23 de. abril de 1569. gún efecto, porque es hacienda agena.
Q ue p a ra ve n d er b ie n es d e d ifu n to s p re c e d a tasa
ción de p e r ito s. LEY LX .
Mandamos que no se puedan vender bienes D. Eelipe III en Madrid á. 13 de diciembre de 1620.
D. Felipe IV en esta Recopilación,
ele dif untos sin ser primero tasados por perso
Que ¿os bien es de difuntos en F ilip in a s e n tr e n en
nas peritas y de bueua conciencia. ¿a re a l caja y se p a g u en e n la d e M éjico.
LEY. L'Vil. Nuestra voluntad es que el dinero proce
1). Felipe II en el Carpió á 26 de mayo de 1570. Don dido de bienes de difuntos en las Islas Filipi
Fefipe IV en Madrid á 23 de mayo de 1622. nas entre en nuestra caja real de la ciudad de
Ñ líe. no se tru e q u e el o ro n i saque n in g u n a ca n tid a d Manila. Y mandamos que la cantidad que mon
d e -la c a ja , y los v i r e y e s , p r e s id e n te s y oidores no tare se descuente y pague en la caja real de
d e n lu g a r d lo co n tra rio . Méjico del situado que se hubiere de enviar á
Ordenamos y mandamos que el juez gene aquellas islas.
ral ni las demas personas que intervinieren en . ..-.LEY ■LXL
la administración y cobro de bienes de difun D. Felipe II en Madrid á 17 de junio de 15G3. Don
tos^ no truequen el oro que hubiere en la ca Felipe IV en esta Recopilación.
jú para intereses ni comodidad particular su Que los bien es de' d ifu n to s d e la E spañola se en v ie n
ya , ni de los propios bienes , ni tomen ningu e n cu ero s y azúcar.
na cantidad prestada para sí mismos n¡. otra
persona, con fianzas ni sin ellas , ni en otra for Mandarnos que los bienes de difuntos que
ma , ni la saquen de la caja , aunque sea á tí hubiere en !a isla Española se envien á la casa
tulo de ganancia e’interés , 6 (como dicen) ho de contratación de Sevilla, como está dispues
nesto, lucro , y los vireyes, presidentes y oido to, y que vengan empleados en cueros y azú
res no consientan ni den lugar 4 lo contrario. cares á riesgo de los interesados.
(9) Este defensor en Chile lleva un dos por cien LEY L X IIÏ.
to por su trabaja escluidos los bienes y caudales des Capítulo de Instrucción de generales de flotas da
tinados para memorias y obras pias, según cédula de 1595.
25 de junio d e 68, y en Guatemala por real dispo-
Sicion de 16 de agosto de 97 tira derechos pór arancel. Que los g e n e ra le s de g aleones y flo ta s h a g a n co b ra r
Esta ley 55 se ha mandado observar en real cé los bienes d e d f u n t o s luego que lleg u en d los p u e r
dula de 25 de junio de 68, señaladamente en la par to s , y que se tra ig a n con los p a p eles.
te que hace cscepciop. Luego que llegaren los generales de galeo-
524 Libro ii. Título xxxn.
nes y flotas á los puertos de nuestras Indias do d su ca rg o , en caso que e n e l v i a g e d ie re a lg ú n
requieran á las justicias y oficiales reales que ba jel a l tr a v é s , se e n tr e g u e n y tra ig a n c o n fo rm e á
e sta le y .
les envíen los bienes de difuntos, testamentos
é inventarios, y los demás papeles que les per Los generales de nuestras ilotas y armadas
tenezcan , y los hagan registrar en el registro pongan cobro en los bienes de los capitanes,
real, y traer á la casa de contratación, con tes maestres ú otras personas que en ellas fallecie
timonio de Jas diligencias que sobre esto hubie ren en el viage de las Indias de ida y vuelta,
ren hecho, donde se proceda contra los gene inventaríen ante el escribano y recojan el oro,
rales , justicias y escribanos reales, escribanos plata, perlas y otro cualquier género de hacien
y tenedores de bienes de difuntos, por la cul da nuestra, y de particulares que hubieren te
pa que resultare de no ejecutar lo susodicho. nido à su cargo, y se entreguen de todo, con
los testamentos, escrituras, recaudos é inven
LEY L X IV . tarios , y luego que llegaren á estos reinos den
El emperador don Carlos y el príncipe gobernador cuenta con pago á nuestros oficiales reales de
en la ordenanza 119 de la Casa. la casa de contratación; y sí el bajel se aparta
Q ue fa lle c ie n d o a lg u n o en la m a r , e l m a e stre p o n re de la armada ó flota, ó si diere al traves y
ga p o r in v e n ta r io lo s b ie n es y los tra ig a á la casa. llegare á tierra, las justicias y oficiales reales
de la parte donde aportare, hagan la misma
Los maestres de naos marchantes y sueltas, diligencia, y entreguen loque hubiere venido
y sin flota que fueren á las indias cuando falle á cargo de los difuntos, y todo lo demas con
ciere algún pasagero ú otra persona en la mar, los papeles, al cabo del bajel, para que en la
pongan por inventario sus bienes ante el escri formi susodicha, y tomando primeramente se
bano de la nao y testigos ; y cuando volvieren guridad bastante de la persona à quien lo en
à Sevilla los entreguen à nuestros oficiales rea tregaren de lo que traían á la casa, y no lo con
les de la casa , sin diminución, pena de cien tradiciendo el que fuere dueño legítimo, se
mil maravedís, y de pagar lo que retuvieren traiga y entregue en la casa á quien lo ha de
de estos bienes, con el cuatro tanto, todo apli haber.
cado á nuestra cámaray fisco. Y ordenamos à
los oficiales que asi lo den por instrucción, y LEY L X V IIÍ.
que tengan cuidado de saber domo se cum D. Felipe lll sn Valladolid á 25 de noviembre de
ple. ( 10) 1604.
Q ue los g e n e ra le s no se va lg a n d e b ie n es d e d i
LEY LXV. fu n t o s .
I). Felipe II y la princesa gobernadora en Vallado- Ordenamos y mandamos á los generales de
lid á 2 de setiembre de 1557. nuestras armadas y flotas de la carrera de In
Q ue los escrib a n o s d e naos den rela cio n es ju r a d a s dias que para los gastos y provisiones que se
de los (/tic cn.el.fus m u r ie r e n , como se ordena. ofrecieren en el viaje , ni otro ningún caso, no
Ordenamos que los escribanos de naos se sa valgan de las partidas dé bienes dé difuntos,
obliguen de entregar á nuestro presidente y pena de suspensión de sus oficios, en que in
jueces oficiales de la casa, luego que lleguen á curran desde el dia de la contravención , y de
vuelta de viaje relación cierta y verdadera, ju que mandaremos cobrar de sus personas y bie
rada y firmada de sus nombres, de ios que hu nes lo que tomaren de los de difuntos, y el pre
bieren fallecido en sus bageles, cómo se llama sidente y jueces oficiales de la casa se lo hagan
ban, de dónde eran naturales, qué bienes d e notificar al tiempo que se presentaren en ella
jaron, y si se entregaron, é hizo cargo al maes con el título, y á la vuelta de él se ponga la
tre, y de la almoneda de ellos, con los testa notificación, para que no puedan pretender ig
mentos é inventarios, y si algun bagel diere al norancia.
traves en puertos de las Indias, asimismo el es LEY LX1X.
cribano sea obligado á traerla consigo en la nao D. Felipe IV en Madrid á 16 de abril de 1639, ca
en que viniere para este efecto, y asi se preven pítulo 10.
ga en las fianzas que los escribanos dieren en la Que cada a ñ o se e n v ie n d S e v illa lo s bien es d e d i
casa ó ciudad de Cádiz ante nuestro oficial que f u n t o s , y los va ca n tes c o n sus recaudos y te sta m e n
to s, y ce rtifica c ió n d e que no q u edan m as.
allíi'eside.
LEY LX V I. El oidor que fuere juez de bienes de difun
tos, y los oficiales de nuestra real hacienda»
El emperador D. Carlos y la emperatriz gobernado han de tener cuidado cómo se lo ordenamos y
ra Valladolid á 51 de mayo de 1358.
mandamos, de enviar cada año á estos reinos
Q ue los bienes d e d ifu n to s v e n g a n á su rie sg o y
costa. toda la hacienda de Jos dichos difuntos que no
tuviere embarazo ni litigio, para que se pueda
Mandamos que cuando se enviaren á estos cumplir y ejecutar mejor su voluntad y lega
reinos algunos bienes de difuntos vengan á su dos , y darse satisfacción à las partes, de suerte
riesgo y cosía. que se aseguren las conciencias de todos los que
LEY LX V 1I. en esto entendieren , dirigiéndola á nuestros
D. Felipe II en Madrid á 28 de marzo de 1563. Don presidente y jueces oficiales de la casa de con -
Felipe IV en esta Recopilación. tracion de Sevilla, sin llegar à ella para otra
Que los bien es de d ifu n to s y los que h u b ie re n te n i ninguna cosa ni efecto, remitiendo juntamen
te con la dicha hacienda de difuntos sus testa
(10) Coucuer. ley 57. tit. 24. lib. 9. mentos, inventarios, cartas-cuentas y demas
Del juzgado de bienes de difuntos. 323
recaudos, para que por ellos se puedan hacer j de ellas, y envíe á estos reinos cuanto estuvie-
las diligencias convenientes, y saberse los que j re líquido Y para poderse enviar, y tengan el
son sus verdaderos dueños para entregársela. mismo cuidado de no fiar las llaves de otras per
Y también mandamos sé remitan cada año los sonas que las diputadas para su guarda y custo
bienes vacantes que no tuvieren dueños cono dia: con apercibimiento que de lo contrario nos
cidos, con relación y memoria aparte, y sus tendremos por deservido, y serán condenados
cartas-cuentas en la forma rjue lo demas, y las en los daños y menoscabos que se siguieren de
unas y otras cuentas y relaciones han de venir no lo cumplir y ejecutar, y los vireyes y presi
firmadas del oidor que fuere juez, y de nues dentes hagan guardar lo proveído , pidiendo á
tros oficiales y escribano de cada distrito, los los ministros a quien particularmente se come
cuates han de certificar y dar fé que no que te , que les avisen de lo que fueren obrando
dan otros ningunos bienes tocantes á las car- para que con las noticias necesarias Ies obliguen
tas-cuentas que remiten en dinero, ni efec á la observancia y cumplimiento de todo lo dis
tos, dentro ni fuera de la caja*, y si todavía por puesto, como lo encargamos, y que nos den con
alguna causa quedaren algunos, lo han de refe tinua cuenta de su ejecución. ( 12)
rir los dichos oficiales y escribano, declarando
cuales y cuantos son. (i I) Que en las audiencias reales se señale cada se
LEY L X X . mana un dia para ver pleitos de bienes de di
D. Felipe IV en Madrid á 26 de marzo de 1637 , y 16 funtos,, le y 80, tit. 15 de este libro.
de abril de 1539 , cap. 18. Que tos comprendidos en visitas de cajas y deu
Q ue los v i r e y e s , p r e s id e n te s , ju e c e s g e n e ra le s , y dores á ellas, ó bienes de difuntos, no gocen
las d em a s ju s tic ia s h a g a n c u m p lir y e jec u ta r la s l e · del privilegio m ilitar, ley 17 , tit. 11 f¡b. 3.
y e s d e e s te titu lo . Que ningún pariente, criado, ni allegado de mi
Porque todo lo contenido eti las leyes de es nistro, ni juez , sea depositario de bienes de
te titulo tenga cumplido efecto, ordenamos y difuntos, ni se le cometa su cobranza ley 32
mandamos á los vireyes, presidentes, oidores y til. hb. 3. *
jueces generales de nuestras audiencias reales Sobre los bienes de difuntos en las Judias y su
de las Indias, y á todos los demas jueces y jus administración y cuenta en la casa de con
ticias de ellas, que todos y cada uno en lo que tratación de Sevilla, se vea el tit, Vi lib, 9.
lé tocare tengan y pongan particular cuidado
en que haya gran recato en guardar y requerir (12) Sobre el cumplimíenlo de esta ley y anterio
las cajas de .bienes de difuntos, y no ..permitan res que hablan de la remisión de estos caudales a Es-
ni consientan que estén ni salgan fuera de nues paña, debe tenerse presente, que en real cédula de
19 de jubo de 1792 se previno que los oficiales reales
tras cajas reales \ y que todos los años se saque ajusten en cantidad cierta el flete de estos caudales
y avisen al presidente jaez de arribadas y alzadas de
(11) Mandada guardar por cédula de Madrid á Cádiz para que pareciendo justo se pague, ó en caso
10 de febrero de 1/08, lít. 4, nútn. 28. de parecer escesivo dé cuenta ai consejo etc.
-f-0
TITULO T E m iT A T GUATEO.
D e los v isita d o res generales y p a rtic u la r es.