1. ¿Qué es una calle y cómo puede obtenerse una definición intercultural válida?

Una calle puede ser vista como el espacio que queda fuera de los edificios de la
ciudad, o como un espacio lineal en el que transitan autos y peatones, pero en
realidad es mucho más que eso, podría considerarse como un espacio en el que los
peatones no solo circulan sino que realizan diferentes actividades que varían en
diferentes partes de la ciudad dependiendo del entorno, la cultura, las costumbres,
la historia, las necesidades de las personas, la hora, etc. Sin embargo todos los
habitantes de una ciudad la utilizan para circular por lo que esta podría ser su
función principal y está depende totalmente de las actividades que se realizan en
los diferentes espacios que comunica ya sean públicos, privados o colectivos “la
ciudad vital envía señales amigables a sus habitantes, con promesas de interacción
social. La presencia de otras personas, a su vez, nos señala a que lugares vale la pena
ir” 1 como decía Jan Gehl la gente va a dónde va la gente y esta se dirige a donde
están las actividades de su interés o que son necesarias para su vida, ya que si las
personas no tuvieran una actividad que realizar en un lugar específico
probablemente no transitarían por las calles que llevan a este, por lo que la calle
puede ser vista como un gran espacio que utilizan todas las personas para circular o
permanecer gracias a que esta está conectada con los demás espacios mencionados
anteriormente.

2. ¿Cuál es el papel de la cultura, y de las normas, a la hora de definir comportamientos

adecuados a las calles?

3. ¿Cómo podemos clasificar la variedad de conductas en la calle para poder deducir

aquellas características perceptivas que las animan?

Para poder clasificar algo monótono y repetitivo en base a un gesto natural es de

especial cuidado ya que la naturaleza misma es compleja en su ritmo.

Se parte por entender dos términos (Conducta y Percepción), los cuales son la clave para
solucionar el cuestionamiento. La Conducta es “la realización de cualquier actividad en la que
esté implicada una acción, o un pensamiento o emoción.”2 La Percepción es “el acto de recibir,
interpretar y comprender a través de la psiquis las señales sensoriales que provienen de los cinco
sentidos orgánicos.”3

Por lo que al momento de entender las conductas que las personas realizan en la calle y
deducir las características perceptivas que fortalecen en dichas conductas, se debería en teoría
analizar a cada ser, ya que, aunque la conducta se podría enumerar y catalogar, la percepción
es algo más unitario y autónomo.

Tanto Jean Jacobs como Jan Gehl, han diferenciado y creado normas en el modo de ver
la calle, con las tres cualidades de una calle segura de Jean Jacobs y los tres tipos de actividades

1
JAN GEHL (2014) Ciudades para la gente, Buenos Aires: Infinito. P. 63.
2
PATRICIA SANCHEZ SEISDEDOS, 25/03/18, “¿Que entendemos por conducta? Concepto, tipos y
técnicas”, página WEB [EN LÍNEA], Disponible en: https://blog.cognifit.com/es/conducta/
3
DefiniciónABC, “DEFINICIÓN DE PERCEPCIÓN”, página WEB [EN LÍNEA], Disponible en:
https://www.definicionabc.com/general/percepcion.php
exteriores de Jan Gehl, este último y su análisis de la actividad humana está más cerca a lo que
se quiere llegar, en donde hay conductas que realizan las personas en la calle que son por
razones obligatorias, el hecho de transitar solo por pasar es una conducta que está definida
dentro de la necesidad, otra conducta es el permanecer que está definida dentro de lo opcional,
Pero existen otras dos conductas que en contraposición con las dos anteriores se ven dentro del
marco conceptual, el transitar definido dentro de lo opcional en donde la persona decide
transitar por gusto y la conducta dentro de la permanencia y es el de la necesidad en forma de
trabajo, ya que las personas también laboran en la misma calle.

• Transitar – Necesidad

• Transitar – Opcional

• Permanecer – Opcional

• Permanecer – Necesidad

Ahora, los rasgos que se dan en el entorno para que estas conductas entren dentro de
un enfoque perceptivo, lo definen por medio de la actividad de la zona, la importancia del sector
y la historia de la calle objeto de análisis, estos ítems permiten establecer en el individuo
sensaciones del transitar y del permanecer de acuerdo como esté familiarizado con cada uno.

Concluyendo, las conductas se pueden clasificar dentro de un marco general, sin

embargo, las características perceptivas son rasgos singulares que varían en cada entorno
dependiendo de factores exteriores al objeto de análisis.

4. ¿Cómo podemos formular un conjunto más detallado de características físicas que sean
perceptibles y que estimulen caminar? Amos Rapoport. El uso peatonal de la calle: cultura y
percepción.

Entendiendo que la calle hace parte de un espacio, y que el espacio es una dimensión,
una extensión, una materialidad, una realidad, una estructura, que pertenece a un todo,
podemos ver la calle como un fragmento de todo que engloba la cotidianeidad, ésta está
contenida en dos planos longitudinales que tienen un valor incluso mayor que el que se le da en
la actualidad. Es ese plano urbano que carga con casas, tiendas, aceras, muros y todo aquel
elemento que sea parte del ambiente, pero teniendo en cuenta que lo más relevante que
conforma la calle no es lo tangible, sino aquello efímero que produce cada persona que pasa a
través de ella. Pero, para cada persona en particular ¿Qué es una calle? Y ¿cómo definirla según
cada percepción? La percepción de una ciudad y de sus componentes es dinámica y secuencial.

Si bien dice Borjas (2003) ’La calle es el soporte de las relaciones interpersonales de los
habitantes de una ciudad, en la cual se considera la relación del hombre con su entorno físico.
Donde la calle es aquel factor común en la relaciones de los humanos.’ Entonces, respecto a
esto, quienes hacen la calle son aquellos que la habitan y le dan vida a la misma.

En ese soporte es que necesitamos coincidir para darle luz a esas relaciones
interpersonales, pero, ¿Por qué acudimos a un lugar? Y ¿Por qué lo concurrimos? ¿Es acaso esa
necesidad de encontrar quienes somos, de encontrar ese algo que nos conduce a un lugar
específico? ¿Será que nos gusta lo que dice en aquel muro o nos gusta el café de esa cuadra?
Las calles generan un alto grado de intercambio cultural, ya que reúne a más de una persona
que piensa de manera distinta en un lugar determinado a una hora determinada.
 Se puede decir que lo que nos incita a caminar, a andar recurrentemente por un espacio
es aquel recuerdo de algo que experimentamos en su momento y queremos revivir, aquello que
vemos, aquella charla con el señor que vende libros desde hace tantos años, o el simple hecho
de ver pasar a la persona que te gusta todos los días a la misma hora, aquel hábito que hemos
construido, es lo que nos lleva a circular por los mismos lugares. Los seres humanos somos
gestores de nuestro propio desarrollo y como generamos ese andar, ese recorrido de nuestro
día a día. Es cuando se dice que el hombre reconoce (o debería) y valora cada elemento del
ambiente que conforma un espacio para habitar.

La manera en que cada persona percibe la cama, la ciudad, el campo, el mundo y en

particular el espacio urbano llamado calle dice mucho de cómo la configuración urbana se
adapta a las necesidades de todo aquel que lo habita.