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ELEMENTOS

DERECHO ESPAÑOL.
IMPRENTA DE H. FOURHIER Y Ci
CALLI DI SB1H1, H* l4-
ELEMENTOS

DEL

DERECHO ESPAÑOL

POl
DON JOAQUIN ESCRICHE,
AUTOR DEL DICCIONARIO SAZONADO DE LEGISLACION.

TERCERA EDICION ,
1UMEJIT1DA COH Vil BIITOMA DEL MISMO DHICMO.

PARIS,
LIBRERIA DE D. VICENTE SALVA,
CALLE DE LILLE, N° í.

4840.
ÍBIBLIOTHEC
REGIA.
[mNACKNSISJ
ADVERTENCIA.

-<#»-

• El despacho rápido que ha tenido en el dis


curso de un año la primera edicion de estos Ele
mentos, es un buen testimonio del aprecio con
que han sido recibidos ; y no habiendo ya ejem
plares para satisfacer á las nuevas demandas , se
ha procedido á la segunda edicion , que se pre
senta mejorada con algun aumento de doctrinas
y aun de títulos, y con las citas de las leyes anti
guas que se hallan vigentes, y de las modernas
que se han publicado hasta el dia. Con este nue
vo trabajo se ha hecho mas útil é interesante la
presente obrita. »
« Ella es una esposicion breve, clara y sencilla
de nuestra actual legislacion y jurisprudencia , y
no tiene mas objeto que el de facilitar un medio
á los jóvenes legistas , para que puedan dominar
en poco tiempo el conjunto y la estension de las
— VI —
materias del Derecho , ponerse en camino de ad
quirir conocimientos mas profundos, y habilitarse
para los exámenes , á que tienen que someterse
hasta lograr el título de ahogados. Era preciso á
este fin usar de la forma de diálogo , que si bien
en las obras largas llega á ser demasiado fatigosa,
conserva en las cortas sus ventajas naturales de
avivar la atencion de los jóvenes, de presentarles
las ideas con mas distincion, y de grabarlas en su
memoria con mas firmeza. Tal vez se observará
en algunas partes cierta profusion de citas ; pero
así podrán los lectores ir á tomar en las fuentes
el complemento de las nociones que son necesa
rias para perfeccionarse en la ciencia , y que no
es posible abrazar en un compendio. »

Hasta aquí el autor en el principio de la segun


da edicion. Nosotros solo debemos añadir res
pecto de la presente, que haciéndola para los jó
venes que se dedican en América al estudio de la
jurispradencia, nos ha parecido sustituir al título
de Elementos del Derecho patrio el de Elemen
tos del Derecho español, y completarlos prefi
jando un compendio de la historia del mismo ,
sacado de las Instituciones de Álvareí.
La legislacion española continúa siendo la de
las nuevas repúblicas americanas , menos en los -
punios en que se halla espresamonte derogada.
Pero en muchos de estos ha variado cabalmente
la espaüola moderna ; y como sus recientes dis
posiciones emanan tambien de cuerpos que re
presentan la voluntad nacional, es probable que
coincidan con las adoptadas en ultramar. Cuando
así no sea , siempre ge ofrece campo al hombre
estudioso para examinar, dónde se ha atendido
mejor al interes público , ó si acaso es debida la
diversidad á la especie de gobierno de cada pais,
á su situacion topográfica, ó á alguno de los va-
ríos motivos que pueden influir en que se adopte
una medida legislativa. Como quiera, los prin
cipiantes hallarán reunida en este breve volumen
la doctrina de una ciencia , que no está tratada
con mas método ni con mayor claridad en obras
mucho mas estensas.
ESPLICACION
DE LAS ABKEVIATUBAS MAS FRECUENTES
El» ESTA OBSA.
-o«o-
Art articulo.
aud audiencias.
C Codei.
c. ó cap capítulo.
céd cédula.
circ circular.
Conc. lateran Concilium lateranense.
Cone. irid Concilium iridentinum.
Cons Consejo.
Const. ó Constit Constitucion.
d dicho ó dicha.
decr decreto.
dltp disputatio.
fac facultad.
gl glosa.
ind índice.
lib libro.
n número.
ROI nota.
¡V. i¡. 6 Ifov. Rec Novísima Recopilacion.
orden ordenanza.
P. ó Parí Partida.
pragm pragmática.
q qusstio.
Recop Nueva Recopilacion.
regí. ó reglatn reglamento.
set setiembre.
>¡g siguiente ó siguientes.
til título.
truet tractalus.
trat tratado.
ÍNDICE.

-°ífr>-

Pág.
COMPENDIO DE LA HISTORIA DEL DERECHO ESPAÑOL... 1
TÍTULO PRELIMINAR.
De la justicia y del Derecho 15
LIBRO PRIMERO.
DI LAS PERSONAS.
Título i. Del estado de los hombres 33
Tít. ii. De la patria potestad SI
Tit. ni. Del matrimonio 33
Tit. Iv. De los electos del matrimonio 39
Tit. v. De las dotes , donaciones y arras 43
Tit. ti. De la legiiimacion , adopcion y emancipacion. 48
Tit. tu. De la tutela y curatela ó curaduría 80
Tit. vni. De la restitucion in Iniegrum 54
LIBRO SEGUNDO.
DE LAS COSAS.
Titulo i. De la division de las cosas, y de los modos
de adquirir su dominio 37
Tít. II. De la prescripcion 68
Tít. ni. De las servidumbres 70
Tit. Iv. De los testamentos 74
Tít v. De la institucion de heredero 7t
X ÍNDICE.
Pdg.
Tít. vi. De las sustituciones 83
Tít. tu. De la desheredacion 86
Tít. viii. De la revocacion y rescision de los testa
mentos 89
Tít. ix. De la admision de la herencia 91
Tít. x. De las mejoras de tercio y quinto, de la co
lacion y de la particion de la herencia... 94
Tít. xI. De los legados 97
Tít. xii. De los fideicomisos. 101
Tít. xiu. De los codicilos 103
Tít. xiv. De los albaceas 104
Tít. xv. De los mayorazgos... 106
Tít. xvi. De las herencias abintestalo 114
Tít. xvii. De las obligaciones 123
Tít. xviii. De la transaccion 126
Tít. xix. De la compra y venta )28
Tít. xx. De los retractos 135
Tít. xxi. De la permuta ó cambio. 138
Tít. xxii. Del arrendamiento 140
Tít. xxiii. De los censos 143
Tít. xxiv. De la sociedad 148
Til. xxv. Del mandato 151
Tít. xxvi. De la estipulacion ó promesa 133
Tít. xxvii. De la fianza 153
Tít.xxvm. Del mutuo ó préstamo 138
Tít. xxix. Del comodato 160
Tít. xxx. Del depósito 162
Tít. xxxi. De la prenda é hipoteca y de la gradua
cion de acreedores 164
Tit. xxxu. De la obligacion literal 170
Tít. xxxiii. De la donacion 171
Tit. xxxiv. De la aseguracion 174
Tít. xxxv. De los cuasi-contratos 173
Tít. xxxvi. De las obligaciones que nacen de los deli
tos y cuasi-delitos 178
Tít xxxvn. De la estincion de las obligaciones 180
ÍNDICE. XI

LIBRO TERCERO.
Pág.
DE LOS DELITOS Y DE LIS PENAS.
Título í. De los delitos en general ISS
TIt. II. De la traicion 186
íit. ni. Del HoMicifllo 18?
Tit. iV. De la injuria 191
Tít. t. De la calumnia i9í
Tít. vi. Del hurto y del robo 196
T/t. vit. De 14 fuerza y de las asonadas 197
Tít. virt. De la falsedad 200
Tít. ix. De los delitos contra las costumbres 202
Tít. x. De la usura 207
Tít. xi. Del juego 209
Tít. ni. De las penas 211
Tit. mi. De la cárcel 213
LIBRO CUARTO.
DE LOS JUICIOS.
Título I. De las acciones 218
Tít. ii. De las escepciones 22»
Tit. ni. De los juicios 228
Tit. iv. Del actor y del reo 2M
Tit. v. Del juez 232
Til. vi. De los arbitros 241
TíL vit. De los abogados 246
Tít. viii. De los procuradores 219
Tit. ix. De los escribanos »• . 333
TÍL x. De la demanda 233
Tit. xi. De la citacion SS9
Tít. ni. De la contestacion 864
Tít. xm. De las pruebas 26G
Tit. iv. De la «entencia 283
XII ÍNDICE.
Pdg.
Tit. xv. De los trámites judiciales 283
— Pleitos de menor cuantía 885
— Pleitos de mayor cuantía. .- MI
— Juicio de conciliacion 292
— Juicio civil ordinario 293
Tít. ivi. De la apelacion 299
— Apelacion en pleitos de menor cuantía 309
Tít. x vii. De la súplica ó suplicacion 311
— Súplica en negocies de menor cuantía 314
Tít. xviii. De la segunda suplicacion 313
Tít. xix. Del recurso de inj sticia notoria . %I9
Tit. xx. Del recurso de nulidad 321
Tít. xxi. De la competencia y otros diferentes recur
sos contra ia arbitrariedad de los juezes. . 330
Tít. xxii. Del recurso de Tuerza 336
Tít. xxiii. Del recurso de nuevos diezmos 338
Tít. xxiv. Del juicio ejecutivo 339
Tit. xxv. Del concurso de acreedores, cesion de bie
nes , esperas y quitas 349
Tít. xxvi. Del juicio sumario de alucemos 353
Tít. xxvii. Del juicio sumario de posesion SS9
Tit. xxviii. De las dr-nuncias de obras 363
Tit. xxix. Del juicio criminal 368
— §. i. Sobre los medios de proceder á la averi
guacion de los delitos 369
— g. ii. De la sumaria 374
— g. III. Del plenario 383
— g. iv. Modo de proceder contra reos ausentes ... 396
Tít. xxx. Del asilo 398
Tít. xxxi. Del indulto 403
DE LA HIST0B1A

DEL DERECHO ESPAÑOL.

Como este compendio no tiene otro objeto


que dar á los principiantes alguna idea de los
códigos del Derecho español , solo haré en él
una breve relacion de aquello en que con
vienen los autores, desentendiéndome de las
prolijas disputas que suelen mezclarse en es
ta materia.
Aunque no falta quien haya querido des
cubrir las leyes, con que se gobernaron los
primeros fundadores de España antes de la
invasion de los cartagineses en ella, no obs
i
2 COMPENDIO DE LA HISTORIA
tante sobre este particular es menester con
fesar que no tenemos cosa cierta. Lo mas
probable parece ser que no tuvieron leyes
escritas, gobernándose sin duda por las de
costumbre y por juicios arbitrarios, funda
dos en equidad y justicia. Se crac que los
cartagineses comenzarían por lo menos á in
troducir las suyas en las provincias que do
minaron. Pero aun esta conjetura no carece
de inverosimilitud, si se atiende al -poco
tiempo que duró sa gobierno , que fué d-e
poco mas de doscientos años ; y á las conti
nuas guerras de que estuvieron agitados en
lodo él.
A los cartagineses siguieron los romanos
en la dominacion de España, y de estos no
hai duda que luego que perfeccionaron la
conquista de todas sus provincias , intiodu-
jeron en ellas su lengua, 6us costumbres y
su legislacion.
En la decadencia del Imperio romano de
occidente pasó España á la dominacion de
diferentes naciones bárbaras del norte, co
mo fueron los godos, los vándalos , los ala
nos, las suevos y silingos. Todos ellos se dis
putaron largo tiempo el dominio, hasta que
los godos , con la ruina ó destierro de todas
DBfc DERECHO ESPANOfc. 3
las otras, quedaron por dueños' únicos de
España ; lo que sucedió hácia el año de 412
de Jesucristo, Los godos en el principio de
su reinado permitieron á los españoles conti
nuar usando de las leyes romanas, á que pa
rece estaban' acostumbrados, y poco á poco
fueron ellos estableciendo algunas. El pri
mero que las dió escritas fué el rei Eurico,
que murió el año de 483. A ellas añadieron
otras sus sucesores, y principalmente Leo-
vigildo, quien enmendó y arregló las que
había, quitando las superfluas y añadiendo
otras necesarias.
EL primer código de leyes godas es el fa
moso <|ue se publicó el siglo XII en latin con
el nombre de Liber judicum. , llamado tam
bien Fuero de los juezes , ó Fuero-Juzgo , y
se tiene por fuente y origen de las leyes de
España. Dividese esta obra en doce libros re
partidos en títulos, y sus leyes se componen
de edictos de diversos reyes godos, de de
cretos de varios concilios toledanos , y de
otras leyes, cuyo orígpn no se espresa. Se
duda sobre su autor, y unos lo atribuyen á
Sisenando, otros á Chindas vindo y otros á
Reces vinto, que todos florecieron en el si
glo sétimo.
4 COMPENDIO DE LA HISTORIA
Despues de la entrada de los árabes en Es-
paftn , que sucedió el año de 714 , en que se
arruinó la monarquía goda, continuaron ri
giendo las leyes godas por muchos años en las
provincias que se preservaron de los moros,
y en las que se iban recobrando, gobernán
dose por ellas y por las costumbres de la na
cion en general. La division de las provincias
que se conquistaban á los moros , y la dife
rencia que con el tiempo se iba notando en
muchas cosas del gobierno particular de cada
una, originaron la variedad de códigos que
se establecieron en ellas. En Castilla se esta
bleció , á fines del siglo X y principios del
XI, por su conde Don Sancho García, el
Fuero llamado viejo de Castilla, cuyas leyes
son , despues de las del Fuero-Juzgo, las fun
damentales de la Corona de Castilla, sepa
rada de la de Leon. Don Alonso VII en las
Cortes de Nájera de 1128 lo aumentó y en
mendó , publicando diferentes leyes respec
tivas al estado de los nobles. A ellas se unie
ron despues varios usos y costumbres de
Castilla , y diferentes fazañas ó sentencias
pronunciadas en los tribunales del reino, las
cuales rigieron hasta el reinado de Don
Alonso Xt, qiie quiso fuesen preferidas las
DEL DERECHO ESPAÑOL. 5
del código que arregló y publicó en las Cor
tes de Alcalá del año de 1348, conocido con
el nombre de Ordenamiento real de Alcalá.
Ultimamente el rei Don Pedro , en las Cortes
de Valladolid de 1351, enmendó y arregló el
Fuero de Castilla en la forma que ha llegado
á nuestros tiempos, siendo conocido tambien
por los nombres de Fuero de los hijos- dalgos,
Fuero de Burgos y Fuero de las jazañas, albe-
drios y costumbres antiguas de España.
En el reino de Leon dió el rei Don Alonso V,
en las Cortes generales que tuvo en la ciudad
de este nombre el año de 1020, el Fuero lla
mado de Leon , compuesto de leyes estable
cidas en aquella asamblea para el gobierno
de la misma ciudad y reino , con inclusion de
Galicia y la parte de Portugal conquistada
hasta entonces , continuando en regirse por
ellas hasta que se publicó el código llamado
Fuero real; y aunque se establecieron en Cas
tilla y Leon los dos fueros referidos, caste
llano y leonés, continuaron en observarse
tambien en sus provincias , mas ó menos res
pectivamente , las leyes del Fuero-Juzgo , en
todp 1° perteneciente al Derecho comun ,
hasta que con el tiempo se fué entibiando su
observancia, principalmente en Castilla la
i.
tí COiHUKpiO m JUA HISTORIA
Vieja; pero s¡ decayó su vigor en esta, lo re
cobró en la estension de Castilla la Nueva y
las provincias que se fueron conquistando
desde d reinado de Don Alonso VI basta
principios del de Don Alonso el Sabio, cuyos
monarcas dieron las leyes de este código á
los pueblos conquistados para su gobierno
en todo lo perteneciente al Derecho comu».
El rei Don Alonso X llamado el Sabio (')-,
deseando anular los fueros de poblacion y
conquista ,- y los generales de Castilla y Leon,
para evitar la confusion y- aun complicacion
de tanta multitud de leyes diferentes en cada
provincia; ordenó y publicó en el año de 1255
el Fuero rea!, conocido tambien con los nom
bres de Libro de los consejos de Castilla,
Fuero de las leyes y Fuero de la corte, porque
se decidían por él principalmente los juicios
en los tribunales de la corle; mandando que
sus leyes fuesen generales y únicas en todos
sus dominios ; pero reconociendo la nobleza)
y los pueblos , particularmente de Castill i ,

( * ) Algunos sostienen que Don Alonso el Sabio fué n y


no x, y que el x fue el autor del Fuero real, y por consi
guiente que este es posterior á las Partidas- tos fundamen
tos de esta opinion no parecen de mucha gravedad , y pue
den verse en Colon, Librer. de escrib., lib. I, cap. 2, m iO.
UfcJ. UKRKCilO KSl>A>Ot. 7'
que por ellas qued iban derogados sus anti
guos fueros y franquezas-, las reclamaron y
recobraron en tiem po del mismo rei Don
Alonso , cesando entre ellos la observancia del
Fuero real, el cual se aceptó generalmente en
Estremadura , en Algarve, Andalucía, rei
no de Murcia, etc.; habiendo hecho la mis
ma reclamacion los concejos de las ciudades
y villas de la corona de León, en tiempo de
las discordias del Infante Den Sancho con su
padre el mismo rei Don Alonso, capitulando
entre otras cosas el restableeimenlo de lis
leyes del Fuero leonés y Fuero-Juzgo.
El Fuero real no dejó de tener muchos de
fectos. Con este motivo , para su mayor de
claracion é inteligencia, fué necesario se
compusiesen las advertencias llamadas Leyes
de Estilo , en número de doscientas cincuenta
y dos, con autoridad del mismo rei Don Alon
so, de su hijo Don Sancho y de Don Fernan
do el Emplazado, segun se declara en su
prólogo. Se publicaron á fines/del siglo XIII
ó principios del XIV, y algunas de ellas se
hallan insertas en la Nueva Recopilacion.
Despues del Fuero real sigue el código cé
lebre de las Partidas. El prólogo de esta obra
nos refiere que el rei Don Alonso ^1 Sabio la
8 COMPENDIO DE LA HISTORIA
emprendió por mandado de su padre S. Fer
nando el año de 1251, cuarto de su reinado ,
y que la acabó siete años despues. No se ob
servaron estas leyes hasta el tiempo de Don
Alonso XI (hacia el año de 134-8), quien por
la leí 1.a, iít. 28 de su Ordenamiento de Al
calá las publicó y dió valor, habiéndolas án-
tes enmendado y corregido á su satisfaccion.
Esto mismo consta en la lei3.°, tit. 1*, lib. 2.°
de la Nueva Recopilacion. Se tiene por cierto
que la causa de haberse dilatado tanto tiem
po la publicacion de este código, fueron las
turbulencias , guerras y otros gravísimos ne
gocios ocurridos en el reinado de D. Alonso
el Sabio y en los dos siguientes.
Se componen las Partidas en gran parte de
leyes del Derecho romano , de capítulos del
Derecho canónico, y de autoridades de los
s.mtos Padres. Es evidente que contienen al
mismo tiempo muchas leyes antiguas del
reino, y que se consultaron las costumbres y
fueros de la nacion, deseando saliese un cuer
po legal , perfecto y peculiar de nuestra Es
paña; pero este objeto tan importante no se
logró completamente.
Don Alonso XI, queriendo que todos sus
reinos se gobernasen por unas mismas leyes,
DEI, DEBECHO ESPAÑOL. 9
teniendo presentes las que promulgó en las
Cortes de Ciudad real y Segovia , formó en
las de Alcalá , año de 1348 , el Ordenamiento
de leyes, conocido por este nombre, man
dando que rigiesen en sus dominios con pre
ferencia á los códigos antiguos , y despues de
ellas las de los Fueros municipales de los
pueblos y las de las Partidas, habiéndolas
ántes corregido ; lo cual renovó Don Enri
que II en las Cortes de Toro, año de 1369,
y la reina Doña Juana en la lei Ia de Toro,
que se halla inserta en la Nueva Recopilacion.
Casi todas las leyes de este código se pasa
ron asimismo á dicha Eecopilacion , ó en
teras, ó con alguna leve mutacion.
De las leyes de este código, y de las que
promulgaron los reyes sucesores desde Don
Alonso XI hasta los Reyes Católicos, sé
formó el que conocemos con el título de Or
denanzas reales de Castilla, y tambien con el
de Ordenamiento real. Se compone de varias
leyes, ya dispersas, ya contenidas en el
Fuero real , Leyes del Estilo y Ordenamiento
de Alcalá, y se divide en ocho libros. Se
cree que su autor, Alonso Montalvo, em
prendió esta gbra de orden de los reyes Don
Fernando y Doña Isabel , como lo asegura él
10 COMPENDIO BE LA HISTOBIA
mismo en su prólogo; pero nunca se espidió
lei alguna que diese fuerza á esta compila
cion ; por lo que sus leyes no tienen Otra que
la que merecen en su original.
A las referidas colecciones se siguió otra
que se llamó la Nueva Recopilacion. Esta se
concluyó y publicó el año de 1567 en dos
tomos, comprensivos de nueve libros , incor
porándose ere ella las leyes que corrían en
varios cuadernos-, y otras que se hallaban
sueltas. Erelas-ediciones posteriores, hechas
en los años de 1581 , 92 y 98,^640-, 1723<y
1745, se le fueron aumentando muchas leyes
establecidas en el tiempo intermedio de urna
edicion á otra ; de suerte que en la de 1745
se le añadió un tercer tomo,- en el cual, bajo
el nombre de Autos acordados del Consejo,
se incluyeron mas de quinientas pragmáticas,
cédulas, decretos, órdenes, declaraciones y
resoluciones reales espedidas hasta dicho
año , distribuyéndolas por el mismo orden
de títulos y libros contenidos en los dos to
mos de leyes recopiladas. Con el aumento de
veinte y seis leyes y doce autos salieron otras
tres ediciones en los años de 1772, 75 y 77,
ofreciendo dar al público en otro tomo sepa
rado, por vía de suplemento, ef gran número
DEL DERECHO ESPAÑOL. 11
de cédulas y decretos reales , y autos acor
dados que habían salido desde el año de 1745.
Ultimamente se ha publicado otra edicion
de la misma Recopilacion , no por el método
y orden de la antigua, sino en nueva forma,
aprovechando las leyes útiles contenidas en
aquella , y agregando mas de dos mil provi
dencias respectivas al tiempo, desde 1745
hasta 1805. Esta Recopilacion , dividida en
doce libi os , se aprobó y mandó observar por
el señor Don Cárlos IV, con el título de No
vísima Recopilacion de las leyes de España,
por una real cédula de 15 de julio de 805,
que se halla al principio de la obra.
Conocidas las épocas de la promulgacion
de todos estos códigos, y sabido el principio
de que las leyes posteriores derogan á las an
teriores , se conocerá el valor relativo de to
das las partes de nuestra legislacion, y se
sabrá por cuáles leyes debe fallarse en los
diversos casos que pueden ocurrir. Pero pa
ra proceder en materia tan importante segun
el tenor de las leyes, véase la 3.a, tít. 2.°, lib.
3.° ele la Novísima Recopilacion.
ELEMENTOS

DEL

DERECHO

TÍTULO PRELIMINAR.

DE LA JUSTICIA Y DEL DERECHO.


' í
Preg. Qué es justicia?
Resp. El hábito de arreglarse á la lei; ó la
voluntad firme y constante de dar á cada uno
lo que le pertenece. (Lei 1, tít. 1, Parí. 3.)
P. üe cuántas maneras es?
i?. Dividese principalmente en conmuta
tiva y distributiva. Justicia conmutativa es
la que regla la igualdad ó proporcion que
debe haber entre las cosas, cuando se dan
unas por otras; y distributiva la que da los
14 DE LA JUSTICIA
premios y las penas segun los méritos de ca
da uno.
P. Cuál es la fuenie de la justicia?
R. El derecho, pues él nos enseña lo que
es justo ó injusto, licitprú ilícito.
P. Qué es derecho ?
R. La coleccion ó el «conjunto de las leyes,
y también la facultad ó accion otorgada por
la lei -•: d« modo que unas veaes es < fl«sa y
otras efecto; pero se toma con mas frecuen
cia en el primer sentido.
P. ¿Cuáles son los preceptos primordiales
del Derecho?
R. Los tres siguientes : Io Vivir honesta-
menie : 2D No hacer daño á nadie : 3° Dar á
cada uño lo Suyo. Llámanse preceptos pri
mordiales, porque no hai doctrina del Dere
cho que no se derive de alguno de estos prin
cipios. (Lei 3, lít. i, Part. 3.)
P. Cómo se divide el Derecho?
R. En natural, de gentes y civil. ( Lei 2,
Ut. i, Part. i.)
P. Qué es Derecho natural ?
R. La coleccion de las leyes que Dios mis
mo ha promulgado al linaje humano por me
dio de la recta razon. --
P. Qué es Derecho de gentes?
V DEti JJERBCIIO.
/?. La coleccion de las leyes y costumbres
que arreglan las relaciones y los intereses
que tienen las naciones' unas con otraé. Este
Derecho se compone de los principios del
Derecho natural aplicados á los negocios de
naciones, en cuvo sentido se llama- Dfcrer-
cho de gentes primario ó primitivo ; y de los
tratados d« paa, de alianza y de comercio;
como igualm- irte de los; usos observados rocí-
procamente entre los pueblos; en cuyo sen
tido se denomina secundario ó positivo. Al
gunos publicistas le dan el nombre de Dere
cho público, y otros el de internacional.
P. Qué es Derecho civil?
R. La coleccion de las leyes que cada na
cion tiene esiahlecidas para la administra
cion de los intereses generales del estado, y
para todo lo relativo á la estension y ejerci
cio de los derechos ó facultades particulares
de cada uno de sus individuos.
P. De cuántas maneras es el Derecho c'.vilt?
H. De dos : Derecho público y Derecho pri
vado.
P. Cuál es el Derecho público?
R. El que fija las relaciones y los intereses
que existen entre una nacion y los individuos
que la componen. Este Derecho comprende
16 DE 1A JUSTICIA
la lei fundamental , llamada entre nosotros
Constitucion; la lei electoral ; las leyes rela
tivas á la organizacion de las autoridades
constituidas ; como tambien las que tienen
por objeto la represion de los atentados con
tra la moral, el buen orden y la seguridad
del estado ó de los ciudadanos ; las que esta
blecen las condiciones del matrimonio , la pa
tria potestad, la cualidad de las personas, etc.
El Derecho público es conocido ordinaria
mente con el nombre de Derecho politico , y
constituye la soberanía.
P. Qué es soberanía?
R. La omnipotencia humana , ó la reunion
de iodos los poderes sociales, esto es, del
legislativo que hace las leyes , del ejecutivo
que las ejecuta , y del judicial que las aplica
á los hechos particulares.
P. En quién residen estqs poderes ?
R. El legislativo en las Cortes con el reí ;
el ejecutivo en el rei ; y el judicial en los tri
bunales y juzgados, que administran la justi
cia en nombre del rei. ( Const. <Zel837, art. 12,
45, 63 y 68. )
P. Cuál es el Derecho privado ?
K. El que se compone de las leyes que tie
nen por objeto arreglar los intereses pecu
V DEL DERECHO. 17
niarios de los ciudadanos entre ellos; como
por ejemplo , de las leyes que rigen los con
tratos ; los testamentos , la sucesiones y los
diferentes modos de adquirir la propiedad.
P. No hai alguna otra division del Derecho
civil?
R. La hai, en escrito y no escrito. Derecho
escrito es el que se compone de disposiciones
promulgadas por la autoridad del rei ; y De
recho no escrito , que suele llamarse consue
tudinario, es el que abraza los usos y cos
tumbres que habiéndose introducido insen
siblemente con el consentimiento tácito del
legislador, han llegado á adquirir fuerza de
leyes. (Lei 4, tít. 1, y lei 4, tít. 2 , P. 1. )
P. Pues que todo Derecho es una colec
cion de leyes, decidme ¿qué cosa es lei?
R. Una regla de conducta ó acción esta
blecida por una autoridad á quien debemos
obedecer.
P. De cuántas maneras es la lei ?
R. Las leyes se dividen : I° en generales y
especiales : 2o en imperativas, prohibitivas,
facultativas y penales 3o en personales y
reales. Lei general es la que se da en bene
ficio de todo el pueblo ; y especial la que se
da en favor de cuerpos ó personas particu
iQ m UA JUSTICIA
lares, y que por tanto se llama privilegio. Lei
imperativa es la que manda ó prescribe una
accion : prohibitiva, la que la prohibe : facul
tativa, la que sin mandar ni prohibir, se re
duce á introducir un derecho ó (acuitad, de
que cada uno puede librempnte usar ó) m>
usar ; y penal , la que tiene por objeto re
primir algun hecho que turba el orden pú
blico : bien que las leyes penales pueden con
siderarse, mas bien como sancion de las im
perativas y. prohibitivas, que como una clase
particular de leyes. Lei personal, por último,
es la que solo hace relación al estado y cali
dad de las personas; y real, la que se aplica
solamente á los bienes.
P. ¿ Qué es lo que se requiere para la for
macion de la lei?
Ji. Se requiere : I° su proposicion por el
rei, por el senado ó por el congreso delos
diputados , que es lo que se llama iniciativa :
2° su adopcion por cada uno de os Idos cuer
pos colegisladores : 3° su sancion ponel rei
quelaadopta en definitiva y le da la exis
tencia. (Const. de 1837, art. 36 y 445.)
P. Qué es sancion ?
' li. La palabra sancion, aplicada á las leyes,
tiene dos significaciones : en primer lugar, es
V Mk DERKCUO. t9
aquella jwrte.de la lei'en que se establece urta
pena contra el infractor; y en segundo, es la
aprobacion real dada á la lei para hacerla
ejecutiva.» ; • . • ' .-
P. ¿ Desde cuáailo es ejecutiva y obligato
ria la lei?
li. Las leyes y las- disposiciones generales
del gobierno son obligatorias para cada ca
pital de provincia desde que se publican ofi
cialmente en ella , y desde cuatro dias des
pue, para los demás pueblos de la misma pro
vincia. (Lei de 28 de noviembre de 1837.) Se
reputa hecha la publicacion de las leyes y de
las disposiciones del gobierno el día de su
insercion en el boletín oficial.
P. ¿Sobre qué tiempo ejerce la lei su
imperio , sobre el pasado ó sobre el fu
turo ?
R. Pues que la lei no es obligatoria sino
desde su promulgacion , es consiguiente que
no pueda aplicarse á los tiempos pasados,
sino solo á los venideros ; y por eso se dice
que la tei.no tiene efecto retroactivo. Este es
un principio conservador de la fortuna, d^l
honor y de la vida de los ciudadanos. ( Lei 12,
tít. 2, lei 8, tít. 4, lib. %leil, tít. 5, lib. 3, y
lei6,tít.ó, lüi.kdel Fuero-Juzgo ; lei 200 del
20 DE LA JUSTICIA
Estilo; lei 15, tít. 14, P. 3; y lei 13, 17,
lib. 10, Mw. i?ec. )
P. Sin embargo, las leyes interpretativas
¿no son una escepcion de esta regla?
R. Puede decirse que no lo son ; porque
las leyes interpretativas se identifican con las
leyes interpretadas, y se consideran con la
misma fecha ó data que estas últimas : ellas
respetan , por otra parte , las sentencias da
das y las convenciones hechas durante la os
curidad de la lei.
P. A quiénes obligan las leyes?
R. A toda clase de personas ; y su ignoran
cia no escusa á nadie, sino en ciertos casos á
los militares ocupados en el servicio de las
armas , á los labradores que viven en despo
blado , á los pastores que andan con ganados
por los montes y yermos, y á las mujeres que
residen en tales lugares. ( Leyes 20 y 21, tít.
l,iM.)
P. Obligan tambien á los estrnnjeros?
R. Les obligan con respecto á los bienes
raizes poseidos en territorio español , como
igualmente por los contratos hechos y deli
tos contravenciones cometidas en el mismo.
( Lei 15, tít. 1, P. 1 ; ind. de la lei 15, tít.
14 , P. 3; leyes 3y5, tít. 11, lib. 6 , NÍR.
Y DEL DERECHO. 21
y circ. del Cons. de 25 de agosto de 1T71. )
P. ¿ Puede cualquiera renunciar por con
venciones particulares al beneficio de la lei ?
R. No puede renunciarse á las leyes impe
rativas ni á las prohibitivas , porque intere
san al orden público ; pero bien puede re
nunciarse á las que solo interesan á los con
trayentes , y no al orden público ni á las bue
nas costumbres. ( Lei 28, tít. 11, P. 5, y
lei 238 del Estilo. )
P. Guando el juez tiene que aplicar una
lei , y encuentra dudoso ú oscuro su sentido,
¿qué es lo que debe hacer?
R. Acudir á las reglas que sugiere la ju
risprudencia. .
P. Qué es jurisprudencia?
R. La ciencia de las leyes ; el conocimiento
de lo justo y de lo injusto ; el hábito práctico
de interpretar bien las leyes , y aplicarlas con
oportunidad á los casos que ocurran ; y mo
dernamente se usa de esta voz para denotar
la serie de sentencias uniformes sobre un
mismo punto.
P. Debe acaso el juez interpretar las leyes?
R. Hai tres especies de interpretacion : in
terpretacion auténtica, interpretacion usual,
é interpretacion doctrinal. La primera es la
22 DE EA JUSTICIA
declaracion que hace el mismo legislador : la
segunda es la inteligencia que resulta del uso
y de la práctica de los tribunales; y la ter
cera, la esplicacion razonada que dan los
doctores ó jurisconsultos. Cuando la lei es tan
oscura que no liai medio de penetrar su sen
tido, es necesario consultar al legislador para
que lo esprese. Cuando las decisiones unifor
mes de los tribunales lian llegarlo á fijar el
sentido de la lei , es preciso atenerse al que
por ellas se le ha dado. Kn defecto de la in
terpretacion usual , puede valerse el juez de
las doctrinas delos autores, hallándolas fun
dadas en buenas razones ( Lei 14, tit. 1, PUí ;
regla 36, tü. 34, P. 7; lei 3, y nota % tiU 2,
lib. 3, N. Ji. ; y pragm. de 12 de marzo- de
mt. )
P. Cuál es la duracion de las leyes?
K. Las leyes son perpetuas por su natura
leza; pero á vezes pierden su fuerza por la
abrogacion.
P. Qué es abrogacion ?
R. La abolicion, revocacion ó destruccion
de :dguna lei.
P. De cuántas maneras es?
Ji. De dos: espresa ó tácita. Es espresa,
cuando una nueva lei revoca formalmente 'a
Y i»BX JJKREOHO. g3
antigua; y es-tácita , cuando la nueva lei con
tiene disposiciones contrarias á la anterior
sin decir que 'la revoca, ó cuando los moti
vos de una lei han cesado enteramente, -<> en
fin, cuando se ha establecido una costumbire
contraria á ría ¡lei.; ó cuando esl# ha caido
en .desuso. ( Lei 2'J8 del Estilo., y lei (6, ttít.
2,P. i.)
P. ¿Es lo mismo abrogacion que deroga
cion ?
R. Abrogacion es la abolicion total de la
lei ; y derogacion no es mas que la abolicion
de una parte de ella. Mas no siempre los au
tores usan de estas vozes con la debida dis
tincion.
P. Habéis dicho que el Derecho no solo se
compone de las leyes, sino tambien de las cos
tumbres. Qué es costumbre?
R. La práctica mui usad i y recibida que
ha adquirido fuerza de lei. P.ira que la cos
tumbre sea legitima y no corruptela , se re
quiere : que se haya introducida con el con
sentimiento tácito del legislador; que sea con
forme á la utilidad general ; y que se haya
observado por c spacio de diez años. La cos
tumbre legitima surte los efectos de la lei,
no solo cuando no hai lei en contrario , sino
24 DE LA JUSTICIA Y DEL DERECHO.
tambien para destruir la lei anterior que le
fuere opuesta , y para interpretar la dudosa :
de donde viene el decir que hai costumbre
fuera de la lei , contra la lei, y segun la lei.
(Leyes 4, 5, y 6, tít. 2, P. i. )
P. Cuáles son los objetos del Derecho?
R. Las personas, las cosas y las acciones.
LIBRO PRIMERO.

DE LAS PERSONAS.

TÍTULO I.

DEL ESTADO DE LOS HOMBRES.

P. Qué es persona ?
R. El hombre considerado en algun estado.
P. Qué es estado?
R. La calidad ó condicion, en virtud de la
cual gozan los hombres de diferentes dere
chos. (Lei i, tít. 23, P. i.)
P. De cuántas maneras es ?
R. De dos : natural y civil. Natural es el
que proviene de la naturaleza; y civil ol que
dimana de la voluniad de los hombres.
P. ¿Cómo se dividen las personas segun
el estado natural ?
T.
26 DE LAS PERSONAS.
R. En nacidas y por nacer ; en varones y
hembras ; y en mayores ó menores de edad.
P. ¿ Qué hai que advertir acerca de los
individuos que hallándose concebidos, no han
nacido todavía ?
R. Que gozan de ciertos derechos de los
nacidos , con tal que despues nazcan vivos ,
vivan veinte y cuatro horas, sean bautizados,
v se consideren legítimos. ( Leí 3,4 y ó , tít.
23 , P. 4 ; leí 8, tít. 33 , P. 7; y leí 2, tít. 5,
lib. 10, N. B.)
P, ¿ Tienen las hembras los mismos dere
chos que los varones?
/{. Sin duda alguna, salvo en aquellas co
sas en que las leyes las esceptúan ; pues la
palabra hombre comprende por lo comun á
las mujeres. (Leí 6, til. 33, P. 7; lei 4, tít. 4,
P. 3; leyes 20 y 21, tít. 1, P. i ; y ley TA,
tíL M.
P. ¿ Quiénes son mayores ó menores de
edad ?
i?. Mayores de edad son las personas r¡ue
pasan de veinte y cinco años , y menores las
que todavía no los han cumplido. Los meno
res son púberes ó impúberes : púberes son
los varones que han cumplido catorce años ,
y las hembras que han cumplido doce ; é im
DE LAS PERSONAS. 27
púberes los que no han llegado á estas eda
des respectivamente. Los que no tienen siete
años cumplidos, se llaman infantes; desde los
siete hasta los diez y medio , próximos á la
infancia ; y de aquí hasta los catorce ó dore,
próximos á la pubertad. Los menores gozan
del beneficio de la restitucion in integrum, y
de otros varios. (Lei 1, tít, 7, P. 2; lei h„tít.
iG,P. 4; lei 6, tít. 1 , P. 4; lei' 8, tít. 19,
P. 3; lei 2, tít. 19, P. 6.)
P. ¿ Cómo se dividen los hombres segun
el estado civil ?
tt. En libres ó esclavos ; nobles ó ple
beyos ; eclesiásticos- ó legos ; vecinos ó tran
seuntes; naturales ó estranjeros; padres ó
hijos de familia.
P. Quiénes son libres ?
1{. Los que pueden hacer lo que quieran ,
si no se les impide la fuerza ó el Derecho. De
estos se llaman ingenuos los que siempre han
tenido libertad; y libertos, los que la han
recibido de sus señores. (Lei 1, tít. 22, P. 4.)
P. Quiénes son esclavos?
/?. Los que están sujetos al dominio- de
otro, como si fuesen una propiedad suya. No
se conocen en España ; pero existen todavía
en las colonias. (Lei 1, tü. 21 , P. 4.)
28 DE LAS PERSONAS.
P. ¿ En qué consiste la potestad de los
señores sobre los esclavos ?
R. En el derecho de adquirir por medio de
ellos, y en el de hacer de los mismos lo que
les acomode , niénos matarlos ó lastimarlos.
( Leyes 5, 6 y 7, tit. 21 , P. 4.)
P. Cómo se hacen los esclavos ?
R, Hai unos que lo son de nacimiento por
nacer de nuestras esclavas, á no ser que estas
hubieran sido libres en la época de la concep
cion ó del parto, ó en el tiempo intermedio;
y otros que caen en tal estado, porque son
cogidos en la guerra , siendo enemigos de la
fé , ó porque se venden voluntariamente sien
do mayores de veinte años. (Leyes 1 y 2,
tit. 21, P. 3.)
P. ¿ Cómo salen los esclavos de su estado
de servidumbre?
R. Por la manumision , esto es , por la li
bertad que les diere su señor ; por alguna
accion gloriosa que hicieren ; y por la pres
cripcion de diez años entre presentes y veinte
entre ausentes, habiendo buena fé, y por la
de treinta sin buena fé. ( Leyes 1,2,3,4,5,
6 y 7, tit. 22, P. k.)
P. Quiénes son nobles ?
R. Los que gozan de cierta calidad de dis
DE LAS PERSONAS. 29
tincion que los eleva á una clase superior á
la regular ú ordinaria de los demas hombres.
P. Y plebeyos?
R. Los individuos del estado llano ó gene
ral. Pero la distincion de nobles y plebeyos
ha cesado ya casi enteramente con -el esta
blecimiento dela libertad política; y ya no
disfrutan aquellos sino de mui pocos de sus
antiguos privilegios. Todos los españoles son
ahora admisibles á los empleos y cargos pú
blicos , segun su mérito y capazidad ; y todos
están obligados á contribuir en proporcion
de sus haberes para los gastos del Estado.
(Const. de 1837, art. 5 y 6.)
P. Quiénes son eclesiásticos y legos ?
R. Eclesiásticos son los que en virtud do
las órdenes están dedicados al culto divino y
servicio del altar ; y legos -todos los que no
tienen órdenes clericales. Los primeros go
zan de ciertas esenciones y tienen su fuero
particular.
P. Quiénes son vecinos y transeuntes?
R. Vecinos son los que tienen casa y hogar
en un pueblo y contribuyen á las cargas ó
repartimientos ; bien que en sentido mas lato
se llaman tambien vecinos los que habitan de
asiento en algun lugar, como los estudiantes,
30 !>!-: LAS PERSONAS.
menestrales y criados. Transeuntes son los
que se hallan de paso en un pueblo sin do
miciliarle en él. Como solamente los vecinos
llevan las caigas concejiles, solo ellos deben
disfrutar de ciertos beneficios. (Lei 2, tít. 24,
P, 4 ; lei 6, til. 4» y ki X, tít. 5, Ub. 7, N. tí. ;
lei 32, tít. 2, P. 3, y su gl. 12 de Grog. Ló
pez. )
P Quiénes son naturales y estranjeros?
tí. Natural, ó por mejor decir, español,
es el que hubiere nacido dentro del reino,
siendo hijo de padres que ambos á dos,- ó á
lo menos el padre haya tambien nacido en el
reino, ó haya contraido domicilio en él, y
ademas haya vivido por tiempo de diez años;
como asimismo el que hubiere nacido casual
mente fuera del pais , siendo hijo de padre
natural de él ; el nacido en el reino de padre
y madre desconocidos ó inciertos ; y el es-
tranjero que haya obtenido caria de natura
leza. Estranjero es el que no se halla en nin
guno de estos casos. (Leyes 6 y 7 , y not. 4 y
5„#í, 14, lib. 1, N. tí., y lei 4, tít. 37-, lib. 1,
N. tí.)
Según la constitucion de 1837, « son espa
ñoles : I° Todas las personas nacidas en los
dominios de España ; 2° Los hijos de padre ó
DE LA PATRIA POTESTAD 31
madre españoles, aunque hayan nacido fuera
de España ; 3° Los estranjeros que hayan ob
tenido carta de naturaleza ; 4° Los que sin
ella hayan ganado vecindad en cualquier
pueblo de la monarquía. — La calidad de es
pañol se pierde por adquirir naturaleza en
pais estranjero, y por admitir empleo de
otro gobierno sin licencia del rei. »
Los eslranjeros no gozan de los derechos
políticos de los españoles , ni pueden tener
beneficios eclesiásticos ó pensiones sobre
ellos, ni oficios ó cargos públicos. (Lei l, tít.
23 ; lei 7, tít. 14, lib. 1 ; lei til. k, y leyes
2 y 3, tít, 5, lib. 1, N. &-)

-<*>-

TÍTULO H.
DE LA PATRIA POTESTAD.

P. Qué es patria potestad ?


fl. El derecho que compete al padre sobre
los hijos. ( Lei 1, tít. 17, P. 4. )
P. Cómo se adquiere la patria potestad"?
R. Por el matrimonio, por la legitimacion
y por la adopcion» ( Lei k, id.)
32 DE LA PATRIA POTESTAD.
P. Cómo se estingue ?
R. Por la muerte natural ó civil del padre ;
por la dignidad ó alto destino á que subiere
el hijo ; por la emancipacion ; por el matri
monio del hijo ; por el delito de incesto que
cometiere el padre ; y por la esposicion ó
abandono del hijo en algun hospital ú otro
paraje. (Leyes del tít. 18, P. 4; lei 47 de
Toro; lei 1, tít. 23, lib. 4, Fuero real; lei 4,
tít. 20, P. 4; y art. 25, lei 5, tít. 37, lib. 7,
N. R.)
P. En qué consiste la patria potestad?
R. En la facultad de dirigir y corregir á
los hijos, y en la de adquirir por medio de
ellos. (Leyes 3 y 5 , tít. 17, P. 4 ; lei 18, tít.
18, P. 4; y lei 9, tít. 8, P. 7.)
P. ¿ Qué es lo que adquiere el padre por
medio del hijo?
R. La plena propiedad del peculio profec-
ticio y el simple usufructo del adventicio,
quedando para el hijo la plena propiedad del
castrense y del casi-castrense. ( Lei 7, tít. 4,
lib. 3, Fuero real; y leyes 5, 6 y 7, tít. 17, P. 4.)
P. Qué son estos peculios?
R. Se llama peculio el pequeño caudal que
posee el hijo de familia con separacion de los
bienes de su padre. El peculio castrense com
DEL MATRIMONIO. 33
prende las adquisiciones hechas en el servi
cio militar ; y el casi-castrense las que se ha
cen' en la carrera de la toga ó en el ejercicio
de las artes liberales. El profecticio consiste
en lo que adquiere el hijo por razon del pa
dre ó con los bienes de este; y el adventicio
abraza todos los bienes que vienen al hijo de
cualquier otro lado que de los bienes del pa
dre, como por su trabajo ó industria, ó por
donacion de cualquier persona. (Leyes 5, 6
y 7, tít. 17, P. 4.)
P. ¿ Conserva el padre toda su vida el usu
fructo del peculio adventicio del hijo?
R. Solamente lo conserva hasta que el hijo
se casa ; y si emancipa al hijo , retiene para
sí la mitad del usufructo , en premio de la
gracia que le concede. (Lei 15, tít. 18, P. 4,
y lei 48 de Toro.)

TÍTULO III.
DEL MATRIMONIO.

P. Qué es matrimonio?
R. El contrato de sociedad perpetua que
3t> DEL MATRIMONIO.
ferencia de culto, cuando el uno es católico
y el otro inüel ; y el crimen de adulterio ó de
homicidio del primer cónyuge que hubiese
tenido uno de los contrayentes, cometido con
esperanza ó promesa de casamiento. (Leyes 6,
11, 12, 15, 16, 17 y 19, tít. 2, P. 4; lei 5,
tít. 4 , i». 4 ; leyes 39 y 41, tít. 6, P. 1 ; lei 2 ,
tü. 8, P. 1 ; Conc. trid., sess. 24, de ref. mat.)
P. ¿ Toda especie de parentesco hace nulo
el matrimonio ?
R. El parentesco de consanguinidad , que
es el que tienen las personas que descienden
de una raiz por efecto de cópula legitima ó
ilegítima , es impedimento dirimente en la li
nea recta sin limitacion de grados , y en la co
lateral hasta el cuarto grado inclusive. El
parentesco civil, que es el que resulta de la
adopcion , impide y anula el matrimonio en
tre el adoptante y el adoptado, aunque se
disuelva la adopcion ; entre el adoptado y los
hijos carnales del adoptante , miéntras dure
la adopcion ; entre el adoptado y el cónyuge
del adoptante, y recíprocamente entre el
adoptante y el cónyuge del adoptado, sea que
se disuelva ó que dure la adopcion. El pa
rentesco espiritual, por último , que es 1 que
proviene de los sacramentos de bautismo !y
DEL MATRIMONIO. 37
confirmacion, hace nulo el matrimonio del
bautizante ó confirmante y padrino ó madri
na con el bautizado ó confirmado y sus pa
dres. (Leyes 1,4^6, tit. 6, jP. 4; leyes 1yS,
tit. 7, P. 4; Conc. trid. , sess. 24, de reform.
matr., cap. 2.)
P. Qué es línea?
R. El orden ó serie de los parientes , ó per
sonas que descienden de una raiz ó tronco.
(Leiü, tit. 6, P. 4.)
P. De cuántas maneras es?
R. Dedos: recta y colateral. La primera
abraza los ascendientes y descendientes, y la
segunda todos los parientes que proceden de
una raiz comun , sin descender los unos de
los otros , como los hermanos , tios , primos ,
sobrinos , etc. ( Lei 2 , tit. 6 , P. 4. )
P. Qué es grado?
R. El escalon ó paso de distancia que hai
de un pariente á otro.
P. Cómo se cuentan los grados?
R. En la línea recta se conforman el Dere
cho civil y el canónico , pues ambos cuentan
en ella tantos grados cuantas son las genera
ciones. Pero se diferencian en la colateral ,
porque el civil sigue la misma regla que en
la recta ; mas el canónico solo cuenta las ge-
*
38 DEL MATRIMONIO.
neraciones que hai desde el un pariente has
ta el tronco , sin bajar despues hasta el otro,
bien que sube desde el mas remoto, cuando
la línea es desigual. Así es que el tio está con
la sobrina en tercer grado por el Derecho ci
vil , y en segundo por el canónico. La compu
tacion canónica se sigue en los casamientos ,
y. la civil en todo lo demas. (Leyes 3 y 4, tít.
6, P. 4.-)
P. Qué es afinidad ?
R. Un vínculo semejante al parentesco,
que media entre el uno de los cónyuges y los
parientes del otro ; de modo que en el mis
mo grado que uno es pariente de la mujer
por consanguinidad, lo es del marido por afi
nidad. (Lei 5, tít. 6, P. 4.)
P. ¿ Hasta qué grado es impedimento di
rimente la afinidad ?
R. Hasta el cuarto inclusive , si nace de
cópula lícita; y solo hasta el segundo tambien
inclusive, si proviene de cópula ilícita. (Lei 5,
tít. 6, P. 4 ; cap. 8, extr. de consang. et affi-
nit.; Conc. trid., sess. 24, de reform. matr.,
cap. 4. )
P. ¿Cuál es el impedimento de pública
honestidad ?
R. £1 que causan los esponsales válidos
DE LOS EFECTOS DEL MATRIMONIO. 39
y el matrimonio legítimo que no ha llegado
á consumarse. Aquellos impiden el casamien
to solo dentro del primer grado ; .mas este
lo impide hasta el cuarto inclusive. (Conc.
lateran., cap. 8; lib. 4, tít. 14; Conc. trid.,
sess. 24, de reform. matrim., cap. 3.)
P. ¿ El matrimonio es perpetuo ó tempo
ral ?
J{. Perpetuo ; de modo que si está consu
mado , solo se disuelve por la muerte ; y si
no lo está , se disuelve tambien por la profe
sion religiosa de cualquiera de los dos cón
yuges. Mas pueden separarse los cónyuges
en cuanto á la cohabiiacion, mediante sen
tencia judicial por razon de adulterio, sevicia
ó trato cruel, y algunas otras causas que in
ducen peligro en la vida ó en la moral. (Leyes
del tit. 10, P. 4. )
-offo-

TÍTULO IV.
DE LOS EFECTOS DEL MATRIMONIO.

P. i Cuáles son los efectos que produce


el matrimonio ?
R. Los siguientes : I° la libertad ó esen
40 DE LOS EFECTOS
cion de la patria potestad : 2° la autoridad
del marido sobre la mujer con respecto á sus
contratos y administracion de sus bienes :
3a la legitimidad de los hijos concebidos du
rante el matrimonio , y aun de los concebi
dos ántes siendo reconocidos: 4° la patria
potestad sobre los hijos : 5° la comunion de
bienes. (Leyes 47, 54, 55 y 56 de Toro; lei 5,
tit. 2, P. 3; lei 1, tit. 8, P. 4 ; leyes 3 y 4, tit.
17, P. 4; y leyes del tit. 4, lib. 10, N. R.)
P. Qué comunion es esta?
R. Cierta sociedad legal que queda esta
blecida entre los cónyuges, por la cual se
hacen comunes de los dos por mitad los bie
nes gananciales , aunque el uno hubiese traí
do mas capital que el otro. (Leyes 1 y 3, tit.
3, lib. 3, Fuero real, ó leyes 1 y 3, tit. 4,
lib. 10, N. R.)
P. Cuáles son los bienes gananciales?
R. Todos los que el marido y la mujer, ó
cualquiera de ellos, durante el matrimonio y
viviendo en uno, adquieren por compra ó
mediante su trabajo é industria , como tam
bien los frutos de los bienes propios que ca
da uno trajo al matrimonio, y de los que ad
quiere para sí por algun título lucrativo, co
mo herencia , legado, donacion. (Leyes 1,2,
DEL MATRIMONIO. 41
3, 4 y 5, tit. 4, 10, N. R. y leyesd, 9 y
11, 4, lib. 3, íwero rea¿. )
P. ¿Cómo se estingue esta sociedad ó co
munion de bienes?
R. Cesa por la muerte de uno de los cón
yuges ; por la confiscacion de los bienes de
cualquiera de los dos; por renuncia de la
mujer; por separacion legítima ; y por adul
terio de la mujer; pero en este caso sola
mente en perjuicio de ella. ( Leyes 5, 9 , 10 y
11, tit. 4, lib. 10, N. R.;y leí 5, tit. 17,
P.7.)
P. ¿ Cuáles son las cargas de esta socie
dad?
R. Las deudas contraidas durante el ma
trimonio ; las dotes de las hijas ; y las dona
ciones propter nupiias de los hijos. ( Lei 14,
tit. 20 , lib- 3 , Fuero real; lei 207 del Estilo ;
y lei 53 de Toro, ó lei 4 , tit. 3 , lib. 10, N. R.)
P. i Quién tiene el dominio de los bienes
gananciales?
R. El dominio de estos bienes es comun
de ambos consortes durante la sociedad; pe
ro solo el marido puede enajenarlos entre
vivos , aun sin el consentimiento de la mujer,
con tal que no lo haga con ánimo de perju
dicar á esta. (Leyes 1 , i y 5, tit. 4, lib. 10,
42 DE LAS DOTES,
jV. R- ; Molina, de primog., lib. 2 , cap. 10 ; y
Gutierrez, lib. %,pract. qucest. 121.)

-°$£>-

TÍTULO V.

DE LAS DOTES , DONACIONES Y ARRAS.

P. Qué es dote?
Jl. El caudal que entrega la mujer ú otro
por ella al marido , para sostener las cargas
del matrimonio. (Lei 1, tit. M , P. 4.)
P. De cuántas maneras es?
i?. Se divide en adventicia y profecticia;
en estimada é inestimada ; y en necesaria y
voluntaria.
P. ¿ Cuáles son las dotes adventicia y pro
fecticia?
R. Dote adventicia es la que se compone
de bienes propios de la mujer, ó dados por
la madre ó algun pariente que no sea de la
línea recta paterna, ó algun estraño. Dote
profecticia se llama la que sale de los bienes
del padre ó de algun pariente de la línea
recta paterna. (Lei 2, tit. 11 , P. 4.)
DONACIONES Y ARRAS. 43
P. ¿ Cuáles son las dotes estimada é ines
timada?
R. Estimada es la que consiste en bienes
cuyo precio se señala , é inestimada la que
consta de fincas que no se justiprecian. La
primera se hace propia del marido , quien
solo estará obligado á volver el precio ; mas
la segunda debe restituirse en las mismas
cosas. (Lei 16, tít. 11, P. k.)
P. ¿Cuáles son las dotes necesaria y volun
taria ?
R. Necesaria es la que da el padre y el
abuelo paterno ; porque aquel debe darla á
la hija, aunque sea rica , y este á la nieta, si
fuese pobre. Voluntaria es la que da la madre
ú otro por su voluntad ; bien que tambien la
madre puede ser apremiada, cuando ella es
rica y el padre pobre. (Leyes 8 y 9, tít, 11 ,
P. k.)
P. Cuál debe ser la cantidad de la dote ?
R. Debe regularse por la de los bienes del
que está obligado á darla. (Leyes 5, 6, 7 y 8,
tít. Z,lib. 10, N. R.)
P. ¿ A quién pertenecen los frutos de la
dote?
R. Al marido miéntras dura el matrimo
nio , debiendo partirse á prorata los del año
44 1)E LAS DOTES,
en que se disuelve. (Leyesl, 18, 21, 25, 26,
27 y 28, tít. 11 , P. 4 ; y lei 23 , tít. 31, i\ 3.)
jP. Puede el marido enajenar la dote ?
R. Puede enajenar la dote estimada ; pero
no la inestimada : bien que á vezes no se hace
la estimacion de las fincas dotales , sino con
objeto de que se sepa qué es lo que debe res
tituir el marido , en caso de que perezcan ó
se deterioren por su culpa. (LeyesT, 18, 19
y 20, tit. 11, P. 4.)
i5. Y la mujer ¿puede vender la dote?
R. La mujer no puede vender mas que
hasta la mitad de la dote inestimada con li
cencia de su marido , segun costumbre esta
blecida ; pero parece que se tienen par váli
das aun las enajenaciones escesivas , si la
mujer las confirmare con juramento. (Gu
tierrez, dejuram. confirm., cap. 1 ;y Larrea,
alegac. 35, ra. 26.)
P. ¿Qué hará la mujer cuando ve que el
marido disipa la dote ?
R. Puede pedir que se la restituya , ó se
deposite en persona de confianza. (Lei. i,
tít. 9 , P. 3 ; y lei 29 , tít. i 1 , P. 4. )
P. Cuándo debe el marido restituir la dote?
i?. En caso de muerte ó separacion ; á no
ser que hubiesen pactado otra cosa , ó que la
DONACIONES Y ARRAS. .45
mujer hubiese cometido adulterio, ó que fuere
costumbre en algun lugar el que el marido
gane la dote, muerta la mujer; pues en estos
tres casos se queda el marido con ella, no
habiendo hijos. (Leyes 23, 26, 30 y 31 , tit.
11, P. 4 ; leyes 50 y 51, tit. 14, P. 5; y lei 15,
tit. 17, P. 7.)
P. ¿ Cuánto tiempo se concede al marido
para hacer esta restitucion?
R. Si los bienes fuesen raizes , debe res
tituirlos desde luego ; pero si fuesen mue
bles , dentro de un año. (Lei 31, tit. 11,
P. 4.)
P. i Qué bienes son los que se llaman pa
rafernales?
R. Los que tiene la mujer ademas de los
dotales. Su administracion pertenece al ma
rido, si la mujer se los entregó al efecto; y
tanto para la devolucion de estos como de los
dotales, están hipotecados todos los que po
see él mismo. (Lei 17, tit. 11, P. 4.)
P. ¿Qué se entiende por donaciones es
ponsalicias?
R. Los regalos que ántes del matrimonio
suele hacer el esposo á la esposa, y al con
trario. No pueden esceder de la octava parte
de la dote. (Lei 3, tit. 11 , P. 4; leyes 3, 6,
46 DE LA LEGITIMACION,
7 y 8, tít. 3, y iei2,tít.S, lib. 10, ¿V. i?. )
P. Qué son las arras?
R. La cantidad que el varon promete á la
mujer por razon del casamiento con ella ; y
no puede esceder de la décima parte de sus
bienes. Su dominio es de la mujer; pero si se
le hubiere hecho tambien donación esponsa
licia, solo podrá escoger una de las dos co
sas. (Lei 1, tít. 11, P. 4; leyes 1,2, 5 y ü,
tít. 2 , lib. 3 , Fuero real; lei 9, tít. 12 , lib* 3,
Fuero real; leyes 50 , 51 y 52 de Toro, ó leyes
i, 2 y 3, tít. 3, lib. 10, N. R.)
P. Qué es donacion propter nuptias?
R. La que hacen los padres á los hijos pa
ra que puedan sostener las cargas del matri
monio. (Leyes ky 5, tít. 3, lib. 10, Nov. Rec.)

-<>&>-

TÍTÜLO VI.
DE LA LEGITIMACION, ADOPCION Y
EMANCIPACION.

P. Qué es legitimacion?
R. Un acto especial que produce el efecto
de hacer legítimo al hijo natural ; y se veri
ADOPCION Y RMANCIPACION. 47
fica de dos maneras , por subsiguiente matri
monio, ó por rescripto del rei. Por subsi
guiente matrimonio , cuando uno despues de
haber tenido algun hijo natural , se casa con
la mujer en quien le hubo. Por rescripto de)
rei , cuando este á solicitud de los padres ó
de los mismos hijos Ies concede esta gracia.
(Lei 1 , tit. 13, y lei 4, tit. 15 , P. 4 ; leyes 2 y
17, tit. 6 , lib. 3 , Fuero real. )
P. i Desde cuándo surte su efecto la legi
timacion ?
R. Desde que se contrae el matrimonio ó
se espide la real gracia. (Lei 1 , tit. 18, y lei
4, tit. 15, P. 4.)
P. Qué es adopcion ?
R. El acto de prohijar ó recibir como hijo
al que naturalmente lo es de otro. (Lei i, tit.
16, P. 4. )
P. De cuántas maneras es ?
R. De dos : adopcion en especie , y arro
gacion.
P. Qué es adopcion en especie ?
R. El prohijamiento del que se halla en la
potestad de su padre natural ; y se hace ante
cualquiera juez , bastando el consentimiento
tácito del hijo, el cual pasa á la patria potes
tad del adoptante, solo cuando este es aseen
48 DE LA LEGITIMACION,
diente suyo. (Leí 7, tít. 7, y leyes 1, 4, 9 y 10,
tít. 16, i>. 4; fe* 91, í*í. 18, jP. 3.)
P. Qué es arrogacion ?
R. El prohijamiento de uno que no tiene
padre ó está fuera de la patria potestad. El
arrogado ha de ser mayor de siete años, debe
estar autorizado al efecto por el rei, y pasa
á la patria potestad del arrogador. (Lei 7,
tít.T, y leyes 1, 4, 6, 7 y 8, tít. 16, P. 4,
fe* 92, tít. 18, P. 3.)
P. Quién puede adoptar ?
R. Todo nombre libre que esté fuera de
la patria potestad, con tal que esceda al
adoptando en diez y ocho años de edad, y
pueda tener hijos naturalmente. La mujer no
puede adoptar sino con otorgamiento del rei,
y solo en el caso de haber perdido algun hijo
en batalla. (Leyes 2, 3 y 4 , tít. 16, P. 4.)
P. Qué es emancipacion?
R. La renuncia que hace el padre de la pa
tria potestad que tiene sobre el hijo. Esta re
nuncia podrá ser voluntaria ó forzosa. Será
voluntaria , cuando se hiciere por comun
acuerdo de padre é hijo ; y forzosa , cuando
se obligare al padre á verificarla por tratar al
hijo con crueldad , por hacer prostituir á las
hijas, ó por aceptar algun legado que se le
ADOPCION Y EMANCIPACION. 49
dejare con esta condicion. (Leyes 15, 16, 17,
18 y 19, ttí. 18, P. 4; y lei 93, tít. 18, P. 3.)
P. Ante quién se hace ?
R. Ante el juez ordinario, quien da cuenta
de ello á la superioridad con remision del
espediente para que la declare. (Lei 4, tít. 5 ,
lib. 10, iV. R.)
P. ¿Cuáles son ahora los trámites que de
ben observarse en los espedientes de legiti
maciones y emancipaciones ?
R. El que tratare de conseguir alguna de
dichas gracias, debe presentar la solicitud
documentada para el rei en la audiencia ter
ritorial, que la dirigirá al juez de primera
instancia competente, el cual abrirá un espe
diente informativo, oirá por via de instruc
cion sin figura de juicio á las personas ó cor
poraciones que puedan tener interes en el
asunto, admitirá las justiñcaciones que los
interesados ofrecieren, las recibirá en su ca
so de oficio, y devolverá á la audiencia el
espediente original con su informe. La au
diencia, oyendo al fiscal, examinará si el
espediente se halla debidamente instruido;
no estándolo , ampliará convenientemente la
instruccion ; y cuando esta se halle completa,
elevará igualmente original el espediente al
50 DE LA TUTELA
gobierno con la censara fiscal, informando
por su parte lo que se le ofrezca y parezca.
(Lei de 14 de abril de 1838 , y real orden de
19 del propio mes y año. )

título vn.
DE LA TUTELA Y CURATELA Ó CURADURÍA.

P. Qué es tutela?
R. La autoridad que se confiere á una per
sona, primariamente para la educacion, crian
za y defensa del huérfano menor de catorce
años , y de la huérfana menor de doce ; y ac
cesoriamente para la administracion y go
bierno de sus bienes. (Lei i, ttt. 16, P. 6. )
P. De cuántas maneras es?
R. De tres : testamentaria , legítima y da-
t ra.
P. Cuál es la tutela testamentaria?
i?. La que ejerce la persona nombrada por
el testador en su testamento. (Lei 2 , ttt. 16 ,
P. 6.)
P. ¿ Quién puede nombrar tutor testamen
tario?
Y CUBATELA. 51
R. En rigor solo el padre , porque este de
recho dimana de la patria potestad ; pero si
le nombra la madre ó algun estraño, insti
tuyendo heredero al huérfano , subsiste con
la confirmacion del juez- (Leyes 3, 6 y 8, tít,
16, P. (>. )
P. Quién puede ser tutor?
R. Todos lus que son capazes de desem
peñar el cargo ; y por ello están esceptuados
el sordo-mudo , el loco , el pródigo , el me
nor y la mujer : bien que pueden serlo la ma
dre y la abuela , si quisieren , con tal que no
se casen y renuncien el beneficio que tienen
las mujeres de no poderse obligar por otro.
(Leyes 4 y 5, tít. 16, P. 6.)
P. Cuál es la tutela legítima?
R. La que por disposicion de la lei ejerce
el pariente mas cercano , á falta de tutor tes
tamentario. (Leyes 2, 9 y 12, tít. 16, P. 6. )
P. Cuál es la tutela dativa?
R. La que ejerce la persona nombrada
por el juez , á falta de tutor testamentario ó
legítimo. ( Leyes 2 y 12, tít. 16 , P. 6.)
P. Cómo se acaba la tutela ?
R. De parte del pupilo, por la pubertad ó
adopcion ; y de parte del tutor, por la muerte
civil, por la escusa ó remocion, y por el
52 DE LA TUTELA
cumplimiento de la condicion ó del tiempo.
{Leyes 3 y 21, tít. 16, P. 6.)
P. Qué es curatela?
j?. La facultad de cuidar de los bienes y
negocios del que no se halla en estado de
gobernarlos por sí mismo , sea por razon de
la edad , como el menor de veinte y cinco
años desde los catorce ó doce , segun su ca
lidad de varon ó hembra , sea por algun vicio
ó defecto del cuerpo ó del ánimo, como el
demente ó pródigo. (Lei 13, tít. 16, P. 6.)
P. ¿Puede ser obligado el menor á recibir
curador?
i?. Solo puede ser obligado en el caso de
que tenga que comparecer en juicio por plei
to que moviere ó le fuere movido. (Lei 13,
tít. 16 , JP. 6. )
P. Cómo se acaba la curatela?
R. Del mismo modo que la tutela , como
igualmente cesando la causa que la motivó ;
bajo el supuesto de que la edad que da fin á
la curaduría, no es la de la pubertad, sino la
de veinte y cinco años.
P. i Están obligados así el tutor como el
curador á admitir el cargo de tales?
/?. El tutor legítimo es libre en aceptarle
ó desecharle ; pero todos los demas tienen
Y CURATELA. 53
que tomarle, á no ser que no le puedan des
empeñar de un modo conveniente por su po
breza, achaques, ignorancia, edad de setenta
ó mas años , ausencia por causa del Estado ,
enemistad capital con la familia del huérfano,
ó pleito con el mismo, número de cinco hijos,
oficio publico, profesion de las artes libe
rales , ó alguna otra causa que se considere
suficiente. (Leyes 2 y 12, tít. 16; y leyes 1,
2, 3 y 4, tít. 17, P. 6; lei 3, art. 4, tít. 29,
lib. 7, ¿V. R.)
P. ¿ Puede quitarse el cargo al tutor ó cu
rador ?
R. £1 que administra fraudulenta ó negli
gentemente la tutela ó curatela , ó el que por
su conducta moral dé motivo de desconfian
za , debe ser removido por el juez , ó bien de
oficio , ó bien mediante acusacion de cual
quiera del pueblo, y aun del mismo huérfano,
si es mayor de catorce años , con tal que to
me consejo de sus parientes. (Leyes 1, 2, 3
yk,tit.l8,P.G.)
P. í Cuáles son las obligaciones del tutor
ó curador ?
R. Dar fianzas, á no ser testamentario;
prestar juramento; formar inventario; cui
dar de la educacion del huérfano ; adminis
5.
54 DE LA RESTITUCION
irar sus bienes , sin poder enajenar los raizes
ó muebles preciosos sino con decreto de juez;
defender los derechos del pupilo ; autorizar
sus contratos ; y rendir cuenta de su admi
nistracion. (Leyes 9, 15, 16, 17, 18, 19, 20
y 21 4 tít. 16, P. 6 ; lei 4, tít. 5 , P. 5 ; lei 94,
tít. 18, P. 3; Greg. López, en la gl. 5 de la
lei 9, tít. 16, P. 6; lei 23, ít'í. 13, P. 5; lei 1,
fif. 12, 10, N. R.; lei 4, tít. 3, tft. 4,
ÍWro-./ttág'o.)
P. ¿ Se señala algun sueldo al tutor ó cu
rador?
R. El lutor ó curador tiene derecho á per
cibir la decima parle de los frutos naturales,
industriales y civiles de los bienes del pupilo
ó menor, deducidas las espensas. (Lei 3, tít.
3, lib. 4, Fuero-Juzgo; lei 2, tít. 7, lib. 3,
Fuero real; y Gutierrez de tutel. , P. 3 , c. 23,
y 37,')
-•»>-

: -•-<- TÍTULO VIH.


DE L V RESTITUCION IN INTEGIWM.

P- l Qué es restitucion in integrum ó por


entero ?
JN 1NTEGRUH. 55
R. Un beneficio legal , por el que el menor
que ha padecido lesion en algun acto ó con
trato, logra que se repongan las cosas en el
estado que lenian ántes. (Lei 1, tü. 19, P. 6;
y lei 1, tít. 25, P. 3.)
P. Cuándo tiene lugar esta restitucion ?
R. Cuando el menor ha recibido daño por
su inesperiencia ó debilidad de juicio, por
culpa de su tutor ó curador , ó por engaño
de otro , así en los actos judiciales como en
los estrajudiciales , sin que la impida el haber
intervenido decreto de juez. [Proemio y le
yes 2, 3 y 5, tit. 19, P. 6 ; leyes 1y2, tít. 25,
P. 3; lei i, tít. 13, P.3.)
P. ¿ Cuándo puede el menor hacer la de
manda de restitucion ?
R. No solo durante su menor edad, sino
tambien dentro de cuatro años despues de
cumplidos los veinte y cinco. (Lei 8, tít. 19,
P. 6. )
P. ¿ En todos los casos se concede a\ me
nor el beneficio de la restitucion ?
R. Se niega en los delitos; en los casos
fortuitos ; en los términos dilatorios que se
llaman fatales; cuando en la sentencia se
tiene el remedio de la nulidad; cuando el
deudor le pagó por mandamiento del juez ;
56 DE LA RESTITUCION IN INTEGRUM.
cuando al tiempo del contrato dijo maliciosa
mente que era mayor , y por su aspecto pa
recía serlo ; cuando celebró el contrato del
modo que cualquiera hombre advertido lo
hubiera celebrado. (Leyes 4 y 6, tít. 19, P. 6 ;
leyes 1 y 2 , tít. 25, P. 3 ; lei 4, tít. 14, JP. 5 ;
lei 2, tít. 13, 10; lei i, tít. 21, «6. 11;
lei 1, ft'í. 12, lib. U,N.R.)
P. ¿ Qué otros gozan de este mismo privi
legio?
R. Las iglesias, el fisco, los concejos, los
pueblos y las universidades , dentro de cua
tro años contados desde que recibieron el
daño ; como igualmente los que otorgaron al
gun contrato perjudicial por fuerza ó miedo
grave, y los que pierden alguna cosa por
prescripcion , estando ausentes en romería ,
estudios , cautiverio , guerra ó comision de la
república. A estos se cuenta el cuadrienio
para pedir la restitucion , desde el dia de su
regreso , y á sus herederos desde el dia <Je la
muerte de aquellos en el lugar en que se ha
llaban ausentes. (Lei 10, tít. 19, P. 6 ; lei 56,
tít. 5 , P. 5 , y su glosa 1.a; lei 10, tít. 23, y
lei 28, tít. 29 , P. 3; y lei 4 , tít. 34, lib. 11 ,
N. R.)
r

LIBRO SEGUNDO.
DE LAS COSAS.

TÍTULO I.

DE LA DIVISION DE LAS COSAS, V DE LOS


MODOS DE ADQUIRIR SU DOMINIO.

P. Qué se entiende por cosa?


R. Todo lo que puede ser objeto de una
controversia en Derecho ; ó lo que puede ser
de alguna utilidad al hombre.
P. ¿ Qué diferencia hai entre cosas y bie
nes ?
R. El nombre de cosas tiene mas estension
que el de bienes. Aquel se aplica á todo lo que
existe física ó moralmente , escepto el hom
bre , á todo lo que puede poseerse ; y este á
todo lo que se posee y se halla en nuestro pa
58 DIVISION DE LAS COSAS
trimonio. Así que el agua , los árboles , los
animales salvajes son cosas, míéntras nadie
los posee ; pero luego que alguno se apodera
de ellos , pasan á la clase de bienes.
P. Cómo sü dividen las cosas?
R. Primeramente se dividen en cosas que
están en nuestro patrimonio, cuales son las
que pertenecen á particulares; y en cosas
que están fuera de nuestro patrimonio, como
las comunes , las públicas , las universitarias
ó concejiles, y las de ninguno ó que á nadie
pertenecen. En segundo lugar, se dividen en
corporales é incorporales : las corporales se
subdividen en muebles é inmuebles : las mue
bles en tangibles y no fungibles. ( Lei 2 , tít.
28, y lei 1 , tít. 30, P. 3.)
P. Cuáles son las cosas comunes ?
R. Las que no siendo privativamente de
ninguno en cuanto á la propiedad , pertene
cen á todos en cuanto al uso ; como el aire,
el agua corriente , el mar y sus playas. (Lei 3,
tít. 28, P. 3.)
P. Cuáles son las públicas ?
R. Las que en cuanto á la propiedad per
tenecen á un pueblo ó nacion, y en cuanto al
uso á todos los individuos de su distrito ; co
mo los rios , riberas , puertos y caminos pú
Y MODOS DE ADQUIRIRIAS. 59
blicos. (Lei 6, tit. 28 , P. 3 , y gl. 4 de Greg.
López )
P. i Cuáles son las universitarias ó conce
jiles?
/?. Las que en cuanto á la propiedad, per
tenecen á una ciudad, villa ó lugar, y en
cuanto al uso, á todos y cada uno de sus veci
nos; como las fuentes, montes, dehesas y
pastos. (Lei 10, tit. It , P. 3, y lei 9, tit. 28,
P. 3.) '
P. Cuáles son las particulares t
R. Las que perienecen at dominio de al
guna persona ó cuerpo. ( Lei 2 , tit. 28, P. 8.)
P. ¿ Cuáles son las corporales é incorpora
les, muebles é inmuebles, fungible» y no
fangibles?
R. Corporales son las que se hallan en la
esfera de los sentidos, como la casa, el campo,
el vestido; é incorporales las que no existen
sino intelectualmente ó no pueden tocarse,
como las servidumbres y todos los derechos.
Muebles, las que sin alteracion ninguna pue
den llevarse de una parte á otra , ya se mue
van por sí mismas , como los animales; ya no
puedan mudar de sitio sino por una fuerza
estraña , como las mesas , los frutos de la
tierra, etc.; é inmuebles ó raizes, las que no
60 DIVISION DE LAS COSAS
pueden trasladarse de una parte á otra, como
los edificios, los campos , etc. Fungibles son
las que se consumen por el primer uso que se
hace de ellas, como el trigo y el vino, y no
fungibles las que no se consumen con el pri
mer uso que se hace de ellas , como un ca
ballo , un vestido , etc. ( Lei 1 , tít. 30, y lei 4,
tít. 29, P. 3; proemio y lei 1 , tít. 17, P. 2;
leyes 28 y 29, tít. 5, jP. 5, y los autores.)
P. Cuáles son las cosas de ninguno?
R. Las que no son susceptibles de propie
dad particular; y se subdividen en sagradas,
religiosas y santas. Sagradas son las destina
das al servicio divino , como los cálizes y las
vestiduras sacerdotales : religiosas , los luga
res bendecidos para enterrar en ellos los ca
dáveres ; y santas , las que mediante alguna
sancion están puestas al abrigo de la violacion
de los hombres , como los muros y las puer
tas de las ciudades. (Leyes 2, 12, 13 y 14,
tít. 28, P. 3.)
P. Qué es dominio?
R. El poder que cada uno tiene de usar y
disponer libremente de lo que es suyo ; ó mas
bien , el derecho ó facultad de cscluir á los
otros del uso de alguna cosa.
P. De cuántas maneras es ?
Y MODOS DE ADQUIRIRLAS. 61
R. De dos : pleno y ménos pleno. Dominio
pleno es la reunion de la facultad de disponer
y del derecho de usar en una misma perso
na ; y ménos pleno el que está repartido en
tre dos dueños , de los cuales el uno tiene la
nuda propiedad de la cosa, y el otro goza del
usufructo. El dominio ménos pleno se llama
directo con respecto al que solo tiene la nuda
propiedad con facultad de exigir alguna pen
sion en reconocimiento de su derecho ; y se
denomina útil con respecto al que tiene el
usufructo ó la facultad de percibir la utilidad
de la cosa.
P. Es lo mismo dominio que propiedad?
R. Propiedad y dominio son una misma co
sa; pero la palabra propiedad no solo se apli
ca al derecho, sino tambien á la cosa en que se
tiene el derecho. Ademas se llama propiedad
y tambien nuda propiedad el dominio que no
va acompañado del usufructo ; y plena pro
piedad el dominio que va acompañado del
usufructo. Es decir , que nuda propiedad es
el derecho de disponer ó concurrir á dispo
ner de una cosa, salvo el derecho de disfru
tarla que pertenece á otra persona ; y plena
propiedad es el derecho de disponer y de go
zar de la cosa.
<
62 DIVISION DE LAS COSAS
P. ¿ Cuáles son los medios de adquirir el
dominio ó propiedad de las cosas ?
R. Por el Derecho civil son varios , como
veremos mas adelante; mas por el Derecho
de gentes son la ocupacion, la accesion y la
tradicion ó entrega.
P. Qué es ocupacion?
R. La aprehension, toma ó apoderamiento
de las cosas que carecen de dueño , con áni
mo de hacerlas propias.
P. Cuáles son sus especies?
R. La caza , la pesca y la invencion ó ha
llazgo.
P. Qué es caza ?
R. La ocupacion de las fieras y de las aves
que no pertenecen á nadie. Los animales
mansos no pueden ser jamas objeto de la ca
za ; ni tampoco los amansados, sino solo en el
caso de que hubiesen vuelto á su primitivo
estado de libertad , dejando la costumbre de
ir y volver á los abrigos de sus dueños. (Le
yes 11, 19, 20,22-?/ 23, tít. 28 , P. 3.)
P. ¿ Basta que un cazador haya herido al
ave ó á la fiera, para hacerla suya ?
R. En r'gor es tambien necesaria la ocu
pacion ; pero ha prevalecido la costumbre de
que nadie pueda cogerla miéntras la persiga
Y MODOS DE ADQUIRIRLAS. 63
el que la hirió. (Lei 21, tit, 28, P. 3 ; y lei 16,
tit. 4, lib. 3, Fuero real. )
P. i Se puede cazar libremente en tierras
de propiedad particular ?
R. Se puede cazar en las tierras abiertas
que no estén labradas ó que estén de rastrojo.
( Decr. de 3 de mayo de 1834, art. 4.)
P. ¿ De quién es la caza que cayere del aire
en tierra de propiedad particular, ó entrase
en ella despues de herida?
i?. Siendo la tierra abierta, y no estando
labrada ó estando de rastrojo , pertenece al
cazador ; y en todos los demas casos al dueño
ó arrendatario de la tierra. ( Lei 17, tit. 28,
P. 3, y decri de 3 de mayo de 1834, art. 7.)
P. Qué es peso ?
i?. La ocupacion de los pez es en el mar,
en los rios ó en las lagunas.
P. ¿ Se puede pescar libremente en las la
gunas y en los rios?
S. Nadie puede pescar en las aguas estan
cadas , ni aun en las corrientes , sino los due
ños de las tierras que les sirven de linde.
( Decr. de 3 de mayo de 1834. )
P. Qué es invencion ó hallazgo?
/?. La ocupacion de las cosas que por su
naturaleza no pertenecen á nadie , como los
64 DIVISION DE LAS COSAS
productos del mar que se encuentran en las
playas, ó de las que han abandonado sus
dueños con el ánimo de no contarlas mas en el
número de sus bienes. En esta clase se consi
dera el hallazgo de un tesoro , esto es , de un
depósito antiguo de dinero ó alhajas, cuyo
origen no se conoce. Si el inventor lo descu
bre en su propio fundo , lo hace todo suyo ;
pero si lo halla por casualidad en fundo aje
no , solo adquiere la mitad, quedando la otra
mitad para el propietario del fundo , sea este
un particular ó el Estado. (Leyes 5 y 45, tit.
28, P. 3; y lei de 9 de mayo de 1835. )
P. Qué es accesion 1
R. La adquisicion de todo lo que producen
nuestras cosas , y de lo que se les une acce
soriamente.
P. De cuántas maneras es?
R. Natural , industrial y mista , segun que
nuestras cosas reciben aumento por obra de
sola la naturaleza, ó por nuestra industria,
ó por la naturaleza y el artificio juntamente.
P. ¿ Cuáles son las especies de la accesión
natural ?
i?. El parto de nuestros animales; la isla
formada en el rio, la cual se hace propia de los
dueños de los predios mas cercanos por am
Y MODOS DE ADQUIRIRLAS. 65
bos lados ; el aluvion , esto es , el aumento de
terreno que el rio va incorporando insensi
blemente á nuestro campo : la avulsion , esto
es , la fuerza del rio , que agrega á mi campo
por un accidente una porcion del campo ve
cino, la cual se hace mia, si el dueño no la
reclama ántes de consolidarse la union ; y el
abandono que un rio hace de su cauce , el
cual se reparte del mismo modo que la isla.
(Leyes 25, 26, 27 y 31, tít. 18, P. 3.)
P. i Cuáles son las especies de la accesion
industrial ?
R. La conjuncion , la especificacion y la
conmistion.
P. Qué es conjuncion?
R. La union de una cosa ajena á la nues
tra. En este caso es regla general que lo ac
cesorio sigue á lo principal. Así es que el dia
mante cede á la sortija en que se ha incluido,
el brazo á la estatua, el adorno , por precioso
que sea, al vestido en que se ha puesto, y el
edificio al suelo en que se ha levantado ; pero
la pintura no cede al lienzo, ni la escritura
de importancia debe ceder al papel ajeno en
que se ha estendido. Es claro que el que se
queda con la cosa ajena unida á la suya, deb«
pagar al dueño su estimacion, habiendo bue-
c.
G6 DIVISION DE LAS COSAS
na fe. ( Leyes 35, 36, 37, 38, 41 y 42 , iit. 28,
P. 3; y leí i6,tít. 2,P. 3.)
P. Qué es especificacion?
i?. La formacion de una nueva especie con
materia ajena. Si esta nueva especie puede
reducirse á su primer estado, como por
ejemplo, un voso hecho de una barra de oro;
pertenece al propietario de la materia; pero
si no puede volver á su primera forma, como
t i vino hecho de uvas ajenas, queda de aquel
que la hizo ; con la obligacion de reembolsar
al otro en ambos casos el precio de la materia
ó del trabajo, si habia buena fe. (Leí 33,
tít. 28, P. 3.)
P. Qué es conmistion ?
R. La mezcla ó confusión de cosas áridas ó
líquidas de diferentes dueños. Las cosas ári
das que se mezclan, no se hacen comunes,
si la mezcla no se verificó por voluntad de los
propietarios ; mas las cosas liquidas que se
confunden, quedan comunes por necesidad ,
ues que no pueden separarse. ( Lei 34, tít,
$,P. 3.)
P. ¿ Cuáles son las especies de la accesion
mista?
R. La plantacion de árboles, la siembra
de granos y la percepcion de frutos de fundo
Y MODOS DE ADQUIRIRLAS. 67
ajeno por el poseedor de buena fe. Lo que se
planta ó siembra en un fundo , cede al due
ño del suelo, deducidos gastos. Pero el que
posee un campo ajeno con buena fe , hace
suyos los frutos industriales que percibió
mas no los existentes ni los naturales. ( Leyes
39, 40, 42, 43 y 44, tít. 28, P. 3.)
P. Qué es tradicion ó entrega ?
R. La traslacion de la posesion.
P. De cuántas maneras es?
R. Real, simbólica , de breve mano y de
larga mano. La real consiste en la dacion ó
traslacion efectiva de la cosa de mano en
mano, ó en la introduccion en ella, cuando
es un edificio ó un campu. La simbólica, en
dar el símbolo ó señal de la cosa por la cosa
misma, como las llaves ó algunos instrumen
tos* La de breve mano, en la ficcion de que
se entrega una cosa que el adquirente posee
ya por otra causa. La de larga mano, en
señalar ó mostrar á la vista la cosa que es
objeto de la entrega. ( Leyes 46, 47 y 48, tít.
28, P. 3 ; iei¡es 1, 6, 7, 8 y 9, tít. 30, P. y
lei 7, tít. 4, P. 5. )
68 DE LA PRESCRIPCION.

TÍTULO Ií.

DE LA PRESCRIPCION.

P Qué es prescripcion ó usucapion 1


R. Un modo de adquirir por el Derecho ci
vil la propiedad de una cosa en virtud de ha
berla poseido todo el tiempo marcado por la
lei. ( Lei 1, tít. 29, P. 3. )
P. ¿Cuál es el fundamento de la prescrip
cion?
R. Evitar la incertidumbre perpetua de
las propiedades , y poner un término á los
pleitos.
P. ¿ Cuáles son los requisitos indispensa
bles para la prescripcion?
R. Justo titulo; buena fe ; posesion conti
nuada ; tiempo tasado por la lei ; y capazidad
de la cosa. ( Leyes del tít. 29, P. 3. )
P. Qué es justo título ?
R. La causa idónea para trasladar el do
minio, como una venta, una donacion, un
legado. (Leyes 9, 14, 15 y 18, tít. 29, P 3. )
P. Qué es buena fe ?
R. La persuasion de que se posee legitima
DK LA PRESCRIPCION. 69
mente ; la cual debe durar hasta el comple
mento del tiempo necesario para la prescrip
cion. ( Leyes 9 y 12, tít. 29, P. 3, y Greg.
López gl. 1.° de d. lei 12. )
P. Qué es posesion ?
R. La tenencia ó goze legal de una cosa
con el ánimo de escluir á los otros de su uso.
Esta posesion ha de ser continua, sin que se
interrumpa natural ni civilmente. (Lei 1, tít.
30, P. 3; leyes 9 y 29, tít. 29, P. 3; lei 5, tít.
15, lib. 10 , y lei 6, tít. 8, lib. 11. N. R- )
P. i Cuál es el tiempo establecido por la
lei?
R. En las cosas muebles , tres años ; y en
las raizes, diez años entre presentes y veinte
entre ausentes. En las del patrimonio de las
ciudades y en las raizes de las iglesias, cua
renta años ; y en las de la iglesia romana ,
ciento. La posesion se prescribe por un año
y un dia. Tambien se prescriben las acciones ,
segun se dirá en su lugar. (Leyes 9, 18, 20,
7 y 26, tít. 29, P. 3 ; y lei 3, tít. 8, lib. 11,
N. R. )
P. ¿En qué consiste la capazidad do la
cosa?
R. En que la cosa sea de las que pueden
prescribirse; pues hai algunas que son im
70 DE LAS SERVIDUMBRES.
prescriptibles , como las sagradas , religiosas
y santas, las concejiles, las forzadas ó ro
badas, la jurisdiccion suprema, etc. ( Leyes
6, 7, 4 y 8, tit. 29, P. 3. )

TÍTULO IH.
DE LAS SERVIDUMBRES.

P. Qué es servidumbre?
R. Un derecho á que esiá sujeta la cosa
ajena en utilidad nuestra ó de un fundo que
nos pertenece. ( Leí i, tit. 31, P. 3. )
P. De cuántas maneras es?
R. De dos , personal y real. La personal es
la que se debe á la persona, como el usu
fructo, el uso y la habitacion. La real ó pre
dial es la inherente al predio ó fundo. ( Leyes
lf/20, tit. 31, P. 3. )
/'. Se subdivide la servidumbre real?
R. Se subdivide en rústica y urbana. Rús
tica es la que se debe al predio rústico, es
to es, á un fundo ó heredad. Urbana la que
se debo al predio urbano , esto es, al que
sirve de habitacion. ( Lei 1, tit. 31, P. 3. )
DE LAS SERVIDUMBRES. 71
P. i Cuáles son las principales especies de
servidumbres rústicas?
R. La senda, iter, que consiste en el dere
cho de pasar por la heredad de otro para ir
á la mía, y suele ser dos piés de ancha. La
carrera, actus, que comprende el derecho
de pasar con bestias de carga ó con alguna
pequeña carreta, y suele tener cuatro piés
de ancha. El camino, vía, que abraza el
derecho de pasar cuanto fuere menester, y
suele tener la anchura de ocho piés en lo rec
to y diez y seis en las vueltas. ( Lei 3, tít. 31,
P. 3.)
P. ¿Cuáles son las mas frecuentes entre las
servidumbres urbanas ?
R. El derecho de edificar sobre la pnr-ed ó
columna del vecino : el de abrir ventana en
la pared del mismo para dar luz á mi casa :
el de echar ó no echar á su casa el agua que
cae en mis tejados ; y el de prohibirle que le
vante mas su casa ó haga cualquier obra que
quite la luz ó las vistas á la mia. ( Lei 2, tít.
3!, P. 3. )
P. ¿Cómo se constituyen las servidum
bres?
R. Por contrato ; por (estamento ; por pres
cripcion ; y por disposicion del juez en los
72 DE LAS SERVIDUMBRES.
juicios divisorios. (Lei 14, tít. 31, Partida 3. )
P. Cómo se estinguen?
R. Por la consolidacion ó reunion de los
predios sirviente y dominante en una misma
mano ; por la cesion ó remision espresa ó tá
cita ; por el no uso en la forma y tiempo que
se requiere para la prescripcion; y en fin
por la pérdida de la cosa. ( Leyes 16, 17, 18
y 19, tít. 31, P. 3. /
P. Habéis dicho que las especies de las
servidumbres personales son el usufructo, el
uso y la habitacion. Qué es usufructo?
R. El derecho de usar de ta cosa ajena
y aprovecharse de todos sus frutos sin dete
riorarla. ( Ley'iO, tít. 31, P. 3.)
P. Qué debe hacer el usufructuario?
R. Dar caucion de que cuidará de la cosa
como si fuese suya propia ; y de que la res- .
tituirá acabado que sea el usufructo. ( Lei 20,
tít. 31, P. 3. )
P. Cómo se constituye el usufructo ?
R. Por contrato ; por testamento ; por pres
cripcion ; y por el juez en los juicios diviso
rios. ( Leyes 14 y 20, tít. 31, P. 3; y lei 10,
tít. 15, P. 6.)
P. Cómo se acaba?
R, Por la consolidacion, que se verifica
DE LAS SERVIDUMBRES. 73
cuando el usufructuario adquiere la propie
dad de la cosa de que solo tenia el usufructo ;
por la remision ; por la prescripcion ó el no
uso; por la muerte ó destierro perpetuo ; por
la cesion hecha por el usufructuario á un
tercero , pues entonces se consolidaría con la
propiedad; y por la destruccion de la cosa
fructuaria. (Leyes 17, 24, 25 y 26, tít. 31 ,
P. 3.)
P. Qué es uso?
R. El derecho de usar de la cosa ajena
con cierta limitacion. ( Lei 20, tít. 31, P. 3. )
P. En qué se diferencia del usufructo ?
R. En que el usufructuario se aprovecha
de todos los frutos , y el usuario no puede
tomar sino los precisos para sus necesidades
cotidianas : el usufructuario debe pagar las
cargas y tributos de la cosa fructuaria ; mas
no el usuario , á no ser que absorba toda la
utilidad. (Leyes 20, 21, 22 y 23, tít. 31,
P. 3.)
P. Cómo se adquiere y estingue el uso ?
R. Del mismo modo que el usufructo.
( Leyes 14 y 24, tít. 31, P. 3.)
P. Qué es habitacion?
R. El derecho de habitar gratuitamente en
casa ajena. (Lei 27, tít. 31, P. 3.)
74 DE LOS TESTAMENTOS.
P. ¿ Qué diferencia se encuentra entre la
habitacion y el uso de una casa ?
R. El que tiene derecho de habitacion «a
una casa, puede alquilarla y vivir ea otra
parte ; mas el que solo tiene el uso , debe ha
bitar la casa por si mismo , y apénas puede
recibir algun huésped. La habitacion se dife
rencia tambien del uso en que 110 se acaba
sino por la muerte ó remision. (Ze¿27, tlt.
31 , P. 3. )

TÍTULO IV.
DE LOS TESTAMENTOS.

P. Qué es herencia?
fí. La sucesion en los bienes y acciones
que tenia alguno al tiempo de su muerte.
P. De cuántas maneras es?
R. De dos : testamentaria, que se confiere
por testamento; y legítima, que se confiere
por la k\. (Proem. y lei Z,tít. 13, P. 6.)
P. Qué es testamento?
R. La manifestacion ó declaración que ha
ce una persona de su última voluntad en la
DE LOS TESTAMENTOS. 75
forma prevenida por las leyes, disponiendo
de sus bienes para despues de su muerte.
(Leii, tít. 1. P. 6.)
P. De cuántas maneras es?
R. Solemne y privilegiado. Solemne es el
que se celebra con las formalidades que pres
criben las leyes ; y privilegiado , el que no
exige mas requisito sino que conste la volun
tad del otorgante con dos testigos ó por una
simple escritura de su puño, cual es el mili
tar. (Leyes 1 , y 2, tít. 18, lib. 10, N-. R; leí
4 , tít. 1, P. 6 ; ordenanzas de ejército art. 4 ,
trat. 8, tít. 11 ; céd. de 24 de octubre de 1778,
ó sea lei 8, tít. 18, lib. 10, N. R.)
P. ¿Cómo se divide el testamento so
lemne?
R. En escrito ó cerrado , y mincupativo ó
abierta
P. Cuál es el testamento abierto?
R. El que se otorga de viva voz ante escri
bano y tres testigos vecinos del lugar ; ó ante
cinco testigos vecinos del lugar sin escribano ;
ó ante tres testigos vecinos del lugap sola
mente, si no pudieren ser habidos en el pue
blo cinco testigos ni escribano ; ó bien ante
siete testigos, aunque no sean vecinos ni con
curra escribano. Si el otorgante es ciego, han
76 DE LOS TESTAMENTOS.
de intervenir cinco testigos y escribano , fir
mando uno de ellos por el ciego ; mas si no
hubiere escribano, deben concurrir ocho tes
tigos, escribiendo uno de ellos el testamento.
Pero es de advertir, que cuando se hace el
testamento sin escribano , tiene que pedir el
heredero que se examine á los testigos, y se
declaren sus deposiciones por testamento,
protocolizándose en los registros del escri
bano. (Leyes 1 y 2, tít. 18, lib. 10, N. R.;
leí 11, tit. 5, lib. 2, Fuero-Juzgo ; y lei 4, tít. 2,
P. 6.)
P. Cuál es el testamento cerrado ?
R. El que despues de escrito por el testa
dor ú otra persona de su confianza , se en
trega cerrado al escribano, quien estiende en
su cubierta el otorgamiento y lo firma con el
testador y siete testigos, vecinos ó no vecinos
del lugar, debiendo saber escribir un testigo
á lo ménos para firmar por los que no sepan.
El ciego no puede hacer testamento cerrado.
Muerto el testador manda el juez la apertura
del testamento á peticion de cualquier intere
sado. (Lei 3 de Toro, ó lei 2, tit. 18, lib. 10,
N. R. ; lei 3, tít. 2, P. 6 ; Greg. López, gl. 2.' de
la lei 3, tít. 12, P.6;y Ant. Gómez, en la lei 3,
de Toro, n. 51.)
DE LOS TESTAMENTOS. 77
P. ¿ Quiénes pueden ser testigos en un tes
tamento?
R. Todos, ménos los que están declarados
incapazes , cuales son : el menor de catorce
años; la mujer ; el esclavo ; el mudo ; el sor
do; el ciego; el loco; el pródigo; el conde
nado por cantares ó libelos infamatorios,
hurto , homicidio ú otro delito semejante ; el
moro ó judio ; el ascendiente ó descendiente
del testador; el heredero y sus parientes
dentro del cuarto grado. (Lei 9, tít. 5, lib. 3,
Fuero real; leyes 9 y 11, tít. 1, P.6;y lei 14,
tít. 16, P. 3. )
P. Quiénes pueden hacer testamento?
R. Todos , ménos el varon menor de ca
torce años y la hembra menor de doce , el
loco , el pródigo , el mudo ó sordo , que no
saben escribir ni pueden hablar, y el religio
so profeso. (Lei 6, tít. 5, y lei 11, tít. 6, lib. 3,
Fuero real; leyes 13, 16 y 17, tít. 1 , P. 6 ; y
lei 8, tít. 21, P. 1.)
P. ¿Se puede dar comision á otro para
hacer testamento?
R. Sin duda ; y esto es lo que se llama tes
tar por comisario. Pero se ha de otorgar el
poder con las mismas solemnidades que se
requieren para el testamento abierto; y el
7.
78 DE LA INSTITUCION'
comisario no puede hacer mas que pagar las
deudas del testador, y repartir por su alma el
quinto de sus bienes, cuando el poder es ge
neral , debiendo entregar la herencia al he
redero legítimo ó al nombrado en el poder.
( Leyes 31, 32, 33, 34, 35, 36, 37 y 39 de Toro,
ó sea leyes i, y sig. tit. 19, y lei 43, tít. 20,

-<#>-

TÍTULO V.

DE LA INSTITUCION DE HEREDERO.

P. Qué es institucion de heredero?


R. El nombramiento que hace el testador
de una ó mas personas que le sucedan en los
bienes y derechos que dejare al tiempo de su
muerte. (Lei 1, tít. 3, P. 6. )
P. ¿ Es necesaria la institucion de here
dero para que valga el testamento ?
R. No lo es ; pues si no la hai , pasa la he
rencia al heredero legítimo , quien paga las
mandas y cumple lo demas que hubiere dis
DE HEREDERO. 79
puesto el testador. (Lei i, tít. 18, lib. 10,
N. M.)
P. Quiénes pueden ser herederos?
R. Todos los que no están escluidos por la
lei. Los escluidos son : los desterrados para
siempre; los condenados á trabajos perpe
tuos en las minas ; los cuerpos ó sociedades
formadas contra Derecho ; y el clérigo ó fraile
que hubiere confesado al testador en su últi
ma enfermedad , asi como tambien sus pa
rientes, iglesia ó religion. {Leyes 2, 4 y 5, tít.
3, P. 6 ; y lei 15, tü. 20, lib. 10, N. R. )
P. ¿ Puede el testador instituir herederos
á quienes mejor le parezca?
R. No puede hacerlo siempre , porque si
tiene hijos ó descendientes legítimos, está
obligado á dejarles todos sus bienes, escepto
la quinta parte, de la cual puede disponer
segun le acomode ; y si muriere sin descen
dientes, debe dejar á sus ascendientes del
mismo modo todos sus bienes, escepto la ter
cera parte, de la cual podrá disponer á su ar
bitrio : en inteligencia de que no puede gra
var con condiciones ni de otro modo los bie
nes que tiene que dejar á estos herederos for
zosos. Solo pues á falla de descendientes y
ascendientes , podrá dejar la herencia á las
80 DE LA INSTITUCION
personas que quisiere. (Leyes 6, 28 y 30 de
Toro, 6 leyes 1, 8 y 9, tít. 20, lib. 10, iV. R.)
P. ¿Son tambien herederos forzosos los
hijos ilegítimos?
i?. Los naturales legitimados por subsi
guiente matrimonio no se diferencian de los
legítimos : los legitimados por rescripto del
príncipe deben ser nombrados herederos,
cuando no hai legítimos , con preferencia á
los ascendientes ; y los no legitimados pue
den ser preferidos tambien á los ascendientes
por el padre, y deben serlo por la madre. Los
hijos espurios tienen derecho á ser preferidos
del mismo modo por la madre á los ascen
dientes , cuando no hai hijos legítimos, á mé-
nos que sean adulterinos. Pero es de adver
tir que así los naturales como los espurios ,
cuando quedan escluidos de la herencia, pue
den reclamar el quinto de los bienes de sus
padres ó madres, ó al ménos los alimentos.
(Leyes ly% tít. 13, P. 4 ; lei 2, tít. 6, lib. 3 ,
Fuero real; leyes 9, 10 y 12 de Toro, ó sea
leyes 5, 6 y 7, tít. 20, lib. 10, ¿V. R. ).
P. ¿Quiénes son los hijos naturales y los
espurios ?
R. Naturales son los nacidos de hombre y
mujer, que al tiempo de la concepcion ó na
»E HEREDERO. 81
cimiento podían casarse justamente sin dis
pensa. Espurios son los nacidos fuera de ma
trimonio de padres que no podian casarse en
ninguna de dichas dos épocas. (Lei 11 de
Toro, ó lei i, tít. 4, lib. 10, N. E.; lei 3, tít.
ib, y lei 1, tít. 15, P. 4.)
P. ¿Cómo debe ser designado el here
dero?
E. Por su nombre y apellido , ó por seña
les indudables, ó refiriéndose á codicilo ó
memoria en que esté espresado ; pero no por
injurias ó dicterios especiales que le deshon
ren ó infamen, pues en este caso seria nulo el
nombramiento. (Leyes 6 y 10, tít. 3. P. 6.)
P. ¿ Cómo ha de hacerse la institucion de
heredero?
E. Puede hacerse puramente ó bajo con
dicion, desde ó hasta tiempo cierto. Si se hace
bajo condicion , es preciso por lo comun que
esta se cumpla ántes de entregar la herencia
al instituido. ( Leyes del tít. 4, P. 6, é ind. de
la lei 1 , tít. 18, lib. 10, N. E., por la cual se
destruye la lei 15, tít. 3, P. 6. )
P. ¿Cómo podrá el testador dividir su he
rencia, si nombrase varios herederos?
E. Del modo que mejor le parezca; pues
cuando no bai herederos forzosos, tiene la li
82 DE LA INSTITUCION DE HEREDERO.
bertad de distribuir sus bienes entre las per
sonas y en la forma que mas le acomode.
P. ¿Qué será si el testador instituye uno 6
varios herederos, señalándoles cierta parle
determinada de la hacienda, sin disponer del
resto de ella?
R. Cada heredero llevará lo que se le hu
biere designado, y el resto de los bienes pa
sará á los herederos abintestato; pues como
entre nosotros no rige ya el principio tan fa
moso de los romanos de que nadie podia mo
rir en parte testado y en parte intestado , no
tiene ya lugar, sino cuando el testador así lo
quiera, el célebre derecho de acrecer, que
consistia en adquirir uno de los herederos la
porcion de que no se habia dispuesto ó que
no habia querido aceptar su compañero.
(Lei i, tít. 18, tíb. 10, N. R.)
P. ¿Y si las partes en que los herederos
han sido instituidos sobrepujan á la heren
cia , como en el caso de que el testador dejase
á Pedro la mitad, á Juan la tercera, y á Diego
la cuarta parte?
R. Entonces se les rebajará el escedente á
prorata. Supongamos, por ejemplo, que la
herencia importa 12.00Ü reales, cuya mitad
son 6.000, la tercera parte 4.000, y la cuarta
DELAS SUSTITUCIONES. 83
3.O00, ,q«e en todo componen 13.00*. Divi
diendo la herencia en trece partes , se verá
que cada uaa de estas es 923 re. y algunos
maravedís : multiplicando esta cantidad por
seis, qnees la mitad correspondiente á Pedro,
le tocarán 5.538 reales y pico de maravedís :
haciendo luego la multiplicacion de la misma
cantidad por cuatro, que es la tercera fiarte
perteneciente á Juan , dará 3.692 reales y
maravedís : últimamente multiplicándola por
tres, que es la cuarta parte señalada á Diego,
resultarán 2.769 reales y pico de maravedís.

TÍTULO VI.

DE LAS SUSTITUCIONES.

P. Qué es sustitucion?
R. Una segunda institucion de heredero,
para que á falta del primer nombrado, entre
el sustituto á disfrutar la herencia (Leí 1, tít.
5, i». 6.)
P. Cuántas especies hai de sustitucion?
R. Seis, á saber : sustitucion vulgar, pu-
84 DE LAS SUSTITUCIONES.
pilar, ejemplar, compendiosa, recíproca y fi
deicomisaria. (Lei 1, tít. 5, P. 6.)
P. Cuál es la sustitucion vulgar?
R. La que puede ser hecha por cualquier
testador, y á cualquier heredero , en estos tér
minos : « Nombro á Pedro mi heredero, y si
no lo fuere, á Antonio ; » ó bien tácitamente
de este modo : « Nombro por mis herederos á
Pedro , Antonio y Juan , para que el que me
sobreviva, sea mi heredero. » (Leyes 1, 2, 3
y 4, tít. 5, P. 6.)
P. Cuál es la pupilar?
R. La que hace el padre al hijo impúber
que tiene en su poder, para el caso de que
muera ántes de llegar á la pubertad. (Leyes
i, 5, y 10, tít. 5, P.6.)
P. Cuál es la ejemplar?
R. La que pueden hacer los ascendientes,
así maternos como paternos , á los hijos de
mentes , fatuos , pródigos y demas incapazes
de testar, sean púberes ó impúberes, para el
caso de que muriesen en tal estado. (Lei 11,
tít. 5, P. 6.).
jP. Cuál es la compendiosa ?
R. La que en breves palabras contiene di
ferentes instituciones, por los varios tiempos
en que pueden verificarse ; de modo que esta
DE LAS SUSTITUCIONES. 85
especie de sustitucion puede comprender la
vulgar, la pupilar y cualquiera otra , segun
la capazidad del que la hace y del que la re
cibe. (Lei 12, tít. 5, P. 6.)
P. Cuál es la recíproca?
R. La que hace el testador disponiendo que
sean mutuamente sustitutos entre sí los mis
mos que instituye herederos. (Lei 13, tít. 5,
P. 6.)
P. Cuál es la fideicomisaria?
R. Aquella en que el testador encomienda
á la fidelidad del heredero nombrado que res
tituya á otro la herencia. (Lei 14, tít. 5, P. 6.)
P. Habiendo nombrado el testador tres ó
cuatro herederos, y sustitutos de estos, si
muriese cualquiera de los primeros, ¿serán
Mamados los segundos?
R. No hai duda : en caso de morir uno de
los instituidos , entrarán los sustitutos á re
partirse la porcion vacante ,* á ménos que los
instituidos en primer lugar sean personas que
escluyan á los sustitutos, segun puede pre
sumirse del afecto y mente del testador. Así
sucedería, si instituyese á sus descendientes,
y les diese sustitutos estraños ; pues siendo
verosímil que mirase con predileccioná los
primeros, muerto alguno de ellos sin suce
8
86 DE LA DESHEREDACION.
sion , le heredarán sus hermanos , porque se
consideran recíprocamente sustituidos ; lo
cual no se presume en los demas casos.

TÍTÜLO VII.
DE LA DESHEREDACION.

P. Qué es desheredacion?
R. La privacion de la herencia que se nos
debe por la lei. (Lei 1, tit. 7, P. 6. )
P. A quién se debe la herencia ?
R. A los hijos , escepto la quinta parte ; y
en defecto de hijos, á los padres, escepto la
tercera. (Lei 1, tit. 4, lib. 4, Fuero-Juzgo ;
lei 10, tít. 5, y lei 7, tit. 12, lib. 3, Fuero
real; leyes 6 y 28 de Toro.)
P. ¿Se debe tambien á los hermanos, á
falta de descendientes y ascendientes ?
R. No se les debe; pero no se les puede
preferir una persona estraña de mala vida ó
infame de hecho ó de derecho, á no ser que
hayan maquinado la muerte del testador, ó
le hayan acusado de delito grave , digno de
muerte ó perdimiento de miembro, ó le
DE LA DKSHÍREUACIO». Wt
bayan hecho perder la mayor parte de su»
bienes ó procurado que la perdiese. (Lei 12,
tít. 7, P. 6. )
P. i De cuántos modos puede suceder que
el testador prive injustamente de la herencia
ásns descendientes ó ascendientes legítimos? *
R. De dos : primero , por preterición , es
to es, nombrando á un estraño sin haeer
mencion de ellos ; y segundo , por eaclution
sin justa causa. En el primer caso es nulo el
testameato en cuanto á la institucion de here
dero; y en el segundo se rescinde por la
queja de inoficioso testamento. (Lei 10, tít. 7,
y lei 1, tít. 8, P. 6, combinadas con la lei t,
- tít. 18, lib. 10, Ifc R~)
P. ¿Cuáles son las justas causas por las
que el padre puede desheredar al hijo?
R. £1 hijo que pasa de diez años y medio,
puede ser desheredado : — si i»juria grave
mente á su padre ; — si le pone las manos
para prenderle ó herirle: — si maquina su
muerte ; — si le acusa de algun delito grave ,
esccpto el de alta traicion; — si le hace per
der gran paite de su hacienda; — si le aban
dona estando demente, cautivo ó preso; —
si le impide hacer testamento; — si tiene ac
ceso con su madrastra ; — si se hace lidiador,
88 DE LA DESHEREDACION.
juglar ó cómico ; — si apostata ; — si se casa,
siendo menor, sin su licencia ; — y si la hija
menor se entrega al libertinaje, no queriendo
complacer á su padre casándose. ( Leyes 2 ,
4, 5, 6 y 7, ttt. 7, P. 6.)
* P. ¿Cuáles son las justas causas para des
heredar á los padres?
R. Los padres pueden ser desheredados :
— por maquinar la muerte del hijo ; — por
acusarle de algun delito grave ; — por aban
donarle estando demente ó cautivo ; — por
impedirle hacer testamento ; — por tener ac
ceso con su nuera ; — por herejía ; — y por
maquinar el padre la muerte de la madre , ó
esta la de aquel. (Lei 11 , ttt. 7, P. 6.)
P. ¿Cómo deberá hacerse la deshereda
cion?
R. Nombrando al desheredado por su
nombre ó por otra señal cierta , y espresan
do alguna de las justas causas que hai al
efecto. (Leyes 2 y 3, ttt. 7, P. 6.)
P. ¿Quién ha de probar la causa, si la
niega el desheredado?
R. El testador ó el heredero instituido.
(Leyes 8, 10 y 12, ttt. 7, P. 6.)
título vm.
DE LA REVOCACION Y RESCISION DE LOS
TESTAMENTOS.

P. i Puede el testador revocar su testa


mento?
R. Puede revocarlo y variarlo cuantas ve-
zes guste hasta la muerte. (Lei 2, tít. 5, lib. 3,
Fuero real; y lei 25, tít. i, P. 6. )
P. ¿Cuándo se entiende que el testador
revoca su testamento ?
R. Cuando de propósito y no por casuali
dad lo rasga , ó raya las firmas , ó lo inutiliza
de otro modo ; y cuando haciendo otro tes
tamento, anula espresamente el primero, ó
toma disposiciones contrarias á las conteni
das en él. Por lo demas pueden ser válidos
dos ó mas testamentos de una misma perso
na, con tal que no sean contrarios. (Leyes 21,
22, 23, y 24, tít. i,%y lei 39, tít. 9, P. 6. )
P. ¿ Se puede rescindir ó invalidar el tes
tamento de un difunto?
R. El juez puede rescindirlo mediante la
querella de testamento inoficioso, que es un
recurso en que se pide la invalidacion del
8.
90 REVOCACION DE LOS TESTAMENTOS.
testamento, por estar hecho contra los ofi
cios de piedad que se dehen mutuamente pa
dres é hijos. ( Proemio y lei i, tít- 8, P. 6. )
P. ¿ Quiénes pueden intentar esta que
rella?
R. Los ascendientes y descendientes des-
heredados por caus.i falsa ó sin espresion de
causa, y los hermanos desheredados en la
propia forma , ú omitidos, si se les ha prefe
rido alguna persona de mala vida ó infamada.
(Leyes 1 y 2, tít. 8, P. %.)
P. Cuánto tiempo dura esta accion ?
R. Cinco años , de modo que pasado este
término no es oido el querellante. (Lei 4, tít.
8, P..ft.)
P. Cuáles son los efectos de la rescision?
R. Que la herencia va á los herederos abin-
testato, conservándose empero los legados y
mejoras. ( Lei 7, tít. 8, P. 6 ; y lei 24 de To
ro, ó sea lei 8, tít. 6, lib. 10, N. R. )
P. ¿ Qué sucederá, si los ascendientes ó
descendientes, han sido omitidos en el testa
mento con nombramiento de otro heredero ,
ó sin tal nombramiento?
R. Entonces no se rescinde el testamento ,
sino que en el primer caso es radicalmente
nula la institucion de heredero , y en el se
DE LA ADMISION BE LA HERENCIA. 9P
gundo se entienden nombrados con el eargo
de pagar las mandas, en cuanto no les mun-
güen su legítima. ( Lei 10, tít. 1, y lei 1, tít. 8,
P. 6; lei U tít. 18, Ub. 10, N. R.; Matienzo,
en la glosa 10 de d. lei 1, tít. 18; Ayllon ad
Gom. , 1 Variar- cap. ti..)
P. ¿Y si nace algun hijo despues de otor
gado el testamento en que no se hace: men
cion de él ?
R. Entra á percibir su legítima, esto es, la
parte que le corresponde, sin necesidad de ¡a
querella. Es cierto que la lei 20, tít. 1 , P. 6,
dice que por el nacimiento del hijo postumo
se quebranta el testamento ; pero parece que
segun el espíritu de la citada lei 1, tít. 18, lib.
10, N. R. , tal quebrantamiento debe enten
derse solo en cuanto á la herencia.

TÍTULO- IX.
DE LA ADMISION DE LA HERENCIA.

P. ¿Qué se requiere para adir ó admitir


la herencia?
R. Ante todo es ueces irio que el heredero
92 DE LA ADMISION
sea capaz, esto es, que no haya tenido impe
dimento legal al tiempo de la muerte del tes
tador, siendo heredero forzoso; y al tiempo de
la institucion, de la muerte y de la admision,
siendo estraño. ( Lei 22, tít. 3, P. 6. )
P. i Cómo debe hacerse la admision de la
herencia?
R. Espresamente, declarando su voluntad
con palabras ; ó tácitamente , manifestándola
con hechos. (Leyes 11, tít. 6. P. 6. )
P. Cómo se repudia?
R. Por la renuncia espresa , ó por la omi
sion de los actos de heredero, ó por hacer en
ella ó en sus bienes contratos como estraño y
no como heredero. (Lei 18, tít. 6, P. 6. )
P. i Cuáles son las cargas á que se sujeta
el que adquiere una herencia?
R. Todas aquellas con que la herencia está
gravada, como deudas y mandas, aun cuando
importen mucho mas que los bienes de la mis
ma. (Proemio y leyes 5 y 10, tít. 6, P. 6. )
P. ¿ No le ofrece la lei algun medio para
precaverse de tal peligro?
R. Le concede el derecho de tomarse tiem
po para deliberar, si le conviene admitir ó
desechar la herencia con vista de su importe
y de sus cargas ; y el beneficio de inventario,
DE LA HERENCIA. 93
mediante el cual , hecho en debida forma, no
queda obligado á pagar á los acreedores del
difunto mas de lo que montare la herencia.
(Proemio y leyes 5 y 10, tít. 6 , P. 6.)
jP. ¿ Cuánto tiempo se concede para deli
berar?
S. El rei puede conceder al efecto un año;
y el juez nueve meses , cuyo término puede
coartar hasta cien dias. (Leyes 1, 2, 3 y 4,
tít. 6, P, 6.)
P. Cómo debe hacerse el inventario?
R. Debe empezarse y acabarse dentro de
tres meses , y si los bienes estuvieren en di
versos lugares distantes unos de otros , den
tro de un año; con intervencion de escribano
público ; asistencia de tres testigos vecinos
del pueblo ; y citacion de los legatarios y de-
mas interesados. ( Leyes 5, 6, 7, 8 y 9, tít 6,
P. 6.)

-offo-
t
TITULO X.
DE LAS MEJORAS DE TERCIO Y QDINTO,
Y DE LA COLACIOií.

P. ¿ Están obligados los padres á repartir


sus bienes con igualdad entre todos los hijos ?
R. Tienen facultad para dejar á cualquiera
de ellos, ademas de lo que corresponda ,por
legítima , la quinta ó la tercera parte de sus
bienes, ó una y otra juntamente: lo cual se
llama mejorar, y produce una diminucion
proporcional en las legitimas. Mejora es pues
la ventaja que un ascendiente concede á al
guno de sus descendientes legítimos, seña
lándole mas parte d<; herencia que á los otros.
(Lei 9, tít 5, lib. 3, Fuero real; leyes 214,
213 y 200 del Estilo; leyes 17 á 27 de Toro,
ó leyes del tü. 6, lib. 10, N. R.)
P. De qué modo se hacen estas mejoras?
R. En testamento ú otra última voluntad,
ó por contrato entre vivos , ya sea espresa-
mente manifestándolo así con palabras for
males, ya tácitamente haciendo alguna do
nacion por mera y espontánea liberalidad;
pero de manera que sea un solo tercio y
SE LAS MEJORAS Y DE tA COLACION. 95
quinto del que se disponga en vida ó muerte,
y no dos. Las hijas no pueden ser mejoradas
por contrato entre vivos , sino solo en testa
mento. (Leyes 17, 26 y 28 de Toro; y lei 6,
tít. 3, lib. \O, N. R.) -
P. Cuando se han hecho ambas mejoras ,
¿cuál se saca antes, la del tercio ó la del
quinto?
R. La del quinto , á no ser que el testador
hubiese dispuesto lo contrario , ó tuviese he
cha de antemano irrevocablemente la del ter
cio. (Léi 214 del Estilo ; Cifuéntes, en la lei
25 de Toro; y Gómez, en la lei 17 de Toro.)
P. Prescindiendo de estas mejoras, ¿pue
den los padres dar á unos hijos mas que á
otros?
R. De ningun modo ; y asi es que el hijo ú
otro descendiente legítimo que en vida de sus
padres hubiese recibido algunos bienes del
caudal paterno ó materno por dote, dona- '
cion propter nuptias, ú otra causa necesaria,
debe traerlos á colacion y particion. (Leyes 3,
4 y 6 , tít. 15 , P. 6 ; 'y lei 29 de Toro , ó lei 5,
tít. 3, lib. 10, N.R.)
P. Qué es colacion ?
R. La manifestacion que en la particion de
una herencia hace alguno de los hijos de los
96 DE LAS MEJORAS Y DE LA COLACION.
bienes que recibió del caudal paterno ó ma
terno en vida de sus padres , para que unién
dose á la masa general , se haga la division
de esta con la debida igualdad entre todos
los coherederos.
P. ¿ Cuál es pues el orden que debe se
guirse en la particion de la herencia paterna
ó materna , para que ninguno quede perjudi
cado?
R. Se empieza por hacer la estimacion de
la hacienda que dejó el difunto : se pagan sus
deudas : se saca la mejora del quinto , cuyo
perceptor pagará de él los gastos de entierro
y misas y los legados : se saca luego la me
jora del tercio , á no ser que deba sacarse
antes que la del quinto por disposicion del
testador ó por estar hecha irrevocablemente
de antemano : se hace la colacion ó acumula-
lamicnto de bienes que en cualquier época
hayan recibido los hijos de los padres, sin
pertenecer á mejoras ; y aumentada con ellos
la masa de la herencia, se reparte con igual
dad entre todos los herederos.
TÍTULO XI.
DE LOS LEGADOS.

P. Qué es legado ?
R. Cierta manda , dádiva ó donacion que
deja el testador en su testamento ó codicilo á
cargo del heredero, y á favor de su alma ó de
alguno á quien trata de hacer beneficio. (Lei
i, tít. 9, P. 6.)
P. Quién puede legar ?
R. £1 que puede hacer testamento. (Lei 1,
tít. 9, P.6.)
P. Quién puede ser legatario?
R. El que puede ser heredero , bastando
que sea capaz al tiempo de la muerte del tes
tador. (Lei i, tít. 9,i>. 6.)
P. Qué cosas pueden legarse?
R. Todas las que están en el comercio de
los hombres , así las venideras como las pre
sentes , y no solo las propias , sino tambien
las ajenas. (Leyes 10, 11 , 12, 13, 14 y 15,
tít. 9, P. 6.)
P. ¿Qué debe hacer el heredero, cuando
el testador legó una cosa ajena?
R. Comprarla para entregarla al legata
98 DE LOS LEGADOS.
rio; y si el dueño no la quisiere vender, tie
ne que dar su estimacion ajuicio de peritos :
con tal empero que el testador supiese que
era ajena , ó que el legatario fuese persona
allegada de este. (Lei 10, tít. 9, P. 6.)
P. Vale el legado de la cosa empeñada ?
R. Sin duda. Si está empeñada por su valor
ó mas, la debe redimir el heredero para darla
al legatario; pero si lo está por menos, solo
en el caso de saber el testador el empeño ,
tendrá el heredero la obligacion de redimir
la; pues ignorándolo, deberá desempeñarla
el legatario. (Lei 11 , tít. 9, P. 6.)
P. Si el testador legase cierta cantidad,
mil pesos v. gr. qüe dijo tener en un cofre ,
y no se hallasen allí mas que quinientos, ¿es
taría obligado el heredero á entregar los
mi?
R. Cumpliría con entregar los quinientos;
y si hubiese v. gr. dos mil , no estaría obliga
do mas que á entregar la suma que había
sido legada. (Lei 18 , tít. 9, P. 6. )
P. Si el testador lega una cosa genérica ,
v. gr. un caballo , sin designar cuál , ¿ debe
el heredero entregar el mejor ?
R. No está obligado sino á dar uno media
no , á no ser que el testador hubiese dado al
DE LOS LEGADOS. 99
legatario el derecho de eleccion. ( Leyes 23- y
25, tít. 9, P. 6.)
P. Cómo pueden hacerse los legados ?
R. Absolutamente, ó bajo condicion; has
ta cierto dia, ó desde cierto dia; por cierta
causa, ó para cierto fin. (Leyes 21 y 31 , tít.
9,P.6.)
P. Si se lega pura y absolutamente una co
sa específica, v. gr. el campo tal, ¿cuándo
pasa su dominio al legatario ?
jR. Desde la muerte del testador , con sus
frutos y con los aumentos que tuvo despues
de legada ; de suerte que aunque falleciese el
legatario antes de recibir el legado , lo tras
mitiría á su heredero ; lo que no sucede en el
legado condicional , pues si muere el legata
rio antes de cumplirse la condicion , queda
el dominio de la cosa legada en el heredero
del testador. (Leyes<3k, 37, 41 y 48, tít. 9,
P.&; y Grey. López, en la gl. 4.a de d. lei
37.)
P. Cuando se lega por una causa falsa ,
como si el testador dijera: Lego á Pedro cien
pesos , porque cuidó de mis negocios , no sien
do esto verdad , ¿ queda nulo el legado ?
R. El legado es válido en tal caso, á no ser
que el heredero pruebe que el testador no
100 DE LOS LEGADOS.
hubiese legado, si hubiera sabido que la causa
era falsa. (Leyes 20 y 21, tít 9, P. 6.)
P. Si se lega para cierto fin, v. g. Mando á
Pedro cien pesos para que se gradúe de doctor,
¿deberá entregarse desde luego el legado?
R. Sin duda , con tal que el legatario dé
fianza de ejecutar el mandato. ( Lei 21, tít. 9,
P. 6. )
P. ¿ Hai derecho de acrecer entre los le
gatarios ?
R. Le hai del mismo modo que entre los
herederos ; de suerte que cuando lega el tes
tador una misma cosa á dos ó mas personas,
ó bien juntamente en una misma proposicion,
ó bien separadamente en dos proposiciones ,
si una de ellas no recibe el legado por cual
quiera causa que sea, acrece ó se agrega
entónces su parte á los demas colegatarios.
- ( Lei 33, tít. 9, P. 6. )
P. Dónde pueden pedirse los legados?
R. Siendo específicos, esto es, de cosa
cierta y determinada , en el lugar en que se
hallaren , ó donde estuviere la mayor parte
de los bienes del testador, ó donde morase el
heredero ; y si son genéricos , v. gr. un ca
ballo , sin decir cuál , ó de cantidad , en los
dos últimos lugares, ó donde el heredero
BE LOS FIDEICOMISOS. 101
empezase á pagar las mandas , á no ser que
el testador hubiere señalado el lugar y tiem
po. ( Lei 48, tit. 9, P. 6. )
P. Cómo se estinguen los legados ?
R. Por revocacion del testador, aunque sea
hecha en codicilo , ó inutilizando la escritura ;
— si hace de la cosa legada una nueva espe
cie, como de lana paño;— si la diere á otra
persona ; — si la vende ó empeña sin necesi
dad ;— si la cosa se pierde sin culpa del here
dero; — si viniere á poder del legatario por
titulo lucrativo ántes de la muerte del testa
dor ; — si el legatario muere ántes que el
testador ó ántes de cumplirse la condicion.
( Lei 3, tit. 5, lib. 3, Fuero real; leyes 17, 21,
22, 39, 40, 41, 42, 43 y 44, tit. 9, P. 6 ; y
leyes 7, 8, 9 y 14, tit. 4, P. 6. )

TÍTULO XH.
DE LOS FIDEICOMISOS.

P. Qué es fideicomiso ?
R. Todo aquello que deja el testador á al
guno para que lo entregue á otro.
9.
102 bE LOS FIDEICOMISOS.
P. Cuántas especies hai de fideicomisos?
i?. Dos; á saber: fideicomiso singular y
fideicomiso universal.
P. Cuál es el singular ?
/?. Aquel en que el testador ruega ó encar
ga al heredero ó legatario que dé á otro cierta
cosa determinada. ( Lei 3, tít. 9, P. 6. )
P. Y el universal?
/?. Aquel en que el testador manda ó rue
ga al que nombra heredero, que restituya la
herencia á otro. ( Lei 14, tít. 5, P. 6. )
P. ¿Qué ventajas consigue el heredero que
tiene que entregar la herencia á otro ?
T?. Tiene el derecho de retener para sí la
cuarta parte de la herencia, que se llama
cuarta trebeliánica, imputando en ella lo que
el testador le hubiere dejado y los frutos que
tomó de la herencia, miéntras estuvo en su po
der. (Lei 14, tít. 5, P. 6; ylei8, tít. 11, P. 6. )
P. ¿Y si el testador consume todos sus
bienes en legados y fideicomisos, sin que na
da quede para el heredero?
Tí. En tal caso tiene el heredero la facul
tad de quitar proporcionalmente á cada lega
tario > fideicomisario particular, y aun dona
tario moiiis causa, lo que sea necesario para
formar ó completar y retener para si la cuar
BE LOS COMC1LOS, 103
ta parte de la herencia , que se llama cuarta
falcidia. (Leyes 1 á 7, tít. 11, P. 6. )

TÍTULO XUI.
DE LOS CODICiLOS.

P. Qué es codicilo ?
R. La declaracion ménos solemne que un
testado ó intestado hace de su última volun
tad. (Proemio del tít. 12, P. &. )
P. De cuántas maneras es ?
R. De dos : nuncupativo ó abierto , y es
crito ó cerrado ; y ambos deben hacerse con
la misma solemnidad que el testamento abier
to. (Leyes 1 y 3, tít. 12, P. 6; y lei 3 de Toro,
ó lei 2, tít. 18, Ub. 10, N. R. )
P. ¿Qué es lo que puede hacerse en el co
dicilo ?
R. Lo mismo que en el testamento, escep-
to nombrar heredero directamente ó 'poner
condiciones al nombrado, sustituir y deshe
redar. Pero puede darse y quitarse indirec
tamente la herencia ; como por ejemplo, si
alguno manda ó ruega en é! , sin haber hecho
104 DE LOS ALBACEAS.
testamento , que su heredero abintestato res
tituya la herencia á otro. (Leyes 1, 2, y 3, tít.
12, P. 6. )
P. ¿ Qué sucede, si muere alguno dejando
muchos codicilos ?
R. Todos son válidos , con tal que no haya
contradiccion entre sus disposiciones. (Leí 3,
tít. 12, P. 6. )

-oH<>-

TÍTÜLO XIV.

DE LOS ALBACEAS.

jP. Quién es albacea?


R. La persona encargada de llevar á efecto
lo que ha ordenado el testador en su testa,
mento ú otra última disposicion ; de suerte
que el albacea es un verdadero mandatario.
( Proemio y lei \ , tít. 10, JP. 6. )
P. De cuántas maneras es?
i?. De tres : legítimo , testamentario y da
tivo.
P. Cuál es el legítimo?
R. El que por Derecho tiene la obligacion
DE LOS ALBACEAS. 105
de cumplir la voluntad del testador : tal es el
heredero.
P. Cuál es el testamentario ?
R. El nombrado por el testador.
P. Y el dativo ?
iJ. El nombrado de oficio por el juez , en
caso de que el electo por el testador ó el he
redero no quieran cumplir lo dispuesto por
el difunto.
P. Quién puede ser albacea?
R. El mayor de veinte y cinco años. (Lei 7,
tit. 5, lib. 3, Fuero real. ) Sin embargo, algu
nos quieren que pueda serlo el mayor de diez
y siete años , con tal que sea capaz de hacer
testamento, pues que el Derecho le juzga idó
neo para ser procurador en los negocios es-
trajudiciales.
P. Cuáles son los' deberes del albacea?
R. Hacer inventario formal de los bienes
del testador ; pagar el daño que se siguiere
por su descuido ó malicia ; cumplir su encar
go con toda brevedad sin poder pasar del
término de un año, y dar cuenta de lo reci
bido y gastado. ( Leyes del tít. 10, P. 6 ; y lei
10, tü. 21, lib. 10, N. R.)
P. Cómo cesa el cargo de albacea?
R. Por su muerte , impedimento , ó remo
100 DE LOS MAYORAZGOS.
cion á causa de ser sospechoso ; — por revo
cacion del testador; — por enemistad que so
breviniere entre los dos ; — por el trascurso
del término asignado ; — por la conclusion de
la comision ; — y por cesar la causa del nom
bramiento.
P. Se debe dar salario al albacea?
K. Está en práctica el dárselo, cuando se
viene en conocimiento de que tal ha sido la
voluntad del testador.

TÍTÜiO XV.
DE LOS MAYORAZGOS.

P. Qué es mayorazgo?
R. El derecho de suceder en los bienes de
jados, con la condicion de que se conserven
perpetuamente en la familia, y pertenezcan
al primogénito mas próximo poc orden suce
sivo, ó á otra persona llamada en la funda
cion.
P. De cuántas maneras es?
7?. De dos : regular é irregular.
P. Cuál es el regular?
DE LOS MAYORAZGOS. 107
R. Aquel en que sucede el varon con pre
ferencia á la hembra , y el mayor con prefe
rencia al menor en cada línea , segun el orden
prescrito para la sucesion de la corona en la
tlt. 15, P. 5.)
P. Y el irregular? .
R. Aquel que se desvia poco ó mucho del
modo de suceder del regular ; y puede ser de
tantas maneras cuantas quieran los funda
dores ; pero sus especies principales se redu
cen á nueve, que son : 1.a de agnacion ver
dadera; 2.a de agnacion fingida ó artificiosa;
3.a de simple masculinidad ; 4.a de feminei
dad; 5.a de eleccion; 6.° alternativo; 7.a sal-
tuario; 8.a de segundogenitura ; y 9.a incom
patible. (Rojas de Almansa , de incompatibü.,
disp. 1, quwst. 1, n. 8. )
P. ¿Cuál es el mayorazgo de agnacion
verdadera? '
R. Aquel en que suceden únicamente los
varones de varones por linea masculina.
P. Cuál es el de agnacion 'fingida ?
R. El que pidiendo varonía , llama al va-
ron de la hembra mas próxima , estinguida
que sea la linea de varon en varon.
P. Cuál es el de pura masculinidad?
R. Aquel que solo admite á los varones,
108 DE LOS MAYORAZGOS.
ya sean descendientes de varon ó de hem
bra.
JP. Cuál es el de femineidad?
i?. Aquel en que solamente suceden las
hembras, ó por lo ménos son preferidas á los
varones.
P. Cuál es el electivo?
R. Aquel en que el poseedor tiene facul
tad de elegir para sucesor al hijo ó pariente
que mejor le pareciere.
P. Cuál el alternativo?
R. Aquel en que suceden alternativamente
uno de una línea y otro de otra.
P. Cuál el saltuario?
R. El que sin atender á la línea, busca pa
ra la sucesion al sugeto que tiene las calida
des prevenidas en los llamamientos.
P. Cuál el de segundogenitura?
R. El que llama á los hijos segundos por
orden sucesivo.
JP. Cuál el incompatible?
R. El que no puede estar juntamente con
otro en una misma persona.
P, ¿ Qué se necesita para poder fundar un
mayorazgo?
R. Obtener licencia del rei, y asignarle
bienes que produzcan á lo ménos tres mil
DE ,LOS MAYORAZGOS. 100
ducados de renta. (Real céd. de 14 de mayo
de 1789, ó lei 12, tít. 17, lib. 10,N.R.)
P. Cómo se funda el mayorazgo?
R. En testamento, ó por contrato entre
vivos. (Lei 44 de Toro, 6 4, tít. 17, lib. 10,
N.R.)
P. ¿Puede dividirse el mayorazgo entre
dos personas?
R. De ningun modo, á no ser que naciesen
dos varones ó dos hembras en un parto, sin
saberse quién nació primero. (Lei 12, tít. 33,
P.1;y Molina, lib. 1 , de primog., cap. 11 ,
y lib. 3, cap.. i.)
P. Cuándo cesa el mayorazgo?
R. El mayorazgo es perpetuo por su natu
raleza , y por consiguiente dura miéntras no
se estingue la familia del fundador. (Lei 2,
tít. 15, P. 2; Molina, lib. 1, de primog.,
cap. 4 ; y Gomez, lei 40 de Toro, n. 64.)
P. ¿Qué es lo que debe tenerse presente
para la sucesion en el mayorazgo?
jf?. La línea, el grado, el sexo y la mayor
edad. La linea, porque los de la línea del
último poseedor son ántes que los de las
otras. El grado, porque el pariente mas pró
ximo de dicho poseedor escluye al mas re
moto. El sexo , porque el varon escluye a la
10
110 1>E LOS MAYORAZGOS.
hembra de la misma línea y grado. La mayor
edad, porque entre los que son iguales en
línea, grado y sexo, ha de preferirse el ma
yor de edad. (Leí % tít. 15, P. 2; y Molina,
lib. 3, cap. 4, n. 13 y 14.)
P. ¿Tiene lugar en la sucesion de mayo
razgos el derecho de representacion?
R. Lo tiene en la linea recta y en la trans
versal; y así es que los hijos ocupan siempre
el grado y lugar de sus padres , aunque estos
hubiesen muerto ántes de fundarse el mayo
razgo. (Lei 2, tít. 15, P. 2; lei 40 de Toro,
ó lei 5, tít. 1'7, ílb. 10, N. R. ; y lei 9 de d.
tít. 17.)
P. ¿Cuáles son los descendientes que tie
nen derecho al mayorazgo ?
R. Los legítimos y los legitimados por sub
siguiente matrimonio ; mas no los legitimados
por rescripto del rei, sino cuando no haya
ningun otro pariente del fundador -r y ménos
los adoptivos ó arrogados. (Greg. López, glosa
10 de la lei 2, tít. 15, P. 2; Molina, lib. 1,
cap. h, y lib. 3, cap. 3, n. 45 ; y Hermen. de
Rojas, pan. 1 , cap. 6, n. 6 y 10.)
P. ¿ Son tenidos por ilegítimos los nacidos
de matrimonio putativo?
R. De ningun modo, con tal que el matri
DE LOS MAYOBAZGOS. 111
monio se hubiese contraido con las solemni
dades prevenidas , y los contrayentes ó al
guno de ellos ignorase el impedimento que
tenian para casarse. (Lei< 1 , tít. 13, P. \ ; y
Molina, lib. 3, cap. 1, n. 15.)
P. ¿Desde cuándo se entiende llamado á
la sucesion el legitimado por subsiguiente
matrimonio?
R. Desde el tiempo de su legitimacion, es
to es, desde el casamiento de sus padres ; de
manera que si su padre ántes de este matri
monio contrae otro y tiene de él un hijo legi
timo, este se considerará el primogéniio.
(Molina, lib. 3, cap. 1, ». 7; y Ant. Gómez,
en la lei 9 de Toro , n. 63 y sig. )
P. ¿ En el mayorazgo se sucede por dere
cho hereditario ó de snngre?
R. Respecto del fundador se sucede por
derecho hereditario ; pero respecto del último
poseedor, por derecho de sangre; pues el
mayorazgo solo pertenece á los parientes del
último poseedor que sean tambien parientes
del fundador. (Ie¿2, tít. 15, P. 2, y glosa
18, de Greg. López; ki 9, tít. 1 , P. 2; y Mo
lina, lib. 5, cap. 9, ra. 2, y lib. 1, cap. 8,
n. 10.)
112 DE LOS MAYORAZGOS.
P. ¿ Cómo pasa la posesion de un mayo
razgo al sucesor?
R. Muerto el poseedor del mayorazgo , se
trasmite al sucesor por virtud del mismo de
recho ó ministerio de la lei la posesion civil y
natural de todos los bienes que lo componen ,
sin acto alguno de aprehension ú ocupacion , .
aunque algun otro haya tomado la posesion
de ellos en vida del tenedor del mayorazgo.
(Lei 45 de Toro, ó i, tít. 2b, lib. 11, N. R.;
Gomez, en dicha lei, n. 112, y Molina, lib. 3,
cap. 12, n. 24.)
Pi ¿Está obligado el sucesor del mayo
razgo á pagar las deudas del antecesor?
R. Solo está obligado á pagarlas, cuando se
hubieren contraido en beneficio del mayo
razgo. ( Molina, lib. i, cap. 10 ; y Ant. Gómez,
en la lei 40 de Toro, n. 72.)
P. ¿ A quién pertenecen las mejoras que
hace el poseedor en los bienes del mayo
razgo?
R. Las hechas en los edificios ceden al
mismo mayorazgo , y por consiguiente pasan
al sucesor, el cual no está obligado á dar
parte alguna de la estimacion á los herederos
del que las hizo. Dúdase si esta disposicion
debe estenderse á las mejoras de los demas
DE LOS MAYORAZGOS. 113
bienes. (Lei 46 de Toro, ó 6, tit. 17, lib. 10,
N. R. ; Molina, lib. ^ , cap. 26 , ra. 15 y sig. ;
y Ant. Gómez , era cü. lei 46 , ra. 4. )
P. Cómo puede probarse el mayorazgo ?
R. Por la escritura de fundacion, con la
licencia correspondiente ; — por testigos que
depongan del tenor de dichos documentos,
si se hubiesen perdido ; — y por costumbre
inmemorial de haberse poseido los bienes se
gun las reglas de mayorazgo. (Lei 41 de Toro,
ó 1 , tit. 17, lib. 10, N. R. ; y Molina, lib. 3,
cap. 8, ra. 5 y sig.)
P. Qué es lo que se ha dispuesto última
mente sobre los mayorazgos ?
R. Que queden suprimidos todos los mayo
razgos , fideicomisos , patronatos y cualquiera
otra especie de vinculaciones, y restituidos
á la clase de absolutamente libres los bienes
de cualquiera naturaleza que los compongan ;
pucfiendo desde luego los poseedores actua
les disponer libremente como propios de la
mitad de ellos , y pasando despues de su
muerte la otra mitad al sucesor para que pue
da tambien disponer de ella libremente como
dueño : y (pie nadie podrá en lo sucesivo, aun
que sea por via de mejora, ni por otro titulo
ni pretesto, fundar mayorazgo , fideicomiso,
10.
III IIEBENCIAS ABINTESTATO.
patronato, capellanía, obra pia, ni vincula
cion alguna sobre ninguna clase de bienes ó
derechos, ni prohibir directa ni indirecta
mente su enajenacion, ni vincular acciones
sobre bancos ú otros fondos estranjeros. (De
creto de Cortes de 27 de setiembre de 1820 , y
real decreto de 30 de agosto de 1836. )

-*ffo-

TÍTÜLO 3£VL

DE LAS HERENCIAS ABINTESTATO.

P, Qué es herencia abintestato ?


H. La sucesion que deja uno que muere sin
testamento, ó con testamento que se anula ó
rescinde ó queda sin efecto por alguna razon.
{Lei 1, tít. 13, P. 6. )
P. Quién se lleva la herencia abintestato ?
R. En primer lugar los descendientes : en
segundo los ascendientes : en tercero los pa
rientes colaterales hasta cierto grado; y en
cuarto el fisco. (Lei 3, iit. 5, lib. 3, Fuero
real ; leyes 2 y 6, tít. 13, P. 6 ; y lei 6, tít. 22,
lib. 10, N. R. )
HERENCIAS ABINTESTATO. 115
P. ¿Qué descendientes son herederos ab-
intestato ?
i?. Los que ocupan el primer lugar, sean
varones ó hembras; esio es, aquellos entre
los cuales y el difunto no media persona al
guna, como son los hijos, y los nietos, si hu
biere fallecido el padre de estos , en cuyo caso
entran representándole , sucediendo los hijos
por cabezas y los nietos por estirpes. ( Lei 20,
tít. 2, lib. 4, Fuero-Juzgo ; y lei 3, tit. 13,
P. 6. )
P. ¿Qué es suceder por cabezas y por es
tirpes 1
R. Suceder por cabezas es venir á heredar
por derecho propio y personal ; y suceder^or
estirpes ó troncos es venir á heredar en lugar
ó representacion de sus ascendientes difuntos.
Los que suceden por cabezas llevan la parte
que toca á cada uno ; y los que suceden por
estirpes, solamente perciben la parte de su
difunto padre. Así pues, si fallece Juan con
un hijo, dos nietos y tres biznietos huérfa
nos , se dividirá la herencia en tres partes
iguales , una para el hijo , otra para los dos
nietos , y la tercera para los biznietos , porque
el primero sucede por cabezas y los otros por
estirpes , esto es , el hijo por su propia per
1 1G HERENCIAS ABINTESTATO.
sona, los nietos por la de su padre, y los biz
nietos por la de su abuelo.
P. Los hijos postumos , que son los que el
padre deja concebidos cuando fallece, ¿tie
nen tambien derecho á la herencia?
R. No hai duda alguna, con tal que en ellos
concurran las circunstancias siguientes : 1."
que nazcan enteramente y vivos : 2.a que vi
van despues de su nacimiento veinte y cuatro
horas por lo ménos : 3.a que sean bautiza
dos : 4.a que hayan nacido en tiempo que pue
dan considerarse fruto del matrimonio. (Lei
13 de Toro, ó 2, tít. 5, lib. 10, N. R.; y lei 4,
tít. 23, P. 4. )
P. ¿Suceden igualmente los hijos legiti
mados?
R. Los legitimados por subsiguiente matri
monio suceden juntamente con los legítimos ;
mas los legitimados para heredar á sus pa
dres por rescripto del príncipe, no suceden
sino cuando están solos ; bien que en la suce
sion de los demas parientes son iguales á los
legítimos. (Leyes 1 y 2, tít. 13, P. 4; leyes 4
y 9, tít. 15, P. 4; leyes 2 y 17,. tít. 6, lib. 3,
Fuero real; y lei 12 de Toro, ó 7, tít. 20, lib.
10, N. R. )
P. Y los hijos naturales no legitimados?
HERENCIAS ABINTESTATO. 117
R. Los hijos naturales, cuando no hai legí
timos ni legitimados , suceden á su padre en
la sesta parte de la herencia que deben partir
con su madre, y á la madre en toda la heren
cia. En defecto de naturales , suceden á la
madre los espurios, con tal que no sean de
dañado y punible ayuntamiento , esto es , de
mujer casada con otro , pues estos están es-
cluidos, así como los de clérigos, frailes y
monjas profesas. (Leyes 8 y 10, tít. 13, P. 6 ;
lei 9 de Toro, ó 5, lít. 20, lib 10, N. R. ; y lei
k, d. tít. 20, lib. 10, N. R.)
P. Qué diremos de los hijos adoptivos ?
R. Que suceden al adoptante que no tuvie
re hijos ni ascendientes legítimos ó naturales.
(Lei 5, ttt. 6, lib. 3, y lei i, tít. 22, lib. h,
Fuero real; leyes 6 y 12 de Toro, ó 1 y 7,
tít. 20, lib. 10, N. R.; Gregor. López, en la
glosa 5, de la lei 8, tít. 16, jP. 4; y Azevedo,
en d. lei 1, tít. 20, lib. 10, ¿V. R. )
P. ¿Quiénes suceden á falta de descen
dientes ?
jR. Los ascendientes legítimos, de los cua
les el mas cercano escluye siempre al mas
remoto, y si concurren ascendientes de las
dos líneas en un mismo grado , la mitad de la
herencia va á la línea paterna y la otra mi
118 HERENCIAS ABINTESTATO.
tad á la materna , sin distincion de bienes pa
ternos y maternos , salvo en los pueblos donde
es fuero ó costumbre volver los bienes al
tronco. ( Lei 21 , tít. 3, lib. 4, Fuero- Juzgo ;
lei 1, tít. 6, lib. 3, Fuero real; lei 4, tít. 13,
P. 6, y leyes %y1 de Toro , ó i y 2, tít. 20,
lib. 10, N. R. )
P. A falta de ascendientes legítimos ¿ suce
derán los naturales?
R. Sucederán en los mismos términos que
los hijos naturales suceden á sus padres, pues
los derechos de sucesion suelen ser recípro
cos. ( lei 8, tít. 13, P. 6. )
P. Si los derechos de sucesion son recí
procos, ¿habrá algun caso en que el adop
tante suceda al hijo adoptivo ?
R. Ninguno, pues aquí falla la regla de
reciprocidad.
P. No dejando el difunto descendientes ni
ascendientes, ¿quiénes deberán heredarle?
R. Los parientes transversales en la forma
siguiente : 1.° los hermanos bilaterales ó sus
hijos; aquellos por cabezas, mas estos por
estirpes, cuando concurren con sus tios; y por
cabezas , cuando están solos : 2.° habiendo
hermanos enteros y medios hermanos , se di
vidirán los bienes de modo que los paternos
HERENCIAS ABINTESTATO. 119
vayan á los hermanos de parte de padre , y
los maternos á los de parte de madre; pero
los demas se repartirán igualmente entre
ellos : 3.° á falta de los referidos, entrarán los
demas parientes por su orden y grado hasta
el cuarto grado bivil segun unos, y canónico
segun otros , sin que produzca preferencia
alguna el doble vínculo de parentesco : 4.° rio
habiendo parientes legítimos, sucederán los
naturales por parle de madre, con esclusion
de los de parte de padre. (Leyes 3, 8 y 9, tít.
2, lib. 4, Fuero-Juzgo; leyes 1 y ÍZ, tít. 6 , lib.
3, Fuero real; leyes 5 , 6 y 12, tít. 13 , P. 6,
con las glosas 1, 2 y 3 de d. lei 12 por Greg.
López ; Antonio Gómez , en la lei 9 de Toro ,
n. 50; Sala, en su lluslr. del Derecho, lib.
% tít. 8 , *• 8 , 9 , 10 y 11 j y leyes 1 y 9 de
Toro. )
P. Cuando no hai descendientes, ascen
dientes ni colaterales , ¿quién hereda los bie
nes del iniestado ?
R. El fisco. ( Lei 6, tít. 13, P. 6 ; y leyes 1
y 6, tít. 22, lib. 10, N. R. )
P. ¿No es mas justo que los herede la
viuda?
R. La lei 6, título 13, Partida 6 , disponía
que fallando parientes colaterales del difunto
120 HERENCIAS ABINTESTATO.
hasta el décimo grado, se heredaran recípro
camente el marido y la mujer, y que siendo
el difunto soltero ó viudo pasase la herencia
al fisco ; pero la lei 6, título 22, libro 10 de la
Novísima Recopilacion, sin hacer mencion de
los consortes , previene que las herencias ab-
intestato pertenezcan al fisco , á falta de pa
rientes transversales hasta el cuarto grado.
P. ¿ Con que la viuda jamas tiene derecho
alguno á la herencia ?
R. Cuando la viuda queda pobre , y no tie
ne dote ú otros bienes con que alimentarse ,
ni se los legó el marido para dicho objeto ,
puede llevar la cuarta parte de los bienes del
difunto, con tal que no pase de cien libras de
oro. Esta parte, que se llama la cuarta ma
rital, se debe á la mujer aun cuando queden
hijos de este matrimonio , y no solo cuando el
marido muere intestado, sino tambien cuando
hizo testamento. (Leil, tít. 13, P. 6, con las
glosas de Greg. López. )
P. Si los herederos abintestato se hallan
ausentes ó son menores , ¿ qué es lo que ha
de practicarse ?
R. Debe entónces el juez nombrarles de
fensor ó tutor respectivamente, y mandar in
ventariar y depositar en persona segura con
HERENCIAS ABINTESTATO. 121
asistencia de estos los bienes de la herencia,
para evitar su estravío.
P. ¿Hai alguna disposicion reciente sobre
las sucesiones intestadas?
R. Segun lei de 16 de mayo de 1835 « cor
responden al Estado los bienes de los que
mueran ó hayan muerto intestados , sin dejar
personas capazes de sucederles con arreglo á
las leyes vigentes. A falta de dichas personas
sucederán con preferencia al Estado : 1° los
hijos naturales legalmente reconocidos, y sus
descendientes por lo respectivo á la sucesion
del padre, y sin perjuicio del derecho prefe
rente que tienen los mismos para suceder á
la madre : 2o el cónyuge no separado por de
manda de divorcio contestada al tiempo del
fallecimiento, entendiéndose que á su muerte
deberán volver los bienes raizes de abolengo
á los colaterales : 3° los colaterales desde
el quinto hasta el décimo grado inclusive ,
computados civilmente al tiempo de abrirse
la sucesion. »

11
TITULO xvn.
DE LAS OBLIGACIONES.

P. Qué es obligacion ?
i?. La necesidad en que estamos constitui
dos por el Derecho , de dar ó hacer alguna
cosa. N
P. De cuántas maneras es?
R. De tres : natural, civil y mista. Natural
es la que solo se apoya en la equidad, sin
producir accion, como la del pupilo que con
trae sin autoridad del tutor. Civil, la que solo
se funda en el Derecho civil sin que le acom
pañe el natural , y produce una accion tan
débil que se destruye fácilmente por la es-
ccpcion que se le oponga; como la que nace
de un contrato celebrado á la fuerza. Mista,
la que nos imponen ambos Derechos , natu
ral y civil ; y esta es la que se entiende ba
jo el nombre general de obligacion. (Lei 5,
tít. 12, P. 5; y lei 56, tit. 5, P. 5. )
P. De dónde nace la obligacion?
R. Del contrato, cuasi- contrato, delito y
cuasi-delito. Tambien nace de la lei, como
por ejemplo, la obligacion de ser tutor.
DE LAS OBLIGACIONES. 123
P. Qué es contrato?
R. Una convencion por la cual una persona
se obliga á dar, hacer ó no hacer alguna cosa
en favor de otra.
P. Cuántas especies hai de contratos?
R. Los contratos se dividen : I° en nomi
nados é innominados ; 2° en bilaterales y uni
laterales ; y 3o en consensuales , verbales ,
reales y literales.
P. ¿Cuáles son los nominados é innomi
nados?
R. Nominados son los que tienen nombro
propio, como la vento, el mutuo, el mandato.
Innominados, los que no tienen nombre y se
reducen á estas cuatro clases : doi para que
des, doi para que hagas , hago para que des,
hago para que hagas. Antes solamente los con
tratos nominados producían accion y obliga
cion ; y los innominados no la producían, sino
despues que uno de los contrayentes habia
cumplido por su par|e. Mas ahora todos los
contratos , así los innominados como los no
minados , tienen fuerza obligatoria desde el
momento en que se han celebrado. (Lei 5, tít.
6, P. 5 ; y lei \ , tít. 1 , lib. 1 0, N. R. )
P. ¿Cuálrs son los bilaterales y unilate
rales ?
124 DE LAS OBLIGACIONES.
R. Bilaterales ó sinalagmáticos son aque
llos en que ambos contrayentes quedan obli
gados reciprocamente , como la venta. Unila
terales por el contrario aquellos en que solo
queda obligada una de las partes, como el
mutuo.
P. ¿ Cuáles son los consensuales, verbales,
reales y literales?
R. Los consensuales se constituyen y per
feccionan por el simple consentimiento; los
verbales por cierta fórmula de palabras; los
reales por la entrega de una cosa ; y los lite
rales por la entrega de un vale ó escrito que
no se reclama dentro de cierto tiempo. Son
consensuales la compra - venta , el arrenda
miento , la compañía y el mandato : de los
verbales no hai mas que la estipulacion : son
reales el mutuo, el comodato, el depósito y la
prenda ; y de los literales no hai otro que el
que se llama obligacion literal.
P. ¿Qué se requiere para la validez de un
contrato ?
R. Consentimiento de los contrayentes ;
capazidad de los mismos para contraer ; cosa
cierta que forme la materia del empeño; y
causa lícita y verdadera en la obligacion.
P. A qué están obligados los contrayentes ?
DE LAS OBLIGACIONES. 125
J?. No solo á cumplir lo contratado , sino
tambien á resarcir el daño que por su dolo ó
culpa se siguiere á la parte contraria : lo que
se llama prestar el dolo ó culpa. (Leyes 6 y 61,
tít. 5, P. 5 ; lei 30, tít. 12, P. 5 ; lei 4, tit. 3,
P. 5 ; y lei 3, tít. 16, P. 7.)
P. Qué es dolo ?
i?. El propósito de dañar á otro injusta
mente. (Lei 1, tít. 16, P. 7.)
P. Qué es culpa?
R. La negligencia ó impericia en el des
empeño de la obligacion contraida. Es de tres
maneras, lata, leve y levísima. Lata es la omi
sion de la diligencia que todos suelen poner :
leve, la omision de aquellas precauciones que
el buen padre de familias toma ordinaria
mente en sus negocios; y levísima la omi
sion de aquellos cuidados que no suelen po
ner en sus negocios sino los padres de fami
lia mas exactos y diligentes. (Lei 11, tít. 33,
P. 7.)
P. ¿Así el dolo como la culpa se prestan
en todos los contratos ?
R. El dolo y la culpa lata se prestan en
todos los contratos : la culpa leve, cuando la
utilidad es de ambos contrayentes, como en la
venta ; y la levísima solo cuando la utilidad es
126 DE LA TRANSACCION.
del que reeibe, como en el comodato. (Leyes
i, 5 y 6, tít. 16, lei 1, tít. 17, leí 17, tít. 10, y
iei 1, tít. 15, lib. 3, Fuero real; lei % tít. 2,
lei 23, 5, lei 8, í»'¿. 8, /e¿ 20, tít. 13, ¿eyes 3
y 4, ft'í. 3, 20, 29 y 30, ííí. 12, lei 10,
1, y lei 24, <#. 5, P. 5. )
jP. ¿Y si la cosa que es objeto del contra
to, padece daño ó detrimento por casualidad
ó caso fortuito ?
R. El daño entonces es á cargo del dueño
de la cosa, guia res domino suo perit; á no ser
que hubiere culpa ó tardanza en el que debe
restituir. (Lei 11 , tít. 33 , P. 7; lei 3, tít. 2,
P. 5; y leik, tít. 3, P. 5.)

TITÜLO XVIII.
DE LA TRANSACCION.

P. Qué es transaccion?
R. Una convencion en que se arreglan las
partes acerca de algun punto litigioso , dán -
dose ó remitiéndose mutuamente alguna cosa.
P. Cuál es la fuerza de la transaccion?
R. La misma que la de la cosa juzgada , de
DE LA TRANSACCION. 427
modo que produce la escepcion de pleito aca
bado. (£«'34, tít. 14, P. 5.)
P. Quién puedo transigir?
R. £1 que tiene la libre administracion de
sus cosas; mas no el procurador sin poder
especial para ello. (Lei 19, tít. 5, jP. 8; Greg.
López, en las glosas 8 y 9 de esta lei; Covar-
rub., 1, Var. resol., cap. 6, n.3;y Valeron, de
transad. , tít. 4, q. 5, ». 27 y 28. )
P. ¿Hai algunas cosas sobre las cuales no
puede transigirse?
i?. Es nula la transaccion que se hiciere so
bre lo mandado en un testamento que toda
vía no se ha visto ; sobre los alimentos futu
ros que se deben por testamento ; y sobre los
delitos futuros. (Lei 1, tít. 2, P. 6; Valeron,
de transad. , tít. 3,q.U; Castillo, de alinien-
tis, cap. ult. ; L. 8, C. de transad. ; y lei 22,
tít. 1, JP. 6.)
P. Puede rescindirse ía transaccion?
R. Solo en easo de haberse otorgado en
vista de falsos instrumentos, ó por dolo ó
miedo que cae en varon constante. (Lei 34,
tít. 14, P. 5; L. 13, C. de transad.; y Vale-
ron, tít. 6, de transad. , q. 3, ». 7. )
P. Y si hubo lesion?
R. Algunos autores sientan que debe res
128 DE LA COMPRA V VENTA.
cindirse la transaccion solamente cuando la
lesion fué enormísima ; pero otros son de pa
recer que ni aun en este caso hai lugar á la
rescision. ( Ydieron, tít. 6, q. 2 ; y Castillo, lib.
8, de alim., cap. 36, n. 80. )
P. Cuál es la lesion enormísima ?
R. La que escede considerablemente la
mitad del justo predio, al paso que la enorme
es la que pasa un poco de dicha mitad.

-oH°-

TÍTULO XIX.
DE LA COMPBA Y VENTA.

P. Qué es compra y venta ?


R. Un contrato consensual, por el que uno
se obliga á entregar una cosa y otro á pagarla.
(Leil, tít. 5, P. 5.)
P. ¿Qué cosas deben considerarse como
sustanciales en este contrato?
R. El consentimiento , la cosa y el precio.
( Leí 6, tít. 5, P. 5. )
P. Cuándo queda perfeccionada la venta?
R. Luego que los contrayentes se han con
venido en la cosa y en el precio, aunque la
DE LA COMPRA Y VENTA. 129
cosa no haya sido entregada, ni el precio pa
gado. (Lei 23 , tít. 5,P.b;y lei 17 , tít. 10,
lib. 3, Fuero real.)
P. ¿Puede retirarse del contrato alguna de
las partes ?
R. Pe ningun modo , cuando ya está per
feccionada la convencion ; pero si no hubo mas
que promesa de vender ó comprar, y esta se
hizo con arras, puede separarse el que las dió,
perdiéndolas, y el que las recibió, restituyen
do el doble. (Lei 7, tít. 5, P. 5.)
P. Cómo debe ser el consentimiento?
R. Libre de error, de violencia y de dolo.
Si el error es sustancial, como cuando se ven
de laton por oro, es nula la venta ; pero si solo
es accidental, como cuando se vende oro malo
por bueno, ni aun habrá lugar á la diminu
cion de precio, en caso de haberse vendido la
cosa como cuerpo cierto. La violencia es causa
de rescision de la venta por la restitucion in
integrum. El dolo que dió causa á la venta, la
hace nula; pero el incidente solo produce
derecho al resarcimiento del daño. (Leyes 3 ,
21, 56, y 57, Ut.h,P. 5.)
P. Qué cosas pueden venderse?
R. Todas las que están en el comercio de
los hombres, así las presentes como las veni
130 DE LA COMPRA Y VENTA.
deras ; bien que la sucesion de una persona
viva-no puede venderse sino con su beneplá
cito. (Leyes 11, 12, 13, 14, 15, 16 y 17, tít.
i, P. 5.)
P. ¿Cuáles son las calidades que debe te
ner el precio?
R. El precio debe consistir en dinero, pues
de otro modo seria permuta y no venta ; —
debe tambien ser cierto y determinado por
las partes ó por un tercero ; — y por último,
ha de serjusto, de modo que habiendo lesion
enorme, puede pedirse dentro de cuatro años
el resarcimiento del daño ó la rescision de la
venta. (Leyesi, 9, 10 y 56, ttí. 5, P. 5; y leí
ü,tít.l,Ub.iO,N.R.)
P. Quiénes pueden comprar y vender?
R. Los que tienen la libre administracion
desus bienes. Pero los tutores, curadores,
albaceas, y cualesquiera otros administra
dores de bienes ajenos , no pueden comprar
por sí ni por personas interpuestas cosa al
guna de las que administran, bajo nulidad y
la pena del euatro tanto para el fisco ; ni los
juezes pueden tampoco comprar los bienes
que se venden en almoneda por su mandato.
(Leyes 2, 4 y 5, tlf. 5, P. 5; Iri 1 , tít. 12,
«*. 10, y lei k, tít. 14, ¡ib. 5, N. R.)
DE LA COMPRA Y VENTA» 131
P. ¿ Puede obligarse á uno á vender sus
eosas ?
R. Solo se le puede obligar por causa jus
tificada de utilidad comun , previa la corres
pondiente indemnizacion. (Zet2, tít. 1, P. 2;
lei3l , tít. 18, P. 3; leyes 4, 5 y 11 , t¥í. 19,
¿¿6. 7, iV. i?. ; rieer. de Cortes de 14 de julio de
1836; y Corasí, de 1837, art. 10.)
/». Puede obligarse á uno á comprar?
R. Hubo un tiempo en que los juezes com
pelían á mercaderes y otras personas á com
prar los bienes de los delincuentes, con ob
jeto de atender á los gastos de las casas y á
la satisfaccion de las condenaciones ; pero la
lei prohibió estas compulsiones ó apremios ,
y declaró nulas las ventas así ejecutadas.
(Leil, tít. 12, lib. 10, N.R.)
P. ¿ Deben cumplirse todos los pactos que
se pongan en las ventas ?
R. Sin duda, con tal que no sean contra
las leyes ó buenas costumbres. (Lei 38, tít.
5, P. 5.)
P. Cuáles son los pactos mas frecuentes ?
R. El de retrovendendo, el de la lei comi
soria, y el de adicion en dia.
P. Qué es pacto de retrovendendo?
R. Una convencion por la que se estipula
132 DE LA COMPRA Y VENTA,
que volviendo el vendedor al comprador e
precio recibido, haya este de restituir á aquel
la cosa vendida. La venta que se hace con es
te pacto , suele llamarse á carta de gracia.
(leí 42, tít. 5, P. 5.)
P. Qué es pacto de la lei comisoria?
R. Una convencion por la que se establece
que si el comprador no paga el precio hasta
cierto dia determinado , se deshaga la venta.
(Lei 38, tít. 5, P. 5.)
P. Y el de adicion ó señalamiento de dia?
R. Una convencion por la que se estipula
que si el vendedor hallare hasta cierto dia
determinado quien le diese mas por la cosa
vendida, la pueda vender á este, á no ser
que el primer comprador acepte e! aumento.
(Lei 40, tít. 5, P. 5.)
P. Cuáles son los pactos reprobados?
R. Entre otros, el de pagar cuando el com
prador se case, ó herede, ó suceda en algun
mayorazgo, de modo que con cualquiera de
estos se anula la venta ; y tambien el comi
sorio, por el que se estipula que el acreedor
se quede con la prenda, aunque sea de mas
valor que la deuda, si el deudor no la redime
hasta cierto dia. (Lei 41 , tít. 5, y lei 12, tít.
13, P. 5; lei 17, tít. 1, lib. 10, N. R.)
DE LA COMPRA Y VENTA. 133
P. ¿ Cuáles son las obligaciones del ven
dedor?
R. Entregar al comprador la cosa vendida
con todo lo que le pertenece ó le está uni
do ; manifestarle al tiempo del contrato las
cargas, vicios, tachas ó defectos que tuviere
la misma ; y responder de la eviccion ó sa
neamiento, esto es, mantenerle en la posesion
pacífica de la cosa , ó restituirle el precio y
satisfacerle los perjuicios en caso que le fuere
quitada por otro de mejor derecho. (Leyes 6
y 15, tít. 10, lib. 3, Fuero real; leyes 19, 27,
37, 64, 65 y 66, tít. 5, P. 5.)
P. ¿Qué derecho tiene el comprador, si
descubre alguna tacha ó carga que no mani
festó el vendedor?
R. Puede intentar dentro de seis meses la
accion redhibiloria para deshacer la venta ,
recobrando el precio con los daños que se le
hubieren seguido; ó bien dentro de un año la
del quanti minoris para recobrar tanta par
te del precio cuanta valiese ménos la cosa por
razon de la carga ó vícío ocultado. (Leyes 63
y 67, tít. 5, P. 5.)
P. i Cuáles son las obligaciones del com
prador?
R. Pagar el precio en el dia y lugar que se
ii
134 DE LA COMPRA Y VENTA.
hubiere señalado, ó en el que se hiciere la
entrega de la cosa, como asimismo el interes
legal del precio desde el dia de la demora.
(Lei 28, tít. 5, P. 5; lei 2, tít. 10, lib. 3,
Fuero real; y leyes k y 5, tít. h, lib. 5, Fuero-
Juzgo.)
P. ¿ De quién es el daño de la cosa vendi
da y no entregada?
R. El daño de la cosa vendida, así como
el provecho, corre por cuenta del comprador,
aun ántes de su entrega, desde el momento
en que la venta quedó perfeccionada. (Lei
17, tít. 10, lib. 3, Fuero real; y lei 23, tít. 5,
P. 5.)
P. ¿ Siempre es del comprador el peligro
de la cosa?
R. Sin duda, si la cosa vendida es un cuer
po cierto y perece ántes de la entrega sin do
lo ni culpa del vendedor; pero seria lo con
trario, si la venta recayese sobre una cosa in
determinada de cierto género, ó si se hiciese
bajo condicion. (Leyes 24, 25, 20 y 27, tít. 5,
P. 5.)
P. ¿ k quién pertenece la Cosa qüe se ha
vendido por separado á dos personas ?
R. Al primero que pagó el precio, si se dió
á ambos la posesion; pero si solo el uno hu
DE LOS RETRACTOS. 135
biese tomado la posesion, adquiere el domi
nio, con tal que hubiese pagado el precio,
aunque sea el comprador posterior. (Leyes
50 y 51, tfí. 5, P. 5.)

TÍTULO XX.
DE LOS RETRACTOS.

P. Qué es retracto?
Jf?. El derecho que por leí, costumbre ó
pacto compete á ciertas personas para re
traer 6 tomar por el tanto la cosa vendida á
otro.
P. ¿ Cuántas y cuáles son sus principales
especies ?
R. Tres : retracto legítimo ó de abolengo ,
retracto de comunion ó sociedad , y retracto
convencional.
P. Cuál es el retracto de abolengo?
i?. El que tienen los parientes mas próxi
mos del vendedor hasta el cuarto grado por
su orden, para redimir ó quedarse por el mis
mo precio la cosa vendida á otro , con tal que
sea raiz y pertenezca al patrimonio de los
136 DE LOS RETRACTOS.
padres ó abuelos. (Leyes del tít. 13 , lib. 10,
N. R.)
P. ¿Cuánto tiempo tienen los parientes
para usar de este derecho?
R. Nueve dias, que corren contra los me
nores, ausentes é ignorantes , sin que se con
ceda el remedio de restitucion in integrum.
(Leyes 4 y 2, tít. 13, lib. 10 , N. R.)
P. ¿Qué sucederá, si durante los nueve
dias, y antes de hacerse uso de este derecho,
hubiere pasado la cosa á muchas manos?
R. El retrayente se subrogará en lugar
del primer comprador, entregándole el precio
que este hubiere dado ; y las demas ventas
quedarán deshechas y anuladas, restituyén
dose los precios á los compradores respecti
vos. ( Gómez, en la lei 70 de Toro , n. 35; y
Molina, de just. et jur., disp. 371.)
P. ¿Cuál es el retracto de sociedad ó co
munion?
R. El que tiene cualquiera de los socios ó
condueños de una cosa indivisa, para ser pre
ferido por el tanto en la compra de la parte
que alguno de ellos vende á otro que no lo es.
Del mismo modo debe ser preferido el dueño
directo ó el superficionario, si se vende la su
perficie ó el dominio directo. (Lei 55, tít. 5,
DE LOS RETRACTOS. 137
P. 5 ; y lei 75 de Toro, ó 9 , tít. 13 , lib. 10 ,
N. R.)
P. ¿ Qué tiempo se concede al socio ó co
munero, al dueño directo y al superficionario
para intentar sus retractos?
R . El de nueve dias , como á los parientes.
(Lei 9, tít. 13, lib. 10, N. R.)
P. ¿Cuál es el orden que se sigue, cuando
concurren al retracto un pariente , un comu
nero y un superficionario ?
R. En primer lugar debe preferirse el su
perficionario ó el dueño directo , en segundo
el socio ó comunero , y en tercero el parien
te. (Lei 74 de Toro, Ú8, tít. 13, lib. 10,
N. R.)
P. Cuál es el retracto convencional?
R. El pacto accesorio al contrato de venta,
por el cual se reserva el vendedor la facultad
de recobrar ó redimira cosa vendida dentro
de cierto término ó cuando quisiere, mediante
la restitucion del precio. (Lei 42, tít. 5,
P. 5.)
P. Cuánto tiempo dura el derecho de re
dimir, si no se ha señalado en la convencion?
R. Segun unos , siempre , y segun otros ,
solo veinte años , que es el término de las
acciones personales. (Gómez, 2, variar., cap.
138 DE LA PERMUTA Ó CAMBIO.
2, ra. 28 ; y Molina, de justitia et jvr., disp.
374.)
P. ¿ Puede intentarse el retracto conven
cional contra un tercer poseedor á quien hu
biere pasado la cosa vendida?
R. De ningun modo, porque esta acción es
meramente personal ; y así' es que en seme
jante caso podrá precisarse al primer com
prador á la satisfaccion de los perjuicios, ó
al recobro dela cosa vendida, si se hubiere
puesto la condicion de que no pudiera ven
derse á otro. (Leí 42, tít. 5, P. 5; Hermosilla
en sus glosas 7, 9 y 10 ; Ant. Gómez , 2 , var.
cap. 2 , ra. 29 ; y Molina , disp. 374.)

TÍTÜLO XXI.
DE LA PERMUTA Ó CAMBIO.

P. Qué es permuta?
R. Un contrato consensual, por el cual las
partes se dan respectivamente una cosa por
otra. La permuta puede considerarse como
una venta doble, en que cada una de las co
sas es á un mismo tiempo cosa vendida y
DE LA PERMUTA Ó CAMBIOT 139
precio de 1 otra , y cada uno de los con
trayentes es tambien á la vez vendedor y
comprador. (Proemio y lei i, tít. 6, P. 6.)
P. ¿A que está obligado el contrayente
que no quisiere cumplir el convenio?
R. Antiguamente solo estaba obligado á
pagar al otro los perjuicios que por esta razon
se le siguieren; pero ahora puede ser apre
miado al cumplimiento del contrato, como en
la venta. (Lei 3 , tít. 6, P. 8, y feí 1 , tít. 1 ,
lib. 10 , N. R.)
P. Qué derecho tiene el que cumplió por
su parte?
R. Puede apremiar al otro á que cumpla
por la suya , ó pedirle los perjuicios que ju
rare con la tasa del juez. (Lei 3, tít. 6, P. 5,
y lei i, tít. 1, Ub. 10, N. R.)
P. ¿Qué mas hai que decir acerca de la
permuta?'
R. Que se le pueden aplicar todas las de-
mas reglas prescritas para la venta. (Lei 4,
tít. 6, P. 5.)
TÍTULO XXII.
DEL ARRENDAMIENTO.

P. Qué es arrendamiento?
R. Un contrato consensua!, por el que una
de las partes se obliga á dar á la otra para
cierto tiempo el uso de alguna cosa, ó bien á
hacerle algun servicio , mediante cierto pre
cio convenido entre ellas. (Lei 1, tit. 8, P. 6.)
P. ¿ Cuáles son los requisitos esenciales de
este contrato?
R. La cosa , el precio , y el consentimiento
de los contrayentes , así sobre la cosa como
sobre el precio.
P. Quién es el arrendador?
R. El que da el uso ó la hechura de la cosa.
P. Quién es el arrendatario?
R. El que lo recibe. El arrendatario de un -
predio urbano se llama inquilino; y el de un
predio rústico , colono.
P. i Cuáles son las obligaciones del dueño
ó arrendador?
J?. Entregar al arrendatario la cosa en el
estado conveniente al uso para que la arrien
da ; — mantenerle en el disfrute de la misma
DEL ARRENDAMIENTO. 141
todo el tiempo prefijado en la convencion ; —
satisfacerle los perjuicios que se le siguieren
por impedírsele por su causa el uso de la
cosa , ó por tener la misma algun vicio , de
fecto óm al propiedad ; — abonarle las me
joras que aumentasen la renta de la cosa, —
y resarcirle los daños que le causare por su
negligencia ó impericia, en caso de ser arren
dador de obras , esto es , jornalero ú oficial.
(Leyes 6, 10, 14, 15, 21 y 24 , tít. 8, P. 5.)
P. ¿Cuáles son las obligaciones del arren
datario?
R. Cuidar de la cosa arrendada como si
fuese propia ;— pagar el precio al tiempo con
venido ó acostumbrado; — volver la cosa á
su dueño, concluido el tiempo del arriendo;
— y resarcirle los perjuicios que la cosa es-
perimentare por su culpa. (Leyes 4, 5, 6, 7
y 18, tít. 8, P. 5.)
P. ¿ Hai algun caso en que el arrendador
pueda despedir al arrendatario ántes de cum
plirse el tiempo del arriendo?
i?. Puede despedirle, si por una causa im
prevista necesitare la casa para habitarla él
mismo ó alguno de sus hijos; — si es indis
pensable repararla para que no se caiga ; —
si el inquilino hace mal uso de ella ; — y en
142 DEL ARRENDAMIENTO.
fin si este no paga el precio á su tiempo. (Lei
6, tít. 8, P. 5.)
P. ¿ Está obligado siempre el arrendatario
á pagar iodo el precio estipulado?
R. Si se pierden todos los frutos de la he
redad por un caso fortuito estraordinario, no
se le debe exigir cosa alguna del precio ; mas
si no se han perdido todos los frutos , se le
suele rebajar una parte del precio, á no ser
que la pérdida de un año se compense con la
abundancia de otro. (Leyes 22 y 23, tít. 8,
P. 5; Molina, de jvst. etjvr., tract. 2, disp.
49'i ; y Covar.; practic, cap. 30.)
P. Puede subarrendar el arrendatario?
R. Sin duda, con tal que no se le haya
prohibido por pacto. (L. 6, C. Locat.; Gó
mez y Ayllon, lib, 2, Variar, cap. 3, n. 11.
Mas esta regla está destruida en cuanto á las
tierras por real orden de 21 dejunio de 1768,
y por decreto de Cortes de 8 de junio de 1815,
restnblecido en 8 de setiembre de 1836; y en
cuanto á casas en Madrid, por la lei 8, tít.
10,lib. 10, Ar. R.)
P. Cómo se acaba el arriendo?
R. Por la conclusion del término, bien
que se entiende renovado si no se avisa á su
tiempo; — por cesar el derecho del dueño,
DE LOS CENSOS. 143
quien en tal caso deberá dar la correspon
diente indemnizacion; — y por muerte del
arrendador que no fuese mas que mero usu
fructuario. (Leyes 18 y 19, tít. 8 , P. 5 ; leyes
3 y 4 con su nota , tít. 10 , Hb. 10 , N. R.)

-oHo-

TÍTULO XXIII.

DE LOS CENSOS.

P. Qué es censo?
R. El derecho de percibir una pension
anual , mediante la entrega de alguna cosa.
P. Cómo se constituye?
R. Principalmente por contrato, que toma
tambien el nombre de censo , y algunas vezes
por testamento.
P. Cuántas especies hai de censos?
R. Tres : enfitéutico, reservativo y con-
signativo.
P. Qué es censo enfitéutico?
R. El derecho que tenemos de exigir de
otro cierto cánon ó pension anual en razon de
haberle trasferido para siempre ó para largo
tiempo el dominio útil de alguna cosa raiz,
144 DE LOS CENSOS,
reservándonos el directo. (Lei3, tít. 14 , P.
I; y lei-28, tít. 8, P.5.)
P. ¿ Cuáles son los derechos del enfiteuta,
esto es, del que paga la pension?
i?. Adquiere el dominio útil de la cosa ; —
puede venderla , empeñarla é imponer servi
dumbre sobre ella ; — y se liberta del cánon,
si se pierde la cosa de modo que no queda de
ella sino ménos de la octava parte. ( Leyes 28
y 29 , tít. 8 , P. 5 , con la glosa de Gregorio
López; y Molina, deprimog., lib. 1, cap. 20,
m. 2.)
P. ¿Cuáles son los derechos del dueño
directo ó censualista?
R. Se queda con el dominio directo ; —
cobra las pensiones ; — puede recuperar la
cosa, si dejan de satisfacérsele las pensiones
por espacio de tres años ; — puede tomar ó
retraer por el tanto la cosa censida siempre
que se venda, á cuyo efecto se le debe avisar
con la anticipacion de dos meses ; — y en
igual caso percibe del comprador la quin
cuagésima parte del precio por derecho de
laudemio. (Leyes 28 y 29, tít. 8, P. 5.)
P. Qué es censo reservativo?
R. El derecho que tenemos de exigir de
otro cierta pension anual en frutos ó en di
PE LOS CENSOS. 14-'j
ñero por haberle trasferido el dominio di
recto y útil de alguna cosa raiz.
P. ¿Cuáles son los derechos del censua
lista en el censo reservativo?
R. Solo el del cobro de la pension, de mo
do que el censatario queda dueño indepen
diente y absoluto de la cosa. (Covarrub., 3,
var., cap. 7; Molina, dejust. etjure,tract. 2,
disp. 381 ; Avendaño, de censibus, cap. 13.)
P. Qué es censo consignativo?
R. El derecho que tenemos de exigir de
otro cierta pension anual , por haberle dado
cierta suma de dinero sobre sus bienes raizes,
cuyo dominio directo y útil queda á favor
del mismo.
P. Cómo se- divide el censo?
R. Se divide en perpetuo y temporal. El
perpetuo se subdivide en irredimible ó muer
to y en redimible ó al quitar. El temporal se
constituye ó bien para número cierto de afios,
como veinte ó treinta ; ó bien para un tér
mino incierto, como durante la vida del cen
sualista , censatario ú otra persona; en cuyo
caso se Uama vitalicio. (Molina, tract. 2, disp.
383.)
P. ¿ Cuáles son las cosas que deben consi
derarse en el censo?
146 DE LOS CENSOS.
R. La cosa en que se funda el censo , el
precio que se llama capital, y la pension ó
rédito.
P. ¿En qué cosas puede constituirse el
censo?
R. En cosas raizes y fructíferas , y en de
rechos perpetuos ó que se consideran tales»
(Avendaño, de censibus, cap. 50- y sig.; y
Cencío, de censibus , y. 29. )
P. Qué hai que decir sobre el precio ?
R. Que debe ser proporcionado- á la pen
sion.
P. Qué proporcion debe tener la pension
con el precio ó capital ?
R. En el censo redimible debe ser la pen
sion al tres por ciento ; en el vitalicio de una
vida al diez ; en el vitalicio de dos vida-s al
ocho y un tercio ; en el irredimible al dos ; y
en el enfliéutico al uno y medio ; ó^segun uso
y costumbre en estos dos últimos. ( Leyes 3 ,
6, 8, 9, 12, 13 y 22, tít. 15, lio. 10, Ñ. JR. ;
Covarrub. 3, variar., cap. 9 y sig.\ Avend.,
cap. 32; y Molina, disp. 385.)
P. ¿ Se anula el contrato de censo por el
hecho de establecer una pension mas alta que
la prescrita ?
R. No se anula , sino que se reforma con
DE LOS CENSOS. 147
la rebaja del esceso. ( Leyes 6 y 8, y notas 1 y
2, tít. 15, lib. 10, TV. Avendaño, cap. 36;
y Larrea, alegac. 25, n. 8. )
P. De quién deben exigirse las pensiones ?
R. Del poseedor de la finca sobre que está
impuesto el censo, aunque sean anteriores al
tiempo en que la posee , bien que tiene re
curso contra su antecesor, y el acreedor pue
de pedirlas indiferentemente al uno ó al otro.
(Leí 7, C. de publ. et vectig.; Covarrub., 3,
var., cap. 7 ; Molina, disp. 534. )
P. Cómo se eslihgue el censb?
í?. Por perecer enteramente la Cosa, ó ha
cerse infructífera en un todo y para siempre ;
— por el abandono que hiciere de ella el cen
satario á favor del censualista ; — por la pres
cripcion de treinia años con buena fe; — y
por la redencion, restituyendo el capital al
censualista. ( Avendaño, cap. 60, 107 y 110;
Molina, disp. 385 ; Vela, disert. 3i y 35; Gó
mez, % var. cap. 11, n. 45.)
P. ¿Puede el censualista obligar al cen-
satnrio á la redencion del censo?
í?. No puede ; antes por el contrario el cen
satario tienfe la libertad de redimirlo cuando
quisiere; en inteligencia de que ya no hai
censo que sea irredimible. ( Feliciano, de cen
148 DE LA SOCIEDAD.
sibus, lib. 1, cap. 8; y leyes 21 y sig., tít. 15,
Hb.íO,N.R.)

TÍTULO XXIV.

DE LA SOCIEDAD.

P. Qué es sociedad?
R. Un contrato consensual, por el que dos
ó mas personas se convienen en reunir sus
capitales ó industria con el objeto de hacer
alguna ganancia y partírsela entra ellas. ( Lei
1, tít. 10, P. 5.)"
P. De cuántas maneras es?
jF?. Universal, que comprende todos los
bienes ; y singular, que tiene por objeto una
cosa especial ó un negocio determinado. ( Lei
3, tít. 10, P. 5. )
P. Cómo se reparte la ganancia?
R. Cada socio debe participar de la ganan
cia ó de la pérdida con proporcion á los fon
dos que puso, á no ser que se hubiere seña
lado la pane que habia de darse á cada uno.
( Leyes 3, 4, 5 y 6, tít. 10, P. 5 . )
DE LA SOCIEDAD. 149
P. Cuál es la que se llama sociedad leo
nina ?
R. Aquella en que resulta que uno se lleva
toda la ganancia ó soporta toda la pérdida ;
y esta sociedad es nula. (Lei 4, tít. 10, P. 5.)
P. ¿ De qué se responden los socios mu
tuamente ?
R. Del dolo y de la culpa leve , porque la
sociedad se contrae en beneficio de todas las
partes. ( Lei 13, tit. 10, y leyes 22 y 23, tit.
14, P. 5.)
P. Cómo se acaba la sociedad ?
R. Por la espiracion del tiempo para que
se contrajo; — por la estincion de la cosa
que era objeto de la sociedad ; — por la ter
minacion del negocio; — por la muerte na
tural ó civil de alguno de los socios ; — pur
la cesion ó confiscacion de bienes de cual
quiera de ellos ; — y por la renuncia que hi
cieren uno ó muchos, con tal que no sea frau
dulenta ni intempéstiva. (Leyes 10 y 11, tít.
10, P. 5.)
P. Cuándo es fraudulenta la renuncia?
R. Cuando el socio renuncia por apro
piarse á si solo la utilidad que se habían pro
puesto sacar todos en comun. (Lei 12, tit. 10,
P.5.)
13.
150 dé La sociedad.
P. ¿Qué pena tiene el socio que hace una
renuncia fraudulenta ?
R. La de hacerse partícipe de las pérdidas
y no de las ganancias , que los demás socios
tuvieren en lo sucesivo, y la de darles la par
te respectiva de las ganancias que él hiciere.
(Leií% tít. 10, P. 5.)
P. Cuándo es intempestiva la renuncia?
R. Cuando se ha dado ya principio al ne
gocio , y no puede disolverse la sociedad sin
perjuicio de los socios.
P. ¿ A qué está obligado el socio que hace
la renuncia intempesliva1?
R. A indemnizar á los demas de todos los
perjuicios que se les siguieren ; á no ser que
tuviere justa causa para renunciar, como si
alguno de los socios falta á sus empeños , ó
se ausenta en comision del rei ó del concejo,
ó es tan bravo que no se le puede sufrir.
(Leyes 11 y 14, tít. 10, P. 5.)

-oHo-
TÍTULO XXV.

DEL MANDATO.

P. Qué es mandato ?
R. Un contrato consensual, por el que una
persona toma á su cargo el desempeño de los
negocios que otra le confía. Al principio no
es mas que un acto del mandante, que luego
se convierte en contrato por la aceptacion
espresa ó tácita del mandatario.
P. Cómo se da el mandato?
R. Por escritura pública ó privada, ó por
carta, ó de palabra, y aun tácitamente, como
cuando uno permite que otro desempeñe sus
negocios. (Leyes 12 y 24, tit. 12, P. 5.)
P. De cuántas maneras es?
i?. Especial, que tiene por objeto un ne
gocio determinado , como vender, hipotecar
ó transigir ; y general , que abraza todos los
negocios del mandante, como la administra
cion de su hacienda.
P. El mandato es gratuito?
R. Lo es por su naturaleza, á no haber con
vencion en contrario ; bien que en este caso
degeneraría en arrendamiento ó locacion.
152 DEL MANDATO.
P. ¿Cuáles son los deberes del manda
tario?
H. Cumplir su encargo con fidelidad y
exactitud ; — responder del dolo y de las
faltas que cometiere; — limitarse al poder;
— y dar cuenta de su gestion. (Leyes 20, 21,
22, 23, 26, 27, 29 y 31, tít. 12, P. 5 ; lei 19,
tít. 5, P. 3; y lei 11, tít. 10, lib. 1, íwero
real. )
P. Cuáles son los del mandante ?
R. Ejecutar los empeños contraidos por el
mandatario en virtud del poder; — y reem
bolsarle los adelantos que hubiere hecho.
(Leyes 20, 21 y 25, tít. 12, P. 5 ; y lei 51, tít.
5, P. 5.)
P. Cómo se acaba el mandato?
R. Por revocacion del mandante; — por
renuncia del mandatario , con tal que no sea
intempestiva ó sin justa causa ; — y por la
muerte natural ó civil de cualquiera de los
dos contrayentes (Lei 2, tít. 10, lib. 1, Fuero
real; y la opinion coman. )
TÍTULO XXVI.

DE LA ESTIPULACION Ó PROMESA.

P. Qué es estipulacion ?
R. Un contrato verbal, por el que uno pro
mete á otro que hará ó le dará lo que le pide.
(Lei 1, tít. 11, P. 5.)
P. Por qué se llama verbal este contrato?
R. Porque antiguamente consistía en cier
ta fórmula precisa y determinada, por la que
respondiendo uno á la pregunta de otro, le
prometía dar ó hacer lo que le pedia. (Lei 2,
ta. n, p. 5.)
P. ¿ Está obligado cualquiera á cumplir lo
que promete ?
R. No hai duda , con tal que sea capaz de
prometer, y la promesa sea aceptada; de
modo que la persona á quien se hubiere he
cho la promesa, tiene derecho de pedir la in
demnizacion de los daños que se le siguieren
por la falta de cumplimiento. (Leyes 1, 10 y
13, tít. 11, P. 5.)
P. ¿Cómo puede hacerse la estipulacion ó
promesa?
154 DE LA ESTIPULACION O PROMESA.
R. De todos los modos que se quiera : pu
ramente , sin fijar época ni condicion ; y en
este caso puede pedirse desde luego la cosa
prometida : — señalando algun dia determi
nado; y entonces no puede pedirse la cosa
hasta que venga el dia; pero si la da ántes el
promitente, no la puede repetir, porque es
indudable que ta! dia ha de llegar ; y si mue
re ántes de la época señalada alguno de los
contrayentes , quedan en sus herederos los
efectos de la promesa : — Analmente, bajo
condicion; en cuyo caso no puede pedirse la
cosa hasta despues del cumplimiento de la
Condicion ; mas en cualquier tiempo que esta
se verifique, aunque sea despues de la muer
te de los contrayentes , se trasmite á los he
rederos el derecho que resulta de la obliga
cion. (Leyes 12, 13, 14, 15 y 17, tít. it, P. 5 ;
y lei 32, tít. 14, P. 5. )
P. Si dos personas prometen una misma
cosa, ¿ puede pedirse toda á cada una de
ellas ?
R. Si la han prometido simplemente, no
puede pedirse á cada una mas que la mitad ;
pero si la prometieron espres-amente in soli-
dum, puede cada una ser reconvenida por el
todo , porque cada uno de los deudores soli—
DE LA FIANZA. 155
darios es responsable del total, de forma que
hecho el pago por uno de ellos, quedan li
bres los otros. (Lei 16, tit. 11, P. 5 ; lei 10,
tit. i, lib. 10, N. R. ; y Azevedo, en el comen
tario de d. lei 10.)
JP. Y si dos personas estipulan ó se hacen
prometer solidariamente una misma cosa,
¿podrá cada una de ellas exigirla toda?
R. No hai duda , porque toda la deuda se
debe á cada uno de los acreedores solidarios,
de modo que hecho el pago á uno de ellos ,
queda estinguida la obligacion para con los
demas. (Lei 16, tit. 11, P. 5.)

TÍTULO XXVII.

DE LA FIANZA.

P. Qué es fianza?
R. Un contrato, por el cual un tercero to
ma sobre sí el cumplimiento de una obliga
cion ajena, para el caso de que no la cumpla
el que la contrajo. (Proemio y lei 1 , tit. 12,
P. 5.)
P. Quiénes pueden ser fiadores ?
156 DE LA FIANZA.
R. Todos aquellos á quienes no está pro
hibido por la lei. Están comprendidos en la
prohibicion, — los menores, — los dementes,
— los pródigos, — los soldados, — los obis
pos, — los labradores, sino entre sí mismos,
— y las mujeres, sino por su propia utilidad,
ó bien renunciando este privilegio. (Leyes 1,
2, 3 y 4, tit. 12, P. 5; lei 3, tít. 11 , lib. 10,
N. R.; y lei 16, tit. 31, lib. 11, N. R. )
P. Qué especie de obligaciou e sla fianza ?
R. Accesoria, pues tiene por objeto asegu
rar el cumplimiento de otra obligacion prin
cipal.
P. ¿Puede el fiador quedar obligado á mas
' que el deudor principal?
R. No puede obligarse á mas en cuanto á
la cosa misma, ni en cuanto á los plazos del
pago, ni en cuanto á la causa de la deuda;
pero puede quedar obligado mas estrecha
mente. Asi es que el deudor principal no pue
de ser apremiado á cumplir una obligacion
natural , y puede serlo el fiador, esceptuando
un corto número de casos. (Leyes 5^7, tít.
12, P. 5. )
P. ¿Puede el acreedor exigir la deuda del
fiador, ántes de proceder contra el deudor
principal ?
DE LA FIANZA. 157
R. No puede, sino despues de haber soli
citado el cobro inútilmente del deudor, á no
ser que este se halle insolvente por notorie
dad, ó ausente ú oculto. (Lei 9, tít. 12, P. 5.)
P. Cuando hai muchos fiadores, ¿cómo
quedan obligados?
R. Si se obligaron simplemente , solo pue
den ser reconvenidos á prorata; mas si se
obligaron solidariamente, puede cada uno
de ellos ser reconvenido por el todo, sin mas
arbitrio que el de pedir al acreedor le ceda
sus acciones contra sus compañeros en la fian
za , para reclamar de ellos la satisfaccion de
la parte que les corresponda. ( Leyes 8 , 10 y
11, tü. 12, P. 5; y lei 10, tít. i, lib. 10,
N. R.)
P. ¿En qué casos puede pedir el fiador
que se le liberte de la fianza?
R. Cuando hace ya mucho tiempo que se
halla comprometido en ella; — cuando pasó
ya el dia hasta el cual se constituyó fiador ;
— cuando observa que el deudor empieza á
malgastar sus bienes ; — y cuando el acree
dor alarga el plazo del cumplimiento de la
obligacion principal sin consentimiento del
mismo fiador. ( Leyes 8 y 10, tít. 18, lib. 3,
Fuero real; y lei 14, tít. 12, P. 5. )
158 DEL MUTUO Ó PRÉSTAMO.
P. Cómo se eslingue la fianza?
R. Por la estincion de la obligacion prin
cipal , y por la liberacion en los casos que se
acaban de espresar.

-m>-

títu^oi xxvm.
DEL MUTUO Ó PRÉSTAMO.

P. Qué es mutuo?
R. \)n contrato real , por el que una de las
partes entrega á la otra cierta cantidad de
cosas fungibles ó que se consumen por el
primea uso- que se hace de ellas, con la obli
gacion de restituir otro tanto de la misma
especie y calidad. (Leii, tít. 16, lib. 3, Fuero
real; y lei i, tít. 1, P. 5. ) — Véase el titulo
de la Obligacion literal.
P. ¿Quién corre con el peligro de la cosa
prestada ó dada en mutuo?
R. El mutuaiario, porque se hace dueño
de ella , y la cosa perece para su dueño. ( Lei
iO, tít. 1, P. 5.)
P. Quién puede prestar ó dar en mutuo?
R. El que tiene la libre disposicion de sus
bienes. (Lei % tít. i, P. 5.)
DEL MDTUO Ó PRÉSTAMO. 159
P. A quién puede prestarse?
R. A todos, ménos á los hijos de familia
sin consentimiento de los padres; y á nadie
puede prestarse cantidad alguna en merca
derías ú otros géneros. Es de advertir, que
para cobrar el préstamo que se hiciere á un
menor, ciudad, villa ó iglesia, se necesita
probar que se empleó en utilidad suya, (te-
yes 3 y 4, tít. i, P. 5;y leyes 2 y 3, tít. 8, lib.
10, N. R.)
P. Cuál es la obligacion del mutuatario?
R. Volver al mutuante igual cantidad de
la cosa prestada , de la misma especie y de
tan buena calidad , en el tiempo y lugar que
hubieren señalado, débiendo pagarle ademas
en caso de morosidad los perjuicios que se le
siguieren. (Leyes 2, 8 y 10, tít. 1, P. 5. )
P. ¿ Y si no se encontrase cantidad algu
na de la misma especie ?
R. Se cumplirá con dar el precio de la co
sa , no el que tenia cuando se prestó, sino el
que se estimare en el dia y lugar en que ha
bía de pagarse, ó en que se pidiere en juicio.
(Lei 8, tít. 1, P. 5.)
P. ¿ Puede el mutuante llevarse algun in
teres por el mutuo?
R. No ptiede,- porque el mutuo es gratuito,
160 DEL COMODATO.
escepto el caso de que haya daño emergente
ó lucro cesante , esto es , cuando el mutuante
sufre alguna pérdida ó se priva de alguna ga
nancia por razon del mutuo.
P. ¿ Cuál es el interes que puede llevar el
mutuante por razon de daño emergente ó
lucro cesante ?
R. No debe esceder del seis por ciento al
año.

TÍTULO XXIX.

DEL COMODATO.

P. Qué es comodato?
R. Un contrato real, por el que una de las
partes entrega á la otra una cosa no fungible,
para que se sirva de ella por cierto tiempo ,
y la restituya despues. (Proem. y leí 1, tit. 2,
P. 5 ; y lei i, tit. 16, lib. 3, Fuero real.)
P. Quién corre con el riesgo de la cosa?
R. El comodante , que continúa siempre
siendo su dueño ; á no ser que hubiere culpa
ó tardanza del comodatario, ó pacio de lo
DEL COMODATO. 161
contrario. (Lei 1, tit. 16, lib. 3, Fuero real;
y lei 3, tit. 2, P. 5.)
P. Qué cosas pueden darse en comodato?
i?. Las que están en el comercio, y no se
consumen por el primer uso que se hace de
ellas, como por ejemplo, un caballo, un car
ruaje , un libro. (Lei 1 , tit. 1 , P. 5.)
P. ¿Cuáles son las obligaciones del como
dante?
R. Responder de los perjuicios que cau
sare la cosa prestada , por vicios ó defectos
que no hubiere manifestado sabiéndolos ; —
no pedir la cosa ántes del tiempo convenido,
á no ser por una necesidad imprevista ; — y
abonar al comodatario los gastos estraordi-
narios qile hubiere hecho para la conserva
cion de la cosa, mas no los ordinarios. (Lei
4, tit. 16, lib. 3, Fuero real; y leyes 6 y 7, tü.
2,P.5.)
P. ¿ Cuáles son las obligaciones del como
datario ?
R. Cuidar de la cosa prestada como buen
padre de familia . de suerte que habrá de
prestar la culpa levísima ; — no emplearla si
no en el uso determinado por la convencion ;
— pagar los gastos ordinarios que causare;
— y restituirla al tiempo convenido. (Leyes 2,
14.
162 BEL DEPÓSITO.
3, 5, 7 y 9, iit. % P.5,y lei 4, ttt. 16, iib\ 3,
Fuero real.)
P. ¿ Debe el comodatario pagar algun in
teres al comodante por el uso de la cosa?
R. Este contrato es esencialmente gratuito ;
y en caso de esiipularse algun interes dege
neraría en arriendo ó alquiler. (Lei 1, ttt. 2,
P. 5.)

TÍTULO XXX.

DEL DEPÓSITO.

P. Qué es depósito?
R. Ün contrato real, por el que una de las
partes se encarga gratuitamente de guardar
la cosa de la otra con la condicion de resti
tuírsela, cuando se la pidiere. (Lei 1 , ttt. 3,
P.5.)
P. De cuántas maneras es?
R. De dos .- voluntario y necesario.
P. Cuál es el voluntario?
R. El <¡ue se forma por el consentimiento
reciproco de la persona que lo hace y de la
DEL DEPÓSITO. 163
que lo recibe; y este es verdadero contrato.
(Lei'i, íít. 3, P. 5.)
jP. Y el necesario ?
R. El que so hace en fuerza de algun acci
dente imprevisto, como incendio, ruina ó nau
fragio. (Lei 1, ttt. 3, P. 5 )
P. Qué cosas son objeto de este contrato?
R. Regularmente las muebles. (Lei 2 , ttt.
5, P. 5.)
P. Cuáles son los deberes del depositario?
R. Cuidar de la cosa depositada como si
fuese propia ;—no servirse efe ella sin el con
sentimiento del depositante ; — y restituirla á
este con sus frutos cuando le fuere pedida,
sin poderla retener por razon de deuda.
(Leyes 2, 3, 5, 6 y 10, tü. 3, P. 5 ; lei 3, tü.
14, P. 1 ; leyes 5 y 6, ttt. 15, lib. 3, Fuero real.)
P. Cuáles son los deberes del depositante?
i?. Reembolsar al depositario los gastos
que hubiere heiho para la conservacion del
depósito, y pagarle asimismo los daños que
hubiere por vicio ó defecto de la cosa depo
sitada , si sabiéndolo no lo puso en su noticia.
(Lei 10, tít. 3, P. 5.)
P. ¿Cuál es la pena del depositario que
niega el depósito?
R. La infamia y el pago de las costas y
164 DE LA PRENDA É HIPOTECA.
perjuicios ; y si el depósito fuere necesario ,
la estimacion doblada. (Lei 8, tit. 3, P. 5.)

-oHo-

TÍTÜLO XXXI.

DE LA PRENDA É HIPOTECA.

P. Qué es prenda?
R. Un contrato real, por el que el deudor
entrega una cosa al acreedor para seguridad
de la deuda. Aplícase tambien el nombre de
prenda á la misma cosa empeñada. (Proem.
y lei i, tit. 13, P. 5.)
P. ¿ Qué cosas pueden empeñarse ó darse
en prenda?
/?. Todas las que son capazes de dar segu
ridad al acreedor, sean corporales ó incor
porales , presentes ó futuras, muebles ó in
muebles , propias ó ajenas. (Leyes 2 , 3 y 9 ,
tit. 13, P. 5.)
P. ¿A quién pertenecen los frutos de la
cosa empeñada? al acreedor ó al deudor?
R. Al deudor, porque al acreedor no pasa
el domiuio ni el uso de la prenda, sino solo
DE LA PRENDA É HIPOTECA. 165
la custodia, como en el depósito; de modo
que está reprobado el pacto anticrético, re
ducido á que el acreedor perciba como in
tereses los frutos de la prenda (Leyes 2 y 20,
tít. 13 , P. 5.) : bien que será lícito , cuando
hai lucro cesante ó daño emergente.
P. ¿ Cuáles son los deberes del acreedor
con respecto á la prenda?
R. Cuidarla como cosa propia ;—no hacer
uso de ella , sino cuando intervenga el pacto
anticrético en los casos que es lícito ; — y
restituirla, luego que le fuere satisfecha la
deuda. (Leyes 15, 20 y 21, tít. 13, P. 5 ; y lei
3, tít. 19, lib. 3, Fuero real.)
P. Cuáles son los del deudor ?
R. Mantener al acreedor en posesion de la
prenda hasta el pago de la deuda ; — darle
otra prenda, si la primera quedase nula por
alguna razon ; — y satisfacerle los gastos he
chos en su conservacion. (Leyes 10, 15, 21 y
35, tít. 13, P. 5.)
P. ¿ Qué derechos tiene el acreedor sobre
*la prenda?
R. El de hacerse pagar con ella, con pre
ferencia á los demas acreedores. '
P. Qué es hipoteca ?
R. Un derecho real que tiene el acreedor.
166 DE LA PRENDA É HIPOTECA.
sobre los bienes raizes que le ha obligado el
deudor para pago de la deuda.
P. En qué se diferencia de la prenda?
R. En que la prenda consiste regularmente
en cosas muebles, y la hipoteca en raizes : en
la prenda se entrega la cosa al acreedor ; y
en la hipoteca se queda coa día el deudor,
quien no traspasa al acreedor sino un dere
cho á la cosa hipotecada, en el caso de que no
se le satisfaga la deuda.
P. De cuántas maneras es la hipoteca ?
R. Legal, judicial, convencional, general
y especial. (Leyes 1 y 5, tít. 13, P. 5.)
P. Cuál es la legal ?
R. La que resulta de la lei; como por
ejemplo, la que tiene la mujer en los bienes
del marido para la restitucion de la dote, la
del menor en los del tutor para la entrega de
los de la tutela , y la del dueño de una casa
en los muebles del inquilino para el cobro de
los alquileres. (Leyes 1 y 23, tít. 13, P. 5;
lei 17, tít. 11 , P. 4 ; lei 5, tít. %,P-. 5;ylet
ft, tít. 17, lib. 3, Fuero real.)
P. Cuál es la judicial?
R. La que resulta de alguna sentencia ó
auto de un tribunal de justicia. (Lei 1, tít. 13.
P. 5.)
DE LA PRENDA K HIPOTECA. 16"
P. Cuál es la convencional?
R. La que se constituye por voluntad de
las partes. (Lei i, tít. 13, P. 5.)
P. Cuál es la general?
R. Aquella en que el deudor obliga los
bienes que tiene y tendrá en lo sucesivo;
entendiéndose esceptuados los vestidos, ca
ma, utensilios de cocina, instrumentos del
oficio ó profesion , y otras cosas semejantes.
(Leyes 4 y 5, tít. 13, P. h.)
P. Cuál es la especial ?
R. Aquella en que el deudor obliga alguna
cosa determinada. (Lei 7, 1ít. 19, lib. 3, Fue'
ro real.)
P. ¿Cuál es el derecho del acreedor sobre
la hipoteca especial y la prenda?
R. El de hacerse pagar con ella , con pre
ferencia á los demas acreedores, aunque se
halle en poder de un tercer poseedor. (Leyes
12, 14, 41, 42 y 44, tít. 13, P. 5; y lei 1, tít.
19, lib. 3, Fuero real.)
P. Cuando hai muchos acreedores hipo
tecarios y no hipotecarios, ¿cuál es el orden
que debe seguirse en los pagos ?
R. Primeramente deben ser satisfechos
los que vienen con derecho de dominio , co
mo por ejemplo , los que reclaman un caba
168 DE LA PRENDA É HIPOTECA.
lio depositado ó prestado. (Lei 9, tít. 3, P. 5;
lei 2, tít. 3, P. 5; lei 1, tfí. 1, /'. 5; ¿e¿ 1 ,
tfí. 8, P. 5 ; ¿eí 46, tó. 28, P. 3.) En segundo
lugar, los de los gastos de la última enferme
dad , de entierro , de justicia y otros seme
jantes que por su calidad tienen preferencia
sobre los demas. (Lei 12, tít, 13, P. 1; lei
30, tü. 13, P. 5; lei 8, tít. 6, P. 6; y Gó
mez , en la lei 30 de Toro. ) En tercer lugar ,
los hipotecarios privilegiados ; cuales son , el
fisco , la mujer por su dote , y los que fiaron
para comprar , reparar ó conservar la hipo
teca, segun la respectiva anterioridad de sus
créditos. (Leyes 26, 28, 29, 30 y 33, tít. 13,
P. o; lei 5, tít. 8, P. 5 ; lei tí, tít. 11, lib. 10,
N. R. ; y lei 15, tít. 31, lib. 11 , N. R.) En
cuarto lugar , los hipotecarios que no tienen
privilegio, segun la anterioridad de sus cré
ditos , sin distincion de hipoteca tácita ó es
presa, esto es, legal ó convencional. (Lei 27,
tít. 13, P. 5. ) En quinto lugar, los que pu
sieron por via de depósito en poder del deu
dor dinero ú otra cosa que conste de núme
ro, peso ó medida. ( Lei 9, tít. 3, P. 5; leyes
11 y 12, tít. ik, P. 5. ) En sesto lugar, los
acreedores personales ; entre los cuales se
debe pagar primero á los que prueban sus
DE LA PRENDA É HIPOTECA. 169
créditos con escritura pública , luego á los
que prueban con documento privado escrito
en el papel sellado que corresponde , y des
pués á los que los apoyan en documento pri
vado escrito en el papel comun, ó en contra
tos verbales. (Lei 5, tít. 24, lib. 10, N. R.;
leyes 4 y 5, tít. l>8, lib. 11 , N. R. ; lei 31,
tü. 13, P. 5; y lei 11, tít. 14, P. 5.)
P. ¿ Qué sucede cuando concurren dos ó
mas acreedores de una clase?
R. Es preferido el que tiene el derecho
mas antiguo, (qui prior est tempore, potior est
jure ) con tal que conste plenamente la ante
rioridad ; pero si esta no puede justificarse
de un modo indudable, como acontece cuan
do no se presentan sino documentos priva
dos escritos en papel comun , tienen que ser
pagados á prorata de sus créditos respecti
vos. (Lei 27, tít. 13, P. 5; lei 5, tít. 24, lib.
10, N. R.; lei 11, tít. 14, P. 5.)
P. ¿Cómo se acaba la obligacion de pren
da é hipoteca?
R. Por la estincion de la obligacion prin
cipal ; — por la pérdida de la cosa empeña
da sin culpa del deudor; — por la condona
cion espresa ó tácita ; — por la prescripcion
13
170 DE LA OBLIGACION LITERAL.
de treinta años con buena fe. (Leyes 38 y 40,
tít. *3, P. 5.)

TÍTULO XXXII.

DE LA OBLIGACION LITERAL.

P<. Qué es obligacion literal ?


R. La necesidad en que se pone de pagar
una deuda que quizá no lia contraido, el que
entrega á otro un va'e ó escrito privado, con
fesando haber recibido de él en mutuo algu
na cantidad, y deja pasar dos años sin recla
marlo. ( Lei % tít. 1, P-, 5.)
P. ¿ Por qué se llama literal esta obliga
cion-?;
Porque nace precisamente, no del présr
tamo, sino del vale ó escrito dado y no recla
mado en el término de los dos años.
P- ¿Qué h&ré. el que entregó el vale, si
dentro de los dos años se le pide la cantidad
que no recibió?
R. Oponer la escepcion non numerate? pe
cunia; en cuyo caso es de cargo del acree
dor el probar la entrega del dinero^ á no ser
DE LA DONACION. 171
que el otro hubiese renunciado la escepcion,
( lei 9, Ht. 1, P. 5. J
P. ¿ Y si se le pide despues de los dos
años?
R. No puede ya libertarse del pago , al
cual está obligado en razon del vale; y por
eso para evitar este caso, debe reclamarlo
dentro del término de los dos años , alegan
do no haberle sido entregado el dinero. ( Lei
!), tít. 1, P. 5.)

TITüLO XXXI1Í. .

BE LA DONACION.

P. Qué es donacion?
R. Un acto por el cual el donador se des
poja gratuitamente de una cosa suya en favor
de otra persona. (Proem. y lei l,iít. 4, P. 5.)
P. De cuántas maneras es?
R. De dos : donacion entre vivos, y dona
cion por causa de muerte.
P. Cuál es la donacion entre vivos?
R. La que se hace actual é irrevocable
mente á favor de una persona que la acepta.
172 DK LA DONACION.
(Lei 1 , tít. 4, P. 5; y lei 6, tit. 12, lib. 3,
Fuero real. )
P. Y la donacion por causa de muerte?
R. La que se hace por via de manda en
consideracion de la muerte que se teme. ( Lei
11, tít. 4, P. 5 ; y lei í, tít. 7, lib. 10, N. R.)
P. ¿En qué se diferencian la donacion en
tre vivos y la donacion por causa de muerte ?
R. La donacion entre vivos puede hacerse
á solas ; la donacion por causa de muerte de
be hacerse delante de tres testigos. La pri
mera necesita de insinuacion , esto es , de
manifestacion ante el juez para que la aprue
be, si pasa de quinientos maravedís de oro,
ménos cuando se hace por razon de dote ó
casamiento, por la nacion ó á la nacion, para
redimir cautivos ó para algun establecimien
to de piedad ; mas la segunda no necesita de
semejante autorizacion. — La primera es ir
revocable, á no ser que despues sobrevengan
hijos al donador, ó el donatario cometa al
gun acto grave de ingratitud ; mas la segun
da puede revocarse. — La primera trasfiere
el dominio mediante la entrega ; mas la se
gunda lo trasfiere aun sin la entrega, con tal
que muera el donador ántes que el donata
rio, sin arrepentirse de la donacion. — Final
DE LA DONACION. 173
mente en la primera hai lugar al beneOcío de
competencia , es decir, no se puede pedir al
donador mas de lo que puede dar despues
de atender á su manutencion ; mas la segun
da está sujeta á la detraccion de la cuarta fal-
cidia (tít. XII), por ser mui semejante al le
gado. (Leí 1 , tü. 18 , lib. 10 , ¿V. R. ; leyes 4 ,
8, 9, 10 y 11, tít. k,P.b;y lei 1, tít. 11, P. 6. )
P. Quiénes pueden donar ?
R. Entre vivos, los que tienen la libre ad
ministracion de sus bienes ; y por causa de
muerte, los que pueden hacer testamento.
Mas las donaciones que se hacen mutuamen
te los cónyuges, solo son válidas, cuando no
se hace mas pobre el donador ni mas rico
el donatario, ó cuando el donador muere sin
haberlas revocado. — Sobre las donaciones
de los padres véase el título de las mejoras.
(Leyes 1 , 3 y 11 , tít. 4, P. 5 ; leyes 54, 55 y
56 de Toro ; y leyes 4, 5 y 6, tít. 11 , P. k. )

15.
TITULO XXXIV.

DE LA ASEGURACION.

P. Qué es aseguracion ó seguro ?


R. Un contrato por el que una de las par
tes toma á su cargo , mediante cierto precio ,
él daño que la otra puede esperimeritar en
sus cosas por los accidentes ó casos fortuitos
á que las tiene espuestas. Hai seguros contra
el incendio, contra el granizo, contra los ries
gos que corren por mar ó tierra los géneros
despachados para un pais disiante.
P. ¿ Cuál debe ser el precio de la asegu
racion ?
U. El que sea proporcionado al mayor ó
menor peligro de la cosa que se asegura.
Este precio se llama premio ó prima.
P. Qué es lo que anula este contrato?
Ji. La mala fe del asegurador ó del ¡.segu
rado, como sucede en todos los demas.

-oÜ<>-
TÍTULO XXXV.
DE LOS CUASI-CONTRATOS.

P. Qué es cuasi-contrato?
R. Un hecho lícito puramente voluntario ,
de que resulta obligacion á favor de un ter
cero , y algunas vezes obligacion recíproca
entre dos partes.
P. ¿ Cuáles son 1 as especies mas comunes
del cuasi-contrato?
R. La administracion de bienes ó negocios
ajenos sin mandato de su dueño, llamada por
los romanos negotiorum geslio; — la de la tu
tela ó curatela ; — la de una rosa comun ; — la
admision de herencia ; — y la paga de lo inde
bido.
P. ¿ Qué obligaciones produce la admi
nistracion de bienes ajenos sin mandato del
dueño?
R. El que toma á su cargo espontánea
mente el cuidado de los bienes ó negocios de
otro que lo ignora, esté obligado : I° á des
empeñar en utilidad del dueño la adminis
tracion ó negocio de que se ha encargado ;
— 2° á prestar la culpa leve, y si se antepuso
176 DE LOS CUASI-CONTRATOS.
á otros mas idóneos y zelosos , la levísima ;
pero si se metió en tal cuidado por evitar la
pérdida de las cosas que halló en absoluto
desamparo , solamente prestará la culpa lata
y el dolo ; y finalmente, si emprendiere algu
na cosa peligrosa y aventurada que no acos
tumbraba hacer el dueño, tambien el caso
fortuito; — 3o á dar cuentas al dueño y en
tregarle los productos, con baja de las espen-
sas tanto útiles como necesarias. — El dueño
de los bienes ó negocios que han sido bien
administrados , tiene por su parte la obliga
cion de cumplir los empeños que ha contraí
do en su nombre el gerente ó administrador;
y de reembolsarle todos los gastos útiles ó
necesarios que hubiere hecho. (Leyes 26, 27,
28, 29, 30, 33, 34, 35 y 36, tit. 12, P. 5 ; y
lei 35, tit. 14, P. 5.)
P. Qué obligaciones produce la tutela?
R. De parte del tutor, la de dar cuentas y
prestar la culpa leve ; y de parte del pupilo,
la de indemnizar al tutor de los gastos que
hubiere hecho en su beneficio. (Lei 2, tit. 7,
lib. 3, Fuero real. )
P. i Qué hai que decir sobre la comunion
ó indivision de bienes?
R. Los que poseen una cosa en comun, in
DE LOS CUASI-CONTRATOS. 177
dependientemente de toda convencion, están
obligados mutuamente á la particion de la
cosa y á la rendicion de cuentas. ( Leyes 1 y
% tit. 15, P. 6. )
P. i A qué se obliga el que admite una he
rencia?
. R. Por el hecho de la admision de la he
rencia queda obligado para con los acreedo
res hereditarios y legatarios, como si hubiese
celebrado con ellos un contrato espreso , de
biendo cumplir todos los empeños del difun
to. ( Leyes 5 y 10, tit. 6, P. 6. )
P. ¿ Qué obligaciones nacen de la paga de
lo indebido?
R. £1 que recibe una cosa que no se le de
bía, queda obligado á restituirla con sus pro
ductos , deduciendo los gastos útiles ó nece
sarios hechos para su conservacion ; y es res
ponsable de su pérdida por caso fortuito , si
la recibió con mala fe. Pero está dispensado
de la restitucion el que recibe una cosa que
se le debia naturalmente , pues la obligacion
natural impide la repeticion de lo pagado.
( Leyes 28 y sig. , tit. 14, P. 5. )
P. ¿ Se puede repetir lo que se da por cau
sa torpe ?
R. Solo se puede repetir cuando la torpe-
J78 DE LAS OBLIGACIONES QUE NACEN
;a está de parte del que recibe únicamente,
como si das dinero al juez para que no co
meta una injusticia ; pero no cuando la tor
peza esiá de parte del que da ó de ambos,
como si se da dinero para seducir á una mu
jer, porgue en caso de igualdad es mejoría
condicion del que posee. [Leyes 47 y sig. ,
tít. 14, iP. 5; leyes 16 y 27, tít. 22, P. 3; y
Grey. López, en la glosa k de d. lei 27. )
-ofi*-

TÍWLO XXXVI.
6E LAS OBLIGACIONES QUE NACEN DE LOS
DELITOS Y CUASI-DELITOS.

P. Qué es delito?
R. Toda accion ilícita del hombre, hecha'
con intencion de dañar.
P. Y cuasi-delito?
R. La accion ilícita que causa daño á otro,
pero que se ha hecho sin ¡mencion de cau
sarlo.
P. ¿Cuál es la obligac'on que producen
los delitos y cuasi-delitos?
R. La de reparar el mal que se ha causado
á otro; de modo que cada uno es responsa
DE LOS DELITOS Y f.UASI-DELITOS. 179
ble del daño que hubiese causado por su he
cho, ó por su descuido, imprudencia ó impe
ricia.
P. ¿ Cuáles son los delilos que producen la
obligacion de reparar el mal que se ha cau
sado?
R. Todos ; pero las leyes señalan con es
pecialidad el hurto, la rapiña ó robo, el daño
hecho contra justicia , y la injuria, porque en
estos hai ciertas penas pecuniarias estableci
das á favor del perjudicado. Mas como en la
práctica se reducen todas á la satisfaccion de
daños y perjuicios , no es necesario que nos
detengamos en su- esplicacion. ( Tit. 9, 13, 14
y 15, P. 7. )
P. ¿ Cuáles son los cuasi-delitos que pro
ducen la obligacion de reparar el mal que se
ha causado?
i?. Siempre que una persona por descui
do, imprudencia ó impericia causare daño á
otra en su persona ó en sus cosas, debe re
pararlo. Pónense como ejemplos de cuasi de
litos los siguientes : — Io la sentencia dada
injustamente por ignorancia; en cuyo caso el
juez queda obligado á pagarlos perjuicios al
litigante conlra quien la dió : — 2° el echar
de las casas á la calle alguna cosa que hizo
180 DE LA ESTINCIOX
daño á los transeuntes, los cuales tienen de
recho á reclamar el pago doblado del daño
de t')dos los moradores de la casa, escepto
los huéspedes, mientras no se sepa quién es
el culpable : — 3° el tener colgada ó puesta
alguna cosa en paraje de donde pueda caer
á la calle y hacer daño; en cuyo caso se im
pone alguna multa por el peligro : — 4° el te
ner n posada ó nave criados que roben á
los viajeros, pues el posador ó maestre debe
pagar doblada la cosa hurtada por la culpa
de tener malhechores en su servicio. ( Lei 24,
tít. 22, P. 3; leyes 251, 23, 24, 25, 26, tit. 15,
P. 7; y íei 7, tít. 14, P. 7.)

TÍTULO XXXVII.

DE LA ESTINCIOX DE LAS OBLIGACIONES.

P. Cómo se estinguen las obligaciones?


i?. Por la paga ó solucion ; — por la pér
dida de la' cosa sin culpa del deudor; — por
el juramento decisorio; — por la remision vo
luntaria ; — por la novacion; — por la com
pensacion ; — por la consolidacion ; — y por
DE LAS OBLIGACIONES. 181
el mutuo disenso. ( Leyes 1^2, tít. 14, P. 5. )
P. Qué es paga ó solucion?
R. La prestacion ó ejecucion de lo que se
debe dar ó hacer. (Lei 1, tü. 14, P. 5.)
P. Cómo debe pagarse la deuda?
R. En el modo, tiempo y lugar conveni
dos , á no ser que no pueda el deudor cum
plir su obligacion en la forma estipulada, en
cuyo caso tendrá que satisfacerla del mejor
modo que le sea posible , con indemnizacion
de perjuicios. (Leyes 9 y 11 , tít. 20, lib. 3,
Fuero real; leyes 1, 3, 4 y 5, tit. 14, P. 5 ; y
lei 55 de Toro. )
P. Cuando el deudor da una cantidad al
acreedor á cuenta de varias deudas, ¿ á cuál
de estas debe aplicarse ?
R. A la que designe el deudor ; en su de
fecto á la que escoja el acreedor ; si ambos
callan , á la mas gravosa ; y si son iguales , á
todas. ( Lei 8, tit. 20, lib. 3, Fuero real; y lei
10, tit. 14, P. 5. )
P. ¿ Qué debe hacer el deudor, cuando el
acreedor se niega sin justa causa á recibir el
pago?
R. Ofrecérsele ante el juez en el tiempo y
forma que corresponde, segun el contrato, y
depositar en seguida la suma con aproba
is
-182 DE LA ESTINCION
cion del propio juez ; que es lo que se llama
consignacion, y liberta al deudor de todo
riesgo. ( Lei 8, tít. 14. P. 5.)
P. ¿ Puede el acreedor apremiar por sí
mismo al deudor, y aun tomarle prenda?
R. El acreedor que así lo hiciere , pierde
la deuda, y tiene que volver doblada la pren
da. Solo el juez puede disponer los apremios
y ejecuciones á peticion del interesado. (Lei
1, tít. 6, lib. 5, Fuero-Juzgo; lei 2, iit. 19, lib.
3, Fuero real; lei 11, tít. 13, y lei 14, tít. 14,
f». 5.)
P. Cuando perece ó se pierde la cosa de
bida, ¿se libra el deudor de pagar su im
porte ?
R. Se libra, cuando la cosa era cierta y de
terminada, v. gr. un caballo, y pereció sin
culpa alguna del deudor, porque las cosas
perecen para su dueño ; pero no, cuando era
genérica ó de las que se suelen contar, pesar
ó medir, ó cuando hubo culpa , aunque solo
fuese de tardanza en la restitucion. (Lei 9,
tít. 14, P. 5 ; y lei 10, til. i, P. 5. )
P. Qué es juramento decisorio?
R. El que una parte defiere ú ofrece á la
otra, obligándose á pasar por lo que esta ju
re. Si jurando pues niega la deuda, queda
1)15 LAS OBLIGACIONES. 183
estinguidala obligacion ; á no ser que se haya
pedido el juramenta, como se acostumbra,
con reserva de olra prueba. (Leyes 2, 3 y 4,
tít. 11, P. 3, ylei 9, tít. 14, P. 5.)
P. ¿ Cuándo se entenderá que el acreedor
remite ó perdona la deuda?
R. Cuando lo manifiesta con palabras es
presas, ó con hechos que no dejan duda de
su intencion, como si entrega el vale al deu
dor ó lo rompe de propósito ; pero la restitu
cion de la prenda no hace presumir el perdon
de la deuda. (Leyes 1 y 9, tít. 14. P. 5 ¿ lei
40, tít. 13,. P. 5. ; y lei 11, tít. 19, P. 3. )
P. Qué es novacion?
R. La sustitucion de una nueva obligacion
natural ó civil en lugar de la primera, ya sea
vanándose la especie de la obligacion, ya
sea vanándose la persona del deudor ó del
acreedor. (Lei 16, tít. 20, lib. 3, Fuero real;
y leyes 15, 16 y 18, tít. 14, P. 5.)
P. Qué es compensacion?
R. El pago de una deuda con otra entre
dos personas que se deben mutuamente al
guna cosa. Pero no tiene lugar la compensa
cion , si las deudas no son ciertas y líquidas,
ó si las cosas no tienen estimacion cierta ; co
mo ni tampoco en los casos de reclamarse un
184 DE LA ESTINCION DE LAS OBLIGAC.
depósito ó una cosa de que ha sido despo
jado injustamente el propietario. (Leyes 20 á
27, iít. 14 , P. 5 ; leí 5, tit. 3,ylei9, tit. 2 ,
P. 5.)
P. Qué es consolidacion ?
R. Consolidacion ó confusion es la reu
nion de las calidades de acreedor y deudor
en una misma persona.
P. ¿ Cómo se estinguen las obligaciones
por el mutuo disenso?
R. Lo que solo se ha contraido por el con
sentimiento, se deshace por el consentimien
to contrario de las dos partes, si no ha me
diado entrega por alguna de ellas, porque
las cosas se disuelven del mismo modo que
se constituyeron. (Leí 2, tit. 10, lib. 3, Fue
ro real. )
LIBRO TERCERO.

DE LOS DELITOS Y DE LAS PENAS.

TÍTULO I.

DE LOS DELITOS EN GENERAL.

P. Qué es delito?
R. La infraccion de una lei cometida vo
luntariamente y ásabiéndas, en daño ú ofen
sa del Estado, ó de alguno de sus individuos.
P. De cuántas maneras es?
R. De dos : público y privado. Público es
el que ofende ó inmediatamente al Estado
mismo, ó directamente á cualquier individuo,
pero causando indirectamente grave daño á
la república. Privado es el que ofende ó da
ña directamente á un individuo de la socie
dad, sin causar á esta un gran perjuicio.
<6.
186 DE LA TRAICION.
P. Cuántos géneros. hai de delitos?
R. Los principales son : traicion, homici
dio , injuria , calumnia , hurto, robo, fuerza ,
falsedad, adulterio, incesto, estupro, sodo
mía, lenocinio, amancebamiento, rapto, bi
gamia, usura, juego, escalamiento de cár
celes, etc.

TÍTULO II.
DE LA TRAICION.

P. ¿ Qué es traicion ó crimen de lesa ma


jestad?
R. El delito que se comete contra el rei ó
contra el pro comunal de toda la tierra. (Lei
1, tít. 1,P.1;y lei t, tít. 7, lib. 12, N. R. )
P. Cuáles son sus penas?
R. La muerte, la infamia y la confiscacion
de bienes. Mas esta última ha sido abolida.
( Leyes 2 y 3, tít. %P.1; lei 2, tít. 28, P. 2 ;
leyes i y 2, tít. 7, lib. 12, N. R. ; y art. 10 de
la Const. <íel837.)
P. ¿Quiénes son castigados á causa de este
delito, ademas de los que lo cometen?
DEL HOMICIDIO. 187
R. Los que dieren consejo ó ayuda, incur
ren en las mismas penas que los traidores ; y
los hijos varones de estos últimos quedan cu
biertos de infamia é incapazes de heredar á
sus parientes y á los estraños. (Lei 2, tít. 2,
P. 7.) Pero en el dia ninguna pena es trascen
dental á la familia del que la sufre. ( Const.
<fe 181 2, art. 305.)
P. i Quiénes pueden ser acusadores y tes
tigos en este delito?
R. Cualesquiera hombres y mujeres de
buena ó mala fama , ricos ó pobres , parien
tes ó estraños, aunque eslén esceptuados de
serlo en otras causas. ( Lei 3, tít. 2, P. 7. )

TÍTULO ni.
DEL HOMICIDIO.

P. Qué es homicidio?
R. La muerte de un hombre hecha por
otro.
P. De cuántas maneras es ?
R. Voluntario y casual.
P. Cuál es el homicidio voluntario?
J88 DEL HOMICIDIO.
R. El que se comete á sabiendas , esto es ,
con intencion , aunque sea en riña ó desafío ;
y puede ser simple ó calificado.
P. Cuál es el homicidio simple ?
R. El que no va acompañado de circuns»
tandas que lo agraven.
P. Y el calificado?
R. El que por razon de las circunstancias
del hecho ó de las personas , hace mas detes
table al que lo comete, como el homicidio
alevoso y el parricidio.
P. Cuál es el homicidio alevoso?
R. El que se comete á muerte segura , sin
pelea ó riña , sea con arcabuz ó pistolete , sea
con arma blanca , sea con veneno ó de otro
modo. Este homicidio suele llamarse asesi
nato. (LeiZ, tít. 21 , lib. *2, N. R.)
P. ¿ Qué pena se impone al homicida vo
luntario?
R. La de muerte ; y en caso de alevosía
se añade la de ser arrastrado y la confisca
cion de lodos ó parte de los bienes. (Leyes 1
y 2, tít. 21, lib. 12, N. R.)
P. i Quiénes son condenados tambien co
mo homicidas?
R. El que hiere á otro con asechanzas ; el
que compra, vende 6 proporciona veneno con
DEL HOMICIDIO. 189
intencion de matar á otro; el que castra ó
manda castrar á otro ; el que procura y lo
gra el aborto de una criatura ya viva, pues
si no lo está , solo incurre en la pena de cin
co años de destierro á alguna isla. (Lei 3, tít.
21, lib. 12, N. R. ; y leyes 7, 8 y 13, tít. 8,
P. Í.)
P. ¿ Se castiga siempre el homicidio vo
luntario?
R. Hai casos en que no merece ninguna
pena, por haber razon ó derecho para co
meterlo ; como cuando uno mata á otro sin
poderlo evitar en defensa legítima de sí mis
mo ó de su mujer, padre, hijo, hermano ú
otro pariente dentro del cuarto grado; ó
cuando el marido, padre ó hermano, matan
á uno que hallan yaciendo con su mujer, hija
ó hermana ; ó cuando cualquiera mata á_ un
raptor, que se lleva por fuerza á una mujer
para abusar de ella ; ó á un ladron que halla
de noche en su casa hurtando ó foradándola,
ó de dia huyendo con el hurto sin querer
lo dejar ni darse á prision ; ó al que le que
ma ó destruye de noche sus casas , campos,
árboles ó mieses , ó de dia se apodera por
fuerza de sus cosas; ó al salteador famoso
de caminos que no se deja prender. (Leyes
190 1)KL HOMjeiDlO.
2 y 3, tit. 8, p. 7 ; %e.s 1 y 4, 21, y lei
l, í¿í. 28, ¿¿¿>. 12, /V. ü.)
i?. Cuál es el homicidio casual ?
R. El que se comete involuntar¿afliente;poE
un acaso y sin culpa alguna. No. está sujeto- i
pena; pero si hubiere culpa , como' descuido,
imprudencia ó falta de habilidad , debe sen
castigado con una pena mas- lijcra que la del
homicidio voluntario. (Leyes 4, 5 y 6, tit. 8 ,
P. 7; y leyes 13 y 14, tit. 21, Ub• 12, 2V. i?.)
P. Qué es parricidio ?
R. El homicidio de un ascendiente ó des
cendiente, ó bien de un hermano, sobrino,
tío, del marido ó de la mujer, del suegro,
suegra, yerno, nuera, padrastro, madras
tra ó entenado. (Lei 12, tit. 8, P. 7.J
P. Cuál es la pena del parricida?
R. La de azotes y muerte, siendo luego
echado al mar ó rio mas próximo el cadáver
del delincuente metido en un cubo, sobre
cuya superficie esterior e«tán pintados un
perro, un gallo, un mono y una culebra.
( Lei 12 , tit. 8 , P. 7 ; y la práctica.)
P. Qué es suicidio?
i?. El acto de quitarse á sí mismo la vida.
P. Qué pena se impone al suicida?
R. Ninguna , porque se presume que habia
DE ¡LA INJURIA. iH
perdido el jarcio, no obstante lo dispuesto en
la Jei 24, tít. i , f». í{ y en la leí 15 , tít. 21 ,
lib. ISt, N. R., qae imponían la confiscacion. ,
la cual-pof otra parte ha sido abolida en ge
neral por el art. 1© de la Const. de 1837.

TÍTÜLO TV.

DE LA INJURIA.

P. Qué es injuria ?
R. El dicho ó hecho que se dirige á ultra
jar ó herir la reputacion ó dignidad de algu
na persona. (Lei 1, tít. 9, P. 7.)
P. ©e cuántas maneras es ?
R. De dos : verbal y real. La verbal se
hace con palabras ó escritos, y la real con
hechos. (Lei i, tit. 9, P. 7.)
P. Cuál es la pena del injuriante?
R. El injuriado puede pedir civilmente la
indemnizacion ó satisfaccion que quiere se le
dé por la injuria, y el juez la concede en cuan
to le parece equitativa ; y tambien puede pe
dir criminalmente se castigue al reo con mul
ta en favor del fisco ú otra pena proporcio
192 DE LA INJURIA.
nada ; mas no puede usar de las dos acciones
á un tiempo, ni dejar la elegida y entablar la
otra. (Lei 21, tít. 9, P. 7.) Esto es hablando
en general, pues hai algunas injurias, cuyas
penas están señaladas por la lei.
P. i Cuáles son las injurias que tienen pe
na señalada?
R. El que llame á otra persona gafo , sodo
mita, cornudo, traidor, hereje , moro, judío,
ó á mujer casada puta , ó usare de otros de
nuestos semejantes , tiene que cantar la pali
nodia, esto es, desdecirse ante el alcalde y
hombres buenos , y pagar la multa de tres
cientos sueldos al injuriado y al fisco por
iguales partes. El que llama á otro tornadizo
ó marrano, debe pagar diez mil maravedís
al fisco, y otros tantos al injuriado , ó estar
un año en el cepo por lo que no pudiere pa
gar. El que injuriare á otro por escrito atri
buyéndole algun delito en pasquín ó libelo
famoso, queda sujeto á la pena que corres
ponde al delito imputado. (Lei 1 , tít. 25, lib.
12, N. R. ; Covarrub., lib. 1, variar., cap. 11 ;
Azevedo, en los coment. de d. lei,n. 42 y 87;
y lei 3, tít. 9, P. 7.)
P. ¿ No está esento de pena el que atri
buye un delito á una persona, si lo probare?
DE LA INJURIA. 193
R. Está esento de pena el que lo atribuye
de palabra y lo prueba, si el Estado interesa
en que se sepa ; pero nunca lo está el que lo
imputa por escrito en pasquín ó libelo famo
so. (Leyes 1 y 3,tít. 9, P. 7 ; y Greg. López
en sus glosas.)
P. ¿ Quién puede intentar la accion de la
injuria?
R. El injuriado , el padre por el hijo que
tuviere en su poder, y el marido por la mu
jer. (Lei9, tit. 9, P. 7.)
P. Contra quién compete esta accion?
R. No solo contra el que hizo la injuria,
sino tambien contra el que la promovió con
instigaciones ó consejos. (Lei 10, tit. 9, P. 7.)
P. Cómo se acaba la accion del injuriado?
R. Por la muerte del ofensor ó del ofen
dido; — por la remision espresa ó tácita; —
y por el trascurso de un año sin haber recla-
, macion. (Leyes 22 y 23, tit. 9, P. 7.)

17
TITULO V.

DE LA CALUMNIA.

P. Qué es calumnia?
R. El delito que uno comete atacando é
hiriendo maliciosamente el honor y la repu
tacion de otro con mentiras ó imputaciones
falsas.
P. De cuántas maneras es la calumnia?
R. De dos : judicial y estrajudicial.
P. Cuál es la calumnia judicial?
R. La que se comete acusando á uno mali
ciosamente de algun delito ante el tribunal
de justicia ; y esta puede ser manifiesta ó pre
sunta. Es manifiesta, cuando se prueba que
la acusacion ó imputacion ha sido maliciosa ;
y presunta , cuando el acusador no ha pro—-
bado la acusacion , sin que por su parte el
acusado haya demostrado la malicia ó el do
lo de aquel.
P. ¿Incurre en pena el acusador que no
prueba la imputacion que ha intentado?
R. En la calumnia manifiesta todo acusa
dor, de cualquiera clase que sea, incurre en
X)K LA CALUMNIA. i9¡>
la pena señalada por la lei; peco en la ca
lumnia presunta están esentos de pena :.—4.°
el fiscal ó promotor fiscal; — 2.° el tutor que
acusa á nombre del huérfano ; — 3.° el here
dero que acusare á la persona que el testador
hubiese designado como su- matador ó ase
sino ; — 4.° el acusador del monedero falso ;
— 5.° el que acusa sobre agravio hecho á él
mismo, ó sobre la muerte de su cónyuge ó
de sus deudos dentro del cuarto grado. (Le
yes 5, 6, 20, 21 y 26» títr 1, P. 7.)
P. i Cuál es la pena en que incurre el ca
lumniador ?
R. Antiguamente era la del talion , esto es ,
la misma que merecería el calumniado , si se
le probase el delito imputado ( Lei 26, tít. 1 ,
jP. 7) ; pero en el dia es arbitraria , segun la
calidad de la imputacion , y las circunstancias
de las personas, con costas é indemnizacion
de daños y perjuicios.
P. Cuál es la calumnia estrajudicial?
R. La que comete el que imputa á otro
V fuera de juicio un delito que no ha cometido.
P. ¿ En qué pena incurre el calumniador
estrajudicial?
R. En la misma que el judicial ; y si hu
biese hecho la imputacion por escrito, no es
196 ' DEL HURTO Y DEL ROBO.
admitido á probarla en juicio. (Lei 8, tít. 6;
y lei 3, tít. 9, P. 7.)

TÍTÜLO VI.

DEL HURTO Y DEL ROBO.

P. Qué es hurto?
R. La ocupacion fraudulenta de la cosa
ajena con ánimo de apropiársela. (Lei i, tít.
14, P. 7.)
P. Qué es robo 7
R. La ocupacion violenta de la cosa ajena
con intencion de hacerla propia. (Lei 1, tít.
13, P. 1; y lei 2, tít. 18, P. 1.)
P. En qué penas incurre el ladron?
R. Ademas de tener que restituir al dueño
la cosa hurtada ó robada con el resarcimien
to de perjuicios , incurre por el primer hurto
sencillo en la pena de vergüenza y de algu
nos años de presidio ; por el segundo en la
de cien azotes y de presidio perpetuo , esto
es, de diez años con retencion; y por el ter
cero en la de muerte ; con tal que los tres
hurtos sean de consideracion. Mas cuando el

-
DE LA FUERZA Y DE LAS ASONADAS. 197
hurto es calificado, esto es, cuando va acom
pañado de alguna circunstancia que lo agra
ve, se impone la pena de muerte por el se
gundo al que hurta en tiempo de guerra á
sus compañeros ; y por el primero al que está
de propósito en los caminos para robar, al
que hubiese entrado por fuerza en casa ó
iglesia con el propio objeto, al pirata, al em
pleado del gobierno que hurtase los caudales
públicos, y á los consejeros y encubridores
de semejantes hurtos. (Leyes de tos tít. 13 y
14, P. 7 ; leí 4 , tít. 34, lib. 12, N. R. ; Ant.
Gómez, lib. 3, variar., cap. 5, n. 4 y sig. ;
leyes del tít. 14, lib. 12, N. B. ; leyes 6 y 7,
tít. 28, P. 2; y lei 6, tít. 5, lib. 4, Fuero real.)
En el dia están en desuso las penas de ver
güenza y de azotes, y apénas se impone otra
que la de presidio por mas ó ménos años.

TÍTULO VII.
DE LA FUERZA Y DE LAS ASONADAS.

P. Qué es fuerza?
R. La violencia que se hace maliciosamente
17.
198 DE LA FUERZA
con armas ó sin ellas para causar á otro al
gun daño en su persona ó en sus cosas, ó pa
ra obligarle á dar ó hacer lo que no quiere.
{Leí i, tít. 10, P,J.)
P. ¿Cuáles son las penas del que hace
fuerza con armas?
R. Destierro perpetuo á alguna isla ; con
fiscacion de bienes, si no tiene parientes en
línea recta hasta el tercer grado; y resarci
miento de perjuicios. Pero si muriere alguno
de la parte del forzador ó de la del forzado,
se impone la pena de muerte al jefe de la
fuerza. (Leyes 8 y 9, tít. 10, P. 7.)
P. ¿Cuáles son las penas del que hace
fuerza sin armas?
R. Destierro ; confiscacion de la tercera
parte de los bienes ; pérdida del oficio públi
co que tuviese; y resarcimento de perjuicios.
(Leyes 8 y 9, tít. 10, P. 7.)
P. ¿ Qué pena tiene el que toma por fuerza
una cosa que otro posee pacíficamente , pre-
testando ser suya?
R. Pierde el derecho que tuviese en ella;
y si no tuviere derecho alguno, debe resti
tuirla doble. (Zc¿10, tít. 10, P. 7; y leií,
tít. 34, lib. 11, N.R.)
P. Qué es asonada ó tumulto?
Y DE LAS ASONADAS. 199
i?. El lev antamiento y reunion de diez hom
bres á lo ménos contra la pública seguridad.
(Lei 16, tít. 26-, P. 2; Greg. López , glosa 2
de d. lei 16; y Azevedo, en la lei 1 , tít. 11 ,
lib. 12, N. R.)
P. ¿Cuál es la pena que se impone á los
autores de una asonada?
R: Si la asonada se dirige contra el Estado,
se castiga con la pena de la traicion ; si con
tra los ministros de justicia , se impone á los
autores la pena de diez años de trabajos for
zados y confiscacion de la mitad de los bienes,
y la mitad de la pena á los que acompañaren ;
y en fin, si contra los particulares, se incurre
en pena arbitraria, ademas del pago del du
plo al damnificado y del cuadruplo al fisco.
— E! que repicare las campanas para fomen
tar el tumulto, merece pena de muerte. —
El conocimiento de estas causas corresponde
siempre á la justicia ordinaria. (Leyes 1 , 2 y
3, tít. 2, P. 7 ; lei 3, tít. 19, P. 2; lei 3, tít
10, lib. 12, N. ñ. ; leyes i , 2 y 3, tít. 15, lib.
8, N. R. ; leyes 2, 4 y 5, tít 11 , lib. 12, N. R.)

-«fío-
TÍTULO VIII.
DE LA FALSEDAD.

P. Qué es falsedad?
R. La imitacion ó supresion de la ver
dad, hecha maliciosamente en perjuicio de
otro. Hai imitacion de la verdad, cuando
uno hace privilegios ó sellos falsos ; y hai
supresion, cuando uno rae, cancela ó esconde
algun instrumento verdadero. (Lei 1, tít. 7,
P. 7.)
P. Cuál es la pena del falsario ?
R. Destierro perpetuo en alguna isla y
confiscacion de bienes, si no tiene parientes
en línea recta hasta el tercer grado. (Lei 6,
tít. 7, P. 7.) Esto es hablando en general,
pues hai algunos falsarios que se castigan
con otras penas, como el que contrahace al
gun instrumento auténtico, el testigo falso, el
que vende ó compra con medidas ó pesos fal
sos, y el monedero falso, etc.
P. ¿ Cuál es la pena que se impone al que
falsificare carta, privilegio ó sello del rei?
R. La de muerte. (Lei 6, tít. 7, P, 7.)
P. ¿Cómo es castigado el escribano que
DE LA FALSEDAD. 201
comete una falsedad en sus escritos ó en
juicio ?
R. Antes se le cortaba la mano , y queda
ba infamado 'para siempre. Ahora se le im
pone una multa, ó se le priva de oficio, ó se
le destina á presidio, segun los casos. (Leyes
7 y 8, tít. 9, P. 2; lei 16, tít. 19, P. 3; y lei
6, tít. 7, P. 7.)
P. En qué pena incurre el testigo falso?
JR. El testigo que depuso falsamente con
tra alguna persona en causa criminal por de
lito que tenga pena corporal , debe sufrir la
misma pena que debia imponerse al reo en
su persona y bienes, si se le hubiese probado
el delito que se le imputaba; en las demas
causas criminales , la de vergüenza pública y
trabajos perpetuos, esto es, por diez años
con retencion ; y en las civiles, la de vergüen
za pública y diez años de trabajos. (Leyes 5
y 6, tít. 6, lib. 12, N. R. )
P. ¿Qué pena merece el que vende ó com
pra con medidas ó pesos falsos?
R. Las de pagar doblado el daño que cau
só, ser desterrado por cierto tiempo , y que
brantársele públicamente las medidas ó pe
sos falsos ante las puertas de su casa. (Lei 7,
tfí.7, P.7.)
202 DE LOS DELITOS
P. Y el monedero falso?
R. Incurre en las penas de muerte y con
fiscacion de todos sus bienes. (Lei 9, tít. 7,
P. 7 ; lei 1 , tít. 17, lib. 9, N. R. ; y lei 3, tít.
8, lib. 12, N. R.)
P. Quién se entiende por monedero falso?
R. El que sin estar autorizado por el go
bierno hiciere moneda de oro , plata ú otro
metal ; y el que cercenare la verdadera. ( Lei
3, tít. 8, lib. 12,N.R.)

-«fío-

TÍTULO IX.
DE LOS DELITOS CONTRA LAS COSTUMBRES.

P. ¿ Cuáles son los delitos contra las cos


tumbres?
R. El adulterio , el incesto , el estupro , la
sodomía, el lenocinio, el amancebamiento, el
rapto y la bigamia.
P. Qué es adulterio?
R. El acceso carnal de un hombre con mu
jer casada con otro. (Lei 1, tít. 17, P. 7.)
P. Quién puede acusar á los adúlteros?
R. Solo el marido, ante el juez secular,
CONTRA LAS COSTUMBRES, 203
dentro del término de cinco años, y si hu
biese habido violencia, dentro del de treinta.
(Lei k, tít. 26, lib. 12, N. R.; y lei 4, tít. 47,
P. 7.)
P. ¿Cuáles son los derechos del marido
que encuentra á los adúlteros en fragante ?
R. Puede quitarles la vida impunemente.
( Lei 2, tít. 28, lib. 12, N. R. )
P. Cuál es la pena de los adúlteros?
R. La de reclusion y pérdida de la dole ,
arras y bienes gananciales en la mujer ; y la
de destierro, multa ó presidio en el hombre.
( Lei 23, tít. 11, P. 4 ; lei 6, tít. 2, lib. 3, Fue
ro real; lei 15, tít. 17, P.7 ;y la práctica. )
P. Qué es incesto -?
R. El ayuntamiento ilícito «ntre aquellas
personas que no pueden casarse por razon
de parentesco. (Lei \, tít. 18, P. 7.)
P. Cuál es la pena de los incestuosos ?
R. La de destierro en el hombre , y reclu
sion en la mujer ; y ademas la confiscacion
de la mitad de los bienes de cada uno de los
dos : pudiendo ser acusados por cualquiera
del pueblo en caso de escándalo. ( Leyes 2 y
3, tít. 18, P. 7; lei 13, tít. % P.k;y lei 1, tít.
29, lib. 12, TV. R. )
P. ¿ En qué pena incurre el que se casa
204 DE LOS DELITOS
con parienta dentro de grado prohibido sin
dispensa?
R. En las de destierro perpetuo y confis
cacion de bienes, si no tiene hijos de otro ma
trimonio. (Lei 3, tít 18, P. 7.)
P. Qué es estupro ?
R. El desfloramiento de doncella honesta,
aunque medie su consentimiento. (Lei 1, tít.
19, P.7.)
P. Qué penase impone al estuprador?
R. La de casarse con la estuprada, ó do
tarla y reconocer la prole. En su defecto , se
le destina rá presidio ó á las armas.
P. i Y si el estuprador es el tutor ó cura
dor de la huérfana?
R. Se le destierra para siempre , y se le
confiscan los bienes, en caso de que no tenga
descendientes ó ascendientes. (Lei 6, tít. 17,
P. 7.)
P. Cuál es la pena de la sodomía ?
R. La de muerte y confiscacion de bienes.
( Leyes del tít. 21, P. 7, y del tít. 30, Ub. 12,
N. R.)
P. Qué es lenocinio?
R. El infame tráfico que se hace prosti
tuyendo mujeres por precio. (Lei 1, tít. 22,
P. *¡.) '
CONTRA LAS COSTUMBRKS. 205
P. Cómo se llaman los reos de este delito?
i?. Alcahuetes ó rufianes.
P. Qué pena tienen?
R. Las de infamia, vergüenza pública ó
azotes, y reclusion ó trabajos forzados, segun
la diferencia de sexos y de casos. ( Leyes del
tít. 22, P. 7, y del tít. 27, lib. 12, N. R. ; y lei
4, tít. 6, P. 7.)
P. Qué es amancebamiento?
R. El trato ilícito y habitual de hombre y
mujer.
P. Cuál es la pena de los amancebados?
R. El que tiene por manceba á una mujer
casada, y no la entrega al primer requeri
miento, incurre en la confiscacion de la mitad
de sus bienes, ademas de la pena de adulte
rio. El casado que tuviere trato ilícito con
una soltera , pierde tambien la mitad de sus
bienes á favor del fisco , y tiene que entregar
el quinto de ellos hasta la cantidad de diez
mil maravedís por cada vez para dotar á la
manceba. Si el amancebado es clérigo ó frai
le, debe ser castigado con las penas prescri
tas por el Derecho canónico, y la manceba es
desterrada del pueblo por cierto tiempo ; ad
virtiendo que en el caso de ser mujer casada,
no puede ser perseguida en juicio sino por su
18
206 DELITOS CONTRA LAS COSTUMBRES.
marido, á no ser que este consintiere el de
lito. (Leyes del tít. 2G, lib. 12, N. R. ) Última-
nente , por reales órdenes de 22 de febrero
de 1815, 10 de marzo de 1818 y 15 de mar
zo de 1829, se halla mandado, que si despues
de amonestaciones y exhortaciones privadas
no cesan los amancebamientos públicos, aun
que sean entre personas solteras, se proceda
sin detencion al arresto y prision de los cul
pables , á su destierro de ios pueblos en que
residan , á su reclusion en hospicios ó casas
de correccion , á su aplicacion al servicio de
las armas, ó á la imposicion de penas pecu
niarias, segun los casos y circunstancias.
P. Qué es rapto ?
R. El robo de mujer doncella, casada ó
viuda honesta , con el fin de corromperla , ó
para otro perverso designio.
P. Cuál es la pena del raptor ?
R. La de muerte y pérdida de todos los
bienes á favor de la robada; á no ser que
esta, siendo soltera, consintiese en casarse
con él. La pena de muerte se ha conmutado
por la práctica en la de presidio ó galeras.
En las mismas penas incurre el forzador,
aunque no medie rapto. (Leyes del tít. 20,
P.V ; y la práctica. )
DE LA USURA. 207
P. Qué es bigamia ?
R. El estado de una persona casada con
dos á un mismo tiempo.
P. En qué pena incurre el bigamo?
R. En las de vergüenza pública y diez años
de trabajos forzados. (Lei 16, tít. 17, P. 7 ;
y leyes 7, 8, 9 y 10-, tít. 28, lib. 12, N. R. )
P. ¿Qué hai que advertir en general acer
ca de las penas contra los delitos de incon
tinencia?
R. Que estando abolida la confiscacion de
bienes, no puede ya imponerse esta pena.

-oJ§9-

títolo X.
DE LA USÜRA.

P. Qué es usura?
R. El in tares que se lleva por el dinero en
el contrato de mutuo ó préstamo.
P. ¿Cuál es la pena del usurero ó del que
presta á usura?
R. La infamia , la pérdida de la cantidad
prestada á favor del mutuatario , y el pago
de igual suma con destino al fisco y acusa
208 DE LA USURA.
dor. Por la segunda vez se pierde la mitad de
los bienes, y por la tercera todos. (Leyes 31 y
40, tít. 11, P. 5 ; lei 4, tít. 6, P. 7; y leyes 2,
4 y 5, tít. 22, lib. 12, N. R.)
P. Cómo se prueba la usura?
R. Con el testimonio singular de dos ó tres
personas, con tal que haya algunas otras pre
sunciones. (Lei 2, tít. 22, lib. 12, N. R.)
P. En qué casos es permitida la usura?
R. Cuando hai daño emergente ó lucro ce
sante; esto es , cuando el prestamista ha de
sufrir alguna pérdida, ó privarse de alguna
-ganancia por prestar su dinero. (Covarru-
bias, 3, variar., cap. 4, n. 2.)
P. i Cuál es el interes que puede llevar en
estos casos el prestamista?
i?. La práctica ha introducido el de seis
por ciento á estilo de comercio ; y aun puede
decirse que en el dia no se entiende por usu
ra sino lo que escede del seis.

-°SÍ°-
TÍTULO XI.
DEL JUEGO.

P. Qué juegos están prohibidos?


R. Los de suerte y azar; los de crédiio; al
fiado ó sobre palabra ; y los de alhajas, pren.
das ú otros cualesquiera bienes muebles ó
raizes. En los permitidos no puede pasar de
un real de vellon el tanto suelto que se jugare,
ni de treinta ducados toda la cantidad que
se atravesare durante la sesion.
P. ¿En qué pena incurren los contraven
tores? .
R. Si fuesen nobles , en la multa de dos--
cientos ducados ; y si de otra condicion , en
la de cincuenta : por la segunda vez, en mul
ta doblada ; y por la tercera tambien en do
ble multa, y en un año de destierro del pue
blo. En defecto de bienes, sufrirán por la
primera vez diez dias de cárcel , por la se
gunda veinte , y por la tercera treinta , con
destierro del pueblo. El dueño de la casa
queda sujeto respectivamente á pena dobla
da, segun su clase. Los vaj;os que se entre
is.
210 DEL JUEGO.
gan habitualmente al juego, sin tener arraigo
ni ocupacion, deben ser destinados á presi
dio por cinco años ; y el que tiene habitual
mente juego en su casa, por ocho.
P. ¿Están obligados los jugadores al pago
de lo perdido contra la lei?
i?. No solamente no lo están, sino que
pueden reclamar dentro de ocho dias lo que
tal vez hubieren pagado.
P. ¿ Puede jugarse á cualquiera especie de
jue^o permitido en las casas públicas , como
tabernas ó cafés?
R. En dichos parajes solo se permiten los
juegos de damas, ajedrez, chaquete, tablas
reales y trucos.
P. ¿Cómo debe proceder el juez en asun
tos de juegos?
R. Por denuncia ó de oficio, bastando fun
dados rezelos de contravencion para el re
conocimiento de casas públicas, y siendo pre
cisa informacion sumaria para el de particu
lares. (Lei 13, tít. 23, lib. 12, N. R )
r
TITULO XLI.

DE LAS PENAS.

P. Qué es pena?
R. El mal que por disposicion de la lei se
hace padecer á uno en su persona , en su re
putacion ó en sus bienes, por el mal que este
mismo causó voluntariamente á la sociedad ó
á alguno de sus individuos.
P. Cuál es el objet& de las penas?
R. Quitar al delincuente la voluntad de re
incidir , y contener con el ejemplo del casti
go á los que intentasen imitarle. (Lei 1, tit.
31, P. 7. 1
p. Cuántas clases hai de penas?
R. Tres : corporales , de infamia y pecu
niarias.
P. Cuáles son las penas corporales?
R. Las que afligen al cuerpo , ya causando
dolor , ya privando de ciertas comodidades,
ya produciendo algunas incomodidades. Ta
les son, ademas de la capital, la de azotes-,
vergüenza , bombas, galeras, minas, arsena
les , presidio , obras públicas , destierro del
212 DE LAS PENAS.
reino , y prision ó reclusion por mas de seis
meses. (Reglam. de 26 de setiembre de 1835,
art. 11.)
P. ¿No es también pena corporal la muti
lacion, el confinamiento, y la prision ó reclu
sion, cuando se impone como pena, aunque
solo sea de una hora ?
R. La mutilacion no está en uso , como
tampoco los azotes. Disputábase si el confi
namiento era ó no pena corporal; pero pues
que la lei no le incluye en esta clase, es claro
que no debe reputarse tal. La prision ó re
clusion es en rigor pena corporal, pase ó no
pase de seis meses; mas la lei no quiere que
se la considere de esta especie para los efec
tos del Derecho, sino cuando esceda de dicho
tiempo. En suma, son penas corporales todas
y solo las que he mencionado.
P. Cuáles son las penas de infamia?
R. Las que tienen por objeto privar á un
delincuente del honor, de la reputacion y de
la estimacion pública. Tales son la de ver
güenza pública, la de pasar á un reo por de
bajo de la horca, y la declaracion que á ve-
zes hace la lei , de que el que comete tal ó
tal delito , queda infamado. (Leyes del tít. 6,
P. 7.)
DE LAS PENAS. 213
P. ¿ Cuáles son los efectos de las penas de
infamia?
R. El infame pierde las dignidades, hono
res y empleos que tuviere , y queda inhábil
para obtener otros , así como tambien para
ser acusador y testigo. (LeiT, tít. 6, P. 7, lei
2, tít. \,P.h;y lei 8, tít. 16, P. 3.)
P. ¿ Recae alguna vez la infamia sobre la
familia del delincuente ?
R. En el dia ninguna pena es trascendental
á la familia del que la sufre, ni aun en los de
litos de traicion ó lesa majestad. (Const. de
1812, art. 305.)
jP. Cuáles son las penas pecuniarias?
i?. Las que privan á un hombre del todo ó
parte de sus bienes. Tales son la confiscacion
y las multas. La confiscacion ,' por la que se
quita al reo en favor del fisco la totalidad ,
ó á lo menos una gran parte de su patrimo
nio, está ya abolida por la lei (Const. de 1837,
art. 10. ) ; y solo quedan las multas , ó penas
pecuniarias moderadas, que no deben privar
al condenado ni á su familia de los medios
de subsistencia.
P. ¿Se reputa como pena pecuniaria el
resarcimiento de los daños y perjuicios que
214 DE LAS PENAS.
con el delito suelen causarse al ofendido ó á
su familia?
R. Este resarcimiento no es mas que la re
paracion del muí que se ha hecho al indivi
duo perjudicado, y no tiene el concepto de
pena, la cual se dirige principalmente á satis
facer á la vindicta pública.
P. ¿ Debe el juez atenerse en la imposicion
de multas á la cantidad que señalan las le
yes?
R. El juez debe tomar en consideracion la
variacion que ha tenido el valor de la mone
da.
P. ¿Puede el juez imponer unas penas por
otras?
R. Los tribunales superiores pueden con
mutar las penas de presidio en pecuniarias ,
permitiéndolo la clase del delito. (Lei 20, tít.
41 , lib. 12 , N. R. Véase ademas el tit. 40 da
d. lib. 12, N. R. )

-o$*o-
TÍTULO XIII.

DE LA CÁRCEL.

P. Qué es cárcel?
7?. La casa pública destinada para la cus
todia y seguridad de los reos.
P. Quién puede tener cárcel?
R. Solo el gobierno ; de manera que el par
ticular que la tuviese y aprisionase en ella á
alguna persona, incurriría en pena de muer
te. (Leí 15, tít. 29, P. 7; y lei 3, tít. 33,
lib. 5, N. R.)
P. ¿Qué pena tienen los presos que se es
capan de la cárcel ? • <
R. Si se escapan por encontrar la puerta
abierta, ó para presentarse á un tribunal su
perior, ninguna : — si se escapan todos ó la
mayor parte, formando conspiracion para
quebrantar la prision sin saberlo los guarda
dores , incurren en la pena del delito por que
estaban presos; bien que si probaren su ino-*
cencia, solo se les impondrá al¡>una pena
arbitraria por el escalamiento; — y si solo
huyeron algunos , se les pondrá despues en
2l() DE LA CÁRCEL.
mas fuertes prisiones, y condenará ademas
á pena estraordinaria. ( Lei 13, tít. 29, P. 7 ;
fe» 17, í/í. 38, lib. 12, ¿V. i?., e» el sentido que
la entiende Greg. López en las glosas de d. lei
13, tít. 29, P. 7; real órden de 27 de enero
de 1787 ; y lei 11, tít. 32, ¿¿6. 12, iV. R. )
i5. ¿ Qué pena merece el que saca por
fuerza ó engaño de la cárcel á algun preso ?
R. La misma pena que el preso debia su
frir. ( Lei 14, tít. 29, P. 7; y lei 3, tít. 4, lib.
7 del Fuero-Juzgo. ) En la práctica sin em
bargo se atiende á las circunstancias , y se
absuelve á la mujer que con su astucia sabe
dar libertad á su marido. (Gómez, tom. 3,
variar., cap. 9, n. 12.)
P. ¿ Cuál es la pena del carcelero que deja
escapar un preso?
R. Si tuvo malicia ó culpa lata, incurre en
la pena que merecía el preso, aunque sea cor
poral ; mas en el caso de ser pecuniaria ó pa
go de deuda, debe tambien satisfacerla y es
tar medio año en prision. Si tuvo culpa leve,
estará un año en prision por la pena corporal
• que mereciese el preso , y solo tres meses
por la pecuniaria ó pago de deuda , que de
berá satisfacer ademas. Si no tuvo culpa al
guna, deberá probar su inocencia , por tener
DE LA CÁRCEL. 217
contra sí la presuncion. (Lei 12, tít. 29 de
la Partida sétima ; y lei 18 , tít. 38 , libro
12 de la Novísima Becopilacion.)
LIBRO CUARTO.
DE LOS JUICIOS.

TITULO I.
DE LAS ACCIONES.

P. Qué es accion?
i?. El derecho de exigir alguna cosa , y el
modo legal que tenemos para pedir en justi
cia lo que es nuestro ó se nos debe por otro.
En la primera acepcion corresponde al se
gundo objeto del Derecho, y en la segunda al
tercero.
P. De cuántas maneras es ?
R. De dos : real y personal. (Lei 5. tít. 8,
Ub. 11, W. R.)
P. Cuál es la accion real?
DE LAS ACCIONES. 219
R. La que nace de alguno de los derechos
llamados reales , esto es , del dominio , de la
sucesion hereditaria, de la servidumbre, ó
de la prenda é hipoteca. Del dominio nacen
la accion reivindicatoría y la publiciana : del
derecho hereditario la peticion de herencia y
la querella de inoficioso testamento : de la
servidumbre ó con motivo de ella la accion
confesoria y la negatoria : de la prenda é hi
poteca la accion hipotecaria.
P. Cuál es la accion reivindicatoría?
R. La que compete á uno para pedir la res
titucion de una cosa que le pertenece por De
recho civil ó de gentes.
P. Y la publiciana?
R. La que compete al que perdió una cosa
que poseia con buena fe sin haberla prescrito
todavía, contra cualquiera que la detenga,
á no ser su verdadero dueño. L\kmase publi
ciana por haberla introducido el pretor Pu-
blicio. ( Lei 13, tít. 11, P. % ; y lei 50, ttt. 5,
P. 5.)
P. i Cuál es la accion petitoria de heren
cia?
R. La que compete al heredero testamen
tario ó abintestato para pedir de cualquiera
poseedor la entrega de los bienes herediia
220 DE LAS ACCIONES.
rios. La querella de inoficioso testamento no
es otra cosa que una especie de peticion de
herencia.
P. Cuál es la accion confesoria ?
R. La que compete al que tiene una servi
dumbre constituida en su favor contra el que
la impide, para que este le deje gozar pacífi
camente de ella y le restituya los frutos ó in
tereses percibidos. ( Lei 21, tít. 22, P. 3. )
P. Y la negatoria?
R. La que tiene á su favor el dueño de una
heredad en que otro ejerce una servidumbre
indebida, para pedir que se le condene á de
sistir del uso de ella , y á resarcir los daños
causados. (Lei 21, tít. 22, P. 3. )
P. Cuál es la accion hipotecaria ?
R. La que tiene el acreedor contra cual
quier poseedor para perseguir la cosa hipo
tecada y cobrar de su producto, despues que
hecha ejecucion en los bienes del deudor, apa
rece la insuficiencia de estos para cubrir la
deuda. (Leyes 14 y 18, tít. 13, P. 5.)
P. Cuál es la accion personal?
R. La que nace de una obligacion pura
mente personal ; y nos corresponde para exi
gir de otro el cumplimiento de cualquiera
obligacion que contrajo , ya sea que esta di
DE LAS ACCIONES. 221
mane de contrato ó cuasi-contrato, ya de de
lito ó cuasi-delito.
P. ¿ En qué se distinguen la accion real y
la personal?
R. En que la accion real , como nace del
derecho que tenemos sobre una cosa , com
pete contra cualquiera poseedor de esta;
mas la personal , como dimana de una obli
gacion en que otro se ha constituido para con
nosotros, no corresponde contra cualquier
poseedor, sino solo contra la persona obli
gada ó su heredero que la representa. (Lei
k%tít. 5, P. 8.)
P. ¿ No puede suceder que una accion sea
en parte real y en parte personal ?
R. Sucede con efecto , y entónces se llama
accion mista. Por ella pedimos la restitucion
de una cosa que nos pertenece, y la satisfac
cion de lo que se nos debe por razon de ga
nancias , perjuicios ú oiras prestaciones per
sonales. Tales son la peticion de herencia, la
accion de amojonamiento, la de division de
una cosa comun y la de particion de heren
cia.
P. La accion pauliana ó revocatoria ¿es
personal ó real ?
R. Personal ; y es la que compete á los
19.
222 DE LAS ACCIONES.
acreedores , para pedir en el término de un
año la revocacion de las enajenaciones que
hizo fraudulentamente en perjuicio de ellos
el deudor. Y con efecto, la enajenacion por
título lucrativo se revoca sin mas que hacer
constar el fraude ; pero la hecha por título
oneroso no se revoca, sino haciendo ver que
era sabedora del fraude la persona á quien
se enajenó la cosa. Llámase pauliana por ha
berla introducido el pretor Paulo. ( Leyes 7, 9
y 12, ttt. 15, P. 5. )
P. Qué otra division hai de acciones?
i?. La de penales y no penales ó persecu
torias de la cosa.
P. Cuáles son las penales?
R. Las que se dirigen á pedir la aplica
cion de la pena pecuniaria establecida por
las leyes á favor del perjudicado. Estas di
manan solamente de los delitos y cuasi-delí-
tos, como por ejemplo la accion de hurto,
que es al cuádruplo en el hurto manifiesto , y
al doblo en el encubierto.
. P. 4 Y las persecutorias de la cosa , ó no
penales ?
i?. Las que tienen por objeto demandar lo
que pertenece á nuestro patrimonio ; y á esta
clase corresponden todas las acciones reales,
DE LAS ACCIONES. 223
y las personales que dimanan de contrato ó
cuasi-contrato.
P, ¿En qué se diferencian las acciones pena-
Ies y las persecutorias de la cosa ó no penales?
i?. Ademas de la diferencia que resulta de
sus respectivas definiciones , hai la de que las
acciones persecutorias deta cosa pasan á los
herederos del acreedor, y se dan contra los
herederos del deudor; pero las acciones pe
nales no pasan a los unos ni pueden ejercerse
contra los otros, sino solo en el caso de que
se hubiese entablado y contestado el pleito
en vida del ofensor y del ofendido. (Lei 25,
tít. 1, P. 7.)
P. Qué acciones son las que llaman per
judiciales?
E. Aquellas por las que se litiga entre dos
sugetos sobre si el uno de ellos es ó no escla
vo del otro, ingenuo ó liberto, hijo ó estraño.
Se llaman perjudiciales , porque perjudican ó
son trascendentales aun á ciertas personas
" que no litigan. Asi es , que si se declara, por
ejemplo, que Pedro es hijo de Juan , no solo
conseguirá aquel los derechos de filiacion
contra su padre , sino tambien contra sus her
manos sin haber litigado con ellos. (£e¿20,
tít. 22, P. 3.)
224 DE LAS ACCIONES.
P. ¿ A qué se reducen las acciones ¡nsti-
toria y ejercitoria ?
i?. Son unas especies de acciones perso
nales, y tienen lugar cuando el dueño de una
tienda ó nave pone en ella algun factor ó man
cebo, patron ó maestre, para dirigirla, en
cuyo caso queda obligado dicho dueño al
cumplimiento de los contratos que se hicie
ren con alguno de los referidos encargados.
Llámase institoria la accion que se da con
tra el dueño de la tienda, y ejercitoria la que
compete contra el de la nave. (Lei 7, tít. 21,
iP. 4 ; lei 7, tít. 1 , P.5; y Código de comer
cio, art. 177, 178, 191 y 621.)
P. ¿ Las acciones duran siempre , ó se des
truyen por la prescripcion?
itjLLa accion real , ó mista de personal y
real, q^eda destruida por la prescripcion,
pues luego que el poseedor de la cosa se hizo
dueño de ella , por haberla peseido todo el
tiempo marcado por la lei , cesa contra él to
da accion ; pero si le faltó alguno de los re- '
quisitos indispensables para prescribir la co
sa , entonces no se estingue la accion real si
no por la prescripcion de treinta años. El de
recho de ejecutar por obligacion personal se
prescribe por diez años ; la accion personal
DE LAS ESCEPCIONES. 225
y la sentencia ejecutoria dada .sobre ella, por
veinte años ; la accion de los letrados , boti
carios , especieros , tenderos , oficiales mecá
nicos , criados y otros de semejantes clases ,
para pedir el pago de sus honorarios, géne
ros, hechuras ó estipendios, por tres años :
bajo la inteligencia de que la palabra prescri
bir, cuando se trata de acciones, no significa
adquirir, como cuando se habla de cosas , si
no estinguir. (Lei 21 , tít. 29, P. 3; lei 5, tít.
8, lib. H,N.R.;y leyes 9 y 10 , tít. 11 , lib.
10, N. R.)

título n.
DE LAS ESCEPGIONES.

P. Qué es escepcion?
R. La esclusion de la accion, esto es, la
contradiccion con que el demandado procura
diferir ó destruir la pretension ó demanda
del actor.
P. De cuántas maneras es ?
R. Dilatoria , perentoria y mista.
P. Cuál es la dilatoria ?
226 DE LAS ESCEPCIONES.
R. La que difiere ó suspende el curso de
la causa ; como por ejemplo , las de incom
petencia y recusacion del juez, la de ilegiti
midad de algun litigante para presentarse en
juicio , las de escusion, orden ó moratoria, la
de oscuridad en la demanda, y la de peti
cion antes del plazo. (Lei 9, tit. 3, P. 3.)
P. Cuál es la perentoria?
i?. La que destruye ó enerva la accion prin
cipal. Llámase perentoria, porque acaba el li
tigio cuando está claramente probada. Tales
son las de dolo , miedo , pacto de no pedir, y
otras muchas. (Leyes 8, 10 y 11, tit. 3, P. 3.)
P. Cuál es la mista?
R. La que procede de la cosa que es ob
jeto de litigio, y que no debe ya sujetarse á
este , como la transaccion, cosa juzgada , pa
ga, finiquito, prescripcion, y todas las de-
mas que acreditan la falta de acción en el
demandante , por no haberla tenido nunca ó
haberla ya perdido. Llámase mista , porque
puede proponerse como dilatoria ó peren
toria.
P. ¿ En qué tiempo han de ponerse y pro
barse las escepciones dilatorias?
R. Dentro de nueve dias , contados desde
el del emplazamiento exclusive; y si el de
DE LAS ESCEPCIONES. 227
mandado viviese fuera de la jurisdiccion del
juez que le emplaza, desde el día siguiente
al del último término señalado para compa
recer. Mas tambien podrán proponerse des
pues de los nueve dias , jurando el litigante
no haber tenido ántes noticia de ellas ; y aun
la recusacion puede oponerse en cualquier
estado del juicio. Es de advertir que la de
incompetencia debe ponerse la primera, pues
de otro modo se prorogaria la jurisdiccion
del juez. (Lei 9, tít. 3, P. 3 ; lei 1 , tít. 7, lib.
11, N. R. ; Azevedo, en d. lei 1, n. 55 ; y Co-
varrúbias , practic. qucest. cap. 26, n, 2.)
P. Y las escepciones perentorias ¿cuándo
deben proponerse?
R. Dentro de veinte dias , que empiezan á
correr despues de los nueve que se conce
den para contestar á la demanda; bien que
podrá prorogarse el término, si las escep
ciones nacen despues, ó jura el reo que han
llegado de nuevo á su noticia. (Lei 11, tít. 3,
P. 3; y lei 1 , tit. 7, lib. 11 , ZV. R. yAzev. y
Covar. en los lugares citados.)
TÍTULO III.
DE LOS JUICIOS.

P. Qué es juicio?
R. La legítima discusion de un negocio en
tre actor y reo ante juez competente, que la
dirige y termina con su decision.
P. De cuántas maneras es?
R. Se divide primero en civil y criminal :
segundo, en ordinario ó plenario y sumario
ó estraordinario : tercero, en petitorio y po
sesorio; y cuarto, en doble y sencillo.
P. Cuál es el juicio civil?
R. Aquel en que se trata del interes parti
cular de las personas.
P. Y el criminal?
R. El que tiene por objeto la persecucion
de algun delito.
P. Cuál es el ordinario?
R. Aquel en que se procede segun el or
den y las solemnidades prescritas por el De
recho.
P. Y el estraordinario ó sumario?
R. Aquel en que se conoce de la causa bre
DE LOS JUICIOS. 229
ve y sumariamente, sin las reglas ni solemni
dades establecidas para los juicios comunes.
(Leil, tít. 2a, P. 3.)
JP. Cuál es el petitorio?
R. Aquel en que se pide la propiedad de
una cosa.
P. Y el posesorio?
R. Aquel en que se litiga sobre la adqui
sicion, retencion ó recobro de la posesion.
P. Cuál es el doble?
i?. Aquel en que cualquiera de los dos
litigantes puede ser actor ó reo, como en las
acciones perjudiciales y en la de amojona-
menio.
P. Y el sencillo?
i?. Aquel en que uno tiene que ser el ac
tor y otro el reo.
P. Qué personas intervienen en el juicio?
K. £1 actor ó demandante, el reo ó deman
dado, y el juez. Suelen tambien concurrir ac
cesoriamente los procuradores y abogados, el
asesor, escribano y alguaciles.
P. ¿ Cuáles son las partes principa es de
que se compone el juicio?
H. La demanda, la citacion, la contesta
cion, las pruebas y la sentencia.
-«tí*.
-

TÍTULO IV.
DEL ACTOR Y DEt REO.

P. Quién se llama actor?


R. El que pone alguna demanda en juicio.
P. Y reo?
R. El demandado en juicio civil ó crimi
nalmente, ó el que contradice al actor.
P. Quién puede comparecer en juicio?
R. Todo el que puede obligarse. De aquí
es que no puede litigar el mudo, el sordo, el
loco y el pródigo ; ni el menor de veinte y
cinco años sin la autoridad de su tutor ó cu
rador; ni tampoco el hijo de familias sin li
cencia de su padre , á no ser sobre su pecu
lio castrense ó cuasi-castrense, ó sobre cual
quier otro asunto, siempre que su padre se
halle ausente y él sea mayor de veinte y cin-
-co años. (Lei 1, tít. 3, P. 3; lei 17, tít. 16,
P. 6j-feí 7, til. % Hb. 10, N. R. ; lei % tít. 5, y
leil, tít. % P. 3.)
P. ¿En qué casos puede el hijo de fami
lias litigar con su padre ?
R. Guando se trata de cosas pertenecien
DEL ACTOR Y DEL REO. 231
tes al peculio castrense ó cuasi-castrense ; —
cuando el padre le niega los alimentos;— ó
le malgasta su peculio adventicio;*- ó le tra
ta mui cruelmente; — ó no quiere recono
cerle por hijo; — ó le niega el permiso para
casarse con cierta persona. (Lei 2, tít. 2,
P. 3; y lei 9, tít. 2, lib. 10, N. R.) Mas de
berá pedir la venia del juez en la demanda.
. (Lei 4. tít. 7, P. 3; y lei 3, tít. 2, P. 2.)
P. ¿Qué debe hacer el juez, cuando tiene
que litigar un menor que tarece de tutor y
curador ?
R. Nombrarle de oficio al efecto un cura
dor, que suele llamarse curador ad litem.
(Lei 11, tít. 2, P. 3; y lei 13, tít. 16, ¿\ 6.)
P. ¿Hai algun caso en que pueda obligar
se á uno á poner demanda?
R. Hai tres, que son, cuando uno sabe que
otro va diciendo casas en deshonor suyo ; ó
que trata de moverle pleito maliciosamente
para estorbarle un viaje; ó que espera para
movérsele la muerte de alguna persona, con
cuyo testimonio habia de apoyar su derecho.
En el primer caso puede pedir el interesado
contra su contrario que pruebe sus baldones
ó le dé una satisfaccion : en el segundo , que
ponga luego su demanda, ó no la ponga sino
232 DEL JUEZ.
despues del viaje ; y en el tercero, que ponga
tambien el pleito inmediatamente, ó le abone
la declaracion anticipada del testigo, cuya
muerte se teme. (Leyes 46 y 47, tít. 2, P. 3;
y lei 2, tít. 16, P. 3.)

TÍTULO V.
DEL JUEZ.

P. Quién es juez?
R. El que tiene autoridad- para dirigir el
orden del proceso con sus autos inlerlocuto-
rios, y decidir con arreglo á las leyes la cues
tion principal por medio de su sentencia defi
nitiva.
P. ¿ Qué circunstancias se requieren para
ser juez?
R. Edad competente, ciencia del Derecho,
buenas costumbres y capazidad. ( Leyes 4 y
5, tít. 4, P. 3; y lei 1, tít. 1 . lib. 11 , N. R. )
jP. A qué se reduce la capazidad ?
R. A que el juez no se halle en el número
de aquellas personas que no pueden serlo
por razon de su estado ó de algun defecto ,
DEL JUEZ. 233
cuales son el loco , fatuo , mudo , sordo, cie
go , pródigo , enfermo habitual , la mujer, el
religioso y el clérigo en asuntos seculares.
(Lei 4, tít. 4, P.3;y lei 4, tít. 1, lib. 11 ,
N.R.)
P. ¿ Cuál es la edad competente para ser
juez ?
R. Para ser juez letrado ordinario es ne
cesaria la edad de veinte y seis años cumpli
dos; para ser juez lego la de veinte años tam
bien cumplidos ; y para delegado , la de diez
y ocho. (Lei 5, tít. 4, P. 3 ; y leyes 3 y 6, tít.
1, lib. 11, N. R.)
P. ¿Por qué se necesita mas edad en el
juez letrado que en el lego?
i?. Porque el letrado administra justicia
por sí mismo , y el lego con acuerdo de ase
sor.
P. Qué es asesor?
R. El letrado que aconseja al juez lego lo
que debe proveer y sentenciar en las cosas
de justicia.
P. ¿Está obligado el juez lego á confor
marse con el dictámen de su asesor?
R. No hai duda, porque el asesor es el res
ponsable; pero puede suspender el acuerdo
y consultar á la superioridad con remision
20.
BEL JUEZ.
del espediente y esposicion de las razones
que tuviere para disentir. (Lei % tít. 21, P. 3 ;
y lei 9, tít. 16, lib. if, N.'k.-)
P. Cuántas clases hai de juezes?
R. Tres : ordinarios, delegados y arbitros.
(leí i, tít. 4, P. 3.)
P. Qué es juez ordinario?
R. El que ejerce jurisdiccion en su nom
bre por derecho propio de su oficio , como
los alcaldes , juezes de primera instancia , y
todos los demas que tienen destino fijo. [Lei
IVítf. 4, P. 3. )
P. Qué es juez delegado?
R. El que ejerce jurisdiccion por mandato
del tribunal ó juez ordinario que le comisio
na para alguna causa determinada, dándole
facultades mas ó menos amplias. ( Leyes 1, 2
y 19, tít. 4. P. 3. )
P. ¿ Pueden delegarse cualesquiera cau
sas?
R. No pueden delegarse las causas en que
puede -imponerse pena de muerte, perdi
miento de miembro ó destierro perpetuo; 'ni
aquellas en que se trata de cosa que vale
mas de trescientos maravedís de oro ; ni el
nombramiento de tutores ó curadores. (Lei
-18, tít. k,P.Z;y lei 6, tít. 10, lib. 11, N. R.)
P. Qué es jurisdiccion?
R. La potestad de conocer y sentenciar
las causas civiles y criminales ; á que va aneja
la fuerza coactiva de hacerlas ejecutar, cono
cida con los nombres de mero y misto impe
rio. (Lei 18, tit. 4, P. 3.)
P. Qué es imperio?
R. La potestad de llevar á efecto las sen
tencias.
P. Qué es mero imperio?
R. El poder de administrar justicia en las
causas en que puede imponerse pena de
muerte , perdimiento de miembro ó destier
ro perpetuo. (Lei 18, tit. k,P. 3.)
P. Qué es imperio misto?
i?. La potestad de determinar las causas
civiles , y las criminales cuya pena es de me
nor gravedad que las de muerte, perdimiento
de miembro ó destierro perpetuo. (Lei 18,
iít. 4. P. 3. )
jP. Cómo se divide la jurisdiccion?
i?, Primero, en ordinaria y delegada : se
gundo, en forzosa y voluntaria ó prorogada ;
y tercero, en privativa y acumulativa.
• P. Cuál es la jurisdiccion ordinaria?
R. La que compete al magistrado por de
recho propio de su oficio.
236 DEL JUEZ.
P. Y la delegada?
R. La que se da á alguno por comision pa
ra asunlo y tiempo determinado.
P. Cómo se acaba la jurisdiccion delegada?
R. Por revocacion del delegante ; — por
el trascurso de un año sin hacer uso de ella ;
— por hacerse el delegado igual ó superior
en oficio al delegante; —por muerte ó pérdi
da de oficio del delegante ántes de la citacion ;
— por muerte del delegado , á no ser que se
le hubiese dado la comision , no como á tal
persona , sino como á constituido en tal dig
nidad ú oficio; — y por la conclusion del
tiempo ó negocio. (Ze¿21, tít. 4, P. 3; y leyes
Zhy 47, tít. 18, P. 3.)
P. Cuál es la jurisdiccion forzosa ?
R. La que tiene el juez ó superior respec
to de sus subditos. (Lei 32, tít. 2, P. 3.)
P. Y la voluntaria ó prorogada?
R. La que por consentimiento espreso ó
tácito de las partes se estiende á personas ó
causas para las cuales era incompetente ; co
mo cuando se someten á juez ajeno, renun
ciando espresamente su propio fuero, ó com
parecen ante juez ajeno sin declinar su juris
diccion. (Lei 7, tít. 29, lib. 11, N. R. ; lei 32,
tít. 2, P. 3 ; y lei 20, tít. 4, P. 3. )
DEL JUEZ. 237
P. Cuál es la privativa?
R. La que priva á otros juezes del conoci
miento de la causa ; como la que tienen los
delegados por juez superior al del partido,
los cuales pueden por tanto inhihir á los or
dinarios del conocimiento de las causas con
tenidas en su comision, aunque pendan ante
ellos. (leí 47, tít. 18, P.3.)
P. Cuál es la acumulativa ?
E. Aquella por la que puede un juez co
nocer á prevencion de las mismas causas que
otro; cual es la que reside en dos juezes
iguales de un mismo distrito, pues cualquie
ra de ellos puede anticiparse á tomar cono
cimiento de cualesquiera causas.
P. ¿ Cuál es el juez legítimo y competente
de una causa?
R. En las causas civiles , el juez del lugar
donde el demandado está domiciliado ó lo es
taba cuando se obligó ; — el que se espresó en
el contrato ; — y el del paraje en que se ha
llan las cosas que son objeto del litigio. En las
causas criminales, el del lugar donde el reo
cometió el delito, el de su domicilio, el de
aquel en que tuviere la mayor parte de sus
bienes, si en él fuere hallado , ó el de cual
quier otro en que fuere cogido, siendo vaga
238 DEL JDÉZ.
mundo. (Lei 32, tit. 2, P. 3 ; lei últ. , tit. 9 ,
f. ti; íe¿ 15, tít. 1, y /e¿ 1, tit. 29, P. 7 ; lei 1,
«ft. 36, lib. 12, /V. R. )
P. ¿Todas las personas están sujetas al
juez de su territorio?
. R. Ántes habia algunas que en los nego
cios de mas de diez mil maravedís podian
acudir en la primera instancia al tribunal su
perior de la provincia, las cuales se decia por
eso que gozaban del privilegio llamado caso
de corte; y eran las que llamamos misera
bles, como viudas, menores de veinte y cinco
años que no tienen padre , y otras personas
pobres ó desvalidas , como tambien los con
cejos, monasterios, hospitales, ciudades, igle
sias y demas cuerpos que disfrutan el dere
cho de menores. (Lei 5, tit. 3, lei 41, tít. 18,
lei 20, tít. 23, P. 3 ; lei 1, tit. 1, Hb. h, lei 5,
tit. 2, Ub. 5, lei 9, tít. k, lib. 11, lei 13, tit. i,
tib. 5, lei 5, tít. 3, lib. 1 1 , N. R. ; y lei 37
del Estilo.) Mas ahora los juezes letrados de
primera instancia son, cada uno en su dis
trito , los únicos á quienes compete conocer
en la instancia sobredicha de todas las cau
sas civiles y criminales que en él ocurran
correspondientes á la real jurisdiccion ordi
naria , inclusas las que han sido casos de cor
DEL JUEZ. 239
te. (Regl, de 26 de setiembre de 1835, art. 36.)
P. ¿Quiénes están esentos de someterse
á la jurisdiccion ordinaria?
R. Los que gozan de fuero particular ó
privilegiado , como los eclesiásticos y mili
tares.
P. ¿Están obligados los litigantes á some
terse al juez competente, aunque teman al
guna parcialidad injusta de su parte?
R. Pueden usar en tal caso del remedio le
gal de la recusacion.
P. Qué es recusacion?
R. Una escepcion que pone al juez el liti
gante que le tiene por sospechoso , para que
no conozca de la causa.
P. ¿Se debe espresar causa ó motivo para
recusar á algun juez?
R. Si el juez es individuo de algun tribu
nal superior, es preciso alegar justa causa y
probarla bajo la pena de incurrir en cierta
multa ; pero si es inferior, como juez de pri
mera instancia ó alcalde , basta decir en ge
neral que se le tiene por sospechoso, jurando
que no se procede en ello de malicia. ( Leyes
i, 3, 5 y 8, tít. 2, lib. 11, N.R.)
P. ¿ Qué debe hacer el juez inferior que
se ve recusado?
240 DEL JUEZ.
T?. En las causas civiles debe tomar por
adjunto á un hombre bueno para decidir
ambos el pleito ; mas en las criminales se
acompañará con el otro juez que hubiere en
el pueblo ; en su defecto con dos regidores
nombrados por el ayuntamiento ; y á falta
de estos, con dos hombres buenos que cua
tro de los mas ricos del pueblo, designados
por él, elegirán entre sí por suerte. (Leyes 1
y%tit. %lib. ii,N.R.)
P. ¿Qué se practicará, cuando discorJa
ren el juez y los acompañados?
i?. En las causas civiles nombrarán un
tercero en discordia para que sentencie con
ellos, debiendo prevalecer la mayoría de vo
tos ; pero en las criminales no hai necesidad
de nombrar tercero , pues habiendo solo un
acompañado, prevalece la sentencia mas fa
vorable al reo, y habiendo dos se está por
lo que decidiere la mayor parte. (Leyes 17 y
18, tít. 22, P. 3; y Azevedo, en la lei i, tít.
2, lib.il, N.R.)
P. ¿Qué otras personas pueden ser re
cusadas, ademas del juez?
R. El acompañado, con tal que se alegue
y pruebe justa causa , el asesor, el relator y
el escribano. ( Greg. López , en la glosa 9 de
de los Arbitros. 241
la lei 22, tit. 4, P. 3; lei G, tít. 20, lib. 4, ¿V.
y lei% tít. 21, P. 3.)
P. ¿ Cuáles son los efectos de la recusa
cion de estos individuos ?
R. El asesor recusado no tiene entrada en
la causa, pudiendo recusar cada parte tres
abogados asesores ; mas al relator y escriba
no se les nombran por el juez acompañados,
cuyos derechos ó salario tiene que pagar el
recusante. (Lei 2, tit. 21, P. 3; leyes 9 y 27,
tít. 2, lib. 11, N. R. ; lei 6, tit. 20, lib. 4, iV.
i?.; y Greg. López, en la gl. 9 de la lei 22,
tit. 4, P. 3.)
P. ¿Qué sucederá, si el juez no cumple
los requisitos de la recusacion?
i?. Que será nulo cuanto se hiciere en la
causa, á no ser que el recusante siga litigan
do ante el recusado sin protestar.

TÍTULO VI.
SE LOS ARBITROS.

P. Qué es árbitro?
R. El juez avenidor, nombrado por las
21
242 be los Arbitros.
partes interesadas, para decidir el negocio
sobre que disputan. ( Lei 23, tít. 4, P. 3. )
P. Cuántas clases hai de juezes arbitros ?
R. Dos, á saber : árbitros de derecho, que
se llaman árbitros simplemente, y árbitros
de hecho, que suelen llamarse arbitradores
ó amigables componedores. (Lei 23, tít. 4,
P. 3.)
P. ¿ Qué diferencia hai entre los árbitros
y arbitradores ?
R. Los árbitros deben oir y sentenciar el
pleito segun Derecho en la propia forma que
los juezes ordinarios ; mas los arbitradores
componen amistosamente y de buena fe el ne
gocio que se les confía. ( Lei 23, tít. 4. P. 3. )
P. Quiénes pueden nombrar árbitros ?
i?. Todos los que son capazes de celebrar
contratos y comparecer en juicio. (Lei 25,
tít. 4, P. 3.)
P. Quiénes pueden ser nombrados?
R. Los que no tienen defecto legal para
juzgar, ó por mejor decir, para ser mandata
rios; pero no puede serlo el juez ordinario
que habría de entender en la misma causa.
(Leih, tít. 35, lib. 11, N. R.)
P. ¿ Qué causas pueden ponerse en ma
nos de árbitros?
DE LOS ARBITROS. 243
R. Todas las relativas al interes de los par
ticulares, ménos las de matrimonio y las cri
minales en que solo se trate del castigo del
delincuente. (Lei 2b, tit. 4> P. 3; y lei 4, tít.
17, lib. 11, N. R.)
P. i Cómo debe hacerse el nombramiento
de árbitros ?
i?. Mediante escritura pública de compro
miso, en que las partes espresan los sugetos
que eligen, el negocio que les confían, las
facultades que les dan, y la promesa de estar
á su decision. Tambien puede hacerse me
diante escrito privado firmado por las partes.
{Leyes 23 y 26, tit. k, y lei 106, tit. 18, P. 3.)
P. i Puede alguno ser obligado á aceptar
el nombramiento de juez arbitro ?
R. Nadie puede ser obligado á aceptarle ;
pero despues de admitido el encargo, no
puede dejarse sino con justa causa. ( Leyes 29
y SO, tit. k, P. 8.)
P. ¿ En qué casos puede ser recusado el
árbitro?
R. Cuando despues de puesto el negocio
en sus manos , descubre alguna de las partes
ser su enemigo, ó haber sido sobornado por
la otra. (Lei 31, tít. 4, P. 3.)
P. Cómo han de proceder los árbitros?
244 DE LOS ARBITROS.
R. Con arreglo á Derecho y al compromi
so, oyendo las razones y pruebas de cada
una de las partes en la misma forma que los
juezes ordinarios, y dando la sentencia con
asistencia de todos bajo nulidad , y con em
plazamiento de los litigantes dentro del tiem
po y lugar señalado , y si no hubiese término
prescrito, dentro de tres años. (Leyes 23, 27,
29 y 32, tít. 4, P. 3.)
P. ¿ Qué se hace cuando hai igualdad de
votos en la sentencia?
R. Si la una mitad condena al demandado
en mas y la otra en ménos cantidad , vale la
condenacion en ménos, pues en ella todos
convienen; pero si la una le absuelve y la
otra le condena absolutamente, se ha de ele
gir un tercero por los interesados ó por los
arbitros. (Leyes 26, 29 y 32, tít. 4, P. 3 ; y
lei 17, tít. 22, P. 3.)
P. ¿ Puede apelarse de la sentencia dada
por los arbitros ?
R. Puede apelarse dentro de diez dias , con
tal que la parte agraviada no la hubiese con
sentido espresamente firmándola ; pero como
desde luego trae aparejada ejecucion , puede
pedir su cumplimiento la parte vencedora,
dando fianzas de restituir la cosa con sus fru
de los Arbitros. 245
tos encaso de revocacion. En la Constitucion
del año 12, tít. 5, artículo 281, que rige co
mo decreto , se dice, que « la sentencia que
dieren los árbitros se ejecutará, si las partes
al hacer el compromiso no se hubieren reser
vado el derecho de apelar. » (Leyes 23 y 35,
tít. 4, P. 3; lei 4, tít. 17, lib. 11 , N. R. ; y
Const. de 1812, art. 281.)
P. ¿Para ante quién debe hacerse esta ape
lacion ?
R. Para ante el juez ordinario; y si este
confirma la sentencia, puede apelarse para
ante el tribunal superior del territorio. Si
tambien fuese confirmada por este tribunal ,
ya no hai mas grado; pero si fuese revocada,
puede suplicar ante el mismo la parte con
traria. (Lei 4, tit. 17, lib. 11, N. R.)
P. ¿Debe ser obedecida tambien la sen
tencia de los arbitradores?
R. La sentencia de los arbitradores tiene
la misma fuerza que la de los árbitros , de
biendo aplicarse á la una cuanto se ha dicho
sobre la otra.
P. ¿Cómo se acaba el poder de los árbi
tros?
R. Por muerte natural ó civil de alguno de
los árbitros, ó por la natural de alguna de las
21.
246 DE LOS ABOGADOS.
partes, á no ser que se hubiese dispuesto otra
cosa en el compromiso ; — por la revocacion
espresa ó tácita de las partes; — por cesion
que hiciere una parte á otra de la cosa sobre
que versaba el litigio; — por destruccion ó
pérdida de la misma cosa; — y por haber pa
sado el término del compromiso, ó en su de
fecto el de tres años. (Leyes 27, 28, 30 y 31,
tit. k, P. 3.)

TÍTULO VII.
DE LOS ABOGADOS.

P. Quién es abogado?
R. El que defiende causas suyas ó ajenas
en los tribunales demandando ó respondien
do ; ó sea , el profesor de jurisprudencia que
lia obtenido título legítimo para defender en
juicio los intereses ó causas de los litigantes.
(Leil, tit. 6, P. 3.)
P. Qué se requiere para ser abogado?
R. Ser mayor de diez y siete años; —haber
estudiado siete años de jurisprudencia con el
grado de licenciado, y ocho sin él;—no tener
DE LOS ABOGADOS. 247
ninguno de aquellos defectos que impiden el
ejercicio de esta profesion; y ser aprobado
por alguna de las audiencias territoriales.
(Leyes 2, 3, 4 y 5, tít. 6, P. 3 ; planes de estu
dios de ^ 4 de octubre de \ 824 y 26 de octubre
de ^36 ; y regl, de 26 de setiembre de 1835.)
P. ¿Qué debe hacer el abogado que quiere
ejercer su profesion?
R. Presentar su título á la autoridad del
pueblo en que se estableciere, y ascribirse al
colegio de abogados donde le haya. (Decr. de
Cortes de 8 de junio de 1823 yií de julio de
1837, y real decr. de 5 de mayo de 1838.)
jP. ¿ Quiénes son los que no pueden ejer
cer la abogacía ?
R. El sordo, ciego, loco ó pródigo ; el que
recibiere precio por lidiar con fieras ; el con
denado por adulterio, traicion, alevosía, fal
sedad, homicidio ú otro delito tan grave como
estos; el infamado por algun otro delito me
nor que los anteriores , bien que este puede
abogar por sus parientes y pupilo que tuviere
en su guarda ; y finalmente el eclesiástico , el
cual no puede abogar ante juezes seglares si
no en causas propias , ó de su iglesia, ó de
sus padres, paniaguados, personas pobres ú
otras á quienes haya de heredar. (Leyes 2, 3,
248 DE LOS ABOGADOS.
4 y 5, tit. 6, P. 3; y lei 5, tit. 22, lib. 5, 2V. i?.)
P. ¿Cuáles son las obligaciones principales
del abogado?
R. Firmar los poderes del procurador di
ciendo ser bastantes; — alegar brevemente
sin citar leyes; —ver originalmente los proce
sos ; — seguir la causa que hubiere comenza
do; — guardar los secretos de su cliente; — y
patrocinar de balde á los pobres. (Lei 3, tit.
31, lib. 5, N. R.; lei 3, tit. 3, lib. 11, N. R.;
lei 1, tit. 14, lib. 11, ^V. R.; y leyes 8, 9, 11,
12, 13 y 14, tit. 22, lib. 5, N. R.)
P. ¿ Qué es lo que prohiben las leyes al
abogado?
R. Pactar que su cliente le dé cierta parte
de la cosa litigiosa , bajo privacion perpetua
de oficio; — pedirle algo para el caso de salir
victorioso en el pleito, bajo suspension de
oficio por seis meses ; — asegurarle la victoria
por alguna cantidad, bajo la pena de pagarla
con el doblo ; — hacerle partido de seguir el
pleito por cierta suma , bajo la pena de cin
cuenta mil maravedís ; — alegar leyes falsas ,
bajo la pena de falsario ; — hacer pedimentos
sobre cosas cuyo valor no pase de quinientos
reales de vellon;—abogar en causa cuyo juez
ó escribano sea su pariente mui inmediato;
DE LOS PROCURADORES. 249
—y defender en segunda instancia al adver
sario del que defendió en la primera. (Lei 14,
tít. 6, P. 3; leyes 7, 17 y 22, tít. 22, lib. 5, N.
R.; lei i, tít. 7, P. 7; lei 1, cap. 7, tít. 13,
5, N. R.; y lei 6, tít. 3, ¿«6. 11, ¿V. R.)
P. ¿Solo los abogados pueden hacer peti
ciones para los tribunales?
R. Solo ellos; pero los interesados pueden
hacer las de levísimo momento , y los pro
curadores los pedimentos llamados de cajon.
(Lei9,tít. 31, ¿M. 5,N.R.)

TÍTULO VIH.
DE LOS PROCURADORES.

P. Quién es procurador?
R. Hablando generalmente, es el que en
virtud de poder ó facultad de otro ejecuta en
su nombre alguna cosa ; pero aquí es el que
por oficio en los tribunales y á virtud de po
der de alguna de las partes la defiende en al
gun pleito ó causa, haciendo las peticiones y
demas diligencias necesarias para el logro de
su pretension. Este se llama procurador cau
sídico ó judicial. (Lei 1, tít. 5, P. 3.)
250 DE LOS PROCUBADOBES.
P. ¿Quién puede nombrar procurador ju
dicial?
R. Puede nombrarle : Io el mayor de veinte
y cinco años que está fuera de la patria po
testad ; pues estando sujeto á ella, solo puede
en aquellos casos en que le es permitido pa
recer por si en juicio, segun lo dicho en el tí
tulo del actor;—2o el menor de dicha edad con
otorgamiento de su tutor ó curador; bien que
si le nombrase por sí solo, sera válido lo que
el procurador hiciere en su beneficio, y no lo
que le perjudicase. (Leyes 2 y 3, tít. 5, P. 3.)
P. Quién puede ser procurador?
R. Todo el que no tenga impedimento le
gal. Le tienen el loco, sordo, mudo, pródigo,
menor de veinte y cinco años, clérigo, fraile,
sugeto poderoso, militar en actual servicio,
empleado ausente en servicio del público, la
mujer, el acusado de algun delito durante la
causa , y en las audiencias el que carece de
título. (Leyes 5, 6, 7, 8 y 9, tít. b,P.Z\ylei
5 , tít. 22, lib. 5, N. R.)
P. ¿Es necesario valerse de procurador
para presentarse enjuicio?
i?. El que haya de litigar en un tribunal
superior, debe dar poder á uno de los pro
curadores del número que ejercen allí su ofi
DE LOS PROCURADORES. 251
cio mediante título de aprobacion. (Lei i,
tít. 31, «6. 5, N. R.)
P. ¿Quién da el título álos procuradores
de las audiencias?
R. El rei, á simple propuesta de la audien
cia respectiva, la cual no debe proponer para
estos oficios sino personas mayores de 25
años, de probidad y buena reputacion, acredi
tadas y de suficiente arraigo, que hayan prac
ticado tres años , y cuya capazidad aparezca
por un exámen que les hagan dos ó mas mi
nistros del tribunal. (Ordens. de las aud. de
20 de diciembre de 1835, art. 202 y sig.)
P. ¿Cuáles son las obligaciones del procu
rador?
R. Exhibir, al presentarse en juicio, poder
de su parte bastanteado por un abogado; —
formar los pedimentos de términos, apre
mios, rebeldías, publicacion de probanzas,
señalamiento y demas que sean de mera sus-
tanciacion, debiendo valerse para cualesquie
ra otras peticiones de algun abogado del co
legio ; — tener un libro de correspondencia,
otro de poderes, otro de cargo y data, otro
de notificaciones , otro de provisiones y eje
cutorias, y otro de conocimientos ó recibos de
procesos; — poner la mayor actividad en los
252 DE LOS PROCURADORES.
asuntos de sus clientes; y responderles de
los daños y perjuicios que les causaren por
su culpa; — no usar de su oficio por ante es
cribano que sea su padre, hijo, hermano,
suegro ó yerno ; — y no traspasar los lími
tes de su poder, ni sustituirle sino en caso de
tener esta facultad. (Orden, de las aud. de 20
de diciembre de 1835, art. 205 y sig.)
P. ¿Para qué casos necesita el procura
dor poder especial?
R. Para pedir restitucion in integmm ; —
reclamar el hijo que alguno retiene contra
la voluntad de su padre ; — acusar á un tu
tor de sospechoso; — aceptar beneficio y to
mar posesion de él ; — hacer juramento de ca
lumnia ; — jurar en el juicio ; — prorogar ju
risdiccion;— hacer donacion, cesiones ó tran
sacciones; — renunciar ó no seguir la apela
cion;— y para algunos otros actos. (Leyes \$,
16, 17, 18 y 19, tít. 5, P. 3.)
P. ¿Qué debe hacerse, cuando es dudoso
el poder del procurador?
R. Hacerle prestar caucion de que el prin
cipal dará por firme y valedero lo que él hi
ciere, (leí 21, tít. 5, P. 3.)
P. ¿ Cómo se acaba el poder dado para
pleitos? - . •
DE LOS ESCRIBANOS. 253
R. Por revocacion del poder ; — por re
nuncia del procurador notificada á la parte ;
— por muerte del poderdante acaecida ántes
de la contestacion del pleito ; — por la del
procurador, sea ántes ó despues ; y por la ter
minacion del negocio. (Leyes 23 y 24, tít. 5,
P. 3.)

TÍTULO IX.
DE LOS ESCRIBANOS.

P. Quién es escribano?
R. El que tiene por oficio redactar y auto
rizar con su firma cuanto pasa en los juicios,
así como tambien los contratos que se cele
bran entre partes.
P. ¿ Qué se requiere para ejercer este ofi
cio?
R. Ser mayor de veinte y cinco años, lego
y no eclesiástico, libre y no esclavo, haber
adquirido la suficiente instruccion practican
do cuatro años con un escribano, gozar de
buena reputacion, y obtener título del rei,
previo exámen y aprobacion de la audiencia
22
254 DE LOS ESCRIBANO».
en cuyo territorio resida. (Leyes 7 y 8, tít. 9,
P. 2 ; lei % tít. 19, P. 3; leyes 2, 5, 6, 7, 8 y
10, tít. 15, lib. 7, TV. 1?. ; circular del Consejo
real de 12 de agosto de 1757 ; regí, de 26 de
setiembre de 1835, arí. 58; y lei de 14 de abril
de 1838.)
i*. Cuáles son sus principales obligaciones?
R. Estender todos los actos sin abreviatu
ras ni guarismos; — escribir por sí las depo
siciones de los testigos, sin que á ello esté
presente persona alguna, guardando legali
dad y sigilo; — abstenerse de actuar en las
causas de sus parientes hasta el cuarto gra
do; — tener un libro de registro llamado
protocolo , en que siente todas las escrituras
que haga; — manifestar en las escrituras que
conoce personalmente á los otorgantes, ó es
presar en su defecto los nombres y vecindad
de dos testigos que los conozcan, y que aque
llos deben presentarle ; — notar á la espalda
de los procesos y escrituras los derechos que
él y los juezes llevaren á las partes, bajo la
pena de su pérdida con el cuatrotanto para el
fisco; — hacer uso del papel sellado que cor
responda, así en las diligencias judiciales co
mo en las escrituras públicas; y remitir á la
audiencia del distrito, dentro de los ocho
DE LA DEMANBA. * 255
primeros dias del rites de enero de cada
año, testimonio literal del índice de los pro
tocolos que hubiere otorgado en el año ante
rior, con fe negativa de no quedar otros ea
su poder. (Lei 7, tít. 19, P. 3; lei 7, tít. 11,
lib. 11, N. R.; lei 6, tít. 3, ¡ib. ii, N. R.;
leyes 1 y 2, tít. 23, lib. 10, N. R. ; lei 18,
tít. 15, ¿¿6. 7, y lei 8, ft'í. 35, ii, N. R. ;
real céd. de'i2 de mayo de 1824; y real or
den de 21 de octubre de 1836.)
P. ¿En qué pena incurre el escribano que
comete falsedad en juicio ó en los instrumen
tos?
i?. Antes en la de infamia perpetua, y en
la mutilacion de la mano derecha (Lei 16,
tít. 19, P. 3.); y ahora en multa, privacion
de oficio, ó presidio, segun los casos.
-°«o- ,

TÍTULO X.
DE LA DEMANBA.

P. Qué es demanda?
R. La peticion que se hace al juez para
que mande dar, pagar ó hacer alguna cosa.
P. Cómo se hace la demanda?
256 * DE LA DEMANDA.
R. De palabra ó por escrito.
i3. Cuándo se hace de palabra?
R. Cuando el valor de lo que se pide, no
pasa de quinientos reales vellon. (Lei 1, tít.
13, lib. 5, N. R.)
P. Cuándo por escrito?
R. Siempre que la cantidad pase de qui
nientos reales vellon. (Lei 1, tít. 13, lib. 5,
N. R.)
P. ¿Qué es lo que debe contener la de
manda?
R. La designacion del juez anle quien se
hace ; el nombre del actor que la presenta ; el
del reo contra quien se dirige; la cosa, can
tidad ó hecho que se pide ; y la razon ó causa
en que se funda. (Leyes 25 y 40, tít. 2, P. 3.)
P. ¿Para qué se necesita la espresion de
todas estas circunstancias?
R. Para que el juez se entere del negocio
y pueda citar al reo, y para que el reo co
nozca si el juez es ó no competente para él,
y si le conviene litigar ó acceder desde luego
á los deseos del actor.
P. ¿Qué debe hacer el actor que no puede
especificar bien la cosa que intenta deman
dar, por estar en poder del reo ó do otra per
sona?
DE LA DEMANDA. 257
R. Pedir que el que la tiene, le ponga de
manifiesto ante el juez , ó bien la cosa misma,
ó bien el documento que la designa. Así es
que el heredero puede pedir la presentacion
del testamento en que se le nombra tal, para
demandar luego la herencia. (Leyes 16 y 17,
tít. 2, P. 3.)
P. ¿Pueden deducirse varias acciones en
una misma demanda?
R. No hai duda, con tal que no sean con
trarias entre sí; y si lo fueren, debe elegir el
demandante la que mas le convenga, no pu-
diendo despues volver á la otra, que se pre
sume renunciada. (Lei 7, tít. 10, P. 3.)
P. ¿Se puede pedir en una misma deman
da la propiedad y la posesion?
R. Bien se puede ; pero es mejor pedir
primero la posesion, por razon de las venta
jas que lleva consigo la calidad de poseedor
en el juicio de propiedad. (Lei 27, tít. 2,
P. 3.)
P. ¿Deben acompañar á la demanda las
escrituras ó documentos en que se apoya?
i?. Si no acompañaren á la demanda tudas
las escrituras con que el actor intente pro
barla, no debe el juez admitirlas despues ,
como no se presenten con el juramento de
22. \
258 DE LA DEMANDA.
que no se tenia noticia de ellas, ó de que an
tes no habían podido ser habidas. (Leí i, tít.
3, lib. 11 , N. R., y regl, de 26 de setiem
bre de 1835, art. 48.)
P. ¿Qué puede hacer el actor que tiene
esperanzas de que Ja certeza de su preten
sion resultará de la declaracion del reo?
R. Pedir ante todas cosas que el reo jure
y declare al tenor del pedimento, si es cier
to ó no lo que en él se espresa , con reser
va de otra prueba, por si lo negare, y que
evacuada la declaracion se comunique al mis
mo actor, para en su vista formalizar la de
manda segun le convenga. (Leyes 1 y 2, tít,
10, P. 3; y lei 4, tít. 28, lib. 11, N. R.)
P. ¿Qué recurso tiene el actor, cuando te
me que el reo disipará durante el litigio la co
sa sobre que va á pleitear?
R. Puede pedir que se ponga dicha cosa
en secuestro y poder de un hombre abonan
do, para que este la entregue despues al que
saliere vencedor en el pleito. [Leyes del tít, 9,
P. 3.)
P. Cómo suele terminarse la demanda?
R. Con la palabra jura, etc. , la cual signi
fica que la parte presta el juramento de ca
lumnia.
DE IA CITACION. 259
P. ¿ Qué es lo que asegura la parte con
este juramento?
R. Que no procede ni procederá en el plei
to con malicia , sino de buena fe y creyendo
que le asiste la razon. x

TÍTÜLO XI.
DE LA CITACION.

P. Qué es citacion?
R. La notificacion que se hace al deman
dado ó reo de la orden del juez, para que
comparezca en el tribunal á estar á derecho.
(Lei i, tít. 7, P. 3.)
P. De cuántas maneras es?
R. Verbal y escrita, segun fuere la de
manda. La verbal se hace por medio de un
alguacil ó portero , y la escrita por medio de
escribano. (Lei 1, tít- 1, P. 3.)
P. Puede omitirse la citacion ?
R. De ningun modo , porque entonces el
juicio seria nulo. (Ind. de la lei 12, tít. 22,
P, 3.)
P. A quién se debe citar?
260 DE LA CITACION.
i?. A la persona que tiene el interes prin
cipal en la causa ; y alguna vez se cita tam
bien á los que no tienen mas que un interes
secundario.
P. ¿Y si no puede ser habida la persona,
porque huye ó se esconde, ó se ignora su pa
radero?
R. Basta entonces hacer saber la citacion
en su casa á la familia , y si no tuviere fami
lia , á los vecinos mas coreanos , dejándoles
una papeleta, que tambien suele fijarse á la
puerta de la casa. Mas si no tuviere casa ni
hognr, se le citará por tres pregones , para
que se lo hagan saber sus parientes ó ami
gos. (Lei 1, tít. 7, P. 3 ; y Greg. López, gl. 6.)
P. Cómo se hace la citacion ?
R. Habida la persona citada , se le lee ín
tegramente la providencia de citacion , se le
da en el acto copia literal de ella, aun cuan
do no la pida, y se hace espresion de haberse
cumplido lo uno y lo otro en la diligencia , la
cual ha de firmarse por la persona citada , y
no sabiendo hacerlo, por un testigo á su rue
go. Si el citado no quisiere firmar, ni presen
tar el testigo que firme á su ruego, practi
cará el escribano la citacion en presencia de
dos testigos, los cuales, en el caso de hacerse
DE LA CITACION. 261
la citacion en la casa del citado , deberán ser
vecinos de la misma casa ó de las mas próxi
mas á ella ; y cuando se practique en otro lu
gar, deberán ser vecinos de aquel pueblo,
sin que puedan serlo en ningun caso los ofi
ciales y dependientes del escribano. Cuando
la citacion se practique por cédula , á causa
de no poder ser habida la persona que debe
ser citada, se espresará en la diligencia el
nombre , calidad y habitacion de la persona
á quien se entregue la cédula, y esta firmará
su recibo. Si no sabe ó no quiere firmar, se
observará lo que para ambos casos queda
prevenido. La omision de estas formalidades
produce la nulidad de la citacion y de los
procedimientos ulteriores, á ménos que el ci
tado se manifestase sabedor de la providen
cia por escritos ó diligencias judiciales he
chas á su instancia, y no reclamase la citacion
formal. El escribano que hiciere una citacion
sin observar estas formalidades, incurrirá en
la multa de 500 rs. vn. , y será ademas res
ponsable de los perjuicios que se sigan á las
partes, si se declara nula. Todas estas forma
lidades son estensivas á todas las notifica
ciones. (Lei de i de junio de 1837.)
P. ¿ Cómo se hará la citacion, cuando las
262 DE LA CITACION.
personas son inciertas ó no conocidas?
R, Por tres pregones y por inedio de los
periódicos.
P. ¿ Y si la persona que ha de ser citada,
está fuera del territorio del juez?
R. Se dirige carta requisitoria á la justicia
del distrito donde se halla. ( Lei 3, tit- kt 1%,
11, N. R.)
P. Cuáles son los efectos de la citacion?
R. Prevenir el juicio, es decir, que el ci
tado por un juez no puede serlo despues por
otro de igual jurisdiccion sobre el propio
negocio; — interrumpir la prescripcion; —
hacer nula la enajenacion posterior de la co
sa demandada; — perpetuar la jurisdiccion
del juez delegado ; — sujetar al citado á se
guir el pleito ante ti juez que le citó, aunque
despues deje de ser competente ; — y obli
gar al citado de otro fuero á presentarse al
juez á deducir su esencion, á no ser que esta
sea notoria. ( Leyes 2,12, 13 y 14 „tíl. 7, P.
3; lei 29, tit. 29, P. 3; lei 21, tit. 4, y lei 35,
tit. 18, P. 3. )
P. ¿ Qué deberá hacerse contra el que no
comparece en juicio siendo citado?
R. Antes se le hacían tres citaciones , acu
sándole tres vezes la rebeldía ; y despues de
DE LA CITACION. 263
esto podia el actor elegir uno de dos medios,
ó el de prueba , siguiendo la causa hasta la
sentencia definitiva inclusive, ó el de asenta -
miento. (Lei 2, tít. 5, lib. 11, N. R.) Pero
ahora no se acusa mas que una vez la rebel
día, previa la citacion y emplazamiento ; y si
acusada no comparece el demandado, se da
por contestada la demanda, y se recibe el
pleito á prueba. ( Regl. de'O&dé setiembre de
1835.)
P. ¿ Cómo se sigue la causa con el deman
dado rebelde ó contumaz?
R. El juez le señala los estrados del tribu
nal por procurador, y en ellos se leen sos
providencias , causando al reo el mismo per
juicio que si se le notificasen en persona.
P. ¿ A qué se reduce el medio de asenta
miento!!
R. A entregar al actor la cosa demanda
da , ó darle bienes del reo rebelde hasta en
la cantidad á que asciende la deuda. El reo
puede purgar la rebeldía y recobrar sus bie
nes compareciendo dentro de dos meses, si la
accion es real, y dentro de uno, si fuere per
sonal. (Lei 2, tít. 8, P. 3.; y lei \ , tít. 5,
lib. 11 , N. R. ) Mas esta via del asentamiento
no está ya en uso.
TÍTULO XII.
DE LA CONTESTACION.

P. Qué es contestacion ?
R. La respuesta del reo á la demanda del
actor, confesando ó negando la causa ó fun
damento de la accion.
P. Puede omitirse la contestacion?
R. Si se omitiese, seria nulo el juicio, y no
podria darse sentencia definitiva sino en caso
de contumazia. (Lei 8, tít. 10, P. 3; y Gfeg.
López en su glosa 4. )
P. ¿ Qué término se concede al reo para
contestar ?
R. Nueve dias , que corren desde la noti
ficacion de la demanda, si el reo se halla en
el mismo pueblo, ó el plazo que el juez seña-
te, si estuviere ausente. (Leyes 1 y 3 , tít. 6,
lib. 11, N.R.)
P. ¿Qué pena tiene el reo que deja pasar
el término prescrito sin contestar á la de
manda?
R. La de ser habido por confeso en razon
de su contumazia y rebeldía; pudiendo el
DE LA CONTESTACION. 265
actor en semejante caso elegir el medio de
prueba ó el de asentamiento, segun se ha
dicho en el título de la citacion. Mas no será
habido por confeso, si probare alguna justa
causa que le impidió contestar, como en
fermedad, ocupacion, incursion de enemi
gos, avenidas, etc. (Lei i, iít. 6, lib. 11, iV. R.;
y lei 2, tít! 7, P. 3.)
P. Esta confesion presunta ¿tiene tanta
fuerza como si fuese real y verdadera?
R. No tiene mas efecto que el de cargar
al reo la prueba que debería hacer el actor,
si aquel hubiese contestado á su tiempo ; y
así es que el reo podrá deducir y probar sus
escepciones en cualquier estado del juicio.
(Curia filípica, p. 1, §. 14, n. 9.)
P. i Cuáles son los efectos de la contesta
cion?
R. Que las dos partes quedan sujetas á la
jurisdiccion del juez, aunque sea incompe
tente para alguna de ellas; y que se forma
entre las mismas una especie de cuasi-con-
trato, de modo que ninguna de las dos puede
desistir de la causa contra la voluntad de la
otra. (Lei 8, tít. 10, P. 3; Paz, praxis, tom.
y p. \ , tewp. 6; y Carleval, de jud., tít. 2,
disp. 1.)
23
TÍTÜLO XIII.

DE LAS PRUEBAS.

P. Qué es prueba?
R. La averiguacion qiíe se hace jurídica--
merite de una cosa dudosa; 6 bien, el medio
con que se muestra y hace patente la verdad'
ó falsedad de alguna cosa. (Leí 1, tít. 14, P. 3.)
P. De cuántas maneras es ?
R. Plena ó completa, y semiplena ó incom
pleta.
Pj Cuál es la prueba plena ó completa?
R. La que demuestra ciara é indudabie-
metote la verdad del hecho controvertido.
P. Cuál es la semiplena ó incompleta?
R. La que por si sola no' demuestra con
claridad el hecho, pero ptredo contribuir con
otras á demostrarlo.
P. ¿Cuáles 80n fás especies de prueba
plena ?
R. La confesion judicial : — el juramento
decisorio;—la declaracion uniforme de dos ó
mas testigos que no tengan tacha ;—los ins
trumentos públicos; — y la inspeccion ocular
DE LAS PRUEBAS, 3(57
del juez en ciertas causas. (Lei&, tít. lk, P.
3; y Zeyes 2, 3 y k, tít. \ l, P, 3.)
P. ¿Y las esptcies de prueba semiplena ó
incompleta?
R. La deposicion de un solo te'sligo; — la
confesion estrajudicial;^-el juramento suple
torio; — la comparacion ó cotejo de letras; —
la fama pública;—y las presunciones. (Lei 8,
tít. 14, P. 3; leyes 2, 3 y 4, tít, 11, P- 3; y
lei 118, í#. 18, P, %)
P, Qué es confesion judicial?
i?. La declaracion que hace la parte contra
sí misma delante del juez. (Lei t, tít. 13,
P- 3.)
P. Cómo se hace la confesion judicjal?
i?. Puede hacerse por escrito en los misr
mos pedimentos, ó verbalmente respondien
do á las preguntas que el juez hiciere de ofi
cio, ó en virtud de posiciones presentadas al
efecto por la parte contraria, las cuales no
son otra cosa que ciertas proposiciones ó
asertos breves de hechos pertenecientes á la
causa, sobre los cuales pide un litigante que el
otro declare bajo de juramento, para relevar
se de la prueba : en cuyo caso llama el juez
al otro litigante , y tomándole juramento , le
examina por si ó por medio del escribano sin
268 DE LAS PRUEBAS.
darle tiempo para consultar ó deliberar, y sin
permitirle que responda con palabras dudo
sas , sino claras y categóricas , afirmando ó
negando, bajo pena de ser habido por confe
so. (Proem. y leyes i y 2, tít. 12, P. 3; lei 3,
tít. 13, P. 3; leyes Íy2, tít. 9, y lei 2, tít. 10,
lib. 11, N. R.)
P. ¿ Qué se requiere para que la confesion
haga plena fe?
R. Que sea libre ; que recaiga sobre cosa
determinada ; que no contenga error de he
cho; que en las causas criminales no sea falsa
la existencia del cuerpo del delito; y que
siendo hecha por algun menor intervenga la
autoridad de su curador. ( Leyes 1 , 2 , i , 5 y
6, tít. 13, P. 3; lei 3, tít. 25, P. 3; lei % tit. 7,
lib. 2, Fuero real; leyes 4 y 5, tít. 28, lib. H,
N. R.; regl, de 26 de setiembre de 1835 , art.
8; y Const. de 1812, art. 287.)
P. Hace siempre fe la confesion judicial?
R. En los negocios civiles que interesan al
orden púplico, no debe hacer plena fe ni de
cidir la contestacion. Asi que, cuando una
mujer quiere separarse de su marido por
causa de sevicia ó de injurias graves , no se
ha de tener por suficiente la confesion del
marido para pronunciar la separacion.
DE LAS PBUEBAS. 269
P. Qué es confesion estrajudicial?
/?. La declaracion que uno hace contra sí
mismo fuera de la presencia del juez, ó ante
juez incompetente. (Lei 3, tít. 13, P. 3; y lei
133 del Estilo.)
P. ¿ Tiene alguna vez fuerza de plena
prueba la confesion estrajudicial?
R. La tiene, cuando se hace en causas civi
les á presencia de la otra parte ó de su pro
curador, con espresion de la cosa y de la ra
zon por que se debe ; pero es preciso hacer
constar en justicia, á lo ménos con dos testi
gos, que se hizo dicha confesion. Fuera de
este caso, como generalmente en materia de
delitos, no hace sino prueba semiplena. (Lei
7, tít. 13, P. 3; y lei 2, tít. 7, lib. 2, Fuero
real.)
P. Qué es juramento?
- R. La declaracion que hace una de las par
tes tomando á Dios por testigo de la verdad
del hecho que atesta; y es judicial ó estraju
dicial , segun que se presta en presencia del
juez ó fuera de ella. (Leyes 1 y 2, tít. 11,
P. 3.)
P. ¿De cuántas maneras es el juramento -
judicial?
R, De dos : decisorio y supletorio.
272 DE LAS PRUEBAS.
dores ó alevosos , homicidas , falsarios , per
juros, forzadores de mujeres, ladrones, ta
hures , alcahuetes , y otros de mala vida ó
viciosas costumbres;—4.° por falta de impar
cialidad, á los interesados en la causa, á los
ascendientes y descendientes de los litigan
tes, á los hermanos, á la mujer por el marido
y al marido por la mujer, al criado, familiar
ó paniaguado, al enemigo capital, al hombre
mui pobre en causas criminales , si no es de
buena reputacion, al juez en pleito que juzgó
ó ha de j uzgar, al abogado y al procurador por
su parte ó cliente, y al tutor ó curador por sus
pupilos ó menores. (Leyes 8á 22, tít. 16, P. 3.)
P. ¿Cuántos testigos se necesitan para
hacer plena prueba?
R. Dos , por lo ménos , contestes y mayo
res de toda escepcion : contestes , esto es ,
que concuerden en la persona , hecho ó ca
so, tiempo y lugar : mayores de toda escep
cion , esto es , que no tengan ninguna de las
tachas ó defectos indicados. (Lei 32, tit. 16,
P. 3.)
P. ¿ Cuántos testigos puede presentar ca
da litigante?
i?. Hasta treinta sobre cada hecho que in
tentare probar. (Lei% tít. 11, lib. 11, N. R.)
DE LAS PRUEBAS. 273
P. ¿Están obligados toáoslos ciudadanos
á declarar cuando se les mande?
R. Lo están en tanto grado, que el juez
puede apremiarlos á ello hasta con prision y
embargo de bienes; pero en causas crimi
nales nadie puede ser apremiado á declarar
conira sus ascendientes , descendientes , pa
rientes colaterales hasta el cuarto grado, mu
jer ó marido, suegro, yerno, padrastro ó
entenado. (Leyes \ í y 35, tít. 16, i5. 3; lei
últ., tit. 30, P. 7; y lei i, tít. 11, lib. 11,
N. R.)
P. ¿ Deben comparecer en el tribunal to
dos los testigos?
R. Todos , ménos los mayores de setenta
años, las mujeres honradas, las personas ilus
tres, los enfermos, y otros que tengan algun
inconveniente , á los cuales ha de tomarse la
declaracion en sus casas. (Lei 35, tít. 16,
P. 3.) Segun decreto de Cortes de 11 de se
tiembre de 1820, restablecido por real decreto
de 30 de agosto de 1836, toda persona de
cualquiera clase , fuero y condicion que sea,
cuando tenga que declarar como testigo en
una causa criminal , está obligada á compa
recer para este efecto ante el juez que co
nozca de ella , luego que sea citada por el
274 DE LAS PRUEBAS.
mismo f sin necesidad de previo permiso del
jefe ó superior respectivo.
P. i Y si los testigos se hallan fuera del
territorio del juez?
R. Debe el juez enviar el interrogatorio á
la justicia del pueblo donde moran, para que
les reciba sus declaraciones y se las remita
cerradas, á no hacerse por medio de recep
tores ; pero si de la causa puede resultar pena
de muerte, mutilacion ó destierro, debe e'
juez que la sigue, oir por sí mismo á los testi
gos. (Zeí 27, tit. 16, P. 3.)
P. ¿Qué debe hacer el juez ántes de to
mar declaracion á los testigps?
R. Recibirles juramento, con citacion del
adversario, de que dirán verdad y np des
cubrirán sus testimonios á las partes , pues
sin el juramento no valdrían Jas deposiciones,
á ménos que las partes se conviniesen ántes
en ello. (Leyes 23 y Zk.tít. 16, P. 3; y tei 3,
tit. H,lib. 11, iV. R,)
P. ¿ Cómo han de ser examinados los tes
tigos ?
R. Cada uno separadamente por el mismo
juez, . si la causa es- importante, ó por el escri
bano , si es de poca monta , debiendo mani
festar las- circunstancias del hecho, y ¡cómp y
DE LAS PRUEBAS. 275
por qué sabe lo que se le pregunta. (Lei 2!j,
• tít. 16, P. 3 ; y lei 16, tít. 32, Ht. 12, Ñ. R.)
P. ¿ Qué hará él juez, cuándo, hallare va
riedad en los testigos?
R. Carearlos para avériguar la verdad por
medio de siis esplicac'fones y debates.
P. Y si alguno de ellos ighoráse la lengua?
R. Examinarte por medid de dos intér
pretes juramentados; ó de uno solo, si mas hó
hubiere, ó en ello se convinieren los litigantes.
(Gómez, lib. 2, tidr. , éap. 9; y Curia filí
pica, p. i, §. 17, n. 26.J
P. Él testigo yá examinado ¿ podra volver
á corregir su déclaracion?
R. Puede corregirla, miéritras nó haya ha-
blado con ninguna de las partes interesadas ;
y el juez puede llamarle en cualquier casó
para que esplique las espresiones oscuras ó
dudosas. [Lei 30, tít. 16, P. 3.)
P- í Q"é partido tomará el juez, cuando
ambos litigantes hacen prueba plena con tes
tigos ?
É< Atenerse á las declaraciones de los mas
idóneos y fidedignos ; y en caso de igualdad
absolver al demandado. (Leyes 40 y 41, tít.
16, P. 3. )
P. ¿Debe presentar cada litigante todos
276 DE LAS PRUEBAS.
sus testigos de una vez, ó puede presentarlos
en tiempos diferentes ?
R. Miéntras dure el término de prueba,
puede presentar siempre nuevos testigos ,
aun cuando hubiese dicho al juez que ya no
queria traer mas , con tal que jure no saber
lo que depusieron los primeros ni los de su
contrario ; pero pasado el tiempo de la prue
ba, no se admiten ya sino instrumentos.
(LeiU, tit. 16, P. 3.)
P. i Puede destruirse con testigos la fuer
za de un instrumento?
R. Si cuatro testigos idóneos afirman que
en el dia del otorgamiento se hallaba el otor
gante supuesto en otro lugar mui distante, se
da por probada la falsedad del instrumento
público ; y bastan dos testigos para probar
la del instrumento privado. ( Lei 117, tit. 18,
Í>. 3.)
P. Cuando hai contradiccion entre el ins
trumento público y lo que dicen los testigos
instrumentales, ¿ quién merece mas crédito?
R. El instrumento, si concuerda con el pro
tocolo, y el escribano es de buena fama ; pero
si el escribano no tiene buena opinion , y el
instrumento es reciente , se ha de creer á los
testigos. (Lei 115, tit. 18, P. 3.)
DE LAS PRUEBAS. 277
P. Si un acreedor presenta escritura pú
blica para probar la deuda, ¿ cuántos testigos
habrá de presentar el deudor para probar el
pago?
R. Cinco testigos que hubieran sido llama
dos para presenciarlo. (Lei 32, tit. 16, P. 5.)
P. Qué cosa es instrumento ?
R. La escritura , papel ó documento con
que se justifica ó prueba alguna cosa.
P. De cuántas maneras es ?
R. Público y privado : aquel es el que está
autorizado en debida forma por una persona
pública , y este el que eslá hecho por personas
particulares sin autorizacion de persona pú
blica.
P. ¿ Cuáles son los instrumentos públicos
que hacen plena prueba?
R. Las escrituras otorgadas ante escribano
con las formalidades correspondientes ; los
documentos auténticos dados por las princi
pales autoridades del reino ; y las partidas de
bautismo ú otras certificaciones dadas por los
párrocos conforme á los asientos que constan
en los libros parroquiales. (Lei 114, tlt. 18,
P. 3; Greg. López , en la gl. 1. de la lei 1,
tit. 18, P. 3; y lei 45, tít. 10, lib. 11, N. R.)
P. Cómo se hacen las escrituras públicas?
34
278 DE LAS PRUEBAS.
R. El escribano forma primero una nota ó
estrado de lo que contratan las partes en un
cuadernillo de papel comün llamado minu
tario , estando presentes dos testigos , y lúegó
lo pone por estenso en un libro de papel en
tero, que se llama protocolo ó régistrb, él
cual queda en poder del escribano ; y de esta
escritura matriz, que firma el interesado, ó
un testigo á su ruego , se sacan los traslados
necesarios autorizados por el escribano ante
quien pasó, ú otro que haya heredado sus
protocolos , ó que esté facultado para ello por
el juez competente y con citacion de las par
tes. Este traslado pues , sácado del proto
colo, hace fe en los tribunales; siendo de
advertir que cuando el escribano que lo au
toriza, no es conocido en alguno de estos, debe
legalizarse su firma cün tres escribanos que
certifiquen su legitimidad. (Leyes 54, 55 y 114,
Ut. 18 , P. 3 ; leyes 8 y 9 , ttt. 19 , P. 3 { y lei
1, tit. 23, lib. 10, N. R.)
P. ¿ Hacen fe las escrituras privadas, co
mo recibos, cédulas y libros de cuentas?
i?. Solo la hacen, cuando son reconocidas
por las partes ó probadas por dos testigos que
declaren enjuicio contradictorio» haberlas vis
to hacer. (Leyes 114 y 119, tit. 18, P. 3. )
DE LAS PRUEBAS. 279
P. Qué se entiende por inspeccion ocular ?
R. El reconocimiento que hace el juez, por
sí mismo ó por peritos , de la cosa controver
tida para enterarse del estado de ella en cuan
to al punto que se disputa.
P. ¿ Cómo debe hacerse la- inspeccion ocu
lar?
R. Cuando el asunto sobre que ha de re
caer dicha inspeccion, pide conocimientos fa
cultativos, debe acompañarse el juez; de pe
ritos nombrados por las partes, los cuales
despues de aceptado el encargo y hecho ju
ramento de cumplirle fielmente, hacen el re
conocimiento á presencia del escribano y de(
juez, y de las partes, si quieren asistir, pasán
dole luego á este para que le apruebe. Si e\
asunto no exige conocimientos facultativos,
el juez nombra testigos, á cuya presencia se
hace el reconocimiento con citacion de las
partes. En ambos casos lo pone todo por di
ligencia el escribano, y autorizado el acto por
los que han intervenido en él, se une á los au
tos y forma prueba completa. (Leyes 8 y 13,
tít. i 4 ; P. 3, Greg. López, en la glosa 6 de d.
lei 8 ; y varios autores. )
P. Qué es presuncion ?
R. La consecuencia que saca la lei ó el ma
280 DE LAS PRUEBAS.
gistrado de un hecho conocido á otro desco
nocido ó incierto,
P. De cuántas maneras es t
R. De dos : presuncion legal, y presun
cion judicial.
P. Cuál es la presuncion legal ?
i?. La que se halla establecida por la lei ;
y esta se subdivide en presuncion juris et de
jure , y en presuncion juris. Presuncion juris
et de jure , ó sea presuncion de derecho y por
derecho , es la que tiene tal grado de fuerza
que contra ella no se admite prueba ; como
cuando naciendo de un mismo parto varon y
hembra , se presume nacido primero el va-
ron. Presuncion juris, ó sea presuncion de
derecho , es la que solo se considera cierta,
mientras no se pruebe lo contrario : así es ,
por ejemplo, como se presumen legítimos los
hijos habidos en un matrimonio, miéntras no
se pruebe que no lo son.
P. Cuál es la presuncion judicial?
R. La que forma el juez por las circuns-
ncias antecedentes, concomitantes ó sub
ís <u ;ntes al hecho principal que se examina.
E¡> puede ser vehemente, mediana ó leve,
según el mayor ó menor grado que tenga de
probabilidad.
DE LAS PRUEBAS. 281
P. Qué prueba hacen estas presunciones?
R. La presuncion juris et de jure hace
prueba plena; como tambien la presuncion
juris, miéntras no se pruebelo contrario. Mas
la presuncion judicial solo hace semiplena
probanza, mas ó ménos fuerte segun el ma
yor ó menor grado de gravedad. ( Leyes 8, 9,
10 y 12, tít. 14, P. 3 ; y lei últ., tít. 33, P. 7.)
P. ¿ Cuántas pruebas semiplenas son ne
cesarias para hacer una plena?
R. En las causas civiles bastan dos, con
tal que sean de las mas fundadas , segun di
cen algunos autores; pero en las criminales
es preciso que las pruebas sean mas claras
que la luz para condenar al acusado. (Moli
na , de primogen, lib, 2 , cap. 6 , n. 35 ; Ant.
Gómez, lib. 3, variar., cap. 12, n. 26; y lei
12, tít. 14, P. 3. )
P. A quién corresponde hacer la prueba?
R. El actor debe probar el hecho ó cosa
que negare el reo; pero á vezes tiene qu^
probar el reo su negativa , cuando contiene
afirmacion , y está la presuncion á favor f;je
su adversario. (Leyes i.y% tít. 14, P.;i3^¡f

-oj§o-
r
94.
TÍTULO XIV.

DE LA SENTENCIA.

P. Qué es sentencia?
R. La decision legítima del juez sobre la
causa controvertida en su tribunal. (Lei i,
tit. 22, P. 3. )
P. De cuántas maneras es?
R. De dos : definitiva é interlocutoria.
P. Cuál es la definitiva? •
R. La que se pronuncia sobre el asunto
principal , absolviendo ó condenando al de
mandado. (Lei% tít. 22, P. 3.)
P. Y la interlocutoria ?
R. La que se da sobre algun incidente ó
artípulo de la causa , y dirige el orden del
juicio, (Lei 2, tit. 22, P. 3.)
P. ¿Qué se requiere para que la sentencia
sea válida?
R. Que el juez sea competente ; — que no
se haya omitido la citacion ni la contestacion
en el juicio ; — que se cite á las partes para
oiría ; — que contenga absolucion ó conde
nacion , designando la cosa ó cantidad ; —
DE LA SENTENCIA, 2Í$
que sea conforme á las leyes, á la naturaleza
ó buenas costumbres y á la demanda ; — que
se dé en el lugar acostumbrado , haciéndola
escribir, de dia y no de noche , y en dia que
no sea feriado ; — que no se pronuncie con
tra autoridad de cosa juzgada ; — y que no
haya mediado soborno. (Leyes 1, 5, 12, 13,
15 y 16, tít. 22, P. 3; leyes 3\y 5 , tít. 2G,
P. 3; y lei 2, tít. 16, lib. 11, N. R. )
P. i Qué remedio tiene el agraviado, cuan
do es nula la sentencia ?
R. Pedir que se declare nula y de ningun
valor.
P. ¿ A quién debe hacer este recurso de
nulidad?
R. Al mismo juez que pronunció la sen
tencia, si no apeló de ella, ó apeló con la cláu
sula salvo el derecho de nulidad; y en otro
caso al juez superior.
P. ¿ Cuánto tiempo tiene el agraviado pa
ra pedir la nulidad de la sentencia?
R. Sesenta dias, que corren desde el dia en
que fué dada ; pero si la nulidad fuere noto
ria y como tal resulta de los mismos autos,
v. gr. por defecto de citacion, puede pedirse
perpetuamente. (Lei 1, tíf. 18, lib. 11, AT. R.;
y leyes 3, 4 y 5, tít. 26. P. 3. ) •
284 DE LA SENTENCIA.
P. ¿ Puede el juez revocar la sentencia que
dió en caso de ser injusta?
R. Puede revocar la ¡nterlocutoria en cual
quier estado del juicio á peticion de las par
tes ; pero no la definitiva , aunque se le pre
senten nuevas escrituras ó pruebas, á no ser
que la hubiere dado por soborno, escrituras
ó testigos falsos, pues en este caso podria re
vocarla en el término de veinte años por vía
de restitucion, á pedimento de los interesa
dos. Mas aunque no se pueda revocar la de
finitiva, pueden hacerse en ella dentro del
mismo d¡a las enmiendas que se crean justas
con respecto á las palabras, frutos y costas.
( Leyes 2 , 3, 4, 13 y 19, tít. 22, P. 3 ; y leyes
1 y 2, tít. 26, P. 3. )
P. A quién se debe condenar en costas?
R. Al litigante temerario, esto es, al que no
ha tenido justa causa para litigar, aun cuan
do haya prestado el juramento de calumnia.
(Lei8, tít. 22, P. 3, con la glosa 2 de Grey.
López. )
P. ¿ Qué debe hacer el juez, cuando el ac
tor prueba diferente cosa de la que demandó ?
R. Absolver al reo de la instancia.
P. ¿Qué quiere decir absolver de la ins
tancia ?
DE LOS TRÁMITES JUDICIALES. 285
i?. Que el reo queda libre de este juicio,
pero no de que el actor le vuelva á demandar
sobre la misma cosa , entablando la accion
correspondiente ; bien que no valen los autos
hechos, sino solo los instrumentos y proban
zas, reproduciéndolos de nuevo.

-oK°-

TÍTÜLO XV.
DE LOS TRAMITES JUDICrALES.

P. Qué cosa son los trámites judiciales?


R. El órden sucesivo de los pasos y dili
gencias que deben practicarse en los juicios
civiles y criminales.
P. ¿Cuáles son los trámites de los juicios
civiles ?
R. Estos trámites son diversos segun la
mayor ó menor cuantía de los pleitos.

PLEITOS DE MENOR CUANTÍA.

P. ¿Cuáles son los pleitos de menor cuan


tía?
i?. Aquellos en que la cantidad ó valor de
28ti DE LOS TRÁMITES JUDICIALES.
la cosa que se litiga, no escede de dos mil
reales vellon en la Península é islas adyacen
tes, y de 4705 rs. 30 mrs. en ultramar. Estos
pleitos se dividen en tres clases : á la prime
ra pertenecen los negocios que no esceden de
doscientos reales en la Península é islas adya
centes, y de seiscientos en ultramar : á la se
gunda los que pasando de las cantidades es
presadas no escedan de quinientos reales ve
llon en la Península y dichas islas, y de dos
mil en ultramar; y á la tercera los que pasen
de quinientos reales y no escedan de dos mil
en la Península é islas, y de cuatro mil sete
cientos cinco reales y treinta maravedís en ul
tramar.
P. ¿Qué trámites se siguen en los pleitos
de menor cuantía de la primera clase?
R. El demandante debe acudir al alcalde,
ó si le parece mejor, al juez letrado de prime
ra instancia rlonde le hubiere, para que de
cida el negocio en juicio verbal : á cuyo efec
to se asociará el alcalde ó juez con dos hom
bres buenos nombrados uno por cada parte,
y despues de oir al demandante y al deman
dado y el dictámcn de los dos asociados, da
rá ante escribano la providencia que sea jus
ta; y de ella no habrá apelacion, ni otra for
DE LOS TRÁMITES JUDICIALES. 287
maliciad que asentarla , con espresion sucin
ta de los antecedentes , en un libro que de
berá llevar para los juicios verbales, firman
do el alcalde ó juez, los hombres buenos y
el escribano. (Regl, de 26 de setiembre de
1835, art. 31.)
P. ¿Cómo se procede en los pleitos de me
nor cuantía dela segunda clase?
R. Del mismo modo que en los de la pri
mera, con la diferencia de que solo á los jue-
zes letrados de primera instanciá correspon
de conocer de ellos en todos los pueblos de
su partido, con esclusion de los alcaldes.
(Regl, de 26 de setiembre de 1835, art. 40.)
P. ¿ Se deciden tambien en juicio verbal
los pleitos de menor cuantía de la tercera
clase?
R. Estos pleitos se sustancian y deciden
por escrito, aunque por trámites mas breves
que los juicios ordinarios ; y no pueden en
tablarse, sin que se haya intentado primero
el medio de la conciliacion ante el alcalde del
pueblo.
P. No habiendo tenido efecto lá concilia
cion, ¿qué debe hacer el interesado?
R. Principiar el pleito ante el juez letrado
de primera instancia del partido por un escri
288 DE LOS 1RÁMITES JUDICIALES.
to breve, en que ponga la accion ó demanda
con la claridad y los demas requisitos que
exigen las leyes. ( Lei de 10 de enero de 1838,
art. 1 y 2.)
P. ¿Qué providencia dará el juez en su
vista?
R. Mandará conferir traslado al demanda
do por el término de nueve dias, dentro de
los cuales deberá presentarse la contesta
cion; y pasados, el escribano hará recoger
los autos con escrito ó sin él, sin que se ne
cesite para ello peticion de la pane ni man
dato del juez. (Dicha lei, art. 3.)
P. ¿Podrá el demandado formar artículo
de no contestar ó de previo pronunciamien
to?
R. Bien podrá proponer escepciones dila
torias ; pero no por eso dejará de contestar
subsidiariamente sobre lo principal. (D. lei,
art. 4.)
P. Recogidos los autos, ¿qué es lo que de
be hacerse?
R. Proveer auto señalando el dia en que
las partes han de hacer su respectiva prueba.
El dia que se señale, ha de ser posterior al
quinto y anterior al duodécimo siguientes al
de la fecha de dicho auto. (D. lei, art. 5.)
DE LOS TRÁMITES JUDICIALES. 289
P. Con qué objeto se fija este término?
R. Con el de que las partes ó sus defenso
res puedan ver los autos en la escribanía; la
actora para enterarse de la contestacion á la
demanda, y ambas para preparar sus pro
banzas con el debido conocimiento. (D. lei,
art. 6.)
P. Cómo se hacen las pruebas?
R. El dia señalado para ellas producirán y
propondrán verbalmente el demandante y el
demandado la que les convenga, instrumen
tal, testifical, por juramento deferido ó refe
rido, ó por posiciojnes ; pudiendo presenciar
los litigantes y sus defensores todos los actos
de la prueba, así de la suya como de la con
traria, y hacer á los testigos todas las pre
guntas que sean concernientes al asunto. To
do lo relativo á las pruebas se espresará bre
ve, pero claramente, en una diligencia que se
estenderá en el acto, y que firmarán el juez, el
escribano, las partes, sus defensores, si hu
biesen asistido, y los testigos que supieren
escribir. (D. lei, art. 7, 8 y 10.)
P. ¿Y si por cualquier causa no se pudie
sen concluir ambas pruebas en el mismo dia?
R. Se continuarán en los dos siguientes.
(D. lei, art. 9.)
ts
290 DE LOS TRÁMITES JUDICIALES.
P. ¿ Se podrá prorogar el término proba
torio?
R. Se podrá prorogar poT otros ocho dias,
si dentro de los tres se señalare y ofreciere
presentar algun testigo que esté ausente, pe
ro para el solo efecto de examinarle. ( D. lei,
art. 9.) /
P. ¿Podrán ser examinados los testigos
ántes del término de prueba?
/?. Solo podrán serlo aquellos que estén
para ausentarse (D. lei, art. 9.), ó con algu
na enfermedad que haga temer su pronto fa
llecimiento.
P. Cuándo pronunciará el juez la sentencia?
R. Dentro de los primeros cuatro dias des
pues de concluido el término probatorio ,
decidiendo en ella lo que corresponda sobre
algun articulo, si se hubiese formado, y sobre
lo principal ; pero si el artículo es de los que
perimen ó estinguen la accion, ó impiden el
progreso ad ulteriora, decidiéndose que tiene
lugar, no se fallará sobre lo principal. ( D. lei,
art. 11.)
P. ¿Qué hará el juez, cuando el artículo se
funde en que el valor de la cosa litigiosa no
pasa de quinientos reales, ó en que escede de
los dos mil ?
DE LOS TRÁMITES JUDICIALES. 291
K. Si así resulta efectivamente, fallará so
bre lo principal en el primer caso, y manda
rá en el segundo reponer el pleito al estado
de la contestacion de la demanda, para pro
seguirlo como pleito de mayor cuantía, car
gando al actor en el primer caso todas las
costas, y en el segundo las causadas desde
dicha contestacion. (D. lei, art. 12.)
P. Qué fuerza tiene la sentencia?
K. Si no es apelada, se tiene por consenti
da y pasada en autoridad de cosa juzgada por
ministerio de la lei, y sin necesidad de de
claracion judicial : de modo que trascurrido
el término de la apelacion , que es el de cin
co dias, deberá el juez ejecutarla. (D. lei,
art. 13 y 14.)
P. ¿Pueden prorogarse alguna vez los tér
minos de estos pleitos?
R. Todos ellos son perentorios é improro-
gables ; pero no se cuentan los dias festivos
en que vacan los tribunales. (D.lei, art. 27.)
Véase el tít. de la apelacion, al fin.

PLEITOS DE MAYOR CUANTÍA.

P. ¿Cuáles son los pleitos de mayor cuan


tía?
292 DE LOS TBÁMITES JUDICIALES.
R. Aquellos en que la cantidad ó valor de
la cosa que se litiga , pasa de dos mil reales
vellon en la Península é islas adyacentes, y
de cuatro mil setecientos cinco reales y treinta
maravedís en ultramar. (Lei 10 de enero de
1838, art. 1; lei U , tít. "20, lib. 11, N. R. ;
y regl, de 26 de setiembre de 1835, art. 41.)
P. Dónde han de entablarse estos pleitos ?
R. En el juzgado de primera instancia del
partido ; pero precediendo el juicio de conci
liacion, cuando el negocio es de aquellos que
pueden terminarse por avenencia de las par
tes. (Regl, de 26 de setiembre de 1835, art.
43 y 47.)
P. Qué es juicio de conciliacion?
R. Un acto judicial que tiene por objeto
procurar que las partes se avengan y conci
ben sobre el asunto que da motivo al pleito.
i*. Cómo se celebra este juicio?
R. El alcalde del pueblo del demandado
(que es el único juez competente para estos
actos, aun con respecto á los eclesiásticos y
militares sin perjuicio de su fuero), asociado
de dos hombres buenos, nombrados uno por
cada parte, oye al demandante y al deman
dado, se entera de las razones en que respec
tivamente apoyan su intencion; y oido el dic
DE LOS TRÁMITES JUDICIALES. 293
támen de los dos hombres buenos, toma la
providencia que le parece propia para el fin
de terminar el litigio sin mas progreso, como
se termina en efecto, si las partes se aquietan
con esta decision estrajudicial. ( Constit. de
1812 , art. 282, 283 y 284; reglam. de 26 de
setiembre de 1835, art. 21 y sig.; y-lei de
5 de junio de 1821.)
P. Y si las partes no se avienen?
R. Puede entonces e! demandante , con
certificación de haber intentado inútilmente
el medio de la conciliacion, acudir al juez de
primera instancia, que sea competente, para
principiar el pleito en juicio ordinario , ó en
el que corresponda.

JUICIO CIVIL ORDINARIO.

P. ¿ Cuáles son los trámites del juicio or


dinario ?
R. El actor presenta la demanda con las
escrituras en que la apoya. (Leyes 1 , 2 y 4 ,
til. 3, Ub. ii,N. R.;y regl, de 26 de setiem
bre de 1835, art. 48.)
Emplázase al reo, y se le da traslado de
ella para que la conteste dentro de nueve
dias continuos, contados desde la notificacion,
25.
294 UE LOS TRÁMITES JUDICIALES.
si está en el pueblo del pleito , y desde el si
guiente al dul último término concedido para
comparecer, si se hallare ausente. (Leyes 1
y 3, tít. 6, lib. i\,N. R.)
Si el reo tiene escepciones dilatorias ó pe
rentorias , las opone y prueba dentro de los
términos indicados al hablar de ellas en el
tít. 2.° de este libro. -
Si el reo no tiene escepciones , presenta la
contestacion dentro del término espresado ,
usando en ella de reconvencion ó mutua pe
ticion, si tuviere algun derecho contra el
actor ; en cuyo caso se le conceden veinte dias
desde la notificacion de la demanda : bajo el
concepto de que debe igualmente acompa
ñar, si le fuere posible, las escrituras de su
prueba. (Lei % tít. 3, y lei 1 , tít. 7 , lib. 11 ,
N.R.)
De la contestacion se da traslado al actor ,
quien en su vista presenta dentro de seis dias
otro escrito , llamado réplica, para impugnar
la contestacion. (Lei 3, tít. 1, lib. 11, N. R.)
De la réplica del actor se confiere asimismo
traslado al reo ; el cual la rebate dentro de
otros seis dias en otro pedimento, llamado
duplica, duplicacion ó contraréplica. (D. lei 3,
tít. 7, lib. 11, ¿V. R.)
DE LOS TRÁMITES JUDICIALES. 295
De la contraréplica se suele dar traslado
al actor, no para que la combata, sino para
que se instruya de ella, pues con estos dos
escritos , y aun á vezes con uno de cada par
te, queda ya fijada la cuestion. (D. lei 3, tít.
7, lei l, tít. 14, y lei i, tít. 15, lib. 11, Si. R.;
y reglam. de 26 de setiembre de 1835, art.
48, regla 5.) *
En este estado, ó bien de oficio, ó bien á
pedimento de una de las partes presentado
en el término de seis dias , y despues de dar
traslado á la oira, abre el juez la causa á
prueba por un breve término comun á las par
tes , que á pedimento de cualquiera de ellas
se va prorogando hasta el restante de la lei.
E! término legal es de ochenta dias, si la
prueba de testigos ha de hacerse dentro del
distrito de la audiencia territorial ; de cíenlo
veinte dias , si ha de practicarse en el terri
torio de otra audiencia ; de suis meses , si los
testigos se hallaren fuera del reino ó de la
otra parte del mar ; y aun el de año y medio,
de dos ó mas, si los paises fueren mui remo
tos. El juez puede acortar, segun las circuns
tancias , pero no alargar los términos proba
torios. ( Leyes 1, 2, 3 y 4, tít. 10 , libro ss , 11 ,
N. R.)
296 DE LOS TRÁMITES JUDICIALES.
Abierta la causa á prueba , toman los liti
gantes el proceso por su turno , y cada uno
forma su interrogatorio, y lo presenta con un
pedimento, para que á su tenor sean exami
nados los testigos que presente; y aun puede
pedir que su adversario responda por via de
posicion lo que supiere sobre alguna de las
preguntas del interrogatorio , para aprove
charse de la respuesta, si le conviene. El juez
admite el interrogatorio en cuanto es perti
nente, da traslado del pedimento á la otra
parte , citándola al mismo tiempo , para que
presencie el juramenio de los testigos , y lue
go procede á tomar á estos sus declaracio
nes. (Lei23, ttt. 16, P. 3.)
Concluido el término probatorio, manda
el juez, á pedimento de alguno de los liti
gantes con traslado al otro , que se haga pu
blicacion de probanzas , esto es, que se unan
á los autos, pata que puedan ser examinadas
por las partes ; y hecha y notificada , puede
cualquiera de estas oponer tachad dentro de
seis dias á los testigos de la contraria , sea
por la inhabilidad de sus personas , sea por
no haber dado razon de sus dichos, sea por
no haberse hecho su examen en debida for
ma. Si el juez las encuentra admisibles, las
DE LOS TRÁMITES JUDICIALES. 297
recibe á prueba por un término perentorio,
que no pase de la mitad del que se concedió
para la probanza principal. (Leyes 22, 28 y 37,
tít. 16, P. 3; lei 6 , tit. 33 , P. 7 ; y leyes 1 y
2, tít. 12, lib. 11, N. R.)
Hácese tambien publicacion de las pruebas
de tachas ; y tomando las partes por su orden
el proceso, alega cada una dentro de seis
dias lo que resulta á su favor, esforzando sus
razones y debilitando las del adversario , en
uno ó dos pedimentos que se llaman de bien
probado. (Lei 1, tit. 14, y lei 1, tít. 15, lib. 11,
N. R.; y regl, de 26 de setiembre de 1835,
art. 48, regla 5. )
En seguida declara el juez por conclusos
los autos a instancia de alguna de las partes,
ó de oficio , si la otra no concluye en el ter
mino de seis dias ; y pasa luego á examinar
la causa y pronunciar la sentencia dentro del
término de veinte dias , con citacion de los
litigantes. ( yes 1 y 3, tít. 15 , y leyes i y 2,
tít. i6, lib. 11, N.R.)
La sentencia no apelada pasa en autoridad
de cosa juzgada, debiendo ejecutarse dentro
de tercero dia, si fuere sobre cosa raiz ó mue-
. ble, y dentro de diez dias, si recayese sobre
alguna cantidad de dinero. (Lei 19-. tit. 22,
298 DS LOS TRÁMITES JUDICIALES.
P. 3 ; y lei 1 , tít. 17, lib. 11 , Novís. Reeop. )
Son precisos y perentorios los términos
señalados por las leyes recopiladas para el
emplazamiento del demandado, contestacion
á la demanda , oposicion y prueba de las es-
cepciones y reconvenciones , y escritos de
replica y duplica; y el juez, bajo su mas es
trecha responsabilidad , no puede nunca pro-
rogarlos sino por causa justa y verdadera
que se esponga, y por el tiempo absoluta
mente necesario , con tal que la próroga no
esceda en ningun caso del término señalado
por la lei : debiendo bastar siempre el que se
acuse una sola rebeldía, cumplido que sea el
término respectivo, para que sin necesidad
de especial providencia se despache el apre
mio y se recojan los autos, á fin de darles su
debido curso. ( Regl. de 20 de setiembre de
1835, art. 48, regla 2.)
Nunca debe admitirse prueba de cosa, que
probada no aproveche en el pleito; ñipara
las probanzas debe concederse mas término
que el suficiente dentro del máximo señalado
por la lei, el cual los juezes no pueden sus
pender nunca sino por causa de manifiesta ne
cesidad que se esprese en el proceso. (Regl,
de 26 de setiembre de 1835 , art. 48 , regla 4.)
DE LA APELACION. 299
El juez que no diere las sentencias interlo-
cutorias dentro de seis dias, y las definitivas
dentro de veinte , debe pagar dobladas las
costas que se causaren , y ademas cincuenta
mil maravedís para el fisco y acusador ó fis
cal. (Lei 1, iit. 16, lib. li,N.ñ.; y regl, de
26 de setiembre de 1835 , art. 48 , regla 6.)

TÍTULO XVI.

DE LA APELACION.

P. Qué es apelacion?
R. La reclamacion ó recurso que alguno
de los litigantes ú otro interesado hace al juez
ó tribunal superior, para que reponga ó re
forme la sentencia del inferior. ( Lei 1 , iít.
23, P. 3.)
P. Quién puede apelar?
R. Todos aquellos á quienes la sentencia
perjudicare, aunque no hayan sido parte en
la caHsa. (Lei 4, til. 23, P. 3.)
P. Puede apelar el procurador ?
R. Puede y debe interponer la apelacion ;
pero no está obligado á seguirla , á no ser
300 DE LA APELACION.
que el poder sea general para todos los plei
tos , ó contenga la cláusula especial de que
pueda ó deba continuarla. (Lei 3, tít. 23, P. 3.)
P. ¿ Qué será , si por descuido del procu
rador quedase firme la sentencia?
R. El procurador deberá responder de su
omision ; y si careciese de bienes , podrá
entonces apelar el principal dentro del tér
mino legal , contado desde el dia en que su
piere la sentencia. (Lei% tít. 23, P. 3.)
P. De quién y á quién ha de apelarse?
R. Del juez menor al mayor; y no á cual
quiera mayor, sino al inmediato en grado ;
bien que siempre es válida la apelacion que
se hiciere para ante juez igual, ó para ante el
reí y los tribunales que le representan ; en
cuyo caso se remite al juez competente. En
el fuero ordinario , de los juezes de primera
instancia debe apelarse á la audiencia del ter
ritorio, así en las causas civiles como en las
criminales. (Lei 18, tít. 23, P. 3 ; lei 10, tít. 1,
lib. 5, N R.; lei 13, tít. 20, lib. 11, N.R.;y
regí, de 26 de setiembre de 1835, art. 58. )
P. De qué sentencias puede apelarse?
R. De las definitivas ; mas no de las inter-
locutorias, á no ser que tengan fuerza de de
finitivas ó causen gravámen que no sea fácil
DE LA APELACION. 301
reparar por la definitiva. (Lei 13, iít. 23,
P. 3; y lei 23, tít. 20 , lib. 11, N. R. )
j?. ¿Hai algunos casos en que no se ad
mite apelacion de las sentencias definitivas ?
R. Hai los siguientes : 1.° cuando la can
tidad ó valor de lo que se litiga , no pasa de
veinte y cinco duros en la Península é islas
adyacentes , y de ciento en ultramar : — 2.°
cuando se trata de causas criminales sobre
injurias, y faltas livianas que no merezcan
otra pena que alguna reprension ó correc
cion lijera : — 3.° cuando las partes hubiesen
pactado en juicio ó fuera de él que no apela
rían : — 4.° cuando se hubiere dado la sen
tencia en virtud de juramento decisorio : —
5 ° cuando los litigantes hubieren sido rebel
des ó coniumazes, no queriendo asistir al
juicio siendo llamados : — 6." cuando fuere
vencido en juicio el que debiese algo al rei
por razon de cuenta, pecho ú otra causa.
(Regl, de 2G de setiembre de 1835, art. 40 y
41; lei 25, tit. 11 , P. 3; y leyes 9 y 13, ttt.
23, P. 3.)
P. ¿ No hai tambien algunos delitos en que
no puede apelarse, como los delitos notorios,
los de robo público, motin, fuerza de muje
res , falsificacion de moneda ó sello real y
26
302 DE LA APELACION.
homicidio alevoso, é igualmente cuando el
reo condenado está convicto y confeso?
R. En el dia tiene que admitirse la apela
cion en todos estos delitos y casos , debiendo
considerarse derogadas las leyes y costum
bres en contrario. (Lei 1, tít. 20, lib. 11, N.
R.; y reglam. de 26 de setiembre de 1835, art.
51 , disp. ih. )
P. Cuál es el término para apelar?
R. El de cinco dias continuos, sin contar
el de la notificación de la sentencia ; y en las
causas sobre delitos livianos que no merezcan
pena corporal, el de dos. (Lei i, tít. 20, lib.
11, N. R. ; y regl, de 26 de setiembre de 1835,
art. 51 , disp. 14. ) Mas los menores pueden
apelar dentro del término de cuatro años des
pues de haber salido de la menoría : el fisco,
los concejos y las iglesias, dentro del de cua
tro años desde la notificacion de la sentencia ;
y á los ausentes en servicio del Estado, en
romería, estudios, cautiverio ó destierro,
como igualmente á los presos, y á los que se
vieren detenidos por engaño , fuerza ó acci
dente, no les corre el término legal sino des
de que cese la ausencia ó el impedimento.
( Leyes 1 , 2 y 3 , tít. 25, P. '3 ; leyes 10, 11 y
12, tít. 23, P. 3 ; y leyes 8, 9 y 10, tít. 19, P. 6.)
DE LA APELACION. 303
P. ¿ Ante quién ha de interponerse la ape
lacion?
R. Ante el juez de primera instancia. (Lei
22, tít. 23, P. 3; y regl- de 26 de setiembre de
1835, art. 50.)
P. Cómo se hace la apelacion?
R. Verbalmente en el acto de la notifica
cion de la sentencia, bastando decir apelo;
pero si se dejare pasar algun tiempo, será
preciso hacerla por escrito. (Lei 22, tít. 23,
P. 3.)
P. ¿Cuáles son los efectos de la apela
cion?
R. La apelacion legítimamente interpuesta
suspende la jurisdiccion del juez de primera
instancia, y devuelve ó trasfiere la causa al
tribunal superior ; y por eso se dice que tiene
dos efectos , efecto suspensivo y efecto devo
lutivo : de suerte que aquel es el que sus
pende ó impide le ejecucion de la sentencia,
y este el que , sin impedir la ejecucion de la
sentencia, no hace mas que pasnr ó devolver
al superior e! conocimiento de la causa. (Lei
26, tít. 23, P. 3, y real orden de 10 de abril
de 1836.)
P. ¿ Cuándo debe admitir el juez la ape
lacion en ambos efectos?
304 DE LA APELACION.
R. Cuando la causa no es urgente, y se
trata en juicio plenario.
P. Y en el devolutivo solamente ?
R. Cuando la causa es urgente , como por
ejemplo , cuando se trata de alimentos indis
pensables al que los pide, de salarios de sir
vientes ó jornaleros, de cosas que no pueden
guardarse, y por lo general de las que se
ventilan en juicios sumarios, v. gr. en el eje
cutivo. (Curia filípica, part. 5,§. 1, n. 19 1/20.)
P. ¿ Qué debe hacer el juez de primera
instancia, una vez interpuesta y admitida la
apelacion ?
R. Disponer desde luego, sin esperar man
damiento superior, la remisión de los autos
originales á la audiencia territorial, en el caso
de haber admitido la apelacion lisa y llana
mente ó sea en ambos efectos , ó bien la de
la compulsa en el caso de no haber otorgado
la apelacion sino solo en el efecto devolutivo,
citando siempre y emplazando previamente á
los interesados, para que acudan á usar de su
derecho ante el tribunal superior. ( Regl, de
26 de setiembre de 1835, art. 49 y 50. )
P. ¿ Qué término tiene el apelante para
presentarse al tribunal superior en grado de
apelacion?
DE LA APELACION. 305
R. En caso de que no se le hubiere seña
lado el juez inferior, tiene por lei el de cua
renta dias, si el superior residiese de la parte
de allá de los puertos , el de'quince , si estu
viese de los puertos acá, y el de tres, si reside
en el mismo pueblo que el inferior, contán
dose tambien los dias feriados. ( Lei 3, tít. 20,
lib. 11, N. R. ; y art. 49 y 50 de d. regl. )
P. ¿Cuáles son los trámites del juicio ape-
latorio, ó sea de la segunda instancia ?
R. Obrando ya en el tribunal superior los
autos originales ó por compulsa, debe el ape
lante presentar dentro del plazo la demanda
llamada de agravios ó de mejora, en que es
pone las razones que le asisten contra la sen
tencia apelada , y pide se declare nula y de
ningun valor ó se revoque como injusta, acom
pañando las escrituras en que se apoye, como
en la primera instancia. (Leyes 4, 5 y 6, tít.
21, lib. ii,N. R.)
Confiérese traslado ni adversario para que
conteste; y si se sintiere tambien agraviado
de la sentencia, por haberle sido favorable en
parte y en parte adversa, puede decir que se
adhiere á la apelacion, y pedir que se confir
me la sentencia en cuanto le fué favorable, y
se declare nula ó se revoque como injusta, en
306 DE LA APELACION.
cuaalo le fué perjudicial, presentando igual
mente sus documentos. ( Lei 5, tít. 21, lib. 11,
iV.fi.)
Ambos litigantes pueden ampliar sus peti
ciones en lo accesorio al litigio principal, co
mo rentas, frutos, etc., alegar nuevos hechos
y probarlos, ó esforzar con nuevas razones y
pruebas los alegados en primera instancia ;
mas no hacer alteraciones esenciales que va
ríen la naturaleza de sus pretensiones.
Coauno ó dos escritos de cada parte queda
fijada la cuestion , y concluyen las partes, ó
declara el tribunal á peticion de una de estas
conclusa la causa para prueba, sin que nun
ca sea necesario acusar mas que una sola re
beldía. (Lei 1, tít. 14, y leyes i y 2, tít. 15,
lib.-11, N. fi.)
Ábrese la causa á prueba y se hace esta
del mismo modo <¡ue en la primera instan
cia.
No se admite prueba de testigos sobre los
mismos artículos del interrogatorio del pri
mer juicio ú otros directamente contrarios ;
pero bien puede admitirse la de escrituras y
de confesion de la parte contraria. (Lei 6,
tít. 10, lib. 11," iV.fi.)
Sin embargo tiene lugar la admision de
DE LA APELACION. • 307
testigos : — 1.° cuando el que los presenta,
jura que en el curso de la primera instancia
se hallaban ausentes ó no se acordó de ellos :
— 2.° cuando su exámen en la primera instan
cia padeció el vicio de nulidad : — 3.° cuando
habiéndose presentado en la primera instan
cia no fueron examinados : — 4.° cuando
ambas partes consienten en su presentacion
y exámen : — 5.° cuando los menores piden
restitucion , para probar sobre los mismos ar
tículos de la primera instancia : —6° cuan
do la causa fuere matrimonial : — 7.° en las
causas criminales : — 8.° cuando se propo
nen escepciones nuevas, que no fueron pro
puestas en la primera instancia ó que se des
preciaron por el juez. (Greg. López, en, la gl.
3 de la lei 37, tít. 16, P. 3; Curia filípica,
part. 5, §. 3 , n. 4; lei 7, tít. 10, y lei 4 , tít.
13, lib. 11 ,N.R.)
Hechas las probanzas, se procede á su pu
blicacion, como igualmente á la de las de res
titucion y tachas, si las hubiere : toma en se
guida el relator los autos para informar al
tribunal de lo actuado ; y alegando luego las
partes de bien probado, se declara por con
clusa la causa y se falla , sin que sea necesa
rio citar á las partes para oir la sentencia. ( Lei
308 DE LA APELACION.
5, tit. 26, P. 3 ; lei 6, Ht. 23 , lib. 5,y lei$,
tit. 15, lib. 11, N. R.)
P. Si el apelante abandonare la apelacion,
no siguiéndola dentro de los términos lega
les, ¿ qué es lo que podrá hacer su adversario?
R. Pedir en el tribunal superior que se de
clare por desierta la apelacion; y este con
efecto, despues de oir sumariamente al ape
lante y viendo que no ha tenido impedimento
para seguirla, debe declararla desierta, y
devolver los autos al inferior pnra la ejecu
cion de la sentencia.
P. i Se siguen los mismos trámites en el
juicio de apelacion de los autos interlocuto-
rios que en el de los definitivos?
R. La sustanciacion de apelaciones de au
tos interlocutorios se reduce á la entrega
del proceso á las partes por su orden , y á
cada una por un término que no pase de
nueve dias, para solo el objeto de que se ins
truyan los defensores, á fin de hablar en es
trados : pasado el último término, sin nece
sidad de otra cosa, se llama el negocio con
citacion de los interesados para fallar lo que
corresponda ; y de lo que se fallare, no Jiai lu
gar á súplica. (Regl, de 26 de set. de 1835, art.
69; y decr. de 8 de octubre de 1835 , art. 1 .) -
DE LA APELACION. 309
i
APELACION EN PLEITOS DE MENOR CUANTÍA.

P. ¿ Cuál es el modo de proceder en el jui


cio apelatorio de los pleitos de menor cuantía?
R. En los pleitos de menor cuantía de la
primera y de la segunda clase no hai apela
cion ; pero la hai en los de la tercera , esto
es, en los negocios que pasando- de quinientos
reales, no esceden de dos mil en la Península
é islas adyacentes.
Si se interpone apelacion de la sentencia
de primera instancia dentro del término de
los cinco dias, sea verbaimente, sea por es
crito, debe el juez admitirla lisa y llanamente
y sin dar traslado , mandando que se cite á
las partes , para que dentro de quince dias
acudan por sí ó por medio de procurador á
la audiencia territorial , ála que se remitirán
los autos á costa del apelante. (Lei de 10 de
enero de 1838, art. 14 y 25.)
Trascurrido el término de la citacion, la
sala á que corresponda, manda pasar los au
tos al relator, señalando desde luego el dia
de la vista, que ha de ser uno de los seis pri
meros siguientes. (D. lei, art. 15.)
El dia señalado da cuenta el relator sin
310 DE LA APELACION.
formar estrado ni apuntamiento, pero leyen
do á la letra lo que sea necesario. No asisten
abogados ; mas las partes ó sus procuradores
pueden hablar sobre los hechos. (D. lei,
art. 16.)
No se admiten pruebas ni escritos algunos;
de modo que la sala tiene que fallar solo en
vista de lo actuado en el juzgado de primera
instancia.
La sentencia de la sala causa ejecutoria,
ménos cuando revoca por mayoría , y no por
unanimidad, la de primera instancia. (B. lei,
art. 18.)
En este último caso hai lugar á la súplica,
y en el primero se devuelven los autos al juz
gado inferior para la ejecucion de la senten
cia. (D. lei, art. 19, 22 y 23.)
Todos los términos son perentorios é im-
pi orogables ; pero no se cuentan los dias fes
tivos. (D. lei, art. 27.)

-<>Ho-
TÍTULO XVII.
DE LA SÚPLICA Ó SUPLICACION.

P. Qué es súplica ó suplicacion? '


R- La peticion que se hace á la audiencia
territorial, para que corrija ó revoque la pri
mera sentencia que ha dado la misma sobre
algun negocio. La primera sentencia se llama
de vista , y la segunda de revista. (Lei lí, tit.
23, P. 3; y lei 1 , tit. 21, lib. ti , N. R.)
P. ¿ Se admite la súplica en todo género
de causas ?
R. No hai lugar á súplica en los juicios su-
marísimos de posesion , sea que la sentencia
de vista confirme ó revoque la del juez infe
rior; ni tampoco en los plenarios, sino en el
solo caso de que la sentencia de vista no sea
enteramente conforme á la de primera instan
cia, y la entidad del negocio esceda de qui
nientos duros en la Península é islas adyacen
tes, y de mil en ultramar. (Regl, de 26 de se
tiembre de 1835 , art. 66.)
No hai lugar á súplica en los pleitos sobre
propiedad, cuya cuantía no pase de d oscien-
tos duros en la Península é islas adyacentes ,
312 DE LA SÚPLICA.
y de quinientos en ultramar, sea que la sen
tencia de vista confirme ó que revoque la pri
mera ; ni tampoco le hai, cuando la sentencia
de vista sea enteramente conforme á la de
primera instancia en pleito sobre propiedad,
cuya cuantía no esceda de mil duros en la
Península é islas adyacentes, y de dos mil en
ultramar ; mas en estos dos casos debe admi
tirse la súplica, cuando el que la interponga,
presente nuevos documentos, jurando que
los encontró nuevamente, y que antes no los
tuvo ni supo de ellos, aunque hizo las dili
gencias oportunas. ( Regl, de 26 de setiembre
dem$,art.&1.)
- No hai lugar á súplica , — cuando en el
pleito haya habido tres sentencias, confor
mes ó no conformes ; porque en todo nego
cio, cualquiera que sea su cuantía, no puede
haber mas que tres instancias y tres senten
cias definitivas pronunciadas en ellas : — ni
de la sentencia de vista en apelaciones de
autos interlocutorios, aunque tengan fuerza
de definitivos : — ni del auto en -que se de
clara que hace ó no fuerza el juez eclesiásti
co : — ni de aquel en que la audiencia se de
clara competente ó incompetente para el ne
gocio que se somete á su decision. ( Const. de
DE LA SÚPLICA. 313
1812, art. 285; reglam. de 26 de setiembre de
1835, art. 69; decr. de 8 de octubre de 1835,
art. 1 ; y lei 7, tó. 21, ¿¿6. 11, 2V. i?.J
P. ¿ Qué término concede la lei para inter
poner la súplica?
R. Diez dias fatales, es de se ntencia de
finitiva, y tres dias tambien fatales , si fuese
de interlocutoria con fuerza de definitiva. (Lei
I, tít. 21, lib. 11, N. R.)
P. ^Cuál es el modo de proceder en esta
instancia de suplicacion?
R. En el pedimento con que se interpone
la suplicacion, llamado de súplica general,
se dice solo que la sentencia de vista es dig
na de corregirse. Si se admite la súplica, se
cita á la parte contraria, y luego se presenta
otro pedimento llamado de súplica especial,
en que se espresa la enmienda ó modificacion
que se solicita. Confiérese traslado de él al
adversario, quien presenta otro escrito, que
se llama de oposicion á la súplica; y sigue
luego sustanciándose esta instancia de revis
ta en la misma forma que la de vista. Con los
escritos de súplica especial y de oposicion de
ben presentarse las escrituras en que cada li
tigante se apoyare. (Leyes 4 y 5, tít. 21, lib.
II, N. R.)
27
DE LA SÚPLICA.

SÚPLICA EN NEGOCIOS DE MENOR CUANTÍA.

P. ¿Se admite súplica en los negocios de


menor cuantía de la tercera clase, esto es, en
los que pasando de quinientos reales, no es
ceden de dos mil en la Península é islas ad
yacentes ?
R. Solo se admite cuando la sentencia de
vista revoca por mayoría, y no por unanimi
dad, la sentencia de primera instancia." (Lei
de 10 de enero de 1838, art. 18.)
P. ¿Cómo y en qué tiempo se ha de inter
poner el recurso de súplica, y cuáles son sus
trámites en estos pleitos de menor cuantía ?
2?. Puede interponerse verbalmente ó por
escrito , dentro de los diez dias siguientes al
de la notificacion de la sentencia de vista :
admitida la súplica sin dir traslado, se seña
la dia para la revista dentro de los seis pri
meros siguientes : verifícase esta por dos ma
gistrados diversos, y en los mismos térmi
nos que la vista : reúnense estos magistra
dos con los que vieron ántes el pleito : votan
unos y otros , y lo que resulte acordado por la
mayoría, hace sentencia y causa ejecutoria.
(Lei de 10 de enero de 1838, art. Id y sig.)
TÍTULO XVIII.
DE LA SEGUNDA SUPLICACION.

P. Qué es segunda suplicacion?


R. Una nueva revision del proceso en las
causas de que conocen las audiencias en pri
mera y segunda instancia. (Lei 1, tít. 22, lib.
11, N. R.)
P. ¿De qué sentencias puede interpo
nerse?
R. Solo de las definitivas de revista dadas
por las audiencias en pleitos empezados en
ellas. (Leyes 1 y 4, tít. 22, lib. 11, N. R.)
P. Qué se requiere para introducirla?
R. Si el pleito fuere sobre propiedad , se
requiere que su valor llegue á tres mil do
blas de oro de cabeza, esto es, á cuarenta y
dos mil seiccientos noventa y siete reales ve
llon. Pero si fuere sobre posesion, es preci
so que el valor de la propiedad ascienda á
seis mil doblas, esto es, á ochenta y cinco
mil quinientos noventa y cuatro reales ve
llon; que no sean conformes las sentencias
de vista y revista; y que no verse la causa
316 DE LA SEGUNDA SUPLICACION,
sobre posesion de bienes de mayorazgo. (Le
yes 5, 6 y 16, tít. 22, lib. 11, N. R.)
P. ¿Cuánto tiempo tiene el agraviado para
usar de este recurso»?
R. Veinte dias fatales contados desde la
notificacion dela sentencia. (Lei 1, d. tít. 22,
lib. 11, N. R.)
P. ¿ Qué tiene que hacer para que se le
admita ?
R. Dar fianzas de pagar mil y quinientas
doblas, si se confirmare la sentencia, con
destino al fisco, á los juezes de la revista y
á la parte vencedora (Lei 1, d. tít. 22.) ; pe
ro si fuere pobre, bastará que preste cau
cion juratoria de pagar cuando tenga bienes.
P. ¿ Qué podrá hacer el suplicante para li
brarse del pago de esta suma ?
R. Apartarse del recurso dentro de tres
meses contados desde que lo introdujo. (Lei
% d. tít. 22.)
P. ¿ En qué casos se suspende la ejecucion
de la sentencia de revista suplicada?
R. Solo cuando no han sido conformes las
dos sentencias de vista y revista. (Lei 18, d.
tít. 22.)
P. ¿Qué tribunal es el que conoce de la
segunda suplicacion?
DE LA SEGUNDA SUPLICACION. 317
R. E! tribunal supremo de justicia. (Regt.
de 26 de setiembre de 1835, art. 90, fac. 6.)
P. ¿Qué término tiene el suplicante para
presentarse en grado de segunda suplica
cion?
R. El de cuarenta dias, contados desde
aquel en que suplicó, bajo pena de desercion.
(Lei 2, tít. 22, lib. 11, N. R.)
P. ¿Cómo se procede en el conocimiento
de este recurso?
jf?. La sala del tribunal destinada al inten
to, juzga el negocio por lo que resulta del pro
cesó, sin admitir escrito, ni peticion, ni pro
banzas ó escrituras , ni dilaciones por via de
resiitucion ó en manera alguna. (Lei 7, tít.
22, lib. 11, N. R.)
P. ¿ Tiene lugar en el dia el recurso de se
gunda suplicacion?
R. Como r.liora están suprimidos los casos
de corte , apenas hai negocio de que las au
diencias conozcan en primera instancia ; y
por otra parte se halla dispuesto que todas
las causas civiles y criminales se fenezcan
dentro del territorio de cada audiencia. (Re-
glam. de 26 de setiembre de 1835, art. 36; y
Const. rfel812, art. 262.)
Por n al decreto de i de noviembre de
17.
318 DE LA SEGUNDA SUPLICACION.
1838 se mandó : — que se admitiesen los re
cursos de segunda suplicacion é injusticia no
toria que respectivamente procedieran en los
negocios pendientes en las audiencias, tribu
nales de comercio y ordinarios antes de 13
de agosto de 1836, y se siguiesen y fallasen
con arreglo á las leyes que regian hasta la
misma época : — que en los negocios que
empezaron en las audiencias y se devolvie
ron á los juezes de primera instancia en vir
tud de lo dispuesto por el reglamento provi
sional de justicia, no tuviese lugar la se
gunda suplicacion, sino el recurso de injus
ticia notoria; —^y que para poder ser admi
tidos los recursos de estas clases que ya no
estuvieren interpuestos, debiesen interponer
se en el término de veinte dias, que empeza
rían á contarse á los dos meses despues de
la publicacion de este decreto en la gazeta
de Madrid. Es claro pues que ya no pueden
interponerse recursos de segunda suplica
cion ni de injusticia notoria.
TÍTULO XIX.
DEL RECüRSO DE INJUSTICIA NOTORIA.

P. Qué es recurso de injusticia notoria?


R. La queja que presenta al supremo tri
bunal de justicia el litigante que se siente
agraviado de la sentencia de una audiencia,
por una injusticia que resulta notoriamente
de los mismos autos.
P. Es siempre admisible este recurso?
R. No lo es , — cuando hai lugar á la se
gunda suplicacion; — ni en los juicios pose
sorios; — ni de los autos interlocutorios que
no causan perjuicio irreparable ; — ni de las
sentencias de vista, mandadas ejecutar sin
embargo de súplica, á no haberse denegado
la licencia para suplicar. (Leyes 1 y 2, tít.
23, lib. 11, ¿V. R.)
P. ¿Qué se requiere para introducir este
recurso?
R. Que preceda depósito de quinientos
ducados de vellon, ó fianza de pagarlos, en
la misma forma que la pena de injusta se
gunda suplicacion, para el caso de que se
320 DEL RECURSO DE INJUSTICIA NOTORIA.
reconozca no haber habido motivo suficiente
para dar semejante queja. (Lei 2, tít. 23, lib.
U,N.R.)
P. Y si el litigante es pobre?
R. Bastará que preste caucion juratoria de
pagar, cuando tenga bienes. (Lei 2, tít. 23,
lib. 11, N. R.)
P. i Cuáles son los trámites que observa
el supremo tribunal?
/{. Admitido el pedimento presentado por
el recurrente, manda que se le lleve copia
de los autos, y en su vista da su determina
cion ; de la cual no hai suplicacion ni otro
remedio alguno. (Dicha lei 2, tit. 23, lib. 11,
N. R.)
P. ¿Tiene lugar todavía el recurso de in
justicia notoria?
R. El reglamento de 26 de setiembre de
1835 dice en su art. 68, que los recursos de
injusticia notoria y segunda suplicacion de
ben continuar en sus respectivos casos con
arreglo á las leyes ; pero á consecuencia del
artículo 261 de la Constitucion del año 12,
que rige como decreto, y de los reales de
cretos de 20 de agosto de 1836 y 4 de no
viembre de 1838; no pueden ya interponerse
recursos de injusticia notoria ni de segunda
DEL RECURSO DE NULIDAD. 321
suplicacion ; bien que tendrá lugar el de nu
lidad contra las sentencias dadas en última
instancia. ( Véase el título siguiente y el final
del que antecede.) Solo en los pleitos sobre ne
gocios mercantiles continuará observándose
lo dispuesto en el Código de comercio acerca
de los recursos de injusticia notoria. (Real
decreto de 4 de noviembre de 1838.)

TÍTULO XX.
DEL RECURSO DE NULIDAD.

P. Qué es recurso de nulidad ?


R. La accion que queda en ciertos casos á
la persona condenada en última instancia por
una real audiencia ó por el tribunal especial
de guerra y marina, para acudir al tribunal '
supremo de justicia pidiendo la anulacion de
la sentencia.
P. ¿ Dónde se halla establecido este re
curso ?
R. En el artículo 261 de la Constitucion
de 1812, que rige como decreto, y en real de
creto de i de noviembre de 1838.
322 DEL RECURSO DE NULIDAD.
P. ¿ Contra qué sentencias ha lugar el re
curso de nulidad ?
R. Contra las sentencias de revista de las
reales audiencias y del tribunal especial de
guerra y marina, en lo que no sean confor
mes con las sentencias de vista, si fueren
contrarias á lei clara y terminante. Cuando
la parte en que difieran de la sentencia de
vista , sea inseparable de la en que fueren
conformes á ella, tendrá lugar el recurso
contra todo el fallo de revista. — Ha lugar
igualmente este recurso contraías ejecutorias
de dichos tribunales, cuando en las instancias
de vista ó revista se hayan infringido las
leyes del enjuiciamiento en los casos siguien
tes : — 1.° por defecto del emplazamiento en
tiempo y forma de los que deban ser citados
al juicio : — 2.° por falta de personalidad ó
poder suficiente de los litigantes para com
parecer en juicio : — 3.° por defecto de cita
cion para prueba ó definitiva y para toda di
ligencia probatoria : — 4.° por no haberse re
cibido el pleito á prueba , debiéndose recibir,
ó no haberse permitido á las partes bacer la
prueba que les convenia, siendo conducente
y admisible : — 5.° por no haberse notificado
el auto de prueba ó la sentencia definitiva en
DEL RECORSO DE NULIDAD. 323
tiempo y forma : — 6.° cuando se denegare
la súplica sin embargo de ser conforme á De
recho : — 7.° por incompetencia de jurisdic
cion. — No ha lugar al recurso de nulidad en
las causas criminales , ni en los pleitos pose
sorios y ejecutivos. (Ari. 3 , k y 6, decr. de 4
de noviembre de Í83S.)
P- ¿Qué se requiere para que proceda el
recurso en dichos casos ?
R. Que se haya reclamado la nulidad ántes
que recayese sentencia en la instancia res
pectiva , y que la reclamacion no haya sur
tido efecto. Sin embargo, si la nulidad re
clamada y desatendida en una instancia pu
diese subsanarse en la ulterior, se debe re
clamar nuevamente en ella. (Art. 5.)
P. ¿ Dónde , cuándo y cómo debe interpo
nerse el recurso de nulidad?
R. En el tribunal superior á guo dentro de
los diez dias siguientes al de la notificacion
de la sentencia que cause ejecutoria , por es
crito firmado de letrado, en que se citen la
lei ó doctrina legal infringida , y por ti pro
curador autorizado con poder especial. Si
careciese de él , y su principal se halla au
sente, lo manifestará así protestando pre
sentar dicho poder. El tribunal le señalará,
324 DEL RECURSO DE NULIDAD.
con calidad de ¡mprorogable, el término que
parezca necesario segun las distancias y es
tado de las comunicaciones. (Art. 7.)
P. ¿ Qué debe preceder á la admision del
recurso por parte del que lo interpone?
R. Depósito de diez mil reales vellon , ó
fianza suficiente en doble cantidad, ú obliga
cion, siendo pobre, hecha en escritura pú
blica ó en los aulos, de responder de dicha
suma, cuando llegue á mejor fortuna. Los fis
cales de S. M. no están obligados al depósito
ni á la fianza. (Art. 8.)
P. ¿ Qué es lo que ha de hacer et tribunal
á guo, interpuesto que sea el recurso?
R. Admitirlo sin mas trámites , y mandar
remitir al supremo el todo ó la parte de autos
que se estime conducente, previa citacion de
los interesados, para que comparezcan á usar
de su derecho dentro de treinta dias , conta
dos desde el en que se les notificare el auto
de admision del recurso y emplazamiento.
Este término será de cincuenta dias para los
recursos que se interpongan de la audiencia
de Mallorca, y de sesenta para los de Cana
rias. Entregarán originales ála parte que in
terpuso el recurso, de conformidad con la
contraria y con la obligacion de satisfacer
DEL RECUIISO DE NULIDAD. 325
previamente el porte del correo , la pieza ó
piezas que se consideren bastantes para su
determinacion. Pero siempre se acompaña
rán , t.° e\ memorial ajustado en copia auto
rizada: 2.° originales, ó por testimonio lite
ral , si existiesen en otra pieza, la sentencia
que causó ejecutoria , la reclamacion de nu
lidad y todo lo relativo á la interposicion y
admision del recurso , con un informe en que
el tribunal manifieste los fundamentos de he
cho y de derecho que tuvo presentes para
dictar su fallo. ( Art. 9.)
P. ¿Es ejecutiva la sentencia de que se
interponga recurso de nulidad ?
R. Se ejecutará, si lo solicitare la parte
que la obtuvo , dando fianzas suficientes de
estar á las resultas ; y para dicho efecto se
sacará el testimonio oportuno. (Art. 10.)
P. ¿ Qué hará el litigante, si el tribunal a
quo denegare el recurso de nulidad?
R. Podrá apelar del auto de la denegacion
para ante el tribunal supremo; y en su caso
el tribunal a quo mandará sacar testimonio
de lo conducente por señalamiento de los in
teresados , y le remitirá al supremo dentro
de los quince dias inmediatos al en que se les
hubiese notificado el auto de que se apeló,
326 DEL RECURSO DÉ NULIDAD.
emplazando á las partes para que se presen
ten á usar de su derecho en dicho tribunal
dentro de treinta dias, ó bien de cincuenta',
si fuere la audiencia de Mallorca, ó de se
senta, si fuere la de Canarias. El tribunal' su
premo, previa entrega de los autos á las- mis
mas, para el solo efecto de que informen el
dia de la vista , decidirá definitiva é irrevo
cablemente este incidente. (Artículo 11.)
P. i Cómo se procede en el conocimiento
del recurso de nulidad?
R. Recibidos los autos en el tribunal su
premo , y pasado el término del emplaza
miento sin que se haya presentado la parte
recurrente, se declarará á peticion de la con
traria por desierto el recurso, condenando
al que le interpuso, al pago de las costas cau
sadas, y á la pérdida de la mitad de la canti
dad depositada ó de que se obligó á respon
der, con aplicacion por mitad á la parte con
traria y al fondo de penas de justicia. (Art.
12. ) Presentándose las partes en el tribunal
supremo por medio de procurador, se les
entregarán los autos para instruccion de sus
letrados por un término suficiente, con tal
que no pase de treinta dias á cada una. (Art.
13. ) Devueltos los autos, y hecho, si se pi
DEL KECURSO DE NULIDAD. 327
diere, el cotejo del memorial ajustado, se
señalará dia para la vista del recurso , y se
procederá á ella, citadas las partes. (Art. 14.)
Concurrirán siete juezes á la vista y deter
minacion de estos recursos. A la de los que
se interpusieren de las sentencias y actuacio
nes de la sala de justicia del tribunal especial
de guerra y marina, asistirán los ministros y
flscal togado de la misma, que no hayan en
tendido en e! negocio ; tomando del supremo
de justicia los restantes hasta completar di
cho número. (Art. 15.) La sentencia se pro
nunciará dentro de los quince dias siguientes
al de la vista , haciéndose en ella espresa de
claracion de si ha ó no lugar al recurso , y
esponiéndose los fundamentos legales del fa
llo, sin que contra ella se admita recurso al
guno. (Art. 16 y 17.)
P. ¿ Cuáles son los efectos de la sentencia
del tribunal supremo?
R. Guando se declare haber lugar al re
curso por ser el fallo contrario á lei espresa
y terminante , el tribunal supremo devolverá
Jos autos al tribunal a quo , para que sobre
el fondo de la cuestion determine en última
instancia lo que estime justo, por siete minis
tros que no hayan intervenido en los ante
328 DEL RECURSO DE NULIDAD.
riores fallos ; y cuando se declare haber lu
gar al recurso por infraccion de las leyes de
enjuiciamiento de que trata el artículo 4.°, se
devolverán los autos al tribunal a quo, para
que reponiendo el proceso al estado que tenia
antes de cometerse la nulidad, lo sustancie y
determine con arreglo á las leyes, por minis
tros diferentes de los que tomaron parte en
los fallos anteriores. Si la declaracion de nu
lidad recayere sobre autos seguidos en el
tribunal de guerra y marina; ó en audiencias
que no constaren del número necesario de
ministros hábiles , se remitirán por el tribu
nal supremo para los efectos espresados á la
audiencia mas inmediata. (Art. 18, 19?/ 20. )
P. ¿Hai algun recurso contra el fallo que
se diere por el tribunal á quo ó del inme
diato , en los procesos devueltos ó remitidos
por consecuencia de la declaracion de nuli
dad?
R. No hai recurso alguno , salvo el de res
ponsabilidad contra los ministros que dicta
ren el fallo. Mas aunque estos incurrieren en
ella , su determinacion será siempre firme, y
tendrá fuerza de cosa juzgada entre los liti
gantes. (Artículo 21.)
P. ¿Cuál es la pena del recurrente, cuan
DEL RECURSO DE NULIDAD. 329
do el tribunal supremo declara no haber lu
gar al recurso ?
R. Se le condena en las costas y en la pér
dida de la suma depositada ó de que se obli
gó á responder; y esta cantidad se repartirá
por mitad entre la parte contraria y el fondo
de penas de justicia. (Art. 22.)
P. ¿ Qué publicidad debe darse á los fallos
sobre estos recursos?
R. En la gazeta del gobierno se publica
rán los fallos del tribunal supremo relativos
á los recursos de nulidad , y los que dictaren
los superiores , á quienes se devolviere el co
nocimiento de los autos anulados. (Art. 23.)
P. ¿Rigen tambien en materias de comer
cio las disposiciones sobre recursos de nu
lidad?
R. En los pleitos sobre negocios mercan
tiles continuará observándose , mientras no
se mande otra cosa, lo dispuesto en el Códi
go de comercio acerca de los recursos de in
justicia notoria. (Art. 24.)

-28.
TÍTULO XXI.

DE LA COMPETENCIA Y OTROS DIFERENTES


RECURSOS CONTRA LA ARBITRARIEDAD DE
LOS JÜEZES.

P. i Cuándo puede decirse que un juez es


arbitrario?
R. Cuando usurpa la jurisdiccion que no le
compete ; — cuando no oye al que le pide jus
ticia , ó dilata mas de lo justo los términos ,
los autos ó la sentencia; — cuando no admite
la apelacion legítima ; — y cuando altera el
orden del juicio.
P. ¿Cómo se impide la usurpacion de ju
risdiccion?
R. El litigante interesado debe declinar la
jurisdiccion del juez, presentándole un pedi
mento para que se inhiba y abstenga del co
nocimiento de la causa, y mande al actor que
acuda al juez competente. Tambien el juez
competente puede defender su jurisdiccion,
formando contienda de competencia al usur
pador.
P. Cómo se forma esta competencia ?
R. El juez ó juzgado que solicite la inhi-
DE LA COMPETENCIA, ETC. 331
bicion de otro, pasará oficio á este , manifes
tando las razones en que se funde , y anun
ciando la competencia, si no cede ; contestará
el intimado dando las suyas , y aceptándola
en su caso ; si el primero no se satisface, lo
dirá al segundo, y ambos remitirán por el
primer correo á la autoridad superior com
petente los autos que cada uno haya formado,
esponiendo las razones en que se funde, y
£sía decidirá la competencia en el preciso tér
mino de ocho dias. ( Decreto de Cortes de 19
de ajirilde 1813, restablecido por real decreto
de 30 de agosto de 1836.)
P. ¿A qué tribunal corresponde dirimir
Jas competencias?
-fi. Al supremo tribunal de justicia corres
ponde dirimir todas las competencias de las
audiencias entre sí en todo el territorio es
pañol, y las de las audiencias con los tribu
nales especiales que existan en la Península é
islas adyacentes ; las que se ofrecieren en la
Península é islas adyacentes entre los juezes
ordinarios de primera instancia y los tribu
nales especiales que no estén sujetos á la ju
risdiccion de las audiencias ; las que se pro
movieren en la Península y dichas islas entre
los tribunales especiales de distintos territo
332 RECURSOS CONTRA
rios, ó que aunque sean de uno mismo, ejer
zan diversa especie de jurisdiccion, ó no ten
gan entrambos un mismo tribunal superior
que pueda decidir ; y por fin , las que ocur
ran en la Península y dichas islas entre una
audiencia y el juez ordinario de distinto ter
ritorio, y entre juezes ordinarios de terri
torios diferentes. (D. decreto de 19 de abril,
art. i, 2, 3 y 4.)
A las audiencias de ambos hemisferios per
tenece dirimir las competencias entre todos
los juezes subalternos de sus respectivos ter
ritorios ; y son juezes subalternos de las au
diencias, no solo los ordinarios, sino tambien
los de los tribunales especiales creados ó que
se crearen para conocer en primera instancia
de determinados negocios, con apelaciones á
las mismas audiencias. (Art. 5 y 6.)
Las competencias que se promuevan en la
Península é islas adyacentes entre los tribu
nales de guerra y marina, serán decididas
por el superior especial de guerra y marina,
á escepcion de las que ocurran entre coman
dantes de matrícula de un mismo departamen
to, que dirimirá su capitan general. ( Art. 7. )
P. ¿Cuál es en ultramar el tribunal que
debe dirimir las competencias?
LA ARB1TR. DE LOS JUEZES. 333
R. En ultramar cada audiencia dirime, co
mo en la Península , las competencias entre
todos los juezes subalternos de su territorio.
Las que ocurran entre los juezes subalternos
de las audiencias y los tribunales y juzgados
especiales , ó entre estos y las audiencias , se
decidirán por la mas inmediata. Cada au
diencia decidirá las que se promovieren entre
los tribunales especiales de su territorio,
aunque no sean subalternos de la misma,
cuando entrambos no tuvieren un mismo su
perior; pues teniéndole, deberá este deci
dirlas. Las que se ofrecieren entre los juzga
dos especiales de distintos territorios, ó entre
los juezes ordinarios de territorios diferentes,
serán decididas por la audiencia mas inme
diata á la provincia del que las promoviere.
(Art. 5, 6, 8, 9 y 10.)
P. ¿Qué debe hacer el litigante que se
siente agraviado por el juez , ó porque no le
quiere oir en justicia , ó porque dilata mali
ciosamente la sentencia?
R. Quejarse al tribunal superior del terri
torio , el cual manda al juez inferior que haga
justicia ála parto sin dar lugar á nuevas que
jas ; por la segunda vez le amenaza con una
multa arbitraria ; y por la tercera le declara
334 RECURSOS CONTRA
incurso en la multa , cargándole ademas los
gastos de la provision , y amenazándole con
otra multa mayor, si no oye al interesado.
P. ¿Qué recurso tiene el litigante, cuando
el juez dilata mas de lo justo los términos 6
providencias?
R. Puede interponer apelacion , y si no le
fuere admitida, quejarse al tribunal superior,
el cual practica las mismas diligencias que en
el caso precedente.
P. ¿Qué remedio hai cuando el juez niega
la apelacion, ó solo la admite en el efecto de
volutivo, correspondiendo en ambos efec
tos?
R. El agraviado, armándose con un testi
monio de la denegacion , acude al tribunal
superior, el cual pide informe al juez; en
cuya vista y de lo alegado por la parte inte
resada, ó declara que no ha lugar al recurso,
ó manda que el juez inferior admita la ape
lacion.
P. ¿Qué se hace cuando el juez altera el
orden del juicio?
R. Si la alteracion es accidental, sin causar
notable vejacion, como por ejemplo la dene
gacion de un término ó traslado , debe ape
larse ; mas si la alteracion es esencial con
LA ARBITR. DE IOS JUZES. 335
particular vejámen, se introduce el recurso
de queja.
P. ¿ Qué es lo que debe hacer la audien
cia en virtud de queja fundada de un litigante
contra el juez inferior ?
R. La audiencia puede pedir y exigir al
juez inferior los informes y noticias que es
time, y cuando haya justo motivo, censurar
le, reprenderle, apercibirle, multarle, y aun
formarle causa, de oficio ó á instancia de
parte, por los retrasos, descuidos y abusos
graves que notare. Pero deberá oirle en jus
ticia siempre que reclame contra cualquiera
correccion que se le imponga sin formarle
causa ; y fuera de aquellas facultades legíti
mas que la audiencia tiene en los casos de ape
lacion, competencia y -recurso de fuerza, de
proteccion ó de nulidad , no podrá de mane
ra alguna avocar causa pendiente ante juez
inferior en primera insiancia, ni entremeterse
en el fondo de ella, cuando promueva su cur
so, ó se informe de su estado, ni pedírsela
aun ad effectum videndi, ni retener su cono
cimiento en dicha instancia, cuando haya ape
lacion de auto interlocutorio , ni embarazar
de otro modo al juez en el ejercicio de su juris
diccion. (Regl, de 26 de sel. de 1835, art. 59.)
TITULO XXII.
DEL RECURSO SE FUERZA.

P. Qué es recurso de fuerza ?


jR. La reclamacion con que acude al tribu
nal secular la persona que se siente agravia
da por el eclesiástico , implorando su protec
cion á fln de que impida la violencia que este
le hace. (Lei \, til. 2, lib. % N. R. )
P. ¿ Cuándo hace fuerza el juez eclesiás
tico?
R. Cuando conoce de causa que no le com
pete ; — cuando no observa las reglas pres
critas por las leyes y Cánones ; — y cuando
niega injustamente la apelacion. (Lei 17, d.
ttí. 2. )
P. ¿Qué es lo que debe hacer el agraviado,
cuando el juez eclesiástico conoce de causa
que no pertenece á su jurisdiccion?
R. Pedirle que se abstenga del conocimien
to de la causa, y remita los autos al juez com
petente, protestando de lo contrario implorar
el ausilio del tribunal seglar. Si el eclesiástico
se resiste, se acude entonces con testimonio
DEL RECURSO DE FUERZA. 337
de lo acaecido al tribunal seglar superior del
territorio , el cual mediante el auto llamado
de legos, declara nulos los autos obrados por
el eclesiástico , los recoge y remite al juez
competente para que conozca de la causa.
(Dicha lei 17. )
P. ¿Y si el eclesiástico hace la fuerza en el
modo de proceder, ó en no otorgar la apela
cion?
R. Entonces se pide al mismo eclesiástico
reforme el auto con que hace fuerza : si se
resiste, se protesta el ausilio secular ; y si aun
así no se consigue el objeto , se hace el re
curso al tribunal del territorio, el cual despa
cha carta ordinaria al eclesiástico para que
reforme la fuerza, y si esto no bastare, sobre
carta para que remita los autos originales,
en cuya vista manda alzar la fuerza, si la hu
biere. (Leyes 2 y 17, d. tit. 2. )
P. ¿ Cuál es el tribunal que conoce de los
recursos de fuerza?
R. Cada audiencia conoce de los recursos
que se introduzcan de los tribunales , prela
dos ú otras cualesquiera autoridades ecle
siásticas de su territorio ; y el supremo tri
bunal de justicia de los que se interpongan
de la nunciatura , de¡ Consejo de órdenes y
29
338 DEL RECORSO DE NUEVOS DIEZMOS.
de todos los demás tribunales eclesiásticos
superiores de la corte. (Leyes 4 y 11 , d. tít.
2:; Const. de 1812, art. 261 y 266 ; y regl, de
26' de setiembre de 1835, art. 58 y 90. )

-°H°-

TÍTULO XXIII.

DEL RECURSO DE NUEVOS DIEZMOS.

P. ¿ Cuándo tiene lugar el recurso de nue


vos diezmos1?'
j?i Siempre que la autoridad eclesiástica
pide diezmos que átires no se pagaban.
P. ¿ Qué es lo que deben hacer en tal ca
so los interesados en no pagarlos?
R. Acudir al supremo tribunal de justicia,
el cual exige del juez eclesiástico la remision
de los autos originales. (Leyes! y 10, tit. 6,
lib. 1, N. R. ; y reglam. de 26 de set. de 1835,
art. 90, facultad H.) Pueden tambien acudir
al respectivo juez de primera instancia, pa
ra el mero hecho de que los ampare en la po
sesion de no pagarlos. (D. reglam., art. 44.)
P. ¿ Cómo se procede en el supremo tri
DEL JUICIO EJECUTIVO. 339
bunal de justicia, luego que vienen á él los
autos ?
R. Se entregan estos á las partes por su
orden , y se sustancia y determina el pleito
como oí ro cualquiera ordinario, oyendo tam
bien al fiscal como en las demas causas en
que tiene interesal fisco. (Lei 10, tít. 6, lib.
í.'n.b.)
P. ¿ Tiene lugar todavía el recurso de
,nuevos diezmos ?
JR. Habiéndose abolido el diezmo , ha ce
sado el motivo de este recurso.

TÍTULO XXIV.
DEL JUICIO EJECUTIVO.

P. Qué es juicio ejecutivo?


i?. Un juicio sumario que tiene por objeto
la aprehension y venta ó adjudicacion de los
bienes del deudor moroso á favor de su acree
dor, en virtud de un instrumento que trae
aparejada ejecucion.
P. ¿ Cuáles son los instrumentos que traen
aparejada ejecucion?
R. La escritura pública ú otro documento
310 DEL JUICIO EJECUTIVO.
auténtico sobre deuda líquida cuyo plazo ha
vencido; — la confesion judicial , y el vale ,
carta ú otro papel reconocido en juicio por el
deudor ; — la letra de cambio aceptada ó
protestada, en el primer caso contra el acep
tante, y en el segundo contra el librador que
la reconozca ; — la carta ejecutoria de la sen
tencia pasada en autoridad de cosa juzgada ;
— la sentencia de los árbitros ; — la tran
saccion hecha ante escribano público; — el
juicio uniforme de los contadores nombra
dos por las partes , con tal que esté confir
mado por el juez ; — los libramientos do los
jefes de hacienda contra los subalternos ; —
y las libranzas despachadas por orden de al
gun juez para hacer pago al acreedor del di
nero depositado. (Leyes i y 4, tit. 28, lib. li,
N. R.; lei 7, tit. 3, lib. 9, N. R.; leyes \, 4
y 5, tit. 17, lib. tí, N. R. ; lei 14, tit. 7, y leyes
7, 8 y 9, tít. 16, lib. 9, Recop. )
P. Quién puede pedir la ejecucion?
R. El acreedor nombrado en el instru
mento que la trae aparejada, y otro cual
quiera que tenga interes, como por ejemplo
el cesionario del acreedor. (Lei 6, tit. 10, P.
5; y Curia filípica, p. 2, §. 9, n. 1 á 5.)
P. Contra quién debe pedirse la ejecucion?
DEL JUICIO EJECUTIVO. 341
i?. Contra el deudor y su heredero, y tam
bien contra la mujer por la mitad de las deu
das contraidas por el marido durante el ma
trimonio. (Cur. filípica, p. 2, §. 10, n.ká 11.)
jP. ¿En qué bienes ha de hacerse la eje
cucion?
R. En los que señale el deudor, y en su
defecto el acreedor; debiendo empezarse por
los muebles, y pasando luego á los raizes, si
aquellos no fueren suficientes. (Lei 3, tít. 27,
P. 3; y lei J2, tít. 28, lib. 11, N. R.)
P. ¿ Hai algunos bienes que estén esentos
de la ejecucion?
i?. Lo están las cosas sagradas y destina
das al culto divino; — los animales y apare
jos de labranza, los sembrados y barbechos,
y los panes ó granos que todavía se hallan en
las eras sin entrojar ; — los instrumentos de
los artistas y artesanos para el uso de sus ofi
cios ó profesiones ; — los libros de los abo
gados y estudiantes ; — los caballos, armas y
sueldos de los militares; — las casas, muías,
caballos y armas que usaren los nobles; —
los vestidos , camas y demas cosas necesa
rias al uso diario; — las yeguas destinadas
para la cria de caballos de casta ; — y las
naves que vengan de fuera del pais con mer
29.
342 DEL JUICIO EJECUrTIW.
caderías. (Leí 3, tít. 13, Partida 5; leyes 1,
2 y .3, í#. 5, ¿¿6. 1, iV. R.; leyes 15, 16 y
19, tít.Z\,lib. 11, iV. R.;Azevedoá la lei 12,
tít. 28, ¿¿¿>. 11 , Recop,; lei 3 , ¿#. 27, P. 3;
fejíes ¡1, 9, 13 y 15, 2, lib. 6, N . R. ; lei 5,
tít. 13, P. 5; lei 2, arí. 6, tíí. 29, lib. 7, N.
S.f ^/Jei.k, tít. 31, lib. U, iV. i.)
P. Cómo se empieza el juicio ejecutivo?
R. El acreedor presenta su demanda con
el documento en cuya virtud pide la ejecu
cion contra la persona y bienes del deudor,
tpor la cantidad de la deuda, décima y cos
tas; y examinado el instrumento, manda el
juez despachar el mandamiento de ejecucion,
que por el acreedor ó con su anuencia se en
trega á un alguacil ó escribano para su cum
plimiento. (Leyes 1, 6, 7, 8, 10 y 12, tít. 28,
Mh. 14, Sí. R.; y lei 1, tít. 30•, lib. 11, N. R.)
P. ¿ Qué es lo que debe practicar el algua
cil con el despacho de ejecucion?
R. Dirigirse á la casa del deudor con el
escribano ; requerirle para que pague inme
diatamente la deuda con las costas , ó de lo
contrario designe bienes muebles, ó en su de
fecto raizes en que hacer la ejecucion , dan
do fianza de saneamiento, esto es, de que
son suficientes los bienes designados ; hacer
BEL JUICIO EJECUTIVO. 343
en seguida la traba, esto es, embargar los
bienes con espresion de la hora ; depositarlos
en poder de persona abonada; y llevar al
deudor á la cárcel , si no diere dicha fianza.
(Lei 12, tít. 28, Mb. 111, -M. £.)
P. ¿Puede ser llevado á la cárcel cual
quier deudor que no diere la fianza?
R. Están esceptuados de este vejamen, si
no es por deudas que provengan de delito ó
cuasi-delito, los nobles, ios doctores ó licen
ciados en cualquiera ciencia, los abogados,
los labradores, los artistas y artesanos y los
operarios de las -fábricas , los que hacen ce
sion de bienes á favor de sus acreedores,
las mujeres por fianza ó.deudas del marido,
y los que gozan el beneficio de competencia.
(Leyes 2 y 10, tít. 2, ¿ib. 16, Jf. J?. ; lei 3, tít.
10, P. 2; lei 19, tít. &1, lib. U, N. R. ; lei k,
tít. 15, P. 5 ; y lei 2, Ht. 4.Í, lib. 10, TV. R.)
P. ¿Cómo se librará el deudor dela satis
faccion de la décima?
R. Pagando -ó depositando el importe de
la deuda dentro de setenta y dos horas con
tadas desde la de la traba de la ejecucion.
(Lei 17, tít. 30, lib. 11, TV. R.)
P. ¿ Qué es lo que se hace, trabada la eje
cucion?
344 DEL JUICIO EJECUTIVO.
R. Se procede á pregonar los bienes em
bargados, con el fin de venderlos en pública
subasta y cubrir la deuda con su producto.
P. Cuántos pregones se dan?
R. Tres : cada uno de tres en tres días, si
los bienes fueren muebles , y de nueve en
nueve, si son raizes, (Lei 12, tít. 28, lib. 11,
N. R.)
P. Dónde se dan los pregones?
R. El primero en el pueblo de la residen
cia del ejecutado , y todos tres en el lugar
del juicio : en el concepto de que el deudor
puede renunciarlos como establecidos en su
beneficio. (Lei 13, d. tít. 28.)
P. ¿Qué es lo que ha de pedir el actor, pa
sado el término de los pregones?
R. Que se haga al deudor la citacion lla
mada de remate, porque en su consecuen
cia se han de rematar y adjudicar los bienes
á favor del mejor postor. (Leyes 12 y 13, d.
tít. 28.)
P. ¿Puede el deudor oponerse á la verifi
cacion del remate?
R. Puede oponerse presentando escepcio-
nes legítimas, como pago ya hecho, promesa
ó pacto de no pedir, usura, falsedad del ins
trumento, temor ó fuerza, ú otra seme
DEL JUICIO EJECUTIVO. 345
jante. (Leyes 1 y 3, d. tit. 28, lib. 11, iV. R.)
P. ¿Cuánto tiempo se le concede para ha
cer esta oposicion?
R. Tres dias contados desde el de la cita
cion de remate ( Lei 12, d. tit. 28.) : bien que
segun algunos , puede hacerla , mientras no
esté sentenciada de remate la causa.
P. ¿ Qué término le da el juez para pro
bar su escepcion , si se la admite?
R. Diez dias fatales, contados desde aquel
en que se opuso (Leyes 1, 2 y 12, d. tit. 28) ,
en los cuales se entregan primero los autos al
deudor, que solo los tiene cinco dias , y des
pues al acreedor, que los tiene otros cinco.
P. Si el deudor no pone escepcion legíti- .
ma dentro de los tres dias, ó no la prueba den
tro delos diez, ¿qué deberá practicarse?
i?. El .actor debe pedir entonces que se
proceda al remate de bienes ; lo cual debe
mandar el juez, afianzando aquel la restitu
cion de lo cobrado para el caso de que se re
voque la sentencia por la apelacion, que solo
se admite en el efecto devolutivo. (Leyes 1, 2
y 12, d. tit. 28.)
P. ¿No se permite al deudor probar su es
cepcion con testigos?
R. Sí; pero deberá nombrarlos, jurando
346 DEL JUICIO EJECUTIVO.
que en ello no procede maliciosamente, y el
juez le señalará el término que sea suficiente
segun la distancia; bajo la inteligencia de que
_siila prueba no se hiciese en los diez dias, se
procede al remate de bienes. No obstante lo
cual , se admiie despues de dicho término la
prueba de los testigos distantes por la via de
juicio ordinario. (Lei 1, d. tít. 28; y Curiafi
lípica, p. 2 , §. 20, n. 8.)
P. ¿Cómo se procede al remate ó venta
de los bienes?
R. Justipreciados los bienes por peritos, y
pareciendo admisibles las posturas, que lo
serán , si llegaren á las dos terceras partes
del justiprecio, manda el juez efectuar el
remate con señalamiento de dia y hora, ci
tando un dia ántes al ejecutado. Verificado
así, se adjudican los bienes al mejor postor,
y se hace pago con su producto al ejecuiante,
precedida la mencionada fianza, satisfacién
dose al mismo tiempo las costas y la décima,
donde hubiere costumbre de pagarla. (Lei
13,, tít. 28.)
jP. ¿Cómo se hará pago el ejecutante, cuan
do no hubiere postor, ó fuese despreciable la
postura , ó no bastaré el valor de los bienes
ejecutados?
DEL JUICIO EJECUTIVO; 347
i?. En los dos primeros casos puede pedir
que se le adjudiquen en pago de su crédito
los bienes que sean suficientes para cubrir
lo (Lei 44, tít. 13; P. 5.) ; y en el tercero se
da mandamiento de apremio contra el deu
dor y fiador de saneamiento.
P. ¿Qué recurso tiene el deudor, sf eri Vi*
venta de los bienes ejecutados interviniere
dolo ó fraude?
R. Puede pedir que se le restituyan dan
do el precio. (Lei 49', tít. 13; P. a; y Azeve~
do, ere la lei 19, tít. 2f<, lib. 4, Becop., ó $ett'
lei 12, tít. 28, Hb. lf , N.- ».)
P. ¿Qué deben hacer los demás acree
dores , cuando saben que el deudor es eje
cutado por alguno ?
R. Pueden salir'al- juicio, cualquiera que
sea el estado en que se halle , con tal que no
se haya hecho pago al ejecutante; y debe
admitírseles la oposicion, siempre que no
sea maliciosa para impedir los erectos de la
ejecucion. (Eei 3, tít. 27, P. 3; lei 16, tít.
28, lib. 11, N. R. ; Greg. López, en la glo
sa \.° de la lei 11, tít. 14, P. 5; Covarrub.,
pract. qwcest., cap: 16, n. 2-, y otros autores.)
P. ¿ Cómo se procede en el caso de tercer
opositor?
348 DEL JUICIO EJECUTIVO.
R. Si este liene derecho de dominio en los
bienes embargados, y lo justifica con instru
mentos ó con sumaria informacion de testi
gos, se le entregan los bienes, y se mejora la
ejecucion en otros del deudor. Si alega prefe
rencia de su crédito con instrumento que trae
aparejada ejecucion, se sobresee tambien en
el juicio ejecutivo, miéntras se resuelve cuál
de los acreedores tiene mejor derecho. De la
oposicion del tercero se da traslado al ejecu
tante y al ejecutado, para que espongan lo
que les convenga ; y se recibe á prueba este
incidente, en caso necesario. Mas si el tercer
opositor no presentare instrumento que 'rai
ga aparejada ejecucion, deberá usar de su ac
cion en juicio ordinario, y continuará el eje
cutivo. (Lei 3, tít. 27, P. 3; Gregorio López,
en la glosa 1." de la lei 11, tít. 14, P. 5; lei
6,-tit. 10, P. 3; lei 16, tít. 28, lib 11, N. R.;
y Curia filípica, p. 2 , §. 26, n. 10, 11 y 12.)
P. ¿Se guardan tambien todos estos trá
mites en la ejecucion de las sentencias sobre
pleitos de menor cuantía?
R. En la ejecucion de estas sentencias de
be proceder el juez de plano , sin permitir
gastos y dilaciones que puedan escusarse.
Para ello, si requerido eJ deudor no pagare
DE LOS ACREEDORES Y DEUDORES. 349
dentro de dos dias, se embargarán y vende
rán en almoneda pública bienes suficientes :
los muebles á los tres dias, y los raizes á los
nueve; pregonándolos de tres en tres. (Lei
de 10 de enero de 1838.)

-^jo-

título XXV.
DEL CONCURSO DE ACREEDORES, CESION
DE BIENES, ESPERAS Y QDITAS.

P. Qué es concurso de acreedores?


R. El juicio promovido, ó bien por el deu
dor, ó bien por los acreedores sobrepago de
las deudas.
jP. De cuántas maneras es?
R. De dos : voluntario y necesario. Con
curso voluntario , que tambien se dice pre
ventivo, es el que promueve el mismo deu
dor, ya haciendo cesion de bienes , ya pi
diendo espera para el pago, ya solicitando
quita ó remision de alguna parte de sus deu
das. Concurso necesario es el que promueven
los acreedores contra el deudor, sin que este
los convoque.
30
350 DE LOS ACREEDORES
P. Cómo se hace la cesion de bienes?
R. El deudor presenta al juez una rela
cion de sus bienes y otra de sus deudas, ma
nifestando las causas de la imposibilidad en
que se halla de satisfacer el importe de es
tas, y pidiendo le admita la cesion que hace
de los bienes á favor de los acreedores, á
quienes se cite para que en el término legal
acudan á usar de su accion , y pasado aquel
se declare por bien formado el concurso. (Lei
i, tít. 15, P. 5.)
P. ¿Cómo se hace la citacion á los acree
dores 1
R. A los que se hallan en el pueblo del
juzgado, en sus propias personas; á los que
residen en otro, por requisitoria ; y á los que
no se sabe dónde paran , por edictos de tres
en tres dias fijados en los parajes públicos.
P. ¿Qué es lo que se hace, admitida que
sea la cesion?
R. Tomar los bienes cedidos , sin dejar al
cedente mas que la ropa de su uso ordinario,
nombrando depositario ó administrador que
los cuide ó administre ; pero si el deudor fue
se de aquellos que gozan el beneficio llamado
de competencia , se le debe dejar la parte de
bienes que le fuere necesaria para vivir se
Y DEUDORES. 351
gun su estado y condicion. (Dicha lei 1, tít.
15,
P. ¿ Quiénes son los que disfrutan del be
neficio de competencia?
R. Los ascendientes respecto de sus des
cendientes, y al contrario; los hermanos, los
socios mutuamente ; los cónyuges; los sue
gros; los patronos respecto de sus libertos;
el donador respecto del donatario; los títu
los, los militares, los demas empleados pú
blicos, y los clérigos. (Lei, 32, tít. 11, P. 4;
lei 4, tít. 4. P. 5; lei 15, tít. 10, P- 5 ; leyes 1
y 3, tít. 15, P. 5 ; lei 23, tít. 6, P. i; y la cos
tumbre.)
P. ¿ A cualquiera deudor se admite la ce
sion de bienes?
i?. Solo al deudor desgraciado y de buena
fe. (Lei 4, tít. 15. P. 5, con la glosa de Greg.
López; y leyes i, 2 y 8, tít. 32, ¿¿6. 11, N. R.)
P. Cuáles son los efectos de la cesion?
i?. Librarse el deudor de estar en la cár
cel; — gozar el beneficio de competencia , si
llegare á mejor fortuna; — y atraer al juicio
de cesion todos los demas pleitos de pagos
que se le hubieren movido particularmente
por algunos de los acreedores. (Leyes 3 y 4 ,
tít. 15, P. 5; y los autores.)
352 DE LOS ACREEDOBES
P. Cómo se sigue este juicio?
R. Admitida la cesion y presentándose los
acreedores , toma los autos cualquiera de
ellos que primero los pida, para alegar su de
recho : de la demanda de este se da traslado
á los demas , y así sucesivamente , siguiendo
el pleito como un juicio ordinario, para justi
ficar cada uno la legitimidad , cantidad y ca
lidad ó preferencia de -sus créditos; en cuya
vista el juez haciendo en su sentencia defini
tiva la calificacion de todos los créditos, con
arreglo á lo dicho en el título de la prenda é
hipoteca, manda hacer el pago con el importe
de los bienes vendidos en pública subasta y
de las rentas y frutos que hubiesen tenido
desde la cesion hasta lavenla.
P. Si alguno de los acreedores no acude
al concurso, ¿ deberá tenérsele presente para
el pago?
R. El acreedor que no acudo dentro del
término señalado por el juez, pierde la prefe
rencia de grado ó hipoteca , quedándole sal
vo el derecho para cobrar de lo que sobrare
despues de cubiertos los concurrentes.
P. Cuándo sucede el concurso necesario?
R. Cuando reconvenido el deudor por uno
de sus acreedores, comparecen y se oponen
Y DEUDORES. 353
los otros, formando entre sí un litigio sobre
la preferencia de sus créditos.
P. i En qué se diferencian el concurso vo
luntario y el necesario?
R. En que el voluntario es promovido por
el deudor , y el necesario por los acreedores ,
y en que el voluntario es universal, atrayen
do por consiguiente todas las causas movidas
antes ó despues , cuando en el necesario pue
den seguirse por los juezes que en ellas en
tienden respectivamente, siendo solo nece
sario que los acreedores acudan con el man
damiento de "pago al juez del concurso, que
es el que debe hacer- la graduacion de los
créditos.
P. Qué es espera?
R. Un beneficio concedido por la lei á los
deudores desgraciados y de buena fe, por ei
cual consiguen de sus acreedores el respiro
de algun tiempo para poder pagar sus deu
das. (Lei 5, tít. 15, P. h;y leyes 2 y G, tít. 32,
lib. 11, N. R.)
P. Cómo se procede para la espera?
R. El deudor trata con cada uno de sus
acreedores á fin de que le esperen por algun
tiempo; ó bien presenta memorial al juez or
dinario manifestándole los contratiempos que
so.
354 DE LOS ACREEDORES Y DEUDORES.
Je ¡impiden pagar sus deudas por de pronto, y
pidiéndole mande que se junten sus acreedo
res en determinado lugar, dia y hora, para
tratar sobre la concesion de plazo. Si cada
uno pues en particular, ó reunidos todos por
autoridad del juez, conviene en acceder á la
espera la mayor parte de acreedores en can
tidad de deudas, el deudor pone demanda
para que se obligue á los demas á pasar por
ella. Dase traslado á estos de la demanda, y
se sigue el juicio ordinario hasta sentencia.
(D. lei 5, con sus glosas porGreg. López; Ant.
Gómez, lib. 3, variar., cap. 3, n. 63,-^ Curia
filípica, p. 2, §. 24, n. 8.)
P. Qué es quita?
R. Olro beneficio introducido por la lei á
favor de los deudores desgraciados y de bue
na fe , en virtud del cual se les guita ó per
dona por sus acreedores alguna parte de las
deudas (lei 6, tít. 15, P. 5.)
P. ¿Cuál es el modo de proceder para la
quita?
i?. Reunidos los acreedores á instancia del
deudor , les hace presente los contratiempos
que ha esperimentado , y que si le perdonan
parte de sus deudas, promete pagarles lo res
tante. En este concurso se observan las mis
DEL JUICIO SUMAKIO DE ALIMENTOS. 3&5
-mas reglas que en la espera ; con la diferen
cia de que la resolucion de la junta no per
judica al acreedor ausente á quien se debe
mas que á todos los otros ; ni la remision de
los acreedores simples obra contra el ausente
.que tiene hipoteca ó prenda. (Dicha lei 6, con
su glosa por Gregorio López; y Curiafilípica,
H.2, $.24,n. 5, 6y8.)
-off>-

TÍTÜLO XXVI.
DEL JUICIO SUMARIO DE ALIMENTOS.

P. Qué se entiende por alimentos ?


]{. Las asistencias que se dan á una per
sona para su manutencion y subsistencia,
esto es, para comida, bebida, vestido, ha
bitacion y recuperacion de la salud. ( Le? 2,
.-M/L 19, P. A; y lei 5, tít. 33, P. 1.)
P. De cuántas maneras son los alimentos ?
R. De dos : naturales y civiles. Naturales
son los que consisten precisamente en lo in
dispensable para subsistir el que los recibe ;
y civiles los que se estienden á lo que exige
la condicion y circunstancias del que los ha
de dar y del que los ha de recibir.
556 DEC JUICIO SUMARIO
P. ¿ De dónde proviene el derecho á exigir
alimentos?
R. Puede provenir de la lei natural ó po
sitiva, de disposicion testamentaria y de con
trato.
P. ¿ En qué especie de juicio deben venti
larse las contestaciones sobre alimentos?
R. Las que se suscitan sobre alimentos que
provienen meramente de contrato ó última
voluntad, en juicio ordinario; y las de los
que se deben por equidad ó por lei, en juicio
sumario.
P. ¿ Quién tiene obligacion de dar alimen
tos por equidad ó por lei ?
R. Los padres á los hijos , y los hijos á los
padres; y si los padres ó los hijos estuvieren
pobres , se estiende la obligacion á los demas
ascendientes ó descendientes que tengan me
dios para ello. (Leyes 2, 3, k, 5 , 6 y 7, tít.
19, P. k; leyes 3 y 4 , tít. 20 , P. k; lei 5 , art.
25 y 26 , tít. 37, lib. 7, N. R. ; y lei 9 , art. 3,
tít. 2, lib. 10, N. R.)
P. ¿Quiénes se comprenden aquí bajo el
nombre de hijos?
R. No solo los legítimos y los naturales,
sino tambien los espurios ó bastardos , esto
es , los adulterinos , incestuosos y demas :
DE ALIMENTOS. 357
con la diferencia de que los ascendientes pa
ternos están esentos de esta obligacion res
pecto de los espurios ó bastardos. (Lei 5 , tít.
19, P. 4.)
P. ¿Cuál de los dos consortes, cuando es
tán separados , tiene obligacion de mantener
á los hijos ?
R. El que dió motivo á la separacion, á no
ser que fuese pobre y el otro consorte rico.
Por lo demas la madre debe criar y alimentar
á los hijos hasta la edad de tres años , y de
esta edad en adelante el padre ; bien que eu
caso de pobreza del obligado , recae el de
ber de los íilim<ntos en el otro. (Lei 3, til.
8, libro 3, Fuero real; y letjes 3 y 4 , íít. 19,
P. 4.)
P. i Cuáles son los alimentos que se de
ben mutuamente los ascendientes y descen
dientes ?
R. Los legítimos y los naturales se deben
ordinariamente alimentos civiles, y los es
purios ó bastardos nada mas que alimentos
naturales.
P. ¿ Hai otras personas que deban darse
alimentos ?
R. Los cónyuges, aunque vivan separados,
y los hermanos. (Lei 7, Ut. 2, P. A; reales cé
358 DEL JUICIO SUMARIO DE ALIMENTOS.
dulas de 22 de marzo de 1787 y 18 de marzo
de 1804; y leí i, tít. S,.lib. 3, Fueroreal.)
P. ¿En qué casos cesa la obligacion de
dar alimentos ?
R. fiuando el deudor se halla ó viene á
caer en la imposibilidad de darlos, ó el ali
mentista no tiene necesidad de ellos ; y cuan
do el que los ha de recibir, comete contra el
que los ha de dar, alguna de aquellas especies
de ingratitud que son justa causa de deshe
redacion; bien que en este último caso no
pierden los padres ni los hijos su derecho á
Ips alimentos puramente naturales. (Leyes 2,
3, 4 -y 6, iit. 19 , P. 4 ; y lei 9 , ari. 3 , tit. 2 ,
lib. 10, N. S. )
P. ¿ Cómo se procede en este juicio de ali
mentos?
i?. El actor presenta demanda, ofreciendo
informacion así de su derecho como de su
pobreza; y hecha, providencia el juez suma
riamente lo que cree justo. De la sentencia no
se admite apelacion, sino solo en el efecto
devolutivo.
TÍTULO XXVII.

DEL JUICIO SUMARIO DE POSESION.

P. Qué es posesion ?
R. La tenencia de una cosa con ánimo de
escluir á los otros de su uso.
P. De cuántas maneras es?
Ji. De dos : natural y civil. Posesion natu
ral es la que consiste en tener uno la cosa
corporalmente por si mismo, como cuando
lleva su reloj en el bolsillo ó está personal
mente en su casa ó heredad. Posesion civiles
la que consiste en tener la cosa habitual ó
mentalmente, como cuando uno presta su re
loj , ó sale de su casa ó heredad sin ánimo de
desampararla. ( Leyes 1 y 2 , tit. 30, P. 3.)
P. ¿Por qué se suele litigar solo sobre la
posesion, cuando parecía mas natural litigar
á un tiempo sobre la posesion y la propiedad?
Ji. Porque el poseedor goza las ventajas
de no estar obligado á manifestar su título,
de conservar la cosa mientras otro no pruebe
que es suya , de poder defender la posesion
resistiendo al que quiera quitársela , y de ser
360 DEL JUICIO SUMARIO DE POSESION.
teniilo por de mejor condicion en igualdad
de causa. (Lei 28, tít % P. 3, y Ant. Gómez ,
en la lei 45 de Toro, n. 190. )
P. ¿Cómo se llama el juicio en que se ven
tila la posesion?
fí. Juicio posesorio, el cual se divide en
sumario y plenario. Sumario es el que se sus
tancia brevemente sin las solemnidades del
ordinario, no admitiéndose apelacion de la
sentencia sino á lo mas en el efecto devolu-
livo ; y plenario es el que se sustancia por el
método y términos de cualquier juicio ordi
nario. (Gómez, en la lei 43 de Toro, n. 19i;
y Salgado, de reg. protect. , p. 3, cap 12, n.
30^34.)
P. ¿Cuáles son las causas de posesion que
se deciden en juicio sumario?
R. Las que tienen por objeto adquirir de
pronto , conservar ó recobrar la posesion de
alguna cosa.
P. ¿Cómo se llaman las acciones que com
peten al interno?
R. Interdictos, que es lo mismo que decir
providencias interinas; porque antes de pasar
á la cuestion sobre la propiedad, se discute
primero la de posesion.
P. Cuántos son los interdictos?
«EL JUICIO SUMARIO I)E POSESION. 361
R. Tres : interdicto de adquirir de pronto
la posesion, interdicto de retenerla, é inter
dicto de recobrarla.
P. ¿Cuál es el interdicto sobre adquirir la
posesion ?
i?. El que compete al que desea adquirir
de pronto una posesion en que todavía no ha
entrado, pero á que tiene un derecho mani
fiesto. Tal es, por ejemplo, el que correspon
de á los hijos ó parientes mas próximos de
un difunto que tienen derecho á heredarle por
testamento ó ab intestato, para que se les
ponga en posesion pacífica de los bienes he
reditarios, bajo la pena de que cualquiera que
los ocupe sin licencia del juez , pierda el de
recho que tuviere á ellos , ó los restituya do
blados , si no tuviere derecho alguno. Tal es
tambien el que compete al que presenta un
testamento que no está raido ni cancelado, ni
tiene otro vicio visible, para que desde lupgft
se le entregue la herencia que en él se le deja,
como efectivamente se le debe entregar, á no
ser que otro se ofrezca á probar inmediata-
mente la falsedad del testamento. ( Lei 3, tít.
34, lib. 11 , 2V. R. ; lei % tít. 14, P. 6; y Ant.
Gómez, en la lei 45 de Toro, n. 120 y sig.)

si
362 DEL JUICIO SUMARIO DE POSESION.
, P. ¿ Cuál es el interdicto de retener ó con
servar la posesion ?
R. El que compete al que ya tiene la po
sesion natural ó civil, ó ambas, contra el que
le inquieta en el uso de la cosa poseida, ó pre
tende tener la misma posesion , para que el
juez le declare verdadero poseedor, y mande
que el otro le resarza los perjuicios que le
haya causado y no le moleste en lo sucesivo.
El que usa de este interdicto, debe probar el
hecho de su posesion y las gestiones del otro
para perturbarle. (Antonio Gómez, en la lei
45 de Toro, n. 168 y sig. )
P. ¿ Cuál es el interdicto sobre el recobro
de la posesion?
R. El que compete al que ha sido despo
jado violentamente de la cosa mueble ó raiz
que poseia, para que se le restituya ó repon
ga en la posesion , condenando al despojante
an las costas, daños y perjuicios, y en las de-
mas penas de Derecho. (Lei 10, tit. 10, P. 7;
y Ant. Gómez , en, la lei 45 de Toro , n. 189
y 191.)
P. En qué pena incurre el despojante?
R. En la de perder por el hecho del des
pojo cualquier derecho que tuviere en la co
sa; y no teniendo ninguno, en la de pagar al
del juicio Sumario de posesión. 363
despojado tanto como valiere la cosa toma
da, sin perjuicio de su restitucion con todos
los frutos y utilidades. (D. lei 10, tit. 10,
#». 7; y leyes iy% tit. 34, lib. 11, N. R.)
P. i Debe el juez acceder siempre á la pre
tension del despojado?
R. Debe acceder, luego que este acredite
su posesion y el hecho del despojo, pues na
die por su propia autoridad puede despojar
á otro violentamente de lo que está poseyen
do. Mas si el despojante se opusiere justi
ficando con instrumento ejecutivo, que los
irienes son suyos propios, se suele suspen
der la restitucion hasta oírle. (Lei 18, tit. 10,
jP. 7 ; leyes 5 y 6, tit. 34, lib. ií,N.R.;y Gó
mez, en la lei 45 de Toro, n. 182 y 183.)
P. ¿Qué juez debe conocer de estos inter
dictos?
R. Toda persona (dice el art. 44 del regla
mento de 28 de setiembre de 1835) que fuere
despojada ó perturbada en la posesion de al
guna cosa profana ó espiritual, sea lego, ecle
siástico^ militar el despojante ó perturbador,
podrá acudir al juez letrado de primera ins
tancia del partido ó distrito, para que la res
tituya y ampare; y dicho juez conocerá de
estos recursos por medio del juicio sumarí
364 DEL JUICIO SUMARIO DE POSESION.
simo que corresponda , y aun por el plenario
de posesion, si las partes lo promovieren con
las apelaciones á la audiencia respectiva ; re
servándose el juicio de propiedad á los jue-
zes competentes, siempre que se trate de
cosa ó de persona que goze de fuero privile
giado.
P. i Hai apelacion y súplica en estos jui
cios?
R. En los juicios sumarísimos de posesion
no se admite la apelacion, sino solo en el efec
to devolutivo ; é interpuesta y admitida, ha
rá el juez que á eleccion del apelante, ó se
remitan los autos á la audiencia en compulsa
á costa de este , ó se aguarde para remitir
los originales , á que sea plenamente ejecu
tada la sentencia de primera instancia ; ci
tándose siempre y emplazándose previamen
te álos interesados, para <|ue acudan á usar
de su derechotinte el tribunal superior. (Re
glara, de 26 de set. de 1835, art. 49. )
En los mismos juicios no hai lugar á sú
plica de la sentencia de vista , confirme ó re
voque la del juez inferior. En los plenarios
se puede suplicar, en el solo caso de que la
sentencia de vista no sea enteramente con
forme á la de primera instancia, y la entidad
DE LAS DENUNCIAS DE OBRAS. 365
del negocio esceda de quinientos duros en la
Península é islas adyacentes , y de mil en ul
tramar. ( D. reglam., art. 66. )

-etfo-

TÍTULO XXVIII.
DE LAS DENUNCIAS DE OBRAS.

P. Qué se entiende por denuncia de obra?


R. La accion que tenemos para precaver
judicialmente los daños ó perjuicios que pue
de causarnos una obra ó edificio.
P. De cuántas maneras es?
R. De dos : denuncia de obra nueva, y
denuncia de obra vieja ó ruinosa.
P. Qué es denuncia de obra nueva ?
R. La legítima prohibicion de hacer algu
na obra nueva en nuestro perjuicio.
P. Qué es lo que se llama obra nueva?
R. No solo la obra ó construccion que se
hace enteramente de nuevo sobre sus ci
mientos propios, sino tambien la que se hace
sobre edificio antiguo, añadiéndole ó quitán
dole y mudándole su anterior forma. ( Lei 1 ,
tít. 32, P. 'S.)
31.
366 DE LAS ©ENUNCIAS BE OBRAS.
i». ¿<Quién puede hacer la denuncia de
obra nueva?
R. El que tiene algun interes en que la
obra no se construya , por razon del perjui
cio que habría de acarrearle. (D. lei 1. )
JP. A quién debe hacerse la denuncia?
R. Al dueño de la obra , ó al que en su
nombre cuidare de la construccion, ó á los
maestros ú oficiales que trabajaren en ella ,
ya sea intimándoles el mismo interesado que
cesen en su trabajo y deshagan lo hecho, ya
sea acudiendo al juez para que lo mande des
hacer. (D. lei 1. )
P. ¿ Qué debe hacer el juez en vista de la
denuncia?
R. Tomar al denunciador juramento de
que no hace la denuncia maliciosamente , si
no porque cree tener derecho de hacerla , á
causa de que la nueva obra se construye en
terreno suyo ó en su perjuicio ; trasladarse
luego personalmente ó enviar el escribano al
paraje de la obra; tomar medida y razon del
estado en que esta se encuentra ; hacer saber
al dueño la denuncia en cualquier parte que
í'uere hallado ; mandarle suspender entera
mente la obra, bajo la pena de derribar á su
costa lo que se construyere despues ; oir lúe
DE LAS DENUNCIAS DE OBRAS. 367
go en juicio contradictorio al denunciador y
al denunciado; y si no se pudiere decidir el
pleito en el término de tres meses , dará fa
cultad al denunciado para continuar la obra,
con tal que le presente fianza de que la der
ribará á su costa, si apareciere que no tenia
-derecho para su fabricacion. (Leyes 1, 8 y 9,
d. tít. 32, P. 3. )
j?. ¿ Siempre produce la denuncia el efec
to de tener que suspender la obra ?
R. Si la suspension pudiera causar mucho
perjuicio al denunciado, al paso que la conti
nuacion no lo hubiese de producir sino mui
lijero al denunciador, deberá darse facultad
al denunciado para proseguir la obra, pre
sentando fianza de que la demolerá en caso
de probarse la justicia de la denuncia. (An
tonio Gómez, en la lei 46 de Toro, n. 37.)
P. ¿ Qué es denuncia de obra vieja ó rui
nosa?
R. La queja que se da al juez de que la
casa ó edificio de nuestro vecino , ó por su
mala construccion ó por su vejez, amenaza
ruina que tememos nos pueda hacer daño.
P, ¿ Qué debe hacer el juez en vista de la
queja ?
R. Reconocer por medio de peritos el es
368 DEL JUICIO CRIMINAL.
tado del edificio, y mandar al dueño que lo
derribe dentro de cierto término , si no es
susceptible de reparacion , ó que lo repare
en el caso contrario, dando fianza á los veci
nos de que no les vendrá ningun daño. ( Lei
10, tít. 32, P. 3.)
P. ¿Y si el dueño no diere fiador, ó de
morase la reparacion ó el derribo ?
R. Debe darse á los vecinos querellantes
la posesion del edificio ruinoso , y por fin su
propiedad, en el caso de que el dueño persis
tiere en su rebeldía permitiendo que estos lo
reparen ó destruyan. (D. lei 10.)

TÍTULO XXIX.
DEL JUICIO CRIMINAL.

P. Cuál es el juicio criminal ?


R. El que tiene por objeto la persecucion
y castigo de algun delito.
P. Qué cosas hai que considerar en este
juicio?
R. El medio de proceder á la averiguacion
del delito, la sumaria y el plenario.
DEL JUICIO CRIMINAL. 369

§ I-
SOBRE LOS MEDIOS DE PROCEDER A LA
AVERIGUACION DE LOS DELITOS.

P. ¿Cuáles son los medios de proceder á


la averiguacion de los delitos ?
R. La acusacion ó querella , la denuncia ó
delacion, y la pesquisa.
P. Qué es acusacion?
R. La accion con que uno pide al juez que
castigue el delito cometido por otro.
P. Qué es querella?
R. La acusacion ó queja que uno pone
ante el juez contra otro que le ha hecho al
gun agravio, ó que ha cometido algun delito
en perjuicio suyo.
P. ¿ En qué se diferencian la querella y la
acusacion ?
jR. En que la querella se entabla por la
persona perjudicada por el delito , y la acu
sacion por cualquiera del pueblo ó por el pro
motor fiscal ; mas la una y la otra son en el
fondo una misma cosa.
P. Quién puede acusar ?
R. En los delitos privados solo la perdona
370 DEL JUICIO CRIMINAL.
agraviada ; y en los públicos cualquiera par
ticular, á no ser que le esté prohibido por las
leyes.
P. ¿ Cuáles son las personas á quienes es
tá prohibida la acusacion?
R. Las siguientes : — 1.° las mujeres, á no
ser por la muerte de sus mandos : — 2." los
menores de catorce años : — 3.° los que ad
ministran justicia, porque su poder podría ser
perjudicial al acusado : — 4.° los perjuros y
los infames de Derecho : — 5.° los pobres de
solemnidad : — 6.° el que recibió dinero pa
ra acusar ó para desamparar la acusacion :
— 7.° el que tuviese hechas y no acabadas
en juicio dos acusaciones : — 8.° el que tu
viese pendiente contra sí alguna acusacion
por delito mayor ó igual , y el sentenciado á
muerte ó destierro perpetuo : — 9." el cóm
plice en el mismo delito : — 10.° el hermano,
el descendiente, el liberto y el criado del de
lincuente. Mas es de advertir que todos pue
den acusar por delitos cometidos contra ellos
mismos ó contra los suyos. (Lei 14, tít. 8,
J>. 7 ; y leyes 2 y 4, tit. 1, P. 7. )
P. ¿ En qué pena incurre el acusador que
no prueba su acusacion?
R. En la del talion , esto es, en la misma
DEt JUICIO CRIMINAL. 371
que tendría que sufrir el acusado, si se le hu
biese convencido. (Lei 1 , tít. 1 ,P. 7. ) Pero
en la práctica se reduce la condenacion á pe
na arbitraria y al resarcimiento de costa»,
daños y perjuicios.
P. ¿ Esián sujetos á pena todos los acusa
dores que no prueban Va acusacion?
R. Miéntras no sea evidente la calumnia,
están exentos , — t.° el ministro de justicia
que tiene el car^jo de acusar : 2.° el tutor que
acusa á nombre del huérfano por injuria he
cha á este ó á sus parientes : — 3.° el here
dero que acusare á una persona, de quien
dijo el testador en su testamento ó delante
de testigos , que le habia causado el mal de
que moria : — 4.° el acusador del monedero
falso : — 5.° el que acusa sobre hecho contra
sí propio ó sobre muerte de sus deudos en
cuarto grado : — 6.° la persona casada que
acusa por la muerte de su consorte. ( Leyes 5,
6, 20, 21 y 26, tít. 1, P. 7.)
P. Quiénes no pueden ser acusados?
R. No pueden serlo, — 1.° los locos, fa
tuos , y menores de diez años y medio : —
2.° los menores de catorce años por delitos
de lujuria : — 3.° los que ya fueron absuel-
tos del delito, á no probarse que se hizo con
372 DEL JUICIO CRIMINAL.
dolo la primera acusacion : 4.° los muertos,
á no ser por delito de traicion , malversacion
de los caudales públicos, inteligencia con los
enemigos del Estado , robo sacrilego , muerte
dada por la mujer á su marido , ó injusticia
cometida por algun juez en fuerza de sobor
no. (Leyes 1,8, 9 y 12, tít. 1, P. 7.)
P. Pueden ser acusados los juezes?
R. Antes no podían serlo durante su oficio
«¡no por delito cometido en su desempeño
(Lei 11, tit. i,P. 7.) ; mas ahora pueden
serlo por delitos comunes ante cualquiera
otro juez de los del mismo pueblo, si en él
hubiere dos ó mas, ó en su defecto ante el
juez de partido cuya capital esté mas inme
diata ; y por las culpas ó delitos relativos al
ejercicio del ministerio judicial, ante la au
diencia de su respectivo territorio. (Regla
mento de 26 de setiembre de 1835, artículo
46, 59 y 73.)
P. Qué es denuncia ó delacion?
R. El aviso que uno da al juez de algun
delito que se ha cometido , y tambien de su
autor, si lo sabe , no con el objeto de seguir
el juicio en su nombre, sino con el de que el
juez proceda al castigo del delincuente. (Lei
27, tít. i, P. 7. )
DEL JUICIO CRIMINAL. 373
P. ¿ Está obligado el denunciador á pro
bar su denuncia?
R. Solo está obligado á probarla en el caso
de que se hubiese ofrecido á ello , ó en el de
que resulte que la hizo por malicia. (Dicha lei
27^ tít. 1, P. 7; lei 6, tít. 6; y leyes 1, 2 y 3,
tít. 33, lib. 12, N. R.)
P. Qué es pesquisa?
R. La averiguacion que hace el juez del de
lito y del delincuente, en virtud de noticias
judiciales ó estrajudiciales. (Lei 1 , título 17,
P. 3 ; y lei i, tít. 34, lib. 12, N. R. )
P. De cuántas maneras es ?
R. De dos : general y particular. Pesquisa
general es la que se hace sobre todos los de
litos que se cometen en alguna tierra ; y par
ticular la que recae sobre algun delito deter
minado. (D. lei 1, tít. 17, P. 3.)
P. Quién puede hacer pesquisas ?
R. El juez ordinario puede hacer pesquisas
particulares por razón de su oficio ; mas no
las generales sin previa autorizacion. (Lei 2,
d. tít. 17 , P. 3 ; y leyes del tü. 34 , lib. 12 ,
¿V. R.)

32
374 DEL JUICIO CRIMINAL.

§• II.
DE LA SUMARIA.

P. Qué es sumaria?
R. Una informacion ó juicio informativo
que tiene por objeto averiguar la existencia
del delito con todas sus circunstancias, y la
persona del que lo ha cometido para impo
nerle la pena que merezca.
P. Cómo se empieza la sumaria?
R. No habiendo acusador, se pone por
cabeza de proceso un auto de oficio, en que
con espresion de la noticia que se hubiere
dado sobre la perpetracion del delito, decreta
el juez pasar personalmente á indagar la ver
dad. Pasa efectivamente con el escribano;
comprueba la existencia ó el cuerpo del de
lito, cuando este sea de los que dejan seña
les materiales de su perpetracion ; recoge y
asegura los efectos en que consista; hácelos
examinar en caso necesario por peritos; to
ma declaracion jurada al agraviado, á quien
pregunta, si quiere querellarse, para seguir en
otro caso la causa de oficio ; detiene ó arresta
en casos de alguna gravedad las personas de
BEL JUICIO CRIMINAL. 375
los que aparezcan reos , ó que por algun fun
damento raciona] suficiente se presuma ó sos
peche que lo son ; adopta todas las demas
disposiciones que su prudencia le sugiera pa
ra el descubrimiento de la verdad de los he
chos ; y procura ante todas cosas y con la
mayor eficazia prestar al perjudicado por el
delito los socorros , remedios ó proteccion
que pueda y legalmente deba darte. (Lei k,
tit. 33, y leil, tit. 34, lib. 12, N. R.;reglam.
de 26 de set. de 1835 , art. 5 y 51 ; y la prác
tica. )
Cuando se procede por via de acusacion ,
el primer paso es presentar la parte ofendida
un pedimento llamado querella, en que des
pues de hacer relacion circunstanciada del
delito , concluye pidiendo se le admita suma
ria informacion, ó qu« se hagan tales ó tales
diligencias para probarlo, y constando en
cuanto baste, se mande prender al reo y em
bargar sus bienes, como asimismo á sus
cómplices , condenándolos en la pena mere
cida con resarcimiento de daños y perjuicios.
En vista del pedimento da el juez un auto,
cuando lo estima conveniente , de que afian
zando de calumnia el querellante, se pro
veerá; y dada en su caso la fianza, se admite
376 BEL JUICIO CRIMINAL.
por otro auto la acusacion, mandando que se
dé la informacion ofrecida ó que se practi
quen las diligencias solicitadas.
P. ¿ Qué es lo que debe hacerse despues
de estas primeras gestiones ?
i?. Se procede á recibir la sumaria infor
macion ó practicar las diligencias pedidas, si
la causa se empezó á instancia de parte, ó á
hacerla indagacion judicial, si se sigue de
oficio.
P- ¿ Qué medios pueden usarse en uno y
otro caso para lograr el objeto de la sumaria?
i?. Todos los medios de prueba que sean
mas á propósito segun la naturaleza del de
lito ; pero es aquí mas natural y frecuente la
de testigos.
P. ¿ Puede citar y compeler el juez á cua
lesquiera personas para que declaren ante él
como testigos, aunque sean de otro fuero?
R. Toda persona, de cualquiera clase, fue
ro y condicion que sea , cuando tenga que
declarar como testigo en una causa criminal ,
está obligada á comparecer para este efecto
ante el juez que conozca de ella , luego que
sea citada por el mismo, sin necesidad de
previo permiso de su jefe ó superior, y sin
poder dar su testimonio por certificacion ó
DEL JUICIO CRIMINAL. 377
informe, sino por declaracion bajo juramento
en forma que deberá prestar segun su estado
respectivo. ( Decreto de Cortes de 11 de set.
de 1820, restablecido por real decreto de 30
de agosto de 1836. )
P. ¿ Quién debe juramentar y examinar á
los testigos ?
R. Precisamente el juez de la causa y ante
el escribano de ella ; y si residieren en otro
pueblo , el juez ó alcalde del mismo , y tam
bien ante escribano, salvo si el juez de la
causa por alguna circunstancia particulares-
timare mas conveniente al mejor servicio, co
meter esta diligencia á otra persona de su
confianza. (Regl, de 26 de setiembre de 1835,
art. 8 y 34 ,• y decr. de Cortes de 11 de sel. de
1820., art. 9.) Véase el título de las pruebas.
P. ¿ Cómo han de ser examinados los tes
tigos ?
R. Sin manifestarles el nombre del pre
sunto reo, se les harán, mirándolos á la cara,
todas las preguntas conducentes sobre el he
cho, circunstancias de lugar, dia, hora y
demas, personas que se hallaron presentes,
señas del reo, etc. ; absteniéndose de toda
pregunta indirecta, capciosa ó sugestiva, de
toda coaccion física ó moral, y de toda pro
32.
B78 DEL JUICIO CRIMINAL.
mesa, dádiva, engaño ó impropio artificio.
( Leyes 26 y 28 , tit. 16 , P.Z ; lei 3 , tít. 11 ,
lib. 11 , N. R. ; y reglamento de 26 de set. de
1835, arl. 8.)
P. ¿ Qué es lo que se requiere para pro
ceder á la prision del que se presuma reo ?
R. Que por cualquier medio resulte de la
informacion sumaria el haber acaecido un
hecho digno de pena corporal ; que haya al
gun motivo ó indicio suficiente segun las leyes,
para creer que tal ó tal persona ha cometido
aquel hecho ; y que se le notifique en el acto
mismo de la prision el competente manda
miento del juez por escrito. (Const. de 1812,
art. 287,- Const. de 1837 , art. 7; regl, de 26
de set. de 1835 , art. 5; decr. de Cortes de 11
de set. de 1820 , restablecido por real decr. de
30 de ar/osto de 1836, art. 1 y 2.)
P. Y si la urgencia ó la complicacion de
circunstancias no dieren lugar á verificar la
informacion sumaria del hecho , ó á estender
el mandamiento del juez por escrito, ¿no se
podrá proceder á la prision?
R. No podrá el juez proceder á ella; pero
podrá mandar detener y custodiar como dete
nida en un lugar, que no sea la cárcel, por un
término que no pase de veinte y cuatro horas,
BEL Í0ICIO CRIMINAL. 379
á cualquiera persona que le pnrezca sospe
chosa, mientras hace con ía mayor brevedad
posible la precisa informacion sumaria. (D.
decr. de 11 de set. de 1820, art. 3 y 4.)
P. ¿ Deberá siempre ser llevado á la cárcel
el presunto reo ?
R. No será llevado á la cárcel el que dé
fiador «n los casos en que la lei no prohiba
espresamente que se admita la fianza. (Const.
de 1812, <art. 295 y 296; y reyl. de 26 de set.
de 1835, art. 11.)
P. ¿ Qué ha de hacer el juez con «1 presun
to reo despues de *u prision ó arresto ?
R. Tomarle por sí mismo y ante el escri
bano dentro del término de veinte y cuatro
horas declaracion indagatoria sinjurmnento ,
preguntándole su nombre, naturaleza, vecin
dad, oficio, edad, pasos que dió el dia del
delito, personas con .quienes se acompañó,
asuntos de que habló , si sabe quién cometió
el delito, mas no si le cometió él mismo; y
absteniéndose, como con los testigos, de pre
guntas capciosas, ó sugestivas, y de coaccio
nes, promesas, dádivas y artificios. Tambien
deberá preguntarle, si alguna otra vez ha es
tado preso ó procesado, y manifestarle den
tro de las veinte y cuatro horas la causa de su
380 DEL JUICIO CRIMINAL.
prision y el nombre de su acusador, si le hu
biere. (Lei 10, tit. 32 , lib. 12, N. R. ; regl, de
26 de set. de 1 835 , art. 6 y 8 ; Const. de 1812,
art. 290, 291, 300 y 303.
P. Debe ponerse al reo en incomunicacion ?
R. Solo cuando lo exija la naturaleza de
las averiguaciones sumarias , y por solo aquel
tiempo que sea realmente necesario. (Regl,
de 26 de set. de 1835, art. 7.)
P. ¿ Debe hacerse embargo de los bienes
del reo?
R. Solo se hará cuando se proceda por deli
tos que lleven consigo responsabilidad pecu
niaria, y en proporcion á la cantidad á que es
ta pueda estenderse. (Const. de 1812, art. 294.)
P. i Cómo se seguirán las tercerías dotales
ó de dominio que se entablaren sobre los bie
nes embargados?
R. Las tercerías dotales ó de dominio so
bre los bienes embargados ó aprehendidos á
los reos , las averiguaciones de efectos perte
necientes á estos , cuando haya embargo , y
cualesquiera otros particulares independien
tes de la causa principal, no embarazarán
nunca el curso de esta, y deberán seguirse
en piezas separadas. (Decr. restablecido de
11 de set. de 1820, art. U.)
DEL JUICIO CRIMINAL. 381
P. i Cuál es el paso que ha de darse des
pues de la declaracion del reo?
i?, Evacuar las citas de las personas que
segun los dichos de los testigos ó del reo ,
puedan saber algo sobre el hecho criminal ó
su autor, omitiendo aquellas que no sean ne
cesarias ó convenientes para la averiguacion
de la verdad en el asunto de que se trate.
(Regl- de 26 de set. de 1835, art. 51 ; y decr.
restablecido de 11 de set. de 1820, art. 8.)
P. Cómo se evacúan las citas?
R. Primeramente se toma juramento al ci
tado , luego se le lee lo que dice el citante , y
despues se le recibe la declaracion.
P. ¿ Y si hubiese contradiccion entre el ci
tante y el citado?
R. Mandará el juez carearlos , para ins
truirse con sus debates, como se hace tam
bien cuando los reos se contradicen mutua
mente.
P. ¿Qué es lo que se practica, cuando
dice un testigo que vió al delincuente y que
le conocería, si le volviese á ver?
R. Se forma rueda de presos, esto es, se
ponen en Ola ocho, diez ó mas de ellos , ves
tidos todos de una misma manera; é intro
duciendo luego al testigo , se le hace recono
382 mt íujcio criminal.
ceríos uno por uno, y manifestar quién es,
con nuevo juramento.
P. ¿Qué diligencia resta despues de las
indicadas ?
R. La de tomar al reo la confesion, á cuyo
efecto se le leerán integramente todos los do
cumentos y las declaraciones de los testigos ,
con ios nombres de estos ; y si por ellos no los
conociere , se le darán cuantas noticias pida
para venir en conocimiento de quiénes son.
(Const. de 1812, art. 301 ; y reglam. de 1835,
, ttrt. 9.) No se le podrán hacer otros cargos
que los que efectivamente resulten del suma
rio, y tales cuales resulten; ni otras recon
venciones que las que racionalmente se de
duzcan de lo que responda el confesante ; de
biendo siempre el juez abstenerse de agravar
unas y otras con calificaciones arbitrarias y
omitir la evacuacion de las citas que se ha
gan en la confesion , las cuales deben quedar
para que el tratado como reo pruebe despues
lo que le convenga. (Regl. de 26 de setiembre
de 1835, art. 0 y 51.) — Cuando el reo es me
nor , se le nombra curador antes de la confe
sion ; y á su presencia se ratifica en las decla
raciones que hubiese prestado, y se le leen
todas las actuaciones del sumario; y luego ,
DEL JUICIO CRIMINAL, 383
retirandose el curador, se le hacen los cargos.
P. ¿ Debe apremiarse ó tenerse por con
feso al reo que no quiere hacer la confesion?
]i. La confesion ha de ser libre de toda
coaccion física ó moral. (Leyes k y 5, tít 13,
P. 3 ; y art. 8 del regl. de 1835.) ; y para con
denar á un reo, no es indispensable que con
fiese el delito , sino que se le convenza de ha
berlo cometido. Su silencio puede ser un in
dicio contra él , pero no es una prueba.
P. Si despues de la confesion apareciere
algun nuevo reo, hecho ó circunstancia con
cerniente á la causa, ¿se podrá continuar la
sumaria ?
R. No hai duda en ello; y por eso manda
el juez dejar abierta la confesion, asi como la
declaracion indagatoria, y las deposiciones de
los testigos , para continuarlas siempre que
convenga.
P. Cuando en la causa haya cómplices y
convenga hacer un pronto y saludable escar
miento, ¿qué debe hacer el juez?
R. Proseguirla y determinarla rápidamente
con respecto al reo ó reos principales que se
hallen convencidos, sin perjuicio de conti
nuar las indagaciones en pieza separada para
13 averiguacion y castigo de los demas culpa
384 DEL JUICIO CRIMINAL.
dos. (Decreto restablecido de Cortes de 11 de
set. de 1820, art. 15.)
P. ¿ Qué se hará, cuando se vea que el ar
restado ó preso es inocente, ó que no merece
pena corporal?
S. En cualquier estado de la causa en que
resulte ser inocente el arrestado ó preso, se
le pondrá inmediatamente en libertad sin cos
tas algunas, y se sobreseerá desde luego res
pecto á él, declarando que el procedimiento
no le pare ningun perjuicio en su reputacion.
Sobreseerá asimismo el juez, si, terminado el
sumario, viere que no hai mérito para pasar
mas adelante, ó que el procesado no resulta
acreedor sino á alguna pena leve que no pa
se de reprension , arresto ó multa ; en cuyo
caso la aplicará al proveer el sobreseimien
to. El auto en que mande sobreseer, se con
sultará siempre á la audiencia del territorio.
Tambien se concederá la libertad al procesa
do, pero con costas y bajo fianza ó caucion
suficiente , en cualquier estado en que, aun
que no resulte su inocencia, aparezca que no
es reo de pena corporal. ( Reglamento de 26
de setiembre de 1835, artículo 11 y regla 4. ■
del Si.)
P. i Qué es lo que se practica en la audien
DEL JUICIO CRIMINAL. 385
cia con las causas criminales que van á ella
en consulta de sobreseimiento acordado en
sumario?
R. Se oye al fiscal, cuando corresponda, in
voce ó por escrito, y sin mas trámites ni ne
cesidad de vista formal, se da desde luego la
determinacion que sea del caso, de la cual no
hai lugar á súplica. (D. regl, de 1835, art. 71.)

§. III.
DEL PLENARIO.

P. Cuándo se pasa al juicio plenario?-


R. Como el único objeto de los sumarios
es y debe ser la averiguacion de la verdad,
averiguada que sea plenamente por la com
probacion del cuerpo del delito y por la con
fesion del reo, ó por el dicho conteste de
testigos presenciales, de modo que se pueda
dar cierta sentencia; debe terminarse el su
mario, y procederse al plenario desde luego.
(D. decr. de 11 de set. de 1820, art. 10.)
P. Qué se entiende por plenario?
R. El juicio que se sigue despues de la su
maria, casi en la misma forma que el civil or
dinario, con el fin de acreditar la inocencia ó
33
38(3 DEL JUICIO CRIMINAL.
culpabilidad del procesado, y dar la senten
cia absolutoria ó condenatoria.
P. Este juicio es público ó secreto?
R. Desde la confesion, que es la última di
ligencia de la sumaria, debe ser ya público
el proceso, y ninguna pieza, documento ni
actuacion en él se podrá nunca reservar á las
partes. Todas las providencias y demas actos
en el plenario , inclusa principalmente la ce
lebracion del juicio, serán siempre en audien
cia pública, escepto aquellas causas en que la
decencia exija que se vean á puerta cerrada;
pero en unas y otras podrán siempre asistir
los interesados y sus defensores, si quisieren.
(D. reglam. de 1835, art. 10; y Constit. de
1812, art. 302.)
P. Cómo se procede al plenario?
R. Manda el juez entregar los autos al acu
sador, si le hai, ó al promotor fiscal, si la cau
sa se sigue de oficio, señalándole el término
preciso que sea suficiente, con tal que no pa
se de nueve dias, para que formalice la acu
sacion : á cuyo efecto ha de tener presente
el juez, que en toda causa sobre delito que
por pertenecer á la clase de público , puede
perseguirse de oficio, ha de ser paTte el pro
motor fiscal del juzgado, aunque haya acusa
BEL JUICIO CRIMINAL. 387
dor ó querellante particular; pero en las que
versen sobre delito privado , no se le ha de
oir sino cuando de algun modo interesen á la
causa pública ó á la defensa de la real juris
diccion ordinaria. (Regl, de 1835, art. 51, re
glas 5.a y 15.a )
P. ¿Qué se hace con el escrito de acusa
cion?
R. Se da traslado al reo para que contes
te y se defienda, señalándole tambien un tér
mino suficiente que no pase de nueve dias.
Si fueren dos ó mas los acusados y pudieren
sin inconveniente hacer unidos su defensa,
mandará el juez que así lo ejecuten, señalán
doles un término que podrá estender á quin
ce dias para todos, cuando lo requiera la ca
lidad del caso. Y si siendo muchos los proce
sados, y no pudiendo defenderse unidos, exi
giere la gravedad de las circunstancias que se
termine con toda urgencia el proceso, dis
pondrá que en vez de entregársele al defen
sor de cada uno, se ponga de manifiesto á los
respectivos defensores en el oficio del escri
bano sin reserva alguna, por un término que
no pase de quince dias y por catorce horas
en cada uno; permitiéndoseles leerlo todo
original por si mismos , y sacar las copias ó
388 DEL JUICIO CRIMINAL.
apuntes que crean conducentes , aunque sin
dejarse de tomar todas las precauciones opor
tunas para evitar abusos. (Regl, de 1835, art.
51, regla 5.a )
P. ¿Cómo y cuándo ha de articularse la
prueba?
R. Por medio de otrosíes en los escritos
de acusacion y defensa deberá necesaria
mente cada parte articular toda la prueba
que le conviniere, ó renunciar á ella; espre
sando en uno y otro cuso, si se conforma ó no
con todas las declaraciones de los testigos
examinados en el sumario, ó con cuáles de
ellas está conforme, si no lo estuviere con al
gunas. (Regl, de 1835, art. 51, regla 6.a )
P. ¿ Cuáles son los efectos de la renuncia
de prueba y de la conformidad con las de
claraciones del sumario?
R. Si las partes de consuno renunciaren
la prueba y se conformaren con todas las de
claraciones del sumario, habrá el juez por
conclusa desde luego la causa, y dichas de
claraciones, aunque no ratificadas, harán ple
na fe en aquel juicio. (Regl, de 1835, art. 51,
regla 7.° )
P. ¿Y si alguna de las partes articulare
prueba, ó espusiese que no se conforma con
DEL JUICIO CRIMINAL. 389
todas las declaraciones del sumario, ó con al
gunas ó alguna de ellas -?
R. El juez entonces proveerá sobre lo
principal del escrito , aunque como por lo
comun se reduce á pedir pena ó la absolu
cion, se acostumbra reservar para su tiempo,
que es el de sentencia; y en cuanto á los
otrosíes, admitirá ó no la prueba que se ar
ticule ( teniendo presente que no puede ad
mitir á los reos prueba sobre puntos que
probados no pueden aprovecharles, y será
responsable de la dilacion y de las costas en
caso contrario ), y comunicará traslado á las
demas pirtes. Luego que estuviere evacuado
por todas ellas , llamará los autos y recibirá
la causa á prueba, con la precisa calidad de to
dos cargos, por el término que prudentemen
te le parezca necesario segun la calidad de
la causa y de las pruebas que se propongan,
y segun las personas que hayan de ser exa
minadas y la distancia de los lugares, negan
do las prórogasque maliciosamente ó sin ver
dadera necesidad pidan las partes ; tenien
do presente que así los términos de 80 y 120
dias como el ultramarino, señalados por las
leyes para las probanzas, no son sino el -máxi
mum de los que puede conceder. ( Dea: res
33.
390 DEL JUICIO CRIMINAL.
tablecido delí deset. de 1820, art. 11, 12 y 13.}
P- í Qué quiere decir que se recibe la cau
sa á prueba con calidad de todos cargos?
R. Que ya no se vuelve á entregar á las
partes ni se las cita para sentencia, sino que
concluido el término de prueba, y acreditado
así por nota del escribano, se señala dia pa
ra su vista; y solo cuando las partes la piden
para instruccion, suele comunicárseles para
este solo objeto, sin admitir ningun nuevo
alegato; y el dia señalado se ve la causa y se
pronuncia la sentencia.
P. ¿Qué es lo que debe hacerse dentro
del término probatorio?
i?. La ratificacion de aquellos testigos con
cuyas declaraciones no se conforme alguna
de las partes, y las demas pruebas, que por
estas se articulen, y hayan sido admitidas
por el juez, se ejecutarán dentro del término
probatorio, con citacion de todos los intere
sados ; los cuáles podrán asistir, por sí ó por
medio de persona que diputen , al cotejo ó
compulsa de documentos, y al exámen ó ra
tificacion de los testigos, y hacer á estos con
la debida moderacion y regularidad las pre
guntas que estimen , debiendo contestar á
ellas el repreguntado, á ménos que el juez no
«EL JUICIO CRIMINAL. 391
las déclare impertinentes ó impropias. (Regl,
de 1835, art. 51, regla 8fl )
P. ¿Cuándo podrán ponerse tachas á los
testigos? '
R. A los testigos del sumario, al tiempo de
-pedir su ratificacion; y á los nuevos que se
presentaren en elplenario, dentro del pre
ciso término de los tres dias siguientes á
aquel en que el testigo hubiere prestado su
declaracion. (Reglam. de 1835, art. 51, regla
9.a, y la opinion comun en cuanto al primer
estremo. )
P. ¿ Qué término se concede para probar
las tachas?
R. Si estuviere fenecido ya el término pro
batorio para lo principal, ó no bastare lo que
reste de él , se ampliará ó señalará de nuevo
cual fuere suficiente , con tal que en ningun
caso pueda esceder de la mitad del concedi
do para la prueba principal. ( D. reglam. , art.
51, regla 9." )
P. Cómo se hará la prueba de tachas ?
R. Con citacion de los interesados, como
en la prueba principal , y con igual comuni
dad del término respectivo, (id.)
P. i Qué es lo que corresponde hacer des
pues de la probanza principal y la de tachas?
392 DEL JUICIO CRIMINAL.
R. Pasado el término probatorio, se tendrá
por conclusa la causa; y el escribano, sin
necesidad de que se acuse la rebeldía ni de
especial providencia, la recogerá y le dará el
debido curso , poniéndolo en conocimiento
del juez , quien dentro de tres dias, si halla
re en ella defectos sustanciales que subsa
nar, ó faltaren algunas diligencias precisas
para el cabal conocimiento de la verdad,
acordará , que para determinar mejor , se
practiquen sin pérdida de momento todas
las que fueren indispensables, bajo su res
ponsabilidad, en el caso de dar con esto mar
gen á innecesarias dilaciones. Si no hubiere
que practicar ninguna diligencia nueva, man
dará notificar el señalamiento de dia para
sentencia definitiva. (Combinacion del art. 51,
reglas 10, 11 y 12, reglam. de 26 de set. de
4835 con las disposiciones del decr. de 11 de
set. de 1820.)
P. Qué término tiene el juez para pronun
ciar su sentencia?
R. Para dar sus providencias interlocuto-
rias tiene el perentorio término de tres dias ;
y para pronunciar sentencia definitiva, el de
ocho, que podrán estenderse á doce dias, si
la causa pasare de quinientas hojas. Pronun
DEL JUICIO CRIMINAL. 393
ciada la sentencia definitiva , será notificada
inmediatamente a las partes. (Regl, de 1835,
art. 51, regla 13, con igual combinacion.)
P. ¿Debe el juez ejecutar su sentencia,
luego despues de pronunciada y notificada?
i?. Hecha la notificacion de la sentencia ,
sea que las partes apelen ó que no apelen ,
deben remitirse desde luego los autos origi
nales á la audiencia del territorio con pre
via citacion y emplazamiento de las mismas,
siempre que la causa fuere sobre delito á que
por la lei esté señalada pena corporal. Si la
causa fuere sobre delito liviano, á que por la
lei no se imponga pena de esta dase , solo se
remitirá á la audiencia con igual formalidad,
cuando alguna de las partes interponga ape
lacion dentro de los dos dias siguientes al de
la notificacion de la sentencia ; la cual causa
rá ejecutoria , y será llevada desde luego á
debido efecto por el juez, si no se apelare en
dicho término. (/>. regl., art. 51, regla 14.)
P. i Cuál es la obligacion del escribano
que notifique al reo la sentencia definitiva?
R. Advertirle que si en el término del em-
plazamienio no eligiere procurador y abogado
quo le defiendan en el tribunal superior, le
serán nombrados por esto de oficio, y. con el
394 DEL JUICIO CRIMINAL.
procurador se entenderán los traslados y ac
tuaciones relativas al mismo reo, hasta que re
caiga en el proceso sentencia ejecutoria. El
escribano que omitiere esta formalidad, ó no
la hiciere constar en la diligencia de noiifica-
cion de la definitiva , incurrirá en la multa de
doscientos hasta quinientos reales de vellon.
El mismo escribano escribirá apud acta el
nombramiento de defensor ó defensores en
su caso, y firmará el reo esta diligencia , que
equivaldrá por poder en forma. (Real decreto
de 4 de noviembre de 1838, disposicion 1.a)
P. ¿Qué es lo que se practica en la au
diencia con respecto á estas causas que van á
ella en apelacion ó en consulta?
R. En las causas criminales que vayan á la
audiencia en apelacion de juzgado inferior,
o en consulta de sentencia definitiva pronun
ciada por él sobre delito de pena corporal , la
audiencia , para determinar en vista ó en re
vista , oirá al fiscal en su cnso , y tambien á
las demas partes ó sus defensores , si «e pre
sentaren ó hubiesen sido nombrados apud
acta, concediéndoles un término que no pa
se de nueve dias á cada uno, con las circuns
tancias que añade la regla 5.a del art. 51 del
reglamenio de 26 de setiembre de 1835. (Vé
DEL JUICIO CRIMINAL. 39S
ase mas arriba, en el principio de este §. III.)
Si pasado el término del emplazamiento
hecho en el juzgado inferior, no hubiesen
comparecido las partes, se les nombrará de
oficio defensor y procurador, con quien se
entenderán las actuaciones relativas á la no
compareciente , hasta que recaiga ejecutoria
en el proceso. ( Real decr. de 4 de noviembre
de 1838 , disposicion 2a, que sustituye al art.
72 del regl. t/el835.)
P. ¿En esta segunda instancia se podrá
pedir nuevo término de prueba?
R. En las segundas y terceras instancias
no concederán nunca las audiencias nuevo
término de prueba , sino sobre hechos que la
exijan , siendo de aquellos que sin malicia se
dejaron de proponer en la primera instancia,
ó que propuestos no fueron admitidos. (Decr.
restablecido de 11 de set. de 1820, art. 17.)
- P. Hai lugar á súplica en estas causas?
R. Solamente le habrá, cuando la senten
cia de vista no sea conforme de toda confor
midad á la de primera instancia. (Reglam. de
1835, art. 72.)
396 DEL JUICIO CRIMINAL.

§• IV:

MODO DE PROCEDER CONTRA REOS AUSENTES.

P. Cómo se procede contra el reo ausente?


R. Si el que resulta reo en un delito, no pu
diere ser habido , á pesar de las diligencias
hechas y requisitorias espedidas para su cap
tura , se le embargan los bienes en proporcion
á la cantidad á que pueda estenderse su res
ponsabilidad pecuniaria , vendiéndose en al
moneda pública los que no puedan conser
varse ; y se le emplaza por tres vezes, de nueve
en nueve dias cada una pregonándole públi
camente, y fijando á cada plazo en el paraje
acostumbrado un edicto que contenga el de
lito de que se le acusa , el lérmino que se le
concede para comparecer, y el número de
pregones y rebeldías que á la sazon le fueren
acusadas.
Si el reo no acude al primer plazo, se le
condena en la pena del desprez, que antes
era de sesenta maravedís, y ahora es arbitra
ria ; pero si se presenta al segundo plazo, pa
ga el desprez y las costas causadas por su au
DEL JUICIO CRIMINAL. 397
senda y rebeldía, y se le oye en justicia. Si
tampoco parece al segundo plazo , y el delito
merece pena capital , será condenado en la
pena del homecillo, que tambien es arbitraria
en el dia, aunque ántes era de seiscientos ma
ravedís. Si comparece al tercer plazo, paga
rá el desprez y homecillo y las costas, y se
rá oido; mas si no se presenta dentro de este
último plazo, se le pone la acusacion en for
ma como si estuviese presente, se le manda
responder dentro de tercero dia, se le seña
lan los estrados por procurador, y se sigue
con ellos la causa por los trámites regulares,
hasta la sentencia definitiva , que se pronun
ciará segun lo que resulte del proceso.
Si el acusado se presenta en la cárcel, ó es
hecho preso ántes de la sentencia definitiva,
ó dentro del año desde que fué dada, pagará
las referidas penas de rebeldía y costas, y se
rá oido sobre las penas corporales y pecunia
rias, quedando en su fuerza y vigor todo lo
actuado; pero si no compareciese ni fuese
preso dentro de dicho año , no será ya oido
sobre las penas pecuniarias , sino solo sobre
las corporales. Si muriese en el discurso del
referido año , serán oidos sus herederos so
rbe las penas pecuniarias, en caso de ser el
398 DEL ASILO.
delito de los que no se estinguen por la muer*
te. (Lei 1, tít. 37, lib. 12, ZY. R,)

TÍTULO XXX.
DEL ASILO.

P. Qué es asilo?
R, El lugar de refugio para los delincuen
tes; ó sea, el derecho que tienen ciertos de
lincuentes que se refugian en la iglesia, para
estar bajo el amparo de ella, y no ser castiga
dos sino con una pena nías moderada que la
correspondiente al delito.
P. ¿ Cuáles son los delincuentes que gozan
de este beneficio?
R. Los que no han cometido sino un deli
to menor que los que por su atrocidad mere
cen todo el rigor de las leyes.
P. ¿ Qué delincuentes merecen el rigor de
las leyes, sin que pueda alcanzarles el bene
ficio del asilo?
R. Los reos de lesa majestad ; los homici
das , a no serlo casualmente ó en propia de
fensa; los ladrones públicos; los taladores de
DEL ASILO. 399
Campos ó heredades; los incendiarios; los
plagiarios , esto es , los que por fuerza y en
gaño se llevan personas y las retienen en su
poder para que se rediman con dinero ; los
comerciantes alzados ; los falsificadores de
letras apostólicas ó de moneda; los emplea
dos en montes de piedad ú otros fondos pú
blicos que cometen hurto ó falsedad ; y los
que fingiéndose ministros de justicia, cometen
robos con muerte ó mutilacion de miembro.
( Leyes 4 y 5, tít. 11, P. 1; leyes 1 y h, tít. h,
lib. 1, N.R., con sus notas; y varias bulas de
diferentes papas. )
P. Qué iglesias pueden servir de asilo?
É. Una ó dos en cada ciudad, segun eligie
re el Ordinario eclesiástico. (Bula de Clemente
XIV de 1772; y lei 5, tít. 4, lib. 1, N. R.)
P. ¿Qué se hace con el reo que se refugia
en una iglesia de asilo?
R. El juez secular le estraerá de ella in
mediatamente, con noticia del rector, párro
co ó prelado eclesiástico, bajo la competente
caucion de no ofenderle en su vida y miem
bros ; y le pondrá en cárcel segura.
Procederá luego á la competente averigua
cion de la causa que tuvo el reo para el re
traimiento ; y resultando ser leve , le corregí
400 DEL ASILO.
rá arbitraria y prudentemente , y le pondrá
en libertad, con el apercibimiento que gradúe
oportuno. Mas si resultase delito digno de pe
na corporal, le hará el correspondiente suma
rio; y evacuada su confesion con las cit is, en
el término preciso de tres dias , no habiendo
motivo urgente que lo dilate, remitirá los au
tos á la audiencia.
La audiencia, oyendo al fiscal, si ve que el
delito no es de los esceptuados del derecho
de asilo, ó que la prueba no es bastante para
que el reo pierda la inmunidad , le destina-
ár por providencia y tiempo que nunca pa
se de diez años, á presidio, arsenales, traba
jos públicos, servicio de las armas ó des
tierro , ó le multará ó corregirá arbitraria
mente segun sus circunstancias y la calidad
del hecho ; y si el reo suplicare de la conde
nacion, le oii á conforme á Derecho. Mas si el
delito es de los esceptuados, habiendo prue
bas subsistentes, devolverá los autos al juez
inferior, para que con copia autorizada de la
culpa que resulte, pida sin perjuicio de la pro
secucion de la causa , al juez eclesiástico la
consignacion formal y llana entrega del reo
sin caucion. >
El juez eclesiástico, en vista solo de dicha
' DEL ASILO. 401
copia , proveerá si ha ó no lugar la consigna
cion y entrega del reo; y provista, se efec
tuará la entrega formal dentro de veinte y
cuatro horas ; á cuya consecuencia procederá
el juez en los autos , como si el reo hubiera
sido aprehendido fuera de sagrado.
Si el juez eclesiástico denegase la consigna
cion y entrega del reo , ó procediese á otra
operacion irregular, dará cuenta el juez infe
rior con remision de los autos á la audiencia
territorial , la cual librará la ordinaria acos
tumbrada, para que el juez eclesiástico remiia
igualmente sus autos con citacion de las par
tes ; y hecho , introducirá el fiscal el recurso
de fuerza.
Declarándose que el juez eclesiástico hace
fuerza, devolverá la audiencia los autos al
juez de primera instancia para su continua
cion , y si se declara que no la hace en lo sus
tancial , providenciará desde luego la mi ma
audiencia el destino ó pena del reo, como en
el caso de no ser el delito de los esceptuados
del derecho de asilo. (Lei 6, tít. 4, libro 1 ,
N. R.)
TÍTULO XXXI.
DEL INDULTO.

P. Qué es indulto ?
R. El perdon de la pena que se tenia me
recida. (Lei 1, tit. 32, ¿». 7.)
P. De cuántas maneras es?
R. De dos : general, que es el que se con
cede á todos los delincuentes, con motivo de
alguna alegría pública; y especial, que es el
que se concede á una persona , en virtud de
alguna razon particular. (D. lei i.)
P. ¿Todos los delitos se entienden perdo~
nados en el indulto general ?
R. Suelen esceptuarse los de traicion, ale
vosía, fabricacion de moneda falsa, incendio,
estraccion de cosas prohibidas del territorio,
hurto, cohecho, baratería, falsedad, resisten
cia á la jusiicia, desafio, y malversacion de la
hacienda pública. ( Leyes y ñolas del tit. 42 ,
lib. 12, Ni R.; y Elizondo, Pract.for., t. 6,
p. 2, c. 14.)
P. ¿Qué se requiere para la aplicacion del
indulto?
.fl. Que el reo satisfaga primero á la parte
DEL INDULTO. 403
agraviada, si la hubiere , ó consiga el perdon
de ella : bien que siempre tendrá lugar en
cuanto á la pena ó interes correspondiente al
fisco, y aun al denunciador. (Leyes 1 y 3, tit.
42, lib. 12, N. R.; y real céd. de 17 de octu
bre de 1771.)
P. Cuáles son los efectos del indulto?
R. Si se concede antes de la sentencia,
queda el reo libre de la pena, y conserva su
estado y bienes como los tenia ántes; pero si
se da despues, queda libre de la pena corpo
ral, mas no recobra los bienes, ni la fama, ni
la honra que perdió por la sentencia, á no ser
que en el indulto se mande volverle á su pri
mer estado. (Lei 2, tit. 32, P. 7.) El indulto
nunca se estiende al resarcimiento de daños y
perjuicios causados á la parte ofendida.

FIN.
LIBROS DEL FONDO

DON VICENTE SAEVA.

Amistades (Las) peligrosas. Cartas recogidas en una


sociedad , y publicadas para la instruccion de algunas
otras. Paris, 4854 . 2 vols. \Svo. frances , con 5 lá
minas.
Amor, misterio y espiacion , novela moral. Valen
cia, 4852. \%vo. mayor español, láminas.
Antillon. Carta esférica del Mediterráneo. Valen
cia, 18H. Un pliego de marca imperial, con una
memoria en Ato. esp. de Noticias geográficas del Mar
mediterráneo.
— La misma iluminada.
Araújo (Mata y). Nueva gramática latina, escrita
con sencillez ülosóüca. Sesta edicion. Paris,, 4859.
Svo. esp.
Naila es mas difícil en los libros elementales que limilarse á lo
que debe aprender de memoria y estudiar ei discípulo, dejando el
campo abierto al maestro, para inculcarle sobre aquellas, otras no
ciones accesorias. Araújo debe haber seguido esta oportuna senda,
cuando está tan generalmente adoptada su dramatica; la cual se
halla ahora purgada de las erratas, de que abundaban las cinco im
presiones suyas ejecutadas en España.

Béntham. Deontología ó ciencia de la moral. Obra


postuma de este autor, revisada y ordenada por Mr.
J. Bowring, y publicada en frances sobre su manus
crito original. Traducida ahora al espanol, por Dun P.
P. Paris, 4856. 2 vols. Svo. mayor esp., papel avi
telado.
Esta obra es la última que ha sa'ido á luz del célebre Béntliam ,
y el mas apreciable acaso de sus escrito?. Al traducirla se ha cuida-
no de no mutilarla en lo ma* mínimo.
Biblia (La sagrada), nuevamente traducida al es
pañol é ilustrada con notas por Don Félix. Torres Amat.
Edicion reimpresa de la segunda de Madrid. Paris,
4 856. 17 vols. \Svo. frances.
Á mas de copiarse por entero la traduccion y notas del señor
Amat con arreglo á |a segunda edicion, que está sobre manera me
jorada, ha procurado el editor corregir las erratas ( algunas de bas
tante importancia) que en ella se advierten.
Bordas. Compendio de la gramática italiana, for
mado sobre los mejores autores. Edicion mui corregida
y aumentada. Paris, 4 855. Svo. esp.
Pasa este compendio por el mas proporcionado para enseñar la
lengua italiana á los que poseen la española, y se ha cuidado de rec
tificarlo y perfeccionarlo en esta edicion, particularmente en los es-
tractos que se dan al fin de algunos autores italianos, no menos que
en sus traducciones.
Bruja (La), ó cuadro de la corte de Roma. Novela
bailada entre los manuscritos de un respetable teólo
go, grande amigote de la Curia romana, por D. Vicente
Salvá. Paris, \ 850. 4 Svo. fr. lárn.
El lector, cualquiera que sea su opinion, devorará con ansia es
ta obrilla, en que lucen á la par una vasta erudicion en la historia
eclesiástica, un manejo magistral de la lengua castellana, y el chiste
y lijereza que suelen echarse ménos en los escritos de los" teólogos.
Büffon (El) de los niños, ó historia natural abre
viada de los cuadrúpedos- aves, anfibios, insectos, etc.
Segunda edicion. Valencia, t855. 8to. esp. con 56
laminillas.
— La misma obra con las láminas iluminadas.
Esta obra nada tiene de comun con otra en 18vo. fr. que bajo el
mismo titulo se ha publicado en Paris. Sobre ser mucho mas esten
sa, está entresacada de las mejores que se han escrito acerca de es
ta materia, y contiene lodo lo que es indispensable para que los jó
venes se formen una idea bastante completa de laHijforia natural,
y se aficionen á su estudio.

Campe. El nuevo Robinson, historia moral reducida


á diálogos, puesta en castellano por Don Tomas de
Iriarte. Edicion hecha bajo el cuidado de Don Vicente
Salvá.- Paris , 1852. 2 vols. \ Sio.fr. con 4 láminas
y un mapa.
Camfománes (D. Pedro Rodríguez). Tratado de la
regalía de España , ó sea el derecho real de nombrar á
los beneficios eclesiásticos de toda España y guarda de
sus iglesias vacantes. Con un suplemento ó reflexiones
históricas é introduccion para la mayor inteligencia del
novísimo Concordato de 4 4 de enero de 1755 en sus
principales artículos. Arreglado y deducido todo ello
de los Cánones, Disciplina eclesiástica, costumbres y
leyes de España, segun el orden de los tiempos. Lo
publica del manuscrito original del autor D. Vicente
Salvá. Paris, 4 850. Svo.fr. Primera y única edi
cion de esta obra.
En una época en que la mayor parte de las nuevas repúblicas
americanas estén entablando sus relaciones con la Silla pontificia,
les conviene en gran manera conocer lo que los Cánones y las an
tiguas leyes de España disponen sobre el importante punto, que en
esta obra se propuso dilucidar el señor Campománes. Este escrito,
no mencionado por Sempere y Guarínos ai tratar de los de aquel
respetable magistrado, parece que estaba destinado para la impre
sion, segun lo prueban la dedicatoria, lo limpio del manuscrito, y
las firmas y notas del autor ; pero tal vez la sobrada franqueza y
claridad de las doctrinas que contiene, impediría su publicacion.
Capmany. Arte de traducir el idioma frances al cas
tellano , revisto y aumentado por Don Antonio Alcalá
Galiano y por Don Vicente Salvá. Paris, -1835. 42w.
frances.
Este libro pudiera mui bien hacer las vezes de una Gramática
francesa; pero cuando no se le quiera emplear con este objeto, lo
necesitan indispensablemente los españoles que estudian el fran
ces, á fin de que no se les peguen malos resabios, ni olviden los mo
dismos de su lengua nativa. Capmany era mui maestro en esta par
te, y su obra ha recibido considerables retoques y aumentos en es
ta reimpresion.
Cavalario. Instituciones del Derecho canónico, tra
ducidas al español del testo del autor sin supresion
alguna, por Don Juan Tejada y Ramiro. Segunda edi
cion mui corregida y mejorada. Valencia, 1 857. 5 vols.
Svo. esp.
Casi todas las Universidades de España han adoptado las Institu
ciones de Cavalario por testo para la enseñanza del Derecho canó
nico.
- Cavai.larii instilutiones juris canonici, quibus ve-
tus et nova Ecclesiae disciplina enarratur. Editio prima
hispana , ad ipsum auctoris opus ex amussim aptata.
Valenliae edetanorum, 4 85-1. 2 vols. Svo. esp. demás
de 160 págs. cada uno. Esta es ta primera edicion
española en que está el testo de Cavalario íntegro
y sin castrar.
Celia ó la buena liija, y Rosa ó cómo se debe en
gañar. Valencia, 1828. 2 vols. \ Sro.fr. láminas.
Cementerio (El) de la Magdalena, ó la muerte de
Luis XVI y de su familia, por Regnault-Warin. Edi
cion corregida y aumentada con un resumen de las vi
das de Luis XVI, de madama Isabel, de la duquesa de
Angulema, de Luis XVIII, de Carlos X. y de los du
ques de Angulema y de Berry, por Don Vicente Salva.
París, 1855. h vols. \Svo.fr. ron 4 láms.
El propietario y principal traductor de esta obra, D. Vicente Sal-
vá, la ha revisto ahora de nuevo, y ha insertado en sus lugares al
gunos pasajes que se hallan suprimidos en la tercera y cuarta edi
cion de España.
Cicehon. Epístolas ó cartas, vulgarmente llamadas
familiares , traducidas por el Dr. Pedro Simon Abril.
En latín y español. Valencia, 1797. 4 vols. gruesos
en Svo. mayor esp.
Pedro Simon Abril, uno de los mejores humanistas del siglo de
oro d auestra literatura, hizo esta traduccion con mucha propie
dad y con el lenguaje castizo de su época.
Ciceroms epistolarum ad familiares libri XVI. Ma-
triti, t8l7. Svo. esp.
Ciceronis epistolarum selectarum libri quatuor. Va
lentía?, 4 820. Svo. esp.
Coleccion de los mas célebres romances antiguos
españoles, históricos y caballerescos, publicada por
Depping, y ahora considerablemente enmendada por
D. Vicente Salvá. Londres, 4825. 2 vols. Svo. esp.
pap. avit.
Cortes. Fisonomía y varios secretos de naturaleza.
Paris, 4854. \ Svo. fr.
Chatkadbriand. Atala, ó los amores de dos salvajes
en el desierto. Traduccion corregida por Don Vicente
Salvá. Valencia , \ 855. Svo. esp. lámina.

eligías ( Las ) de la Religion cristiana , ó el poder


del Evangelio para Lacemos felizes, por el abate La-
mouretie. Paris, 4852. Svo. esp.
En esta edicion se han añadido por la vez primera los muchos
pasajes del original que faltaban en todas las publicadas en España,
y se ha revisto con cuidado la traduccion para corregirla de los gra
vísimos defectos de que adolecia.
Djccionakio de la lengda castellana por la Aca
demia española, reimpreso de la octava edicion publi
cada en Madrid en 4857, con algunas mejoras, por Don
Vicente Salvá. Paris, 4 858. Volumen en Ato. mayor
esp. de mas de 1000 págs.
Este Diccionario ha recibido' notables aumentos en su octava edi
cion, particularmente en la parte latina, tanto que puede ya suplir
perfectamente al español-latino de Valbuena, siendo superior á él
bajo muchos respectos. Por esto he procurado imprimirlo en la
misma letra que mi Diccionario latino-español, y en tamaño mui
Eneo mayor que este, porque haciéndolo igual, hubiera salido so-
rado abultado.
Mi reimpresion, sin haber alterado en nada el testo de la Acade
mia, lleva c nocidas ventajas sobre la edicion de Madrid, por ha
berse corregido no solo las erratas que se sacaron en la Fe de ellas,
sino infinitas otras; y en particular por haborse intercalado en los
lugares respectivos los artículos del suplemento, y restituídose mu
chas dicciones al riguroso érden alfabético, fuera del cual se halla
ban. Se ha uniformado ademas la ortografía, pues aparecían vesti
gios de todas las que sucesivamente han estado en vigor al tiempo
de salir á luz cada una de las siete primeras ediciones.
Al esponer estas y otras varias mejoras de la mia en la adverten
cia que he prefijado á la obra, anuncio que estói trabajando un Su-
pleuienio, en oue he reunido muchas vozes olvidadas por la Aca
demia, entre ellas un crecido número de las usadas y provinciales
de los diversos estados de la Hispano-América y de las posesiones es
pañolas en el Asia.

17jddcaciox
' de la infancia. Dividida en tres partes, la
moral , la virtud y la buena crianza , con el Manual
instructivo y curioso para los niños : por Don José
Menéndez. Madrid , \ 856. Svo. esp.
El libro que antecede, se halla adoptado en todas las escuelas de
primera educacion de España.
Ej; rucio cotidiano de diferentes oraciones para la
confesion y comunion, y para la santa misa. Paris,
4851. Svo. esp. láms.
Ejercicio espiritual cotidiano, mui completo de ora
ciones á diversos santos , para ántes y despues de la co
munioh, y para oír la misa. París, 4855. 48wo. fr.
láms. pap.Jino.
— El mismo en 52vo.fr. láms. pap. fino.
Elogios históricos de los santos, con los misterios
de N. Sr. Jesucristo y de la SSma. Virgen , para todo
el año. Valencia. 4 vols. Ato. esp.
Escuela de arquitectura civil, en que se contienen
los órdenes de arquitectura , la distribucion de los pla
nos de templos y casas, y el conocimiento de los mate
riales, por Atanasio Genaro. Valencia, 1804. íto. esp.
con 54 láms.
Espejo de cristal fino, y antorcha que aviva el alma,
por D. Pedro Espinosa. Valencia ,4 847.4 6vo. esp.
Evangelios (Los santos) traducidos al castellano
con notas sacadas de los santos Padres y espositores sa
grados, por el P. Fr. Anselmo Petite. Valencia, 4855.
Svo. esp.

García Malo. Véase Voz de la naturaleza.


Gerbeh de Robles. Nuevo formulario «eneral com
pleto, ó coleccion de las recetas mas usadas en la prác
tica médica, con notas sobre las dosis, modo de ad
ministrarlas y aplicaciones particulares, estractado de
los mas célebres formularios y de otras obras de ambas
facultades. París, 4 859, 2 vols. Svo. esp.
Esto formulario, sacado do los de Ralier, Richard, Alibcrl, Cadet,
Barhior, Magendie y Lagncau, del Diccionario ile medicina y ciru
gía- práctica* por una sociedad de profesores, del de Cirnala prác
tica de Cooper y de los interesantes trabajos de Lugol, va precedi
do de reglas generales sobre el arte de recetar y de consideraciones
sobre ios hospitales civiles de París, y al fin del tomo segundo se ha
puesto la clasificacion de las sustancias medicinales segun sus pro
piedades; un índice alfabético que comprende los medicamentos
simples, sus diversas preparaciones y dosis; una noticia sobre los
recientemente introducidos en el arte de curar, sus fórmulas y uso ;
un tratado de los diferentes cáusticos y modo de aplicarlos, y por
último un cuadro de las principales sustancias venenosas y de sus
antídotos.
Gómez Herbiosilla. Arte de hablar en prosa y ver
so. Segunda edicion. Paris, 4857. ivols. 4ivo.fr.
Gómez Hermosilla. Juicio crítico de los principa
les poetas de la última era, á saber, Moraún hijo,
Meléndez , ¡Morona , Jovellános , Cienfuégos , Roldan ,
Casiro , Arjona y Sánchez Barbero. Paris, 4 840. 2 vols.
í2vo. fr.
Esta obra, que se publica ahora por la primera vez, debe mirarse
como la continuacion y complemento del Arle de hablar en prosa
y verso, del mismo autor.
Gramática latina de Antonio de Nebrija, con la
explicacion y notas del P. Agustín de S. Juan Bautista ,
revisada por el P. Pedro de Santa María Magdalena. Va
lencia, 1855. Svo. esp. de 400 págs,
Granada. Meditaciones para lodos los dias de la se
mana, con la nueva concesion de indulgencias.Van aña
didas las de santa Catarina de Sena y del B. Enrique
Suson. Paris, \ S56. Grueso vol. en Svo. esp.
— Las mismas de papel florete. Svo. esp.

Heineccio. Elementos del Derecho romano, traduci


dos y anotados. Segunda edicion. Paris, 4 856. Svo.
español.
Heineccio. Recitaciones del Derecho civil segun el
orden de la Instüuta. Traduccion de Don Luis de Co-
llántcs , revisada y corregida con arreglo al testo de
Heineccio por Don Vicente Salva. Esta edicion com
prende todas las nolas y apéndices que lleva la última
de Madrid. Paris, J837. 5 vols. Svo. esp.
Las tres ediciones que se han hecho en España de estas Recita
ciones , han aumentado progresivamente los errores tipográficos,
desfigurándolas en muchísimos pasajes , despues que su traductor
habia saltado algunos, y manifestado en otros poca inteligencia en
el latín, ó poco esmero en desempeñar su tarea. Así es que la pre
sente revision ofrece un trabajo casi del todo nuevo, en el que si se
echa menos respecto de la lengua castellana la maestría con que el
autor manejaba la latina, nada se omite de lo que él escribió, ni se
le hacen decir cosas mui diferentes de las que dijo.
Herrera. Práctica de las ceremonias de la misa
rezada y cantada solemne , segun las rúbricas del Misal
romano, con otros tratados pertenecientes al culto divi
no. Valencia. Svo. esp.
Hufelam). Manual de medicina práctica. Paris,
•1859. 4 rols. Svo. esp.
El esclarecido aulor del Tratado sobre las escrófulas y del Arle
de pra'onqnr la vida, quiso, án tes determinar la suya, legaren
este Manual el fruto de una esperiencia de cincuenta años á la ca-
bezera de los enfermos. La imparcialidad , esenta de lodo espíritu
de sistema, con que está escrito, y la sensata aplicacion que ha he
cho de la Medicina homeopática , han producido esa competencia
de traducciones que se han publicado en Francia en pocos meses.
De todas ellas comparadas se ha hecho la presente por un profesor
español, quien ha procurado esplicar las vozes técnicas recientes v
cuyo significado es poco conocido entre nosotros, reducir los pesos
Í medidas de los medicamentos á los de la Farmacopea española, y
acer algunas otras aclaraciones en notas para la mejor inteligencia
de la obra.
Hurtado de Mendoza. Historia de la guerra de
Granada , que hizo el rei D. Felipe II contra los mo
riscos de aquel reino, sus rebeldes. Edicion hecha bajo
la direccion de D. Vicente Salvá, de quien es el pró
logo que precede á la obra. Valencia , \ 850. 800. ma
yor esp. retrato.
— La misma en papel fuerte.

Infancia (Libro de la). Véase Educacion.


Irene y Clara , ó la maHre imperiosa. Novela mo
ral que publica D. Vicente Salvá. Paris, 4850. \2vo.
fr. con 5 lams.
Irving. Cuentos de la Alhambra. Valencia, 4 855.
IGvo. mayor esp. , portada grabada y lámina.

Jacquier. Institutiones philosophicae. Valentiae, Mon-


fort, 4824. 6 vols. Svo. esp. láminas de cobre.

Lamartine. Poesías entresacadas de sus obras, y tra


ducidas en \erso castellano por D. J. M. de Berrioza-
bal. I'ai is, IS40. \Svo. fr. viñHas y retrato.
p« m,.presente lraduccion de las principales poesías de Lamartine
rtni?.
uuies ..?r?p.'a P?ra hacer
aracterisUcas conocer
de uno de losá escritores
los que hablan el español,
que mas las
descuellan
ahora en Francia. El tomito que las comprende, está ademas impre
so con un esmero particular, y por sus viñetas y el retrato del au
tor constituye un verdadero libro de aijuinaldo.
La Meunais. Palabras de un creyente, con un apén
dice sobre la libertad y el absolutismo , del mismo
autor. Sevilla, 4855. \ \vo.fr.
Lahraga. Prontuario de la teología moral, refor
mado, corregido é iluslrado con varias Constituciones
de Benedicto XIV, en especial del solicitante in confes-
sione,áe\ ayuno etc., por D. Francisco Sántos Grosin.
Zaragoza, 4852. Grueso vol. en Xto. esp.
La Valle. Oraciones y meditaciones para asistir á
la mi a. Valencia, 4 817 A 2vo. esp. láminas.
Lente (El). Novela satírico-moral. Valencia, 4855.
ÍSvo. mayor, esp. láms.
Libros ( Los) poéticos de la santa Biblia, traduci
dos en verso castellano, por Don Tomas José González
Carvajal. Nueva ediciun , adornada con dos láminas
finas. Paris, 1858. 2 vols. lüvo. fr. láminas , papel
fino.
El tomo primero comprende los Salmos y los
Cánticos sueltos del antiguo y nuevo Testamento, y el
segundo el Libro de Job, el Cántico de los Cánticos ,
la Profecía de Isaías y los Trenos de Jeremías. Cada
tomo puede comprarse por separado.
— La misma obra en 52vo. fr., es decir, del tamaño
de la anterior edicion, sol<re papel fino con láminas.
Cada tomo se vende separado.
Estos dos tomilos contienen la castiza y elegante traduccion en
verso de los Litros poéticos fie la Biblia, que se halla esparcida en
los doce volúmenes en octavo mayor, impresos en Valencia y Ma
drid. Así puede tenerse á mui poco coste lo mejor que en los últi
mos tiempos ha producido la Musa sagrada española. Pueden figu
rar por su tamaño, láminas, bonita impresion y buen papel entre
los libros de estrenas.
Ligüori. Las dorias de María. Tercera edicion ,
aumentada con ía vida del autor y la traduccion de
todas las autoridades latinas. Valencia, 1851. 2 vols.
Svo. esp.
36.
— 10 —
Lista. Poesías. Edicion ajustada á la de Madrid,
y aumentada con una composicion del mismo autor.
Paris, 4 834. Un grueso vol. en Svo. esp.
Lugdunensis ( Akchiepiscopi ) instituliones tlteolo-
gicas , ad usum scholarum sua? dicecesis editae. Testi
monia gallica nunc primüm in hispanum sermonem
prodeunt conversa. Valentía? , 1857. 6 volt. 4ío.
español.
Los varios pasajes de autores franceses citados en esta obra se pu
blican ahora por primera veí traducidos al castellano.

Manual de usos y costumbres de sefooritas de buen


tono. — Poema de Venus. Valencia, 4852; 4Cw>. ma
yor esp.
Manual ^Novísimo) del comerciante, ó reduccion
de pesos, medidas y monedas, tanlo nacionales como
estranjeras , <¡ue comprende mui por estenso la de
reales vellon á pesos de 428 cuartos y viceversa, la de
libras catalanas á reales vellon y viceversa, tablas pa
ra todos los cambios mas usuales en las lelras que se
libran sobre Francia é Inglaterra , y una de números
fijos para el cálculo de intereses desde 5 hasta 4 2
por 0/0 al año. Valencia, 4859. Svo. esp.
Por la portada de este Manual se ve que abraza una reduccion
exacta de los pesos, medidas y monedas de los principales países
comerciantes de Europa. Su utilidad principal consiste en suplir
perfectamente la costosa obra de Molledo para los cambios de Fran
cia é Inglaterra. Siendo el real de vellon, que forma la base de este
tratado, una moneda decimal alícuota dei peso fuerte, no deben
hallar dificultad en su uso las personas que se dedican al comercio
ó al giro en la América.
Marmontel. Cuentos morales , traducidos por Don
Pedro Estala. Edicion corregida por Don Vicente Salvá.
Valencia, 4 84 5. 4 2ro. mayor esp.
Martínez de la Rosa. El libro de los niños. París,
4 840. 4 8w>. fr. viñetas y láminas.
En pocos dias se hicieron en Madrid dos ediciones de este libri-
to, mui acomodado á la inteligencia y gusto de los niños. En la pre
sente impresion, superior á las españolas bajo lodos aspectos, se
han hecho los cambios necesarios para adaptarla á las instituciones
que rigen en las nuevas repúblicas americanas.
— 11 —
Martínez de la Rosa. Poesías, y las dos comedias,
Los zelos infundados ó el Marido en la chimenea,
y, Lo que puede un empleo. Paris, 4856. Mvo.fr.
retrato.
El tomo que aquí se anuncia, como que puede y debe formar él
sesto de las obras de este autor, se ha impreso sobre escelente papel
y con el mismo grado de letra que lo> otros cinco. El retrato que va
a su frente, es parecidísimo, y distinto del que se baila en la edicion
de las Poesías hecha en Madrid. Esta es otra dé las obras, que en
cuadernada con gusto, puede regalarse á las personas aficionadas á
la lectura de los poetas.
Maury. Esvero y Almedora, poema en doce cantos.
París, 4840. Vivo- fr. viñetas y retrato.
El autor, aunque español, tradujo al frances en su Espagne poé-
tlque varias composiciones de nuestros mejores poetas con tal feli-
zidad, que se ha adquirido una bien merecida reputacion en la re-
Eública de las letras. En este poema, escrito en octavas, ha querido
acer ver que tambien sabe versificar en la lengua que mamó con
la leche, y que si no ha logrado igualar á Ariosto y á Sir Walter
Scott , se ha esforzado por imitarlos en su agradable variedad de
asuntos y de estilo. Las circunstancias materiales de este libro y sus
viñetas y retrato lo hacen mui propio para que se le numere entre
los que se regalan por Navidad ó con otros motivos.
Mayans. Retórica. Valencia, 4786. 2 vols. gruesos
en 8vo. mayor esp.
Meléndez Valdes. Poesías reimpresas de la edicion
de Madrid de 4 820 por Don Vicente Salva. Edicion
completa con el prólogo y la vida del autor , que faltan
en casi todos los ejemplares de la de Madrid. Paris ,
1852. 4 vols. 8uo. esp. retrato y hermoso papel.
Esta edicion es la única completa que se halla de venta de todas
las poesías de Meléndez , y de su correccion tipográfica se ha cui
dado con particular empeño. La lijereza y graoia de las anacreónti
cas, romances y composiciones líricas de Meléndez, y la hermosura
de esta impresion la constituyen una obra propia de aguinaldo.
Mora. Leyendas españolas. Paris , 1840. Volumen
en í2vo. fr. de 624 páginas, con muchas viñetas
y en escelente papel avitelado.
Todas las composiciones de este tomo se han publicado poco há
por la vez primera, y no ceden en fluidez, gracia y pureza de lengua
je á ninguna de las muchas con que su autor se ha granjeado ya un
nombre distinguido en el orbe literario. Á cada leyenda precede
una linda viñeta, y el Don Opas ¡leva cuatro, para que este libro,
cuya letra y papel compiten en belleza, sea el mas buscado para re
galos, como que es ef volumen escrito en verso castellano que
mayor aceptacion debe hallar en el público ilustrado.
Mokatjn (Dos Leandro). Obras líricas. Segunda
edicion , corregida por D. Vicente Salva. Londres, \ 825.
Svo. esp. pup. avit.
Mokatin (Nicolás). Obras5 postumas , publicadas
por su hijo. Londres, \ 825. Svo. esp. pap. avit.
Moratin (D. Nicolás y D. Leandro). Poesías es
cogidas de estos dos poetas. Valencia, 4850. 8vo. esp.
con el retrato da Don Leandro.

Nepote (Cornelio). En latiu, con notas y un breve


diccionario para el uso de las escuelas, por D. Vicente
Salvá. Paris, 4858. Svo. esp. retratos y viñetas alu
sivas á las costumbres , armas y antigüedades de
los romanos.
Pocos libros se han publicado para las escuelas hasta el dia con
lanío esmero como este Cornelio Nepote. Las notas colocadas en
cada capítulo y el Diccionario que va al fin, ilustran y guian al prin
cipiante, para que pueda sacarse la traduccion , sin dársela com
pleta, porque esto tiene graves inconvenientes para el que aprende
una lengua.

Palafox. Semana espiritual para frecuentar la pre


sencia de Dios y disponerse para recibirle. Valencia.
\tvo. esp.
Palanca y Gutiérrez. Compendio histórico de la le
gislacion romana, dividido en seis épocas, con un apén
dice á la segunda , que contiene la version espanola de
las doce Tablas. Valencia, 4856. Svo. esp.
Pinton. Estrado del Compendio histórico de la
Religion, para uso de los niños de primeras letras.
Paris, 1 858. I Svo. fr.
Püjalte. Klogio fúnebre de los valencianos que mu
rieron en defensa de su patria en la tarde del 28 do ju
nio de 1808, y resumen histórico de las glorias del rei
no de Valencia desde los tiempos mas remotos. Segun
da edicion, corregida por D. Vicente Salvá. Valencia,
\ 845. Svo. esp.
Ren;. Tarifas perpetuas para hallar el importe de los
sueldos, pres y salarios- por aiíos. meses y dias. con sus
— 13 -
descuentos y líquidos para los ajustes ; combinados de
modo que sirvan para los cambios de letras y para el
adeudo de derechos en las aduanas. Valencia, 4 854.
4to. español.
Relacion de los hechos heroicos con que el pueblo
de Paris recobró su libertad en los dias 27 , 28 y 29
de julio de 1 850 , estractada de varias obras francesas
por un español emigrado, testiao ocular de los sucesos.
Taris, 4 850. \Svo. Ir. con los retratos del rei Luis
Felipa V° y del general Lafayette.
La relacion fiel y circunstanciada de un acontecimiento que tanto
ha debido influir en la política de toda Europa, inspira de suyo
bastante interes para ser leida. El autor ha cuidado de aumentarlo,
intercalando un sucinto epítome de la vida del actual rei de los fran
ceses, y la del venerable Lafayette, cuyos hechos pertenecen á am
bos mundos, pues á mas de haberlos ilustrado con sus virtudes y
peregrinaciones, la América del norte le cuenta entre los mas dis
tinguidos campeones de su libertad. Tambien va puesta en su pro
pio lugar la presente Constitucion de la monarquía francesa.
Ripalda. Catecismo breve de la doctrina cristiana.
Valencia. \6vo. esp.
Ros. Formularios de escrituras públicas. Valencia.
4to. esp.
Hos Práctica de escribanos. Valencia. Svo. esp.
RorjssEL Sistema físico y moral del hombre; ensayo
sobre la sensibilidad y una nota sobre las simpatías. Pa
ris, 4 85 1 . hlvo.fr. lámina iluminada.
Roussel. Sistema físico y moral de la mujer. París,
-1 854 . \ 2vo. fr. lámina -iluminada.

Saaveora. El Moro espósilo, ó Córdoba y Rúrgos en


el siglo décimo. En un apéndice se añaden la Florinda
y algunas otras poesías inéditas del mismo autor. París,
-í 854. 2 vols. \2vo. fr. con viñetas y retrato, papel
fino.
— La misma obra sobre papel avitelado y el retrato
de papel de China.
El Moro espósilo es obra enteramente original , y la primera de
eu género en la poesía castellana. En el prólogo se trata de los ca
racteres de la poesía clásica y de la romántica, y se da noticia da
los mas distinguidos poetas modernos de Europa. Es superfluo que
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mé estienda en describir las singulares dotes de esta obra- despnest
de la favorable acogida que ha encontrado dentro y fuera de los
países en que se habla el español. Su lectura repelida causa siem
pre nuevo placer; y tanto por esto como por las circunstancias de Ift
impresion, es preferida para obsequiar á las personas de gusto,
encuadernada en buena pasta ó con algun mayor lujo.
Saikt-Pierre. Los votos de un solitario con la Ca
bana indiana y El Café de Surate. Valencia, 4820.
2 vols. 9vo. esp. láminas. Tanto la traduccion como
la impresion de esta obra fueron revisadas y corre
gidas por D. Vicente Salva.
Saint-I'ierre. La Cabana indiana y El Café de Su
rate. Valencia, 1820. Svo. esp. lámina.
Sala. Ilustración del Detecho real de España. Edi
cion corregida y adicionada por su autor, con las citas
de las leyes arregladas á la Novísima Recopilacion , y la
primera en que se ha seguido la ortografía moderna.
París, 4857. 2 vols. \ 2vo. fr.
Las ventajas que tiene la presente edicion sobre cuantas se han
hecho hasta el dia de esta obra de Sala, no consisten solo en que se
la haya reducido á la ortografía moderna, sino en haberla purgado
de las infinitas y groseras erratas qüe tenia, especialmente en el
esencialísimo punto de las citas de las leyes ; y en que hayan desa
parecido las trivialidades chabacanas que en algunos lugares se ha
bía permitido el autor. Se ha restituido tambien el sentido á cláu
sulas que carecían de él absolutamente.
Salvá. Gramática de la lengua castellana segun aho
ra se habla. Quinta edicion, mucho mas aumentada
que las anteriores. Paris, 1840. \ 2vo.fr.
Esta Gramática ha recibido mejoras muí considerables en (odas
sus reimpresiones, particularmente ert las que se hicieron en 1833
y 1839. No son de menos importancia las que se observan en esta
última, que gana á todas las otras en la parte tipográfica. A pesar
de los muchos aumentos que ahora ha tenido , es mas reducido su
volumen, por haberse adoptado un grado de letra mas pequeño
que en las otras. — Todos l°s ejemplares llevan mi firma y rúbrica
de estampilla al dorso de la portada.
Salva.- Compendio de su Gramática castellana, ar
reglado por el mismo para el uso de las escuelas. Paris,
•1858. Svo. esp.
Deben mirarse como contrahechos todos los ejemplares que no
lleven mi firma al dorso de la portada.
Salva. Nuevo Valbuena, ó Diccionario latino-es
pañol formado sobre el de Don Manuel Valbuena, con
muchos aumentos, correcciones y mejoras. Cuarta edi
oión. Patis, 4840. 4 vol. en Svo. mayor francés dé
950 págs.
Haría aquí una breve reseña de las notables ventajas que lleva
este Diccionario sobre lodos los latino-españoles publicados hasta el
dia, si las tres ediciones despachadas en el espacio de siete años no
me dispensasen de semejante trabajo. Falta solo observar que la
cuarta que ahora anuncio, es mucho mas correcta que las tres ante
riores; que he verificado en ella las variaciones importantes que en
su Advertencia espreso; y que siendo el papel de mas consistencia
que en la última y el lirado no menos bien desempeñado, he hecho
todo lo que está en mi mano para ir llevando á la perfeccion esta
obra.
Salva. Diccionario frances-español y español-frances.
Paris. Un vol. en Svo. mayor frances, igual al Diccio
nario latino-español. • /
En el Prospecto de esta obra he anunciado estensamente el plan
que sigo en su redaccion, y únicamente puedo añadir ahora, que va
ya impresa una tercera parte, tanto de la francesa-española, como
de la española-francesa. Á pesar de haber principiado mi trabajo,
estando preparado con muchos años de anticipacion, camina con
alguna lentitud, porque no he descubierto el secreto de hacer me
dianamente bien en pocos meses un Diccionario bilingüe, ó por me
jor decir , dos ; cosa que no parece ha causado embarazo á casi to
dos mis predecesores. Por mi Prospecto ha podido formarse el pu
blico una idea de los graves desaciertos en que han incurrido Nú-
ñez de Taboada, Gian Trapany, Rosily y Marlínez-López, por haber
acometido una empresa superior á sus fuerzas, y por haberla hecho
á destajo. Del qué ha salido últimamente á luz de Fonseca, baste
decir, que su autor ha ganado á lodos los demas en correr la posta,
y que no siendo español ni frances, no debe esperarse que posea
estas lenguas hasta el punto que se necesita Saberlas para formar un
Diccionario.
Salva. Véase Bruja, Campománes, Capmany,
Cementerio , Coleccion , Chateaubriand, Delicias,
Diccionario, Heineccio, Hurtado de Mendosa,
Irene y Clara , Libros poéticos , Meléndez , Nepote ,
Relacion, Saavedra, Saint-Pierre , Sala y Voz de
la naturaleza.
Samamego. Fábulas en verso castellano para el uso
del real seminario vascongado. Edicion publicada por
Don Vicente Salva. París, 4855. 4 8vo. fr.
Soissons (El obispo de). Catecismo de la doctrina
cristiana. Valencia. 2 vols. Svo. esp.

osca. Geometría elementar, aritmética inferior y


geometría práctica. Valencia, 1794. Svo. mayor esp.
láminas.
Tosca. Tratados de arquitectura civil , montea y
cantería, y relojes. Valencia, 4794. Svo. mayor esp.
láminas.

V alpemaro (El). Novela moral. Valencia, 1816. 2


vofs. \2vo. esp. láms.
VERONiusde regula lidei catholicae. Valentías, 1801.
Svo. esp.
Viajes de AU Bey el Abassi ( Don Domingo Badía y
Leblich), por Africa y Asia, durante los años 1805 á
1807. Paris, \ 856. 5 vols. Svo. may. esp. pap. avit.
retrato.
Tiempo era ya de que España poseyera en su lengua este intere
sante y arriesgado viaje de uno de sus hijos, sin tener que mendi-
§arlo de las otras naciones, donde antes de ahora se había publica-
o. El cuidado con que se ha hecho la traduccion de la francesa que
salió á luz á vista del autor, y el retrato y vida del mismo con que
va adornada la obra, deben llenar los deseos de cuantos aprecian
en algo las glorias patrias.
Visitas al santísimo Sacramento y á María Santísima.
Valencia, 1855. i2vo. esp. •
Víves. Catecismo de la doctrina crisliana. Valencia,
1814. Sro. esp.
— El mismo. Valencia, 1816. 16?;o. esp.
Volney. Viaje por Egipto y Siria, durante los años
de 1785, 84 y 85 , traducido al castellano é ilustrado
con nolas y adiciones por un habanero. Paris , Julio
Didot, 1850. 2 vols. Svo. fr. con muchas láminas y
mapas.
Voz de la naturaleza. Coleccion de anécdotas ,
historias y novelas, tan agradables como útiles á toda
clase de personas. Nueva edicion notablemente corre
gida y variada por Don Vicente Salvá. Paris, 4855.
5 vols. lsvo. fr. láminas.

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