UNIVERSIDAD FCO.

JOSÉ DE CALDAS
FACULTAD INGENIERIA
PROYECTO DE INDUSTRIAL
PRODUCCIÓN Y COMPRENSION DE TEXTOS
PROFESOR JUAN CARLOS MOJICA
ABRIL DE 2019

MI AUTOBIOGRAFÍA

Juan Camilo Molina Avila

20191015014

En estas breves paginas iré describiendo todos aquellos sucesos que han sido parte de mi
vida y que de forma incondicional han hecho parte de mi ser y de cuanto soy ahora en el
presente y que con el cumulo de nuevas vivencias seré en un futuro (si así Dios lo permite).
Comenzaré a contar esta breve historia como cualquiera comenzaría: contando los grandes
sucesos de mi infancia para dar entrada a mi juventud.

Nací el 18 de enero del año 2002 bajo el seno de una familia residente en Bogotá y gran
poseedora de dificultades familiares. Inicialmente viví con mi padre y mi madre junto con
mi abuelita y mis dos queridas hermanas. A pesar de que en mi familia se presenciaban
grandes dificultades tuve siempre el gran amor y cariño de mis dos hermanas, que por el
entonces tenían la edad de entre diez y seis años de edad, tanto para mis padres como para
ellas fui motivo de mucha alegría y curiosidad, por tener un nuevo integrante en la familia,
incluso en algunas descripciones me cuentan que cuando me vieron por primera vez me
vieron tan ‘arrugadito’ que dijeron: “parece un viejito”.

Fui criado bajo un profundo y noble amor de mis hermanas, pues eran quienes estaban más
pendientes de mí, especialmente mi hermana mayor quien con ternura y gran afecto me
daba mucho amor y gran cuidado, dando me siempre las mejores enseñanzas y valores.
Aunque amo a mis dos hermanas por igual, los momentos que compartí con mi hermana
mayor fueron los de más cariño, pues con ella aprendí grandes valores desde el amor, hasta
el punto de que en mi crecimiento era la confidente de mis travesuras en el colegio y
problemas, que como siempre no faltan pero siempre son de gran utilidad para nuestro
aprendizaje. Así de esta manera fui creciendo bajo el cuidado de mis padres aunque de
manera especial de mis hermanas y el profundo amor de ellos.
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PROFESOR JUAN CARLOS MOJICA
ABRIL DE 2019

Conforme iba pasando el tiempo iba aprendiendo cosas nuevas, desde el colegio comencé a
demostrar grandes habilidades hacia el estudio y de manera especial hacia las matemáticas,
quienes en mi bachillerato se convirtieron en mi mejor pasatiempo, y que en el ahora son la
principal base de la carrera que estoy estudiando. Adquirí grandes aptitudes en la materia
pues gracias a Dios tenia facilidad de manejo para las mismas y un gran gusto a cuanto es
lógico y racional. MI vida estudiantil se baso en una gran dedicación de manera especial a
la física, matemáticas y al final en química. Por gracia de Dios logre obtener finalmente un
buen puntaje ICFES que me serviría para estudiar en la universidad Distrital Fco. José de
Caldas.

Hacia los finales de mi niñez (11 años) ocurrió un acontecimiento que cambiaria muchas
cosas de mi vida, púes por hechos de la vida tuve que sepárame de mi hermana mayor,
aquella con quien más compartía y quien se había convertido en mi mejor amiga, aquella a
quien tanto ama mi corazón. Ahora quien daba gran sentido a mi vida se había ido, y todo
sería diferente, pues, las tardes serían llenas de soledad y vacios, cada vez que llegaba del
colegio hablaba mucho con ella y ahora ya no podría compartir aquellos momentos
placenteros en la fraternidad. En efecto, mis próximos años se desarrollaron bajo esa
tristeza que empañaba mi corazón. Más aun estaba siempre asistido por quien tanto me
ama, Dios.

Aunque después de este acontecimiento ocurrieron muchas cosas con las cuales intenté
llenar esos vacios de soledad, logré finalmente encontrar el amor de mi vida, quién le da
sentido en todo momento y en todo lugar, y quien es mi razón de ser: Dios; también quién
me dejó como madre a la más linda: María. Después de un hermoso encuentro con Dios mi
vida cambió en un ciento por ciento, la alegría, felicidad y paz que buscaba la encontré
finalmente en donde solamente se puede encontrar, Dios.

Desde niño siempre tuve un gran deseo y profundo amor por Dios, pero debido a que mi
familia no me inculcó los valores bajo el seño de la santa doctrina de la Iglesia, desconocí
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en mis primeros años de vida sobre el gran valor de la Eucaristía, la confesión y demás
sacramentos con los cuales Dios enriquece nuestras vidas.

Así mi vida desarrollada apartada de la Iglesia y la oración, después dio un gran giro a la
conversión y la consagración a Jesús por María, a partir de encuentro con Dios, haciéndome
esclavo de la inmaculada para la mayor gloria de Dios, llevando una vida en el mayor de
los amores y la mayor felicidad.

En este caminar conocí un gran movimiento católico llamado Lazos de Amor Mariano, en
donde aprendí en la profundización de la evangelización las grandes riquezas y misterios de
las Santa Iglesia Católica, enamorándome cada vez mas de aquella Iglesia que Cristo
instituyo sobre San Pedro, y por la cual el Espíritu Santo vivifica mi fé.

Así desde el amor y la misericordia de Dios mi vida se fundamentó en la evangelización y

el llamado misionero que Dios hizo a mi vida, evangelizando en todo momento y usando
las palabras sólo si es necesario (como lo enseña San Francisco de Asís) mostrando que la
fé es para todos y no sólo para los curas y las monjas, siendo una fé transversal llevada en
las obras desde nuestro estado (estudio, trabajo, etc.), mostrando siempre la alegría de
Cristo, y el amor de la Santísima Virgen María (quién es mi madre y me ha llevado en su
amor maternal a los brazos de Cristo).

Finalmente concluyo que mi vida es una vida laica consagrada a Dios por medio de María;
que se enriquece por la obras de la caridad y la entrega de mi en mi misión en la Iglesia, mi
estudio (en el cual he demostrado grandes facultades con las cuales puedo ayudar
futuramente a la sociedad) y mi familia (a quiénes Dios me ha dado para amar).